AMPARO EN REVISIÓN 730/2015 QUEJOSA: **********.
PONENTE: MINISTRA MARGARITA BEATRIZ LUNA RAMOS. SECRETARIA: MARÍA ANTONIETA DEL CARMEN TORPEY
CERVANTES.
México, Distrito Federal. Acuerdo de la Segunda Sala de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, correspondiente al
V I S T O S; Y
R E S U L T A N D O:
PRIMERO. Por escrito presentado el cuatro de abril de dos
mil catorce, ante la Oficina de Correspondencia Común de los
Juzgados de Distrito en Materia Administrativa en el Distrito
Federal, **********, por conducto de su apoderado, demandaron el
amparo y protección de la Justicia Federal, contra las autoridades
y por los actos que a continuación se mencionan:
AUTORIDADES RESPONSABLES: a) Presidente de los Estados Unidos Mexicanos; b) Congreso de la Unión; c) Secretario de Gobernación; d) Director General Adjunto del Diario Oficial de la Federación; e) Director General
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
2
del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial; f) Coordinador Departamental de Resoluciones de Marcas Notorias del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial.
ACTOS RECLAMADOS:
1. Del Congreso de la Unión se reclama, con todas sus consecuencias y efectos, la discusión, aprobación y/o intervención en el procedimiento que dio lugar a la expedición y/o promulgación del decreto de veintiocho de julio de mil novecientos noventa y cuatro, publicado el día dos de agosto de mil novecientos noventa y cuatro en el Diario Oficial de la Federación a través del cual ‘se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley de Fomento y Protección de la Propiedad Industrial’, particularmente en lo relativo a la reforma al artículo 221 de la Ley de la Propiedad Industrial.
2. Del Presidente de la República se reclama, con todos sus efectos y consecuencias, su intervención y/o promulgación en el citado decreto.
3. Del Secretario de Gobernación se reclama la orden de publicación y/o publicación en el Diario Oficial de la Federación y/o promulgación en el decreto mencionado.
4. Del Director General adjunto del Diario Oficial de la Federación, se reclama la publicación y/o promulgación en el Diario Oficial de la Federación del referido decreto.
5. Del Director General del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, en su calidad de titular y responsable del trámite y resolución de los asuntos que incumben al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, reclamo con todos sus efectos y consecuencias las órdenes, indicaciones, instrucciones
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
3
o acuerdos verbales o escritos, que como superior jerárquico cursó a su subordinado el Coordinador Departamental de Resoluciones de Marcas Notorias del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial en relación con el oficio fechado el ********** 2014 dictado en el expediente ********** identificable bajo el número de folio **********.
6. Del Coordinador Departamental de Resoluciones de Marcas Notorias del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial se reclama:
a) El acatamiento, observancia y ejecución de los acuerdos, órdenes, disposiciones, o instrucciones que en párrafos anteriores se atribuyen al Director General del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial; también reclamo la emisión de los mismos acuerdos, órdenes o resoluciones que hubiere emitido de impero propio y no en cumplimiento de actos provenientes de su superior jerárquico, ya que los lleve a cabo por sí mismo o por sus subordinados, con todas sus consecuencias y efectos.
b) El acto de aplicación del artículo 221 de la Ley de la Propiedad Industrial dentro del oficio fecha el seis de marzo de dos mil catorce dictado en el expediente ********** identificable bajo el número de folio **********, con todos sus efectos y consecuencias.
c) La orden, intervención, aprobación y emisión del oficio fechado el seis de marzo de dos mil catorce dictado en el expediente ********** identificable bajo el número de folio **********, con todos sus efectos y consecuencias.”
SEGUNDO. La quejosa señaló como derechos
fundamentales violados, los contenidos en los artículos 1o., 14,
16, 17, 28 y 133, constitucionales; señaló como parte tercera
interesada a Probiomed, Sociedad Anónima de Capital Variable; e
hizo valer los conceptos de violación que estimó pertinentes.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
4
TERCERO. En auto de ocho de abril de dos mil catorce, el
Juez Cuarto de Distrito en Materia Administrativa en el Distrito
Federal, al que le correspondió conocer del asunto, ordenó formar
su registro con el número de expediente amparo en revisión
********** y previo requerimiento y su desahogo, el catorce
siguiente, admitió la demanda de amparo.
CUARTO. Tramitado el juicio, el Juez Federal celebró
audiencia constitucional el diecinueve de noviembre de dos mil
catorce, con el siguiente punto resolutivo:
“ÚNICO. Se SOBRESEE en el presente juicio de amparo promovido por **********, por conducto de su apoderado legal **********, respecto de los actos y autoridades precisados en el resultando primero de este fallo, y por los razonamientos expuestos en el tercero y último de los considerandos de esta sentencia.”
Las consideraciones en las que se sustenta y en la parte
que interesa, son las siguientes:
“QUINTO. Previamente al estudio de los conceptos de
violación formulados por la parte quejosa, procede el
análisis de las causales de improcedencia que de
oficio se adviertan o que hayan hecho valer las partes,
toda vez que su estudio es de orden público y
preferente a cualquier otra cuestión planteada,
conforme a lo dispuesto en los artículos 62 y 74,
fracción V, ambos de la Ley Reglamentaria de los
artículos 103 y 107 constitucionales.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
5
Al respecto, este Juzgado de Distrito considera que en
relación con el acto consistente en el oficio de seis de
marzo de dos mil catorce, identificable bajo el número
de folio **********, dictado en el expediente **********, se
actualiza la causal de improcedencia que prevé el
artículo 61, fracción XXIII, en relación con el numeral
107, fracción III, incisos a) y b), ambos de la Ley de
Amparo.
(…) conviene referir que el impetrante de amparo
acude a reclamar lo siguiente: ‘(…) el acto de aplicación
del artículo 221 de la Ley de la Propiedad Industrial dentro
del oficio fechado el seis de marzo de dos mil catorce
dictado en el expediente ********** identificable bajo el
número de folio **********, con todos sus efectos y
consecuencias.’
Por su parte, en el capítulo correspondiente a los
antecedentes del acto precisado en el párrafo que
antecede, mismos que fueron manifestados por el
quejoso bajo protesta de decir verdad, se advierte lo
siguiente: ‘(…) 27. Mediante oficio con número de folio
********** de fecha ********** de marzo de dos mil catorce
notificado personalmente a mis poderdantes el día
********** de marzo de dos mil catorce, el Instituto Mexicano
de la Propiedad Industrial resolvió en lo que interesa para
efectos del presente amparo: (i) desechar la ampliación a
la solicitud de declaración administrativa de infracción
aduciendo medularmente su supuesta improcedencia
porque a su saber la Ley de la Propiedad Industrial no
permitiría la ampliación de la acción de infracción y por
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
6
tanto el procedimiento de infracción constituiría una litis
cerrada; señalando que no habría supletoriedad del Código
Federal de Procedimientos Civiles al respecto; y (ii)
declinar/rechazar competencia para resolver sobre la
condena de daños y perjuicios aduciendo medularmente
que, con fundamento en el artículo 221 de la Ley de la
Propiedad Industrial, la condena correspondería a otra vía
y autoridad jurisdiccional (…).’
En ese tenor, resulta incuestionable que en la especie,
el acto que reclama la quejosa por esta vía, consiste
esencialmente en el oficio con número de folio **********
de seis de marzo de dos mil catorce, emitido por el
Coordinador Departamental de Resoluciones de
Marcas Notorias del Instituto Mexicano de la Propiedad
Industrial dentro del expediente **********, que contiene
el desechamiento de la ampliación a la solicitud de
declaración administrativa de infracción al no surtirse
el supuesto jurídico para que proceda la aplicación
supletoria del Código Federal de Procedimientos
Civiles a la Ley de la Propiedad Industrial y la negativa
para resolver sobre la condena de daños y perjuicios,
al no surtirse los supuestos del artículo 121 de la Ley
de la Propiedad Industrial.
En tal virtud, a primera vista podría pensarse que dicho
acuerdo le irroga un perjuicio a la parte quejosa de
imposible reparación, en la medida que al negarle de
manera definitiva la ampliación a la solicitud de
declaración administrativa de infracción y condenar
desde ya a la demandada al pago de daños y
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
7
perjuicios, evidentemente, trastoca en alguna medida
su defensa y, hace imposible su valoración.
Sin embargo, conforme a los criterios establecidos por
el Alto Tribunal del país, el concepto de acto de
ejecución irreparable para la procedencia del amparo
indirecto, debe entenderse como aquel que tiene
consecuencias que afectan directa e inmediatamente
alguno de los llamados derechos fundamentales del
gobernado que tutela la Constitución por medio de las
garantías y, ahora, por los instrumentos
internacionales respecto de los cuales el Estado
Mexicano es parte; nunca en casos en que la
afectación sea adjetiva o procesal, toda vez que esa
afectación o sus efectos no podrían ser destruidos con
el sólo hecho de que quien la resienta obtenga
sentencia favorable a sus pretensiones en el juicio.
El segundo criterio orientador, que se considera
complementario al apuntado en líneas que anteceden
establece que los actos procesales tienen una
ejecución de imposible reparación, cuando sus
consecuencias afectan a las partes en juicio en grado
predominante o superior, porque concurran
circunstancias de gran trascendencia dentro del
procedimiento que significan una situación especial
dentro del mismo, de cuya decisión dependa la suerte
de todo el juicio, o bien para asegurar su desarrollo
con respeto a los derechos procesales esenciales del
quejoso, o bien porque conlleve la posibilidad de evitar
el desarrollo ocioso o innecesario del juicio.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
8
En tal virtud, para establecer si un acto procesal o
adjetivo produce una afectación irreparable en la
esfera jurídica del gobernado, debe irrogar en éste una
afectación a derechos sustantivos o bien, afectar
durante el procedimiento de una forma superior o
predominante de manera tal, que se afecte la suerte de
todo el procedimiento, no asegure el desarrollo del
mismo o, exista la posibilidad de evitar el desarrollo
ocioso del procedimiento.
Retomando los antecedentes narrados por el
justiciable se puede deducir con suma claridad, que
éste ocurre al juicio de control constitucional a
reclamar el oficio con número de folio ********** de seis
de marzo de dos mil catorce, emitido por el
Coordinador Departamental de Resoluciones de Maras
Notorias del Instituto Mexicano de la Propiedad
Industrial dentro del expediente **********.
En esta tesitura, es válido considerar que el oficio
combatido de ninguna manera constituye una
resolución definitiva en el procedimiento; de igual
manera, tampoco es de los que tienen una ejecución
de imposible reparación, que satisfaga el requisitos de
procedibilidad del amparo biinstancial establecido en
el inciso b), fracción III, del numeral 107, de la Ley de
Amparo interpretado en sentido contrario, ya que se
trata de un acuerdo de trámite, que no constituye un
acto procesal de ejecución irreparable para el
solicitante del amparo, en tanto la afectación a los
derechos de carácter sustantivo dependerá del sentido
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
9
de la sentencia que, en su oportunidad, se dicte en el
proceso tramitado.
Se dice lo anterior en razón de que el acuerdo
reclamado tiene efectos estrictamente intraprocesales,
dictado dentro de la solicitud de declaración
administrativa de infracción promovida por la parte
actora aquí quejosa, que no la priva del derecho de
defensa, contra la cual, en su caso, al resolverse el
fondo de la cuestión planteada en la vía ordinaria, sería
procedente el juicio de nulidad, siempre y cuando la
violación trascienda al resultado del fallo, pues ésta no
existiría ante la posibilidad de que las consecuencias
de la posible violación se extingan en la realidad al
dictar una sentencia favorable o sin haber originado
afectación alguna a los derechos fundamentales y
humanos del gobernado, sin dejar huella en su esfera
jurídica.
Sirve de apoyo a lo anterior, por la razón que la rige, la
jurisprudencia 2a./J. 70/2009, de la Segunda Sala de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, (…) de rubro y
texto: ‘DEMANDA DE NULIDAD. EL INCUMPLIMIENTO
DE LA OBLIGACIÓN DEL MAGISTRADO INSTRUCTOR
DEL TRIBUNAL FEDERAL DE JUSTICIA FISCAL Y
ADMINISTRATIVA DE RESPETAR EL PLAZO DE 20 DÍAS
ESTABLECIDO EN EL ARTÍCULO 17 DE LA LEY
FEDERAL DE PROCEDIMIENTO CONTENCIOSO
ADMINISTRATIVO PARA AMPLIARLA, ES UNA
VIOLACIÓN AL PROCEDIMIENTO CUYA
TRASCENDENCIA AL RESULTADO DEL FALLO DEBE
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
10
EXAMINARSE EN EL AMPARO DIRECTO. (Se
transcribe).’
