Tratado de Charaña

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  BIBLIOTECA DEL CONGRESO NACIONAL DE CHILE DEPARTAMENTO DE ESTUDIOS, EXTENSIÓN Y PUBLICACIONES EN TORNO A LOS ANTECEDENTES DE LA RECLAMACION MARITIMA BOLIVIANA HASTA EL TRATADO DE PAZ DE  1904 ENTRE CHILE Y BOLIVIA Y DOS NEGOCIACIONES DURANTE EL SIGLO XX DEPESEX/BCN/SERIE ESTUDIOS AÑO XV, Nº 291.C SANTIAGO DE CHILE AGOSTO DE 2005

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BIBLIOTECA DEL CONGRESO NACIONAL DE CHILE DEPARTAMENTO DE ESTUDIOS, EXTENSIN Y PUBLICACIONES

EN TORNO A LOS ANTECEDENTES DE LA RECLAMACION MARITIMA BOLIVIANA HASTA EL TRATADO DE PAZ DE 1904 ENTRE CHILE Y BOLIVIA Y DOS NEGOCIACIONES DURANTE EL SIGLO XX

DEPESEX/BCN/SERIE ESTUDIOS AO XV, N 291.C

SANTIAGO DE CHILE AGOSTO DE 2005

TABLA DE CONTENIDOS

ABSTRACT .......................................................................................................................... I INTRODUCCIN ................................................................................................................ 1 I. LAS LEYES DE INDIAS EN EL SIGLO XVII: EL LMITE NORTE DEL REINO DE CHILE Y EL OESTE DE LA AUDIENCIA DE CHARCAS DURANTE EL SIGLO SIGUIENTE, EN LAS VERSIONES CHILENA Y BOLIVIANA. ................... 1 II. LA CUESTIN DE LMITES CON BOLIVIA DURANTE LA INDEPENDENCIA Y LUEGO CON LA CONFEDERACIN PER-BOLIVIANA DEL PROTECTOR ANDRS DE SANTA CRUZ........................................................... 6 III. EL ORIGEN DEL LITORAL DE BOLIVIA ............................................................. 9 IV. CONTROVERSIAS LIMTROFES Y TRATADOS ENTRE CHILE Y BOLIVIA EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XIX HASTA ANTES DE LA GUERRA DEL PACFICO ................................................................................................................. 14 V. PARTICIPACIN DE DOMINGO SANTA MARIA EN EL CONFLICTO, PACTO DE TREGUA DE 1884 Y FRUSTRADAS NEGOCIACIONES POSTERIORES HASTA EL TRATADO DE PAZ Y AMISTAD CON BOLIVIA DE 1904. ..................................................................................................................................... 22 VI. UN CORREDOR PARA BOLIVIA: DOS NEGOCIACIONES EN EL SIGLO XX. ....................................................................................................................................... 42 1. NEGOCIACIN DE 1950.................................................................................................. 43 2. NEGOCIACIN DE 1975.................................................................................................. 47 EPLOGO ........................................................................................................................... 55 CONCLUSIONES .............................................................................................................. 57 SELECCIN BIBLIOGRFICA..................................................................................... 59 ANEXO: SELECCIN DE MAPAS ................................................................................ 64

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ABSTRACTEl presente estudio pretende aportar elementos histricos y de juicio en el sentido que los antecedentes de la reclamacin martima boliviana sobre territorios que pertenecen a Chile, desde los tiempos de la Colonia y, al menos, hasta el Tratado de Paz de 1904, entre Bolivia y Chile, son discutibles. En primer lugar se trabaja a partir de documentos indianos, citados y analizados por connotados historiadores chilenos, en los cuales se demuestra que el norte el reino de Chile colindaba con territorios pertenecientes a la Audiencia de Lima y no con los de la Audiencia de Charcas, (parte de la posterior Bolivia) que se encontraba hacia el interior, por lo que sta no llegaba al ocano. A continuacin, y siempre con respecto a las posesiones de la Audiencia de Charcas se pondr en duda, citando documentos histricos, la versin oficial boliviana contenida en El Libro Azul: El Problema Martimo Boliviano que indica que este pas s posey salida al mar desde la poca colonial. Luego sigue el uti possidetis de 1810, durante el proceso emancipador de Espaa, que tanto Chile como Bolivia sealan como punto de partida de sus territorios a partir del establecimiento de la Repblica. Asimismo, se establecer que Bolivia no tuvo acceso al Pacfico cuando naci como pas independiente, aunque s lo tuvo con posterioridad. Al respecto, de paso se hablar sobre la responsabilidad de la Corona espaola con respecto a la interpretacin limtrofe de sus territorios coloniales A continuacin, se describe la situacin con la Confederacin Per-Boliviana. Desde esta, y a causa, segn algunos historiadores chilenos, de un desinters de Chile en precisar su frontera norte, por motivos de poltica interna comenz el avance boliviano hacia el Pacfico (caleta de Cobija, en especial), lo que es rechazado por la misma versin de Bolivia, que incluso se refiere a un avance chileno sobre su territorio. Se debe establecer que este trabajo considera como base de los argumentos de la posicin boliviana, en todo el perodo, la fuente ya dicha y otra publicacin: Fundamentos de la demanda martima boliviana, del Consulado General de Bolivia en Chile, que aparece en la red de Internet. Ya instalada la Repblica, en Chile y Bolivia, se describen las controversias polticolimtrofes, durante el siglo XIX y tratados (de 1866 y de 1874) entre ambos pases. Ms adelante, finalizada la Guerra del Pacfico (1979-1884), Bolivia firm con Chile el Pacto de Tregua de 4 de abril de 1884, en el cual se estableci que Chile seguira gobernando, segn su legislacin, los territorios comprendidos entre el paralelo 23 (Mejillones; actual punta de Angamos) hasta ms al norte, la desembocadura del ro Loa en 21 27 (la que actualmente marca el lmite entre la I Regin de Tarapac y la II de Antofagasta) fijando, asimismo, el lmite oriental hacia la cordillera interior. Tambin se ver cmo han existido dos tendencias en Chile con relacin a la salida al mar de Bolivia, durante fines del siglo XIX y primera dcada del siglo pasado. En la primera, y a consecuencia de la llamada poltica boliviana liderada por el Ministro de Relaciones Exteriores de Chile, y luego Presidente de la Repblica, Domingo Santa Mara, Chile deba abrirse a dar aquella salida a Bolivia, puesto que la tena antes de la Guerra del Pacfico, y asEste documento se inicia con una Presentacin del ex Presidente de Bolivia, Carlos Mesa G., y luego una Introduccin de su ex Canciller Juan Ignacio Siles.

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evitar los problemas que acarreara la mediterraneidad boliviana. Esta tendencia se revertira en 1900, ao en que Chile se reserv el dominio de Tacna y Arica en caso de serle favorable un plebiscito. De aqu naci el cambio de la posicin chilena, ahora no acorde la anterior, proclive a la salida al mar de Bolivia. As, hasta aquel ao 1900, Chile intent negociar con Bolivia parte de o los territorios de Tacna y Arica, antes y tras la Guerra del Pacfico, los cuales eran originarios del Per cuya soberana definitiva qued sujeta a un plebiscito posterior que no se efectu. Esta poltica, como una continuidad de la posicin de Domingo Santa Mara, ocurri incluso durante de las conversaciones entre diversos actores polticos de la poca, con los proyectos de Tratados del 18 de mayo de 1895 (de Paz, de Comercio y Especial de transferencia de territorio). Las negociaciones para la concretizacin de estos instrumentos no llegaron a feliz trmino ya que no fueron ratificados, por lo que sigui vigente el Pacto de Tregua de 4 de abril de 1884. Asimismo se resumen los antecedentes y se describe los puntos del Tratado de Paz, Amistad i Comercio entre Chile i Bolivia, promulgado el 20 de octubre de 1904 y publicado en Chile el 27 de marzo de 1905. Es importante destacar que con relacin a la observancia por Chile de este Tratado de 1904 con Bolivia, en el que quedan reconocidos del dominio absoluto y perpetuo de Chile los territorios ocupados por ste en virtud del artculo 2 del Pacto de Tregua de 4 de abril de 1884, se puntualiza la suma global desembolsada por Chile para su ejecucin (una cantidad superior a seis millones de libras esterlinas) as como su desglose en los cuatro mayores mbitos (a saber: construccin del ferrocarril de Arica a La Paz; garanta por los ferrocarriles interiores hasta 1918; dinero en efectivo segn el artculo 4 del Tratado y pago por indemnizaciones a particulares). Asimismo, se llega a estimar el porcentaje de este desembolso en el Presupuesto Nacional de la poca. Antes de terminar el trabajo se tratan dos negociaciones del siglo XX entre Chile y Bolivia, las que lograron mayor cercana, para que este pas lograra un acceso soberano al Pacfico mediante un corredor sal norte de Arica. Se trata de las negociaciones de 1950 y la de 1975, en las que los Tratados de Chile con el Per, de 1929, dieron a este ltimo pas un rol decisivo en aquellas. Finaliza este estudio haciendo un breve anlisis relativo a puntos especficos de la Convencin de Viena sobre el Derecho de los Tratados, negociada en esa ciudad y adoptada el 23 de mayo de 1969, la que sujeta ratificacin por los Estados, establece el principio de no alteracin de los Tratados. Esta Convencin fue firmada, tanto por Bolivia como por Chile, aquel mismo da, aunque slo Chile la ratific el 2 de abril de 1981. Antes de las Conclusiones, los autores han credo necesario citar, en un Eplogo, la opinin del cientista social y diplomtico chileno Luis Maira A., quien se expande en el contexto de las relaciones exteriores de Chile, especialmente en lo referente al tema de este estudio.

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EN TORNO A LOS ANTECEDENTES DE LA RECLAMACION MARITIMA BOLIVIANA HASTA EL TRATADO DE PAZ DE 1904 ENTRE CHILE Y BOLIVIA Y DOS NEGOCIACIONES DURANTE EL SIGLO XXEstudio elaborado por Pablo Valderrama Hoyl con la colaboracin de Virginie Loiseau, investigadores de la Seccin de Estudios de la Biblioteca del Congreso Nacional. Adems se cont con el apoyo de Fernando Concha, de la Unidad de Libros Raros y Valiosos.

INTRODUCCINEl presente estudio ha sido elaborado con motivo de haberse cumplido el 20 de octubre del ao recin pasado, los 100 aos del Tratado de Paz, Amistad y Comercio de 1904 entre Bolivia y Chile, an vigente. Asimismo y como en el ltimo tiempo se han producido una serie de roces diplomticos entre los dos pases como consecuencia de la insistencia boliviana, en distintos foros internacionales, reclamando una salida al mar, que perdi luego de la Guerra del Pacfico con Chile, desencuentros que an se mantienen, los autores han credo conveniente y de inters informativo para los legisladores hacer un resumen histrico, poltico y diplomtico, desde distintos ngulos, de esta ms que centenaria controversia.

I. LAS LEYES DE INDIAS EN EL SIGLO XVII: EL LMITE NORTE DEL REINO DE CHILE Y EL OESTE DE LA AUDIENCIA DE CHARCAS DURANTE EL SIGLO SIGUIENTE, EN LAS VERSIONES CHILENA Y BOLIVIANA.En primer trmino, en 1680, bajo el reinado de Felipe IV, fue promulgada la Recopilacin de leyes de los reinos de Indias, en la cual se reunieron y refundieron, en forma orgnica, las ordenanzas y normas dictadas por la corona espaola para Amrica.

