Un corazón quebrantado y humillado, Tú, Dios mío, no … · LA NUEVA ALIANZA El tiempo de...

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Edita: Equipo de liturgia. Cuaresma. 2015 "Un corazón quebrantado y humillado, Tú, Dios mío, no lo desprecias." Sal 50

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Edita: Equipo de liturgia. Cuaresma. 2015

"Un corazón quebrantado y humillado, Tú, Dios mío, no lo desprecias." Sal 50

LA NUEVA ALIANZA

El tiempo de Cuaresma que iniciamos es una llamada que el

Señor nos dirige, por medio de la Iglesia a la Conversión: a

volver a Él. Resituarnos como cristianos, ver que actitudes,

planteamientos, acciones hay en nosotros que no se ajustan al

Evangelio y pedir la gracia de cambiar.

En este sentido es fundamental prestar atención, de un modo

especial, a la Palabra de Dios, porque en ella encontramos

esa luz tan necesaria, que permite que nos veamos desde la

mirada siempre misericordiosa del Señor. Nos puede ayudar

mucho este folleto preparado por el Equipo parroquial de

Liturgia, que recoge las lecturas de cada domingo y una

reflexión sobre las mismas, así como participar semanalmente

en ese encuentro con la Palabra de Dios: ”A la luz de la

Palabra”. (Todos los jueves a las 20 h)

Las lecturas propias de este Ciclo litúrgico, que llamamos Ciclo

B, pondrán el acento en el tema de la Alianza. Nuestro Dios es

el Dios de la Alianza. El que selló un pacto con el pueblo de

Israel: “Yo seré vuestro Dios, vosotros seréis mi pueblo”.

Desde entonces la fidelidad de Dios ha permanecido de

generación en generación. No así la fidelidad del pueblo, que

incumpliendo los mandamientos de Dios, quebrantó muchas

veces esa Alianza, teniendo que ser restaurada tantas veces

por la misericordia divina.

Pero una nueva Alianza es sellada en Jesucristo. Una Alianza

con toda la humanidad y para toda la humanidad. Dios en su

Hijo, hace un nuevo pacto, y este definitivo y eterno.

“Esta es mi sangre, sangre de la alianza nueva y eterna”, son

las palabras de Jesús en la Última Cena, por las que instituye

la Eucaristía. Es él, quien con su entrega en la cruz, nos

reconcilia con Dios, nos hace vivir de nuevo en Alianza:¡es

nuestro Dios y nosotros su pueblo!, ¡es nuestro Padre y

nosotros sus hijos!. Desde el bautismo, vivimos en alianza, en

comunión con Dios.

El camino cuaresmal es una invitación a reconocer

humildemente las veces que con nuestro pecado hemos

quebrantado esa comunión con Dios, con la Iglesia, con los

hermanos; a pedir perdón con sincero arrepentimiento, y

llegar así a la Pascua, tiempo de renovación y vida nueva.

Guiados por la Palabra, y por la presencia misericordiosa del

Señor, recorramos este Itinerario hacia la Pascua, con la

certeza de que dará verdaderos frutos de vida cristiana en

nosotros.

Vuestro Párroco,

Antonio Ferrando Martí

Cuaresma: tiempo de conversión. De ajustar nuestra vida al Evangelio.

• Cuaresma: tiempo de desierto. Es austeridad, esfuerzo,

crecimiento, paciencia, esperanza.

• Cuaresma: tiempo de compartir: Lo que se tiene en las

manos y en el corazón.

• Cuaresma: tiempo de oración: Entrar dentro de sí. El

amor que se arrodilla.

• Cuaresma: entrenamiento para la muerte y para la vida.

Peregrinar hacia la Pascua

Miércoles ceniza: EL UMBRAL DE LA CUARESMA

"... Rasgad los corazones, no las vestiduras " (Joel 2, 12-18)

"... Ahora es tiempo de gracia; ahora es día de salvación ... " (2 Cor 5,

20 - 6, 2)

1. Oración inicial

Padre nuestro, durante esta época de arrepentimiento, ten misericordia de nosotros. Con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras buenas obras, transforma nuestro egoísmo en generosidad. Abre nuestros corazones a tu Palabra, sana nuestras heridas del pecado, ayúdanos a hacer el bien en este mundo. Que transformemos la oscuridad y el dolor en vida y alegría. Amén. 2.- PALABRA

