TRABAJO ANSALDI

download TRABAJO ANSALDI

of 21

Transcript of TRABAJO ANSALDI

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 1 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

Qu democracias para qu ciudadanos? La democracia en Amrica Latina despus de la democratizacin.As, tenemos democracias de pobres, pero tambin democracias pobres y un incierto futuro que hace pensar en pobres democracias si persisten o se imponen ciertas tendencias hoy presentes1 Waldo Ansaldi

Los

aos`80

transcurrieron

bajo

el

signo

de

una

paulatina

redemocratizacin en Amrica Latina. A fines de la dcada, Latinoamrica entraba en una nueva fase, neoliberal y globalizante de su economa y de su poltica. Sin embargo, la aplicacin del modelo neoliberal que se llev a cabo en el contexto de la redemocratizacin poltica y la crisis econmica, hizo evidente la brecha entre la democracia formal y la democracia social. El texto que aqu se presenta tiene una pretensin panormica con el objetivo de hacer una revisin de cmo se instalaron los regmenes democrticos en la regin, desde los procesos de transicin hasta la fecha. Para ello el artculo comienza explicitando conceptualmente el trmino democratizacin, luego exponiendo las caractersticas de ese proceso en Amrica Latina en las transiciones hacia regmenes democrticos durante la dcada del 80. En el siguiente apartado se trata, en primer lugar, de sealar la construccin de las democracias latinoamericanas en la rbita del pensamiento neoliberal. Finalmente, se hace referencia a las percepciones que los ciudadanos tienen de1

Ansaldi, Waldo: Democracias de pobres, democracias pobres, pobres democracias. Publicado originariamente en Temas y Debates, Ao 7, N 6 y 7. Rosario, noviembre de 2003, pp. 27-43. Publicacin electrnica en http://www.catedras.fsoc.uba.ar/udishal

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 2 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

las democracias hoy y, con ello, se intentar plantear cules son las tendencias actuales que permiten hablar de pobres democracias. Nos parece necesario, entonces, explicitar qu entendemos por

democratizacin, para ello, nos basaremos en las aclaraciones conceptuales de Waldo Ansaldi cuando dice que: la democratizacin es un proceso que va de una situacin de dictadura a una de pluralismo, no agotado en el mero marco de la democracia poltica ni, mucho menos, en el de la liberalizacin del sistema poltico (entendida como apertura de ste) En ese sentido, la democratizacin atiende a los fines y resultados del proceso y remite a otros dos conceptos, los de transicin a consolidacin de la democracia. Los tres son objeto de interpretaciones dismiles por parte de polticos y de cientficos sociales. As, para algunos, la democratizacin se alcanza cuando se establece o recupera el ejercicio del pluralismo poltico; para otros, en cambio, sta es una plataforma para plantear, exigir y comenzar a construir una sociedad en la que la democracia se practica tambin en los planos de lo econmico y de lo social. Desde este punto de vista, para algunos cientistas sociales la democratizacin efectiva superara el estadio de democracia poltica, solo en tanto se concrete la democracia social. En tales perspectivas, la transicin corresponde a la primera de estas situaciones y es perceptible en la realizacin de elecciones libres, asuncin del gobierno por parte del partido y los candidatos vencedores, la aprobacin de una nueva Constitucin (no siempre) y el traspaso de los atributos del poder a otro Presidente, tambin elegido libremente (con la eventual variante de la posibilidad de la reeleccin); la

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 3 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

consolidacin, a su vez, es entendida como el momento de formulacin y realizacin de condiciones polticas, econmicas, sociales y socioculturales que hacen ms factible o probable la estabilidad de la democracia2 De este modo, la democracia poltica una vez establecida sera la base para la iniciacin de una democracia que atienda la demanda por la democratizacin de la sociedad y del Estado, aumentando los mecanismos de participacin, asegurando el desarrollo econmico y la distribucin equitativa de la riqueza. Seala Ansaldi que ambos puntos de vista no son necesariamente excluyentes, pueden ser momentos diferentes del proceso de democratizacin Ms all del debate terico sobre la democracia social que no sera posible abordar en estas pginas por una cuestin de espacio, la pregunta urgente sobre las democracias en Amrica Latina gira en torno a qu tipo de democracias tenemos hoy. Si analizamos la etapa de transicin en los 80 y en los 90 la de consolidacin siguiendo de algn modo la conceptualizacin de Ansaldi y el argumento planteado por el mismo autor: hoy, nuestras democracias: estn ms cerca de la precariedad que de la fortaleza?3. Qu democracias hemos construido? para qu ciudadanos? Nos interesa, entonces, abordar el debate sobre las consecuencias de la redemocratizacin en el ejercicio de la ciudadana en Amrica Latina en la

