Ciclo de Complementación Curricular en Museología y Repositorios Culturales y Naturales

TALLER DE ELABORACIÓN DE TRABAJO FINAL Profesores a cargo: Luis Wainer – Silvia Borja

Alumno: Claudio Pascal

Proyecto de investigación

“La gratuidad en los museos de la ciudad de Comodoro Rivadavia

y su relación con la inclusión social de los habitantes

del barrio San Martín”

Autor: Claudio Roberto Pascal

Tutores: Prof. Luis Wainer – Prof. Silvia Borja

Comodoro Rivadavia, 20 de noviembre de 2015

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Proyecto de investigación

“La gratuidad y accesibilidad en los museos de la ciudad de

Comodoro Rivadavia y su relación con la inclusión social de los

habitantes del barrio San Martín”

 "Cómo voy a pagar entrada… si es cultura…”1

1. INTRODUCCIÓN

El presente proyecto de investigación está referido a la gratuidad y accesibilidad en

los museos y su relación con la inclusión social. Para ello, voy a analizar el caso en el barrio

San Martín de Comodoro Rivadavia, Chubut.

Considero que el libre ingreso a estas instituciones garantiza la igualdad de

posibilidades de acceso al patrimonio y a la educación no formal que brindan a la comunidad,

incentiva la recurrencia de las visitas y se constituye en una herramienta para la inclusión

social, especialmente para los sectores más desfavorecidos de la sociedad; los que menos

concurren y los que más necesitan acceder.

El territorio en el que se enmarca el desarrollo del trabajo presenta uno de los

mayores índices de violencia y una tasa considerable de homicidios, en distintas

circunstancias.

El proyecto de investigación tiene como propósito averiguar la relación entre la

gratuidad y accesibilidad en los museos, y la inclusión social en el Barrio San Martín.

Además, de indagar sobre la supuesta relación entre el precio de una entrada y la apreciación

que pueda hacer el visitante del museo.

1 Vecina del barrio San Martín: Concepto expresado en conversación mantenida durante la elaboración de tortas fritas en cocina de la Biblioteca Popular Hugo Darío Fernández, en el marco de la conmemoración del día de la tradición (durante el período de realización de encuestas).

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2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

a. Preguntas de investigación

¿Existe relación entre el valor económico de una entrada al museo y la apreciación que tiene

el visitante perteneciente al barrio San Martín?

La gratuidad en la entrada y la accesibilidad de los museos de la ciudad de Comodoro

Rivadavia, ¿contribuyen a la inclusión social de los habitantes del barrio San Martín?

¿La reiteración de visitas a los museos locales por parte de los habitantes del Barrio San

Martín, se produce mayoritariamente en los museos gratuitos de la ciudad?

b. Objetivos de investigación

Objetivos Generales

Conceptualizar respecto a la influencia de la gratuidad de los museos de Comodoro

Rivadavia, sobre la inclusión social y la accesibilidad al patrimonio de los habitantes del

barrio San Martín.

Objetivos específicos

Analizar si la gratuidad y la accesibilidad en los museos favorecen la inclusión social de los

habitantes del Barrio San Martín de la Ciudad de Comodoro Rivadavia.

Indagar si la gratuidad en los museos constituye una herramienta fundamental para asegurar la

accesibilidad al patrimonio y a la educación no formal de los habitantes del barrio San Martín.

c. Justificación

La investigación a realizarse posibilitará obtener información en relación al grado de

conocimiento que tienen los vecinos del barrio sobre la oferta de los museos locales, sus

posibilidades de acceso a estas instituciones, las relaciones existentes entre los museos y las

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distintas entidades y actores del barrio; y sobre la efectividad de las políticas que implementan

en la actualidad los museos locales en uno de los barrios periféricos de la ciudad.

Asimismo permitiría revertir en el campo de la museología el conjunto de cuestiones

y prejuicios establecidos en relación a la gratuidad y la accesibilidad, además de desterrar

maneras de pensar elitistas referidas a la relación entre valor económico y valor patrimonial,

cultural o estético; conceptos arraigados en la práctica museística regional y que involucran en

la ciudad a gran parte de los trabajadores de museos y directivos, quienes consideran al ser

humano incapaz de establecer una valoración positiva respecto al patrimonio, una obra de arte

o una actividad cultural, si a ésta no se le asigna un valor monetario acorde a lo que se

considera que debería costar el acceso a dichos bienes cultuales.

La elección del territorio en el que se desarrollará la investigación se fundamenta en

el hecho de que el Barrio San Martín de la Ciudad de Comodoro Rivadavia es uno de los

sectores más marginados de la localidad y con el índice más alto de violencia y homicidios en

los últimos años. Esta situación permitirá relacionar la gratuidad y la accesibilidad con la

inclusión social en uno de los sectores más desprotegidos.

3. HIPÓTESIS Y VARIABLES QUE SE DESPRENDEN DE LA MISMA.

DEFINICIONES CONCEPTUALES Y OPERACIONALES. INDICADORES A

TRABAJAR.

Sistema de hipótesis

Hipótesis

1. La gratuidad y la accesibilidad en los museos de la ciudad de Comodoro Rivadavia favorece

la inclusión social de los habitantes del Barrio San Martín y constituye una herramienta

fundamental para asegurar la accesibilidad a la educación no formal y al patrimonio.

2. La valoración que realizan los habitantes del barrio San Martín sobre el patrimonio exhibido

en los museos de la ciudad de Comodoro Rivadavia y su oferta, no tiene relación con el valor

monetario de una entrada.

3. La gratuidad de los museos municipales de la ciudad de Comodoro Rivadavia contribuye a la

recurrencia de las visitas de los habitantes del barrio San Martín.

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Sistema de variables: inclusión; patrimonio; gratuidad; accesibilidad.

Gratuidad en los Museos de Comodoro Rivadavia: variable independiente.

Indicadores: Imposición de valor monetario al costo de las entradas a los museos para

visitantes locales, a contingentes escolares o a contingentes de barrios periféricos.

 

Accesibilidad al patrimonio de los habitantes del B° San Martín: variable dependiente.

Indicadores: Conocimiento de los habitantes del B° San Martín sobre la existencia de museos

en la ciudad, visitas realizadas por los vecinos del barrio San Martín a los museos locales,

condiciones de acceso físico, económico y cognitivo de los museos locales.

Accesibilidad a la educación no formal de los habitantes del B° San Martín: variable

dependiente.

Indicadores: accesibilidad cognitiva de las muestras de los museos locales, acceso de

contingentes de escuelas a los museos y recurrencia de visitas, inclusión de visitas a los

museos locales los contenidos pedagógicos de las escuelas del B° San Martín, costo de las

entradas y equipamiento para personas con capacidades diferentes.  

Inclusión social de los habitantes del B° San Martín: variable interviniente.

Indicadores: Condiciones socioeconómicas de los habitantes del barrio San Martín; grado de

conocimiento sobre los museos locales y recurrencia de las visitas.  

4. MARCO TEÓRICO: INDAGACIONES PRELIMINARES / ESTADO DE LA

CUESTIÓN / ANTECEDENTES

Antecedentes de la Investigación (estado de la cuestión)

No fue posible hallar trabajos de investigación específicos que desarrollen objetivos

análogos al presente proyecto de investigación, desarrollados en Hispanoamérica. Sin

embargo, sí existen numerosos escritos y entrevistas acerca de la gratuidad en los museos

como forma de inclusión social, tanto a favor como en contra de este fundamento.

En primer lugar, Fernando Arezo y Verónica Pereyra (2008) establecen

objetivos opuestos al presente proyecto de investigación, al brindar herramientas tendientes a

implementar el pago de entradas en los museos de Montevideo (Uruguay), establecer el perfil 5

de los consumidores hacia los museos, determinar una estimación promedio de la cantidad

anual de visitantes en los museos encuestados, y su disposición a abonar entrada.

Centran su investigación en el campo de la economía de la cultura y explican la

modalidad de conducta de consumo del visitante montevideano hacia tres importantes

instituciones museísticas de dicha ciudad. A partir de esto estiman la demanda y pretenden

obtener un indicador de la propensión a pagar por el consumo de dichos museos. En la investigación se indagó sobre las características sociodemográficas, socioculturales y económicas de los consumidores y potenciales consumidores.

Cabe destacar que en Uruguay los museos en su mayoría son de ingreso gratuito, por lo cual los autores consideran que el trabajo podría servir como base para posibles futuras políticas de precios en torno a estas instituciones.

Por otra parte, también en América Latina, Chile implementó la gratuidad en la totalidad de sus museos nacionales a partir de marzo del año en curso. Estas instituciones conforman la red de museos de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), y abarca a 26 instituciones en 13 regiones del país. Al respecto, Ángel Cabeza (2015), director de la Dibam expresó en un artículo periodístico: "Es un gran salto que estamos dando para poder entregar un mejor acceso a los patrimonios y a los tesoros para todos los visitantes nacionales y extranjeros". De esta manera Chile fija una política de gratuidad, tanto para los visitantes locales, nacionales o internacionales, como una herramienta para la accesibilidad de los ciudadanos al patrimonio.

De igual manera, Claudia Barattini (2015), segunda la ministra de Cultura de Chile expresó: "La gratuidad en los museos significa bajar las barreras de acceso a los bienes y servicios culturales (...) Va en la línea que venimos trabajando como gobierno de concebir la cultura como un derecho ciudadano". La funcionaria refiere a la gratuidad como una herramienta fundamental para lograr la accesibilidad en el marco del cumplimiento de los derechos de los ciudadanos respecto del acceso a la cultura, los que se encuentran amparados constitucionalmente. Asimismo Barattini expresa: "Necesitamos mucho más público en los museos, que no están saturados en su capacidad. Hay muchísimo que hacer para que la

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población acceda a ellos". En este sentido da a entender que la gratuidad no es la única barrera de acceso, sino que se enmarca en una serie de cuestiones más complejas sobre las cuales los museos y sus órganos rectores deben trabajar.

En el mismo sentido, y en relación a la afectación presupuestaria que podría provocar

la medida adoptada por la presidente de Chile Michelle Bachelet, el saliente director de la

Dibam, Alan Trampe (2015), manifestó: "Esto no va a impactar los presupuestos de los

museos. Para nosotros no es tan relevante y lo podemos asumir, pero para los usuarios y el

público debería ser relevante porque eliminamos un impedimento de acceso y generamos un

acceso universal". El ex director de la Dibam, refiere al bajo impacto que el ingreso generado

en concepto de entradas tiene sobre el presupuesto general de los museos, un punto que

resulta controvertido, con opiniones disímiles, que varía de acuerdo a los montos impuestos al

valor de las entradas y al caudal de visitantes. De igual manera menciona a la gratuidad como

una herramienta para lograr el “acceso universal”. Si bien los museos suelen tener previsto el

libre acceso en caso de contingentes, escuelas o grupos de bajos recursos, mediante distintas

modalidades, el concepto de acceso universal, evita situaciones que pueden resultar

discriminatorias o estigmatizantes.

