TESIS ABUNDANCIA RELATIVA, DISTRIBUCIÓN Y PERMANENCIA DE...
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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE BAJA CALIFORNIA SUR AREA DE CONOCIMIENTO DE CIENCIAS DEL MAR Y DE LA TIERRA DEPARTAMENTO ACADÉMICO DE CIENCIAS MARINAS Y COSTERAS POSGRADO EN CIENCIAS MARINAS Y COSTERAS TESIS ABUNDANCIA RELATIVA, DISTRIBUCIÓN Y PERMANENCIA DE LA BALLENA GRIS EN EL COMPLEJO LAGUNAR BAHÍA MAGDALENA-BAHÍA ALMEJAS DURANTE EL INVIERNO DE 2016 Que para obtener el grado de: MAESTRA EN CIENCIAS MARINAS Y COSTERAS CON ORIENTACIÓN EN BIOLOGÍA MARINA PRESENTA: MIWAKO YOKOO GUERRERO DIRECTOR: Dr. E. ALEJANDRO GÓMEZ GALLARDO UNZUETA La Paz, Baja California Sur, enero de 2018
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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE BAJA CALIFORNIA SUR
AREA DE CONOCIMIENTO DE CIENCIAS DEL MAR Y DE LA TIERRA
DEPARTAMENTO ACADÉMICO DE CIENCIAS MARINAS Y COSTERAS
POSGRADO EN CIENCIAS MARINAS Y COSTERAS
TESIS
ABUNDANCIA RELATIVA, DISTRIBUCIÓN Y PERMANENCIA DE LA BALLENA
GRIS EN EL COMPLEJO LAGUNAR BAHÍA MAGDALENA-BAHÍA ALMEJAS
DURANTE EL INVIERNO DE 2016
Que para obtener el grado de:
MAESTRA EN CIENCIAS MARINAS Y COSTERAS
CON ORIENTACIÓN EN BIOLOGÍA MARINA
PRESENTA:
MIWAKO YOKOO GUERRERO
DIRECTOR: Dr. E. ALEJANDRO GÓMEZ GALLARDO UNZUETA
La Paz, Baja California Sur, enero de 2018
Dedicatoria
A mis padres y hermanas, por todo el apoyo y amor que he recibido.
A mi familia Guerrero, por guiarme a la meta a cada paso.
A mi familia Yokoo, por haberme enseñado parte de mis raíces y mi identidad.
この二年間半、色々お世話になりました。
家族やラパスで出会ったみんなの応援や支えのお陰で最後まで頑張り、自
分の強さを知ることができました。
メキシコで過ごした思い出はみんなの愛が詰まっています。
この経験を参考にもっと人生に挑戦したいと思います。
まだまだ未熟ですが、これからもよろしくお願いします。
Agradecimientos
Dr. E. Alejandro Gómez-Gallardo, por darme la oportunidad de trabajar con usted y probar mis
capacidades como bióloga. Su apoyo y paciencia me ayudaron a crecer como investigadora y a
desarrollar mi deseo de seguir con la ciencia.
Dr. Jorge R. Urbán, por aceptarme en el programa de posgrado de CIMACO y en su laboratorio.
Su apoyo me ayudó a realizar mi estudio y explorar la belleza que existe en Baja California Sur.
Dr. Hiram Rosales Nanduca, por guiarme en las salidas de campo y por el tiempo invertido para
realizar mi estudio. Su paciencia y sus experiencias en el campo me ayudaron a poco a poco
quitarme el miedo aun con mis defectos y mostrar mis capacidades como bióloga.
Dr. Alberto Sánchez, por su paciencia, el tiempo invertido y su apoyo en desarrollar mi estudio
de batimetría. Sin su ayuda, mi estudio no hubiera llegado a ser un avance importante para la
rama de mamíferos marinos.
Dr. Sergio Aguilar Martínez, por su paciencia y su apoyo desde el inicio de mi maestría. Sus
consejos y discusión ha sido un gran apoyo para que este estudio sea posible.
Dra. Griselda Margarita y Juan Francisco Villa y los estudiantes del Tecnológico, por sus
ayudas para realizar una salida de campo que fue una parte importante de mi estudio.
M en C. Enrique Humberto Gómez Pech, por compartir su sabiduría sobre el sistema de
información geográfica y por la dedicación en enseñarme paso a paso el uso del programa, lo cual
fue muy útil para mi estudio y espero poder aplicarlo más para futuros estudios.
Liliana Paredes, por tu amistad desde el principio de mi tiempo en la maestría y por toda la
ayuda y los consejos que me has dado. Tu amistad ha sido una de las mejores cosas que me ha
pasado, disfruté cada salida que hicimos juntas. ¡Mil gracias!
Dra. María Eugenia Ortega, por siempre estar al tanto y por sus consejos que me dio en el
transcurso de mi maestría. Sus palabras me ayudaron mucho en apreciar todo lo que la vida me ha
bendecido.
M. en C. Susana Plascencia, por el apoyo que recibí en mi redacción. Cada detalle y tiempo que
se tomó me ayudó mucho a mejorar mi español y mis ideas, desarrollando mis habilidades como
científica.
Mis compañeros del PRIMMA (Lorena, Esther, Mariana, Pamela, Carlos, Tabata, Natalia,
Eder, Jorge, Rocío, Vinnie, Omar, Daniela, Daniela, Gabriela, Anthony, Estefany), por cada
saludo, apoyo, experiencia y cultura que me compartieron en el transcurso en la maestría. Han
sido el motor para seguir adelante cada día en La Paz.
Yamaly y Guillermo, por sus amistades y las salidas juntos al malecón y a las playas. Nuestra
amistad nació en nuestra clase de estadística y ahora somos amigos que nos apoyamos en tiempos
buenos y difíciles. Para mí, ustedes me regalaron risas, compañía, y mucho amor! Los quiero
mucho, y espero hacer más goro goro con ustedes.
Jorge Armando, Diego, Silvia, David, Tania, Manuel, Tsuyoshi, Zvi, Karla, Triana y todos
los que estuvieron parte de este capítulo de mi vida, por su amistad y apoyo durante mi tiempo
en la maestría.
