Asociación de la Medalla Milagrosa OTOÑO 2014

Del Director Espiritual

BOLETÍN LUZ DE ESPERANZA

Virgen de la Medalla Milagrosa, escucha nuestra oración.

Estimado miembro de la Asociación:

Ya estamos en los últimos meses del año, y con ellos llega una época de alegría y celebración. Pronto estaremos celebrando el Día de Acción de Gracias, después el Adviento, la Solemnidad de Nuestra Señora de Guadalupe y finalmente la Navidad y el Año Nuevo.

El final del año es sin duda un tiempo de celebración y conmemoración que nos invita a hacer memoria de todo lo bueno que hemos recibido. A la vez nos invita a abrir nuestro corazón a las nuevas experiencias espirituales que Dios nos tiene preparadas por medio de nuestros encuentros familiares, con otras personas y con el mismo Dios.

Para nosotros en la Asociación de la Medalla Milagrosa es un privilegio compartir con usted estos momentos espirituales tan importantes para nuestra fe. El fin del año también está teñido de grandes cel-ebraciones en honor a Nuestra Señora, la Madre de Dios, y en este número de nuestro boletín Luz de Esperanza, hemos incluido una reseña especial sobre el mensaje que Nuestra Señora comunica a santa Catalina Labouré y al mundo por medio de la Medalla Milagrosa.

Además le invito a que si aún no tiene su propia Medalla Milagrosa, obtenga una llamando a nues-tra oficina. Nuestra Señora dijo: “Quienes lleven puesta mi medalla recibirán grandes gracias, es-pecialmente si la llevan alrededor del cuello”. La Medalla fue el instrumento que la Virgen eligió para transmitir su mensaje de esperanza, por eso la

Estimado Padre:En una ocasión escribí a la Asociación pidiendo que oraran por mi

hermana que estaba sufriendo de cáncer de los huesos y le habían dado menos de un año de vida. Ya han sido 24 años desde que Nuestra Señora intercedió por nosotros ante su Hijo y la curó. Esta carta es un testimonio de acción de gracias a Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa por el milagro que hizo en la vida de mi hermana.

-L.J., NJ

Estimado padre:Hace un año me hice unos exámenes de rutina donde me encontraron

cáncer. Fue algo que jamás me imaginé. Yo me refugié en Dios para que me ayudara a lidiar con esto, pues no quería decirle a nadie. El próximo mes se casaba mi hijo y no quería entristecerlo. Me quedé callada, me hice todos los exámenes y firmé un documento donde me aclaraban que podía fallecer. Yo había pedido mucha oración a la Asociación de la Medalla Milagrosa. Y ellos me hablaban, me consolaban y me escribían cartas diciéndome que estaban orando por mí. En casa tenemos a la Virgencita Milagrosa y una medallita que nunca me quito. Luego de mucho orar, la oncóloga me dijo que habían removido todo el cáncer y que no había necesidad de quimioterapia o radiación. Yo lloraba de alegría y agradecimiento a la Virgen por escuchar mi oración y a los padres que oraron por mí.

-B.C., Houston TX

honramos recordando su historia y la importancia que tiene en nuestra vida.

Para nosotros será un honor orar por sus inten-ciones de oración. Adjuntos encontrará una hojita de petición y un sobre para que me envíe sus peticiones. Nosotros las colocaremos ante el altar de Nuestra Señora y las recodaremos en nuestras misas y oraciones en el Santuario Nacional de la Medalla Milagrosa.

Siempre con la Virgen María,

Rev. Prudencio Rodríguez de Yurre, C.M.Director Espiritual

Novenas a Nuestra Señora en el Santuario de la Medalla MilagrosaCada mes, en el Santuario de la Medalla Milagrosa se celebran eventos y Novenas de oración además de 30

misas por los miembros de la Asociación. Como miembro de la Asociación, le estaremos recordando en oración en las siguientes celebraciones:

Novena de la Inmaculada Concepción de María: Del 8 al 16 de diciembreNovena del Desposorio de María: Del 15 al 23 de enero

Novena a Nuestra Señora de Lourdes: Del 3 al 11 de febrero

Asociación de la Medalla Milagrosa1811 West Saint Joseph Street Perryville, Missouri 63775-1598 www.ammespanol.org padreamm@amm.org 1-800-360-2104

Asociación de la Medalla Milagrosa Asociación de la Medalla Milagrosa

La Asociación le invita a partici-par en la Novena de la Inmaculada Concepción que se celebrará en el Santuario Nacional de la Medalla Milagrosa, del 8 al 16 de diciembre. Para poder recordarle en nuestras misas y oraciones durante la no-vena, solo incluya sus peticiones en la hojita de petición y devuélvalas en el sobre adjunto. Nosotros las colocaremos ante el altar de Nues-tra Señora donde la comunidad las recordará en oración.

Gracias por su apoyo y por par-ticipar con nosotros en oración. Que Dios le bendiga y que Nuestra Señora interceda por usted.

Oración a la Virgen InmaculadaVirgen Santísima, que habiendo agradado al Señor fuiste elegida para ser su Madre, Inmaculada en cuerpo y alma, dirige piadosa una mirada sobre estos hijos que te imploran tu protección. Oh Madre amable, Reina y abo-gada nuestra, acepta las oraciones que te suplicamos presentes ante el trono de Dios, a fin de que jamás caigamos y podamos llegar todos al puerto de salvación; que la Iglesia y la sociedad cristianas canten una vez más el himno de la victoria, de la libertad y la paz. Amén.