En esa línea argumentativa, se concluye que la
determinación impugnada no puede afectar de modo
inmediato algún derecho sustantivo, ni tampoco
produce una afectación en grado predominante o
superior, dado que no impide la integración debida
de la litis de la solicitud respectiva.
Tampoco ocasiona que se retarde la solución del
procedimiento respectivo, ni que se siga de manera
ociosa, pues como se ha visto, cabe la posibilidad
de que la parte quejosa pueda obtener una
resolución totalmente favorable a sus intereses,
dado que el oficio impugnado no determina o
presupone que se emita una resolución contraria a
los intereses del justiciable, sino que, ello se
encuentra sujeto al análisis de lo que suceda en el
expediente de declaración de infracción valorándolo
en su integridad, lo que pone en evidencia que el
acto reclamado no es de imposible reparación.
En relacionadas condiciones, es indefectible que en
el caso se actualiza la causa de improcedencia
prevista en el artículo 61, fracción XXIII, en relación
con el 107, fracción III, incisos a) y b), de la Ley de
Amparo, así como el numeral 107, fracción III, inciso
b) de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, pues como se ha dicho el oficio emitido
por el Coordinador Departamental de Resoluciones
de Marcas Notorias del Instituto Mexicano de la
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
11
Propiedad Industrial, dentro del expediente **********,
no es acto definitivo, ni se trata de actos que tengan
sobre la hoy quejosa una ejecución que sea de
imposible reparación, pues no producen afectación
inmediata a algún derecho fundamental de la misma,
ni causan un perjuicio en grado predominante o
superior dado que sus efectos son meramente
intraprocesales, los cuales pueden ser reparables no
sólo con el dictado de una resolución favorable, sino
por la propia autoridad responsable antes del
dictado de la resolución.
Cobran aplicación las jurisprudencias (…) 24/92 y
29/89, (…) que a la letra dicen: ‘EJECUCIÓN
IRREPARABLE. SE PRESENTA, PARA EFECTOS DE
LA PROCEDENCIA DEL AMPARO INDIRECTO
CONTRA ACTOS DENTRO DEL JUICIO, CUANDO
ESTOS AFECTAN DE MODO DIRECTO E INMEDIATO
DERECHOS SUSTANTIVOS. (Se transcribe).’ y
‘EJECUCIÓN DE IMPOSIBLE REPARACIÓN.
ALCANCES DEL ARTÍCULO 107, FRACCIÓN III,
INCISO B) CONSTITUCIONAL (Se transcribe).’
Asimismo, sirve de apoyo la tesis aislada con
número de registro 180,415, (…) de rubro: ‘ACTOS
DE EJECUCIÓN IRREPARABLE. CRITERIOS PARA
DETERMINAR LA PROCEDENCIA O
IMPROCEDENCIA DEL JUICIO DE AMPARO
INDIRECTO. (Se transcribe).’
En concordancia con lo anterior, el sobreseimiento
decretado respecto de la referida actuación que se
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
12
reclamó del procedimiento de declaración
administrativa de infracción **********, debe hacerse
extensivo a los actos que éstos hicieron consistir en
la discusión, aprobación, expedición, promulgación
y publicación del Decreto de veintinueve de julio de
mil novecientos noventa y cuatro, publicado el día
dos de agosto de mil novecientos noventa y cuatro
en el Diario Oficial de la Federación a través del cual
se derogan diversas disposiciones de la Ley de
Fomento y Protección de la Propiedad Industrial,
particularmente lo relativo a la reforma al artículo
221 de la Ley de la Propiedad Industrial, toda vez
que el estudio sobre su constitucionalidad no puede
desvincularse del acto de aplicación que dio origen
a la promoción de la presente instancia
constitucional.
Ello, toda vez que cuando se promueva un amparo
en contra de disposiciones de observancia general
con motivo de su aplicación en perjuicio de la parte
peticionaria del amparo, no puede desvincularse la
apreciación de esas normas generales de los actos
de aplicación relativos, dado que en estos últimos
se establece la situación concreta de la parte
quejosa, de modo tal que esa vinculación entre las
normas generales reclamadas y sus actos de
aplicación, lo cual impide examinarlas, sin
considerar los actos en donde se haya aplicado.
Al respecto, cabe precisar que el juicio de amparo
resulta improcedente en contra de actos
intraprocesales, aun cuando se combaten por
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
13
constituir la aplicación de una norma tildada de
inconstitucional –salvo que sean de imposible
reparación- por lo que si (…) la actuación reclamada
como primer acto de aplicación, no es de aquéllas
que revista la característica de ser de imposible
reparación, por ende, es inconcuso que no se
cumple la condición para la procedencia del juicio
de amparo indirecto.
Sirve de apoyo a lo anterior, la jurisprudencia P./J.
78/2007, del Pleno de la Suprema Corte de Justicia
de la Nación, (…) de rubro y texto: ‘AMPARO
CONTRA LEYES CON MOTIVO DE SU PRIMER ACTO
DE APLICACIÓN DENTRO DEL PROCEDIMIENTO.
PROCEDE EN LA VÍA INDIRECTA SIEMPRE Y
CUANDO CAUSE UN PERJUICIO DE IMPOSIBLE
REPARACIÓN. (Se transcribe).’
Del mismo modo, es aplicable por analogía, la
jurisprudencia 2a./J. 215/2009, emitida por la
Segunda Sala de nuestro Máximo Tribunal, (…) que
a continuación se transcribe: ‘AMPARO CONTRA
LEYES CON MOTIVO DE SU PRIMER ACTO DE
APLICACIÓN DENTRO DEL PROCEDIMIENTO
ADMINISTRATIVO DISCIPLINARIO CONTEMPLADO
EN EL ARTÍCULO 136 DE LA LEY ORGÁNICA DEL
PODER JUDICIAL DEL ESTADO LIBRE Y SOBERANO
DE GUERRERO. PROCEDE EN LA VÍA INDIRECTA
CUANDO SEA DE IMPOSIBLE REPARACIÓN. (Se
transcribe).’
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
14
Por lo tanto, no basta que el oficio con número de
folio ********** dictado dentro del procedimiento
administrativo **********, constituya la primera
aplicación perjudicial de la norma que también
reclamó (artículo 221 de la Ley de la Propiedad
Industrial), porque, además, es necesario que el
daño que produzca su ejecución sea de imposible
reparación, como único supuesto que justificaría la
posibilidad de acudir al juicio de amparo, lo que en
la especie no aconteció.
Resulta aplicable a lo anterior, en lo conducente y
por el criterio que sostiene, la tesis aislada del Pleno
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, (…)
que a la letra dice: ‘LEYES, AMPARO CONTRA. EL
SOBRESEIMIENTO DEL ACTO DE APLICACIÓN
DETERMINA EL SOBRESEIMIENTO DEL PRECEPTO
LEGAL IMPUGNADO. (Se transcribe).’
En efecto, de acuerdo a la reclamación planteada en
el presente juicio de amparo, no se podría analizar la
constitucionalidad del ordenamiento legal que se
combate en esta vía, de manera aislada o
independiente del acto de aplicación reclamado,
puesto que como se dijo con antelación, este órgano
jurisdiccional se encuentra impedido para examinar
el uno prescindiendo del otro.
Sustenta la anterior determinación, la jurisprudencia
de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia
de la Nación, (…) de voz: ‘LEYES, AMPARO CONTRA.
REGLAS PARA SU ESTUDIO CUNADO SE
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
15
PROMUEVE CON MOTIVO DE UN ACTO DE
APLICACIÓN. (Se transcribe).’
También, sirve de apoyo la jurisprudencia del Pleno
de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, (…)
que dice: ‘LEYES O REGLAMENTOS. AMPARO
CONTRA, PROMOVIDO CON MOTIVO DE SU
APLICACIÓN. (Se transcribe).’
En las relatadas consideraciones, ante la
improcedencia del juicio de amparo en que se actúa,
por los motivos antes expuestos, se estima que no
es dable estudiar las causas de improcedencia
invocadas por las partes en relación con los actos
reclamados, de conformidad con la tesis sustentada
por el Tribunal Colegiado en Materias Administrativa
y de Trabajo del Séptimo Circuito, de la Octava
Época, (…) que dice: ‘CAUSALES DE
IMPROCEDENCIA. CUANDO SU ESTUDIO ES
INNECESARIO, ASÍ COMO DE LOS DEMÁS
AGRAVIOS. (Se transcribe).’”
SEXTO. En contra de la anterior resolución la parte quejosa
interpuso recurso de revisión.
SÉPTIMO. La Presidenta del Décimo Séptimo Tribunal
Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito, al que le
correspondió conocer de recurso lo admitió registrándolo con el
número 56/2015.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
16
OCTAVO. Mediante escrito presentado el nueve de febrero
de dos mil quince, ante la Oficina de Correspondencia Común de
los Tribunales Colegiados en Materia Administrativa del Primer
Circuito, la autoridad responsable Directora General Adjunta de lo
Contencioso en ausencia del Jefe de la Unidad de Asuntos
Jurídicos, ambos de la Secretaría de Economía, en
representación del Presidente de la República, planteó recurso de
revisión adhesiva.
NOVENO. Posteriormente, mediante escrito presentado el
once de febrero de dos mil quince, ante el Decimoséptimo
Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito,
y anexado en auto de presidencia de doce de febrero siguiente, la
tercera interesada **********, interpuso recurso de revisión
adhesivo.
DÉCIMO. En cumplimiento al oficio **********, de nueve de
febrero de dos mil quince, emitido por el Secretario Técnico de la
Comisión de Creación de Nuevos Órganos del Consejo de la
Judicatura Federal, el mencionado Tribunal, remitió los autos del
citado asunto al Octavo Tribunal del Centro Auxiliar de la Tercera
Región con residencia en **********, para el dictado del fallo
relativo.
DÉCIMO PRIMERO. Tramitado el recurso, en sesión de
trece de mayo de dos mil quince, el Tribunal Colegido de Circuito
dictó sentencia con los siguientes puntos resolutivos:
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
17
“PRIMERO. Queda firme el sobreseimiento decretado en contra del acto reclamado atribuido al Director General del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, consistente en las órdenes, indicaciones, instrucciones o acuerdos verbales o escritos que giró al Coordinador Departamental de Resoluciones de Marcas Notorias del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, para emitir el oficio de seis de marzo de dos mil catorce, con número de folio **********. SEGUNDO. En la materia de la revisión, se revoca la sentencia recurrida, en términos del considerando décimo de esta ejecutoria. TERCERO. La Justicia de la Unión ampara y protege a **********, en contra del acto que reclamaron del Coordinador Departamental de Resoluciones de Marcas Notorias del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, consistente en el oficio ********** de seis de marzo de dos mil catorce, emitido en el expediente **********. El amparo se concede para los efectos precisados en la parte final del considerando décimo tercero de esta ejecutoria. CUARTO. Es infundado el recurso de revisión adhesivo planteado por la Directora General Adjunta de lo Contencioso en ausencia del Jefe de la Unidad de Asuntos Jurídicos, ambos de la Secretaría de Economía, en representación del Presidente de la República, conforme lo expuesto en la parte final del considerando décimo. QUINTO. Se declara sin materia la revisión adhesiva interpuesta por **********, de conformidad con lo expuesto en el considerando décimo cuarto del presente fallo. SEXTO. Se deja a salvo la jurisdicción de la Suprema Corte de Justicia de la Nación para resolver el presente recurso de revisión en cuanto a la inconstitucionalidad del artículo 221 de la Ley de la Propiedad Industrial, por lo que los autos deberán serle remitidos, en los
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
18
términos indicados en el último considerando de esta resolución.” Cabe destacar que la revocación de la sentencia combatida
obedeció a que fue desacertado que el Juez Federal sobreseyera
respecto del acto de aplicación reclamado pues debe
considerarse de imposible reparación al afectar el derecho
sustantivo a la jurisdicción establecido en el artículo 17
constitucional.
