Volumen 62 - Nº 3 Buenos Aires - Septiembre 2016

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Volumen 62 - Nº 3 Buenos Aires - Septiembre 2016 ISSN 0001-6896 (impresa) ISSN 2362-3829 (en línea) Editorial 145. Juego, mente y cultura HUGO R. MANCUSO Originales. Trabajos completos 148. Efecto de técnicas de gimnasia cerebral sobre la atención sostenida y la concentración en el proceso de alfabetización inicial MARCELO ROBERTO GARCÍA, MARCELINO SGRO, ROBERTO STHARINGER, PASCUAL ÁNGEL GARGIULO 153. Consistencia interna y dimensionalidad del Inventario de Evaluación de la Personalidad en estudiantes universitarios de Buenos Aires JULIANA BEATRIZ STOVER, AGUSTÍN FREIBERG HOFFMANN, MERCEDES FERNÁNDEZ LIPORACE, ALEJANDRO CASTRO SOLANO 164. Rasgos del trastorno por déficit de atención e hiperactividad y consumo patológico de alcohol en adolescentes FERRAN PADRÓS BLÁZQUEZ, MARTHA ZAMORA CERVANTES, PAULINO SALINAS GARCÍA, MARÍA PATRICIA MARTÍNEZ MEDINA 171. El sentido de vida en jóvenes de 18 a 25 años concurrentes a centros educativos de nivel secundario (2015, Mendoza, Argentina) ANDRÉS ENZO GOTTFRIED, MARIELA JOHANNA FOZZATTI Revisión/Revisiones 180. Psiconeuroendocrinología del estrés y la depresión: interacciones entre factores biológicos, psicológicos, genéticos y ambientales GUSTAVO TAFET 195. Abordajes educativos y terapéuticos sobre las dificultades en la comunicación de niños con signos clínicos de autismo MELISA CORREDERA, JULIETA DE BATTISTA

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Volumen 62 - Nº 3Buenos Aires - Septiembre 2016ISSN 0001-6896 (impresa)ISSN 2362-3829 (en línea)

Editorial

145. Juego, mente y culturaHUGO R. MANCUSO

Originales. Trabajos completos

148. Efecto de técnicas de gimnasia cerebralsobre la atención sostenida y laconcentración en el proceso dealfabetización inicialMARCELO ROBERTO GARCÍA, MARCELINO SGRO, ROBERTO

STHARINGER, PASCUAL ÁNGEL GARGIULO

153. Consistencia interna y dimensionalidaddel Inventario de Evaluación de laPersonalidad en estudiantes universitariosde Buenos AiresJULIANA BEATRIZ STOVER, AGUSTÍN FREIBERG HOFFMANN,MERCEDES FERNÁNDEZ LIPORACE, ALEJANDRO CASTRO SOLANO

164. Rasgos del trastorno por déficit deatención e hiperactividad y consumopatológico de alcohol en adolescentesFERRAN PADRÓS BLÁZQUEZ, MARTHA ZAMORA CERVANTES,PAULINO SALINAS GARCÍA, MARÍA PATRICIA MARTÍNEZ MEDINA

171. El sentido de vida en jóvenes de 18 a25 años concurrentes a centros educativosde nivel secundario (2015, Mendoza,Argentina) ANDRÉS ENZO GOTTFRIED, MARIELA JOHANNA FOZZATTI

Revisión/Revisiones

180. Psiconeuroendocrinología del estrésy la depresión: interacciones entrefactores biológicos, psicológicos,genéticos y ambientalesGUSTAVO TAFET

195. Abordajes educativos y terapéuticossobre las dificultades en la comunicaciónde niños con signos clínicos de autismoMELISA CORREDERA, JULIETA DE BATTISTA

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Volumen 62 - Nº 3Buenos Aires - Septiembre 2016ISSN 0001-6896 (impresa)ISSN 2362-3829 (en línea)

Historia

207. Influencias de De Sanctis en Argentina através de la labor de Ciampi en la primeracátedra de Neuropsiquiatría InfantilLUCÍA ROSSI, GIOVANNI PIETRO LOMBARDO, ANA ROCÍO

JUÁREZ, HERNÁN GUSTAVO ELCOVICH, GIORGIA MORGESE

Informaciones

216. Jornada Interinstitucional FundaciónACTA, AMEPSA y UMSA

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Consejos Científicos Nacional Roberto Canay UMSA, USAL, Argentina Verónica Brasesco UMSA, USAL, Argentina Andres Febbraio UBA, UMSA Diego Feder U. Maimónides, Argentina Héctor Fernández-Álvarez U. de Belgrano, Argentina

María de los Á. López Geist APSA, Argentina Alicia Losoviz FELAIBE, Argentina Humberto Mesones Ac. Nac. de Medicina, Argentina Lucía Rossi UBA, Argentina María Lucrecia Rovaletti UBA, CONICET, Argentina Fernando Silberstein UBA, UNR, Argentina Roberto Sivak U. Maimónides, Argentina Humberto Tittarelli CISM, Argentina Patricia Weismann UNMDP, Argentina

Internacional Jorge Acevedo Guerra Santiago – Chile Renato D. Alarcón Lima – Perú; Rochester – EUARubén Ardila Bogotá – Colombia Demetrio Barcia Murcia – España Helio Carpintero Madrid – España Jorge A. Costa e Silva Rio de Janeiro – Brasil Otto Dörr Zegers Santiago – Chile Alejandro Gómez Santiago – Chile René González Uzcátegui San José - Costa Rica Itzhak Levav Jerusalem – Israel Facundo Manes Buenos Aires – Argentina Juan Mezzich Pittsburgh – EUA Driss Moussaoui Casablanca, Marruecos A. Rafael Parada Santiago – Chile Duncan Pedersen † Montreal, Quebec - Canadá Héctor Pérez-Rincón México D.F. – México Juan Matías Santos Madrid – España Norman Sartorius Ginebra – Suiza Hernán Silva Ibarra Santiago – Chile Carlos Sluzki Santa Barbara – EUA Tomás Ortiz Madrid – España Benjamín Vicente Concepción – Chile Sergio Villaseñor Bayardo Guadalajara – México Ana María Zlachevski Ojeda Santiago – Chile

Comité Honorífico Francisco Alonso-Fernández UCM – España. Fernando Lolas Stepke Universidad de Chile – Chile. Luis Meyer Fundación Acta – Argentina.