2

Ansaldi, Waldo: Gobernabilidad democrtica y desigualdad social. Publicado originalmente en Estudios Sociales. Revista Universitaria Semestral, Ao 5, nm. 9, Santa Fe, segundo semestre 1995, pp. 9-35, y en Leviatn poca, n 70, II 1997, pp. 95-121Madrid, Invierno. Publicacin en lnea: www.catedras.fsoc.uba.ar/udishal,. 3 Ansaldi, Waldo: La democracia en Amrica Latina, ms cerca de la precariedad que de la fortaleza. Revista Sociedad, N1, 19, Facultad de Ciencias Sociales. UBA, Diciembre 2001. Publicacin en lnea: www.catedras.fsoc.uba.ar/udishal

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 4 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

actualidad, para ello revisaremos el tipo de democracia que se construy entre los aos 80 y 90.

El fin de las dictaduras y la transicin a la democracia en los 80En los aos `80 comienza una paulatina democratizacin en Amrica

Latina: entre 1983 y 1984, respectivamente, se termin el rgimen militar en Argentina y Uruguay; en Brasil, la democracia regres en 1985, en 1987 comenz el proceso de paz en El Salvador, entre 1988-1990 Chile se sacudi de la dictadura de Pinochet, 1989 puso fin al mando absoluto de Stroessner en Paraguay. De este modo, sobre la herencia de las dictaduras, con su saldo de violencia y endeudamiento externo, comenz el proceso de reconstruccin de la democracia en Amrica Latina. Diversos factores econmicos y polticos desencadenaron lo que se ha denominado la dcada perdida. El agotamiento de la industrializacin por sustitucin de importaciones provoc un fuerte decrecimiento econmico, el alza de las tasas internacionales de inters caus la explosin de la deuda externa que llev a los pases latinoamericanos, orientados a la exportacin para pagar a los acreedores, a la recesin. En Amrica Central, los conflictos armados de baja intensidad desgastaron las frgiles economas de la regin. La deuda de los pases latinoamericanos estuvieron extremadamente vulnerables a las presiones del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional que impusieron una serie de reformas neoliberales, tales como la privatizacin de las empresas estatales, la apertura de las economas nacionales, la lucha contra la inflacin, la bsqueda del equilibrio fiscal y, por parte del Estado, la reduccin del gasto pblico as como el abandono de su histrico papel protector.44

Vizentini, Paulo: A poltica externa do regime militar brasileiro. Porto Alegre: Editora da Universidade/UFRGS, 1998.

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 5 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

En la regin se vivieron diversas experiencias con los procesos de democratizacin. Por un lado, pases con continuidad democrtica y con regmenes ms democrticos, como Costa Rica, o ms autoritarios, como seran los casos de Mxico, Venezuela y Colombia. Para otros pases los obstculos no pasaban por conquistar una democracia formal, sino ms bien por democratizar la cultura poltica autoritaria, la cual no permite una verdadera recuperacin de la legitimidad democrtica, sobretodo cuando sta fue precaria, como en Argentina. Asimismo, encontramos pases que despus del rgimen militar regresaron a un rgimen democrtico como en el caso de Chile y Uruguay. Para finalizar este recorrido, pases como El Salvador, Guatemala, Honduras y Hait que nunca tuvieron una tradicin democrtica ni tampoco experiencias populistas o socialdemcratas, lo que complica an ms el proceso de transicin. En estas sociedades las relaciones sociales tienen una profunda raz autoritaria. Lo autoritario que se intenta superar no es solamente una estructura poltica sino una manera de ser de toda la sociedad y su sistema de dominacin incluido Si lo autoritario tiene un carcter orgnico, su sustitucin no corresponde simplemente a una crisis coyuntural poltica, sino a un largo proceso de luchas que en Centroamrica se asocian a la crisis del orden oligrquico y a las batallas polticas por su modificacin5 Otros pases como Brasil, Per y Bolivia presentan combinaciones de los tipos de experiencia que sealamos antes.

5

Torres Rivas, E.: Centroamrica: la transicin autoritaria hacia la democracia. Rev. De Estudios Polticos, n 74, oct-dic 1991, Madrid, p.132.

