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TURISMO SOSTENIBLE PARA EL DESARROLLO

CONTENIDO

CRÉDITOS

Sede Maquita: Av. Rumichaca S26-365 y Moro Moro (esq.) Teléfonos: (5932) 2670925/26/27Quito - Ecuador

Carta:“Y Dios entregó al hombre y a la mujer el jardín del Edén”............................3

Turismo Responsable frente a la Sostenibilidad……………...........................4

Cotopaxi:Circuito Turístico Comunitario Quilotoa – Chugchilán....................................6

Chimborazo:Turismo comunitario: ¡Oportunidad de desarrollo sostenible y solidario!.......8

Tema Central:Maquita: Por un Turismo de acercamiento entre los pueblos.....................10

Manabí:Ruta del Cacao impulsa Emprendimientos Productivos y Turísticos.........12

Napo:Red de Turismo dinamiza economías locales...............................................14

Invitado:Turismo comunitario en Ecuador, sostenibilidad y buen vivir.......................16

NotiMaquicuna.............................................................................................18

CONSEJO EDITORIALPadre Graziano MasonMaría Jesús PérezWilliam Villanueva

COORDINACIÓN EDITORIALIvette Pullas L.

TEXTOSÁrea SocialEmpresas Sociales

FOTOGRAFÍAEquipo TerritorialBanco Imágenes Maquita

DISEÑO YDIAGRAMACIÓNNataly Yerovi

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s así, amigas y amigos, como empezó la humani-dad. Y todo, absolutamente todo, es un hermo-sísimo regalo de Él. Vayan y conozcan la belleza

de nuestros montes ecuatorianos del Chimborazo al Cotopaxi, del Cayambe al Antisana y cuantos más…

Gocen de tanta e insuperable fortaleza y al mismo tiempo de tanta paz que nos entra en el corazón. Claro está que hay que luchar para llegar hasta la cumbre. Pero créanmelo, sin esfuerzo nada se puede saborear de las maravillas que nos ofrece la vida.

Cuando Dios hizo el Edén pensó en América, como dice el gran cantante Nino Bravo. Cuanta verdad hermosa hay en esta canción: nuestra América encantadora y nuestro único Ecuador.

Vengan y vean. Disfruten con nuestros campesinos la enorme variedad de frutas y verduras, y cuantas mara-villas más. Ecuador es una auténtica belleza, conozcan nuestras impresionantes playas. Son muy variadas y para todos los gustos y no tengan recelo de las olas: déjense mimar por ellas. Sentirán el gusto y la alegría de vivir, de amar y de gozar. La vida es bella, es para nosotros todos.

E ¡Y la Amazonía, con su exuberante flora y fauna, que estupenda es! Hay que conocerla de cerca para verda-deramente amarla.

¿Y Galápagos? Se me desvanecen de emoción las pa-labras: vengan y ustedes se darán cuenta del encanto que tienen nuestras islas.

Conozcan y admiren también amigas y amigos del con-tinente y del mundo entero, junto con nuestras her-manas y hermanos ecuatorianos... Y ciertamente vol-verán… porque lo bello y lo lindo se aprecia con cariño, con mirada llena de agradecimiento.

Gracias, muchas gracias amigo y compañero Jesús: no somos dignos de toda la hermosura que tus manos nos han regalado.

El turismo sostenible, presentado por nuestra Maquita Turismo, nos invita a conocerlo, disfrutarlo y cuidarlo.

Adelante compañeras y compañeros. ¡Con la alegría y el compromiso de nuestro amigo Jesús, vamos todas y todos para hacer cada día mejor nuestro Ecuador!

CARTA

“Y Dios entregó al hombre y a la mujer el jardín del Edén…”

Génesis 2.15

Con el cariño de siempre,Padre Graziano

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l concepto de turismo sostenible, ha sido conce-bido por muchos países, gremios y organizaciones como la panacea frente al denominado “turismo

depredador o de masas”. Ecuador no ha sido la excep-ción, pues es muy común el uso de esta palabra entre profesionales, académicos, planificadores, comunida-des campesinas, ONGs, GADS, etc.; bajo esta perspecti-va surgen las siguientes interrogantes: ¿Se puede hablar realmente de turismo sostenible en el país?, ¿Entienden realmente los distintos actores de la industria esta con-cepción del turismo?, ¿Son realmente medibles los dis-tintos indicadores y elementos planteados a lo largo del tiempo?