El otorgamiento del amparo obedeció a que en concepto del
Tribunal Colegiado de Circuito si bien es verdad que de los
preceptos de la Ley de la Propiedad Industrial examinados, no se
advierte que una vez presentada la solicitud de declaración de
infracción administrativa la parte afectada pueda ampliarla,
también lo es que la omisión del legislador anotada no puede
orillar a que se desechen los nuevos elementos contenidos en la
ampliación de la solicitud respectiva, cuando se sustenten en
hechos conocidos con posterioridad a la petición inicial, puesto
que a través de la sanción de las infracciones administrativas en
materia de propiedad industrial se busca inhibir el engaño por
parte del infractor al público consumidor, que no se aproveche del
derecho que no le pertenece, del prestigio y buen nombre ajeno,
así como que no se cause perjuicio a un tercero, titular de una
patente de invención, del registro de modelos de utilidad, de
diseños industriales, marcas, aviso o nombre comercial
registrados, etcétera, cuyas transgresiones pueden originar la
declaración de ilegalidad y ameritar una sanción administrativa.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
19
Por ende, mientras se traten de infracciones derivadas de
hechos novedosos, la institución de la ampliación de la solicitud
de declaración de infracción administrativa, debe estar al alcance
de la parte afectada, pues de lo contrario se coartaría un derecho
constitucional en su perjuicio.
En esas condiciones, no debe ser obstáculo para que se
admita la ampliación de la solicitud de declaración de infracción
administrativa tratándose de hechos novedosos, el hecho de que
dicha figura no se encuentre reglamentada en la Ley de la
Propiedad Industrial, puesto que su inclusión permitirá el
cumplimiento de un derecho fundamental reconocido por nuestra
Carta Magna en el artículo 17, debiéndose acudir a la
supletoriedad del artículo 71 del Código Federal de
Procedimientos Civiles para proveer sobre la ampliación. De ahí
que se concediera el amparo ‘para el efecto de que la
responsable deje insubsistente el oficio reclamado, asimismo,
reitere lo que no es materia de concesión y, únicamente por
cuanto hace al desechamiento de la ampliación de la solicitud de
declaración de infracción administrativa con base en los
razonamientos expuestos en este considerando, provea sobre su
admisión.’
DÉCIMO SEGUNDO. Por acuerdo de diecinueve de junio de
dos mil quince, el Presidente en funciones de la Suprema Corte
de Justicia de la Nación, admitió el recurso de revisión; ordenó la
formación y registro del asunto con el número de expediente
amparo en revisión 730/2015, turnó el asunto a la Ministra
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
20
Margarita Beatriz Luna Ramos, y ordenó su notificación a las
autoridades responsables y al Agente del Ministerio Público de la
Federación.
DÉCIMO TERCERO. Por acuerdo de trece de julio siguiente,
el Presidente de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia
de la Nación, se avocó al conocimiento del asunto y remitió los
autos a la Ministra Margarita Beatriz Luna Ramos.
C O N S I D E R A N D O :
PRIMERO. La Segunda Sala de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación es competente para conocer del recurso de
revisión, de conformidad con lo dispuesto en los artículos 107,
fracción VIII, inciso a) constitucional, 11, fracción V y 21, fracción
XI, de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación; 81,
fracción I y 83, del Decreto por el que se expidió la Ley de
Amparo Reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, publicado
en el Diario Oficial de la Federación el dos de abril de dos mil
trece, en relación con los puntos Primero y Tercero, del Acuerdo
Plenario 5/2013, publicado en el mismo órgano informativo el
veintiuno de mayo de dos mil trece; en virtud de que se interpone
en contra de una sentencia dictada por un Juez Federal en la
audiencia constitucional de un juicio de amparo indirecto, en que
se planteó la inconstitucionalidad del artículo 221, de la Ley de la
propiedad Industrial, contenido en el decreto de veintinueve de
julio de mil novecientos noventa y cuatro, publicado el dos de
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
21
agosto siguiente en el Diario Oficial de la Federación a través del
cual se reforman adicionan y derogan diversas disposiciones de la
Ley de Fomento y Protección de la Propiedad Industrial y si bien
subsiste el problema de constitucionalidad, se estima innecesaria
la intervención del Tribunal Pleno.
SEGUNDO. No es el caso de ocuparse de la legitimación del
recurrente y de la oportunidad del recurso de revisión, ya que
estas cuestiones fueron abordadas por el Tribunal Colegiado de
Circuito en las consideraciones tercera y cuarta de la sentencia
dictada en el amparo en revisión auxiliar **********, derivado del
amparo en revisión administrativo **********.
TERCERO. Previamente a abordar el análisis del presente
asunto conviene destacar los antecedentes relevantes del caso:
1. Por escrito presentado el catorce de febrero de dos mil
catorce, **********, por conducto de su apoderado, ante el
Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, solicitaron en
el procedimiento **********, entre otros aspectos, la
ampliación de la declaración administrativa de
infracción en contra de **********, en términos del numeral
71 del Código Federal de Procedimientos Civiles, de
aplicación supletoria, derivado de la concurrencia de nuevos
hechos diversos a los que soportaron la solicitud de
declaración administrativa de infracción inicial, asimismo,
demandó la indemnización que correspondiera por
daños y perjuicios.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
22
2. Mediante oficio ********** de seis de marzo de dos mil
catorce, emitido en el expediente **********, el Coordinador
Departamental de Resoluciones de Marcas Notorias del
Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, por un lado,
desechó la ampliación de la solicitud de declaración
administrativa de infracción en contra de **********,
presentada por ********** y **********, con base en que no se
surtía el supuesto jurídico para que procediera la aplicación
supletoria del Código Federal de Procedimientos Civiles y,
por otro, determinó que la acción de indemnización de daños
y perjuicios debía promoverse en la vía y ante el órgano
jurisdiccional correspondiente.
3. Por escrito presentado el cuatro de abril de dos mil catorce,
el apoderado de las sociedades **********, promovieron juicio
de amparo indirecto en el que combatieron, entre otros
aspectos, la inconstitucionalidad del artículo 221 de la Ley
de la Propiedad Industrial, con motivo de su primer acto de
aplicación que hizo consistir en el oficio ********** de seis de
marzo de dos mil catorce, emitido en el expediente **********,
por el Coordinador Departamental de Resoluciones de
Marcas Notorias del Instituto Mexicano de la Propiedad
Industrial.
4. De dicha demanda de amparo, correspondió conocer al Juez
Cuarto de Distrito en Materia Administrativa en el Distrito
Federal y, tramitado el juicio, el diecinueve de noviembre de
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
23
dos mil catorce, dictó la sentencia en el sentido de
sobreseer en el juicio de amparo.
5. En contra de la resolución anterior, la parte afectada
interpuso recurso de revisión del que conoció el Octavo
Tribunal Colegiado de Circuito del Centro Auxiliar el cual
remitió a este Alto Tribunal el asunto para conocer del
planteamiento de inconstitucionalidad del artículo 221 de la
Ley de la Propiedad Industrial contenida en el decreto
reclamado.
Relatados los anteriores antecedentes, procede examinar el
tercer concepto de violación hecho valer por la parte quejosa
en su escrito de demanda, atento al contenido del artículo 93,
fracción V, de la Ley de Amparo.
CUARTO. En el referido concepto de violación hecho valer
por la parte quejosa, adujo, substancialmente, lo siguiente:
El artículo 221 de la Ley de Propiedad Industrial es
contrario a los derechos fundamentales de seguridad
jurídica, economía procesal y acceso a la justicia
pronta, completa y expedita, al impedir que el
Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial conozca y
resuelva de los reclamos de daños y perjuicios
derivados de la infracción a derechos de propiedad
industrial en los procedimientos administrativos,
dotando exclusivamente de dicha facultad a los
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
24
Tribunales Civiles, quienes carecen de facultades
para resolver la infracción a los derechos de propiedad
industrial, esto es, que tal inconstitucionalidad deriva de
que el citado precepto evita que en los procedimientos
de declaración administrativa de infracción, en
atención al principio de continencia de la causa, el
referido Instituto se pronuncie y resuelva respecto del
reclamo de daños y perjuicios, siendo que para el caso
en que el titular del derecho fundamental a la inventiva
así lo plantee, el Instituto en cita debe resolver sobre
todas las pretensiones derivadas de una acción
principal y sobre los daños y perjuicios ocasionados
precisamente con motivo de la violación al derecho
fundamental a la inventiva.
Añade la parte quejosa, que el precepto combatido viola
en su perjuicio el derecho fundamental de seguridad
jurídica, considerando que las resoluciones se rigen por
el principio de unidad sin que se deba escindir el
estudio de las cuestiones planteadas en el
procedimiento, de modo que la citada disposición
infringe el citado derecho de los gobernados al
obligarles a que acudan a una instancia distinta para
resolver sobre una cuestión accesoria al fondo del
asunto en el procedimiento de declaración
administrativa de infracción.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
25
Agrega la parte quejosa que el principio de economía
procesal integrado al derecho fundamental de tutela
jurisdiccional efectiva, se refiere al ahorro de costos, de
tiempo y de energía de las partes en un procedimiento
y va de la mano del principio de debido proceso en
el que se prevé el establecimiento de reglas necesarias
que permiten que la decisión de la controversia se
realice con el menor empleo de recursos humanos y en
el menor tiempo posible, de modo que la unión de
todas las acciones derivadas a la cuestión principal
para su resolución debe ser vista por un solo juzgador,
lo cual es una cuestión que se infringe con el precepto
reclamado, pues no obstante que es facultad del
Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial el
conocimiento y resolución de los procedimientos de
declaración administrativa de infracción, impide e
inhibe a dicho Instituto para que conozca de las
acciones derivadas de la principal dotando de manera
exclusiva a los Tribunales civiles de dichas facultades.
Continúa argumentando la parte quejosa que el
precepto que reclama es contrario al derecho de
acceso a la justicia, en razón de que, en su
concepto, la protección a los derechos humanos
únicamente puede darse cuando existen vías
procesales adecuadas para acceder a dicha
protección.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
26
El artículo 17 constitucional que ha tenido diversas
reformas, ha perfeccionado y robustecido el derecho
fundamental de acceso a la jurisdicción, al señalar sus
calidades: independencia en sus órganos, prontitud en
sus procesos y resoluciones, que se agoten las
cuestiones planteadas y que la justicia sea completa,
imparcial para que asegure el imperio del derecho y
sea gratuita; que el hombre tenga derecho a que se le
administre justicia de manera pronta, además que debe
ser completa pues no hay en verdad una justicia
cuando ésta es en fragmentos o a medias e imparcial,
aspectos que van en el mismo sentido que los artículos
8º, y 10 de la Declaración Universal de los Derechos
Humanos y artículos 8º, párrafo 1 y 25, de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos,
preceptos estos últimos que subyacen y detallan los
alcances del artículo 17 constitucional, de modo que
tales disposiciones deben interpretarse de manera
sistemática; de modo que los Tribunales resuelvan la
controversia que les es planteada en los términos y
plazos que fijen las leyes sin obstáculos como lo sería
obligar al particular a acudir a una instancia distinta
para ejercer una acción conexa a la principal que es del
conocimiento de dicha autoridad.
Argumenta la parte quejosa que el precepto que tilda
de inconstitucional, contraviene el Tratado de Libre
Comercio de América del Norte, en especial los
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
27
artículos 1701 y 1714 que establecen,
respectivamente, que cada una de las partes otorgará
en su territorio a los nacionales de otra parte,
protección adecuada y eficaz, asegurándose a la vez
que las medidas destinadas a defender esos derechos
no se conviertan en obstáculo al comercio legítimo
y que cada una de las partes garantizará que su
derecho interno contenga procedimientos de
defensa de los derechos de propiedad intelectual
que permitan la adopción de medidas eficaces
contra cualquier acto que infrinja los derechos de
propiedad intelectual incluyendo recursos expeditos
para prevenir las infracciones y recursos que
desalienten futuras infracciones y que se evite la
creación de barreras al comercio legítimo y se
proporcionen salvaguardas contra el abuso de
procedimientos, garantizando que los
procedimientos para la defensa de los derechos de
propiedad intelectual sean justos y equitativos, que
no sean innecesariamente complicados o costosos
y que no impliquen plazos irrazonables o demoras
injustificadas.