Lectura del santo evangelio según san Mateo (Mt 6, 1-6. 16-18)

En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos:

Cuidad de no practicar vuestra justicia delante

de los hombres para ser vistos por ellos; de lo

contrario no tendréis recompensa de vuestro

Padre celestial. Por tanto, cuando hagas

limosna, no vayas tocando la trompeta por

delante como hacen los hipócritas en las

sinagogas y por las calles con el fin de ser

honrados por los hombres; os aseguro que ya

han recibido su paga. Tú, en cambio, cuando

hagas limosna, que no sepa tu mano izquierda

lo que hace tu derecha; así tu limosna quedará

en secreto y tu Padre, que ve en lo secreto, te lo pagará.

Cuando recéis no seáis como los hipócritas, a quienes les gusta

rezar de pie en las sinagogas y en las esquinas para que los vea la

gente.

Os aseguro que ya han recibido su paga. Cuando tú vayas a rezar

entra en tu cuarto, cierra la puerta y reza a tu Padre que está en lo

escondido, y tu Padre que ve en lo escondido, te lo pagará. Cuando

ayunéis no andéis cabizbajos, como los farsantes que desfiguran su

cara para hacer ver a la gente que ayunan.

Os aseguro que ya han recibido su paga. Tú, en cambio, cuando

ayunes perfúmate la cabeza y lávate la cara, para que tu ayuno lo

note, no la gente, sino tu Padre que está en lo escondido; y tu Padre

que ve en lo escondido, te recompensará.

3.- Resuena la Palabra

•Revisamos en el umbral de la Cuaresma los tres ejes de nuestra

vida cristiana: ◦La relación con los hermanos: la justicia = limosna

(v.1-4). En un tiempo de "crisis" no valen lamentos, lo que cuenta

son hechos ◦La relación con Dios: la oración -no los rezos- (v.5-6)

¿Qué calidad de vida me da esta relación? ◦La relación conmigo

mismo: el ayuno (v.16-18) ¿Cómo repercute el ayuno en la práctica

de la justicia?

•Tres miradas a cambiar: hacia el otro - los otros; hacia arriba,

hacia Dios; y hacia adentro, hacia mí mismo.

4. Oración R. Misericordia Señor por tu bondad Misericordia, Dios mío, por tu bondad, por tu inmensa compasión borra mi culpa; lava del todo mi delito, limpia mi pecado. R.

Pues yo reconozco mi culpa, tengo siempre presente mi pecado: contra ti, contra ti sólo pequé, cometí la maldad que aborreces. R. Oh Dios, crea en mí un corazón puro, renuévame por dentro con espíritu firme; no me arrojes lejos de tu rostro, no me quites tu santo espíritu. R. Devuélveme la alegría de tu salvación, afiánzame con espíritu generoso. Señor, me abrirás los labios, y mi boca proclamará tu alabanza. R.

1er domingo:

"... Hago un pacto con vosotros: el diluvio no volverá a destruir la vida

... " (Gen 9 8-15)

"... El bautismo ... no consiste en limpiar una suciedad corporal, sino

en impetrar de Dios una conciencia pura ... " (I Pe 3, 18 - 22)

1. Oracion inicial

Padre nuestro, durante esta época de arrepentimiento, ten misericordia de nosotros. Con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras buenas obras, transforma nuestro egoísmo en generosidad. Abre nuestros corazones a tu Palabra, sana nuestras heridas del pecado, ayúdanos a hacer el bien en este mundo. Que transformemos la oscuridad y el dolor en vida y alegría. Amén.

2.- PALABRA

Lectura del santo evangelio según san Marcos (Mc 1, 12-15)

En aquel tiempo, el Espíritu empujó a Jesús al

desierto. Se quedó en el desierto cuarenta días,

dejándose tentar por Satanás; vivía entre alimañas, y

los ángeles le servían. Cuando arrestaron a Juan,

Jesús se marchó a Galilea a proclamar el evangelio de

Dios. Decía: - "Se ha cumplido el plazo, está cerca el Reino de Dios:

convertíos y creed en el evangelio".

3.- Resuena la Palabra

Nos llamas, Padre, como a Jesús al desierto. Lugar de intimidad,

de encuentro y de diálogo; en este desierto de nuestra vida nos

encontramos con tu silencio, que nos exige atención: atención a lo

profundo de nosotros mismos, atención a lo alto, atención al

hermano. Son tres caminos por donde llegas a nuestras vidas.