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En su Breve Historia de las Fronteras de Chile, el historiador Jaime Eyzaguirre demuestra que el lmite norte del reino de Chile colindaba con los territorios pertenecientes a la Audiencia de Lima, al tiempo que puntualiza los que comprendan la Audiencia de Charcas (tambin llamada Alto Per que contemplaba parte de lo que ms tarde sera Bolivia) situada hacia el este; al interior de la frontera entre la Audiencia de Lima y el reino de Chile, razn por la que no tena acceso al Pacfico. Citemos a Eyzaguirre cuando se expande en torno al contenido de la Recopilacin de leyes de los reinos de Indias: En su libro II, ttulo XV se ocup de las Audiencias del Nuevo Mundo, su rgimen administrativo y mbito jurisdiccional. As, la ley 5, al referirse a la Audiencia de Lima, dispuso que ella tenga por distrito la costa que hay desde dicha ciudad hasta el reino de Chile exclusive Resulta as clara la colindancia entre el Per y Chile. Sin embargo, se ha sostenido que la continuidad territorial de ambos reinos estara interrumpida por el acceso al mar de la Audiencia de Charcas, pues un trozo de la ley 9 dice que esta ltima confina por el levante y poniente con los dos mares del Norte y del Sur. Para apreciar el verdadero alcance de esta frase, conviene leer el texto completo de la citada ley 9. Ordena en ella el rey que la Audiencia de Charcas tenga por distrito la provincia de los Charcas y todo el Collao* desde el pueblo de Ayavire por el camino de Hurcosuyo, desde el pueblo de Asillo por el camino de Humasuyo, desde Atuncana* por el camino de Arequipa hasta la parte de los Charcas inclusive, con las provincias de Sangabana, Carabaya, Iuries y Dieguitas, Mojos y Chunchos y Santa Cruz de la Sierra, partiendo trminos por el septentrin con la Real Audiencia de Lima y provincias no descubiertas, por el medioda con la Real Audiencia de Chile y por el levante y poniente con los dos mares del Norte y del Sur* y lnea de la demarcacin entre las coronas de los reinos de Castilla y Portugal por la parte de la provincia de Santa Cruz del Brasil. Ante todo hay que advertir que la lnea que corre desde Atuncana por el camino de Arequipa hasta la parte de los Charcas corresponde al punto culminante y adyacente por el poniente con el mar del Sur. Atuncana est a 2145 sur y dista unas ocho leguas de la costa. Arequipa, por su parte, se halla a 1612 sur y a unas trece leguasNotas de los autores: * Se trata del altiplano. La gran laguna del Collao, por ejemplo, corresponde al lago Titicaca. * Con respecto a esta localidad el historiador Sergio Villalobos (ob. cit.) puntualiza: Algunos historiadores chilenos equivocadamente han entendido que Atuncana era San Pedro de Atacama. Se trata, en realidad de un poblado ubicado exactamente al sur del Cuzco (...) se situaba de manera general en el rumbo hacia Charcas. Esta ltima regin corresponda al sector de Chuquisaca o Sucre y desde poca preincsica haba sido el espacio ocupado por los indios charcas. Fue el nombre que los espaoles extendieron a toda la jurisdiccin de la Audicnecia establecida en Chuquisaca o villa de La Plata. Ver Nota 3, pg. 78 (pie de pgina). * Se refiere a los ocanos Atlntico y Pacfico, respectivamente. Esta indicacin que aparece en la Recopilacin... constituye para Sergio Villalobos (ob. cit.) un grueso error, en el caso de ambos mares, ya que por el Atlntico estaban las posesiones portuguesas y por el Pacfico las de Per y Chile.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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del mar. La provincia de Charcas se encuentra al este, es decir, al interior, y no tiene ningn punto hacia el oeste del camino que une estos lugares. Entre dicho camino y la costa hay una amplia faja de territorio que sigui siempre en poder de la Audiencia de Lima. Si esto no fuera as sera imposible explicarse la ley 15 del mismo ttulo XV, libro II de la Recopilacin de Indias, ya citada anteriormente, que dispone: Que el Corregidor de Arica, aunque sea del distrito de la Audiencia de Lima, cumpla los mandamientos de la de Charcas. Fue necesario apuntar de manera expresa esta servidumbre de Arica a Charcas, no obstante corresponder el puerto a la provincia de la Audiencia de Lima, porque Charcas no tena acceso a la costa. En otra forma Arica, que est situada en 1828, o sea, entre los paralelos de Atuncana y Arequipa, le hubiera pertenecido naturalmente. La afirmacin de la ley 9 de que la Audiencia de Charcas linda por el levante y poniente con los mares del Norte y del Sur, tiene as slo el sentido de indicar una direccin geogrfica, pero no puede inferirse de ella que el territorio de Charcas posey costa entre esos mares. Darle este ltimo alcance sera contraponerla a la expresa letra de la ley 5, ya citada anteriormente, que concede a la Audiencia de Lima por distrito la costa que hay desde dicha ciudad hasta el reino de Chile exclusive, sin interrupcin alguna. En fin, parece inoficioso aadir que cuando la ley 9 de la Recopilacin alude a la demarcacin de Charcas por el medioda con la Real Audiencia de Chile lo hace bien, pues Charcas colindaba al sur con la provincia de Cuyo, entonces perteneciente a Chile.1 Ms adelante, en su mismo trabajo, Eyzaguirre prueba como tampoco el lmite norte del reino de Chile (vimos: Audiencia de Lima) fue alterado con la creacin, en 1776, del virreinato del Ro de la Plata que incluy los territorios dependientes de la Audiencia de Charcas, que seguan siendo mediterrneos. As, luego, el historiador chileno se refiere al Plano general del reino de Chile en la Amrica meridional, elaborado por el cosmgrafo Andrs Baleato, en 1793, por orden del virrey Francisco Gil de Taboada y Lemus, el cual puntualiza que aquel lmite se inicia en el grado 21, es decir, en la desembocadura del ro Loa y comienzo del desierto de Atacama. Esto ltimo es nuevamente refrendado en la Gua poltica, eclesistica y militar del virreinato del Per que aquel mismo ao public el sabio peruano Hiplito Unanue por encargo del citado virrey. A continuacin se puntualizar en este estudio la posicin actual de la Repblica de Bolivia, con relacin al origen colonial de los derechos bolivianos sobre la costa de Atacama,

Eyzaguirre, Jaime. Breve Historias de las Fronteras de Chile. Editorial Universitaria. Santiago de Chile, 1984, pp. 28-30.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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procedentes de El Libro Azul: El Problema Martimo Boliviano, La Paz, 2004.2 Seala este documento: EL VIRREINATO DEL PERU El Virreinato del Per, entidad poltico-administrativa establecida en Espaa en 1542, durante el periodo colonial incluy los actuales territorios de Colombia, Ecuador, Bolivia y Per, as como los de Chile y Argentina. Diversos estudios histricos testimonian que la Audiencia de Charcas, que fue la base administrativa sobre la cual se conform posteriormente la Repblica de Bolivia, limitaba con las costas del Pacfico. La Audiencia de Charcas abarcaba desde el ro Loa en el norte (al norte de Tocopilla y al sur de Iquique, entonces territorio peruano) a los 21 y el ro Salado en el sur (al sur de Taltal y al norte del valle de Copiap) entre los grados 26 y 27. Las leyes IX y XII de la Recopilacin de Indias establecen claramente esa jurisdiccin de los que a partir de 1825 fue el Departamento boliviano de Potos. El 18 de abril de 1548, el pacificador La Gasca, que defini los lmites entre el Virreinato del Per (Audiencia de Charcas en esa regin) y la capitana de Chile, estableci el paralelo 25 como la demarcacin ms al norte de Chile. Este mismo criterio fue expresado por don Pedro de Valdivia, conquistador de Chile en su carta al emperador Carlos V de 15 de octubre de 1550, en la que menciona textualmente el paralelo 25 como el lmite ms al norte de su jurisdiccin. Queda claro que Chile nunca posey territorios ms al norte del valle de Copiap, y que esa realidad fue sistemticamente reconocida en todos los mapas que se publicaron en el mundo hasta 1880. Sobre esa base la soberana boliviana era indiscutible cuando menos hasta el Paposo en el paralelo 25. A su vez el documento del Consulado General de Bolivia en Chile: Fundamentos de la demanda martima boliviana, indica: Los Derechos de Bolivia sobre su territorio de Atacama, junto al Ocano Pacfico, se remontan a los tiempos de las culturas precolombinas, y tienen una incontrovertible legitimidad jurdica, desde la Colonia espaola. En efecto, los lmites de la Real Audiencia de Charcas, y luego los de la Repblica de Bolivia, sobre la costa del Pacfico, se extendan desde la desembocadura del ro Loa 21, 27 L.S. en el norte, hasta la cabecera del valle de Copiap, por el sur 27 L.S. (). [sic].3 Por nuestra parte observamos que estas afirmaciones sobre derechos bolivianos desde la Colonia en esa zona no exponen bases documentales histricas que as lo comprueben y fundamenten. Se habla, por ejemplo, de diversos estudios histricos testimoniales pero no se los menciona. La segunda fuente boliviana no dice nada sobre el paralelo 25 que puntualiza la primera como el lmite inicial en tiempos del Virreinato del Per. Con relacin a esta lnea demarcatoria, se debe enfatizar que los autores de este trabajo han estudiado la referida carta2

El Libro Azul: El Problema Martimo Boliviano. La Paz, 2004. En: http://www.rree.gov.bo/libroazul/LIBRO%20AZUL%20ESP 3 Consulado General de Bolivia en Chile. Fundamentos de la demanda martima Boliviana. http://www.microweb.cl/bolivia/libro1.htmlBiblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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de Pedro de Valdivia al emperador Carlos V, de 15 de octubre de 1550, en la que segn El Libro Azul.... de Bolivia, el conquistador de Chile menciona textualmente el paralelo 25 como el lmite ms al norte de su jurisdiccin y han comprobado que esta aseveracin Valdivia no la dice en ninguna parte. Es ms: no utiliza el vocablo paralelo en el texto de 25 pginas. La nica referencia a lmites de su gobernacin, la hace el conquistador en su carta en los siguientes trminos: (...) Sacra Majestad: en las provisiones que me dio y merced que me hizo por virtud de su real poder que para ello trajo el Licenciado de la Gasca, me seal de lmites de gobernacin hasta cuarenta e un grados de norte sur, costa adelante, y cient leguas de ancho ueste leste; y porque de all al Estrecho de Magallanes es la tierra que puede haber poblado poca, y a la persona a quien se diese, antes estorbara que servira, e yo la voy toda poblando y repartiendo a los vasallos de V. M. (...).4 Con relacin al licenciado Pedro de la Gasca (1494-1565), hbil eclesistico y poltico espaol al servicio del emperador Carlos V, ambos textos lo citan, pero en contextos diferentes. Pedro de la Gasca estableci los lmites de la Audiencia de Lima, luego de la Guerra Civil en el Per (1544-1548) en la que Pedro de Valdivia tuvo destacada actuacin en contra de las fuerzas rebeldes del conquistador Gonzalo Pizarro. Ahora bien, en 1549, De la Gasca, en retribucin por la leal participacin de Pedro de Valdivia en esa contienda, lo nombr gobernador y capitn general de Chile. (Vase Nueva Enciclopedia Larousse. Editorial Planeta, Barcelona, 1984. Tomo V, p. 4309). Volviendo al prrafo arriba citado de El Libro Azul... (El Virreinato del Per) en el cual se dice: Queda claro que Chile nunca posey territorios ms al norte del valle de Copiap y que esa realidad fue sistemticamente reconocida en todos los mapas que se publicaron en el mundo hasta 1880, sealemos que a la vista tenemos un mapa (que aparece en Internet, WEB de la Biblioteca Nacional de Chile*) con el ttulo Il Chile Regno Dell America Meridionale, Bologna: Nella stamperia de S. Tommaso DAquino (aprox. 1776), en el que el Reino de Chile aparece limitando al norte con parte del territorio de Per, desde el paralelo 24 hacia el sur. De este modo, la afirmacin que citamos del documento oficial boliviano es incorrecta. Ahora, respecto al documento boliviano del Consulado en Chile, citado arriba, al sealar como argumento que: Los derechos de Bolivia sobre su territorio de Atacama, junto al Ocano Pacfico, se remontan a los tiempos de las culturas precolombinas... es errnea, ya que en esa poca no existan los pases actuales. Esta realidad cambi drsticamente con la Conquista espaola. Por otra parte, connotados historiadores chilenos contemporneos como Guillermo Lagos Carmona (Historia de las Fronteras de Chile. Los Tratados de Lmites con Bolivia,http://www.cervantesvirtual.com/servlet/SirveObras/12593842001258285209068/p0000002.htm#I 9 Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. Cartas de Pedro de Valdivia que tratan del descubrimiento y conquista del Reino de Chile. Valdivia, Pedro de. Al emperador Carlos V. Concepcin, 15 de octubre de 1550. p. 22. * http://www.memoriachilena.cl/documento jpg.asp?id=MC00127919Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones4