Acta Psiquiátrica y Psicológica de América Latina es una publicación científica sin fines de lucro, propiedad de la Fundación ACTA Fondo para la Salud Mental, fundada por Guillermo Vidal en 1954, que tiene por objeto fomentar el desarrollo de la psiquiatría, la psicología y las neurociencias en lengua española y sus relaciones interdisciplinarias, en sus varias orientaciones, con las ciencias sociales y los fundamentos epistemológicos y metodológicos de las mismas.

Aparece regularmente cuatro veces al año ―en marzo, junio, septiembre y diciembre― en versión impresa (ISSN 0001-6896) y a partir de 2014 y con la misma regularidad, en versión en línea (ISSN 2362-3829).

Incorporada por CONICET y CAICYT al Núcleo Básico de Revistas Científicas Argentinas en el área Ciencias Biológicas y de la Salud. Indexada en LATINDEX, LILACS, PSICODOC, PsycINFO, ESCI-Thomson Reuters, figura en tales registros abreviada como: Acta Psiquiátr Psicol Am Lat. Director Fundador† Guillermo Vidal [1917-2000] Director Hugo R. Mancuso Universidad de Buenos Aires, CONICET [email protected] Consejo Académico Ricardo Aranovich Fundación Acta Fondo para la Salud Mental [email protected] Gargiulo Universidad Nacional de Cuyo, [email protected]

Gustavo A. Mäusel Universidad del Museo Social Argentino [email protected] Edith Serfaty Academia Nacional de Medicina, Argentina [email protected] GustavoTafet Universidad Maimónides, Argentina. [email protected] Secretaria de Redacción Alejandra Niño Amieva Universidad de Buenos Aires, Argentina. [email protected] Corrección María Mercedes Niklison Traducción Ana María Morilla Diagramación María Rosa Alvarez Responsable Administrativo Ignacio Burgo. Fundación Acta Fondo para la Salud Mental, Argentina. [email protected] Administración Marcelo T. de Alvear 2202, piso 3° (Escuela de Salud Pública, Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires) C1122AAJ Ciudad Autónoma de Buenos Aires, R. Argentina, TE: (5411) 4897-7272; [email protected] Registro Nacional de la Propiedad Intelectual N° 091317 ISSN 0001-6896 (impresa) ISSN 2362-3829 (en línea) © Fundación ACTA, Fondo para la Salud Mental. Todos los derechos reservados - Ley 11.723. Hecho el depósito que marca la ley. Prohibida su reproducción total o parcial por cualquier medio sin previo consentimiento de Fundación Acta. Los artículos y notas firmadas no representan necesariamente la opinión de la revista y son de exclusiva responsabilidad de los autores.

Ana Lía Kornblit Universidad de Buenos Aires, [email protected]

Este número se terminó de imprimir en septiembre de 2016

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El objetivo de la presente investigación fue llevar a cabo un releva-miento de la obra de Lanfranco Ciampi en la ciudad de Rosario(Santa Fe, Argentina). Se indagó sobre su formación enNeuropsiquiatría, la posterior relación con su maestro Sante DeSanctis y su desempeño institucional, que incluyó la fundación de laPrimera Escuela para Niños Retardados de la Argentina y de la pri-mera cátedra de Neuropsiquiatría Infantil del mundo. Al respecto, seanalizaron los conceptos de educabilidad y peligrosidad―esenciales en la obra del autor― para evaluar su aplicación en losdiseños institucionales de la Facultad de Ciencias Médicas,Farmacia y Ramos Menores de la Universidad Nacional del Litoral yde la sede de Rosario de la Liga de Higiene Mental.Metodológicamente, se trata de una investigación ex post factoretrospectiva en la cual las fuentes documentales son abordadasmediante técnicas cualitativas de análisis crítico de discurso.

Palabras Clave: Historia de la Psicología – Psiquiatría Infantil –Educabilidad – Peligrosidad.

Influences of De Sanctis in Argentina through Ciampi’s Work inthe First Chair of Child NeuropsychiatryThe aim of this research was to conduct a survey of LanfrancoCiampi's work in the city of Rosario, Santa Fe, Argentina. This workstudied his formation in Neuropsychiatry, the subsequent relationshipwith his teacher Sante De Sanctis, and his institutional developmentthat included the foundation of the First School for Mentally RetardedChildren in Argentina and the first chair of Child Neuropsychiatry in theworld. For this, the concepts of educability and dangerousness, ―keypoints in the work of the author― were analyzed to evaluate theirapplication in the institutional designs of the Faculty of Medicine,Pharmacy and Other Branches of Medical Sciences of theUniversidad Nacional del Litoral and the headquarters of the Leaguefor Mental Health in Rosario. Methodologically, it is a retrospective expost facto research for which documentary sources are studiedthrough qualitative techniques of critical discourse analysis.