Por otra parte, Roberto Farriol (2015), director del Museo Nacional de Bellas Artes de

Chile, al respecto sostiene que: "Un museo no es un producto de consumo, lo que aportan los

museos a la sociedad no está en relación con el valor de una entrada”. Farriol expresa un

concepto que resulta central para la comprensión de la gratuidad como eje fundamental y

parte de una serie de medidas y acciones que posibiliten la accesibilidad a los museos. Resulta

imposible cuantificar y relacionar en términos económicos el aporte que los museos que

funcionen de acuerdo a los estándares actuales desarrollados y establecidos por las Naciones

Unidas y sus entidades dependientes, pueden aportar a las sociedades y al desarrollo

sustentable de la humanidad. Un museo no persigue lucro y no es posible cuantificar

económicamente sus beneficios.

Estas voces a favor de la gratuidad de acceso al patrimonio destacan su valor e importancia, como hecho que permite la eliminación de una de las barreras de acceso, en el marco del cumplimiento de los derechos de acceso a la cultura, en forma universal.

Asimismo, otros actores expresaron su disidencia respecto a dicha medida, como fue

el caso del ex ministro de Cultura de Chile, Luciano Cruz-Coke (2015), quien al margen de

estar de acuerdo con la gratuidad, no considera adecuada su implementación en forma

universal: "En términos de gratuidad hay que ser cuidadosos. Hay que dar gratuidad a 7

quienes la necesitan. Aquellos que puedan cooperar, a mi juicio, deben hacerlo”. En este

sentido, el ex funcionario refiere a la conveniencia de una gratuidad orientada a quienes no

poseen los recursos necesarios para abonar la entrada. Esta postura presenta varios

inconvenientes en cuanto a su implementación, debido a que en la práctica podría resultar

discriminatoria y estigmatizante2 para el público concurrente, además de no considerar que el

precio de las entradas no constituye la única barrera de acceso, y que se enmarca dentro de

una compleja relación de situaciones con conllevan a que el público mayoritario que

habitualmente visita a los museos resulta ser el que mayores ingresos posee y un mayor nivel

de instrucción, además de un alto grado de recurrencia en las visitas.

Por su parte, Alejandra Wood (2015), directora del Centro Gabriela Mistral, afirma:

“…me pregunto si la gente no asiste a los museos por el valor de las entradas o por otros

motivos. Si el acceso siempre es gratuito, estamos comunicando que la oferta artística no

tiene un valor en sí mismo...”. Wood hace referencia a un tema controversial arraigado en

determinados actores vinculados a la cultura y la gestión de bienes culturales, quienes

establecen una relación directa respecto a la valoración que realiza el público sobre el

patrimonio y el costo de la entrada que abona el visitante para acceder, considerándolo en

consecuencia incapaz de establecer una valoración sin que medien aspectos económicos entre

su apreciación y la obra de arte, pieza, objeto u oferta cultural. Esta forma de concebir la

relación entre el ser humano, el arte y su patrimonio, constituye un prejuicio arraigado en el

ámbito museal y una barrera ficticia entre el hombre y sus expresiones artísticas, y su herencia

tangible e intangible. Una conexión emocional, sensorial y cognitiva que va más allá de

cualquier imposición relacionada a la valoración económica.

Cristian Antoine (2014), pone en discusión los aspectos positivos y negativos sobre la

gratuidad en los museos como tema de debate de especialistas a través del tiempo. De igual

manera hace referencia a lo expresado por Gombault (2008), en relación a que el impacto

positivo de la gratuidad sobre la asistencia del público resulta eficaz en el corto plazo, pero no

en el mediano y largo plazo, además de la necesidad de contemplar otras variables mediante

el desarrollo de acciones específicas para aumentar, ampliar y diversificar la asistencia de

público, que incluyan la accesibilidad física e intelectual. Cabe destacar que el autor se centra

en la gratuidad y no contempla al resto de las variables que intervienen en la accesibilidad.

De igual manera cuestiona la equidad que brinda el acceso gratuito en relación a los

visitantes habituales y ocasionales, debido a que aun implementándose el libre acceso,

2 La realización de un trámite para la obtención de gratuidad en el valor de las entradas por parte del visitante, resulta un acto discriminatorio debido a que se lo expone a una situación de inferioridad en cuanto a su capacidad económica ante el resto de la sociedad, que sí puede solventarla, ubicándolo públicamente y ante otros, en una clase social inferior.

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persiste el beneficio sobre el público tradicional, en concordancia a los trabajos elaborados

por Bourdieu (2012) en la década de 1960, respecto a la preeminencia de los grupos de

mayores recursos y mayor nivel educativo.

Asimismo, Antoine hace referencia al hecho de que la gratuidad de acceso a los

museos en Chile, no asegura que los segmentos sociales más desfavorecidos asistan a estas

instituciones. Considera que el gasto asociado a la experiencia de visitar un museos es más

onerosa que el costo de la entrada, debido a los gastos generados por el transporte público o

el estacionamiento, el valor de las exposiciones temporales, el consumo de alimentos o

bebidas, los gastos en la tienda de merchandising; elementos que cada vez en mayor medida

forman parte de la experiencia del visitante. Antoine afirma que la gratuidad solo disminuye

el costo monetario global para el visitante del museo, que no asegura que la experiencia de

acceder a un museo resulte gratuita y que afecta al financiamiento de las instituciones. De

igual manera y en concordancia a lo expresado por Alejandra Wood, pone en duda la

valorización que el público pueda hacer sobre la valoración de la experiencia en el museo, si

la misma se ofrece en forma gratuita.

En el ámbito europeo, Gran Bretaña estableció la gratuidad para los museos nacionales (red compuesta por más de 50 instituciones) a partir de 2001. Como resultado de la experiencia, en los primeros 10 años a partir de la aplicación de la medida, las visitas se incrementaron en un 51%; la asistencia de turistas aumentó en un 150%. Hubo museos que aumentaron sus visitas en un 269%. En tanto, el número de visitas de niños aumentó un 36%.

El público se diversificó después de la introducción de la entrada gratuita y el número de visitantes pertenecientes a minorías étnicas aumentó en 177,5% (en comparación con un aumento global de visitas de 54%).

Asimismo, los museos tomaron medidas para alentar la visita de los segmentos socioeconómicos más bajos, lográndose un incremento del 26% de las visitas a los Museos Nacionales de Liverpool y el 17% de las visitas a la Armería Real en Leeds, de personas de bajos recursos entre 2010 y 2011.

De igual manera, y al margen del desarrollo de internet y el incremento del uso de la red a nivel global, y de las innovaciones producidas por las instituciones en internet; se produjo un aumento del

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500% en las visitas a las respectivas páginas web de los Museos Nacionales del Reino Unido, las que podrían estar motivadas en cierta medida por el aumento de la popularidad adquirida por estas instituciones a partir de la implementación de la gratuidad de acceso.

En relación a los beneficios que producen los museos sobre la economía, estas entidades son consideradas de vital importancia económica debido a la capacidad de generar la visita de turistas y los consecuentes beneficios. En 2000/2001 hubo 9,2 millones de visitas de extranjeros a museos patrocinados por el DCMS (Department for Culture, Media and Sport del Reino Unido). Durante 2010 y 2011 esta cifra se elevó a 17,7 millones de visitas al extranjero. Casi el 60% de los visitantes del Reino Unido visitan los museos gratuitos patrocinados por DCMS. La economía visitante contribuye en 114 millones de dólares o 8,2% del PIB de Gran Bretaña.

Asimismo, los museos juegan un papel clave en la promoción de las industrias creativas del Reino Unido, que contribuyen significativamente a su economía, con el 5,6% del PIB en 2013. Esta cifra es más del doble de la contribución media hecha al PIB en el resto de Europa.

Aproximadamente 1 de cada £1.000 en la economía del Reino Unido puede ser directamente relacionada con el sector de los museos y galerías. Los principales museos y galerías -la gran mayoría de los cuales no cobran por la admisión- gastan más de 650 millones al año. Se estima que los beneficios económicos de los principales museos y galerías del Reino Unido son de £ 1.5 mil millones por año.

En oposición a esta medida aplicada en el Reino Unido, Tristram Hunt (2011), en su artículo: “We need to start charging for museums and galleries again”, conceptualiza respecto a la conveniencia de reestablecer el cobro de entradas en museos y galerías de arte en Gran Bretaña, debido a las consecuencias desfavorables para las instituciones regionales o comunales, las que ven restringido su presupuesto y las posibilidades de desarrollo de las artes. Además, refiere al hecho de que la medida de gratuidad reposicionó a Londres en una situación de liderazgo frente a otros centros mundiales como Nueva York o París, pero la misma no fue efectiva para ampliar el público consumidor de arte y de cultura.

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De igual manera afirma que de acuerdo a estudios realizados, mientras que el número de visitas aumentó considerablemente, el perfil socioeconómico y cultural del público se ha mantenido relativamente estable.

Igualmente, refiere al desfinanciamiento que la aplicación de la medida provocó a otras entidades culturales, y especialmente respecto de la desigualdad de oportunidades entre los grandes centros nacionales y las instituciones regionales, además de hacer mención a la disminución de los presupuestos de adquisición y la consecuente pérdida de competitividad ante otros centros a nivel internacional.

Respecto al escenario en España en relación las políticas de gratuidad, Peio Riaño (2013), menciona la crítica situación financiera debido a la quita de financiamiento estatal y falta de ayuda privada a los museos, ante la falta de previsibilidad y la no implementación de la reforma de la ley de mecenazgo, la que permitiría una mayor inversión privada. Como consecuencia se produjo un aumento significativo en el valor de las entradas, hecho que pone en riesgo el derecho de acceso al patrimonio de los ciudadanos.

Asimismo se ve reducido el horario semanal gratuito, disminuyéndose aún más la limitada gratuidad de acceso a los museos, mediante la implementación de días u horarios de libre acceso, las que además resultan desconocidas para la mayoría del público.

En relación a la gratuidad que ofrecen algunos museos de los Estados Unidos y la forma de financiamiento de estas instituciones, Nina Simon (2015) hace referencia a la ínfima suma que representa el ingreso por admisión en los museos a nivel nacional, que en el caso de los museos de arte alcanza al 1.4%. De igual manera hace mención a la necesidad de reemplazar la pérdida ocasionada por la gratuidad – para un adecuado financiamiento – mediante el aumento de la filantropía y de las donaciones, las que se producirían a consecuencia del aumento del público asistente. Además, considera la necesidad de generación de donaciones que financien el acceso de nuevos públicos.

Por otro lado, a partir de 2008, China también implementó la gratuidad de los museos estatales y otras instituciones culturales públicas

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incluidas en el programa de mejoramiento, apertura y acceso gratuito, como una política de Estado, medida que también alcanzó a los museos privados. Las autoridades consideran que para lograr una sociedad moderna deben garantizar los derechos culturales. Se considera que el libre acceso está contribuyendo a disminuir la brecha cultural y educativa entre las distintas clases sociales. De igual manera el gobierno pretende disminuir la sobrevaloración de la cultura occidental, en desmedro de la de su propio país.

La gratuidad en China fue implementada como parte de la reforma cultural, cuyo propósito es continuar el crecimiento económico y brindar mejores condiciones de vida para la población (Priscila Magaña-Huerta, 2013). Bases Teóricas (Conceptos teóricos sobre lo que se quiere desarrollar)

El concepto teórico que trabajo en esta investigación es el de la accesibilidad museística – con mayor hincapié en la gratuidad – como herramienta de inclusión social.