Contenido
I. Introducción .................................................................................................................................. 1
II. Antecedentes ................................................................................................................................ 3
2.1. Descripción de la especie ....................................................................................................... 3
2.2. Distribución ........................................................................................................................... 3
2.3. Protección de la ballena gris .................................................................................................. 4
2.4. Abundancia relativa, distribución y densidad ........................................................................ 6
2.5. Permanencia y movimientos .................................................................................................. 7
III. Objetivos .................................................................................................................................... 8
3.1. Objetivo general ..................................................................................................................... 8
3.2. Objetivos específicos ............................................................................................................. 8
IV. Área de Estudio .......................................................................................................................... 9
V. Métodos ..................................................................................................................................... 11
5.1. Abundancia, distribución y densidad ................................................................................... 11
5.2. Distribución de acuerdo a la profundidad, permanencia y movimientos entre las zonas del
complejo lagunar ........................................................................................................................ 16
VI. Resultados ................................................................................................................................ 19
6.1. Abundancia, distribución y densidad ................................................................................... 19
6.2. Densidad .............................................................................................................................. 20
6.3. Distribución de acuerdo a la profundidad ............................................................................ 21
6.4. Permanencia ......................................................................................................................... 24
6.5. Movimientos ........................................................................................................................ 26
VII. Discusión ................................................................................................................................ 28
7.1. Abundancia y distribución ................................................................................................... 28
7.2. Abundancias relativas de los últimos años .......................................................................... 30
7.3. Permanencia ......................................................................................................................... 34
7.4. Movimientos ........................................................................................................................ 36
VIII. Conclusiones .......................................................................................................................... 38
IX. Literatura citada ....................................................................................................................... 39
X. Anexos ....................................................................................................................................... 44
Lista de Figuras
Figura 1 Morfología de la ballena gris (Eschrichtius robustus), imagen de Peter
Folkens
Figura 2 Distribución de las poblaciones Americana (rojo) y Asiática (amarillo) de
ballena gris en el Pacifico Norte, imagen tomada de la Unión Internacional
para la Conservación de la Naturaleza (IUCN por sus siglas en inglés)
Figura 3 Mapa del complejo lagunar Bahía Magdalena - Bahía Almejas
Figura 4 Distribución de los observadores para la realización de los censos de ballena
gris
Figura 5 Zonificación y ruta del transecto para el conteo en el Canal de Santo
Domingo
Figura 6 Zonificación y ruta del transecto para el conteo en la Bahía Magdalena
Figura 7 Zonificación y ruta del transecto para el conteo en la Bahía Almejas
Figura 8 Batimetría de Bahía Magdalena y Bahía Almejas
Figura 9 Canal de Santo Domingo con los transectos recorridos para la batimetría
Figura 10 Foto-identificación de una ballena gris registrada en Canal de Santo
Domingo en enero y en Bahía Almajas en Marzo de 2016
Figura 11 Distribución de las Madres con crías y Solitarios respecto a la profundidad
en el complejo lagunar Bahía Magdalena – Bahía Almejas durante el
invierno 2016
Figura 12 Distribución de las Madres con crías y Solitarios respecto a la profundidad
en el Canal de Santo Domingo (arriba), en la Bahía Magdalena (medio) y en
la Bahía Almejas (abajo) durante el invierno 2016
Figura 13 Diferencia en los tiempos de permanencia (días) de los individuos
recapturados en el complejo lagunar durante el 2016 prueba no paramétrico
Figura 14 Diferencia en los tiempos de permanencia (días) de las Madres con cría que
fueron recapturadas en el Canal de Santo Domingo (CSD), la Bahía
Magdalena (BM) y la Bahía Almejas (BA)
Figura 15 Movimientos de los Solitarios en el año 2016
Figura 16 Comparación de la abundancia relativa de Madres con crías (MC, arriba) y
Solitarios (Sol, abajo) en los años 1983-1987, 1996-1997 y 2016 en el
Canal de Santo Domingo
Figura 17 Promedios y varianzas de la abundancia relativa de Madres con cría (MC,
arriba) y Solitarios (Sol, abajo) del Canal de Santo Domingo en los años
1983-1987, 1996-1997 y 2016
Figura 18 Abundancia relativa de Madres con cría (MC, arriba) y Solitarios (Sol,
abajo) de los años 1997 y 2016
Lista de Tablas
Tabla 1 Abundancia relativa (AR) de las Madres con crías (MC) y Solitarios (Sol) y
Temperatura superficial del mar (TSM) y el esfuerzo de observación
realizado en Bahía Magdalena –Bahía Almejas durante la temporada invernal
de 2016
Tabla 2 Número de ballenas por categoría, registradas en cada área del complejo
lagunar Bahía Magdalena – Bahía Almejas
Tabla 3 Área disponible y densidad en cada área por categoría (individuo/ km2)
Tabla 4 Densidad de Madre con cría (MC) y de Solitario (Sol) en cada área del
complejo lagunar Bahía Magdalena – Bahía Almejas durante la temporada
invernal de 2016 (individuo/ km2)
Tabla 5 Ballenas identificadas y recapturadas
Tabla 6 Movimientos de los individuos en la Bahía Magdalena – Bahía Almejas 2016
Tabla 7 Movimientos de los individuos en la Bahía Magdalena – Bahía Almejas 2017
Lista de Anexos
Figura 19 Bitácora para el censo de ballena gris en Bahía
Magdalena – Bahía Almejas
Figura 20 Bitácora para la foto-identificación de ballena gris en
Bahía Magdalena – Bahía Almejas
Figura 21 Bitácora para el avistamiento de mamíferos marinos
Figura 22 Distribución de Madre con cría en Canal de Santo
Domingo durante Enero, Febrero y Marzo
Figura 23 Distribución de Madre con cría en Bahía Magdalena
durante Enero, Febrero y Marzo
Figura 24 Distribuciones de Madre con cría en Bahía Almejas
durante Enero, Febrero y Marzo
Figura 25 Distribuciones de Solitario en Canal de Santo Domingo
durante Enero y Febrero
Figura 26 Distribuciones de Solitario en Bahía Magdalena durante
Enero, Febrero y Marzo
Figura 27 Distribuciones de Solitario en Bahía Almejas durante
Enero y Febrero
Resumen
La ballena gris es conocida como un caso de éxito para la conservación, ya que se ha
recuperado de estar en peligro de extinción, hasta tener una población estable; esta es una de las
especies más estudiadas por los investigadores, debido a su distribución costera en el Pacifico
Norte. A pesar de eso existen pocos trabajos sobre la abundancia relativa de la especie en el
complejo lagunar Bahía Magdalena – Bahía Almejas, México. Los objetivos de este trabajo son
caracterizar la distribución de la ballena gris en el complejo lagunar durante la temporada de
reproducción del año 2016 y determinar si existen diferencias en las abundancias relativas entre
este año y los años anteriores. Para determinar la abundancia relativa de cada tipo de agrupación,
Madres con crías y Solitarios o adultos sin crías, se dividió el complejo lagunar Bahía Magdalena
– Bahía Almejas en tres áreas: el Canal de Santo Domingo, la Bahía Magdalena y Bahía Almejas,
se realizaron conteos mínimos a través de un transecto predeterminado para cada área, y se
compararon los datos con trabajos anteriores en el Canal de Santo Domingo (1983-1987, 1996-
1997) y en todo el complejo lagunar (1997). En este estudio se realizó la batimetría del Canal de
Santo Domingo y con batimetrías existentes del resto del área de estudio, se estimó el área
disponible de uso para calcular la densidad de la especie en cada área con la finalidad de
comparar las tres áreas con dimensiones distintas. También se realizó la foto-identificación para
estimar el tiempo promedio de permanencia, de todos los individuos y los individuos visto más de
una vez, de las dos agrupaciones y sus movimientos dentro del complejo lagunar. Se estimó la
abundancia relativa como el número máximo de ballenas durante el mes de febrero de la
temporada 2016 fue de 88 individuos, la mayoría de los cuales se concentraron en el Canal de
Santo Domingo. La abundancia relativa de las Madres con cría durante febrero fue de 25.2/ h y de
los Solitarios durante el mes de enero fue de 4.1/ h. En los diferentes años en el Canal de Santo
Domingo y en todo el complejo lagunar, se obtuvo diferentes valores promedio de abundancia
relativa. Sin embargo, no se encontraron diferencias significativas entre los valores obtenidos; en
cuanto a la totalidad del complejo lagunar, no fue posible determinar las diferencias. Al comparar
las tres áreas del complejo, respecto a la densidad, fue mayor en el Canal de Santo Domingo y
esto se debe que la mayoría de las ballenas tiene una preferencia hacia los sitios con un área
reducida. En el transcurso de las observaciones realizadas, se identificaron 146 individuos en el
complejo lagunar Bahía Magdalena – Bahía Almejas, de los cuales 35 fueron recapturados en
más de un día (30 Madres con cría y 5 Solitarios). El tiempo promedio de permanencia para todas
las Madres con cría fue de 7.7± 2.6 días (n=71) y para las que tuvieron dos o más registros fue de
16.9±4.69 días (n=30); mientras que el tiempo promedio de permanencia para todos los Solitarios
fue de 1.33±0.41 días (n=75) y para los Solitarios con dos o más recapturas fue de 6±1.22 días
(n=5). De todos los individuos identificados, sólo dos Solitarios fueron registrados en dos áreas
distintas del complejo lagunar durante el año, lo que indica una preferencia de los animales por
un área en particular.
Abstract
Gray whale is well-known for its successful recovery from extinction and is most studied
by researchers, due to its distribution concentrated in the coast of North Pacific Ocean. However,
there are little studies on the relative abundance of this specie in the Magdalena Bay – Almejas
Bay lagoon complex, Mexico. The objectives of this study were to characterize the gray whale’s
distribution in the Magdalena Bay – Almejas Bay lagoon complex during the winter season 2016
and determine any differences in the relative abundance between the present study and those from
previous years. First, Magdalena Bay – Almejas Bay was divided into three areas (Santo
Domingo Channel, Magdalena Bay and Almejas Bay) and the minimum count of whales was
performed using predetermined transect for each area to determine the relative abundance of each
category: Mother with calf and Single whale or adult without calf. The data were then compared
with those of previous studies in Santo Domingo Channel (1983-1987, 1996-1997) and in the
Magdalena Bay – Almejas Bay lagoon complex (1997). Second, the bathymetry was used to
determine the area of whale’s distribution and the density for each area of the lagoon complex.