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Ed. Andrs Bello, Stgo. de Chile, 1981, 196 pp) y Sergio Villalobos R., (Chile y Per: la historia que nos une y nos separa 1535-1883. Ed. Universitaria, Santiago, 2004, 278 pp), coinciden en sus investigaciones en el sentido que la Audiencia de Charcas no tuvo acceso al mar. Asimismo, el texto boliviano El Libro Azul... confirma que la Audiencia de Charcas perteneca al Virreinato del Per, al sealar: ...defini los lmites entre el Virreinato del Per (Audiencia de Charcas en esa regin) y la capitana de Chile,..., por lo que el lmite norte de la capitana de Chile era la Audiencia de Lima, ambas integrantes del Virreinato del Per. En consecuencia, nos parece que desde la Colonia, la posicin actual de Bolivia, en el sentido que por entonces tena salida concreta al ocano Pacfico en aquella zona, no es demostrable.

II. LA CUESTIN DE LMITES CON BOLIVIA DURANTE LA INDEPENDENCIA Y LUEGO CON LA CONFEDERACIN PERBOLIVIANA DEL PROTECTOR ANDRS DE SANTA CRUZEyzaguirre, en el captulo IV de su obra que titula: El uti possidetis de 1810, seala que, entre otros documentos, el mapa oficial de Andrs Baleato, de 1793, (que fijaba el Loa como frontera entre Per y Chile) constituyen () las bases que permiten conocer con precisin el uti possidetis de Chile en 1810. Ms adelante el historiador seala que durante la guerra por la Independencia, el naciente Chile y su Junta de Gobierno de 1813 tempranamente se hizo presente en el desierto de Atacama. As, indica: () En 1813, en plena guerra de emancipacin y al levantarse por orden de la Junta de Gobierno, el censo del pas, se efectu ste en la caleta del Paposo [ubicada en 25 03, hoy un tanto ms al norte de Taltal y al sur de Antofagasta], uno de los pocos caseros de la regin del desierto, donde entonces habitaban slo 570 individuos de origen indio, mestizo y mulato. Al mismo lugar se despach en diciembre de 1817, por el subdelegado de Copiap y en cumplimiento de rdenes del gobierno de OHiggins un bando de proclamacin de la independencia de Chile. Por un decreto de 20 de abril de 1819, OHiggins dispuso el bloqueo de los puertos del Per por la escuadra chilena para evitar que este virreinato, controlado por los espaoles, recibiera auxilio externo. Pues bien, en este decreto se defini como litoral peruano: Todos los fondeaderos del mar Pacfico que estn situados entre los 2148 y los 212 latitud sur, es decir, la lnea de costa desde Iquique hasta Guayaquil inclusive. Al sur de Iquique, o sea desde el ro Loa, no caba decretar bloqueo, porque no exista territorio de jurisdiccin extraa a Chile, sino exclusivamente el del propio pas. El citado decreto fue confirmado expresamente por otro de 20 de agosto de 1820, da del zarpe de la expedicin libertadora del Per al mando de San Martn y Cochrane. La inclusin del desierto de Atacama, del Loa al sur, dentro de los lmites

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de Chile, y la colindancia directa del ltimo con el Per, sin interferencia de otro pas, fluyen as claramente de estos documentos.5 Sergio Villalobos, por su parte, seala en relacin al perodo de la Independencia: () En los aos de la Independencia, prceres como OHiggins, Zenteno, San Martn y Bolvar, reconocieron a travs de algunas disposiciones, que Chile posea el litoral de Atacama hasta el lmite con el Per. A rengln seguido Villalobos seala en forma tajante: Bolivia naci a la vida republicana sin costa.6 Pero volvamos a El Libro Azul... para tener la visin boliviana del periodo de la Independencia: CREACIN DE LA REPUBLICA DE BOLIVIA (1825) Bolivia se estableci como Repblica independiente en 1825. Despus de la Guerra de la Independencia, al ser establecido el territorio de los nuevos Estados americanos sobre la base del principio uti possidetis juris de 1810, base del derecho territorial de las flamantes Repblicas, la Repblica de Bolivia comprenda la antigua jurisdiccin de la Audiencia de Charcas. En 1826, el Mariscal Antonio Jos de Sucre, por entonces Presidente de Bolivia, clarific la divisin poltica del pas. Las Intendencias fueron convertidas en Departamentos. Bolivia qued dividida en cinco Departamentos: Chuquisaca, La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Potos. Los Departamentos fueron divididos en provincias y stas en cantones. Atacama era una de las provincias dependientes dela prefectura de Potos, su capital era San Pedro de Atacama. Era una regin magra, un desierto sin agua, spero y duro, que contena ricos yacimientos de salitre, brax y cobre. Hasta aqu queda en claro que el territorio de la naciente Repblica de Bolivia comprenda la antigua jurisdiccin de la Audiencia de Charcas. Pero el texto boliviano no fundamenta documentalmente las decisiones mediante las cuales el Mariscal Antonio Jos de Sucre clarific la divisin poltica del pas. Ms adelante el texto tampoco demuestra porqu la provincia de Atacama dependa del Departamento de Potos. No obstante, El Libro Azul... describe topogrficamente aquella parte del despoblado de Atacama, pero no indica los lmites de esa provincia, y menos que tuviera acceso al Pacfico. Ms adelante indica este texto: Recin en 1837, se cre el Departamento del Litoral. Polticamente, el Litoral se divida en dos provincias: La Mar cuya capital era Cobija y Atacama cuya capital era San Pedro de Atacama (...).Ob. Cit. Nota 1. pp. 49, 51 y 52. Villalobos R., Sergio. Chile y Per la historia que nos une y nos separa 1535-1883. Universitaria, Santiago, 2 ed., 2004. pp. 84 y 85.6 5

Editorial

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En aquel ao la Repblica de Chile estaba en guerra contra la Confederacin PerBoliviana que lideraba el Protector Andrs de Santa Cruz. Aquella beligerancia no estall por un problema de lmites, no exista ninguna controversia en este sentido, se trataba pues de un conflicto enteramente poltico entre Chile y la Confederacin. Pero, volviendo a El Libro Azul..., cuando ste indica: Recin en 1837, se cre el Departamento del Litoral, este documento no prueba ni histrica ni jurdicamente esta creacin, acaecida doce aos despus del nacimiento de la Repblica de Bolivia (1825). Sin embargo esta aseveracin da razn a lo sostenido por el historiador chileno, arriba citado, en el sentido que Bolivia naci a la vida independiente sin tener acceso al Pacfico. Adems, el documento del Consulado de Bolivia en Chile antes citado, tambin avanza hasta la poca de nuestras independencias de la Corona espaola sealando: A tiempo de declararse la independencia de nuestras naciones las nuevas circunscripciones territoriales, para los Estados emergentes, estuvieron basadas en el Principio del Uti possidetis juris de 1810 fundamento incontrovertible del Derecho Internacional Pblico Americano. Por eso, por parte de Chile, no hubo duda alguna respecto a la legitimidad de la posesin, soberana y actos jurisdiccionales que Bolivia ejerca en sus territorios de la Costa del Pacfico. El reconocimiento de Chile de esos derechos bolivianos consta no slo en los textos constitucionales que ese pas sancion entre ambas Naciones: el Tratado de Amistad, Comercio y Navegacin, aprobado por el Congreso chileno, en 1883 y 1834.7 [sic] Nuevamente destaquemos que este acpite del texto boliviano contradice, sin fundamentos jurdicos, lo expresado por Jaime Eyzaguirre como ste s lo hace, cuando puntualiza: las bases que permiten conocer con precisin el uti possidetis de Chile en 1810 que vimos anteriormente. Asimismo nada dice de los actos jurisdiccionales realizados por los primeros Gobiernos chilenos de la independencia que a continuacin el historiador chileno estableci con claridad. Agreguemos que nosotros no encontramos en ningn registro ni recopilacin un Tratado de Amistad, Comercio y Navegacin, aprobado por el Congreso chileno, en 1883 y 1834. Por ello, estas fechas implican un error de transcripcin en el primer ao (debera decir 1833), y otro error histrico, ya que, reiteramos, ni en ese ao ni en 1834, simplemente no existi Tratado alguno sancionado por la Repblica de Chile con la Repblica de Bolivia. Ahora bien, uno de los argumentos de la reclamacin de Bolivia consiste en que en su nacimiento como nacin independiente, gracias al libertador Simn Bolvar, tuvo acceso al Pacfico. Al respecto aade Sergio Villalobos: La organizacin de la repblica altiplnica comenz en el ao 1825, cuando una asamblea representativa estableci su independencia y design a Simn Bolvar como presidente, bajo condicin de encontrarse en el territorio. En esa calidad, el general venezolano, considerando que el pas careca de un puerto de mar, comision al coronel irlands Francisco Burdett OConnor para que reconociese el litoral7

Ob. Cit. Nota 2. p. 1.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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atacameo y habilitase para el comercio el mejor lugar que encontrase. Las condiciones ms favorables existan en Cobija y se le dio carcter de puerto bajo el nombre de Lamar, en homenaje al general de ese apellido. Al tomar esas decisiones, Bolvar actuaba de manera arbitraria a impulsos de su arrogancia y vehemencia, asumiendo un papel autoritario para disponer de los territorios y los pueblos. La medida surti efecto relativo, debido a los vnculos de hecho que se haban formado con el altiplano durante la poca colonial. Al respecto sealemos que vimos cmo en 1825 la recin nacida Repblica de Bolivia careci de acceso oficial al Pacfico, sino que recin en 1837 lo tuvo, cuando El Libro Azul... indica que ese pas cre el Departamento del Litoral. Lo que no cabe duda es que Bolivia, hemos visto lo dicho arriba tambin por Sergio Villalobos, lleg a tener acceso al mar, despus de su Independencia y con la Confederacin Per-Boliviana del mariscal Andrs de Santa Cruz, lo que trataremos a continuacin.