Keywords: History of Psychology – Child Psychiatry – Educability –Dangerousness.

LUCÍA ROSSIDoctora en Psicología.

Instituto de Investigaciones,Cátedra II de Historia de la Psicología.

Facultad de PsicologíaUniversidad de Buenos Aires,

R. Argentina.

GIOVANNI PIETRO LOMBARDOFull Professor of General

Psychology. Dip. di PsicologiaDinamica e Clinica.

Sapienza Università di Roma,Italia.

ANA ROCÍO JUÁREZLicenciada en Psicología.

Instituto de Investigaciones,Cátedra II de Historia de la Psicología.

Facultad de PsicologíaUniversidad de Buenos Aires,

R. Argentina.

HERNÁN GUSTAVO ELCOVICHLicenciado en Psicología.

Instituto de Investigaciones,Cátedra II de Historia de la Psicología.

Facultad de PsicologíaUniversidad de Buenos Aires,

R. Argentina.

GIORGIA MORGESEPhD of Psychology and

Cognitive Science. Dip. diPsicologia Dinamica e Clinica.Sapienza Università di Roma,

Italia.

Influencias de De Sanctis en Argentina a través de la labor de Ciampi enla primera cátedra de Neuropsiquiatría InfantilLUCÍA ROSSI, GIOVANNI PIETRO LOMBARDO, ANA ROCÍO JUÁREZ, HERNÁN GUSTAVO ELCOVICH, GIORGIAMORGESE

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Historia

CORRESPONDENCIALic. Ana Rocío Juárez.

Hipólito Yrigoyen 3242, C1207ABQ. Ciudad de Buenos Aires,

R. Argentina; [email protected]

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IntroducciónLanfranco Ciampi fue médico psiquiatra forma-do en Italia con el Dr. Sante De Sanctis.Realizaba prácticas en el Hospital Clínico deBarcelona (España) y al regresar a su paísnatal, en 1913 comenzó a trabajar en el InstitutoMédico-Pedagógico de Roma, dirigido por sumaestro. En 1919 fue nombrado Vicedirector delInstituto, cargo que ejerció por un año.

La obra de Lanfranco Ciampi en Argentina seinició en 1920, cuando llegó a Buenos Aires.Luego de una rápida y cálida recepción por suscolegas locales, comenzó a trabajar en elInstituto Psico-Pedagógico de esa ciudad,donde aportó su formación en neuropsiquiatría.En ese tiempo inició una comunicación episto-lar con De Sanctis que da cuenta de la relaciónacadémica y de la deferencia con que nuncadejó de referirse a su mentor.

Su trabajo giró en torno a la distinción entreenfermos mentales que pueden reeducarse pormedio de tratamientos pedagógicos y enfermosque no pueden reeducarse y que requieren detratamiento médico. Esta clasificación le permi-tió un abordaje profiláctico de [lo que se consi-deraba] las principales causas de ladelincuencia ―el ocio y la desocupación― enrelación con quienes podían adaptarse social-mente, y la peligrosidad e inadaptabilidad, enrelación con aquellos anormales que demanda-ban internación.

El reconocimiento a su labor no demoró y elgobierno de la provincia de Santa Fe lo invitó aorganizar el trabajo con niños anormales en esaprovincia. Se instaló en la ciudad de Rosario(Santa Fe, R. Argentina) donde se desarrollóinstitucionalmente: fundó la Primera Escuelapara Niños Retardados de la Argentina, la pri-mera cátedra de Neuropsiquiatría Infantil delmundo en la Facultad de Ciencias Médicas,Farmacia y Ramos Menores de la UniversidadNacional del Litoral y la sede de Rosario de laLiga de Higiene Mental.

Marco teóricoPara comprender la verdadera dimensión delos hechos históricos no basta con el abordajelógico racional, el cual si bien procura claridadconceptual no indaga las manifestaciones afec-tivas y receptivas que también auxilian la laborcomprensiva. Estas manifestaciones de carác-

ter endopático [15] permiten revivir la conexiónde sentimientos propia de una época y, de esemodo, reconstruir el pasado.

La historia es la diversidad en despliegue de las for-mas humanas de vida, diversidad que radica en lafuerza genética de la naturaleza humana y que sepresenta en la existencia por la acción de las diver-sas condiciones geográficas, climáticas y sociales devida [5].

Es por estos motivos que se torna necesariorealizar una contextualización de los momentosprecedentes, tanto en lo que respecta a la for-mación de Lanfranco Ciampi con su maestroSante De Sanctis como en lo concerniente alcontexto nacional argentino en el que Ciampifinalmente desarrolló su obra más notable.

MetodologíaDe acuerdo con la clasificación para las meto-dologías de investigación en Psicología pro-puesta por Montero & León [9], se trata de unestudio ex post facto retrospectivo, en tanto lasrelaciones causales expuestas parten de laimposibilidad de modificar las variables, puestoque refiere a situaciones pasadas.

Las fuentes documentales son abordadasmediante técnicas cualitativas de análisis críticode discurso, según las concepciones de VanDijk [4], quien sostiene que los textos expresany reproducen las ideología–creencias y concep-ciones teóricas–de su productor y que un acer-camiento analítico permite indagar la relaciónentre cognición, discurso y sociedad.

Asimismo, se tomarán las concepciones deNarvaja de Arnoux [10], quien sostiene que sedebe analizar lo dicho en el texto en dos nive-les: lo efectivamente dicho y lo dicho en lo no-dicho (interpretar los silencios y omisiones delos productores de discurso).

