Visita Presidencial en Guatemala

Visita Oficial de la Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, a Guatemala, el 30 de enero 2015.

Embajada de Chile en Guatemala Pgina 1

PRESIDENTA MICHELLE BACHELET EN GUATEMALA.

La debilidad de nuestras Instituciones sigue marcando a nuestra regin. Las soluciones pasan, en gran medida, por consolidar la Democracia, reformar nuestros sistemas educativos; valorar la diversidad cultural

y brindar mayor participacin a la mujer.

Conferencia en la Universidad de San Carlos



Ningn pas ha progresado con un sistema educativo

segregador y discriminador, que impide el crecimiento econmico y el desarrollo.

Buscamos que la educacin pblica y privada sean de alta calidad mediante las nuevas reformas.

Cuando los ricos estudian con los ricos y los pobres con los pobres,

se daa el tejido social y se reproduce la desigualdad

impidiendo que los ciudadanos compartan una visin de pas

Presidenta Michelle Bachelet en su conferencia magistral ante la sociedad civil de Guatemala, en la Universidad de

San Carlos, evento organizado junto con la Fundacin Esquipulas.



UNA VISITA EN UN SIGNIFICATIVO CONTEXTO INTERCULTURAL.

La Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, realiz el 30 de enero 2015 una nueva Visita oficial a Guatemala. Ahora, en su segundo mandato, quiso brindar un especial fortalecimiento a las relaciones entre ambas naciones, destacando el intercambio de experiencias en materia de reformas sociales, la promocin de los Derechos de gnero, el reconocimiento y valoracin de la diversidad cultural de nuestros pueblos y el incremento de las relaciones comerciales con Guatemala y Centro Amrica y Caribe.

En su estada en Guatemala la Presidenta fue acogida con afecto por las ms altas autoridades de esta gran nacin, lo que qued reflejado en una Declaracin Conjunta y en la suscripcin de importantes acuerdos entre gobiernos. Un hito relevante de su visita fue tambin un encuentro con la sociedad civil guatemalteca, en la histrica Universidad de San Carlos, seguido de un importante encuentro empresarial Chile-Guatemala. Al cierre de su visita, la Presidenta comparti una cena representativa de los Sabores de Chile con actores de un amplio abanico de la sociedad de Guatemala, Universidades, ONG, comunidades indgenas, Fundaciones, medios de prensa, organizaciones sociales, organismos de Naciones Unidas, chilenos residentes y diversas personalidades, como la Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Mench.

Un aspecto a destacar es que la comitiva que acompa a la Presidenta de Chile, estuvo integrada por altas autoridades del Gobierno, exponentes de diversas entidades de empresarios nacionales, acadmicos y representantes del Pueblo Mapuche, en lo que fue una muestra sensible de nuestra propia diversidad cultural.

La Embajada de Chile, a pocos meses de haber iniciado una nueva etapa de labores en la relaciones diplomticas con Guatemala, se siente honrada con esta visita de nuestra Presidenta, y con ello se ha brindado tambin un sentido reconocimiento a la idea de una Embajada intercultural, en una Nacin como Guatemala (Tierra de rboles, en lengua Maya), en donde la diversidad de sus pueblos forma parte de su patrimonio cultural.

DOMINGO NAMUNCURA Embajador de Chile en Guatemala.



IMGENES DEL ARRIBO Y PRIMERAS HORAS

DE LA PRESIDENTA DE CHILE EN GUATEMALA.

La Seora Vicepresidenta de Guatemala, Licenciada Roxana Baldettirecibe a la Presidenta de Chile

en el Aeropuerto Internacional Aurora.

Firma de Acuerdos y Declaracin conjunta de ambos Presidentes.



Durante la maana del viernes 30 de enero 2015 la Presidenta de Chile fue recibida oficialmente en el Palacio Presidencial de Guatemala, por el Seor Presidente, don Fernando Otto Prez y la seora Vicepresidenta Roxana Baldetti, con un hermoso ceremonial institucional. Luego del saludo de S.E. el Presidente de Guatemala, la Presidenta de Chile, respondi coloquialmente y en trminos muy sinceros y cordiales al grato y emocionante recibimiento. Muchas gracias Presidente Prez:

Nosotros, felices, de estar ac en Guatemala. Esto no es casual. Yo he venido porque nos ha parecido que esta visita expresa y refleja esta tradicin ya de 175 aos, como usted deca, de excelentes relaciones entre Guatemala-Chile y Chile-Guatemala. Y hemos conversado con el Presidente, tal como l ha sealado, una especie de balance de lo que hemos avanzado hasta ahora, y tambin ha sido una reunin fructfera en trminos de mirar cules son las oportunidades que se abren para ambos pases en distintos mbitos.

Hemos venido, el Presidente lo destacaba, con un importante nmero de empresarios. Haba gran inters de venir ac, y puedo decir que no vinieron todos los que estaban interesados. Haba muchos ms todava, pero como el viaje era tan cortito, decidimos adecuar oportunidades para seguir viniendo. Y creo que es, entonces, una muy buena visita. Cuando termine el da, la visita habr sido muy fructfera, tanto por lo que va a ser el compromiso de trabajo, el inters del trabajo entre nuestros gobiernos, entre nuestro sector pblico, entre nuestro sector privado y entre nuestros pueblos.

Y por eso nos parece que lo que hemos firmado ahora, este Acuerdo de Cooperacin en el mbito turstico, tambin acerca a nuestra gente, a nuestra cultura, a nuestros pueblos para conocernos ms profundamente en Chile y Guatemala. Quiero decirle que estamos muy optimistas, muy contentos; nos sentimos muy bien acogidos ac, y por eso es que con mucha fuerza vamos a continuar asegurando que todas las reas de trabajo y de cooperacin que hemos identificado, puedan hacerse realidad. Con el Presidente, ya hemos instruido a los cancilleres y a los Embajadores a que empecemos a concretar estas medidas, y estoy segura que tambin a nivel de nuestros empresarios se van a generar muy buenas relaciones.

As que tenemos mucho que aprender tambin de Guatemala, Presidente; tambin de empresarios y representantes del mundo indgena, del mundo mapuche. Tenemos mucho que aprender de la experiencia patrimonial que ustedes tienen. As que creemos que sta es, de verdad, una relacin en lo comercial, en los distintos mbitos, extraordinariamente constructiva y positiva, y que desde Chile vamos a seguir empujando con mucha fuerza, porque sabemos que as nuestros pases, nuestros pueblos mejoran y viven como corresponde, con la dignidad que se merecen.

Muchas gracias Presidente.



Almuerzo oficial del Presidente de Guatemala ofrecido a la Presidenta de Chile.

Concluido el ceremonial oficial de recibimiento y recepcin de la Presidenta de Chile, en el Palacio Presidencial de Guatemala, se realiz un importante encuentro de la Mandataria, con la sociedad civil guatemalteca, reunida en el Museo de la histrica Universidad de San Carlos, evento que fue organizado y convocado por la Universidad y la Fundacin Esquipulas, con una concurrencia de 500 personas, todas representativas de distintos mbitos sociales, culturales, diplomticos, acadmicos y de la sociedad propiamente tal. En el evento presentaron su saludo y su mensaje el Seor Rector de la Universidad, don Carlos Alvarador y el Seor Presidente de la Fundacin Esquipulas, el ex Presidente Vinicio Cerezo. A continuacin, S.E. la Presidenta de Chile, comparti con todos los presentes su Conferencia Magistral sobre Reforma Educacional, Derechos de gnero, interculturalidad e integracin, como factores claves del desarrollo. Este es el texto completo de su Conferencia. Amigas y amigos:

Quiero decir que es un honor para m estar aqu nuevamente, en esta casa de estudios, como aqu se deca, una de las ms antiguas de la regin. Y lo primero, no voy a poder acompaarlos maana, pero Feliz Aniversario, 339, pero con esa capacidad de mantener la tradicin, pero a la vez, ser muy joven en las preguntas que se hacen sobre la sociedad y sobre el mundo en que vivimos. Una universidad pblica que ha forjado a ilustres guatemaltecos como usted lo recordaba, seor rector, al premio Nobel Miguel ngel Asturias- y que, sin duda, seguir hacindolo, contribuyendo de esta manera a la construccin de un maana mejor para Guatemala, pero tambin para toda Amrica Latina.

