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T E R C E R A T E M P O R A D A PROGRAMA 9

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T E R C E R AT E M P O R A D A

PROGRAMA 9

Sala NezahualcóyotlSábado 09 de diciembre 20:00 horasDomingo 10 de diciembre 12:00 horas

Orquesta Filarmónica de la UNAMChristian Gohmer, director huésped

Programa

Arturo Márquez Danzón no. 2(1950) (Duración aproximada: 11 minutos)

Samuel Zyman Concierto para piano y orquesta(1956) I Allegro molto II Adagio III Presto (Duración aproximada: 24 minutos)

Mauricio Náder, piano

Intermedio

Heitor Villa-Lobos Bachianas brasileiras no. 5(1887-1959) I Aria (Cantilena) II Danza (Martelo) (Duración aproximada: 11 minutos)

María Caballero, soprano

María Granillo Travesías urbanas*(1962) I Vías alternas II Encrucijadas III Llueve sobre mojado (Duración aproximada: 20 minutos)

* Estreno mundial

Concierto dedicado al Bachillerato a Distancia de la UNAM por su X Aniversario B@UNAM • CUAED

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Christian GohmerDirector huésped

Christian Gohmer comenzó su formación musical a tem-prana edad, con clases de violín. Cursó su carrera en la Escuela Superior de Música y ha estudiado dirección de orquesta con Enrique Diemecke, Alain Paris y Enrique Patrón de Rueda. Ha asistido a cursos de perfecciona-miento con la Orquesta Barroca de Friburgo, el ensamble Recherche y Diavolus in Musicae, entre otros.

Ha colaborado con la Orquesta y el Coro del Teatro de Bellas Artes, la Filar-mónica de la Ciudad de México, la Filarmónica de la UNAM, la Sinfóni- ca de la Universidad Autónoma de Guanajuato, la Orquesta de Cámara de Bellas Artes, la Sinfónica de Xalapa, la Filarmónica de Querétaro, la Sinfóni-ca de Oaxaca, la Sinfónica de la Universidad Autónoma de Nuevo León, la Sinfónica del Instituto Politécnico Nacional, el Ensamble del Centro de Ex-perimentación y Producción de Música Contemporánea, la Orquesta de Cá- mara de la Universidad Michoacana, la Sinfónica del Estado de Puebla y la Sinfónica de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo. Se ha presen-tado en diversas ciudades de México, así como en Nueva York, Los Ángeles, San Diego y Tucson en Estados Unidos.

De 2006 a 2009, fue director musical de la Sinfónica de la Escuela Supe-rior de Música y de 2014 a 2015 estuvo al frente de la Filarmónica de Sonora. Ha trabajado con Jorge Federico Osorio, Simone Kermes, Tarja Turunen, Christophe Dujardin, Francisco Ladrón de Guevara, Cuauhtémoc Rivera, Erika Dobosiewicz, y otros artistas.

Es director y fundador del ensamble de música contemporánea Tempus Fugit, con el que ha estrenado obras de más de cuarenta compositores mexi-canos y extranjeros en diversos foros y festivales del país. Con ese conjunto ha recibido becas del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes y ha grabado obras como Pierrot Lunaire de Schönberg, la versión de Paul Hindemith de La noche de los mayas de Revueltas, el Concierto hispano para guitarra y orquesta de Juan Trigos, la ópera Las cartas de Frida de Marcela Rodríguez y música de Alejandro Romero, Georgina Derbez, Jorge Torres Sáenz y Ana Lara, entre otros.

Actualmente es director artístico del Solistas Ensamble del Instituto Na-cional de Bellas Artes.