Antecedentesa) Lanfranco Ciampi: sus orígenes y formaciónLanfranco Ciampi fue un médico italiano nacidoen San Vito in Monte en 1885. Muy temprana-mente se especializó en el trabajo con niñosdeficientes y retrasados. En 1910, cuando seencontraba trabajando en el Hospital Clínico deBarcelona (España) inició una comunicaciónepistolar con su maestro, el Dr. Sante DeSanctis. En 1913 regresó a Italia, llegando pri-mero a Nápoles y luego a Roma, donde inició

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un trabajo en el Instituto Médico-Pedagógico deRoma, del cual De Sanctis fue su Director. En1919 llegó a ser Vicedirector del Instituto y alaño siguiente viajó a Buenos Aires (Argentina)para iniciar una obra pionera de vanguardiainternacional en el campo de laNeuropsiquiatría Infantil.

b) Contexto argentinoHacia 1916 habían llegado a la Argentina seismillones de inmigrantes de los cuales más de lamitad provenía de Italia y España, siendo en sumayoría trabajadores agrarios. Impulsados porlas desfavorables condiciones socioeconómi-cas de sus países de origen fueron atraídos porlas políticas nacionales de Argentina parapoblar el interior del país y satisfacer las nece-sidades de mano de obra.

Sin embargo, las posibilidades de obtener tie-rras eran escasas debido a sus altos valores,inalcanzables para los inmigrantes. Por ello,muchos optaron por instalarse en zonas urba-nas. El problema era que no había ciudadespreparadas para absorber la gran afluencia,que en poco tiempo duplicó la población argen-tina.

Así, en la ciudad de Buenos Aires ―la quemayor número de inmigrantes recibió― surgeel hacinamiento con la figura del conventillo: uncaserón de cuatro o cinco habitaciones llama-das piezas con una familia por habitación y unacocina y un baño compartidos. Las pertenen-cias de las familias se ubicaban en los patiospuesto que las piezas hacían de dormitorio con-yugal, infantil, sala, comedor y cocina [13].Situaciones similares de precarización sereprodujeron en las ciudades de Rosario yCórdoba.

Con esta coyuntura, era ínfimo el espacio físicoque poseían los niños para jugar dado que, poruna lado, desde 1892 regía una reglamentaciónque prohibía a los niños jugar a la pelota en lascalles y, por otro, para evitar destrozos, se lesimpedía jugar en los patios. En este sentido seprodujo un empuje del niño hacia afuera, haciala calle y la desprotección [8].

Sin embargo, la doble prohibición produjo unasituación paradojal: el niño no podía jugar den-tro de las casas ni fuera de ellas. Este escena-rio llega a su punto de máxima tensión cuando

en 1907 los niños toman las escobas de lascasas y salen a la calle a «barrer» a los caseros.Este hecho se conoce como la Huelga de lasEscobas y se produjo en paralelo a la Huelga delos Inquilinos, originada en los altísimos costosde alquiler y los consecuentes desalojos.

Esta revuelta iniciada en el sur de la ciudad deBuenos Aires rápidamente se extendió a ciuda-des como Rosario, La Plata, Bahía Blanca, Mardel Plata, Córdoba y Mendoza. Las condicionessocioeconómicas eran similares en diversoslugares del país.

c) La ciudad de RosarioEntre los años 1914 y 1930 la ciudad deRosario sufrió una explosión demográfica comoresultado del crecimiento del movimiento por-tuario y de las corrientes migratorias internascon su consecuente proceso de urbanizaciónde los suburbios. En este sentido:

Su espacio urbano toleraba el deambular desordena-do y ruidos de ciudadanos, animales y locos; en élcirculaban coexistiendo los gritos de los vendedores,los delirios de los locos y las lenguas extrañas de sunumerosa población extranjera [6].

Hasta ese momento eran las Sociedades deBeneficencia las encargadas de socorrer a loslocos. Si éstos no eran juzgados peligrosos,tenían permitido entremezclarse en el paisajeurbano y deambular por las calles con el restode los ciudadanos. Por el contrario, los delin-cuentes y peligrosos eran destinados a la celdapolicial, a la espera de que algún tren los lleva-ra a la Colonia Oliva (Córdoba) o a BuenosAires [7].

Hacia 1921 Rosario contaba con 3038 huérfa-nos menores de catorce años. Esta problemáti-ca era abordada por el Asilo de Huérfanos,dependiente de la Sociedad de Beneficencia.

Sin embargo, el creciente número de casoshizo que el Estado adoptara medidas, surgien-do la necesidad de armar dispositivos tendien-tes a contener estas formas de marginalidadsocial. Respecto del inicio del dispositivo psi-quiátrico en Rosario, Gentile plantea que elmismo se establece en el área académica nosólo gracias al progreso de la ciencia sino tam-bién por una política estatal decidida a tratarnecesidades sociales específicas que urgíaatender.

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En este contexto aparece uno de los pionerosde la psiquiatría infantil en Argentina: el Dr.Lanfranco Ciampi.

Lanfranco Ciampi: discípulo de Sante DeSanctisa) Su trabajo en el Instituto Psico-PedagógicoTras siete años de desempeño junto a DeSanctis en el Instituto Médico-Pedagógico deRoma, Ciampi decidió emprender su viaje a laArgentina. En una carta previa a su partida,fechada el 23 de marzo de 1920, agradecía asu maestro por el interés mostrado en su traba-jo. Al llegar, comenzó a trabajar en el InstitutoPsico-Pedagógico de Buenos Aires. Dos mesesdespués, el 2 de mayo de 1920, le comentabaen otra carta que había sido muy bien recibidopor sus colegas de la clínica psiquiátrica local,lo que le facilitaba iniciar rápidamente su traba-jo con niños anormales.