Usted lo recordaba, y la verdad que tengo con la Universidad de San Carlos un vnculo personal, que se remonta a ese marzo del 2007, momento en que ustedes me honraron -tal como lo haban hecho en 1931 con nuestra insigne poeta Gabriela Mistral- al otorgarme el Doctorado Honoris Causa. Como dije en aquella oportunidad, tal distincin me compromete de por vida con esta multicentenaria institucin.

Qu mejor lugar que ste, una universidad pblica, pluralista, autnoma, comprometida con la cultura y las culturas, con la verdad y la paz, para hablar de los temas que nos convocan: el rol de la educacin, la equidad de gnero y la interculturalidad para el desarrollo.

Podra parecer que esos asuntos tienen un sentido obvio y un valor por s mismos, y que no vale mucho la pena hacer nuevas disquisiciones. Sin embargo, ellos aparecen bajo una perspectiva ms rica cuando se ponen en relacin a lo nico que puede ser su justificacin ltima: una vida mejor para los ciudadanos y ciudadanas.

Bajo esa luz, no slo aparece la necesidad de reflexionar sobre las interdependencias entre educacin, gnero e interculturalidad. Tambin aparece su carcter dinmico, pues aquello que es una vida mejor para todos, es algo que evoluciona con los cambios de las sociedades y debe ser debatido pblicamente.

Y esa es, precisamente, una de las ms altas funciones del espacio universitario: pensar la complejidad de las realidades y aspiraciones de nuestros pases, bajo la luz crtica e integradora de su finalidad humana.



No hay lecciones ni frmulas mgicas

para resolver problemas

sociales, polticos o econmicos.

Lo que existe son

sociedades que gracias al debate

pblico y a la deliberacin polica,

buscan y deciden sus soluciones

a la luz de su experiencia anhelos y desafos

La universalidad a la que aludimos con la palabra universidad, proviene precisamente de aquel foco de luz integral y trascendente que aporta el humanismo, que hace de la persona, sus potencialidades, relaciones y derechos, el criterio ltimo de valor.

Deca el ilustre venezolano, y chileno adoptivo, Andrs Bello, que en la universidad "todas las verdades se tocan" porque "los adelantamientos en

todas lneas (sic) se llaman unos a otros, se eslabonan, se empujan (...) Todas las facultades humanas forman un sistema, en que no puede haber regularidad y armona sin el concurso de cada una. No se puede paralizar una fibra, una sola fibra del alma, sin que todas las otras enfermen".

Por eso estos temas no slo pueden, sino que deben abordarse aqu, en este espacio de encuentro, en estos espacios universitarios, que en nuestros pases han sido guas y maestras en la formacin de la nacin soberana.

La responsabilidad de las universidades con vocacin pblica, aqu y en mi pas, es, pues, enorme. Especialmente ahora, en que las ideas y modelos de desarrollo que hemos seguido en las ltimas dcadas, si bien en algunos casos han significado avances, han dejado importantes pendientes sin resolver, y no bastan ya para enfrentar los nuevos retos que nos ponen por delante las nuevas dinmicas de la sociedad global.



Debemos, pues, poner todas nuestras capacidades de reflexin crtica y propositiva al servicio de nuevos nfasis de largo plazo en nuestros enfoques y polticas de desarrollo. Tales son algunas de las ideas que abordar en esta charla.

Pero por favor, yo escuchaba al rector, al presidente y sus expectativas, y deca nada de lo que pueda decir va a cumplir con esas expectativas. Pero por sobre todas las cosas, porque no esperen lecciones, ni frmulas mgicas para resolver problemas sociales, polticos o econmicos a los que debemos hacer frente, porque sencillamente eso no existe. Lo que existen son sociedades que gracias a sus ciencias y humanidades, al debate pblico y a la deliberacin poltica, buscan y deciden sus soluciones a la luz de sus experiencias, de sus anhelos y desafos.

Por eso yo quiero compartir mi visin sobre los nuevos desafos y qu estamos haciendo en mi pas para enfrentarlos. Chile ha avanzado significativamente en las ltimas dcadas. Nuestra sociedad ha cambiado y hoy los chilenos y chilenas pueden ms y aspiran a mucho ms. Pero tambin tenemos muchos lastres heredados que nos impiden muchas veces avanzar ms rpido y tambin nuevos desafos que enfrentar. Y eso caracteriza este momento histrico del pas. Estamos abocados a encontrar los medios que nos permitan superar los obstculos y a crear las condiciones que nos permitan ponernos a la altura de las nuevas oportunidades y retos. Y hemos puesto a Chile en movimiento, y todos y todas estamos comprometidos a llevarlo a buen puerto. Y ese es nuestro mejor capital para el desarrollo.

S que muchas de nuestras caractersticas y dinmicas responden a las particularidades de nuestra historia nacional y a nuestra especfica posicin y dotacin geogrfica. Pero tambin hay en ello aspectos que responden a ciertas dinmicas universales de los procesos de desarrollo y de democratizacin. Y eso es lo que nos permite hoy da entablar un dilogo y compartir experiencias con ustedes, ciudadanos y ciudadanas de Guatemala, tambin comprometidos con el desarrollo, el bienestar y la democracia de vuestro pas.

Amigas y amigos:

Hoy vivimos en un mundo globalizado y crecientemente interdependiente. En un mundo en constante transformacin, que cambia, a la par de la tecnologa, a una velocidad sorprendente. Este nuevo contexto impone nuevos desafos en prcticamente todas las reas, que debemos ser capaces de enfrentar.



La economa globalizada demanda una constante adecuacin, tanto en infraestructura fsica, como en capacidades humanas, a los requerimientos de los mercados internacionales.

El inminente fin del superciclo de los commodities, que tanto benefici en los ltimos aos a Amrica Latina, nos llama a buscar alternativas, a diversificar nuestras exportaciones y a agregar valor agregado a nuestros productos.

El surgimiento de una ciudadana ms empoderada y organizada, en gran medida gracias a la expansin de Internet, que reclama por sus derechos y pone en cuestin la legitimidad de las instituciones polticas, nos obliga a repensar la democracia y a profundizarla.

Es cierto, tenemos nuevos desafos, pero tambin tenemos tremendos temas pendientes: la pobreza, la desigualdad, las exclusiones de todo tipo, la falta de cohesin social. La debilidad de nuestras instituciones sigue marcando a nuestra regin. Hemos visto progresos significativos, en reduccin de la pobreza, por ejemplo, siendo significativos, las cifras siguen siendo vergonzosamente altas.

Tanto los nuevos retos, como los que vienen de antao, exigen que repensemos nuestra poltica y nuestras polticas, que continuemos con lo que hemos hecho bien y que reformulemos aquello que no parece funcionar.

Creemos que las respuestas pasan, en gran medida, por consolidar y ampliar la democracia, por generar polticas de equidad e inclusin, por dar protagonismo a las mujeres y valorar y aprovechar las diversidades tnicas y culturales.