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 6 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

Por lo general se reconoce que existe la conviccin, para los pases latinoamericanos, que la democracia es el sistema ms adecuado para gobernar y dirimir conflictos. Sostiene Luis Maira que el fin de los regmenes autoritarios, a lo largo de la dcada de los 80, abri la recuperacin de la soberana popular y la posibilidad de elegir en un contexto de penuria econmica generalizada.6 Ansaldi, por su parte seala que la novedad del perodo de transicin de dictaduras a democracias polticas fue la renuncia a transformaciones radicales, a diferencia de los aos setenta, la idea de revolucin se diluye como posibilidad.7 Por ejemplo, en la dcada del 80, a pesar del triunfo del sandinismo en Nicaragua y de la ofensiva del FMLN en El Salvador, la revolucin dej de ser una posibilidad cierta. Incluso, despus, planteado una alternativa de poder. Del mismo modo, en esta etapa las nuevas reivindicaciones democrticas complementaban los temas de la teora democrtica clsica con las preocupaciones por la justicia y la equidad.8 La frase de campaa de Alfonsn deca que: Con la democracia se come, se cura y se educa. Aunque incompleta y, en algunos casos como en Chile, demorada derrota de los regmenes autoritarios la democratizacin fue acompaada por el inters pblico por conocer los enunciados contenidos en la propuesta democrtica. En las transiciones democrticas, escribe ODonnell,6

el

Ejrcito de Liberacin

Nacional (EZLN) liderado por el subcomandante Marcos en Mxico no ha

Maira, Luis: Chile: la transicin interminable, Mxico, D.F.: Grijalbo, 1999. Ansaldi, Waldo: ob.cit, 2001.

7

8

Born, Atilio. Estado, capitalismo y democracia en Amrica Latina. Coleccin Secretaria Ejecutiva, Clacso, Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales, Ciudad de Buenos Aires, Argentina. Agosto 2003.

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 7 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

la sociedad civil resucita de su letargo, impulsada desde las lites o por determinados liderazgos; agrega, tambin que, a la resurreccin de la sociedad civil, en una primera etapa de efervescencia popular, le sigue un perodo de cansancio, de repliegue en lo privado o de desencanto, por la traicin a la pureza del ideal.9 Aparece, tambin, una idea muy fuerte de la democracia poltica en su forma clsica de democracia liberal representativa. En este sentido se podra hablar de una consolidacin de la democracia, sin embargo, se tratara solo de una apariencia. Existen elecciones peridicas, limpias, alternancias de partidos en el ejercicio de gobierno, incluso en Mxico las fuerzas armadas no tienen mucha influencia y aparecen subordinadas al poder civil, los golpes de Estado no parecen, entonces, probables. Para la divisin de poderes existe una constante en todos los pases latinoamericanos los avances del Ejecutivo sobre el Legislativo y el Judicial; el presidencialismo, con su clusula constitucional que permite reeleccin inmediata y con los decretos de necesidad y urgencia, se ha hecho ms fuerte en la regin, hecho observable en Argentina y Per. Debemos tener en cuenta que la experiencia prctica de las transiciones democrticas frustraron las expectativas optimistas que proliferaban a los inicios de los 80a. Como seala Atilio Born: los alentadores avances polticos registrados en los ochenta fueron acompaados por un marcado empeoramiento de las condiciones de vida de las grandes mayoras nacionales10

9

ODonnell, G.: Debate: la consolidacin democrtica. Ilusiones acerca de la consolidacin. Arenas, n 2, pp117-141.10

Born, A.: ob.cit.

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 8 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

Es comprobable que la redemocratizacin signific la pauperizacin de vastas franjas de la sociedad. Paradjicamente pretendi integrar polticamente a las masas y, a la vez, ensayar polticas de ajuste que las excluan; reafirm el valor del Estado como mbito de justicia y como instancia de redistribucin de ingresos y, al mismo tiempo, se lo sacrific y desmantel en aras del mercado. En palabras de Immanuel Wallerstein: Ol!, viene la democratizacin. Sin duda, vivir en un pas posdictadura militar era inmensamente ms agradable que vivir en las crceles o en el exilio. Pero, visto con ms cuidado, los "vivas" por la democratizacin de Amrica Latina fueron un poco exagerados. Con esta democratizacin parcial (incluidas las amnistas para los verdugos) venan los ajustes la FMI y la necesidad para los pobres de apretarse los cinturones an mas11 Si bien Chile y Paraguay comenzaron su transcisin democrticas hacia finales de la dcada y no al principio, los problemas que afligen a los pases que comenzaron la democratizacin con anterioridad tambin se hallan presentes en estas experiencias. En el caso chileno, a diferencia de otros pases de Amrica del Sur, el ajuste regresivo lo hizo la dictadura. No form parte de la agenda de la democracia como una tarea a cumplir, pero sigue estando presente como un legado del pinochetismo, que dej como herencia una sociedad ms injusta y desigual que la que exista durante los aos de Frei y, sobre todo, de Allende, y un rgimen democrtico notoriamente debilitado por las prerrogativas que permanecieron en manos de Pinochet y sus aliados.

