Texto narrativo 0001

6
i'É La narrativa tr'LU* A Justifica por qué eltexto de la lectura pertenece al género narrativo. Perggnajes lntroducción Tje-mPo Espacio Nudo Desenlace La narrativa es el género literario en el que un narrador cuenta los lr€ chos sucedidos a unos personaies. Vamos a analizar sus caracl€ rísticas a partir de la lectura de este texto. Segú¡ lq mitglggla griega, Apolo, dios de la poesía, la be- ¡ezg y él a¡te, oui9o,.co-mp.etir..9on Cupido en el arte de lanzar flechas. _U*n dí3 Cupido, enfurecido y lleno de cólera por el com- p,o rtámlq¡Io Q e .Apo!o.., 9e,aQ e,¡ rt¡Q 9n. 9l ..bg-s-q"ue y t ram Ó un plan para vengarse de é1. El plan consistía en lo si- guiente: lanzaría a Apolo una flecha de oro, que causa un enamoramiento inmed¡ato a quien hiere, y otra flecha de plo- mo, que causa rechazo y repulsiÓn, a la bella ninfa Dafne. Decidido, Cupido ejecutó el maléfico plan hiriendo a am- bos con sus flechas. Apolo, tras ser herido por la flecha de amor, vio a Dafne y sintiéndose locamente enamorado salió en persecusión de la ninfa. Por el contrario, Dafne, que estaba herida con la flecha del rechazo, saliÓ huyendo del dlos. Cuando ya las fuerzas se le agotaban a la joven ninfa de tanto huir suplicó ayuda a su madre, la cual decidió salvarla transformando a su bella hija en un laurel. Cuando Apolo alcanzó a su amada, Dafne ya se encon- traba en plena metamorfosis. Le salieron hojas, corlezay raí- ces hasta que no quedó nada de su figura original. Fue entonces cuando Apolo abrazÓ fuertemente el árbol y llo- amargamente mientras decía: "Puesto que no puedes ser mi mujer, serás mi árbol predilecto y tus hojas, siempre verdes, coronarán las cabezas de las gentes en señal de vic- toriau. ffiffi ?rwr. J'nr¡lA ü ; u*6o¡tn - Toion¿ €sl*ÑaL' 4"'3s A-ntos lú! *;i* ;t1 38 LJniCaC I " LÍñé¿A Y ti'ren*+rw(A 2u., (ott*Qo <perÉ.

Transcript of Texto narrativo 0001

Page 1: Texto narrativo 0001

i'É La narrativa

tr'LU* A

Justifica por qué eltexto de la lectura pertenece al género narrativo.

Perggnajes

lntroducción Tje-mPo

Espacio

Nudo

Desenlace

La narrativa es el género literario en el que un narrador cuenta los lr€

chos sucedidos a unos personaies. Vamos a analizar sus caracl€rísticas a partir de la lectura de este texto.

Segú¡ lq mitglggla griega, Apolo, dios de la poesía, la be-

¡ezg y él a¡te, oui9o,.co-mp.etir..9on Cupido en el arte delanzar flechas.

_U*n dí3 Cupido, enfurecido y lleno de cólera por el com-p,o rtámlq¡Io Q e .Apo!o.., 9e,aQ e,¡ rt¡Q 9n. 9l ..bg-s-q"ue y t ram Ó

un plan para vengarse de é1. El plan consistía en lo si-guiente: lanzaría a Apolo una flecha de oro, que causa un

enamoramiento inmed¡ato a quien hiere, y otra flecha de plo-

mo, que causa rechazo y repulsiÓn, a la bella ninfa Dafne.

Decidido, Cupido ejecutó el maléfico plan hiriendo a am-bos con sus flechas. Apolo, tras ser herido por la flechade amor, vio a Dafne y sintiéndose locamente enamoradosalió en persecusión de la ninfa. Por el contrario, Dafne, que

estaba herida con la flecha del rechazo, saliÓ huyendo del

dlos. Cuando ya las fuerzas se le agotaban a la joven ninfade tanto huir suplicó ayuda a su madre, la cual decidiósalvarla transformando a su bella hija en un laurel.