Y mucho de esto pasa por reformar nuestros sistemas educativos, porque como dijo, entiendo que en esta misma sala, el ao pasado, el rector de la UNAM: en la educacin residen las armas del progreso individual y tambin del colectivo. Sin educacin no hay forma de combatir los problemas de ayer y menos an de prepararnos para enfrentar los de maana.

Amigas y amigos:

El nuevo contexto global trae tambin nuevas exigencias para la paz y para la erradicacin de todas las formas de violencia. Como dije pocos das atrs, en la sesin que presid del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, el contexto internacional es hoy, evidentemente, distinto al que conocimos en el siglo XX.



No observamos hoy guerras interestatales como las que tuvieron lugar en tiempos pasados, con su trgica estela de muerte y destruccin, ni pugnas ideolgicas tan agudas. Sin embargo, eso no significa de ninguna manera que estemos viviendo en un mundo pacfico y seguro.

Las amenazas son otras, pero igualmente serias. Son guerras intranacionales -en acto o en potencia- producidas por tensiones socio-econmicas, de gnero, tnicas, tribales o religiosas.

Son peligros transnacionales -como el terrorismo, el narcotrfico, el trfico de armas, el trfico de personas y el crimen organizado- generados muchas veces por la exclusin, por la falta de oportunidades y por la debilidad de las instituciones pblicas o la escasa legitimidad de la democracia.

No podremos terminar con estas amenazas a menos que enfrentemos sus causas subyacentes. De poco sirven los tanques y los misiles. Mucho ms tiles son, como afirma el Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, la "poltica de inclusin, la educacin, el empleo y las oportunidades reales".

Y la inclusin parte por el respeto al Estado de derecho y a las instituciones democrticas. Esa es la base, el punto de partida, la condicin indispensable para resguardar los derechos fundamentales, las libertades individuales y para edificar sociedades ms justas.

La democracia permite gestionar las diferencias, resolver las tensiones sociales pacficamente y que todos los ciudadanos sean y se sientan partcipes de las decisiones colectivas que van moldeando el futuro de la comunidad nacional.

Hasta hace poco, la democracia era un bien escaso en Amrica Latina. Era un concepto vaco, que no operaba como gua efectiva de las decisiones sociales. Muchos pases -como ste y como el mo- perdieron en algn momento el rumbo y se

sumergieron en pesadillas autoritarias.

Y conocemos el alto costo de extraviar la democracia. Sabemos, como deca Asturias, lo que es estar de paso, siempre de paso, tener la tierra como posada, tenerlo todo como prestado, no tener sombra sino equipaje. Sabemos de sueos rotos, de exilios y prdidas; sabemos lo que es la exclusin en su sentido ms puro y duro.

Por lo mismo amamos la libertad y el entendimiento razonado de las diferencias. Por eso valoramos las instituciones democrticas y republicanas.

Y actualmente la democracia est prcticamente en todos los pases de la regin. Es ms, se ha instalado como un paradigma indiscutido en gran parte del mundo. Pero eso no quiere decir que hayamos dejado atrs el riesgo de caer en el autoritarismo o en el populismo.



La consolidacin de la democracia sigue siendo -como seal en este mismo lugar el ao 2007- un problema fundamental que encara nuestra Amrica Latina.

La pobreza persistente, la desigualdad extrema, la exclusin, el descontento social y la debilidad institucional invitan al conflicto y tambin a buscar respuestas rpidas y soluciones mgicas que slo traen mayor malestar social y ms conflictividad a mediano y largo plazo.

Segn los datos de CEPAL, que acaban de lanzar -datos para el ao 2014- 165 millones de personas en Amrica Latina son pobres, eso es el 28,1% de la poblacin total, y 69 millones, el 11,7%, estn en indigencia, en pobreza extrema. Hemos logrado reducir la pobreza en tres dcadas, desde el 40% en 1980 al 28,1% el ao 2014. Y eso, por un lado, es una gran noticia que alienta nuestras esperanzas de que debemos avanzar por el camino slido de la democracia con inclusin. Pero no basta, es totalmente insuficiente. Hay mucho ms que hacer.

Particularmente preocupante es la pobreza infantil. Considerando el enfoque de derechos y aplicando una medicin multidimensional, la CEPAL concluye que en la regin 70,5 millones de nios, nias y adolescentes son pobres, eso es el 40,5%, y 28,3 millones, el 16,3%, son indigentes o de pobreza extrema.

Y ste es un apremiante llamado de atencin. Ms all del sufrimiento que esta situacin produce, que es de por s inaceptable y demanda una respuesta inmediata, debemos ser conscientes que estamos hipotecando el futuro no slo de nuestras democracias, sino tambin de nuestros pueblos. Y qu decir de las desigualdades, y en particular de la distribucin del ingreso.

Como saben, la nuestra es la regin ms desigual del planeta. Nuevamente acudo a la CEPAL, que nos ha actualizado los datos y tenemos los datos del ao pasado. El quintil ms pobre -el 20% de los hogares con menos ingresos- capta el 5,6% de los ingresos totales, mientras que el quintil ms rico se queda con el 46,7%.

Creemos que la desigualdad -de ingresos, de acceso a servicios bsicos, de oportunidades y resultados- es una de las mayores amenazas para el desarrollo de nuestros pases, para la democracia y para la paz.

Porque pone en entredicho la comunin de intereses y valores que es la nica que posibilita la convivencia nacional, agudiza las tensiones sociales, genera resentimiento y, en los casos extremos, violencia armada. Evidentemente tenemos un gran dficit en este sentido.

Y tenemos que trabajar para resolver estos graves problemas. Tenemos clara la urgencia, pero tambin tenemos claro que no existen los atajos y que no existen los caminos fciles.

La democracia se consolida con ms democracia, haciendo los procesos ms participativos, ms inclusivos, incorporando en la toma de decisiones a las mujeres y a los diversos grupos sociales.



Se consolida tambin promoviendo la inclusin real de los ciudadanos y ciudadanas en todos los mbitos -en educacin, en los servicios de salud, en el mercado laboral-, reduciendo las desigualdades, valorando la diversidad y creando nuevas y mejores oportunidades de movilidad para que todos y todas puedan contar con un futuro prometedor.

Y por ello, tambin es importante, con crecimiento econmico, porque sin crecimiento difcilmente podremos crear los puestos de trabajo de calidad que hombres y mujeres requieren y nuestro desarrollo demanda.

Sin slidas expectativas de crecimiento econmico, adems, no tendremos incentivos para invertir en la infraestructura fsica y social que necesitamos para competir en el marco de la globalizacin, pero a la vez, para que en esa competencia y resultados nos permita brindar bienestar a nuestra ciudadana.

stas son algunas de las condiciones bsicas que compartimos como regin para consolidar la democracia y tambin para lograr un desarrollo integral y a la vez inclusivo. Y son todos aspectos de un mismo desafo.

El quintil ms pobre -el 20% de los hogares con menos ingresos-

capta el 5,6% de los ingresos totales, mientras que el quintil ms rico

se queda con el 46,7%.

Amigas y amigos:

Los chilenos y chilenas hemos entendido que enfrentar estos desafos tiene sus complejidades, pero por otro lado, es nuestra oportunidad y responsabilidad histrica. Que ahora es el momento, y que postergar la accin es la antesala de una frustracin. Por eso, como Gobierno que representa a las mayoras, nos hemos puesto colectivamente en marcha. No estamos partiendo de cero, porque en las dcadas pasadas se crearon condiciones institucionales y econmicas, expectativas y derechos sociales sobre las cuales hoy da estamos parados.