Existirían muchas respuestas dependiendo de su procedencia, puede ser que la palabra sostenibili-dad dejó de ser un tema mediático y que realmente se acentúo en la cotidianidad de todos. En efecto, estas reflexiones vuelven a replantearse con la Declaratoria del Año Internacional del Turismo Responsable para el Desarrollo por parte de las Naciones Unidas en 2017. Sin embargo, para los distintos actores que es-tamos comprometidos con el desarrollo turístico, que creemos y apostamos por un turismo más justo, soli-dario, equitativo, incluyente y responsable esta palabra debería ser nuestra bandera de lucha.

En la actualidad, este tema es debatido tanto en grandes eventos a nivel internacional como en peque-ños territorios rurales, tal es el caso de las comunidades campesinas e indígenas que han optado por trabajar de forma conjunta para acoger y hacer del turismo, un ca-talizador de cambio positivo y de esta forma contribuir a mitigar la pobreza e impulsar el desarrollo inclusivo.

En Ecuador, afirmar que el turismo comunitario es sostenible, suena bien en su ámbito discursivo. Sin embargo, se evidencia aún una marcada diferencia en-tre la realidad y lo que encierra su significado, es decir se está buscando aún el denominado “equilibrio”, para esto no hace falta únicamente la voluntad de ciertos gestores, pues existen factores que dependen de otros, es decir de la articulación de otros actores, sean estos:

púbicos, privados, comunitarios, familiares, etc., pues no existe ni existirá un correcto desarrollo sino se esta-blece un verdadero modelo de gestión integrador que se ajuste a la realidad del país, de las distintas organiza-ciones, comunidades y sobre todo del mercado.

Como Maquita, venimos trabajando más de tres décadas en el Ecuador y hace casi 20 años con nuestra empresa social Maquita Turismo, en el desarrollo de un turismo responsable. En este contexto, hablar de sostenibilidad sigue siendo un desafío; la incidencia di-recta en los gestores y la experiencia, han dado lugar a la aparición de interesantes emprendimientos turísti-cos comunitarios, que se encuentran anclados a la ca-dena de valor formal del turismo, algunos han logrado un importante posicionamiento, ya sea esto por iniciati-va propia o con nuestro apoyo; otros están en proceso de madurez empresarial, lo cual no implica que se haya alcanzado aún su sostenibilidad. Ya que esto es la suma de un trabajo y esfuerzo constante multidisciplinario, donde cada uno de los actores debería tomar en cuen-ta que el turismo comunitario en el país necesita de la tecnificación y profesionalización, desde su planifica-ción, y es tarea de todos contribuir a que esto sea una realidad.

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Por: William VillanuevaGerencia Maquita Turismo

Turismo Respon

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El sector público, desde sus competencias legis-lativas y regulatorias deben dar más atención y énfasis a estos emprendimientos, pues existen vacíos y en varios casos trabas por la falta de definiciones legales de esta modalidad del turismo. Se debe tomar en cuenta que en muchas ocasiones las iniciativas comunitarias han tomado un papel protagónico para el desarrollo local, supliendo en algunas ocasiones la ausencia de inversión estatal, en el tema de obra pública y servicios básicos.

Las ONG´s aportan desde su ámbito, creyendo y apostando en un turismo diferente, administrado des-de las bases sociales, las comunidades.

Es imprescindible, la contribución de la empre-sa privada, especialmente para la comercialización, son quienes deben empezar a ver al turismo comunitario como una oferta interesante, que permite obtener ven-tajas competitivas en el producto, pues no hay otra mo-dalidad donde la temática de naturaleza y cultura sea tan auténtico, esto llama a la responsabilidad social que en el turismo suena mucho, pero pocos lo practican.

La Academia también debe aportar con su co-nocimiento, puesto que la capacitación y desarrollo de

capacidades para las comunidades es fundamental. Debe ser obligación de las comunidades que cuentan con emprendimientos turísticos garantizar la calidad de sus servicios y operación, y esto solo se lograría con una capacitación constante, ya que ningún socio estra-tégico mantendrá relaciones recíprocas sino existe la voluntad y la plena confianza en la calidad que ofrece la operación comunitaria.

Como Maquita Turismo, sumamos esfuerzos a una minga conjunta de todos los actores para lograr este desarrollo, no es un tarea fácil, pero si muy grati-ficante; nuestro compromiso es seguir en la búsqueda de nuevas y mejores oportunidades comerciales, con la apertura de mercados, canales eficientes, mejoramien-to continuo, utilización y optimización tecnológica, ca-pacitación y asistencia técnica, planificación estratégica y sobre todo la convicción de lograr incidir en el cambio positivo de las comunidades y organizaciones que ven en la actividad turística una razón de seguir soñando por un desarrollo local más justo y solidario, un desa-rrollo acentuado en su realidad, espontaneidad y forma de vida.