Lastly, the photo-identification was used to estimate the mean residence and the distribution in
relation to depth for each category, as well as their movements within the Magdalena Bay –
Almejas Bay if individuals were seen in more than one area. During the winter season 2016, 88
whales were recorded in February as the highest count, with high concentrations of gray whale in
the Santo Domingo Channel for both categories: the relative abundance of Mother with calf was
25.2/ hr in February and of Single whale was 4.1/ hr in January. There were different values of
relative abundances in Santo Domingo Channel in the years of study, however, the analysis
showed no significant differences among them; as for the Magdalena Bay – Almejas Bay lagoon
complex, it was not possible to determine the differences between the years. In respect of the
density, by comparing the three areas of the lagoon complex, the highest densities for both
categories were found in Santo Domingo Channel, which indicates gray whale’s preference for
shallow areas. With photo-identification, 146 gray whales were identified and 35 of them were
recaptured more than one day: 35 Mother with calf and 5 Single whales. The mean residence for
all the Mother with calf was 7.7±2.6 days (n=71), while mean residence of recaptured Mothers
with calf was 16.9±4.69 days (n=30). On the other hand, the mean residence for all Single whales
was 1.33±0.41 days (n=75) and of those with recapture was 6±1.22 days (n=5). Out of all the
whales identified, only two Single whales were seen in two distinct areas of among the lagoon
complex during the winter 2016; this indicates gray whales have preference for one particular
area when residing in the Magdalena Bay – Almejas Bay lagoon complex.
1
I. Introducción
La ballena gris, Eschrichtius robustus, es una especie migratoria que actualmente habita
sólo el Pacífico Norte y tiene dos subpoblaciones; una en América y la otra en Asia (Rice y
Wolman, 1971). En la población Americana existen más de 21,000 ballenas (citado en Martínez,
2016). Entre diciembre y abril arriban a sus destinos de reproducción, después de realizar una
migración de 10,000 km hacia la costa occidental de Baja California Sur, donde se agregan
principalmente en las lagunas costeras de, Ojo de Liebre, San Ignacio y el complejo lagunar
Bahía Magdalena -Bahía Almejas (BM-BA en adelante) las cuales les protegen de la depredación
y permiten optimizar la crianza de sus ballenatos durante la temporada invernal (Rice y Wolman,
1971; Troyo, 2004). En el inicio de la temporada invernal, las hembras que van a parir empiezan
su migración hacia el sur, seguidas por las hembras y machos maduros y finalmente los jóvenes
(Swartz, 1986; Urbán et al., 2003). La laguna más sureña que frecuenta esta especie, es el BM-
BA (Rice y Wolman, 1971).
El complejo lagunar BM-BA es un sitio importante donde la mayoría de los recursos del
ecosistema marino son explotados. En el comienzo de la industria ballenera, la población de la
ballena gris americana fue afectada de forma importante hasta ponerla en peligro de extinción.
Desde el año 1840, esta industria ballenera empezó a expandirse en las costas de América por la
demanda del aceite (Busch, 1998). Dentro del siglo XIX (entre los años 1845-47, 1851-1865 y
1873-1874), capturaron aproximadamente 2,000 ballenas sólo en el BM-BA, mientras que en la
Laguna Ojo de Liebre se capturaron 1,250 ballenas y 385 en la Laguna San Ignacio (Henderson,
1972 y 1984).
En el año 1946 la Comisión Ballenera Internacional (IWC por sus siglas en inglés),
estableció una convención para el monitoreo y la regulación global (citado en Sumich, 2014); y
en 1982, se estableció la moratoria a la cacería con la intención de proteger las especies de
grandes ballenas que son vulnerables (citado en Urbán et al., 2003). En Estados Unidos de
America, a partir de 1994 la población americana de la ballena gris fue eliminada de la lista de
especies en peligro de extinción, según la Ley de Especies en Peligro de Extinción (Laake et al.,
2
1994; Thomas et al., 2015). Por otra parte en México formaron la reserva de la biosfera en 1979,
la laguna Guerrero Negro, Ojo de Liebre y San Ignacio son reconocidos como santuario para las
ballenas (citado en Jones y Swartz, 1984). Las grandes ballenas también se encuentra protegida
por la Norma Oficial Mexicana (NOM-059-SEMARNAT-2010) en la cual es considerada bajo la
categoría de protección especial (Pr) (Anónimo, 2010).
La BM-BA está constituida por tres esteros principales: El Canal de Santo Domingo, la
Bahía Magdalena y la Bahía Almejas. Por su amplia producción y biodiversidad, el complejo
lagunar ha sido un centro de explotación de recursos importante para la economía local,
incluyendo el uso turístico de la ballena gris (Dedina e Young, 1995).
Actualmente, en el complejo lagunar se ejercen las actividades pesquera y acuícolas, las
cuales tan sólo en Bahía Magdalena aportan más del 25% del ingreso del estado de Baja
California Sur (citado en Lluch-Belda et al., 2000; Jiménez, 2014).
Además de estas actividades, el turismo se ha convertido en una parte importante de las
actividades productivas locales, por ser uno de los sitios con una gran agregación de ballenas en
Baja California Sur y su comportamiento “amistoso” que atrae a la gente, por lo tanto, es una
actividad con importancia económica como un recurso natural. Solamente en la Bahía Magdalena,
esta actividad turística generó USD $103.18 millones (Schowoer, 2007; Hoyt e Iñíguez, 2008). A
pesar de lo anterior, no se sabe con certeza la situación actual de la especie respecto a su
abundancia, distribución y movimientos dentro del complejo lagunar, elementos importantes para
un mejor manejo de la actividad turística en el presente y el futuro.
3
II. Antecedentes
2.1. Descripción de la especie
La ballena gris Eschrichtius robustus (Lilljeborg, 1861) (Figura 1) pertenece al Orden
Cetacea, Suborden Mysticeti ballenas con barbas y es la única especie que coforma la Familia
Eschrichtiidae. Una ballena gris adulta mide en promedio 13 m y pesa aproximadamente 33 t
(Rice y Wolman, 1971). La coloración de su piel varía entre diferentes tonos de gris en todo su
cuerpo, con manchas blancas, cicatrices, balanos y parásitos presentes en la piel. No presentan
una aleta dorsal como tal; en su lugar tiene una giba grande, seguida de varias gibas o
aglomeraciones de grasa pequeñas, que no corresponden con las apófisis espinosas de las
vértebras. En comparación con los demás misticetos, tiene poco pliegues en la región gular (2 a
5) y se alimenta en el fondo marino de organismos como: anfípodos, isópodos, misidáceos y
algunos poliquetos (Rice y Wolman, 1971).
Figura 1. Morfología de la ballena gris (Eschrichtius robustus), imagen de Peter Folkens.
2.2. Distribución
Cuando la temporada invernal se acerca, las ballenas migran desde sus áreas de
alimentación: los Mares Chukchi, Bering y Beaufort, hasta la costa de California (Punta Loma,
Punta Yankee, Carmel y Granite Canyon) y a la costa occidental de la Península de Baja
California, México (Figura 2), donde se ubican sus áreas de reproducción (Rice y Wolman, 1971;
Darling et al., 1998; Mate y Urbán, 2003). Durante la migración esta especie lo hace en grupos
segregados por sexo y edad; estas agrupaciones presentan diferentes comportamientos, como por
4
ejemplo, las hembras con crías son más atentas al bienestar de su ballenato (Townsend, 1886;
Rice y Wolman, 1971).
Figura 2. Distribución de las poblaciones Americana (rojo) y Asiática (amarillo) de ballena gris en el
Pacifico Norte, imagen tomada de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN
por sus siglas en inglés)
2.3. Protección de la ballena gris
La población americana de ballena gris fue sobreexplotada por la industria ballenera
desde mediados del siglo XIX (Henderson, 1984). Además de las dos subpoblaciones en Pacifico
Norte, existía otra población en el Océano Atlántico, pero en el siglo XVII el comercio ballenero
se estableció. Es posible que por esto, aparte de las condiciones inadecuadas en esta zona, llevó a
que esta población se extinguiera (Mead y Mitchell, 1984). Las ballenas grises en el Pacifico
Norte también sufrieron una cacería muy intensa desde el siglo XIX hasta el XX (Reeves, 1984;
Urbán et al., 2003; Reeves y Smith, 2010).
5
Con el tiempo, la actividad ballenera fue restringida o prohibida y la ballena gris recuperó
su población del Pacífico Noreste, saliendo del peligro de extinción (Thomas et al., 2015). Desde
que la ballena gris fue registrada como especie en peligro de extinción (Henderson 1984), estuvo
bajo la protección de la IWC (International Whaling Commission) desde el año 1946. En E.U.A.
se le dio la protección mediante la Ley de protección de mamíferos marinos promulgada en 1972
(citado en Urbán et al., 2003). En México se estableció la Reserva de la biosfera El Vizcaíno en
1979, conservando las lagunas con agregaciones importantes de la ballena gris en Laguna Ojo de
Liebre, Laguna San Ignacio y Laguna Guerrero Negro, como santuarios de la especie. (citado por
Jones y Swartz, 1984; Urbán et al., 2003).