Estamos haciendo grandes esfuerzos por acortar las brechas sociales y evitar que segmentos de la poblacin queden rezagados, para acabar con las desigualdades injustas y por integrar a los excluidos.

Y el propsito es doble: por un lado asegurar que cada ciudadano, independientemente de su condicin social, poltica, econmica o cultural, identidad sexual, gnero o lugar de procedencia o etnia, consiga desarrollar sus potencialidades y, por otro, que todos y todas, y cada uno de ellos, pueda aportar al desarrollo comn del pas. Desarrollar capacidades personales, por un lado, pero tambin fortalezas colectivas, ese es nuestro norte.



Y como saben, estamos haciendo mltiples reformas que apuntan justamente a este objetivo. Reformas polticas democratizadoras que gracias, entre otras cosas, a la sustitucin, finalmente, despus de muchos aos, del sistema electoral heredado de la dictadura- nos van a permitir tener una democracia ms representativa, inclusiva y legtima a los ojos de los ciudadanos.

Y a esta gran reforma del sistema electoral, que acabamos de aprobar hace una semana, como digo, despus de aos de lucha, nos va a permitir tener una democracia donde los ciudadanos sientan que su voto importa y que al que eligen realmente los represente. Pero adems, el ao 2017, por primera vez, a travs de otra gran reforma que hemos hecho, los chilenos en el exterior van a poder votar en las primarias y en las presidenciales, cosa que tambin nos parece un gran avance en nuestro pas.

Si mencionaba las reformas polticas democratizadoras y hablbamos de la lucha contra la desigualdad, clave era hacer una reforma fiscal, una reforma tributaria, una reforma tributaria que permitiera repartir la carga de manera ms equitativa y que nos asegure financiamiento permanente para aquellas transformaciones, en reas como educacin, salud y proteccin social, que comprometimos en el programa de Gobierno y que fueron ampliamente respaldadas por la ciudadana en las elecciones pasadas. Y claro, fueron cuatro meses, al comienzo del Gobierno, donde finalmente logramos llegar a un consenso completo en el Parlamento para apoyar esta reforma tributaria de 3% del Producto Interno Bruto, que nos va a permitir, justamente, contar con los recursos para hacer las mejoras en muchas reas sustantivas.

Y tambin estamos empeados -y en esto quiero detenerme un momento- en llevar adelante una reforma que eleve la calidad de la educacin pblica y que genere un sistema educativo ms equitativo y ms integrador.

Acaba de estar en Chile un experto fins, Pasi Sahlberg, que nos dijo recientemente, en tono de alerta, que ningn pas ha progresado con un sistema educativo que segrega, como el que tenemos actualmente.

En Chile, como en otros pases de la regin, el rendimiento escolar est ntimamente relacionado con el nivel socioeconmico de las familias. El pago adicional que hacen los padres en las escuelas particulares subvencionadas por el Estado y la seleccin al ingreso, han generado un sistema altamente segregado, en el que los ricos estudian con los ricos, los pobres estudian con los pobres, reproduciendo de esta manera no slo capacidades y oportunidades desiguales, sino redes sociales e imgenes de mundo excluyentes.

Esto ha daado profundamente el tejido social, ha contribuido a ensanchar las brechas y, en consecuencia, impedido que nuestros compatriotas compartan una visin de pas, vivan la diversidad y construyan los canales de cooperacin.

Estas prcticas, adems, eliminan el efecto positivo que los nios y nias de mejor desempeo tienen sobre los menos aventajados, lo que compromete la calidad del sistema en su conjunto.



Est comprobado -es lo que muestra la experiencia comparada- que el aprendizaje de los nios ms vulnerables mejora notablemente cuando comparten la sala de clases con otros de mayor capital cultural. Este efecto, lgicamente, desaparece en escuelas altamente segregadas como las nuestras.

Por otro lado, estas formas de segregacin y discriminacin dificultan el reconocimiento de la calidad educativa, bsicamente porque impiden distinguir si es un colegio el exitoso por sus propios mritos y metodologas de enseanza o simplemente porque pueden seleccionar a los estudiantes con mejor rendimiento, debido al capital cultural de sus familias y sectores sociales de origen.

Terminar con esas prcticas har ms reconocible la calidad de los establecimientos educacionales y permitir, por un lado, que el Estado pueda vigilar con mayor efectividad el desempeo del sistema y, por otro, que las familias puedan elegir dnde educar a sus hijos, con una mejor informacin y con ms libertad.

Nuestra meta es que, a mediano plazo, todos los liceos y colegios, pblicos, subvencionados por el Estado o particulares pagados, alcancen niveles equivalentes de excelencia e inclusin.

Y lo que estamos llevando a cabo no es slo un proyecto, ni un conjunto de iniciativas legales. Lo que est en juego es que pasemos de un modelo centrado en la educacin como un bien de consumo, basado en las capacidades familiares de pago, a un modelo basado en derechos, que garantice calidad para todos y sea un generador de oportunidades y de movilizacin social amplia.

En la educacin est una de las claves del cambio que deseamos para los chilenos y chilenas, porque cuando todos los nios, nias y jvenes tengan las mismas oportunidades de adquirir conocimientos y competencias para optar a una vida ms plena, habremos cumplido con una parte importante en nuestra misin de crear una sociedad ms justa, prspera y equitativa.

Y quiero hacer mas las palabras de Andrs Bello, quien en 1843, en el discurso inaugural de la Universidad de Chile -nuestra Universidad pblica ms importante- afirm lo siguiente: "Yo ciertamente soy de los que miran la instruccin general, la educacin del pueblo, como uno de los objetos ms importantes y privilegiados a que pueda dirigir su atencin el gobierno; como una necesidad primera y urgente; como la base de todo slido progreso; como el cimiento indispensable de las instituciones republicanas". Y justamente ah en Chile estamos poniendo el acento.

El autoritarismo y el populismo son dos tentaciones regresivas

de la democracia sana. Para evitarlas

conviene reducir las desigualdades de ingreso;

de acceso, de oportunidades y resultados.



Amigas, amigos:

Como ustedes saben, el trabajo por la igualdad de gnero ha sido una preocupacin fundamental para m. Y he tenido la oportunidad, no slo como ciudadana, luego como ministra de Salud, luego de Defensa, como Presidenta de la Repblica, pero tambin desde ONU Mujeres, rgano de Naciones Unidas que tuve la fortuna de dirigir, de trabajar en esta direccin.

Y a partir de tales experiencias he adquirido tres certezas. La primera es que se han conseguido significativos avances en la lucha por la igualdad en las ltimas dcadas. La segunda es que tenemos an muchas tareas pendientes, todas impostergables. Y la tercera, que el desarrollo equitativo e inclusivo es slo posible con igualdad de gnero. sta debe ser, por tanto, una prioridad de los Estados alrededor del mundo y particularmente de los latinoamericanos, donde la pobreza tiene cara de mujer y de nio.

Por cierto que ha habido un importante avance en materia de acceso a la salud y a la educacin para las mujeres. Sin embargo, la persistente brecha con respecto a los hombres y las diferencias profundas que se observan entre pases, deben reforzar nuestra preocupacin por la construccin de un mundo ms equitativo tambin en materia de gnero.

Ya lo deca, la pobreza sigue teniendo mayoritariamente un rostro femenino. Todava hoy en el mundo 800 mujeres mueren diariamente en el parto. Todava en Amrica Latina y el Caribe, 9.300 mujeres mueren al ao por causas relacionadas con el embarazo. Todava hoy la presencia de la mujer en la educacin superior, en la actividad poltica y en el trabajo remunerado, es minoritaria.