Cuando Apolo alcanzó a su amada, Dafne ya se encon-traba en plena metamorfosis. Le salieron hojas, corlezay raí-

ces hasta que no quedó nada de su figura original. Fueentonces cuando Apolo abrazÓ fuertemente el árbol y llo-ró amargamente mientras decía: "Puesto que no puedes sermi mujer, serás mi árbol predilecto y tus hojas, siempreverdes, coronarán las cabezas de las gentes en señal de vic-toriau.

ffiffi

?rwr. J'nr¡lA ü ; u*6o¡tn - Toion¿ €sl*ÑaL' 4"'3s A-ntos

lú!*;i*

;t1

38 LJniCaC I

" LÍñé¿A Y ti'ren*+rw(A 2u., (ott*Qo <perÉ.

Page 2: Texto narrativo 0001

'le-;te-

Analicemos los elementos narrativos del texto anterior:

- Personajes. Según el grado de importancia que adquieran en la his-toria, pueden ser:

. Principales. Son imprescindibles para que la acción avance;comoApolo y Dafne.

. Secundarios. Tienen menor importancia para el desarrollo delos hechos. En el texto anterior podría ser la madre de Dafne.

- Narrador. Se encarga de explicar la historia, presentar a los persona-jes y describir los lugares. Puede hacerlo en 1.a o en 3.a persona.

. El narrador en tercera persona no participa en la historia del re-lato, sino que narra lo que ve u observa. Asísucede en el textoanterior: Un día Cupido se adentró en el bosque y tramó un plan...

. El narrador en primera persona coincide con uno de los persona-jes y, por lo tanto, participa en la historia. Por ejemplo: Un día meadentré en el bosque y tramé un plan...

- Estructura. Es el orden elegido para explicar los hechos de formalógica. Consta de las siguientes partes:

I

)

)

¡

I

)

rf

INTRODUCCIÓN

is el ¡n¡c¡o oe a narrácion.Por lo gereral. se presen-tan el tiempo y el lugardonde transcur"en los re-chos, y los personajesque van a intervenir.

: NUDOi-,, Es la parte central de, la narración. Se plan-

, tea un conflicto y ser desarrollan los acon-, tecimientos.

; DESENLACEt-. -.

, Es el final de la

, narración y en él sei soluciona el conflic-; to planteado en el: nudo.

i

,e,,,:Actividades *r,E t"e este texto y deduce a qué parte de la estruc- E Justifica si el narrador de este texto emplea la pri-

IrtHHJ

ftl

tura narrativa pertenece. Justifica tu respuesta.De todas formas, seguro, seguro, no era nada, por-que Seve y yo no vimos ni el burro ni la piedra, asíquevete a ver si no fueron imaginaciones de los otros,

Lo único que sentí es que la tartana daba vueltas ymás vueltas, y que el fondo del barranco iba su-biendo, subiendo, hasta que, ¡zasl, chocó contra micara. Me parece que oí gritar, y a lo mejor eran misamigos, que también se habían caído del carro,pero tampoco estoy seguro.

Al fin quedé tumbado en el suelo, y ei cielo empezóa alejarse, y yo me dormi tan a gusto,

Después de mucho rato, sentí que alguien me movÍa;pero, como cre'a que estaba soñando, no hice ni caso.Después me colocaron una mano en el lado dere-cho delpecho, y oílavoz de Rodríguez que gritaba:

-¡Está mueftol

Lucía Baquedano, Fantasmas de día.

- Completa la narración con las dos partes de laestructura que faltan.

mera o la tercera persona verbal.

Se despertó Gorraiz, y salió de lachoza; tomó el sen-dero que corría por el borde mismo del precipicio ybajó a un descampado del monte, en donde iba apreparar un horno de carbón.

Empezó por recoger ios troncos de leña más grue-sos que había en el suelo formando montones, y loscolocó circularmente, dejando un vacío en el centro;luego fue poniendo otros más delgados sobre aqué-llos, y sobre éstos, otros, y asícontinuó su obra, silban-do un principio de canción que nunca conclua, sin sen-tir la soledad y el silencio que dominaban el monte.