11

Conferencia magistral en el XX Congreso de la Asociacin Latinoamericana de Sociologa, (ALAS) Mxico DF, 2 al 6 de octubre de 1995. En: e-l@tina, Revista electrnica de estudios latinoamericanos Vol. 5, nm. 20, Buenos Aires, julio-setiembre de 2007 http://www.iigg.fsoc.uba.ar/elatina.htm

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 9 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

Por su parte, Ansaldi plantea,

que las transiciones democrticas en

Amrica Latina son similares aunque la historia de cada una de ellas es diferente, en tanto su tratamiento es de procesos complejos y simples a la vez. Complejos por el nmero de actores que participan y los condicionamientos histricos tanto internos como externos; simples porque, en general, las negociaciones y decisiones se hicieron desde el vrtice: las dirigencias de los partidos polticos, sindicatos obreros, burguesa y las conducciones militares.12 Es importante sealar tambin que, la nocin de transicin a la democracia tiene como supuesto que el paso de un rgimen autoritario a un rgimen democrtico no siempre se da por la derrota del primero, sino como consecuencia de pactos y negociaciones entre las fuerzas democrticas y las fuerzas del rgimen. Por ejemplo, Brasil es un caso donde juegan un rol decisivo las organizaciones de la sociedad civil: la Iglesia Catlica, la Asociacin Brasilea de Prensa, la Orden de los Abogados de Brasil y los nuevos sindicatos y movimientos sociales en el proceso de salida de la dictadura.13 En el caso de Argentina, al igual que en el resto de la regin, se impuso una estricta poltica de ajuste que dej al Estado sin la posibilidad de llevar adelante una poltica social, recortando brutalmente los ingresos de las clases populares en el momento cuando desde la poltica se celebraba el advenimiento de la democracia y la recuperacin de la ciudadana.1412

Ansaldi, W.: ob.cit.

13

Ansaldi, Waldo: Dormir con el enemigo. Las organizaciones de la sociedad civil en la transicin a la democracia poltica en Brasil. Publicacin en lnea: www.catedras.fsoc.uba.ar/udishal. Publicado originariamente, en soporte papel, en El Prncipe. Revista de Ciencia Poltica, Ao III, nro. 5/6, La Plata, setiembre-diciembre de 1996, pp. 207-24714

El tema de la deuda externa es un ejemplo: muchos gobernantes expresaron su desilusin ante la inconmovible actitud de los pases acreedores, que insistieron en asignar un tratamiento exclusivamente tcnico y contable a este problema, manteniendo sin variar la poltica que haban

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 10 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

A pesar de los problemas la democratizacin poltica ha avanzado dinmicamente en Amrica Latina en los ltimos aos, aunque, existen diferencias entre los pases: algunos pases optaron por una nueva frmula constitucional, otros por la celebracin de referendos que avalaron el trnsito ms o menos condicionado. La consolidacin (neoliberal) de la democracia en los 90 En cambio, la dcada del 90 nos muestra una situacin opuesta: se recupera relativamente la economa, pero, se deterioran las expectativas polticas. Un ejemplo claro est dado en el descreimiento sobre la dirigencia poltica que, a su vez, plantea hacia la sociedad una verdadera crisis de representatividad, ms interesados en las formas democrticas que en los problemas que la gente sufre.15 Como seala Ansaldi: la de 1990 registr importantes mejoras en los indicadores

macroeconmicos, aunque la recuperacin no dej de estar atada a las turbulencias financieras producidas en el plano internacional (comenzando por el efecto Tequila) y se vio muy fuertemente afectada por los elevados costos sociales que tuvo la adhesin gubernamental a la ideologa neoliberal (o neoconservadora-liberal) y, consecuentemente, la aplicacin de polticas fundadas en el Consenso de Washington16 Si bien en Amrica Latina el primer experimento neoliberal fue Chile durante el gobierno de Pinochet, el viraje continental en esta direccin fue en 1988 en Mxico con Salinas de Gortari, y, en 1989 con Menem en Argentina. Uno de los ejemplos de las polticas neoliberales fue el consenso generalizado sobre las bondades del mismo; los pases latinoamericanos vieronfijado hacia nuestros pases en pocas de dictadura. 15 Maira, Luis: ob.cit.16