Desde que se estableció la convención por la IWC en 1946, los investigadores han llevado
a cabo monitoreos para estimar su abundancia actual. Aunque esta especie está protegida por la
IWC y las leyes establecidas por los gobiernos mexicano y estadounidense, el complejo lagunar
BM-BA es la única zona de agregación invernal que no está reconocida bajo alguna categoría de
reserva o área natural protegida y es también el sitio con menor número de estudios acerca de esta
especie.
Hasta la fecha, se han publicado trece investigaciones para el complejo lagunar BM-BA
sobre la ballena gris en este sitio, en los cuales incorpora información sobre la abundancia,
distribución, permanencia y/o movimientos de esta especie.
Durante los años 1952 hasta 1975, los reportes se realizaron utilizando el método de censo
aéreo (Gard, 1974 y 1978). Los datos fueron recopilados para determinar los patrones en la
abundancia de las ballenas grises en esos años. En el complejo lagunar BM-BA, hubo dos años
con conteos mayores a 340 ballenas adultas en 1956 y 1975, pero a pesar de eso tiene la
abundancia más baja de todas las lagunas estudiadas. Para obtener el óptimo conteo de ballenas,
el método fue modificado de conteo aéreo a conteo realizado en lancha (Jones y Swartz, 1984),
por lo tanto, no es posible comparar los resultados obtenidos con dos diferentes métodos.
Los primeros estudios con conteo en lancha fueron realizados en el año 1983 en el Canal
de Santo Domingo y en 1997 en todo el complejo lagunar (Fleischer y Contreras, 1986; Perez-
6
Cortéz et al., 2000) De las tres áreas en el complejo lagunar, el monitoreo tuvo un mayor esfuerzo
en el Canal de Santo Domingo, donde hay una gran abundancia de madres con crías (Fleischer y
Conteras-Urrachea, 1986; Fleischer et al., 2007). Es importante comparar las tres áreas del
complejo lagunar, ya que se considera que tienen diferentes dinámicas en estudios anteriores
(Gard, 1974; Perez-Cortéz et al., 2000). Los reportes de su abundancia, distribución y
permanencia permitirían conocer mejor sus patrones de movimientos y preferencias de zonas para
así manejar las actividades antropogénicas directas e indirectas (e.g. actividad turísticas,
explotación pesquera o actividades industriales).
2.4. Abundancia relativa, distribución y densidad
La estimación de la abundancia relativa y la distribución son herramientas que ayudan a
entender la importancia y cambios en la densidad de una especie en un ecosistema o un hábitat, la
abundancia relativa siendo la medida analítica de su contribución en el hábitat y la distribución es
de su presencia dentro del área de preferencia (MacArthur, 1960).
Para cuantificar la abundancia relativa de la especie, se requiere conocer la relación entre
el esfuerzo realizado en el campo y el número de individuos registrados. Gardner y Chávez-
Rosales (2000) utilizaron este método para detectar el cambio en la abundancia de las ballenas
grises en Bahía Magdalena en los años 1997-1999, documentando su relación con la oscilación de
la temperatura (El Niño y La Niña), lo cual aporta en los estudios de Salvadeo et al. (2015) y
Martínez Calvillo (2016) sobre esta relación.
Actualmente, existe una falta de monitoreo en todo el complejo lagunar (Gardner y
Chávez-Rosales, 2000; Barrera-Arriaga, 2006) y en todos los meses de la temporada (Perez-
Cortéz et al., 2000; Fleischer et al. 2007) que permita actualizar y estudiar la dinámica de la
especie, como la relación con la temperatura superficial del mar en esta área. Por lo anterior, en
este estudio se documentó la forma en que se distribuyen las diferentes categorías de las ballenas
grises; Madre con cría (MC) y solitarios o ballenas adultas sin cría (Sol); los cambios en su
distribución y el movimiento de los individuos entre las regiones de esta zona. La información
generada y los datos de los años anteriores fueron comparados para monitorear la abundancia
relativa y establecer el patrón temporal de la ocupación invernal.
7
Además de la abundancia y distribución, Gómez-Gallardo (2004) incluyó la densidad en
su trabajo y el área disponible en la Laguna San Ignacio, se determinó la zona con una menor área
disponible preferible para las ballenas; este trabajo también fue realizado en la Laguna Ojo de
Libre por Alvarado et al. (1986). Sin embargo, aún no es realizado en el complejo lagunar Bahía
Magdalena – Bahía Almejas, a pesar lo beneficial que es para prevenir cualquier alteración a la
especie durante la temporada de reproducción.
2.5. Permanencia y movimientos
En los estudios anteriores, además del conteo, la técnica de foto-identificación fue
utilizada para determinar la estimación del tiempo de permanencia de la ballena gris en la Laguna
San Ignacio (Jones y Swartz, 1977; Swartz y Cummings, 1994). Desde el año 1980 hasta la fecha,
el Programa de Ecología en Laguna San Ignacio (LSIESP por sus siglas en inglés) y el Programa
de Investigación de Mamíferos Marinos (PRIMMA) han aplicado esta técnica con la finalidad de
determinar los movimientos de la especie en un área específico como el complejo lagunar Bahía
Magdalena - Bahía Almejas (Barrera-Arriaga, 2006; Rosales-Nanduca et al., 2012), regional
(Martínez et al., 2013), y global (Martínez, 2016), tanto como la filopatría (González, 2008).
Sin embargo, los trabajos realizados en el complejo lagunar Bahía Magdalena – Bahía
Almejas es escaso; solamente en los años 2006 y 2012, y no todos los trabajos realizados han
monitoreado todo el complejo lagunar (Barrera-Arriaga, 2006; Rosales-Nanduca et al., 2012).
8
III. Objetivos
3.1. Objetivo general
Caracterizar la abundancia relativa, la distribución y la permanencia de la ballena gris en
el complejo lagunar Bahía Magdalena - Bahía Almejas durante la temporada invernal de 2016.
3.2. Objetivos específicos
Estimar la abundancia relativa y determinar la distribución de la ballena gris distinguiendo
entre categorías; Solitarios (Sol) y Madres con crías (MC) durante el invierno 2016 en las
tres áreas del complejo lagunar Bahía Magdalena- Bahía Almejas
Determinar la distribución de la ballena gris distinguiendo entre categorías; Solitarios
(Sol) y Madres con crías (MC) durante el invierno 2016 en las tres áreas del complejo
lagunar Bahía Magdalena- Bahía Almejas
Estimar el tiempo promedio de permanencia y determinar los movimientos de las ballenas
entre las zonas del complejo lagunar por categoría (MC y Sol)
9
IV. Área de Estudio
El complejo lagunar Bahía Magdalena - Bahía Almejas (BM-BA) se ubica al sur de la
costa occidental del estado de Baja California Sur, en el cuadrante 24.20°N a 25.40°N y
111.40°W a 112.50°W (Figura 3), a 60 km al este de Puerto San Carlos, Comundú. El complejo
lagunar está rodeado por un bioma semiárido, dominado por los manglares (Acosta-Velázquez y
Ruiz-Luna, 2007).
BM-BA está separado en tres áreas: Canal de Santo Domingo o CSD (24.83°N a 24.86°N
y 112.09°W a 112.11°W) es un área donde se localiza el Puerto Adolfo López Mateos, el sitio
donde se realizan actividades productivas como la actividad de observación turística de ballenas y
distintas pesquerías. El CSD tiene un área de 32 km2 que se caracteriza por una profundidad
media de 4.9 m y una máxima de 11 m (Rodríguez et al., 2007). La Bahía Magdalena o BM
(24.64°N a 24.63°N y 112.09°W a 111.82°W) tiene un área de 883 km2
con un ancho de 22 km y
una longitud de 31 km, con una profundidad media de 14.7 m y una máxima de 40.1 m
(Rodríguez et al., 2007), donde las actividades turística y pesquera se ejercen en Puerto San
Carlos. La Bahía Almejas o BA (24.56°N a 24.36°N y 111.83°W a 111.48°W) está conectada con
la BM por el Canal Gaviota y tiene una característica similar a la BM, excepto el área que es más
pequeña (370 km2) su largo y ancho es de 22 km por 15 km, con una profundidad media de 10.6
m y una máxima de 26.8 m.
La temperatura superficial del mar (TSM) dentro del complejo lagunar tiene un promedio
de 20˚C durante la temporada invernal, mientras que durante el resto del año la temperatura
mínima es de 17.5˚C en enero y la máxima de 30˚C en septiembre, siendo un poco más cálido
que el Océano Pacifico adyacente (Lluch-Belda et al., 2000) debido al movimiento de agua por
las surgencias y la marea semidiurna (Obeso Nieblas et al., 1999).