Añade la parte quejosa que el Acuerdo sobre los
Aspectos de los Derechos de Propiedad Industrial
relacionados con el comercio, alude a la reducción
de las distorsiones del comercio internacional y los
obstáculos al mismo, teniendo en cuenta la necesidad
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
28
de fomentar una protección eficaz y adecuada de los
derechos de propiedad intelectual, que han de
asegurarse que las medidas y procedimientos
destinados a hacer respetar dichos derechos no se
conviertan a su vez en obstáculos al comercio legítimo,
reconociéndose la necesidad de nuevas normas y
disciplinas relativas a la provisión de normas y
principios adecuados relativos a la existencia, alcance
y ejercicio de los derechos de propiedad intelectual
relacionados con el comercio.
En el citado Acuerdo, particularmente en su artículo 41,
establece que los miembros deben asegurarse que en
su legislación nacional se establezcan procedimientos
de observancia de los derechos de propiedad
intelectual que permitan la adopción de medidas
eficaces contra cualquier acción infractora de los
derechos de propiedad intelectual con inclusión de
recursos ágiles para prevenir las infracciones y de
recursos que constituyan un medio eficaz de disuasión
de nuevas infracciones, agregando que los
procedimientos relativos a la observancia de los
derechos de propiedad intelectual serán justos y
equitativos y no serán innecesariamente complicados o
gravosos ni tendrán plazos injustificables o retrasos
innecesarios.
De ahí que el precepto combatido contravenga lo
pactado en los tratados internacionales, pues el
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
29
recurso para la protección de los derechos en materia
de propiedad industrial no es eficaz ni ágil y mucho
menos adecuado, ya que no se establece la reparación
integral del derecho a la inventiva, preceptuando la
necesaria instauración de una instancia diversa ante
una autoridad distinta como son los Tribunales Civiles.
El precepto reclamado infringe el derecho a la
restitución íntegra del derecho humano vulnerado,
considerando que la reparación integral del daño a que
aluden la Corte Interamericana de Derechos Humanos
y el artículo 63, párrafo 1, de la Convención Americana
de Derechos Humanos, comprende la restitución, la
indemnización, el proyecto de vida, la satisfacción y las
garantías de no-repetición, lo cual es reconocido en el
sistema universal de los derechos humanos.
La reparación integral del daño ocasionado por la
violación de derechos humanos, también es reconocida
en el sistema universal de los derechos humanos, esto
es, al través de los principios y directrices básicos
sobre el derecho de las víctimas de violaciones
manifiestas de las normas internacionales de derechos
humanos y de violaciones graves de derecho
internacional humanitario a interponer recursos y
obtener reparaciones, todo lo que encuentra también
fundamento en la Ley General de Víctimas que alude a
la reparación integral.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
30
Añade la parte quejosa que los medios de reparación
deben ser adecuados, efectivos y rápidos y que todas
las autoridades en el ámbito de sus respectivas
competencias tienen la obligación de prevenir,
investigar, sancionar y lograr la reparación integral de
los daños que cualquier persona física o moral pudo
haber sufrido por motivo de una violación de sus
derechos humanos.
En la especie, el precepto combatido desconoce las
disposiciones que dotan al Instituto Mexicano de la
Propiedad Industrial como la autoridad administrativa
especializada para conocer de toda clase de
controversias relacionadas con los derechos de
propiedad industrial.
El precepto combatido contraviene todo el sistema de
competencia 8º, artículos 90 constitucional, 1o, 3o, y
45, de la Ley Orgánica de la Administración Pública
Federal, 1o, 2o, fracciones II, IV y V, 6º, fracciones IV,
V y XXII, 187, 199 bis, 199, bis- 1, fracción II, 199 bis-2,
199-bis 4, 199, bis-5, 221 y 221 bis, de la Ley de la
Propiedad Industrial, 1o, 7 y 14, del Reglamento del
Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial y 1o, 4o,
18, fracciones I, II y VII, 11, fracción III, del Estatuto
Orgánico del Instituto Mexicano de la Propiedad
Industrial) por el que se dota al Instituto Mexicano de
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
31
la Propiedad Industrial de las facultades necesarias
para el cumplimiento de su objeto al excluir de su
conocimiento la reparación de los daños y perjuicios
derivados de la infracción a un derecho de propiedad
industrial.
Son infundados los conceptos de violación aducidos.
Ciertamente, previamente al examen de los conceptos de
violación, precisa la transcripción del precepto reclamado de la
Ley de Propiedad Industrial y que es del tenor siguiente:
“ARTÍCULO 221. Las sanciones establecidas en esta ley
y demás disposiciones derivadas de ella, se impondrán
además de la indemnización que corresponda por
daños y perjuicios a los afectados, en los términos de la
legislación común y sin perjuicio de lo dispuesto en el
artículo siguiente.”
“ARTÍCULO 221 BIS. La reparación del daño material o
la indemnización de daños y perjuicios por la violación
de los derechos que confiere esta ley, en ningún caso
será inferior al cuarenta por ciento del precio de venta al
público de cada producto o la prestación de servicios
que impliquen una violación de alguno o algunos de los
derechos de propiedad industrial regulados en esta
ley.”
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
32
El artículo 221 de la Ley de la Propiedad Industrial le fue
aplicado a la parte quejosa en el acuerdo dictado por el
Coordinador Departamental de Resoluciones de Marcas Notorias
del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, el seis de marzo
de dos mil catorce, folio 7459, en el expediente P.C.1526/2013
(I-230)15799, que en la parte conducente establece:
“(…) En cuanto a su solicitud de que este Instituto condene desde ya a la demandada al pago de daños y perjuicios generados a sus representada (sic), de igual manera se le comunica que no ha lugar a acordar de conformidad lo solicitado, toda vez que el artículo 221 de la Ley de la Propiedad Industrial establece que las sanciones establecidas en esta ley y demás disposiciones derivadas de ella, se impondrán además de la indemnización que corresponda por los daños y perjuicios a los afectados, en los términos de la legislación común y sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 221 bis del mismo ordenamiento, de lo anterior se colige que dicha acción, deberá interponerse en la vía y ante el órgano jurisdiccional correspondiente, ya que el objeto primordial del presente procedimiento es realizar las investigaciones de presuntas infracciones administrativas y prevenir o hacer cesar la violación a los derechos de propiedad industrial, así como imponer las sanciones administrativas correspondientes en la materia, en caso de demostrarse dichas infracciones, no así el pago de indemnización por los daños y perjuicios, quedando este derecho incólumne para hacer valerlo(sic) cuando así sea procedente.”
Ahora bien, la parte quejosa sostiene que el precepto que
reclama es contrario al derecho fundamental de seguridad
jurídica al impedir que el Instituto Mexicano de la Propiedad
Industrial, conozca y resuelva respecto de los reclamos de daños
y perjuicios derivados de la infracción a derechos de propiedad
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
33
industrial en los procedimientos administrativos, dotando de dicha
facultad de manera exclusiva a los Tribunales Civiles, los que en
su concepto carecen de facultades para resolver la infracción a
los derechos de propiedad industrial.
La seguridad jurídica supone la certeza, estabilidad y
razonabilidad en las normas y actos que dicten las autoridades,
esto es, que se opone a las modificaciones bruscas, ilegítimas e
irrazonables. Constituye la situación de un sistema jurídico en el
cual las normas o los actos gozan de estabilidad, considerada
ésta como certidumbre y en que los eventuales cambios
normativos serán razonables y previsibles, realizados por las
autoridades legítimamente investidas de poder para ello, las que
respetarán los derechos de las personas permitiendo a los
actores del sistema, estimar con un margen de alta probabilidad
de sus conductas presentes y resguardando en todo momento
una esfera mínima de derechos protegidos de toda arbitrariedad.
El principio de seguridad jurídica previsto en el artículo 161
de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
consiste en otorgar certeza al gobernado respecto de una
situación o actuación de las autoridades, sin que ello implique que
el legislador deba precisar de manera específica un procedimiento
para cada una de las relaciones jurídicas que se entablen.
1 “ARTÍCULO. 16. Nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino
en virtud de mandamiento escrito de la autoridad competente, que funde y motive la causa legal del
procedimiento…”
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
34
En todo caso, debe entenderse que el principio de seguridad
jurídica, en su expresión genérica, exige del legislador el
establecimiento de normas que otorguen certeza a los
gobernados y que al mismo tiempo sirvan de orientación a la
autoridad para imponer la sanción o llevar a cabo la actuación que
en cada caso corresponda.
De tal suerte, resulta conveniente destacar que, el citado
principio no debe entenderse en el sentido de que la ley ha de
señalar de manera especial y precisa un procedimiento para
regular cada una de las relaciones que se entablen entre las
autoridades y los particulares, sino que debe contener los
elementos mínimos pero precisos para hacer valer el derecho del
gobernado y para que sobre el particular, la autoridad no incurra
en arbitrariedades.
Lo anteriormente expuesto, se desprende del contenido de
la jurisprudencia de esta Segunda Sala, siguiente:
"GARANTÍA DE SEGURIDAD JURÍDICA. SUS ALCANCES. La garantía de seguridad jurídica prevista en el artículo 16 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, no debe entenderse en el sentido de que la ley ha de señalar de manera especial y precisa un procedimiento para regular cada una de las relaciones que se entablen entre las autoridades y los particulares, sino que debe contener los elementos mínimos para hacer valer el derecho del gobernado y para que, sobre este aspecto, la autoridad no incurra en arbitrariedades, lo que explica que existen trámites o relaciones que por su simplicidad o sencillez, no requieren de que la ley pormenorice un procedimiento detallado para ejercer el derecho correlativo. Lo anterior
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
35
corrobora que es innecesario que en todos los supuestos de la ley se deba detallar minuciosamente el procedimiento, cuando éste se encuentra definido de manera sencilla para evidenciar la forma en que debe hacerse valer el derecho por el particular, así como las facultades y obligaciones que le corresponden a la autoridad.” (Registro: 174,094. Novena Época. Instancia: Segunda
Sala. Jurisprudencia. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo: XXIV, octubre de 2006 .Materia(s): Constitucional. Tesis: 2a./J. 144/2006. Página: 351)
Así el principio de seguridad jurídica previsto en la Ley
Fundamental, constituye una de las bases del sistema jurídico
mexicano, tendente a garantizar que los gobernados tengan la
certeza jurídica respecto de la forma en que habrán de conducirse
los órganos del Estado, esto es, tiene por objeto que se tenga el
conocimiento pleno respecto de las reglas establecidas en la ley y
que regirán y delimitarán la actuación de las autoridades de todos
niveles.
Es por ello que la Constitución Federal, prevé que dicho
principio sea respetado desde el momento de la emisión de la ley,
en la que se delimite de manera clara y precisa la actuación de la
autoridad, así como los requisitos u obligaciones con que deba
cumplir el gobernado, con lo cual se garantiza un parámetro
objetivo que brinda certeza y seguridad jurídica.
Lo anterior implica que la ley deberá establecer las bases
necesarias para delimitar la actuación de la autoridad, así como
los procedimientos que se deben seguir cumpliendo desde luego
con diversos requisitos, sin llegar al extremo de que la ley se
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
36
convierta en un formulario en el que se establezcan definiciones
específicas, pero sí en la que se brinde la certeza de la manera
en que deba cumplirse.
Para determinar si el precepto en estudio es contrario o no al
derecho fundamental de seguridad jurídica, al hacer una remisión
a la legislación común para la obtención de la indemnización por
concepto de daños y perjuicios, derivados de la infracción a
derechos de propiedad industrial sin que de dicha acción conozca
el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual, cabe destacar lo
siguiente:
La Suprema Corte de Justicia de la Nación ha sostenido en
reiteradas ocasiones que en el sistema jurídico mexicano, por
regla general, la competencia de los órganos jurisdiccionales por
razón de la materia se distribuye entre diversos tribunales, a los
que se les asigna una especialización, lo que da origen a la
existencia de Tribunales Agrarios, Civiles, Fiscales, Penales, de
Trabajo, etcétera, y que a cada uno de ellos les corresponde
conocer de los asuntos relacionados con su especialidad.
Si tal situación da lugar a un conflicto de competencia, éste
debe resolverse atendiendo exclusivamente a la naturaleza de la
acción, lo cual, regularmente, se puede determinar mediante el
análisis cuidadoso de las prestaciones reclamadas, de los hechos
narrados, de las pruebas aportadas y de los preceptos legales en
que se apoye la demanda, cuando se cuenta con este último dato,
pues es obvio que el actor no está obligado a mencionarlo. (2)
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
37
En la especie, si bien no se está en presencia de un conflicto
competencial a que se refiere la jurisprudencia citada, dicho
criterio es ilustrativo para determinar si procede ante el Instituto
de la Propiedad Industrial la acción de indemnización por pago de
daños y perjuicios derivados de la infracción a derechos de
propiedad industrial en los procedimientos administrativos.
