Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
-
Upload
alex-red-red -
Category
Documents
-
view
226 -
download
0
Transcript of Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 1/117
Estudio introductorio
LAVISIÓN MÁS familiar del proceso de la política nos ha acos-tumbrado a ver en la legislatura y el gobierno el punto central
de la hechura de la política pública: la decisión de lo que hay quehacer y de cómo hacerla. Nos ha acostumbrado también a creer que, después, a manera de una orden obligatoria, la política essimplemente ejecutada por el aparato burocrático, una pirámideescalonada de funcionarios expertos, dedicados, sometidos e im-
parciales.
A esta visión contribuyó la "científica" dicotomía entre políticay administración pública, según la cual los políticos decidían y losadministradores y empleados públicos ejecutaban o, en el mejor de los casos, decidían cómo ejecutar las decisiones. En esta pers-
pectiva, la decisión de la política era por definición institucional-mente perfecta, por cuanto había sido adoptada por titulareslegalmente competentes y conforme a procesos legalmente esta-
blecidos. Y si perfecta, no procedía legal y administrativamentemás que ejecutarla tal cual, cumplirla en el sentido de obedecerlaal pie de la letra, no en el sentido de llevarla a cabo, a su cumpli-
miento y plenitud, "implementarla". Por consiguiente, los incum- plimientos de la política, tales como que no ocurrieran las cosasque se buscaba realizar o que se realizaran mal, defectuosamente,a destiempo, ocasionando nuevos y mayores problemas, fueron sinmás imputados a los defectos morales e intelectuales de funcio-narios y empleados públicos, a los burócratas. Habría sido su in-competencia y/o su irresponsabilidad la fuente del mayor o menor fracaso de la política.
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 2/117
Obviamente fue cada vez más difícil creer que la decisión mis-
ma no tenía nada que ver con el hecho de que no salieran las
cosas como se había pensado, a pesar de que la puesta en práctica
de la decisión había devorado recursos, agotado el esfuerzo de
servidores públicos de buena voluntad y restringido a través de
pesadas regulaciones la libré acción de los ciudadanos. Los fraca-sos (relativos o absolutos) de las políticas se fueron apilando tris-
temente y arrojaron evidencia que muchos de ellos se debían a
los errores de las grandes decisiones más que a los comporta-
mientos de los operadores. El crecimiento del estado obligaba
a atender un mayor número de situaciones y problemas que se
consideraban de interés general. El sinfín de problemas, su he-
terogeneidad, complejidad, escala, conflictualidad, variabili-
dad..., planteaba cada vez más cuestiones no sólo de definición
de los problemas sino de su tratabilidad. En muchas áreas, los
gobiernos terminaron por ahogarse intelectual y administrativa-
mente -por no decir políticamente. Ante la magnitud y urgencia
de los problemas decidieron improvisada y reactivamente. Y cuan-
do decidieron inteligentemente, basándose en información con-
fiable y conocimiento probado, en experiencias exitosas previas,
la puesta en práctica de las políticas corrió a cargo de organiza-
ciones saturadas, incontrolables, a veces incompetentes y no rara-
mente en el filo de la legalidad.
Hay una triste historia de políticas fracasadas. En parte por
errores de diseño, en parte por defectos de implementación de
las políticas. Por un lado, si se acepta que de suyo toda política
es .una hipótesis que espera realizar ciertos objetivos .medianteciertas acciones y que en consecuencia es susceptible de error, se
impone un extremo cuidado en la definición y explicación del pro-
blema público: hay que contar con teoría causal (o proceder con
rigurosa lógica de inducción a la manera' del "método de compa-
ración sucesivas limitadas" de Lindblom). Por otro lado, si se
acepta que los problemas públicos son escabrosos, de dificilísimo
manejo,pluridimensionales y cambiantes, y que en su atención
concurren numerosísimos actores, con diversos intereses, puntos
de vista ymotivaciones, se impone encontrar fórmulas inteligentes
de coordinación que integren la actividad de .1osdiversos partici-
pantes sin perder de vista el objetivo a alcanzar. Sin embargo, es
lógico pensar que frente a muchas. situaciones apremiantes los go- biernos han decidido sin teorías de apoyo o se han sustentado en
teoremas, tecnologías, modelos inadecuados; en estos casos, la
más puntillosa y entusiasta puesta en práctica de la política no
podrá corregir el error de su concepción y diseño, condenando la
implementación a ser un esfuerzo sin sentido. Asimismo, la polí-
tica, en el momento en que se echa a andar, desata muchas opor-
tunidades y expectativas, poderes e intereses en juego, cargas de
trabajo y responsabilidades, operaciones y decisiones; la imple-
mentación se vuelve entonces un proceso muy complejo y elusivo,
también conflictivo, y es casi imposible encontrar una fórmula de
coordinación que integre las diferencias y configure una acción
colectiva armónica y efectiva. Los errores de diseño y los defectos
de implementación son más comunes, obviamente, en las políticas
sociales que enfrentan problemas cuyos componentes y factores
explicativos arraigan en realidades vitales de difícil acceso e inci-
dencia gubernamental.
Aquí estudiaremos específicamente el proceso de implemen-
tación de las políticas, sus dificultades y oportunidades, sus expli-
caciones y recomendaciones. En primer lugar, expondremos el
contexto sociopolítico norteamericano que ocasionó .1osestudios·
de implementación y que llevó a descubrir su centralidad para el
éxito o fracaso de una política: las políticas de reforma social de
los años sesenta. Siempre recordaré la sorpresa que me causó el
hecho de que los investigadores norteamericanos de mediados de
la década de los setenta, hayan tenido un estado de ánimo similar
al que tuve amediados de la década de los ochenta, cuando me ,
asomé por piimera vez a los estudios de políticas públicas. Nos
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 3/117
sentíamos frustrados Y quizá irritados por tantas políticas y pro-
gramas gubernamentales sin éxito, por tanto desperdicio de dinero
público, por tanta ineficiencia administrativa, por tantos proble-
mas irresueltos y siempre profusamente tratados, portanto discurso
fantasiosamente prometedor de respuestas y bienes abundantes. En
. mucho el reclamo por el redimensionamiento del estado se debió
a la percepción de los fracasos, relativos o absolutos, de las polí-
ticas emprendidas por un gobierno que invocando la necesidad y
justicia de las reformas sociales se extendía por todos lados y con-
trolaba improductivamente demasiados espacios.de acción indivi-
dual y social. Hoy se ha aprendido que las funciones estatales de
reforma y bienestar social pueden realizarse sin el agobio guber-
namental, con su regulación e iniciativa, pero sin dispendio, bu-
rocratización y paternalismo.
En segundo lugar, expondremos la primera generación de los
estudios de implementación, que desencadenó toda una serie deinvestigaciones y recomendaciones. Se trata de los trabajos pione-
ros y fundamentales de los berkeleyanos, Pressmann, Wildavsky,
Bardach, que han circunscrito el ámbito de la problemática y dado
el tono a los estudios. La principal razón de exponer brevemente
sus posiciones obedece a que sus importantes trabajos no pudieroI1
formar parte de la antología. Los textos seleccionados pertenecen
a la segunda y tercera generación de estudios, la que reacciona a
los enfoques jerárquicos de implementación y propone proceder
a la inversa: desde los operadores a los decisores (Berman, Elmo-
re, Lipsky). Y la generación que con mayor distancia del tiempode las frustraciones y los entusiasmos, elabora modelos del pro-
ceso de implementación, con la finalidad de orientar los diferentes
estudios y de corregir en la práctica defectos y obstáculos (Van
Horn y Van Meter, Rein y Rabinowitz, Mazmanian y Sabatier,
O'Toole).
L Las decepciones de los anos sesenta:
Great Society y War on Poverty
Al revisar los primeros estudios norteamericanos que a comienzos
de los años setenta se ocupan de la implementación de las políticas
públicas, llama la atención el hecho de que todos ellos fueron
escritos con un ánimo de desencanto en la capacidad del gobierno
para resolver los viejos y patentes problemas sociales de la pobre-
za, la desigualdad, la discriminación en los Estados Unidos. Son
estudios que nacen de "promesas incumplidas" y "esperanzas frus-
tradas" ante el malogro de los programas de reforma social de los
años sesenta. Son libros críticos, quizá pesimistas, pero no capitu-
lan ni teórica ni políticamente. Quieren saber por qué buenas le-
yes, inteligentes programas gubernamentales, abundantes y
oportunos financiamientos, esfuerzos cotidianos de organizacio-
nes y personas, simplemente no funcionaron, no resolvieron los problemas sociales que afrontaron y quedaron muy lejos de los
objetivos que prometieron alcanzar. Quieren saber por qué el go-
bierno fracasó, con el fin de llegara saber cómo el gobierno podría
ser eficaz en sus tareas y promesas; Y, mucho más radicalmente,
tratan de saber si en definitiva el gobierno posee la capacidad (y
en qué medida) de ofrecer soluciones a las cuestiones sociales y,
por consiguiente, si tiene sentido y plausibilidad su intervención,
sus cargas fiscales y regulaciones jurídicas y el crecimiento de sus
agencias administrativas o si, por lo contrario, es altamente im-
probable que leyes, presupuestos y programas de acción guberna-mental posean eficacia alguna en muchas de las reformas sociales
que anuncian emprender y prometen realizar. El problema de fon-
do es entonces el de saber ¿cuál es el ámbito de factibilidad de
la acción gubernamental? ¿Qué puede hacer y qué no puede hacer
el gobierno? y ¿por qué no es eficaz en el terreno de lo que ra-
zonablemente parece serIe accesible?
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 4/117
'Aaron Wildavsky, pionero de los,estudios sobre la implemen-
tación de políticas públicas, atestigua con claridad la actitud pre-
dominante del tiempo:
Todos los que vivieron las promesas exaltadas y las esperanzas
frustradas de los programas sociales de los años sesenta han
qúedado marcados hasta hoy en día por esa experiencia. El
trabajo intelectual de los años setenta, el mío incluido, ha sido
un esfuerzo por entender en dónde estuvo el error del gobier-
no, por aprender qué habría que hacer para que el gobierno
pudiera funcionar mejor o por saber si no sería mejor que el
gobierno simplemente no emprendiera acción alguna. En efec-
to, las dificultades del gobierno crecen en proporción a la mag-
nitud de sus i:¡{tentos. Más grandiosos son los intentos
gubernamentales, mas el gobierno está obligado a intervenir
en las conductas de las personas y más debe extraer de los
ingresos personales. Sin agravio de Diógenes, fue más fácil en-contrar un hombre honesto que un programa eficaz. ¿Por qué?
(1979:4).
La década de los años sesenta se abre en un momento de al-
tísima confianza norteamericana en la capacidad directiva y ope-
rativa del gobierno. La tradicional sospecha conservadora acerca
del poder estatal, su resistencia a intervenciones innecesarias del
gobierno en la esfera de las libertades privadas, había cedido en
favor del "consenso liberal".1 Los liberales reclamaban reformas
sociales en conformidad con el principio de la igualdad, valor bá-
sico de -la cultura política norteamericana y consideraban al go-
1Después de 1932 (New Deal),por "liberal" o "liberalismo" suele entenderse en los
Estados Unidos las corrientes polfticas que reconocen la igualdad intrínseca de los indi-
viduos en dignidad, libertades y derechos (civiles y políticos), pero que, ante el hecho de
la desigualdad social de oportunidades y condiciones -la existencia de privilegios, mo-
nopolios, distinciones-, que impide el ejercicio efectivo de las libertades a grandes númerosde población, sostienen también la necesidad de reformas económicas, sociales y políticas
a través de una mayor actividad distributiva y asistencial del gobierno mediante reglamen-
tación, fiscalización y gasto público. Sinónimo de reformismo social e intervencionismo
bierno estatal como eL protagonista de la magna tarea reformista.
El tiempo de la Depresión y los años-de la Segunda Guerra habían
difundido y acendrado una actitud de confianza en la rectitud y
en la capacidad del gobierno. La conclusión de la guerra de Carea
dio paso a una nación más vuelta hacia sí misma y fue la ocasión
para pensar que _existían ya las condiciones para lanzar el ataque
final a la pobreza y a la discriminación. Había llegado la hora de
llevar a término las ideas-del New Deal de Roosevelt. Elproyecto
liberal tuvo sus primeros asomos en la política d e Jl{ewFrontier de
la presidencia Kennedyy encontró su gran oportunidad en 1964,
con el ascenso arrollador de Lyndon B. Johnson a la presidencia
y la mayoría demócrata en las dos cámaras. La Social Security Act
de 1935, con su doble programa de "seguridad social" y de "asis-
tencia pública", resucitó en la más amplia y audaz reformasocial
emprendida por la política Johnson de Creat S ocie ty yW ar o n
Poverty. Una Nueva legislación dio inicio y dirección al combate
con,tra la desigualdad, la discriminación y la póbreza (EconomicOpportunity Act, 1964;Elementary and Secondary Education Act,
1965;Public Works and Economic Development Act, 1965;Hou-
sing and Urban Development Act, 1965; Medicare and Medicaid,
1965; Civil Rights Act, 1964; Voting Rights Act, 1965).
Desde los tiempos de la primera presidencia de Franklin Roo-
sevelt ninguna administración \había tenido tan pocas restric-
ciones políticas como la del presidente Johnson. El nuevo
presidente ... decidió declarar la guerra a la pobreza, extender
los programas de salud, vivienda, educación y capacitacióil pa-ra el trabajo, así como aumentar los aportes gubernamentales
estatal, el liberalismo norteamericano fue criticado por el (neo)conservadurismo -en el
lenguaje latinoamericano, en sentido inverso, por el neoliberalismo-, que le imputó el
estancamiento económico, el déficit público, el dispendio y desvío de fondos públicos, la
ineficiencia de los programas sociales..., y reivindicó conforme a su tradición los valores
del individualismo racional, el gobierno limitado y el libre mercado. Por eJíl:ensión,y no
sin exageración, suele decirse que el partido demócrata es liberal y el partido republicano
conservador.
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 5/117
en efectivo y en especie. Para alcanzar estas metas, el gobierno
federal buscó que los gobiernos estatales y locales se convir-
tieran en instrumentos a través de transferencias que por su
monto difícilmente podrían rehusar los gobernadores, alcaldes
y -legisladores locales. Según la apreciación común, -la alegre
legislación liberal había hecho crecer enormemente al sector
federal. Se pusieron en práctica nuevas armas administrativas
para atacar problemas que finalmente, después de décadas de
confuso entendimiento, se enfocaban con claridad. Los libera-
les esperaron que los resultados de sus políticas serían el pleno
empleo, el rápido crecimiento económico, la distribución equi~
tativa de los frutos del desarrollo entre las minorías antes des-
preciadas y entre los sectores sociales marginados. de las
mayorías, un mayor número de vivjendas y menos barrios ba-
jos, una mejor atención a la salud, especialmente a la de los
ancianos y los pobres, alimentos para los que no podían com- prarlos, capacitación laboral para los que podía serles de pro-
vecho, asistencia en dinero y en especie para los que no se
podía apoyar de ninguna otra manera. Los conservadores te-
mieron en cambio que el resultado fuera un crecimiento ex-
plosivo del sector público y un aumento de las intromisiones
en las libertades económicas y personales. Proliferaron las.
agencias. Creció el gasto público. Contada era la pobreza y
'parecía estar en descenso. Grandes fueron las esperanzas"
(Aaron, 1978: 2-3).
respectivamente a un 34, 36, 38 Y42% del gasto total del presu-
puesto federal y a un 6.28, 6.43, 7.91 y 10,05% del PNB. Dentro
del gasto total la parte canalizada específicamente a los pobres
(familias con ingresos inferiores a los tres mil dólares anuales) fue
de 4 552 millon es de dólares en 1961, de 6 136 en 1965, de 10
637 en 1967yde 22 972 en 1971, equivalente respectivamente a
un 13.42, 14.33, 17¡68 Y 21.68% del gasto público en "recursos
humanos" (Lowi, 1969, 1979).
Característica relevante de las políticas gubernamentales de
"Gran Sociedad" y "Guerra a la pobreza" fue la participación am-
plia y determinante de académicos e intelectuales. Las ciencias
sociales norteamericanas durante la posguerra, particularmente la
economía, la ciencia política yla sociología, habían tenido un de-
sarrollo impresionante e influyente. Habían logrado afinar y fun-
damentar sus métodos de conocimiento, introduciendo protocolos
formales y cuantitativos de conceptualización y habían avanzadoen la producción de explicaciones causales (o en su caso modelos)
acerca del comportamiento de las más significativas relaciones
económicas, políticas y sociales. Al comienzo de los años sesenta
ya estaba disponible una gran cantidad de estudios sobre pobla-
ción, desempleo, educación, discriminación, pobreza, salud públi-
ca, desarrollo urbano ..., además de formidables investigaciones
teóricas y empíricas de micro y macroeconomía. Los estudios ofre-
cían abundante información y proponian explicaciones (correla-
ciones estadísticamente sustentadas entre diversos hechos sociales
de interés político-gubernamental, por ejemplo, entre educacióny empleo, discriminación y movilidad socioeconórnica, gasto pú-
blico e inflación ...). Por consiguiente, se atrevían también a ofrecer
pronósticos sobre las consecuencias que resultarían de ciertos ti-
pos de decisiones, presentando estimaciones de su costo y bene-
ficio. El programa teórico-político de las Policy Sciences, esbozado
por H. Lasswell y D. Lerner, en 1951, parecía haberse vuelto re-
alidad una década después.
Más allá de esta visión del New Welfare de la presidencia de
Johnson, el hecho es que el gasto público en "recursos humanos",
concepto que incluía los gastos directos y los grants-in-aid enedu-
cación, salud, vivienda y capacitación, laboral, así como los varios
pagos de seguridad social y asistencia pública, en efectivo y en
especie, creció de 33957 millones de dólares en 1961 a 42 817 en
1965, a 60177 en 1967 y a 105 983 en 1971, cifras equivalentes
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 6/117
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 7/117
Sin duda, la prisa de la voluntad presidencial y la fuerte mayoría
demócrata en las cámaras habían provocado legislaciones y pro-
gramas con buenas intenciones pero sin objetivos específicos y sin
conexiones precisas entre las diversas operaciones. Pero esta baja
planeación de la acción. federal no era la característica de otros
programas, que habían sido cuidadosos y hasta detallados en su
diseño. De todos modos, el defecto de la vaguedad o el exceso de
pormenorización conducían igualmente a la conclusión de que las
más nobles intenciones y las más generosas promesas de reforma
.social eran derrotadas en el tránsito de la decisión a las operacio-
nes, en la puesta en práctica de leyes y programas. Parecía que un
destino fatal acompañaba a las políticas sociales, sin importar el
diseño operativo o la secuencia de esfuerzos y actores. "Aprendi-
moS que la implementación no era el breve interludio entre una
brillante idea y el abrir las puertas para brindar el servicio" (Wi-
lliams, 1975: 531). Las investigaciones fueron descubriendo los di-versos factores que afectaban la puesta en marcha de las políticas
gubernamentales. Estos factores (distorsiones burocráticas, resis-
tencias locales, conflictos intergubernamentales, heterogeneidad
de intereses, diversidad de situaciones, indiferencia de los bene-
ficiarios...) demostraban que la promulgación de leyes buenas o
elbuen diseño (científico-tecnológico) de un programa guberna-
mental no eran condiciones suficientes. para el éxito efectivo de
una política. Esta conclusión, sólo a la apariencia obvia y trivial,
llamó la atención sobre el hecho de que en el policymaking, des-
pués de la "gran" decisión, entraban en juego factores, tal vezmenores, que no habían sido previstos por leyes y programas y
que, sin embargo, distorsionaban las leyes y los programas o sim-
plemente los hacían a un lado. Más aún, el proceso de implemen-
tación fue también la ocasión para descubrir la inconsistencia de
muchas relaciones causales espurias que la le'gislación y el progra-
ma de gobierno habían incorporado, confiando en los teoremas
de la economía, la sociología, la pedagogía, la ciencia política, el
urbanismo. Las conexiones causales entre fenómenos, contempla-
das por teorías, modelos y tecnologías, o simplemente no sucedie-
ron o tuvieron lugar en formas imprevistas, con un cortejo de
consecuencias secundarias indeseadas. "El artículo de fé que une
a los analistas de la implementación es la creencia que el llevar a
cabo una política, la instalación de una tecnología, la realización
de un plan, la ejecución de una ley no es algo ni automático ni
asegurado. Al contrario, la investigación sistemática y la observa-
ción espontánea indican que los resultados de las políticas sociales
y de los planes más innovadores han sido generalmente imprede~
cibles y desafortunados, cuando menos a los ojos de sus diseña-
dores" (Berman 1978: 160)
Gross, Giacquinta y Bernstein (1971), Murphy (1971), Berman
y Mcumghlin (1974, 1976), Elmore (1975), McLaughlin (1975,
1976)son autores de multicitados estudios sobre las reformas edu-
cativas: la implementación del título 1 de La Ley de EducaciónElemental y Secundarias (ESEA) de 1965 (subsidios federales por
billones de dólares para las escuelas locales con gran población
de niños de familias pobres y dispuestas a emprender "programas
educativos especiales para los desfavorecidos"), el programa Head
Start (servicios de educación preescolar yde atención a la salud
para niños de familias en desventaja) y el programa FolZow
Through (servicios de reforzamiento educativo en los primeros
años de la escuela pública, con particular atención a los níños
en desventaja). A pesar de las interminables discusiones sobre
, las escalas de medición y los procedimientos de análisis utiliza-dos por los evaluadoresde los programas, estaba a la vista la
baja efectividad de los programas educativos emprendidos bajo
el principio de la igualdad de oportunidades. Las habilidades
cognoscitivas y lingüísticas eran casi tan pobres como antes y no
mantenían una relación significativa con las técnicas educativas
empleadas ni con los gastos y los esfuerzos invertidos. "Después
de dos años de esfuerzo concertado, los evaluadores no pudieron
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 8/117
documentar la efectividad del título implementación y tampoco
determinar si hubo algún programa en operación en el nivel 10-
cal. Los fondos del título implementación habían simplemente
desaparecido en el pantano de los sistemas escolares locales,con
algunas trazas aquí y allá de algo que pudo haber sido un pro-
grama educativo de carácter compensatorio" (Williams y Elmo-re; 1976: 102).
El libro de Martha Derthick New Towns In-Town: fVhyaFe-
deral Program Failed (1972) es un ensayo clásico sobre la más
importante política urbana de la presidencia de Johnson, fruto
de su idea y compromiso personal. Las metas del programa fue-
ron mejorar las decadentes condiciones de vida y habitación de
los pobres de la ciudad, foco de creciente violencia y criminali-
dad, así como reconstruir la imagen de un gobierno pasivo ante
el deterioro urbano de las principales ciudades norteamericanas.
Un desarrollo urbano y habitacional integral a través de l~ venta
de terrenos de propiedad federal en las áreas metropolitanas a
precios baratos fue considerado el nuevo y deci sivo instrumento,
que venía a sumarse a los tradicionales subsidios gubernamen-
tales de renta, compra, subsidios para construCción, manteni-
miento y renovación. El programa estuvo a cargo del Department
01Housing and Urban Development (HUD) , que intentó lanzado
en siete ciudades americanas. "El intento de la administración
Johnsonpor crear nuevas comunidades modelo en terrenos de
propiedad federal en las áreas metropolitanas comenzó en el ve-
rano de 1967. Sin embargo, cuatro años más tarde, no se habían
aún terminado de construir ninguna de las comunidades ... El programa fue inequívocamente un fracaso. No sólo no alcanzó
sus objetivos, sino que tampoco dejó resultados visibles. Tres
proyectos (en San Antonio, New Bedford y San Francisco) mu-
rieron de inmediato., Los otros cuatro (en Washington, Atlanta,
Louisville, Clinton Township) e.ncontraron enormes dificultades
yretrasos. En.la primavera de 1971 estaban apenas enconstruc-
ción trescientas unidades. Si se iba a terminar algún proyecto Ysi,
una vez terminado, se realizaría la concepción federal de la co-
munidad modelo, era algo totalmente incierto" (Derthick, 1972:
XIII-XIV). .El ensayo de J. Pressman y A. Wildavsky, Implementatwn
(1973), centró su atención en los programas de la Economic De-velopment Agency (EDA) , orientados a la creación de emp:eo.sper- ,
manentes para las minorías a través del desarrollo econonnco de
las localidades. Para ello revisaron el experimento de Oakland
(1966-1970) que buscaba mostrar ejemplarmente cómo la c~ns-
trucción de obras públicas junto con financiamientos atractLvos
para las empresas privadas era un óptimo incentivo para que los
empleadores dinamizaran sus negocios y desencadenaran procesos
de contratación de las minorías. En 1966, EDA anunció la voluntad
del gobierno federal de invertir 23 millones de dólares e~ Oak-
land con el fin de crear tres mil empleos entre los reSIdentes
des:mpleados. Tres años después se habían canalizado sólo cuatro
millones y creadó apenas 63 empleos. "A este paso, pasarían otros
veinte años antes de que esta operación de emergencia gastara el
dinero destinado a crear los empleos y pudiera evitar que la gente
provocara revueltas en las ciudades o tomara parte en ellas. Parte
de los tres millones se fueron para la construcción de un paso a
desniveL. y el resto se gastó en los honorarios de los arquitectos.
El Congreso aprobó los fondos necesarios, las autoridades de la
ciudad y las empresas dieron su aprobación, se anunció el progra-
ma al público con bombos y platillos. Pero, años más tarde, las
~onstrucciones no habían sido terminadas, los financiamientos sehabían agotado y los resultados en términos de empleo para las
minorías eran magros y decepcionantes" (Pressman yWildavsky,
1973: XIX-XX). 'Todas.estas evaluaciones oficiales y académicas de las políticas
y sus resultados fueron socavando la esperanza en la capacidad
del gobierno como el agente de la gran reforma social. La decep-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 9/117
. tuvo comienzos intelectuales, se volvió total y penosa
cuando la Guerra de Vietnam devoró los recursos económicos y
morales de la política de Johnson. El "consenso liberal" entró irre-
mediablemente en crisis. Más tarde, los escándalos de la presi-
dencia de Nixon terminaron por sepultar la confianza de la
posguerra en la ~apacidad y honestidad del gobierno federal. El New Fed e'ra lism nixoniano corrigió, reorientó, atenuó los progra-
mas sociales, no los canceló, pero las iimovaciones desaparecieron
en el mar de ilegitimidad en que desembocó su gobierno. Conce-
damos que esta historia estadounidense tiene de sobra analogías
en la historia político-administrativa mexicana, latinoamericana y
de tantos otros países.
Exhibir el incumplimiento de objetivos, los retrasos impensa-
. bles y los costos excesivos de las políticas sociales fue la tónica de
los primeros estudios de la implementación de políticas. En opi-
nión de Bardach (1977) propiciaron una conciencia "escéptica, so-fisticada, anti-ideológica, tal vez post-liberal", y originaron las
"herejías post-liberales".
La primera herejía es el escepticismo respecto de los funda-
mentos intelectuales de la reforma liberal. La segunda herejía
afirma que, aun si sabemos 10 que se puede hacer y podemos
encontrar los líderes políticos dispuestos a hacerla, el gobierno
está probablemente mal cortado para llevar a cabo el trabajo.
En el fondo, es probable que las estrategias regulatorias y bu-
rocráticas que han empleado con toda confianza los gobiernos
sean ineficaces si no es que dañinas ... La tercerá herejía, con
base en las dos primeras, afirma que, aun si s e sabe lo que se
debe hacer, se encuentran los líderes políticos dispuestos a ha-
cerla y se puede diseñar una estrategia apropiada de interven-
ción gubernamental (esto es, mínimamente burocrática), no se
puede asegurar queJa estrategia será bien llevada a cabo ... La
más simple estrategia gubernamental puede implicar activida-
des complejas e interrelacionadas de muchos niveles de ofici-
nas y agencias de gobierno, organizaciones privadas, asociacio-
nes profesionales, grupos de interés y poblaciones de
beneficiarios (1977: 4-5).
Para ningún autor las razones del "fracaso" de las políticassociales fueron de orden moral, corrupción, mentira, pereza, irres-
ponsabilidad ... de funcionarios altos o menores. "Si ellos decep-
cionaron las expectativas que el público puso en el gobierno es
porque ellos también se engañaron a sí mismos" (Derthick, 1972:
XIII). Las razones invocadas fueron de orden político-administra-
tivo. A la izquierda, los "radicales" indicaron que el cambio social
impulsado por los liberales tenía necesariamente que ser mucho
menor del esperado y estaba condenado al fracaso, por cuanto las
políticas del New Welf are dejaban inalterada la estructura desigual
y contradictoria del sistema capitalista norteamericano. A la de-recha, los "neoconservadores" denunciaron la incapacidad del go-
bierno liberal (demócrata) y reivindicaron los mecanismos
correctivos del libre mercado. Se afirmó que cualquier gobierno
corporativo-pluralista-incrementalista es un "gobierno que no
puede planear ni alcanzar la justicia", un "gobierno impotente,
que no por ser más grande es más poderoso" (Lowi, 19: XVI).
Todas las reformas sociales que emprende son capturadas y ex-
plotadaspor poderosos grupos particularistas de interés, al mar-
gen de la ley y al abrigo de transacciones ocultas.
n. Los primeros estudios
sobre la implementación.
•A la distancia de diez o quince años es fácil afirmar irónicamente
que los primeros estudios sobre la implementación se llevaron a
cabo desde la óptica del "nada funciona" (Rein, 1983) o desde
"los horrores de la guerra" (Linder y Peters, 1987). Sin duda, la
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 10/117
"primera generación" de investigadores no fue optimista. Vital-mente no tenían razón para seda, aunque su presunción inicialde ·las políticas federales como "zona de desastre" · los condujo· ageneralizaciones teóricamente discutibles. No sólo descubrierony explicaron los defectos, conflictos, retrasos, distorsiones ... queacarreaban las políticas. Afirmaron también que esas situacioneseran inherentes a la puesta en práctica de toda política. "Hastala política más robusta -la que está tan bien diseñada que pare-cería poder sobrevivir al proceso de implementación- tenderá amalograrse. Los síntomas clásicos de bajo desempeño, retraso yescalada de costos aparecerán forzosamente" (Bardach, 1977: 5).Con ello, deliberada o inadvertidamente, la primera literaturallevó agua a los molinos del neocünservadurismo (entre noso-tros, neoliberalismo) norteamericano de los años ochenta. Pero, posiciones ideológicas y políticas aparte, fue su mérito innegablemirar con ojos nuevos un hecho tan viejo como limitadamente
entendido, a saber, que la acción gubernamental arrastra siem- pre un déficit en sus resultados. Es evidente que los fracasos pueden deberse a muchos factores, pero uno fundamental es quees inexistente o defectuosa la implementación de las políticas.Los gobiernos suelen ser mejores cuando discurren y legislanacerca de las reformas sociales que cuando las efectúan. Por en-de, rescataron y destacaron la importancia que para el éxito dela política tiene la implementación y no sólo su diseño. Con ellocuestionaron la tendencia del policy analysis a encerrarse en elmomento de la decisión y a considerado el paso sustantivo de
la política y el determinante de su éxito. Cuestionaron particu-larmente la perspectiva economicista, ingenieril y contable en laque se había confinado la toma de de.CÍsión de la política. Ensegundo lugar, localizaron los factores que inciden en la imple-mentación y ocasionan su fracaso. Antes de estos estudios, pocoshabían percibido el problema o lo.habían entendido restringida-mente como un simple problema administrativo u organizacional
a manejar. 11ellos se debe el énfasis en el carácter político de laimplementación.
El fracaso de las políticas tiene obviamente muchas causas.El error en la decisión gubernamental es la causa más invocada.El precio que paga elliderazgo gubernamental por su sobreac-tuación· es el que se le constituya en el origen de los males. Elerror puede ser teórico o técnico, en el sentido de que laestra-tegia de acción diseñada no produce el efecto esperado y aspi-rado como fin. En los casos más impugnados se imputa el error a determinadas predisposiciones, proclividades, del gobierno por ciertas pautas de análisis de los problemas y de selección de al~ternativas, o bien, a las características rígidas del sistema políticoque obligan a considerar y desahogar los asuntos públicos dentrode un mismo arreglo de intereses ... En esta perspectiva "política"la cuestión básica es la equivocación de la decisión gubernamen-tal y, por tanto, se trata de prevenida o reparada. Es la cuestión
del diseño de la "buena" política. Si se puede proyectar un ob- jetivo con consenso y si se puede diseñar unobjetiv,o factible,todo está resuelto enteramente para presidentes, asesores, legis-ladores y clientela. Pero, más frecuentemente, se han imputadolos defectos y fracasos a la ejecución de las decisiones. En esta
perspectiva "administrativa" o "burocrática" los determinantesson la desorganización de las agencias, la impropiedad y rutinade los procedimientos, la incompetencia técnica o la apatía delos agentes, los vicios ¡norales que rodean el desempeño ... Lacuestión básica es entonces la dirección y el control para lograr
una ejecución disciplinada y productiva (intercomunicación, in-centivos, supervisiones ...).
Ambas perspectivas, la del diseño y la de la ejecución, heredanla tradicional separación entre la política y la administración, entrelos decisoresy los operadores (simples ejecutores). No hay e:pton-ces un objeto de conocimiento independiente denominable "im-
plementación". Antes hay una decisión política, después sólo
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 11/117
simple ad~inistración. A la ciencia política interesa sólo el·mo-mento de la decisión pública, el estudio del proceso conflictivoy/o concertado de las opciones políticas y el de la elección vincu-lante. Lo que sucede después de ella no es materia de politologíasino asunto de las "ciencias administrativas", de técnicas geren-
ciales y desarrollos organizacionales. Sin embargo, no es así. "En principio algunos actos administrativos simplemente ejecutan unadecisión política previa. Si es así, nos podemos olvidar de ellos
por cuanto no forman parte del policymaking. Sin embargo, la ma-yor parte de los actos administrativos o quizá todos ellos hacen política y cambian la política al intentar inipTemeiifarlaEii estecaso debemos analizar la implementación como parte del policy-
making" (Lindblom, 1980:64).La tendencia a reducir el estudio de la política al gran mo-
mento decisorio de gobierno, al diseño y selección de la mejor
opción de conducta respecto de los fines, llegó a su apogeo en.1965 con laÍnstauración del "presupuesto por programas", en elgobierno federal norteamericano. Economistas, investigadoresde operaciones, analistas políticos, administradores científicos,
procedieron a desagregar los grandes fines de la legislación· yadministración federal en objetivos precisos (con resultadosmensurables para fines de comprobadón y evaluación) y a dibu-
jar cursos de acción eficientes y controlables (recursos, técnicas,agentes, situaciones, tiempos y movimientos ...) para realizar losobjetivos. PPBS hizo que la atención de decisores y analistas po-líticos se concentrara en la ponderación y elección entre variasopciones competitivas de realización eficiente de objetivos. Unclima de normatividad y prescripción era respirable, con exigen-cias tanto más amplias cuanto más se consideraba que eran po-líticas de interés nacional general.'Más aún, este enfoque no sólo privi,legió el momento del diseño de las políticas. También pri-vilegió el nivel supremo de la decisión de las políticas, el de la presidencia federal. Presuponía entonces que la decisión "racio-
nal", una vez·tomada, se desarrollaría al pie de la letra del pro-grama y que las decisiones de la Casa Blanca descenderían'inal'-teradas dentro del cauce y en el tiempo estimado por los diversosescalones de las direcciones federales, de los gobiernos estatalesy locales, de las agencias operadoras de los servicios, hasta los
street-level bureaucrats. Esta suerte de jacobinismo tecnocrático,tan intelectual' como veleitario, fue el derrotado en los años se-senta. La literatura de laimplementación, pese asu crítica y de-cepción .gubernamental, reivindicó la naturaleza política de las
.políticas.Más allá del diseño está la implementaciónde la decisión. Y
más allá del presidente y de la legislatura está la compleja redde organizaciones públicas, con sus intereses y sus hábitos, quese encargan de transformar las decisiones en hechos efectivos.Estos dos recordatorios son pertinentes y decisivos para el des-
tino de las políticas públicas si han de llegar a ser efectivamente políticas, componentes de la historia social real, y no simplemen-te discursos de gobierno y escritos deleyes, una simple "colec-ción de palabras", para usar la expresión de Bardach. Los
primeros estudios pudieron haber exagerado sus pretensionesteóricas y sus pronósticos. No deja de sorprender su juicio tandrástico comOinfundado que toda política, por el hecho de tener que ser implementada, está condenada al fracaso, al incumpli-miento. Pudieron también haber dado inicio a una moda inte-lectual que usó el término implementacióncomo una nuevamanera de decir las mismas cosas que desde siempre los estudiostradicionales deadministfación y organización pública habían di-cho con diverso lenguaje. Ambas cosas de hecho sucedieron. Sinembargo, ello no menoscaba su mérito de haber llamado la aten-ción sobre el problema de la implementación de políticas, haber reivindicado su especificidad cognoscitiva, haber generado nue~vos conceptos y explicaciones de un fenómeno restringidamenteentendido y , en particular, haber enriquecido el policy analysis
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 12/117
sacándolo de su confinamiento en el análisis de costo-beneficio yen su pretensión de identificar indifer~nciadamente racionalidadeconómica y racionalidad política.
Umplementation analysis es un vino nuevo o sólo un vino viejo
en botellas nuevas? ¿Es sólo una nueva etiqueta? En realidades un poco ambas cosas cuando se revisa el campo de estudio.En su forma más superficial es sólo una nueva etiqueta parala vieja observación de que los mejores planes de los ratonesy los hombres se frustran. Después del desastre de Vietnam ylas decepciones de Great ~ocietyno sorprende que haya tenidogran aceptación el estribillo que adetezala sabiduría prácticacon términos racionalistas y que sirve de descripción, explica-ción, racionalización y excusa de los frq,casosdel diseño de las
políticas ... En su forma cabal, el análisis de la implementación puede ser una botella nueva para un vino viejo. Y sería grave
error pasar por alto el valor de la nueva botella. Al insistir enque, para cumplir con las responsabilidades del diseñador de
políticas, se requiere contar con juicios acerca de 10 que real-mente pueda acontecer si se elige una opción política en lugar de otra, los analistas de la implementación obligan a los eco-nomistas a ir más allá de sus supuestos complacientes y sirn-
plificadores acerca de cómo el gobierno puede actuar si seadopta una determinada política. Del mismo modo obligan alos especialistas en organizaciones y a íos politóíogos a ir .másallá de su manida advertencia: "el asunto' es mucho más com-
plicado" ... Ir más allá del trabajo ordinario de la ciencia polí-tica, de la teoría de la organización, de la economía, con el.finde llegar a inferencias útiles para el diseño de las políticas noes un logro insignificante ... (Esto) sugiere que hay fermentosen el implementation analysis que pueden eventualmente pro-ducir un vino nuevo (Moore y Allison, 1978: 154-155).
n. t Los defectos y excesos de
las políticas federales: M Derthick
Uno de los trabajos más citados en l6s años setenta, además' deser cronológicamente uno de los primeros, es el de Martha Dert..,
hick (1972),
New Towns In~Town. Su mérito eS'haber lanzado por primera vez la pregunta teórica Why a federal program failed?, por qué fallan los programas federales, y haber inauguradouI1 nuevointerés de conocimiento y una nueva dirección de respuesta. Su planteamiento lleva al concepto un estado de conciencia genera-cional y abre una línea de estudio dentro de la ciencia políticanorteamericana. Su investigación puso de relieve "los lÍJ;nitesdela centralización", cuestionando el supuesto de la fácil y subordi-nada articulación de los gobiernos est<\talesy locales al gobiernofederal. En consecuencia, criticó que los planificadores y analistasfederales hayan dejado fuera de toda consideración en el diseño
de la política comunitaria-habitacionallas resistencias e indiferen-cias de autoridades y grupos de nivel local, que el programa en-frentaría en el momento de ser puesto en operación. La tesisespecífica es que: "el fracaso se debió principalmente ala limitadacapacidad del gobierno federal para influir en las acciones de losgobiernos locales y a su tendencia aproyectar metas ideales. Estasdos incapacidades son inherentes a la posición que el gobiernocentral ocupa en el sistema federal americano" (1972 :83).
Para realizar sus políticas nacionales la presidencia no puedemás que pasar a través. de la red de los gobiernos subnacionales
y, por ende, necesita actuar exitosamente en el nivel de la políticalocal. En un sistema federal esto significa frecuentemente ofrecer incentivos en forma de subsidios y determinar las condiciones desu entrega. Todo ello· implíca: "tener un conocimiento suficientede la política local con el fin de determinar cuáles pueden ser losincentivos idóneos y necesarios, poseer los incentivos en cantidadsuficiente y canalizarlos oportunamente hacia los centros del po-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 13/117
dá local cuyo apoyo se necesita para poder alcanzar el propósito
federal" (1972: 84); Estas tres condiciones no fueron cumplidas
en el programa federal conocido como N e w T O W 1 1 SI n - T o w n . Hubo
"conocimiento limitado" del sistema político local (las autoridades
locales no estaban interesadas en desarrollar el programa, ni dis-'
puestas a provocar o enfrentar una previsible oposición local queacarrearía mayores daños que los beneficios del programa ...). Hu-
bo también "limitada provisión de ayuda", en el sentido de que
el incentivo de la compra de tierras federales a bajo precio pero
a cambio de acept ar desarrollos habitacionales para los pobres y
las minorías fue considerada una transacción político-económica
desventajosa o muy poco atractiva. Por ende, hubo también "limi-
tado uso de la ayuda", la cual no pudo despertar grupos de apoyo
ni disuadir alas movimientos de oposición local. Si a estas con-
diciones incumplidas se suma "la inflación de los objetivos" se
tiene el cuadro completo de porqué tal política estaba condenadaal fracaso.
Objetivos inflados, desmesurados, parecen ser una inclinación
del gobierno federal en la ideaciónde sus políticas. No se contenta
con alcanzar determinadas metas concretas, sino que aspira a que
sus logros sean innovadores, ejemplares y edificantes, portadores
de un poderoso "valor simbólico para toda la sociedad". Idealismo
y federalismo parecen ir de la mano. Esto quedó de manifiesto en
el programa habitacional de la presidencia de Johnson. No se tra-
taba sólo de construir casas.para los pobres de las ciudades prin-
cipales de los Estados Unidos, sino de "crear una comunidad modelo para la sociedad urbana de la segunda mitad del siglo xx".
Ahora bien, el objetivo de una zona habitacional con integración
social y racial, con nuevos estilos de vida yde interacción, con
participación comunitaria en su gestión, con instalaciones de de-
sarrollo educativo y expresión artística... forzó a .un plan de tal
complejidad económica, política, cultural y técnica quenecesa-
riamente tenía. que sobrepasar la capacidad gubernamental de
su.realización. La dificultad de llevar a cabo muchos planes fede-
rales reside precisamente en que sus objetivos tienden a ser gran-
diosos, .excesivos, por· la magnitud de su cobertura y de su
idealidad (de su "efecto demostración"). Esta propensión se debe
a la "posición central" que el gobierno federal ocupa en el sistema
político. "Su escala de jurisdicción y su lejanía de la ejecuciónmaterial de los programas nacionales" lo lleva a proyectar objeti-
vos que trascienden los asuntos singulares de las localidades (los
cuales además desconoce), y objetivos supuestamente capaces de
sacudir la rigidez y hasta mezquindad del arreglo de los intereses,
usos y poderes locales. La idea cultural del "gobierno central como
activista.social" es paradójicamente una de las fuentes de su ine-
ficiencia.
El programa de venta de los terrenos federales no es más que
un ejemplo de un fenómeno general que requiere explicación:
la tendencia del gobierno federal a ser el innovador de las
políticas públicas y la fuente de las definiciones ideales del
bien público. La división de autoridad en el s istema federal ha
tendido a asignar al gobi¿rno central el papel del reformador
de los asuntos locales... Su separación de ·la política y de la
administración locales ha permitido que los políticos federales
tiendan a formular objetivos ideales e iImovadores... Ellos son
libres, mucho más libres que las autoridades locales para po-
nerse públicamente delládo del progreso yde los grandes prin-
cipios. No teniendo que decidir ordinariamente sobre casos
concretos, no tienen tampoco por qué hacer los compromisosque los casos singulares implican. Más lejos están de la casuís-
tica, más capaces son de principios (1972: 94).
Su análisis arroja algunas observaciones tendientes a evitar que
las políticas nacionales fracasen. Se· exige "una buena repre-
sentación de los intéreses locales"""generar un apoyo local crean-
do organizaciones aliadas", "promover ajustes entre el programa
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 14/117
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 15/117
y explicaciones y cuyos teoremas son hasta la fecha un punto de
referencia, es el de Jeffrey L Pressmany Aaron Wildavsky (1973)
Implementation.(Su largo subtítulo irónico lo dice todo: "Cómo
las grandes expectativas de Washington se malograron en. Oak-
land, o por qué.,resulta asombroso que los programas federales
funcionen. Saga de ,la oficina de Administración del DesarrolloEconómico, narrada por dos.observadores compasivos que desean
reconstruir.la moral sobre la base de esperanzas frustradas"). Su
novedad y mérito consiste en su aporte teórico al entendimiento
y a la explicación del problema-proceso de la implementación
pues introduce distinciones conceptuales fundamentales, acota
con precisión su objeto de estudio y construye las primeras cate-
gorías e hipótesis de su desarrollo. Se trata de un libro concep-
tualmente frío en la superficie; pero agitado su fondo par la
frustración, por la sensación de que los fracasos gubernamentales
no han enseñado nada a nadie:
Tocamos un nervio muy sensible. Nuestra preocupación por
los obstáculos con que toparon .los numerosos programas de
gobierno, intentados recientemente paraaliger,ar la pobreza,
no se debió sólo ál hecho de que habían sido un fracaso. En
efecto, de entrada era esperable una cierta decepción. El ma-
lestar público procede más bien de la percepción que, en tér-
minos generales, no hemos aprendido nada del fracaso y, en
consecuencia, que estamos hoy tan necesitados y confundidos
como lo estábamos antes (1973: 127-128).
El fracaso de las políticas federales es el horizonte del ensayo.
Pero no el fracaso que es imputable a la oposición o a la ausencia
de apoyo a una determinada política. Tampoco el que sucede de-
bido a criterios legislativos contradictorios o ambiguos o a falta
de financiamiento adecuado en calidad, monto y oportunidad. Es-
tas fuentes de fracaso de una política, aunque realesyfrecuentes
(el trabajo de Derthick lo había mostrado recientemente), nada
tienen que ver propiamente con la implementación. Son fracasos
por aborto, dado que las políticas nunca se iniciaron de verdad
o no tuvieron la oportunidad de desplegarse. Tampoco es sor-
prendente su fracaso pues su explicación es obvia. En cambio,
hay sorpresa y, por tanto, impulso a la búsqueda de explicación,cuando se malogra una política que desde su comienzo gozó de
consenso serio, disponibilidad de recursos, criterios legislativos
precisos y compatibles, y la oposición fue inexistente ... (1973:
87-93). Cuando se cumplen estas condiciones y, pese a ello, so-
brevieneel fracaso, porque los resultados nunca llegaron o que-
daron muy lejos de los efectos esperados, se está entonces en
sentido propio y estricto en el campo del problema de la imple-
mentación. No todos los fracasos de las políticas son reconduci-
bles a -la implementación, pero ésta es una de sus fuentes más
graves y desconcertantes, por cuanto los factores que nos pare-cen· decisivos para el buen desarrollo y cumplimiento de la po-
lítica estuvieron presentes. Con este recorte conceptual, el
campo de estudio de la implementación queda mejor circunscri-
to y constituye unoqjeto de conocimiento original.