III. EL ORIGEN DEL LITORAL DE BOLIVIASin embargo, segn los historiadores hasta ahora consultados, problemas internos de Chile, a partir de 1825, como la lucha militar por la incorporacin del archipilago de Chilo an en posesin de Espaa, al territorio nacional y luego la contienda poltica interna entre liberales y conservadores, inmersa en un perodo anrquico que llev a la guerra civil de 1829, motivaron la despreocupacin chilena por su frontera norte con el Per. Volvamos a Eyzaguirre para explicar este vacilante momento poltico chileno que habra aprovechado el entonces Presidente boliviano Andrs de Santa Cruz. Indica este historiador: () Algo despus, en 1829, el mismo Santa Cruz pas a ser Presidente de su patria y ahora desde este cargo negoci con el Per [del que antes haba sido gobernante interino *] un canje de territorio a fin de conseguir Arica para Bolivia. Esta gestin tambin fracas y entonces Santa Cruz se preocup de dar impulso a la caleta de Cobija, para hacer de ella el acceso de Bolivia al mar. Instituy all un gobierno litoral independiente de otras autoridades provinciales y declar a Cobija puerto franco. Por estar situada en 2233, al sur del ro Loa, lmite tradicional entre Chile y el Per, Cobija se encontraba dentro de la jurisdiccin de Chile. No obstante ste, distrado en esos aos por agudos problemas de poltica interna, se desentendi por entero de este avance de Bolivia que qued as tcitamente consagrado.

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Este y otros textos entre parntesis cuadrado son agregados nuestros.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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Esta despreocupacin de Chile por el extremo norte del desierto de Atacama desaparece luego de consolidada la vida poltica nacional. ().8 Siempre con respecto a este momento de desinters de Chile por la frontera de su extremo norte y el consiguiente avance boliviano hacia el Pacfico donde instituye a la caleta de Cobija como puerto propio, en circunstancias que se encontraba, como dice Eyzaguirre, en territorio chileno, argumento que debatiremos ms adelante, citemos ahora al historiador chileno Guillermo Lagos Carmona, quien expone su punto de vista y comenta un decreto del mariscal boliviano Andrs de Santa Cruz, sobre el que insistira ms adelante: () En 1829, alejado Jos Antonio de Sucre [Antonio Jos de Sucre fue lugarteniente de Simn Bolvar y vencedor de la batalla de Ayacucho- 1825] del poder y del pas, el Mariscal Santa Cruz fue elegido Presidente de Bolivia de una terna que dej el primero. Ahora era l quien pretenda Arica, pero el Per se niega. No le quedaba ms que mirar hacia Cobija, el proyecto de Bolvar, de Sucre, de Burdet OConnor. El sitio es inhspito, alejado, pero qu hacer? El decreto de Santa Cruz dice: La necesidad de fomentar el nico puerto de la Repblica, y atendiendo a que la falta de numerario para costear los gastos que demandan las obras proyectadas hace infructuosas todas las medidas que el Gobierno ha adoptado para la pronta realizacin de tan interesantes objetos. Decreto: 1 Se autoriza al coronel Manuel Amaya para levantar un emprstito de cien mil pesos, cuya cantidad se invertir en la construccin y habilitacin de almacenes, fortificaciones, caminos, postas, aguadas y dems establecimientos que deben crearse para dar existencia y seguridad a aquel puerto. El Presidente de Bolivia confiesa que el nico puerto de la Repblica es Cobija; pero es ms bien imaginario. Materialmente no existe y para darle existencia hay que pedir un emprstito para ejecutar las obras. Ttulos, para qu? Bastan las espadas de Bolvar, de Sucre y la suya. El 6 de agosto de 1833 [el 6 de agosto es el da patrio de Bolivia] Santa Cruz reitera en su Mensaje al Congreso: Despus de vuestro receso, en la anterior legislatura, he cumplido con la promesa que os hice entonces de visitar en persona la provincia litoral, queriendo llenar debidamente vuestros deseos y la ley de 12 de octubre del ao prximo pasado a favor de nuestro nico puerto de Cobija.9Ob. Cit. Nota 1, p. 53. Lagos Carmona, Guillermo.- Historia de las Fronteras de Chile. Los Tratados de Lmites con Bolivia. 2 Ed. Aumentada y actualizada. Editorial Andrs Bello, Santiago, 1981. 196 p., pp 22 y 23.9 8

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Pero por nuestra parte hemos dicho que Bolivia, por una razn u otra, s tuvo acceso al Pacfico despus de su Independencia, Veamos lo que dice el escritor e historiador chileno Oscar Pinochet de la Barra en su libro Puerto para Bolivia? Centenaria Negociacin en el cual no considera las exposiciones de Eyzaguirre en su postura global del conflicto y tampoco la de Lagos Carmona, en especial en torno a las posiciones de Sucre (partidario de un acceso soberano al Pacfico por Arica) y el Libertador Bolvar quien se inclinaba por Cojija. Oscar Pinochet slo se refiere a que el Alto Per (luego Bolivia), en sa poca, intentar regularizar su situacin martima. Dice Pinochet de la Barra: Alcanzada su Independencia, el Alto Per trat de regularizar su salida al Pacfico y en diciembre de 1825 Bolvar se decidi por Cobija, donde todo estaba por hacer, lo que motiv carta de Sucre, Presidente de Bolivia, al Libertador venezolano, en enero de 1826: Sera conveniente que usted informara al Congreso peruano sobre nuestro deseo de la cesin de Arica, destacando que es un puerto que funciona solamente como un punto de acceso a Bolivia Por su parte, la Asamblea Constituyente del Alto Per haba instruido, el 15 de agosto de 1825, a una delegacin que enviaba al Libertador: ... que la lnea divisoria de uno y otro Estado se fije de modo que tirndola del Desaguadero a la costa, Arica venga a quedar en el territorio de esta Repblica.... Bolvar no ceda. A fines de ese mismo ao, los gobiernos de Bolivia y Per firmaron un tratado por el cual la frontera comn pasaba del ro Loa, paralelo 21 27, al ro Sama, paralelo 18, extendindose la costa boliviana hacia el norte hasta abarcar Arica. Este tratado no fue ratificado posteriormente por Lima. En 1831, el Presidente boliviano Andrs Santa Cruz fracas en sus gestiones por obtener la exclusividad de Arica para su pas o, al menos, compartir el territorio con el Per. (...). 10 (...) Diez aos despus, en 1836, en una proyectada misin extraordinaria de Mariano Egaa, motivada por la creacin de la Confederacin Per-Boliviana, entre sus instrucciones confidenciales figuraba, segn Barros Borgoo [aqu cita a Luis Barros Borgoo en: La negociacin chileno-boliviana de 1885. Imprenta y Encuadernacin Barcelona, Santiago, 1897], el expreso y formal ofrecimiento de parte de Chile de hacer transferir a Bolivia el territorio de Tacna y Arica. Rafael Egaa agrega [ahora cita a otro Egaa, Rafael, en: La cuestin de Tacna y Arica, Santiago, 1910]: Este compromiso, segn consta en las mismas instrucciones, se estipulaba con la previa consulta y aceptacin de todos los notables peruanos residentes entonces en Chile.Pinochet de la Barra, Oscar.- Puerto para Bolivia? Centenaria Negociacin. Santiago, Chile, 1987. p. 13 y ss.10

Editorial Salesiana.

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Seis aos despus, en 1842, las fuerzas armadas bolivianas, luego de la victoria de Ingavi,* ocuparon Arica y la bandera de ese pas flame al viento del Pacfico. Walter Guevara Arce recuerda que el Presidente [boliviano, Jos] Ballivin no logr la aceptacin del Per para la compra de Arica y luego de firmado el Tratado de Paz con Lima se retir ms all del Desaguadero. As podemos observar que Oscar Pinochet de la Barra da por descontado el acceso de Bolivia al Pacfico, que tanto Eyzaguirre como Lagos niegan en su origen, (aceptndolo posteriormente como ocupacin de facto) destacando, adems, que el inters boliviano, desde su Independencia, con Sucre en la Presidencia, era buscar la cesin de Arica por parte del Per. Sin embargo Bolvar y no Sucre, como sostiene Lagos, prefera Cobija. Pero la negociacin entre ambos pases no prosper y Bolivia mantuvo Cobija. No obstante los tres autores coinciden en la preocupacin de los primeros mandatarios bolivianos por obtener Arica como puerto para Bolivia. Al respecto recuerda Pinochet de la Barra que Arica serva, despus de la Independencia, como puerto para las exportaciones de Bolivia y Cobija era usado para sus importaciones. Sigamos. Finalizada la guerra de Chile contra la Confederacin Per-Boliviana, al mando del Protector Andrs de Santa Cruz [cuyo enemigo poltico declarado haba sido Diego Portales], con el triunfo de las armas chilenas y un sector de aliados peruanos, el 20 de enero de 1839, en Yungay; al ao siguiente, el 26 de enero, el vencido Santa Cruz emiti un revelador manifiesto en el que explic su proceder poltico con relacin a Cobija. Sobre este documento Lagos Carmona se explaya haciendo especial hincapi y comentarios que intercala. As, Lagos, cita al ex Protector: Las hostilidades que el comercio de Bolivia sufra constantemente en el puerto de Arica hicieron ms urgente la necesidad de fomentar el nico propio, para eximir a los bolivianos del capricho de los gobiernos vecinos y de las vicisitudes de su poltica: este fue uno de los objetos que atrajo mi atencin. Bolivia, por su situacin geogrfica, alejada por todas partes del mar, no podr hacer grandes progresos en su comercio y en su industria, ni aun en la carrera de la civilizacin, mientras no se ponga ms inmediata y directamente en contacto con los pueblos industriosos y ms adelantados de ambos hemisferios. Para remediar este gran defecto me decid a proteger con todos los esfuerzos del Gobierno la caleta de Cobija, de que tan slo puede disponer Bolivia por efecto de una viciosa demarcacin territorial. Las hostilidades y los gobiernos vecinos es una alusin al Per que l mismo gobern. En cuanto a la viciosa demarcacin territorial, es una referencia a las divisiones administrativas que tenan las colonias de Espaa.N. Del A.- Con respecto a la batalla de Ingavi (18 de noviembre de 1841) esta sucedi en el contexto del conflicto entre Per y Bolivia tras el desmantelamiento de la Confederacin Per-Boliviana y cuando tropas del primer pas invadieron el territorio boliviano con el fin de anexionarlo. La victoria boliviana de Ingavi permiti afianzar la Independencia de Bolivia, separndola definitivamente del Per, y adems logr ocupar parte del territorio peruano hasta la paz del 7 de junio de 1842. Por otra parte sealemos que Walter Guevara Arce, fue un importante lder poltico boliviano que incluso fue designado Presidente interino de Bolivia en 1979. Oscar Pinochet se refiere al documento escrito por Guevara: Radiografa de la negociacin con Chile. La Paz, 1978.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones*