•¡Quizás! por los tres caminos concretos se está acercando el

Reino a nosotros, si cambiamos, si "convertimos" nuestro

aislamiento en diálogo; nuestro egoismo en fraternidad; nuestras

exigencias en servicio ... El camino hacia la Pascua contigo,

comienza en este desierto nuestro y es un camino de liberación.

4. Oración

R. Tus sendas Señor, son misericordia y lealtad

Señor, enséñame tus caminos, instrúyeme en tus sendas: haz

que camine con lealtad; enséñame, porque tú eres mi Dios y

Salvador. R

Recuerda, Señor, que tu ternura y tu misericordia son eternas.

Acuérdate de mí con misericordia, por tu bondad, Señor. R

El Señor es bueno y es recto, y enseña el camino a los

pecadores; hace caminar a los humildes con rectitud, enseña

su camino a los humildes. R

2º domingo

"... Por no haberte reservado a tu hijo, tu hijo único, te

bendeciré ... " (Gen 22 1-2. 9-13. 15-18)

"... El que no perdonó a su propio Hijo ... ¿cómo no nos

dará todo en él " (Rom 8, 31 - 34)

1. Oración inicial

Padre nuestro, durante esta época de arrepentimiento, ten misericordia de nosotros. Con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras buenas obras, transforma nuestro egoísmo en generosidad. Abre nuestros corazones a tu Palabra, sana nuestras heridas del pecado, ayúdanos a hacer el bien en este mundo. Que transformemos la oscuridad y el dolor en vida y alegría. Amén.

2.- PALABRA

Lectura del santo evangelio según san Marcos (Mc 9 2-10)

Seis días después, Jesús tomó consigo a

Pedro, a Santiago y a Juan, los llevó a

solas a un monte alto y quedó

transfigurado ante ellos. Sus vestidos se

volvieron de un blanco deslumbrador,

como ningún batanero del mundo podría

blanquearlos.

Se les aparecieron también Elías y Moisés, que conversaban

con Jesús. Pedro tomó la palabra y dijo a Jesús: - Maestro,

estamos muy bien aquí. Vamos a hacer tres tiendas: una para

ti, otra para Moisés y otra para Elías. Estaban tan asustados

que no sabía lo que decía.

Vino entonces una nube que los cubrió y se oyó una voz desde

la nube: - Este es mi Hijo amado; escuchadle.

De pronto, cuando miraron alrededor, vieron sólo a Jesús con

ellos. Al bajar del monte, les ordenó que no contaran a

ninguno lo que habían visto hasta que el Hijo del hombre

hubiera resucitado de entre los muertos. Ellos guardaron el

secreto, pero discutían entre sí sobre lo que significaría aquello

de resucitar de entre los muertos.

3.- Resuena la Palabra

Señor, también nos llamas al Tabor, a la altura ..., a ascender, a

un diálogo con los grandes orantes de la historia de tu pueblo:

Moisés y Elías (v.4).

•En ese diálogo es donde encontramos tu luz, tu aliento, tu

fuerza para afrontar los retos de la existencia cotidiana ...

•Escuchándote en silencio, Señor, purificas todas nuestras

oscuridades, nuestros errores y cuanto somos queda "de un

blanco deslumbrador" (v.3).

No podemos quedarnos siempre en el Tabor, hemos de bajar

(v.9), hemos de afrontar la vida con los hermanos, hemos de

transformar nuestra condición humana sin separarnos de los

otros; hemos de escrutar como los discípulos ¿qué significa

resucitar de entre los muertos? (v.10):•Elevar la vida cotidiana

de toda dependencia ...

•Superar el miedo al futuro sin protección ... •Entregar el

amor sin esperar nada a cambio ... •Salir de la tristeza por

amor a otro ... " Ellos guardaron el secreto " (v.10); nosotros

también en "secreto" trabajamos contigo para vivir y resucitar

contigo ...

4. Oración

R. Caminare en presencia del señor

Tenía fe, aun cuando dije: "¡Qué desgraciado soy!" Mucho le

cuesta al Señor la muerte de sus fieles. R.

Señor, yo soy tu siervo, siervo tuyo, hijo de tu esclava:

rompiste mis cadenas. Te ofreceré un sacrificio de alabanza,

invocando tu nombre, Señor. R.

Cumpliré al Señor mis votos en presencia de todo el pueblo,

en el atrio de la casa del Señor, en medio de ti, Jerusalén. R.