En este año y en honor a la Declaratoria del Año Internacional del Turismo Sostenible, nuestra invitación es a seguir apostando y creyendo en que un turismo diferente es posible.

sable frente a la Sostenibilidad

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ace 10 años durante mis estudios universitarios, un profesor de cátedra nos comentó sobre la exis-tencia de una laguna ubicada cerca de Zumbahua

en Cotopaxi, de la cual pocos conocían, pero que valía la pena visitarla, es así que con un grupo de amigos em-prendimos el viaje hacia ese lugar y cuando llegamos, observamos pocas cabañas, algunos turistas, caminos polvorientos y puestos improvisados de artesanías. Ca-minamos hacia el cráter de la laguna, y recuerdo aún la emoción que sentí aquel día al ver la majestuosidad de sus aguas cristalinas, la belleza de su paisaje, un sitio mágico y maravilloso que sorprende a sus visitantes y hace que su gente se sienta orgullosa de pertenecer a este lugar.

Hoy, tengo el lujo de trabajar en el Quilotoa y de ser parte de esta transformación, puesto que con el acompañamiento de organizaciones amigas como es Maquita y otras instituciones del Estado, la Organi-zación Comunitaria Lago Verde Quilotoa y la Comuna Ponce Quilotoa, hemos caminado y trabajado en una

apuesta desafiante de hacer turismo, como una alterna-tiva que ofrece oportunidades de trabajo para su gente, y que es responsable de las acciones que realiza.

Como comenta Segundo Latacunga, Presidente de la Comuna Ponce Quilotoa, “…anteriormente vivía-mos de la agricultura, pero nuestros terrenos son areno-sos y pobres, por lo que los frutos no eran los mejores, siempre contemplábamos a la laguna del Quilotoa y al ver que turistas se acercaban a conocerla, pensamos que si nos organizamos podríamos desarrollar el turis-mo, es así que iniciamos con 15 personas y ahora somos 280 familias quienes conformamos la organización co-munitaria, sabemos que tenemos un tesoro, y estamos conscientes que debemos cuidar y preservar la laguna y su entorno; porque ahora el turismo nos da de comer, de vestir, nos permite educar a nuestros hijos, y ha evitado la migración ya que los jóvenes ahora regresan a este lugar; por todo esto me siento agradecido con Dios”.

Actualmente, la organización comunitaria cuen-ta con el Restaurante Kirutwa y el Hostal Princesa Toa, instalaciones que se encuentran junto al cráter del volcán Quilotoa, ofreciendo una maravillosa vista de la laguna y

COTOPAXI

Circuito Turístico Comunit ario Quilotoa – Chugchilán

Por: Gabriela GaiborCoord. General Convenio Manos Unidas - Maquita

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de la Reserva Ecológica de los Ilinizas que de acuerdo a los registros del Ministerio de Ambiente del Ecuador, en el año 2016 ingresaron en promedio 100.000 turistas. En realidad, este crecimiento ha sido significativo si lo com-paramos con años anteriores, así como el incremento de iniciativas familiares que han ampliado y diversificado la oferta turística para prestar servicios de alimentación, hospedaje, guianza, kayak, paseos a caballo, bicicletas y transporte; y ser proveedores de bienes como: materia prima para la elaboración de los menús y artesanías que expresan su cultura y valor ancestral.

Isabel Pastuña, de 31 años, socia de la organi-zación comunitaria Lago Verde Quilotoa, entre sonrisas nos dice “…la naturaleza ha sido generosa con nosotros y con nuestros vecinos, ya que a más de la laguna del Quilotoa, el paisaje natural invita a realizar un recorrido alrededor de este atractivo o descender por el cañón del Río Toachi…”, efectivamente, a este recorrido se le co-noce como el Circuito Turístico Comunitario Quilotoa– Chugchilán, que involucra a un centenar de familias que han mejorado sus condiciones de vida a partir del turis-mo comunitario y en el cual, se puede visitar otras ini-ciativas, como es el Shalalá Lodge, un emprendimiento

que ofrece los servicios de alimentación y hospedaje, en medio de la tranquilidad de un bosque y con un vistazo a la laguna desde el Mirador de Vidrio, una obra arquitec-tónica creada por el Ministerio de Turismo y premiada por su diseño innovador.

Si continuamos con la ruta, se puede disfrutar de otros atractivos, como es el mirador de Makakunka, el mirador de Las Golondrinas y la cascada de Las Gua-yamas en Guayama Grande, el mirador de Cochapata en Guayama San Pedro, el Centro Artesanal Don Bos-co en Chasualó, el mirador al cañón del Río Toachi en Chinaló Bajo y la Planta de Transformación de Chochos en Chugchilán, ésta última, combina perfectamente el agroturismo, ofreciendo a quienes la visitan, una expe-riencia demostrativa desde el ciclo productivo del cho-cho, su procesamiento con altos estándares de calidad y finalmente su degustación.