Dar su concepto a la implementación y a lo que debe ser con-
siderado problema de implementación es la primera tarea. El sig-
nificadoprimero del término "implementar" es derivado del
lenguaje ordinario (inglés): llevar a cabo, llevar a efecto, efectuar,
realizar, producir, cumplir, culminar, completar. ..El verbo denota
la acción que se ejerce sobre un objeto, considerado falto, defec~
tuoso, desde un cierto punto de vista, con el fin de dotarlo de
todos los elementos necesarios para que llegue a superfección o
acabamiento. En este contexto es obvio que lo que se implementa,
el objeto de la acción denotada por el verbo implementar, es la
política. Procede entonces, lógicamente, una clara distinción entre
la política y el acto de implementarla. Esta distinción no suele
hacerse con nitidez en las concepciones prevalecientes de políticos
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 16/117
yanalistassobre lo que hay que entender por política, con el re-
sultadode privar de consistencia teórica (e interés práctico) al
acto de implementación de la política, descalificándolo como un
objeto de estudio propio y distinto. Este defecto conceptual ha
tenido, a su vez consecuen<;iasprácticas nocivas en el diseño, de-
sarrollo y evaluación de las políticas, al ignorar el papel crucüil
que la implementación tiene para la efectividad de la política.
Por "política" se entiende frecuentemente "una declaración de
intenciones", "una declaración general de metas y objetivos". Es
el caso de la afirmación "nuestra política es generar empleo para
las minorías;', en el sentido de anunciar lo que se quiere hacer.
El discurso político está repleto de declaraciones de nobles pro-
pósitos públicos y buenas intenciones. Por otro lado, también se
entiende por "política" el "comportamiento actual", "la meta y su
actual cumplimiento". Es el caso de la afirmación "huestra política
es generar empleo para las ,minorías", y se relatan enseguida las
acciones de creación de puestos de trabajo, de contrataciones re-
alizadas, de población empleada. Entre el extremo de un concepto
de política como "declaración de intenciones" -anterior a toda
acción- y el extremo del otro concepto de política como "decla-
ración de resultados" ~posterior a toda acción- hay que reivindicar
y recuperar el espacio intermedio del actuar, el conjunto de ac-
ciones que transformó las intenciones en resultados obser- va-
bles. Este espacio intermedio del actuar es precisamente el acto de
implementación.
Pressman y' Wildavsky proponen una definición formalizada
de la política como teoría o hipótesis causal, como "una cadenacausal entre las condiciones iniciales y las futuras consecuencias:
si X, entonces Y" (1973 : XV). Para el caso específico de Oakland
la hipótesis es: "Si el gobierno federal... proporciona 23 millones
de dólares en préstamos y subsidios a ~mpresas y si éstas aceptan
contratar minorías después de emplear el dinero, entonces se
construirán instalaciones que crearán nuevos empleos destinados
a las minorías .(1973 : XIV). Según esta conceptualización, pers-
picaz· pero imprecisa y no. refinada en. el texto, la política es la
formulación de una hipótesis de relación causal entre acciones
humanas (no entre eventos naturales según una "regla de aconte-
cimiento" fija y univeral) y como tal formula una relación causal
todavía por efectuarse y ..todavía por comprobarse si es efectiva.o
simplemente inexistente.
La política comienza a abandonar el cielo de los proyectos y
deseos y a tocar el mundo real sólo cuando ocurren las "condicio-r
nesiniciales", y por consiguiente desatan el proceso de causación.
Las "'condiciones iniciales" parecen ser dos hechos: el consenso
en torno del objetivo de la política, por ende, en torno del acon-
tecimiento que se desea ocurra (en su estudio de caso, el empleo
de las minorías) y el conseI1soen torno de los recursos e instru-
mentos a utUizar para producir el aconteciriento preferido (en
su estudio, préstamos y subsidios públicos). En el fondo, son los
medios y los fines de un curso de acción o, dicho en lenguaje
causal, son los factores productivos y los efectos esperados de un
curso de acción. Obviamente, las condiciones iniciales, al deter-
minar la orientación y la capacidad productiva de la acción, res-
tringen las opciones de acción. Sólo la clase de acciones congruentes
con esa determinada orientación y compatible con el empleo de
esos recursos e instrumentos son las que se podrán poner en juego
para realizar el acontecimiento esperado y aspirado por la política.
La implementación será precisamente el conjunto de las acciones
a encontrar, diseñar, llevar acabo y concatenar que, siguiendo el
sentido y empleando la capacidad productiva de las condicionesiniciales, se considera tendrán como consecuencia o efecto el
acontecimiento terminal previsto y preferido.
El esquema conceptual, parece ser: condiciones iniciales -ac-
ción de implementación- efecto último esperado. "Laimplemen-
tación consiste en la capacidad de realizar las consecuencias
previstas después de que las condiciones iniciales han' sido cum-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 17/117
plidas ... No se puede terminar lo que ni siguiera ha comenzado.Defecto de implementaciónnosería la falla en la puesta en mar-chasino en la incapacidad de seguir adelante" (1973 : XIV). Este"seguir adelante" consiste en "la capacidad de forjar los eslabonessiguientes de la cadena causal, de modo que se consigan los re~
sultados deseados. Una vez que se depositaron los fondos y selograron los acuerdos locales, la tarea es construir instalaciones
para crear nuevos empleos y controlar a las minorías" (1973 : XV).Si en el mundo de la naturaleza se procede según regularidadesinmediatas y universales de conexión entre condiciones y conse-cuencias, en el mundo social de las políticas, la implementaciónes el proceso que intencionalmente establece y realiza la conexióncausal y que, s1 cae en defectos oen incumplimientos, rompe elnexo causal y lleva al fracaso la política. En este sentido, operacomo el proceso de falsación de esa hipótesis causal que es toda
política. "Llamaremos implementación al grado en que las conse-cuencias previstas (el momento del 'luego entonces') sucedan"(1973: XV).
En el caso de Oakland, según la conceptualización de Pres- .sman y Wildavsky, las condiciones iniciales de la política son elconsenso en torno. de la generación de empleo para las minoríasnegras y mexicoamericanas y los financiamientos federales dispo~nibles para empresas interesadas en la construcción de obras pú-
blicas de infraestructura o para empresas interesadas en laampliación de sus negocios. La implementaCión será entonces esa
_secuencia programada de acciones ("la cadena subsiguiente decausalidad") que conlleva muchos' actores y muchas operaciones,reiterativas y progresivas, individuales y colectivas, y que buscacon esos medios específicos (financiamientos y subsidios públicos)
producir el evento aspirado como fin (empleo de minorías). Amanera de ejemplo, la.implementación abarca estudios sobre de-sempleo y situación social de las minorías en Oakland, decisiónsobre la oficina federal que se encargará de desarrollar la política,
selecCión del personal y nombramiento de los directivos,.reumo-~es con las autoridades locales y grupos políticos de la ciudad parafmes de presentación de ideas y obtención de consenso, diseñodel programa y. calendario de la acción gubernamental, anunciosy convocatorias, determinación de requisitos que garanticen la ar-
ticulaCión del financiamientocon el empleo de las minorías (por tanto, fijac~ónde criterios para la elegibilidad de empresas, parala aprobaCIónde proyectos, para la continuación osuspensión defondos gubernamentales ...), revisión técnica de los proyectos deco.nstrucCiónde obras públicas, actividades de aprobación y segui-IDlento de los proyectos, actividades de información en casos demalos entendidos y de negociación en casos de conflictos, progra-mas de capacitación de mano de obra... Éstos y otros pasos más,
por los que una política atraviesa, son puntos de reunión de mu-chos actores con diversos intereses y puntos de vista sobre la po-
lítica en su conjunto o sobre las ventajas o costos que sedesprenden de cada uno de los pasos de su implementación. Esevidente que, en el proceso empírico de implementación de una
política, las fases que conceptualmente pueden ser tal vez distin-·guidas eonmtidez yprogresividad tienden a sobreponerse ya ser reversibles, formando un "tejido sin costuras".
Esta profundización y aclaración de las tesis de Pressman yWildavsky nos lleva a afirmar que lo que se implementa, en sen-tidoamplio, es la:hipótesis causal que constituye la política. Pero,en sentido circunscrito, es el objetivo, el evento aún irrealizado
pero esperado y calculado como efecto último de un proceso cau-sal,~uesto en marcha por determinadas condiciones iniciales ycontlhuado por la cadena de acciones de implementación. Hay asíun doble sentido de implementación: es el proceso de convertir u~ mero enunciado mental (legislación, plan o programa de go-
bIerno) en un curso de acción efectivo y es el proceso de convertir algo que es sólo un deseo, un efecto probable, en una realidadefectiva. Son dos así los significados del "llevar a cabo a efecto
,. ,
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 18/117
a culminación", del "implementar": el tránsito ,del éoncepto(lo
abstracto) a lo real (lo concreto) y el tránsito de lo probable (el '
objetivo, la expectativa) a lo efectuado. El lío del pasar de un
dicho a un hecho.
Con la finalidad de precisar con nitidez el problema de la im-
plementación, los autores supusieron en su análisis la ausencia de
todo un conjunto de factores que suelen incidir negativamente en
la realización de las políticas. Por un lado, se supuso que no existía
ni ambigüedad ni inconsistencia interna entre los objetivos de la
política ni tampoco oposición política a los mIsmos, que había
además consenso sobre el empleo de los medios básicos y que el
financiamiento era suficiente. Por otro lado, se supuso que las
organizaciones e individuos encargados de llevar a cabo la política
tenían la competencia técnica para desempeñar sus tareas y la in-
~egridad moral para cumplir con sus compromisos. Desde esta
perspectiva, no serían entonces problemas de implementación en
sentido propio los problemas que surgieran debido a que no secumplieron estas condiciones. Estos problemas deberían ser lla-
mados con su nombre propio: oposición política, financiamien~o
errado, incompetencia técnica, indolencia burocrática ... Sobre to-
do en el punto que concierne a las acciones que se desprenden
de las condiciones iniciales, éstas pueden ser mal cumplidas o nun-
ca efectuadas por causas de incompetencia, desorden, corrupción,
pereza ... de las burocracias públicas o de las organizaciones pri-
vadas que (por ejemplo, vía favoritismos dientelistas) recibieron
el encargo de llevar a la práctica las decisiones gubernamentales.
A estos incumplimientos, en cuanto afectan la puesta en prácticade las decisiones, se les puede llamar en sentido amplio defectos
o problemas de implementación. Pero, considerados en sentido
propio, son defectos o problemas de administración, organización,
aptitud y ética profesional... y.como tales deben ser nombrados,
conceptualizados y explicados. En sentido propio y estricto existe
un problema de implementación cuando, a pesar de ser indudable
la aptitud técnica y la responsabilidad de las organizaciones par-
ticipantes, a pesar de haber consenso en torno de los objetivos y
los medios (las "condiciones iniciales"), el desarrollo de la política
se desvía, atrasa, frena ... con el resultado final del incumplimiento
o fracaso de la política.
Ahora bien, si se presupone que se han salvado los escollos
más peligrosos y frecuentes para el éxito de una política, por qué
entonces aparece el "problema de implementación", en qué con-
siste éste, cuáles son los factores que transforman un proceso que
sup~estament~ debería ser fluido y simplemente operativo en un
curso de acción desviado, lento e inconc1uyente. El estudio del
caso Oak1and ofrece una serie de factores relevantes que van a
ser resumidos por la expresión the complexity of joint action La
complejidad dela co-operación es el determinante de queno su-
cedan o sucedan fuera de tiempo y sin impacto las acciones que
era previsible y esperable sucedieran, dado que eran congruentes
con las condiciones iniciales, por todos aceptadas sin reparo. El primero de estos factores es "la multiplicidad de participantes y
perspectivas": diferentes individuos y organizaciones, guberna-
mentales y civiles, intervienen por las más diversas razones e in-
tereses (a manera de ejemplo, porque poseen jurisdicción sobre
la materia de la política o de su implementación, perciben que sus
intereses pueden ser reforzados o debilitados en el proceso, tienen
una opinión sobre cómo hacer las cosas, se encargan técnicamente
de la puesta en práctica ...).E intervienen· con diversas actitudes y
grados de compromiso. Son variadísimos empíricamente los mo-
dos y resultados de estas intervenciones de muchos actores en mu-chos tramos del proceso. En líneas generales, el resultado de esta
plural participación es pormenorizar objetivos, recursos y proce-
dimientos, adaptados a circunstancias y operadores. Aunque sus
observaciones y propuestas no caigan fuera del marco global de
lá orientación y de la instrumentación de la política, sus especifi-
caciones (esta prioridad en este momento, esta urgencia aquí y
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 19/117
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 20/117
los puntos de decisión; d) identificar y sumar los "claros", las.apro-
baciones que es indispensable concedan los participantessingula-
res: Podríamos añadir e) la identificación de cuáles actores pueden
ser calificados de "independientes" en sentido estricto y cuáles
son dependientes (por razones económicas, políticas, ideológi-
cas...) de otrOs en el momento de las decisiones de cooperación.El estudio empírico del programa de empleo de Oakland arro-
jó 30 puntos de decisión que comportaban un total de 70 "claros".
Según un cálculo aritmético (presentado como ejercicio, más que
como procedimiento canónico), Pressman yWildavsky demues-
tran que, aun si se otorga una muy alta probabilidad al caso favo-
rable de que los diversos actores den sin reparos su aprobación
en cada punto de decisión, es debilísima la probabilidad final de
éxito de una política, cuya estimación resulta del producto de la
multiplicación de todas las probabilidades de aprobación de cada
participante. La probabilidad de éxito final después de 70 "claros",
suponiendo un 80% de consenso por parte de los participantes,
es de una en un millón y bastan sólo cuatro eventos necesitados
de aprobación para que la política esté ya por debajo de la mitad
de la probabilidad de ser completada con éxito. Es de seis en diez
mil y de cuatro en mil si la probabilidad de consenso asciende a
90 y 95% respectivamente, así como bastan 7 y 14 "claros" para
que el éxito de t'a política sea inferior al de su fracaso.
La multiplicidad de actores participantes, de puntos de deci-
sión, de aprobaciones requeridas en cada decisión, provocan dos
efectos negativos: "la pluralidad de objetivos y trayectorias de de-
cisión" y "la aparición de decisiones inesperadas". Frecuentemen-te las políticas contienen varios objetivos que en el.concepto fino
de sus diseñadores forman una unidad interdependiente, pero que
en la práctica prosaica. de su desarrollo comienzan primero a di-
ferenciarse, después a separarse y terminan enfrentándose como
opciones excluyente s con trayectorias propias de realización. (En
el estudio de Oakland, la construcción de obras públicas y la ge-
neración de empleos formaban una unidad, en el sentido de que
la realización de un objetivo conduciría al· otro; sin embargo, lo
que a la postre sucedió fue la concentración de la mayor parte de
los participantes en el programa de construcción de obras públicas
con independencia de la generación de empleo, obj~tivoprincipal
del gobierno federal y de algunos grupos políticos locales). Del
mismo modo, las acciones programadas conllevan puntos y mate-
rias de decisión imprevistos. Las diferentes perspectivas de los ac-
tores durante el proceso y particularmente sus diferentes "sentidos
de urgencia" dan origen a muchas solicitudes de información, es-
timaciones, consultas, negociaciones ... Esto lleva a que la agenda
gubernamental incluya la necesidad de nuevas rondas de conver-
sación y decisión, con todas las discusiones y vetos que acarrean
y con las urgencias o las rutinas establecidas de los diversos par-
ticipantes. El resultado final será, por lo menos, "el retraso en el
tiempo que puede ser equivalente a derrota en la sustancia" (1973:
113). La anatomía del retraso es entonces un estudio ineludible
de toda implementación de políticas que implique una pluralidad
de actores independientes. '
Si se parte del supuesto que la posición de los participantes
en un programa gubernamental está determinada por "la direc-
ción de su preferencia" (positiva o negativa; posición afavor o en
contra), por "la intensidad de su preferencia" (alta o baja: dedi-,
cación o indiferencia) y por "los recursos disponibles para afectar
los resultados" (fuertes o débiles), se puede afirmar que elTetraso
del programa es en función del número de puntos de decisión, del
número de participantes independientes en las decisiones, de ladirección e intensidad de sus preferencias, y de la magnitud de los
recursos que están dispuestos a invertir para influir en las deci-
siones. Habría entonces participantes que contribuirían al éxito
del programa por ser portadores del "mínimo retraso" (positivos,
altos y fuertes) junto a otros que contribuirían a su fracasopor
ser los causantes del "máximo retraso" (negativo, altos y fuertes).
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 21/117
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 22/117
un programa de acción no conducente al fin, el cual se caracterizóademás por una innecesaria secuencia de pasos que complicó yterminó por extraviada realización del fin. La agencia federal EDAafrontó el problema del desempleo de las minc;>ríasétnicas en unaciudad en transición de industria manufacturera a industria de ser-vicios, extrapolando el esquema teórico que tradicionalmente ha-
bía empleado para las "regiones deprimidas" rurales y queconsistía en crear las condiciones de un desarrollo regional auto-sostenido (creación de infraestructura, facilidades para la funda-ción de empresas ...), lo cual provocaría espontáneamente ladinámica de la economía y la generación de empleos. Pero el en-foque de "subsidio al capital" en una ciudad que se mueve dentrode un entorno económico en expansión no lleva necesariamenteal objetivo esperado y deseado. Porejemplo, esmás probable que
provoque la aparición de industrias intensivas. en capital y no enmano de obra, agravando el desempleo de las minorías carentes
de calificaCión productiva de punta. Lo que aquí hubiera proce-dido era "el subsidio al trabajo o premio al empleo que se pagasobre rendimientos cumplidos ... Un subsidio al trabajo, que sepa-ga contra rendimientos, tiene el atractivo adicional que el eventualfracaso del programa no cuesta excesivo dinero" (1973: 159).·Cuando menos, hubiera permitido un diseño simple y directo del
proceso de implementación, evitando toda esa secuencia de ac-ciones que se vuelve altamente contingente por la sobrecarga de
participantes y acciones. Aquí la teoría causal de. referencia eraimprocedente. Se esperó equivocadamente que a ciertas condicio-
nes seguirían ciertas consecuencias. Y estos defectos teóricos ori-ginaron problemas políticos y exacerbaron los problemas burocráticos.
Es muy frecuente descubrir que teorías económicas o socioló-gicas defectuosas o mal aplicadas a las circunstancias están en elorigen de programas de acción no implementables y, por ende,condenados al fracaso. Pero también se puede observar o suponer
que empresas de iinplementación exitosas, que se ciñerona laletra y al espíritu del programa, se tiraron ala basura, debido alos· errores de las teorías y las tecnologías que dieron su base yorientación a las políticas. La observación inicial de· Pressman yWildavsky acerca de la política como hipótesis o teoría causal aquíse consuma y prueba. Todas las políticas introducen procesos cau-
sales en la sociedad, que no siempre pueden. desarrollarse en ladirección y con la eficacia esperada, desatando en cambio otrosnexos de causa-efecto, que generan nuevos e inesperados proble-mas o agudizan los viejos. Sabemos que muchas políticas se deci-den para poner remedio a los· problemas ocasionados por decisiones políticas previas. Políticas que causan otras políticas.De todos modos, conviene recordar aquí la advertencia de Lind- blom sobre la imposibilidad práctica de contar con teorías proba-das para cada:decisión pública.
Si la implementación es "la capacidad de forjar los eslabones
subsiguientes dela cadena causal", entonces la lógica recomenda-ción general es la de contar con una teoría causal precisa, quelogre establecer una relación (la más) dÍl..ecta entre .causay efecto(medio-fin), sin la mediación de muchos eslabones causales. Si secree que hay muchos caminos para llegar a la realización del fin,habrá de escogerse el directo, sin rodeos, el sencillo, sin un labe-rinto de pasos. Más agentes y operaciones causales introducimosen la cadena causal, más aumentamos "la complejidad de la acciónconjunta" y más alto es el riesgo de que esos pasos operativos,atiborrados de agentes, retrasen el proceso o, peor aún, lo desvíen,
terminando por introducir acciones diferentes a las previstas y pro-vocandoefectos incalculados. La prescripción es entonces la invi-tación a minimizar los eslabones causales del nexo causal.
La experiencia de innumerables pasos en un programa de im- plementación sugiere que la sencillez en las políticas es la cua-lidad más deseada. Menos pasos comporta llevar a cabo el
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 23/117
programa, menores son las oportunidades de que sobrevenga
el desastre. Más directamente se dirigela política a su meta y
menor es el número de las decisiones que implica su realiza-
ción, mayor es entonces la probabilidad de que su objetivo sea
cumplido" (1973: 147).
Pero más allá de esta recomendación operativa, importante, la
central del libro, en oposición a la posición convencional de ana-
listas y políticos, es procurar la articulación !entre el diseño y la
implementación de las políticas públicas. A ello contribuyó la de-
finición de política como "hipótesis que contiene condiciones ini-
ciales y consecuencias previstas". En esta perspectiva, diseñar una
política significa prever e incluir esa secuencia de acciones que es
justamente el proceso de implementación y cuyo efecto último es
la producción del estado de cosas buscado como objetivo. Estric-
tamente no se puede hablar de diseño de la política si no es a lavez el diseño de su proceso de implementación. Para que la polí-
tica sea realidad concreta y no una inteligente idea, no basta la
definición más inteligente de las "condiciones iniciales" (la cone-
xión fines-medios), si no incluye el proceso de acción que les da
cuerpo, efectividad, continuidad y que remata en el efecto termi-
nal buscado. En un tiempo en que la clarificación de·los objetivos
y la determinación de los medios, bajo el principio de la elección
racional (economía), era casi la tarea única del policy analysis, el
ensayo de Pressmany Wildavsky fue un saludable cuestionamien-
to. Demostró que esa supuestamente fina y ejemplar elección ra-
cional no tenía productividad real y movimiento propio, como si
divinamente descendiera' a .la historia social e inconteniblemente
desplegara su verdad y eficacia. Se podrá decir que esto es algo
desentido común, a pesar de griegos, cristianos y Hegel,obsesio-
nadas por la irrealización de la idea. Pero, entonces, este sentido
común no parece ser la virtud de 1 príncipe y de su corte, imple-
mentación es también la reivindicación de lacotidümeidad social
("los males que afligieron al programa EDA en Oakland fueron
de carácter prosaico y cotidiano"). Y, más profundamente, la eter'"
na reivindicación de la historia social, plural y contingente, com-
pleja, ante la universalidad y pureza del concepto racional.
La implementación no debiera estar divorciada de la política. No tiene mucho sentido tener buenas ideas si no pueden ser
realizadas. Dichas en forma de homilía, todos están de acuer-
do. Pero en el programa Oakland ... la formulación de la polí-
tica estuvo divorciada de su intento de ejecutada. Desde el
comienzo se puso el énfasis en el diseño del programa, en la
obtención del consenso inicial a nivel local y en la asignación
de fondos... Los pasos posteriores de la implementación fueron
percibidos como 'cuestiones técnicas' que se resolverían por
sí mismas sise negociaban los acuerdos básicos y se llevaban
a cabo oportunamente las asignaciones financieras. Los añosmostraron que esas cuestiones aparentemente de rutina fueron
los escollos en el que naufragó el program a... Las dificultades
de la implementación deben formar parte de la formulación
inicial de la política. La implementación no debe ser concebida
como un proceso que sucede después independientemente del
diseño (1973: 143).
Por un lado, la interdependencia entre el diseño y la imple-
mentación de la política y, por el otro, la búsqueda de simplicidad
en el diseño, son las dos recomendaciones fundamentales. Sin du-
da contribuirán a disminuir la magnitud de los fracasos que, em-
pero, son inevitables. No hay implementación perfecta y, por ende,
tampoco política perfecta. Este destino no celestial de las políticas,
este escepticismo, descansa "en características inherentes de la
vida política que no pueden ser enteramente abolidas". La com-
plejidad, el desencuentro, el conflicto, la imprevisibilidad, el
error... son características de la política y, mejor dicho,caracterís-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 24/117
ticas de la vida social misma. Más específica y programáticamente,
el régimenfederal, si vital y genuino, provocará los incumplimien-
tos de las políticas federales. Con ello, quedan sugeridas dos pro-
posiciones que rescatan el carácter político de la implementación.
La primera es que no hay ciencia, modelo, teorema que llegue al
punto último de conectar verdad, bien y felicidad, situación que
suele esperarse de la política en las sociedades tradicionales. Tie-
ne límites la acción gubernamental, no puede ser utópicamente
transformada en un punto de resolución final de los problemas de
la sociedad. Este sueño eterno de. la perfecta racionalización de
la política, que reaparece bajo diversas formas, es excluido y sus-
tituido por la invocación y la invitación al "aprendizaje" (colecti'-
vo), un tema alRue no sólo Wildavsky dedicará posteriormente
mucha atención. La segunda es que la centralización del poder,
argumentada frecuentemente como una estrategia necesaria para
corregir la fragmentación y la debilidad de los poderes de un sis-
tema federal, no sólo es más improductiva sino que también es
incapaz de resolver los problemas más numerosos y agudos que
un federalismo inhibido o menoscabado termina, en revancha, por
provocar y dejar crecer. Los defectos de la implementación ates-
. tiguan, por último, la vitalidad de los valores de la democracia
pluralista. Una "implementación perfecta", por lo contrario, exi-
giría controles pormenorizados tan autoritarios que el sentido li-
beral-democrático del gobierno federal quedaría aniquilado.
Ninguno cree que el sistema federal esté por desaparecer. Si
el principio federal mantiene su vitalidad, ello significa preci-samente que las organizaciones estatales y locales deben ser
capaces de rechazar, enfrentar y retardar las iniciativas fede-
rales. Si ya no serán capaces de emprender este tipo de accio-
nes, entonces no habrá ya independencia estatal o local y, en
consecuencia, tampoco federalism¡o operativo. Su forma podría
seguir siendo visible pero su sustancia habría desaparecido ...
No importa cómo se organice y reorganice el gobierno federal,
todos los programas sociales tendrán virtualmente que atrave-
sar lasjurisdicci0nes de las diferentes oficinas, departamentos
e instancias supervisoras. Aunque se pueda abatir el número
de ~claros'... no hay empero ningún ordenamiento en el pasado
y en el futuro que pueda reducir al mínimo los claros en los
programas. (1973: 162).
Aunque cronológicamente posterior a otros ensayos relevantes
(Hargrove, 1975; Van Meter y Van Horn, 1975; Williams y Elmo-
re, 1976), el ensayo de Eugene Bardach, 1he Implementation Ga-
me (1977), al día de hoy con seis ediciones, es un buen ejemplo
del clima de frustración, a comienzo de los setenta, pero también
el primer intento de traducir los resultados de las investigaciones
primeras en un marco conceptual (tipologías y explicaciones) de
validez más general que la de los estudios de caso. La estructura
del ensayo de Bardach es clara: "llegar a una concepción precisa
del proceso de implementación, antes de intentar especificar sus
problemas y especular sobre lo que se debe hacer para enfrentar-
los" (1977: 37). Se establece entonces una clara distinción entre
el "problema de la implementación", definido como un "problema
de control y dirección de una multitud de actividades", y el "pro-
ceso de implemeritación". La perspectiva del libro es "la plurali-
dad de intereses", perspectiva incómoda para el que busca ser
fielmente obediente á los objetivos ordenados por la ley o el di-seño original. En contraste, el proceso de implementación es "algo
terriblemente frustrante, tedioso, que además regala un buen nú-
mero de enemigos políticos a los que quieren dirigir con energía
su rumbo y desenvolvimiento" (1977: 9).
El primer acercamiento al concepto del proceso de implemen-
tación es dado por la metáfora del "proceso de ensamblaje" de
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 25/117
una "máquina" (la política o el programa), cuyas "partes" o com- ponentes· son, entre otros, los recursos· financieros y los procesosadministrativos, las fuentes de los fondos, las dependencias públi-cas, las empresas privadas proveedoras de bienes ) sérvicios, ·losgrupos de apoyo, las regulaciones de autoridades gubernamenta-
les, la actitud de los beneficiarios o clientelas... La implementaciónes entonces "el proceso de ensamblar numerosos y diversos ele-mentosdel programa ... que se encuentran en manos de diferentes partes que ... son independientes entre sí, razón por la cual la per-suasión y la negociación son el único modo de lograr que cada
.parte coopere proporcionando los elementos del programa queestán bajo su control" (1977: 37). Visto así, el proceso es intrín-secamente politizado, pero pertenece a una "determinada especiede política", ya que "la existencia de un mandato político biendefinido, que ha sido autorizado legalmente en una etapa previadel proceso político, condiciona la estrategia y la táctica de la lu-cha. Su efecto más relevante es hacer que la política del procesode implementación sea altamente defensiva. Una gran cantidadde energía se va en. maniobras para evitar la responsabilidad, lasupervisión, la acusación".(1977: 37). "Ensamblaje" y "política"son las dos características fundamentales del proceso, a las quehay que sumar. una tercera y decisiva, la de ser "un sistema de
juegos que se relacionan entre sí de manera laxa" (1977: 38).Con la "metáfora maestra" de "juegos" no se entiende el con-
cepto de la "teoría matemática de juegos", hoy tan productiva-mente empleada en las ciencias sociales. Es en cambio una
representación conceptual descriptiva, que procura enumerar y or-denar las características de los jugadores, lo que está en juego, lasapuestas, las estrategias y tácticas, los recursos necesarios para po-der entrar al juego, las reglas de juego y las de juego limpio, lanaturaleza de las comunicaciones permitidas entre los jugadores,el grado de incertidumbre respecto del resultado del juego, tam-
bién los que no tienen interés de participar en el juego, los espec-
tadores o lo que exigen cambios en los parámetros del juego ~omocondición para entrar a jugar... Por juego(s), entonces, hay queentender aquí "las estrategias y técnicas" de interacción-la inte-racción estratégica~ por medio de las cuales entran en relaciónrecíproca actores independientes, poseedores de diversos recursos
que el programa o la política contempla como componentes ne-cesarios para la producción del evento deseado. Mediante· estasinteracciones estratégicas se determinan "los términos particula-res bajo los que se entregarán o se retirarán los elementos queintegran el proceso de ensamblaje del programa" (1977: 58). Setrata, por consiguiente, delas relaciones que determinan de hechola orientación, la eficacia y el alcance de una política. Dicho deotra'manera, son las estrategias y tácticas que los actores, desdesus propios intereses y poderes (que pueden ser o no ser compa-tibles con los objetivos y medios de una política), emplean en susinteracciones con el fin de ganar control sobre los elementos quecomponen el programa de .implementación de una política y queestán bajo el control de otros actores independientes. "Juego" esun "refinamiento útil de la idea original de 'control' que ...es cen-tral en el problema de la implementación. El control, por tanto,se transforma en estrategia y táctica, de aquí lo apropiado del 'jue-go' como la caracterización de los aspectos de conttol del proceso"(1977: 56). En síntesis:
El proceso de impÍementación se caracteriza por el maniobrar de muchos actores semiautónomos, cada uno de los cuales in-
tenta tener acceso a los elementos del programa y tenerlos bajo su control, intentando al mismo tiempo extraer las mejo-res ventajas de otros actores que también buscan tener accesoa elementos que les den el control. (1977:51).
Según Bardach, la nocióp. de "juego" permite dar una "formaabstracta y sistemática" a los resultados de los estudios de caso
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 26/117
que ofrecen conceptos cargados indudablemente de rico conteni-do empírico, pero que suelen no captar lo fundamental y especí-ficodelprocesoy,por ende, no ofrecen definiciones, explicacionesy recomendaciones extrapolables a otras circunstancias. El defectológico de los conceptos y la estrechez del ámbito de las explica-ciones hace muy vulnerables las pretensiones teóricas y prácticas
de la primera literatura. Obviamente no se trata de producir "pro- posiciones legiformes", algo de suyo "inalcanzable y no realista","dada la naturaleza fragmentaria y disyuntiva del mundo real"(1977: 57), pero sí conceptos consistentes y heurísticamente fe-cundos. El concepto "juego" es, entonces, en su apreciación y encomparación con los demás conceptos producidos, un conceptológica y metodológicamente confiable.
Después de refutar las conceptualizaciones y explicacionesofrecidas por otros investigadores, pasa a identificar los "juegosde implementación" y los efectos negativos que generan en el de-
sarrollo de la política:,
Los efectos adversos son de cuatro tipos: 1) el desvío de re-cursos, especialmente del dinero, que deberían ser usados paraobtener o crear ciertos elementos del programa. 2) La distor-sión de los objetivos de la política, estipulados en el mandatooriginal. 3) La resistencia. a los esfuerzos que de manera ex-
plícita y hasta institucionalizada se llevan a cabo con el fin delograr un control administrativo de las conductas. 4) La disi-
pación de energías personales y políticas en jugar juegos que
hubiera sido mejor canalizar hacia acciones constructivas del programa (1977: 66).
Bardach procede a localizar, describir y nombrar estas diversasestrategias y técnicas de interacción, aunque no formula un esque-ma heurístico para su invención empírica y construcción concep-tual. Los juegos serán aquí expuestos a grandes trazos, sugiriendo
más que desarrollando su concepto. Losjuegos que producen el"desvío de fondos" son: Easy Money, Budget Game, EasyLife, Pork
Bar re! . Son juegos que nacen de las oportunidades económicasque las decisiones políticas generan y que conectan los negocios
privados con los asuntos públicos. Son juegos eternos yuniversa-les. La gran masa de dinero de la hacienda estatal es lo que está
en juego. Gastos multimillonarios están siempre listos para ser dirigidos hacia objetivos sociales cuya realización es siempre po-líticamente "insoslayable e inaplazable", suele decirse. Cómo ob-tener, aumentar, controlar, manejar el dinero público, desde laóptica de los intereses particulares, es la finalidad del juego. Esagran masa de dinero pronta a ser· gastada permite que diversos
proveedores privados hagan cálculos de ganancia fácil a cambiode proporcionar determinados bienes y servicios. Son innumera-
bles las formas en que los privados pueden aprovechar las opor-tunidade§ del gran dinyro público, negociando términos' de
intercambio que le son no sólo favorables sino, con frecuencia,desproporcionadamente favorables. Una de las consecuencias máscomunes de este juego es la escalada de costos sinrelación algunacon las prestaciones efectuadas. Este juego del "dinero fácil" seconecta y acumula con el "juego del presupuesto". Éste es el juegoque juegan las dependencias y los funcionarios· gubernamentalescon miras a definir la orientación, el monto y las condiciones deutilización del dinero público. Más que obedecer a criterios deoptimización -en el fondo, los dineros no son suyos y una rigurosae intachable gestión de los gastos poco o nada les significa ~n
términos de reconocimiento o ventaja personal-, siguen otros cii-terios, tales como el favor a c1ientelasfieles y generosas, el forta-lecimiento de sus grupos políticos, el quedar bien ante sussuperiores, alianzas con colaboradores del mismo o inferior nivel
jerárquico, la sobrevivencia en la red de las burocracias .., Si a .estose añaden las limitaciones de los cuadros superiores para vigilar la forma en la que los niveles inferiores y otros organismos extra-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 27/117
gubernamentales gastan el dinero público, se tiene una idea de
las altas probabilidades de inflación, derroche, bajos desempeños
y grandes retrasos ... Las mismas actitudes y razones llevan a que
los funcionarios gubernamentales determinen la cantidad y la ca-
lidad de sus prestaciones de acuerdo con sus rutinas establecidas
de operación y sean reacios a incrementar sus cargas de respon-
sabilidad a menos de recibir contraprestaciorres en ingresos y es-
tatus. Es el juego político de la "vida fácil", tan conocido como
padecido por derechohabientes y beneficiarios de los servicios pú-
blicos. "Barril sin fondo" es otro juego de desvío y dispers ión de
los recursos estatales. Tiene innumerables causas y manifesta-
ciones y es fundamentalmente el juego que gustan o al que están
obligados a jugar los líderes políticos, autoridades elegidas, sobre
todo, si son populistas. En razón de compromisos con sus elec-
toresy clientelas, gobernadores, diputados, líderes, presidentes,
tienden a recoger sus demandas y a reclamar su urgente trata-
miento. Todo problema particular que inquieta a su electorado,
independientemente de su origen y alcance, suele ser asumido y
traducido como problema político, público, y objeto de acción
gubernamental. La imaginación de un dinero público inagotable
y siempre disponible es la ocasión para despertar expectativas,
levantar demandas y presionar con amenazas disuasivas. Es así
tarea común de líderes y representantes exigir que los beneficios
de algunos sectores se extiendan a los demás y sean conservados
en el tiempo. La inagotabilidad de los recursos o la inconCiencia
d~ los costos de la decisión pública es la ilusión fiscal.
Pero hay otra familia de juegos que se urden en relación conlos fines de una política. Los objetivos dela política cambian a lo
largo del proceso de implementación, sobre todo si se trata de
objetivos genéricos, imprecisos, yno gozan de un consenso fuerte
y amplio. En efecto: "intereses opuestos a las finalidades del man-
dato original de una política pueden haber estado quietos .durante
la polémica de su adopción, precisamente porque calculaban que
tendrían oportunidades posteriores para alcanzar, durante la ba-
talla de la implementación, victorias más decisivas aunque menos
públicas ... La implementación es la continuación de la política por
otros medios. El juego político de la renegociación de los fines .
puede irse por muchas direcciones. Puede recortar o reajustar los
fines, distorsionarlos o inhibirlos, sobrecargarlos de tal modo quese vuelvan un peso político insoportable". (1977: 85).
Los juegos que producen el efecto de "desviación de los fines"
son: Piling On, Up for Grabs, Keeping the Peace. El primero, el del
"apilamiento", tan propio de los reformadores sociales, consiste
en ir sumando en torno de una política, nuevos objetivos y metas,
cada vez más ambiciosas y generales, que le dan a la política una
mayor integración conceptual y quizá un mayor consenso (movi-
lización), pero que justamente por esa sobrecarga la debilita y la
hace inalcanzable. Es "la inflación de objetivos", indicada por
Derthick. Por ejemplo, un programa de alfabetización de adultos
termina por englobar tareas de organización productiva y política,
de salud pública, de modernización de la vida...Aunque los nuevos
objetivos pueden complementar y completar el objetivo inicial
más limitado, provocan también tal dispersión y costo, por lo am-
bicioso del proyecto, que se vuelve imposible llevarlo a cabo. El
ejemplo de Bardach son las políticas demócratas reformistas de
los años sesenta norteamericanos. Objetivos socioeconómicos pre-
cisos se transformaron en fines tan grandiosos y complejos como
imposibles. El juego de "Al mejor postor" desea, por lo contrario,
que los objetivos de una política sean legal y programáticamente
genéricos y ambiguos, para sacar provecho de las omisiones, iIi-definiciones e incompatibilidades. En este caso, los pocos elemen-
tos claros y objetivos del programa (presupuestos, recursos, bienes
y servicios, plazas de trabajo ...) se vuelven una oportunidad para
que diversos actores (clientelas, gobernadores, líderes, grupos
opositores, advenedizos ...), desde la óptica de sus intereses exclu-
sivos, traten de allegárselos como recursos políticos o económicQs
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 28/117
significativos. La inyección de estas perspectivas e intereses par-
ticulares. en el cuerpo de una política imprecisa y laxa tiene el
efecto de distorsionarla y dispersarla, atraparla en pequeños y he-
terogéneos objetivos y metas, dejándola inconclusa. El fenómeno
más frecuente de este juego es la captura de las dependencias por
sus clientelas y los conocidos problemas del agente principal. No
habiendo nada preciso y perentorio en las órdenes, es fácil que
ocurran interjuegos tendientes a intervenir en los nombramientos
de los directivos, recibir un trato privilegiado (permisos, créditos
blandos, procedimientos excepcionales ...) por parte de la depen-
dencia gubernamental, reorientar su patrimonio y actividad hacia
otros objetivos... Lamentablemente, mucha legislación y muchos
programas de gobierno con el fin de prevenir oposiciones y apla-
zamientos en las cámaras y en la opinión pública, redactan docu-
~entos cuya letra y espíritu quedan suficientemente 'flojos y
plurívocos, sin ordenamiento de preferencias, para que los inte- .
resados puedan filtrar después todo tipo de iniciativas y encontrar todo tipo de oportunidades. Es frecuentemente en el terreno del
."hacer como si", el de las políticas retóricas y permisivas. Al con-
trario, cuando las políticas se dirigen a resolver los grandes males
sociales, tratando de innovar estructuras y comportamientos, el
efecto no previsto es la intervención de activistas, zelotas, idealis-
tas,y también fanáticos. Aquí el juego de "mantener la paz en
casa", que deberá jugar el gobierno, no obstante su resuelta vo-
luntad de cambio social, será cuestionado por los militantes que
calificaran.al gobierno de "contrarreformista". Los promotores de
los cambios, que vencieron en el momento parlamentario, querráncontrolar el proceso de implementación de las1eyes y chocarán
contra los que defienden el orden de cosas o contra los que con-
sideran que las reformas son lentas, tibias y menores. La polari-
zación política termina por atrapar toda ley y programa de
reforma. Para seguirade1ante, si se quiere evitar el enfrentamien-
to, se analizarán, recortarán o reajustarán los objetivos, con el
efecto probable de desfigurar h i política, atenu·ada, desvirtuada o
aplazarla indefinidamente.
Los juegos que provocan "dilemas de administración" son em-
píricamente multiformes y también inevitables, por cuanto el pro-
ceso de implementación ocurre normalmente bajo la dirección de
una oficina gubernamental que sólo muy limitadamente posee o
controla las piezas a ensamblar para que suceda el efecto buscado.
ITo ken ism , Ma ssiv e Res ista nce , Soc ial Ent rop y, Ma nag em ent Ga me .
Los tres primeros son juegos de cara a los administradores y con
frecuencia en su contra. El más común, tan utilizado por los polí-
ticos.experimentados· como rápidamente. aprendido por los recién
llegados, es la "simulación" de adhesión y contribución al progra-
ma a través de pomposas declaraciones y manifestaciones públi-
cas, aunque de hecho sólo hacen concesiones simbólicas, formales,
de poco valor y fuera de tiempo. Juego tremendamente destructor
si el aparente apoyador no entrega o retira "componentes clave"
del programa que, por alguna razón, monopoliza. Este obstruccio-nismo, combatible y reversible pero a caro precio, puede ser pro-
tagonizadopor grupos privados influyentes que controlan recursos
económicos y políticos pero también por familias políticas rivales
y otras instancias gubernamentales competidoras con jurisdicción
en el ámbito de una política dada. Otro juego de obstrucción, me-
diante retiro o no entrega de elementos clave del programa, es la
"resistencia masiva". Este juego consiste en evadir responsabili-
dades y reglamentaciones desfavorables y en derrotar la capacidad
de una dependencia para perseguidos incumplimientos e imponer
sanciones. Grandes movilizaciones y paros son los aspectos másespectaculares de esta resistencia, pero toma también formas más
silenciosas y cotidianas de boicot y resistencia dentro y fuera de
las oficinas gubernamentales, que hacen perder todo sentido y efi-
cacia a los eventuales actos de control y coacción. Estos dos juegos
son jugados por actores claramente identificables y con papeles
públicos, pero el tercero tiene detrás fuerzas impersonales, difusas
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 29/117
y capilares. La "entropíasocial" se manifiesta en la incompeten-
cia presente en todos los niveles de las organizaciones, en las
incontables dificultades de coordinación de actividades, organi-
zaciones, personalidades, en el alto grado de discrecionalidad de
los niveles operativos. Sus efectos son los excesos,defíciencias y
retrasos en las operaciones: una clara desproporción entre re-cursOs y resultados. El contrajuego, frecuentemente puesto en
prá~tica, es el de una "mejor gestión", que busca establecer im-
pecables sistemas de información y rígidos procedimientos de
auditorías y contralorías, detallados manuales de procedimien-
tos, instrucciones escritas precisas y públicas, reclutamientos ri-
gurosos ... Esta estrategia de centralización directiva, tarde o
temprano, por convicciones valorativas de los jefes o por evalua-
ciónde su inefectividad,da paso a iniciativas de descentraliza-
ción de instancias gubernamentales, a una mayor autonomía de
las autoridades locales y de los niveles operativos y a una mayor
confianza en la acción de los grupos privados, iniciándose así otro
círculo en la espiral de los juegos administrativos.
Hay también todo un conjunto de juegos extremadamente de-
fensivos en prevención o en ,contra de las movidas presuntas o
presentes de otros jugadores, con el fin de evitar desventajas y
daños a sus intereses ...Sus efectos más importantes son el retraso
y el bajo desempeño de una política. Son llamados por Bardach:
Tenacity, Territory, Not our Probleni, Odd man out, Reputation. La
"tosudez" es la interacciónque se caracteriza por la disponibilidad
y el deseo de cooperar pero con la condición de que los términos
de participación (ciertas prioridades, personas, estilos de gestión,facilidades financieras ...) sean previa y completamente satisfechos.
Aunque no siempre provoca la ruina del programa, sí le substrae
recursosy apoyos, provocando retrasos. El juego habitual del "te-
rritorio" es la defensa del propio ámbito dejurisdicción y compe-
tencia en la implementación de una política. Debido a la
competitividadque este tipo de interacción genera entre los di-
v~rsos organismos· gubernamental~s y entre los· diversos actores
de una política, puede provocar efectos positivos (mejores desem-
peños, calidad de los productos, ahorros, tiempos oportunos ...),
pero también puede- conducir a improductivas guerrillas intestinas
entre los diversos colaboradores. Otra cara del celo por el propio
dominio de influencia es la actitud del "no es nuestro problema".Dentro y fuera de las burocracias hay un cultivado esmero por no
meterse en tareas que impliquen sobrecarga de trabajo, contro-
versias, hostilidades o que pongan al descubierto las incompeten-
cias y debilidades mantenidas en secreto. Esta habilidad para
esquivar o resbalar responsabilidades afecta la prestación de ser-
vicios públicos y la reglamentación deconductas.que una política
intenta alcanzar. Este juego puede derivar en otro tan común co-
mo mezquino que consiste en imputar errores y defectos a los
comportamientos de los demás.
De todos modos, el nudo problemático de todas las interac-
ciones es la incertidumbre que captura a cada actor acerca de si
los demás harán sus contribuciones al programa de acción colec-
tiva mediante el cual seimplementa la política. En la medida en
que la incertidumbre disminuye tiende a aumentar entrega y vi-
ceversa. Buscarán entonces mantener su opción a retirarse del jue-
go, en caso de que los otros co-autores no den señales de sus
actitudes y se mantengan titubeantes. Este juego cerrado de la
incertidumbre, por el cual se decide no actuar hasta que los otros
actúen, así como no manifestar la propia disposición a meno¿ que
los otros enseñen sus intenciones y ,asuman compromisos, es la
invitación a la parálisis o a dejar que los eventos sobrevepgan.Jugado con toda intransigencia, el programa nunca arrancaría o
se frenaría a cada paso para averiguar, vez por vez, si existe la
voluntad de seguir adelante. Por ello "excluir al tipo raro" (el que
actúa "a la libre"), reticente, sin compromisos y acuerdos, que no
da señales de su comportamiento futuro ni está dispuesto a ex-
presar su actitud o a encontrar arreglos, es un juego de todas las
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 30/117
jugadas. Esos hombres individualistas, "sin equipo", que no des-
piertan confianza, provenientes frecuentemente de · las filas de
los intelectuales, más dispuestos a defender su teorerpa, su tec-
nología y su cálculo, por razones de "verdad" que a hacer trans-
acciones, son objeto y víctimas de este juego sin el cual la política
no se pone en movimiento. Por último, hay muchas interacciones
que nacen del impulso de rescatar, promover o fortalecerla ima-gen del funcionario o del político o de un determinado organis-
mo gubernamental. El juego de la "reputación" es un compañero
de viaje de toda política. Demasiados poderes, intereses, carreras
personales, imágenes públicas, están en juego, como para aceptar
pasivamente que otros aotores protagonicen.el proceso de im-
plementación de una ~eterminada política o que, contribuyen-
do igual o menos que otros participantes, obtengan el máximo
reconocimiento público y los mejores beneficios políticos y eco-
nómicos;
El análisis de Bardach se acompañó con algunas consideracio-nes sobre la forma de evitar algunos juegos de efectos dañinos.
