Siglo Xxi, Claves Del R-006 Nº075 - Mas Alla de La Ciencia - Vicufo2

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TEMARIO

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  • pw ffiffiWffiffi &ffiffi# Wffiffi ffiffiffiffiw0DAS las ciencias, todas las filosofias, todas las tendencias quese pueden englobat bajo el trmino de "holstico" confluyen enla necesidad imperiosa de que suria un nuevo hombre capu de

    implicarse con sus semejantes y con su entorno en la construccin deuna nueva sociedd asefiida er unos pilares diametralmente opues-tos alos que han reinado durante los ltimos trescientos aos.

    Esto coloca al hombre de nuestros das ante una posicin bien cla-ra: la necesidad de aprender nuevas frmulas de relacin, de probarhiptesis diferentes, de confirmar teoas que nacen como frutos tem-pranos de su intuicin... y, sin embargo, se nos plantea una curiosa di-cotoma: cmo podremos aprender algo nuevo si no hemos "desa-prendido" antes todo aquello que nos ha ller,zdo a la situacin acrual?

    Es imprescindible que, antes de platteamos cualquier cambio, nosenfrentemos a una rer,isin de nuestra escala de mlores y realicemosun anlisis lo ms objetivo posible de todo lo que representa nuestrobryaie de creencias, de ese conjunto de cuestiones entretejidas en laspartes ms profundasde nuestra mente queforman parte indisolu-ble de nuestra perso-nalidad.

    Creer es asumircomo ci.ertas lasinfortnaciones re-ci,hidas sobre cual-quier tema, pordi,stintas aas, yque, i.nmed,i.ata-mente, pasan q.coruserti,rse en er-dades.

    La creencia se for-ma en base a milti-ples factores, entrelos que destacan lainformacin, el informador, la sociedad y la seguridad psiquica.

    La informacin es el elemento que decanta el proceso. Si esa infor-macin viene acompaada por la experiencia del informador y stenos parcce fiable o nos merece crdito, entonces la asumimos comopropla. Si es bien acpfadl socialmente y no choca con las estructurasestablecidas, seranmejor aceptada; y si, adems, nos proporcionaseguridad (ciela, niruana, etc.), entonces tiene todos los ingredientesnecesarios para pasar a ser totalmente asimilad.

    Hemos de tener en cuentz que, generalmente, la creencia estexenta de lgica y se asienta en el inconsciente colectivo hasta quees sustituida por otra con mayor cargaruciomJ. As, a 1o largo de lahistoria los hombres hemos visto desfilar ante nosotros verdadesirrefutables incapaces de sobrevivir al paso del tiempo. Esto es unhecho observable en las ltimas dcadx, en que el devenir de losacontecimientos ha provocado que nos enffentemos constzntemente

    a la revisin de conceptos, posfifados, dogmas, ideologas... creen-cias, en definitiva, con las que hemos ido llenando nuestra "mochi-la" de caminantes.

    Pero, cul es el proceso?, atravs de qu mecanismo logran in-troducirse las creencias en nuestro mundo interior? Todo pareceapuntar a que su puerta de ertadason nuestros sentidos. Pero, comotodos sabemos, stos nos en-gaan. En tal caso, no es de-masiado arriesgado creer enlo que nos dicen los sentidos?Nuestra historia est plagadade hechos desafortunadosque se han desencadenadosimplemente por haber "cre-do" ver u or tzLl o cual cosa.

    [a psicologa nos ha de-

    mostrado que las cosas no son siem-pre lo que parecefi. Por ejemplo, de-trs de 1o que a veces parece un granamor puede esconderse un gran egos-mo, mientras en otras ocasiones de-

    ' trs de una aparente cobarda hay una accin heroica. As pues, /ascreencias no dejan de ser los "inpu,ts" que se graban en lasmentes de los hombres para que respondan cicgammte aquimes las intenten dervocan Esas creencias son la salvaguardade las instituciones polticas y religiosas, pues no podemos olvidarque, bsicamente, no existen diferencias entre un ideario poftico yunas leyes religiosas.

    Y precisamente son las creencias inamobles (base donde se sus-tentn las culturas) las que impiden que los hombres se entiendan.Piensa igual un islamista que un cristiano o un judo?, son igualessus costumbres? No. [a cultura lamucan las creencias. Qutale a unpueblo su dios y crear otro ixmediatzmente.

    Las creencias nos dan seguridad. Lo vieio, lo ya conocido, nos per-mite desenvolvernos con ms o menos soltura en la vid. Incluso aun-que intuyamos que estn obsoletas y que deben ser renovadas, somos

  • rrrcios al cambio, a que se tambaleen nuestros pilares, tan bien sus-.rnLidos sobre la tradicin y la herencia de nuestros antepasados.