Este circuito es ideal para quienes gustan reali-zar actividades como el senderismo, ciclismo y cabalga-ta, en cuyo recorrido, podrán admirar y deleitarse con la belleza del paisaje, degustar de comida típica y compar-tir la cultura, alegría y calidez de su gente.

COTOPAXI

Circuito Turístico Comunit ario Quilotoa – Chugchilán

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n la provincia de Chimborazo el Turismo comuni-tario, asume una nueva concepción de desarrollo territorial que fomenta las relaciones de recipro-

cidad y respeto, participación y democracia en la toma de decisiones, y la redistribución de los excedentes para generar oportunidades de desarrollo de toda la comunidad.

Un ejemplo de esta propuesta es el Emprendi-miento de Turismo Comunitario de la comuna Tolte, ubicada en el cantón Alausí, que inició sus actividades hace 7 años con una concepción de desarrollo sosteni-ble, equitativo y solidario.

Un recuento de ello, lo hace la Administradora de esta iniciativa, Miryan Chogllo, “Gracias al apoyo de algunas organizaciones amigas como Maquita po-demos trabajar en nuestra propia comuna y no migrar a las ciudades porque podemos cumplir nuestro sueño

compartir nuestra cultura, costumbres, tradiciones y saberes, aprovechando la belleza natural, cultural y pa-trimonial porque nuestra comuna se encuentra frente a la majestuosa montaña Nariz del Diablo.

Durante estos años logramos el apoyo para la construcción de la Cafetería Restaurante Mirador Nariz del Diablo, apertura de sendero con escalinata, readecuación de caminos vecinales, implementación de granjas integrales. Varias personas de la organiza-ción, en especial mujeres y jóvenes, ofrecen a los tu-ristas actividades de ciclismo, cabalgata y guianza, con las cuales incrementan los ingresos económicos para el bienestar de las familias y apoyo a toda la comuna.

El trabajo coordinado con Maquita me ha moti-vado para desempeñar mi rol como administradora de manera transparente, honesta y responsable; es una de las mejores experiencias que he vivido, y anhelo que cada vez nuestro Emprendimiento sea reconocido y va-lorado como un ejemplo de constancia a nivel cantonal

CHIMBORAZO

Turismo comunitario: !Oportunidad

Por: Aida MoinaCoordinación Social Chimborazo

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y provincial, para que más organizaciones se sumen para mejorar.”

Por su parte, Rosa Sauce, joven campesina, y lideresa de la organización comunitaria, cuenta que las mujeres han sido el pilar fundamental para impulsar el turismo comunitario como alternativa de desarrollo para su localidad, “…Tuvimos un gran sueño, una gran esperanza que nuestras vidas mejorarían, aunque era difícil no desmayamos, continuamos unidas en la co-muna. Hoy después de algunos años en coordinación con los Gobiernos Locales y otras organizaciones tanto públicas como privadas, podemos ver algunos frutos...Nos sentimos orgullosas de que las personas jóvenes de nuestra comuna estemos brindando una atención de calidad a quienes llegan y disfrutan de todos los atrac-tivos naturales y turísticos. Es una gran alegría porque gracias al turismo comunitario mantengo a mis hijas”.

Para Vicente Paguay, que conjuntamente con su esposa elaboran artesanías mediante el impulso de

esta iniciativa también se han visto beneficiados al igual que varios artesanos porque pueden vender a los turis-tas sus artesanías elaboradas en madera.

Esta experiencia es un claro ejemplo de com-batir lo que llama el Papa Francisco “Economía de la exclusión y la inequidad”. Y está alineado a la perse-verancia en la planificación, seguimiento y evaluación periódica del trabajo, constituyéndose en la dinámica constante para impulsar el desarrollo integral de la co-muna mediante la generación de empleo e ingresos económicos para las familias, con una justa distribución de ingresos y la conservación de la riqueza cultural y ambiental.

Todo esto implica soñar, pero también vivirlo, y ¿Cómo hacerlo?, como Maquita continúa nuestro com-promiso, para impulsar ideas, sueños, entusiasmo y vi-sión de cambio a favor de las familias con la cuales tene-mos el privilegio de trabajar, con una política de servicio por una sociedad más justa, equitativa y solidaria.

CHIMBORAZO

de desarrollo sostenible y solidario!

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uando pronunciamos la palabra turismo, en nuestro escenario mental nos vienen sensaciones de des-canso, conocimiento, diversión, tranquilidad,… pero si además le añadimos calificativos como: sostenible, vivencial, consciente, responsable, etc.… le da una connotación humanista y de relacionamiento que incide

positivamente al bienestar.

