Desde que se creó la Comisión Nacional del Bicentenario el Ejecutivo ha buscado la
forma de eliminar de la secretaría ejecutiva a Margarita Morselli, quien tiene toda
la confianza de este Congreso.
Todo este movimiento se da por dos razones:
1° La novia de López Perito, Rocío Ortega, llama muy frecuentemente a la
Presidencia del Senado para presionar su nombramiento.
2° Lugo busca meter a la Ortega para tener el poder absoluto en la Comisión
Nacional del Bicentenario, que hoy es administrada equitativamente por los tres
poderes del Estado.
Este hombre, aun enfermo, no entiende que la participación democrática en
cuestiones de Estado. Pretende que por ser Presidente todo se realice a su
voluntad.
Olvida el Presidente que la República del Paraguay no es un Obispado para
disponer de acuerdo a su capricho y abusar de las mujeres a su antojo.
Hoy la política de la Comisión del Bicentenario se maneja en equilibrio, pues el
Ejecutivo tiene 2 votos, al igual que el Congreso, pero en caso de que Margarita
sea separada del cargo Lugo tendrá a su disposición 3 votos, y con ello el poder
absoluto.
Digo poder absoluto porque es necesario contar con tres votos para implementar
cualquier iniciativa dentro de la Comisión, cuya estructura está compuesta por los
tres poderes del Estado.
Por lo tanto, esta avanzada que realiza Rocío Ortega de la Mano de su novio López
Perito y la complicidad de Lugo atentará con todo el programa cultural de la
nación, dejando a merced de la novia del primer ministro una celebración que
debe ser nacional.
Cuidado que no nos calienten la rana, debemos mantenernos alerta sobre el caso;
de lo contrario al querer responder estaremos cocinados por Lugo
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