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María CaballeroSoprano

Originaria de Navojoa en Sonora, María Caballero estu- dió canto con Cristina Velasco y Gerardo González en la Es- cuela Superior de Música y Danza de Monterrey. Ha tomado cursos y clases magistrales con Francisco Araiza, Ramón Vargas, Rogelio Riojas-Nolasco, Rocío Tamez, Juan Bautista Sandoval y Rosa María Hernández. Fue acepta-da en el Estudio de Ópera de Santa Cecilia de Roma,

donde trabajó con Renata Scotto, Anna Vandhi y Cesare Scartone, y en el Estudio de Ópera de Mirella Freni en Modena. Se presentó con la Orquesta del Sur de Arizona en el Festival Oaxaca 2015. En 2016, tuvo su primera pre-sentación en la explanada del Palacio de Bellas Artes a los 24 años de edad con el papel de Sandmännchen de la ópera Hansel y Gretel de Humperdinck. Ha interpretado los roles de Musetta en La bohème de Puccini, Adina en El elíxir de amor de Donizetti, Lauretta de Gianni Schicchi de Puccini, Ninettaen La finta semplice y Zerlina en Don Giovanni de Mozart, en producciones del Teatro Macedonio Alcalá de Oaxaca, el Festival Revueltas de Durango, el Teatro de la Ciudad de Monterrey y otros foros del país. Ha colaborado con la Orquesta de Cámara de Bellas Artes, dirigida por José Luis Castillo. Ac-tualmente es beneficiaria del Estudio de la Ópera de Bellas Artes.

Mauricio NáderPiano

Mauricio Náder Schekaibán estudió en el Conservato- rio Nacional de Música y la Escuela de Música de la Uni- versidad de Houston. Cursó una maestría piano en la Escuela de Música Eastman, donde recibió un certificado de intérprete. Sus maestros fueron Carlos Bueno, María Teresa Rodríguez, Nancy Weems y Anton Nel. A los 19 años de edad, debutó en el Palacio de Bellas Artes como

solista de la Orquesta Sinfónica Nacional. En 1996, ganó el Concurso Inter-nacional de Piano Bartók-Kabalevsky en Estados Unidos. En varias ocasiones ha sido becario del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes. Se ha presen-tado en escenarios de México, Estados Unidos, Canadá, Alemania, Bulgaria, España, Francia, Italia, Noruega, Portugal, Belice, Colombia, Costa Rica, Brasil, Cuba, Perú, Puerto Rico, El Salvador, Líbano, Pakistán y China, con lo que ha buscado contribuir en la difusión de la música mexicana. Realizó el estreno en México de los libros I y II de Makrokosmos de George Crumb durante el XXXVII Festival Internacional Cervantino, así como el estreno en varios países del Concierto para piano y orquesta de Manuel M. Ponce y el de José Rolón. Ha grabado más de treinta discos compactos, entre los que se pueden men-cionar Apuntes para piano, Recital y Mauricio Náder à Paris. Asimismo, ha sido juez de diversos concursos nacionales e internacionales y ha ofrecido clases magistrales en varios países.

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Arturo Márquez (Álamos, 1950)Danzón no. 2

No han sido pocas las veces que en la historia de la música la danza ha dado pie a la creación de obras sinfónicas que, por utilizar la expresión con la que Richard Wagner calificó la Séptima sinfonía de Beethoven, se convierten en la mismísima «apoteosis de la danza». Basta recordar el Bolero o La valse de Maurice Ravel, Malambo de la Suite Estancias de Alberto Ginastera o el Danzón no. 2 de Arturo Márquez.

Según Márquez, en una entrevista concedida durante la filmación del cortometraje Danzón no. 2, de Guillermo Ortiz, basado en la obra homónima del compositor sonorense, de la combinación de su pasión por la música de salón, específicamente el danzón, con el impacto que en su conciencia tuvo el levantamiento zapatista a principios de 1994, surgió en él la necesidad de crear una obra que reflejara el «espíritu de renovación» que mucha gente estaba experimentando ante los cambios que se estaban suscitando en nuestro país. El resultado fue una obra que desde su estreno, el 5 de marzo de 1994, pro-yectó la música sinfónica de México a los escenarios internacionales. En palabras de su creador, el Danzón no. 2 «trata de acercarse lo más posible a la danza, a sus melodías nostálgicas, a sus ritmos montunos, y aun cuando profana su intimidad, su forma y su lenguaje armónico, es una manera perso-nal de expresar mi respeto y emotividad por la verdadera música popular.»