La accesibilidad es un tema a resolver por los museos. Al margen de la accesibilidad

física, (la que más atención tuvo en los últimos años), la accesibilidad intelectual, los

prejuicios, la oferta inadecuada de las exhibiciones, la falta de difusión, el coste de las

entradas, la falta de políticas adecuadas desde los museos y el costo y las dificultades que

presentan los medios de transporte, constituyen impedimentos o barreras de acceso,

especialmente para los sectores menos favorecidos de la sociedad, paradójicamente, en los

que los museos tienen un potencial mayor para provocar un cambio en sus vidas.

La inclusión de los sectores sociales desfavorecidos permite que estos entren en

contacto con la propuesta museal en igualdad de condiciones de otros segmentos

socioeconómicos; y a los museos, brindar a la sociedad en su conjunto conocimiento, en el

marco de la educación no formal, en un espacio de recreación y participación, y provocar

cambios significativos en la vida de las personas; cualquiera fuere su situación

socioeconómica o su formación académica.

Desde un punto teórico, la inclusión social es un “proceso que asegura que aquellos

en riesgo de pobreza y exclusión social, tengan las oportunidades y recursos necesarios para

participar completamente en la vida económica, social y cultural disfrutando un nivel de vida 12

y bienestar que se considere normal en la sociedad en la que ellos viven” (Unión Europea).

La inclusión posibilita asegurar que grandes sectores de la sociedad no queden por fuera de

ésta, y evitar las consecuencias que la exclusión, la marginalidad y la opresión ocasionan

sobre los sectores más vulnerables de la sociedad. La inclusión social significa integrar a la

vida comunitaria a todos los miembros de la sociedad, independientemente de su origen, de su

actividad, de su condición socio-económica, de su pensamiento, etnia o creencias.

El libre acceso al patrimonio (que se ha centrado de manera principal en el acceso a

los museos) ha sido objeto de estudios y debates a través del tiempo. Para ello, trabajé con diversos autores, como Françoise Benhamou (2014), Víctor Vich (2014), Pierre Bourdieu (2010) y Silvia Alderoqui (2011).

En primer lugar, la economista e investigadora Françoise Benhamou (2014),

refiere a las repercusiones económicas del patrimonio y analiza las políticas patrimoniales de

escala internacional. Describe un análisis realizado en Francia entre 1994 y 2000, en el que se

observa que existe un consumo cultural desigual, según el nivel educativo y socio-profesional

del público. Es decir, que los visitantes más asiduos al museo son los que tienen un mayor

nivel educativo, están más informados y viven en ciudades. Asimismo se desprende que tanto

la edad como la jubilación no cambian sustancialmente estas jerarquías.

De igual manera, al margen de haber aumentado el número de visitantes, se observó

que el 70 % de los franceses de 15 años o más no visitó ningún museo o exposición durante el

año 2005, porcentaje que se mantiene en 2008 y aumenta entre 2003 y 2010.

La investigadora se refiere a la “gratuidad y democratización” como un debate

recurrente, con resultados sesgados. Realiza un análisis sobre la relación entre gratuidad,

tarifario, riesgo de mercantilización por falta de ganancia como consecuencia de la gratuidad,

carga impositiva, visitante marginal y financiamiento de la gratuidad.

Además, la autora se refiere a la gratuidad como una referencia asociada al origen de

los museos, en el marco de una devolución al pueblo de lo que es suyo, en el cual el cobro de

entradas se visualiza como un producto de la mercantilización de la cultura, distanciándolos

de su función primigenia. En contraposición, conceptualiza respecto a que la implementación

de la gratuidad generalizada pone en riesgo a los museos de una mercantilización inadecuada,

como consecuencia de la necesidad de compensar la pérdida de recursos que obtenían en

concepto de cobro de entradas (Benhamou, 2014: 65).

Respecto al hecho de que la gratuidad en los museos es financiada a través del pago de

impuestos, considera de que puede producirse un efecto no deseado, debido a que a través de

la gratuidad se subvenciona también a segmentos de público con un poder adquisitivo que les

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permite abonar el costo de las entradas, generándose en consecuencia un efecto contra-

redistributivo (Benhamou, 2014: 66-67).

De igual manera, Benhamou refiere al hecho de que la gratuidad puede compensarse

mediante los ingresos generados por el visitante durante la visita, producto del consumo en

restaurantes y adquisiciones en tiendas de merchandising. De esta manera el visitante con

mayores recursos económicos subvenciona a los pertenecientes a los sectores más

desfavorecidos, aunque afirma que no existe garantía de que estos recursos terminen

beneficiando en forma directa a la institución, por lo que advierte sobre la existencia de otras

alternativas, como las políticas dirigidas a un público en particular o los eventos puntuales

(Benhamou, 2014: 67).

En segundo lugar, Pierre Bourdieu (2010) conceptualiza respecto a las categorías

sociales que habitualmente asisten a los museos, coincidiendo con el estudio al que refiere

Benhamou, ya que las clases sociales más favorecidas son las más fuertemente representadas

en el público que asiste a los museos. Asimismo, menciona que el visitante predominante es el

estudiante de escuela secundaria y que la estructura de los públicos de los museos es muy

parecida a la estructura de la población estudiantil distribuida según el origen social: “la

existencia de una relación tan brutal entre la instrucción y la frecuentación de los museos

basta para demostrar que sólo la escuela puede crear o desarrollar (según el caso) la

aspiración a la cultura, incluso la menos escolar”. (Bourdieu, 2010: 42).

Además, el autor hace referencia a que la frecuentación de los museos está ligada a las

posibilidades de hacer turismo, y esto depende netamente de los recursos económicos. En

cuanto a esta “utilización del tiempo libre con fines culturales”, Bourdieu señala que la

proporción de la gente que dice haber ido al museo porque tiene costumbre de hacerlo cuando

visita otros lugares, crece notablemente a medida que se asciende en la jerarquía social, por lo

que esto indicaría que el turismo se concibe con más frecuencia como una empresa cultural a

medida que se asciende en esa jerarquía (Bourdieu, 2010: 44). Vemos entonces que el museo

es una mercancía consumida, en mayor parte, por quienes tienen los recursos para asistir y

pagar la entrada.

En relación a las barreras cognitivas de los visitantes, Bourdieu describe la relación de

los museos con los sectores sociales más desfavorecidos, al decir que los individuos de las

clases más desfavorecidas que acceden al museo se sienten fuera de lugar y faltos de

preparación para comprender lo que allí se expone. Y asimismo critica que nada se ha hecho –

por parte de los museos – para que la visita sea una experiencia más agradable y accesible

(Bourdieu, 2010: 47).

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En tercer lugar, Silvia Alderoqui (2011) hace mención de las conceptualizaciones

realizadas por Bourdieu y J. C. Person en un estudio de 1977, en donde señalan que “la

educación contribuye a la reproducción de desigualdades sociales y que las escuelas, al igual

que los museos, lejos de contribuir a la democratización del conocimiento, legitiman esa

situación” (Alderoqui, 2011: 43). Y en boca de Néstor García Canclini, destaca que aunque

los museos sean de acceso gratuito, no todas las personas tienen la posibilidad de

aprovecharlos de la misma manera. El hecho de que los objetos expuestos no sean posibles de

tocar, que sea impuesto el silencio absoluto, entre otros factores, hacen que el museo se

convierta en un espacio excluyente. De esta manera, sólo pueden acceder aquellas personas

que cuentan con los medios económicos y simbólicos para apropiárselo (Alderoqui, 2011:

44).

La autora también se refiere a las distintas barreras de acceso que tienen los visitantes:

intelectual, físico, emocional o sensorial, las relativas a la información, toma de decisiones,

culturales y económicas. A partir de esto, establece que hay que disolver estas barreras si lo

que se quiere es un museo inclusivo; “habrá que establecer puntos de inicio que consideren a

aquellos que están excluidos” (Alderoqui, 2011: 47). En este mismo sentido van los planteos

de Américo Castilla (2003) quien menciona que una política cultural de museos del siglo XXI

exige una mirada más orientada hacia la inclusión social de nuevos públicos y a enriquecer la

oferta para los visitantes habituales.

Por último, Víctor Vich (2014), propone “Desculturalizar la cultura”, es decir,

“arrancar la cultura de su supuesta autonomía y utilizarla como recurso para intervenir en el

cambio social” (Vich, 2014: 98). Para él, la cultura es un dispositivo socializador a partir del

cual los seres humanos nos constituimos como tales, es decir, establece y regula la forma en

que se practican las relaciones sociales. Por ello considera que hay que “posicionar a la

cultura como un agente de transformación social y revelar las dimensiones culturales de

fenómenos aparentemente no culturales” (Vich, 2014: 85).

El autor destaca a la cultura, como un dispositivo socializador a partir del cual los

seres humanos nos constituimos como tales. La cultura como un agente que establece y regula

la forma en la que se practican las relaciones sociales entre los seres humanos, no como algo

que simboliza lo existente, sino como un dispositivo que contribuye a producir la realidad en

la que vivimos. (Vich, 2014: 84). En este sentido los museos y su accesibilidad, representan

una herramienta de cambio fundamental, como un espacio de participación ciudadana, de

construcción social y cultural, y un dispositivo capaz de provocar cambios significativos en la

vida de las personas.

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Asimismo, Vich refiere a la inexistencia de políticas públicas destinadas a generar

nuevos modelos de identidad bajo nuevos ideales comunitarios (Vich, 2014: 84). En este

sentido, los museos se erigen como un potencial actor social fundamental para generar

cambios en sociedades, en las que la exclusión, la inequidad y la violencia conforman una

difícil realidad, cuyos flagelos se profundizan con el paso del tiempo. Al respecto Vich

considera que las políticas culturales deben abrir espacios para que las identidades excluidas

accedan al poder de representarse a sí mismas (Vich, 2014: 89).

En la transformación social, la cultura constituye un factor fundamental. Al respecto

Vich manifiesta: “El gran reto de las políticas culturales consiste en hacer entender a los

políticos y a la ciudadanía en general, que muchos de los graves problemas sociales tienen

menos que ver con el código penal que con la cultura”. (Vich, 2014: 94). De esta manera, los

museos se constituyen en instituciones con un gran potencial para provocar cambios positivos

en la sociedad y en la vida de las personas.

Por último, el autor se refiere a la implicancia de las políticas culturales como

elementos transformadores en los cambios sociales, una estrategia fundamental para dar la

batalla por los espacios públicos. Agentes destinados a introducir algo nuevo en la sociedad.

Los espacios públicos son por excelencia los lugares democratizadores de la cultura y resulta

fundamental defenderlos e incrementarlos (Vich, 2014: 97). En este sentido, la eliminación de

las barreras de acceso a los museos y la calidad de la propuesta que estas instituciones brindan

a la comunidad, considerando la totalidad de los segmentos socioeconómicos en el marco del

cumplimiento de los derechos culturales, representan herramientas fundamentales para la

inclusión social de los sectores vulnerables y una verdadera transformación social.