Ansaldi, W.:ob.cit., 2003

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 11 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

condicionados el acceso al crdito por parte de los organismos internacionales y la negociacin de la deuda a la implementacin de estos programas, como lineamientos generales estuvieron condensados en lo que se denomin Consenso de Washington. El Consenso de Washington realiza un diagnstico equivocado de las causas que llevaron a la crisis econmica de Latinoamrica en general, y de Argentina en particular, que explica el estancamiento como la persistente intervencin estatal sobre la actividad privada. Para el Consenso de Washington el ciclo populista fue perjudicial para los pases latinoamericanos y las propuestas que elabora sobre la superacin de esta crisis responden a este diagnstico. Las causas de la crisis latinoamericana se encuentran en: el excesivo crecimiento del Estado, que se manifiesta en exceso de regulacin, proteccionismo y empresas estatales ineficientes; el populismo econmico, expresado en la incapacidad de controlar el dficit pblico y de controlar las demandas sociales. Teniendo en cuenta este diagnstico, las recomendaciones van a centrarse en el logro del equilibrio fiscal y la estabilizacin, y la reduccin del populismo econmico. Segn el economista John Williamson, el Consenso de Washington estara constituido por diez reformas: 1) disciplina fiscal tendente a eliminar el dficit pblico; 2) cambio de las prioridades en relacin al gasto pblico, eliminando subsidios y aumentando gastos en salud y educacin; 3) reforma tributara, aumentando los impuestos si esto fuese inevitable, pero la base tributara debera ser amplia y los tipos marginales deberan ser moderados; 4) los tipos de inters deberan ser positivos y determinados por el mercado;

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 12 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

5) el tipo de cambio debera ser tambin determinado por el mercado, garantizndose al mismo tiempo que fuese competitivo; 6) el comercio debera ser liberalizado y orientado hacia el exterior (no se atribuye ninguna prioridad a la liberalizacin de los flujos de capitales); 7) las inversiones extranjeras directas no deberan sufrir restricciones; 8) las empresas pblicas deberan ser privatizadas; 9) las actividades econmicas deberan ser desreguladas; 10) el derecho de propiedad debera ser garantizado ms firmemente. Esta lista de reformas es, por lo tanto, perfectamente coherente con el diagnstico de que la crisis latinoamericana tiene su origen en la indisciplina fiscal (populismo econmico) y en el estatismo (proteccionismo nacionalista). El Consenso de Washington se construy a partir del fundamento de que Amrica Latina era un bloque homogneo de economas similares, con problemticas parecidas a las cuales se les dara solucin en forma conjunta. Por otro lado, el consenso de Washington no dice nada respecto de la deuda externa o, de forma ms amplia, de la deuda pblica.17

No tiene ningn

carcter histrico, no sita la intervencin del Estado y el populismo econmico en un plano histrico, sugiriendo implcitamente que estos problemas fueron siempre, histricamente, causas de la crisis. Esta lnea de pensamiento ejerce una poderosa influencia sobre las elites latinoamericanas, paradjicamente, estas medidas agravaron la situacin, en lugar de mejorarla.

17

Esto no fue un puro olvido. Aunque Washington reconozca la existencia de la crisis de la deuda, la versin corriente es que el problema se ha sobreestimado ampliamente.

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 13 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

Concretamente, el contexto externo propici la instalacin de democracias que fueron denominadas como democracias polticas, democracias neoliberales o democracias formales; stas fueron democracias en donde las libertades polticas y civiles convivieron con la pobreza y la marginacin social. En general, al promediar la dcada de los 80, las campaas electorales presidenciales estuvieron marcadas por fuertes crticas hacia los planes recomendados por los organismos internacionales. Por ejemplo, el caso peruano, donde el candidato Fujimori, prometi a los votantes de las zonas rurales, a los indgenas, a los mestizos y a las clases menos favorecidas un programa populista que acabara con la situacin de crisis econmica, o el candidato Menen en Argentina que prometi el salariazo y la revolucin productiva As llegaron a la presidencia: Carlos Andrs Prez en Venezuela, Jaime Paz Zamora en Bolivia, Carlo Menem en Argentina, Collor de Mello en Brasil y Alberto Fujimori en Per, sin embargo, cuando asumieron sus mandatos, en un claro viraje ideolgico, adoptaron los programas neoliberales y profundizaron sus vnculos con los Estados Unidos. En toda Latinoamrica se impulsaron las privatizaciones, que, en la mayora de los casos estuvieron teidas por denuncias de corrupcin. Entre los casos ms resonantes estuvieron el de Brasil donde Collor de Mello se vio obligado a abandonar el gobierno y, en Venezuela donde la Corte Suprema de Justicia proces a Prez. En lo que respecta al diseo institucional y al rgimen poltico, los pases latinoamericanos tendieron a reforzar y fortalecer un presidencialismo personalista, limitando desde el Ejecutivo al poder Legislativo, incluso al Judicial. La figura central fue indiscutidamente el presidente, que, frente a los programas de ajuste y reforma del Estado, permiti implementar rpidamente las recetas neoliberales.

