«Siento que nos ven como personas raras y sin derechos. Nos ven como un objeto»

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10 LA REVISTA AGRARIA / 163 LRA: ¿Cuál es la reflexión que hace sobre ser indígena actualmente en el país? ¿Cuáles son los criterios para reconocer a un pueblo como indíge- na o para autorreconocerse como indígena? Gladis Vila: ¿Qué es ser indígena en el Perú? Este es un proceso muy reciente en el país. Los pueblos indígenas nos regimos por el Convenio 169 de la OIT 2 , donde se define claramente, por ejemplo, quiénes somos los sujetos de consulta. El convenio habla de pueblos que existen desde antes de la creación de los Estados en diferentes países y que aún mantienen parte de sus manifes- taciones culturales. Sin embargo, en el actual pro- ceso de implementación de la Ley de Consulta se restringen varios aspectos, principalmente sobre quiénes somos el sujeto de derecho. Por ejemplo, para las autoridades, no todas las comunidades campesinas deben ser sujeto de derecho a la con- sulta. Creemos que en el viceministerio de Inter- culturalidad este tema aún no está muy claro. LRA: ¿Por qué existen obstáculos en el proce- so de definición del sujeto de derecho a la consul- ta previa? G. Vila: Cuando se elaboró el reglamento de la ley, se cumplió lo de «Hecha la ley, hecha la tram- pa», porque en el tema de sujetos de derecho nos imponen a los indígenas varias características. Pri- mero: «que sean diferentes». ¿Qué implica esto? Justamente, ahí entendemos lo que han dicho hace poco el presidente Ollanta Humala, la misma Na- dine Heredia o incluso varios empresarios: «que debes tener tu pluma», «que no debes tener celu- lar» o que solamente son indígenas los pueblos no contactados o en aislamiento voluntario. En- tonces, existen varias interpretaciones porque no hay claridad en ese tema. El reglamento nos exige muchos más aspectos, que incluso no están en el Convenio 169, donde se establece que los indíge- nas pueden cumplir solo algunas de las conside- raciones, como la pertenencia cultural y la autoi- dentificación. Por ejemplo, el reglamento exige que debamos tener, necesariamente, un idioma pro- «Siento que nos ven como personas raras y sin derechos. Nos ven como un objeto». Entrevista a la lideresa indígena quechua Gladis Vila Pihue, presidenta de la Organiza- ción Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas del Perú (Onamiap), acerca de los obstáculos que enfrenta el proceso de consulta previa que se está implemen- tando en las comunidades nativas y campesinas, y sobre el actual significado de las identidades indígenas en el Perú. Ricardo Marapi 1 pio. En Onamiap creemos que con esto se anula- ría el derecho de consulta de los pueblos indíge- nas de Cajamarca, donde existe el polémico tema del proyecto minero Conga. LRA: ¿Por qué las organizaciones indígenas plantean que el idioma no debería ser un factor o requisito obligatorio para definir a los indígenas y sujetos de consulta? G. Vila: Porque nuestros idiomas indígenas es- tán en extinción. Por ejemplo, el idioma jaqaru, que se habla en la zona de Yauyos, en Lima, está en una etapa de desaparición. En Cajamarca, los pueblos perdieron el idioma originario durante la época de la conquista española. No todos los pueblos indí- genas hablamos en la actualidad un idioma propio. LRA: Además, no ha desaparecido por sí solo. ¿Qué es lo que está detrás de esta extinción del idioma? G. Vila: La actual estructura del Estado. No hay políticas públicas que protejan nuestros idiomas in- dígenas. La educación es homogénea en el país. Se habla de una educación intercultural, pero esta no se aplica realmente. La política educativa elimina nuestras manifestaciones culturales e idiomas. Por ejemplo, hoy en día, en ciertos centros educativos de Huancavelica se prohíbe hablar el quechua. Mu- chos docentes te dicen: «Tú estás estudiando para hablar perfectamente el español; no te sirve el que- chua». Con la eliminación del idioma, asimismo se está matando a todo un pueblo. Y esto genera tam- bién confusiones en el Estado para la aplicación de la consulta previa. Pero para los pueblos indígenas está clarísimo: no se debe restringir el derecho a la consulta en función del requisito del idioma. LRA: En la actualidad, los procesos de consulta se están realizando principalmente con comuni- dades nativas y en temas que no están relaciona- dos con conflictos mineros. ¿El proceso de la con- sulta se aplicará con mucha lentitud en las comu- nidades campesinas?