Pío Baroja, Cuentas.

- Reescribe el texto cambiando la personanarrativa.

Te proponemos que leas un relato del escritor Os-car Wilde, titulado El gigante egoísta. Puedes en-contrarlo en esta página web:

Analiza en tu cuaderno sus elementos narrativos.Completa tu análisis con ejemplos deltexto.

*-er

ñs

ffiffiffir#ffiWff{ó$-'¡.!4;,

?rwt. T,'H€NA Vi L:ABoNA 'n' Eslnfrou- 44' lños

Page 3: Texto narrativo 0001

Cuento Apolo y Cupido

VOCABULARIO

r Mitología: 1. f. Conjunto de mitos de rur pueblo o de una cultur4 especialmente de la

griega y romaria. 2. f. Esfudio de los mitos. Mito: Narración maravillosa situada fuera

del tiempo histórico y protagonizadapor personajes de carácter divino o heroico. Con

frecuencia interpreta el origen del mundo o grandes acontecimientos de la humanidad.

r Cólera: f. Ir4 enojo, enfado.

o AdenÍar: 1. prnl. Penefar en lo interior de algo.

o Tra:nar: 2. tr. Disponer o preparar con astucia o dolo un enredo, engaño o fraición.

r Maléfico: maléfico, ca. (Del lat. maleficus). adj. Que perjudica y hace daño a alguiur

con maleficios. adj. Que ocasiona o es capaz de ocasionar daño.

e Ninfa: ninfa. f. Mir. Cada una de las fabulosas deidades de las aguas, bosques, selvas,

etc., llamadas con varios nombres, como dríad4 nereid4 etc. f. coloq. Joven hermosa.

o Metamorfosis: 1. f. Transformación de aigo en otra cosa.

r Predilecto: 1. adj. Preferido por amü o afecto especial.

El gigante egoísta

[Cuento. Texto completo]Oscar Wilde

Cada tarde, a la salida de la escuela, los niños se iban a jugar al jardín del Ggante. Era un jardín amplio yhermoso, con arbustos de flores y cubierto de césped verde y suave, Por aquí y por allá, entre la hierba, se

abrían flores luminosas como estrellas, y había doce albaricoqueros que durante la Primavera se cubríancon delicadas flores color rosa y nácar, y al llegar el Otoño se cargaban de ricos frutos aterciopelados. Lospájaros se demoraban en el ramaje de los arboles, y cantaban con tanta dulzura que los niños dejaban dejugar para escuchar sus trinos.-¡Qué felices somos aquí! -se decían unos a otros.

Pero un día el Gigante regresó. Había ido de visita donde su amigo el Ogro de Cornish, y se había quedadocon é1 durante los últimos siete años. Durante ese tiempo ya se habían dicho todo 1o que se tenían quedecir, pues su conversación era limitada" y el Ggante sintié el deseo de volver a su mansión. Al llegar, loprimero que vio fue a los niños jugando en el jardin.

-¿Qué hacen aquí? -surgió con su voz retumbante.

Los niños escaparon coniendo en desbandada.

-Este jardín es mío. Es mi jardín propio -dijo el Gigante-; todo e1 mundo debe entender eso y no dejaré quenadie se meta a jugar aquí.

\/, ltoL.,,.*^, fo,l¿'or^,^,,q. E*a¿ao\ - 193-rl?¿r-l"S

Page 4: Texto narrativo 0001

I de inmediato, alz6 una pared muy alta, y en la puerta puso un cartel que decía:

ENTRADA ESTRICTAMENTE PROHIBIDABAJO LAS PENAS CONSIGTJIENTES

Era un Gigante egoista...

Los pobres niños se quedaron sin tener dónde jugar. Hicieron la prueba de ir a jugar en la carretera, peroestaba llena de polvo, estaba plagada de pedruscos, y no les gustó. A menudo rondaban alrededor del muroque ocultaba el jardín del Gigante y recordaban nostálgicamente lo que había detrás.

-¡Qué dichosos éramos allíl -se decían unos a otros.