3er domingo

"... Yo soy el Señor, tu Dios, que te saqué de Egipto, de la

esclavitud. " (Ex 20 1-17)

"... Nosotros predicamos a Cristo crucificado: escándalo para

los judios ... " (I Cor 1, 22-25)

1. Oración inicial

Padre nuestro, durante esta época de arrepentimiento, ten misericordia de nosotros. Con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras buenas obras, transforma nuestro egoísmo en generosidad. Abre nuestros corazones a tu Palabra, sana nuestras heridas del pecado, ayúdanos a hacer el bien en este mundo. Que transformemos la oscuridad y el dolor en vida y alegría. Amén.

2.- PALABRA

Lectura del santo evangelio según san Juan (Jn 2 13-25)

En aquel tiempo, se acercaba la Pascua de los

judíos, y Jesús subió a Jerusalén. Y encontró en

el templo a los vendedores de bueyes, ovejas y

palomas, y a los cambistas sentados; y,

haciendo un azote de cordeles, los echó a todos

del templo, ovejas y bueyes; y a los cambistas

les esparció las monedas y les volcó las mesas; y a los que

vendían palomas les dijo: - "Quitad esto de aquí: no

convirtáis en un mercado la casa de mi Padre". Sus discípulos

se acordaron de lo que está escrito: "El celo de tu casa me

devora". Entonces intervinieron los judíos y le preguntaron: -

"¿Qué signos nos muestras para obrar así?". Jesús contestó: -

"Destruid este templo, y en tres días lo levantaré". Los judíos

replicaron: - "Cuarenta y seis años ha costado construir este

templo, ¿y tú lo vas a levantar en tres días?" Pero él hablaba

del templo de su cuerpo. Y, cuando resucitó de entre los

muertos, los discípulos se acordaron de que lo había dicho, y

dieron fe a la Escritura y a la palabra que había dicho Jesús.

Mientras estaba en Jerusalén por las fiestas de Pascua, muchos

creyeron en su nombre, viendo los signos que hacía; pero Jesús

no se confiaba con ellos, porque los conocía a todos y no

necesitaba el testimonio de nadie sobre un hombre, porque él

sabía lo que hay dentro de cada hombre.

3.- Resuena la Palabra

Señor, es fácil entrar en tu recinto, en tus paredes, en tus

espacios ...; entrar y salir según nuestros gustos, como quien va

al mercado ... (v.16); tenerte ubicado, controlado ...,

disponible…

◦¿Dónde dar culto a Dios?; ni en Jerusalen ni en otro monte,

"en espíritu y en verdad" (Jn 4 21-24). ◦¿Cómo establecer

relaciones con Dios?; en la misericordia, la libertad y la vida.

◦Nuestro cuerpo es templo porque el Espíritu mora en

nosotros (I Cor 3, 16).

◦Todos somos miembros del Cuerpo de Cristo, templo de

Dios por excelencia (II Cor 6, 16-18).

Encontrarnos contigo, Señor, y encontrarnos con otros

templos habitados por ti viene a ser el ejercicio cotidiano de

nuestra existencia. ¡Cuanto templo arruinado, olvidado,

despreciado y mancillado por el abuso injusto y la guerra!

Ayer el Templo fue convertido en un "mercado", hoy el

mercado urge ser convertido en templo: encontremos a Dios

que habita en nuestros hermanos.

4. Oración

R. Señor, tú tienes palabras de vida eterna

La ley del Señor es perfecta y es descanso del alma; el

precepto del Señor es fiel / e instruye al ignorante. R.

Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón; la

norma del Señor es límpida y da luz a los ojos. R.

La voluntad del Señor es pura y eternamente estable; los

mandamientos del Señor son verdaderos y enteramente

justos. R.

Más preciosos que el oro, más que el oro fino; más dulces que

la miel de un panal que destila. R.

4º domingo

"... Pero ellos se burlaron de los mensajeros de Dios,

despreciaron sus palabras y se mofaron de sus profetas ... " (2

Crón 36 14-16. 19-23)

"... Por pura gracia estáis salvados ... " (Ef 2, 4-10)

1. Oración inicial

Padre nuestro, durante esta época de arrepentimiento, ten misericordia de nosotros.

