Universidad de CaraboboFacultad de Ciencias de la Educación

TRABAJO INDIVIDUAL

Puntos a tratar:

DEFINICIÓN PROPIA, DE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y ANDRAGOGÍA PERFIL DEL LICENCIADO EN EDUCACIÓN

CUADRO COMPARATIVO DE PEDAGOGÍA-ANDRAGOGÍA

Asignatura: PEDAGOGÍA-CURRICULUMProfesora: SUSANA GÓMEZ de LEAL

Alumna: LUCIA MONTANARI M.C.I.: 4.874.328

Sección: 73Semestre: 5º

DEFINICIÓN PROPIA, DE EDUCACIÓN, PEDAGOGÍA Y ANDRAGOGÍA

Es muy difícil realizar este trabajo individual sin usar palabras como “Yo”, o,“mi experiencia”,

pues, al hablar de “propia” la primera persona entra inevitablemente en juego. De todas

maneras trataré de hacerlo de forma tal que sirva para explicar mi punto de vista al

momento de definir estos tres términos.

Hace algunos años (por ser amable conmigo misma) recuerdo que se decía de un profesor

de matemáticas en Valencia que era el único “pedagogo” de verdad, es decir, que era el

único graduado en el pedagógico de Caracas, muy bueno y querido por sus alumnos por

cierto, mientras que los demás eran o ingenieros (en la materia de física), o personas

nativas del país de origen de un idioma (inglés), o excelentes ejecutantes de un instrumento

(piano), por poner algunos ejemplos de profesores que conocí, los cuales no siempre

sabían dar clases aun siendo “Maestros” en la materia. Gracias a Dios me sucedió muy

pocas veces. Agrego a esto que, ya en la universidad, he encontrado profesores cuyos

conocimientos no discuto pero con los cuales “he quedado hambrienta de saber” por usar

una expresión, y por lo tanto he tenido que buscar la manera de “comer” ese conocimiento

en otra fuente.

Culmino este preámbulo diciendo que, según cuentan mi mamá y mi abuela, siempre he

tenido la fastidiosa costumbre de querer enseñar, corregir y enderezar la vida a cuanto

cristiano se me cruzara por el camino, por lo tanto ese deseo de guiar o conducir a otras

personas está bastante arraigado en mi.

Hecha esta breve premisa introductoria podría entonces concretar mi propia definición de

estos tres términos. Preciso, antes que nada, que las 3 palabras llevan en su seno,

etimológicamente hablando, el hecho de “conducir y/o guiar”. Por lo tanto si quisiera definir

EDUCACIÓN-PEDAGOGÍA y ANDRAGOGÍA, podría perfectamente resumirlas en la

misión-profesión-vocación de guiar y conducir por los caminos del conocimiento con la

finalidad de contribuir al proceso de moldear (ya iniciado en el vientre materno, con la base

de un código genético) al hombre-ciudadano-familia-sociedad del futuro…nada fácil,

¿verdad? Es de notar que no establezco diferencias entre los 3 conceptos al momento de

definirlos, pues en realidad vendrían a ser lo mismo con pequeños detalles: EDUCAR:

guiar, PEDAGOGÍA: guiar al niño, al joven, y ANDRAGOGÍA: guiar al adulto, al hombre.

Entonces, ¿porque utilizar 3 términos en vez de uno solo? Pues, siempre según mi “propio”

punto de vista, la Educación vendría a ser la herramienta a utilizar, y la Pedagogía y la

Andragogía, las áreas en las cuales aplicar, utilizar, dicha herramienta.

Indudablemente se requieren otros elementos, otras piezas, para completar este

rompecabezas, por llamarlo de alguna manera, es lo que entonces podríamos llamar:

“EL PERFIL DEL LICENCIADO EN EDUCACIÓN”

Siempre asomados a la ventana de nuestra individualidad, de nuestro “propio punto de

vista” podríamos enumerar los elementos constituyentes de este rompecabezas empezando

a armarlo de la cabeza a los pies (sin que ello denote una escala de importancia, todos los

elementos son igualmente importantes):

1- Vocación

2- Conocimientos

3- tolerancia

4- atención

5- ternura y/o dulzura

6- firmeza

7- pasión (amor por…)