Ya instalado en el ámbito de la Psiquiatría enArgentina, el 8 de septiembre de 1922 le escri-bía a De Sanctis informándole que se estabaorganizando una nueva Facultad de CienciasMédicas, Farmacia y Ramos Menores en laUniversidad Nacional del Litoral (Rosario, pro-vincia de Santa Fe) y que el gobierno provincialle había encargado ocuparse de los niños anor-males.

Se observa de este modo que el discurso deCiampi se valida en su formación y experienciacon De Sanctis, en su trabajo en el InstitutoPsico-Pedagógico y también en el reconocimien-to que le hace el gobierno al encargarle la tareade organizar el trabajo con niños anormales.

Es a partir de estas relaciones con los sectorespolíticos que en 1922 consiguió crear la prime-ra Escuela para Niños Retardados del país y en1923 que se dictara el primer curso dePsiquiatría Infantil en dicha Facultad. Años mástarde, el curso adquirió el estatuto de cátedra,convirtiéndose así en la primera cátedra deNeuropsiquiatría Infantil del mundo.

b) Educabilidad y peligrosidad: conceptos esen-ciales de su obraInicialmente se señalaba que el hacinamientoprodujo un empuje del niño hacia afuera, haciala calle y de ese modo surgió la figura del niñode la calle como niño peligroso. El trabajo deCiampi abordó esta problemática centrándose

en dos conceptos fundamentales: peligrosidady educabilidad.

Se organizó entonces un primer grupo dondese reunió a los anormales psíquicos verdade-ros, los insuficientes mentales de grado livianoy los insuficientes mentales con anomalías decarácter; y un segundo grupo integrado por losfrenasténicos ―incluye imbéciles e idiotas―,epilépticos y niños con atrofia ética post-ence-falítica.

Estos dos grupos clasificatorios aparecían dife-renciados y opuestos de acuerdo a los criteriosde educabilidad, sociabilidad y tratamiento.Ciampi afirmaba que los niños que pertenecíanal primer grupo eran más educables y, porende, más socializables que los del segundo.Por ello, sostenía que el tratamiento en estecaso debía basarse principalmente en cuestio-nes pedagógicas mientras que en el segundocaso debía recurrirse a un tratamiento esencial-mente médico-psiquiátrico.

La finalidad de esta clasificación consistía enseparar a aquellos niños que presentaban diag-nósticos más serios y que por ese motivo debí-an ser internados para recibir tratamiento médi-co, de los que por medio de la educación, podí-an adaptarse al ambiente social para ser eco-nómicamente valorizados. Así, se destacabaque lo importante era que el niño pudiera:

(…) desarrollarse en proporción a las finalidades quela sociedad ambiciona para sus hijos […] la económi-ca, la productiva, son alcanzables por los anormalespsíquicos, pero muchas otras, no lo son […] Losanormales psíquicos pueden rendir hasta el 85% delo que rinden los jóvenes sanos y normales, peronunca podrán volverse obreros originales y ricos deiniciativas [3].

Es decir, Ciampi reconocía que estos niños,aún con educación, nunca lograrían ser igualesa los niños normales, pero podrían rendir y des-empeñarse de modo tal que en lugar de conver-tirse en una carga para la familia y para lasociedad, pudieran volverse hombres útiles.

Ciampi sostenía que la anomalía psíquica erauna de las principales causas de la delincuen-cia y es así como el abordaje pedagógico deesta problemática se presentaba como una res-puesta tendiente a combatirla. Si el anormal y elretardado abandonaban la escuela donde habí-

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an recibido capacitación al finalizar el períodoescolar, debían salir al mundo a competir conlos normales por un puesto de trabajo. En tantoen ausencia de la contención de la escuela noestaban en condiciones de bastarse a sí mis-mos, serían fácilmente derrotados por los nor-males, que poseen mejores habilidades.Aparecería entonces el ocio y la desocupación,en primer lugar. Luego la miseria, que deriva enel robo o en la prostitución, ambos caminos quellevaban a la cárcel. La solución a este mal esque el joven no abandonara definitivamente laescuela sino que continuara realizando laborespara las que fue preparado para así evitar esedecurso que, de otro modo, resultaba inevita-ble.

Cuando se trata de los niños que correspondenal segundo grupo, Ciampi indicaba que los fre-nasténicos eran incapaces de adaptarse social-mente a causa de la idiocia o de la imbecilidad,razón por la cual debían permanecer en institu-ciones de internación. Sobre los epilépticosdecía que, dado que manifiestaban peligrosi-dad, requerían tratamiento pedagógico indivi-dualizado junto con el tratamiento médico. Encuanto a los niños con atrofia post-encefalíticaafirmaba que eran propensos a la inmoralidad,de carácter inestable e inquieto, nunca estabantan enfermos para adaptarse a un hospital nitan sanos para adaptarse a una cárcel. Porestos motivos, para todo este gran grupo deanormales indicaba principalmente tratamientomédico.

c) Hacia una clasificación de las enfermedadesmentalesEl Boletín del Instituto Psiquiátrico, constituidoen el órgano de difusión oficial de la Facultadde Ciencias Médicas de Rosario, publicó en1930 un artículo escrito por Gonzalo Bosch―Titular de la Cátedra de Psiquiatría― yLanfranco Ciampi ―titular de la Cátedra dePsiquiatría Infantil― titulado «Clasificación delas enfermedades mentales», en el que se pro-ponía un rediseño de los cuadros psiquiátricosclásicos [11].