Con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras buenas obras, transforma nuestro egoísmo en generosidad. Abre nuestros corazones a tu Palabra, sana nuestras heridas del pecado, ayúdanos a hacer el bien en este mundo. Que transformemos la oscuridad y el dolor en vida y alegría. Amén.

2.- PALABRA

Lectura del santo evangelio según san Juan (Jn 3 14-21)

En aquel tiempo, dijo Jesús a Nicodemo:

"Lo mismo que Moisés elevó la serpiente en el

desierto, así tiene que ser elevado el Hijo del

hombre, para que todo el que cree en él tenga

vida eterna. Tanto amó Dios al mundo, que

entregó a su Hijo único para que no perezca

ninguno de los que creen en él, sino que tengan

vida eterna. Porque Dios no mandó a su Hijo al mundo para

juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. El que

cree en él no será juzgado; el que no cree ya está juzgado,

porque no ha creído en el nombre del Hijo único de Dios. El

juicio consiste en esto: que la luz vino al mundo, y los hombres

prefirieron la tiniebla a la luz, porque sus obras eran malas.

Pues todo el que obra perversamente detesta la luz, y no se

acerca a la luz, para no verse acusado por sus obras. En

cambio, el que realiza la verdad se acerca a la luz, para que vea

que sus obras están hechas según Dios".

3.- Resuena la Palabra

La luz está en la Cruz, en "el Hijo del Hombre elevado" (v.14).

◦Ahí está presente la Redención en todo su esplendor, no en el

sufrimiento y en el dolor, está espléndidamente iluminando

con la libertad y con el amor con que son vividos dolor,

sufrimiento y muerte. ◦"Tanto amó Dios ... que entregó a su

Hijo ... para que tengan vida eterna" (v.16). La entrega de Dios

no fue a la muerte, fue a la libertad del amor, a un amor

modélico de entrega en la vida, "para que el mundo se salve

por él" (v.17). Quien salva es el amor de Cristo, no el dolor, la

pasión y la muerte. Estas realidades son la consecuencia de la

entrega, de la coherencia y del amor en la vida. Quien ilumina,

realiza y salva es el amor vivido en cada momento, el dolor y la

muerte se dan porque los hombres "obran perversamente y

detestan la luz" (v.20). Acercarse a la luz y realizar la verdad del

amor es el camino de la Redención, personal, interpersonal y

comunitaria, es participar de la obra redentora de Cristo.

4. Oración

R. Que no me olvide de ti, señor

Junto a los canales de Babilonia nos sentamos a llorar con

nostalgia de Sión; en los sauces de sus orillas colgábamos

nuestras cítaras. R

Allí los que nos deportaron nos invitaban a cantar; nuestros

opresores, a divertirlos: "Cantadnos un cantar de Sión." R.

¡Cómo cantar un cántico del Señor en tierra extranjera! Si me

olvido de ti, Jerusalén, que se me paralice la mano derecha. R.

Que se me pegue la lengua al paladar si no me acuerdo de ti, si

no pongo a Jerusalén en la cumbre de mis alegrías. R

5º domingo

"... Y no tendrá que enseñar uno a su prójimo, el otro a su

hermano " (Jer 31 31-34)

"... Él, a pesar de ser Hijo, aprendió, sufriendo, a obedecer ...

"(Heb 5 7-9)

1. Oración inicial

Padre nuestro, durante esta época de arrepentimiento, ten misericordia de nosotros. Con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras buenas obras, transforma nuestro egoísmo en generosidad. Abre nuestros corazones a tu Palabra, sana nuestras heridas del pecado, ayúdanos a hacer el bien en este mundo. Que transformemos la oscuridad y el dolor en vida y alegría. Amén.

2.- PALABRA

Lectura del santo evangelio según san Juan (Jn 12 20-33)

En aquel tiempo, entre los que habían

venido a celebrar la fiesta había algunos

griegos; éstos, acercándose a Felipe, el

de Betsaida de Galilea, le rogaban: -

"Señor, quisiéramos ver a Jesús". Felipe

fue a decírselo a Andrés; y Andrés y Felipe

fueron a decírselo a Jesús. Jesús les

contestó: - "Ha llegado la hora de que sea glorificado el Hijo del

hombre. Os aseguro que si el grano de trigo no cae en tierra y

muere, queda infecundo; pero si muere, da mucho fruto. El que

se ama a sí mismo, se pierde, y el que se aborrece a sí mismo en

este mundo, se guardará para la vida eterna. El que quiera

servirme, que me siga y donde esté yo, allí también estará mi

servidor; a quien me sirva, el Padre le premiará. Ahora mi alma

está agitada y, ¿qué diré?: Padre, líbrame de esta hora. Pero si por

esto he venido, para esta hora. Padre, glorifica tu nombre".