10
Figura 3. Mapa del complejo lagunar Bahía Magdalena - Bahía Almejas
11
V. Métodos
5.1. Abundancia, distribución y densidad
Para cumplir el primer objetivo, que es calcular la abundancia relativa y la distribución de
la ballena gris por categorías, se realizó un conteo mínimo en cada una de las áreas (CSD, BM y
BA) por cada mes, durante la temporada de reproducción (enero a marzo). En el conteo
se estimaron la abundancia relativa y la distribución de las ballenas, los cuales fueron realizados
con la metodología propuesta por Jones y Swartz (1984) y Urbán et al. (2003).
Los conteos se realizaron en una embarcación de 25 pies con un motor fuera de borda de
75hp, con dos observadores principales (uno a babor y otro a estribor) y con el apoyo de otro
observador adicional para cada lado, así como un operador de la embarcación. Uno de los
observadores de apoyo, además realizó el papel de anotador (Figura 4). Los conteos fueron
realizados a lo largo de transectos predefinidos para cada zona (Fleischer y Contreras-Urrachea,
1986; Perez-Cortéz et al., 2000; Barrera-Arriaga, 2006).
Figura 4. Distribución de los observadores para la realización de los censos de ballena gris
12
Durante los conteos, se registraron las ballenas contadas, incluso otras especies y las
embarcaciones que se encontraron dentro de un radio de 180⁰ y hasta 2 km de distancia del
transecto a cada lado de la embarcación. Para esto, los observadores contaron con la ayuda de
binoculares cuando fue necesario. El anotador fue el encargado de registrar los avistamientos de
los dos observadores principales y toda la información con respecto al conteo: hora de inicio y
término, zona, visibilidad, temperatura superficial del mar (TSM) y profundidad, utilizando un
termómetro y un ecosonda portable PS-7. Durante el conteo, el navegador fue el encargado en
seguir los transectos usando un geoposicionador global (GPS) y de mantener la velocidad
promedio de 11 km/h para poder observar las ballenas que salen a la superficie en al menos un
par de ocasiones.
Los resultados obtenidos de los conteos fueron utilizados para determinar y comparar la
abundancia relativa de las ballenas relacionado con el esfuerzo realizado (tiempo empleado en
horas) para cada área por categoría, madres con crías (MC) y solitarios (Sol).
En el Canal de Santo Domingo (CSD), el transecto recorre un estrecho de
aproximadamente 34.6 km de largo, hacia al norte en dirección de la llamada la Curva del Diablo
hasta la Boca de la Soledad; este recorrido dura aproximadamente 3 h (Figura 5). El área se
dividió en tres zonas: superior, media e inferior (Fleisher y Contreras-Urrachea, 1986).
13
Figura 5. Zonificación y ruta del transecto para el conteo en el Canal de Santo Domingo
En la Bahía Magdalena (BM) se realizaron dos transectos(Figura 6), el primero de ellos en
el centro de la bahía (18.3 km) y el segundo cercano a la boca (23.3 km). El tiempo total de
esfuerzo para realizar ambos conteos fue de aproximadamente 3.5 h.
Figura 6. Zonificación y ruta del transecto para el conteo en la Bahía Magdalena
-112.00 -111.80
25.05
25.20
Boca de la Soledad
Puerto López MateosOCÉANOPACÍFICO
Isla
Mag
dale
na
ZONAINFERIOR
ZONAMEDIA
ZONASUPERIOR
-112.00 -111.80
24.60
24.80
Isla Margarita
BahíaMagdalena
Puerto San Carlos
ZonaCentroZona
Oeste
ZonaSureste
Boca
14
En la Bahía Almejas (BA) se realizó un transecto de 21.3 km (Figura 7); el tiempo
recorrido de este transecto es aproximadamente de 2.5 h.
Figura 7. Zonificación y ruta del transecto para el conteo en la Bahía Almejas
Con la finalidad de comparar la abundancia en las tres áreas y conocer sus patrones de
distribución de las dos agrupaciones de ballena gris (MC y Sol) en las tres áreas del complejo
lagunar BM-BA, debido a la gran diferencia en sus dimensiones y topografía, se requirió conocer
la profundidad del área muestreada, para así poder determinar el área disponible para el
desplazamiento de las ballenas, que se definió como aquellas zonas con una profundidad mayor a
2 m (Gómez-Gallardo, 2004). La batimetría de BM y BA se obtuvo de mapas batimétricos
proporcionados por Secretaría de Marina (2004) (Figura 8).
-111.60 -111.40
24.40
24.60
Isla Margarita
BahíaAlmejas
Puerto Cancún
Isla Creciente
Canal de la
Gaviota
ZonaSureste
ZonaOeste
15
Figura 8. Batimetría de Bahía Magdalena y Bahía Almejas
La batimetría del CSD fue obtenida en una salida de campo, utilizando un ecosonda y
transectos predefinidos; con ayuda del programa Surfer 10, se calculó la batimetría y se
determinaron las áreas disponibles para el desplazamiento de las ballenas (Figura 9). La densidad
de las ballenas registradas durante el año 2016 fue comparada con las obtenidas en años
anteriores en el CSD y todo el complejo lagunar.
16
Figura 9. Transectos recorridos en el Canal de Santo Domingo para medir la batimetría y mapa de la
batimetría ya concluido.
5.2. Distribución de acuerdo a la profundidad, permanencia y movimientos entre las zonas
del complejo lagunar
Para cumplir con el segundo objetivo (determinar la distribución de las dos agrupaciones
de ballena gris en cada área del complejo lagunar), se utilizaron los datos de profundidad donde
las ballenas se distribuyeron en cada área del complejo lagunar. Con la finalidad de determinar
las diferencias significativas entre MC y Sol en las tres áreas de la BM-BA, la distribución con
relación a la profundidad de las dos agrupaciones en cada área fueron comparadas utilizando el
registro de profundidad donde se inició la observación de las ballenas grises. Cabe mencionar que
unos individuos pueden tener más que un registro de profundidad, ya que es posible que las
ballenas permanezcan más de un día en un mismo sitio. Para determinar, estos análisis también
fueron probados por la prueba no paramétrica (Mann-Whitney).
17
Para cumplir con el tercer objetivos (estimar el tiempo promedio de permanencia y los
movimientos de las ballenas por categorías entre las zonas del complejo lagunar) se utilizó la
técnica de la foto-identificación (citado en Swartz y Cummings, 1977; Swartz y Jones, 1984). La
foto-identificación es una técnica que se utiliza para identificar a los animales individualmente y
consiste en tomar fotografías de los costados derecho e izquierdo, incluyendo la joroba que se
encuentra en la parte media del dorso de las ballenas grises. Cada animal presenta pigmentaciones
distintivas así como marcas producidas por piojos, balanos y otros factores (Bradford et al., 2011)
(Figura 10).
Esta técnica nos permite distinguir a los individuos que se observan más de una vez, ya
sea en diferentes momentos o sitios. Para calcular la permanencia, se pueden utilizar dos
métodos: El primero consiste en calcular la diferencia del tiempo (en días) entre el primer y el
último registro de cada individuo, incluyendo los animales que solo se observaron una vez.
Mientras que en el segundo, solo se utilizan animales con dos o más recapturas en días diferentes.
Utilizando los dos métodos permite a tomar en cuenta el cambio del tiempo promedio de
permanencia, ya que el gran porcentaje de los individuos fueron sólo se registra una vez.
La diferencia en el tiempo promedio de permanencia, de las MC y Sol recapturadas en las
tres áreas, fue analizada mediante una prueba no paramétrica (Kruskal-Wallis), para conocer si
existen diferencias significativas en los tiempos de permanencia de cada agrupación entre las
áreas del complejo lagunar BM-BA (CSD, BM y BA). Así mismo, se calculó el tiempo máximo
de permanencia para cada grupo.
18
Figura 10. Foto-identificación de una ballena gris registrada en Canal de Santo Domingo en enero y en
Bahía Almajas en Marzo de 2016.
19
VI. Resultados
6.1. Abundancia, distribución y densidad
En total, se realizaron tres conteos en cada localidad (uno cada mes), entre enero y marzo
del año 2016 con un esfuerzo total de 22.3 h incluyendo todas las zonas. El monitoreo fue
realizado del 16 de enero hasta el 6 de marzo. El año 2016 fue considerado como el año de El
Niño y se obtuvo la mínima temperatura superficial del mar (TSM) de 18˚C en enero y la máxima
TSM de 24˚C (Tabla 1). El conteo máximo fue en el mes de febrero con 88 ballenas adultas y 63
crías con 8.15 h de esfuerzo incluyendo todas las zonas muestreadas. Cabe mencionar que el CSD
tuvo la mayor abundancia de MC (55), mientras que la BM tuvo mayor abundancia de Sol (14)
(Tabla 1).