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Luego prosigue: Grandes eran las dificultades para superar una distancia de 170 leguas de desiertos helados, que separan a Cobija de la primera ciudad de Bolivia; y deban ser proporcionados los medios que se empleasen para allanarlas, y vencer los obstculos que la naturaleza opona a este designio de primera importancia. Cobija carece de agua; no la tiene a menos distancia de veinte y cinco leguas: y en todo el trnsito hacia Potos apenas se encontraban diseminadas a largos trechos chozas y miserables aldeas. Habiendo reconocido la poca eficacia de las rdenes del Gobierno, y de todas las medidas comunes, resolv marchar personalmente, y examinar la localidad y los impedimentos de una empresa que la independencia de Bolivia y la seguridad de su comercio requeran que se superasen. Santa Cruz habla de Cobija separada de la primera ciudad de Bolivia por desiertos helados y distantes como si fuera una especie de enclave. Efectivamente, describa territorios sin conexin alguna. Y concluye: Autorizado por el Congreso del ao 1832, dict en el mismo puerto el decreto de 1 de enero de 1833, declarndolo franco para los buques de todas las naciones, y libre de toda clase de derechos, y aun de toda indagacin fiscal. Mand igualmente establecer en la extensin del camino buenas postas, y posadas bien servidas, que, como por encanto, transformaron aquel largo desierto de Atacama en un buen trnsito de comunicacin. Luego de ironizar sobre lo manifestado por Santa Cruz, el historiador Lagos Carmona contina aseverando enfticamente: () Los vestigios que haba en aquellas solitarias comarcas databan del tiempo de los incas y de los espaoles, por lo menos as lo atestiguan narradores imparciales que se adentraron en ellas, como lo fueron los primeros exploradores y los mineros que recorran el desierto en todas direcciones. Los buques de todas las naciones como l deca no transformaron la humilde y vieja caleta de los pescadores changos, el nico puerto propio . 11 Finalmente Guillermo Lagos destaca que Andrs de Santa Cruz haba dicho la verdad en su documento: Bolivia naci lejos del mar y por una demarcacin de territorio no establecida slidamente, como tambin sucedi en otras latitudes de la Amrica hispana, no pudo heredar ttulos de dominio sobre el Pacfico. Hemisfricamente, este hecho es importante de destacar por cuanto suscit mltiples diferendos limtrofes entre las posteriores repblicas nacidas de la Colonia al ser interpretadas, en tan vastos territorios, las disposiciones fronterizas sealadas por la Corona espaola, las que adems fue variando al crear nuevas jurisdicciones.11

Ob. Cit. Nota 9, p. 23 a 25.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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Ms adelante, Lagos se pregunta si Chile ignor o toler la ocupacin de la caleta de Cobija, ya que, al parecer, seala, no protest. Por ltimo, concluye sealando que los gobernantes chilenos estaban sumidos en los graves acontecimientos que sacudan la poltica interna. Por esta misma razn Sergio Villalobos apunta que no existi la tranquilidad para que Chile interpusiera una reclamacin diplomtica, aunque tambin pone en duda que la decisin boliviana de ocupar Cobija se conociera en este pas. Volvamos a la tesis boliviana, luego de su Independencia, en la que enfatiza la soberana de Bolivia entre los ros Loa (21, 27 Sur) y Salado (26 Sur aprox.). As, El Libro Azul... puntualiza: ...La superficie del Departamento del Litoral era de aproximadamente 120.000 Km2. Dos ros marcaban sus lmites, al norte el Loa (con el Per) y al sur El Salado (con Chile). En la costa boliviana estaban los puertos de Antofagasta, Cobija y Tocopilla, las bahas de Mejillones, Algodonales y Herradura y las caletas de Gatico, Guanillos, Michilla, Tames, Gualahuala, Cobre y Paquica. Tambin se haban desarrollado poblados interiores como Calama y San Pedro de Atacama. As, concluimos este captulo destacando la reivindicacin oficial boliviana; la coincidencia de una parte de los historiadores chilenos al explicar que la posesin de Cobija por Bolivia, y as sentar un precedente de su acceso al Pacfico, que luego esgrimira con pertinacia, se debi a graves problemas polticos internos de Chile que desviaron su atencin sobre su lmite norte en el desierto de Atacama (posiciones de Jaime Eyzaguirre y de Guillermo Lagos). Por su lado, Sergio Villalobos admite sin justificaciones (da por hecho) el acceso boliviano al Pacfico, luego de su Independencia, por Cobija. Sin embargo Oscar Pinochet no discute este acceso ni desde el origen de Bolivia como Repblica, ni antes de sta ni hasta la Guerra del Pacfico, en que lo pierde. Agreguemos que, al menos en el texto de este ltimo que hemos consultado, no se refiere a aquello.

IV. CONTROVERSIAS LIMTROFES Y TRATADOS ENTRE CHILE Y BOLIVIA EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XIX HASTA ANTES DE LA GUERRA DEL PACFICODurante la Administracin del Presidente Manuel Bulnes, ste se impuso del descubrimiento, por parte de exploradores chilenos, de yacimientos de guano en la zona costera del desierto de Atacama. As, en 1842, el mandatario chileno promulg la ley de 31 de octubre de ese ao que declar de propiedad nacional las guaneras al sur de la baha de Mejillones, (23 Sur, aprox.) disponiendo, asimismo, que ninguna embarcacin poda cargar guano sin el consentimiento de las autoridades chilenas y facultando al Presidente de la Repblica para gravar la exportacin de este producto con derechos de aduana. Esta ley que dej a Mejillones como la frontera chileno-boliviana, motiv el reclamo de Bolivia.

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Por ser de importancia para este trabajo, en cuanto al establecimiento de un lmite fronterizo en Mejillones, citaremos nuevamente a Eyzaguirre que explica esta situacin cuando alude a una carta de Bernardo OHiggins (en el destierro en Lima), de 1831, en la cual sealaba que Chile se extenda en el Pacfico desde la baha de Mejillones hasta Nueva Shetland del Sur. Apunta Jaime Eyzaguirre: () OHiggins saba, sin embargo, que los lmites septentrionales de Chile alcanzaban ms al norte. Sus decretos sobre el bloqueo de las costas peruanas, en 1819 y 1820, citados en pginas anteriores, as lo prueban de manera concluyente. No obstante, la generosidad americanista que empuj las decisiones de los prceres, hizo sin duda que OHiggins, ya alejado del mando, mirara sin resistencia la ocupacin de Cobija que realizara Bolivia en 1831 para proveerse de puerto en una zona desolada. Su amistad con Santa Cruz, autor principal de esta salida de Bolivia al ocano, pudo haber influido en su nimo. Por otra parte, el estrecho contacto epistolar que mantuvo OHiggins en sus ltimos aos con personeros del gobierno de Bulnes, y que produjo como resultado tornar efectiva la presencia de Chile en Magallanes, debi acaso acelerar la dictacin de la ley que hizo de Mejillones la meta norte del pas. No puede, sin embargo, darse a lo ltimo ms que el carcter de mera presuncin, pues por ahora se carece de documentos al respecto. 12 El Libro Azul... luego de referirse al inexistente Tratado de 1833 y 1834 entre Chile y Bolivia, destaca la posicin contraria a la ley chilena de 1842, denunciando una progresiva penetracin chilena en territorio boliviano. Dice El Libro Azul...: AVANCES CHILENOS SOBRE LAS COSTAS BOLIVIANAS La creciente importancia del salitre, unida al hecho de que Bolivia contaba con escasa poblacin en la provincia de Atacama y muy reducidos medios para hacer valer su autoridad, llev a numerosos aventureros chilenos a establecerse es aquel territorio desde 1840 y a explotarlo sin autorizacin boliviana. Bolivia quiso solucionar estas infracciones, con un espritu amistoso hacia los emigrantes. Sin embargo, Chile rehus tratar el asunto en tanto avanzaba sobre territorio boliviano. En enero de 1843, el representante boliviano en Chile, Casimiro Olaeta pas una nota al gobierno chileno pidiendo la revocacin de la ley, pues, a su entender, Bolivia era soberana del desierto hasta el ro Salado (en 26 aprox.), aunque en otra nota seal que este ro se encontraba en 25. Chile, por su parte, contest que no poda modificar las leyes sin hacer una investigacin exhaustiva de los ttulos que ambas partes pudieran invocar para reclamar derechos en el desierto. El ya citado documento del Consulado boliviano en Chile, al referirse a este momento de la controversia dice, sin pruebas ni especificaciones de alguna ndole: Ante estas disposiciones [se refiere a la ley chilena del 31 de octubre de 1842], Bolivia envi a Chile sucesivas misiones diplomticas, para defender sus derechos. A12

Ob. Cit. Nota 1, p. 56.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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pesar de ello, se produjeron a partir de 1843 sucesivos avances de Chile en el norte hacia el territorio boliviano, que se fueron repitiendo en la dcada de 1850, como parte de una deliberada poltica expansionista explcitamente enunciada por su geopoltico Diego Portales, con proyecciones que iban ms all de los territorios de Bolivia, como que la invasin no se detuvo en territorio boliviano, que Chile deca ser suyo sino que continu sobre el Per (). 13 Volvamos. La disputa continu hasta 1845 cuando el ministro Manuel Montt, en la Memoria de Relaciones Exteriores presentada al Congreso Nacional (que daba cuenta de las investigaciones realizadas), demostr la inconsistencia de la posicin de Olaeta, quien invoc gegrafos particulares, y adujo, en cambio, los testimonios a favor de los derechos chilenos contenidos, entre otros, en los documentos oficiales del virrey Gil de Taboada y Lemus, que ya vimos, y que sealaban como lmite entre el Per y Chile el ro Loa, asignando a nuestro pas todo el desierto de Atacama. En 1847 Bolivia insisti en su posicin y el gobierno de Chile, tratando de encontrar una solucin amistosa a la disputa, se demostr dispuesto a estudiar un tratado de lmites entre ambos pases. Problemas polticos internos bolivianos posteriores impidieron el avance de estas negociaciones. Por otra parte sealemos que las Constituciones chilenas desde la de 1822 hasta la de 1833, en trminos generales, situaban el territorio de Chile, de norte a sur, desde el desierto de Atacama hasta el Cabo de Hornos. Las Constituciones bolivianas fueron cambiando el articulado en relacin a sus lmites por el oeste, entre la de 1826, la de 1831 y la de 1843*. Pero en 1858, Chile propuso a Bolivia establecer relaciones permanentes con diplomticos en uno y otro pas, lo que fue aceptado por su contraparte, aunque sta sigui reclamando el ro Salado (26 Sur aprox.), como lmite entre ambas repblicas. En 1863 la controversia limtrofe, con un Chile sosteniendo poseer derechos histricos sobre el desierto de Atacama, estuvo a punto de pasar a una confrontacin militar cuando el Legislativo boliviano autoriz (27 de mayo) al Presidente boliviano Jos Mara de Ach a declarar la guerra a Chile, ley que este poder promulg el 5 de junio y que nuestro pas conoci ms tarde. Pero sucedi algo inesperado que cambi la aguda situacin bilateral. Ni El Libro Azul... ni el texto del Consulado de Bolivia en Chile, ambos varias veces citado, nada indican sobre la proposicin chilena de 1858 ni de aquella autorizacin boliviana para declarar la guerra cinco aos ms adelante. Dejaremos a Guillermo Lagos puntualizar lo que ocurri entre 1864 y 1866, ao ste en que termin la llamada Guerra con Espaa (1865-1866, cuando la escuadra espaola bombarde Valparaso) y en el que, adems, Bolivia y Chile firmaron su Tratado de Lmites. Anota Lagos:Ob. Cit. Nota 2, p. 1. En cuanto a las Constituciones chilenas (en una visin general) vase Eyzaguirre, ob. cit. pp. 61 y 62. Con relacin a las Cartas bolivianas, (tambin en general) vase Lagos Carmona, ob. cit. p. 29.* 13