Ahora bien, conviene atender a lo dispuesto en lo
conducente, en la Ley de la Propiedad Industrial:
TITULO SEXTO De los Procedimientos Administrativos Capítulo II Del Procedimiento de Declaración Administrativa “ARTÍCULO 6o. El Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, autoridad administrativa en materia de propiedad industrial, es un organismo descentralizado, con personalidad jurídica y patrimonio propio, el cual tendrá las siguientes facultades: (…) IV. Sustanciar los procedimientos de nulidad, caducidad y cancelación de los derechos de propiedad industrial, formular las resoluciones y emitir las declaraciones administrativas correspondientes, conforme lo dispone esta Ley y su reglamento y, en general, resolver las solicitudes que se susciten con motivo de la aplicación de la misma; (…) IX. Fungir como árbitro en la resolución de controversias relacionadas con el pago de los daños y
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
38
perjuicios derivados de la violación a los derechos de propiedad industrial que tutela esta Ley, cuando los involucrados lo designen expresamente como tal; de conformidad con las disposiciones contenidas en el Título Cuarto del Libro Quinto del Código de Comercio; (REFORMADO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994) “ARTÍCULO 187. Las solicitudes de declaración administrativa de nulidad, caducidad, cancelación e infracción administrativa que establece esta ley, se sustanciarán y resolverán con arreglo al procedimiento que señala este capítulo y las formalidades que esta ley prevé, siendo aplicable supletoriamente, en lo que no se oponga, el Código Federal de Procedimientos Civiles.” (REFORMADO, D.O.F. 18 DE JUNIO DE 2010) “ARTÍCULO 188. El Instituto podrá iniciar el procedimiento de declaración administrativa de oficio o a petición de quien tenga un interés jurídico y funde su pretensión. De igual manera, cualquier persona podrá manifestar por escrito al Instituto la existencia de causales para iniciar el procedimiento de declaración administrativa de oficio, en cuyo caso el Instituto podrá considerar dicha información como elementos para determinar el inicio del procedimiento, de considerarlo procedente.” “ARTÍCULO 189. La solicitud de declaración administrativa que se interponga deberá contener los siguientes requisitos: (…).” (REFORMADO, D.O.F. 25 DE ENERO DE 2006) “ARTÍCULO 190. Con la solicitud de declaración administrativa deberán presentarse, en originales o copias debidamente certificadas, los documentos y constancias en que se funde la acción y ofrecerse las pruebas correspondientes. Las pruebas que se presenten posteriormente, no serán admitidas salvo que fueren supervenientes. Asimismo, deberá exhibir el solicitante el número de copias simples de la
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
39
solicitud y de los documentos que a ella se acompaña, necesarios para correr traslado a la contraparte. Cuando se ofrezca como prueba algún documento que obre en los archivos del Instituto, bastará que el solicitante precise el expediente en el cual se encuentra y solicite la expedición de la copia certificada correspondiente o, en su caso, el cotejo de la copia simple que se exhiba y solicitará al Instituto que con la copia simple de dichas pruebas, se emplace al titular afectado.”
“ARTÍCULO 192. En los procedimientos de declaración administrativa se admitirán toda clase de pruebas, excepto la testimonial y confesional, salvo que el testimonio o la confesión estén contenidas en documental, así como las que sean contrarias a la moral y al derecho. (ADICIONADO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994) Sin perjuicio de lo dispuesto en el párrafo anterior, para los efectos de esta Ley, se otorgará valor probatorio a las facturas expedidas y a los inventarios elaborados por el titular o su licenciatario.” “ARTÍCULO 193. Admitida la solicitud de declaración administrativa de nulidad, caducidad y cancelación, el Instituto, con la copia simple de la solicitud y los documentos que se le acompañaron, la notificará al titular afectado, concediéndole un plazo de un mes para que manifieste por escrito lo que a su derecho convenga. En los procedimientos de declaración administrativa de infracción se estará a lo dispuesto en los artículos 209 fracción IX y 216 de esta Ley. La notificación se hará en el domicilio señalado por el solicitante de la declaración administrativa.” (REFORMADO PRIMER PÁRRAFO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994).
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
40
“ARTÍCULO 197. El escrito en que el titular afectado o, en su caso, el presunto infractor formule sus manifestaciones deberá contener: (…) Para la presentación del escrito y el ofrecimiento de pruebas será aplicable lo dispuesto en el artículo 190 de esta ley.” (REFORMADO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994) “ARTÍCULO 199. Transcurrido el plazo para que el titular afectado o el presunto infractor, presente sus manifestaciones y, en su caso, la prórroga a que se refiere el artículo anterior, previo estudio de los antecedentes relativos y desahogadas las pruebas que lo requieran, se dictará la resolución administrativa que proceda, la que se notificará a los interesados en el domicilio señalado en el expediente o, en su caso, mediante publicación en los términos del artículo 194 de esta ley. Tratándose de procedimientos de declaración administrativa de infracción, en la misma resolución se impondrá la sanción, cuando ésta sea procedente.” (ADICIONADO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994) “ARTÍCULO 199 BIS. En los procedimientos de declaración administrativa relativos a la violación de alguno de los derechos que protege esta Ley, el Instituto podrá adoptar las siguientes medidas: I. Ordenar el retiro de la circulación o impedir ésta, respecto de las mercancías que infrinjan derechos de los tutelados por esta ley; II. Ordenar se retiren de la circulación: a) Los objetos fabricados o usados ilegalmente; b) Los objetos, empaques, envases, embalajes, papelería, material publicitario y similares que infrinjan alguno de los derechos tutelados por esta ley; c) Los anuncios, letreros, rótulos, papelería y similares que infrinjan alguno de los derechos tutelados por esta ley; y
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
41
d) Los utensilios o instrumento (sic) destinados o utilizados en la fabricación, elaboración u obtención de cualquiera de los señalados en los incisos a), b) y c), anteriores; III. Prohibir, de inmediato, la comercialización o uso de los productos con los que se viole un derecho de los protegidos por esta ley; IV. Ordenar el aseguramiento de bienes, mismo que se practicará conforme a lo dispuesto en los artículos 211 a 212 BIS 2; V. Ordenar al presunto infractor o a terceros la suspensión o el cese de los actos que constituyan una violación a las disposiciones de esta ley, y VI. Ordenar se suspenda la prestación del servicio o se clausure el establecimiento cuando las medidas que se prevén en las fracciones anteriores, no sean suficiente para prevenir o evitar la violación a los derechos protegidos por esta ley. Si el producto o servicio se encuentra en el comercio, los comerciantes o prestadores tendrán la obligación de abstenerse de su enajenación o prestación a partir de la fecha en que se les notifique la resolución. Igual obligación tendrán los productores, fabricantes, importadores y sus distribuidores, quienes serán responsables de recuperar de inmediato los productos que ya se encuentren en el comercio.” (ADICIONADO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994) “ARTÍCULO 199 BIS 5. El Instituto decidirá en la resolución definitiva del procedimiento de declaración administrativa de infracción, sobre el levantamiento o definitividad de las medidas adoptadas.” REFORMADO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994) “ARTÍCULO 217. Una vez concluido el plazo a que se refieren los artículos 209, fracción IX y 216 de esta ley,
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
42
el Instituto con base en el acta de inspección levantada, y en caso de no haberse requerido por la naturaleza de la infracción, con los elementos que obren en el expediente, y tomando en cuenta las manifestaciones y pruebas del interesado, dictará la resolución que corresponda.” (REFORMADO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994) “ARTÍCULO 221. Las sanciones establecidas en esta Ley y demás disposiciones derivadas de ella, se impondrán además de la indemnización que corresponda por daños y perjuicios a los afectados, en los términos de la legislación común y sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo siguiente.” (ADICIONADO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994) “ARTÍCULO 221 BIS. La reparación del daño material o la indemnización de daños y perjuicios por la violación de los derechos que confiere esta Ley, en ningún caso será inferior al cuarenta por ciento del precio de venta al público de cada producto o la prestación de servicios que impliquen una violación de alguno o algunos de los derechos de propiedad industrial regulados en esta ley.” (REFORMADO, D.O.F. 2 DE AGOSTO DE 1994) “ARTÍCULO 222. Si del análisis del expediente formado con motivo de la investigación por infracción administrativa el Instituto advierte la realización de hechos que pudieran constituir alguno de los delitos previstos en esta ley, así lo hará constar en la resolución que emita.”
De las diversas hipótesis que establecen la competencia
material del Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial destaca
que conocerá, entre otros aspectos, de las controversias que se
susciten entre los gobernados con motivo de las solicitudes de
declaración administrativa de nulidad, caducidad, cancelación e
infracción administrativa, las que se sustanciarán con las
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
43
formalidades establecidas en la ley y aplicando supletoriamente
en lo que no se oponga, el Código Federal de Procedimientos
Civiles. Para ello se prevén las facultades del Instituto para
sustanciar y proveer los procedimientos administrativos de
nulidad, caducidad y conciliación de los derechos de propiedad
Industrial e imponer sanciones (artículo 6º, fracción IV, de la ley
en cita) los requisitos que debe tener dicha solicitud (artículos 189
y 190), se regula la admisión y desahogo de pruebas
correspondientes, las formalidades relacionadas con la
notificación de la solicitud a las partes, se establecen las reglas
para el caso de que el Instituto inicie de oficio el procedimiento de
declaración administrativa (artículos 192, 193 y 196), las
formalidades del escrito del titular afectado o del presunto
infractor (artículo 197), el dictado y notificación de la resolución
que se emita (artículo 199), se prevén las facultades del Instituto
para imponer ciertas medidas en esos procedimientos cuando ha
habido violación de alguno de los derechos protegidos por la ley
(artículo 199 bis) y decidirá en la resolución definitiva que dicte el
instituto, sobre el levantamiento o definitividad de dichas medidas
(artículo 199 bis 5), si regulan lo relativo a infracciones y
sanciones administrativas (artículos 217, 221, 221 bis y 222),
entre otros aspectos.
Por otra parte, el legislador otorgó al Instituto Mexicano de la
Propiedad Industrial una competencia análoga a la contenciosa
administrativa, a través de la cual podrá declarar la nulidad,
caducidad, cancelación e infracción administrativa,
desprendiéndose también de la misma ley que cuando las partes
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
44
interesadas no designen como árbitro al citado instituto para la
resolución de controversias relacionadas con el pago de los
daños y perjuicios derivados de la violación a los derechos de
propiedad industrial, tal como lo permite la fracción IX del artículo
6o. de la ley de la materia, el diverso numeral 221 faculta al
afectado para demandar ese pago en los términos de la
legislación común.
En el caso que se examina, tratándose de la citada solicitud
de declaración administrativa, que culmina con la imposición de
una indemnización por concepto de pago de daños y perjuicios de
dicha acción no ha de conocer el referido Instituto en la medida
que no es de su competencia conocer de las acciones de índole
civil, en tanto que éstas se ejercen ante los Tribunales
especializados en dicha materia, en los que ya no se cuestionará
si los particulares realizaron conductas que lleven a la declaración
de nulidad, caducidad, cancelación e infracción administrativa.
Esto es, tratándose de la acción de indemnización por pago
de daños y perjuicios derivada de un conflicto de declaración
administrativa de nulidad, caducidad, cancelación e infracción,
cuando el Instituto de la Propiedad del Industrial no actúa como
árbitro en relación con las controversias relacionadas con el pago
de daños y perjuicios derivados de la violación a los derechos de
propiedad industrial cuando los involucrados lo designan como tal
de conformidad con el Título Cuarto, del libro Quinto del Código
de Comercio que regulan el arbitraje nacional e internacional,
constituye una acción que no se vincula con la aplicación o
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
45
interpretación de normas sustantivas contenidas en la Ley de la
Propiedad Industrial, pues ninguna de sus disposiciones así lo
establece.
Además, si como se ha sostenido en la resolución de la
competencia 171/1998, resuelta por el Tribunal Pleno de la
Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la República
Mexicana nadie discute la existencia de Tribunales de Justicia
especializados para distintas ramas del derecho, como la civil,
penal, del trabajo, agraria, fiscal, electoral, entre otras, y que cada
uno de estos órganos tiene una competencia limitada, la cual se
precisa, regularmente, en la ley orgánica respectiva, casi siempre
en relación con su especialización, existiendo casos en que, aun
cuando un órgano jurisdiccional es especializado, conoce de
asuntos de materia distinta; sin embargo, en el caso, atento a la
naturaleza de la acción relacionada con el pago de indemnización
por concepto de daños y perjuicios ocasionados por el infractor,
debe estimarse que queda comprendida en el campo de derecho
civil, atendiendo preponderantemente a la calidad de la pretensión
que se reclama.