Tabla 1. Abundancia relativa (AR) de las Madres con crías (MC) y Solitarios (Sol) y Temperatura
superficial del mar (TSM) y el esfuerzo de observación realizado en Bahía Magdalena –Bahía Almejas
durante la temporada invernal de 2016
Mes Área TSM (˚C) Esfuerzo (h) MC AR de MC Sol AR de Sol
CSD 19 2.18 26 11.9/h 9 4.1/h
Enero BM 21 3.55 0 0/h 2 0.6/h
BA 18 2.42 1 0.4/h 1 0.4/h
CSD 20 2.18 55 25.2/h 4 1.8/h
Febrero BM 21 3.55 1 0.3/h 14 3.9/h
BA 19 2.42 7 2.9/h 7 2.9/h
CSD 24 2.18 4 1.83/h 0 0/h
Marzo BM 23 3.55 0 0/h 0 0/h
BA 23 2.42 1 0.4/h 1 0.4/h
En el monitoreo realizado en el CSD durante enero, se contaron principalmente por MC y
se presentó el mayor conteo de Sol (nueve ballenas), mientras que en BM y BA solo se encontró
una ballena de cada categoría (Tabla 2). Posteriormente, durante el recorrido realizado en febrero,
el número de ballenas aumentó en todas las áreas durante 5 al 7 de febrero de 2016; los Sol se
20
distribuyeron en las tres áreas y las MC se concentraron principalmente en el CSD. Sin embargo,
para el último recorrido entre el 4 y el 6 de marzo, el número de ballenas dentro del complejo
lagunar disminuyó drásticamente, siendo el CSD el área con mayor cantidad de MC (cuatro).
Tabla 2. Número de ballenas por categoría, registradas en cada área del complejo lagunar Bahía
Magdalena – Bahía Almejas
Área Categoría Enero Febrero Marzo
CSD MC 26 55 4
Sol 9 4 0
BM MC 0 1 0
Sol 2 14 0
BA MC 1 7 1
Sol 1 7 1
6.2. Densidad
Mediante el programa Surfer 10, se calculó el área total disponible del desplazamiento de
las ballenas con respecto al área marina total del complejo lagunar, excluyendo las zonas con
profundidad menor a 2 m. A partir de este cálculo, se obtuvo el área marina total del complejo
lagunar de 1285 km2, mientras el área disponible es de 897.077 km
2 que presentó el 69% del área
marina total (Tabla 3).
En el caso del CSD, el área disponible es de 16.2 km2 que corresponden al 51% del área
total (32km2). Para BM, el área disponibles es de 666.5 km
2 correspondiente al 75% del área total
(883 km2). BA cuenta con el área disponible de 214.4 km
2, lo cual equivale al 58% del area total.
Tabla 3. Área disponible en cada área
Área Total (km2) Disponible (km
2) Porcentaje del área total (%)
CSD 32 16.2 51
BM 883 666.5 75
BA 370 214.4 58
Total 1285 897.1 69
21
Se calculó la densidad de cada agrupación registrada, con una mayor densidad de MC
(0.07/ km2) que los Sol (0.027/ km
2). Cabe mencionar que CSD fue el área con las mayores
concentraciones de MC (3.39/ km2) y Sol (0.24/ km
2) de las tres zonas. Mientras que BM tuvo la
densidades más bajas para ambas agrupaciones: MC de 0.001/ km2 y Sol de 0.021/ km
2. En el
caso de BA, se obtuvo una densidad de 0.032/ km2
para ambos tipos de agrupaciones (Tabla 4).
Tabla 4. Densidad de Madre con cría (MC) y de Solitario (Sol) en cada área del complejo lagunar Bahía
Magdalena – Bahía Almejas durante la temporada invernal de 2016 (individuo/ km2)
Mes Área Total (km2) Disponible (km
2)
Densidad de MC
(MC/km2)
Densidad de Sol
(Sol/km2)
CSD 32 16.191 1.606 0.556
Enero BM 883 666.459 0 0.003
BA 370 214.427 0.005 0.005
CSD 32 16.191 3.397 0.247
Febrero BM 883 666.459 0.002 0.021
BA 370 214.427 0.033 0.033
CSD 32 16.191 0.247 0
Marzo BM 883 666.459 0 0
BA 370 214.427 0.005 0.005
6.3. Distribución de acuerdo a la profundidad
De acuerdo con la información generada, se puede determinar que en el complejo lagunar
las MC se distribuyen en zonas con rangos de profundidad entre 5 m y 38 m con una profundidad
media de 12 m. Mientras que los Sol distribuyen en profundidades entre 6 m y 80 m con una
profundidad media de 20 m. Se compararon las distribuciones de las MC y los Sol mediante una
prueba no paramétrica (Mann-Whitney) y se presentó diferencias significativas entre las dos
agrupaciones (U=1570, p<0.05) (Figura 11).
22
Figura 11. Distribución de las Madres con crías y Solitarios respecto a la profundidad en el complejo
lagunar Bahía Magdalena – Bahía Almejas durante el invierno 2016
Las diferencias significativas presentaron en la BM (U= 122, p < .05) y la BA (U= 77, p
< .05), con números de ballenas distintas en los dos áreas (Figuras 12): las MC (n=5) y los (n=49)
en BM y las MC (n=14) y los Sol (n=13) en BA. Mientras que en el CSD la distribución de las
MC (n=90) y los Sol (n=12) fueron similares (U= 539 p > .05); estos resultados son debido a los
rango de distribución distintos en cada área, ya que el CSD tiene la máxima profundidad de 11 m
y las bahías tienen una máxima profundidad mayor que 11 m.
23
24
Figura 12. Distribución de las Madres con crías y Solitarios respecto a la profundidad en el Canal de
Santo Domingo (arriba), en la Bahía Magdalena (medio) y en la Bahía Almejas (abajo) durante el invierno
2016
6.4. Permanencia
A partir de la foto-identificación, fueron identificadas un total de 146 ballenas (71 MC y
75 Sol), empleando un esfuerzo de 182 h en el campo (Tabla 5). De estos individuos, 35 ballenas
corresponden a 30 MC y 5 Sol.
Tabla 5. Ballenas identificadas y recapturadas
Categoría Identificados Recapturados
MC 71 30
Sol 75 5
Total 146 35
25
Al hacer la estimación de tiempo promedio de permanencia y utilizando los registros de
todos los individuos, el resultado de las MC fue de 7.73 ± 2.66 días (IC 95%, n=71), mientras que
los Sol fue de 1.33 ± 0.41 días (IC 95%, n=75) y utilizando únicamente los individuos con
recapturas, el valor promedio de MC fue de 16.93 ± 2.66 días (IC 95%, n=30), y de los Sol fue de
6 ± 1.22 días (IC 95%, n=5). Se compararon los tiempos de permanencia de todas las MC y los
Sol mediante una prueba no paramétrica (Mann-Whitney), con diferencias significativas entre las
categorías (U=1669.500, p < .05). Este mismo procedimiento se realizó sólo con los individuos
que presentaban recapturas, también mostrando diferencias significativas (U=29.500, p< .05)
(Figura 13).
Figura 13. Diferencia en los tiempos de permanencia (días) de los individuos recapturados en el complejo
lagunar durante el 2016 prueba no paramétrico (U=29.500, p < .05)
26
Las permanencias de las Madres con cría registradas en uno de las área del complejo
lagunar BM-BA fueron comparadas (Figura 14), ya que los Sol fueron pocos que permanecieron
más de un día (n=5). La análisis no presentó las diferencias significativas (H(2,28)=2.264, p > .05),
sin embargo, 96% de las MC recapturadas permanecieron más tiempo en el CSD, con un
promedio de 20.1 ± 5.8 días, y en la BA por 20.2 ± 6.5 días; 85% de estas MC permanecieron en
el CSD (n=23) y 14% en la BA (n=4).
Figura 14. Diferencia en los tiempos de permanencia (días) de las Madres con cría que fueron
recapturadas en el Canal de Santo Domingo (CSD), la Bahía Magdalena (BM) y la Bahía Almejas (BA)
6.5. Movimientos
En cuanto al movimiento de los individuos entre las diferentes áreas del complejo lagunar,
se obtuvo que de las 146 ballenas registradas durante el invierno de 2016, sólo dos (2 Sol) fueron
recapturadas en dos áreas diferentes (Tabla 6).