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Entrevista a la lideresa indígena quechua Gladis Vila Pihue, presidenta de la Organización Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas del Perú (Onamiap), acerca de los obstáculos que enfrenta el proceso de consulta previa que se está implementando en las comunidades nativas y campesinas, y sobre el actual significado de las identidades indígenas en el Perú.

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10 LA REVISTA AGRARIA / 163

LRA: ¿Cuál es la reflexión que hace sobre ser

indígena actualmente en el país? ¿Cuáles son los

criterios para reconocer a un pueblo como indíge-

na o para autorreconocerse como indígena?

Gladis Vila: ¿Qué es ser indígena en el Perú?

Este es un proceso muy reciente en el país. Los

pueblos indígenas nos regimos por el Convenio

169 de la OIT2, donde se define claramente, por

ejemplo, quiénes somos los sujetos de consulta.

El convenio habla de pueblos que existen desde

antes de la creación de los Estados en diferentes

países y que aún mantienen parte de sus manifes-

taciones culturales. Sin embargo, en el actual pro-

ceso de implementación de la Ley de Consulta se

restringen varios aspectos, principalmente sobre

quiénes somos el sujeto de derecho. Por ejemplo,

para las autoridades, no todas las comunidades

campesinas deben ser sujeto de derecho a la con-

sulta. Creemos que en el viceministerio de Inter-

culturalidad este tema aún no está muy claro.

LRA: ¿Por qué existen obstáculos en el proce-

so de definición del sujeto de derecho a la consul-

ta previa?

G. Vila: Cuando se elaboró el reglamento de la

ley, se cumplió lo de «Hecha la ley, hecha la tram-

pa», porque en el tema de sujetos de derecho nos

imponen a los indígenas varias características. Pri-

mero: «que sean diferentes». ¿Qué implica esto?

Justamente, ahí entendemos lo que han dicho hace

poco el presidente Ollanta Humala, la misma Na-

dine Heredia o incluso varios empresarios: «que

debes tener tu pluma», «que no debes tener celu-

lar» o que solamente son indígenas los pueblos

no contactados o en aislamiento voluntario. En-

tonces, existen varias interpretaciones porque no

hay claridad en ese tema. El reglamento nos exige

muchos más aspectos, que incluso no están en el

Convenio 169, donde se establece que los indíge-

nas pueden cumplir solo algunas de las conside-

raciones, como la pertenencia cultural y la autoi-

dentificación. Por ejemplo, el reglamento exige que

debamos tener, necesariamente, un idioma pro-

«Siento que nos ven comopersonas raras y sin derechos.

Nos ven como un objeto».Entrevista a la lideresa indígena quechua Gladis Vila Pihue, presidenta de la Organiza-

ción Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas del Perú (Onamiap), acerca

de los obstáculos que enfrenta el proceso de consulta previa que se está implemen-

tando en las comunidades nativas y campesinas, y sobre el actual significado de las

identidades indígenas en el Perú.

Ricardo Marapi1

pio. En Onamiap creemos que con esto se anula-

ría el derecho de consulta de los pueblos indíge-

nas de Cajamarca, donde existe el polémico tema

del proyecto minero Conga.

LRA: ¿Por qué las organizaciones indígenas

plantean que el idioma no debería ser un factor o

requisito obligatorio para definir a los indígenas

y sujetos de consulta?

G. Vila: Porque nuestros idiomas indígenas es-

tán en extinción. Por ejemplo, el idioma jaqaru, que

se habla en la zona de Yauyos, en Lima, está en una

etapa de desaparición. En Cajamarca, los pueblos

perdieron el idioma originario durante la época de

la conquista española. No todos los pueblos indí-

genas hablamos en la actualidad un idioma propio.

LRA: Además, no ha desaparecido por sí solo.

¿Qué es lo que está detrás de esta extinción del

idioma?

G. Vila: La actual estructura del Estado. No hay

políticas públicas que protejan nuestros idiomas in-

dígenas. La educación es homogénea en el país. Se

habla de una educación intercultural, pero esta no

se aplica realmente. La política educativa elimina

nuestras manifestaciones culturales e idiomas. Por

ejemplo, hoy en día, en ciertos centros educativos

de Huancavelica se prohíbe hablar el quechua. Mu-

chos docentes te dicen: «Tú estás estudiando para

hablar perfectamente el español; no te sirve el que-

chua». Con la eliminación del idioma, asimismo se

está matando a todo un pueblo. Y esto genera tam-

bién confusiones en el Estado para la aplicación de

la consulta previa. Pero para los pueblos indígenas

está clarísimo: no se debe restringir el derecho a la

consulta en función del requisito del idioma.