Este trabajo surgió como heredero de los deba-tes producidos en 1928, durante la PrimeraConferencia Latino-Americana de Neurología,Psiquiatría y Medicina Legal, y se propusoalcanzar una clasificación científica de lasenfermedades mentales. Su criterio organiza-

dor estaba dado por el grado de autonomía psí-quica del enfermo. No obstante, se señalaba elcarácter provisorio de dicha clasificación porcuanto el avance del conocimiento de la cienciatraería nuevos descubrimientos que la pondríanen tensión.

Se advierte que los límites entre la salud y laenfermedad no eran muy nítidos, razón por lacual en muchos casos no resultaba posible sudelimitación. Por ello, se establecían algunasconsideraciones que funcionaban como guíapara el armado de la clasificación [1]:

a) Debe establecerse una distinción entre elsíndrome clínico ―en tanto constelación sinto-mática― y la entidad morbosa con autonomíapropia, para la cual se debe conocer su etiolo-gía.b) Es aconsejable relativizar la distinción entrefactores etiológicos endógenos y exógenos(debido a su coexistencia y simultaneidad enmuchas enfermedades).c) Deben diferenciarse las causas de contin-gencia de las causas específicas al momentode establecer la etiología de una entidad mor-bosa.

Asimismo, se tomaban en consideración laselaboraciones de Nicola Pende, quien señalabala existencia de un factor realizador que proce-de del ambiente en el desencadenamiento deuna enfermedad mental.

Desempeño Institucionala) Articulación entre la Cátedra de PsiquiatríaInfantil y la Escuela para Niños RetardadosEn base a la experiencia obtenida en el InstitutoMédico-Pedagógico de Roma y a su prontainserción en el ámbito local, el Dr. Agudo Ávila―Delegado Organizador de la Facultad deCiencias Médicas, Farmacia y Ramos Menoresde Rosario― convocó a Lanfranco Ciampi paradiseñar la Escuela para Niños Retardados enesa ciudad.

Gracias a las gestiones realizadas por Ciampiante Cecilio Juanto, intendente de Rosario, laEscuela se instaló en el Parque Independenciay comenzó a funcionar en 1922.

Siguiendo la corriente neuropsiquiátrica deSante De Sanctis, durante la primera mitad delaño 1923 Ciampi organizó el primer Curso de

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Psiquiatría Infantil. Al finalizarlo, en diciembredel mismo año, le escribía a su mentor infor-mando que había completado con éxito el cursoy que los alumnos habían realizado sus prácti-cas en la Escuela para Niños Retardados.

Los principales contenidos se basaban en laidea de que la enfermedad mental del niño nopodía abordarse a partir del modelo de la psi-quiatría pensada para adultos, sino que reque-ría de una psiquiatría específica.

En 1924, se decidió el traslado de la Escuela aun pequeño local situado frente a la Facultad.Por este motivo, el 5 de septiembre de 1924Ciampi elevó una nota al Dr. Rafael Araya―Decano de la Facultad de CienciasMédicas― con el fin de poner en consideraciónun proyecto que permitiera organizar de mane-ra definitiva la cátedra de Psiquiatría Infantil yarticularla con la Escuela para NiñosRetardados, donde los alumnos de la cátedrarealizarían sus prácticas.

A tal efecto, describía la situación en que sehallaba la Escuela explicando que sólo habíapodido funcionar como un externado, recibien-do a los enfermitos durante el día. Si bien pre-sentaba a los estudiantes universitarios casosclínicos de niños retardados anormales y neu-ropáticos (se recibían entre 18 y 22 casos dia-rios), este sistema no permitía demostrar cómopodía funcionar correctamente una EscuelaEspecial para la atención de casos más graves:síndromes psicopáticos agudos o crónicos, his-terismo infantil, distimias infantiles, parálisisgeneral progresiva y demencia precocísima(diagnóstico tomado de De Sanctis). Por elloplanteaba la necesidad de habilitar un sistemade Internado:

Que los alumnos se encuentren con la posibilidad deobservar todos los tipos de enfermos pertenecientesa nuestra asignatura (Psiquiatría Infantil) y darsecuenta de todos los procedimientos y sistemas dereeducación y de asistencia, y de experimentar su efi-cacia [2].

Proponía el abordaje de los casos gravesmediante tratamiento psiquiátrico mientras queel de los casos leves, mediante tratamientopedagógico. Estos casos leves serían tratadosen el Externado o Internado Diurno, que estaríadestinado a niños oligofrénicos o inestables delcarácter, susceptibles de mejoría y no peligro-

sos, así como también niños neuropáticos y psi-copáticos leves.

Asimismo, argumentaba en este proyecto lanecesidad de sostener el curso de Ortofonía,tendiente al tratamiento reeducativo de la pala-bra para aquellos niños que padecían trastor-nos del lenguaje, diseñando una sección queatendiera las necesidades de aquellos niñosque demandaran la corrección de los defectosy los trastornos de la palabra.

De este modo, se cumplía con el doble objetivode trabajar en la prevención, protección y cui-dado y en la curación de la enfermedad, comolo planteaba el Higienismo Mental, por el quelas políticas sanitarias surgen como una res-puesta a la demanda social [12], convirtiéndosela Escuela en la primera institución que afronta-ba esta problemática.