A partir de los autores seleccionados, considero que las problemáticas sociales sólo se

cambian a través de la cultura, porque precisamente, esos problemas tienen origen en

cuestiones culturales. Y respecto a esto, la institución-museo es un vehículo favorable para la

inclusión social. Entonces, no tiene sentido realizar una exclusión a partir de imponer un

precio de entrada. En este sentido, la gratuidad universal no es imposible, ya que existen otras

formas de compensación del ingreso de dinero.

Además, los autores coinciden en que los museos tienen más afluencia de público de

un nivel socioeconómico medio-alto, quienes son asimismo los que más consumen las ofertas

culturales. Lo que no se piensa es en el no público, es decir, el que no está consumiendo

museos. Y en esto no influye solamente el hecho de que el acceso en algunos museos sea

prohibitivo a partir del valor de la entrada, sino que existen otras barreras de accesibilidad que

terminan excluyendo al público que no suele asistir.

16

5. TIPO DE ESTUDIO SEGÚN MÉTODO/S EMPLEADO/S Y SEGÚN OBJETIVOS

La diversidad y complejidad de los factores involucrados en la problemática planteada

requiere de un abordaje metodológico plural y combinado, y el empleo mixto de técnicas

diferentes de recolección de información.

Se realizarán encuestas cuantitativas y entrevistas.

6. MARCO METODOLÓGICO

Metodología

Contexto espacial y temporal:

La investigación se desarrollará en el barrio San Martín, ubicado en la zona oeste de la

ciudad de Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut, durante los meses de septiembre y

noviembre de 2015.

El barrio San Martín se inició en la década de 1960 y es uno de los más populares de

la ciudad, con una población cercana a las 6.000 personas, de acuerdo al último censo

efectuado. Además, es uno de los barrios con mayor índice de violencia de Comodoro

Rivadavia.

Técnicas de recolección de información:

Encuestas a habitantes del barrio San Martín sobre muestra representativa de la población, en

forma aleatoria y de acuerdo a distribución geográfica. Esta herramienta permitirá indagar a la

población del Barrio San Martín sobre distintos aspectos de interés para la investigación.

Encuesta a alumnos de Escuela N° 1024 "Juan XXIII" y Escuela Provincial N° 184.

Posibilitará conocer el aporte que realiza la escuela a la accesibilidad de los alumnos a los

museos locales.

Entrevistas a los Directores de los establecimientos educacionales: Escuela Provincial N° 184,

Escuela Nro. 1024 "Juan XXIII" y Jardín de Infantes N° 426 “Huellita Sureña”. Permitirán

indagar respecto a la situación socioeconómica del barrio y sobre distintos aspectos de la

relación Museo-Escuela.

Entrevista al Sr. Ernesto Allende, Presidente de la Biblioteca Popular Hugo Darío Fernández,

ubicada en el Barrio San Martín. Allende, quien reside en el lugar desde hace

aproximadamente 50 años y ocupó con anterioridad la presidencia de la Unión Vecinal, se ha

destacado a través de la escritura, hecho que junto a su trayectoria dentro de la comunidad lo

17

convierte en un actor social con posibilidades de brindar una reflexión desde su mirada sobre

la realidad en la que vive.

Entrevistas a dos vecinos del barrio San Martín. Posibilitará conocer sus experiencias como

parte de contingentes que visitaron los muesos locales y su relación con estas instituciones.

Entrevista a la guía de turismo Estela Carrizo, perteneciente a la Dirección de Turismo de la

Municipalidad de Comodoro Rivadavia, quien dirige el programa de sensibilización turística

“Turista por un día”, en el que contingentes de distintos barrios visitaron los museos locales,

entre otros atractivos.

Entrevista al Sr. Ángel Erruvidart, guía del Museo Ferroportuario de Comodoro Rivadavia,

quien atiende regularmente a contingentes provenientes del Barrio San Martín, en el marco de

visitas organizadas por la Biblioteca Popular Hugo Darío Fernández.

Entrevista a la Prof. Anahí Fonseca, quien al margen de sus tareas en el Área de Conservación

y Restauración del Museo Regional Patagónico Antonio Garcés, realiza visitas guiadas.

Entrevista al Técnico en Turismo Miguel Montaña, quien se desempaña como guía del Museo

Nacional del Petróleo de Comodoro Rivadavia.

Entrevista a la Prof. Graciela Ronconi, directora del Museo Nacional del Petróleo de

Comodoro Rivadavia. Único museo de la ciudad que cobra entrada en la ciudad.

Entrevista al Secretario de Cultura de la Municipalidad de Comodoro Rivadavia, Daniel

Vleminchx, cuya gestión se caracteriza por la aplicación de políticas inclusivas y gratuidad de

eventos y de acceso a las instituciones.

Entrevista al Sr. Antonio Franco, Director del Museo de Gemas de Puerto Madryn, museo

privado y de entrada libre y gratuita, el que además cuenta con una escuela gratuita de

orfebrería con un fin social y una muestra itinerante.

Población: La población investigada está compuesta por un universo de 5.996 habitantes, de

acuerdo al último censo realizado.

Muestra: La muestra para la realización de la encuesta es representativa y aleatoria, y está

conformada por el 1% de la población.

Respecto a la metodología implementada para la realización de las encuestas a los

vecinos del barrio, en un principio intenté realizarlas en forma domiciliaria, de acuerdo a la

distribución geográfica de los hogares. Iniciado el proceso surgió como inconveniente la

reticencia de los vecinos del barrio a colaborar con la realización de las mismas, además de

los altos índices de inseguridad y conflictividad social existente en el lugar, hechos que 18

tornaron insegura y riesgosa la actividad. Asimismo intenté realizar las encuestas en las

paradas de transporte público de pasajeros, sin mayor éxito.

Ante esta situación solicité al Presidente de la Biblioteca Hugo Darío Fernández, el

acompañamiento y la selección de los vecinos a encuestar, práctica que desarrollé durante dos

semanas con escasos resultados, debido a la poca disponibilidad de tiempo del señor Allende,

quien tiene una demanda permanente debido a las actividades que se desarrollan en la

Biblioteca.

A los fines de mejorar la efectividad de las realización de las encuestas, opté por

solicitar colaboración en forma diversificada a los responsables de las principales

instituciones que funcionan en el barrio, como la Iglesia Evangélica más antigua, la Unión

Vecinal, el Centro de Promoción Barral, el Centro de Día (adultos mayores) y la Biblioteca

Popular Hugo Darío Fernández, quienes en todos los casos brindaron dicha colaboración.

De acuerdo al conocimiento de los actores sociales involucrados, se seleccionaron los

vecinos de acuerdo a la distribución geográfica de sus hogares y a los distintos estratos

sociales.

En primer término concurrí a la Iglesia Evangélica más antigua del barrio, obteniendo

solamente dos encuestas, debido a que la mayoría de los feligreses pertenecen a otros barrios

de la ciudad.

En el caso de la Unión Vecinal seleccioné a los vecinos que retiran porciones diarias

de comida elaborada entre las 11:00 y las 12:30 horas, grupo que representa a los sectores más

desfavorecidos. Asimismo, concurrí a talleres de gimnasia y peluquería que se dictan en la

Unión Vecinal. De igual manera encuesté a los adolescentes que asisten al Núcleo de Acceso

al Conocimiento que funciona en dicha entidad, y a vecinos que se apersonaron a realizar

consultas o trámites ocasionales.

Posteriormente concurrí al Centro de Promoción Barrial (que incluye al Centro de Día)

y encuesté al personal que desarrolla funciones en dicho centro que se domicilia en el barrio,

y a vecinos que asisten a distintos talleres y actividades, en distintos horarios, de acuerdo a

información brindada por la responsable de la entidad.

En la Biblioteca Popular Hugo Darío Fernández encuesté a personas que asistieron en

busca de información, y a vecinos que participaron de los distintos talleres que se dictan en la

institución o en el marco de actividades que desarrolla la Biblioteca.

En el caso de las encuestas realizadas a alumnos de las dos escuelas primarias que

funcionan en el barrio, seleccioné como muestra a un curso completo del último año de cada

establecimiento.

19

Las encuestas fueron entregadas a personal directivo y la realización fue dirigida por

docentes, las que fueron retiradas al día siguiente. En la Escuela Provincial N° 184 se

encuestaron 34 alumnos correspondientes a 6° grado y en la Escuela de Gestión Social N°

1024, Juan XXIII, se encuestaron 20 alumnos de 6° a. A los efectos de alcanzar un número

más cercano al total del curso correspondiente a la Escuela N° 184, se agregaron 8 alumnos

de 4° grado, alcanzándose un total de 28 alumnos encuestados en la Escuela de Gestión Social

N° 1024.

7. ANÁLISIS

a) Barrio San Martín de Comodoro Rivadavia. Una aproximación al territorio

En la década del ’60, el Barrio General San Martín comienza a tomar forma, a partir

de la subdivisión que se realizó del barrio La Floresta, que lo contenía en un principio. La

división en dos barrios fue realizada luego de considerarse la gran extensión que tenía el

barrio original y la separación geográfica provocada por un pequeño cerro. Este hecho explica

que la mayoría de la nomenclatura de las calles responda a nombres de plantas o frutos, como

por ejemplo: Los Álamos, Los Duraznos, Los Claveles, Los Alelíes, Los Pensamientos, Los

Plátanos, Los Manzanos, Los Jazmines, Las Rosas, Las Margaritas y Las Orquídeas.

En sus inicios, el barrio San Martín se conformó con viviendas precarias y el agua era

provista por el gobierno municipal a través de camiones y a mediante una canilla comunitaria

ubicada a una gran distancia, en otro sector de la ciudad. El lugar se caracterizó por la falta de

servicios esenciales, la poca presencia estatal y una gran cantidad de inmigrantes de origen

chileno entre la población. La carencia de agua y la búsqueda por obtenerla dio lugar a las

primeras disputas ente los vecinos para alcanzarla (Allende, 2008). Estos hechos fueron

descriptos por Ernesto Allende, Presidente de la Biblioteca Popular Hugo Darío Fernández en

la entrevista realizada en 2014: “La lucha por el agua llegó muchas veces al enfrentamiento

entre vecinos donde se amenazaban unos con otros, o se pechaban con el fin de proteger su

reserva de agua que pudieran”.

La aproximación e ingreso al territorio se realizó a través de la “Biblioteca Popular

Hugo Darío Fernández”, actor social destacado de la comunidad que cumple actividades y

servicios que trascienden su función específica, habiéndose transformado en un centro de

actividades culturales y un referente al cual los vecinos del barrio acuden en busca de una

solución a sus problemas o necesidades.

20

El barrio San Martín atravesó una profunda crisis social, la que se incrementó a partir

de la década de 1990. Las situaciones violentas, homicidios, asaltos y diferencias entre

familias antagónicas, conforman el presente de conflictividad social que vive esta comunidad.

La mayoría de las personas que fallecen en estas circunstancias son jóvenes o adolescentes

pertenecientes a antiguas familias del lugar3.

En los ‘90 se produjo un aumento progresivo en el abuso del consumo de alcohol, y en

los últimos años proliferó el consumo de drogas, especialmente en personas jóvenes y

adolescentes. A estos factores se suma la falta de oportunidades laborales y de desarrollo

personal. Estos aspectos componen el presente del barrio, inmerso en una compleja

problemática.