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 14 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

En trminos institucionales, el resultado arroj un poder Ejecutivo que ampli sus facultades y acudi, desmesuradamente, a los decretos de necesidad y urgencia. Estos pases continuaron con su tradicin histrica de un ejecutivo fuerte y un Congreso dbil, generalmente sometido a la autoridad del jefe del partido gobernante y presidente de la Repblica.18 Un caso paradigmtico fue el de Fujimori, que en 1992 disolvi el Congreso y cerr el poder Judicial. Anul artculos de la Constitucin peruana para obtener su reeleccin y detuvo a sus rivales polticos, argumentando que todas estas medidas estaban destinadas a combatir a Sendero Luminoso y a los narcotraficantes. En Venezuela, la llegada de Hugo Chvez al poder marc un perfil

diferente al de los dems pases latinoamericanos. All, la poltica se debati entre una dictadura electa o una democracia populista o caudillista. La llamada Revolucin Bolivariana incluye la creacin de un aparato partidario fuerte y la nacionalizacin de las empresas. En 1998 Chvez gan las elecciones y promovi la reforma de la Constitucin que le garantiz vencer en las prximas elecciones. Desde el 2001. Aprob las leyes de estatizacin de las tierras, hidrocarburos y bancos. Concretamente, el proceso de reestructuracin del Estado orientado a la desregulacin y privatizacin, a excepcin de Venezuela, impactaron fuertemente en la sociedad. Con la reformulacin del rol del Estado variaron las relaciones de la economa y la distribucin de la riqueza. En este marco, se multiplicaron las desigualdades que produjeron explosiones sociales frente al aumento de la pobreza y de la desocupacin: el Caracazo en Venezuela, la rebelin zapatista en los 90 en Mxico, liderada por el subcomandante Marcos, fueron las consecuencias ms palpables de la aplicacin18

Svampa, M.: La sociedad excluyente: la Argentina bajo el signo del neoliberalismo. Alfaguara, Bs.As., 2005

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 15 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

de estas polticas. La continuacin de las mismas a comienzos del siglo XXI, teidos de hechos de corrupcin desembocaron en una de las crisis de mayor envergadura que se vivi en Amrica Latina: la crisis de diciembre de 2001 en Argentina. Se puede agregar que Argentina no estuvo aislada de la crisis de gobernabilidad y alta conflictividad social, como lo llama Bosoer, en varios pases latinoamericanos se produjo el derrumbe de los presidencialismo de mercado como fueron los casos de Paraguay, Per y Bolivia. Es decir, mandatarios que siguieron una economa neoliberal aplicando recetas pro-mercado; en algunos casos las respuestas, una vez que se sali de la crisis, fueron una recreacin de frmulas polticas nacional populistas no hegemnicas, donde se revalorizan las polticas desarrollistas de los aos 50 y 60 tratando de reconstruir la mstica militante de los 70. 19 Las nuevas coaliciones electorales se autodefinieron como la nueva poltica, intentando desprenderse del pasado inmediato y del Consenso de Washington en la bsqueda de otras alternativas de poder, por ejemplo, Toledo en Per o Kirchner en Argentina.

La democracia hoy. Tendencias actuales pobres democracias?Para muchos autores la democracia en Amrica Latina se est reinventando y cada pas, segn sus posibilidades y obstculos, se esforzara para instaurar el imperio de la ley y los derechos de los ciudadanos.20

19

Bosoer, F.: Crisis con salvataje? Una hiptesis sobre el componente parlamentario en el autorescate de las democracias sudamericanas: 1999-2003. En: ALBERTI, G., LLENDERROZAS, E. y PINTO, J.: (comps) Instituciones, democracia e integracin regional en el Mercosur. Prometeo, Bs.As., 2006.20

Del Alcazar Garrido, J. et al: Historia contempornea de Amrica. PUV, Valencia, 2003. pg. 382

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 16 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