El mercado laboral tampoco incorpora a las mujeres plenamente, en especial en zonas ms atrasadas. En los pases ms desarrollados la participacin llega al 53% de la fuerza laboral femenina, mientras que en Medio Oriente y frica del Norte, el porcentaje baja a la mitad, al 26%. En Chile la situacin es intermedia, pues la tasa de ocupacin femenina alcanza el 45%.

Pero tambin sabemos que las mujeres muchas veces tienen acceso a empleo, pero a empleos mucho ms precarios y mucho ms frgiles.

Y sabemos que el acceso a la educacin, la formacin y la capacitacin es un factor esencial para superar estas desigualdades. Y en tal sentido, los datos reflejan avances importantes, pero alertan, al mismo tiempo, sobre grandes tareas pendientes.



Dos tercios de los 770 millones de personas analfabetas del mundo son mujeres. En educacin primaria, afortunadamente, la brecha entre nios y nias se ha cerrado prcticamente. Pero un peldao ms arriba, en la educacin secundaria, tan slo 6 mujeres asisten a la escuela por cada 10 hombres.

Y si bien en educacin superior, en muchas sociedades, las mujeres hemos avanzado rpidamente hasta prcticamente superar a los hombres, se mantiene un marcado sesgo hacia temticas vinculadas con roles tradicionales de gnero. La presencia de las mujeres es mucho mayor en campos como la educacin, la salud, las humanidades y el arte, pero es muy minoritaria en ciencias exactas e ingeniera.

Y, por tanto, esto tambin se expresa y afecta el nivel salarial en el mercado laboral, como tambin su incorporacin a los centros de investigacin tecnolgica y a las altas esferas de decisin dentro de las empresas.

Pero ac terminan las cifras y las noticias alentadoras. Porque si en estas materias que he nombrado podemos reconocer avances destacables, hay otra donde no vemos los cambios deseados. Y me refiero a

la violencia de gnero.

El 35% de las mujeres sufre violencia fsica y sexual. Y en algunos pases, esta cifra llega al 70%. En 15 pases de Amrica Latina y el Caribe cerca del 50% de las mujeres dijeron haber sido vctimas de al menos un asalto sexual durante su vida. Y casi el 70% de los abusos fsicos fueron cometidos por sus propias parejas. Y sabemos que en Centroamrica esta realidad es especialmente aguda. El fin de la violencia de gnero, que nunca ms una mujer sea golpeada, amenazada o asesinada slo por ser mujer, es tambin una base y el inicio de cualquier poltica de equidad.

Y en Chile, mi Gobierno ha tomado el trabajo por la equidad de gnero como una prioridad. Por eso que una de las primeras medidas que

adoptamos al comenzar nuestro mandato, fue enviar al Congreso el proyecto de ley que creaba el Ministerio de la Mujer, tenamos un Servicio Nacional de la Mujer, pero que tena un nivel ms bajo de ministerio. Y quisimos fortalecer la institucionalidad y darle mayor peso poltico, necesario para promover y garantizar los derechos de las mujeres. Y justamente hace 2 das, hemos aprobado finalmente esta ley.

Y para acoger a las vctimas de violencia, que en mi pas provoca alrededor de 40 femicidios al ao, estamos duplicando las Casas de Acogida y vamos a aumentar en un 25% los Centros de la Mujer que entregan apoyo y asistencia oportuna.

Adems, estamos implementando un conjunto de medidas que van a fortalecer la autonoma econmica de las mujeres, lo que creemos es fundamental, por un lado, para tener autonoma econmica, pero tambin es un mecanismo importante para disminuir su vulnerabilidad frente a la violencia.



Por otra parte, en la reforma que acabamos de aprobar a nuestro sistema electoral, yo mencionaba que acabamos de derogar el Sistema Binominal y cambiarlo por un sistema electoral proporcional, hemos incluido una ley de cuotas transitoria, que asegurar que al menos el 40% de quienes postulen al Congreso sean mujeres. Yo lo he dicho, a m me hubiera gustado que el 40% hubiesen suido electas, pero ha costado tanto esto que al menos el 40% de candidatas, es un primer gran paso.

Porque queremos romper la inercia del sistema poltico que mantiene una representacin de 16% de mujeres en ambas Cmaras en nuestro pas, mientras que en Amrica Latina y en los pases de la OECD esta cifra llega en promedio al 26%.

En definitiva, lo que buscamos en este tema, como en muchos otros, es generar condiciones de igualdad efectiva, que nos permitan avanzar hacia ese Chile que queremos: una sociedad que reconoce igual valor, iguales derechos, iguales potencialidades, pero a la vez provee oportunidades equitativas a hombres y mujeres.

Pero por sobre todo, porque nos parece que es lo que hay que hacer, que es un imperativo tico, pero que tambin es una necesidad para el desarrollo. Porque en la medida en que todos y todas podamos aportar, en igualdad de condiciones, al progreso de nuestros pueblos, podremos ir ms rpido y llegar ms lejos por la senda del desarrollo armnico, inclusivo y sustentable. Y esta premisa es vlida tanto en relacin al gnero como a todas las formas de inclusin.

Es muy interesante cuando uno, y en mi trabajo como Directora Ejecutiva de ONU Mujeres, iba a los pases nrdicos, que son los pases que tienen mayores grados democrticos, inclusivos, de bienestar social y de equidad en todas las lneas, cada vez que ellos contaban que iban a un lugar, en los pases como los nuestros o en otros pases en vas de desarrollo, las distintas autoridades les sealaban ustedes pueden hacer eso, porque son pases ricos; ustedes pueden incluir mujeres; ustedes pueden tener polticas, digamos, de asegurar derechos sociales y econmicos, porque son pases ricos.

Y ellos decan, si usted ve la historia post-guerra, nuestros pases eran pobres, y justamente hoy da somos ricos porque entendimos que la nica manera de desarrollarnos y poder llegar a tener los niveles de desarrollo que hoy da tenemos, es incluyendo, incluyendo e incluyendo, y colocando en la educacin inclusiva, el acento fundamental de nuestros esfuerzos. Si hoy da somos ricos, es porque incluimos a mujeres, es porque incluimos a nuestros pueblos originarios, es porque incluimos a nuestros jvenes, es porque le aseguramos a los nios que pudieran ser la generacin que permitiera que nuestros pases fueran lo que hoy da son.

Y creo que eso es muy interesante y muy importante, porque muchas veces los gobiernos encontramos que no tenemos los recursos, que no tenemos las posibilidades, pero la verdad que lo que es ms importante de todo, es voluntad poltica, tener claro lo que funciona y trabajar para unir las fuerzas y las capacidades del pas para ir en pos de ese objetivo.

Y yo por eso creo y soy una firme convencida de que la solucin va justamente por hacer de nuestras sociedades, sociedades inclusivas e integradas que garanticen al ser humano la dignidad y el respeto que todos nos merecemos.



La valoracin de la diversidad y el respeto de las diferencias, sean tnicas, culturales, polticas, sociales, sexuales o de cualquier tipo, son tambin condiciones para el progreso.

Esto implica que la bsqueda de una pacfica y sinrgica convivencia intercultural, debe ser parte de nuestras preocupaciones, y debe estar presente en nuestras acciones gobierno. Ms en un contexto tan heterogneo como el latinoamericano, donde la diversidad es un rasgo definitorio, pero a la vez parte esencial de su riqueza.

Nuestro continente es un crisol de culturas. Aqu convergen mltiples cosmovisiones, mltiples culturas, mltiples etnias. Para que nuestras sociedades interculturales fructifiquen, es necesario que se extienda no slo la valoracin de la diversidad y el respeto activo, sino tambin, la interaccin y la comunicacin con los otros que son culturalmente diferentes, que hablan otras lenguas, que profesan otras creencias, que practican otros ritos y que tienen otro aspecto y otra presencia.