Así se ha pronunciado ante la Suprema Corte de Justicia de
la Nación cuando se han resuelto algunos conflictos
competenciales de acuerdo con las tesis que enseguida se
reproducen:
“COMPETENCIA, RESOLUCIONES DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA EN MATERIA DE. ALCANCE. La resolución de un conflicto competencial por la
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
46
Suprema Corte de Justicia de la Nación, sólo tiene por objeto precisar qué autoridad jurisdiccional debe resolver sobre la existencia o inexistencia de una prestación reclamada atendiendo a la naturaleza de las prestaciones que se exigen por el actor, pero no tiene facultades la propia Corte para que, sin previo juicio, desconozca los derechos y prestaciones que demanda aquél, ni obligarlo a fundar sus prestaciones o acciones en un ordenamiento legal distinto, al que el demandado cree tener derecho. Si el actor ejercita una acción laboral, no se puede, sin previo juicio, obligarlo a que deduzca sus derechos mediante una acción civil o mercantil, y corresponde a las autoridades del trabajo, mediante el debido proceso legal, resolver si el actor tiene derecho a las prestaciones legales que demanda. Está bajo la responsabilidad del actor el ejercitar bien o mal sus derechos, si ejercita una acción laboral mediante los procedimientos seguidos ante los tribunales del trabajo (en el cual la contraparte tiene plenitud de derechos para defenderse) y se demuestra que no existía relación laboral, sino una regida por el derecho civil o mercantil, se dictará una sentencia que absuelva al demandado, pero en un juicio en que se cumplan las formalidades esenciales de un procedimiento.” (Octava Época. Registro IUS: 208024.
Instancia: Cuarta Sala. Tesis aislada. Fuente: Semanario Judicial de la Federación, Tomo II, Primera Parte, julio-diciembre de 1988, materia común, página 278. Genealogía: Informe 1988, Segunda Parte, Cuarta Sala, tesis 5, página 21).
“COMPETENCIA, MATERIA DE LOS CONFLICTOS DE. La resolución de un conflicto competencial por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, sólo tiene por objeto el precisar que autoridad jurisdiccional debe resolver sobre la existencia o inexistencia de una prestación reclamada, atendiendo a la naturaleza de las prestaciones que se exigen por el actor, pero la Suprema Corte no tiene facultades para que, sin previo juicio, desconocer los derechos y prestaciones que el actor demanda, ni obligarlo a fundar sus pretensiones y acciones en un ordenamiento legal distinto al que el demandante cree tener derecho. Si el demandante
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
47
ejercita una acción laboral, no se puede sin previo juicio, obligarlo a que deduzca sus derechos mediante una acción civil o mercantil. Está bajo la responsabilidad y perjuicio del demandante el que ejercite bien o mal sus derechos. Si ejercitó una acción laboral y durante el procedimiento seguido ante los Tribunales del Trabajo, en el cual la contraparte tiene plenitud de derechos para defenderse, se demuestra que no existía relación laboral sino regida por el derecho mercantil, existirá una sentencia que absuelva al demandado, pero en un juicio en el que se cumplan las formalidades esenciales del procedimiento.” (Sexta
Época. Instancia: Pleno. Fuente: Semanario Judicial de la Federación, Volumen CXXIX, Primera Parte, marzo de 1968 página 13).
No obsta a lo anterior, que el demandante estuviera sujeto a
un régimen jurídico administrativo, ya que la acción que se ejerce
es civil, debido a la naturaleza jurídica de la obligación y de los
mecanismos procesales conducentes para hacer valer el derecho
que se estima afectado, más aún que con dicha acción se ventilan
intereses de dos personas que son de índole patrimonial personal
que no repercuten en los derechos de protección a la propiedad
industrial en cuanto que el ejercicio de la citada acción, le otorga
al actor tan solo el derecho a obtener una suma de dinero que
corresponda al valor económico de los perjuicios que le hubiera
ocasionado el infractor, por lo que su aplicación corresponde a los
Tribunales especializados en dicha materia.
Lo anteriormente considerado se ha corroborado en lo
conducente, las jurisprudencias y tesis que enseguida se
reproducen:
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
48
“COMPETENCIA. RECLAMACIÓN DE DAÑOS Y PERJUICIOS A UN SINDICATO, COMO CONSECUENCIA DE LA DECLARACIÓN DE INEXISTENCIA DE UNA HUELGA, SU CONOCIMIENTO CORRESPONDE A UN JUEZ DE LO CIVIL. Si bien los conflictos derivados de la relación de trabajo deben resolverse por los tribunales especializados, por disposición del artículo 123 constitucional, las normas contenidas en la legislación laboral no prevén acciones como la de reclamación de daños y perjuicios a un sindicato de trabajadores, como consecuencia de la declaración de inexistencia de una huelga, pues dicha acción, que repercute en el patrimonio de las personas, se encuentra regulada por el Código Civil y su aplicación corresponde a los tribunales especializados en dicha materia; por tanto, el competente para conocer de un asunto en el que se ejercite una acción de esta naturaleza es un Juez de lo civil.” (Novena Época.
Núm. Registro IUS: 200650. Instancia: Segunda Sala. Tesis aislada. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo III, febrero de 1996, materias laboral y común, tesis 2a. XII/96, página 265)
“COMPETENCIA PARA CONOCER DEL DELITO DE DESPOJO. CORRESPONDE A UN JUEZ PENAL, Y NO A UN TRIBUNAL AGRARIO, AUN CUANDO EL INMUEBLE OBJETO DEL ILÍCITO SEA DE CARÁCTER EJIDAL. La pluralidad de tribunales especializados para conocer de asuntos relacionados con distintas ramas del derecho, como la civil, penal, del trabajo, agrario, entre otros, da lugar a conflictos competenciales cuando dos o más órganos jurisdiccionales se niegan a conocer de ellos, o sostienen al mismo tiempo su competencia para resolverlo. En tales casos es menester dirimir el conflicto atendiendo a la naturaleza de la acción ejercida, de modo que si se trata de una acción persecutoria por el delito de despojo, la competencia para conocer de ella se surte en favor del Juez Penal y no de un Tribunal Unitario Agrario, que no tiene facultades para conocer de la comisión de delitos pues, aun cuando el inmueble objeto del despojo tuviera el carácter de ejidal, ello no alteraría la naturaleza de la acción deducida, que tiene por objeto
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
49
determinar la responsabilidad penal del inculpado en el evento que se le atribuye y, en su caso, sancionarlo conforme al Código Penal, quedando incólume el derecho agrario que al inculpado pudiera asistir para poseer el inmueble en cuestión.” (Novena Época. Núm.
Registro IUS: 195023. Instancia: Pleno. Jurisprudencia. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo VIII, diciembre de 1998, materia penal, tesis P./J. 82/98, página 16).
“SEGURO SOCIAL. LA ACCIÓN DE PAGO EJERCITADA CONTRA EL INSTITUTO POR GASTOS EFECTUADOS CON MOTIVO DE LA NEGATIVA A BRINDAR ASISTENCIA MÉDICA U HOSPITALARIA A UN ASEGURADO, BENEFICIARIO O PENSIONADO, O POR RESULTAR DEFICIENTE, ES DE NATURALEZA CIVIL Y SU CONOCIMIENTO CORRESPONDE A UN JUEZ DEL FUERO COMÚN. De conformidad con lo dispuesto en el artículo 275, de la Ley del Seguro Social abrogada, las controversias entre los asegurados o sus beneficiarios y el instituto sobre las prestaciones que la propia ley otorga, podrán ventilarse ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, infiriéndose de dicho precepto que es requisito sine qua non para que una acción sea de la competencia de ese tribunal laboral, que la prestación reclamada derive de ese ordenamiento. Ahora bien, la acción de pago ejercitada por un asegurado, beneficiario o pensionado, en contra de la citada institución de seguridad social, en razón de haber realizado erogaciones en numerario por no recibir los servicios médicos u hospitalarios, o bien, al estimar que son deficientes, circunstancias que los condujeron a obtener esos servicios en forma particular, escapa del ámbito de las normas laborales, administrativas y fiscales contenidas en el ordenamiento invocado; además de que en esa hipótesis la controversia no se endereza contra dicha institución como subrogataria de la obligación patronal en materia de seguridad y previsión social de los trabajadores, que es el carácter reconocido por la ley que lo rige, sino como prestador de un servicio médico, al que los afectados le atribuyen haber incurrido en responsabilidades por
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
50
negligencia, impericia o falta de cuidado; atento lo cual, el reclamo de la prestación económica de que se trata, desde luego, constituye una acción prevista en la legislación civil y, por tanto, debe ser resuelta bajo la aplicación de las normas del derecho común.” (Novena
Época. Núm. Registro IUS: 190365. Instancia: Pleno. Jurisprudencia. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo XIII, enero de 2001, materia civil, tesis P./J. 1/2001, página 12)
"COMPETENCIA LABORAL Y CIVIL. CUANDO EN LA MISMA DEMANDA SE EJERCITAN ACCIONES DE AMBAS MATERIAS, PUEDE FINCARSE LA COMPETENCIA EN DIVERSOS ÓRGANOS JURISDICCIONALES. Cuando en el mismo libelo un trabajador asegurado demanda del Instituto Mexicano del Seguro Social, por una parte, el cumplimiento de la prestación de asistencia médica, acción que es de carácter laboral según lo prevé la Ley del Seguro Social y, por otra, el pago de una indemnización por gastos erogados con motivo de la atención médica otorgada, no por el instituto, sino por médicos particulares, reclamación que constituye el ejercicio de una acción de naturaleza civil, la controversia competencial debe resolverse en el sentido de que el conocimiento de la demanda, en lo que respecta a la primera acción, corresponde a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, mientras que la parte relativa a la indemnización compete al Juez Civil; sin que pueda considerarse como obstáculo, la circunstancia de que las acciones se hayan ejercitado en una misma demanda, dado que el carácter de trabajador del actor y la exigencia de la justicia pronta, completa e imparcial que garantiza el artículo 17 de la Constitución General de la República, son elementos dominantes respecto del rompimiento de la continencia de la causa.” (Novena Época. Registro IUS: 197509. Instancia: Segunda
Sala. Tesis aislada. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo VI, octubre de 1997, materias civil, laboral y común, tesis 2a. CXII/97, página 385).
“COMPETENCIA PARA CONOCER DE LA ACCIÓN DE PAGO POR CONCEPTO DE LA OCUPACIÓN
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
51
TEMPORAL DE UNA PARCELA EJIDAL CONTRA EL OCUPANTE. CORRESPONDE A UN JUEZ EN MATERIA CIVIL. La competencia para conocer de la acción de pago ejercida por un ejidatario por concepto de la ocupación temporal de la parcela de la que es titular contra su ocupante, se surte en favor de un Juez en materia Civil y no de un Tribunal Unitario Agrario, ya que su naturaleza es civil, en la medida en que el interés del actor es de carácter patrimonial y personal, que no repercute en el núcleo ejidal o comunal al que pertenece, en virtud de que lo que pretende con su ejercicio es obtener una cantidad de dinero que corresponda al valor económico de los perjuicios que le hubiera ocasionado no gozar de la posesión de la parcela, de manera que el reclamo de la prestación económica de que se trata escapa al ámbito de las normas agrarias y, por ende, la vía en la que se ventile la controversia debe resolverse bajo la aplicación de las normas del derecho civil.” (Décima Época. Registro:
2004413. Instancia: Segunda Sala. Tipo de Tesis: Jurisprudencia. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Libro XXIV, Septiembre de 2013, Tomo 2. Materia(s): Civil, Administrativa. Tesis: 2a./J. 128/2013 (10a.).Página: 1177).
No es obstáculo a la conclusión alcanzada que el artículo
187 de la Ley de la Propiedad Industrial establezca que el Código
de Procedimientos Civiles es de aplicación supletoria, toda vez
que dicho numeral expresamente dispone que tal supletoriedad
tendrá lugar cuando no se oponga a la ley.