"Se ofrecieron algunas sugerencias, aunque a desgano y de manera
más bien escéptica: seis recursos antimonopólicos, cuatro sistemas
para que los pocos pueden controlar a los muchos, tres métodos
para acelerar el proceso de ensamblaje del programa y dos técni-
cas para suavizar y agilizar los rituales de la negociación" (1977:
250). En efecto, para evitar obstrucciones por parte de actores
que detentan en monopolio determinados elementos clave del
programa, se propuso: a) prescindir de ellos, mediante un diseño
de programa que no incluya los elementos monopolizados por ac-tores adversos o apáticos; b) "crear un nuev~ monopolio" que sea
aliado o quede sujeto a control; c) "promover la competencia";
d) "soborno"; e) "cooptación"; f) "contrapeso" mediante la crea-
ción o la promoc{ón de organizaciones capaces de presionar o de
vigilar a los monopolizadores del mercado económico-político
(1977: 103-108).
Para evitar ·las obstrucciones procedentes de la "resistencia
masiva", pueden ser de alguna manera útiles: a) la "prescripción",
órdenes claras y notorias, cuyos efectos usualmente débiles pue-
den ser incrementados en la medida en que la autoridad goce de
apoyo, influencia, coactividad; b) la "habilitación", un instrumento
de control que consiste en ofrecer los recursos que desea pero de .
los que carece un actor importante para llevar a cabo sus aspira-ciones y, de esta manera, inducirlo a que entregue sus contribu-
ciones al programa colectivo de acción; su punto débil consiste en
que su empleo presupone compartir los objetivos de una política
en un ambiente de confianza; c) "incentivos"; d)"disuasión"
(1977: 109-124).Los tres métodos para acelerar el proceso de en-
samblaje, disminuyendo costos y retrasos, son: a) "la asignación
de prioridades", acto casi de sentido común pero que en el diseño
de proyectos y la puesta en práctica fácilmente olvidan; b) "inge-
niárselas", promover la capacidad, derivada del conocimiento y la
experiencia, para encontrar soluciones sobre la marcha de proble-mas y necesidades: una invitación a la discrecionalidad creativa;
c) intentarla técnica de la "gestión de proyectos" (1977: 187-195).
Por último, las dos técnicas recomendables para aligerar los ritua-
les barrocos de la negociación son: a) "usar intermediarios para
facilitar las negociaciones" y b) "cerrar el rango de las opciones
mediante maniobras" (1977: 240~244).Estas sugerencias, conoci-
das por teóricos y prácticos de las organizaciones, aplicadas por
maestros y aprendices de la política, se presentan más como in-
tentos de enfrentar problemas que como recetas de solución. En
el fondo, son también juegos para obtener el control de otrosjue- .gos. Su éxito, fracaso o empate dependerá de las situaciones en
que se juegan y de la bravura del jugador.
La invitación a "escribir un escenario" re capitula la recomen-
dación de que los juegos de la implementación sean previstos des-
de el momento mismo del diseño de la política. Si el "problema
de la implementación" es cómo lograr el control de las acciones
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 31/117
Este método implica una construcción imaginaria de las se-
cuencias futuras de acciones - condiciones consecuentes -
acciones ~ condiciones consecuentes ~. Se trata de inventar
una historia plausible acerca de "lo que sucederá si..." o, más
precisamente, de inventar muchas historias, El contar estas
historias a uno mismo o a los colegas ayuda a iluminaralgu-, .
nas .de las pistas de implementación que el diseñador no de-
sea trazar. Ello permite rediseñar algunas características del
sistema de los juegos de implementación que permitan contar historias con happy endings. Prueba y error, a través de rei-
teraciones, produce cada vez más mejores finales (1977: 254).
lias y de otros grupos y con los intercambios ventajosos de bienes
y trabajo que las unidades económicas tratan de alcanzar en el
mercado" (1977: 251). Lamagnitud del problema político exige
entonces teorías sociales probadas, aunque es evidente que tales
teorías nonos son todavía accesibles. La implementación más
bien, acrecenterá nuestros problemas teóricos. En conexió~ conla teoría causal se indica la conveniencia de disminuir la exten-
sión de la cadena causal mediante la eliminación de agentes in-
nece~arios. Se, exige "diseño simple, programas directos que
reqUIeren la menor gestión ...' pues si el 'juego de la gerencia' es
una propuesta perdedora, la mejor estrategia es evitar jugarlo"(1977: 253). .
El "escenario" se escribe con la finalidad práctica de localizar
"las tensiones y las restricciones que la política puede encontrar
durante el proceso de implementación" (1977: 262). Nos dice
qué "funciona bien", en el entendido que contribuye a identificar los problemas que la implementación no podrá esquivar durante
su recorrido. Pero de ninguna manera cae en la ingenuidad de
pensar que la escritura del escenario garantice una implementa-
ción correcta y fluida. La utilidad heurística del escenario no sólo
no es garantía de solución práctica sino que deja sin respuesta
muchos interrogantes cognoscitivos. En particular -y nada me-
nos- no puede cabalmente responder con certeza a las preguntas
fundamentales de "quiénes jugarán, cómo jugarán, por cuánto
tiempo jugarán y cuáles efectos desencadenarán sus juegos"
(1977: 273). Las preguntas más significativas tendrán sólo res-
puestas aproximativas y no perfectamente ciertas. Iluminarán, sin
duda, la adopción de una cierta política pero problemas por de-
fectos y errores saltarán inevitablemente en el trayecto. Habrá
entonces que introducir modificaciones oportunas en el progra-
ma para no liquidar su probabilidad de éxito. Ahora bien, "se
puede pensar en términos generales que estas modificaciones
podrían ser provocadas por las intervenciones en el juego de la
de muchos individuos y organizaciones, para configurar una acción,
colectiva, con el fin de alcanzar los objetivos de una política, no
disparar sus costos y reducir los retrasos, entonces el diseño de-
berá prever lo más exactamente posible cuáles son (deberían ser)
los probables jugadores, juegos y apuestas. Para ello invita a es-
cribir un "escenario".
Este Scenario- Writing, que tanto recuerda el método weberia-
no de "posibilidad objetiva" y "causación adecuada", requiere ob-
viamente información, imaginación, experiencia, oficio, pero
también por la inclusión de secuencias causales una "buena teo-
ría". Teorías económicas, politológicas y sociológicas son necesa-
rias. Tanto más necesarias cuanto más los problemas que tratan
de enfrentar las políticas gubernamentales no son de pequeña escalani de fácil solución. Muy acertadamente recuerda que la caracterís-
tica del "problema político" es su magnitud, su complejidad, su con-
flictualidad, su variabilidad, sobre todo su estar por encima de las
capacidades de individuos y grupos de la sociedad civil. "El gobier-
no intenta encontrar solución a las escorias de nuestros problemas
sociales. Los problemas fáciles son los que tienen que ver con los
intereses singulares de las personas, con los intereses de las fami-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 32/117
sorprende es que el esfuerzo teórico por llevar al concepto la im-
plementación remate en la postulación de una práctica (hiper)
politizada, que se deja sin conceptualizar, explicar y corregir. Re-
sulta ing~nuo pensar que estos empresarios políticos no tengan
intereses, sean todopoderosos y no queden capturados por las re-
des de interés. Suena a una suerte de deus ex machina para poner
orden y dar sentido a una historia sin respuesta. Si no se abdica
de la teoría, se la remueve en la práctica. En efecto, lo que se deja
entre líneas es la idea de que la:implementación exitosa depende
de un gran hombre político más que de un buen análisis y de un
servicio público responsable. Unos aplaudirán, otros se rasgarán
las vestiduras.
La conclusión del ensayo es doble. Por un lado, se pide un
sentido de mayor mesura respecto de lo que los gobiernos pueden
llevar a cabo, particularmente en lo que concierne a las reformas
sociales. Por el otro, pide la producción de teorías económicas y
~ociales. La primera conclusión forma parte del consenso poslibe-~al(demócrata) estadounidense reciente que argumenta con razón
la creciente y peligrosa desproporción entre las demandas sociales
y las ofertas gubernamentales, invocando un repliegue del Estado
yun retorno al.mercado. La segunda conclusión es la razón de ser
de los estudios politológicos en su afán de ilustrar la política.
implementación, de los jugadores identificados íntimamente con
las metas proyectadas por los patrocinadores 'idealistas' de la po-
lítica original" (1977: 273).
Los límites cognoscitivos del diseño del escenario invocan en-
tonces la práctica de la voluntad y la habilidad política para en-
contrar la salida: "fixing the game", en el sentido de "reparar","ajustar", "arreglar". Para llevar a puerto la implementación se
requiere reparar los desgastes, deficiencias, vacíos, daños, averías,
distorsiones, retrasos... que los juegos provocan. Ello significa
ajustar ciertos elementos del sistema de juegos (intereses, perso-
nalidades, poderes, contribuciones, tiempos ...). Se requiere, en-
tonces, un faer) un político de altura, comprometido enteramente
con el éxito de una determi~ada política, por convicción más que
por interés. El mediador-reparador-ajustador posee un gran capi-
tal de recursos políticos {información, autoridad formal y/o real,
influencia en el presupuesto y en los medios de comunicación,
relaciones y amistades en puestos políticos y burocráticos clave...)
y es capaz de convocar a las partes morosas o conflictivas, sentarlas
a negociar, disuadir a opositores, derrotar adversarios, sumar con-
sensos, atraer contribuciones, derribar obstáculos ... En cuanto for-
ma de "gobierno de hombres que no de leyes", esta personalidad
política, la estrella del juego y su árbitro, actuará según las nece-
sidades tanto en secreto comO en público, no se preoGUpará por " , ,
usar mano dura, legalmente apoyado, o por echar mano de otros
. medios impropios aunque no necesariamente ilegales; Puede ser
la tarea de una persona políticamente dotada o "tarea de una coa-
lición de socios políticos con recursos complementarios. No esdiversa de cualquier otro tarea política. Los juegos de la imple-
mentación son juegos políticos" (1977: 278). La invocación de la
voluntad y de la habilidad política de un líder reconocido o de
una coalición poderosa, para que una política pueda ser exitosa,'
no debe parecer algo asombroso e inusitado en la teoría política.
Es la condición primera, por todos sabida y hasta molesta. Lo que
El gobierno no debería hacer muchas de las cosas que le ha
pedido tradicionálmente la reforma. Aun si el gobiernoi en abs-
tracto, persigue fines apropiados, no está muy capacitado para
llevarlos a cabo. Los mercados y las costumbres son más firmesy sensibles. El gobierno es probablemente menos sensible y con-
fiable que lo que están dispuestos a aceptar los xeformadores
liberales. Sin embargo, los problemas más importantes que afec-
tan a las políticas.públicas no son empero los de la implemen-
tación, sino los de la carencia de teoría básica social, económica
y política. En el corto plazo es necesario invertir una gran can-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 33/117
tidad de energía en diseñar políticas y programas implemen-
tables. De todos modos, en el largo plazo es esencial que sea-
mos mucho más modestos en nuestras demandas y éxpectativas
respecto de las instituciones del gobierno representativo
(1977: 283).
n. 4. La implementación desde abajo:
la segunda generación de estudios
Al final de los años setenta un grupo de autores, que habían es-
tudiado específicamente las políticas sociales, llegó también a la
conclusión de que el proceso de implementación influía determi-
nantemente en los resultados de la política y comenzaron a cues-
tionar los supuestos en los que se habían basado los diseños de
las políticas y las evaluación de las políticas. Colegas de investi-
gación e institución, Williams y Elmore, Berman y McLaughlin,reelaborar'on y desarrollaron, en continuidad con los resultados
de sus investigaciones, las tesis de Lipsky (1971 1977, 1978) sobre
la importancia que la ácción de los street-Ievel bureaucrats tiene
en la efectuación de las políticas. Los conceptos resultantes de sus
observaciones y análisis dieron origen a un "enfoque conceptual
alternativo" que tuvo el mérito de renovar la producción teórica
y ofrecer un nuevo modo de ver el proceso de implementación,
sus problemas y rumbos de respuesta.
Estos autores coincidieron en afirmar que fuertes supuestos
jerárquicos habían influido en el diseño y la investigación de la
implementación. Políticos, altos funcionarios y asesores partían de
la premisa de que la fase realmente problemática de una política
era la toma de decisión. Por consiguiente, el curso de acción a
seguir por una política, para ser efectiva, es el que procede de
conformidad con la decisión ilustrada y panorámica de los gober-
nantes, ejecutando fielmente sus indicaciones técnicas, organiza-
tivas y operativas. El esquema conceptual jerárquico no cambia
porque algunos ingenuamente piensen que la decisión gubema-
~ental sea autosuficiente y baste hacerla pública para que recorra.
mal,~er~da.e inc~ntenible los e~calones de lá pirámide de "emplea-
dos publIcos, SImplemente eJecutores de órdenes, o bien por el
hecho de que se aprecie con irritación o resignación que la deci-
sión es obstaculizada y distorsionada por la resistencia, impericia? ap~tía de los funcionarios "menores" o de otras organizaciones
mfenores en autoridad. En este enfoque dominante llamado des-.,; .' ,.
pues top-down, se Imputan los problemas de la implementación o
la intervención de muchos poderes durante el proceso a la desor-
ganización de las organizaciones, al comportamiento 'irresponsa-
ble de los operadores, puesto de manifiesto en la evasión de
tareas, resistencia a reglamentaciones, bajo desempeño ... En con-
secuencia, la solución recomendable es fundamentalmente la
creación de un aparato (espectacular o sutil) de controles median-
te reglamentos, hombres de confianza, sanciones, incentivos ... es-
tableci?o y mane~ado por un cuerpo directivo enérgico y
supervISor, con el fm de garantizar la fidelidad y la conformidad
de los operadores en los términos de la decisión o del programade gobierno. .
El modelo jerárquico y sistémico concentra la atención de los
analistas en los puntos críticos del mando, el control y la coor-
dinación en los organismos gubernamentales. Las únicas luces
que este tipo de análisis arroja son propuestas de una mayor
racionalidad y simplicidad en el sistema político, así como los
esfuerzos por una mayor coordinación y responsabilidad en las
instancias públicas. Las recomendaciones basadas en este en-
foque difícilmente serán eficaces, por cuanto desconocen las
funciones políticas que cumplen el retraso, la pobre coordina-
ción, la incoherencia de los objetivos y su conflictualidad
(Lipsky, 1980: 396).
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 34/117
Pero no sólo esta matriz de pensamiento es propia de los pla-nificadores y analistas. Tambiénsubyace en las primeras inv~sti-gaciones de la implementación, que estudiaron el proceso baJo elsupuesto explícito o implícito de que la implementación e~ el trán-sito dejos programas Yobjetivos decididos en los altos lllveles degobierno a las operaciones de organizaciones e individu?s en un.alocalidad concreta. Por ello, se calificó como fracaso e mcumph-miento el hecho de que las acciónes efectivas y sus consecuenciasse distanciaran de los términos previstos por el programa o seretrasaran respecto del tiempo calculado. Se ubicó entonces el problema en la limitada capacidad de control del gobierno feder~sobre elementos y acciones fundamentales del proceso y, especl-ficamente, sobre las conductas de las burocracias, los ámbitos deautoridad de los gobiernos locales, los movimientos de oposición política. La "complejidad de la acción conjun~a", ~?s,:'ju~go~de laimplementación", los "límites de la centralIzaclOn ... mdlc~ban justamente fenómenos que escapaban al control de una autondadcentral superior. Éxito de la política y control de la imple~enta-ción fueron sinónimos. En consecuencia, para tomar las nendasdel control, se recomendaba minimizar el número de participantes(puntos de decisión, oportunidades de veto) o reforzar los contro-les. Sólo Derthick(1972) había puesto el énfasis en la "descen-tralización" yen la necesidad de "ajuste entre el programa federal
y los intereses locales". \
Poco se puede hacer si analistas y políticos persisten en ver la
implementación como un conjunto ordenado de relaciones, deautoridad. En efecto, en la medida en que el proceso de lm-
plementación esté dominado por la reglamentación, la estruc-tura organizativa formal y el control directivo, es de esperar que los ,problemas de la complejidad crezcan. Cuanto más rí-gida sea la estructura de las relaciones jerárquicas y mayor elnúmero de puntos de control y decisión para asegurar la con-
formipad, más oportunidades hay para la desviación y el retra-so, mayores la propensión de los subordinados a descansar ensus superiores y buscar de ellos la orientación, y menor la con-fianza en el criterio y la capacidad individual para resolver los problemas. Una de las mayores ironías del gran interés actual por la implementación es que cuanto más intentamos gober-
narla con Jos instrumentos convencionales del control jerár-quico, menos capaces somos de lograrlo (Elmore, 1979: 608).
Este grupo de investigadores deséubrió y formalizó otra ma-nera de estudiar el problema de la implementación y otra maneradeabordarlo en la práctica.Walter Williams (1975, 1976, 1980)acentuó la idea de que implementar una política social significabaa fin de cuentas poner en operación a través de mía organizaciónconcreta y de unos operadores concretos, en una localidad' deter-minada; un conjunto de acciones cuyas consecuencias previsibles,
benéficas para una población, eran consideradas la realización delos objetivos ordenados por la políticas. Su reivindicación de la
field implementation, del final point oi selVíce delivery, como ellu-gar en que toda política se consuma ose frustra, aun la perfecta-mente diseñada, significó rescatar y resaltar la importanciadeterminante de la organización local (la "agencia") y de los ac-to~es empíricos que prestan los servicios gubernamentales al pú-
blIco y que suelen ocupar los escalones ,más bajos de laadministración, los de piso, ventanilla y calle. Cuando se repasanlos objetivos y programas de las reformas sociales más ambiciosas
o de las medidas sociales compensatorias, uno encuentra siempreque su realización depende directa e inmediatamente de la accióndel personal de una agencia .local en interacción con un deman-dante, derechohabiente, beneficiario, con problemas, exigencias yexpectativas singulares. El reconocimiento de las circunstancias einiciativás locales es ya un notable desplazamiento en el abordajeteórico y práctico de la cuestión de la implementación y más par-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 35/117
¿Ha de esperarse que la actividad implementadora se asemeje
a los términos de la decisión? Cuando se trata de llevar a la
práctica en diferentes contextos locales paquetes complejos de
medidas, los decisores no esperan ni cosa más importante ni
desean una reproducción precisa de los. detalles. El objetivo
es el rendimiento no la conformidad. Para aumentar laprob-
abilidad de alcanzar los objetivos básicos de una política, la
implementación debería ser el desarrollo realista de la deci-
sión de acuerdo con las 'condiciones del contexto local. En la
situación ideal, los encargados de la implementación deberían
tomar la idea básica y modificada según las condiciones locales
específicas. El resultado debería tener una semejanza razona-
ble con la idea básica, estimada en los términos de los insumos
y productos esperados, y debería incorporar lo mejor de la de-
cisión y lo mejor de las ideas locales (Williams, 1. 1975: 843).
el proceso concreto de prestación de servicios, ordenado por una
política y que las organizaciones y agentes locales llevan a cabo
con sus patrones particulares de gestión y rendimiento para una
población determinada.' Berman insiste en la función decisiva de
la microimplementación, por cuanto el éxito global de una política
depende del desempeño y las consecuencias de la prestación local
de servicios, y lo conceptualiza como la "adaptación mutua" (Ber-
man y McLaughlin, 1974; McLaughlin, 1976; Berman, 1978, 1980)
que existe entre las condiciones de la agencia local y el programa
de acción diseñado en las alturas. La adaptación es entonces tanto
una prescripción normativa como una variable observable y deci-
siva en el desarrollo de una política.
ticularmente de la cuestión acerca de lo que se debe entender por
éxito o por fracaso de una política, En este nuevo enfoque se busca
peiformance not conformance, rendimientos no subordinación. A
la inversa, en la visión canónica de la administración pública, ins-
pirada por el supuesto de la jerarquía, se juzga como éxito el cum-
plimiento oportuno y cabal de los términos de ia legislación y del programa de gobierno.
El énfasis en el "contexto local" fue retraducido y refinado por
Paul Berman (1974, 1978, 1980) con el concepto del institutional
setting como el determinante del desarrollo y resultado de una
política. La estructura del contexto institucional es introducida en
dos niveles de análisis y explicación: macro y microimplementa-
ción. Por "macroimplementación" se entiende todo el proceso de
generación y cumplimiento de las condiciones necesarias para que
una política pueda ser puesta en práctica en el ámbito determi-
nado de una localidad. Por "microimplementación" se entiende
A la inversa de los supuestos que subyacen a muchas estrate-
gias y políticas federales de reforma, hemos descubierto que
la implementación no es simplemente la aplicación directa de
una tecnología o de un plan. La implementación es, más bien,
un proceso organizacional dinámico cuya configuración resulta
de las recurrentes interacciones entre las metas y los métodos
del proyecto y el contexto institucional. Como tal, la imple-
mentación no es un proceso · automático ni cierto ... En breve,
ahí donde la implementación fue exitosa y donde ocurrieron
cambios significativos en las aptitudes, actitudes y conducta de
los participantes, la implementación se caracterizó por un
proceso de adaptación mutua. Los objetivos y métodos del
proyecto se modificaron para ajustarse a las necesidades e
intereses de los directivos y operadores locales y éstos a su
vez cambiaron para poder ajustarse a los requerimientos del
proyecto (McLaughlin, 1976: 169).
Berman (1980) dio un paso más adelante y desplegó las po-
tencialidades teórico-prácticas de la "adaptación mutua" en el mo-
delo llamado adaptative implementation, que pretende ser
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 36/117
,
heurísticamente productivo para los estudios empíricos y las ac-
ciones prácticas. Contraria en sus características a la llamada pro-
grammed implementation, en la que el esquema del control
jerárquico vertical se expresa y ejecuta, la adaptativa funciona en
el caso de políticas ambiciosas de reforma social a realizarse en
contextos organizacionales conflictivos, diferenciados y entorno S
sociales inestables. .
.Richard Elmore (1978, 1979) también llamó la atención sobre
el hecho, de que las organizaciones encargadas de realizar las de-
cisiones políticas son determinantes en la suerte de éstas. Se vuel-
ve entonces imprescindible el estudio del funcionamiento de las
organizaciones públicas (y de su interacción con las organizaciones
privadas), así como la averiguación de los diversos modelos de
estructuración y funcionamiento que están en la base de las orga-
nizaciones. El enfoque de organizaciones que introduce Elmore
en el estudio de la implementación es otro camino para descubrir
los límites del modelo jerárquico, según el cual gobernantes y altosfuncionarios pueden desde las alturas determinar y controlar los
agentes que intervienen en el proceso y los diversos aspectos téc-
nicos, procedurales y políticos de sus iniciativas. Este tipo de or-
ganización y con autoridad y gerencial intenta dirigir el proceso
impulsando una estrategia de forward mapping, un programa pros-
pectivo y racionalista de acción que pretende calcular y prever de
antemano las diversas operaciones y resultados que una política
tiene que alcanzar para poder llegar a su realización cabal. La
frecUente debilidad teórica y práctica de este modelo vertical y
predeterminante debe ser la ocasión para introducir la estrategiaalternativa del backward mapping que parte, a la inversa, retros-
pectivamente, desde· el suelo, desde las interacciones específicas
que suceden entre sociedad y gobierno en los niveles operativos
directos ("inferiores") de una organización pública local. A partir
de esta base realísima, se diseñan los objetivos y operaciones de
la política, buscando introducir alas medidas de apoyo, califica-
La argumentación en favor del enfoque teórico-práctico co-=:, '
munmente llamado bottom-up, tiene su origen en los escritos de
Lipsky. A él se debe la reivindicación de la posición crucial que
los "burócratas al nivel de la calle" (expresión suya, 1976) ocupan
dóny corrección en las organizaciones locales. De nuevo aquí
cuenta "rendimiento no conformidad", el ajuste de los operadores
a las circunstancias concretas en las que la acción pública sucede
yllega efectivamente a la ciudadanía más que la conformidad a
los términos de un programa diseñado desde el escritorio y desde
u.na visió~ jerárquica o aristocrática de la organización pública,
SImple umverso de empleados neutros y subordinados a las deci-
siones de la cúspide.
Lo que los libros de texto no discuten son las debilidades del
diseño prospectivo lforward mapping) y sus severas limitacio-
nes como técnica de análisis. Su problema más serio se ubica
en la suposición implícita y acrítica de que los decisores de las
políticas controlan los procesos organizacionales, políticos y
tecnológicos que afectan la implementación. La noción que las
autoridades ejercen -o deberían ejercer- algún tipo de control
directo y decisivo sobre el proceso de implementación de la política es, sin más, la mentira piadosa de la administración
pública convencional y del análisis de políticas. Los adminis-
tradores justifican sus decisiones discrecionales diciendo que
su autoridad es delegada y que es controlada por autoridades
elegidas o legalmente designadas. Losanalistaspolíticosjus-'
tifican su existencia arguyendo que se requieren decisiones
racionales e informadas para guiar y controlar a los adminis-
tradores. En cualquier caso, administradores y analistas se
.sienten incómodos ante"la eventualidad de que las intencio-
nes y directrices de las autoridades no sean la clave de expli-cación del proceso de implementación(Elmore, 1979: 603).
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 37/117
en el proceso de implementación. Sutesis contradice una tradiciónintelectual predominante que estudia problemas y recomienda so-luciones desde la perspectiva de la "estructura jerárquica de lasorganizaciones". En esta concepción lo realmente determinantees ladecision política que se toma en los altos niveles del gobierno
y que desciende a los niveles inferiores para ser simplemente eje-cutada. Sin embargo, el análisis de diversos estudios de caso y susestudios propios sobre las políticas de educación especial para ni-ños con dificultades físicas, emocionales o mentales (Weatherleyy Lipsky, 1977) ofrecían evidencia contraria a la versión oficial delos líderes políticos yde los altos dirigentes administrativos, resal-tando el papel decisivo que en la puesta en práctica de las políticassociales jugaban las' evaluaciones de los casos (¿era este niño unsujeto de educación especial?) y 13.sdecisiones correspondientesque tenían quehacer maestros, médicos, trabajadores sociales, po-
licías y abogados ... para resolver las interrogantes que los muchoscasos singulares levantaban. "Éstos y otros empleados públicos,que comparten semejantes situaciones de trabajo, los hemos lla-mado 'burócratas al nivel de la calle'. En su trabajo interactúandirectamente con los ciudadanos y gozan básicamente de gran dis-crecionalidad en el desempeño de sus funciones ... Muy apropia-damente se puede decir quelos burócratas menores, de ventanilla,
piso, a nivel de calle, son en verdad los policymakers en sus res- pectivas áreas de trabajo" (1977: 172).
Son comunes las características de trabajo de este conjunto deempleados públicos en contacto directo con los ciudadanos (de-rechohabientes, beneficiarios, usuarios, clientes.,.). Las leyes ylos
programas gubernamentales les asignan continuamente nuevas ymayores tareas que los obligan a cambios constantes en sus con-diciones de trabajo y les exigen ajustes importantes en sus habili-dades y conductas tanto personales como de grupo. La demandade servicios tiende aser no sólo amplia, incesante y apremiante(sobrecarga de trabajo), sinó tambiéndiversificada casuísticamen-
te. Por otro lado, no reciben indicaciones precisas y operativassobre metas, prioridades y casos extraordinarios, tanto menos cri-terios o escalas de rendimiento. Suelen además no gozar de granreconocimiento en su organiz¡tción y en la sociedad, sus remune-raciones directas e indirectas no son comparativamente altas y susexpectativas de carrera no son rápidas. Por último, sus recursos~a~eriales, organizativos y personales son comparativamente muylUllitados respecto de la magnitud e intensidad de la tarea socialque se les asigna. La imprecisión de fines, la limitación de los
recursos disponibles ante la presión político-administrativa queencaran los empleados públicos, motiva que tengan que actuar con discrecionalidad en la prestación de los servicios y procedana inventar esquemas de conducta rutinaria para poder controlar el flujo de la demanda y manejar la presión de las demandas sobreel cumplimiento de su trabajo.
Para poder cumplir con los requerimientos de sus tareas, los burócratas de los niveles operativos deben encontrar sus mo-dos de acomodar las demandas con la realidad de recursoslimitados. Para ello rutinizan procedimientos, modifican obje-tivos, racionalizan servicios, determinan prioridades y limitano controlan clientelas. En otras palabras, procuran desarrollar
prácticas que les permitan de alguna manera procesar el tra- bajo que se les exige. Su trabajo es intrínsecamente discrecio-nal. Las medidas que podrían dar dirección a su conducta son
de muy poca eficacia. Por ejemplo, los objetivos que se marcana los empleados públicos suelen ser vagos y contradictorios.Es además difícil establecer o imponer medidas de producti-vidad en la prestación de servicios. Los consumidores de susservicios suelen ser relativamente irrelevantes como grupo or-ganizado. Los empleados de ventanilla son constreñidos másque ~iados en su trabajo. Los ajustes y mecanismos de regu-lación, que libremente desarrollan, originan patrones de con-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 38/117
dueta que para la percepción del público son sin más el pro-
gramarle gobierno (Lipsky, 1977: 172).
y apreciar las modificaciones importantes que en las condiciones
de vida de demandantes y usuarios introducían los servicios pú-
blicos de empleados anónimos. Si el modelo aspira a validez po-
sitiva, entonces las observaciones de los estudios de caso le son
abrumadoramente adyersas. Lo mismo pu«de decirse del otro su-
puesto, el de la complementariedad e interdependencia de las or-
ganizaciones, que concibe la implementación como "sistema" de
acción. Saltan en seguida a la vista la divergencia y el conflicto de
intereses, las negociaciones nunca resolutorias, las.contribuciones
sólo simuladas, las diferentes motivaciones y urgencias en el cum-
plimiento de las funciones ... Si el modelo, en vez de validez des-
criptiva, pretende ser normativo, entonces encajona todas sus
prescripciones en solicitar mayores supervisiones, reglamentacio-
nes,contralorías, sanciones. Este recetarío de utilidad dudosa,
provoca además fenómenos de resistencia y oposición, abierta o
silenciosa, ante los cuales es impotente o contraproducente.
Las evidencias que Lipsky acumula a sus tesis sonaccesibles~
Una común en nuestro medio y, pese a ello, desatendida, es la
tendencia de las políticas sociales a aumentar y mejorar las medi-
das compensatorias de edllcación, vivienda, salud, empleo ... en unacercamiento alideal de la justicia sociaL Aulllentan las leyes y
se radicalizan los programas de asistencia, seguridad y promoción
social, pero sus operadores directos suelen ser el mismo personal
de siempre, ubicado mayoritariamente en los niveles inferiores de
las dependencias federales y de las organizaciones gubernamen-
tales locales, ignorados en su trabajo o abandonados a sí mismos,
portadores de las mismas habilidades, destrezas y rutinas, apenas
si actualizados mediante cursos rápidos academizantes y las ex-
hortaciones morales de los altos funcionarios.
La tesis de que hay que "enfocar la atención en los encargadosde llevar a cabo la política, más que en los que la formulan y la
transmiten" significa polémicamente "poner de cabeza al estudio
de la implementaciónde políticas públicas" (Lipsky, 1978: 391) y
proponer una visión alternativa, la del "enfoque de la estructura
de trabajo" en la que actúan los prestadores de los servicios pú-
blicos. En efecto, son demasiadas las excepciones que padecen las
dos premisas del modelo predominante de decisión pública, a sa-
ber, la jerarquía y la interdependencia de las organizaciones. En
su óptica, todos los problemas son defectos de controlo de coor-
dinación y, en los enfoques más audaces, de negociación entre lasorganizaciones de interés para llegar a un consenso.
Muy perspicazmente añade que este supuesto jerárquico está
en el origen de muchos de los estudios iniciales sobre la imple-
mentación, que apresuradamente calificaron de fracaso el incum-
plimiento al que se condenaba lógicamente esta concepción tan
jerárquica como ingenua del desarrollo de la política, sin observar
Un enfoque alternativo al estudio de la implementación de
políticas es concentrar la atención del análisis en los encarga-
dos de llevar a cabo la política más que en los que la formulan
y la transmiten. Antes de analizar las interferencias en la su-
bordinación, tendencia presente en la mayor parte de los es-
tudios, se debería conocer el niodo como perciben y efectúan
su trabajo los operadores directos de la política ... Más que to-
marlos en consideración como el eslabón final de la cadena de,
una política, los prestadores de los servicios deberían ser con-
siderados como sus protagonistas ... A diferencia de otros en-foques de implementación de políticas, éste sería el apropiado
en contextos donde la capacidad de influencia efectiva de una
política es diversa a la jerarquía de autoridad en la organiza-
ción y en donde la conexión entre los elementos de la política
no es tan estrecha como para pensar que sean partes de un
mismo sistema de acción política (Lipsky, 1978: 398).
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 39/117
En conclusión, lo que los estudios de la implementación dejan
en claro es la importancia que la dimensión política y organizativa
tienen para que la política logre tener un impacto claro y cons-
tructivo en las condiciones reales de vida y no sea sólo una buena
intención o un hermoso proyecto de expertos. El momento del
diseño, que tanto significado atribuyé a los aspectos teóricos, tec-nológicos yeconómicos, debe complementarse con la previsión de
los problemas político-organizacionales que aparecerán con ma-
yor o menor dureza en el momento en que la política abandone
los papeles llenos de análisis, cálculos y reglamentos, las reuniones
de elaborados especialistas, y se le eche a andar en el mundo real.
Si la puesta en práctica seguirá la línea jerárquica del top-down o
si procederá según el criterio del bottom-up, eso depende normal-
mente de las características y tradiciones del sistema político-ad-
ministrativo en cuyo marco se deciden y . efectúan las políticas.
Pero de todos los. estudios se desprende aleccionadoramente que
sería más inteligente organizarse y actuar según las características
específicas de las situaciones problemáticas y las expectativas de
los ciudadanos. Hay experiencias vetustas y novísimas que mues-
tran cómo desarrollos no burocráticos de programas guberna-
mentales resultan ser comparativamente más eficientes y más
consensuales. El involucramiento de los ciudadanos en la aten-
ción de sus problemas, la revaloración de los servidores público~
en contacto. directo con la ciudadanía, la delegación de la pres-
tación de determinados servicios públicos a las comunidades ...
suelen ser enfoques organizacionales alternativos de la implemen-
tación de políticas. Y son particularmente valiosos en el dominio
de las políticas sociales que atacan problemas ancestrales de na- ,
turaleza compleja, con raíces y componentes que se sustraen a los
instrumentos convencionales del gobierno. Cada vez más se pone
de manifiesto que la homologación de instrumentos y comporta-
mientospiérde sentido frente a circunstancias, reclamos y expec-
tativas tan' específicas como variables. De nuevo, desde la
perspectiva de los problemas de implementación, las señales po":
lítico-administrativas se remiten a la pluralidad y diferenciación,
a las políticas. La homologación y compactación de la gestión pú-
blica, con un mismo formato para todas las situaciones no parece
ser ya la respuesta a los problemas públicos de una sociedad con
iniciativa.
1
AMo N,H. (1978): Politics and the ProfessQrs:Great Society in Perspec-
tive, Brookings Institution, Washington, D.C.
BARDACH,E.(1977): The Implementation Game, MIT Press, Cambridge.
BERMAN,P. Y M. McLaughlin, (1974): Implementing Innovations: Revi-
sions for an Agenda for a Study of Change Agentin Education, Rand Corporation, Santa Monica.
__ -,' (1976): "Implementation of Educational Innovation", en Edu-
cational Forum, n. 40, pp. 345-70.
BERMAN,P. (1978):"The Study of Macro and Micro-Implementation",en Public Policy, n. 26, pp. 157-184.
___ , (1980): "Thinking about Programmed and Adaptative Imple-
mentation: Matching Strategies to Situations", en Helen M. Ingram
y Dean E. Mann, eds. Why Policies Succeed or Fail, Sage, BeverlyHills.
BROWNE,Ay A Wildavsky, (1984): "Implementation as Mutual Adap-
tation", en Pressman yWildavsky, Implementation (3a. ed.), Univer-sity of California Press, Berkeley.
ELMoRE,Richard F. (1976): "Follow ThroughPlanned Variation", en
Walter Williams y Richard F. Elmore, eds., Social Program Imple,-
mentation, John Wiley, New York, pp. 101-123.
ELMORE,Richard F. (1977): "Lesson from Follow Through", Policy
Analysis 1,3 (Verano): pp. 549-84.
___ .' (1978): "Organizational Models of Social Program Implernen-
tation". en Public Policy 26, 2 (Primavera): pp. 185-228.
___ ,' (1979-80): "Bacward Mapping: Implementation Research and
Policy Decisions", en Political Sciimce Quarterly 94, 4 (Invierno) pp.601-616.
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 40/117
, n " } t I ( J J - / 5 I Z I 7 0 . 3
~ O ~ ~ ~ 7 c N i 1
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 41/117
Afinales de 1968 llamó nuestra atención el esfuerzo que a favor
del empleo emprendió en Oakland la Administración de Desa-rrollo Económico (Economic Development Administration),
motivada por la aparición de un libro que ostentaba el llamati-
vatítulo de Oakland's Nat {ar Burning. Escrito por un destacado
participante en la riesgosa empresa que la ADE llevó a cabo
en Oakland,1el libro se publicó para señalar el hecho de que la
ciudad se había salvado 'recientemente de motines y la ruina
por haber recibido una inyección de 23 millones de dólares de
fondos federales. Y como dicha ayuda financiera favoreció
la creación de empleos para grupos minoritarios -enviando así
un rayo de esperanza a una nación atribulada- el programa
de la ADE fue muy elogiado como modelo digno de imitarse.
Dado que losmiembros del Proyecto de Oakland no estaban en-terados de que la ciudad se había librado del mal, investigamos
la situación legal del programa y descubrimos que en 1969, tres
años después de su iniciación, se habían gastado realmente al-
rededor de tres millones de dólares. Aese ritmo, pasarían otros
veinte años antes de que esta operación de urgencia hubiera
agotado el dinero destinado a crear empleos para la gente que
podría evitar los motines o, por lo menos, su participación en
ellos. Una parte de los tres millones había ido a parar a la ciu-
dad para la construcción del paso de Hegenberger al coliseo
(obra que, en nuestra opinión, se habría realizado de cualquier
modo). El resto sehabía destinado al pago de honorarios delos
arquitectos. Nos permitimos brevemente unas discretas fanta-sías en que los arquitectos locales estaban a punto de derrocar
al Ayuntamiento dela ciudad de Oakland en un incruento golpe
de Estado, sólo para que a última hora se dejaran comprar con
fondos de la ADE. Pero una investigación ulterior sugirió queno
había blancos fáciles ni villanos indudables. La implementa-
IAmory Bradford, Oakland's Not {or Burning (Nueva York, McKay, 1968).
51
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 42/117
ción del programa dela ADE fuemucho más difícil dele..que hu-
biera creído cualquiera de nosotros.Este libro empieza por el final: nos concentraremos en esa
parte de un programa público que sigue al establecimiento ini-
cial demetas, a la consolidación deun acuerdo ya la entrega de
fondos. El Congreso delosEstados Unidos creauna nueva agen-
cia con el nombre de Administración del Desarrollo Económi-co (ADE), la cual decide intervenir en las ciudades con el fin de
proporcionar trabajos nuevos y permanentes a las minorías,
mediante el desarrollo económico. Oakland esla ciudad que se
elige para experimentar y demostrar la manera por la cual la
provisión de obras públicas y préstamos para la construcción
de edificios puede procurar incentivos para que los empresa-
rios contraten grupos minoritarios de la población. El Congre-
so asigna los fondos necesarios; se obtiene la aprobación delos
funcionarios y de los hombres de empresa de la ciudad, y el
programa se anuncia al público con las fanfarrias de costum-
bre. Años más tarde, la construcción sólo ha avanzado parcial-
mente; han desaparecido por completo los préstamos mercanti-lesy losresultados encuanto alempleo deminorías son míseros
y desalentadores. ¿Por qué?
Algunosprogramas abortan porque noha sidoposible lograr
el consenso político. Otros languidecen porque no han podido
asegurarse los fondos. Otros más se desvanecen debido a que
no se vepróximo el acuerdo inicial con los funcionarios locales
o con las empresas privadas. Todas estas condiciones fueron
satisfechas en el programa de empleo de la ADE instituido en
Oakland, pero no fue posible implementar el programa a tiem-
po para obtener los resultados anhelados.
En nuestro estudio sobre la implementación hemos selec-
cionado deliberadamente un caso del cual se han excluido sus
elementos dramáticos que en esencia se explican por sí solos.
No hubo una gran pugna. Todos estuvieron de acuerdo. La pu-
blicidad fue mínima. El tema no revistió una importancia polí-
tica preponderante. Se dispuso de los fondos esenciales en el
momento oportuno. Los males que afectaron al programa ADE
en Oakland fueron de naturaleza trivial y cotidiana. Había que
mantener los convenios después de haberse pactado. También
había que obtener numerosas aprobaciones y autorizaciones
de una diversidad de participantes. El hecho de no reconocer
que estas circunstancias, sumamente comunes, presentan se-
rios obstáculos a la implementación inhibe el aprendizaje. Al-
guien que vaya siempre en busca de circunstancias insólitas y
acontecimientos dramáticos no puede apreciar lo difícil que es
hacer que acontezca lo ordinario.
Alparecer, la gente cree ahora que la implementación debeser fácil; así que se preocupan cuando no ocurren los sucesos
que se esperaban o cuando resultan mal. Creeríamos que nues-
tro esfuerzo ha tenido éxito si fuera más la cantidad de gente
que empezara a comprender que la implementación, enlasme-
jores circunstancias, es excesivamente difícil, así que se sor-
prenderían agradablemente al observar que realmente han su-
cedido algunas cosas buenas.A pesar de que, en años recientes, la implementación ha
sido objeto de grandes discusiones, rara vez se la ha estudiado.
Presidentes y sus consejeros, secretarios de departamentos y
sus subordinados, así como funcionarios locales ygrupos asen-
tados en sus comunidades se quejan de que las buenas ideas sedisipan enelproceso deejecución. Sin embargo, con excepción
del excelente libro de Martha Derthick2no hemos podido loca-
lizar ningún análisis minucioso dela implementación.3 Lasque-
jas acerca dela implementación no constituyen esfuerzos serios
de abordar elproblema.Es indudable que un enfoque comparativo a los problemas
dela implementación sería idealmente preferible al que hemos
adoptado. Pero esta materia no se conoce lo suficiente para es-
tablecer categorías apropiadas, y no disponemos de ninguna
2 Martha Derthick, New Towns in-Town (Washington, D.C.: Urban Institu-
te), 1972.
3 El.espléndido relato que hacen Stephen Bailey y Edith Mosher sobre laLey de Educación Primaria y Secundaria revela una aguda sensibilidad hacia
losproblemas de la implementación. Pero elpropósito de los autores noes ana-
lizar la implementación como un fenómeno aparte. Véase su publicación ESEA:
The Office of Education Administers a Law (Syracuse: Syracuse UniversityPress, 1968). Jerome T.Murphy, en su artículo "Título 1de ESEA: The Polítics of
Implementing Federal Education Reform", Harvard Educational Review 41
(I 971): 35-63, aborda directamente la cuestión de la implementación. Si bien
este artículo no contiene un análisis tan completo de la implementación comoel que se incluye en el estudio de Derthick, el autor ofrece abundantes ideas
profundas sobre el problema.
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 43/117
bibliografía previa enla cual nos apoyemos como guía. No esta-
mos pretendiendo haber acometido un análisis extenso de la
implementación. No estamos seguros de saber en qué consis-
ten todos los problemas, mucho menos de aportar sus solucio-
nes. Pero de alguna parte ha de arrancar un principio, y confia-
mos en que este libro lo sea.
Para nosotros, implementación significa precisamente lo
que Webster yRoget dicen que hace: llevar a cabo, lograr, reali-zar, producir, completar. Pero, ¿qué es lo que se está imple-
mentando? Una política, naturalmente. Debe haber algo con
anterioridad a la implementación; de otro modo, nohabría nada
que avanzara hacia el proceso de ésta. Un verbo como "imple-
mentar" debe tener un sujeto como "política".Pero, normalmen-
te, las políticas implican tanto las metas como los medios de al-
canzarlas. ¿Cómo es, entonces, que hacemos una distinción
entre una política y su implementación?
En nuestra charla diaria, cuando nos referimos a decisiones,
utilizamos la palabra "política" de varios modos notablemente
diferentes. Aveces,política quiere decir una declaraciónde inten-
ción:nuestra política consisteen aumentar elempleoentre gruposminoritarios. En nuestro estudio, la política estratada como una
declaracióngeneraldemetasyobjetivos.Nada seha dichoacercade
lo que podría hacerse, o de si se ha hecho o se hará algo para lo-
grar esepropósito. Otras veceshablamos depolítica como si este
término equivaliera a una conducta real. Nuestra política estriba
en contratar minorías, lo que significaque verdaderamente lo ha-
cemos. En este sentido, política abarca la meta y su consecución.
Ambos significados depolítica descartan la posibilidad de estu-
diar la implementación. Cuando la palabra "política" subsiste
como un objetivo desencamado, sin especificar a losejecutores
o losactos con loscuales éstos tengan que comprometerse para
lograr el resultado conveniente, no hay ninguna implementa-ción que estudiar. Cuando la declaración del objetivo incluye la
consecución, la implementación resulta innecesaria.
No podemos trabajar con una definición de política que ex-
cluya toda implementación, ni con una que incluya todas las
implementaciones. Debe haber un punto de partida. Si no se
inicia alguna acción, la implementación no tiene lugar. Asimis-
mo, debe haber un punto final. La implementación no puede
tener éxito ni fracasar si no cuenta con una meta contra la cual
pueda juzgársela.Convengamos en referimos a la política como una hipótesis
que conlleva condiciones esenciales y consecuencias previstas.
Si x selleva a cabo enun tiempo t J' Y resultara en el tiempot 2' Si
por conducto de la Administración del Desarrollo Económico
el gobierno federal otorga 23millones de dólares en préstamos
y concesionesa empresas de OakIand,y si éstasconvienen encon-tratar grupos minoritarios después de agotar el dinero, secons-
truirán instalaciones encaminadas a la creación de nuevos
empleos para las minorías. En este caso, la implementación
constituiría la capacidad de alcanzar las consecuencias previs-
tas, después de haberse satisfecho las condiciones esenciales.
La implementación no se refiere a crear las condiciones
esenciales. Es necesario que se apruebe la legislación corres-
pondiente, y que los fondos se comprometan antes de que tenga
lugar la implementación para obtener el resultado pronostica-
do. De manera semejante, debe llegarse a acuerdos con las em-
presas locales antes de esforzarse en llevarlos a cabo. Después
de todo, el mundo está lleno de propuestas de políticas queabortan. No es posible terminar lo que no se ha comenzado. La
falta de implementación no debe atribuirse a la incapacidad de
avanzar sino a la de seguir hasta el fin.Para recalcar la existencia real de las condiciones esencia-
les debemos distinguir entre programa ypolítica. Un programa
consiste en una acción gubernamental que se inicia con lamira
de lograr objetivos cuya consecución es problemática. Un pro-
grama existe cuando se han satisfecho las condiciones esencia-
les -o sea, la etapa "si" de la hipótesis sobre la política-o La
palabra "programa" significa la conversión de una hipótesis en
una acción gubernamental. Se han autorizado las premisas
fundamentales de la hipótesis. Designaremos como implemen-tación elgrado en que han ocurrido las consecuencias previstas
(la etapa "entonces"). La implementación puede considerarse
como un proceso de interacción entre la fijación de metas ylas
acciones engranadas para alcanzadas.
Considerando en conjunto, un programa puede concebirse
como un sistema en el cual cada elemento depende del otro. Si
no sesuministra dinero, no esposible construir instalaciones, y
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 44/117
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 45/117
ll i d l d d l G d S h l f bli li
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 46/117
nell, secretario del decano de la Graduate School of Public Poli-cy, cuidó la copia original y cuidó del manuscrito hasta su pu-
blicación. Esperamos que todas las personas que nos ayudaronsientan que han contribuido a la apertura de un análisis soste-nido de los problemas de implementación, que durante muchotiempo ha contado con vilipendiados participantes y confundi-dos observadores.
