Buenas, como muchos ya sabéis estoy en Nepal intentando ayudar en la medida de lo posible en la

atención de victimas post-terremoto y la reconstrucción de las numerosas poblaciones destruidas. La

verdad que no está siendo nada fácil, lo primero que se aprende cuando intentas colaborar es lo difícil

que es realmente AYUDAR y las complicaciones de hacerlo lo más eficazmente posible, la cabeza se te

llena de dudas y no es nada fácil saber si de verdad lo estás haciendo correctamente. Sobre todo es muy

complicado ponerse en la mentalidad de la sociedad en la que te introduces, que no es la nuestra y por

tanto no perciben los acontecimientos, los problemas, las necesidades y las soluciones de la misma

forma que las percibimos nosotros.

Escribo estas líneas para contaros a grandes rasgos mi experiencia aquí, en compañía de Dani y de la

gente que vamos conociendo. Contaros el pequeño proyecto que estamos planteando dentro de

nuestras grandes limitaciones y sobre todo la realidad de un extraordinario país con una extraordinaria

gente, realidad que está muy lejos de la que nuestros queridos y faltos de ética periodistas intentan

plasmar en las catastróficas noticias que llegan al resto del mundo y que parecen más bien motivadas

por un afán de ventas que por una motivación de enviar información objetiva de la realidad, no

teniendo en cuenta que con ello echan por tierra la economía de un país que depende en gran medida

del turismo justamente cuando menos lo necesita…pero bueno, no vamos a ponernos a rajar aquí…

El país está bien, por supuesto tremendamente afectado, pero intentando poco a poco volver a la

normalidad. Las zonas más afectadas son sobretodo la del valle de Katmandú, zona norte de Katmandú

hasta Everest (epicentro del primer terremoto) y sur de la capital. El gran número de edificios dañados,

que no se van a poder recuperar, no es acorde con el relativamente pequeño número de víctimas

gracias a que el primer terremoto ocurrió durante el día y la mayoría de la gente se encontraba fuera de

sus domicilios. No me malentendáis, con esto quiero decir que la cantidad de casas afectadas es muy

muy alta y va a ser el principal problema en el medio plazo ya que su reconstrucción requiere un dinero

que las familias nepalís no van a poder conseguir. De momento esta gente duerme en la calle, en tiendas

de campaña, campamentos montados por las asociaciones de ayuda en las grandes ciudades y en

tiendas o cabañas temporales construidas por las propias familias afectadas en los entornos rurales.

Nuestra sensación es que así pasaran mucho tiempo, primero porque no va a haber dinero para

reconstrucción y segundo porque el miedo que se ha adueñado de la población no les va a permitir

dormir dentro de edificios durante un tiempo aunque no estén dañados (en esto la mentalidad de la

sociedad nepalí está muy lejos de la occidental, aunque sea difícil de entender desde nuestro prisma).

Que haya aviso oficial de que otro terremoto mayor está por venir y pequeños terremotos diarios (que

yo, que soy un melón, ni noto), no ayuda. Así que todo indica que la situación va a mantenerse

permanente durante un largo periodo, esperemos que no por años.

Por otra parte el país está bien, como decía intentando volver a la normalidad en cuanto a trabajo y

abastecimiento. La gente que se dedica al turismo va a pasar muy malos meses hasta que el extranjero

pierda el miedo y vuelva a venir al país, esto es realmente grave, no quiero dar datos que desconozco a

ciencia cierta, pero una gran parte de la población depende de ello o de su entorno. Nadie debe tener

miedo a volver. En cuanto a abastecimiento de medicinas y productos básicos cualquier ayuda será

bienvenida, pero no notamos a pie de calle grandes carencias.

En el corto plazo hay que sumar un hándicap adicional a los problemas mencionados antes, el monzón.

Estamos ya en época pre monzón con prácticamente una tormenta diaria y en dos semanas nos

meteremos de pleno en tres meses de lluvia continuada. La precaria situación de la gente durmiendo en

la calle hace que se tema por la higiene de las víctimas y que esto puede dar lugar a enfermedades y

más muertes. Por ello se hace imprescindible una rápida actuación para que todo el mundo privado de

domicilio tenga un refugio temporal debidamente acondicionado e instalaciones básicas mínimas para

pasar estos complicados próximos tres meses.

En cuanto a cómo se organizan las ayudas tenemos que:

En el gobierno nadie confía. Parece que está planificando y organizando la ayuda y reconstrucción pero

sinceramente la sensación que nos da es más bien de obstrucción y de que no va a ser de ayuda a las

víctimas. No hemos visto ningún movimiento claro y no creo que planteen una reconstrucción masiva de

todos los edificios afectados, hablaríamos de sumas multimillonarias, menos aun en las zonas rurales.