Por lo mismo, son de suma importancia los espacios de encuentro, como ste en el que nos encontramos, y las escuelas, los liceos pblicos, que son los espacios republicanos por excelencia.

Por esto es que creemos que la reforma al sistema educativo que estamos implementando en Chile es tan relevante, porque nos va a permitir integrar y cohesionar a nuestra sociedad.

Las relaciones interculturales se dan en los diferentes mbitos de la vida cotidiana, pero con especial fuerza en la escuela. Por ello, fomentar una sociedad cohesionada y basada en el respeto de las mltiples diferencias, no slo implica el reto de incluir a indgenas, afrodescendientes y otras personas culturalmente diferentes en las instituciones educativas, tal cual existen en la actualidad, sino tambin transformarlas para que se adecen a la diversidad cultural. Es necesario incorporar el dilogo de saberes y el reconocimiento de la diversidad de valores y modos de aprendizaje,

como elementos centrales de las polticas, planes y programas del sector.

Debemos ser capaces de escucharnos, de incluir a todos y a todas en las discusiones y en la toma de decisiones, porque as como seala Daniel Mato el ao 2005, tendremos la posibilidad de re-pensarnos a nosotros mismos, como colectivos nacionales complejos, hechos de mltiples diversidades () condicin necesaria (aunque no suficiente) para convertir el reconocimiento y manejo de esas diversidades en potencialidades para el desarrollo.

Queridas amigas y amigos:

Estando aqu en Guatemala, yo vi por primera vez hermosas frases del Libro del Consejo de los Quichs, el Popol-vuh, y quiero concluir citando una bella frase que para ustedes es tan conocida, pero para nosotros, cada vez que la escuchamos, nos emociona y nos inspira. Esa fuente de sabidura universal que nos han legado los pueblos de esta tierra, cuando decan, tantos aos atrs, con tanta, yo dira,



sabidura: que todos se levanten, que se llame a todos, que no haya un grupo, ni dos grupos de entre nosotros que se quede atrs de los dems.

Slo si actuamos unidos, hombres y mujeres de todas las etnias, culturas y procedencias, de distintas perspectivas, lograremos alcanzar el desarrollo integral de nuestros pueblos y construir un mundo justo, libre, igualitario y fraterno para todos y todas.

Muchas gracias.



ENCUENTRO EMPRESARIAL

CHILE-GUATEMALA.

Luego de la Conferencia Magistral de la Presidenta de Chile en el Museo de la Universidad de San Carlos, la mandataria se dirigi al Encuentro Empresarial Chile-Guatemala para exponer en el cierr del evento. Desde Chile viaj una muy importante comitiva de empresarios nacionales junto con representantes de la Cmara de Comercio Mapuche de Santiago, quienes durante el da 30 de enero- sostuvieron diversas reuniones y mesas de negocios, con el objeto de explorar y ampliar las relaciones comerciales entre ambos pases. Hacia la tarde, y mientras se realizaba el encuentro con la sociedad civil, 200 personas, representativas del sector empresarial de Guatemala y la comitiva chilena desarrollaron un amplio seminario, con expositores de ambos pases. La Presidenta de Chile arrib hacia la hora vespertina para saludar a los numerosos participantes y compartir con ellos una importante reflexin.



OPORTUNIDADES, DESAFOS E INTERCAMBIO DE EXPERIENCIA

Amigas y amigos:

Lo primero que quiero decir es que estamos casi terminando esta visita. Que ha sido muy fructfera y que nos ha permitido, en lo personal, pero tambin en el conjunto de nuestra delegacin, restablecer relaciones polticas, comerciales; es decir, de mirar cmo a partir de lo que hemos hecho a lo largo de los aos con Guatemala, cules son las nuevas oportunidades, los nuevos desafos y cmo nuestra visita aqu lo que muestra es esa voluntad de seguir caminando juntos.

Cuando hablo de un caminando juntos, no hablamos solamente de las relaciones entre los gobiernos; no hablamos solamente de la relacin en lo cultural. Vengo ahora de la Universidad San Carlos, donde fui invitada a compartir una ponencia. Tambin se trata de la relacin entre nuestros sectores privados, en la relacin de inversin, de comercio y tantas otras reas.

Y quiero, en ese sentido, agradecer la invitacin a participar en este Seminario Empresarial Guatemala-Chile y especialmente a la Cmara de la Industria de Guatemala por organizar este encuentro que ha permitido, y me parece que as lo ha sido tambin y por lo que escuchaba antes de entrar a esta sala, ahondar en temas de inters mutuo para los dos pases y, sobre todo, ser capaces no slo de hacer un balance

de lo realizado hasta ahora, sino de explorar nuevas vas para incrementar una relacin que a juicio de todos nosotros tiene un altsimo potencial.

sta es la tercera vez que visito Guatemala como Presidenta de Chile, y en esta oportunidad, adems de reconocer nuestros vnculos histricos, hemos querido profundizar y diversificar la relacin entre nuestros pases, y entiendo que de eso se ha conversado y discutido en las diferentes exposiciones de este seminario.

Los lazos histricos que nos unen en asuntos de cooperacin nacen con el retorno a la democracia en Chile, cuando en 1991 el ex Presidente de la Repblica, Patricio Aylwin, en la Cumbre de Presidentes Centroamericanos, realizada en San Salvador, anunci un programa de cooperacin tcnica con los pases de la regin, junto a la creacin de un programa de becas para estudios de post grado en las universidades chilenas. A partir de entonces, Chile ha llevado adelante esfuerzos sostenidos para caminar juntos en el desarrollo de Centroamrica.



Apreciamos la riqueza de la diversidad que posee Amrica Latina y el Caribe, y ello nos motiva a identificar nuevos desafos y retos en el marco de la cooperacin al desarrollo. Eso fue parte de lo que trabajamos el da de ayer y anteayer en la reunin de CELAC, que acaba de terminar en Costa Rica. Como pas hemos procurado ajustarnos de manera flexible y estratgica a la multiplicidad de realidades que presenta la regin centroamericana.

En el mbito econmico-comercial, nuestras relaciones se rigen por el Tratado de Libre Comercio entre Chile y Centroamrica, suscrito el 2002, pero tambin por el Protocolo Bilateral entre Chile y Guatemala, que entr en vigencia el 23 de Marzo del 2010.

Y en el ltimo tiempo, Chile ha llevado a la prctica su compromiso e inters de profundizar la relacin con Centroamrica y particularmente con Guatemala. Y este inters se ve reflejado no slo desde el punto de vista comercial, que busca incrementar las relaciones comerciales entre ambas partes y modernizar nuestro acuerdo comercial, sino tambin otorgndole especial prioridad al desarrollo de un amplio programa de cooperacin y una activa labor de promocin de las inversiones hacia esta regin.

Nuestro pas ha definido como reas prioritarias de su gestin para el perodo 2014-2018, el desarrollo de estrategias que permitan extender los beneficios del comercio ms all de la apertura tradicional de mercados, hacia aspectos tales como cadenas globales de valor, inclusin social, el desafo para el comercio que implica el cambio climtico y la responsabilidad social empresarial. En otras palabras, promover el desarrollo en el marco de lo que hoy se conoce como licencia social.

Ciertamente tenemos especial inters en avanzar en los asuntos comerciales propios de nuestra relacin bilateral, donde resulta fundamental buscar de manera conjunta mecanismos que permitan diversificar y aumentar un intercambio comercial que muestra cifras ya muy interesantes.