Ningún libro que aborde el tema de la asignación de recur-sos será completo si no contiene una expresión de agradeci-miento por el indispensable apoyo financiero que recibe. Una
parte del trabajo inicial dedicado a este estudio se llevó a cabogracias a una donación de la National Aeronautics and SpaceAdministration (Administración Nacional de Aeronáutica y delEspacio). De julio de 1969 a septiembre de 1971, el ProyectoOakland fue sostenido por el Urban Institute utilizando los fon-dos puestos a la disposición por el Department of Housing and Urban Development (Departamento del Desarrollo Urbano ydela Vivienda). Tal arreglo hizo posible la publicación del presen-te libro. Durante el año pasado el proyecto se benefició con lagenerosidad de Melvin Webber y de su Institute of Urban and Regional Development (Instituto de Desarrollo Urbano y Re-gional).
La autorización de reproducir las caricaturas de RubeGoldberg procedió del King Features Syndicate, y fue cortesíade la Biblioteca Bancroft de la Universidad de California enBerkeley, donde pasamos muchas horas agradables.
ENLA mañana del 25 de abril de 1966 el Wall Street Journal pu- blicó el siguiente titular: "Comienza la Ayuda Urbana: el Go- bierno Elige a Oakland como Primera Ciudad para el Programade Reconstrucción".1 El artículo del Journal mostraba su sor-
presa por el hecho de que "el primer paquete de ayuda de laGran Sociedad, en su campaña para la protección de las ciuda-des", "no se destinaría a Nueva York, Chicago, Los Ángeles, o aotras urbes importantes, en las cuales lapobreza y las tensionesraciales han estallado en manifestaciones públicas o en moti-nes". Másbien, dicha ayuda "sería para Oakland, Califomia, ciu-dad que mostraba un alto índice de desempleo e inquietudes ra-ciales, y a la que los agentes federales consideraban un polvorín
potencial". Como ayuda para resolver los problemas de desem- pleo e inquietud racial, el nuevo programa financiaría las obras
públicas y los préstamos mercantiles que resultarían en la crea-cióndetrabajos paralosdesempleados,principalmente losnegros.
Según el Journal, otra sorpresa era que "eldonante noserá elnuevo Departamento del Desarrollo Urbano y de la Vivienda.Será una dependencia gubernamental con antecedentes ruralesy,sobre todo,jurisdicción rural: la Administración de DesarrolloEconómico del Departamento de Comercio, "Eugene P. Foley,elentusiasta, incansable eimaginativo subsecretario de Comercio,que dirige laADE, hará el avisooficial esta semana".
El 29 de abril, Foley anunció formalmente el programa enuna conferencia de prensa celebrada en el aeropuerto de Oak-land. El gobemador deCalifornia, Edmund G. Brown, presentó
a Foley como "el subsecretario de Comercio para el DesarrolloEconómico que ha resuelto efectuar en Oakland un experimen-to popular para resolver el principal problema urbano: el des-empleo".2 En seguida, Foley leyó su declaración a la prensa.
IThe Wall Street JournaZ (25 de abril de 1966), p. 1.2 Citado en OakZand's Not {or Burning, de Amory Bradford (Nueva York:
McKay, 1968), p. 123.
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 47/117
dó al Consejo. Durante el litigio, pensamos que podría enta-
blarse un juicio que congelara los activos del Consejo, así que
pagamos a los acreedores directamente para mantener en cur-
so el proyecto".
Varias demoras impidieron al contratista terminar el Cen-
tro en la fecha fijada, el 15dejunio de 1969.Lossubcontratis-
tas tuvieron tropiezos tratando de encontrar un número ade-cuado de obreros competentes, y también cometieron errores
de programación. Luego el ensamble de accesorios acarreó
problemas en la instalación. Aunque el contratista original ha-
bía intentado colocar la plomería enlos módulos de la fábrica,
el Departamento de Construcción de Edificios de la ciudad de
Oakland dispuso que dichos accesorios se instalaran en el sitio
de la obra. Finalmente, se resolvieron estos problemas, y la
obra del Centro se concluyó el20 deagosto de 1969.30Para di-
ciembre de 1970, el Centro había creado 160 empleos, inclu-
yendo 150para minorías.
CUANDOdecimos que los programas han fracasado, esto insi-
núa que nos sentimos sorprendidos. Si desde un principio pen-
samos que era improbable que tuvieran éxito, su incapacidad
de alcanzar las metas fijadas o funcionar de alguna manera no
exigiríauna explicación especial. Sicreímos que habría violen-
tos conflictos de intereses, si era deesperar que quienes tenían
que cooperar estuvieran en desacuerdo, si los recursos necesa-
rios eran muy superiores a los disponibles, podría sorprender-
nos bastante más el que los programas se hubiesen siquiera in-
tentado, en lugar de mostrar asombro por sus omisiones. El
problema sedisiparía con sóloexponerlo. No se necesitaría in-
genio para explicarlo. Una pregunta trillada y común tendríauna respuesta evidente. Aunsi los iniciadores delosprogramas
novaloraron el enconado conflicto que desencadenarían, noso-
tros debíamos investigar simplemente sus fallas depercepción,
después de explicar así los resultados lamentablemente inevi-
tables.
Por ejemplo, no nos sorprende que haya fracasado el pro-
grama de préstamos dela ADEen Oakland. Conociendo las nor-
mas legislativas contradictorias, los antagonismos administra-
tivos entre las dependencias federales, y la incertidumbre dela
acción local por parte de numerosas empresas, no asombra a
nadie que el programa no alcanzara sus propósitos. Con
respecto a las ob'ras públicas, por lo menos, la ADEtenía laventaja detratar con un beneficiario importante -el Puerto de
OakIand-, cuya excelente administración y óptima capacidad
decrédito eran detodos sabidas. No había duda de que elpuer-
to estaba calificado, pero sí de que se cumpliera lo prometido.
Por otra parte, los préstamos mercantiles tenían que pasar a
través deuna variedad deempresas locales, varias delas cuales
operaban con administraciones de dudosa calidad. Ylas solici-
171
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 48/117
tudes debían ser aprobadas por una junta de empresarios loca-
les, que criticaban todo el esfuerzo de la ADE. Además, las nor-
mas reglamentarias de elegibilidad de los prestatarios eran
estrictas a la vez que incompatibles. Aun prestatario potencial
se le dificultaba demostrar que su empresa pudiera crear nue-
vos empleos en el área de tal manera que no compitieran con
los negocios existentes. Aún más difícil le era demostrar que no
podía financiar su propuesta recurriendo a préstamos particula-res(loque haría queloconsideraranun mal riesgo),mientras inten-
taba convencer a la ADE y a la SBA de que pagaría el préstamo.
Empero, losfuncionarios de la ADE en Oaklandse enfrentaron
a un reto adicional al decidir que elplan de empleos se aplicara a
los proyectos de préstamos. Un exfuncionario de préstamos de
la ADE enWashington comentó los efectos de esta decisión: "Us-
tedes comienzan con deudores pobres, quienes, en seguida, tie-
nen que contratar a la fuerza obrera más pobre del mundo. A
continuación, esperamos que compitan con empresarios ricos
que cuentan con fuerzas laborales experimentadas". Cuando la
oficina de préstamos de la ADE trató de prestar a un abruma-
do empresario de Oakland (que había contratado a algunosobreros desempleados, de las minorías) suficiente ayuda admi-
nistrativa para mantener a flote su negocio, un funcionario de
asistencia técnica de la ADE vetó elproyecto. Alfiny al cabo, ra-
zonó el funcionario, si el hombre necesita toda esa ayuda, no
debe ser un buen empresario. La ADE puede prestar un capital
de edificación, pero no capital de trabajo. Bajo la mirada vigi-
lante de banqueros de la Administración de Negocios Peque-
ños, que puede prestar capital de explotación, la empresa final-
mente cayó en bancarrota.
Frente a un numeroso grupo de solicitantes, e impulsados a
relacionarlos mediante una serie de normas complicadas, los
funcionarios de la ADE muy bien pudieron comenzar a añorar la relativa sencillez de los proyectos de obras públicas. ¿Quién
se hace esta clase de cosas a sí mismo? Es posible que, en pleno
entusiasmo, dichos funcionarios no se hayan percatado de aque-
llo en que se habían metido cuando unieron raza y pobreza con
dirección de negocios yempleos. Pero sí tenían una larga histo-
ria legislativa para advertirles que los programas de préstamos
implicaban conflictos de intereses profundamente arraiga-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 49/117
dos. Las normas establecidas para los préstamos, que parecían
aptas para una parodia, son el producto de un acomodo a los
conflictos que surgieron cuando el gobierno federal descubrió
por primera vez que no siempre era fácil ayudar a unos sin per-
judicar a otros. Yun conflicto más ha surgido en el programa
con el requerimiento de que la ADE y la SBA -agencias cuyas
prioridades difieren marcadamente- deben compartir la res- ponsabilidad de administrar el programa de préstamos.
Debido a loscontinuos conflictos que sesuscitan dentro del
programa de préstamos mercantiles, sus reglas para tomar deci-
siones fueron complejas; había que tener en cuenta la compe-
tencia de intereses. La idea de que el empleo para minorías es
buena en sí misma tuvo que ceder ante lodeseable de limitar la
competencia con lasfirmas existentes,a findepermitir que la Ad-
ministración de Negocios Pequeños tratara con los solicitantes
dentro de sujurisdicción para no asumir la función del merca-
doprivado definanciar lascompañías que pudieran utilizar sus
instalaciones. Sin embargo, la propia complejidad de las reglas
para tomar decisiones militó contra su uso satisfactorio, pueseran pocos los solicitantes que podían cumplidas. En efecto,
las normas empezaron a ahuyentar solicitantes. Los encarga-
dos de poner en acción el dinero tuvieron que simplificar su
proceder. Terminaron decidiendo (muy razonablemente den-
tro de sus propios términos) tomar un poco de esto y otro poco
de aquello, y observar lo que pudiera suceder. Siguiendo la di-
rección dela opinión local, llegaron incluso a hacer una conce-
sión, al insistir en que se formara un grupo de ciudadanos que
contribuyera a evaluar las propuest?s, pero no ayudó el hecho
depedir a losciudadanos dela localidad que tomaran decisiones
más alláde sucapacidad. Además,había pocoespaciopara selec-
cionar pues no fueron muchas las propuestas presentadas. Hay
un nombre para eso, pero poner sellos de goma a documentos
no equivale en modo alguno a la participación ciudadana.
Cuando un programa se caracteriza por tantas normas con-
tradictorias, relaciones antagónicas entre losparticipantes yun
alto nivel de incertidumbre hasta de la posibilidad de éxito, no
es difícil predecir o explicar el fracaso del esfuerzo. Bailey y
Mosher escriben: "Cuando, como en el caso de la ESEA, una ley
de alcance sinprecedentes tiene que administrarse por conduc-
to dedependencias estatales ylocales, dentro deun plazo impo-
sible, y por una dependencia cuyo personal es insuficiente, de-
sorganizada ensu estructura yacosada por un diluviodequejas
y demandas deesclarecimiento dela legislación, así como dela
legislación afín consignada yaen loslibros, no essorprendente
que se cometan equivocaciones; lo asombroso es que la leyseimplemente siquiera".I
Nos sorprende más que un programa fracase cuando hay
un aparente acuerdo al principio, y luego, muy pronto, surgen
desavenencias que bloquean elprograma. Un caso de esta natu-
raleza se presentó en el programa "nuevas ciudades dentro de
la ciudad", que es el tema de un análisis excelente hecho por
Martha Derthick.2 Afinales del verano de 1967, el gobiemo de
Johnson inició un programa para construir nuevas comuni-
dades modelo en un terreno sobrante de propiedad federal,
ubicado en un área metropolitana. En el transcurso del año
siguiente, la Casa Blanca y el Departamento de Desarrollo Ur-
bano y Vivienda anunciaron siete proyectos, que se ubicarían
en Washington, D.C., San Antonio, Atlanta, Louisville, Clinton
Township (Michigan), NewBedford y San Francisco. Casitres
años después se hizo evidente el fracaso del programa. Tresde
los proyectos se habían descartado y el resto se enfrentaba a
graves problemas. Casi no había llegado a iniciarse ningunaconstrucción.3
¿Por qué querría ver alguien el diente a caballo regalado?
¿Por qué rechazaría las buenas intenciones del presidente
Johnson, de la Casa Blanca y del Departamento de Desarrollo
Urbano yVivienda,quienes ofrecían subsidios sobre un terreno
excedente, de propiedad federal, situado en áreas metropolita-
nas, con el loable propósito de construir nuevas comunidades
que unirían a negros con blancos, a ricos con pobres, para que
convivieran en armonía con la nueva tecnología? Aunque el
acuerdo inicial parecía, por lo menos, a los funcionarios fede-
rales, haberse difundido, pronto afloraron las discrepancias.
J Stephen K.Bailey y Edith K. Mosher, ESEA: The Office of Education Ad-
ministers a Law (Syracuse, N.Y.: Syracuse University Press, 1968), p. 99.
2 Martha Derthick, New Towns In-Town (Washington, D.C.: Urban Insti-tute, 1972).
3 lb id. , p. XIV.
i l l i fi l difi i
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 50/117
Varios grupos locales se opusieron firmemente a la edificaciónde viviendas públicas de bajo costo; los funcionarios locales
preferían otros tipos de desarrollo urbano que produjeran másingresos por impuestos, y los conservadores se opusieron a los
planes de construcción. Cuando el acuerdo aparente cedió anteel desacuerdo agudizado, el programa se interrumpió.
Podemos justificar aún más nuestra sorpresa por el fracaso
del programa (acrecentando así elinterés depreguntar la razón por la que fallan los programas) presentando un caso en que losacuerdos iniciales se disiparon lentamente en elcurso del tiempoyde maneras impredecibles. En un principio no habría antago-nismos obvios, y tampoco surgirían bruscamente. Más bien, losconflictos se encubrirían y aparecerían sólo después de pasadoun tiempo. Los intereses y las organizaciones participantes
pensaban que querían hacer algo, pero la experiencia les ense-ñaría que se habían equivocado. Pocos programas podrían em-
prenderse si se tuvieran que especificar de antemano todos los participantes, si todas las diferencias futuras se resolvierandesde elprincipio, ysi todos lospactos futuros se celebraran en
las condiciones de ayer. Algotiene que dejarse al avance de losacontecimientos. Así, a medida que los conflictos latentes se ponen de manifiesto, hay que renegociar los convenios origina-les y surge una nueva situación, posiblemente más antagónica.La dependencia federal puede descubrir que los beneficiariosde sus financiamientos no están dispuestos a acatar los acuer-dos iniciales; o bien los beneficiarios pueden interpretar losacuerdos de forma que entran en pugna con las interpretacio-nes federales. Una agencia gubemamental que parezca ser unaorganización única, con un solo mandato, se convierte envariassuborganizaciones que se rigen por mandatos diferentes. Lafirmeza aparente de los propósitos y entendimientos origina-
lescede ante loscambios que experimentan la gente, las organi-zaciones y las circunstancias. Hasta aquí, muy bien. Pero notanto.
Podría decirse que elPrograma de Obras Públicas dela ADEse caracterizó por la lenta disolución del acuerdo. Al suceder una demora a otra, los principales participantes cambiaron, asícomo los acuerdos que habían pactado. Se llegó a conveniosque' luego fueron socavados y volvieron a formularse. Los fre-
cuentes llamadosaestablecer una coordinación (que analiza-remos en el capítulo siguiente) reflejaron la incapacidad de lamaquinaria de implementación para movilizarse con rapidezsuficiente para alcanzar los acuerdos mientras duraban. Si enun mundo exterior, de cambios acelerados, sedeja que transcu-rra demasiado tiempo, es difícil imaginar que sigan siendo fir-mes los acuerdos que se hayan celebrado. Esperamos que la
economía nacional (yla posición de las empresas incluidas enella) se someta a rápidas fluctuaciones. ¿Por qué los convenios,
pactados en loque debe parecer una era pasada, deben conser-var su original obligatoriedad? Cualquiera puede entender larazón deque con el correr del tiempo los convenios se sujeten amodificaciones; todos quieren saber por qué se ocupó tantotiempo en la implementación del Programa de Obras Públicasy Empleos que todo el mundo quería en un principio. Es másfácil explicar por qué los acuerdos se desbaratan años despuésdeque sehan celebrado, que descubrir por qué estan difícil im-
plementarlos cuando se pactan.En nuestra opinión, creemos que es más interesante llevar
la sorpresa al máximo. Hemos escogido el análisis del Progra-ma de Obras Públicas de la ADE en Oakland precisamente por-que carece de los elementos que permiten dar explicacionesfáciles. En comparación, por ejemplo, con las actividades co-munitarias o con el Redesarrollo urbano, al compromiso dela ADE en Oakland le falta tanto drama como conflicto. Adiferen-cia de los préstamos mercantiles, no hubo evidentes interesesen conflicto ni normas legislativas contradictorias. Ytambién,a diferencia del proyecto "nuevas ciudades dentro de la ciu-dad", no hubo oposición a nivel local. En las obras públicas dela ADE los participantes principales que intervinieron en todo elcurso del programa insistieron en que creían en el programa
yque entre ellosno había discrepancias fundamentales. Lossu-cesos que registramos tienen importancia para nosotros debi-do a su prosaica naturaleza cotidiana. Éstas son las clases decosas -diferentes protagonistas, perspectivas diversas, múlti-
ples aclaraciones- que se encuentran en cualquier programa.En realidad, la ADE hizo esfuerzos especiales por superar
los obstáculos de losque sabía que habían bloqueado otros pro-gramas. La innovación de la ADE consistía, desde su propio
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 51/117
punto de vista, precisamente en tratar de evitar la fragmenta-
ción institucional, las metas múltiples y confusas y el financia-
miento inadecuado que habían caracterizado programas ante-
riores, tanto federales como de ciudades. Los proyectos de la
Terminal de la Marina y del hangar de la aerolínea, en los cua-
les nos concentraremos con fines analíticos, incluían de mane-
ra deliberada precisamente una sola agencia federal en una ciu-
dad; había sólo un beneficiario local importante, el Puerto deOakland, cuyos inquilinos estarían obligados a cumplir con un
plan de empleo, escrito y firmado; y habría un compromiso in-
mediato que ascendía a 23 millones de dólares. La construc-
ción íntegra de obras públicas creadoras deempleos era el alma
del programa de la ADE en Oakland. Es improbable que haya
muchos programas más sencillos en cuanto a que impliquen un
menor número de participantes, o menos arreglos complica-
dos. Pocos programas especificarían, como éste, y con tanta
claridad, los beneficios que recibirían los participantes -dine-
ro barato, empleos, crédito político-o Así, puede esperar que
las dificultades que surgieron en este caso afecten casi todo
nuevo programa. Si comprendemos la razón de que este pro-grama haya tropezado con dificultades, podemos confiar en
que llegaremos a algunos delos factores subyacentes que hacen
fracasar a los programas cuando no hay ninguna razón eviden-
te para que así sea.
Loque esperamos demostrar es que lo aparentemente sen-
cillo y directo es realmente complicado y retorcido. En primer
lugar, nos sorprende que no empecemos por considerar el nú-
mero de etapas, el número de participantes cuyas preferencias
deben tenerse en cuenta, yel número de decisiones separadas
que forman parte de lo que creímos que era una sola. Todavía
menos apreciamos el desarrollo geométrico de las interdepen-
dencias a lo largo del tiempo, cuando cada negociación incluyevarios participantes dispuestos a tomar decisiones, cuyas im-
plicaciones se ramifican con el tiempo. ¿Qué hay tan difícil en
construir una terminal y un hangar para una aerolínea cuando
el dinero está ahí, los planos se han firmado y la gente está de
acuerdo con que las minorías participen en los trabajos? Mos-
traremos cómo lo que parecía ser un programa sencillo se con-
virtió en un programa muy complejo, que incluía a numerosos
participantes, una multitud de perspectivas diferentes y una
trayectoria larga y tortuosa de puntos de decisión que había
que aclarar. Dadas estas características, se redujeron notable-
mente las oportunidades de que el programa se concluyera con
la rapidez con la que habían contado sus diseñadores, incluso
las oportunidades de concluido de alguna manera.
Si bien la ADE había intentado llevar a cabo su programa dema-
nera directa y sencilla, sin extender su participación a otras de-
pendencias gubernamentales, un gran número de organizacio-
nes del gobierno y ajenas a éste, así como de personas, con el
tiempo intervinieron en el proceso de implementación. Queda-
ríamos agotados, y también nuestros lectores, si enumeráse-
mos a todos los que llegaron a intervenir en uno u otro aspecto
del programa de la ADE. Así, pongámonos de acuerdo en sim-
plificar la situación. Limitaremos los participantes a la ADE,
el resto del gobierno federal y la ciudad de Oakland, junto con
sus elementos constitutivos. Por lo que toca a la ADE, estos
elementos comprendían la misión especial inicialmente formada
por Foleyy por Bradford, los departamentos de operación de la
ADE en Washington, los jefes de la agencia posteriores a Foley,
la oficina regional de Seattle y la oficina de campo en Oalcland.
Otras agencias federales que llegaron a intervenir en el proceso
de implementación fueron: la Oficina de la Contaduría Gene-
ral; el Departamento de Salud, Educación yBienestar; el De-
partamento del Trabajo yla Armada. Los participantes por parte
de Oakland fueron: el alcalde, los administradores de la ciudad,
la World Airways, el Puerto de Oakland, varios de los dirigentes
negros de la ciudad, grupos de conservación e inquilinos delPuerto de Oakland.
Algunos de estos participantes (como los departamentos
del Trabajo y de Salud, Educación y Bienestar) participaron
porque poseían autoridad jurisdiccional sobre partes impor-
tantes del proyecto; otros (como la Armada) entraron enel proce-
so cuando consideraron que se estaban violando sus intereses,
y otros más (como los negros de OakIand) fueron introducidos
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 52/117
Participante
ADE-Foley,Bradford,
misión especial
en Oakland
ADE-Departamentos
funcionales
en Washington
ADE-Jefesdespués
de Foley
Re lac ión co n el pr og rama
Programa diseñado,
maquinaria del proyecto
instalada en Oakland
Implementación del
proyecto-construcción,
financiamiento,
proceso, etc.
Autoridad ejercida sobre los
proyectos después del otoño
de 1966
Perspectiva y objetivos
pr incipa les
Es necesario iniciar, en un
tiempo relativamente breve
un programa de desarrollo
económico que genere
trabajos para minorías
desempleadas
Dirigido a la construcción
de instalaciones
de manera eficiente
yadministrativamente
apropiada
Intento de salvar
las metas originales
de empleo del proyecto
Oakland
Sentido de urgencia
Muy grande
Alto (algún resentimiento
de la misión especial;
insistencia en que el proceso
satisfaga las normas
administrativas)
Moderado (no idel.tificado
personalmente con el
programa; el Secretario
de Comercio Connor indicó
falta de entusiasmo)
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 53/117
La ciudad estuvo
representada en las
negociaciones con la ADE;
se procuró cimentar la
ayuda para el programa
Se elaboraron solicitudes El financiamiento
de financiamiento, de la ADE se consideró
a la ADE, para obras públicas como una ayuda potencial(se aprobó el camino de a proyectos de obras
acceso al coliseo) públicas en la ciudad
Participante
Armada de Estados Unidos
Re lació n co n el prog rama
Objeción a la construcción
de la terminal por sus
efectos sobre la seguridad
de los vuelos
Ciudad de Oakland
(administración)
Perspectiva y objetivos
pr inc ipa les
El interés principal se
concentró en los efectos de
la construcción del puerto
sobre las operaciones
de la Estación Aeronaval
de AlamedaSe apoyaron firmemente
las metas de desarrollo
económico y de creación
de empleos
Sentido de urgencia
Bajo
Bajo (se concluyó pronto
el camino de acceso;
no se aprobó ningún otro proyecto patrocinado
por la ciudad)
Puerto de Oakland Beneficiario local El d l ADE Moderado (el Puerto está
intencionalmente en el programa por la ADE con el fin de ci- separado impone una distinción artificial, especialmente cuan-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 54/117
p g p
mentar una ayuda local para los proyectos.
Como se muestra en el cuadro V.l, cada uno de los numero-
sos grupos participantes tenía una perspectiva distinta de la
que sustentaba la operación de la ADE, y los grupos discrepaban
en cuanto a la urgencia del programa. Aun dentro de una uni-
dad organizacional podía haber diferencias considerables en
las perspectivas. En esas condiciones, la misión especial de la ADE en Oakland se interesó principalmente por consolidar un
compromiso, rápido y dramático de la agencia con un progra-
ma de crear empleos para las minorías, mientras que los depar-
tamentos operantes de la oficina de la ADE en Washington con-
centraban su interés en la solidez administrativa y financiera
dela construcción del proyecto. En Oakland, dentro del gobier-
no de la ciudad, la atención del alcalde Reading, enfocada en los
aspectos del programa relativos a la producción de trabajos, no
era compartida por los administradores de la ciudad, quienes
veían en la ADE una posible fuente de finanzas para las obras
públicas del gobiemo de la ciudad.
Cuando las perspectivas difieren, también difiere la valora-ción del éxito. Por lo que serefiere al liderato original de la ADE,
la valoración del éxito residía en el número de empleos creados
para la minoría de desempleadas crónicos de Oakland. Pero otros
participantes sustentaban otras normas del éxito: el Puerto de
Oakland se interesaba principalmente en la expansión de sus
instalaciones, en tanto que el Departamento de Salud, Educa-
ción y Bienestar presionaba para que se aumentara el financia-
miento de sus centros de capacitación ya establecidos.
Ninguno de los participantes discrepó seriamente de la
política que favorecía la creación de empleos para las mino-
rías desempleadas de Oakland; asimismo, ninguno cuestionó
la conveniencia de crear empleos por medio de subvenciones a
obras públicas. ¿Por qué, ante esta ausencia de oposición al im-
pulso de la política de la ADE, tropezó el programa con tantos
obstáculos?Cuando los programas no se están implementando, es ten-
tador concluir que los participantes disintieron acerca de los fi-
nes especiales a que aspiraban, más que por los medios ordina-
rios para alcanzados. Empero, el pensar en medios y fines por
p p , p
do esto implica más de un programa. Los fines de un partici-
pante, por ejemplo una institución de capacitación, pueden ser
los medios de otro. Tan pronto como se ponen en operación in-
Iiumerables programas, la corriente de transacciones que circu-
la entre los que participan simultáneamente en ella no puede
mostrar ni un comienzo ni un fin claros, sino únicamente alti-
bajos. Mientras los administradores de cada programa tratende imponer a los demás la secuencia de acontecimientos que
prefieran, pueden entrar en pugna sus prioridades para laeta-
pa siguiente, la cual difiere para cada quien y no puede tener la
misma importancia para todos. Los medios parecen más gran-
des cada vez, porque son lo que la acción está a punto de aco-
meter. En realidad, esmás fácil disentir en cuanto a losmedios,
porque están ahí para provocar disputas, mientras que los fines
se encuentran siempre a la vuelta de la esquina. Para que una
noción, por lo demás abstracta, se vuelva concreta, proporcio-
namos una lista de razones depor qué losparticipantes pueden
estar de acuerdo con respecto a los fines esenciales de una pro-
puesta y, a la vez, oponerse (o simplemente dejar de facilitar)los medios para realizarla.
1. Incompatibilidad directa con otros compromisos. Los
participantes pueden estar de acuerdo con los méritos de una
propuesta, pero descubrir que es incompatible con otras metas
de la organización. ElHEW llegó a opinar que la propuesta so-
bre el adiestramiento en la aerolínea competía por obtener fon-
dos escasos con el East BaySkills Center, el cual figuraba en la
propia lista del HEW que enumeraba las instituciones aproba-
das. Yel Puerto de Oakland, aunque manifestaba su apoyo a las
metas de empleo dela ADE, seguía insistiendo en la necesidad de
"vender supropiedad". Unrepresentante delpuerto observó que:
"los métodos del puerto y los de la ADE son diferentes, pero...
sus principios son losmismos". El vocero del puerto dijo que su
organización quería hacer algo en favor de la minoría desem-
pleada, pero que la ADE no había entendido que no es lo mismo
elaborar un proyecto que hacerlo funcionar. Los funcionarios
delpuerto consideraban que las restricciones de la ADE -particu-
larmente el plan de empleo'-:"-eran molestas. Este juicio fuese-
cunda do por la Matson Navigation Company la cual no desea acordada a la misión especial de Bradford en Oakland así que
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 55/117
cunda do por la Matson Navigation Company, la cual no desea-
ba utilizar las instalaciones del puerto que estuvieran sujetas al
plan de empleo de la ADE.
2. No hay ninguna incompatibilidad directa, pero sí una pre-
ferencia por otros programas. Muchos empleados de la ADE, es-
pecialmente quienes habían trabajado en laARA, opinaron que
las zonas rurales y las poblaciones pequeñas eran el centro apro-
piado de la agencia, apreciación que también era sustentada por la Oficina Federal deAdministración y Presupuesto. Estos par-
ticipantes no se oponían a la idea decrear empleos en zonas ur-
banas, pero no consideraban que esa fuera tarea de la ADE.
3. Compromisos simultáneos con otros proyectos. Los parti-
cipantes pueden estar de acuerdo con una propuesta, no esta-
blecer compromisos contradictorios y no mostrar preferencia
por otros programas, pero pueden tener otros proyectos de su
incumbencia que exijan tiempo y atención. El arquitecto/inge-
niero del Puerto de Oakland demoró su trabajo en los planos de
la Terminal de la Marina, debido a que su personal estaba ocu-
pado en otros proyectos del puerto. Yla World Airways quería
desarrollar un programa general de construcción antes de queéste se asentara sobre normas específicas para el hangar. Di-
chas demoras desagradaron a la ADE, así como las demoras ad-
ministrativas de la agencia decepcionaron al puerto.
4. Subordinación a otras entidades que no ven la urgencia del
proyecto. Durante la implementación de un programa, puede
recurrirse a otras personas u organizaciones que tengan expe-
riencia y autoridad jurisdiccional, pero que no vean la urgencia
del programa general. En esta categoría podría incluirse a los
ingenieros consultores que diseñan los planos para los benefi-
ciarios locales, así como al Departamento del Trabajo, cuyo
asentamiento fue necesario para llevar a cabo el programa de
capacitación de la línea aérea, conforme a la Sección 241 de laMDTA.
5. Diferencias de opinión sobre la jefatura y las funciones
propias de la organización. Los participantes que convienen en
las metas deun programa pueden, sin embargo, discrepar enlo
que respecta a las personas o las unidades organizacionales que
deben dirigir los programas. Los miembros de las divisiones
funcionales de la ADE se resintieron por la posición especial
acordada a la misión especial de Bradford en Oakland, así que
después de la partida de Foley y Bradford, todo el Proyecto
Oakland fue tratado con menos apremio. Tanto el secretario de
Comercio Connor, como Ross Davis, sucesor de Foley, conside-
raron que el Proyecto de Oakland era un proyecto personal de
Foley; no compartieron el entusiasmo de éste por un impulso
dramático dela ADE en zonas urbanas. Los funcionarios regio-
nales de laADE, perturbados por la relación directa establecidaentre Oakland yWashingt9n, trataron de convencer a los repre-
sentantes de Oakland de que encauzaran las solicitudes de fi-
nanciamiento hacia la oficina regional situada en Seattle. Las
diferencias ocasionadas por el liderato del programa dieron pie
a nuevas razones que justificaban la demora.
6. Diferencias legales y de procedimiento. Alexponer las frus-
traciones experimentadas durante los primeros días de imple-
mentación del programa de obras públicas, un miembro de la
misión especial de la ADE hizo notar que
...Había toda clase decosas técnicas que tenían que resolverse.
El tema delempleo se presentó después. Había también varias pre-guntas que hacer acerca de la política de la ADE: cómo hay que tra-
tar esas cosas; hasta dónde llegaría la intromisión de la ADE enese
aspecto. En septiembre, octubre y noviembre de 1966 hubo una
hostilidad manifiesta entre la ADE y el puerto sobre asuntos de la
construcción, por ejemplo la calidad del relleno del terreno ... En
cada punto, el puerto y la ADE esgrimían sus propias opiniones téc-
nicas. Había un endurecimiento. pero no sobre los temas debidos.
Sepeleaban por el relleno del terreno, pero habrían debido preocu-
parse por el empleo.
Por más razonable que parezca, el hecho de aceptar este punto
de vista depende de la intensidad de nuestro interés por elem-
pleo. Otra persona situada en otro lugar, con laresponsabilidad de proteger lavida y la navegación en la bahía, semostraría au-
ténticamente preocupada por la clase de los materiales que se
vierten en ella.Lomismo puede decirse del interés de la Armada
por reducir riesgos para sus aviones. Aunque es fácil desdeñar
estas preocupaciones, la caída de un avión, o un escándalo por
una mayor contaminación de la bahía causaría una severa re-
primenda a los funcionarios responsables. Así,nadie aceptaría
el argumento de que lo primordial unos cuantos años antesi tí l i it i t
necesario para obligar a otros participantes a impulsar el pro-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 56/117
consistía en crear empleos para grupos minoritarios, constru-yendo algo. Una manera paralela de enfocar el mismo problemaes decir que el conflicto interno de las organizaciones gubema-mentales superiores, como lajefatura de contadores dedicados ainvestigar la legalidad de los egresos, ylas organizaciones de lí-nea que tienen responsabilidades directas de operación, ten-dría que ser resuelto en este caso. Son importantes y posibleslos ajustes que se hagan entre las dos perspectivas, pero tieneque quedar un residuo esencial del conflicto. Después de todo,la finalidad de las organizaciones superiores, ya se refiera al
personal, a la contabilidad o a lo que sea, estriba precisamenteen comprobar la conducta de los funcionarios de línea.
Los detalles técnicos de rellenar el terreno y el financia-miento provisional paralizaron el proyecto de la Terminal de laMarina. En el verano de 1969, las licitaciones para el rellenoy el dragado en el proyecto de la terminal fueron postergadas por el abogado del puerto, por causa de complicaciones legales.En ninguno de estos casos hubo desacuerdo respecto a la meta
básica del programa, consistente en proporcionar empleos alas minorías; aun así, las complicaciones legales y de procedi-miento ocasionaron retrasos.
Aunque el interés de algunos participantes en el proyectoera superficial, pues no expresaban acuerdo ni desacuerdo consus metas esenciales, sí estaban capacitados para detener la im-
plementación si consideraban que se estaban perjudicando susintereses. Por tanto, la Oficina de la Contaduría General de losEstados Unidos cuestionó las políticas de subvenciones y prés-tamos aplicados a los proyectos del puerto, en tanto que la Ma-rina presentaba quejas sobre el efecto de la terminal sobre losvuelos de jets de la cercana estación aeronaval. Es posible queestas agencias hayan soslayado su interés en el proyecto, pero sus
inquietudes tenían que ser consideradas seriamente por la Ad-ministración de Desarrollo Económico.
7. Acuerdo junto con falta de poder. Algunos participantes pueden convenir entusiásticamente con una propuesta, perotal vez carezcan de recursos suficientes para apoyada. El alcal-de Reading defendió firmemente el programa de la ADEparacrear empleos, pero no tuvo el poder político y administrativo
grama. Igualmente, los miembros de la comunidad negra deOakland con quienes se habían puesto en contacto los funcio-narios de la ADE,apoyaban fuertemente el programa, pero noejercían ninguna función efectiva. Eran los beneficiarios delinterés de la ADE,pero el puerto era el designado para recibir losfondos para el proyecto. Tanto el alcalde como los líderes ne-
gros apoyaban a la ADE,pero su falta de recursos los volvió enti-dades periféricas con relación al programa. Aunque había tendi-do a la sencillez, con eltiempo el programa de la ADEinvolucró aun grupo numeroso de diversos participantes. Ysi bien ningu-no manifestó estar en desacuerdo con la meta de crear empleos
para miembros de grupos minoritarios mediante la construc-ción de obras públicas, ello no significa que estuvieran dispues-tos a tomar las decisiones, hacer las aclaraciones y llegar a losacuerdos necesarios para acelerar el programa.
LAMULTIPLICIDADDEDECISIONESY LAMENGUANTE
PROBABILIDADDEÉXITODELPROGRAMA
Altrazar la ruta de las decisiones y de los puntos de aclaraciónincluidos en el Programa de Obras Públicas de la ADE,volvere-mos a sobresimplificar la situación. En vez de tratar de aislar cada decisión en la cual un participante importante tuvo unaoportunidad perceptible de hacer elecciones, nos concentrare-mos en aquellos puntos de decisión principales que determina-ron el curso del programa, o que tuvieron que aprobarse paraque éste continuase (asimismo, supondremos, pero sólo mo-mentáneamente, que cada punto de decisión es independientede los otros). El cuadro V.l, que contiene estos puntos de de-
cisión e identifica a los participantes implicados en cada unode ellos, muestra 1 < ; \ manera en que la multiplicidad de participan-tes y perspectivas se combinó para producir una formidable ca-rrera de obstáculos para el programa. Cuando un programa de-
pende de tantos protagonistas, son muchas las posibilidades deque surjan desacuerdos y demoras.
Podemos observar que, al arrancar el Programa de Oakland y determinar su curso inicial, la ADE,tuvo que adoptar varias
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 57/117
CUADRO V.2. Puntos de decisión y aclaraciones necesarias para completar el programa de obras públicas
de la AD E
Puntos de decisión
1. Decisión para implicar a la ADE
en ciudades (otoño de 1965)
2. Selección de Oakland como
la ciudad destinada a llevar a cabo
el experimento (invíerno de 1965)
3. Se pasa por alto al alcalde y se buscan primeros contactos en la
comunidad negra de Oakland
(diciembre de 1965)
4. Selección para formar la misión
especial como entidad
organizacional para el proyecto
(enero de 1966)
5. Selección de un plan de empleocomo mecanismo para canalizar
trabajos hacia los desempleado s
(febrero de 1966)
Participantes
Eugene Foley
Total acumulativo
de acuerdos
Bradford-Foley, misión especialde la ADE
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 58/117
Puntos de decisión
10. Acuerdo requerido sobre rellenar
la bahía para la construcción
de la Terminal de la Marina
(verano-otoño 1966)
11. Acuerdo requerido sobre
el arreglo de financiamiento
provisional (verano-otoño 1966)
12. Negociación de las condicionesimpuestas al contrato
de arrendamiento del hangar
de la World Airways
13. Decisión sobre la solicitud del
puerto para reubicar el proyecto
de la terminal (enero-abril 1967)
14. Aprobación de los contratos
con el A I I para la terminal y el
hangar (marzo-junio 1967)
15. Aprobación de los planos
preliminares para la terminal
ParticipantesADE Washington, ADE, consultor,
Puerto de Oakland
Total acumulativo
de acuerdos
ADE Washington, Puerto
de Oakland
Puerto de Oakland,World Airways
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 59/117
Puntos de decisión
21. Decisión contraria a un
financiamiento excedente para
el hangar; insistencia en imponer
condiciones de empleo más
estrictas al puerto ya la World
Airways (febrero 1969)
22. Permiso para celebrar contratosrespecto al dragado y al relleno
en la terminal Uunio 1969)
23. Acuerdo sobre el plan de empleo
del Puerto de Oakland y respecto
al funcionario encargado
de la igualdad en los empleos
(enero-septiembre 1969)
24. Decisión de oponerse al
restaurante giratorio en la
terminal, y convenio para solicitar
financiamiento para el excedente en
el costo de laconstrucción (otoño 1969)
Participantes
ADE Washington (Davis)
Total acumulativode acuerdos
Puerto de Oakland, ADE
Washington
ADE Washington, Puerto
de Oakland
ADE Washington
(Podesta-Sinnott), Puerto
deOakland
decisiones importantes: en primer lugar, introducirse en el
campo urbano; seleccionar a Oakland como sitio para efectuarCUADRO V.3. Resulta dudosa la consumación
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 60/117
campo urbano; seleccionar a Oakland como sitio para efectuar
su experimento urbano; escoger el puerto como principal agen-
cia destinataria dentro de la ciudad, y vincular la construcción
con los trabajos mediante un plan de empleo. Algunas de estas
primeras decisiones se discutieron acaloradamente en la pro-
pia agencia. Por ejemplo, hubo quienes opinaron que la ADE,
dependencia originalmente rural, no tenía nada que hacer enlas ciudades. Y varios funcionarios de la agencia expresaron
dudas acerca deun plan deempleo que, según ellos, sería difícil
de poner en práctica. Más allá de estas difíciles decisiones ini-
ciales, a lo largo de la ruta fueron muchos los puntos que había
que aclarar, si se decidía continuar el programa. Algunas de es-
tas aclaraciones eran de la incumbencia de la ADE: aprobación
de los planos y de los contratos de obras arquitectónicas delos
beneficiarios; autorización de anticipo s de fondos y reglas res-
pecto a cambios en el diseño del proyecto. Otros puntos de de-
cisión requirieron deaclaraciones favorablespor parte de nume-
rosos participantes, distintos de la ADE. Porejemplo,el programa
de capacitación propuesto para mecánicos de la aerolínea nece-sitó ser aprobado por nueve organizaciones federales, estatales y
locales.
Afin de tener a la mano todos los puntos dedecisión, elpro-
grama requirió que una vasta gama de participantes se dedica-
ra a hacer docenas de compensaciones. En situaciones de gran
controversia y de antagonismo mutuo, es muy reducida la pro-
babilidad de que estos esfuerzos resulten favorables o de que se
lleven a cabo en un tiempo razonable. Pero nosotros hemos
descartado esta especie de drama; en su lugar, supondremos lo
mejor. Deliberadamente, nos desviaremos hacia el lado en el
cual sepresume que hay más acuerdo y mejor voluntad delo que
realmente podría haber. Cargaremos los dados en favor de
que el programa continúe. Así pues, supongamos que ponemos
las probabilidades en favor deque cada participante emprenda
una acción favorable en cada punto de decisión. Podemos
probar con cuatro: 80,90,95 y 99% (los cómputos correspon-
dientes a cada una de estas probabilidades se sintetizan en el
cuadro V.3). Comoquiera que se considere, la probabilidad últi-
ma de éxito es muy baja.
del programa, a menos que sea extremadamente
alto el nivel de acuerdo entre los participantes
Porcentaje
de la probabilidad
de acuerdo
en cada puntode compensación
Probabilidad de éxito
después de 70. compensaciones
Núm. de acuerdos
que reducen la
probabilidad a menos del 50%
0.000000125
0.000644
0.00395
0.489
Concluimos diciendo que la probabilidad de acuerdo por
parte de cada participante en cada punto de decisión debe ser
excesivamente grande para que haya si acaso una oportunidad deque un programa setermine. En el supuesto de que laproba-
bilidad sea de 80%(véase el cuadro V.3), las oportunidades de
que se termine el programa son de un poco más de una enun
millón después de haberse llegado a 70 acuerdos, y disminuye a
menos de la mitad después de cuatro. Si la probabilidad de
acuerdo sube a un saludable 90%, aumentamos la última pro-
babilidad de lograr una aprobación a un poco más de seis en
diez mil, y permitimos siete acuerdos antes de que caiga abajo
de la marca de 50-50. El hecho de avanzar hacia el 95% hace
que aumente la probabilidad de consumación a casi cuatro en
un millar, y permite 14movimientos antes de que las ocasiones
de que fracase superen a sus oportunidades de éxito. Tenemosque avanzar hasta el 99% de coincidencia (10 que significa llegar
a una situación extraordinaria, mediante algún cálculo) para
permitir que se alcancen 68 acuerdos más convenientes, antes
deque la probabilidad de consumación disminuya a menos dela
marca media. Resulta evidente que los datos que consignamos
no sólo se interpretan por sí mismos, sino que requieren ser aclarados por nuestra parte.
Entre los letrados en la materia no hay ningún acuerdo so- contra representantes gubernamentales. Pero si suponemos lo
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 61/117
bre lo que constituye un punto de decisión, por loque nos sería
difícil demostrar que hay una cantidad precisa enel caso que es-
tudiamos. Sinninguna dificultad podríamos duplicar el número
de puntos de decisión si reducimos nuestro juicio sobre lo que
constituye un acto separable. Reduciendo a 30 el número de
puntos de decisión, hemos procurado caer del lado que presenta
menos puntos, en lugar del que tiene más. Pero la extensión de
cada uno de ellos debe aumentar con el número de tomadores
individuales dedecisiones que intervengan. Lamejor defensa de
nuestro procedimiento, burdo pero eficaz, estriba en que los re-
sultados no son afectados en gran manera por algún cambio
(salvolos muy drásticos y apenas concebibles) que ocurra en el
número departicipantes cuyoconsentimiento seapreciso enva-
rias decisiones. Unamirada al cuadro V.3 nos mostrará que, has-
ta que se pasa del 95%de probabilidades de acuerdo sobre cada
tema, se necesitan únicamente 14 aclaraciones por separado
para que laprobabilidad de consumación se reduzca a menos de
un valor deigualación. Sihay una probabilidad de95%decontar
con una acción favorable encada punto, y suponemos la presen-
cia de sólo 30 puntos de aclaración -número ilusoriamente
bajo-, laprobabilidad de que un programa alcance un éxitoto-
tal es de 0.215. Si hay 50de esos puntos, la probabilidad global
de consumación decae apenas 1por ciento.
Si hacemos hincapié en los conflictos que tienen lugar den-
tro de cada uno delos participantes principales, así como entre
ellos, con facilidad podremos disminuir las probabilidades de
acuerdo. Obien, podríamos determinar el grado de urgencia y
de compromiso manifestado por cada participante, y reducir o
aumentar su probabilidad de acción favorable sobre esa base.
Pero ya hemos decidido conceder el beneficio de la duda al éxi-
to del programa.
La altísima probabilidad de acuerdo que se requiere en
cada etapa para producir una moderada probabilidad de llegar
a una consumación satisfactoria hace innecesario conocer la
probabilidad precisa de una etapa particular. Indudablemente,
con el tiempo, las probabilidades varían de un participante a
otro y deuna organización a otra, así como dentro de la misma
organización y entre niveles diferentes del gobierno y privados
mejor -y el 99%para todos y cada uno de los puntos deaclara-
ción parece lo más cerca que podamos avanzar si no negamos
la existencia del problema-, las probabilidades siguen estando
contra la implementación del programa.
Los problemas computacionales son semejantes a los polí-
ticos. ¿Consideramos a cada participante como una entidad se-
parada, de manera que la probabilidad final sea sencillamente
el producto de las probabilidades de una acción favorable de
cada participante? ¿Odemostramos quelas probabilidades seen-
lazan, en tal forma que una respuesta favorable dada en un
tiempo inicial hace aumentar la probabilidad de que seproduz-
ca una respuesta análoga en un tiempo posterior? En lenguaje
político (así como estadístico), estamos preguntando si cada
participante es independiente. ¿Hasta qué grado es controlada
esta cuestión por otros, y hasta qué punto esto puede determinar
su propia posición? Dando vuelta a la cuestión, preguntamos
cuán poderoso es el participante con relación a un tema. Una
acción emprendida por su parte ¿hace aumentar la probabili-
dad deque otros convengan enloque podrían no estar deacuer-
do? Dentro delcontexto estadunidense de poder fragmentado, la
posición más razonable se refiere ciertamente a la independen-
cia de los participantes. En ese caso, la probabilidad deéxitofi-
nal es terriblemente baja. Si modificamos dicha posición para
decir que seespera que losparticipantes federales obedezcan el
liderato delaADE, de modo que se acreciente la probabilidad de
éxitoen elcampofederal, nos queda aún elhecho evidentedeque
ellono puede controlar a organismos locales. Anivel federal, el
resultado más probable es que, observando que no hay ninguna
razón de peso para oponerse a la posición central de laADE, los
otros participantes deduzcan los grados de oposición mediante
demoras. Si expresamos que no sólo hay una pugna sino unin-
terés común entre los participantes federales y locales, como
notoriamente eselcaso,seríadeesperar una demora, asícomoun
ejemplo mixto de acuerdo, dependiendo de cómo vieran ellos
sus intereses de un periodo a otro. En consecuencia, podemos
argüir que, si bien el acuerdo final es posible, pero enmodo al-
guno seguro, probablemente es inevitable una demora conside-rable.
