Sesión plenaria. Estrasburgo.

Hoy, 16 de enero, ha tenido lugar en el Parlamento Europeo, el debate ante la petición de resolución de algunos grupos parlamentarios para pedirle a la Comisión Europea que tome cartas en el asunto sobre la nueva regulación del aborto que, sin ningún debate en el marco del congreso de los diputados, pretende imponer el Partido Popular por medio de su Ministro de Justicia, Gallardón.

El inicio del debate ha partido con la exposición por parte del Comisario Sim Kallas:

“La Comisión reconoce que cada persona tiene derecho fundamental a acceder a un sistema sanitario de alta calidad. A pesar de lo conseguido los problemas de desigualdad y discriminación siguen presentes en Europa y por tanto hay que aumentar los esfuerzos por acabar con todo tipo de discriminación, incluida la sexual. La sanidad tiene que ser universal y hay que poder acceder a ella independientemente de la raza, la edad, el lugar de residencia, el género o la orientación sexual. Hay que evitar la discriminación y evitar todas las creencias pero para ello hay que educar a las personas, actuar en temas de justicias y derechos para que nuestra sociedad mejore en este sentido. La salud reproductiva sin duda entra dentro de la lucha contra la discriminación y la igualdad, fuera y dentro de la UE y hay que redoblar los esfuerzos. Es inaceptable que aunque en la UE la mortalidad materna sea más reducida sea elevada dentro de No es admisible que la mutilación genital siga presente en la UE y en el mundo, ni que continúe habiendo otras formas de violencia que tienen el impacto en la salud y que en algunos entornos se consideren justificadas por motivos de religión o de honor. Hay que reiterar el rechazo de la Comisión Europea hacia la desigualdad.Respetar las competencias nacionales de los Estados miembros es lo que hacemos a la hora de garantizar que pueden cubrir las necesidades de los Estados Miembros.

Durante una hora, eurodiputados y eurodiputadas de los diferentes grupos parlamentarios han presentado sus motivos en detrimento o a favor de la norma.

Secretaría mujer y Secretaría de internacionalDebate sobre la salud sexual y reproductiva de la mujer en el ámbito del Parlamento Europeo

Prioridad: (baja,media o alta) 

16 enero 2014

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Los grupos progresistas han planteado que la salud sexual y reproductiva forma parte del derecho social europeo. Elegir cómo y cuándo se quiere ser madres es un derecho. La medida del Ministro de Justicia parte de considerar a las mujeres menores de edad y obliga a operaciones clandestinas generando riesgos sanitarios en mujeres con menores medios económicos. La propuesta no responde a ningún debate social sino a intereses electorales

Los grupos conservadores han planteado en todo momento el derecho del no nacido, llegando a tildar a los progresistas de pretender socavar la democracia real frente a lo que es competencia de los Estados Miembros.

La Federación de Servicios a la Ciudadanía considera que la salud y sexual y reproductiva de las mujeres es un derecho fundamental, que no pueden ser vulnerado de manera sistemática. No es de recibo que se ponga como excusa la subsidiariedad de los Estados Miembros cuando en el Parlamento Europeo existen muchos otros debates no relacionados con la igualdad de las mujeres en los que claramente se ha interferido.

La Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea vela por el respeto de los derechos humanos y la dignidad, así como los principios de libertad, democracia, igualdad y Estado de Derecho como valores comunes a todos los Estados miembros de la Unión Europea.

Mirar para otro lado frente a la denuncia en el Parlamento Europeo de la barbaridad de esta ley que no garantiza el aborto legal ni seguro a la mujer y no va a provocar una disminución del número de abortos, sino que obligará a muchas mujeres en riesgo de exclusión social o con pocos recursos económicos a realizar abortos de manera clandestina, supone crear de nuevo en dos categorías a las mujeres.

Como conclusión, se ha limitado a afirmar que:

“De conformidad con el TUE y el TFUE la UE no tiene competencia en políticas de aborto y por ello no puede interferir en las políticas de los Estados Miembros. Eso sí, la Comisión está comprometida para acabar con cualquier tipo de discriminación en cualquier Estado, junto con el Parlamento y los Estados Miembros”.

Desde esta Federación seguiremos reivindicando en todas las instancias en las que sea posible que el derecho al aborto es un derecho que no contraviene la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, que forma parte de nuestros tratados y por eso seguiremos denunciando en todos los organismos e instituciones a los que tengamos acceso que la Ley propuesta por Gallardón supone una vulneración flagrante de los derechos de la mujer a decidir sobre su cuerpo.

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