Finalmente, en 1925, Ciampi logró que laEscuela cambiara su sede, trasladándose alHospicio de Alienados.

b) El consultorio externo de Psiquiatría InfantilDesde 1922 funcionó el consultorio externo dePsiquiatría Infantil de Rosario, dependiente delInstituto de Psiquiatría. En los años iniciales elservicio atendía una vez por semana; a partirde 1924, dos veces por semana; y desdeoctubre de 1927 ―año en que Ciampi asumecomo Director del Hospicio de Alienados―, tresveces por semana, al igual que el servicio deadultos.

Este consultorio representaba un medio eficaztanto a nivel de tratamiento, donde se atiende alos neuro-psicopáticos no graves, como a nivelde la profilaxis: muchos pacientes internadospasaban por el consultorio una vez que erandados de alta a fin de evitar posibles recaídas.

El éxito del consultorio radicaba en una impor-tante estrategia: estaba emplazado con accesodirecto a la calle. Ciampi señalaba que, en lamayoría de los casos, estos consultorios se ubi-caban en el interior de los hospicios, asilos ocolonias y que el hecho de tener que adentrar-se en las instituciones donde se hallan interna-dos pacientes más graves, disuadía al públicomás general de efectuar consultas. Por suparte, la ubicación geográfica se conviertía enotro factor de impacto: la instalación en lugares

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alejados de las ciudades, dificultaba las vías deacceso y con estas dificultades se tendía a quela gente no consultara. Por ello, un local en elcentro de la ciudad y de fácil acceso desde lacalle generaba estadísticas muy altas respectode la media. Así, en el quinquenio 1924-1929,el Hospital Nacional de Alienados, ubicado enBuenos Aires (población: 2.000.000 de habitan-tes), recibió 315 consultas por consultoriosexternos mientras que el Instituto Psiquiátricode Rosario (población: 400.000 habitantes)recibió 2237 consultas.

Al respecto, la Sociedad de Neurología yPsiquiatría reconocía en su sesión del 1º deoctubre de 1929 el fecundo trabajo que sevenía realizando al señalar que el Instituto dePsiquiatría de la Facultad de Medicina deRosario tenía el honor de ocupar el primerpuesto en la aplicación de la Higiene Mental yel tratamiento de las psicopatías.

c) Modificaciones al plan de estudios: un inten-to por suprimir la enseñanza de laNeuropsiquiatría Infantil y la PsicologíaExperimentalEn julio de 1930 ―dos meses antes del golpede Estado por el que Félix Uriburu asumecomo presidente de facto―, las nuevas autori-dades elegidas de la Facultad se propusieronrealizar modificaciones al plan de estudios de laFacultad de Ciencias Médicas de Rosario.

La comisión creada para ese fin entendía que elobjetivo principal de la Universidad debía ser laformación de profesores e investigadores,adoptando las concepciones de la EscuelaActiva. Para ello proponían eliminar la ense-ñanza enciclopédica y sustituirla por una objeti-va, práctica e individual que propiciara unaposición activa del alumno.

De este modo, los docentes debían limitarse aguiar y ayudar al alumno a resolver los obstácu-los que se le presentaran para posibilitar el des-arrollo de la personalidad intelectual de cadauno. En este sentido, se promovió la no imple-mentación de un horario uniforme para todoslos alumnos: debían tener tiempo libre paradesarrollar espontáneamente su actividad pre-dilecta.

Lanfranco Ciampi(Neuropsiquiatría Infantil) yGonzalo Bosch (Psiquiatría) no fueron consul-

tados por los miembros de la Comisión. Si biense mostraban a favor de estas propuestas,adoptaron una posición moderada indicandoque se debían evitar las exageraciones quehabían ocurrido en otros países con la imple-mentación de esas ideas. Así, afirmaban que elmaestro universitario no debía ser un especta-dor pasivo sino que debía estimular y favorecerel desarrollo de las aptitudes latentes del alum-no a partir de sus intervenciones, guiadas siem-pre por el rigor científico.

En efecto, la Comisión sostuvo que no seencontraba fundamento para dividir la enseñan-za de la Neuropsiquiatría Infantil y la PsicologíaExperimental de la enseñanza de la Psiquiatría,por lo que se propuso el dictado de un solocurso de Psiquiatría donde se incluyeran todassus ramas.

En octubre de 1930 el Boletín del InstitutoPsiquiátrico publicó un trabajo de Ciampi yBosch titulado: «A propósito de la organizacióndel plan de estudios de la Facultad de CienciasMédicas de Rosario». Este artículo era una res-puesta desde sendas cátedras a las modifica-ciones propuestas por la Comisión para la ela-boración del nuevo plan de estudios.

La respuesta era taxativa: la PsicologíaExperimental, en primer lugar, no era una ramade la Psiquiatría, sino una ciencia auxiliar queella utilizaba; en segundo lugar, la Comisiónparecía mostrar una contradicción interna alproclamar en sus folletos la necesidad de unamayor diversificación de especialidades y alproponer en la práctica que se eliminara unanueva especialidad como la NeuropsiquiatríaInfantil, que redundaba en el progreso de lamedicina y estaba ligada con problemas degran importancia social [4].

La Psiquiatría Infantil, que ha nacido primerocomo una necesidad práctica y luego como unanecesidad científica, entiende ―explicabaSante De Sanctis― que el niño no es un adultopequeño y, por lo tanto, presenta una persona-lidad particular.

Se reconocía la fundamentación de unaNeuropsiquiatría Infantil como disciplina sepa-rada al pensar una enfermedad mental como lapsicosis, en donde se verificaba la existenciade predisposiciones hereditarias cuyas raíces

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emergían en la edad infantil. Es decir, que en elniño ya estaría todo el futuro psicopático y en laniñez podrían reconocerse ya los diversos tem-peramentos [4].

