Una vida cristiana fuera de serie

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UNA VIDA FUERA DE SERIE Sino como está escrito: cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han entrado al corazón del hombre, son las cosas que Dios ha preparado para los que le aman”. 1 Corintios 2:9 INTRODUCCION La mayoría de los cristianos experimentan vidas insípidas, monótonas y rutinarias. Estos nos puede cansar y hacernos desanimar en nuestra decisión de seguir al Señor. La pregunta es ¿Por qué no experimentamos vidas diferentes, fuera de lo normal? La vida de los apóstoles era emocionante, no solo por el riesgo que a diario corrían predicando la verdad de Cristo, sino porque a través de sus vidas se evidenciaba el poder de Dios en los milagros que hacían, como la sanidad de un cojo de nacimiento, a la vista de los más incrédulos. Hechos 4:14-16. 1. Creer: hace mi vida fuera de serie (Marcos 16:17) Nuestra vida como jóvenes cristianos debe ser sobrenatural cada día, pues los milagros y las señales seguirán a los que creen en Dios y a los que depositan su fe en El. Jamás lo podrán experimentar aquellos que basan su vida en las emociones, en el momento o quienes esperan a ver para creer (la lógica). Milagro no solo es la multiplicación de algún alimento o la sanidad de un enfermo. También se evidencia en la transformación de un ser humano, la sanidad de un corazón herido por las marcas y taras del pasado, la restauración de la relación entre padres a hijos etc. Lejos de experimentar estos milagros, solo le pedimos cosas o pertenencias materiales a Dios: un celular, un computador, una tablet, etc. y si nos los da, pensamos que es un milagro, claro, los que tienen la gratitud de reconocerlo. 2. Lo que Dios ha preparado para mi vida: Los milagros tienen las siguientes características: Son manifiestos: se deben hacer notorios sobre todo ante los que no son conocedores de Cristo para que crean Ej.: El testimonio de obediencia de un joven creyente ante unos padres inconversos. En la época de los apóstoles ante el concilio (grupo de personas con autoridad pero No creyentes de las verdades del mesías), se presento el cojo que había sido sano por Pedro y Pablo. Hechos 4:15-16) Los milagros se hacen a través de los hijos que le creen: Los milagros no aparecen solos, se dan como fruto de un corazón creyente y que ha depositado su confianza en el Señor. Los milagros son notorios: “Hechos 4:16 “, sobresalen, así como el cojo fue sano y lo vieron todos sus conocidos, nuestro milagro debe ser visto por todos nuestros amigos, vecinos y familia. Los milagros son innegables: ante la evidencia, los incrédulos no podrán decir nada. Ningún argumento le será válido. Hechos 4:16….“es evidente a todos los que viven en Jerusalén, y no podemos negarlo”

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UNA VIDA FUERA DE SERIE

“Sino como está escrito: cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han entrado al corazón del hombre, son las

cosas que Dios ha preparado para los que le aman”. 1 Corintios 2:9

INTRODUCCION

La mayoría de los cristianos experimentan vidas insípidas, monótonas y rutinarias. Estos nos puede

cansar y hacernos desanimar en nuestra decisión de seguir al Señor. La pregunta es ¿Por qué no

experimentamos vidas diferentes, fuera de lo normal?

La vida de los apóstoles era emocionante, no solo por el riesgo que a diario corrían predicando la

verdad de Cristo, sino porque a través de sus vidas se evidenciaba el poder de Dios en los milagros

que hacían, como la sanidad de un cojo de nacimiento, a la vista de los más incrédulos. Hechos

4:14-16.

1. Creer: hace mi vida fuera de serie (Marcos 16:17)

Nuestra vida como jóvenes cristianos debe ser sobrenatural cada día, pues los milagros y

las señales seguirán a los que creen en Dios y a los que depositan su fe en El. Jamás lo

podrán experimentar aquellos que basan su vida en las emociones, en el momento o quienes

esperan a ver para creer (la lógica).

Milagro no solo es la multiplicación de algún alimento o la sanidad de un enfermo. También

se evidencia en la transformación de un ser humano, la sanidad de un corazón herido por

las marcas y taras del pasado, la restauración de la relación entre padres a hijos etc. Lejos

de experimentar estos milagros, solo le pedimos cosas o pertenencias materiales a Dios: un

celular, un computador, una tablet, etc. y si nos los da, pensamos que es un milagro, claro,

los que tienen la gratitud de reconocerlo.

2. Lo que Dios ha preparado para mi vida: Los milagros tienen las siguientes características:

Son manifiestos: se deben hacer notorios sobre todo ante los que no son conocedores de

Cristo para que crean Ej.: El testimonio de obediencia de un joven creyente ante unos padres

inconversos.

En la época de los apóstoles ante el concilio (grupo de personas con autoridad pero No

creyentes de las verdades del mesías), se presento el cojo que había sido sano por Pedro y

Pablo. Hechos 4:15-16)

Los milagros se hacen a través de los hijos que le creen: Los milagros no aparecen solos,

se dan como fruto de un corazón creyente y que ha depositado su confianza en el Señor.

Los milagros son notorios: “Hechos 4:16 “, sobresalen, así como el cojo fue sano y lo vieron

todos sus conocidos, nuestro milagro debe ser visto por todos nuestros amigos, vecinos y

familia.

Los milagros son innegables: ante la evidencia, los incrédulos no podrán decir nada. Ningún

argumento le será válido. Hechos 4:16….“es evidente a todos los que viven en Jerusalén, y

no podemos negarlo”

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Satanás, nunca querrá que experimentemos vidas de milagros, el tratara de avergonzarnos,

desanimarnos y manipularnos para que volvamos atrás, pero a pesar de eso no podrá retenernos

ni detenernos porque es más grande el que está por nosotros, que los que están contra nosotros.

Esa debe ser nuestra oración como la fue para los apóstoles hechos 4:29-31.

APLICACIÓN TEOTERAPICA

El hijo que comprende la voluntad de Dios, valora la gracia recibida y experimenta el amor del

padre, es libre para hablar con osadía, sin temer, sin tapujos su palabra, se esfuerza por que

entiende que la vida cristiana es una vida de negarse y esforzarse; entiende que a donde va no

está solo, es representante de Dios aquí en la tierra, y puede experimentar la vida abundante que

el padre ha prometido a los que le creen.

No estamos llamados a dar testimonio de lo que podemos hacer nosotros mismo si no a impactar

los corazones de aquellos que viven en desesperanza y no han podido encontrar el camino de la

libertad.