Cuando la Primavera volvió, toda la comarca se pobló de pájaros y flores. Sin embargo, en el jardín delGgante Egoísta permanecía el Inviemo todavía. Como no había niños, los pájaros no cantaban, y losárboles se olvidaron de florecer. Sólo una vezuna lindísima flor se asomó entre la hierba, pero apenas vioel cartel, se sintió tan triste por los niños que volvió a meterse bajo tierra y volvió a quedarse dormida.

Los únicos que ahí se sentian a gusto eran la Nieve y la Escarcha.

-La Primavera se olvidó de este jardín -se dijeron-, así que nos quedaremos aquí todo el resto del año.

La Nieve cubrió la tierra con su gran manto blanco y la Escarcha cubrió de plata los árboles. Y en seguidainvitaron a su triste amigo el Viento del Norte para que pasara con ellos el resto de la temporada. Y llegó elViento del Norte. Venía enwelto en pieles y anduvo rugiendo por el jardín durante todo el día,

desganchando las plantas y derribando las chimeneas.

-¡Qué lugar más agradable! -dijo-. Tenemos que decirle al C¡ranizo que venga a estar con nosotros también.

Y vino e1 Granizo también. Todos los días se pasaba tres horas tamborileando en los tejados de la mansión,hasta que rompió la mayor parte de las tejas. Después se ponía a da¡ vueltas alrededor, coriendo 1o más

rápido que podía. Se vestía de gris y su aliento era como el hielo.

-No entiendo por qué la Primavera se demora tanto en llegar aquí -decía el Ggante Egoísta cuando se

asomaba a la ventana y veía su jardín cubierto de gris y blanco-, espero que pronto cambie el tiempo.Pero la Primavera no llegó nunca, ni tampoco el Verano. El Otoño dio frutos dorados en todos los jardines,pero al jardín del Ggante no le dio ninguno.

-Es un gigante demasiado egoísta -decían los frutales.

De esta manera, el jardín de1 Gigante quedó para siempre sumido en el Invierno, y el Vento del Norte y elGranizo y la Escarcha y la Nieve bailoteaban lúgubremente entre los a¡boles.

Una mañana, el Gigante estaba en la cama todavía cuando oyó que una música muy hermosa llegaba desdeafuera. Sonaba tan dulce en sus oídos, que pensó que tenía que ser el rey de los elfos que pasaba por allí.En realidad, era sólo unjilguerito que estaba cantando frente a su ventana, pero hacía tanto tiempo que elGgante no escuchaba cantar ni un pájaro en su jardín, que le pareció escuchar la música más bella delmundo. Entonces el Granizo detuvo su danza, y el \4ento del Norte dejó de rugir y un perfume deliciosopenetró por entre las persianas abiertas.

-¡Qué bueno! Parece que al fin llegó la Primavera -dijo el Gigante, y saltó de la cama para correr a laventana.

¿Y qué es 1o que vio?Ante sus ojos había un espectáculo maravilloso. A través de una brecha del muro habían entrado los niños,y se habían trepado a los árboles. En cada árbol había un niño, y los árboles estaban tan felices de tenerlosnuevamente con ellos, que se habían cubierto de flores y balanceaban suavemente sus ramas sobre suscabecitas infantiles. Los pájaros revoloteaban cantando alrededor de ellos, y los pequeños reían. Erarealmente un espectáculo muy bello. Só1o en un rincón el Invierno reinaba. Era el rincón más apartado deljardín y en él se encontraba un niñito. Pero era tan pequeñín que no lograba alcanzar a las ramas del arbol,y el niño daba vueltas alrededor del viejo tronco llorando amargamente. El pobre árbol estaba todavíacompletamente cubierto de escarcha y nieve, y el Viento del Norte soplaba y rugía sobre é1, sacudiéndolelas ramas que parecian a punto de quebrarse.

-¡Sube a mí, niñito! -decía el árbol, inclinando sus ramas todo lo que podía. Pero el niño era demasiadopequeño.