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Una escuadra espaola que mandaba Luis Hernndez Pinzn ocup, en abril de 1864, las islas Chinchas del Per, ricas en guano; se exiga el pago de una indemnizacin por daos causados a sbditos espaoles. Las divergencias entre Lima y Madrid fueron aumentando hasta el punto que en 1865 estall la guerra. La presencia espaola en el Pacfico caus viva preocupacin. Chile hizo una alianza con Per creyendo que los peligros y la causa del Per son los peligros y la causa de Chile, solemnemente se obligan a contribuir a la proteccin y a la defensa del honor y la integridad de la nacin peruana, como se expresa en el instrumento correspondiente. Luego adhera Ecuador a la alianza entre Chile y Per. Bolivia hizo causa comn con la alianza tripartita adhiriendo a ella. El jefe de la escuadra espaola parece que proyectaba ocupar Cobija, como eventual base de operaciones y aprovisionamiento. El General Melgarejo, que gobernaba Bolivia, abrog la ley de 5 de junio de 1863 autorizacin de declaracin de guerra () junto con este acto declar solemnemente: El Gobierno de Bolivia queda apto para enviar y recibir Ministros diplomticos que pongan relacin entre ambas Repblicas. Con elocuentes y repetidas expresiones de homenaje a Chile y a la fraternidad americana, Melgarejo quiso borrar una pgina de la historia de su nacin: la autorizacin para la guerra mientras estaba en curso una negociacin diplomtica. Las relaciones, por iniciativa de Bolivia, se reanudaron. Chile acredit como Ministro Plenipotenciario a Aniceto Vergara Albano. Secretario de la Misin era Carlos Walker Martnez. En marzo de 1866 el Ministro de Chile en La Paz presentaba sus Cartas Credenciales. En la capital de Bolivia se negociaron las clusulas de un Tratado de lmites que se firm en Santiago el 10 de agosto de 1866. (). Y finaliza este captulo Lagos Carmona con una importante aseveracin: En 1866 se inicia, en la historia de las fronteras entre Chile y Bolivia, una nueva poca: la de los Tratados de lmites. Los ttulos histricos y el uti possidetis de 1810 quedarn como remotos antecedentes. De aqu en adelante, la norma convencional

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escrita ser la nica que producir efectos jurdicos, en cuanto diga relacin con los territorios que pertenecern a uno u otro Estado. 14 Al respecto, el documento del Consulado boliviano indica, refirindose a los Tratados entre Chile y Bolivia de 1866, de 1874 y al estado de las relaciones bilaterales, inmediatamente antes de la Guerra del Pacfico, lo siguiente: () Los problemas causados por las frecuentes incursiones chilenas sobre territorio boliviano alcanzaron una gravedad tal que se hizo imperativa la suscripcin de un Tratado de lmites, el mismo que se firm en 1866. Este Tratado estableci una funesta medianera, esto es, la participacin entre ambos pases, de todas las riquezas existentes entre los territorios comprendidos entre los paralelos 25 y 23. En 1874, a slo ocho aos del primer Tratado de lmites, y en vista de nuevas dificultades, se tuvo que suscribir un segundo instrumento, que ratific como frontera el Paralelo 24 elimin la medianera, y estipul, en la clusula cuarta, una nueva fuente de problemas, al acordarse de que, durante 25 aos, Bolivia no podra gravar con nuevos impuestos, a personas, industrias y capitales chilenos. Al amparo de arbitrarias concesiones de un gobierno dictatorial boliviano, grupos de ciudadanos chilenos se haban asentado en los territorios del Litoral. Uno de esos grupos representativo de intereses econmicos extra continentales dio el pretexto al gobierno chileno para generar el conflicto. En los trmites de perfeccionamiento de aquellas concesiones ante el Estado boliviano, esa empresa ofreci una participacin del 10% sobre utilidades. El Congreso boliviano prefiri, en lugar de esa participacin, gravar con 10 centavos a cada quintal de salitre exportado. La Empresa acudi a la proteccin del Gobierno chileno, y ste invoc el Tratado de 1874. Ante las conminatorias de Chile, el Gobierno de Bolivia rescindi el contrato con la empresa, y Chile, sin previa declaratoria de guerra, ocup por las armas el Litoral de Bolivia. Es as, como en 1879, Bolivia fue arrastrada a una guerra que no dese ni busc. Inerme, tuvo que defender su soberana, y pidi la aplicacin del Tratado de Alianza defensiva, que tena suscrito con el Per, desde 1873. (). 15 Por su lado El Libro Azul..., es ms descriptivo con respecto a los Tratados de 1866 y de 1874, y hasta 1879, pero coincidente con el texto anterior, cuando estalla la Guerra del Pacfico. Seala este documento oficial boliviano: PRIMER TRATADO DE LIMITES SUSCRITO ENTRE BOLIVIA Y CHILE (1866) El primer Tratado de Lmites, suscrito entre las Repblicas de Bolivia y Chile, fue el del 10 de Agosto de 1866, fijndose como lmite el paralelo 24 de latitud sur. El14 15

Ibid. Nota 7, pp. 34 y 35. Ob. Cit. Nota 2. p. 2.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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mismo estipul la mancomunidad de explotacin del guano, los metales y minerales en el territorio comprendido entre los paralelos 23 y 25 de latitud meridional. De esta manera Chile logr llegar hasta el grado 24 y fue facultado para trabajar y explotar las riquezas hasta el grado 23. SEGUNDO TRATADO DE LIMITES SUSCRITO ENTRE BOLIVIA Y CHILE (1874) El 6 de agosto de 1874, se firm el segundo Tratado de Lmites entre Bolivia y Chile. En virtud del mismo, se mantuvo la lnea divisoria en el grado 24 y los derechos de explotacin chilena hasta el grado 23 subsistan. Tambin se acord que las industrias chilenas no seran gravadas con impuestos durante 25 aos. Un ao despus, el 21 de Junio de 1875, fue firmado un Tratado Complementario al de 1874, que consignaba modificaciones de los Art. 3 y 10 e incorporaba una clusula de arbitraje. IMPUESTO DE LOS 10 CENTAVOS Poco tiempo despus de ratificado el Tratado de 1874, una empresa britnica pidi que se le aprobara una concesin para explotar salitre. El Congreso boliviano en 1878 impuso el pago de la suma nfima de 10 centavos de boliviano por cada quintal de salitre exportado. El establecimiento de este impuesto suscit una reclamacin del Gobierno de Chile, que sostena la violacin del tratado antes mencionado, pese a que el mismo nicamente favoreca a empresas chilenas y no a las britnicas. Por su parte, el Gobierno de Bolivia hizo saber que estaba llano a acogerse al recurso arbitral previsto en el Tratado Complementario. OCUPACIN DE ANTOFAGASTA Como respuesta a la decisin boliviana, Chile opt por ocupar el puerto de Antofagasta el 14 de febrero de 1879, localidad en la que Bolivia no contaba con fuerzas militares. Despus de tomar Antofagasta, Chile ocup los puertos de Cobija, Mejillones y Gatico, las poblaciones de Calama y San Pedro de Atacama y los yacimientos mineros de Caracoles. LA GUERRA DEL PACIFICO En 1879, Bolivia fue arrastrada a una guerra que no busc ni dese. Tuvo que defender su soberana y, en aplicacin de un tratado defensivo suscrito con el Per, intent detener la invasin de su territorio. Chile declar la guerra conjuntamente a Bolivia y el Per el 5 de abril de 1879. La contienda fue desigual, Chile se haba armado anticipadamente a la medida de sus intenciones. Bolivia y Per fueron sorprendidos casi desprovistos de medios blicos y los resultados de la invasin y las ocupaciones, fueron la prdida del litoral boliviano y la ocupacin de Tarapac, Tacna y Arica. (...). Por nuestra parte debemos puntualizar que los textos bolivianos que hemos visto nos parecen inconsistentes desde el punto de vista de las fuentes y sus autores responsables, lasBiblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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que no se explicitan. As, ms parecen un discurso propagandstico reiterativo de hechos que son descritos en forma lineal sin un anlisis histrico reflexivo y comparativo, limitndose a una exposicin tendenciosa. Pero se trata de documentos bolivianos oficiales y se los debe considerar en su contenido y profundidad. Sin embargo, estas interpretaciones bolivianas, merecen ser contrastadas con estudios histricos. Con relacin al Tratado de 1866 veremos lo medular de ste en lo que concierne a los lmites establecidos entre Chile y Bolivia. Retrocedamos entonces a Jaime Eyzaguirre, quien hace un resumen sobre este instrumento, se adelanta al siguiente Tratado de 1874, que dej sin efecto el anterior, avanza hasta el fin de la Guerra del Pacfico (1879-1884); se refiere al Pacto de Tregua de este ltimo ao, y esboza el Tratado de Paz y Amistad entre Chile y Bolivia de 1904, instrumentos, stos y otros, que veremos con mayor profundidad ms adelante: () Este convenio [de 1866] significaba una transaccin en la disputa de lmites. Se fijaba por l como lnea divisoria el paralelo 24 del mar a los Andes; y adems se convena en la reparticin por mitad entre ambos pases de los impuestos provenientes de la reparticin del guano descubierto y por descubrir entre los grados 23 y 25, como tambin los derechos de exportacin que se percibiesen de los minerales extrados en la misma zona. () Divergencias surgidas sobre la forma de aplicar estas ltimas clusulas econmicas, crearon de nuevo un clima de tensin entre Chile y Bolivia y este pas busc en 1873 una alianza secreta con el Per, a cuya suscripcin se quiso arrastrar, aunque sin conseguirlo, a la Repblica Argentina. No obstante, nuevas negociaciones lograron concretar el 6 de agosto de 1874 un segundo tratado chileno-boliviano que dej sin efecto al anterior. Por l se mantuvo como lmite el paralelo 24. La renuncia de Chile a sus derechos soberanos al norte de esta lnea qued, sin embargo, compensada en el artculo 4, con el compromiso que contrajo Bolivia, por el trmino de 25 aos de que las personas, industrias y capitales chilenos situados en la zona cedida por Chile al norte del paralelo 24, no quedaran sujetos a ms contribuciones, de cualquiera clase que sean, que a las que al presente existen. Sin embargo, el incumplimiento por Bolivia de esta clusula ech por tierra el tratado de lmites. En efecto, en 1878 se promulg all por el gobierno del Presidente don Hilarin Daza, una ley que gravaba con diez centavos el quintal de salitre que exportase la Compaa de Salitre y Ferrocarril de Antofagasta. La corporacin afectada por el indicado gravamen era compuesta por chilenos y, como tal, se hallaba bajo el amparo del artculo 4 del tratado de 1874, que prohiba nuevos impuestos por espacio de veinticinco aos. Las gestiones diplomticas emprendidas por Chile para contener esta violacin fueron intiles. Bolivia incluso rechaz el someter a arbitraje la discrepancia y por un decreto de febrero de 1879 reivindic las salitreras detentadas por la Compaa que se haba negado a pagar el impuesto. El Encargado de Negocios chileno en Bolivia, seor Pedro Nolasco Videla, en una ltima nota, con la que puso trmino a su gestin y tras la cual abandon el pas, resumi as el punto de vista chileno y las consecuencias que iban a derivarse de la violacin boliviana a lo pactado: Roto el tratado de 6 de agosto de 1874, porque Bolivia no ha dadoBiblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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cumplimiento a las obligaciones en l estipuladas, renacen para Chile los derechos que legtimamente haca valer antes del tratado de 1866 sobre el territorio a que ese tratado se refiere. En consecuencia, el gobierno de Chile ejercer todos aquellos actos que estime necesario para la defensa de sus derechos y el Excelentsimo Gobierno de Bolivia no debe ver en ellos sino el resultado lgico del rompimiento que ha provocado y de su negativa reiterada para buscar una solucin justa e igualmente honrosa para ambos pases Poco despus dos compaas del ejrcito chileno ocuparon el puerto de Antofagasta, habitado en su 93% por chilenos, e hizo as efectiva la voluntad de Chile de reivindicar para s los territorios situados entre los paralelos 23 y 24 que haba cedido antes a Bolivia bajo una condicin por sta no cumplida. Como resultado de estos hechos estall la guerra entre Chile y Bolivia, pas al que se ali el Per, con quien tena un tratado secreto. Los ejrcitos bolivianos quedaron completamente desbaratados el 26 de mayo de 1880 y la contienda la sigui Chile slo con el Per que, a partir de entonces, no recibi de Bolivia ninguna ayuda. Al fin, el triunfo chileno se impuso tambin sobre el segundo y ms poderoso adversario, con el cual firm en 1883 un tratado de paz [se refiere al Tratado de 20 de octubre de aquel ao con el Per, tambin llamado de Ancn]. (). () La derrota definitiva de su aliado, el Per, hizo que Bolivia se aviniera a firmar con Chile, el 4 de abril de 1884, un Pacto de Tregua, destinado a preparar y facilitar el ajuste de una paz slida y estable. Mientras, el Pacto declaraba suspendidas las hostilidades y sujetaba al rgimen poltico y administrativo que establece la ley chilena, los territorios comprendidos desde el paralelo 23 hasta la desembocadura del ro Loa en el Pacfico. El citado documento no aludi a los territorios situados entre los paralelos 23 y 24, cedidos condicionalmente por Chile a Bolivia por el tratado de 1874, que sta torn nulo por su incumplimiento. Era innecesario mencionarlos, porque Chile no haca sino ejercer sobre ellos un acto reivindicatorio. En cambio el pacto habla de la faja litoral situada al norte de esos territorios, es decir, desde el paralelo 23 al ro Loa. Esta faja haba sido la primitiva y tradicional frontera directa de Chile con el Per, y Chile hizo tcita dejacin de ella desde la ocupacin boliviana de Cobija. Ahora, con el Pacto de Tregua, volva a hacerse presente en esta zona sobre la que podra, asimismo, alegar ttulos histrico-jurdicos que, como se demostr en pginas anteriores, configuraban el uti possidetis de 1810. () Tras largas negociaciones, se firm en Santiago, el 20 de octubre de 1904, el tratado definitivo de paz entre Chile y Bolivia. Por l se consagr el dominio absoluto y perpetuo de Chile en todos los territorios ocupados en virtud del Pacto de Tregua. Bolivia recibi, en cambio, indemnizaciones econmicas apreciables y amplias facilidades de trnsito comercial por el territorio chileno. Las clusulas sobre estas ltimas materias, como tambin diversos acuerdos posteriores destinados a facilitar an ms el goce de estas ventajas, no se detallan aqu por no referirse a las fronteras, objeto exclusivo del presente trabajo. 1616