Las grandes ONGs en la actualidad están totalmente desacreditadas y parece que una vez más están

demostrando lo que la mayor parte de la gente piensa de ellas.

Mi idea utópica de que una gran asociación no gubernamental a nivel mundial se especialice en

catástrofes y ataque de forma organizada, eficiente e independiente a los gobiernos de turno

recaudando todos los fondos de ayuda ante desastres de este tipo, que no olvidemos suceden cada año

en alguna parte del mundo, y empleándolos procedimentadamente de la forma más eficiente posible no

puede estar más lejos de la realidad actual.

Con todas estas carencias, tenemos que las asociaciones y fundaciones menores y voluntarios, que hay

muchos, provistos de pequeños capitales de ayuda, son los que están organizándose de forma

independiente para hacer llegar su ayuda a las víctimas a pequeña escala: pequeñas comunidades,

familias, conocidos afectados, barrios. Esta forma de hacerlo es tremendamente ineficiente y muy

complicada porque como decíamos arriba: ayudar no es nada fácil; pero a día de hoy no hay alternativa

fehaciente. La gente empieza de cero y no es sencillo acertar en cómo ayudar verdaderamente al

afectado. Nos gastamos en darles todo lo que piden para hacer un campamento temporal cojonudo?

Eso ayuda a incentivar la construcción de casas?; Les damos a modo de caridad toda la comida que

piden? Eso ayuda a incentivar que vuelvan al trabajo y la vida normal?; Nos centramos en

reconstrucción? Están los nepalís en disposición tanto económica como moral de volver a dormir en una

casa? Las diferentes respuestas a estas preguntas siempre son complejas y suelen contradecirse unas

con otras.

Con todos estos ingredientes podemos plantear a modo de resumen las necesidades que tiene nepal

después del terremoto desde nuestra humilde experiencia en tres fases:

Necesidad de alimento para cubrir las necesidades básicas en el corto plazo pues la gente se ha

quedado sin trabajo, esta tremendamente conmocionada y afectada psicológicamente. Este

suministro se mantendría durante el menor tiempo posible intentando motivar a la gente para

que vuelva a su vida normal.

Necesidad de refugio temporal para el corto plazo y monzón. Las victimas desprovistas de su

domicilio necesitan techo, herramientas primarias del hogar para los que las han perdido e

instalaciones básicas de suministro de agua y baños para evitar propagación de enfermedades.

A medio plazo estos campamentos, sobre todo en las grandes ciudades, requieren de

mantenimiento. En las zonas rurales los habitantes cuidaran de sí mismos. En los grandes

campamentos parece que las ONGs y ayudas de países extranjeros movilizados tomaran las

riendas.

Necesidad de reconstrucción. Esto será a largo plazo, al menos a partir de octubre (nadie va a

reconstruir en monzón). Se necesita mano de obra para desescombrar, material y profesionales

de construcción para volver a entregarles una casa a los afectados. Este es el punto que vemos

más importante, donde creemos que todos deberíamos estar centrados, pero en el que poca

gente piensa ahora y más difícil es de atajar. Dudamos mucho que los fondos de ayuda lleguen

para cubrir esto, sobre todo si se “malgastan” en las fases anteriores y las propias víctimas están

muy lejos de pensar en reconstrucción es estos momentos, con lo que la tarea de ayuda a

reconstrucción o simplemente concienciación de la población se nos convierte en

tremendamente complicada. El gobierno no da la sensación que vaya a colaborar realmente,

sobretodo en entornos rurales y las familias nepalís no tienen dinero como para pagarse una

nueva casa. Con lo que nuestra conclusión y miedo es que posiblemente las familias pasen

muchos meses, si no años, viviendo en los refugios temporales.

Viuda en lo alto de los escombros de su antigua casa un mes después del primer terremoto

Con todo esto en mente es como intentamos estructurar nuestro pequeño proyecto de ayuda. Hemos

hablado con varias asociaciones para colaborar con ellas como voluntarios escuchando primero sus

ideas, así encontramos a Alba y los colaboradores de Ayuda al Nepal y decidimos colaborar con ellos por

ser la forma de trabajo que más nos convence y percibir un excelente ambiente y concienciación.

Alba gestiona una clínica de medicina natural en el entorno rural de Chapagon al sur de Katmandú. Esta

zona ha sido masivamente afectada y como Alba lleva cohabitando con la población unos meses y

pretende quedarse unos años conoce perfectamente las necesidades y carencias de su entorno (darle

continuidad el proyecto durante al menos 18 meses nos parece fundamental). Tras el terremoto la

plataforma Ayuda al Nepal ha recaudado mediante diferentes iniciativas una serie de fondos desde

España. Podéis verlas en la web https://www.facebook.com/pages/Ayuda-al-

Nepal/425044491001799?fref=ts y seguir a diario el blog con los avances de los voluntarios en

http://ayudaalnepal.weebly.com/ . La asociación se presenta con unos fondos que pueden ser de gran

ayuda pero con falta de voluntarios para distribuirlos de la mejor manera posible entre las víctimas. Es

cuando Dani y yo, previamente Víctor Rodilla al que no tuve la oportunidad de conocer demasiado

desgraciadamente, además de los voluntarios de la clínica, decidimos colaborar de forma activa

reconociendo las diferentes comunidades e intentando idear la forma más efectiva de distribución de

los fondos para cubrir lo mejor posible las necesidades de las víctimas.