Entonces vino una voz del cielo: - "Lo he glorificado y volveré a

glorificarlo". La gente que estaba allí y lo oyó decía que había sido

un trueno; otros decían que le había hablado un ángel. Jesús

tomó la palabra y dijo: -"Esta voz no ha venido por mí, sino por

vosotros. Ahora va a ser juzgado el mundo; ahora el Príncipe de

este mundo va a ser echado fuera. Y cuando yo sea elevado sobre

la tierra, atraeré a todos hacía mí". Esto lo decía dando a entender

la muerte de que iba a morir.

3.- Resuena la Palabra

◦La hora de la glorificación es la hora del amor en la Cruz. Jesús es

un "paradigma", un modelo de amor en ese abrazo fuerte con que

se une a la naturaleza humana en la cruz. Sabe que todo el pecado

en el mundo, toda traición, toda violencia, todo poder ceden

frente a la fuerza del amor. Sobre la cruz no reivindica otra gloria

más que la gloria del amor. ◦Es la hora de la máxima revelación, la

hora que permite "ver" lo nunca visto: la gloria del amor

crucificado. •Sólo el amor es digno de ser creído.

•¿La gloria pasa la cruz?, ¿cuáles son mis cruces? ¿cómo las vivo?

¿me uno al Señor a través de ellas para el bien de la humanidad?

•¿Tengo conciencia de lo fructífera que puede ser mi vida cuando

uno mi cruz a la del Señor?

4. Oración

R. Oh Dios crea en mi un corazón puro

Misericordia, Dios mío, por tu bondad, por tu inmensa

compasión borra mi culpa; / lava del todo mi delito, limpia

mi pecado. R

Oh Dios, crea en mí un corazón puro, renuévame por dentro

con espíritu firme; no me arrojes lejos de tu rostro, no me

quites tu santo espíritu. R

Devuélveme la alegría de tu salvación, afiánzame con espíritu

generoso: enseñaré a los malvados tus caminos, los

pecadores volverán a ti. R.

Domingo de ramos

"... El Señor Dios me ha abierto el oído; y yo no me he

rebelado ni me he echado atrás ... " (Is 50 4-7)

"... Se despojó de su rango, y tomando la condición de

esclavo pasó por uno de tantos ... "(Flp 2 6-11)

1. Oración inicial

Padre nuestro, durante esta época de arrepentimiento, ten misericordia de nosotros. Con nuestra oración, nuestro ayuno y nuestras buenas obras, transforma nuestro egoísmo en generosidad. Abre nuestros corazones a tu Palabra, sana nuestras heridas del pecado, ayúdanos a hacer el bien en este mundo. Que transformemos la oscuridad y el dolor en vida y alegría. Amén.

2.- PALABRA

Mc 14 1 - 15 47. - La cruz es la consecuencia

de su fidelidad y coherencia en el amor. La

obediencia de Jesús pasa por el amor

inquebrantable a Dios su Padre y a las

criaturas.

MEDITACIÓN, ORACIÓN DE QUIETUD

Jaculatorias que podemos repetir a lo largo del día.

•Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado, Señor.

•Por tu Santa Cruz redimiste al mundo.

•Mi Dios y mi todo.

3.- Resuena la Palabra

•¿Con qué signos de amor me acerco a los demás? ◦Mis

hechos, mis actitudes, mis silencios. ◦¿Cómo lavo los pies a mi

entorno? Cómo genero vida en los otros? •¿Cómo está

presente la Cruz en mi vida? ◦¿Cuál es su rostro?, ¿cómo me

sitúo ante ella y con ella?

•¿Dejo que la gracia de Dios me fecunde, que crezca en mi?

◦¿Vivo de cara a la vida o de cara al sepulcro ... ?

