Ahumada Jiménez Enrique Josué Gpo. 331
Reporte del libro 20 mil leguas de viaje submarino
El principal personaje de esta historia es Pierre Aronnax, profesor del museo de París. Este
personajes era una persona muy conocedora de bastantes cosas, que se dedicaba también a
escribir obras sobre temas de la biología, este profesor se expone a sí mismo como una persona
escéptica, pero que a la vez propone ciertas teorías que lo hacen ver como una persona que puede
creer hasta en lo imposible. Esto lo demuestra en su obra de dos volúmenes titulada “Los
misterios de las profundidades submarinas” en la que comenta la cierta existencia de un animal
de tamaños colosales capaz de crear grandes destrucciones. El profesor Pierre Aronnax, conocía
varios idiomas, tales como el francés, el inglés, el alemán y el latín. El profesor era una persona
tranquila el cual pensaba las cosas antes de actuar y siempre reflexionaba.
La historia comienza con la noticia de que un fenómeno inexplicable se había observado varias
veces en el mar una cosa enorme la cual era larga, fusiforme, a veces se notaba que brillaba, y
más grande y rápido que una ballena. El primer contacto más cercano con esta cosa inexplicable
fue hecha por el vapor Governor-Higginson, que al parar frente a esta cosa, el objeto lanzo una
gran columna de agua. Eso mismo paso con el vapor Cristóbal Colon, el cual avisto el objeto a
aproximadamente unas 500 leguas de distancia. Todo esto hacia que la gente creara sus propias
especulaciones sobre este objeto, que lo llegaban a relacionar con Moby Dick o el Kraken.
Después de que la prensa desgasto esta y otras noticias sobre el objeto avistado varias veces,
ocurrió en el año de 1867 que un vapor llamado Moravian, había chocado contra una roca o algún
resto de barco hundido. Pero semanas más tarde se ocasiono un fenómeno contra el barco
llamado Escocia, al cual se le produjo un boquete en su casco en forma perfectamente triangular,
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pero no se encontraba algún sentido lógico para que este boquete se hubiera producido ya que se
ocupaban producir fuerzas extraordinarias para traspasar la plancha de cuatro centímetros y
retirarse con un solo movimiento. Esto volvió a crear controversia entre todas las personas
conocedoras del tema, las cuales unos creían que un animal era capaz de hacer tales cosas y otros
que creían que algún gobierno estaba probando una nueva máquina de guerra. Es por eso que el
profesor Aronnax creo una obra llamada, “Los misterios de las profundidades submarinas”, pero
el cual después fue obligado a crear una opinión correcta. En este artículo el admitía que él creía
en la existencia de un narval gigante pero a la vez se contradecía con los últimos párrafos los
cuales decía que era bastante imposible. Después de volver al tema del objeto, el gobierno
norteamericano preparo una fragata llamada Abraham Lincoln, la cual estaba dispuesta a cazar al
objeto al mando de él comandante Farragut. Debido a la expedición el profesor Arannox recibe la
invitación del ministro J.B. Hobson de la marina estadounidense de que estaba invitado a formar
parte de la cacería. Al recibir esta carta el profesor Arannox no dudó en aceptar la oferta y le
pregunto a Consejo, su criado que era un joven flamenco metódico, celoso, poco impresionable
con los asuntos de la vida, de musculatura recia y ausencia de nervios, que si lo deseaba
acompañar a la caza del animal u objeto desconocido. El cual asintió sin ninguna duda y con
tranquilidad, después de esto Consejo se dispuso a preparar la ropa de ambos para el largo viaje.
Seguido de esto el profesor Arannox y Consejo arribaron a la fragata Abraham Lincoln y fueron
recibidos por el comandante Farragut. Se acomodaron ambos compañeros en sus respectivos
camerinos y la fragata partió saliendo de Nueva York a las tres de la mañana. Ya mar adentro
toda persona arriba del navío observaba atentamente el mar en busca del animal, ya que el
comandante Farragut hizo el comentario de que se darían dos mil dólares a quien ubicara y
señalara la presencia del animal. La fragata contaba con el mejor arponero del momento llamado
Ned Land, un canadiense de un gran habilidad manual, de estatura elevada, escasamente
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comunicativo y en momentos se comportaba de forma violenta. El profesor Arannox empezó a
entablar comunicación con Ned Land, el cual contaba todas sus historias con muchos detalles. Un
30 de julio se pusieron a comentar acerca de la existencia del animal que podría causar todo eso
en el cual el punto de vista de Ned Land era que probablemente fuera un pulpo gigantesco y el
profesor comenta que él cree en la existencia de tal animal, después de utilizar los números y las
matemáticas de él profesor, Ned Land también queda convencido de la existencia de tal animal.