BA BM CSD
Área
0
10
20
30
40
50
60
Pe
rma
ne
ncia
de
MC
(d
ías)
27
Tabla 6. Movimientos de los individuos en la Bahía Magdalena – Bahía Almejas 2016
Individuo ENERO 2016 FEBRERO 2016
18 19 21 22 5
0075 BM BM BA
0090
CSD BA
Durante el año 2016, un individuo recapturado viajó de la BM hacía la BA, y otro viajó del CSD
hacia la BA (Figura 15).
Figura 15. Movimientos de los Solitarios en el año 2016
28
VII. Discusión
7.1. Abundancia y distribución
Los valores de abundancia relativa obtenidos indican que en el complejo lagunar la
agregación de una agrupación es mayor en ciertas áreas: las Madres con crías en el Canal de
Santo Domingo y los Solitarios en Bahía Magdalena. Cabe mencionar que el conteo posiblemente
fue subestimado, ya que existen ciertos sesgos inherentes al muestreo como el tiempo para
registrar el conteo mínimo en todo el complejo lagunar, y en las áreas muestreadas (la Bahía
Magdalena y la Bahía Almejas), las cuales son demasiado anchos aun para uno o dos transectos
que se realizan en ellas. No obstante, los resultados concuerdan con estudios previos.
En el caso de la Bahía Magdalena, los transectos son diseñados para evitar un doble
conteo. Sin embargo, existe demasiada distancia entre ellos, lo que afecta la precisión del registro
de la especie; en la Bahía Almejas, el transecto se encuentra cerca la Isla Magdalena y la Isla
Margarita, lo cual se encuentra entre 2 km y 13 km de la costa de Baja California Sur. Por otro
lado, la longitud del complejo lagunar desde la Boca de la Soledad hasta la Isla Creciente es de
aproximadamente 140 km, por lo que el conteo mínimo de cada una de las áreas tiene que ser
realizado en días diferentes y se obtiene pocos avistamientos en cada área del complejo lagunar
Bahía Magdalena – Bahía Almejas. En esta manera, el monitoreo puede ser interrumpido por
condiciones ambientales como un alto Beaufort o un clima con poca visibilidad.
Los resultados indican que existe una preferencia para cierta área de cada agrupación,
presentando una mayor abundancia relativa de Madres con crías en el Canal de Santo Domingo
durante todos los meses, con un pico de abundancia en febrero con 25.2 ballenas por hora de
esfuerzo, y una menor abundancia en la Bahía Magdalena durante toda la temporada. Mientras
que para el caso de los Solitarios, presentó una mayor abundancia de 4.1/ h en el Canal de Santo
Domingo en el mes de enero; la mayor abundancia en la Bahía Magdalena fue durante febrero
con 3.9 ballenas por hora de esfuerzo, pero la menor durante marzo en la misma localidad (Tabla
1). La Bahía Almejas mostró las abundancias bajas para ambos tipos de agrupaciones a lo largo
de la temporada invernal, con un pico de abundancia en febrero de 2.9 ballenas por hora de
esfuerzo. Los resultados que mostraron una mayor abundancia de Madres con cría en el Canal de
29
Santo Domingo y concuerdan con lo reportado por Dedina e Young (1995), Perez-Cortéz (2000)
y Barrera-Arriaga (2006).
Sin embargo, los resultados de la abundancia de los Solitarios, no coinciden con los
resultados del trabajo de Perez-Cortéz (2000), quien registró una gran abundancia de Solitarios en
la Bahía Almejas durante el año 1997; este año correspondió a un año neutro, mientras que el
2016 fue considerado un año con presencia de El Niño, situación que pudo haber tenido
influencia en la escasa presencia de ballenas en el extremo sur de su distribución invernal, tal
como lo han reportado Gardner y Chávez-Rosales (2000), Salvadeo et al. (2015) y Martínez
(2016).
En cuanto la densidad de ballenas por área, este es el primer trabajo en esta localidad que
utiliza esta técnica, lo que permite comparar zonas con diferentes áreas. El área con la densidad
más alta para ambas categorías fue el Canal de Santo Domingo con 3.39 Madres con crías/ km2 y
0.24 Solitarios/ km2. La Bahía Magdalena tuvo la densidad más baja para ambas categorías, con
una densidad de 0.001 Madres con crías/ km2 y 0.02 Solitarios/ km
2.
Es importante mencionar que aunque el área disponible en la Bahía Magdalena es la
mayor de las tres áreas, las densidades fueron mayores en el Canal de Santo Domingo para ambas
categorías, lo cual coincide con lo reportado por Gómez-Gallardo (2004) en la Laguna San
Ignacio, las ballenas se congregan en áreas angostas. El área disponible en la Bahía Magdalena es
de 666.5 km2, que es tres veces mayor que el área disponible de la Bahía Almejas (214.4 km
2) y
más de 40 veces mayor que el área del Canal de Santo Domingo (16.2 km2).
De acuerdo a los registros de avistamientos obtenidos durante este año por el Programa de
Investigación de Mamíferos Marinos (PRIMMA), la profundidad mínima a la que se encontraron
las ballenas fue de 5 m en el complejo lagunar Bahía Magdalena – Bahía Almejas, por lo que se
sugiere cambiar el área disponible para el cálculo de la densidad en estudios futuros, teniendo una
profundidad base de 4 m. Lo anterior nos permitiría estimar con mayor precisión el área
disponible en el complejo lagunar y recomendar, en caso de realizar actividades como pesca y
turismo, medidas para evitar una alteración a la especie durante su temporada de reproducción.
30
7.2. Abundancias relativas de los últimos años
Los valores de la abundancia relativa de este trabajo fueron comparados con los datos de
trabajos anteriores realizados en el Canal de Santo Domingo entre los años 1983 a 1987 y 1996 a
1997 (Fleischer y Contreras-Urrachea, 1986; Fleischer et al., 2007), y en el complejo lagunar
Bahía Magdalena – Bahía Almejas en el año 1997 (Perez-Cortéz et al., 2000). Esto se realizó con
la finalidad de determinar si la abundancia relativa fue menor en el complejo lagunar durante el
invierno cálido del año 2016.
La abundancia relativa en el Canal de Santo Domingo está dividida por los meses en los
que se realizaron los conteos mínimos, por agrupación (Figura 16).
0
20
40
60
80
100
1983 1984 1985 1986 1987 1996 1997 2016
Ab
un
dan
cia r
ela
tiv
a d
e M
C (
MC
/h)
Año
Enero
Febrero
Marzo
31
Figura 16. Comparación de la abundancia relativa de Madres con crías (MC, arriba) y Solitarios (Sol,
abajo) en los años 1983-1987, 1996-1997 y 2016 en el Canal de Santo Domingo
Utilizando la prueba no paramétrica de Kruskal-Wallis, se determinó que, a pesar de que
las abundancias relativas de MC entre los años son muy altas en comparación a los Sol, no hubo
diferencias significativas entre los diferentes años para ninguna de las dos categorías (Figura 17):
MC (H=7.791, p > .05) y Sol (H=7.285, p > .05). Esto se debe al reducido número de muestras
que se utilizaron para obtener los valores promedio de la abundancia relativa para cada año, lo
que produce varianzas grandes provocando que estas se sobrelapen y no se puedan detectar las
diferencias entre las muestras. A pesar de eso, el Canal de Santo Domingo ha sido considerado
como el área más preferida por las ballenas que han arribado en el complejo lagunar Bahía
Magdalena – Bahía Almejas, particularmente las Madres con cría (Rice et al., 1981; Dedina e
Young, 1995; Perez-Cortéz et al., 2000; Barrera-Arriaga, 2006).
0
5
10
15
20
25
30
1983 1984 1985 1986 1987 1996 1997 2016
Ab
un
dan
cia r
ela
tiv
a d
e S
ol
(Sol/
h)
Año
Enero
Febrero
Marzo
32
Figura 17. Promedios y varianzas de la abundancia relativa de Madres con cría (MC, arriba) y Solitarios
(Sol, abajo) del Canal de Santo Domingo en los años 1983-1987, 1996-1997, y 2016
33
En cuanto a la abundancia relativa de las ballenas en todo el complejo lagunar Bahía
Magdalena – Bahía Almejas, se utilizó la prueba de Welch a comparar los dos años; sin embargo,
debido a la escasez de datos de los años 1997 y 2016, no fue posible determinar si existían
diferencias significativas, aunque de acuerdo con las gráficas obtenidas, es posible que existan
(Figura 18).