El Gigante sintió que el corazón se le deretía.-¡Cuán egoísta he sido! -exclamó-. Ahora sé por qué la Primavera no quería venir hasta aquí. Subiré a ese

pobre niñito al árbol y después voy a botar el muro. Desde hoy mi jardín será para siempre un lugar dejuegos para los niños.

Estaba de veras arrepentido por lo que había hecho.

Bajó entonces la escalera, abrió cautelosamente la puerta de la casa, y entró en eljardín. Pero en cuanto 1o

Page 5: Texto narrativo 0001

vieron los niños se atenorizaron, salieron a escape y el jardín quedó en Invierno olra vez. Sólo aquelpequeñín de1 rincón más alejado no escapó, porque tenía los ojos tan llenos de lágrimas que no vio venir alGgante. Entonces el Gigante se le acercó por detrás, lo tomó gentilmente entre sus manos, y lo subió alárbol. Y el arbol floreció de repente, y los pájaros vinieron a cantar en sus ramas, y el niño abrazl el cuellodel Ggante y lo besó. Y los otros niños, cuando vieron que el Gigante ya no era malo, volvieron corriendoalegremente. Con ellos la Primavera regresó al jardín.-Desde ahora el jardín será para ustedes, hijos míos -dijo el Gigante, y tomando un hacha enorme, echóabajo el muro.A1 mediodía, cuando 1a gente se dirigía al mercado, todos pudieron ver al Ggante jugando con los niñosen el jardín más hermoso que habían visto jamás.

Estuvieron alli jugando todo el dia, y al llegar la noche los niños fueron a despedirse del Gigante.-Pero, ¿dónde está el más pequeñito? -preguntó el Gigante-, ¿ese niño que subí al árbol del rincón?El Ggante 1o quería más que a los o1ros, porque el pequeño lebabía dado un beso.-No lo sabemos -respondieron los niños-, se ma¡chó solito.-Díganle que welva mañana -dijo el Gigante.Pero los niños contestaron que no sabían dónde vivía y que nunca 1o habían visto antes. Y el Ggante sequedó muy triste.

Todas las tardes al salir de la escuela los niños iban a jugar con el Gigante. Pero al más chiquito, a ese queel Gigante más quería, no lo volvieron a ver nunca más. El Gigante era muy bueno con tbdos los niñospero echaba de menos a su primer amiguito y muy a menudo se acordaba de é1.

-¡Cómo me gustaría volverlo a ver! -repetía.Fueron pasando los años, y el Ggante se puso viejo y sus fi¡erzas se debilitaron. Ya no podia jugar; pero,sentado en un enorme sillón, miraba jugar a los niños y admiraba su jardín.-Tengo muchas flores hermosas -se decía-, pero los niños son las flores más hermosas de todas.Una mañana de Invierno, miró por la ventana mientras se vestía. Ya no odiaba el Invierno pues sabia que elInvierno era simplemente la Primavera dormida, y que las flores estaban descansando.Sin embargo, de pronto se restregó los ojos, maravillado, y miró, miró...Era realmente maravilloso 1o que estaba viendo. En el rincón más lejano del jardín había un árbol cubiertopor completo de flores blancas, Todas sus ramas eran doradas, y de ellas colgaban frutos de plata. Debajodel árbol estaba parado el pequeñito a quien tanto había echado de menos.Lleno de alegría el Gigante bajó corriendo 1as escaleras y entró en el jardín. Pero cuando llegó junto alniño su rostro enrojeció de ira, y dijo;-¿Quién se ha atrevido a hacerte daño?Porque en la palma de las manos del niño habia huellas de clavos, y también había huellas de clavos en suspies.

-¿Pero, quién se atrevió a herirte? -gritó el Ggante-. Dímelo, para tomar la espada y matarlo.-¡No! -respondió el niño-. Estas son las heridas del Amor.-¿Quién eres fú, mi pequeño niñito? -preguntó el Gigante, y un extraño temor lo invadió, y cayó de rodillasante el pequeño.

Entonces el niño sonrió al Gigante, y le dijo:-Una vez tú me dejaste jugar en tu jardín; hoy jugarás conmigo en el jardín mío, que es el paraiso.Y cuando los niños llegaron esa tarde encontraron al Ggante muerto debajo del arbol. parecía dormir, yestaba entero cubierto de flores blancas.