En conjunto con Ayuda al Nepal decidimos centrarnos en las comunidades más afectadas y con menos

recursos de la zona rural cercana a la clínica, nos olvidamos de las ciudades que si que están siendo

atendidas por otros organismos. Entendemos que es lo más natural, ya que la clínica es el núcleo de

trabajo de la asociación Ayuda al Nepal, son zonas muy afectadas (comunidades con 100% de las casas

destruidas), pero lejos del epicentro del terremoto donde concentran su trabajo otras asociaciones y

porque tenemos claro que para hacer efectivos los recursos debemos focalizar nuestra ayuda. No

podemos ayudar a mucha gente con los recursos que hay, así que elegimos a que núcleos familiares

ayudar desde nuestro humilde criterio. Otras zonas, familias, comunidades y pueblos deberán ser

atendidos por otros grupos, es una dura decisión pero no se puede hacer de otra manera.

Empezamos un reconocimiento de las comunidades más pobres, decidimos atender 5 comunidades, con

una media de 30 casas/familias por comunidad, normalmente Dalit (o casta baja, los denominados

intocables) o Nagarkoti (casta más alta pero normalmente despreciada en nepal, todavía no tenemos

totalmente claro el por qué). Nuestro método de trabajo es recorrer en moto la zona afectada,

conseguir contactos en cada comunidad que nos puedan ayudar perfectamente con la comunicación y

revisar familia por familia la situación real en cuanto a necesidades.

En este punto nos encontramos actualmente, eligiendo las comunidades a las que vamos a ayudar. No

es fácil y requiere de un conocimiento profundo de sus gentes, por supuesto todo el mundo quiere

ayuda, aunque su necesidad no sea crítica, pero nosotros debemos maximizar los pocos fondos que

tenemos. Una vez las elegimos les preparamos una ficha y comenzamos a darle seguimiento semanal

pasando un día con cada una de ellas, conviviendo con ellas, es la única forma de ganar su confianza y

poder aconsejándoles e incentivarles a volver a sus vidas. Registramos todo lo que entregamos a cada

familia y preparamos un diario de trabajo que se puede seguir en el blog de Ayuda al Nepal. Aquí

debemos ser ordenados pues como decía antes la idea del proyecto y nuestra preocupación es darle un

seguimiento de al menos un año y tanto Dani como yo tenemos una gran limitación que es que en breve

nos tendremos que volver a casa, así como Alba y el personal de la clínica ocupa su jornada completa de

trabajo atendiendo a pacientes en la clínica, con lo que la necesidad de voluntarios para darle

continuidad se convierte en punto crítico.

Familias nos abren sus puertas. Aquí Sures nos enseña su casa derruida.

También nos relacionamos con otras asociaciones nepalís de ayuda rural con las que intentamos

coordinarnos lo mejor posible, tanto en cómo y a quién dirigir la ayuda como en aprovisionamientos de

material y mano de obra para hacerlos más efectivos. Por ejemplo la Fundación que gestiona Tony

Aguilar en Katmandú: The Direct Help Foundation, hombre extraordinariamente cercano que lleva 14

años ayudando en un barrio de Katmandú, conociendo y atendiendo las carencias y necesidades de sus

gentes a las que ahora se unen las generadas por el terremoto.

Con todo esto y sobre todo el seguimiento diario de las familias buscamos tener un conocimiento

profundo de cada familia y de sus necesidades reales siguiendo la estructura en fases explicada arriba:

Comida, refugio temporal, reconstrucción. Con esto creemos aseguramos que cada céntimo que se

gasta llega directamente a atajar una necesidad real de una determinada familia y nunca como caridad,

sino como ayuda y acompañado siempre de la motivación de los voluntarios para las víctimas

sobrepasen este lamentable bache en sus vidas y vuelvan a normalizar su situación de la manera más

suavizada posible. Es lo mejor que tenemos puesto que vemos la situación de una forma mucho más

optimista y activa e la población rural.

Dani siempre animando a los niños de los campamentos al grito de Bukampha!!(Terremoto en Nepali).

En cuanto a nuestro método de trabajo por fases: Comida, Refugio temporal, Reconstrucción; detallo de

la forma más resumida posible lo que nos estamos encontrando y nuestra idea para el futuro.