Samuel Zyman (Ciudad de México, 1956)Concierto para piano y orquesta

San Agustín afirmaba que la música, en cuanto que «la ciencia del bien mo-dular», es un conjunto de conocimientos que sirven para medir correc- tamente las duraciones de los sonidos que conforman las palabras, porque para el que fuera obispo de Hipona y uno de los Padres de la Iglesia Católica, el ritmo es la base sobre la que descansa el poder de la música, y por lo tanto el secreto de la creación. Expresado en buen romance, entender y dominar el rit- mo es aproximarse a la comprensión de Dios, pues medir y acentuar correc-tamente cada uno de los sonidos del discurso, es requisito indispensable para alcanzar la noble dicción que abre las puertas que conducen hacia lo sublime. Lo han sabido desde siempre los poetas; lo sabía Platón cuando imaginó el Timeo ; lo sabía el rabino Judah Loew cuando le insufló vida al Golem a tra-vés de la palabra en algún lugar del antiguo gueto de Praga; y seguramente lo sabía Samuel Zyman cuando concibió su Concierto para piano.

Después de cultivar una doble vida que lo llevaría a graduarse como mé-dico a la vez que adquirir una respetabl e formación como pianista y com- positor en el Conservatorio Nacional de Música de nuestro país, Samuel Zyman decidió jubilar su estetoscopio para estudiar en la Escuela de Música Juilliard de Nueva York, donde obtuvo los grados de maestría y doctorado en composición. Entre sus primeras creaciones importantes se cuenta su Con- cierto para piano y orquesta, escrito en un estilo que el mismo compositor califica de neorromántico: «Mi música es bastante accesible», afirma Zyman,

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y añade: «Es tradicional en el sentido de que está basada en melodías, en temas, tiene un ritmo entendible. No es tonal, como del siglo XIX, por lo me-nos no todo el tiempo. La llamo neorromántica. Es una etiqueta que le pusieron hace tiempo y que nunca me ha molestado.»

Sin embargo, basta escuchar cualquiera de los tres movimientos en los que está estructurado su Concierto para piano, para darse cuenta de que, aun cuando está basado en melodías, éstas nada tienen que ver con aquéllas, seductoras, pegajosas y fáciles de otras músicas, sino que su discurso es un fluir incesante de elaborados trazos melódicos entre los que afloran aquí y allá, ya sea en el solista o en la orquesta, patrones breves cuya evanescencia no es apta para estructuras mentales con déficit de atención; y que, aunque sus ritmos son entendibles, no lo son para un oído no habituado a ir más allá de las acentuaciones básicas de un compás de 4/4. Y si a esto se le suma la complejidad de su colorido tejido contrapuntístico y la explotación al máxi-mo de las capacidades técnicas del solista y de la orquesta, el resultado es una obra de alto voltaje capaz de fundir los axones de un sistema nervioso de dudosa calidad.

Heitor Villa-Lobos (Río de Janeiro, 1887 - Río de Janeiro, 1959)Bachianas brasileiras no. 5

Para satisfacer las ambiciones de Carlos Fermín Fitzcarrald, comerciante cauchero y aventurero explorador peruano, durante más de dos meses alre-dedor de mil indígenas piros y campas del Perú sumaron sus esfuerzos a los de más de cien caucheros blancos para transportar por tierra el barco de vapor Contamana desde las riberas del río Serjali hasta las aguas del río Caspajali, a través de más de diez kilómetros de selva que incluían una cresta de casi quinientos metros de altura. La épica travesía tuvo lugar en 1894, e inspiró ochenta y ocho años después al cineasta alemán Werner Herzog la creación de su filme Fitzcarraldo, en el que el protagonista, para poder cumplir su sueño de construir un teatro de ópera en un pueblo de la Amazonía Peruana, debe transportar un enorme barco a través de la jungla con la ayuda de indí-genas jíbaros, cuyos violentos impulsos intenta aplacar con grabaciones de arias de ópera. En determinado momento del filme y en tan sólo treinta y nueve segundos, Herzog crea una de las escenas más bellas de la historia del cine, y no sólo desde el punto de vista visual sino sonoro también: mientras el barco de vapor Molly-Aida remonta las mansas aguas del río Pachitea, de la selva surgen los amenazantes ritmos de los tambores jíbaros, que de pron-to se mezclan con la dulzura del aria En fermant les yeux de la ópera Manon de Jules Massenet, interpretada por Enrico Caruso. El resultado es mágico, si no es que francamente sublime. Cincuenta y dos años antes, Heitor Villa-Lobos había comenzado a fusionar elementos del folclor musical brasileño con procedimientos composicionales propios de la música barroca para crear sus Bachianas brasileiras. El resultado, al igual que en la escena de Fitzcarraldo es mágico, si no es que…