De igual manera se implementaron nuevas modalidades delictivas en el lugar, como el

asalto a mano armada a cualquier hora del día y en cualquier lugar, y los casos de asalto a

estudiantes en las paradas de colectivos.

A este escenario se suma el agravante de contar con cuestiones no resueltas, como un

alto porcentaje de personas jóvenes que no estudia, que no alcanzaron el nivel medio y que no

encuentran posibilidades de acceder al trabajo formal.

El período en el que comenzó a emerger la problemática en el barrio coincide con el

crecimiento de la violencia juvenil a nivel mundial. Como señala Nancy Cardia: “El

crecimiento de la violencia juvenil en Estados Unidos y en el mundo, que llevó a que

gobiernos e instituciones invirtieran fuertes recursos en el estudio de las causas de esta

violencia y también en programas de prevención” (2005: 15).

La carencia de oportunidades para el desarrollo y para alcanzar estudios de nivel

medio, además de la falta de propuestas de trabajo formal en estos rangos etarios, impide el

desarrollo personal y es otro de los factores de relevancia involucrados en la problemática.

Otros hechos violentos y homicidios se han producido en oportunidad de resolverse

disputas ocasionales, ajustes de cuentas entre grupos antagónicos, discusiones banales,

además de un significativo número de suicidios.

En este escenario, los museos de la ciudad se erigen como actores sociales con un gran

potencial para provocar cambios en la vida de los habitantes del barrio, coadyuvar a la

inclusión social y brindar acceso al patrimonio. La gratuidad se constituye en una herramienta

fundamental para eliminar una de las barreras de acceso a los museos, que impiden

principalmente la participación de visitantes pertenecientes a barrios periféricos, junto a otras

3 A partir de un análisis de iconografía urbana en el barrio, se observó una gran cantidad de retratos y grafitis relacionados a los jóvenes fallecidos a causa de homicidios en el barrio (Ver Anexo IV).

21

barreras como la accesibilidad física y cognitiva, los prejuicios sobre estas instituciones, el

costo del transporte, y los factores culturales, educacionales y sociales.

b) Museos de Comodoro Rivadavia. Una oferta patrimonial centralizada

A pesar de ser una ciudad cercana a los 200.000 habitantes, Comodoro Rivadavia

cuenta solamente con cuatro museos: Museo Regional Prof. Antonio Garcés (1948), Museo

Nacional del Petróleo (1987), Museo Ferroportuario (1997) y Museo Chalet Huergo (2004).

Excepto el Museo Nacional del Petróleo (MuNaP), que depende de la Universidad

Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (U.N.P.S.J.B.), el resto de las instituciones son de

administración municipal.

Dos de los museos, el Museo Ferroportuario y M.R.P.P.A.G., funcionan en el centro

de la ciudad. En tanto, el Museo Nacional del Petróleo y el Museo Chalet Huergo están

emplazados en el barrio General Mosconi (barrio residencial, ubicado a tres kilómetros al

norte del centro)4.

Breve reseña de los museos que funcionan en actualmente en la ciudad de Comodoro

Rivadavia:

Museo Regional Patagónico Prof. Antonio Garcés (M.R.P.P.A.G.): Es el museo más antiguo

de la región y fue creado por la Gobernación Militar de Comodoro Rivadavia5 para albergar a

la colección arqueológica integrada por más de 7.000 piezas al momento de su fundación en

1948, donada por el Prof. Antonio Garcés, con el objetivo de la creación de un museo regional

en la Patagonia Central.

Dicha Gobernación diseñó y construyó un edifico de grandes dimensiones de estilo

neoclásico inspirado en edifico del Museo de Ciencias Naturales de la ciudad de La Plata, el

que preveía diversas salas de exhibición, laboratorios, depósitos y estacionamiento. Este

edificio también contemplaba el funcionamiento de la Biblioteca Pública Municipal. Dicho

edificio nunca albergó a estas instituciones y tuvo otros destinos. En la actualidad funciona

como sede del Juzgado Federal.

Luego de ocupar distintos espacios, todos ellos inadecuados para su funcionamiento,

a finales del siglo XX el M.R.P.P.A.G. se instaló en el edificio de los “ex Baños Públicos”,

construcción que resulta inadecuada debido a sus reducidas dimensiones, además de otra serie 4 Cabe señalar, que el barrio San Martín, se encuentra emplazado en la zona sur-oeste de la ciudad. 5 La Zona Militar o Gobernación Militar de Comodoro Rivadavia fue una división administrativa de la República Argentina -creada como zona militar- realizada en 1943 y convertida en gobernación militar por decreto-ley N° 13.941 del 31 de mayo de 1944, por el presidente de facto Edelmiro Farrell. Su capital fue la ciudad de Comodoro Rivadavia. Desapareció el 28 de julio de 1955.

22

de inconvenientes, como por ejemplo su ubicación en un boulevard en pendiente y sin

estacionamientos, no contar con espacio adecuado para depósitos y laboratorios, y su uso

primigenio.

La colección original se acrecentó paulatinamente y fue divida en: Arqueología,

Paleontología, Ciencias Naturales y Pueblos Originarios.

En sus inicios, a partir de la creación de la provincia de Chubut, en 1955, el Museo

dependió del Gobierno de la Provincia, y a principios del siglo XXI pasó a depender de la

Municipalidad de Comodoro Rivadavia. Se encuentra ubicado en el boulevard de Avenida

Rivadavia, entre calles Francia y Chacabuco, en el centro de la ciudad.

Museo Nacional del Petróleo (MuNaP): Fue creado en 1987 por Yacimientos Petrolíferos

Fiscales (Y.P.F.) mediante Resolución N° 344, con el objetivo de exhibir la historia de la

empresa estatal. En 1993 fue transferido a la Universidad Nacional de la Patagonia, como

consecuencia de la privatización de la empresa.

Actualmente, su guion museológico y museográfico está en pleno proceso de cambio.

Es un museo de grandes dimensiones, que posee una muestra interna y otra externa. El

petróleo es analizado desde fundamentos geológicos, históricos, vinculado a la industria y

cómo afecta en nuestra vida cotidiana, etcétera.

En 1997 fue declarado Bien de interés histórico y cultural a nivel nacional, mediante la

Ley N° 24.799. Se encuentra ubicado en calle Petrolero San Lorenzo N° 250 del barrio

General Mosconi, tres kilómetros al norte del centro de la ciudad.

Museo Ferroportuario: Fue inaugurado en 1996 y creado mediante Ordenanza 5853/95.

Abarca un área histórica ubicada en el casco céntrico de la ciudad conformada por distintos

sitios, elementos y objetos históricos, que pertenecieron al ferrocarril y al puerto de

Comodoro Rivadavia.

La sede del Museo funciona en el edificio de la Estación del Ferrocarril, declarada

“Bien de Interés Histórico Nacional” mediante Ley N° 24.798 y Patrimonio Histórico de la

ciudad de Comodoro Rivadavia de acuerdo a Ordenanza Municipal N° 8830/07.

Museo Chalet Huego 6 : Fue inaugurado en 2004 por la Municipalidad de Comodoro

Rivadavia. Su temática está relacionada a la historia del edifico homónimo, y al aspecto social

6 Este museo no ha sido incluido en el análisis de esta investigación – sólo de manera indirecta – por motivos que hacen a su funcionamiento sin sede y al hecho de que, quien suscribe, es trabajador del mismo.

23

y laboral de los trabajadores de la empresa Y.P.F. y de la dependencia estatal que la precedió,

la Dirección Nacional de la Explotación del Petróleo de Comodoro Rivadavia.

El edificio fue construido en 1919, remodelado en 1941 (de estilo pintoresquista) y

cuenta con una superficie de 1.044 m², además de un jardín histórico de 51.000 m². Es uno de

los edificios más emblemáticos de Comodoro Rivadavia, declarado junto a su jardín histórico-

mediante Ordenanza- patrimonio cultural y natural en 2007. Asimismo cuenta con el dictamen

de la Comisión Nacional de Monumentos, Bienes y Lugares Históricos, para ser declarado

Monumento Histórico Nacional.

En marzo de 2010 se produjo un incendio que afectó a las salas de exhibición y

administración, por lo que su sede actualmente funciona el Centro Cultural de la ciudad, a la

espera de la reparación del edificio. En los próximos meses el Museo abrirá una muestra

temporaria en dicho centro.

Actualmente se encuentra en ejecución una obra millonaria en el jardín histórico del

Museo, que comprende la construcción de una pista aeróbica y la instalación de juegos

infantiles y gimnasios al aire libre, la que no fue solicitada ni aceptada por la institución,

debido que la misma ocasiona una pérdida patrimonial tangible e intangible, al igual que un

cambio radical en su significatividad cultural.

c) Vinculación entre los vecinos del Barrio San Martín y los Museos de la ciudad.

Interpretaciones cruzadas

- Punto de vista desde el Barrio

Vecinos del barrio San Martín:

Se realizaron entrevistas a dos vecinos seleccionados con la colaboración de la

Biblioteca Hugo Darío Fernández, quienes asistieron a los museos locales como parte de

contingentes. Asimismo se efectuaron sesenta encuestas a distintos vecinos.

De los datos obtenidos, analizados y comparados, surge que a partir de los resultados

de la encuesta a vecinos:

Encuesta general sobre museos: 60 encuestadosN° Consulta SÍ (%) NO (%)1 ¿Cree que los museos son importantes? 58 97% 2 3%2 ¿Le interesaría visitar los museos de la ciudad? 58 97% 2 3%3 ¿Conoce algún museo en la ciudad? 29 48% 31 52%

Si contestó sí, ¿Cómo se enteró que había los museos en la ciudad?a) En Facebook 0b) Por los diarios 1

24

c) Por la televisión 6d) Por la radio 3e) Por un conocido 7f) Otros 14

4 Visitó alguno de estos museos: 26 42% 34 58%a) Museo Regional Patagónico Prof. Garcés 12b) Museos Chalet Huergo 1c) Museo Ferroportuario 7d) Museo Nacional del Petróleo 13

5 Si visitó algún museo de la ciudad, ¿cómo fue?a) En colectivo 8b) En auto 2c) Turistas por un día 2d) Contingente Biblioteca Popular Hugo Darío Fernández 3e) Escuela 4f) Contingente Centro de día 3g) Caminando 1

6 Si los visitó, ¿volvió? 14 67% 7 33%7 ¿Qué fue lo que más le gustó? Objetos, Ford T, textiles, bombas de

petróleo, todo, huesos de reptiles, balancines, historia, Halcón (taxidermizado), animales taxidermizados, antropología, paleontología, locomotoras, pueblos originarios, todo (4), tren, objetos.

8 ¿Qué fue lo que menos le gustó? Muy lejos, muy abandonado, no atrae, hay pocas cosas, no había guía, relato muy breve, estado de abandono, falta explicación, falta folletería, temática petrolera, cultura patagónica, ferrocarril, trenes, historia del petróleo.

9 ¿Pagaría entrada para ir a un museo? 23 39% 36 61%Casi la totalidad de los vecinos considera que los museos son importantes y tiene

interés en visitar a los museos de la ciudad, pero solamente el 48% de los encuestados los

conoce y únicamente el 42% los visitó alguna vez. Es decir: más de la mitad de la población

del barrio no sabe respecto de la existencia de museos en la ciudad.