En cuanto a la primera fase, al estar empezando una vez ya ha pasado un mes desde el terremoto está

prácticamente cubierta. Algunas familias más pobres y sin trabajo requieren de alguna ayuda adicional

para pasar el monzón, que intentamos cubrir lo antes posible (tenemos que tener en cuenta que

durante monzón algunas de estas comunidades rurales campesinas o de castas bajas son inaccesibles).

Intentamos no dar demasiado, para incentivar como decíamos que las familias vuelvan lo antes posible a

la normalidad del trabajo y olviden la catástrofe, estamos convencidos que la caridad no ayuda a

acelerar la recuperación, esto lo hemos discutido mucho con gente que no opina lo mismo y que, de

nuevo bajo nuestro punto de vista, no ayuda a las víctimas.

La segunda fase es donde todo el mundo está poniendo más empeño. A estas alturas la mayoría de las

familias tienen refugio temporal más o menos instalado. Normalmente ya han sido ayudadas por

diferentes organizaciones. La forma totalmente desorganizada de trabajo de todas las organizaciones

como la nuestra hace que poblaciones hayan sido ayudadas más de una vez y de forma totalmente

ineficiente, aun así nos intentamos asegurar de que las comunidades elegidas por nosotros tienen un

refugio digno para pasar el monzón, sin que sea excesivo y vaya en contra de nuevo de la iniciativa de las

victimas en lo que realmente debería ser el objetivo de todo el mundo: la reconstrucción completa de

sus casas derrumbadas. Lamentablemente no es así y tanto las victimas como las asociaciones están

pensando mayormente en el muy corto plazo, lo que entendemos es un error, pero que no podemos

cambiar por complicadas razones culturales.

En esta fase nos centramos sobre todo en suministro de agua y baños, de esta forma, aunque las

comunidades ya tengan refugios temporales, focalizamos en mejorar los refugios que consideramos

escasos por falta de recursos de algunas familias y en que no falte suministro de agua potable (nuestra

zona esta abastecida por la red de aguas con lo que este es un tema menor para nosotros) ni baños

(aquí sí que suministramos los necesarios 1 por cada 5-7 familias, para evitar enfermedades futuras

como decimos arriba).

La tercera fase empezara en octubre y estamos pensando en que la forma más eficiente, aunque muy

limitada dado los recursos económicos de los que disponemos, será la esponsorizacion de familias para

pagarles parte o la totalidad de los materiales necesarios, así como si fuera necesario algo de mano de

obra de construcción, lo que además dará economía a la familia de los trabajadores. Esta tercera es la

más complicada puesto que no parece que en el entrono rural el gobierno vaya a llevar a cabo una

reconstrucción, ni si quiera una ayuda a los afectados (se habla de ayudarles concediendo créditos al

2%), esto llevara a que la mayoría de las familia no puedan afrontar la reconstrucción y se mantengan

viviendo en los refugios temporales. Por eso nuestra tarea se centrara en reducir el número de

comunidades según los fondos de los que se disponga y financiar el suministro de material para que las

familias puedan afrontar la reconstrucción dándoles el seguimiento cercano necesario. Tememos que

para esa época todos, tanto en tema de donaciones como voluntariado, nos hayamos olvidado ya de

Nepal dejando la reconstrucción a medias y a las victimas eternamente afectadas por este terremoto de

2015.

Os dejo un mensaje que vamos a intentar extender lo más posible para darle la continuidad de al menos

un año que el proyecto necesita: Necesitamos Voluntarios. Si estas o conoces a alguien interesado en

colaborar como voluntario en este pequeño proyecto en Nepal que da la oportunidad de ayudar

directamente a familias necesitadas afectadas por el terremoto y conocer su cultura y su vida desde la

convivencia con ellos, por favor ponte en contacto con cualquiera de nosotros:

fvizcainogonzalez@gmail.com daniherran@gmail.com ayudaalnepal@gmail.com Si quieres más información envíanos un correo y estaremos encantados de darte más detalle.

Si por el contrario no tienes posibilidad de ayudar como voluntario pero quieres colaborar

económicamente, cualquier aportación nos es de gran ayuda. Ingresadlo en esta cuenta y me encargare

de que llegue directamente a las familias a través del proyecto conjunto con Ayuda al Nepal o cualquiera

de las asociaciones locales con las que tenemos relación directa.

ES87 0030 8121 44 0002780271

Por favor cualquier donación que realicéis enviadme un mail con el asunto “Ayuda al nepal”, para llavar

un seguimiento de direcciones de correo para futuras comunicaciones.

Para que os hagáis una idea con 100 $ se cubren más o menos las necesidades alimenticias de una

familia para el corto plazo, con 300$ se construye un refugio temporal en condiciones y con 5.000 $ se

afronta una aportación de material para construir una nueva casa en el entorno rural.

Disculpad la chapa! Un abrazo! Nos vemos pronto!