Nuestra expectativa normal consiste en que los nuevos pro-
gramas no llegarán siquiera a "despegar", y que, en el mejor deFIGURA V.l. La ADE aspira a dos metas y establece
dos cursos de decisiones
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 62/117
gramas no llegarán siquiera a despegar , y que, en el mejor de
los casos, pasará muchísimo tiempo antes de que empiecen. En
este mundo, las cartas están marcadas contra la realización de
las cosas, y senecesitaun esfuerzoenorme para hacer que semue-
van. Lo notable es que nuevos programas funcionen siquiera.
Naturalmente, las decisiones que se tomen respecto a los
programas no siempre consisten en responder claramente "sí"o "no". Los programas pueden demorarse, modificarse, reducir-
se de acuerdo con una escala y adaptarse o distorsionarse de
otro modo para ajustarse a su medio. Las posibilidades se calcu-
larán en breve. Deseamos ahora profundizar en los aconteci-
mientos inesperados que reducen aún más las escasas perspecti-
vas de implementación de un programa.
Hemos visto que, dado el gran número depuntos de aclara-
ción ocupados por diversos participantes independientes, es
poca la probabilidad de que un programa alcance sus metas.
Pero en el caso del programa de la ADE, no podemos sencilla-
mente calcular la probabilidad de éxito general basándonos en
la sola consideración del producto de las probabilidades de de-cisión individuales, ya que este programa no debe verse como
una fila de luces verdes que, en su totalidad, tienen que seguir
encendidas para que el programa logre sus objetivos. La situa-
ción se ha complicado más. Si a un programa se le dotara de
metas múltiples, se incluirían dos filas distintivas de decisio-
nes; y dentro de cada una de éstas deberíamos establecer una
distinción entre las decisiones que orientan el proyecto en di-
rección de su meta y las que fueron desviaciones no planeadas
del curso.
dos cursos de decisiones
_ _ _ c _ o _ n _ s t_ ru _ c c _ ió _ n _ c _ o _ m _ P I_ e t_ a _ _ ~I"
se ponían a su disposición. Tal como lo imaginó la ADE, la figu-
ra V.l muestra las dos secuencias de decisiones que conduciríana las metas deseadas. Aunque, en un principio, la agencia fede-
ral insistió en que las dos metas debían alcanzarsejuntas, siem-
pre hubo laposibilidad de que una fila de acciones se completa-
ra mientras la otra seestancaba. Es cierto que elplan de empleo
trataba de ligar la construcción de obras con la creación deem-
pleos al nivel local, pero un elemento crucial de la estrategia de
empleo -el programa de capacitación- era, en su organiza-
En lugar de avanzar en línea recta hacia una meta, el programa
de la ADE aspiró a alcanzar dos objetivos importantes: la cons-
trucción de obras públicas yla creación de empleos para los de-
sempleados crónicos. En relación con este último objetivo, la
ADE propuso implementar un programa de capacitación, con
objeto de que dichos desempleados ocuparan los empleos que
FIGURA V.2. Acontecimientos inesperados ocasionan
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 63/117
divergencias en los cursos de decisión
=-=:::::::::=~,-----
Objeciones de la Armada
Elaboración de gufas
de empleo más estrictas
para el puerto
y la World Airways
{
mente el número de decisiones y de aclaraciones requeridos. La
figura V.l, muestra los grupos de decisiones que, según confiaba
l d i í l ió d l P l fi
ción, sumamente distinto del resto de las actividades del pro-
grama. Los participantes federales y estatales en ese programa
D t t d l T b j D t t d E l
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 64/117
la ADE, conducirían a la consumación del programa. Pero la fi-
gura V.2 muestra la manera en que un gran número de decisiones
y de puntos de aclaración inesperados llegó, con el tiempo, a
formar parte de la implementación del proyecto. Estas decisio-
nes no habían intervenido en los planes de la ADE, y no contri-
buyeron a que el programa avanzara directamente a alcanzar
sus objetivos. No obstante, fueron necesarias para despejar blo-queos y favorecer la continuación del programa. El resultado
fue que en cada curso de decisiones surgieran numerosas des-
viaciones no esperadas por los patrocinadores del programa.
Como puede verse, los cursos de las decisiones requeridas se
caracterizaron pronto por la aparición de más elementos que los
esperados: eran todo, menos líneas rectas que conducían direc-
tamente a las metas. En un caso-el no implementar elprograma
de capacitación de la aerolínea-, una vía de decisión se había
roto en un punto crucial. Además, el diagrama de la figuraV.2no
muestra -y no puede mostrar- un programa terminado. Mien-
tras se escribe esta obra, no se ha terminado aún la construcción
del proyecto, y el proceso creador de empleos yace en el futuro.
Es indudable que vendrán más sorpresas. .Lo que parecía un programa relativamente sencillo, urgen-
te y directo -que implicaba a una agencia federal, una ciudad
y un compromiso de financiamiento considerable e inmedia-
to- incluyó finalmente a numerosos participantes diversos, y
una serie de decisiones mucho más larga de la planeada. En rea-
lidad, ninguno de los participantes discrepó de la meta, consis-
tente en proporcionar empleos a las minorías pero sus diferentes
perspectivas y sentidos de urgencia dificultaron que un acuer-
do explícito general se tradujera en una efectiva implementa-
ción de políticas. No sólo fue la dirección de sus decisiones
-favorable o desfavorable- sino la orientación de los partici- pantes en cuanto al ritmo -rápido o lento, urgente o apático--la
que determinó las perspectivas de terminación. Cuando tantas
decisiones futuras dependen de acciones pasadas, la demora
puede equivaler a una derrota en esencia.
-HEW, Departamento del Trabajo, Departamento de Empleo
en Califomia- no intervinieron en otros elementos de la ges-
tión de la ADE en Oakland, y no tenían ninguna razón para com-
partir su urgencia. Por lo tanto, en 1968, cuando se demostró
que era imposible llevar a cabo el programa de capacitación, se
perdió un elemento clavedela estrategia deempleo. Aun si el han-
gar de la aerolínea se hubiera terminado según el plan, y si la
World Airways hubiera creado empleos, aún no habría la canti-
dad de mecánicos capacitados con que la ADE había contado.
Inicialmente, la ADE había declarado que las metas de cons-
trucción y empleo irían dela mano. Pero al transcurrir eltiempo y
con el programa de capacitación estancado sin remedio, sobre la
agencia se ejerció presión para que se concentrara en completar
la construcción. Después de todo, una dependencia que gasta di-
nero tiene que movilizar elnumerario y los proyectos de construc-
ción, o el Congreso podrá sospechar que no está haciendo su tra-
bajo. "Al pasar el tiempo", un funcionario de la ADE hizo notar
que: "cada vez se le dificulta más a la ADE tomar una línea dura.
Trabajamos bajo presión para concluir el proyecto, y empieza a parecer mal para la agencia si no termina. De modo que hay una
gran tentación de (decimos) que suavicemos nuestras deman-
das". Con los contratiempos ocasionados por las crecientes demo-
ras, siempre hubo la posibilidad de que ocurriera un desplaza-
miento de la meta, y que el objetivo referente a la construcción se
mantuviera sólopara la ADE. Pero bajo la dirección de Ross Davis,
y después la de Robert Podesta, la agencia reafirmó enérgicamen-
te su determinación de alcanzar ambas metas: la construcción y el
empleo. Se conservaban así los dos objetivos iniciales, pero tam-
bién la necesidad de completar dos filas separadas de decisiones,
cada una de las cuales se prolongaba más todo el tiempo.
No sólo fue necesario completar dos cursos de decisión para así
alcanzar las metas del programa de la ADE, sino que, dentro de
cada curso, la agencia descubrió que aumentaba constante-
en alguna parte, en algún momento. Tiene que haberse logrado
una adaptación al medio ambiente; pues de otro modo, por de-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 65/117
p ; p , p
finición, los programas no existirían. No se necesita ningún ge-
nio para hacer que los programas funcionen, si no ponemos
atención al tiempo que tomarán, a la suma que requerirán, así
como a la frecuencia con que se modificarán los objetivos o al
hecho de que se modifiquen los medios para obtenerlos. En
realidad, laleydepromedios sugiere que si se aportan suficientesiniciativas nuevas, algunas de ellas deben desarrollarse ypros-
perar en el mundo, aunque el adulto imperfecto muestre poco
parecido con el niño prometedor. Nuestra labor no es imprimir
romanticismo al pasado, sino aprender de sus errores para me- jorar el futuro.
Una razón esencial de la supervivencia de los programas es
que se adaptan a su medio durante lapsos prolongados. Alcon-
siderar la secuencia de acontecimientos necesarios para imple-
mentar un programa, suponemos que al llegar a cada punto de
decisión losdiversos participantes emiten un simple "sí"o "no".
Si bien esta suposición puede ser cierta en el caso de algunos
participantes durante un tiempo, sería raro que todos ellos ac-tuaran así durante todo eltiempo. Por muy útil que pueda ser la
suposición de "todo o nada" para iniciar el análisis, sin duda es
insuficiente para concluir nuestra exposición. Sabemos que un
acto negativo cometido por un participante en un punto dede-
cisión no necesariamente significa que el programa esté muer-
to; se le puede resucitar retrocediendo después ybuscando una
opinión favorable. Los vetos no son permanentes, sino condi-
cionales. Esposible concertar arreglos, celebrar pactos o debi-
litar resistencias. El precio del acuerdo final consiste en demo-
rar o modificar el programa existente. Veamos qué pasa con
nuestro análisis original cuando modificamos nuestra suposi-
ción a findeincluir la posibilidad de numerosos intentos deob-tener aclaraciones por parte de participantes cuya venia es ne-cesaria para el avance del programa.
Para nuestros fines de momento, cada relación que se enta-
bla entre un participante y un programa puede caracterizarse a
10 largo de tres dimensiones. ¿Cuál es la dirección de su prefe-
rencia sobre el asunto en cuestión? ¿Está en pro o en contra?
¿Conqué intensidad se manifiesta su preferencia? ¿Lededicala
Las expectativas acerca de nuevos programas gubernamentales
violan la experiencia común cotidiana. Quienes normalmente
manejan objetos inanimados, como programas de computado-
ra, jamás esperarían que un nuevo programa funcionara la pri-
mera vez.La "eliminacióndeobstáculos"no esalgoque sehaga enla rara ocasión en que las cosas salen mal, sino que es parte es-
perada de hacer que funcione un programa. Es posible que se
requieran numerosas repeticiones, que se extiendan durante pro-
longados periodos, antes de que el nuevo programa opere ade-
cuadamente. El hombre prudente, que sabe que la implemen-
tación de un programa exigirá una inversión considerable
aunque no pueda precisar de antemano el monto, hará por lo
menos un cálculo informal para ver si los probables beneficios
merecen el esfuerzo. No le sorprendería la no implementación
del programa enun plazo breve, trabajando bajo presión. Tiene
simplemente la fortuna de que, al estar oculto a la vista del pú-
blico, es menos probable que se le reprenda por la falta de re-sultados. Yla máquina no hablará para quejarse de cómo ese
hombre abusó de ella.
Las apariencias engañan. Mirando hacia atrás, al mismísi-
mo conjunto de programas gubernamentales que están en ope-
ración, concluimos que deben haberse implementado. ¿Por
qué, entonces, no será implementado nuestro nuevoprograma,
cuando tantos otros que ocupan el paisaje han tenido un éxito
evidente? Es fácil olvidar sus difiCultades iniciales (tal vez
porque nunca las supimos). Se han perdido de vista los años de
tanteos que condujeron al actual estado de operación. Laenor-
me cantidad de recursos que pueden haberse gastado en dife-
rentes alternativas antes de dar con la buena, forma parte
conveniente dela historia pasada, dela cual no somos responsa-
bles. Unos programas que se iniciaron para alcanzar una serie
de objetivos concluyeron alcanzando otro, al cual, mucho des-
pués, damos crédito indebido por su implementación. Todo lo
que existe debe tener ciertas consecuencias, aunque no sean las
previstas, aun sino son las previstas, o si nadie está muy seguro
de cuáles son. Es probable que cada programa afecte a alguien,
se hagan concesiones esenciales. El participante 4 puede ser ca-
paz de extender una demora máxima hasta ser un fin perma-
t
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 66/117
nente.
La demora es, por tanto, una función del número de puntos
de decisión, el número de participantes en cada punto y la in-
tensidad de sus preferencias. El programa de empleo de laADE
no se caracterizó por la presencia de participantes con puntos
de vista intensamente negativos, por tanto no fue forzado otra
vez a los comienzos, pero fue notable por la presencia de núme-
ros sustanciales de demora de tipo menor y moderado. Ya que
ninguna demora sobresale de otras excesivamente, la combina-
ción de demoras ha evitado al programa desarrollar todo su po-tencial.
Supongamos que durante los años que abarcó nuestro estu-
dio, o sea de 1966 a 1970, no hubo participantes que impusie-
ran demoras máximas, y que los otros tres tipos de demora fueran
divididos equitativamente entre los protagonistas, a quienes se
les hubiera pedido en una u otra ocasión, manifestar su asenti-
miento. ¿Cuán prolongada sería la demora? Cada aclaración
entraña un potencial de demora, así que debemos contar la pre-
sencia de cada participante no como una vez, sino como cada vez
que se necesite su consentimiento. Por tanto, comenzamos con
70 aclaraciones. De modo arbitrario, asignamos un valor de una
semana a cada demora mínima, de tres semanas a una demora
menor y de seis semanas a una demora moderada, y llegamos así
a un total de 233 semanas y un tercio. (Una semana por cada de-
mora mínima es igual a 23-1/3; tres semanas por cada demora
menor da 70, y seis por cada demora moderada da un total de
140.) Conforme a estas suposiciones, la demora resultaría hasta
hoy de cuatro años y medio, aproximadamente, lo cual no está le-
jos del blanco.
Ahora bien, esperemos un momento. Aún no hemos consi-
derado dos aspectos de situaciones reales que afectan la demo-ra. Es posible que, durante el mismo periodo, se pidan varias
aclaraciones, lo cual reducirá la demora total implicada. Cada
punto de decisión puede aceptar simultáneamente varias acla-
raciones, por lo que, dada por sentada esta suposición, el nú-
mero apropiado no sería el de las 70 aclaraciones, sino el de los
30 puntos de decisión. Empero, también se da el caso de que la
Positiva 1.Demora mínima,
sin negociación
Negativa 4. Demora máxima,
negociaciónrespecto
a puntos esenciales
2. Demora menor,
sin negociación
3. Demora moderada,
negociaciónrespecto
a puntos periféricos
atención necesaria, o es relativamente indiferente? ¿ Qué recur-
sos puede aportar para apoyar el resultado? ¿Es el participante
fuerte o débil? Por lo tocante a los recursos, en realidad no que-
remos saber cuán fuerte es un participante en general, sino qué
proporción de sus recursos está dispuesto a comprometer para
influir sobre un programa determinado. Por lo tanto, sin me-
noscabo del análisis, podemos suponer, simplificando, que el em-
pleo de recursos es función directa de la intensidad de la prefe-
rencia. Quienes manifiesten una gran intensidad agotarán susrecursos para controlar los resultados, lo que no harán quienes
muestren poca intensidad. El cuadro VA ilustra cómo los diferen-
tes tipos de relaciones entre estos participantes dan lugar a di-
versas demoras.
El participante 1muestra una dirección positiva y una gran
intensidad. Da su consentimiento ill.mediatamente. Al partici-
pante 2 le gusta el programa, pero sin que signifique mucho
para él. Tendrá que esperar su tumo en su escritorio, pero él ac-
tuará afirmativamente después que ocurra una demora en el pro-
ceso. Aunque el participante 3 evalúa negativamente el progra-
ma (o la parte que le afecta), no está sumamente interesado en
él. Cabe esperar una demora moderada y, mientras ésta trans-curre, él negocia con los directores sobre aspectos periféricos del
programa. Cuando está satisfecho, o se le ha ganado de algún
otro modo, el programa puede continuar hacia la etapa siguien-
te. Una demora máxima se presenta cuando un participante es
negativo y se empeña en 1 0 que ha opinado. Según los recursos
de que disponga, tratará de bloquear el programa, a menos que
falta de un primer acuerdo no seanecesariamente fatal para un
programa, ya que las partes pueden intentado (y, de hecho, loI
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 67/117
intentan) de nuevo. Tenemos que considerar la necesidad de
participar en varias rondas de negociaciones, si no con todos
los participantes, por lo menos con los que se inclinan hacia
una demora moderada.He aquí cómo serán nuestros cálculos si tenemos encuenta
estos dos nuevos factores: las aclaraciones simultáneas y lasmúltiples negociaciones repetidas. Nuestro número de partida
está integrado por 30puntos de decisión. También en este caso,
asignamos una semana a una demora mínima, tres semanas a
una demora menor y seis semanas a una demora discreta. Por
tanto, la demora mínima sería de diez semanas, y de treinta la
menor, a medida que seprocurara y al mismo tiempo selograra
el asentimiento de muchos participantes. Pero ahora debemos
considerar que, por ejemplo, senecesitarán tres series de nego-
ciaciones por cada uno de los 10participantes de demoras dis-
cretas, lo cual hace que, por su parte, haya una demora de 180
semanas (es decir, 10 tiempos de participantes por seis sema-
nas de veces de demoras por tres rondas de negociaciones acada vez). La demora total es de 220 semanas, lo que significa
pocos meses más de cuatro años.
Cualquiera puede jugar a este juego de números y hacer
que los totales resulten como lo desee. Nosotros no damos (y el
lector tampoco debe dar) crédito a estas cifras específicas. Cree-
mos que hemos asignado muy poco tiempo a cada tipo de
demora, ya que preferimos desviamos hacia el lado conserva-
dor. La demora total de alrededor de cuatro años es demasiado
pequeña, posiblemente porque nadie, por favorablemente in-
clinado que esté, puede adoptar en realidad una decisión en
una sola semana. Otal vez hayamos descubierto algo acerca de
la dedicación que caracterizó a los funcionarios de la ADE para
acelerar la marcha de este programa lo mejor que pudieron.
Sin embargo, hemos ilustrado las clases de variables que se
debieron introducir en las teorías que pretenden explicar la de-
mora de los programas gubemamentales.Ahora estamos capacitados a complicar más el análisis re-
introduciendo la variable recursos. Podemos omitir la mayor
parte de las relaciones que aparecen en la figura V.3, por haber-
IDirección I Recursos Demora
•• mínima
Demora máxima
Poca Débil _________________________ •••••.Demora
menor
las considerado previamente. Por ejemplo, los participantes
que muestran una dirección positiva, gran intensidad y fortale-
za de recursos, causan una demora mínima, y quienes poseen
las características opuestas causan la obstrucción máxima. Los
participantes caracterizados por tener la dirección negativa,
gran intensidad y pocos recursos podrían ser interesantes, pe-
ro ninguno de ellos apareció en nuestro estudio: por ello, desea-
mos concentramos en los que muestran una actitud favorable
al programa, grandes recursos que podrían comprometerse uoponerse a aquél, pero poca intensidad. En estacategoríapueden
haberse inc!uido varios de los patrones de minorías a quienes
simpatizó la idea deempleo para personas de grupos minorita-
rios -o que por lo menos evaluaron la perspectiva de un fi-
nanciamiento a bajo costo-, pero sin comprometerse intensa-
mente. Es seguro que, dehaberse opuesto desde el principio no
sehabría involucrado. Empero, tan pronto como decidieron to-
mar parte, decayósu entusiasmo. Otra manera de exponedo se-
ría decir que hemos localizado el problema esencial dela políti-
ca o plan deacción: cómo ofrecer incentivos para cambiar una
situación de poca intensidad a una de gran intensidad o, más
precisamente, cómo mantener una gran intensidad positiva du-
rante demoras prolongadas. Hemos tratado la intensidad como
constante. Sin embargo, para todos los participantes, excepto
para los más dedicados, es una variable. Cuanto más largas
sean las demoras, más tiempo habrá para que la intensidad de-
caiga.
Este argumento puede exponerse gráficamente. Tal como
la hemos concebido, la demora es función delos recursos, dela
FIGURA VA. Demora como función de la dirección del interés,
de la intensidad del interés y de la aportación de recursos
distribución del tiempo merece, aunque no reciba, la misma
atención que damos a la asignación de los recursos financieros.
Enfocándonos en la política que más nos interesa en un
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 68/117
p q
momento dado, tendemos a querer disfrazar las dimensiones
temporales delproblema que produce tantas de las dificultades
que experimentamos. Alpaso del tiempo olvidamos recordar el
sentido del tiempo que motivó la política en la cual estamos in-
teresados. Por ejemplo, no cuestionaríamos la falta de un dise-
ño experimentalmente desarrollado, si recordásemos que dicha política fue creada en unas cuantas semanas y que las decisio-
nes se tomaron en menos de 19días. El cuidado en la formula-
ción y la rapidez de la ejecución pueden ser incompatibles sies-
tos dos elementos coinciden. Es fácil olvidar el hecho de que el
sentido de urgencia manifestado por el observador puede dife-
rir del participante, y que, en realidad, los participantes pueden
diferir mucho en cuanto al tiempo y, por tanto, la importan-
cia que puedan atribuir al programa de que se trate. Debemos
preguntar si elproblema fue central o periférico. Si fue central,
también debemos saber cuántas otras cosas de gran importan-
cia tuvo que hacer el participante al mismo tiempo. Si fue pe-
riférico, queremos saber qué lugar ocupó realmente en sus
prioridades de tiempo. Aun en puntos en que los participantes
estén de acuerdo acerca de los méritos de un programa, pue-
den discrepar en lo tocante a la prioridad que cada cual está dis-
puesto a atribuirle. Multiplicar elnúmero departicipantes, darles
diversos grados de importancia, arreglar de modo diferente
sus presupuestos de tiempo establecerá un modelo típico depa-
ro y arranque, caracterizado por un pequeño paso adelante
y por una gran cantidad de demoras. Concretaremos este aná-
lisis ilustrando las diversas causas de las innumerables de-
moras que abatieron el programa de empleo de la ADE en
Oakland.
No todas las demoras carecieron de un plan, es decir, no ocu-rrieron accidentalmente; algunas fueron causadas intencional-
mente porquienes querían suspender una acción inconveniente o
retroceder y volver a fijar el desarrollo del programa. Obstruc-
ciones o paros intencionados durante el proceso se presentaron
cuando la ADE objetó el relleno de la bahía del puerto en 1966,
y cuando la agencia rechazó la solicitud del puerto de que una
Dirección
positiva
del
Interés
(apoyo)
Dirección
negativa
del interés
(oposición)
~demora
intensidad y de la dirección del interés. En virtud de que la "di-
rección", o sea, el apoyo o la oposición, es una variable dicotó-
mica, podemos trazar dos series de curvas para ilustrar sus re-
laciones con las demás fuerzas que operan en el campo. Por la
naturaleza de nuestro argumento, podríamos esperar que la for-
ma de las curvas y la separación entre ellas serían como apare-
cen en la figura VA. Por ejemplo, cuando los recursos se man-
tienen constantes, la demora disminuye y hay una intensidad
positiva de interés; cuando la intensidad se mantiene constan-
te, la demora decae y se registra a la vez un mayor compromiso
de recursos. La configuración de las curvas sugiere que hay una
ley de rendimientos decrecientes en cuanto a la aplicación de
la intensidad o del nivel de los recursos. Hay también rendimien-
tos decrecientes, graduados, en el sentido de que el aumento de
proporción de cada variable (digamos, la duplicación de los re-
cursos y dela intensidad) no afectará laproporción de la demora.
"El tiempo es dinero", reza el viejo dicho. Una expresión
equivalente modema podría ser: "Lasdemoras son oportunida-
des perdidas". Vale la pena dedicar un poco de tiempo a aplicar
más directamente nuestro modelo de demora a la experienciade la ADE en Oakland. El tiempo es un recurso que escasea, tan-
to para los hombres como para las organizaciones. Si quere-
mos saber qué quiere más un hombre, observemos cómo pasa
su tiempo. Si queremos saber qué es lo que más importa a una
organización, inscribamos en un diagrama las actividades a las
cuales dedican sus miembros su preciosa dotación de horas. La
sola firma diseñara y construyera el hangar en 1970. Las demo-
ras debidas a la redeterminación del programa fueron ordena-del negro diciendo "¡Ahora!"no son demandas irracionales ni ame-
it d d ió ú li d d El
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 69/117
ras debidas a la redeterminación del programa fueron ordena
das por la ADE, y por el nuevo gobierno republicano, para volv,er a evaluar la totalidad del Programa de Oaldand en 1969.Ademas,
el derrotero de los planes y las solicitudes de financiamiento por
conducto de la oficina regional ocasionaron demoras de proce-
dimiento; al llegar 1968,la ADE estaba tratando dehallar una fun-
ción útil para sus representantes en el campo.
Varias demoras provinieron de las diversas prioridades;
nadie las ordenó específicamente; obedecieron al hecho de que
los participantes tenían otras cosas que hacer en un tiempo.
La demora de once meses de la ADE para dar al puerto una
respuesta a su solicitud de financiamiento adicional por el
hangar reflejó la poca prioridad del Proyecto de Oaklan?
para la agencia. Hubo una racha de actividad en 1966,a ~a.cualSI-
guieron prolongados periodos de inactividad. Los part~cIpantes
no se volvieron de lleno contra el proyecto, pero teman otras
cosas que hacer. La atención del puerto y de la World Airways
estaba puesta en otras empresas comerciales; la ADE tenía cen-
tenares de proyectos de obras públicas que supervisar; y otrasdependencias federales tenían muchos proyectos referente~ al
potencial humano que aprobar y financiar. Después de lasalIda
de Foley y de Bradford, la ADE se preocupó menos por o~tener
la aprobación constante del programa de Oakland. Nadie pla-
neó estas demoras, pero de todos modos ocurrieron.
Amenudo, es difícil distinguir entre la demora de un pro-
grama y el fracaso de un programa. Si se adopta ,:na decisión
favorable, aunque sea después de un retraso de anos, ¿cuenta
este hecho como éxito o como fracaso? La respuesta depende,
en gran parte. del criterio que sustenten los patrocinadores de
un programa. En el caso del programa de la ADE en Oakland, la
rapidez se consideró esencial. Eugene Foley sostuvo elocuente-mente que la necesidad de crear trabajos era urgente, y que ha-
bía que proceder al punto. En un discurso pronunciado en 1966
dijo Foley:
¡SantoDios!¿Cuántos motines? ¿En cuántas ciudades de estepaís los
necesitamos para que se desvanezca la idea de que todos nuestros
programas destinados al ghetto son de largo plazo? ... Las voces
nazas; son un grito de desesperación. una súplica de ayuda ... El
meollo del problema es el desempleo de los negros. Los empleos
son lomás necesario enuna tierra donde la gente esjuzgada por lo
que hace... Amenos que se ofrezcan trabajos, ... trabajos dignos, con
posibilidades de hacer carrera ... todos (los demás) programas re-sultan prácticamente inútiles.4
Ala luz de este modelo superior -la creación. ahora, de traba-
jos para gente negra-, la demora constituye un fracaso. Pero
otras personas pueden afirmar razonablemente la máxima deque "Más valetarde que nunca".
En forma diferente surge el mismo problema cuando sein-
tenta determinar la probabilidad de éxito de un programa. Si
las decisiones no setoman con la misma rapidez con que sepla-
nean; si un programa tarda cinco o diez años en implementar-
se, ¿cómo podemos determinar si el programa ha tenido éxito?
Si no sabemos si 10 ha obtenido y hasta qué grado, realmente
no podremos calcular la probabilidad de alcanzar esa situación
inexistente. Por muchas razones -la existencia de cursos sepa-rados de decisiones, la constante desviación de decisiones ines-
peradas que se desprenden de cada curso, así como la dificul-
tad de saber si la demora constituye un fracaso- sería muy
difícil calcular de antemano la probabilidad de éxito deun pro-
grama, aun cuando conociéramos la probabilidad de recibir una decisión favorable en cada punto individual. Somos como
viajeros a quienes sepide que seencuentren con gente que noco-
nocen en ocasiones que ignora y en lugares cuya representa-ción en los mapas de caminos parece un laberinto.
¿Hasta qué grado nuestros descubrimientos relativos a los
problemas de implementación son aplicables a otros progra-
mas federales que incluyan localidades? El Programa de Obras
Públicas de la ADE es fundamental: casi cualquier otro que pu-
diéramos imaginar implicaría la formación de un mayor con-
flicto a causa delos propósitos finales o un mayor debate públi-
co, así como menos recursos adecuados a las finalidades que se
consideren. y otras características que mostrarán la razón del
fracaso de los programas. Por tanto, hemos afirmado que los
4 Citado en Oakland's Not For Burning, de Amory Bradford, pp. 2-3.
problemas de implementación descubiertos en el Programa de
Oakland probablemente se encuentran en otros casos que ocu-
rren en circunstancias menos favorables Por supuesto una de-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 70/117
rren en circunstancias menos favorables. Por supuesto, una de
mostración empírica sería preferible a una hipotética. Nosvemos
impedidos a este respecto ya que hemos sido incapaces de esta-
blecer una investigación apropiada. Ninguno de los intentos que
conocemos de abordar los problemas planteados por largas se-
cuencias de decisiones incluyó a múltiples participantes; cada
uno de dichos intentos dependió delo que había pasado antes, y
fue incapaz de controlar a los demás o de vaticinar la probabili-
dad de obtener resultados satisfactorios en puntos siguientes, o si-
quiera de cerciorarse de lo que serían esos puntos o adónde con-
ducirían sus ramificaciones.
Pero el Programa de Obras Públicas de la ADE no surgió ya
completo, del vacío. Fue parte del espíritu de su tiempo. Surgió
ante un fondo de características estructurales: instituciones se-
paradas (el gobiemo federal y las ciudades), cada una de ellas
fragmentada en su interior y esforzándose por participar en la
búsqueda de objetivos sociales inmediatos. Hay comparaciones
pertinentes, tanto nacionales como extranjeras, con el inmenso
golfo que se extiende entre el síndrome de propósitos excelen-tes y resultados innobles que brotan de estas condiciones.
TODO el que no aprende de la experiencia está perdido para
siempre en un mundo caótico. Repite sus errores. Ylo que es
peor, carece de los medios para navegar entre las rocas y losba- jos de lavida. Un rumbo es tan bueno o tan malo como otro. No
puede encontrarle ningún sentido a su mundo porque es inca-
paz de aprovechar sus experiencias pasadas para actuar mejor
en lo futuro.
Ciertas organizaciones, consagradas a los esfuerzos colecti-
vos de los hombres, se dedican a tratar la información ya gene-
rar conocimientos. Su efectividad se deriva de su capacidad de
probar el medio ambiente a fin de corregir errores y reforzar la
verdad. La incapacidad de aprender es fatal. Sin embargo, el
aprendizaje se dificulta más por ser muchos los hombres que
deben hacerlo juntos. Una crítica importante que puede hacer-
se al Programa de Obras Públicas de la ADE en Oakland es que bloqueó todas las posibilidades de aprendizaje. Lejos de ser un
modelo del cual la organización pudiera aprender a lograr el
éxito, ni siquiera fue un experimento en que la organización
pudiera aprender del fracaso.
Hasta ahora, nuestras suposiciones de nuevos programas pú-
blicos distan mucho de la realidad. Suponemos que la gente os-
tensiblemente al mando puede predecir las consecuencias de
sus actos, lo que, con frecuencia, no ocurre. Puesto que hay un problema, suponemos que debe haber una solución y que ésta
ya está incorporada en el programa. Razonamos que, para que
un programa se establezca, se debe contar con un conocimien-
to que enlace las actividades del gobierno con resultados conve-
nientes obtenidos en la sociedad. Esperanzas y plegarias, así
como el deseo general de hacer el bien sin saber cómo, nos pa-
217
96
indicando sus logros ydefectos; es elartículo de ~aurence J.ü'!üoleJr. (1989), Recomendaciones prácticas para la lmplementac.l~n de
laspolíticas que involucran a múltiples actores: una evaluacwn del
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 71/117
laspolíticas que involucran a múltiples actores: una evaluacwn del
campo.
Es r t lU Y posible que muchos no estén conformes co~,eluso delneol~gismo "implementación", que carga conla denotaclOn angloa-mericana de llevar a efecto, a cabo, a cumplimiento. Sin embargo,
si algo dejan en claro las investigaciones es ~u~,e~proceso no ~~e,?eser definido como "implantación", "eje~uclOn ,mst:umentaclOn osimple "puesta en práctica". Es mucho más compleJo.
1. El proceso deimplementación
de las políticas.
Un marco conceptuar
Los POLITÓLOGOS han comenzado a prestar cada vez más aten-ción al estudio de las polítiC'JS públicas. Los temas qne tratao
y las metodologías que emplean reflejan la diversidad de sus inte-reses. Las grandes diferencias en la literatura de las políticas públi-cas dificultan la definición de su campo de estudio y hacen difícillograr una visión coherente. Sin embargo, se puede poner un pocode orden en esta variada producción si se introduce un modelosistémico de la ejecución de las políticas (véase la Figura 1).1 Estemodelo identifica las relaciones que existen entre las distintas áreas
. de interés de los analistas, presta atención a los factoresdetermi-nantes y a las consecuencias dejas políticas públicas, y pone énfasisen la imperfecta correspondencia entre las políticas adoptadas y losservicios realmente ofrecidos.
Los componentes .de este modelo son: 1) un ambiente queestimula el trabajo de los funcionarios de gobierno y que recibe, asu vez, los resultados de su trabajo; 2) las demandas y recursos quelos estímulos del ambiente trasladan a quienes elaboran las políti-cas; 3) un proceso de transformación de las demandas y los recursosen políticas públicas, que incluye también las estructuras formales
" Publicado originalmente con el título "Tht<Policy Implementation Process. A con-ceptual Framework", en Administration &Society, vol. 6, no. 4,1975, pp, 445-488. Traduc-ción al español de Gloria Elena Bernal.
1El modelo del sistema de ejecución de políticas fue creado inicialmente pOr Shar-kansky (1972) y seutliza como unmarco de análisis en Sharkansky y Van Meter (1975).
[ 97]
El elntomo del sistem
l
a ~- - - - - - - - - - - - - - - -La atendóna los factores determinantes y a las consecuencias
de las políticas públicas nos ha hecho comprender mucho mejor el
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 72/117
demandas
y recursos
proceso d~ --PO-Ií-tica--'
'transformación _
retroalimentación
FIG. 1. El sistema de ejecución de las políticas
y los procedimientos guberna:nenta?e~~:~ ~:: ~~~~~~:~i~~:/~~~~~
sentan las metas formales, lals1~t5e)nlc01Soresultados de la política tal yf ,. .os gubernamenta es, . . ,unClOnan . . 1 'bl' . Y6) la retroalimentaclOn
como en realidad se.ofrecen a pu 1C~~S olíticas inducen en ella ejecución y los resultados de P. ,/
que. '. 'te de vuelta al proceso de converSlOn e nambiente y que se transm1 . En muchos sentidos, esteforma de nuevas demandas y recursoS. . ." . ... odelo
marco conceptual difiere poco de.otr~s,a?alPtac1
tones~l :aston.
2. rr laborado 111lCJamen e pOr .
original de SIstema po 1 1CO,e ." rtica" (policy) y
Su rasgo distintivo consiste en propone:d
qU:da~oc~mo categorías"desempeño" (performance) sean conS1 er
diferentes. dI' t .a de eJ'ecución delas políticas han sidoAlgunos rasgos e SlSem 1'1'
f d'd d que otros. Durante e u tlmoestudiados con mayor pro un l. a f o desproporcionado para
de si lo se ha hecho un es uerz ,
: ~ : ~ a r l a ; a t u r a l e z ad e l o ~ p r ~ b l e ~ : : ~ : : : ~ ; o ; n ; e : : e : : ~ ~ ~la manera como se rf~~:~s~: e~~boración de las políticas. Más; ~ ~ : : ; : : : : : \ ~ ; ~ ~ ~ i s t a s p o l í t i c o shan d i r i g i d os u a t e n c i ~ na ; : ~impactos o efectos que tienen las políticas en la gente y en os p
blemas que pretendían resolver.
. '. a orfrecuenciaen relación con el enfoque2 El trabajo teónco quese cI~a con ~ ¿Easton (1965).
sistemático aplicado a la cienc13pohtlca, es e e
p p p j
proceso de la política. Sin embargo, ninguno de los enfoques nos
explica cómo es que las decisiones políticas se transforman en
servicios públicos. Nos dicen muy poco sobre la aplicación o
implementación de las políticas públicas. En pocas palabras, no han
prestado atención suficiente al vínculo entre la política y su realiza-
ción. Una cosa es examinar los factores que determinan las decisio-
nes políticas e identificar los impactos o consecuencias de éstas, y
otra muy diferente es elaborar explicaciones sobre las consecuen-das observadas.
El propósito de este ensayo es explorar él proceso de implemen-
tación de las políticas. Con este fin, definimos el concepto de
implementadón y revisamos la bibliografía existente, tratando
de averiguar si el conocimiento alcanzado podría ayudamos a una
mejor conceptualización del proceso ..Presentamos un modelo que
puede ser útil para analizar la implementación de las políticas, seaque se trate de una sola organización o de muchas.
Para una definición de la
implementación de laspolíticas.
En la bibliografía existente se encuentran diversos significados del
concepto de implementación a menudo incompatibles.3 Nuestra
definición es explíCita:la implementación de las políticas abarca
aquellas acciones efectuadas por individuos (o grupos) públicos y
privados, con miras a la realización de objetivos previamentedecididos. A estas acciones pertenecen tanto los esfuerzos momen-
táneos por traducir las decisiones en propuestas operativas, como
3 Examín'ese, por ejemplo, las distintas interpretaciones del concepto de implement2-ción implícitas en Pressman y Wildavsky(1973), Smith (1973), Lazin (1973), Bunker (1972),
Derthick (1972), Gross et al. (1971) y DOlbeare y Hammond (1971). Véase también los
siguientes estudios, en losljue se utilizan diversos conceptos para examinar el concepto dela irnplementación: Jones (1970), Gergen (1968), Gross (1966) y Dror (1968).
que inciden en la prestación de servicios públicos (es decir en eldesempeño), el estudio de la implementacióndestaca una 'de lasfuerzas que van a determinar el impacto de las políticas. De ahí que,
los esfuerzos prolongados para realizar los cambios, grandes y pequeños, ordenados porlasdecisiones políticas. Williams (1971:
144) lo ~xpres~ de manera sucinta:
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 73/117
En su forma más general, una investigáción sobre la implemen-tación ... pretende establecer si una organización es capaz deconjuntar recursos humanos y materiales en una unidad organi-zativa coherente y si puede motivar a los operadores de maneratal, que sean capaces de llevar a cabo los objetivos explícitos de
la.organización.
como observa Dolbeare (1974), los estudios sobre el impacto por lore~lar preguntan" ¿qué ocurrió?", en tanto que los estudios sobrela Implementación preguntan "¿por qué ocurrió de esta manera?".
No estamos sosteniendo que el estudio de la implementaciónde
las políticas sea capaz de resolver los problemas relacionados cone? impacto "real" (por ejemplo, .si la educación compensatoriatIe~e efecto~benéficos,o n~). ~uestro modelo y la investigación quede el se der~va,no estan dJsenados para medir ni para explicar losresult~dos fmales de las políticas gubernamentale~, sino para medir y e~hcar lo que preferimos llamar desempeño del programa (esdeclf, el grado de cumplimiento real de la prestaciQn de los servicios
prop~estos). Reconocemos que algunos servicios pueden llegar efectIvamente a su destino sin tener ningún impacto sustancial enel problema que se supone atiende la política. Puede darse el caso
de que una política sea puesta en práctica con gran eficiencia y oueap~sar de ello, no l~gre un impacto sustancial, sea porque fu~erroneamente concebIda o porque sucedieron circunstancias im-
previstas: En consecuencia, el buen desempeño del programa esunacondición necesaria pero no suficiente para la obtención de resul-tados finales positivos.
144) lo xpres de manera sucinta:
Debemos insistir en que la fase de implementación no comienzasino hasta después de que las decisiones previas han establecido (oidentificado) los objetivos ylas metas. De igual forma, la implemen-tación tiene lugar sólo despúes de que la legislación ha sido promul-gada y de que los fondos han sido asignados (o, en su caso, despuésde la emisión de un fallo judicial y de su correspondiente decreto).
Como dicen Pressman y Wildavsky (1973: XIV): "Después de todo,el mundo está Heno de propuestas políticas fallidas. No puedeterminarse lo que no se ha iniciado. La ausencia de implementaciónno debería atribuirse a un fracaso en el momento del arranque, sinoa la incapacidad de seguir adelante" . Por lo tanto, el estudio de laimplementación examina aquellos factores que contribuyen a que
se realicen o no los objetivos de la política.Establecemos una clara distinción entre la implementación
de la política, la ejecución o desempeño, y 1 0 que generalmente Sedenomina impacto de la política. Éstos son conceptos diferentes
aunque estén interrelacionados. El estudio del impacto se ocupa delas consecuencias de las decisiones po¡íticas. ¿Cambian las prácticasde oración en las escuelas corno resultado de una decisión de laSuprema Corte? ¿Mejoran sus habilidades para la lectura o para lasmatemáticas los niños en desventaja a causa de la aplicación de un programa educativo innovador? Al concentrarse en las actividades
El estudio de la implementación
~n la actuali~ad sabemos relativ~mente poco sobre el proceso de
Implementaclón de las políticas. Esta es una deficiencia desafortu-nada e~ nues.tra concepción del proceso de la política y puedeconducIr a qmenes elaboran las políticas a conclusiones desafortu-nadas; Cuando se enfrentan con un programa fallido, muchos obser-vadores tienden a atribuir el fracaso auna planeación insuficienteo a la inadecuación del programa mismo. Está imputación es·a
102
menudo injustificada. Al observar las políticas sociales de la GranSociedad, Levine (1968:86)concluía que la mayor parte del proble-
d l G t l P b h bí id lt d " t t
la atención de los académicos, interesados en cuestiones más eleva-das. La implementaciónes engañosamente se~cilla, no parece im-plicar ninguna cuestión de fundamental importancia Con
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 74/117
ma de la Guerra contra la Pobreza, había sido resultado "no tantode la naturaleza de los programas, cuanto de las dificul~ades ?e suadministración". Señalando la posible brecha entre las mtencIOnesy las declaraciones de los funcionarios (las po~íticas), por un lado, y
la prestación de servicios públicos (desempeno), por el otro. Dol- beare y HaIIlffiond (1971: 149) afirmaban que:
...en realidad es muy poco lo que las pálabras conte~da~ en unadecisión o en una ley pueden determinar por SI ffilsmas y
.que enunciar cualquier política es apenas el primer mome~t~de todo un proceso crucial en el que se determm~ lo que ocumray quiénes serán los afectados positiva o ne~atlvamente. por loque ocurrirá. Comprender esta etapa postenor es esenClalpara
entender cabalmente la política.
plicar ninguna cuestión de fundamental importancia. Confrecuencia se considera que la mayoría de los problemas políticoscruciales han sido ya resueltos por las decisiones previas de losejecutivos, legisladores y jueces.
En segundo lugar, es posible que el desarrollo del Sistema dePresupuestaciónpor Programas, la técnica analítica más importantede la década de los sesenta, haya inducido a los analistas políticos aignorar los problemas de la implementación. La presupuestación
por programas concentraba la atención en la selección de los méto-dos más adecuados para lograr losobjetivos y metas previamenteestablecidos, alponer el mayor énfasis enlas decisiones de la cúpuladel gobierno,. en detrimento de los peldaños inferiores de la'
jerarquía, ubicados' en las dependencias encargadas de la imple;.mentaciÓn. El interés de la presupuestación por programas enmejorar los fundamentos de la elaboración de las políticas dejabade lado los problemas que tenían que ver con la prestación directade los servicios públicos. Como señala Williams (1971: 139), la
presupuestaCión por programas subraya la importancia de los obje-tivos de los programas y de los medios alternativos para lograrlos,
pero no presta una atención cuidadosa a la implementaciónuoperación de los programas públicos.
En tercer lugar, la dificultad misma que entraña la tarea hadesalentado e~estudio detallado del proceso de implementación delas políticas. Los problemas de la implementación son complejos ylos académicos han sido disuadidos a menudo de su estudio por
consideraciones metodológicas. El análisis del proceso de imple-mentación plantea serios problemas para establecer sus límitesrespecto del estudio de la formulación de las políticas. Con frecuen-cia resulta difícil identificar los actores más relevantes. Por añadí-dura, muchas de las variables que deben tomarse en cuenta parallevar a término cualquier estudio sobre implementación son de
De esta manera, el estudio de la implementación añ~de unanueva dimensión al análisis de las políticas. Ofrece al estudIOSOy alresponsable de las políticas un punto. de vista. diferente sobre .lamanera en que el sistema logra, o no, convertIr los grandes obJe-tivos generales de las políticas en servicios públicos concretos y
significativos.¿Por qué sabemos tan poco acerca de los problemas de la
implementación de las políticas? Si es tan importante este pr~ceso,¿por qué no se han hecho mayores esfuerzos por descubnr suscaracterísticas fundamentales? Este descuido obedece, en parte, ala suposición ingenua, implícita en muchos estudios, "unavez queuna política ha sido adoptada por un gobiern?,' ésta será llevada .acabo y sus resultados coincidirán en gran medIda con las expectatI~vas de quienes elaboraron la política". (Smith, 1973.:,197-19~). AsI pues, se presupone que el proceso de impl~n:entacIOn conSIste enuna seriede decisiones einteracciones tan tnvIales, que no merecen
medición muy difícilo imposible.Adiferencia de 10que sucede enlas arenas legislativa yjudídal, en donde los Votossuelen registrarse,es difícil aislar las decisiones que se toman en un contexto adminis.-
naturaleza, resulta muy difícil aplicar nuestra comprensión del pro-ceso a otras áreas de políticas en distintos contextosjurisdicciona1es.Los escasos esfuerzos que se han hecho (Smith, 1973; Bunker, 1972)
l b l i h id i f i
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 75/117
qtrativo. Por último, un análisis completo de la implementación exigeque se preste atención a una multiplicidad de acciones durante
periodos prolongados, lo cual supone un enorme despliegue de
tiempo y recursos.Esto no quiere decir que el proceso de implementación hayasido ignorado por quienes elaboran las políticas ni por los analistas,ni tampoco significa que los obstáculos mencionados sean insupe-rables.Los responsables de la elaboración de las políticas sí han puesto atención a los problemas de laimplementación, quizácomo consecu.enciade los resultados frustrantes de los programassociales de la Gran Sociedad. Algunas de las publicaciones másimportantes sobre implementación de las políticas son: el estudiode Kaufman(1960) sobre el Servicio Forestal de los Estados Uni-dos; el examen que hace Baileyy Mosher (1968) de la administra-ción de la Ley de Educación Elemental y Secundaria de 1965; elanálisis de Derthick (1970) sobre los programas federales de sub-vención de fondos; el examen de Gross y asociados (1971) sobre lainnovación planificada en las organizaciones; el estudio de Berke yKirst (1972) sobre el apoyo federal a los programas educativos; elanálisis que hace Derthick (1972) del intento de la administraciónJohnson por crear comunidades nuevas en terrenos federalesubicados en áreas metropolitanas en decadencia; y el desarrollocomunitario de la ciudad de Oakland. Éstos y otros estudios han
permitido identificar algunos de los factores que contribuyen a unamejor comprensión del proceso deimplementación de las políticas.