De ahí que el precepto impugnado no es contrario al
principio de seguridad jurídica en la medida que no existe falta de
certeza para el gobernado en tanto que tratándose de la
declaratoria de infracción, este último tiene expedita la vía para
hacer valer la acción correspondiente ante los tribunales civiles, lo
que no implica que por tal motivo se prolonguen indefinidamente
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
52
las controversias y menos aún se generen resoluciones sucesivas
sobre problemáticas idénticas, en tanto que los derechos que se
protegen a través de las solicitudes de declaración de nulidad,
caducidad, cancelación e infracción administrativa que establece
la Ley de la Propiedad Industrial y aquellas pretensiones que se
persiguen con la acción civil con motivo de una indemnización por
concepto de daños y perjuicios, son diversas, pues en el primer
caso, los procedimientos derivados de tal declaración de nulidad,
lo que pretenden es garantizar una efectiva protección y defensa
de los derechos exclusivos que la Ley de la Propiedad Industrial
otorga a sus titulares dotando para ello de facultades a la
autoridad para prevenir y sancionar la realización de actos de
competencia desleal que afecten el ejercicio pleno de los
derechos de propiedad industrial dentro del marco de respeto de
las garantías individuales y del principio de seguridad jurídica, en
tanto que mediante la acción civil de indemnización se pretende la
defensa de derechos de carácter patrimonial personal.
Por tanto, tampoco se infringe el principio de continencia
de la causa que en concepto de la parte quejosa consiste en que
las pretensiones conexas deben debatirse en un mismo proceso
para evitar que se sigan procedimientos paralelos sobre una
misma cuestión de fondo pudiendo derivar en la emisión de
resoluciones contradictorias, toda vez que si bien este postulado
se sustenta en la necesidad procesal de resolver de manera
concentrada las acciones y pretensiones vinculadas por la misma
causa o que tengan el mismo origen, tal y como ya se ha
señalado, la naturaleza de las acciones en el procedimiento
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
53
administrativo de declaración y la civil, son diversas y no podrían
incurrir en contradicción, considerando que se trata de
pretensiones diferentes, además que la acción civil requiere la
declaratoria previa de infracción por parte del Instituto, como lo ha
reconocido la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación en la jurisprudencia antes transcrita de voz: “PROPIEDAD
INDUSTRIAL. ES NECESARIA UNA PREVIA DECLARACIÓN
POR PARTE DEL INSTITUTO MEXICANO DE LA PROPIEDAD
INDUSTRIAL, SOBRE LA EXISTENCIA DE INFRACCIONES EN
LA MATERIA PARA LA PROCEDENCIA DE LA ACCIÓN DE
INDEMNIZACIÓN POR DAÑOS Y PERJUICIOS.”
En otro contexto, el precepto que se reclama,
contrariamente a lo argumentado por la parte quejosa, no infringe
el principio de economía procesal y tampoco el principio de
justicia pronta.
En efecto, doctrinalmente el principio de economía en
términos generales implica un ahorro de trabajo, tiempo y dinero.
Tratándose del derecho administrativo, el principio de economía
se refiere a que la actuación de la Administración Pública debe
desarrollarse con ahorro de trabajo, energía y costo a fin de
obtener el mayor resultado con el mínimo esfuerzo, lo que en la
práctica implica evitar a los administrados trámites superfluos o
redundantes y que se aminore el trabajo habitualmente encargado
a los órganos o servidores públicos para alcanzar una mayor
eficiencia y eficacia en la tramitación de las resoluciones o actos
administrativos.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
54
Lo anterior, considerando que la eficacia se refiere a la
rapidez, celeridad y sencillez, mientras que la eficiencia alude a
que se cumpla con el objetivo que persigue el procedimiento de la
manera más económica siendo el principio de economía su
versión positiva.
Ahora bien, en concepto de la parte quejosa el principio de
economía procesal que va de la mano del principio de debido
proceso, debe considerarse como el establecimiento de reglas
necesarias que permita que la decisión de la controversia se
realice con el menor empleo de recursos humanos y en el menor
tiempo posible, apoyándose para ello en la jurisprudencia de la
Primera Sala de este Alto Tribunal, de voz: “PRUEBA PERICIAL
EN EL JUICIO DE AMPARO. PROCEDE LA APLICACIÓN
SUPLETORIA DEL CÓDIGO FEDERAL DE PROCEDIMIENTOS
CIVILES PARA OTORGAR A LA CONTRAPARTE DEL
OFERENTE EL DERECHO A ADICIONAR EL CUESTIONARIO
QUE ÉSTE EXHIBIÓ”, en el cual se hace referencia al principio
de economía procesal respecto de los procedimientos ágiles, que
se desenvuelvan en el menor tiempo posible y con el menor
empleo de recursos, en fiel seguimiento del derecho fundamental
a la de administración de justicia tutelada por el artículo 17
constitucional, de modo que el caso, la unión de todas las
acciones derivadas de la cuestión principal para su resolución
debe ser vista por un solo juzgador.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
55
Así, en el entendido que de acuerdo con los principios de
economía procesal y justicia pronta, que se encuentran previstos
en el segundo párrafo del artículo 17 constitucional, ha de
obtenerse el mayor resultado con el mínimo empleo de actividad
procesal, en la especie es de estimarse que el precepto que se
reclama no infringe los referidos principios, en tanto que la sola
determinación normativa relativa a que las sanciones se
impondrán además de la indemnización que corresponda por
daños y perjuicios a los afectados en los términos de la legislación
común, no implica de modo alguno que los Tribunales civiles
encargados del conocimiento de la acción correspondiente no
cumplan con los referidos principios de economía procesal y de
justicia pronta, en tanto que tales órganos también se encuentran
sujetos a dichos principios y de no cumplir con el trámite y
resolución correspondiente en concordancia con aquéllos, en todo
caso, existen las vías de responsabilidad correspondientes que
pudieran ejercerse en contra de quienes resultaren responsables.
Lo anterior es así, pues la Constitución Federal en el artículo
109, fracción III, dispone que se aplicarán sanciones
administrativas a los servidores públicos por los actos u omisiones
que afecten entre otros aspectos, la eficiencia que deben
observar en el desempeño de sus empleos, cargos o comisiones.
Asimismo, el precepto combatido tampoco infringe el
derecho de acceso a la justicia, en tanto que no está vendando
el acceso a los gobernados a los tribunales que hayan de dirimir
la controversia respectiva y, por lo contrario, les favorece en tanto
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
56
que precisamente la norma que se impugna es aquélla que otorga
la base legal para el ejercicio de la acción de indemnización por
pago de daños y perjuicios derivados de la declaratoria de
nulidad, caducidad, cancelación e infracción, siendo que el
juzgador civil no podría rehusarse a conocer de la citada acción.
Al respecto, se estima pertinente destacar que el derecho de
acceso a la justicia encuentra su fundamento en el artículo 17
constitucional, segundo párrafo, que señala lo siguiente:
“Artículo 17. (…) Toda persona tiene derecho a que se le administre justicia por tribunales que estarán expeditos para impartirla en los plazos y términos que fijen las leyes, emitiendo sus resoluciones de manera pronta, completa e imparcial. Su servicio será gratuito, quedando, en consecuencia, prohibidas las costas judiciales.”
El precepto anterior establece el derecho de acceso a la
justicia según el cual cuando alguna persona vea conculcado
alguno de sus derechos puede acudir ante los tribunales a fin de
que se le administre justicia conforme a los términos y plazos que
establezcan las leyes, la cual deberá ser pronta, completa,
imparcial y gratuita.
Por su parte, el artículo 25 de la Convención Americana de
Derechos Humanos establece:
“Artículo 25. Protección Judicial.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
57
1. Toda persona tiene derecho a un recurso sencillo y rápido o a cualquier otro recurso efectivo ante los jueces o tribunales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la Constitución, la ley o la presente Convención, aun cuando tal violación sea cometida por personas que actúen en ejercicio de sus funciones oficiales. 2. Los Estados Partes se comprometen: a) a garantizar que la autoridad competente prevista por el sistema legal del Estado decidirá sobre los derechos de toda persona que interponga tal recurso; b) a desarrollar las posibilidades de recurso judicial, y c) a garantizar el cumplimiento, por las autoridades competentes, de toda decisión en que se haya estimado procedente el recurso.” El derecho de acceso a la justicia se satisface no por el
solo hecho de que algún recurso jurisdiccional esté previsto en la
legislación del Estado, sino que ese recurso debe ser efectivo en
la medida en que el justiciable, de cumplir con los requisitos
justificados constitucionalmente, pueda obtener una resolución en
la que, mediante la aplicación de la ley al caso concreto, se
resuelva si le asiste o no la razón sobre los derechos cuya tutela
jurisdiccional ha solicitado.
Además, la impartición de justicia debe sujetarse a los
plazos y términos que fijen las leyes, es decir, la regulación de los
respectivos procedimientos jurisdiccionales debe garantizar a los
gobernados un efectivo acceso a la justicia, por lo que los
requisitos o presupuestos que condicionan la obtención de una
resolución sobre el fondo de lo pedido deben encontrarse
justificados constitucionalmente, lo que sucede, entre otros casos,
cuando tienden a generar seguridad jurídica a los gobernados que
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
58
acudan como partes a la contienda, o cuando permiten la emisión
de resoluciones prontas y expeditas, siempre y cuando no lleguen
al extremo de hacer nugatorio el derecho cuya tutela se
pretende.2
Así, las leyes procesales determinan cuál es la vía en que
debe intentarse cada acción, por lo cual, la prosecución de un
juicio en la forma establecida por aquéllas tiene el carácter de
presupuesto procesal que debe atenderse previamente a la
decisión de fondo.
En efecto, es el legislador ordinario el que debe establecer
las reglas del procedimiento dentro de las que se encuentran los
llamados presupuestos procesales, entendidos como aquellos
“…requisitos o condiciones que deben cumplirse para la iniciación
2 En este sentido se ha pronunciado el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en la
jurisprudencia P./J. 113/2001, publicada en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena
Época, tomo XIV, Septiembre de 2001, página 5, que dice: “JUSTICIA, ACCESO A LA. LA POTESTAD
QUE SE OTORGA AL LEGISLADOR EN EL ARTÍCULO 17 DE LA CONSTITUCIÓN GENERAL DE
LA REPÚBLICA, PARA FIJAR LOS PLAZOS Y TÉRMINOS CONFORME A LOS CUALES AQUÉLLA
SE ADMINISTRARÁ NO ES ILIMITADA, POR LO QUE LOS PRESUPUESTOS O REQUISITOS
LEGALES QUE SE ESTABLEZCAN PARA OBTENER ANTE UN TRIBUNAL UNA RESOLUCIÓN
SOBRE EL FONDO DE LO PEDIDO DEBEN ENCONTRAR JUSTIFICACIÓN CONSTITUCIONAL. De
la interpretación de lo dispuesto en el artículo 17, párrafo segundo, de la Constitución General de la República
se advierte que en ese numeral se garantiza a favor de los gobernados el acceso efectivo a la justicia, derecho
fundamental que consiste en la posibilidad de ser parte dentro de un proceso y a promover la actividad
jurisdiccional que, una vez cumplidos los respectivos requisitos procesales, permita obtener una decisión en la
que se resuelva sobre las pretensiones deducidas, y si bien en ese precepto se deja a la voluntad del legislador
establecer los plazos y términos conforme a los cuales se administrará la justicia, debe estimarse que en la
regulación respectiva puede limitarse esa prerrogativa fundamental, con el fin de lograr que las instancias de
justicia constituyan el mecanismo expedito, eficaz y confiable al que los gobernados acudan para dirimir
cualquiera de los conflictos que deriven de las relaciones jurídicas que entablan, siempre y cuando las
condiciones o presupuestos procesales que se establezcan encuentren sustento en los diversos principios o
derechos consagrados en la propia Constitución General de la República; por ende, para determinar si en un
caso concreto la condición o presupuesto procesal establecidos por el legislador ordinario se apegan a lo
dispuesto en la Norma Fundamental deberá tomarse en cuenta, entre otras circunstancias, la naturaleza de la
relación jurídica de la que derivan las prerrogativas cuya tutela se solicita y el contexto constitucional en el
que ésta se da.”
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
59
o el desarrollo válido de un proceso, o en su caso, para que
pueda pronunciase la resolución de fondo.”3
En relación con la obligación que con motivo de ese derecho
se impone al Estado, esta Segunda Sala de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación ha derivado cuatro principios que
contribuyen a dar efectividad a la posibilidad de que el gobernado
acuda a los tribunales solicitando que éstos impartan justicia4.