A los 18 años de edad, Heitor Villa-Lobos comenzó a recorrer distintas provincias del Brasil en una aventura musicológica que lo llevaría a entrar en con- tacto con las raíces más profundas del folclor musical de su país. Con un

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considerable bagaje de experiencias, conocimientos y composiciones a cues-tas, comenzó en 1915 a darse a conocer ante un público al que en no pocas ocasiones le resultaba difícil asimilar su innovador estilo, con lo que provocó de parte de la crítica violentas reacciones en su contra.

Sin embargo, su fuerza expresiva y la determinación de sus convicciones despertaron el interés de grandes músicos como Darius Milhaud y Arthur Rubinstein, con cuyo apoyo, aunado al del gobierno brasileño, logró partir en 1923 rumbo a París, donde permaneció hasta 1930, año en el que decidió regresar a su patria para comenzar a colaborar en el proyecto de transforma-ción cultural de la misma, organizando giras de conciertos y conferencias a lo largo de sesenta y seis ciudades. La vehemencia con la que exponía sus ideas ante el público, criticando sus vicios y atacando con dureza el gusto popular por el futbol, del cual afirmaba que había hecho descender la inteligencia humana de la cabeza a los pies, le valieron en alguna ocasión ser despedido con una lluvia de huevos podridos y papas.

Es en esa época que decidió dirigir su mirada hacia la música de Johann Sebastian Bach para componer sus Bachianas brasileiras, serie de nueve pie-zas para distintos grupos camerísticos y orquestales en las que somete ele- mentos rítmicos y melódicos propios de la música de su país a tratamientos formales, contrapuntísticos y armónicos de la música barroca. El nombre de cada una de las partes en las que están divididas, relaciona un término ba- rroco (Preludio, Aria, Fuga, etcétera), con otro propio de la música brasi- leña (Embolada, Modinha, Ponteio y demás), dejando en claro la intención de mostrar el terreno de semejanza que hay entre ambas tradiciones tan apa-rentemente divergentes.

En el caso específico de las Bachianas brasileiras No.5, están compues- tas para un conjunto de ocho violonchelos y soprano, y conformadas por dos partes, de las cuales la primera, compuesta en 1938, es un Aria (Cantilena), dividida en tres secciones de las cuales la primera y la última son una vocali-zación, mientras que la central es un recitativo espresivo al estilo barroco, basado en un poema de Ruth Valadares Corrêa. Por su lado, la segunda parte, añadida por el compositor en 1945, es una Danza (Martelo), caracteri-zada por la persistencia martilleante del ritmo de Embolada, en la que la melodía de la voz entona versos de Manuel Bandeira.

María Granillo (Torreón, 1962)Travesías urbanas

Según Fernando Alvarado Tezozómoc en su Crónica Mexicáyotl, cuando los mexicas contemplaron por fin el augurio anunciado por el dios Huitzilopochtli como la señal que les indicaría el sitio donde habrían de fundar su ciudad, el sacerdote Cuauhtlequetzqui se refirió a lugar donde se manifestó el porten-to como «El sitio donde el águila grazna, en donde abre las alas; el sitio donde ella come y en donde vuelan los peces, donde las serpientes van ha-ciendo ruedos y silban»; y profetizó que «¡Ése será México Tenochtitlan, y muchas cosas han de suceder!» Pero seguramente nunca imaginó que entre esas muchas cosas que habrían de suceder se contarían una sobrepoblación que rebasaría los veinte millones de habitantes, la existencia de un parque