Asimismo el 67% de quienes visitaron los museos locales reiteraron su visita. De

igual manera, más del 60% no está dispuesto a pagar una entrada para asistir a un museo.

También se observa que la mayoría de los vecinos que asistieron a los museos lo hicieron en

transporte público de pasajeros o en contingentes organizados por la biblioteca u otros

actores, y solamente dos vecinos lo hicieron en automóvil y uno caminando7.

De los datos obtenidos se observa que los museos más visitados son los más antiguos

de la ciudad, es decir, el M.R.P.P.A.G. (de 1948) y el MuNaP (inaugurado en 1987). Esta

tendencia podría estar relacionada a la edad de los entrevistados.

En cuanto a la pregunta referida a lo que no les gustó de los museos locales a los

vecinos del barrio San Martín, las respuestas más destacadas están referidas a la lejanía, el

estado de abandono, los poco atractivos que resultan, las pocas cosas que contienen, la falta 7 Consultado el vecino, manifestó que asistió al M.R.P.P.A.G. llevado por la Escuela Juan XXIII en su niñez, y que ir caminando a los museos era una práctica habitual en esa época.

25

de guías, el relato breve de los guías, la falta de explicación y falta de folletería. Estas

respuestas dejan en evidencia que no alcanza con la gratuidad y la accesibilidad al patrimonio.

La oferta museal para coadyuvar a provocar cambios culturales en la sociedad y cambios

positivos en las vidas de las personas, debe cumplimentar los estándares establecidos por el

Concejo Internacional de Museos (ICOM): resultar atractiva, participativa y permitir la

integración de los museos con su comunidad.

De las entrevistas a vecinos surge que los mismos accedieron a los museos locales a

través de contingentes organizados por el “Centro de Día”, que depende del Centro de

Promoción Barrial de la Municipalidad local, y que desconocen la existencia de otros museos

al margen del que visitaron en la oportunidad. Asimismo, si bien el costo del transporte

público de pasajeros resultaría un inconveniente, surgieron otras barreras de acceso a los

museos y otras actividades culturales que no habían sido consideradas. Por ejemplo, los

constantes hechos de inseguridad que dificultan movilizarse desde la parada de colectivos

hasta el domicilio, y además, la necesidad de realizar combinaciones de colectivos para

acceder a la zona norte de la ciudad, en la que funcionan el MuNaP, el Chalet Huergo y el

Predio Ferial de la ciudad. Al respecto el vecino del barrio San Martín, Carlos Argentino

Lacalle, manifestó: “…es un problema para toda la gente que vive en los barrios, porque no

tenemos un colectivo que vaya directo”.

En tanto, en cuanto al pago o no de la entrada, ninguno de los dos vecinos

entrevistados dijo que iría a un museo si le cobraran entrada y consideran que el costo del

pasaje constituiría un inconveniente8. También el vecino Lacalle expresó en forma taxativa:

“Si me cobran entrada, no”. Asimismo su esposa, Nuria de Lacalle afirmó: “Porque nosotros

somos jubilados, vivimos de la jubilación de él (…), entonces yo no me puedo divertir, no

puedo ir a ver un show. No tengo recreación porque no tenemos medios”.

Establecimientos educacionales del barrio San Marín

De las entrevistas realizadas a los directivos de los establecimientos educacionales del

barrio9 surge que – a pesar de que a los museos de la ciudad de Comodoro Rivadavia asisten

regularmente contingentes escolares en gran número y frecuencia – el vínculo entre los

muesos locales y los establecimientos escolares del barrio San Martín es prácticamente

inexistente, al igual que las visitas de contingentes de alumnos del barrio San Martín a los

museos locales. Tampoco los museos de la ciudad han realizado actividades de difusión o

8 En el caso de los vecinos entrevistados, el señor Lacalle y su esposa Nuria Lacalle, cuentan con pasaje gratuito, debido a la discapacidad del señor producto de un golpe en la cabeza en un hecho de inseguridad. 9 Escuela Provincial N° 184, Escuela de Gestión Social N° 1024 y del Jardín de Infantes N° 426 “Huellita Sureña”.

26

muestras temporarias en estas escuelas. Asimismo, la reciente invitación realizada al Jardín de

Infantes N° 426 para visitar la sala de arte del Museo Ferroportuario, fue realizada por parte

de la Dirección de Artes Visuales de la Municipalidad de Comodoro Rivadavia, dependencia

municipal que gestiona dicha sala de arte dentro del Museo Ferroportuario.

Los tres directivos de los establecimientos educacionales del barrio coinciden en que

el principal impedimento para que los alumnos del barrio San Martín realicen vistitas

periódicas a los museos locales – en el marco de su plan de estudios – está representado por el

elevado costo del alquiler de los vehículos de traslado; a lo que se agrega la escasa solvencia

económica de las asociaciones cooperadoras de cada establecimiento, debido a la situación

socioeconómica compleja e inestabilidad laboral de los padres, en la mayoría de los casos. El

costo del alquiler de vehículos de transporte resulta el principal inconveniente para la

totalidad de las entidades del barrio.

Del análisis de las encuestas realizadas a los alumnos de la Escuela Provincial N° 184

y de la Escuela de Gestión Social N° 1024 “Juan XXIII”, se concluye que al 100% de los

alumnos considera que los museos son importantes y que al 96% le interesa visitar a estas

instituciones. Asimismo el 61% de los estudiantes no conoce la existencia de museos en la

ciudad y el 89 % no concurrió a un museo llevado por una escuela.

Estos datos obtenidos reflejan que la totalidad de los alumnos consideran importante a

los museos y que la gran mayoría tiene interés en conocerlos, pero se ven imposibilitados de

asistir llevados por sus escuelas casi el 90% de los alumnos, debido a dificultades

socioeconómicas, falta de promoción y acercamiento de los museos; y principalmente, a causa

del elevado costo del traslado, situación que podría verse subsanada mediante la subvención

de dicho costo por parte del Estado, ya sea a través de los museos, de las escuelas, de

cualquier otra dependencia pertinente, o bien mediante gestiones que posibiliten el patrocinio

de entidades o empresas privadas.

En relación a la disposición a pagar entrada para asistir a un museo, se observa una

notoria diferencia entre los alumnos de la Escuela Juan XXIII (de gestión social) con un 93%

y la Escuela Provincial N° 184 (pública) con un 65%.

Respecto a la gratuidad y las barreras económicas para los vecinos en general, se

visualiza que tanto el cobro de entradas y el costo del pasaje significan impedimentos y

dificultades para que gran parte de los vecinos visiten los museos locales por cuenta propia y

se produzca la recurrencia de las vistas. Los tres directivos de los establecimientos

educacionales entrevistados coinciden en la descripción de la situación socioeconómica

mayoritaria en el barrio. Al respecto la Directora de la Escuela Provincial N° 184, María

Fernanda Mella, refiere: “En general los alumnos que asisten a la Escuela son de familias 27

carenciadas, la mayoría de las familias reciben el cobro de la asignación (universal) por

hijo, o sea, son de bajos recursos, y los que trabajan tienen trabajos de changas,

esporádicos”. De igual manera se debe considerar que se observa que el hábito de visitar a los

museos locales no se encuentra incorporado dentro de las costumbres y rutinas de los vecinos

del barrio.

Encuesta Escuela Provincial N° 184 – 34 alumnos encuestadosN° Consulta SÍ (%) NO (%)1 ¿Crees que los museos son importantes? 34 100% 0 0%2 ¿Te interesaría visitar los museos de la ciudad? 30 88% 4 12%3 ¿Conocés algún museo en la ciudad? 7 21% 27 79%

Si contestó sí, ¿Cómo se enteró que había los museos en la ciudad?a) En Facebookb) Por los diarios 1c) Por la televisiónd) Por la radioe) Por un conocido 5f) Otros 1

4 ¿Fuiste con tu escuela a estos museos? 3 9% 31 91%a) Museo Regional Patagónico Prof. Garcés 2b) Museos Chalet Huergoc) Museo Ferroportuariod) Museo Nacional del Petróleo 1

6 Si los visitó, ¿volvió? 3 76% 1 24%7 ¿Qué fue lo que más le gustó? Estatuas8 ¿Qué fue lo que menos le gustó? flechas9 ¿Pagaría entrada para ir a un museo? 21 65% 13 35%

Encuesta Escuela de Gestión Social N° 1024 – 28 alumnos encuestadosN° Consulta SÍ (%) NO (%)1 ¿Crees que los museos son importantes? 28 100% 0 0 %2 ¿Te interesaría visitar los museos de la ciudad? 27 96 % 1 4 %3 ¿Conocés algún museo en la ciudad? 11 39 % 17 61 %

Si contestó sí, ¿Cómo se enteró que había los museos en la ciudad?g) En Facebook 1h) Por los diarios 1

Por la televisión 1Por la radio

k) Por un conocido 3Otros 2

4 ¿Fuiste con tu escuela a estos museos? 3 11 % 25 89 %e) Museo Regional Patagónico Prof. Garcés 2

Museos Chalet Huergog) Museo Ferroportuarioh) Museo Nacional del Petróleo 2 1

6 Si los visitó, ¿volvió? 1 33% 2 67%7 ¿Qué fue lo que más le gustó? Estatuas8 ¿Qué fue lo que menos le gustó? flechas9 ¿Pagaría entrada para ir a un museo? 26 93 % 2 7 %

28

Entidades que organizaron contingentes a los museos locales (Biblioteca Popular Hugo Darío

Fernández – Dirección de Turismo/Turista por un día)

Del análisis de las entrevistas realizadas a Ernesto Allende, presidente de la Biblioteca,

y a la guía de turismo Estela Carrizo, responsable de la implementación el programa “Turista

por un Día” realizado por la Dirección de Turismo de la Municipalidad local, surge que los

escasos vínculos establecidos entre los museos locales, actores sociales y vecinos del barrio

San Martín, no fueron originados por los museos sino producidos por iniciativa de las

distintas entidades o instituciones que funcionan en dicho barrio. Este es el caso de la

Biblioteca Popular “Hugo Darío Fernández” y de los programas o actividades de otras

dependencias (programa “Turista por un día” de Dirección de Turismo M.C.R.). Asimismo,

las visitas realizadas por distintos vecinos al Museo Nacional del Petróleo, fueron organizadas

por el “Centro de Día” (adultos mayores), dependiente de la Secretaría de Desarrollo Humano

de la Municipalidad local, y no por iniciativa del MuNaP.

De la segunda entrevista realizada a Ernesto Allende, se desprende que la relación

establecida entre vecinos del barrio San Martín que participaron de distintos contingentes

organizados por la entidad se centran los museos municipales, que mantienen entrada gratuita,

además de responder a un interés particular de su parte referido a la historia de la ciudad, y

encontrarse ubicados a menor distancia. Asimismo, Allende habitualmente gestiona el

servicio gratuito de vehículos de transporte, ante la delegación local de la Fuerza Aérea u

otras instituciones.