Ibid. Nota 1, pp. 70 a 73.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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V. PARTICIPACIN DE DOMINGO SANTA MARIA EN EL CONFLICTO, PACTO DE TREGUA DE 1884 Y FRUSTRADAS NEGOCIACIONES POSTERIORES HASTA EL TRATADO DE PAZ Y AMISTAD CON BOLIVIA DE 1904.La posicin de Jaime Eyzaguirre con respecto a los Tratados con Bolivia de 1866 y de1874 y los hechos posteriores, reproducida al finalizar el captulo anterior, contratasta con la que veremos a continuacin y que sostiene Oscar Pinochet de la Barra, en su libro. En esta se destaca la figura preponderante del Ministro de Relaciones Exteriores de Chile y ms tarde Presidente de la Repblica, Domingo Santa Mara, quien fue un firme sostenedor de evitar la mediterraneidad de Bolivia permitindole su salida al Pacfico en el sector de Tacna y Arica. En el tiempo de Santa Mara sta fue la llamada poltica boliviana y que va a representar histricamente una primera posicin chilena favorable al acceso boliviano al ocano, llegada que antes de la Guerra del Pacfico, indiscutiblemente Bolivia tena. Los Tratados de Lmites de1866 y de 1874 rubrican esta realidad, que Bolivia consolid despus de su Independencia en 1825, segn lo que ya hemos visto. Los avatares de esta poltica boliviana, marcarn los intentos de Chile por evitar la mediterraneidad de Bolivia despus de la contienda blica hasta la firma del Tratado de Paz con Bolivia de 1904 y solucionar los coletazos posteriores de ste instrumento, vigente hasta ahora. No obstante veremos cmo esta poltica boliviana tuvo variables estratgicas en su accionar. As, Oscar Pinochet de la Barra en el libro que hemos citado se sita en los primeros meses de 1879, con Chile bajo la Presidencia de Anbal Pinto y expresa textualmente: LA POLITICA BOLIVIANA DURANTE EL GOBIERNO DE ANIBAL PINTO Recin iniciadas las acciones de guerra, con la ocupacin de Antofagasta por tropas chilenas 14 de febrero de 1879, el gobierno del Presidente Anbal Pinto llev adelante diversas gestiones diplomticas tendientes a dividir al enemigo, es decir, separar a Bolivia del Per, en los inicios mismos del conflicto que an no cobraba gran cantidad de vctimas. Es lo que se ha denominado poltica boliviana, y la principal fuerza detrs de ella fue, sin duda, Domingo Santa Mara, primero en calidad de Ministro de Relaciones Exteriores y luego, de Presidente de la Repblica. El gran poltico y estadista estaba convencido de que ejerciendo presin sobre el ms dbil de nuestros contrincantes se poda acortar la guerra. Pero, otras dos razones le hicieron llevar adelante, tenazmente y con la pasin que pona en la realizacin de sus ideas, la mencionada gestin. Una de ellas era correr ms al norte la costa que Chile reconoca como boliviana, unos 170 kilmetros situados entre la desembocadura del ro Loa (lat. 21 27) y la baha de Mejillones (lat. 23), luego de haber recuperado la costa y territorio interior que iban del paralelo 23 al 24. A Santa Mara no le caba

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la menor duda de que Bolivia deba mantener una salida al mar, pero sin cortar en dos el territorio chileno. La otra razn consista en conservar entre los territorios de Chile y Per, como hasta entonces, una cua boliviana, lo que estimaba apropiado para la seguridad chilena. (...). Ms adelante Pinochet de la Barra describe una serie de gestiones llevadas a cabo confidencialmente por personeros tanto chilenos como bolivianos residentes en Chile, dirigidos por Santa Mara, para proponer al gobierno de La Paz (a la sazn al mando del general Hilarin Daza) que se desentendiera de las hostilidades. Uno de estos ltimos, Gabriel Ren Moreno, fue contacto de Domingo Santa Mara y el 29 de mayo ste ltimo le entreg unas bases de entendimiento entre Chile y Bolivia para que propusiera al gobierno boliviano. Pinochet de la Barra, seala que el documento tena siete puntos y por parecerle de mayor importancia, cita el tercero: (...) Como la Repblica de Bolivia ha menester de una parte del territorio peruano para regularizar el suyo y proporcionarse una comunicacin fcil con el Pacfico... Chile no embarazar la adquisicin de esa parte del territorio, ni se opondr a su ocupacin definitiva por parte de Bolivia.... Y contina ahora Oscar Pinochet: Ofrecimiento necesariamente vago, en vista de que se haca antes de haber conquistado Tarapac de manos peruanas. La negociacin no dio resultados, pues no se logr dividir a los aliados, pero oblig al Per a mejorar su trato a Bolivia (...). (...) La poltica boliviana haba comenzado sin xito, pero se renovara ms adelante. En todo caso quedaba de manifiesto el pensamiento de un gobernante chileno al que ya preocupan la paz y las condiciones en que habra que planear la paz para que fuese duradera. De cartas del Ministro Santa Mara, de la poca, se extractan algunos prrafos que revelan la lucidez del estadista. Una de esas comunicaciones es de 3 de diciembre de 1879 y la dirige a su amigo Jos Victorino Lastarria [aqu Oscar Pinochet cita, de autor annimo, el texto: La soberana definitiva de Tacna y Arica. Imprenta Universitaria, Santiago, 1919]: Dueos nosotros de todo el litoral boliviano y de todo el departamento de Tarapac, debemos forzosamente dar un respiradero y una puerta de calle a Bolivia, colocndola entre el Per y Chile, puesto que de otra manera la sofocaramos y la compeleramos a buscar anexiones con el Per o la Repblica Argentina. Es menester interesarla en su propio provecho, as como es menester tambin que nuestra posesin de Tarapac pierda su carcter militar... .