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vehicular de más de nueve y medio millones de vehículos motorizados y, entre otras muchas cosas, un problema crónico de contaminación. Idealizada por Juan Trigos, caricaturizada por Chava Flores, alguna vez exaltada por Alexander von Humboldt como la «región más transparente del aire», lo cier-to es que la Ciudad de México constituye para la mayoría de sus habitantes una experiencia en la que cualquier cosa puede suceder. Es en el afán de darle forma sonora a esta experiencia, que María Granillo compone su Con-cierto para orquesta Travesías urbanas, en relación con el cual señala:

Generalmente mis fuentes de inspiración provienen de la imaginación, de la naturaleza, de las mitologías, como una forma de aproximarme a lo humano de la música desde un lugar poético, y quizá, también, desde una perspectiva un tanto escapista, de eludir la realidad brutal y concreta de habitar, por ejemplo, una ciudad tan tremenda y conflictiva como la nuestra.

Sin embargo, hace no tanto, un buen día me dije: quiero escribir una mú-sica sobre la gran urbe, quiero hablar de imágenes citadinas, quiero abordar las emociones que me invaden día con día en la selva de concreto. Es de estas imá- genes y sensaciones que surge Travesías urbanas.

El viaje inicia con Vías alternas, el primer movimiento, en el recorrido verti-ginoso por calles y avenidas, en el que todo mundo tiene prisa por llegar a tiempo a su destino. Las vías se liberan y se obstruyen alternativamente, los ánimos se violentan y se relajan, todo sucede de manera rápida y nerviosa, queremos escapar de los embotellamientos, queremos fluir y llegar. En el cami- no hay topes, semáforos, luces, pitazos, atorones, arrancones, persecuciones, mentadas... buscamos y encontramos enloquecidamente las Vías alternas.

El segundo movimiento Encrucijadas, nos habla del peligro, de la sorpresa, del miedo, de la precaución. Hay que estar prevenidos, todo puede pasar: un asalto, un crimen, una violación, un secuestro, un accidente. Nos encontramos permanentemente sorteando el miedo ante la encrucijada y escapando. Cada viaje es una aventura llena de peligros que sortear.

El tercer movimiento Llueve sobre mojado, habla, sí, de las lluvias, de las tormentas, de las aguas que se nos desbordan cada año y ante las cuales nos sentimos sobrepasados, pero habla también de la demasía en la que vivimos: demasiada agua, demasiada contaminación, demasiada corrupción, demasiada inseguridad, demasiada violencia, demasiada impunidad. Cuando apenas nos estamos recuperando, vuelve a caer sobre nosotros el peso de la desgracia, tanto natural como humana. Lo decimos a diario, en este país, todos los días nos llueve sobre mojado.

Escrita entre el 2015 y el 2016 como parte del proyecto creativo de María Granillo durante su pertenencia al Sistema Nacional de Creadores de Arte del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, Travesías urbanas busca ser, de acuerdo a su autora, «una reflexión musical sobre nuestra vida cotidia-na en la gran ciudad, que a pesar de todo, quiere ser musical, interesante, imaginativa y bella en toda su oscura complejidad, y que abreva en las inmen-sas posibilidades sonoras de la orquesta sinfónica para expresarse.»

Notas: Roberto Ruiz Guadalajara

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ConcertinosSebastian KwapiszManuel Ramos Reynoso

Violines primerosBenjamín Carone TrejoEwa TurzanskaErik E. Sánchez GonzálezAlma D. Osorio MiguelEdgardo Carone SheptakPavel Koulikov BeglarianJuan Luis Sosa AlvaJosé Juan Melo SalvadorCarlos Ricardo Arias de la VegaJesús Manuel Jiménez HernándezTeodoro Gálvez MariscalRaúl Jonathan Cano MagdalenoEkaterine Martínez BourguetToribio Amaro AnicetoMartín Medrano Ocádiz