Sin embargo, a pesar de la gran cantidad de información que nosaportan, la contribución de estos estudios es limitada debido a sucarencia de una perspectiva teórica definida. Hasta la fecha, ningu-no ha propuesto un marco teórico en relación con el cual puedaexaminarse la implementación de las políticas. Sin un marco de esa
por elaborar tal perspectiva han sido muy poco satisfactorios. Por ejemplo, Smith afirma que la implementación constituye un proble,.ma exclusivo de las naciones del Tercer Mundo, en las que ·losintereses privados pretenden impedir que una burocracia asediada
implemente las políticas públicas. El mismo autor (1973: 199)argu-menta que esa situación se presenta en muy raras ocasiones en lassociedades occidentales del Primer Mundo. Obviamente, es muydifícil sustentar esta opinión, puesto que los problemas que entrañala implementación son igualmente profundos en las naciones desa-rrolladas, porque son propios de las organizaciones complejas.
Los fundamentos de una
perspectiva teórica
En su estudio sobre el Proyecto para el Desarrollo Económico dela Ciudad de Oakland (Economic Development Administration's
Oakland Project), Pressman y Wildavsky (1973: 166) anotan:
Existe (o debe existir) en las ciencias sociales una gran cantidadde estudios sobre implementación; por lo menos eso nos hadicho mucha gente ... Debe estar por ahí, debería estar por ahí,
pero en realidad no está. En este caso parece haber una. suerte de ilusión semántica en operación, ya que se consideraque virtualmente todo lo que se ha hecho en la administración
pública debería tener, en cierta medida, alguna vinculación conla implementación ... Sin embargo, con excepción de los esca-sos estudios mencionados a lo largo de este libro, no hemos
podido encontrar ningún trabajo analítico significativo quetrate ese tema.
Aunque compartimos la preocupación dePressman y Wildavskyrespecto a que no se ha dado suficiente atención a la cuestión de laimplementación delas políticas, pensamos que su crítica ala biblio-
costos irrecuperables, los beneficios colectivos de la estabilidad,los costospsíquicos y la acumulación de restricciones oficiaÍes y nooficiales sobre el comportamiento) que "tienden a mantener a las
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 76/117
grafía es innecesariamente áspera y limitada. Nosotros sostenemos,sencillamente, que existe una rica herencia proveniente de las cien-cias sociales, frecuentemente ignorada por quienes se proponenestudiar el proceso de implementación de las políticas. Contamos
con trabajos teóricos y empíricos en diversas áreas disciplinarias,incluyendo la sociología, la administración pública, la psicología so-cialy la cienciapolítica. A pesar de que la mayorparte de esos estudiosno analiza expresamente el proceso de implementación de las políti-cas,una revisión cuidadosa nos demostraría que no necesitamos gran
.imaginación para perca tamos de su importancia para la comprensiónde ese proceso.
Nuestro marco teórico muestra la influencia de tres grupos deestudios que pueden dividirse en las siguientes categorías: 1) lateoría de la organización - más específicamente los trabajos sobre
el control y el cambio en las organizaciones (innovación); 2) elimpacto de las políticas públicas, particularmente el de las decisio-nes judiciales; y 3) algunos estudios selectos sobre relaciones inter,:"gubernamentales. La tarea de esta sección consiste en delinear lasaportaciones que se han producido en esos campos de estudio. Sedará atención especiala los escritos sobr,e el cambio y el control enlas organizaciones, ya que consideramos que son las que ofrecen lasmayores contribuciones teóricas y las que han sido ignoradas habi-tualmente por quienes estudian el proceso de implementación delas políticas.
Los estudios de la teoría de las organizaciones, han tratadoampliamente el tema del cambio (Bennis, 1966; Downs, 1967;
Gross, 1971; Katzy Kahn, 1966). Un análisis penetrante de este tipoes el de Kaufman (1971), que estudia los diversos impedimentos
para la innovación en la estructura y acción de las organizaciones.Examina varios factores (como las limitaciones de recursos, los
organi~aciones haciendo lo que habían estado haciendo en el pasa-do reciente, y haciéndolo en la misma forma en la que lo habíanvenido haciendo" (Kaufman, 1971: 39). Kaufman reconoce las múl-tiples ventajas de la estabilidad y trata de identificar las fuerzas que
conducen al cambio en las organizaciones, tanto las que se presen-tan involuntariamente como las intencionales. A pesar de ello, elautor no puede menos que llegar a la conclusión de que la mayoríade las organizaciones "son prisioneras del presente y se muestrangeneralmente incapaces de cambiar el futuro que las amenaza conla destrucción si no se transforman" (Kaufman, 1971: 40).
El control en las organizaciones también ha sido tema frecuentede investigación. Su relevancia para el problema de la .imple-mentación puede identificarse en varias de las definiciones .que seencuentran en. la bibliografía. Por ejemplo; Wilensky (1967: 3)
define el control como "el problema de lograr que se efectúe eltrabajo y el de asegurar el cumplimiento de las reglas de laorganización". Anthony (1965: 17), define el "control gerencial"como "el proceso mediante el que los directivos aseguran la obten-ción de los recursos y su uso eficaz y eficiente en favor del cumpli-miento de los objetivos de la organización". Finalmente Etzioni(1964: 68), define el control en las organizaciones como un procesocuyo propósito es "asegurar que las reglas sean obedecidas y lasórdenes cumplidas".
Se han utilizado diversas denominaciones para el análisis de este
aspecto de la vida de las org'anizaciones. El control ha sido discutidodestacando los elementos de liderazgo, coordinación, jerarquía;relaciones humanas, democracia, incentivos y acatamiento. Paranuestros.propósitos; este último concepto es el más útil. El acata-miento puede ser visto como un caso especial en el estudio de laimp1ementación- generalmente relacionado con la obediencia o
desobediencia específica a una ley o directriz. Los estudios sobre el
proceso mediante el que se obtiene o se elude el acatamiento,
arrojan luz sobre el problema de la implementación de políticas
complejas en sistemas políticos fragmentados.
clásica de esta relación sostiene que el papel ideal de los subordi-
nados consiste en implementar fielmente las decisiones de sus
superiores. Las políticas se elaboran en los más altos niveles; pos-
teriormente son ejecutadas por participantes de nivel inferior Cuya
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 77/117
complejas en sistemas políticos fragmentados.
En A Comparative Analysis of Comple.x Organizations (1961),
Etzioni utiliza el concepto de acatamiento como una base para la
comparación de las organizaciones. Efectivamente, este elemento
permite comparar muchas de las características de las organizacio-nes complejas: las metas que persiguen, sus estructuras, sus
mecanismos de motivación, el poder y la interacción que ejer-
cen sus élites, el nivel y los tipos de consenso que logran y sus
sistemas de comunicación y de socialización. Un rasgo central dela
tesis de Etzioni es la idea de que distintos tipos de organizaciones
requieren distintos sistemas de acatamiento y obediencia. Por
ejemplo, cuando los rfriembros de una organización se encuentran
enemistados y tienen una actitud hostil frente a la organización, el
poder coactivo -es decir, la aplicación o la amenaza de aplicación
de sensaciones punitivas- puede ser necesario para conseguir laadhesión a las. reglas y objetivos de la organización. Cuando la
mayoría de los participantes tienen actitudes positivas y están muy
compromentidos con los objetivos ylas metas de la organización, el
acatamiento puede obtenerse mediante el uso del podernonnati-
vo -la asignación y manipulación de recompensas y privaciones
simbólicas. Por último, cuando los participantes no muestran ac-
titudes intensamente favorables hacia la organización y cuando su
participación depende de los costos y beneficios percibid os. El
medio que con mayor probabilidad permitirá lograr el acatamien-
to, es el uso del poder remunerativo)
es decir, la distribución derecursos materiales tales como salarios, comisiones, ganancias
adicionales y servicios.
Un aspecto esencial del pensamiento de Etzioniy de las discu-
siones sobre el control es la relación entre superiores y subordina-
dos enlas organizaciones complejas. La interpretación weberíana
teriormente son ejecutadas por participantes de nivel inferior Cuya
discrecionalidad está severamente restringida. (El "tipo ideal"
clásico ha sido descrito por Max Weberensus estudios sobre la
"dominación racional" o "legal-burocrática"). A pesar de que esta
interpretación ha sido aceptada ampliamente, la mayoría de lasorganizaciones se desvían considerablemente de ella. Numerosos
estudios han demostrado que los operadores de los niveles inferio-
res, como los ayudantes en hospitales psiquiátricos (Scheff, 1961),
los trabajadores de mantenimiento en las fábricas (Crozier, 1964)y
los reclusos en las prisiones (Sykes, 1961), pueden ejercer poder y,
consecuentemente, afectar el desempeño de las organizaciones
complejas.
Con freCuencia, se descartan estos casos en calidad de excepcio-
nes a la regla. Mechanic(1962) propone, por el contrario, que sean
considerados cpmo manifestaciones de un patrón general. Aladquirir control sobre personas, información y medios, los opera-
dores de los niveles inferiores pueden ejercer un considerable
margen de poder que no corresponde con el asignado a susposicio-
nes formales dentro de la organización. Este autor sostiene (1962:
351) que, "en cierto sentido, las organizaciones están permanente-
mente a merced de sus operadores delos niveles inferiores". Reco-
nociendo que el control jerárquico nunca es perfecto y que los
encargados de la implementación de las políticas pueden tener
mucho poder, Baum (1974) construyó una teoría sobre el impacto
judicial, contraria a la interpretación tradicional de la jerarquía enlas organizaciones. Baum propone que "en lugar de· considerar
como una anomalía el poder que pudieran poseer los agentes de los
niveles inferiores, podríamos comenzar por presuponer que son
ellos quienes de hecho determinan el contenido de las políticas que
llevan a cabo". Baum acepta que esta premisa no puede, tal vez,
sostenerse empíricamente, pero afirma que su uso "nos permite
descubrir las fuerzas que contrarrestan la· autonomía, en vez de
darlaspor sentado". (Baum 1974: 6).
fica tres áreas de posible motivación a favor del acatamiento -los
beneficios personales, psicológicos ycole€tivos- y argumenta que:
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 78/117
p ( )
El poder que tienen los participantes de nivel inferior en las
organizaciones aumenta a cauSade las actividades de sus superiores;
quienes suelen tener muy poco conocimiento de lo que sus subor-
dinados hacen. Po.r eso; la supervisión del comportamiento de lossubordinados, resulta ser una cuestión muy importante en el estudio
de las organizaciones complejas. Existen muchos mecanismos me~
diante los cuales los superiores se mantienen informados sobre las
actividades operatlvas, entre éstos destacan los informes, las inspec-
ciones, los contactos personales y las investigaciones formales. Sin
embargo, como lo revelae1 estudio de Kaufman (1973), los sistemas
de retroalimentación administrativa suelen ser inadecuados y es
frecuente quelos superiores no quieran saber nada sobre las activi-
dades operativas: S610se logrará in~rementar el nivel de acatamien-
to por parte de los subordinados, si se otorgan superiores accesibles.
(Para una discusión más completa sobre este asunto, consúltese:
Kaufman, 1960; Dow, 1967: cap. 12; Wilensky, 1967).
La bibliografía sobre el impacto de las decisiones judiciales,
tiene también mucho que aportar al diseño de una teoría sobre la
imjJ1ementación de las políticas. Hasta la fecha, la mayoría de íos
estudiosos· del impacto judicial se han dedicado más a la investiga-
ción empírica que al desarrollo teórico.·Sin embargo, algunos han
enumerado variables que podrían servir para explicar.sus obserVa-
ciones y otros han elaborado teorías parciales sobre el impacto
judicia1.4 Tomando como bas~ la teoría de la re1ació11entre supe-
riores (la Suprema Corte y los tribunales de apelación) y subordi~nadas (juzgados y agencias administrativas), Krislov (1965) postula
que los subordinados aceptan y acatan las directrices de los supe-
riores, cua~doexisten los incentivos para obedecer. Kris10videnti-'
4 Comoejemplos,véanse lossiguientes textos: Wasby (1970), Johnson (1967), Petriek
(1968), Dolbeare y Hammond (1971),Grossman (1970), Brown y Stover (1974).
el acatamiento alcanza su mayor nivel cuando las ventajas per-
sonal~s son las mayores posibles, cuando los mecanismos de
sanción c<;mtrala oposición son contundentes y severos, y cuan-
do la legitimidad de la autoridad que imparte los incentivos y
sanciones es conocida. A la inversa, el acatamiento estará en
su punto más bajo cuando todas las ventajas individuales favo-
rezcan el surgimiento de actitudes de oposición, cuando las
sanciones de la organización sean indulgentes y -aún más im-
portante- cuando la aplicación sea errática y la legitimidad de
la más alta autoridad esté en duda (Krislov, 1965: 136).5
Otro estudio importante, en relación con nuestros propósitos,
es el análisis de Dolbeare y Harrnmond (1971) sobre el impacto de
las decisiones de la Suprema Corte de los Estados Unidos en las
prácticas de oración en las escuelas. Los autores identifican cuatro
categorías de actores que moldean la respuesta a las resoluciones
de las cortes: la naturaleza de la decisión, los mecanismos y proce-
dimientos institucionales, el contexto político-cultural y los intere-
ses, prioridades, preferencias y .comportamiento de los actores
políticos. Al hacer este planteamiento señala (1971: 134) que "ca~
tegorías similares o análogas pueden aplicarse a otros tipos de
políticas generadas por otras instituciones del gobierno nacional".
Por último, existen varios estudios acerca de las relaciones
intergubernamentales, que tratan directamente el problema de la
implementación y que permiten identificar los problemas de las re-
laciones en yentre las organizaciones. Algunos de esos estudios son
los de Bailey y Mosher (1968), Sundquist (1969), Derthick (1970,
S El trabajo de Krislov se basa en losestudios de Barnard (1938), March y Simon (1958),
Biau y Seott (1962). Para ver cómo se ha desarrollado recientemente estas nociones véaseBaum (.1974). '
1972), Pressman y Wildavsky (1973). Estas.obra~ ofrec~n diversas
perspectivas sobre los conflictos entre funcIOnarIOSnacIOn~les,~s-
tatales,! locales, y señalan la interdependencia de los funcIOnan~s
úbli t d l i l d l bi Ad á t l
si la subvención está destinada a alguna actividad en la que.ellos ya
estaban involucrados o no".
La segunda razón es que el proceso de implementaciónes
influido por la magnitud del cambio requerido en las organizado '
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 79/117
públicos en todos los niveles del gobierno. Además, y esto es lo mas
importante, identifican los factores que pert~rb~~l p.roceso de
implementación en organizaciones que no estanrn bIen mtegradas
ni autocontenidasc Por ello, insisten en la autonomía de los subor-
dinados, tanto parla que se refiere al tratamiento de los asuntos
internos como al de los interorganizacionales.
Una perspectiva teórica
influido por la magnitud del cambio requerido en las organizado- .
nes. El análisis de Kaufman (1971) sugiere que es más probable que
laimplementación sea efectiva c\lando no se le exige a la depen-
dencia pública responsable ninguna reorganización drástica. Esta
opinión es reforzada por la argumentación de Levine (1968) en el
sentido de que muchos de los errores de los programas sociales de
la Gran Sociedad, durante la administración Johnson, fueron resul- .
tado de las ingentes demandas que se plantearon a las estructuras y
a los procedimientos administrativos vigentes. Será más difícil po-
ner en práctica aquellas políticas que obligan a cambios profundos
de las relaciones entre los participantes durante la implementación,
que aquellas otras que demandan únicamente cambios marginales
en las relaciones establecidas.
El otro rasgo crítico de la política es el grado de conflicto o
consenso en torno a sus objetivos y metas. ¿Hasta qué punto con-cuerdan los funcionarios responsables respecto a las metas del
programa? Dolbeare y Hammond(l971: 137-138) insinúan la im-
portancia que para un programa puede tener el conflicto entorno
a las metas, cuándo sugieren que "las posiciones valorativas de
funcionarios y líderes ...pueden ser determinantes para el resultado
final de la política".
Al hacer una revisión de la bibliografía sobre el cambio progra-
mado en las organizaciones, Gross y asociados (1971: 24-29) iden-
tifican varios de los factores que condicionan el consenso en torno
a las metas y que, por esa vía, afectan a la implementación misma.Uno deesos factores es la medida en la que los subordinados-o los
responsables de la implementación- han participado en Jaelabora-
ción de la decisión política. El estudio bibliográfico descubre que
existen razones para sostener las siguientes afirmaciones:
El punto de partida más apropiado para la elaboración .de,nuestro
marco teórico, es la política misma que establece l.osobJetIVOS~ ~as
metas. Es aquí donde comienza el proceso de Imp1ementacIOn.
Siguiendo a Lowi (1964) y a Froman (1968), entendemos qu~ ~l
proceso de implementación variará de acuerdo con las cara~tenstL-
cas de la política a ponerse en práctica. A diferentestlpos dedecisión, corresponderán determinados procesos,. estr~~turas y
relaciones entre los factores que influyen en .la eJecucIOn de la
política pública. '. . '"Clasificaremos las políticas de acuerdo con dos caractenstlcas
distintivas: la magnitud del cambio requerido y el grado de cansen'"
so en torno de las metas por parte de los participantes en el proceso
de implementación.El elemento del'cambio es i~portante po~~o
menos por dos razones. La primera, es que la ImplementacIOn
estará condicionada por el grado en que la política a implementar
difiera de políticas anteriores .. Como sugieren diversos autores(Braybrooke y Lindb10m1963; Lindblom, 1965; Wi1dav.s~: 1974),
los cambios graduales acumu1ativos tienen mayor pOSIbIlIdadde .
producir respuestas positivas que los cambios drásticos. En ese
mismo sentido, Derthick (1970: 63) afirma que la ,respuesta de los
gobiernos estatales a lasiniciativas federales "depende en parte de
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 80/117
último~a pesar de que el consenSo suele acompañar a la mayoría de
las· políticas· que implican cambios menores, no es rarp encontrar
casos de políticas que corresponden a la categoría de "cambios
menores/consenso bajo". Esto ocurre con frecuencia cuando a al-
Un modelg delproceso de
implementación de laspolíticas
Nuestro modelo básico -descrito en la Figura 3- postula la exis-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 81/117
j
gunos programas polémicos, como el de apoyo federal a la educa-
ción, el de la atención médica y Tosde bienestar social, se les vuelve
a conceder autorización de operar con algunas pequeñas modifica-
cionesenlos niveles de asignación de recursos o en las fónnulas dedistribución de fondos. Por lo tanto, aunque la política adoptadase
aleje muy poco de las diseñadas en el pasado puede iniciar una
controversia duradera.
Al desarrollar esta tipología de las políticas públicas estamos
partiendo del supuesto de que la eficiencia de la implementación
depende, parcialmente, del tipo de política en cuestión y de
que los factores específicos que facilitan o impiden la realización delos objetivos de un programa suelen variar de un tipo de política a
otro. Más específicamente, nuestra hipótesis apunta que la imple-
mentación ~endrá más éxito cuando' sólo se requieran cambiosmarginales y cuando el consenso en torno a las metas sea alto. A la
inversa, cuando se ordenan grandes cambios y el consenso respecto
a las metas es muy escaso, las perspectivas de una implemen-
taci6nefectivaserán sumamente dudosas. Más aún, podemos afir~
mar que las polít icas que impliquen grandes cambios y,
simultáneamente, un alto grado de consenso, serán implementadas
con mayor éxito que aquellas que supongan cambios menores pero
también escaso consenso. Nuestras previsiones indican que el con-
senso en torno a : las. metas ejerce una. mayor influencia sobre el
proceso de implementación que el elemento del cambio. Teniendoen cuenta estas sugerencias (o hipótesis), es indispensable que
prestemos ahora atención al examen de los factores (o variables
independientes) implicados en el proceso ,de implementación.
g p
. tencia de seis variables que definen los vínculos entre la política y
su desempeño. Este modelo especifica las relaciones entre las va-
riables independientes y la variable dependiente, así como también
las relaciones entre las variables independientes mismas. Los vín-culos que se exponen representan hipótesis implícitas que podrían
.ser puestas a prueba empíricamente, en caso de que pudieran
cons truirse indicadores satisfactorios y se pudiera· reunir la infor-
mación adecuada. Si se aborda el problema de esta manera, hay
mayores posibilidades de captar los procesos mediante los cuales.
las decisiones políticas se ponen en práctica, que si sólo se relacio-
nan superficialmente las variables independientes y las dependien-
tes (Van Meter y Asher, 1973). El modelo ha sido elaborado
sobre la base de los tres conjuntos de obras ya mencionadas y apartir
de la investigación e intuiciones de los propios autores en su estudiodel proceso de implementación.
N aRMAS y OBJETIVOS DE LAS POLÍTICAS
Como nuestro interés principal se concentra en los factores
que determinan el desempeño de las políticas, la identificación de
indicadores adecuados de desempeño es una etapa decisiva en el ..
análisis. Los indicadoresde desempeño permiten determinar el
grado de cumplimiento de las normas y los objetivos. Los estándares
y los objetivos están contenidos en las metas generales· enun-
ciadas en la decisión política. Sin embargo, trascienden las genera-lidades .del documento legislativo, ya que proporcionan reglas
concretas y más específicas para la evaluación de la ejecución del
programa. En ciertos casos, estas normas y objetivos aparec;:en
claramente estipulados y son fácilmente medibles. Por ejemplo, el
Proyecto para el Desarrollo Económico de Oak1and pretendía crear
puestos de trabajo para los desempleadosa través denumero-
sos proyectos de obras públicas .:.....como, la construcción de.un
hangar en el aeropuerto, de una terminal marítima, de un parque
industrialportuario y de una vía de acceso al recientemente cons-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 82/117
industrialportuario y de una vía de acceso al recientemente cons
truido coliseo de laciudad- (Pressman y Wildavsky,' 1973). Para
conocer si la implementación había sido exitosa, bastaba con
determinar el número de empleos creados, la identidad de quienes
fueron contratados y el grado de avance en los proyectos de 6bras
públicas.
En la mayoría de los casos, sin embargo, es mucho más difícil
identificar y medir el desempeño. Esto puede deberse a la extensión
del programa oa la naturaleza compleja y de largo alcance de sus
metas. Puede también ser consecuencia de ambigüedades y
contradicciones enla enunciación de las normas y los objetivos. Sin
embargo, es preciso reconocer queJa ambigüedad puede ser propi-
ciada deliberadamente por quienes elaboran las políticas, can e]fin
de contar con el consenso de los responsables de la implementación
en los otros niveles de la organización o del sistema de ejecución de
las políticas. Aún así, "el estudio de la implementación no puede te-
ner éxito nifracasar si no existe alguna meta en relación con la cual
pueda ser valorada" (Pressman y Wildavsky, 1973: XIV). Para
determinar,cuáles ~onlos estándaresylos objetivos se.puede recu-
rrir a las declaraciones de quienes, elaboran las políticas, las cuales
se encuentran diseminadas en diversos documentos o a los regla-
mentos y lineamientos del programa, en los que se establecen los
criterios para la evaluación de la política. Sin embargo, en
algunos casos los estándares y los objetivos de la política tendrán
que ser construidos por el propio investigador. Podría incluso resul-tar deseable utilizar los criterios de evaluación que emplean los
grupos a los que se dirige la política. En última instancia, la elección
de las unidades para medir el desempeño depende de los propósitos
que alientan la investigación (Rivlin, 1971;Rossi yWilliams, 1972).
Los RECURSOS DE LA POLÍTICA
Las políticas contienen otros elementos, además de los estánda-res y objetivos para juzgar la implementación. Tambiértproveen delos recursos necesarios para administrarlas.Estos recursos puedeni l i f d t i ti ti l f ilit l i l
indispensable preocupamos por la claridad con que losestándaresy objetivos han sido formulados, la exactitud con que son comuni-cados a los encargados' de .la implementación y la congruencia (ouniformidad) con que diversas fuentes de información los difundan.Ni los estándares ni los objetivos pueden ponerse en práctica a
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 83/117
incluir fondos u otros incentivos para estimular o facilitar la imple-mentación efectiva. (Una exposición más detallada de la utilidad delos incentivospuedeencbntrarse en Levine, 1972y Schultze,1969).
Es evidente que los fondos no suelen ser suficientes. Así por ejem- plo, el estudio de Derthick (1972: 87) sobre Nuevas Comunidades, programa desarrollado durante los años de Johnson, indica que lalimitación de los incentivos federales fue uno de los factores quemás contribuyeron al fracaso de ese programa:
Para inducir alos gobiernos locales a aceptar el peso que supo-nía desarrollar nuevas comunidades dentro de las ciudades, elgobierno federal tenía que ofrecer les algo valioso a cambio. ElPresidente supuso que los terrenos federales a bajo precio seríanidóneos para este fin, pero la suposición resultó errónea.
En nuestro modelo se incluyen cuatro factores adicionales: la. comunicación entre las organizaciones y las actividades de induc-
ción, las características de las agencias responsables de la imple-mentación, la influencia del ambiente económico, social y políticosobre la jurisdicción u organización donde la implementación tienelugar y la disposición de los encargados de la misma. C~da uno deestos facton~s está coinpuestopor diversas variables, algunas de lascuales serán identificadas en este texto.
LA COMUNICACIÓN ENTRE ORGANIZACIONES Y LAS
ACTIVIDADES PARA OBLIGAR A LA ACCIÓN
La eficiencia de la implementación exige que las normas y losobjetivos de un programa sean .comprendidos cabalmente por los individWJsa quienes corresponde su relación. De ahí que resulte
Ni los estándares ni los objetivos pueden ponerse en práctica amenos que se les exprese con claridad suficiente, de modo que losresponsables de la implementación puedan saber qué es lo querealmente se espera de ellos.,La comunicación en y entre las orga-nizaciones es un proceso.complejo y difícil. Al transmitir mensajeshacia los niveles inferiores de una organización, ode una organiza-ción a otra, los comunicadores los distorsionan inevitablemente- ya sea voluntaria o involuntariamente (Downs, 1967: 133-136) -.Más aún, cuando diferentes fuentes de comunicación elaboraninterpretaciones contradictorias de las normas y los objetivos, ocuando la misma fuente ofrece interpretaciones sucesivas incompa-tibles entre sí, los responsables de la implementación enfrentarángrandes dificultades para poder dar cumplimiento a las intencionesde la política. Por eso es que las perspectivas de una implementaciónefectiva aumentarán de acuerdo a la claridad con quelosestándaresy objetivos sean definidos y de acuerdo con la exactitud y coherenciacon que sean comunicados .
Frecuentemente el éxito de la implementación requiere meca-nismos y procedimientos institucionales que permitan a lasautori-dades incrementar la probabilidad de que los responsables de laimplementación (los subordinados) actúen de acuerdo con las nor-mas y los objetivos de la política. Como ha observado Neustadt
.(1960: 18), las instrucciones presidenciales no son de efectoinmediato, requieren la presencia de algún mecanismo que obligue
a la acción.Enel contexto de una sola organización, los superiores pueden
tener acceso a una' amplia gama de mecanismos de enforcement.
Cuentan con amplio poder sobre las personas: el reclutamiento y laselección, la asignación y lareubicación, el ascenso y la promoción
y, en última instancia, el despido. Además, tienen control sobre lasasignaciones presupuestales de las oficinas y del personal operativoy pueden incrementarlas o reducirlas en respuesta al desempeño,sea éste satisfactorio o deficiente. Así pues, aunque no puedan
poder remunerativo y poder coactivo. A pes~ de que el gobiernofederal no es, en el sentido que hemos utilizado el término, un"superior" en sus relaciones con los estados y las localidades, pode-mos usar analógicamente esta noción como un instrumento para
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 84/117
p q pobligar a la obediencia, los superiores tienen la posibilidad de influir en el comportamiento de sus subordinados.
En cambio, muchos de esos mecanismos están ausentes cuando
se trata de las relaciones entre miembros de diferentes organizacio-nes- o cuando las relaciones se dan entre funcionarios federales,estatales y locales. Schultze (1969: 202) ha resumido la situación dela siguiente manera:
en tales situaciones no se puede ordenar la ejecución de lasacciones. No existe jerarquía alguna de funcionarios ubicadosen la misma línea de mando que pueda ser invocada paraimpulsar la acción hacia un conjunto de objetivos predetermi-nados. En esos casos, la especificación cuidadosa de planes y
objetivos por parte de una instancia pública no será suficiente para garantizar la eficiencia dé los programas.
En el contexto de las relaciones entre organizaciones (o gobier-nos) resultan de suma importancia dos tipos de actividades deinducción o seguimiento. EIl primer lugar, las actividades de aseso.,ríay de asistencia técnica. Frecuentemente, los funcionarios de másalto nivel pueden hacer mucho para facilitar el éxito de la imple-mentación si auxilian a los subordinados en li,l.interpretación de losreglamentos y linearnientos federales, si estructuran sus respuestas
a las varias presiones políticas y si obtienen los recursos físicos ytécnicos necesarios para poner en práctica una política.En segundo lugar, los superiores (o los funcionariosJederales)
pueden respaldarse en una gran variedad de sanciones, tanto posi-tivas como negativas. Podemos analizar este aspecto recurrieftdo ala distinción que hace Etzioni (1961: 5-8) entre poder normativo,
g porganizar nuestro pensamiento en torno a las relaciones entre' or-ganizaciones y el papel de la inducción.
El uso de lospoderes. normativo y remunerativo es sumamente
frecuente. Por ejemplo, el gobierno federalprocura ejercer influen-cia en las actividades estatales y locales a través de la asignación y
el manejo de recompensas simbólicas y materiales. Una de lastécnicas más importantes para el ejercicio de la influencia federales la socialización, persuasión y cooptación de los actores estatalesy locales. Al intentar establecer alianzas profesionales en torno desus organizaciones y de sus cargos, los funcionarios federales tratande cultivar aliados dispuestos a implementar voluntariamente sus
políticas en los niveles estatal y local. Este procedimiento es muyimportante, ya que la fragmentación del sistema federal hace vir-
tualmente imposible una supervisión efectiva (véase por ejemploKaufman, 1960; Derthick, 1970; Bailey y Mosher, 1968 y Etzioni,1965).
Otra manera de ejercer influencia, es lograr que los estados ylaslocalidades participen activamente en un programa. La perspectivade recibir recursos monetarios del gobierno federal suele ser un
buen incentivo para asegurar que los gobiernos locales acepten losobjetivos de la política federal. Éste puede ser un buen punto de
partida. La investigación ha demostrado que la influencia federalen aspectos determinados de un programa aumentan a medida que
la magnitud de la contribución financiera federal se eleva (Porter,1973:85; Derthick, 1970: 69;-70).
Por último, los funcionarios federales p:ueden incidir en la par-ticipación y la cooperación estatales y locales cuando les ofrecenservicios valiosos. Por ejemplo, muchas subvenciones federaleslogran adhesión al destinar un porcentaje considerable del
financiamiento del programa a cubrirJosc~stos de administraciónde los niveles estatal y local. Además, pueden ofrecer a las organi-zaciones participantes servicios de apoyo tan importantes como
í té i é t l l i ti ió
funcionarios federales tienden a emplear los métodos de vigilanciamas confiables a su disposición: visitas al lugar de la implementa-ción, evaluaciones del programa, inspecciones administrativas y
l d ió di í i d i f ió
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 85/117
asesoría técnica, préstamos al personal, investigación.Los funcionarios federales tienen también a su disposiciónins-
trumentos más apremiantes, que van desde las formas más amables
hasta las más contundentes de poder coactivo. Una práctica comúnconsiste en solicitar a los estados.y a las localidade.s que diseñen contodo detalle 'susplanes para administrar programa federal. Una vezque cuenta COIl garantías suficientes, el gobierno federal asigna losfondos sobre la base de que podrán ser revocados si las condicionesespecificadas del plan no se cumplieran. A través de este mecanis-mo, los funcionarios federales buscan "el acatamiento por adelan-tado" (Derthick, 1970: 209). Otra estrategia similar consiste enespecificar las condiciones y los requisitos procedurales que acom-
pañan la aprobación de los fondos federales, tales como la presen-
tación de informes detallados y el establecimiento de sistemas decontabilidad muy precisos. Por esta vía; el gobierno federal puedeasegurar que se cumplan las intenciones esenciales de sus objetivos.Sin embargo, como apunta Derthick (1970: 200), este procedimien-to no está exento de peligros:
La especificidad acarrea riesgos ... Mientras más específico seael lenguaje de los requisitos federales, menor será la capacidadde adaptación del gobierno federal alas peculiaridades estatalesyrnayor será el peligro de queJas limitaciones federales queden.al descubierto para obligar a la obediencia.
Más aún, reglamentos y lineamientos muy estrictos puedeninduCir a cierto desvío de las metas: los funcionarios estatales ylocales pueden empeñarse en cumplir las exigencias con laintención de obtener fondos y evitar sanciones, ignorando losobje-tivos centrales del programa. Para enfrentar estos problemas, los
controles de gestión, auditorías y otros mecanismos de información- como la elaboración de informes por parte de asesores noguber-namentales, con el encargo de vigilar la operación deJás Unidades
gubernamentales estatales y locales (véase, porejempló, Downs,1967: 145-153;Blau y Scott, 1962: 170-172; Kaufman; 1973).Wilensky(1967: 60-61) añade, empero, una importante advertenciasobre las limitaciones de la vigilancia:
Dondevarían los productos del trabajo o donde las condicioneslocales de operación son cambiantes, suelen proliferar los siste-mas de vigilancia. Esta maquinaria suele ser ineficaz, especial-mente cuando el personal local tiene que someterse a continuasinspecciones ya sea por parte de gente ajena a su profesión o
especialidad o por parte de quienes tienen diferentes conviccio-nes ideológicas ... Cuando ... la distancia doctrinal entre los ins- pectores y el personal es grande, el bloqueo de informaciónresultante puede impedir que los altos directivos tomen con-ciencia de la problemática local y que se adapten a ella, así cOmOtambién puede debilitar su habilidad para comunicar nuevasmetas a las diversas unidades locales.
Es probable que la forma más amenazante de la influenciafederal sea el poder retirar o retener los fondos destinados a losestados y a las localidades. Ésta es el arma de uso extremo en elarsenal de influencia del gobierno federal. Sin embargo, rara vez seutiliza. Puede causar desconcierto entre todos los involucrados ydañar al único aliado que el gobiernoresponsablefederal tiene enla zona de implementación: las instancias estatales o locales deimplementación. Habitualmente, el gobierno negocia con los fun-cionarios ~statales y locales en un esfuerzo por obtener el mayor
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 86/117
a) ¿Son suficientes los recursos económicos disponibles en la jurisdicción (u organización) para sostener con éxito un pro-ceso de implementación?
b) ¿En qué medida (y de qué manera) afectará la implementa-ción de la política las condiciones socioeconómicas prevale
claro si la decisión parece contravenir sus convicciones más profun-das. En condiciones de "disonancia cognoscitiva" (Festinger, 1957),el indivuduo puede intentar hacer contrapeso al mensaje desagra-dable recurriendo a su propia percepción de lo que debería ser ladecisión (véase por ejemplo Wasby 1970: 98)
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 87/117
ción de la política las condiciones socioeconómicas prevale-cientes?
c)¿Cuáles el estado de la opinión pública? ¿Qué tanta atención
se presta al problema que enfrenta la política?d) ¿Favorecen o se oponen lasélites a la implementación de la
política? .e) ¿Cuál es la inclinación política de la jurisdicción (u organiza-
ción) responsable de la implementación? ¿Hay oposicioneso apoyos hacia la política? ..
f) ¿En qué medida se han movilizado a favor o en contra de la política los grupos de interés privados?
LA ACTITUD DE LOS ENCARGADOS DE LAIMPLEMENTACIÓN
Cada unó de los componentes del modelo que hemos expuestodebe Ser visto a trasluz de las percepciones de los responsables dela implementacióndentro de la jurisdicción de la que se está llevan-doa cabo la política. Hay tres elementos del comportamiento de losencargados de la implementación que pueden afectar su capacidady buena voluntad para ejecutar la política: su conocimiento (com- prensión, discernimiento) de la política, la orientación de su res- puesta a la misma (aceptación, neutralidad, rechazo) y la intensidadde su respuesta.
Es muy importante el conocimiento que los responsables tienen
de la intención general de la política, así como de sus nOrmas yobjetivos específicos. Más aún, el éxito de la implementáción puedemalograrse cuando los funcionarios no son conscientes de desacuer,.do con la política. Ya hemos analizado algunos de los aspectos. deeste fenómenO. Sin embargo, queremos insistir en el riesgo de quelos encargados de la implementación malinterpreten un mensaje
decisión (véase, por ejemplo, Wasby, 1970: 98). .También es de importancia decisiva la disposición de los respon-
sables hacia las normas y los objetivos. Los encargados de la imple-
mentación pueden hacer fracasar la ejecución de una políticacuando rechazan los objetivos contenidos en ella (véase, por ejem-
plo, Peltason, 1961; Dolbeare y Hammond, 1971; Etzioni, 1961;Wasby, 1970;y Derthick, 1970).A la inversa, la aceptación ampliade normas y objetivos por parte de los responsables de la adminis-tración de la política incrementará considerablemente el potencialde una ejecuciónexitosa (Kaufman, 1960). Lo menos que puededecirse es que las actividades compartidas parecen facilitar el
proceso deimplementación. Los objetivos de una política puedenser rechazados por muy diversas razones: pueden ofenderlos siste-
mas de valores personales de los responsables, lesionar lealtadesexternas a la organización, poner en riesgo el interés propio, oafectar relaciones ya existentes al otorgarles preferencia. Sinteti-zando este fenómeno, Petrick (1968: 7) ha escrito acerca "de ladificultad que enfrentan los grupos humanos para realizar eficaz~mente acciones de las que no están profundamente convencidos".
Por último, la intensidad de la actitud de los encargados puedeafectar también la ejecución de la política. Aquellos que tienen una
preferencia completamente opuesta pueden llegar a desafiar direc-ta y abiertamente los objetivos del programa. Cuando esto ocurre,
la implementación quedaen entredicho, ya que los subordinados- como los estados o las localidades - pueden negarse, por comple-to a participar en el programa (véase Bailey y Mosher, 1968).Actitudes de menor intensidad pueden provocar que los responsa-
bles intenten desviar o evadir clandestinamente sus obligaciones,cosa que suele ser un patrón de conducta generalizado (véase, por
ejemplo, Lazin, 1973). En estas condiciones, uno deberá indagar qué papel juega la vigilancia y la coerción, con el fin de explicar lasvariaciones en la eficacia de la implementación. En suma, el inves-tigador deberá reunir múltiples indicadores sobre diversos elemen
dos de laimplementación. Sin embargo, las variaciones en el apoyoque los operadores prestan a las políticas Jederales pueden ser explicadas parcialmente atendiendo a su entendimiento e interpre-tación de las normas y los objetivos así como a la manera en la que
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 88/117
tigador deberá reunir múltiples indicadores sobre diversos elemen-tos relacionados con la actitud de los encargados de la
implementación.
VINCULOS HIPoTÉTICOS ENTRE LOS COMPONENTES
DEL MODELO
A pesar de que presentamos nuestra argumentación en términosestáticos, es importante que se reconozca el carácter dinámico del
proceso de implementación. Factores capaces de afectar la ejecu-ción de una política en sus etapas iniciales, pueden tener muy pocarelevancia en algún momento posterIor. En consecuencia, es fun-damental que el estudio de la implementación sea diacrónico. Lasrelaciones que pudieron haberse identificado en algún momento no
deben aplicarse indiferentemente a distintos periodos del proceso.Con esta advertencia, vamos a describir y a justificar brevementealgunas relaciones hipotéticas (véase la Figura3).
Los estándares y los objetivos de las políticas ejercen.un efectoindirecto en el desempeño; su influencia en la variable dependienteestá mediada por otras variables independientes. Evidentemente,la prestación de servicios públicos estará influida por la forma enla que las normas y los objetivos sean comunicados a losresponsables de la implementación y por el grado en que esasmismas normas y objetivos faciliten la supervisión y el condiciona- .
miento dela conducta. Los estándares y objetivos tienen un impactoindirecto en la actitud de los responsables a través de las actividadesde comunicación entre las organizaciones. Las respuestas de losresponsables frente a la política estarán basadas, en parte, en las percepciones e interpretaciones que tengan de los objetivos. Estono quiere decir que un buen nivel de comunicación contribuyanecesarialllente a una disposición positiva por parte de los encarga-
tación de las normas y los objetivos. así como a la manera en la queéstos les fueron comunicados.
Los estándares y los objetivos tienen también un impacto indi-
recto en la disposición de los responsables a través de las actividadesque tratan de· obligar a su cumplimiento. En efecto, aportan losfundamentos que permiten a las autoridades sustentar su relacióncon los encargados de la implementación, pertenecientes a otrasorganizaciones. Po'r ejemplo, las normas y los objetivos imponenlímites a las sanciones alas que las autoridades pueden recurrir legítimamente; de igual manera, ayudan a definir los márgenes dediscrecionalidad concedidos a las agencias responsables. Cuandose autoriza la retención de fondos, es también posible ejercer diversas modalidades de poder coactivo. Por el contrario, cuando
no se permite la retención de fondos, los superiores se ven 9bligadosa valerse exclusivamente de los poderes normativo y remunerativo.Las actividades que buscan hacer cumplir las normas y objetivos pueden alterar la actitud de los responsables, mostrándoles lasventajas de la participación y, muy posiblemente, las desventajas deoponerse a una implementación efectiva. Por lo demás, al emplear la coacción, los funcionarios encargados del control pueden asegu-rar sólopasajeramente la subordinación de los funcionarios respon-sables, sin que cambien sus actitudes hacia el programa. Por ejemplo, el recurso a las auditorías excepcionales puede disuadir a
los encargados de la implementación de usar los fondos de maneraincompatible con las normas y los objetivos de un programa, auncuando no pueda impedirles que continúen cuestionando su conve-niencia.
Proponemos la existencia de vínculos entre los recursos de las políticas y otros tres componentes del modelo. El tipo y la magnitudde losrecursos disponibles ejercerán influencia sobre las activida-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 89/117
entre las organizaciones y las características de las agencias respon-sables. Las actividades qu'ebuscan se cumplan las normas y objetivosde una política pueden aportar vitalidad y experiencia adicional.alas dependencias, mejorando su capacidad para desarrollar los pro-
Vale la pena subrayar alg~mosde los rasgos distintivos del modeloque hemos presentado. Este modelo delinea varios factores que
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 90/117
gramas. También puede ser una fuente de apoyo político que facilitela eficacia de la implementación. La naturaleza de las actividadesde enfon;ement, incluyendo el suministro de asistencia técnica, es-tará a su vez influida por las características de las instancias encar-gadas de la implementación, Debido a que muchos de losmecanismos de.oblígatoriedad asequibles a los ·superiores de unaorganización no pueden ser utilizados cuando la implementaciónrequiere la cooperación interorganizacional o intergubernamental,el tipo de poder al que recurren los superiores - sea normativo,remunerativo o activo - se verá afectadopor las relaciones forma-les e informales existentes entre las organizaciones que elaboran ylas que implementan la política. Asimismo, cuando eligen métodosalternativos de control y seguimiento, se puede esperar que los
superiores estén siendo sensibles a las características de las instan-cias encargadas de la implementación. Las dependencias que cuen-tan con personal competente y con un buen liderazgo requeriránformas de asisten~ia diferentes a las que necesitan las agencias con
personal in~ompetente y con liderazgo deficiente. De manera simi-lar, las agencias que tienen recursos políticos limitados pueden ser más vulnerables al poder coactivo que las que gozan de amplioapoyo entre los ciudadanos particulares y los funcionarios públicos.
6 Aunque nuestro esquema ha sido elaborado sobre la base de variables dicotómicas,el cambio y elconsenso en torno a las metas deben ser considerados como continuos a largode los cuales se ubican las políticas. A pesar de que hemos decidido hablar en términos de"tipos ideales", reconocemos que las decisiones polítícas quedarían ubicadas a lo largo dediversos puntos en las dos dimensiones.
modelan los nexos entre la política y su desempeño, asimismoespecifica qué tipo de relaciones existen entre estas variables inde-
pendientes. Es también un auxilar en la descripción del proceso deimplementación de las políticas y sirve como guía para la investiga-ción, formulando hipótesis sugerentes. Aunque el modelo es rela-tivamente complejo, sostenemos que un análisis de los vínculos
propuestos por él puede conducir a la elaboración de explica-ciones .más .'sistemáticas sobre el desempeño de las políticas.Aunque no es nuestro propósito exponer con detalle cada uno delos vínculos incluidos en el modelo, podemos ilustrar su utilidad. Siempleamos las tres explicaciones generales sobre el fracaso de laimplementación que propuso Kaufman{1973: 2) por vez primera,
podremos destacar su importancia al hacer un resumen de nuestro
modelo.
ELPROCESO DE COMUNICACIÓN
La eficac.ia.de la implementacióIi exige que los subordinados(encargados) sepan lo que están obligados a hacer. A medida quelos' mensajes pasan a través deeualquier red de comunicaciones,corren el riesgo de distorsionarse y dar lugar a directrices contra-dictorias, ambigüedades, incongruencias en las instrucciones y exi-gencías incompatibles entre sí. Pero aun cuando las directricesy los requisitos son claros, pueden surgir problemas si los subordi-
nados (los encargados) uo logran comprender cabalmente lo que seespera de ellos.
Cuatro de los componentes de nuestro modelo abordan este problema: los estándares y los objetivos de la política, la comunica-cíón interorganizacional y las actividades de enforcement, las carac-terísticas de la dependencia responsable y la actitud de los
encargados de la implementación. Nos interesa particularmente elgrado hasta el cual los estándares y los objetivos de la política sontransmitidos con claridad, exactitud, congruencia y oportunidad alos encargados de la implementación. Varios estudios han analizadoel impacto que tiene el proceso de comunicación en el desempeño
otorgaba un amplio margen de decisión a las instancias estatales ylocales para definir sus propios criterios respecto al tipo de benefi-ciarios y de programas susceptibles de recibir apoyo. Según unfuncionario federal, hubo cuando menos un estado que definió alestudiante "en desventaja" como aquel que carecía de educación
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 91/117
de la política. Los estudios sobre impacto judicial (Milner, 1971;Canon y Kolson, 1971; Wasby, 1973; Dolbeare y Hammond, 1971)
han señalado con frecuencia que la incapacidad de los jueces de juzgados menores para acatar las decisiones de los tribunales supe-riores puede atribuirse, en parte, a su desconocimiento de lasresoluciones de esos últimos o a la imposibilidad de comprender
plenamente la naturaleza de esas decisiones.Los problemas inherentes al proceso de comunicación se mani-
fiestan claramente en el caso del Título lde laLeyde EducaciónElemental y Secundaria de 1965 (ESEA).7 Los funcionarios de lasoficinas de educación en los niveles estatal y local anticiparon queiba a ser una ley de "ayuda general". Muchos de ellos fueroninducidos a creer que, una vez aprobado y sancionado, el programaofrecería apoyo a una gran diversidad de programas educativos-impresión reforzada por la amplia difusión que se dio a un docu-mento erróneo que enlistaba los programas "permisibles bajo laley". Sin embargo, el programa contemplaba una serie de requisitosimportantes, que destacaban el "enfoque exclusivo" de la ayuda aniños en desventaja.
Aunque la fórmula del Título 1para la asignación de los fondosfederales precisaba, efectivamente, que la ayuda estaría destinadaa los niños en desventaja, no se especificaban ni en la ley original nien los primeros reglamentos desarrollados por la Oficina Estadou-
nidense de Educación los tipos de programas educativos que po-drían cumplir los requisitos para recibir el financiamiento; así, se
7 La información relativa a la implementación del Título 1del Decreto sobre Edu,caciÓnElemental y S~cundaria de 1965 (ESEA) fue tomada del proyectó de investigación de losautores sobre la implementación de la política federal en educación.
artística, musical y física. Ese estado aplicó pruebas a los estudiantesde sus sistemas escolares utilizando criterios de "evaluación de las
necesidades" y encontró que casi todos estaban "en desventaja".Posteriormente, asignó los fondos del Título 1 para apoyar progra-mas en aquellas tres áreas y distribuyó el financiamiento alejándosede los propósitos fundamentales de la legislación.