El ao 2013 nuestro pas se situ como el vigsimo sexto proveedor de Guatemala y dcimo cuarto comprador. En tanto, desde el punto de vista chileno, Guatemala se ubic en el lugar 47 como principal destino de las exportaciones chilenas y en la posicin 36 como proveedor. Ustedes saben muy bien que Chile tiene una economa abierta, con acuerdos comerciales con pases y grupos de pases en todos los continentes, y el intercambio comercial con Guatemala es significativo y nos parece una oportunidad mutua con amplias perspectivas.

En ese contexto, y tal como se acord en la VI Reunin de la Comisin de Libre Comercio y de las Comisiones de los Protocolos Bilaterales realizado en Nicaragua, en diciembre ltimo, nos hemos comprometido a desarrollar una agenda mucho ms ambiciosa, que contempla la modernizacin del acuerdo y el mejoramiento de las condiciones de acceso a los mercados.



Consideramos que esta agenda debe contemplar al menos la inclusin de captulos de promocin de inversiones y medio ambiente.

En materia de inversiones, Chile busca mejorar los estndares actuales de los Acuerdos de Promocin y Proteccin de las Inversiones, los as llamados APPIs, vigentes con cada uno de los pases centroamericanos, a fin de otorgar mayor certeza jurdica tanto a los inversionistas como al Estado. Y creemos que esto contribuye tambin a generar una mayor atraccin a las inversiones.

Respecto al medio ambiente, nuestro pas considera que una buena vinculacin entre comercio y medio ambiente puede optimizar los beneficios de la apertura de mercados y ayudar a mitigar los posibles impactos negativos sobre la sostenibilidad de los recursos naturales. Esta materia est incorporada en la mayora de los acuerdos con nuestros socios comerciales.

Puntualmente, la agenda de cooperacin con Guatemala para este ao incluye, en el mbito econmico-comercial, temas como compras pblicas, propiedad intelectual, la experiencia chilena en la implementacin del Acuerdo de Asociacin con la Unin Europea y capacitacin a funcionarios del Programa de Agregados Comerciales, Inversin y Turismo, PASID. Y en ese sentido, tambin valoramos el convenio de Cooperacin Estratgica firmado entre la Cmara de Industria de Guatemala y la Sociedad de Fomento Fabril de Chile, el pasado mes de septiembre.

Y es muy importante que el contenido del acuerdo signifique emprender tareas de colaboracin interinstitucional y la ejecucin de acciones para el desarrollo de la trasferencia tecnolgica, a travs de programas de investigacin, innovacin tecnolgica sectorial y de formacin y capacitacin tcnica.

Como ustedes sabrn, parte importante de las inversiones chilenas directas en el exterior se concentran en Sudamrica y Norteamrica. Lo que implica, obviamente, que las inversiones que se registran en Centroamrica y el Caribe son menores . Pese a ello, existe una percepcin muy positiva de los efectos que puede generar la inversin chilena en la regin, a travs de transferencia tecnolgica, acceso a nuevos mercados y generacin de empleo.

Y en esta lnea quiero sealar, y con mucho gusto, que nuestro pas ha resuelto implementar un programa que permita detectar oportunidades para inversiones chilenas directas en Centroamrica y el Caribe. Para ello aunar informacin sobre las condiciones que enfrenta la inversin chilena directa en la regin y buscar potenciar el proceso de integracin econmica de Chile con esa regin, a travs de la utilizacin de instrumentos econmico-comerciales.

Nuestro pas considera que una buena vinculacin entre comercio y medio ambiente puede optimizar

los beneficios de la apertura de mercados y ayudar a mitigar los posibles impactos negativos sobre la sostenibilidad

de los recursos naturales. Esta materia est incorporada en la mayora de los acuerdos con nuestros socios comerciales.



Nuestro pas se encuentra comprometido a realizar todo lo necesario para continuar en una estrecha colaboracin de desarrollo con Guatemala. Queremos aprovechar nuestros vnculos polticos y econmicos para favorecer la generacin de empleo, el aumento de la productividad y el desarrollo social.

Y durante las conversaciones en el da de hoy con el Presidente, con los seores Ministros aqu presentes, hemos identificado una cantidad importante de reas que creemos que son de gran inters. Sin duda, algunas como la minera, la energa, el sector forestal, adems de un conjunto de otras reas que ya estn en desarrollo.

Y yo confo que este Seminario haya sido un buen estmulo para avanzar en este camino. Creemos que nuestro destino, como comunidad latinoamericana, es solidario y que el progreso de cada uno nos beneficia a todos. Y as como Chile fue por muchos aos objeto de cooperacin internacional, de intercambio, estamos dispuestos a seguir cooperando, intercambiando, pero adems haciendo joint venture y todo tipo de actividades en conjunto con los pases cercanos y amigos como Guatemala.

Espero que este Seminario haya abierto la mirada tanto de chilenos como guatemaltecos, y muchas oportunidades de comercio, de inversin, de empresas conjuntas, que nos permitan seguir generando las condiciones para que en cada uno de nuestros pases las economas crezcan, generemos empleos y nuestros pases puedan vivir mejor.

Muchas gracias.

Nuestro pas ha definido

como reas prioritarias de su gestin para el perodo 2014-2018, el desarrollo de

estrategias que permitan extender los beneficios del comercio ms all de la

apertura tradicional de mercados, hacia aspectos tales como cadenas globales de valor, inclusin social, el desafo para el

comercio que implica el cambio climtico y la responsabilidad social empresarial.



DECLARACION CONJUNTA 1. Los Mandatarios manifestaron su satisfaccin por el excelente estado de las relaciones bilaterales, entre Guatemala y Chile, reafirmaron su decidida voluntad de continuar consolidando los vnculos entre ambos pases en las reas poltico, de seguridad, comercial, educativo, cultural y de cooperacin entre otras, as como el fortalecimiento de la democracia, el estado de derecho, los derechos humanos, como elementos indispensables para fortalecer la gobernabilidad y asegurar el bienestar y el desarrollo socioeconmico de sus pueblos y gobiernos, basado en la construccin de sociedades ms prsperas e igualitarias.

2. Ambos Presidentes expresaron su enorme satisfaccin por conmemorarse en 2015 ciento setenta y cinco (175) aos de relaciones diplomticas entre Chile y Guatemala, mismas que desde su inicio se han estrechado cada vez ms por la amistad y dilogo sincero que ha fortalecido la unidad y el desarrollo positivo de los temas de la agenda bilateral y multilateral comn.

3. Coincidieron en que el propsito fundamental de sus pueblos y gobiernos, es continuar promoviendo la democracia, la integracin, la consolidacin de la seguridad y se comprometieron a trabajar de manera conjunta en temas como la Proteccin Social y de Seguridad Alimentaria y Nutricional, para asegurar la igualdad de oportunidades y mejores condiciones para sus ciudadanos.

4. La Presidenta Michelle Bachelet manifest su apoyo al Presidente Otto Prez por la Presidencia Pro Tmpore del Sistema de Integracin Centroamericana -SICA-, que ejercer durante el primer semestre del 2015, reconoci que este espacio permite a sus Estados miembros promover el dilogo poltico y concertar intereses regionales, impulsar y dinamizar su participacin con otros pases, grupos de pases y organismos multilaterales, en aras de consolidarse como bloque regional y lograr resultados concretos en los temas prioritarios de sus respectivas agendas.

En ese sentido, felicit la decisin del Presidente Otto Prez de priorizar la Unin Aduanera durante su Presidencia Pro Tmpore del SICA, lo cual permitir consolidar los logros alcanzados en el proceso de integracin regional para el desarrollo sostenible de la regin.