LRA: En la actualidad, los procesos de consulta

se están realizando principalmente con comuni-

dades nativas y en temas que no están relaciona-

dos con conflictos mineros. ¿El proceso de la con-

sulta se aplicará con mucha lentitud en las comu-

nidades campesinas?

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JUNIO de 2014 11

G. Vila: Creo que, en los años que

vienen, el proceso seguirá estancado.

Actualmente se realizan consultas, pero

en temas que no son polémicos. Por

ejemplo, en Huancavelica se está con-

sultando sobre el bosque de Amaru para

buscar el reconocimiento de la zona

como reserva territorial, porque allí es-

tán las mejores orquídeas del país. Pero,

incluso ahí, la consulta solo se está rea-

lizando con dos comunidades, cuando

el acceso al bosque es de seis comuni-

dades campesinas. Veo muy difícil que

en los próximos meses se pueda imple-

mentar con amplitud el proceso de con-

sulta en los Andes en temas que sí son

polémicos.

LRA: ¿Cuáles son las capacidades

o herramientas que las organiza-

ciones o pueblos indígenas ne-

cesitan para desarrollar un

adecuado diálogo intercul-

tural con el Estado en el

marco del proceso de con-

sulta?

G. Vila: Una herra-

mienta que requerimos, y

que Onamiap está pro-

moviendo, es que en el

nuevo censo demográfi-

co nacional que debe eje-

cutarse en 2017 se incorpore una pregun-

ta acerca del tema de la pertenencia cul-

tural. En el INEI se ha formado un comité

técnico, en el que participan diferentes

sectores académicos, universitarios e

indígenas, donde estamos discutiendo

acerca de cuál sería la pregunta sobre

pertenencia cultural y quisiéramos que

se incluya en el censo una pregunta so-

bre autoidentificación. Por ejemplo, no

hay en la actualidad ningún dato esta-

dístico de la cantidad de indígenas en el

país. Sería importante conocer el nivel

de autoidentificación. Por otro lado, la

elaboración de la base de datos de pue-

blos indígenas, por parte del viceminis-

terio de Interculturalidad, requiere tam-

bién la participación de las organizacio-

nes indígenas. En la actualidad, esa

base de datos se está elabo-

rando de manera autori-

taria, vertical y jerár-

quica. Nosotros no

vamos a permitir

que sea el Esta-

do quien nos

diga si somos

o no somos

indígenas .

D e s d e

Onamiap, impulsaremos el tema de nues-

tra autoidentificación a una pertenencia

cultural como pueblos indígenas.

LRA: ¿Cómo cree que las autorida-

des, funcionarios y empresarios perua-

nos están viendo y percibiendo a los pue-

blos indígenas? ¿Cómo ve a los indíge-

nas la gente que vive en las ciudades?

G. Vila: Siento que nos ven como per-

sonas raras y sin derechos. Nos ven

como un objeto y, como tal, las autorida-

des se sienten con el derecho de decidir

sobre nuestra forma de vida y de desa-

rrollo, y sobre los territorios que habita-

mos. No nos ven como sujetos de dere-

cho. De alguna manera, la Ley de Con-

sulta Previa —aprobada por unanimi-

dad— es riesgosa para ellos, pues al

aprobarla no midieron lo que iba a signi-

ficar realmente. Nos siguen viendo como

si fuéramos menores de edad. Nos ven

distintos. Eso se aprecia en programas

de televisión como el de la «Paisana Ja-

cinta». ¿Qué formación estamos dando a

los niños de las ciudades? El Estado de-

bería promover aquellos valores cultura-

les que tenemos los pueblos indígenas y

con los cuales estamos contribuyendo

día a día. Hoy se revalora mucho la medi-

cina alternativa y natural. ¿Quiénes han

protegido ese campo? ¿Acaso no han

sido los pueblos indígenas? Sin embar-

go, estamos en un país donde persisten

el racismo, la discriminación, y donde

muchos todavía no han realizado un

proceso de autoidentificación. In-

cluso a mí me ha costado muchos

años llegar a una claridad acerca

de mi autoidentificación y perte-

nencia cultural. Entonces, para

muchos peruanos, hacer este

ejercicio es todavía muy com-

plejo. El tema pendiente, y

que aún está muy lejos de

definirse, es que el Perú

cuente con una política

pública más realista y

donde se promueva la

pertenencia a los pue-

blos indígenas.

Notas1 Periodista. Editor de La

Revista Agraria.2 Organización Internacio-

nal del Trabajo.

Gladis Vila Pihue,

presidenta de la

Onamiap.