Figura 18. Abundancia relativa de Madres con cría (MC, arriba) y Solitarios (Sol, abajo) de los años 1997
y 2016
34
Aunque no se pudo determinar una diferencia significativas, las diferencias observadas en
las gráficas indica que en la Bahía Magdalena y en la Bahía Almejas suelen variar la abundancia
de las ballenas dependiendo el cambio en el TSM, y que coinciden con los resultados de los
estudios de Gardner y Chávez-Rosales (2000), Salvadeo et al. (2015) y Martínez (2016).
Gardner y Chávez-Rosales (2000) mostraron una abundancia baja en el año 1998 (año de
El Niño) y alto en el año 1999 (año de La Niña); Salvadeo y colaboradores (2015) comprobaron
la relación entre la abundancia y natalidad alta durante el periodo con poco hielo en el Árctico; y
Martínez (2016) creó un modelo de idoneidad del hábitat bajo condiciones de variabilidad
ambiental natural y escenarios de cambio climático futuros, lo cual fue comprobado con alta
predicción al comparar el modelo con registros de conteos realizados por el PRIMMA en los años
anteriores.
Esto quiere decir que cuando la temperatura es más cálida de lo normal en el complejo
lagunar, las ballenas tienden a congregarse en áreas más norteñas, observándose un menor
número de animales en el complejo lagunar, por lo que la abundancia relativa en años con el
fenómeno de El Niño, es menor que la abundancia relativa registrada en años neutros.
Se sugiere que en los trabajos futuros, se amplíen los tamaños de muestra y el tiempo de
esfuerzo, para así poder obtener suficientes datos que sean comparables. Dichos sesgos ya fueron
descritos con anterioridad.
7.3. Permanencia
El cálculo del tiempo promedio de permanencia de las ballenas identificadas durante el
invierno de 2016, se realizó de dos formas: el primero de ellos incluyendo todos los organismos
registrados y la segunda fue únicamente incluyendo aquellos individuos que fueron registrados en
al menos dos ocasiones (en días distintos). La finalidad de hacer dos cálculos es tener una
comprensión del tiempo de permanencia, ya que al utilizar todos los datos, el promedio
disminuye debido a que un gran porcentaje de los animales sólo se registra una vez, lo que podría
subestimar el tiempo promedio de permanencia. Mientras que el resultado del segundo cálculo
sólo refleja la permanencia de unos pocos individuos registrados.
35
El tiempo promedio de permanencia de todas la Madres con cría en todo el complejo
lagunar fue más largo que los Solitarios; y las Madres con crías que presentaron dos o más
recapturas corresponden al 42% del total de las Madres con cría identificada, mientras que sólo el
6% de los Solitarios tuvieron recapturas. En cuanto al tiempo máximo de permanencia de las
Madres con cría, éste fue de 51 días y de 15 días para los Solitarios. Los resultados anteriores
coinciden con estudios previos (Rice y Wolman, 1971; Swartz, 1986; Barrera-Arriaga, 2006;
Gómez-Gallardo, 2004; Rosales-Nanduca et al., 2012)
Esta diferencia en los rangos y promedio de permanencia entre las agrupaciones, se puede
explicar a partir de que las Madres con crías requieren más tiempo en el complejo lagunar para
optimizar el cuidado de sus crías y prepararlas para su migración hacia el norte; en cuanto a los
Solitarios, estos presentan una mayor movilidad, ingresando y saliendo de las lagunas, por lo que
su tiempo de permanencia es menor (Rice y Wolman, 1971; Swartz, 1986; Gómez-Gallardo,
2004).
Es importante mencionar que los valores promedio y máximo de permanencia pueden
estar subestimados debido a factores como: el tiempo de muestreo reducido (18 días), las amplias
áreas muestreadas, las condiciones ambientales y la conducta de los animales, lo que reduce la
probabilidad de recaptura. Aumentando los días de esfuerzo de este trabajo, se podrían identificar
más individuos que se encuentren en el complejo lagunar y obtener una mejor estimación del
tiempo promedio y máximo de permanencia para cada categoría, ya que su temporada de
reproducción en el complejo lagunar es desde diciembre a mediados de marzo (Perez-Cortéz et al.
2000; Barrera-Arriaga, 2006; López, 2016).
36
7.4. Movimientos
Debido a que en el invierno 2016 hubo pocos individuos que fueron registrados en dos
distintas áreas y no existen estudios previos, se decidió utilizar los datos obtenidos durante la
temporada invernal del año 2017, registrados por el PRIMMA. A pesar que se obtuvo pocos
individuos con movimientos, mostró diferentes resultados entre los dos años, como el tiempo de
registro entre las dos distintas áreas y el patrón de movimiento de cada individuo.
Durante el año 2017, se registró un total de 377 individuos, y de estos únicamente se
registraron ocho movimientos entre las áreas del complejo lagunar (5 MC y 3 Sol) (Tabla 7).
Tabla 7. Movimientos de los individuos en la Bahía Magdalena – Bahía Almejas 2017
Individuo ENERO FEBRERO MARZO
18 20 22 24 25 10 11 14 28 1 2
0002 BM BA
0003 BA CSD
0009 CSD BM CSD
0010 CSD BM
0016 BM CSD
0061 CSD BA
0124 BA BM
0199 CSD BM
Esto concuerda con los estudios anteriores (Gómez-Gallardo, 2004; Barrera-Arriaga,
2006; González, 2008). La baja proporción de movimientos con respecto al número de animales
con dos o más recapturas, sugiere una preferencia por parte de estos individuos a una sola
localidad. Un claro ejemplo podría ser la presencia continua de Madres con crías en el Canal de
Santo Domingo (Figura 14).
Los individuos que mostraron movimientos durante el año 2016, se observó un patrón de
movimientos con una dirección norte-sur. Mientras que todos los individuos observados en 2017
mostraron un patrón de movimiento aleatorio, lo cual coincide con lo reportado de Martínez
(2016) mostrando que los movimientos de las ballenas entre áreas como heterogéneo; en el año
37
2017, también se registró un individuo que presentó dos movimientos, del Canal de Santo
Domingo a la Bahía Magdalena y de regreso.
En cuanto el tiempo entre los registros en las dos distintas áreas para los trece ballenas
(dos en el año 2016 y ocho en 2017), el rango del tiempo fue de 1 a 20 días durante la temporada
2016, mientras que en 2017 de 2 a 41 días. Debido a las diferentes tendencias en los movimientos
y el rango del tiempo en los dos años, se considera que para tratar de explicar estos movimientos
se debe una serie de tiempo importante que permita identificar alguna tendencia y discutir sobre
un posible significado biológico.
Al igual que la estimación del tiempo de permanencia, existen diversos factores que
influyen en el número de recapturas, por lo tanto de movimientos registrados; dichos factores
fueron descritos con anterioridad.
38
VIII. Conclusiones
Las abundancias relativas más altas del complejo lagunar, se presentaron en el Canal de
Santo Domingo durante el mes de febrero para las Madres con crías (25.2 MC/h) y durante enero
para los Solitarios (4.1 Sol/h).
Al comparar las tres zonas del complejo, se observó que las densidades más altas de ballena
gris en el complejo lagunar, fueron registradas en el Canal de Santo Domingo para ambos tipos
de agrupaciones: 3.39 Madres con crías/ km2 y 0.55 Solitarios / km
2.
Sólo el 42.2% de las Madres con crías se vieron en más de un día y su tiempo promedio de
permanencia fue de 16.9 días, mientras que los Solitarios sólo el 6.6% fueron recapturados
teniendo un tiempo promedio de permanencia de 6.0 días.
Durante el 2016, del número total de las ballenas identificadas, sólo dos Solitarios fueron
registradas en más de un área dentro del complejo lagunar. Por lo anterior, la mayoría de las
ballenas tienen una preferencia para un sitio del complejo lagunar durante su temporada invernal.
39
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44
X. Anexos
Figura 17. Bitácora para el censo de ballena gris en BMBA
45
Figure 18. Bitácora para la foto-identificación de ballena gris en BMBA
46
Figura 19. Bitácora para el avistamiento de mamíferos marinos
47
Figura 20. Distribución de MC en Canal de Santo Domingo durante Enero, Febrero y Marzo
48
Figura 21. Distribución de MC en Bahía Magdalena durante Enero, Febrero y Marzo
49
Figura 22. Distribuciones de MC en Bahía Almejas durante Enero, Febrero y Marzo
50
Figura 23. Distribuciones de Sol en Canal de Santo Domingo durante Enero y Febrero. En Marzo no hubo
ningún avistamiento
51
Figura 24. Distribuciones de Sol en Bahía Magdalena durante Enero, Febrero y Marzo
52
Figura 25. Distribuciones de Sol en Bahía Almejas durante Enero y Febrero. En Marzo no hubo ningún
avistamiento.