Violines segundosOsvaldo Urbieta Méndez*Carlos Roberto Gándara García*Nadejda Khovliaguina KhodakovaElena Alexeeva BelinaCecilia González García MoraMariano Batista ViverosMariana Valencia GonzálezMyles Patricio McKeown MezaMiguel Ángel Urbieta MartínezMaría Cristina Mendoza MorenoOswaldo Ernesto Soto CalderónEvguine Alexeev BelinJuan Carlos Castillo RenteríaBenjamín Carone SheptakRoberto Antonio Bustamante Benítez

ViolasFrancisco Cedillo Blanco*Gerardo Sánchez Vizcaíno*Patricia Hernández ZavalaJorge Ramos AmadorLuis Magaña PastranaÉrika Ramírez SánchezJuan Cantor LiraMiguel Alonso Alcántara OrtigozaAnna Arnal FerrerRoberto Campos SalcedoAleksandr Nazaryan

ViolonchelosValentín Lubomirov Mirkov*Beverly Brown Elo*Jorge Andrés Ortiz MorenoJosé Luis Rodríguez AyalaMeredith Harper BlackMarta M. Fontes SalaCarlos Castañeda TapiaJorge Amador BedollaRebeca Mata SandovalLioudmila Beglarian TerentievaIldefonso Cedillo Blanco

ContrabajosVíctor Flores Herrera*Alexei Diorditsa Levitsky*Fernando Gómez LópezJosé Enrique Bertado HernándezHéctor Candanedo TapiaClaudio Enríquez FernándezJesús Cuauhtémoc Hernández ChaidezAlejandro Durán Arroyo

FlautasHéctor Jaramillo Mendoza*Alethia Lozano Birrueta*Jesús Gerardo Martínez Enríquez

PiccoloNadia Guenet

Orquesta Filarmónica de la UNAMMassimo Quarta, director artístico

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OboesRafael Monge Zúñiga*Daniel Rodríguez*Araceli Real Fierros

Corno inglésPatrick Dufrane McDonald

ClarinetesManuel Hernández Aguilar*Austreberto Méndez Iturbide

Clarinete bajoAlberto Álvarez Ledezma

FagotesGerardo Ledezma Sandoval*Manuel Hernández Fierro*Rodolfo Mota Bautista

ContrafagotDavid Ball Condit

CornosElizabeth Segura*Silvestre Hernández Andrade*Gerardo Díaz ArangoMateo Ruiz ZárateMario Miranda Velazco

TrompetasJames Ready*Rafael Ernesto Ancheta Guardado*Humberto Alanís ChichinoArnoldo Armenta Durán

TrombonesBenjamín Alarcón Baer*Alejandro Díaz Avendaño*Alejandro Santillán Reyes

Trombón bajoEmilio Franco Reyes

TubaHéctor Alexandro López

TimbalesAlfonso García Enciso

PercusionesJavier Pérez CasasolaValentín García EncisoFrancisco Sánchez CortésAbel Benítez Torres

ArpaJanet Paulus

Piano y celestaE. Duane Cochran Bradley

* Principal

PRÓXIMO PROGRAMAFuera de Temporada

Gala de Clausura

Massimo Quarta, director artístico

Chaikovski• Suite de El Cascanueces• Sinfonía no. 6 Patética

Sábado 16 de diciembre 20:00 horasDomingo 17 de diciembre 12:00 horas

Programa sujeto a cambios

UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

Dr. Enrique Luis Graue WiechersRector

Dr. Leonardo Lomelí VanegasSecretario General

Ing. Leopoldo Silva GutiérrezSecretario Administrativo

Dr. Alberto Ken Oyama NakagawaSecretario de Desarrollo Institucional

Mtro. Javier de la Fuente HernándezSecretario de Atención a la Comunidad Universitaria

Dra. Mónica González ContróAbogada General

Coordinación de Difusión Cultural

Dr. Jorge Volpi EscalanteCoordinador de Difusión Cultural

Mtro. Fernando Saint Martin de Maria y CamposDirector General de Música