De igual manera, Allende refiere respecto de otras barreras para acceder a los museos

locales, como es el caso de la peligrosidad que presenta el Museo Regional Patagónico Prof.

Antonio Garcés debido a su ubicación dentro de un boulevard, en una de las arterias más

transitadas de la ciudad, en una pendiente pronunciada y sin dársenas de estacionamiento: “El

Garcés me es imposible por lo riesgoso que es. Es muy riesgoso”. Asimismo deja en claro

que el vínculo establecido entre la entidad a su cargo y los museos locales, se generó por su

inquietud ante el interés de los vecinos, y no a raíz de propuestas originadas en los museos.

Además de haber expuesto en la entrevista el poco interés de parte de uno de los museos por

documentar aportes sobre conocimientos sobre objetos exhibidos, expresados por vecinos del

barrio integrantes de los contingentes.

Respecto al cobro de entrada para acceder a los museos locales, Allende es taxativo en

cuanto a su inconveniencia: “¡No! Si cobran entrada. Aunque cobren un peso ya significa una

molestia. Esto tiene que ser gratuito. Es más, nosotros cada vez que vamos al Museo

Ferroportuario le pedimos que le den a los chicos una bolsita, la clásica que reparten en el

29

día del niño, qué sé yo, que una bolsita, que tiene un alfajorcito, un turrón, un juguito, unos

caramelitos”.

De igual manera, y al igual que los directivos de los tres establecimientos

educacionales entrevistados, refiere al costo del alquiler de vehículos de transporte como un

impedimento para acceder a los museos mediante la conformación de contingentes,

especialmente para los más alejados del barrio. En cuanto a la accesibilidad física de personas

discapacitadas que integraron los contingentes, no existieron inconvenientes.

Respecto al programa “Turista por un Día”, Allende considera que este representa un

importante aporte a la accesibilidad de los vecinos a los museos, pero con vacantes muy

limitadas.

Los distintos actores coinciden en que la organización de contingentes para realizar

visitas se constituye en una modalidad que aseguraría la concurrencia de los vecinos a los

museos. Hecho que podría provocar un cambio cultural, y favorecer el acercamiento y

participación de los vecinos en estas instituciones. Al respecto, la guía de turismo Estela

Carrizo -responsable de la implementación del programa de sensibilización turística “Turista

por un día”- refiere: “creo que los vecinos del barrio San Martín, para concurrir a los

museos, asistirían si lo hicieran a través de contingentes concentrados desde la Unión

Vecinal, de una Biblioteca, de un centro comunitario o de un Centro de Adultos Mayores.

Generalmente el interés por acceder a un programa recreativo o cultural tiene mayor éxito y

concurrencia, cuando es por medio de una institución intermedia”. En el mismo sentido y en

coincidencia, el Presidente de la Biblioteca Popular Hugo Darío Fernández manifiesta: “Tiene

que ser con contingentes. No va absolutamente nadie. Es más, alguno iría, aprovecharía el

colectivo para ir a hacer un trámite a la Municipalidad o que se yo, no, no, no. Esto tiene que

ser exclusivo dedicado a esto”.

En relación a las barreras físicas, en la mayoría de los casos los museos locales

cuentan con la infraestructura adecuada para recibir a visitantes con discapacidad física y

poseen recursos museográficos para no videntes, ambliopes o disminuidos visuales.

Respecto de las barreras cognitivas, no se observa que representen impedimentos de

acceso en el caso de las visitas de los contingentes realizadas, debido a que en todos los casos

se contó con guías que subsanaron deficiencias pedagógicas y museográficas observadas. “…

el departamento didáctico, que prácticamente ninguno de los tres (museos municipales)

todavía ha sido creado, pero creo que allí se podría trabajar muy bien las temáticas, por

ejemplo” (Guía Estela Carrizo, programa “Turista por un día”).

Punto de vista desde los Museos30

Del análisis de las entrevistas realizadas a los referentes de los museos locales, se

deduce que estas instituciones no realizan estudios de público que contemplen información

respecto de los visitantes provenientes de los barrios periféricos de la ciudad como una de las

variables. Tampoco realizan programas de inclusión de los públicos que no están visitando los

museos.

El MuNaP y el M.R.P.P.A.G no poseen estrategias para incorporar a público de

barrios periféricos, pero cuentan con visitantes de estos barrios a través de distintas entidades

de acción social, como el “Grupo de la Esquina” y niños en riesgo de adicción. Asimismo

asisten contingentes escolares y visitantes en el marco del plan “Turista por un Día”. En este

sentido, la Prof. Anahí Fonseca, perteneciente al M.R.P.P.A.G, manifestó: “se reciben, por

ejemplo, del “Grupo de la Esquina”, que son niños en tema de riesgo; tenés otro grupo, que

son niños en riesgo de adicción. O sea que no es una estrategia propia del Museo, pero sí se

está recibiendo a estos grupos”. A su vez, la Prof. Graciela Ronconi, directora del MuNaP,

manifestó: “No específicamente [barrios] periféricos, sino a la comunidad en general (…)

con actividades culturales (…) que atraigan a la comunidad, pero al tener poco recurso

humano es complicado también para nosotros. Sabemos que es uno de los objetivos

primordiales de todo museo atraer a la comunidad infantil, sobre todo a los chicos”.

Desde el Museo Ferroportuario, se afirma que desde el año 2011 la institución

implementó la visita a distintos actores sociales pertenecientes a los barrios periféricos con

una muestra itinerante, charlas y videos, en el marco del proyecto “El Museo visita tu barrio,

tu escuela, tu lugar”. Al ser consultado el guía del Museo Ángel Erruvidart, en relación a las

estrategias con la que cuenta la institución para atraer al público perteneciente a barrios

periféricos de la ciudad, manifestó: “Sí, en el marco de un proyecto que se elaboró desde el

museo desde el año 2011, del 2010 al 2011, se proyectó que en base a algo que había pasado

en provincia, un accidente de un contingente de chicos en el Dique Florentino Ameghino10, se

frenaron muchas salidas de los colegios principalmente, y en base a eso se armó un proyecto

que contemplaba los barrios, distintos actores sociales y los colegios, donde el museo salía

con una muestra itinerante, y charlas y videos a los distintos espacios.11

En este sentido, los tres directivos de los establecimientos educacionales del Barrio

San Martín que fueron entrevistados, coinciden en manifestar que ninguno de los museos

10 Se refiere a un accidente ocurrido el 19 de septiembre de 2002, en el que hubo víctimas mortales y varios heridos, al desprenderse un puente que intentaban cruzar. El hecho ocurrió sobre el Río Chubut en el Dique Florentino Ameghino, provincia de Chubut, Argentina. En el accidente, fallecieron ocho alumnos y la directora de la Escuela Nº 39 de la provincia de Buenos Aires. Las víctimas correspondían a un contingente de profesores y alumnos de 5° y 7° grado que, invitados por la gobernación de la provincia, se encontraban en un viaje de estudio.11 Cabe aclarar que este programa no se sigue realizando en la actualidad.

31

realizó muestras o charlas en las instituciones a su cargo y que no se acercaron propuestas. Al

respecto, Gisela Astudillo, Vicedirectora del Jardín de Infantes N° 426 - Huellita Sureña,

manifestó en forma taxativa: “No, no se han acercado, hasta el momento”; la Directora de la

Escuela Provincial N° 184, María Fernanda Mella expresó: “no, venir, no. Nosotros

recibimos invitaciones, a veces, por intermedio de Supervisión Técnica, de la Supervisión de

Escuelas”; y la Vicedirectora de la Escuela de Gestión Social N° 1024 - Juan XXIII, dijo:

“No, en realidad no; porque no hay propuestas desde los museos que nos lleguen

directamente”.

Con respecto a la gratuidad o no de los museos de Comodoro Rivadavia, tanto el

Museo Ferroportuario como el M.R.P.P.A.G. tienen entrada libre y gratuita. En tanto, el

Museo Nacional del Petróleo, al contar en la actualidad sólo con la muestra externa – hasta la

finalización de las obras en la muestra interna – cobra una entrada general de veinte pesos, y

los jubilados y escolares cinco pesos. Habitualmente el museo mantiene una tarifa

diferenciada entre extranjeros, visitantes nacionales, provinciales, locales, escolares, jubilados

y estudiantes universitarios (quienes son los únicos que entran gratis al mismo).

Las escuelas de bajos recursos pueden tener una entrada gratuita previo trámite

administrativo por nota, en la que se exprese que se trata de una escuela de “bajos recursos”.

Al respecto, Miguel Montaña, guía del MuNaP, explica: “Los contingentes escolares abonan

una entrada de cinco pesos por persona, eso excluye a los que son los docentes y padres, y

demás, que vengan a asistir a lo que es el grupo (…) En principio estaría establecido lo que

es la entrada estándar, pero existe la posibilidad de lo que es la gratuidad. Ellos pueden

tramitar mediante una nota, y eso lo autoriza la Dirección”.

Paradójicamente el Museo Nacional del Petróleo depende de la Universidad

Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, pública y gratuita, e impone barreras económicas a

Escuelas públicas y gratuitas, para su acceso a la educación no formal y al producto de la

relación entre Museo-Escuela, (educación formal-educación no formal).

Políticas de acceso a los museos locales

Respecto a las políticas que se aplican en los museos locales en relación a la

gratuidad y la inclusión social, existen dos políticas diferenciadas y opuestas entre los museos

dependientes de la Municipalidad local y el MuNaP, perteneciente a la Universidad Nacional

de la Patagonia San Juan Bosco.

En el caso de los museos municipales, al igual que el resto de las actividades

culturales, se enmarcan dentro de una política de gratuidad en pos de la inclusión social sin 32

que se considere la condición socioeconómica de las personas para su ingreso. Al respecto, el

actual secretario de Cultura de la Municipalidad local, Daniel Vleminchx, manifiesta: “Esta

política es pública [de gratuidad e inclusión social] (…) las planteamos nosotros desde el

gobierno. Después, algunas de ellas quizá se transformen en políticas de Estado. Eso debería

ser una política de Estado. Hoy es una política pública de este gobierno (…) Quizás otro la

modifique, pero si nosotros avanzamos, las políticas públicas se pueden transformar

definitivamente en políticas de Estado, cuando la gente se las apropia, cuando se empodera

de ello”.

Respecto a la gratuidad y su importancia en relación a la inclusión social, Vleminchx

señala que “la columna vertebral de la inclusión social es la gratuidad”. Es importante

señalar que si bien la Municipalidad de Comodoro Rivadavia siempre mantuvo una política de

gratuidad de los museos, se observa que desde los museos no se contemplan las otras

variables que intervienen en la accesibilidad de los ciudadanos a la cultura. Tal vez, esto tenga

que ver con una concepción muy arraigada aun de lo que es el museo y de para qué sirven los

museos. Es decir, un espacio donde no se desarrollan actividades, es estático y sirve con sólo

estar abierto.