En este caso, la ambigüedad y la confusión iniciales se debieron,engran medida, a que las disposiciones estatutarias tendían princi-
palmente a asegurar la responsabilidad fiscal y sólo tangencialmen,.te se referían a los estándares y los objetivos del programa. En lasautorizaciones subsiguientes, el Congreso pudo exponer con muchamayor especificidad y claridad sus propósitos. Al final, la Oficina deEducación reelaboró sus reglamentos estipulando que debían de-sarrollarse programas que contribuyeran al mejoramiento de lashabilidade,s cognoscitivas básicas (como las de la lectura y matemá-ticas). Como resultado, el estado que mencionamos adoptó nuevoscriterios de "evaluación de las necesidades", situándose así dentrode los lineamientos federales.
EL PROBLEMA DE LA CAPACIDAD
El éxito de la implementación depende también de la capacidadque tenga la organización responsable para realizar su encomienda.La capacidad de implementar políticas puede verse entorpecida por
factores tales como la sobrecarga de trabajo y la preparación defi-ciente del personal, la insuficiencia de información y de recursosfinancieros, las restricciones de tiempo. Comentando la incapaci-dad habitual de los subordinados para cumplir con exactitud lasinstrucciones de su,ssuperiores, Kaufmali (1973:3) escribe: "Al
\
enfrentarse con exigencias que no puede satisfacer (el subordina-do), desarrollará sus propias políticas para manejar la situación. El
probléma consiste en que sus políticasrara vez coinciden con las delos jefes".
Cuatro de los componentes de nuestro modelo están relaciona-
ejemplo, en el informe que rindió sobre las instancias reguladorasindependientes del gobierno federal (1971) el Consejo Asesor so- bre Organización Ejecutiva del Presidente Nixon concluia que lasdebilidades de las dependencias .se debían a deficiencias organiza-tivas y estructurales. Asimismo, el monopolio virtual de la industria
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 92/117
Cuatro de los componentes de nuestro modelo están relacionados con la incapacidad: los recursos de la política (su carácter ycantidad), la comunicación entre organizaciones ylas actividades de
inducción (el suministro de apoyo político, la asesoría y , la asistenciatécnica), las características de las dependencias responsables (lacompetencia del personal, la capacidad de liderazgo, la vitalidad,los nexos formales e informales con quienes -elaboran las políticas)y el entorno eéOnÓnllco, social y político (la opinión pública, losgruposde interés organizados, la situación económica de la juris-dicción).
El análisis de Derthick (1972) sobre el programa de laAdminis-tración Johnson de creación de comunidades nuevas dentro de lasciudades, ofrece evidencias sobre la forma en la que la incapacidad
puede inhibir la implementación. La autora informa que los funcio-narios federales enfrentaron obstáculos legales insuperables cuan-do intentaron vender los terrenos excedentes abajo precio.Además, el gobierno federal no pudo hacer un uso eficiente de losrecursos e incentivos de que disponía.
Como el gobierno dependía de los funcionarios locales en lamedida en la que ellos eran los agentes de su intención básica,todas las deficiencias de estos funcionarios para actuar eficaz-mente - ya fuera para conseguir apoyo público, para superar
la oposición o para conformar una OFganizaciónadministrati-va - se convertían en impedimentos propios del gobierno fede-ral mismo (Derthick, 1972:88).
El fracaso de las activades regulatorias del gobierno suele ser explicado también como una consecuencia de la incapacidad. Por
tivas y estructurales. Asimismo, el monopolio virtual de la industria petrolera sobre la información relativa a las reserVas de combustibleya los suministros para el futuro hace extremadamente difícil, si no
imposible, la supervisión de las políticas y de las prácticas de lasindustrias por parte de los funcionarios gubernamentales. Es posi-
ble sostener también que los intereses privados pueden ser incapa-ces de someterse totalmente a los estándares y objetivos de la
-política gubernamental. Un caso sería el de las compañías de servi-cios públicos, que al enfrentar las demandas de la Agencia deProtección Ambiental y de otros cuerpos del gobierno, han llegadoa alegar que el-acatamiento a las normas no es ni económica nitecnológicamente factible.
CONFLICTOS RELACIONADOS CON LA ACTI"nJDANTE LA POLÍTICA
La implementación corre también el riesgo de fracasar silos responsables se rehúsan a hacer lo que se espera de ellos. Losconflictos relacionados con las actitudes surgen cuandp los subor-dinados (los encargados de la implementación) rechazan las metas
propuestas por sus superiores. Las metas ylos objetivos puden ser rechazados por diversas' razones: porque atentan contra los valores
personales de los responsables o contra sus relaciones de lea~tad conagentes externos a la organización, porque violentan su interés
propio o porque alteran rasgos o procedimientos de la organizaciónque los encargados de la implementación desean conservar (Kauf-man,1971).
Si bien nos preocupa especialmente el problema de la actitudde los responsables de la implementación, también nos interesanlos otros cuatro componentes del modelo que ejercen influencia
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 93/117
RIPLEY,R. Y Franklin, G. (1982), Bureaucracy and policy implementation.
Homewood, IL: Dorsey Press.
ROSSITER,C. (1961), The federalist papers. New York: The New AmericanLibrary Inc.
SABATIER,P. (1986), "Top-down and bottom-up approaches to implemen-
t ti h" J l f P bli P li 6 ( t 1) 21 488. Recomendaciones prácticas para
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 94/117
tation research". Journal of Public Policy, 6 (part 1), pp. 21-48.
___ YKIosterman, B. (1981), "A comparative analysis of policy imple-
mentation under different statutory regimes: The San Francisco Bay
Conservation and DeveIopment Commission, 1965-1972". En D. Maz-manian y P. Sabatier (Eds.), Effective Policy (pp. 169-206). Lexington,MA: D.C. Heath.
___ y Mazmanian, D. (1983), "The conditions of effective implemen-
tation: A guide to accomplishing policy objectives", en F. Nigro y L.
Nigro (Eds.), Readings in Public Administration (pp. 93-107). NewYork: Harper and Row.
SALAMON,L. (1981), "Rethinking public management: Third-party go-
vernment and the changing forms of government action". Public Po-
licy, 29 (3), pp. 255-275.
SHARP,E. (1981), "Models of implementation and policy evaluation:
Choice and its implications", en D. Palumboy M. Harder (Eds.),
Implementing Public Policy (pp. 99-115). Lexington, MA: LexingtonBooks.
STONE,C. (1980), "The implementation of social programs: Two perspec-tives". Journal of Social1ssues, 36 (4), pp. 13-34. .
STONE,C. (1987), "Summing up: Urban regimes, development policy, and
political arrangements" en C. Stone y H.Sanders (Eds.), The politics
of urban development (pp. 269-290). Lawrence: University Press of Kansas.
THOMPSON,F. (1984), "Policy implementation and overhead control", en
G. Edwards (Ed.), PublicPolicy Implementation (pp. 3-26). Green-wich, CT: lA!Press.
VANHORN,C. y Van Meter, D. (1976), "The implementation of intergo-
vernmental policy", en C.lones y R. Thomas (Eds.), Policy Making ina Federal System (pp. 36-92). BeverIy HilIs, CA: Sage Publications.
WEIKART,D. y Barret, B. (1976), "J>lannedvariationfrom the perspective
of a model sponsor", en W. WilIiams y R. Elmore (Eds.), Social
program implementation (pp. 125-148). New York: Academic Press.
YOUNG,O. (1980), "International regimes: Problems of concept forma-tion". World Politics, 32 (3),331-356.
la implementación de las políticas
que involucran a múltiples actores:una evaluación del campo*
DESDE PRINCIPIOS de los año~ setenta, la literatura académica
en torno a la implementación delas políticas se ha expandido
a una velocidad vertiginosa. Aun antes de la aparición del estudio
de Pressman y Wildavsky 0973, 1979, 1984), que despertó tanto
interés entre· estudiosos y profesionaJes, se habían realizado ya
diversos estudios de caso e intentado las primeras incursiones en el
análisis teórico. Sin embargo, el volumen y, en muchos sentidos, lacalidad de los esfuerzos aumentaron notoriamente después de la
publicación de aquel libro. La producción abarca casos exitosos y
fallidos de implementación en distintos ámbitos de las políticas, así
como numerosos estudios predominantemente teóricos. En gran
parte de los. trabajos más recientes se observa la intención de
combinar el análisis empírico con la elaboración teórica. Por lo
demás, el campo de estudio ha recibido grandes beneficios de
diversas investigaciones que se han orientado a desarrolJar los
instrumentos metodológicos del análisis de la implementación, a
estudiar las variaciones en el proceso de implementación según lasdiversas ramas del gobierno, a definir detalladamente los rasgos de
la implementación intergubernamental y a analizar las posibles
diferencias en la implementación que pudieran derivarse de los
* Publicado originafmente con el titulo "Policy Recomm~ndat~ons for Multi-Actor
Implementatíon: An Assesment of the FicW', en Joumal ofPubltc Pohcy, va!. 9, no. 1, 1989,
pp. 181-210. Traducción al espatiol de Glona Elena Berna!.
[413¡
distintos tipos de políticas. Algunos ipvestigadores -aquellos que
adoptan una perspectiva "de arriba hacia abajo" (top-down)- se han
concentrado principalmente en los aspectos del proceso de imple-
mentación que supuestamente son accesibles a quienes deciden for-
malmente las políticas y pueden controlarlos. Otros autores -que
Pero ¿exactamente de qué manera esperan que resulte útil la
investigación que estudia las formas de implementación en las que
intervienen múltiples actores? Un objetivo de la mayoría de los
estudios recientes es alcanzar el nivel de la explicación, es decir,
desarrollar o contribuir al desarrollo de una teoría empírica de la
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 95/117
malmente las políticas y pueden controlarlos. Otros autores que
sostienen la perspectiva "de abajo hacia arriba"(bottom-up)- han
lanzado severas y múltiples, críticas tanto de orden metodológico
como político, al enfoque "de arriba hacia abajo". En algunos casos
se reconoce la necesidad de conjuntar las ventajas de ambos enfoques
(véase, por ejemplo, Wittrock, 1985); actualmente se está desarrolla-
do cuando menos un proyecto de investigación que pretende lograr
esa combinación en un contexto empírico (Sabatier y Hanf, 1985).1
Generalmente, la implementación requiere la acción conjunta de
diversas organizaciones, Desde la perspectiva de los investigadores
de la imp1ementación, los problemas analíticos y prácticos más inte-
resantes son los que se refieren a la implementación cuando ésta tiene
lugar en contextos que involucran a diversos actores y, habitualmente,
a distintas organizaciones y no los que se refieren a una única entidad responsable de la implementación. En los espacios políticos densos,
la regla es que participen en la implementación múltiples organiza-
ciones; esta misma regla también quiere seguirse en el caso de
problemas públicos complicados, a menudo imbricados con otros
problemas adicionales, así como eulos sistemas políticos en los que
el poder y, frecuentemente, la autoridad, son compartidos por diver-
sas unidades. Aun cuando los investigadores de la implementación
no sean explícitos al respecto, la mayoría parece suponer que su
trabajo tiene una gran relevancia directa para los contextos en los que
opera una gran cantidad de organizaciones.2
1Como este ~nsayo e~tá ya sobrecargado de referencias a la bibliografía sobre imple-
m~ntaclón, se omiten aqul las citas correspondIentes a las dJVersascategorías de estudios.
O Toole y MomJoy, 1984, presentan parte de las referencias para cada tipo de contribucion.
. . 2 Ha.bJtualmeme los estudios de implementación de las políticas no establecen distin-
cIones cUJdado~~sentr~ los procesos en los que intervienen múJtiples actores, los procesos
en los que partl?pan diversas organizaciones y los procesos a través deJos que las organiza-ciones mteractuan.
desarrollar o contribuir al desarrollo de una teoría empírica de la
implementación. El hecho es que no existe hasta la fecha una teoría
de la implementaciónque goce de consenso general; los investiga-
dores siguen trabajando desde diversas perspectivas teóricas y em-
pleando variables diferentes para sustentar sus descubrimientos
(O'Toole y Montjoy, 1984). Otro de los propósitos reconocidos,
relacionado con el anterior aunque diferente, consiste en auxiliar a. .
quienes están realmente implicados en los procesos políticos; para
ello se pretende elaborar recomendaciones fundamentadas empí-
ricamente, que sean valiosas, viables y, por lo mismo, susceptibles
de aplicación. El principal objetivo de este ensayo es indagar hasta
qué punto se han logrado avances en la consecución de ese último
propósito. Algunas de las preguntas que se plantean son: ¿Qué tipo
de recomendaciones han sido planteadas por los investigadores que
estudian casos de implementación en los que intervienen múltiples
actores? ¿Cuál es el grado de coherencia de esas propuestas? ¿De
qué manera parecen haber sido aplicadas por los implernentadores?
y ¿a que podrían atribuirse esos hallazgos?
Como una posible vía de respuesta a estas cuestiones, examinaré
en este ensayo la bibliografía producida en el campo de la implemen-
tadón. Existen, desde luego, vías alternativas -por ejemplo, la de la
interacción directa entre el investigador y el cliente- a través de las
cuales las recomendaciones sustentadas en la investigación pueden
ser utilizadas por quienes elaboran y aplican las políticas. Sin embar-go, vale la pena examinar la literatura porque, como afirman Lind-
blom y Cohen (1979:2), "cuando se utiliza la investigación social,
habitualmente no hay de por medio ninguna relación entre el inves-
tigador y el usuario. Por el contrario, éste obtiene sus lineamientos del
trabajo publicado por científicos sociales que le son desconocidos".
Este ensayo pretende hacer una revisión crítica del campo deinvestigación, tal y como se refleja en los productos publicados.Los datos del análisis son, pues, los textos mismos, en particular sus correspondientes recomendaciones y la información que ofre-cen sobre el uso de esas recomendaciones en la práctica. Situán-
desarrolla entreJa declaración inicial de una política y el último desus impactos en el mundo circundante. Otros restringen la nociónde implementación a las acciones de quienes son los responsablesformales de la ejecución de una política, excluyendo de este modo1) a los actores no designados oficialmente, aunque sean participan-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 96/117
dose~el estudio en un campo de activo desarrollo, y tomando encuenta la diversidad de corrientes académicas y teóricas que influ-
yen en la literatura, resultaría presuntuoso exigir la exhaustividad.El material de investigación que aquí ha sido ignorado es el quese ha producido fuera del ámbito de la lengua inglesa. En efecto,no se ha hecho una revisión cuidadosa del trabajo basado enexperiencias europeas y otros países. Sin embargo, la muestraanalizada incluye más de 300 textos3 que cubren los principalescampos de implementación de las políticas (con excepción de las
políticas de seguridad y defensa nacionales, temas virtualmenteignorados por los académicos que hacen investigación sobre laimplementadón). Se incluyen en el análisis la mayor parte de los
asuntos más prominentes mencionados por la bibliografía. A ellose añade una revisión sistemática de aproximadamente 40 publi-caciones periódicas especializadas aparecidas durante los últimosdiez años; esta revisión se realizó con el fin de asegurar quequedaran incorporadas la mayoría de las tendencias importantesen el campo. Todas estas contribuciones fueron analizadas paraidentificar cualquier información que pudieran contener respectoa las recomendaciones para la implementación de las políticas y
. su uso práctico. I
En nuestro caso, definir el campo de investigación no es tan fácil
como pudiera parecer. Por ejemplo, los investigadores de la imple-mentación no han llegado a acuerdos sobre lo que constituye elobjeto común de sus estudios. Algunos consideran que la imple-mentación se refiere a todo 10 que forma parte del procesp que se
3 Buena parte del material al que hacemos referencia río fue incluido en la bibliografíaque se presenta al final de este capítulo.
) g q p ptesindispensables -desde el punto de vista técnico y/o pblítico- para
. la implementación de la política, y 2) la cuestión de si las acciones
prescritas· tienen posibilidades de lograr el efecto esperado en elmundo real. (Para una discusión sobre algunos aspectos relativos ala definición de la impleme~tación véanse, por ejemplo, los trabajosde Sabatier y Mazmanian, 1983;O'Toole y Montjoy, 1984).
No es posible examinar aquí todas las obras relacionadas con eltema. Con el fin de limitar el alcance de nuestra empresa dándoledimensiones razonables y, también, con el propósito de restringir elanálisis al asunto que nos interesa en particular (es decir, las reco-mendaciones orientadas a perfeccionar los procesos de implemen-taCÍón en los que intervienen múltiples actores), se omitió una
porción significativa de los estudios interorganizacionales; sólo seincluyeron aquellos estudios que abordaran expresamente el pro- blema de la implementación. De igual manera, se excluyó la litera-tura más general en torno al proceso de las políticas y su análisis.Por último, aunque contienen recomendaciones basadas en la· in-vestigación, algunas obras han restringido sus proporciones de ma-.nera muy específica a la política particular que estudian y al contexto político, económico y temporal singular del proceso de implemen-tación sobre el que trabajan. Así pues, también se han excluido lasrecomendaciones extremadamente específicas que no pretenden
ofrecer conclusiones útiles de tipo general a los diversos agentesque pudieran estar interesados en la implementación de las políti-cas. De cualquier modo, este tipo de recomendaciones suele ser muy escaso, con la excepción de cuatro o cinco estudios.
1. Los·hallazgos: el estado·del
campo de investigación
Imaginemos la poco probable situación de que algún participante
d t i d d i l t ió d últi l t
1 despliega de manera muy resumida las variables que los investi-
gadores consideran más importantes para el estudio de la imple-
mentación. Esta tabla incluye las variables que aparecen como
determinantes en más de 100 estudios. La mayoría de los trabajos
it d li it id tifi i bl i t t t d
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 97/117
en un proceso determinado de implementación de múltiples actores
estuviera interesado enla sabiduría acumulada de los investigado-
res. Nuestro sujeto pretendería obtener esa sabiduría tal y como se presenta en 'las publicaciones, con el propósito de ampliar sus
perspectivas de éxito -no hace falta aquí definir lo que el éxito
pudiera significar para el sujeto en cuestión- (cf. Barrett y Fudge,
1981: 25-26). Si el actor examinara la bibliografía, ¿qué es lo que
encontraría en ella?
Algo que seguramente le llamaría la atención de manera inme-
diata es la gran cantidad y confusión de puntos de vista que existen
en torno de los principales componentes de la implementación y la
operación misma del proceso. En efecto, los investigadores no
coinciden en los principios que deberían regir unareoría de la
implementación, ni tampoco en lo que respecta a la~'variables
cruciales para el éxito del proceso. Inclusive, si bien en su mayoría
no lo asumen explícitamente, los investigadores tampoco concuer-
dan en lo que podría considerarse como el éxito de la implementa-
ción, especialmente cuando se refieren a contextos en los que
interviene una multiplicidad de actores. Pero aun entre aquellos
investigadores que parecerían estar de acuerdo sobre ciertos su-
puestos básicos -por ejemplo, los que parten de una perspectiva
precisa "de arriba hacia abajo" y que pretenden que se dé cumpli-
miento a la voluntad de una autoridad central-, parece haber una
considerable divergencia de opinión.
Este ensayo no tiene como principal propósito hacer un análisis
de la literatura empírico-teórica sobre la implementación que invo-
lucra a múltiples actores. No obstante, dado el vínculo existente
entre losesfuérzos empíricos y las recomendaciones de los analistas,
este asunto adquiere cierta relevancia para nuestro tema.La Tabla
citados se limitan a identificar variables importantes ya presentadas .
en forma de lista de verificación o como elementos de las discusio'"
nes teóricas en torno al proceso de implementaCión, sin ofrecer modelos acabados del proceso. Sigue siendo cierto que
hasta ahora, el campo de investigación manifiesta una fuerte
preferencia por la inducción. Lo que se ha producido son nume-
rosos estudios de caso; por lo demás, la mayor parte del trabajo
conceptual consiste en hipótesis muy vagamente vinculadas en-
tre sí y en esfuerzos por identificar las variables determinantes
que se derivan de los materiales de caso (Sabatier y Mazmanian,
1983: 152).
Sin embargo, varios investigadores llegan, sin lugar a dudas, a
establecer relaciones entre las variables, si bien a menudo de ma-
nera extremadamente complicada (tales son los casos de Mazma-
nianySabatier, 1981, 1983; Sabatiery Mazmanian, 1979, 1981,1983;
Mitnick y Backoff, 1984; Van Meter y Van Horn, 1975; Van Horn
y Van Meter, 1976). La tabla presenta únicamente las variables
importantes, sin esbozar los modelos en los que se incluyen y sin
resumir las propuestas prácticas planteadas por los investigadores.
TABLA 1
VARIABLES CONSIDERADAS COMO IMPORTANTES EN
LA BIBLIOGRAFiA SOBRE IMPLEMENTACIÓN
AckermannySteinmann (1982)
RECOMENDACIONES PRÁCTICAS PARA LA IMPLEMENTACIÓN
TABLA 1(Continuación)
Variables
Tensión elementos del contexto (por ejemplo, facto-. , ,
res económicos).
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 98/117
Steinmann (1982)
Alexander(1985)
Altenstetter yBjorkman (1976, 1977)
Ball (1976)
Bermany
McLaughlin (1976);Berman (1978);MacLaughlin (1976)
Estímulos, política, programa, implementación; va-
riables relacionadas con el contexto, las organizaciocnes, el medio y la percepción.
Ambigüedad en el planteamiento de las metas.
Claridad, consenso y reiteración de las decisiones'actitudes del personal, recursos coactivos, autoridad
basada en la buena reputación, homogeneidad de los problemas públicos, costos de la cancelación, papelde los medios de comunicación locales.
Claridad de las directrices, exactitud con la que secomunican las decisiones, intereses de los subordina-dos, preferencias políticas de los subordinados au-
toridad, aislamiento, sistema de sanciones, m;diosde persuasión, rama del gobierno, estructura de lainterdependencia entre las organizaciones, lista deverificación propuesta por Sabatier yMazmanian.
El contexto institucional (local) ejerce una influenciade la mayor importancia, especialmente en el casodel ambiente organizativo y de las motivaciones del?s participantes (desarrollo de materiales, capacita-Cióndel personal, planeación, reuniones frecuentes);
por el contrario, la política federal, la tecnología y losrecursos ejercen una influencia mínima.
las ~ari~bles importantes dependen del contexto (or-
galllzatlvo, político, social y legal). Claridad en lasmetas de la política, cantidad de actores participan-~es, grado de resistencia de los encargados de laImplementación, ineficacia o ineficiencia; grado decontrol ejercido por los niveles superiores.
Aprobáción, número de actores, persistencia,tiempo. .
BrowneyWildavsky (1984)
Browning, Marshall yTabb (1981, 1984);Browning y MarshalI(1976)
Bryner (1981)
Política formal (claridad en los objetivos y priorida-des validez de la teoría casual, suficiencia de los
rec~rsos financieros, suficiencia de poder); aprendi-zaje/adaptación.
El conteXtolocal es una variable principal (especial-mente la orientación de los objetivos locales y laideolo~ía de las coaliciones local.es ~ominantes); elestatuto,es una variable secundana; tiempo.
Claridad del estatuto, nivel del apoyo político ge·neral.
Claridad en las normas o en los objetivos del estatuto,grado de apoyo por parte de la agencia, "presencia oausencia de prejuicios en el programa que favorez-can o atenten contra el cumplimiento de las respon-
sabilidades de la agencia", "actitudes de lasautoridades de la agencia".
"El grado hasta él cual una organización a) teng~claridad consensual acerca de su tarea, b) esteadecuadamente dividida en partes relacionadasapropiadamente con los sub-ambie~tes corre:pon-dientes, c) esté integrada a través de mtcrcambl?s deinformación yde mecanismos efectivos de mane]? delos conflictos, d) cuente con conocimientos ~reClsosacerca de su desempeño y e) posea capaCIdad d.ereflexión ysea capaz de realizar los ajustes correctl-vos que requiera su propio comportamiento"; rele-vancia del problema, recursos de poder, acuerdo.
Demandas operativas, recursos, autorida.d apoyo: 44"factores a considerar"; estructura de la mterdepen-dencia.
Complejidad del mecanismo de cambio, grad? decambio cantidad de actores involucrados en cahdadde obje~ivos,número de metas, claridad de las metas,duración.
Davies y Mason (1982)
Durant (1984)
La economía, los recursos, la legitimidad ..
Dimensión del cambio conductual requerido, com-l jid d d l ió j bi i lí i
RECOMENDACIONES PRÁCTICAS PARA LA IMPLEMENTACIÓN
TABLA 1 (Continuación)
Al/tor(es)
Conflictos políticos locales, grado de mediación dela agencia local.
Condiciones del campo de implementación en el que
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 99/117
Elmore (1976, 1977,1978, 1979-80, 1985)
Goodwin y Moen (1981)
Gunn (1978); Hogwoody Gunn (1984)
plejidad de la ayción conjunta, ambiente sociopolíti-co, "el efecto dilataría de la desobediencia",actitudes de los responsables, validez de la teoríacasual de la política, "adecuación y credibilidad delos recursos coactivos".
Comunicación (transmisión, claridacl, consistencia),recursos (personal, información, autoridad, capaci-dad instalada), disposición o actitudes de los respon-sables, estructura burocrática (procedimientosestandarizados, fragmentación), complejidad.
Estructura de las relaciones de poder e incentivos,discrecionalidad, recursos.
Teoría técnica adecuada, apoyo del electorado, am- biente socioeconómico, aprendizaje.
Contenido de la política (intereses afectados, tipo de beneficios, grado de transformación previsto, sitio dela toma de decisiones, yncargados de la implementa-ción del programa, recursos) y contexto de la imple-mentación (poder, intereses, estrategias de losactores involucrados, características de la institucióny del régimen, obediencia y sensibilidad).
Comprensión de los responsables respecto de la in-novación, habilidades y conocimientos requeridos,accesibilidad de los recursos necesarios, compatibi-lidad entre las características organizativas y la inno-vación, grado de mótivación del personal.
Naturaleza de la política, estructura de la implemen-
tación, interferencia foránea, control sobre los res- ponsables de la implementación, recursos, teoríaválida.
Mensaje de la política, multiplicidad de agentes, perspectivas e ideologías, recursos, políticas de pla-neaciÓn.
Tipo de política (distributiva, regulatoria, redistribu-tiva).
Kirst y Jung (1982)
Larson (1980)
Lazin (1980)
Levitt (1980)
Luft (1976)
McLanahan (1980)
Majone y Wildavsky(1978)
Condiciones del campo de implementación en el queopera la agencia.
Grado de demanda de la política, teoría casual pre-cisa, incentivos.
Diferencias entre las organizaciones políticas loca-
les.
Complejidad del programa, capacidad de las organi-
zaciones.
Tiempo.
Metas de las políticas, procedimientos de implemen-tación, complejidad, cambios en el ambiente econó-
mico.
Vínculos administrativos.
Escala de tiempo para la introclucción de' poder~slegales, política de gasto ~úblico, cost? d~ ~port~~l-dad, la política como "víctIma del sacnfic~o ,preSlOnexterna instrumentos de la política, certidumbre deque se derivarán beneficios de la ~cción,fon~~laciónde la política como un fin en sí misma, establhdad delas relaciones entre organizaciones, elementos desorpresa y poder posteriores al c~m?io g~b~:na~e~-tal, imágenes, consultas, aprendizaJe, opllllon pubh-ca tendencias en las percepciones de los grupos deinterés, medios de comunicación, elaboración de po-líticas internacionales.
Incentivos.
Especificidad de las metas, grado de centralización, participación de los grupos de interés, confianza pú- blica.
Objetivos, recursos, teoría subyacente a la p~lítica,restricciones surgidas durante el proceso de Imple-mentación.
Papel de intermediario entre las diversas partes.
Marve1 (1982)
Mazmanian y Sabatier
(1981, 1983);Sabatier y
Número de niveles gubernamentales involucrados.
Tratabilidad (tractability) del problema (cuatro va-
riables), capacidad del estatuto para estructurar la Nixon (1980)
burocráticas, recursos, motivaciones,redes de comu-
nicación, mecanismos para alterar el acatamiento.
Claridad y coherencia en la comunicación
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 100/117
Mazmanian (1979, 1981,
1983); Sabatier y
KIosterman (1981)Mead (1977)
Mechling (1978)
Menzel (1981, 1983)
Montjoy y O'Toole
(1979); O'Toole y
Montjoy (1984);
O'Toole (1983)
Murphy(1971, 1973,1974, 1976)
Nakamuray
Smallwood (1980)
), p p
implementación (siete variables), variables no esta-
tutarias (cinco), éxito inicial en la implementación.
Fuerzas económicas y sociales del entorno nivel de
financiamiento, estructura de los incentiv¿s debili-
dad de las instituciones proveedoras, debilidadesadministrativas, restricciones políticas.
Incertidumbre técnica, conflicto interno.
Límites de tiempo impuestos por el estatuto "confi-
guración de las relaciones intergubernam~ntales"
rela~i~nes de apoyo entre los electores, estructura;
admmlstración de las organizaciones, reglas, estilosde coerción, oportunidad.
Modelo complejo del sistema de incentivos, inclu-
yendo las características del emisor, de la relaciónentre el em!sor y el receptor, del receptor, del con-texto orgalllzativo y del ambiente circundante.
Especificidad de la política, recursos, metas de la
~gencia, rutinas, visión del mundo, estructura de la
mterdependencia, requerimientos técnicos de la ta-
rea, facilit.ador, riesgo percibido para los responsa- bles de la lmplementación.
Incentivos, cantidad de aprobaciones, especificidad de los criterios, recursos.
Grado .de ~rans~orma~iónrequerida, .nivel de apoyocomumtano, eXIstenCIade personas capaces de re-
solver los problemas sobre la marcha (fixers).Grado ?e apoyo entre los responsables de la imple-
mentaclón, ?decuación del personal, energía con la
que se practIca la supervisión, leyy tradición, presióndel electorado.
Especificidad d~ la política, limitaciones técnicas
actores, arenas, estructuras organizativas, norma~
Nixon (1980)
Q'Brien (1980)
Pesso (1978)
Porter (1976)
Pressman y
Wildavskv (1984)
Reiny
Rabinovitz (1978)
Ripleyy
Franklin (1982)
Rodgersy
Bullock (1976)
Claridad y coherencia en la comunicación.
Superposición e incompatibilidad entre las disposi-
ciones legales.Reglas, supervisión.
Tecnología requerida por la tarea, tipo de interde-
pendencia, medio ambiente.
Multiplicidad de participantes, perspectivas, instan-
cias de decisión, intensidad de las preferencias, re-
cursos.
Distribución de los poderes, niveles de autoridad y
mandatos, cantidad de organizaciones, liderazgo de
las redes, nivel de competencia y conflicto.
Claridad en las metas de las organizaciones, apoyo
de los líderes de las organizaciones, grado de discre-
cionalidad respecto de medios y fines, organizacio-
nes nuevas vs. organizaciones ya establecidas.
Relevancia de las metas, complejidad, naturaleza y
nivel de los recursos, número de niveles, cantidad de
agencias, número de participantes.
Tipo de política.
Percepción de las normas legales, grado de simpatía
hacia las normas legales, costos y beneficios percibi-
dos por los responsables, factores ambientales, grado
hasta el cual la ley define con precisión quién es
responsable, si la ley especifica o no el tipo e intensi-dad de acatamiento que se requiere, sanciones per-
cibidas, si los beneficiarios tienden o no a unificarse
y sison o no capaces de asumir acciones enérgicas.
Especificidad del estatuto (cuatro variables) ygraclo
hasta el cual se puede forzar el cumplimiento del
estatuto (cuatro variables).
Estratcgia de implementación, tratabilidad del pro-
blema que aborda la política, contenido de la políti-
ca, estructura dc los sistemas sociopolíticos y
gubcrnamental más amplios cantidad de actorcs
J. Thompson (1982)
Van Meter y Van Horp.
(1975), Van Horn
Jerarquía, variables socioeconómicas.
Normas de la política, recursos, coerción, comunica-
ciones, características de las agencias responsables
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 101/117
Scharpf (1977, 1978),
Scharpf et al. (1978)
Skelcher,
Hinings, Leach y
Ransom (1983)
Smith (1973)
gubcrnamental más amplios, cantidad de actorcs,
grado de difusión del poder, actitudes personales e
institucionales de los actores, claridad, adecuaciónde los recursos, apoyo de los líderes, rutinas institu-
cionales.
Medio ambiente, rccursos, habilidades para descn-
volverse en la política burocrática, capacidad de ma-
. nejar la complejidad.
Nivel de conflicto, capacidad disponible para la re-
solución de conflictos, variables estructurales u orga-
nizativas.
Procesos de decisión y de control, recursos, relacio-
nes con el entorno, expectativas respecto a la super-
visión, rutinas, requerimientos técnicos, flujo tle
comunicación, normas de los grupos de trabajo, ha- bilidades conductuales, incentivos, apoyos cognosci-
tivos.
Estructura de los vínculos entre organizaciones.
Tensiones diversas entre políticas idealizadas, orga-
nización ,responsable de la implementación, grupo-
objetivo, factorcs ambientales.
Comportamientos individuales de los encargados de
la implementación.
Disposición local a aceptar el programa, mezcla de
los incentivos que ofrece la política y las condiciones,forma en la que e1problema se desenvuelve.
Nivel de discrecionalidad que ofrece la política, con-
senso, ethos/actitudes y liderazgo en la agencia, tipo
de presión que ejerce el entorno, capacidad de los
agentes responsables de la supervisión.
(1978, 1979a, 1979b),
Van Horn y Van Meter
(1976)
Weatherley y Lipsky
(1977)
Weiler et al. (1982)
de la implementación, condiciones políticas, cotidi-
cioneseconómicas y sociales, actitudes de los encar-
gados de la implementación.
Recursos, comportamientos adaptativos de losburó-
cratas del nivel operativo.
Disponibilidad de información básica, grado hasta el
cual son afectados los programas individuales por las
normas de desempeño establecidas, actitudes de la
agencia, recursos.
Tiempo, sistema de servicio civil, ambiente burocrá-
tico.
Negociaciones y actividades de solución de proble-
mas (fixing), disposición institucionales, competen-
cia de personal, presiones similares a las del
mercado, proceso de información, recursos.
Estatuto (carácter prohibitivo).
La revisión del material resumido en la tabla anterior indica que
hay posibilidades de llegar a ciertos acuerdos en este campo de
investigación. Sin embargo, hasta ahora se ha hecho muy poco para
sumar conocimientos. Aproximadamente la mitad de los estudios
publicados identifican como variables significativas las caraCterísti-
cas de la política misma (especialmente, los r.asgosconcernientes a
la claridad, especificidad y/o flexibilidad de las metas y los procedi-mientos y la validez de la teoría casual de la política); más o menos
la misma proporción de estudios aducen que los recursos (tanto
financieros como de otro tipo) son determinantes. Otras categorías
de variables identificadas con frecuencia incluyen: los actores res-
ponsables de la implementación o de las estructuras que abarcan a
una multiplicidad de actores, el número de actores involucrados las,actitudes y percepciones del personal responsable de la implemen-
tación, las simpatías políticas del electorado y la oportunidad con la
que se realiza el proceso -incluyendo la capacidad de aprendizaje
de los responsables-o No obstante lo anterior, un rasgo típico de la
investigación sobre implementación mucho más notorio en éste
recomendaciones de los analistas hayan sido de gran ayuda para
quienes tiene responsabilidades específicas? O, por el contrario,
¿han resultado irrelevantes? ¿Han llamado en alguna forma la
atención de los responsables las propuestas desarrolladas a través
de la investigación? ¿Qué tipo de respuestas han sido registradas en
l t di ?
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 102/117
investigación sobre implementación, mucho más notorio en éste
que en otros campos de la ciencia social, ha sido el poco esfuerzo
realizando conscientemente por desarrollar y someter a pruebasistemática las intuiciones surgidas en otros trabajos anteriores. En
c.onsecuencia, tampoco se han podido establecer distinciones per-
tmentes entre los trabajos potencialmente fecundos y los meramen-
te plausibles pero improductivos. Este descubrimiento coincide con
las observaciones de otros autores recientes, que señalan la carencia
de una t~oría general de la implementación, (véanse,por ejemplo,
los estudIOS de Alexander, 1982, 1985; Yde Mitnick y Backoff, 1984).
. Si algún responsable de políticas en busca de orientación prác-
tIca se desplazara del material empírico-teórico a los textos que
abordan cuestiones de interés más inmediato -por ejemplo, lasrecomendaciones que ofrece la literatura-, ¿qué es lo,que encon-traría?' \
i
2. Evidencia aderca de la
aplicación de las recomendaciones
Antes de analizar las recomendaciones de los investigadores, vale
la pe.na pr.eg~ntar -independientemente del carácter de esas suge-
renCIas- SIeXIste o no evidencia de que las recomendaciones delos
analistas hayan sido conocidas y puestas en práctica por los actores
de los procesos políticos. En otras palabras, las preguntas a plantear
serían de este tipo: ¿qué información ofrece la literatura acerca de
los esfuerzos que pudieran haber hecho las autoridades por utilizar
los resultados de la investigación? ¿Ha habido una buena cantidad
de intentos? ¿Son más bien escasos? ¿Puede considerarse que las
los estudios?
Para comenzar, no parece que ninguna de las preguntas anterio-
res haya sido formulada efectivamente enlas investigaciones sobre
implementación ni, mucho menos, que haya recibido respuesta
satisfactoria. El campo de investigación carece absolutamente de
información respecto del grado en el cual ha sido aprovechado -y
con qué fines- el conocimiento científico sobre la implementación
en ~aque intervienen múltiples actores (e incluso sobre la variante
de un solo actor). Aunque algunos estudios tratan acerca del grado
y tipo de conocimientos que se han aplicado en otros campos, éste
no es el caso en nuestra área paiticular de invéstigación.
Entre lo materiales examinados, se identificó solamente una
discusión en torno a un intento particular de aplicación de lasrecomendaciones. La literatura no incluye ningún estudio destinado
a auxiliar a los investigadores para que sus resultados y consejos
puedan llamar la atención de quienes participan en los proce-
sos políticos, ni para formular sus análisis de manera que ofrezcan
mayor utilidad práctica a los responsables de las políticas.
En el único estudio que examina un esfuerzo por poner en la
práctica los resultados de la investigación sobre implementación,
Kelman (1984), estudioso de las políticas públicas, aporta un infor-
me personal de sus propios intentos por sacar provecho de los
hallazgos de la investigación, durante el periodo en el que abandonósu puesto académico para prestar sus servicios en el gobierno na-
cional de los Estados Unidos. (Es muy posible que el mecanismo de
difusión de la información de las ciencias sociales acerca delproceso
de implementación sea principalmente el desplazamiento de inves-
tigadores hacia organizaciones involucradas más directamente en
el desarrollo de las políticas). En opinión de Kelman, "gran partede la insatisfacción respecto a las aportaciones que ha hecho lainvestigación sobre implementación se debe a que sus resultados noabordan con suficiente profundidad los problemas específicos de laimplementación ...La literatura no ofrece casos en los que se hayanaplicado, prospectiva yprescriptivamente, las generalizaciones exis-t t l ó it d d ll l d i l t ió "
la investigación generada en ciencias sociales es extensa yaume.ntarápidamente, el conjunto de estudios empíricos acerca de la a~II~~-ción práctica es relativamente pequeño y discontinuo. Una reVISI?nde la bibliografía demostró que habían únicamente 27 estudIoSempíricos que incluían alguna información significativa sobre el
problema de cómo mejorar la utilización práctica de la investigaciónd i i " ( 591) M d l t di i d
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 103/117
tentes, con el propósito de desarrollar planes de implementación"(p. 77). Kelman informa sobre su intento de apoyar el diseño de una
política de la burocracia federal encargada del área de energía; su?ropósito era aprovechar las lecciones de la investigación sobreImplementación como un recurso heurístico. Pero hasta esta for-ma particular de aplicación resultó muy poco estimulante. Desde la
perspectiva de Kelman, la literatura sólo ofrece "generalizacionesmuy vagas" (p. 88), correspondientes principalmente a la variedad"de arriba hacia abajo". Asípues, no podemos extraer conclusionesni si~uiera del.esfuerzo personal de Kelman por poner en prácticauna lIsta reducIda de propuestas. Cuando el autor tuvo oportunidadde d~sarrollar un plan para la implementación y aplicación de una
p?IítiC~For parte del gobierno, pero su plan no fue nunca puesto enejecqcIOn. Kelman tampoco extrajo de esta experiencia ningunac.on~~usión~ue se refiera a la validez de su muy elemental perspec-tIva. de arnba hacia abajo".
~ás allá de este ejemplo, no parece haber bibliografía alguna~elacIOnada con el problema del uso de la investigación sobreImplementación. Si los responsables de las políticas examinaranlaliteratura en busca de pistas útiles que otros pudieran haber apro-vechado, no encontrarían ninguna. Buena parte del material publi-cado sobre los procesos de implementación con múltiples actores
explora el comportamiento de las organizaciones y existe evidencia?e que el problema de la aplicación práctica también ha sidoIgn~rado en los text~ssobre las organizaciones. Beyer y Trice (1982)realIzaron un estudIO sobre el particular. Estos autores descubrie-ron que, "a pesar de que la bibliografía en torno a la utilización de
de organizaciones" (p. 591). Muy pocos de los estudios consignados'por estos autores trataban asuntos relacionados con los contextosen los que operan múltiples organizaciones, y ninguno de ellos secentraba en el tema de la implementación de políticas a cargo de
una multiplicidad de actores.
EVIDENCIAS SOBRE LAS
RECOMENDACIONES PRÁCTICAS
. ¿Qué recomendaciones relacionadas con el proceso de la polí-tica han planteado realmente las investigaciones sobre la imple-mentación a cargo de múltiples actores? La única respuesta breveque podemos dar es: no muchas. Las recomendaciones más precis~sy directas que contiene la literatura se resumen en la Tabla 2. Smduda, algunos de los textos registrados constituyen contribuciones'muy importantes y más adelante discutiremos algunas de ellas. Sinembargo, a pesar de la apariencia voluminosa de las orientaciones,manifiesta en la longitud misma de la tabla, parece razonableafirmar que hay menor cantidad de recomendaciones útiles de loque pudiera pensarse a primera vista.
RECOMENDACIONES pRÁcncAs PARA LA IMPLEMENTACIÓN
TABLA 2 (Continuación)TABLA 2
RECOMENDACIONES PRÁCTICAS DE LA LITERATURA
SOBRE IMPLEMENTACIÓN Autores
Bardach(1977, 1980) Asegurarse de contar con una buena teoría; "elegir
Este estudio aporta numerosas recomendaciones para los responsables de la implementación, relacio-nadas con: el aprovechamiento y sentido de la opor-t id d l ti i ió d l últi l i
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 104/117
( , ) g ; guna estrategia adecuada para enfrentar la entropíasocial" (esto significa "diseñar programas sencillos ydirectos que requieran e! mínimo posible de tareasadministrativas", utilizar -de ser posible- mecanis-mos similares a los del mercado,· distribuir efectivomás que servicios en especie, ejercer la comunica-ción a través de unidades de organización social dedimensiones reducidas, reducir al mínimo la canti-dad de instancia de probación); "diseñar escena-rios"; contar con alguien que desempeñe la funciónde resolver los problemas que aparezcan e~ los "jue-gos de la impleh:\entación"; establecer fases y tiem- pos para la ejecución de la política.
Berman (1978, 1980) "La implementación, sea programada o adaptativa, pueda resultar efectiva si se aplica a la situación
apropiada; en contraste, un desajuste entre el enfo-que yla situación sólo agravaría aquellos problemasque los diversos enfoques de la implementación se
proponen superar". En el caso de! enfoque de la"implementación programada", se debe establecer límites a la discrecionalidad, supervisar el compor-tamiento, modificar los incentivos. Si e! enfoque esde "implementación adaptativa", "se procurará lo-grar solamente acuerdos de tipo general, quizá im- precisos o hasta tácitos, en torno a los objetivos. Encaso de que no se consiga el acuerdo respecto de losobjetivos, bastará entonces el consenso respecto delos medios". Este tipo de enfoques tambi.én "recla-
man la participación activa de los actores más rele-vantes"en la solución de los problemas y en laaportación de estímulos para una mayor motivación ..El autor confíaen la pertinencia de otorgar "un nivelconsiderable de autonomía a 10sresponsables de laimplementación", y delinea cinco parámetros paracontribuir a definir el tipo de situación.
Browne y Wildavsky(1984)
Browning, Marshally Tabb (1980, 1984)
tunidad, la anticipación de los múltiples escenariosde la implementación, la reducción de los compo-
nentes de los programas, la cantidad de instanciasy, tiempos de aprobación, el efecto de sumar otr~sal programa y el aprovechamiento de las probabi-
lidades.
"La implementación dual, parcialmente retrospecti-va y parcialmente prospectiva, el diseño simultánea-mente retrospectivo y prospectivo, es resultado denegociaciones y compromisos".
"Nadie tiene tanta certidumbre acerca de la manerade mejorar la ejecución de las políticas como Saba-tier yMazmanian. Sus prescripciones se derivan cla-ramente del diagnóstico -el cual, a su vez, se centraen la fortaleza del estatuto ..." "Los problemas políti-
cos tanto como los técnicos pueden obstaculizar se-riamente la implementación de políticas queimponen un fuerte control central!zado sobre sist~-mas políticos de grandes dimenSIOnes y compleJi-dad". "En algún momento, este tipo de investigaciónaplicada puede fusionarse con la investigación puraque aborda los procesos de cambio en los sistemas políticos; así, la idea optimista de que la política seauna palanca fácilmente manipulable, comicnza ades-vanecerse. Pensamos que el estudio de la implemen-tación está llegando a ese punto".
"Los esfuerzos de regulación que hace el gobierno ...deben fundamentarse en una concepción clara de los
imperativos de la implementación. Requieren de una base estatutaria precisa, sustentada en un apoyo po-lítico generalizado. La responsabilidad de tomar y
dar forma alas decisiones políticas fundamentales no puede ser delegada a los tribunales ni a las agenciasadministrativas. Si no se toma en cuenta el aspecto
estrictamente político de la implementación, es
probable que los objetivos de la política -inde-
pendientemcnte de su importancia o validez- resul-
ten débiles e ineficaces".
"Teniendo siempre a la vista la Ley de Murphy, los
partidarios de la política podrían preguntarse repe-
tidamente qué es lo que puede fallar, a medida que
se diseñan las políticas y se establecen mecanismos
para la ejecución del programa En última instancia
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 105/117
Elmore (1976, 1977,
1978, 1979-80, 1985)
Se recomienda que los responsables de la implemen-
tación tomen en consideración 44 factores. Los re-
medios que podrían ser apropiados para enfrentar
los problemas de la implementación, incluyen: dise-
ñar los programas de tal forma que se reduzca la
participación de otros actores (por ejemplo, median-
te los contratos con terceros o la participación de
empresas públicas), establecer una sólida relación
con elfuncionario de más alto nively lograr su apoyo,
y comportarse como si la obtención de ayuda por
parte de los actores clave fuese sumamente difícil. Se
discuten explícitamente diversas tácticas.
Que las instituciones responsables de la implemen-
tación tengan pleno poder.
Dar seguimiento a la política a través de todas las
ramas gubernamentales; sin embargo, no debe espe-
rarse grandes progresos.
Las concepciones verticales (de arriba hacia abajo)
no son muy útiles, aunque "cierto tipo de problemas
son más susceptibles de solución cuando se adopta
una perspectiva que cuando se adopta otra". Se
requieren estrategias. Sugerencia: practicar el dise-
ño retrospectivo inquiriendo, en cada nivel, "¿qué
capacidad tiene esta unidad de afectar el comporta-
miento objeto de la política? y ¿qué recursos requie-
re esta unidad para conseguir ese efecto? En la
última etapa del análisis, el analista o la autoridad
describen una política que oriente los recursos haci~
aquellas unidades organizativas que tengan más po-
sibilidad de lograr el mayor efecto posible". En un
trabajo posterior (1985), el autor sugiere practicar
el diseño en ambas direcciones: retrospectiva y pros-
pectivamente.