… Ese tipo de experiencias orientadas a la recuperación de las personas y vivencias satisfactorias, son las que ofre-ce la Operadora de Turismo Maquita, porque nuestra concepción del turismo considera la persona en su relación con los pueblos y su cultura, también favorece la admiración, gratitud y respeto por las maravillas de la “madre naturaleza”, que el Creador nos ha regalado en su infinita generosidad.

Fue en marzo de 1998 cuando, -después de dos años de operar con grupos de cooperación de forma satisfacto-ria-, consideramos importante tener la legalidad para ofrecer todas las garantías de seguridad necesarias por el bienestar de los visitantes.

TEMA CENTRAL

Maquita: Por un Turismo de

Tenemos como identidad proporcionar a los visitantes una oportunidad de descanso y disfrute armónico con la integración de todos los elementos para que las per-sonas tengan experiencias inolvidables.

Como no podía ser de otra forma, nuestra querida Ope-radora de Turismo Maquita nace con los principios del turismo de Economía Social y Solidaria que nos orientan en el relacionamiento con las personas receptoras y vi-sitantes.

Los valores éticos, sociales, culturales y de respeto a la madre naturaleza hace que el turismo se convierta en una experiencia “nutriente-transformadora” del ser hu-mano en su integralidad: en lo físico, emocional, afecti-vo y espiritualidad.

Por: María Jesús PérezDirección Ejecutiva

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Han sido muchas las experiencias compartidas a lo largo de más de 20 años, así como también los aprendizajes adquiridos en este acercamiento entre personas. …Y haciendo síntesis de la historia, vamos a definir algunas con-sideraciones fundamentales para hacer un turismo de acercamiento vivencial.

TEMA CENTRAL

acercamiento entre los pueblos

Identidad y vivencia de la propia cultura, porque la diferencia es concebida como riqueza y el compartirla es un don que se da y se recibe.

Cuidado y protección del hábitat como medio de vida saludable para las personas y todo el ecosistema. En atención y reverencia a la vida.

Respeto y valoración de la cultura en las diferentes expresiones y formas de vida, con autenticidad, sin exhibicionismos, ni folclor.

Ambientes y alimentación saludables para el cuidado y descanso del cuerpo. Conocer los gustos y prefe-rencias de las personas forma parte del “bien sentirse”.

Relaciones de iguales, porque nos centramos en el valor que todas las personas tenemos, independiente de nuestro país de procedencia, profesión o nivel adquisitivo.

Acercamiento entre los pueblos, en donde prima el compartir y las experiencias de vida, en un enriqueci-miento mutuo y solidario.

Podríamos seguir identificando otras dimensiones, pero más bien la invitación es a que podamos ir descubriendo una manera diferente de disfrutar los tiempos de vacaciones, para la salud, los afectos familiares y de amistad, para el conocer y enriquecernos por el acercamiento a otros pueblos y culturas, disfrutando de los lugares visita-dos y acontecimientos vividos con intensidad, sin la presión de una agenda a cumplir. Al final podríamos concluir diciendo que con el turismo sostenible, consciente y transformador de la vida, quere-mos aportar a la felicidad de las personas, a los valores de la vida y también favorecer el conocimiento y encuen-tro con las maravillas del planeta para agradecer, disfrutar y protegerle.

Le apostamos a un turismo para el corazón, para los valores, para LA VIDA.

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romover circuitos de Economía Social y Soli-daria, con base en las cadenas productivas y de valor, para la promoción del desarrollo in-

tegral en los territorios, es uno de los enfoques de Maquita. En este sentido, en la provincia de Manabí específicamente en la zona de la Represa de Poza Honda, se viene trabajando con las organizaciones comunitarias quienes han impulsado iniciativas productivas económicas solidarias.

Uno de estos emprendimientos es el Centro Turístico Comunitario Quinkingua en la comuni-dad La Laguna, Parroquia Honorato Vásquez, can-tón Santa Ana; su administrador, Kevín Cedeño, manifiesta que “El Centro Turístico desde su inau-guración en el año 2008, ofrece a los turistas: hos-pedaje, alimentación, recorrido por senderos con

guías de la zona, paseos en bote por la represa de Poza Honda, visita al río Pata de Pájaro y su cas-cada. Otro atractivo es la noche cultural donde se presenta un grupo de danza, cantos con guitarra, amorfinos y la degustación del chocolate artesanal elaborado por las socias de la organización demos-trando así nuestra cultura local. Estas actividades han permitido que las familias socias y de la comu-nidad podamos dinamizar nuestra economía”.