Esos principios son los siguientes:
Justicia pronta, que se traduce en la obligación de las
autoridades encargadas de su impartición, de resolver las
3 FIX-ZAMUDIO, Héctor, “PRESUPUESTOS PROCESALES” en Enciclopedia Jurídica Mexicana, Instituto
de Investigaciones Jurídicas, Segunda Edición, tomo V, Editorial Porrúa-UNAM, México, 2007, página 747.
4 Jurisprudencia 2a./J. 192/2007, visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXVI, Octubre de 2007, página 209, cuyo texto es: “ACCESO A LA IMPARTICIÓN DE JUSTICIA. EL ARTÍCULO 17 DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS ESTABLECE DIVERSOS PRINCIPIOS QUE INTEGRAN LA GARANTÍA INDIVIDUAL RELATIVA, A CUYA OBSERVANCIA ESTÁN OBLIGADAS LAS AUTORIDADES QUE REALIZAN ACTOS MATERIALMENTE JURISDICCIONALES. La garantía individual de acceso a la impartición de justicia consagra a favor de los gobernados los siguientes principios: 1. De justicia pronta, que se traduce en la obligación de las autoridades encargadas de su impartición de resolver las controversias ante ellas planteadas, dentro de los términos y plazos que para tal efecto establezcan las leyes; 2. De justicia completa, consistente en que la autoridad que conoce del asunto emita pronunciamiento respecto de todos y cada uno de los aspectos debatidos cuyo estudio sea necesario, y garantice al gobernado la obtención de una resolución en la que, mediante la aplicación de la ley al caso concreto, se resuelva si le asiste o no la razón sobre los derechos que le garanticen la tutela jurisdiccional que ha solicitado; 3. De justicia imparcial, que significa que el juzgador emita una resolución apegada a derecho, y sin favoritismo respecto de alguna de las partes o arbitrariedad en su sentido; y, 4. De justicia gratuita, que estriba en que los órganos del Estado encargados de su impartición, así como los servidores públicos a quienes se les encomienda dicha función, no cobrarán a las partes en conflicto emolumento alguno por la prestación de ese servicio público. Ahora bien, si la citada garantía constitucional está encaminada a asegurar que las autoridades encargadas de aplicarla lo hagan de manera pronta, completa, gratuita e imparcial, es claro que las autoridades que se encuentran obligadas a la observancia de la totalidad de los derechos que la integran son todas aquellas que realizan actos materialmente jurisdiccionales, es decir, las que en su ámbito de competencia tienen la atribución necesaria para dirimir un conflicto suscitado entre diversos sujetos de derecho, independientemente de que se trate de órganos judiciales, o bien, sólo materialmente jurisdiccionales.”
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
60
controversias ante ellas planteadas, dentro de los términos y
plazos que para tal efecto establezcan las leyes.
Justicia completa, el cual obliga a que la autoridad que
conoce del asunto, emita pronunciamiento respecto de todos y
cada uno de los aspectos debatidos cuyo estudio sea necesario, y
garantice al gobernado la obtención de una resolución en la que,
mediante la aplicación de la ley al caso concreto, se resuelva si le
asiste o no la razón sobre los derechos que le garanticen la tutela
jurisdiccional que ha solicitado;
Justicia imparcial, obliga a que el juzgador emita una
resolución apegada a derecho, sin favoritismo respecto de alguna
de las partes o arbitrariedad en su sentido; y
Justicia gratuita, estriba en que los órganos del Estado
encargados de su impartición, así como los servidores públicos a
quienes se les encomienda dicha función, no cobrarán a las
partes en conflicto emolumento alguno por la prestación de ese
servicio público.
Ahora bien, el artículo reclamado tan solo refiere a la
legislación común tratándose de la acción de indemnización que
corresponda por daños y perjuicios, la que deriva de una
declaratoria administrativa de nulidad, caducidad, cancelación e
infracción.
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
61
De lo anterior se desprende que la citada remisión no pugna
con los cuatro principios que contribuyen a dar efectividad a la
posibilidad de que el gobernado acuda a los Tribunales
solicitando que éstos impartan justicia5, en tanto que, como se ha
indicado, por lo contrario, permite el acceso a los Tribunales
competentes especializados en conocer la pretensión de los
gobernados a quienes les ha sido favorable la declaratoria de
nulidad, por lo que no se vulnera este principio con la norma
combatida y tampoco el derecho a acceder a un proceso sin
dilaciones indebidas a que se refieren los artículo 8º. y 10, de la
Declaración Universal de Derechos Humanos, por los motivos
antes reseñados.
5 Jurisprudencia 2a./J. 192/2007, visible en el Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XXVI, Octubre de 2007, página 209, cuyo texto es: “ACCESO A LA IMPARTICIÓN DE JUSTICIA. EL ARTÍCULO 17 DE LA CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS ESTABLECE DIVERSOS PRINCIPIOS QUE INTEGRAN LA GARANTÍA INDIVIDUAL RELATIVA, A CUYA OBSERVANCIA ESTÁN OBLIGADAS LAS AUTORIDADES QUE REALIZAN ACTOS MATERIALMENTE JURISDICCIONALES. La garantía individual de acceso a la impartición de justicia consagra a favor de los gobernados los siguientes principios: 1. De justicia pronta, que se traduce en la obligación de las autoridades encargadas de su impartición de resolver las controversias ante ellas planteadas, dentro de los términos y plazos que para tal efecto establezcan las leyes; 2. De justicia completa, consistente en que la autoridad que conoce del asunto emita pronunciamiento respecto de todos y cada uno de los aspectos debatidos cuyo estudio sea necesario, y garantice al gobernado la obtención de una resolución en la que, mediante la aplicación de la ley al caso concreto, se resuelva si le asiste o no la razón sobre los derechos que le garanticen la tutela jurisdiccional que ha solicitado; 3. De justicia imparcial, que significa que el juzgador emita una resolución apegada a derecho, y sin favoritismo respecto de alguna de las partes o arbitrariedad en su sentido; y, 4. De justicia gratuita, que estriba en que los órganos del Estado encargados de su impartición, así como los servidores públicos a quienes se les encomienda dicha función, no cobrarán a las partes en conflicto emolumento alguno por la prestación de ese servicio público. Ahora bien, si la citada garantía constitucional está encaminada a asegurar que las autoridades encargadas de aplicarla lo hagan de manera pronta, completa, gratuita e imparcial, es claro que las autoridades que se encuentran obligadas a la observancia de la totalidad de los derechos que la integran son todas aquellas que realizan actos materialmente jurisdiccionales, es decir, las que en su ámbito de competencia tienen la atribución necesaria para dirimir un conflicto suscitado entre diversos sujetos de derecho, independientemente de que se trate de órganos judiciales, o bien, sólo materialmente jurisdiccionales.”
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
62
Desde diverso aspecto, la remisión que hace el precepto
tildado de inconstitucional a la legislación común, tampoco
infringe el contenido del artículo 8º., párrafo 1, de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos, que prevé que toda
persona tiene derecho a ser oída por un Juez o Tribunal
competente, independiente e imparcial, ya que precisamente a
través de la citada remisión para el conocimiento de la acción de
daños y perjuicios que se le confiere a la legislación común del
que conocerá un Tribunal diverso al Instituto de la Propiedad
Industrial, cabe destacar que aquél constituye un órgano
independiente, imparcial y especialista en ejercicio de la acción
de indemnización por daños y perjuicios.
En otro contexto, aduce substancialmente la parte quejosa,
que respecto del derecho humano a la propiedad industrial y a la
inventiva, existen acuerdos y tratados internacionales en los que
México es parte, de los que se puede concluir que la debida
interpretación de la Ley de Propiedad Industrial permite que el
Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial sea el ente que
conozca y resuelva sobre la condena de daños y perjuicios
derivados de la infracción de los derechos de patente.
Que de lo dispuesto en los artículos 1701 y 1714 del Tratado
de Libre Comercio de América del Norte, se establece que cada
una de las partes otorgará a los nacionales de la otra parte,
protección y defensa adecuada y eficaz para los derechos de
propiedad intelectual asegurándose que esas medidas no sean un
obstáculo al comercio legítimo y que cada una de las partes,
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
63
garantizará que su derecho interno contenga el procedimiento de
defensa de los derechos de propiedad intelectual que permitan la
adopción de medidas eficaces contra cualquier acto que infrinja
los derechos de propiedad intelectual incluyendo recursos
expeditos para prevenir infracciones y recursos que desalienten
futuras infracciones y que cada una de las partes garantizará que
sus procedimientos para la defensa de los derechos de propiedad
industrial sean justos y equitativos, que no sean innecesariamente
complicados o costosos y que no impliquen plazos irrazonables o
demoras injustificadas y que el Acuerdo sobre Aspectos de los
Derechos de Propiedad Industrial relacionados con el comercio.
Al respecto cabe destacar que en la Ley de la Propiedad
Industrial se establece que el Instituto Mexicano de la Propiedad
Industrial conoce de controversias relacionadas con daños y
perjuicios cuando funja como árbitro tratándose de la violación a
los derechos de propiedad industrial cuando los involucrados lo
designen expresamente, de conformidad con las disposiciones del
Título Cuarto del Libro Quinto del Código de Comercio (artículo 6,
fracción IX, de la ley en cita) y si bien en los casos diferentes a
este último, una vez hecha la declaratoria de nulidad por virtud del
artículo 221 de la Ley de la Propiedad Industrial este precepto
remite a la legislación común para el ejercicio de la acción de
indemnización de daños y perjuicios, tal remisión no significa
contravención alguna al Tratado de Libre Comercio y tampoco al
Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad
Industrial Relacionados con el Comercio a que se refiere la parte
quejosa, en tanto que la Constitución Política de los Estados
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
64
Unidos Mexicanos no prohíbe dicha remisión y tampoco
constituye un obstáculo al comercio legítimo a que se refiere el
Acuerdo que invoca la parte quejosa y, por lo contrario, como se
ha indicado, los Tribunales civiles son los que conocen y
resuelven las controversias relacionadas con el ejercicio de las
citadas acciones sin que tal conocimiento implique la existencia
de procedimientos injustos e inequitativos, complicados o
costosos y que se resuelvan con demoras injustificadas, ya que
tal aserto carece de sustento jurídico alguno.
Finalmente, en cuanto a la argumentación de la parte
quejosa en el sentido que el artículo 221 de la Ley de la
Propiedad Industrial es contrario al derecho de restitución íntegra
del derecho humano vulnerado, porque en su concepto al excluir
del procedimiento de declaración administrativa de infracción la
reparación de los daños y perjuicios instaurando una diversa
instancia, deja de constituir un medio adecuado efectivo y rápido
para la reparación integral del derecho fundamental violado,
desconociendo que el Instituto es la autoridad administrativa
especializada para conocer de toda clase de controversias
relacionadas con los derechos de propiedad industrial; debe
decirse que, como se ha indicado, el precepto combatido al
remitir a legislación común para el conocimiento de la acción de
indemnización por daños y perjuicios, ya no estará cuestionando
sobre si los gobernados en su actuar incurrieron en alguna de las
causas de nulidad, infracción, cancelación o caducidad, en tanto
que tal aspecto es del conocimiento exclusivo del Instituto y una
vez que es determinada la infracción, es cuando los Tribunales
AMPARO EN REVISIÓN 730/2015
65
especializados en la materia conocerán de la acción de
indemnización correspondiente, mostrando el precepto combatido
cuál es el cauce legal que ha de seguirse, siendo que los
Tribunales civiles al emitir su resolución, no pueden desligarse de
lo ya resuelto por el referido Instituto, de ahí que el precepto
combatido no es violatorio del derecho a la reparación integral del
daño como incorrectamente lo asevera la parte quejosa.
En consecuencia, al resultar infundados los conceptos de
violación aducidos, procede negar a la parte quejosa el amparo y
protección de la Justicia Federal en contra del artículo 221 de la
Ley de la Protección industrial.
Por lo expuesto y fundado, se resuelve:
ÚNICO. En la materia de la revisión, la Justicia de la Unión
no ampara ni protege a **********, en contra del artículo 221 de la
Ley de Propiedad Industrial.
Notifíquese; con testimonio de esta resolución devuélvanse
los autos al lugar de su origen y, en su oportunidad, archívese el
expediente como asunto concluido.
MATC´llm.
Top Related