8- comprensión

9- paciencia

10-solidaridad

11-fuerza (energía)

12-integridad

En realidad se que se me escapan muchos elementos que conforman, a mi juicio, el Perfil

del Licenciado en Educación, pero puedo suplir esa falla argumentando que en el marco de

la situación política, social, económica y familiar que está viviendo nuestra sociedad

venezolana, (situación que aqueja también a las sociedades de otros países con sus

propias características) donde los valores, los objetivos y metas, los principios y las bases,

han tomado un giro de 180º, nuestra responsabilidad es mayor, o mejor dicho, viaja en otra

dimensión, en otra longitud de onda, y no podemos anclarnos o momificarnos en la

nuestra, ojo! sin perder la perspectiva de lo que ser “educador” significa. No olvidemos que

las madres, por ejemplo, son grandes educadoras pero a veces, la subjetividad emocional

les impide construir en positivo, por eso es que, sin ánimos de sustituirnos a Ellas, debemos

contribuir, como dije al comienzo, al proceso de moldear esta materia prima de primera

calidad, como lo es “El Ser Humano”.

Luego entonces, habiendo precisado estas semejanzas-diferencias de estos 3 términos

podríamos intentar construir una tabla comparativa también de semejanzas-diferencias

entre la Pedagogía y la Andragogía.

PEDAGOGÍA ANDRAGOGÍA

Es la ciencia encargada de guiar, enseñar y educar, al niño-adolescente.

Es la ciencia encargada de guiar, enseñar y educar, al adulto.

Trabaja con un material humano virgen, en lo que a conocimientos se refiere, aunque con el auge de la tecnología (Internet, tv por cable, entre otros) este material humano maneja un exceso de información inadecuada o mal impartida para su joven edad.

Trabaja con un material humano rico en experiencias de vida y en informaciones adquiridas en otro tiempo (cercano o lejano) la cual debe ser manejada con criterio de perfeccionamiento hacia el conocimiento y respeto para quien lo posee.

El niño-joven tiende a identificar al pedagogo afectivamente con el adulto-cómplice-familiar, buscando ser el centro de su atención de manera casi constante y un descuido y/o desinterés en este aspecto conllevaría a nuevos obstáculos al momento de enseñar.

El adulto por su propia condición, es “aparentemente” menos susceptible a la actitud del docente hacia él, y digo aparentemente porque en realidad, como todo ser humano, independientemente de la edad, busca agradar, ser notado, tomado en cuenta, con la salvedad que puede manejar la situación de manera madura.

La finalidad de esta disciplina es la de contribuir al moldeamiento y formación cultural, moral, emocional, ciudadana…entre otras, del futuro hombre, de la futura sociedad.

La finalidad de este disciplina es la de perfeccionar, completar y contribuir con la formación cultural, moral, emocional, ciudadana…entre otras, de este ser humano adulto, para su mejor permanencia y/o inserción en la sociedad en la cual ya vive.

Y así podríamos seguir hablando por muchas más líneas, con nuestras propias palabras y

desde “nuestra ventana” y seguiríamos quedándonos cortos sobre el tema. Por lo tanto, y a

manera de conclusión podemos decir que en esta hermosa y no siempre fácil tarea del

educador, muchos son los elementos que juegan un rol importante, pero, al igual que en un

rompecabezas, todas las piezas son indispensables y la ausencia de una de ellas haría ver

al dibujo general como incompleto, desarmónico.

Yo pertenezco al grupo de los alumnos sujetos a “Andragogía” por mi edad, aunque en el

pupitre de la universidad sienta como si el tiempo no hubiese pasado y me traslado a

lejanos años 70,…de no ser por el cansancio!!!!…pero también estoy detrás de un escritorio

en el rol de “Pedagoga” desde hace un tiempo también. Es por eso que me permito hablar

de esta manera, de ambas disciplinas entrelazándolas con la palabra clave “EDUCACIÓN”.

El más grande “Maestro” de todos los tiempos (y sin ánimos de hacer proselitismo religioso)

dio muestras de sabiduría, de humildad, de firmeza y paciencia, pero también de

humanidad al perder alguna vez esta última, de tolerancia, y…de todas esas características

que deberían conformar el perfil del buen Licenciado en educación.

LUCIA MONTANARI MURA

C.I.: 4.874.328