Adicionalmente este proceso de desarrollo, es un potencial en recursos naturales de flora y de fauna que hacen que la ruta del cacao, que impul-sa el turismo comunitario local, esté relacionada a las actividades culturales de las fincas de las pro-ductoras y productores de la Asociación de Turismo Comunitario La Laguna, permitiendo que el turista se sienta en familia y viva la experiencia más grata y encantadora de conocer el cultivo de cacao en to-das sus etapas.

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MANABÍ

Ruta del Cacao impulsa Emprendi

Por: Aly HernándezCoordinación Agrícola Manabí

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Emigdio García, productor de esta comuni-dad cuenta que su finca agroecológica ha sido vi-sitada por turistas nacionales y extranjeros, a los cuales les muestra orgulloso sus cultivos de cacao, banano, plátano y una variedad de frutas que le ayudan para la autosubsistencia alimentaria de su familia. Además, manifiesta que este proceso lide-rado por Maquita ha hecho que tanto él como sus vecinos tengan consciencia de la importancia de la conservación del entorno natural.

Sumando a esta vivencia de desarrollo local en turismo comunitario; se destaca el emprendi-miento de la Planta Procesadora de Jugos de na-ranja de la Asociación Agroindustrial La Solida-ridad de Poza Honda en el sitio Las Mercedes 1, iniciativa llevada por un grupo de mujeres de la lo-calidad. Para Jenny Cedeño García, integrante de este grupo “el trabajo en conjunto ha permitido sa-car adelante esta planta y por las gestiones que he-

mos realizado esperamos a futuro el apoyo ofrecido por los gobiernos locales para adquirir nuevos equi-pos que nos permitirán obtener el concentrado de naranja y así ampliar la oferta de productos”. Este emprendimiento permite además que las familias productoras de naranja de la zona tengan donde vender su producción a precio justo y sin interme-diarios. El compromiso de las familias organizadas de Poza Honda, la generación de capacidades para la sostenibilidad de sus emprendimientos y los pro-cesos de desarrollo local, la creación de oportuni-dades de trabajo y mejoramiento de ingresos, han mejorado la calidad de vida de sus familias, y han contribuido en procesos de concienciación y sensi-bilización a la sociedad sobre un concepto más inte-gral de los emprendimientos comunitarios porque son el resultado de un trabajo en equipo, de una economía solidaria.

MANABÍ

mientos Productivos y Turísticos

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ara las comunidades de la provincia de Napo, el turismo comunitario brinda la esperanza de una mejor calidad de vida, mediante la conservación

de los recursos naturales y la revalorización de su cul-tura; por lo que hace varios años emprendieron inicia-tivas turísticas, convirtiéndose hoy en un referente de desarrollo sostenible.

Un ejemplo es el Centro de Turismo de la co-munidad de Shandia, en la parroquia Tálag, que los ha beneficiado económica y socialmente, permitiendo que el pueblo se desarrolle. Como anfitriones, el servi-cio que ofrecen está marcado por la esencia del amor, perseverancia, constancia y alegría.

Mariano Andi, dirigente de la comunidad y miembro del comité manifiesta: “Desde que hacemos turismo comunitario, la comunidad se ha ido superan-do, nuestros hijos son profesionales y las familias de los

nuevos jóvenes ya no solo quieren que sean bachilleres sino ingenieros, licenciados, abogados…”. Desde el año pasado Shandia es parte de la Red de Turismo Comu-nitario en Napo, para junto a otros emprendimientos alcanzar un fortalecimiento del turismo comunitario en la provincia junto a la producción de productos locales, como la gastronomía, deportes de aventura, artesanías, entre otros.

Este logro se ha conseguido con la ayuda de toda la comunidad, que se ha capacitado para esta la-bor, porque cuando hay demanda de turistas, cada uno de sus miembros participa ya sea en el área de coci-na, arreglo de habitaciones, atención al cliente o como guías. Todo el equipo se reúne para organizar las activi-dades a realizar durante el día y al final de la jornada se hace una evaluación; esta retroalimentación ayuda al equipo de trabajo, ya que es rotativo.

Muchos productos con los que se preparan los alimentos son entregados por los productores de la co-munidad que tienen sus chacras de plátano, yuca, pal-

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NAPO

Red de Turismo dinam iza economías locales

Por: Fátima Cruz CordonesGestoría Territorial Amazonía

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mito, limón, hoja de bijao, etc. Isaac Cerda, socio de la comunidad manifiesta que “El turismo ha sido un bene-ficio para la comunidad donde participan todas nues-tras familias, cuando vienen los turistas hay muchas actividades; entre ellas están las visitas a las chacras nativas y a las familias: ruku yayas y ruku mamas; la degustación de la chicha de yuca y del chocolate, y eso es un ingreso para nosotros y para las demás comuni-dades ya que los turistas también recorren la Laguna Azul, Misahualli, Archidona y Ahuano”.