5. Destacaron la importancia de promover el Tratado de Libre Comercio vigente desde 2010 con el fin de incrementar an ms el intercambio comercial, se comprometieron a realizar eventos de promocin como un medio eficiente para el establecimiento de contactos empresariales y alianzas estratgicas.

6. Los Presidentes expresaron su complacencia por la realizacin del Encuentro Empresarial entre Guatemala y Chile titulado Oportunidades, desafos e intercambio de experiencias, celebrado al margen de la Visita Oficial, misma que permitir un crecimiento sostenido de las relaciones comerciales, e incentivar y facilitar nuevas corrientes de intercambio en bienes, servicios e inversiones.

7. El Presidente Otto Prez solicit a la Presidenta Michelle Bachelet su apoyo y respaldo para que Guatemala ingrese como miembro pleno a la Alianza del Pacfico, mecanismo de integracin regional integrado por Chile, Colombia, Mxico y Per. La Presidenta Michelle Bachelet celebr el inters de Guatemala en esta importante iniciativa regional y ofreci el apoyo para el proceso de su solicitud de adhesin como miembro pleno.

8. Los mandatarios coincidieron que el desarrollo energtico es clave para el progreso de los pases y enfatizaron que es trascendental el manejo y uso de la energa limpia, el aprovechamiento de los recursos renovables, as como tambin el uso y el ahorro eficiente de la energa. El Presidente de Guatemala solicit a la Presidenta de Chile realizar intercambios de experiencias en el sector industrial que ayuden a mejorar la competitividad y productividad empresarial, el desarrollo de la geotermia, el manejo de la seguridad en el abastecimiento energtico, el ahorro de energa, as como en mecanismos que ayuden a generar cambios en los patrones de consumo de la poblacin que contribuyan a un desarrollo energtico sostenible y que fortalezcan la visin integral de la Poltica Energtica de Guatemala

9. La Presidenta de Chile reiter su apoyo para la continuidad de la cooperacin chilena en Guatemala, a lo que el Presidente Otto Prez Molina, manifest su reconocimiento al Gobierno de Chile por los 20 aos de cooperacin tcnica, tanto en proyectos, como en becas que ha brindado al pas, en forma bilateral y multilateral, a travs de la Agencia de Cooperacin Internacional de Chile (AGCI), destacando la



colaboracin chilena mediante el Fondo Contra el Hambre y la Pobreza en apoyo al Pacto Hambre Cero de Guatemala.

10. El Presidente Otto Prez, expres su agradecimiento al Gobierno de Chile por la cooperacin que brinda en materia de Seguridad Ciudadana a travs del Programa de Cooperacin Internacional del Gobierno de Chile para Policas Uniformadas Extranjeras (CECIPU), con el cual se ha logrado la capacitacin en las reas de montaa y fronteras, orden y seguridad, especializacin de intendencia y contralor, operaciones policiales especiales, educacin policial, drogas y estupefacientes, inteligencia policial y criminalstica a Oficial de la Polica Nacional Civil de Guatemala.

11. Los Presidentes destacaron adicionalmente la necesidad de profundizar la cooperacin internacional, bajo una perspectiva de responsabilidad compartida, para combatir la delincuencia organizada transnacional, el trfico de armas y municiones, el secuestro y la trata de personas, as como el problema mundial de las drogas y delitos conexos. Coincidieron en la importancia de impulsar acciones de proteccin integral con nfasis en la prevencin del delito, que contribuyan a generar ambientes ms seguros, que garanticen los derechos humanos fundamentales de los pueblos.

12. Los Presidentes se congratularon por la suscripcin del Memorndum de Entendimiento entre el Instituto Guatemalteco de Turismo de la Repblica de Guatemala INGUAT y el Servicio Nacional de Turismo de la Repblica de Chile SERNATUR y sobre Cooperacin Turstica, el cual tiene como fin estrechar las relaciones tursticas y profundizar sobre la base del intercambio en materia de turismo.

13. Los Presidentes reiteraron su respaldo de continuar contribuyendo al proceso de modernizacin y fortalecimiento de la Organizacin de los Estados Americanos, as como el establecimiento de procedimientos y mtodos de trabajo renovados que aseguren un funcionamiento ms eficiente y eficaz de la Organizacin y complementen los esfuerzos de desarrollo sostenible, la paz, la seguridad y la democracia de sus Estados Miembros.



14. Los mandatarios coincidieron en renovar su compromiso con la reforma integral de la Organizacin de Naciones Unidas y en particular, dirigida a una representacin equitativa y ms democrtica del Consejo de Seguridad, que refleje las realidades geopolticas actuales. Reafirmaron igualmente, la voluntad de ambos Gobiernos de coordinar sus acciones en el mbito multilateral, en aquellos temas en los cuales mantienen posiciones comunes, en especial, en materias de desarrollo inclusivo, acceso a la justicia y equidad de gnero, contempladas con especial inters dentro de la Agenda de Desarrollo post 2015 en Naciones Unidas.

15. Los Presidentes coincidieron en la importancia de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeos (CELAC) y destacaron la importante reflexin que dio inicio en relacin con el futuro de los trabajos de la CELAC, como el mecanismo de concertacin y dilogo poltico de la regin, durante la III Cumbre de la CELAC celebrada en Beln, Costa Rica.

16. Los Presidentes, en el mbito multilateral, acordaron coordinar sus posiciones y cooperar estrechamente en los distintos organismos internacionales tales como la Organizacin de las Naciones Unidas (ONU); Organizacin de los Estados Americanos (OEA); Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeos (CELAC), la Conferencia Iberoamericana, la Asociacin de Estados del Caribe (AEC) y el Sistema de Integracin Centroamericana (SICA), entre otros. Asimismo, coincidieron en la necesidad de fomentar la participacin del sector privado en los distintos foros multilaterales a nivel regional y hemisfrico.

17. Respecto de la demanda interpuesta por Bolivia ante la Corte Internacional de Justicia relativa a su aspiracin martima, Chile hizo presente que entre ambos pases no existen asuntos territoriales pendientes. Guatemala seal que el asunto compete a ambos pases.

18. Ambos Presidentes se congratularon por los resultados alcanzados durante la Visita Oficial y confirmaron su renovado inters en continuar profundizando el dilogo poltico que los vincula.

19. Al concluir la Visita de Estado, la Presidenta Michelle Bachelet, manifest en nombre propio y en el de su comitiva, su ms sincero y profundo agradecimiento al seor Presidente Otto Prez Molina al Gobierno y al pueblo de Guatemala, por su hospitalidad durante su permanencia en el pas.

Adoptada en Ciudad de Guatemala, a los treinta (30) das del mes de enero de dos mil quince (2015).

Nuestros sinceros agradecimientos a todos quienes hicieron posible esta magnfica Visita Oficial, de la Presidenta de Chile, a Guatemala, el 30 de enero 2015: al pueblo de Guatemala, a su Gobierno y autoridades nacionales. A la Universidad de San Carlos y Fundacin Esquipulas por su generosa contribucin en la organizacin de la Conferencia Magistral. A la Cmara de Industria de Guatemala y sus pares por acoger a la comitiva empresarial de Chile y a S.E. y por la realizacin del Seminario empresarial. Al equipo de Protocolo de las Cancilleras de Guatemala y Chile, por su laborioso trabajo; a los medios de prensa, y a todas las personas e instituciones, que de una u otra forma, colaboraron en esta Visita oficial. A todos y todas, muchsimas gracias.

EMBAJADA DE CHILE EN GUATEMALA

Visita Presidencial en Guatemala

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