Se trata en este ltimo caso, en una primera mirada, de una interpretacin que no est teniendo en cuenta los niveles de pobreza de la poblacin latinoamericana y la posibilidad de su verdadera participacin democrtica. Si bien la ciudadana poltica aparece como universal, en la prctica se asiste a una licuacin del ciudadano: es apenas un mero votante, cuando no se abstiene de votar21, una de las manifestaciones de la creciente apata poltica ligada al desprestigio de la clase dirigente. Lo que caracteriza hoy a Amrica Latina es democracias polticas que, despus del viraje neoliberal y la aplicacin de sus recetas construyeron sociedades con una marcada injusticia social. Por ejemplo, para Ansaldi: Las polticas neoconservadoras de los aos 1990 han producido una brutal fragmentacin social, traducida en ruptura de los lazos de solidaridad y exacerbacin de las desigualdades sociales. Tanto, como para poder decir que ha generado un rgimen de apartheid social, toda vez que sus consecuencia y manifestacin ms visibles son la segregacin socioeconmica y cultural de grandes mayoras demogrficas. Este apartheid social opera en dos registros entrelazados: el de cada una de nuestras sociedades, consideradas en su dialctica interna, y el del mundo globalizado. En uno y otro, las distancias que existen entre hombres y mujeres ubicados en diferentes planos de la pirmide social se han tornado crecientemente mayores..22 Si tomramos el caso mexicano, en el que se ha mejorado notablemente su macroeconoma (crecimiento del 6,9% en el 2000), lo cierto es que Mxico cuenta con 100 millones de habitantes, de los cuales 70 millones son pobres, de stos 30% son tcnicamente pobres, es decir los que cuentan con menos de dos21

Ansaldi, W.: ob.cit. Ansaldi, W.:

22

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 17 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

salarios bsicos mientras que los 40 millones restantes viven en la extrema pobreza o indigencia, estos es, no disponen ni de un salario bsico.23 En el caso de Mxico no es la excepcin sino una versin de la realidad latinoamericana, Luis de Sebastin propone un concepto muy interesante para analizar esta situacin, habla de sociedad dual: Se caracteriza por tener dos mundos en uno: el tercero y el primero dentro de la misma nacin, bajo las mismas autoridades y la misma bandera pases (en los que) hay dos mundos distintos, separados fsicamente por los planes urbansticos de las ciudades, y separados en niveles de vida y en satisfaccin de las necesidades bsicas por un abismo insalvable24 Es claro que, si aplicamos este concepto a toda Amrica Latina veremos cmo se observa en cada pas, obteniendo as una triste verdad: que nuestra regin le gana a cualquier otra regin del mundo en desigualdad. El mismo Luis de Sebastin explica que: desde dos mundos tan distintos, que conviven en un mismo Estado, no se puede plantear un proyecto de nacin diferente, ni proponer una diferente estrategia de desarrollo porque una parte est satisfecha de cmo van las cosas Esto se plantea as, en tanto las elites empresariales, polticas y profesionales acuerdan en acceder plenamente a la globalizacin, ya que perciben el futuro como crecientemente globalizado con oportunidades de las cuales Amrica Latina no puede quedar afuera; creen que los pases latinoamericanos deben abrirse al mundo colectivamente, a travs de bloques de integracin subregional que avancen a un nico bloque regional.2523 24 25

Del Alcazar,: ob. cit. p. 404 Del Alcazar,: ob. cit. Citado por Alcazar: En El Pas, 3 de setiembre de 2001. Del Alcazar Garrido, J.: ob. cit., pg. 504

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 18 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

Ahora bien, esta situacin econmica nos permite observar el estado de las democracias de la regin, decamos que una de las manifestaciones de la creciente apata poltica ligada al desprestigio de la clase dirigente es la de la licuacin del ciudadano. Por ejemplo, la actual situacin chilena muestra datos preocupantes, ya que se trata de un creciente distanciamiento del sistema democrtico de los sectores jvenes y los grupos de rentas ms bajas. Por lo tanto, nos estamos enfrentando a la prdida de calidad de las decisiones democrticas que si se consolida la tendencia es probable que, termine por deslegitimar las instituciones. Que, como seala Caetano, citado por Del Alcazar en su Historia contempornea de Amrica Latina: El desencanto y el incumplimiento de las expectativas crea un territorio abonado para el ascenso de figuras mesinicas, de perfiles neopopulistas (que) la profundizacin de la sangrante injusticia social mine en sus bases la integracin social, soporte fundamental del arraigo de las prcticas y valores democrticos(que) el reforzamiento de los ejecutivos y la prdida de consistencia de los parlamentos, redunde en la proliferacin de sistemas polticos sin contrapesos ni equilibrios institucionales poco habilitantes para el ejercicio slido de la responsabilidad (accountability) y para la consolidacin de la participacin ciudadana26 Es innegable el marco generalizado de democracias en Amrica Latina que ha constituido un gran avance para la regin; sin embargo, el peso de la deuda externa y la terrible desigualdad social plantean serios reparos a la hora de hablar de la calidad de las democracias latinoamericanas y de las tendencias actuales que se observan.