4. Oración

R. Dios mío Dios mío ¿Por qué me has abandonado?

Al verme, se burlan de mí, hacen visajes, menean la cabeza: "Acudió al Señor, que lo ponga a salvo; que lo libre, si tanto le quiere." R. Me acorrala una jauría de mastines, me cerca una banda de malhechores; me taladran las manos y los pies, puedo contar mis huesos. R. Se reparten mi ropa, echan a suertes mi túnica. Pero tú, Señor, no te quedes lejos; / fuerza mía, ven corriendo a ayudarme. R. Contaré tu fama a mis hermanos, en medio de la asamblea te alabaré. Fieles del Señor, alabadlo; linaje de Jacob, glorificadlo; temedlo, linaje de Israel. R

Examen de Conciencia

Examínate – ayudado por estas

preguntas - ¿qué pecados has

cometido desde tu última confesión?

Trata de no quedarte en lo exterior,

sino en las actitudes del corazón y las

omisiones.

RUPTURA CON DIOS:

¿Amo en verdad a Dios con todo mi corazón o vivo más pegado a las cosas materiales?

¿Me he preocupado por renovar mi fe cristiana a través de la oración, la participación activa y atenta en la misa dominical, la lectura de la Palabra de Dios, etc.? ¿Guardo los domingos y días de fiesta de la Iglesia? ¿He cumplido con el precepto anual de la confesión y la comunión pascual? ¿Tengo una relación de confianza y amistad con Dios, o cumplo solamente con ritos externos? ¿He profesado siempre, con vigor y sin temores mi fe en Dios? ¿He manifestado mi condición de cristiano en la vida pública y privada? ¿Ofrezco al Señor mis trabajos y alegrías? Recurro a Él constantemente, o ¿sólo lo busco cuando lo necesito? ¿Tengo reverencia y amor hacia el nombre de Dios o le ofendo con blasfemias, falsos juramentos o usando su nombre en vano? RUPTURA CONMIGO MISMO:

¿Soy soberbio y vanidoso? ¿Me considero superior a los demás? ¿Busco aparentar algo que no soy para ser valorado por otros? ¿Me acepto a mÍ mismo, o vivo en la mentira y el engaño? ¿Soy esclavo de mis complejos? ¿Qué uso he hecho del tiempo y de los talentos que Dios me dio? ¿Me esfuerzo por superar los vicios e inclinaciones malas como la pereza, la avaricia, la gula, la bebida, la droga? ¿He caído en la lujuria con palabra y pensamientos impuros, con deseos o acciones impuras? RUPTURA CON LOS HERMANOS Y CON LA CREACIÓN:

¿Amo de corazón a mi prójimo como a mÍ mismo y como el Señor Jesús me pide que lo ame?¿En mi familia colaboro en crear un clima de reconciliación con paciencia y espíritu de servicio?¿He abusado de mis hermanos más débiles, usándolos para mis fines? ¿He insultado a mi prójimo? ¿Lo he escandalizado gravemente con palabras o con acciones?

Si me han ofendido, ¿sé perdonar, o guardo rencor y deseo de venganza? ¿Comparto mis bienes y mi tiempo con los más pobres, o soy egoísta e indiferente al dolor de los demás? ¿Participo de las obras de evangelización y promoción humana de la Iglesia? ¿Me preocupado por el bien y la prosperidad de la comunidad humana en la que vivo o me paso la vida preocupado tan sólo de mi mismo? ¿He cumplido con mis deberes cívicos? ¿Soy envidioso? ¿Soy chismoso y charlatán? ¿He difamado o calumniado a alguien? ¿He hecho juicios temerarios sobre otros? ¿Soy mentiroso? ¿He hecho algún daño físico o moral a otros? ¿Me he enemistado con odios, ofensas o peleas con mi prójimo? ¿He sido violento? ¿He sido honesto en mi trabajo? ¿He usado rectamente la creación o he abusado de ella con fines egoístas? ¿He robado? ¿He caído en la estafa o el fraude?. Oración para después de la confesión

Qué grande es tu misericordia, Señor. Tú me has aceptado como tu hijo(a) y me has llenado de tu amor. Te agradezco, Señor, y deseo con la ayuda de tu gracia, amarte cada vez más y no ofenderte jamás a Tí. Jesús bondadoso, concédeme que me mantenga fiel hasta el final. Haz que yo siempre desee y busque lo que a ti te agrada y jamás vaya en contra de lo que quieres. Virgen María Santísima, ayúdame: tú eres la madre de la perseverancia, tú eres la razón de mi esperanza. Intercede por mí: consérvame en la gracia de Dios, feliz y sin pecado, como lo estoy en estos momentos. Ayúdame a cuidar mis sentidos y mi mente, y que mi corazón sea fiel a Dios hasta mi muerte. Amén