Oscar Wilde

(Dublín, 1854 - Paris, 1900) Escritor britanico. Hijo del cirujano William Wills-Wilde yde la escritora Joana Elgee, Oscar Wilde tuvo una infancia tranquila y sin sobresaltos. Esfudióen la Portora Royal School de Euniskillen, en el Trinity College de Dublín y, posteriormente, snel Magdalen College de Oxford, centro en el que permaneció entre 1874 y 1878 y en el cualrecibió el Premio Newdigate de poesía, que gozaba de gran prestigio en la época.

Page 6: Texto narrativo 0001

Oscar Wilde combinó sus esfudios universitarios con viajes (en 1877 visitó Italia yGrecia), al tiempo que publicaba en varios periódicos y revistas sus primeros poemaq quefueron reunidos en 1881 en Poemas. Al año siguiente emprendió un viaje a Estados Unidos,donde ofreció una serie de conferencias sobre su teoria acerca de la filosofia estética, quedefendia la idea del <arte por el arte> y en la cual sentaba las bases de lo que posteriormente dioen llamarse dandisml.

A su vuelt4 Osca¡ Wilde hizo 1o propio en universidades y centros culturales brit¿ánicos,donde fue excepcionalmente bien recibido. También lo fue en Franci4 país que visitó en 1883 yen el cual entabló amistad con verlaine y otros escritores de la época.

En 1884 contrajo mafimonio con Constance Lloyd, que le dio dos hijos, quienesrechazaron el apellido paterno tras los acontecimientos de 1895. Entre 1887 y 1889 editó unarevista femenin4 Woman's World, y en 1888 publicó un libro de cuentos, Et príncipefeliz, cuyabuena acogida motivó la publicación, en 1891, de varias de sus obras, entre ellas El crimen deIordArthur Saville.

El éxito de Wilde se basaba en el ingenio punzarite y epigramático que derrochaba ensus obras, dedicadas casi siempre a fustigar las hipocresías de sus contemporáneos. Así mismo,se reeditó en libro rura novela publicada anteriormente en forma de fascículo s, El retrato deDotian Gray,la única novela de Wilde, cuya autoría le reportó feroces críticas desde sectorespuritanos y conservadores debido a su tergiversación del tema de Fausto.

No disminuyó, sin embmgo, su popularidad como dramaturgo, que se acrecentó conobras como Salomé (1891), escrita en francés, o La importancia de llamarse Ernesto (1895),obras de dialogos vivos y cargados de ironía. Su éxito, sin embargo, se vio truncado en 1895cuando el marqués de Queenberry inició una campaña de difamación en periódicos y revistasacusiándolo de homosexual. Wilde, por su parte, intentó deGnderse con un proceso difamatorioconfta Queenberq', aunque sin éxito, pues las pruebas presentadas por este último dabanevidencia de hechos que podían ser juzgados alaluz de la Criminal Amendement Act.

El27 de mayo de 1895 Oscar Wilde fue condenado a dos años de prisión y trabajcsforzados. Las numerosas presiones y peticiones de clemencia efectuadas desde sectoresprogresistas y desde varios de los más importantes círculos literarios errropeos no fueronescuchadas y el escritor se vio obligado a cumplir por entero la pena. Enviado a Wandsworth yReading, donde redactó la posteriormente aclamada Balada de la cárcel de Reading,lasentencia supuso la pérdida de todo aquello que había conseguido durante sus años de gloria.

Recobrada la libertad, cambió de nombre y apellido (adoptó los de Sebastian Melmoth)y emigró a París, donde permaneció hasta su muerte. Sus últimos años de vida se caractenzaronpor la fragilidad económica, sus quebrantos de salud, los problemas derivados de su afición a labebida y un acerc¿lmiento de última hora al catolicismo. Sólo póstumamente sus obras volvierona representarse y a editarse. En 1906, Richard Strauss puso música a su drama Salamé,y con elpaso de los años se fadujo a varias lenguas laprácticatotalidad de su producción literaria.