Después de días sin saber del animal, el capitán del Monroe, un barco cazador de ballenas,
solicito la ayuda de Ned Land para cazar una y el comandante Farragut no dudo en darle permiso
a Ned Land de ir en caza de la ballena. Fue tan buena la cacería que logro matar a dos de un
doble golpe, una arponeada en el corazón y otra después de una larga persecución. Después de la
entrada del navío al océano Pacifico, todos los tripulantes volvieron a examinar todo el horizonte
en busca del animal. Pero después de tres meses no su pudo encontrar nada y la tripulación se
encontraba tensionada por supuestos avistamientos de tal animal, pasados estos tres meses el
comandante Farragut pidió tres días más al estilo Colon, en los cuales volvió una febril actividad
por la búsqueda del animal, en los cuales se utilizaron diversos métodos para tratar de atraer al
animal en caso de que se encontrara cerca. Justamente la noche del 5 de noviembre, Ned Land
avisto una luz entre la oscuridad la cual se movía en dirección al navío, la fragata tomo dirección
contraria pero aun así fue fácilmente alcanzada por el animal el cual redoblaba la velocidad de la
fragata y que llegando la noche apago su luz y siguió la cacería, el arponero Ned Land le pidió a
el comandante que lo pusiera a tiro de arpón para así poder acabar con el animal. Al llegar el día
la fragata siguió otra vez al animal a todo vapor, el comandante desesperado y siguiendo los
consejos de Ned Land forzó al navío al máximo para tratar de lograr alcanzar al animal, también
se utilizaron balas para intentar matar al animal el cual se falló un tiro pero el otro dio en el
blanco, aun así no causo ningún efecto sobre el animal y siguió su camino, tras varias horas de
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persecución llego la noche pero se logró ver a tres millas de distancia la claridad de la luz, el
navío se acercó a menos de veinte pies del inmóvil animal, el cual después de un tiro de arpón
desprendió dos torrentes de agua hacia el navío haciendo salir a el profesor, Consejo y Ned Land
de la fragata, el profesor y Consejo nadaron siguiendo la voz de Ned Land para llegar a lo que
ellos supusieron era un narval gigantesco, debido a que se notaba que tenía grandes planchas de
un material muy duro, el cual se llegó a la conclusión de que era un objeto construido por el
hombre. Pasadas varias horas de esperar, pensar y planear salieron del navío submarino 8
hombres enmascarados los cuales metieron a los 3 compañeros y los encerraron en un cuarto
completamente obscuro y a la media hora de encontrarse encerrados volvió la luz y con ella
llegaron dos personas. Una persona de baja estatura y vigorosa musculatura, el otro una persona
completamente de completa confianza. Y fue por eso que el profesor le narro lo que había vivido
en inglés y en otros idiomas para lograr que lo entendieran pero no dio ningún resultado, seguido
de este acto los personajes extraños se marcharon porque llego el mesero que les preparo la
comida, una variedad de peces conocidos y no conocidos. Terminado la comida el profesor,
Consejo y Ned Land tomaron una siesta la cual duro bastante tiempo debido al cansancio de los
tres. La siesta acabo y se empezaron a hacer diferentes teorías de los motivos por lo cual se
encontraban ahí, aumentando su cólera cada hora que pasaba sin que les dieran de comer hasta
que llego el camarero y al momento de entrar Ned Land se aventó sobre él y en ese mismo
momento grito el comandante del navío que se calmara. Esto provoco que empezara una
discusión sobre el porqué los tenían ahí y que pensaban hacer con ellos, a los cuales decidió que
podrían ser libres en el navío siempre y cuando nunca se irían de ahí. Por consiguiente el capitán
del navío se presentó haciéndose llamar, capitán Nemo, y después llamo a un criado haciéndolo
que llevara a Consejo y Ned Land a sus respectivos dormitorios. Mientras tanto el capitán Nemo
y el profesor Aronnax fueron a el comedor principal del navío y dentro del lugar el capitán Nemo
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le explicó a el profesor acerca de cómo obtenían todo, por medio del mar. Terminada la comida
ambos personajes se dirigieron hacia la biblioteca en al cual se encontraban más de doce mil
volúmenes de diferentes temas. También dentro de esta biblioteca se encontraban diversos
animales disecados y colgando del techo, pilares grandísimos, obras de arte iluminadas por la luz
eléctrica, entre otras cosas. Acabaron de comer y el capitán Nemo le llevo a el profesor a su
recamara y dentro de ella sentados en una mesa le explico cómo es que funcionaba el Nautilus,
cuáles eran sus medidas, el funcionamiento de la ventilación, la velocidad del navío y la forma en
que navegaban. También le fue explicado como estaba construido el Nautilus, que material se
había utilizado, el peso del navío, el cómo sumergía al navío a más de mil metros de profundidad,
la potente torre con el reflector de luz cubierta de vidrio, el precio del navío y también se le
explico al profesor el poder económico del capitán Nemo. Se mandó la orden de subir a la
superficie para saber la ubicación exacta del Nautilus, que se encontraba en Rio Negro, y se retiró
el capitán Nemo. Quedando solo el profesor se puso a pensar varias cosas sobre el capitán y en
esos momentos llegaron Ned Land y Consejo, quedando asombrados por la gran variedad de
objetos que se encontraban en la biblioteca. Pasada una media hora la oscuridad envolvió al
Nautilus, pero luego se notó la presencia de distintas especies de peces, iluminados por el gran
foco que tenía el Nautilus, debido a esto Consejo y Ned Land se pusieron a catalogar las especies
que veían pasar. Pasaron más de 6 días sin que el capitán Nemo apareciera y el profesor todos los
días al subir a la plataforma se encontraba al segundo al mando del navío hasta que el 16 de
noviembre los tres visitantes volvieron a ver al capitán Nemo, y el motivo de esta reunión era
porque iban a hacer una expedición de caza a bosques submarinos.
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Bibliografía:
Verne, J. (1870). 20 Mil Leguas de Viaje Submarino. Época :México, D.F.
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