Hjern (1982); Hjern y
Hull (1982, 1985);Hjern y Porter (1981)
para la ejecución del programa. En última instancia,
la implementación de los programas de desarrollo
rural exige prudencia y perspicacia política en eldiseño, yreclama que se les ejecute con compromiso,
ingenio y no poca buena suerte".
Lista de verificación: darIe precisión a la política;
reducir al mínimo los vínculos en la cadena de la
implementación; impedir la interferencia externa y
ejercer un estrecho control sobre los encargados de
la implementación; asegurarse de que los recursos
sean adecuados y oportunamente provistos; funda-
mentar la política en una teoría válida de causa-
efecto; obtener el consenso y la obediencia.
"...losfactores que Gunn propone controlar son pre-
cisamente aquellos que con mayor dificultad pueden
someterse a control". Se requieren prescripcionesque no estén sujetas a prejuicios liberal-democráti-
cos, y se necesita eliminar el supuesto de que el
establecimiento de los objetivos precede a la imple-
mentación.
Elegir cuidadosamente a los analistas -quizá se re-
quieran distintos analistas para las diferentes tareas
del proceso-. Difundir ampliamente la información
concerniente a proyectos exitosos que puedan servir
como ejemplo.
"Aunque es necesario adoptar una perspectiva lega-
lista, la estructuración de las relaciones entre las
organizaciones es una condición indispensable para
el análisis de la implementación".
"Constitucionalismo empírico": consiste en identifi-
car los patrones organizativos y en averiguar "cuáles
de todas esas formas diversas de organización son o
podrían llegar a ser la óptimas desde una perspectiva
prescriptiva constitucional".
TABLA 2 (Continuación)
Recomendaciones
Concretar la atención en el programa, a través de la
estructura de la implementación (1981) o en el pro-
blema (1982). Tomar en cuenta la importancia del papel de la intermediación.
" i l d l i ld d i l l j
McMahon, Barrett y
Hill (1982)
Utilizar o aumentar el poder de negociación de los
partidarios del programa cuyos intereses sean consi-
derados apropiados por quienes inician la transfor-
mación. Los analistas de las políticas deberían
atender a sus propias convicciones éticas y no "con
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 106/117
"...si lo que se desea es la igualdad social, lo mejor
sería establecer normas reguladoras únicamente en
aquellas áreas en las que el poder de negociación delos sujetos sea escaso en comparación con el poder
de las agencias, o cuando el poder de negociación
esté distribuido equilibradamente entre los sujetos.
Una solución adecuada para los sectores en los que
esas condiciones estén ausentes podría consistir en
utilizar otros recursos legales, tales como los incenti-
vos, los impuestos o la solución colectiva de los pro-
blemas por parte de quienes están sometidos a lasregulaciones".
Uti!izar lasgeneralizaciones propuestas por la inves-
tigación para formular nuevos planes de implemen-
tación. El diseño de los programas debe ser sencillo.
!dentifíquense todos los pasos necesarios para I~
lmplementación. Las "habilidades de la organiza-
ción" deben estar "previamente establecidas o ser susceptibles de creación expedita".
:'...mediante la identificación de los diversos gruposmvolucrados y de lo que cada uno puede ganar o
perder, quien toma las decisiones puede determinar
no solamente las ganancias agregadas netas en favor
de la sociedad en su conjunto, sino también la distri-
bución de esas ganancias entre los grupos, incluidos
aquellos beneficios que no sean de tipo económico ...
El análisis aportará la información necesaria para
que los responsables de la elaboración de las políti-
cas puedan identificar los problemas de implemen-
tación y predecir las reacciones de los grupos
afectados ...Este método puede ayudar a determinar
los incentivos que se requieren para asegurar la cul-
minación exitosa de Un proyecto". Una vez hechoesto, procédase a trabajar.
Mazmanian y Sabatier
(1981, 1983);
Sabatier y Mazmanian
(1979, 1981, 1983)
atender a sus propias convicciones éticas y no "con-
tribuir a perfeccionar, alegre y acríticamente, las
armas del controlo de la subversión ...".
La implementación debe tomarse en cuenta desde la
etapa de formulación de la política. Los que van aser
los responsables de la implementación deben ser
incorporados en la formulación de la política, no de
manera simbólica, sino real. Otórguese también al
analista de las políticas un "papel más prominen-
te"en el proceso de elaboración de la política.
Se propone una lista de verificación ~erivada del
modelo de implementación. Realícense esfuerzos
por estructurar la política de tal manera que 1) el
mandato tenga objetivos claros y coherentes, 2) el
mandato se fundamente en una teoría adecuada, 3)
el mandato otorgue a los responsables de la imple-
mentación un nivel suficiente de autoridad y estruc-
ture el proceso de implementación con el fin de
maximizar "la probabilidad de que los grupos-obje-
tivo se desempeñen de acuerdo con lo deseado", 4)
los líderes del proceso de implementación tengan
"habilidades administrativas y políticas sustantivas y
se comprometan con las metas estatutarias", (5) el
programa sea respaldado por un electorado organi-
zado ypor "unos cuantos legisladores prominentes o
bien un alto funcionario", y (6) la prioridad relativa
de los objetivos estatutarios no corra riesgo de ser
socavada con el tiempo por el surgimiento de políti-
cas públicas incompatibles o por transformacionesde las condiciones socioeconómicas, que debiliten la
teoría casual del estatuto y el apoyo político que
recibe. En caso de que las variables aquí incluidas no
puedan ser manipuladas, se ofrecen recomendacio-
nes adicionales (por ejemplo, si no hay acceso a una
teoría válida, procúrese lograr el aprendizaje a partir
TABLA 2 (Continuación)
Recomendaciones
de la implementación; si no se puede asignar la im-
plementación a unidades operativas que apoyen la
política, dispóngase la intervención de agentes exter-nos, etcétera.
Delegar con absoluta precisión las responsabilida Nakamura (1980)
federales, estatales y locales a actuar con más ener-
gía"; organizar a los electorados los niveles estatal ynacional.
Recúrrase al buen liderazgo.
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 107/117
Montjoy y O'Toole(1979);
O'Toole y Montjoy(1984);
O'Toole (1983)
Murphy (1971, 1973,1974,1976)
Delegar con absoluta precisión las responsabilida-
des; llevar a cabo una supervisión permanente; con-
tar con recursos adecuados; si hay conflicto, asegurar
el apoyo de consultores especializados.
Evitar los plazos estatutarios rígidos que puedan
impedir la implementación; es preciso "tomar en
consideración la configuración de las relaciones in-
tergubernamentales y/o interinstítucionales" al dise-
ñar la política; es necesario "generar relaciones de
apoyo mutuo entre los diversos grupos de beneficia-
rios involucrados". En el estudio proporciona tam-
bién algunas recomendaciones para imprimir nueva
dirección a la política durante la implementación.
Evitar una coordinación jerárquica simplista; hacer
énfasis en las relaciones colaterales e informales'c on ce de r i mp or tan cia a l a di ver si da d. '
Analizar las políticas prospectivas con el fin de de-
terminar si son o no susceptibles de implementa-
ción; prestar atención a los objetivos de las agencias
y a las visiones del mundo; estructurar, de acuerdo
con las necesidades, la interdependencia entre or-
ganizaciones, para llegar a acuerdos sobre la veloci-
dad de la acción y la coordinación (la variable clave
aquí no es simplemente el número de actores invo-
lucrados); proveer recursos adecuados para la im-
plementación; procurar la correspondencia entre la
estructura de la implementación y losrequerimientos
técnicos de la política; recurrir al uso de facilitadores.
Utilizar "estimaciones de factibilidad'" reducir lasexpectativas. '
Se requiere una mejor administración en los niveles
estatal y federal; generar "fuerzas locales capaces de
hacer contrapeso, para estimular a los funcionarios
Nelson (1977)
Porter (1976);
Porter y Olsen (1976)
Pressman y Wildavsky(1984)
Radian y Sharkansky
(1979)
Radin (1977)
Ripley y Franklin
(1982)
Rodgers y BuIlock
(1976)
"...debemos revisar y perfeccionar la manera en la
que caracterizamos y analizamos las alternativas deorganización, puesto que en muchas de las arenas
más importantes son estas alternativas las que defi-
nen el campo real de la elección".
Se requiere claridad y coherencia en la comunicación
de la política.
Establecer correspondencia entre la estructura ad-
ministrativa y la tecnología. "Las tareas basadas en
tecnologías que requieran de ajustes mutuos y/oque
se realicen en ambientes cambiantes y heterogéneos
necesitan de una estructura organizativa que incluya
unidades pequeñas y localizadas".
La impIementación no debería estar divorciada de la política. Considérese la necesidad de utilizar "me-
dios más directos" de implementación, dada "la com-
plejidadde la acción conjunta".
Se requiere tener en cuenta el proceso de implemen-
tación durante el diseño de la política.
Utilizar el recurso de la negociación; involucrar a los
funcionarios estatales y locales y a los beneficiarios.
No es necesariamente aconsejable tomar en cuenta
la implementación durante el diseño de la política;
de hacerla así, se correría el riesgo de comprometer
a la política con los intereses de los burócratas.
Emplear las donaciones en bloque (sobre la base de
casos individuales); recurrir a la conformación de
redes en el nivel local. Prestar atención a la imple-
mentación durante el periodo de diseño del pro-
grama.
Recurrir a la ley para la implementación de ciertostipos de transformación social.
Scharpf (1977, 1978);
LAURENCEJ. O'TOOLE, JR.
TABLA 2 (Continuación)
RECOMENDACIONES PRÁCTICAS PARA LA IMPLEMENTACIÓN
TABLA 2 (Continuación)
Autores
La elección de la estrategia de implementación (bu-rocrátic~, según mecanismos de mercado o de tipoexhortatIvo) debe estar sometida a variaciones de-
pendiendo de las circunstancias. '
Aflojar las estimaciones rígidas de los recursos nece-sarios (incluyendo entre ellos el tiempo); reformar elservicio público; contar con un grupo disponible deanalistas; prestar "atención cuidadosa al ambiente
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 108/117
p ( , );Scharpf et al. (1978)
Van Horn y Van Meter (1976);
Van Meter y Van Horn(1975);Van Horn (1978, 1979a,1979b)
Weatherley y Lipsky
(1977)
Reorganizar la estructura de la toma de decisiones
para adoptarse a los requerimientos técnicos de la política; buscar políticas alternativas que puedan ser adoptadas e implementadas dentro de estructurasdeterminadas; trasladar las responsabilidades a es-tructuras más apropiadas; recurrir a la "activaciónsele~tiva" de d!~erentes partes de la red (lo cualreqUIere de habIlIdad en el trazo y manejo de la red).
Los responsables de la elaboración de las políticas~~berían dedicar mayores esfuerzos a la compren-SIOnde las estrategias de implementación.
Suavizar los supuestos jerárquicos cuando 1) existaconsenso entre los encargados de la implementaciónen torno a la misión común, 2) el entorno no sea
a:I:~rso a la implementación 3) los equipos de super-VISIOnestén fragmentados, agotados, o se muestren
propensos a culpar a los responsables de la imple-mentación.
El modelo apunta hacia la identificación de "varia- b,le~susceptibles de manipulación". Tiene valor heu-ns~I~~. Se requiere mejorar el clima a favor delanalIsls de las políticas en el nivel local. Las autori-dades .c~~trales deberían separar las funciones desupervlslon de las de asistencia técnica. Las autori-dades centrales deberían especificar los fines perono los medios. '
"... pue~to que la implementación está esencialmentedeter~lllada por los comportamientos adaptativosde qUIenes Sonresponsables de poner en práctica lanueva ley, sería. útil analizar esos comportamientosCo? e.1fin de e~tlmular los que se ajusten mejor a losobJetI;o~ pú~lIcos más importantes y desestimular las practIcas lllconvenientes".
organizativo de los nuevos programas".
Hacer de la negociación y de las tareas de arreglo y
ajuste las principales guías de decisión de las agen-cias; reducir la complejidad y la confusión en elcampo de operación por medio de acuerdos institu-cionales; elevar elnivel de competencia del personal;aumentar las instancias de presión del tipo de mer-cado; desarrollar procesos efectivos de información.
(El estudio proporciona breve resumen de las reco-mendaciones planteadas en las investigaciones sobreimplementación. Propone tres tipos de estrategiasque rebasan las que se limitan a recurrir al mercadoo a la jerarquía del Estado. Estas otras estrategiasson: las que implican la reducción de las alternativasa considerar -concentrándose en los casos crucialesy en las arenas determinantes-; las que contiene"meta-decisiones"; y las que "rebasan las fronterasadministrativas tradicionales", permitiendo un mar-gen considerable de discrecionalidad).
La política de tipo prohibitivo puede utilizarse comorecurso para corregir los desequilibrios en las nego-ciaciones que la implementación requiere.
En primer lugar, la mayoría de los textos registrados aquí -aun-
que no todos-, ofrecen recomendaciones sumamente generales y poco detalladas. Se trata de trabajos de corte empírico que habitual-mente concluyen en una reducida y superficial discusión en torno aciertas implicaciones o sugerencias; algunas de éstas están supues-tamente dirigidas a quienes participan de manera directa en el
proceso político. En muy escasas ocasiones los estudios sobre im-
pleI1Je
ntación I1Ja
nifiestanesfuerzos serios por proporcionar pres-cripciones adecuadas. Hay, desde luego, excepciones a la regla; tal
es el caso d el trabajo de McMaholl, Barrett y ffill (1982). Pero engener;d, I1JUclwsde las sugerencias prácticas que propouen los
iuvestigadores sou poco precisas, poco persuasivas o ambas casas.La evaluación que hizo Elmore bace ya varjos aflos, sigue estandovigente en lo esencial: "... las investigaciones sobre l a implementa_ ción de las Po/[ticas COntienen mucba descripción y muy pocas
prescripcioues CUando acudimos a la s investigaciones más sobre
LAURENCEJ.O'TOOLE,JR
PLEMENTACIÓN' ASPARALA1M AhoraACIONESPRACfIC las de otros,
RECOMENO , dicalmente a dacio-alistas se oponen ra iza a las re comen
hacen ciertos an , nsistencia caracter , mente aseverar ' e la mco l' necesana , bien, afIrmar qu campo, no imp Ica alor para qmenes
nes prácticas en :stecarezcan en absoluto de ~sito comúnmenteq ue las propuestas cesos políticos. Un prop expresamente los
' , n los pro 1 ponerse , 1 deP
artICipan e . 'o del cual sue en , nCI'aSOCial,es e' 1 servIcI 'de la CIe , d
reconocIdo, a 1 recomendacIOnes 1 'das ofreClen o untos y as stab eCI t
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 109/117
prescripcioues ... CUando acudimos a la s investigaciones más sobre_
salientes en busca de apoyo Para prever problemas eventuales deimplementación, encoutramos opiniones inconexas y deliberada_ mente vagas" (1979-80: 601),
En seguodo término, parecería que la mayoría de las recomen_daciones que se ofrecen no estáo SUstenradassólidamente en la
iovestigación empirica. Es evidente que existan algunas difiCUltadesserías para generar información útil en un campo tan fuertemente
dominado por los estudíos de caso y pUr la inducción. Esta caracte_ ristica tiene gran importancia eu nuestro campo de investigacióo y
podria atribuirse a la COmplcjidad de lo s fenómenos que se a na l izan.Cada nuevo estudio nos ofrece COnsej",basados en la muy endeble
evidencia empirica de uno o muypocos casos; entre esos COOsejosse enCUentran los relacionados Con la s diversas variables qne seCOnsideran determinan t es en la implementación real izada por múl.tiples actores. No es raro enCOntrarrecomendaciones originadas en
investigaciooes empíricas en las que la cantidad de factores Consi-derados como particularmente relevaotes rebasa, ca n mUcho, eln(unero de casos analizados, (Ejemplo de ello Son los estudios de
Ba rd ach ,19
77 ; Mechling, 1978; OToole , 19 83 YWeimer, 1983). Seadvierte que en el caso de estos estudios se PUdieron haber heChomuchas otras inferencias a par tir de la información fáctica.
En tercer lugar, lasrecomendaciones que aporta la literatura dela implementación en la qUeintervienen múltiples actores, /legan aser COntradictorias entre.si: algooas de la"ugereocias prácticas que
. . tos y as . stab eCI, . tdescubnmIen tI'vas teóncas ya e , 'ones preVIamen e1 P
erspec , d pOSICIapuntalar as , d f alsa autonda a de implementa-' b/l co y e proceso / '
apoyo SIm o lIs participantes en d'osos de pohtlcasA / como o 1 estu 1
aceptadas. SI mucbo del trabajo de os1979). Paradójicamente,ción aprenden f 1985' Lindblom y Coben, .os contradictooos e(Sabatiery Han, 'los estudios y los canse) . '0
también es cierto que eden prestar algún ser~cl ~e las prescrip-incluso incoherentes ~~podria darse al bechoó~~an contradicto-
¿Qué explicacl~~ía sobre la imPlemen:ac~ucirse y que valdríaciones de la blbiJog chas causas que podoa a orias generales: elrias? De entre las mu texto elegirá dos categ guarda la teOlíala pena explorar, este las normas y el estado que
torno a '/desacuerdo en de investigaclOn. ia de consensomp
írica en este campo las normas, La aus:nc 1 "éxito" dee d n torno a nstItuye e
El desacae, o e respecto de lo que co desacuerdo eaentre los investig,adore~duce inevitablemente a o~uscritas. Desde
la implementacIOn, COdacionesque merecen serbasaría los límites1 recomen blema re s
torno a as , .. detallado de este pro valores que algunoluego, un anabsls Baste decir que cIertos tantes para elproce-de nuestro ensayo"d ran normalmente Impor / n la coordinación,
. dores conSl e ales estaoa (poinvestIga "n entrelos Cti olrcto con otro 1
so de la imPlemehntaeCnI:ia~pueden entrar en COI'smIoproceso perci-. la co er n ese m Ila rapIdez y , s participantes e , 'dad el acceso, e
e diverso l dlversl, ..de valores qu tales -a saber, a l'a participaCIOTI-fundamen , duna amp 1 biTÍan como ia a la locabda y . 1984).entido de pertenenc 79' O'Toole y MontJoy,
s t'oy y O'Toole, 19 ,(MonJ
LAURENCEJ.O'TOOLE JR D . , .e Igual forma, diferentes estruct d'
(Hjern y Porter 1981) tend' ., uras e Implementación. ' eran a electuar d "
los llltereses de los part' , e manera dIfere.ncIal, IClpantes Por eslllvestigadores que propo' . ,o es que algunos de los
rCIOnanconsejos 1 'les pueden entrar en cont d' " a as autondades centra-
, ra ICCIOncon qui f dacIOnes explícitamente d' . 'd enes ,orecen recomen-
ope~ativo, a los administrad~r::; d~ : los, bu~ocratas. del nivel partIcipan en al rgalllzaclOnes pnvadas que
guna estructura de im le
la diversidad de los sistemas en los que participan múltiples actores,
sino que encuentran en ella grandes virtudes.
La teor ía emp írica y los proverbios para la implementación . El
desacuerdo en torno a las normas no plantearía problemas especia-
les a nuestro hipotético personaje responsable de las políticas,
interesado en obtener consejos prácticos de la literatura de la im-
plementación. Siempre y cuando los valores y los intereses de los
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 110/117
guna estructura de im le . ,comunit~rios o a los políticos locales, p mentacIOn, a los grupos
Un ejemplo de cómo difieren las . 'tre los investigadores· dI' perspectIvas normativas en-
e a Impleme t ' , ,entre los conjuntos de pro n aCIOn, es la dIvergencia
puestas que ofrece' ,a la tradición vertical (de a 'b h' ,n qUIenesse adhIeren
rn a aCIaabaJ) ,la perspectiva inversa de la b h' ,o y qmenes trabajan en
una simplificación e~ageradase ~bCI~arnba, Aunque constituiría, . a atn mr la bre h
POSIcIOnesa las diferencI' . c a entre esas dos, , as normatIvas o por!'
Ulllcaso principales ya p . d 1 lcas como sus causas" esar equelos d"
ambas posturas han recono 'd ,aca emlCOSque suscribenCI o en CIerta m d'd .
las dos puede reclamar el m ' e 1 a que nmguna de
p.robable que la investigacI'o?nnOpol~o.sobre la verdad, parece poco1 ' empmca logre '1
e abIsmo existente entre 1 ' por SIso a, Superar as recomendac' d 1
Un examen de la Tabla 2 ' , IOnes e os dos grupos.serVlra para de
algunas divergencias muy a d mostrar que persisten, 'gu as entre amb
concIerne a las sugerencias 1 ' , os grupos en 1 0 que para a aCCIOnMu h dI'
gadores que sostienen la p " , . c os e os mvesti-. , OSICIOnvertical .mcomodos ante la com 1 "d se SIenten sumamente
perdido" de la' 1 p eJl ~~ y la heterogeneidad del "eslabónlmp ementacIOn Con 'l' 1
1982), creyendo ident'f' mu tlp es actores (Hjern1 Icar en esa aparente" f' , '
mas del fracaso estatal P con USlOn"los sínto-, '. or otro lado al " '.
el Impacto irreal ya m d ' cntlcar mSls tentemente, enu o contraprod ClOnes formuladas por 10 d" ucente de las recomenda-
1982), se deduciría que m~c~~;entes .(McMahon, Barret y H ill,
tiva "de abajo hacia a 'b" de qUIenes sostienen la perspec-rn a no solamente se dedican a catalogar
plementación. Siempre y cuando los valores y los intereses de los
investigadores se hagan explícitos (condición que no se cumple en
todos los casos), el participante en el proceso puede seleccionar de
entre las recomendaciones ofrecidas aquellas que le parezcan las
más adecuadas. Sin embargo, hay una dificultad adicional que cons-
tituve una seria amenaza contra este campo de investigación: a pesar
de la riqueza de los estudios realizados durante la década pasada,
la teoría empírica no se ha desarrollado debidamente. Por lo menos
en parte, esta afirmación parecería corresponder al estado natural
de las cosas: corno han observado algunos investigadores de la
implementación, antes de que la teoría empírica pueda evolucionar
hacia un mayor refinamiento y de que puedan proponerse recomen-
daciones pertinentes a quienes participan en el proceso de la polí-
tica, los investigadores deben asumir la tarea de registrar la
complejidad y la diversidad de los patrones de organización a través
de los cuales tiene lugar la implementación (Hjern y Porter, 1981;
Hjern, 1982; Hjern y HuIl, 1982; Nelson, 1977).
Sin embargo, independientemente de las justificaciones que
pudieran aducirse, el hecho es que el grado de desarrollo que ha
alcanzado nuestro campo de investigación aún impone restricciones
muy reales a la calidad de las recomendaciones disponibles para
quienes participan en el proceso de la política, No sólo ha habido
una muy pobre creación teórica, corno se indicaba anteriormente,
sino que las pautas e ideas más prometedoras desarrolladas por
algunos estudiosos han sido ignoradas por el resto. Es posible que
éste sea un problema común a toda la ciencia social. Sin embargo,
parece especialmente grave en el caso de un terna corno el de la
446
• . LAURENCE J. O'TOOLE, IR.
Implementación a cargo de múlti 1tado interés hasta fecha ~ es actores, campo que ha conci-
mediante el recurso s m~y reCIentes~ que se está desarrollando
enumeración incomp~e:u~ a; perspectIv~s teóricas distintas. Una
influencia en los estudi e ~s.perspectIvas que podrían ejercer
múltiples actores inclu~;í=~~lfIC?Ss~bre la implementación con
organizaciones y la teo' d n
. la CIenCI~política, la teoría de lasna e as relacIOnes entr "
-especialmente algunas de s . d d . e orgaruzaclOnesusvane a escomo 1 T'
multiplicidad de actores resultanexitosas (afirmación que se cum-
ple para casi cualquier conjunto de criterios de éxito que pueda
adoptarse). Además, propone estratagemas para darle la vuelta a
diversos problemas de implementación. No solamente no se ha
dado seguimiento sistemático a las propuestas de Bowen, sino que
su trabajo ni siquiera ha sido citado en las revistas que enlistan las
investigaciones especializadas.4 En contraste, se sigue haciendo
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 111/117
usvane a escomo 1 Tde transacción (que se t e ana ISISde costos
las or aniza' ' nu re a su vez de la economía, la teoría de
la teo;ía del~:~;~:~~~~7~s ~o~tractuales; cf. WilIiamson, 1981),
las relaciones intergubern e a ~pende~cia del poder, teorías de
blica y materiales sobre lamenta e~, ~eonas sobre la elección pú-e corpOratIVIsmola te ' d 1
(por ejemplo, Mitnick y Backoff 19 ' ,ona. e ~ agenciatorno a la disposición a obedecer' 84), Ylas InVestIgacIOnesen
La afirmación de que el cam' d' .de un enfoque organizador po e Inves~I~acióncarece todavía
conocimientos, se puede c¿;or muestra sU~IcIenteacumulación de
elaboración teórica de p. oba~menCIOnandoel caso de una
Sumo Interes que h .d .completo en la literatura sobre la im le a.,SI o Ignorada por la contribución de Bowen (1982) p ,mentaclOn.Nos referimos a
teórica muy precisa que . A~Ulencontramos una posición
Pressman y Wildav~ky so~e °fone d~rec~~mentea la hipótesis de
probabilísticas del fracaso ~: 1 : i:p;IcacIOn-~~edicción con bases
las circunstancias en las q' .pementaclOn en la mayoría deuemtervlenen múltiple t
asume directamente el ra' s ac ores. Bowenrebate desde el interior m~onamdlentode Pressman y Wildavskyy lo
d Ismo e su marco de ref . (esde la teoría probabilíst' ) 1 erenClas es decir,
Ica, a autora ofrece . proposiciones realistas y verif bl. d . un conjunto de
ción explícita sobre las reco Icad e~,Y esarrolla una argu menta-men aCIOnesquesu t ' f responsables de la im 1 . '. eona o rece a los
p ementaclOn A dif . d Pressman y Wildavsky la d B . . erenCIa e la teoría de
incontestable de que 'm ~ owe? .contnbuye a explicar el hechouc as polItlcas en las que participa una
referencia al análisis de Pressman y Wildavsky en numerosas pu-
blicaciones como la obra clásica sobre la implementación compues-
ta por múltiples actores. Un ejemplo reciente de ello es el estudio
de Kelman (1984). En la última edición del libro de Pressman y
Wildavsky (1984), este último incluye una cita del trabajo de Bowen
en una bibliografía sobre la implementación, pero no menciona el
argumento de la autora ni tampoco reformula en absoluto su propia
posición teórica sobre el tema.
Otro ejemplo importante de la falta de continuidad y de acumu-
lación de conocimientos es un rasgo del trabajo mismo de la mayoría
de los investigadores norteamericanos sobre la implementación. A
pesar de la extensa producción de los académicos europeos, espe-
cialmente la de quienes están vinculados a la tradición "de abajo
hacia arriba" y la de algunos investigadores que han hecho análisis
comparativos importantes, gran parte de la investigación en los
Estados Unidos se lleva a cabo ignorando esos avances. De ello
existen muchos ejemplos. Consúltense simplemente los estudios de
Alexander, 1985; Mitnick yBackoff, 1984; y Ripley y Franklin, 1982.
En este último trabajo, los autores comentan: "Desearíamos poder
concluir determinando si la implementación en los Estados Unidos,
tal y como la hemos escrito, constituye un caso único o si, por el
contrario, tiene similitud con la que se lleva a cabo en otras socie-dades. En realidad, no lo sabemos; esto se debe principalmente a
4 Resulta considerablemente más difícilmostrar la ausencia de uso de una propuesta,
que mostrar su presencia. Sin embargo, hay un hecho revelador: la publicación Social
Science Cita/ion Inde'C todavía no ha registrado ninguna cita de la investigación de Bowen.
RECOMENDACIONES pRÁCfICAS PARA LA IMPLEMENTACIÓN 449
demos que la investigación sobre implem~ntación, parcialme~te
basada en campos teóricos que están expenmentando sus propIas
dificultades, no logre aportar prescripciones sólidas a quienes par-
ticipan en los procesos políticos. .Habrá que añadir a las dificultades mencIOnadas el hecho. ~e
que, aun cuando diferentes investigadores concretan su atenclOn
en problemas similares Ypretenden apoyarse e~ los esfuerz~s de
que ninguna atención se ha prestado a la implementación fuera de
los Estados Unidos" (p. 207). En la última edición de este trabajo
(1985) ya no aparece esta afirmación, pero tampoco hay mención
alguna acerca de la investigación sobre implementación que se
desarrolla ampliamente fuera de los Estados Unidos,
~xiste un pro?lem~ adicional que trasciende la responsabili-
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 112/117
en problemas similares Ypretenden apoyarse e los esfuerz s de
los demás, el campo de investigación ha tendIdo a pro~uc:r no proposiciones comprobadas -lo qu.~redu~daría en pr~sc.npcIO~es
precisas y coherentes para la aCCIOn-,SIllOdescubnmIentos m-
compatibles entre sí; esto ocurre in.cluso en los ca~os en lo,s ~ue
los investigadores diseñan sus estudIOSdesde las mIsmas o sImIla-
res perspectivas. Como resultado, las rec~n:endaciones sue:en
tener un carácter proverbial más que heunstIcO. Usamos. aqUlel
término "proverbial" con toda intención, a l~ ~aner~, d~ SImon e,n
su análisis sobre los "proverbios de la admmIstracIOn . No sena
una exageración sustituir la palabra "administración" por la ,de
"implementación" en el siguiente pasaje de su muy conocIda
crítica a la administración pública ortodoxa:
dad dIrecta de los mvestIgadores de la implementación. Muchos de
los ca,mp.osde investigación mencionados más arriba, que podrían
con,tnbmr a! desarrollo de la teoría empírica de la implementación,
estan expenmentando dificultades internas; por tanto puede espe-
:arse que las trasladen, de una u otra manera, al estudio de la
Imple~e~tación. B~ste ~encionar un solo ejemplo. En el campo de
la t~on~ I.nterorgamzaclOnalse ha intentado trazar la distribución y
el eJercIcI~ del poder en sistemas compuestos por múltiples unida-
?es, medI~nte la aplicación de los principios de la teoría del
mtercamblO y la dependencia del poder (véase, por ejemplo,
~~erson, 1962, 1972, 1976; en Cook, 1977, se encontrará una discu-
SlOnsobre las ~plic~ciones.de la teoría interorganizacional). Puesto~ue el mayor mteres conSIsteen explicar el ejercicio del poder la
Ide~ de centra.Iidad es uno de los conceptos básicos de esta teo;ía.
~~ I~portancIa de .las implicaciones que esta línea de investiga-
ClOntlene para lo~ sIstemas interorganizacionales de políticas, jun-
to con la relevanCIa?e la~oción de centralidad, han sido notadas ya
por ~lgunos de los lllvestlgadores interesados en el análisis de 1
polítlcas con ;núltiples actores (como es el caso de Milward, 198~~471~.Aun aSI,el concepto de centralidad, tal y como es utilizado
habltu~lment~ en la teoría del intercambio, resulta incapaz de
~:edecIr las d~s:rib~ciones de poder, inclusive cuando es trata de
SImples escemf1caclOnes de laboratorio (véase Cook el al., 1983)
~gunos de los conceptos fundamentales de la teoría del intercam~
blOy d~ la dependencia del poder están sufriendo reformulaciones
sustanciales en la actualidad (en Willer 1985 se encontrara~, .,. ' ,. unaaportaclOn muy Importante). Por esta razón, no debería sorpren-
Uno de los defectos funestos de los principios administrativos
en boga es que, como los proverbios, se presentan po~ pares.
Para casi toda prescripción podemos encontrar su eqUlval~nt~
opuesto, igualmente plausible Yaceptable. Aunque l~s pnncI-
pios que conforman el par conducirían a recomendaclOn~s or-
ganizativas exactamente contrarias, no hay nada en la teona que
nos pueda indicar cuál de ellos es el correcto (1976: 20).
En apoyo a esta conclusión bastaría un breve. análisis de,lo que
podemos denominar como la sabiduría convencIOnal, prop:a, de la
perspectiva vertical de arriba hacia abajo. Nuestro proposIto ~s
demostrar que, aun desde el interior de este marco de referencIa,
varias de las prescripciones resultan contradictorias; de ahí que
afirmemos que las recomendaciones son como proverbios que
apuntan frecuentemente en direcciones opuestas y que no permiten
estrechar el margen de decisión para dar lugar a una mayor preci-sión.
Si los estudios sobre implementación realizados desde la pers-
pectiva vertical contienen algún tipo de sabiduría convencional-es
decir, algún conjunto de principios que aparezcan tan razonables
que puedan ser adoptados como guía para la acción~, posiblemente
concediendo amplios márgenes de libre iniciativa a los responsables
del proceso, intensificando su presencia en las localidades (Porter,
1976), e impulsando un estilo de implementación adaptativo (Ber-
man, 1978, 1980); finalmente, intentan conseguir lo imposible:
tomar decisiones acerca de todos los problemas importantes desde
el inicio mismo del proceso, ignorando de esta manera el aprendi-
zaje que necesariamente tiene lugar a medida que se encaran los
problemas que conlleva el desarrollo de toda política
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 113/117
q p p g p , p
sus'prescripciones podrían resumirse de la manera siguiente: a finde maximizar las probabilidades de éxito en la implementación,
desde el punto de vista de la autoridad central, se debe: 1) diseñar
políticas que reduzcan la magnitud del cambio conductual requeri-
do (por ejemplo, Mazmanian y Sabatier, 1981; 1983);2) simplificar
la estructura de la implementación y reducir el numero de actores
(por ejemplo, Kelman, 1984;Pressmany Wildavsky, 1984);3) tratar
de considerar en mayor medida los problemas de la implementación
desde las etapas iniciales del diseño de las políticas (por ejemplo,
Bryner, 1981; O'Toole y Montjoy, 1984; Pressman y Wildavsky,
1984); y 4) tener cuidado de poner las responsabilidades de laimplementación en manos de unidades operativas que muestren
simpatía hacia la política (por ejemplo, F. Thompson, 1982; VanHorn y Van Meter, 1976).
Se sabe muy bien que quienes se adhieren a la perspectiva
opuesta, la de abajo hacia arriba, han hecho diversas críticas a éstas
y parecidas sugerencias. Los grandes esfuerzos tendientes a centra-
lizar el control del proceso -subrayan los críticos- orientan la
atención ~e l?s involucrados hacia variables de difícil, si no imposi-
ble, maneJO; Ignoran que necesariamente hay conflicto, negociación
y transacción política durante la implementación, así como ignoran
los efectos positivos que pueden arrojar estos fenómenos; excluyen
a much?; de los participantes importantes en el proceso de imple-
mentaclOn; no logran adaptarse al surgimiento de muchos proble-
mas en el curso de la política que sólo pueden resolverse
problemas que conlleva el desarrollo de toda política.
Aun haciendo de lado tales críticas, no se reconoce ampliamenteel hecho de que la investigación empírica sobre la implementación
en la que intervienen múltiples actores ofrece conclusiones y reco-
mendaciones contradictorias:
1.Acerca de la dimensión de los cambios en el comportamiento.
Las políticas, que suelen generar grandes cambios conduc-
tuales, pueden implementarse de maneras muy diversas por
los mismos actores. Algunas pueden ser implementadas de
forma sumamente suave y fluida. Es posible que el grado de
cambio conductual requerido -independientemente de sumagnitud- tenga un impacto mucho menor en el proceso de
implementación que el que tiene el "efecto dilatorio de la
desobediencia" (Durant, 1984, 1985).
2. Acerca de la simplificación de la implementación. El trabajo
de Bowen (1982), mencionado anteriormente, demuestra
que el análisis probabilístico de Pressman y Wildavsky dis-
torsiona muchas de las situaciones reales en las que inter-
vienen múltiples actores. Mediante un análisis adicional de
las probabilidades -basado en la incorporación de proba-
bilidades agregadas y condicionales-, el trabajo de Bowena) conduce a aumentar notablemente el optimismo res-
pecto de la posibilidad de tener éxito en la implementa-
ción, b) incluye tácticas empíricamente razonables tales
como la persistencia en el intento, la compactación de las
LAURENCEJ. O'TOOLE, JR.
instancias de aprobación, estrategias para motivar la adhe-
sión y para lograr la reducción de los pasos de la política y c)
aporta consejos -algunos no muy obvios- a los responsables
de la implementación que aún no han perdido las esperan-
zas (p. 1). Otras investigaciones han demostrado que el
análisis de Pressman y WiIdavsky -y particularmente su
conclusión según la cual a mayor cantidad de actores yayor l jid d d l á l t
4. Acerca de la importancia de llevar a cabo la implementación
con actores que sean partidarios de la política. En el proyecto
de investigación arriba mencionado (incisos 1 y 2), Durant
señala otra de las diferencias de Ja sabiduría convencional:
en realidad, el apoyo o la oposición a la política por parte de
los actores sólo es determinante en mínima medida duran-
te el proceso de la implementación. "El hecho de saber que
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 114/117
n:-ayor complejidad del proceso menores serán las oportu-
mdades de acción- parece aplicable únicamente a una ca-
tegoría limitada de estructuras en las que intervienen
múltiples actores (O'Toole y Montjoy, 1984). Por último,
un tercer tipo de investigaciones, que estudian las políticas
regulatorias, concluye que, bajo ciertas condiciones la
complejidad puede facilitar la implementación, hacie~do
que el acatamiento por parte de gran cantidad de actores
resulte mucho más atractivo. La sabiduría convencional a
la que se oponen estas observaciones, puede deberse a ':la
incapacidad de apreciar los muchos problemas que el retra-
so .e~ las instancias de veto plantea para el logro de losobJetIVOSregulatorios" (Durant, 1984: 311; 1985).
3. Acerca de que la implementación sea tomada en considera-
ción durante las etapas iniciales de formulación de las
políticas. Regan, quien ha estudiado las políticas de los
Estados Unidos y de la Gran Bretaña, llega a la conclusión
de que "cuando se plantean problemas relacionados con la
implementación durante el diseño de las políticas, aparece
la tendencia a sacrificar los objetivos programáticos en aras
de las e~igenc.i~sde su ~jecución ...Esto ocurre debido a que
la consIderaclOn de la lmplementación en el momento deldiseño de una política introduce explícitamente la cuestión
de cómo afectará su implementación los patrones existen-
tes de poder de la burocracia y la estructura burocráticamisma" (p. 21).
existe un clima político adverso y de reconocer que esemismo ambiente podría también generar aliados potencia-
les capaces de movilización inmediata, no nos ofrece infor-
mación alguna acerca de las estrategias prospectivas más
adecuadas para lograr la obediencia ajos objetivos" (p. 312).
Aquí tenemos pues un conjunto de aseveraciones incompatibles
entre sí, que se presentan por pares y que se han generado -má.s o
menos todas ellas- en el marco de la perspectiva vertical de arnba
hacia abajo. A pesar de los juicios externados por algunos anaIistas
(como Kelman, 1984),en la literatura sobre implementación pre-valecen recomendaciones contradictorias y contraintuitivas. No
queremos decir con esto queja teoría en torno a la implementaci.órt
sea inútil, que el problema se reduzca a lo que plantea la perspectIva
vertical, que lo mejor que podemos esperar sea asumir una actitud
pragmática ingenua y carente de teoría, y que resulte imposible
producir buena teoría. Sostenemos, por el contrario, que el mundo
de la implementación en la que intervienen múltiples actores es a
tal punto complejo, que las prescripciones simplistas surgidas de
unos cuantos estudios de caso están destinadas irremediablemente
a tener un carácter de proverbios. Esto parece especialmente cierto
si se toma en cuenta que gran parte de las investigaciones han
pretendido edificar teorías sobre la base de muy es casa información
obtenida en proyectos de investigación sumamente limitados en el
tiempo (cL Rose, 1977; Sabatier y Hanf, 1985). El campo de la
implementación tiene que enfrentar aun, como parte de su estrate-
gia de investigación, el reto de la contextualización (véase especial-
mente el trabajo de Wittrock, 1985) y tiene todavía que superar las
prescripciones vacuas que dirige a las autoridades, a los responsa-
bles de la implementación y a los investigadores, cuando simple-
mente afirma que hay que abordar los aspectos sociales,
económicos, políticos y legales de contextos.
Una agenda para la investigación
modelo de elaboración de las políticas mucho más racionalista y
limitado de lo que sería pertinente. En suma, como ocurre con otras
variantes de la ciencia social, la investigación sobre la implementa-
ción puede prestar servicio a los propósitos de orden práctico
esclareciendo los problemas, sensibilizando a los demás ante tales
problemas y llamando la atención hacia los núcleos de variables y
relaciones más persistentes e importantes. Es así como la investiga-
ción cumple genuinamente su propósito heurística En este sentido
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 115/117
Una agenda para la investigación
de la implementación
ción cumple genuinamente su propósito heurística. En este sentido,
un proyecto práctico consistiría en indagar cómo podría este tipo deinformación más limitada atraer adecuadamente la atención de los
actores de la política.
En segundo lugar, como podrán atestiguar muchos de quienes
han estudiado la utilización del conocimiento, no existe razón algu-
na para suponer que los actores del proceso político toman, pueden
tomar o deberían tomar decisiones en torno a las políticas públicas
sobre la base de los hallazgos de la investigación. Los responsables
pueden aprovechar en la práctica muchas otras fuentes de informa-
ción sobre el proceso de implementación, como lapropia experien-
cia,los datos adicionales que aportan los propios colegas, los aliados políticos y hasta los opositores. Muchas de estas fuentes aportan
información específica de gran valor práctico. Aún más, la imple-
mentación de múltiples actores es una denominación genérica para
un conjunto de diversos procesos de interacción, algunos de los
cuales pueden tener la capacidad de resolver por su propia cuenta
los problemas de laspolíticas (cf. Lindblom y Cohen, 1979).Uno de
los temas de la agenda de los investigadores debería ser la investi-
gación sistemática de los patrones de implementación que favore-
cen de hecho diversas formas de comportamiento capaces de
resolver problemas.Pero, en tercer lugar, los académicos que estudian la implemen-
tación pueden hacer mucho a favor del desarrollo de la teoría
empírica en este campo. Los desacuerdos valorativos en torno a las
normas, tales como los que se manifiestan en algunos aspectos
Como hemos visto, la literatura empírica en torno a la implemen-
tación con múltiples actores impone gran cantidad de limitaciones
a la calidad de las recomendaciones propuestas. El campo experi-
menta carencia de acumulación y continuidad de conocimientos.
Las dificultades que se presentan en algunos de los campos básicos
de la elaboración teórica (como el de la teoría del intercambio)
provocan, necesariamente, problemas en el campo de investigación
aplicada del análisis de la implementación. Muchas de las recomen-
daciones disponibles hoy en día parecen carecer de validez externacomo lo demuestra la naturaleza contradictoria y proverbial de l~
~ran m~yoría de los consejos dirigidos a quienes elaboran las polí-
tIcas. Sm embargo, sería un error pensar que una lectura cuidadosa
de la bibliografía sobre implementación produciría un desaliento
inevitable. Existen muchas razones para afirmar que un pesimismotal resultaría inadecuado.
En primer lugar, declarar que el objetivo de la investigación
sobre la implementación de laspolíticas a cargo de múltiples actores
deba ser el de apoyar la práctica de los profesionales, no obliga en
absoluto a los investigadores a desarrollar una teoría predicti-va susceptible de ser empleada por los actores del proceso de la
política y de la implementación. La opinión de que los investigado-
res debe:ían descubrir verdades que los responsables de los proce-
sos podnan aprovechar posteriormente, implica trabajar con un
R EC OM EN DA CI ON ES PR ÁC TI CA S P AR A L A I MP LE ME NT AC IÓ N 45 7
preliminares de comprobación Yreproducció~ (para un l!s-tado de tales intentos, véase Sabatier, 1986).CIertos trabajOSaportan ejemplos particularmente claros de perspectivas im- portantes: el de Mazmanian YSabat.ier en el caso del enfo~ue"de arriba hacia abajo" Y el de HJern para el enfoque deabajo hacia arriba" (véanse, por ejemplo, los textos de Hjern,1982; Hjern y Hull, 1982, 1985; YHjern y Porter, 1981).Algunas investigaciones recientes de Durant y otros han
LAURENCE J. O'TOOLE, JR.
en:re quien~s sostienen la perspectiva "de arriba hacia abajo" y deq~Ienes defIe~den la "de abajo hacia arriba", son una consecuen-c:a ~~tural e mcluso deseable en toda empresa vigorosa de inves-tIgacI~n. No obstante, los investigadores de la implementacióndeb.~nan pr~~cuparse más bien por las dificultades de la investi-gaclOn ~~plfl~a,. en la que debe fundamentarse cualquier reco-mendaclOn practIca digna de confianza Y aun cuando algunos de
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 116/117
1. La revisión de la literatura empírica señala que existe unacuerdo implícit? en t~rno.a algunos grupos de variables quemerecen ma~or m~e.StlgacIón.Se deben hacer esfuerzos por desarrollar sIstematIca y acumulativamente investigaciones
sobre las cara~terísticas de las políticas, los recursos, la es-tructura de la Implementación, las actitudes de los responsa-?les, las relaciones entre los responsables de laImplementación y sus beneficiarios, y el sentido del tiempocon el que se llevan a cabo los procesos.
2. Muchos .~elo.sesfue~zos realizados en el estudio de la imple-~~nta~:on SIguenSIendopromisorios y merecedores de ve-nfIcaclOn y desarrollo más cuidadoso. Algunos (como los deVan Metery Van Horn, 1975;Van Horn, 1978,1979a,'1979b;Van Horn y.Van Meter 1976; Mazmanian y Sabatier, 1981,1983: Sabatler y Mazmanian, 1979, 1981, 1983; Sabatier yKlost~rman, 1981.;~ontjoy y O'Toole, 1979; O'Toole y
~ontJoy, 1984; MItmck y Barchoff, 1984) esbozan modelos~nteresantes ~/teorías rudimentarias acerca del proceso deImpleme~taclOn. Unos cuantos, especialmente el trabajo deMazmaman y Sabatier, ya han dado lugar a ciertos intentos
Algunas investigaciones recientes de Durant y otros han
insistido en la forma en la que la dimensión temporal puedevincularse a otras variables de la implementación menciona-das confrecuencias (Durant, 1984, 1985;Durant el al., 1986).
Finalmente, algunos investigadores han dedicado atención aldesarrollo de estrategias para la implementación en la queintervienen múltiples actores. Los ejemplos más estimulan-tes incluyen el trabajo de Berman (1980), quien ha trazadolas pautas de una teoría de la contingencia en la imple:ne~-tación; el trabajo de Elmore (1979-80; 1985), cuyo ~Isenoretrospectivo Ylógica reversible proporcionan los ru~lIr:en-
tos de una estrategia para la aplicación de los descubnll1len-tos de la perspectiva de "abajo hacia arriba" en el diseño delas políticas; y los trabajos de Scharpf y otros -como los de1977y 1978; YScharpf, Reissert y Schnabel, 1978~ q~~ hanintentado trazar el mapa de los problemas de las polItIcas yvincu1arlo a las estructuras de implementación integradas por múltiples actores, sugiriendo diversas posibilidades dediseño de políticas y de diseño institucional. Todos estosmarcos de referencia Y estas perspectivas diversas deben
recibir atención sostenida y sistemática.
3. Se requieren esfuerzos ulteriores para desarrollar ~asvirtudesde las perspectivas teóricas divergentes. Un caso Import~nteen este sentido es la brecha que existe entre las perspectIvas"de arriba hacia abajo" y "de abajo hacia arriba". A pesar deque el argumento de este ensayo sostiene que no es realista
mendaclOn practIca digna de confianza. Y aun cuando algunos de
estos problemas ~rovienen de la investigación teórica básica, hayuna agend~, propIa para los investigadores del proceso de la im- ple~e~taclO~. A pesar de todas estas limitaciones, parece válidala sIgUlent~ lIsta. de propuestas para superar el estado actual delcampo de lllvestlgación.
8/13/2019 Tema 4 Lecturas PressmanWildavsky, Van Meter, Aguilar
http://slidepdf.com/reader/full/tema-4-lecturas-pressmanwildavsky-van-meter-aguilar 117/117