Novena de la Inmaculada Concepción

superiores para que los deseos de la Madre de Dios se lleven a cabo, en 1832 se imprimen las primeras dos mil medallas.La medalla de la Virgen Milagrosa representa

de una forma admirable la teología y espiri-tualidad de los Evangelios. Es verdaderamente la mejor representación de la Virgen como Inmaculada Concepción concebida sin pecado original. La Medalla Milagrosa representa la fe de la Iglesia que Cristo fundó (no es de extrañar que en el año en que se imprimen las primeras medallas, el Papa Gregorio XVI deposita una de las medallas delante del crucifico de su escrito-rio).Los Evangelios solo nos dan pequeñas y breves

reseñas de la relación entre Jesús y su madre María. Sin embargo, los momentos más impor-tantes y más significativos de esta relación apa-recen en el simbolismo de la Medalla Milagrosa. María como Intercesora (Las bodas de Caná) y María como Corredentora (al pie de la cruz). La jaculatoria: “Oh María, sin pecado conce-

bida, ruega por nosotros que recurrimos a ti” nos desafía a acudir a María para obtener las

gracias que su Hijo Jesús nos da a través de su madre. ¿Cómo va a negarse Jesús ante la intervención de su Madre? En el reverso

de la Medalla, María y la cruz de Cristo están íntimamente ligadas: María, a

La jaculatoria “Oh María, sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a ti”, que rodea una de las caras de la Medalla Mila-grosa, siempre me

ha parecido un verdadero catecismo de nuestra fe católica; un catecismo no escrito por humanos sino diseñado por la Madre de Dios. Solo una intervención divina podría poner de manifiesto el profundo significado de esta jaculatoria.Las apariciones de La Virgen María a santa Cata-

lina Labouré en París, Francia, durante un período de cinco meses, entre julio y noviembre de 1830, irían construyendo poco a poco el plan de María para que santa Catalina fuera aprendiendo de la Madre de Dios los designios para esta Medalla Milagrosa. Lo más fácil habría sido que la Virgen hubiera

acuñado en el cielo la medalla y se la entregara a santa Catalina. Pero no fue así. La Virgen quiso imbuir en el alma y la mente de santa Catalina todo lo que la medalla iba a representar para que ella fuera la primera y la mejor propagadora de lo que la medalla significaría para el mundo.El mundo estaba muy presente en las aparicio-

nes de María a santa Catalina. Francia y Europa vivían tiempos muy turbulentos. La Virgen quería asegurar a Catalina que Ella estaría ahí para pro-teger a los que la invocaran; María quería disipar

Simbolismo de la Medalla Milagrosa: A Jesús por María

la que Simeón le vaticinó que una espada atravesaría su corazón, y María, la Dolorosa al pie de la cruz, hacen de estos símbolos de la Medalla Milagrosa la mejor manera para nosotros los cristianos de profesar nuestra fe en estos misterios que los Evangelios nos describen.María le dijo a santa Catalina que tenemos que

llevar la medalla con fe. Que no es suficiente usarla simplemente como si fuera una joya o una moda. No importa si la medalla es de plata, de oro o de otro material. La medalla representa el mensaje de la Madre de Dios que dice a los que la llevan con fe que ella les otorgará muchas gracias y bendiciones. Desde el momento en que la medalla fue distri-

buida, cantidad de sanaciones y milagrosos ocurri-eron en todo el mundo. Y hasta el día de hoy, María continúa siendo fiel a las promesas que hizo a santa Catalina Labouré.Como miembros de la Asociación de La Medalla

Milagrosa, todos nosotros tenemos el gran privile-gio y la gran responsabilidad de propagar la de-voción a la Virgen de la Medalla Milagrosa, dis-tribuyendo la medalla tal y como la Virgen María instruyó a santa Catalina en 1830.

Asociación de la Medalla MilagrosaAsociación de la Medalla Milagrosa

el miedo y las dudas, y pidió a santa Catalina que no se desanimara a pesar de todos los problemas que vendrían sobre Francia y el mundo entero. En la segunda aparición,

santa Catalina ve que la Virgen se posa sobre un globo que representa al mundo. De las manos extendidas de la Virgen, la Hermana Catalina puede ver anillos en los dedos de La Virgen, de los que destallan rayos, unos luminosos y otros no. María le dice a Santa Catalina: “estos rayos repre-sentan las gracias que daré a los que me las pidan… pero los anillos sin rayos luminosos representan las gracias que las almas se olvidan de pedir…”. Poco a poco el globo donde estaba posada la Virgen

fue desapareciendo, y la imagen de la Virgen quedó representada en una figura oval alrededor de la cual santa Catalina pudo leer las palabras: “Oh María sin pecado concebida, ruega por nosotros que recurrimos a ti”. De repente, la imagen oval de la Virgen se fue dando

vuelta despacio y Catalina pudo ver en el reverso de la imagen la letra M sobre una barra y una cruz, y debajo de la barra dos corazones, el de Jesús rodeado por una corona de espinas y el de María traspasado por una espada. Doce estrellas rodean toda la imagen.Santa Catalina vería a la Madre de Dios por última

vez el 27 de diciembre de 1830. En esa aparición la Virgen le encomienda a santa Catalina que es muy im-portante que lo que le ha manifestado se imprima en una medalla que sería instrumento de sanación para el mundo. La Hermana Catalina había memorizado muy bien su visión de La Madre de Dios y así se lo repite frecuentemente al padre Jean Marie Alaldel, su confesor. No fue fácil convencer al padre Alaldel de que la Vir-

gen le encomendó acuñar su visión en una medalla. Pero a pesar de las dificultades que encuentra con sus

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