    Es curioso ver cmo las creencias, las cukuras, las modas, la ali-nrentacin, la educacin, y, en definitiva, todas aquellas cosas que in-Iluren socialmente sobre el ser humano, son finalmente considera-das como parte de 1o que podramos llamar sr alma grupal. !s,1os pueblos forman distintos rganos integrados dentro de un mismosistema, que, paralelameflte, se inscribe en un cuerpo mucho mfocomplejo. Sin embargo, en ocasiones, los pueblos -los rganos- nosaben que son complementarios y es entonces cuando surgen las

    guerras, ! sin embargo,podra imaginar al pn-crea-s peleando con un ri-n, tratndo cada uno dedefender su funcin comcrnica y verdadera? Pues al-go parecido pasa con lospueblos que se pelean porsus creencias.

    Todos sabemos que lasleyes del ao 100 no tie-nen nada que ver con lasdel 2000; y, sin embargo,siguen los mismos patro-

    nes aun cuando en ocasiones seancontradictorios. El papel de la mujeren la sociedad constituye un buenejemplo de cmo las leyes puedenmodificarse, pasando 1o equivocado aser acertado, v viceversa. A pesar detodo, cada da tenemos ms pruebasfehacientes de que la ler ra muv pordetrs de las ideologas r de los pensa-mientos progresistas que inrpulsan a1 hombre en su etolucin.

    Los conceptos bien y mal, posiuro r negavo. luz v oscuridad, etc.estn presentes en todas las cultura-s l son valorados de distinta formapor quienes ostentan el poder moral. uco o religroso. Por tanto, sonconceptos subjetivos y sujetos a la hfluencla de m1tiples variables.Sin embargo, las leyes se dictan para que el hombre se cia a los mr-genes que delimian el "bien" (dentro de un conterlo determinado yde un tiempo concreto) y es penalizado si los transgrede porque esta-a actuando dentro del concepto "mal".

    Por ejemplo, la figura arquelpica del demonio, del diablo o de laencamacin en un smbolo cualquiera del mal, no es ms que una

    necesidd psicolgica quie trafa de justiflcar las tendencias errneasdel hombre. Posiblemente esa sea una de las cadenas que primerohaya que romper para poder librarnos de las cargas del pasado y asu-mir definitivamente liu riendas de nuestro destino.

    Pero, cmo ser el futuro en niveles superiores de consciencia?,qu peso tendrn las creencias en el ser humano, si es que existen?Para dtr respuest a estos interrogantes sera necesario manefar losconceptos del pasado de forma totalmente asptica, iluminados por laluz dela intuicin y refrendados por la lgica y Ia run que les pro-porcionaran solidez.

    [a Fsica modema ha demostrado que todo es bracin, que todoes energa y que sta se manifiesta gracias a dos polaridades. Asi elser humalo tambin vtbraa por la interaccin de dos polaridades,de dos fuerzas, de dos tendencias, todas ellas sin nombre, sin califica-tivos. En todo caso se las podra definir como ms o menos solid.triaso unificadoras, ya que la tendencia natural de la creacin es la inte-gacin, la unidd, o, lo que es lo mismo, la construccin de umdadesde creciente complejidad.

    Continuando con este mismo planteamiento. podramos peltsar que,al igual que los hombres primithos fueron incorporudo sus distintosaprendizajes en su cadena gentic- es posible que el hombre del maa-na lleve, de igual maner4 la-s leres unirersaies inscritas sobre su ADN. Yque es,LS le,ves sean, en realidad, rura serie de normas de funcionamien-to cotidiano que se rnodificarn conforme se vayan desarrollando los

    acontecimientos, pero sinesperar a que sean refren-dadas por los "expertos le-gisladores". sin necesidadde que sean plasmadas enningun manual sobre lega-[dad. sino que forni'lrnpane del parmroruo de lehumarudad. integrado encada alma hunana.

    Creencias o fe sernpalabras que probable-menle no formen parte enel fuluro del vocabulariode los hombres. ya que ha-brn sido sustituidas porotras de contenidos mu-cho ms obiles', posibi-lidndesy eui.dencias.

    Y es que cuanto ms se acerque la posibilidad a la evidencia,ma,or ser la capacidad del hombre para manifestarse en estesentido, ya que se encontrar ms seguro de que sigue los caucesde la Lev Universal.

    ta cibmci,a es, en el momento actral., utalimitacin de nuestroconocimiento. Cando la edencia sustituya ala creencia, habremospasado de "ueer" a. "saber". Siendo, eso s, conscientes de que elCosmos es un elemento vivo en constante cambio y que el hombre,como parte integrante de 1, debe sintonizar con ese impulso etemode creacin'

    &,ara pinnr Merno

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