26

Del Alcazar: ob.cit., pg. 406

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 19 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

De algn modo podramos decir que Amrica Latina vive una tendencia altamente notoria al debilitamiento de la democracia y, en consecuencia, al fortalecimiento de rasgos autoritarios en los gobiernos. Pero de ningn modo puede decirse que las instituciones democrticas hayan sido socavadas nicamente por los gobernantes. En todo el espectro de actores sociales y polticos se encuentran inclinaciones autoritarias y conductas antidemocrticas; autoritarias y existen actores sociales y polticos con inclinaciones conductas antidemocrticas: latifundistas que mantienen

escuadrones de la muerte, redes clientelistas de carteles de la droga son formas extremas de enclaves antidemocrticos, lo mismo que grupos econmicos y financieros poderosos que en esferas reservadas hacen y permiten que se haga exactamente lo que les conviene. Varios cientistas sociales afirman que hay que trabajar sobre la calidad de la democracia. Cmo mejorar la calidad de la democracia latinoamericana, en esas sociedades duales, dentro de ese rgimen de apartheid social consecuencia de la aplicacin de las recetas neoliberales, hoy en este mundo interdependiente? No es tarea fcil, aunque el balance de casi tres dcadas no es alentador, no podemos perder la esperanza. Creer en la posibilidad de un cambio, democrticamente revolucionario como dice Del Alcazar pensando en el Brasil de Lula.27 Observando las acciones de gobierno de Evo Morales en Bolivia, las declaraciones de Rafael Correa en Ecuador, Bachelet en Chile, sin duda hay cambios aunque an no podemos discernir la magnitud ni el significado de los mismos. Parece que los gobiernos de izquierda enfrentan la compleja tarea de contrarrestar el fortalecimiento del autoritarismo y la antipoltica mediante el aumento de las posibilidades de participacin.27

Del Alcazar: ob.cit., pg. 416

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 20 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

Entendemos que en Brasil, Argentina, Uruguay y Chile, hay gobiernos de izquierda en funciones que se caracterizan por su pragmatismo macroeconmico y su sensibilidad social. Si no desean perder su oportunidad histrica deberan ser capaces de mostrar la habilidad de implementar una poltica de crecimiento exitosa, con la que sea posible financiar la ampliacin de programas sociales. Solo ambas cosas, el crecimiento y una poltica social eficazmente enfocada, pueden producir a mediano plazo una reduccin de la extrema desigualdad social. De todos modos, creemos que, sin ciudadana social y ciudadana poltica es imposible pensar en democracias fuertes donde el perfil del ciudadano no sea slo el de un mero votante acechado por el desempleo y marginado del mercado. En palabras de Ansaldi: Ser pobre en una sociedad rica o en una sociedad cara, como la -Argentina actual- es vivir con reduccin de capacidades, carecer de bienestar, es decir, mal vivir28 Por lo que si la pobreza es desigualdad econmica, social y cultural, es necesario construir una ciudadana democrtica, en la que la decisin y accin polticas modifiquen las injustas desigualdades sociales. Los xitos de gobiernos de izquierda son importantes tambin para contrarrestar el fortalecimiento de las tendencias autoritarias y el avance del cinismo y de la antipoltica. Depende de ellos neutralizar el resentimiento contra la poltica y contra los partidos mediante un aumento de las posibilidades de participacin. Adems, podran surgir nuevas instancias de mediacin entre el Estado y la sociedad que por primera vez no se orienten por principios clientelistas, sino por una concepcin realista del bien comn.28

Ansaldi, W.: Disculpe el seor, se nos llen de pobres el recibidor, en http://www.catedras.fsoc.uba.ar/udishal ; publicado originariamente en Estudios Sociales, n 14, Santa Fe (Argentina), Primer Semestre 1998, pp. 4371.

Seminario: Historia Social, poltica y econmica de Amrica 21 Latina Maestranda: Prof. Lic. Claudia Fava

Construir una democracia participativa no permitir ir olvidando esa casi certeza de vivir en pobres democracias.

.