Esta enérgica respuesta logró cumplir con dosobjetivos. Por un lado, evitó que se suprimierala cátedra de Neuropsiquiatría Infantil; por otro,visibilizó ante las nuevas autoridades de laFacultad la utilidad de contar con un programade psiquiatría infantil afín a los preceptos de laHigiene Mental.

Es decir, la Psiquiatría Infantil tenía los recur-sos y capacidades para brindarle a la HigieneMental los elementos que necesitaba paracumplimentar sus objetivos. En este sentido,esta disciplina no podía desaparecer del plande estudios de la Facultad de CienciasMédicas de Rosario ya que otorgaba los cono-cimientos necesarios para tratar y curar lasenfermedades mentales en los niños y realizarlos esfuerzos necesarios para impedir queestas se desarrollaran o volvieran a aparecer(profilaxis).

La Liga de Higiene Mental: la experiencia deRosarioEl 7 de noviembre de 1938 el Dr. LanfrancoCiampi elevó a la Comisión Central de la LigaArgentina de Higiene Mental un plan para laorganización de un instituto para el tratamientoy educación de los niños débiles mentales. Fueaprobado por unanimidad y se le encomendó aCiampi su organización y dirección.

La diferencia de esta institución con las colo-nias radicaba en dos aspectos principales: 1)funcionaba en el centro de la ciudad y no en laslejanías; y 2) se trataba de un establecimientode semi-internado con vacaciones reducidas yhorario completo y no un internado cerrado.Estos contrastes fueron bien recibidos por laComisión Central en tanto la institución reque-ría partidas presupuestarias mucho menoresque una colonia.

Este establecimiento tenía el objetivo de reem-plazar a la escuela común para la educación delos niños anormales puesto que ésta no estabapreparada para tal fin. Sin embargo, al no tratar-se de un internado, permitía que los niños con-tinuaran recibiendo el cariño y los cuidados desus padres.

Bajo el lema es preferible evitar la enfermedadque curarla, proponía que la profilaxia debíahacerse, siempre que se pudiera, antes de queel niño nazca; en caso contrario, en la primerainfancia.

Los niños peligrosos e inadaptables eran rele-gados al Hospicio de Alienados, por lo que lainstitución estaba destinada al trabajo con niñosreeducables y socialmente adaptables: lamisión era evitar que estos niños ingresaran enel decurso del ocio y la desocupación:

Si bien es cierto que muchos anormales van a engro-sar las filas de los criminales, la mayoría de aquellospueden ser salvados, si interviene oportunamenteuna educación bien organizada y un tratamiento ade-cuado a cada caso particular [3].

Instruyendo y educando al niño para desarrollarsus devaluadas capacidades, se buscabaorientarlo al trabajo manual y regularizar sucarácter y conducta con el propósito de lograrsu adaptación y utilización social.

Ciampi concebía a la adaptación social en lostérminos que Sante De Sanctis lo señalaba, entanto adaptación a un trabajo por cuanto esteresulta un avivador de disposiciones, un susci-tador de formaciones espirituales y un sistema-tizador del carácter.

Nuevamente se observa la influencia de DeSanctis en las concepciones de Ciampi: publicaen ese entonces en el Boletín del InstitutoPsiquiátrico una salutación a su maestro, quequeda a cargo de la Cátedra de ClínicaPsiquiátrica de la Facultad de Medicina deRoma; en ella le reconoce su influencia en eldiseño del modelo asilar y de enseñanza imple-mentado en Rosario.

ConclusionesEn el análisis del desempeño institucional yacadémico de Lanfranco Ciampi en la ciudadde Rosario (Argentina) se aprecian las influen-cias teóricas de Sante De Sanctis. De estemodo, siguiendo la corriente neuropsiquiátricade De Sanctis, logra instalarse rápidamente enel ámbito de la psiquiatría argentina, iniciandosu labor en el Instituto Psico-Pedagógico deBuenos Aires. Esto le vale el reconocimientode las autoridades de la provincia de SantaFe, que le encargan organizar el trabajo con

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niños anormales.

Así, en 1922 funda en Rosario la PrimeraEscuela para Niños Retardados de Argentina yen 1923 consigue dictar el Primer Curso dePsiquiatría Infantil del país, que años más tardeadquiere el estatuto de cátedra, convirtiéndoseen la primera del mundo en esta materia.

A partir de sus influencias teóricas, entiendeque la anomalía psíquica es una de las princi-pales causas de la delincuencia. Es por estoque concibe a la Psiquiatría Infantil como aque-lla disciplina específica (no como una especiali-zación dentro de la Psiquiatría de adultos)capaz de brindar los recursos e instrumentostanto para las tareas de profilaxis como paratratar y curar las enfermedades mentales en losniños, en concordancia con los preceptos de laLiga Argentina de Higiene Mental.

En su obra se destacan las conceptualizacio-nes en torno a la educabilidad y peligrosidadde los niños, proponiendo una clasificaciónque agrupa, por un lado, a aquellos que sepresentan como peligrosos y por lo tantodeben ser internados para recibir tratamientomédico; y por otro, a los niños reeducablesque, recibiendo tratamiento especialmentepedagógico, pueden adaptarse al ambientesocial.

Puede apreciarse la articulación entre reeduca-ción e inserción social en tanto Ciampi proponeque el proceso de educación especial debe pre-parar al niño para que, una vez terminada laescolaridad, se desarrolle en proporción a loque la sociedad espera de un joven, es decir,que sea económicamente productivo y, de estemodo, evitar el decurso que lleva del desem-pleo y el ocio a la delincuencia.