La comunidad se ha preparado para ofrecer danza y música a quienes los visitan. Estos grupos son conformados por jóvenes hombres y mujeres de la co-munidad que permanentemente se reúnen para afinar detalles de cada presentación; también está el Ritual de Shamanismo, donde se invita a una persona mayor con conocimientos ancestrales, para que realice esta actividad que atrae a los turistas.

Las mujeres artesanas de la comunidad expo-nen las artesanías que ellas elaboran en diferentes di-

seños y con materiales propios de la zona. Rebeca Andi Calapucha, que pertenece a esta agrupación comenta “El turismo se ha convertido en una gran oportunidad para crecer. Cuando vienen los turistas, la administra-ción de las cabañas nos comunican y enseguida noso-tras nos organizamos para la venta de nuestras artesa-nías, que nos sirven para sustentar nuestra economía”.

Si bien este trabajo está articulado a nivel inter-no, esta actividad turística los vincula con las tiendas del mercado local, que proveen productos que no se tie-nen en la comunidad; con las cooperativas de taxis que facilitan la movilización de turistas y visitantes desde la ciudad hasta las cabañas y con el servicio de Rafting con quienes se mantiene una constante coordinación.

Por último, esta forma de hacer turismo brin-da beneficios para minimizar los impactos negativos y contribuir a que los miembros de las comunidades se involucren en la protección de su patrimonio cultural y natural, además de sacar provecho de forma directa de la actividad turística que se genera.

Red de Turismo dinam iza economías localesNAPO

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l concepto del turismo comunitario en Ecuador está aún en construcción, la ventaja que se ha encontrado es que existe ya un conglomerado de

cientistas sociales que están estudiándolo. Sin embar-go, no se han fortalecido redes de conocimiento entre éstos que permitan construir un marco teórico robusto y validado para la diversidad de emprendimientos. ¿Cabría la pena reconocer entonces que esta-mos ante un fenómeno que aún no ha definido sus al-cances? ¿Más aún ahora que el mundo entero ha vol-teado sus expectativas de desarrollo sostenible en lo local? La situación actual de los centros de turismo comunitario (CTC) en el país es crítica, sin una red de

apoyo ágil, precisa y constante, las comunidades de-penden mucho de un mercado turístico que las desco-noce, ya que están invisibilizadas en la oferta turística del país. Sin embargo, su presencia es innegable, pues hay evidencia de iniciativas asociativas comunitarias en la mayoría de provincias del país. La falta de un proceso de fortalecimiento gremial, sumado a un plan de desa-rrollo turístico (PLANDETUR 2020) que no tuvo ejecu-ción, fueron -entre otras- las causales de que estos em-prendimientos no hayan logrado plena sostenibilidad.

Hay que quitar el estereotipo creado sobre el turismo comunitario como un servicio o una tipología, puesto que es un modelo de gestión territorial que pretende llegar a su plena sostenibilidad. Bajo este as-pecto no debería crearse normativa especial para los alojamientos, lugares de comidas y bebidas o guías comunitarios, sino que se debería aplicar normativa similar a todos los servicios de este tipo en el país y reconocer como acción afirmativa al hecho de que es

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INVITADO

Turismo comunitario en Ecuad or, sostenibilidad y buen vivir

Por: Enrique CabanillaDocente titular de la Universidad Central del Ecuador

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una empresa social solidaria la que maneja el empren-dimiento, en claro beneficio de toda la comunidad y en contraste con la iniciativa privada.

Es necesario e imprescindible que las comuni-dades que opten por este modelo de gestión, tengan un proceso de consulta previa en el cual se expliquen los pormenores de la inversión necesaria, la operativi-dad y los impactos que van a tener a causa del turismo. Esta fase se ha cumplido en algunos CTC, aquellos que además han perdurado en el tiempo, pues reconocen al turismo como un proceso con diversas etapas y dife-rente complejidad, mientras crece en servicios oferta-dos o en tamaño.

Los trámites burocráticos se deberían simplifi-car en tres aspectos, uno de ellos es la presentación del aval de la comunidad como garantía de auspicio al funcionamiento del CTC. Lo importante de este primer paso es reconocer que en territorio no hay una sola

forma de asociatividad como la comuna, pues en otros lugares funcionan perfectamente corporaciones civiles, cooperativas u otro tipo de asociación.

En segundo término, en orden de ser recono-cido como comunitario, el CTC debería presentar un plan de trabajo anual, en el cual se establezcan clara-mente los objetivos de desarrollo sostenible que auspi-ciará el emprendimiento. Finalmente, para renovar su estado de empresa social y solidaria, todo CTC debería presentar un informe de rendición de cuentas, en el cual se presenten resultados verificables sobre su im-pacto en el buen vivir de la comunidad.