Al contrario, el Museo Nacional del Petróleo, mantiene una política de cobro de

entradas debido a que los ingresos obtenidos coadyuvan al mantenimiento del museo, ya que

el mismo no tiene un presupuesto asignado. Entonces, debe implementar diversas medidas

para la generación de recursos económicos. A estos ingresos se suma al alquiler de

dependencias y otras actividades que se realizan en el museo, y complementan el presupuesto

asignado por parte de la Universidad para su mantenimiento. En este sentido, la Prof. Graciela

Ronconi, directora del MuNaP, manifestó que el ingreso producido por el cobro de las

entradas no es suficiente para mantener la economía del Museo: “Depende de él, pero no es

suficiente. El Museo establece distintas actividades culturales o de alquiler de sus recursos.

Como por ejemplo auditorio y buffet. De esta manera logramos alquilar todos estos espacios

y los fondos se incrementan, ¿para qué?, para sostenerlo. Todavía no podemos hacerlo

crecer. Por ejemplo hay mucho vandalismo, roturas, mantenimiento. Por ahora estamos

sosteniendo de esta manera”.

Ante la consulta referida a la relación entre gratuidad e inclusión social, tanto

Directora del MuNaP, como el Secretario de Cultura, Daniel Vleminchx, coincidieron en

afirmar en forma taxativa que la gratuidad de acceso a los museos contribuye a la inclusión

social. En tal sentido, el secretario de Cultura, Daniel Vleminchx expresó: “¡Absolutamente!

La gratuidad es la base fundamental de la inclusión social”. Incluso, señala que la gratuidad

permite que dos personas que provienen de dos ámbitos socioeconómicos distintos, sean 33

iguales, tanto la persona que puede pagar como la que no lo puede hacer. Entonces,

podríamos pensar otro elemento muy importante relacionado a la gratuidad que es que, dos

personas que de otra manera no se conocerían ni tomarían conciencia sobre el otro, ante la

misma posibilidad de ingreso libre y gratuito a un espacio de cultura, saben del otro, se

construye un nosotros. De esta manera, el museo sirve de lugar de encuentro de personas que

de otra manera no se conocerían ni se tendrían en cuenta. Y esto es posible porque en la

entrada del museo no se realiza una evaluación de la situación económica del visitante para

poder ingresar. Permite juntar a las partes de la sociedad en un mismo espacio, visibilizarnos

como sociedad.

En tanto, la directora del MuNaP, Prof. Graciela Ronconi, afirmó: “Sí, sí, por

supuesto”. Pero, considera que las personas valoran sólo si pagan: “Puede haber respuestas

como personas. Es muy subjetiva (la pregunta), Yo creo que sí, en parte sí, se podría perder

el valor, Lamentablemente somos así. Lo que vale… lo que cuesta vale”. Entonces, cabría

preguntarse si el mensaje que se da desde el museo es “te cobro porque si no, no vas a valorar

lo que hay en el museo”. Y si la cultura es una construcción humana, sin distinción social ni

económica, ¿no es un derecho de todos acceder a ella?

El análisis de un caso particular

Si bien el museo de Gemas de Puerto Madryn funciona fuera del ejido urbano de la

ciudad de Comodoro Rivadavia, constituye un caso paradigmático en relación a la gratuidad y

la inclusión social, debido a que es un museo privado que mantiene la entrada gratuita desde

su creación hace más de 15 años.

Paradójicamente, un funcionario del gobierno de la provincia de Chubut cuestionó al

director del Museo de Gemas la política de gratuidad de acceso que implementa la institución,

al respecto, en la entrevista que se le realizó, Antonio Franco expresó: “hemos sido

cuestionados por algún funcionario provincial, y la forma en la que cuestionó mi decisión de

no cobrar entradas, no fue muy agradable. Igualmente le explicamos cuáles eran nuestras

expectativas, y como nuestro Museo es privado, no tuvo injerencia”.

De igual manera, dentro de las instalaciones del Museo funciona una escuela de

orfebrería habilitada, la que persigue un fin social: “Tenemos cursos de orfebrería y

lapidación, dedicados a personas de bajos recursos o grupos sociales minoritarios”.

Asimismo, el Museo de Gemas cuenta con una muestra itinerante con la cual recorre

el interior de la provincia de Chubut. Se realizan muestras en las Escuelas de las distintas

34

localidades con el fin de acercar el Museo a público que habitualmente no tiene acceso a los

museos que funcionan en las ciudades más pobladas.

El museo se financia con la venta de artículos de joyería elaborados por el Sr.

Franco y su hijo, ambos orfebres; piezas los que se comercializan en la tienda de la

institución.

9. CONCLUSIONES DEL TRABAJO

Como conclusiones obtenidas de la ejecución del presente proyecto de investigación,

se desprende en primer término, que los museos de la ciudad responden a dos políticas

opuestas en relación a la gratuidad. Por un lado, los museos municipales con entrada gratuita,

y por otro el MuNaP, dependiente de U.N.P.S.J.B., que mantiene una política de cobro de

entradas que incluye a las visitas de establecimientos educacionales, la que impone barreras

económicas a las escuelas públicas y gratuitas, para su acceso a la educación no formal y al

producto de la relación entre Museo-Escuela (educación formal-educación no formal).

Asimismo, aunque los museos municipales mantengan una política de gratuidad, ésta

no resulta suficiente para logar la accesibilidad de los habitantes del barrio San Martín, debido

a que se presentan otras barreras que determinan que los vecinos y alumnos del barrio no

asistan a los museos como parte de su esparcimiento o de su plan de estudios, y que un gran

porcentaje de la población no conozca de su existencia.

Estas barreras están constituidas, principalmente, por el costo de del alquiler de

transportes, el costo del pasaje de colectivos y las frecuencias y combinaciones, la

inseguridad, los hábitos culturales y principalmente la ausencia de estrategias para atraer

público del barrio, por parte de los museos locales; entidades que en su totalidad no realizan

estudios de público efectivos tendientes a conocer a su público y a su no-público, que ayuden

a promover vínculos con los establecimientos educacionales u otras instituciones de los

barrios de la ciudad. Y en particular, en el caso del barrio San Martín, cuando se han dado

relaciones, éstas no fueron originadas desde los museos, sino por las instituciones del mismo

barrio.

En relación a las dos escuelas primarias y el jardín de infantes que funcionan en el

barrio San Martín, sus alumnos no visitan regularmente los museos locales como parte del

plan de estudios, siendo el principal impedimento el costo del alquiler de transporte y la

imposibilidad de las asociaciones cooperadoras de cubrir los costos, debido a la situación

socioeconómica de los padres de los alumnos. La inexistencia de visitas de los alumnos del

barrio San Martín a los museos locales, a diferencia de gran parte de los alumnos de la ciudad, 35

contribuye a la exclusión social de los mismos debido a que no tienen acceso a la educación

no formal y al producto resultante de la relación Escuela-Museo. La totalidad de los alumnos

encuestados considera importante a los museos, pero más del 60% no conoce la existencia de

museos en la ciudad.

Además, surge de la investigación que una de las herramientas que resulta de gran

importancia en el corto plazo para acercar a los habitantes del barrio a los museos y generar la

recurrencia de las visitas, es la organización de contingentes escolares y de las distintas

entidades del barrio San Martín, con la participación del Estado Municipal.

Como las principales barreras de acceso a los museos para los habitantes del barrio

San Martín, se identifica a los factores socioeconómicos y hábitos culturales. En este marco,

la gratuidad, la bonificación del transporte público y la organización de contingentes por parte

del Estado, y la promoción y participación de los museos, tendrían un rol fundamental.

Casi la totalidad de los habitantes del barrio San Martín considera que los museos

son importantes, pero no tienen incorporado el hábito de visitarlos. También, las condiciones

socioeconómicas desfavorables coadyuvan a dificultar su acceso a la educación no formal,

recreación, deleite y acceso al patrimonio que ofrecen los museos.

Y entonces, por un lado, existe un posible público (el del Barrio San Martín) que dice

estar interesado en los museos y los considera importantes, pero que tiene distintas

limitaciones que no le permiten acceder a los mismos. Y por el otro lado, tenemos museos que

cobran (limitando aún más la posible visita) y otros que no lo hacen pero que no están

pensando en este público potencial.

Por otra parte, el Museo de Gemas de Puerto Madryn se erige como un caso

paradigmático en la región. Una institución que al margen de los aspectos vinculados a la

accesibilidad analizados en los casos locales, sus acciones lo posicionan más allá de la

gratuidad y la accesibilidad, con realización de acciones directas sobre su comunidad en

relación a la inclusión social, como es el caso del funcionamiento de la escuela de orfebrería

que funciona en sus instalaciones y una muestra itinerante que recorre las escuelas del interior

de la provincia de Chubut.

36

BIBLIOGRAFÍA

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gratuitos-desde-marzo [Consultado: 12 de noviembre de 2015]38

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Disponible en: http://www.cooperativa.cl/noticias/cultura/museos/los-26-museos-publicos-

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ANEXO I

ENCUESTA A VECINOS

Universo: 5966 habitantes del barrio San Martín

Muestra: 60 encuestados (1%).

39

SÍ 97% (58)

NO 3% (2)

¿Cree que los museos son importantes?

SÍ 97% (58)

NO 3% (2)

¿Le interesaría visitar los museos de la ciudad?

ANEXO II

ENCUESTA ESCUELA PROVINCIAL N° 184

Muestra: 34 alumnos encuestados.

40

SÍ 97% (58)

NO 3% (2)

¿Cree que los museos son importantes?

SÍ100% (34)

¿Crees que los museos son importantes?

SÍ88% (30)

NO12% (4)

¿Te interesaría visitar los museos de la ciudad?

SÍ 97% (58)

NO 3% (2)

¿Le interesaría visitar los museos de la ciudad?

ANEXO III

ENCUESTA ESCUELA N° 1024 (DE GESTIÓN SOCIAL) JUAN XXIII

Muestra: 28 encuestados.

41

SÍ65% (21)

NO35% (13)

¿Pagarías entrada para ir a un museo?

SÍ 96% (27)

NO 4% (1)

¿Te intersaría visitar los mueseos de la ciudad?

SÍ 100% (28)

¿Crees que los museos son im-portantes?

SÍ33% (1)

NO67% (2)

¿Si los visitaste, volviste?

SÍ21% (7)

NO79% (27)

¿Conoces algún museo en la ciudad?

SÍ9% (3)

NO91% (31)

Fuiste con tu escuela a estos museos:

ANEXO IV ICONOGRAFÍA URBANARelevamiento fotográfico realizado en el barrio San Martín, entre octubre y noviembre de 2015.

Fachada Biblioteca Popular Hugo Darío Fernández

42

SÍ33% (1)

NO67% (2)

¿Si los visitaste, volviste?

SÍ 93% (26)

NO 7% (2)

¿Pagarías entreda para ir a un museo?

SÍ 39% (11)

NO 61% (17)

¿Conocés algún museo en la ciudad?

NO 89% (25)

SÍ 11% (3)

Fuiste con tu Escuela a alguno de estos museos? (en la ciudad)

SÍ 96% (27)

NO 4% (1)

¿Te intersaría visitar los mueseos de la ciudad?

SÍ 100% (28)

¿Crees que los museos son im-portantes?

Grafitis con referencias religiosas

43

Grafitis referidos a jóvenes asesinados en el barrio

44

Grafitis sobre clubes de fútbol

45

Grafitis sobre hojas de marihuana

Otras imágenes

Otra iconografía: Malvinas, los Rolling Stones y grupo de jóvenes

46