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En carta a Rafael Sotomayor, Ministro de Guerra en campaa, repetir esas ideas un ao despus, en noviembre de 1880 [ahora Pinochet de la Barra cita a Alberto Gutirrez autor de: La guerra de 1879. Editorial Francisco de Aguirre, Buenos Aires, 1975]: No olvidemos que no podemos ahogar a Bolivia. Privada de Antofagasta y de todo el litoral que antes posea hasta el Loa, debemos proporcionarle por alguna parte un puerto suyo, una puerta de calle, que le permita entrar al interior sin zozobra, sin pedir venia. Luego de encomiar la tenacidad de la poltica boliviana llevada a cabo por Domingo Santa Mara y su sentido estratgico, poltico y de buen criterio, Oscar Pinochet transcribe un prrafo de otra carta del 1 de diciembre de 1880 de Santa Mara al mismo Rafael Sotomayor [cita al historiador Gonzalo Bulnes en su obra: La Guerra del Pacfico, t. II, Valparaso, 1914]: En qu situacin queda esta Repblica despojada de todo litoral...? Mal haramos... creyendo que por slo nuestra voluntad, y sin consultar otro inters que el inters nuestro, vamos a poder alterar el mapa americano. Por ahora dejaremos hasta aqu a Oscar Pinochet para retomarlo ms adelante. Como vimos anteriormente, la violacin de Tratado de 1874, cuatro aos despus, por parte del Gobierno boliviano signific el estallido de la Guerra del Pacfico que finaliz con la derrota de las armas aliadas de Per y Bolivia. Pero detengmonos en el Pacto de Tregua con Bolivia, firmado en Valparaso el 4 de abril de 1884 por los representantes de Bolivia: Belisario Salinas y Belisario Boeto y por el ministro de Relaciones Exteriores de Chile Aniceto Vargara Albano. Mediante este acuerdo se estableci que Chile seguira gobernando, con sujecin a la legislacin chilena, los territorios comprendidos desde el paralelo 23 hasta la desembocadura del ro Loa, en el Pacfico. El lmite oriental de estos territorios lo constituan sucesivas lneas rectas entre Sapalegui [o Zapaleri], desde la interseccin con el deslinde que los separa de la Repblica Argentina hasta el volcn Licancabur, luego continuaran otras cuatro rectas, la ltima de las cuales llegara al volcn Ta, continuando luego la lnea divisoria existente entre el departamento de Tarapac, ahora tambin en poder de Chile, y Bolivia. Asimismo estipulaba que en caso que surgieran dificultades en la aplicacin de los lmites, ambos gobiernos nombraran una comisin de ingenieros que los trazara conforme a los puntos determinados. Con respecto al Pacto, Guillermo Lagos Carmona profundiza lo esbozado por Jaime Eyzaguirre, citando al profesor Ernesto Barros Jarpa en su Manual de Derecho Internacional Pblico. Aqu indica Barros: Hay que observar que los territorios a que se refiere el Pacto de Tregua son los que estn al norte del paralelo 23. De Antofagasta, que est al sur de este paralelo, no se hace mencin alguna, lo que quiere decir que Bolivia reconoca que sobre esta parteBiblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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de territorio no pretenda ningn derecho, pues se limitaba a ceder los nicos que tena, o sea, los territorios que estaban al norte del paralelo 23 hasta la desembocadura del ro Loa en el Pacfico. 17 Con relacin al Pacto de Tregua, El Libro Azul...., expresa: EL PACTO DE TREGUA (1884) Bolivia ante la amenaza de nuevas hostilidades con tropas chilenas concentradas en Puno, Tacna, Mollendo y Calama, se vio obligada a firmar, en la ciudad de Valparaso, un Pacto de Tregua, el 4 de abril de 1884. Los trminos del mismo se mantuvieron en reserva hasta su aprobacin por los parlamentos de ambos pases. Por el Pacto de Tregua, Chile justific la ocupacin de los territorios bolivianos conquistados durante la Guerra del Pacfico y asumi la administracin de las aduanas que eran utilizadas por el Estado boliviano, apropindose de sus recaudaciones como tributo de guerra. Junto con el Pacto de Tregua se firm un protocolo complementario, el 30 de mayo de 1885. Ambos instrumentos eran totalmente favorables a Chile y fomentaron la expansin de productos chilenos en el mercado boliviano, con lo que el dominio de Chile fue total. Por nuestra parte indiquemos que no existen antecedentes histricos de amenazas de tropas chilenas a Bolivia, incluso desde localidades tan distantes entre s, toda vez que el ejrcito de ese pas se retir de la guerra, como hemos visto, el 26 de mayo de 1880, despus de su derrota en la batalla de Tacna y, adems, que prcticamente la totalidad del ejrcito chileno, ya haba regresado a Santiago y otras ciudades luego de haberse firmado la paz con Per en 1883. Con relacin al protocolo complementario al Pacto de Tregua que alude la versin oficial boliviana, sealemos que este se firm tambin en Valparaso el 8 de abril de 1884, es decir cuatro das despus del Pacto, por lo que no encontramos registro alguno de otro instrumento firmado por ambos pases en 30 de mayo de 1885. Asimismo, ms adelante se citar textualmente el artculo 6 del Pacto que puntualiza la modalidad de los cobros por parte de Chile de los aranceles aduaneros del puerto de Arica. En el artculo 5, que tambin se citar, se establece que las mercaderas que se introduzcan a Bolivia por Antofagasta tendrn trnsito libre. As, los autores de este estudio, una vez ms, constatamos la ligereza de las afirmaciones del texto boliviano. Volvamos nuevamente a Oscar Pinochet para ver la continuacin y culminacin de la poltica boliviana gestionada por Domingo Santa Mara, ahora en su calidad de Presidente de la Repblica. As, apenas ste asumi su cargo, el 18 de septiembre de 1881, (ya las fuerzas militares chilenas se encontraban en Lima y administraban el Per, aunque tropas peruanas resistan en la sierra andina) su primera preocupacin era hacer la paz con ese pas y con Bolivia. De este modo el Presidente Santa Mara encomend seguir gestiones de acercamiento con Bolivia a un hombre de su confianza: Eusebio Lillo (el mismo autor de la letra de nuestra Cancin Nacional), las que tampoco dieron resultados positivos. Esto sucedi luego de sus contactos con el negociador boliviano Mariano Baptista (posteriormente Presidente de su pas), que tuvieron lugar en enero de 1882 y siempre con la idea del17

Ibid. Nota 7. p. 77.Biblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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Mandatario chileno de la cesin a Bolivia de Tacna y Arica, territorios que Per (su anterior dueo) no estuvo dispuesto a ceder. Seala Pinochet de la Barra: Durante todos esos meses, el Presidente Santa Mara trat vanamente de coordinar un problema que pareca insoluble: cmo firmar la paz con Per y Bolivia y ceder a este ltimo pas Tacna y Arica: territorios que Per no deseaba que salieran de sus lmites nacionales, y que slo estaba dispuesto a dejar, por los prximos diez aos, bajo la administracin del gobierno de Santiago, hasta tanto la solucin definitiva la diera un plebiscito. Esta idea del plebiscito fue propuesta por el Ministro Lavalle [Jos Antonio, Ministro de Relaciones Exteriores peruano] a nuestro representante Novoa [Jovino, diplomtico chileno en Per] en marzo de 1883. Lo que Santa Mara deseaba era comprar Tacna y Arica. Lavalle rechazaba algo tan definitivo como una venta y entonces propuso la continuacin de la administracin chilena y un plebiscito en 1893, lo que Chile acept, seguro de que cualquier plebiscito le dara ambos territorios. Sobre este programado plebiscito nos referiremos ms adelante, una vez que veamos los vaivenes de la poltica peruana al respecto, de gran relevancia para entender el fracaso final de la poltica boliviana, y la nueva actitud del Presidente Santa Mara ante aquellos. Sigamos con Pinochet de la Barra, volviendo al Tratado de Paz con Per (o de Ancn, el 20 de octubre de 1883): (...) Un mes despus de suscrito el Tratado entre Chile y Per, llegaron a Santiago los plenipotenciarios bolivianos Belisario Salinas y Belisario Boeto, en la creencia, alentada por Lima de que Santa Mara les cedera Tacna y Arica. Ya era tarde. Se estudiaron, entonces, los trminos del acuerdo bilateral chileno-boliviano que, finalmente, redactado por el propio Presidente Santa Mara, dej abierta la esperanza a los bolivianos. Esperanza apoyada por Chile, y ms de una vez, en una actitud errtica, por los propios peruanos. Es as como en los meses previos a la firma del Tratado de Ancn, el Gobierno de Lima consideraba una posibilidad real el traspaso de Tacna y Arica a Bolivia. Veamos lo que escribi Jovino Novoa al Presidente Santa Mara [cita a Gonzalo Bulnes. Guerra del Pacfico, t. III, Valparaso, 1914]: Representantes de (Presidente) Iglesias [Miguel, Presidente provisional peruano] exigen las siguientes modificaciones: 1. Chile queda en posesin de Tacna y Arica por diez aos, al trmino de los cuales un plebiscito decidir a qu nacionalidad quieren pertenecer permanentemente, si a Chile, Bolivia o Per.... Pero Chile prefera arreglos separados. (...).

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(...) Para finalizar el anlisis del Tratado de Ancn, volvamos a las razones dadas por el Ministro Aldunate [Luis, Ministro de Relaciones Exteriores chileno] y el Presidente Santa Mara a los dos Belisarios: Salinas y Boeto, que les habran impedido considerar en esa oportunidad la cesin de, en cualquier forma, aun temporal, de Tacna y Arica: porque por diez aos Chile tendra slo la administracin de ambos territorios. Pero, por qu no hubo acuerdo chileno-peruano para disponer, justamente en Ancn, la cesin a Bolivia de Tacna y Arica? Hay comunicaciones entre los actores dela importante gestin que aclaran el misterio. Primero, aunque el Presidente Iglesias mencion a Bolivia en alguna oportunidad, la verdad es que Lima no estaba dispuesta a desprenderse tan fcilmente del territorio que va entre la quebrada de Camarones por el Sur y el ro Sama por el Norte, y confiaba en el plebiscito que se anunciaba para diez aos ms. Lo curioso es que, una vez firmado el Tratado de Ancn, el gobierno limeo entusiasm al Gobierno de La Paz con esa posibilidad. Es as como once das despus de esa firma, el 31 de octubre de 1883, Jovino Novoa telegrafi en clave al Ministro Aldunate: [cita nuevamente a Gonzalo Bulnes...]. Me ha visto ayer la persona del Per como Ministro a Bolivia, Enrique Bustamante y Salazar, y tanto l como el seor Lavalle (Ministro de Relaciones Exteriores) querran saber si al conferenciar en La Paz podra insinuarse la idea de que Tacna y Arica pudieran ser de Bolivia, mediante indemnizaciones a Chile.... Por qu esta ms bien sorpresiva y extempornea actitud peruana? (...). Ms adelante Oscar Pinochet expone la posible causa del retroceso de la posicin del Presidente Santa Mara con respecto a Bolivia citando a Gonzalo Bulnes, el que se enmarcara en los avatares de la poltica peruana. As, seala Pinochet de la Barra: En cuanto al Presidente Santa Mara, Gonzalo Bulnes cree saber el porqu de su sbito desinters de un arreglo rpido con Bolivia. En carta al Almirante Lynch [Patricio, gobernador chileno durante la ocupacin militar del Per], del 21 de diciembre, justo durante las conversaciones, le expresaba: Ya presumo las intrigas que se estn poniendo en juego por (el Embajador) Bustamante, creyendo con ellas salvar a Tacna y Arica, pues se imagina que pidindolas para Bolivia, al fin de fiestas, estas ciudades o territorios seran recuperados por el Per. Afirma Bulnes que Santa Mara estaba preocupado por hacer chileno el litoral boliviano, que nos separaba de la recin conquistada provincia peruana de Tarapac. Conviene recordar algo que los chilenos olvidan, y que es importante: los 300 kilmetros de costa y territorio interior bolivianos tenan un doble origen. Desde la desembocadura del Loa (21 27) hasta Mejillones (23) un ttulo aceptado tcitamente por Chile; entre los paralelos 23 y 24, un ttulo que naca de los tratados chilenoBiblioteca del Congreso Nacional de Chile - Departamento de Estudios, Extensin y Publicaciones

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bolivianos de 1866 y 1874. Chile recuper, durante la Guerra del Pacfico, este segundo territorio. El primero lo administr por veinte aos, de 1884 a 1904, con el deseo de cambirselo a Bolivia por Tacna y Arica. Comenta Gonzalo Bulnes: Lo que tena en vista era obtener con Tacna y Arica la cesin definitiva del litoral.... Finaliza este captulo de su libro Oscar Pinochet, volviendo a hacerse la pregunta de por qu no se incluy a Bolivia en Tratado de Ancn con Per?. Dice el autor citado: Sea como sea, en las negociaciones de Ancn, en 1883, Chile, Per y Bolivia perdieron la oportunidad de hacer una paz duradera, definitiva. En todo caso, la idea de Arica para Bolivia quedaba lanzada desde la misma Guerra del Pacfico. Y ms all de los acuerdos, de los tratados, de las soluciones de reemplazo, Arica sera una meta esquiva, difcil, siempre en la mente de los diplomticos bolivianos y de muchos diplomticos chilenos como la nica frmula verdaderamente eficaz para cerrar una herida abierta en lamentables jornadas. Por nuestra parte s