El buen vivir debería concebirse como el marco sobre el cual se debe medir el desarrollo local, un es-cenario territorial donde la sostenibilidad no es el fin, sino una herramienta que permite diseñar las políticas, estrategias y acciones que apuntalen el bienestar de los pobladores y de su territorio.

Turismo comunitario en Ecuad or, sostenibilidad y buen vivirINVITADO

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En el mes de julio, Maquita en alianza con la Funda-ción Instituto de Agricultura Ecológica del Instituto Canario de Investigaciones Agrícolas (ICIA), realiza-ron en Riobamaba, con el apoyo de la Escuela Poli-técnica del Chimborazo y en Los Ríos, con la Uni-versidad Estatal de Quevedo eventos académicos sobre las Alternativas de diseño y mantenimiento de los sistemas agroecológicos Sostenibles.

En estos espacios la Dra. Ma. Carmen Jaizme y el Dr. José Luis Porcuna de la Fundación ICIA presen-taron sus ponencias, que contaron con una masiva participación de autoridades locales, estudiantes, medios de comunicación y público en general.

Nuestras empresas sociales participaron el 6 y 7 de junio, en la VI edición de la Macrorrueda organizada por Pro Ecuador, con compradores de 34 países obte-niendo resultados positivos, es así que Maquita Agro concretó un nuevo cliente holandés. Maquita Pro-ductos hizo efectivas alianzas con Chile. Y Maquita Turismo estableció contacto con agencias de China, España, Chile y Alemania.

Firmamos con el GAD Municipal de Riobam-ba un Convenio de Cooperación Interinstitucio-nal para desarrollar actividades conjuntas de promoción de la economía social y solidaria.

También establecimos un Convenio Macro de Cooperación mutua con la Fundación ICIA para fortalecer procesos de investigación.

El GAD del cantón Riobam-ba entregó a nuestros líderes: Padre Graziano Mason, Pre-sidente, y María Jesús Pérez, Directora Ejecutiva, un reco-nocimiento como actores de Comercio Justo.

JORNADAS ACADÉMICAS SOBRE INVESTIGACIÓN AGROECOLÓGICA

EMPRESAS SOCIALES MAQUITA PARTICIPAN EN MACRORUEDA DE NEGOCIOS 2017

ALIANZAS INTERINSTITUCIONALES RECONOCIMIENTOS

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34 jóvenes, hombres y mujeres de las comunida-des indígenas Kichwas del Napo participaron de un intercambio de experiencias sobre el uso de tecnologías en el manejo del cultivo de cacao para mejorar su productividad, en el Centro de Tecno-logía Maquita ubicado en Buena Fe - Los Ríos.

INTERCAMBIO DE EXPERIENCIAS

Comunidades productoras de quinua de: Achullay, Convalecencia, Sanancahuan Grande y San Francis-co de Cunuhuachay recibieron equipos (motocul-tores) financiados por AECID, Manos Unidas y Ma-quita. El uso de esta tecnología reduce los costos de producción, mejora los sistemas productivos e incrementa la productividad.

ENTREGA DE EQUIPOS AGRÍCOLAS

Las asociaciones Flor de Caña y Nueva Esperan-za de Mulalillo dieron a conocer sus productos en la II Feria Cotopaxi Vive 2017.

Por su parte, los emprendimientos de mujeres de San Plácido, participaron en la Feria productiva, turística y gastronómica organizada por el GAD de Manabí con productos elaborados a base de cacao nacional Fino de Aroma.

Las mujeres de la Aso. Aromas del Cayambe parti-ciparon en las ferias de Economía Social y Solida-ria promovidas por los programas de promoción de la producción del GAD Municipal de Cayam-be, GAD Parroquial de Cangagua y MAGAP.

PRODUCTOS DE ASOCIACIONES SE EXHIBENEN FERIAS LOCALES

Como resultado de los procesos de formación en participación ciudadana promovidos por Ma-quita, las dirigencias de las comunidades de los cantones Eloy Alfaro y Río Verde intervienieron activamente en las Asambleas ciudadanas de Rendición de Cuentas de sus Gobiernos locales, convirtiéndose en veedores ciudadanos.

Con el fin de lograr un aprovechamiento ópti-mo del recurso agua tanto para consumo como para producción, en varias zonas del cantón Eloy Alfaro se implementan diversas tecnolo-gías como los sistemas de riego parcelarios.

ESPACIOS DE PARTICIPACIÓN CIUDADANA

IMPLEMENTACIÓN DE SISTEMAS DE RIEGO