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XXIX Congreso Departamental de Investigación “Sociedad, desarrollo y políticas
públicas”.
“En torno al uso de consensos teóricos en el análisis de estados financieros a
través del uso de razones financieras”
Resumen:
Con este documento se pretende brindar una aproximación teórica al análisis
financiero por medio de razones, en particular fue una revisión de los principales
puntos de vista de los autores clásicos sobre el particular, con adición de algunas
generalidades de la teoría financiera tradicional.
La importancia del tema radica en que del relativo acuerdo teórico
correspondiente, se posibilita la construcción de los indicadores cuantitativos que
permiten a su vez generar la contrastación práctica de las posibles hipótesis en
torno al desarrollo de las organizaciones en lo que respecta a algunos conceptos
financieros relevantes para la evaluación del riesgo y del rendimiento asociados.
Cabe destacar que no se menoscaba la relevancia de elementos cualitativos
concomitantes al desarrollo de las organizaciones, más bien este tipo de
indicadores complementan el análisis integral de las mismas.
Presentan:
Dra. Ana María Paredes Arriaga y Dr. Luis Fernando Muñoz González
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1. Razones de liquidez. Capacidad de cobertura de las deudas de corto plazo
A continuación se destacan los elementos de consenso en torno a este importante
factor financiero de las empresas.
Al referirse a la liquidez, se llega a mencionar también el término solvencia
(Gitman, 1997; Van Horne y Wachowicz, 2002; Langdon y Bonham, 2001). Aquí
hay una relativa ambigüedad, ya que además del sentido de cobertura de deudas
a corto plazo, en su otro sentido se refiere a la capacidad de cubrir el
endeudamiento en general.
Respecto del concepto liquidez, existen dos aspectos fundamentales: a) La
rapidez de conversión al efectivo, b) sin reducir el valor del activo. (Van Horne y
Wachowicz, 2002). Una preocupación del día a día que tienen las empresas, la
constituye la capacidad que tengan para enfrentar sus obligaciones de corto plazo.
(Weston y Brigham, 1990; Moyer et al, 2000). En tal sentido, se puede decir que
este tipo de razones permite a la empresa tomar medidas para evitar problemas
en cuanto a su capacidad de cubrir las deudas de menor plazo. Recapitulando, un
activo es líquido si se puede convertir fácilmente en efectivo, sin menoscabo de su
valor. Esto es particularmente relevante, ya que uno de los aspectos clave que
debe atender el sistema financiero hoy en día es el referente a “…los
requerimientos de liquidez para garantizar la solvencia.” (Moreyra, 2012: 22).
Las cuentas involucradas en las razones de liquidez (razón circulante y prueba del
ácido) se encuentran dentro del estado de situación financiera (Haime, 1995). Este
tipo de razones le interesa especialmente a los acreedores de la empresa.
Finalmente, cabe comentar sobre la mayor fiabilidad de las cuentas circulantes
respecto de otras, aunque también sobre su mayor volatilidad (Brealey y Myers,
1996).
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Las dos razones más relevantes para evaluar la liquidez son: la razón circulante y
la prueba del ácido.
1.1. Razón circulante o de liquidez
La razón de liquidez más común es denominada por la mayoría de los autores
citados como razón circulante, aunque también algunos le nombran razón de
efectivo, o de liquidez corriente. Se le puede referir también como índice de
solvencia o razón corriente o de liquidez. (Gitman, 1997).
Más allá de otras consideraciones, se señala que este índice podría tomarse como
aceptable en un nivel de 2 (Gitman, 1997). Tan malo es quedarse corto de
liquidez, como excederse (Amat, 1997). Cabe hacer hincapié en la ayuda de las
comparaciones dentro de la industria (Van Horne y Wachowicz, 2002). En este
sentido, Jorge Cuenca Ham señala que:
“…un índice de 2 a 1 refleja una situación financiera sana. Una calificación
excepcionalmente baja señala que la compañía se encontrará con dificultades
para pagar su pasivo a corto plazo; mientras que una muy elevada sugiere que los
fondos no están empleándose bien dentro de la organización y que por lo tanto, se
cuenta con dinero ocioso” (Cuenca, 2012: 11).
Por su grado de generalización de los activos circulantes, en ocasiones se señala
que el índice es relativamente burdo en la información que arroja (Van Horne y
Wachowicz, 2002; Haime, 1995). Entre tanto, debe resaltarse la necesidad de
complementar esta razón con otros indicadores sobre rotación de algunas
cuentas. (Mondino y Pendás, 1994).
Esta razón establece un vínculo entre los vencimientos de los derechos y de las
obligaciones a corto plazo, con lo cual se constituye una cobertura. (Langdon y
Bonham, 2001). Igualmente importante es el análisis comparativo. (Weston y
Brigham, 1990; Brealey y Myers, 1996).
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El siguiente cuadro tiene como finalidad resaltar la fórmula de cálculo, la unidad de
medida, el estándar propuesto y la interpretación de la razón circulante.
Cuadro 1. Razón circulante
Nombre Fórmula Unidad de
medida
Estándar
propuesto
Explicación
Razón
circulante o
liquidez
corriente
Activo circulante /
pasivo de corto
plazo
Veces Igual a 2 / 1 Número de veces
que se puede
cubrir el pasivo
de corto plazo
con el activo
circulante
Fuente: Elaboración propia.
Si bien la razón circulante es un indicador muy usual en el aspecto de liquidez de
las empresas, a menudo la prueba del ácido es una razón más concluyente de
dicho factor en las empresas.
1.2. Razón de prueba del ácido o severa
Los términos más comunes para esta razón son los de prueba del ácido o prueba
rápida, o simplemente razón ácida. En ella, el principal elemento diferenciador
respecto de la razón anterior, es el hecho de que aquí se le restan los inventarios
al activo circulante, para hacerla una prueba más estricta de la liquidez
empresarial. Al respecto, dos consideraciones que hacen que el inventario sea el
activo circulante menos líquido se refieren a su poco valor comercial por su uso
específico o por su carácter de producción en proceso, así como por requerirse de
su venta antes del cobro (Gitman, 1997). Esto da cuenta del por qué se le llega a
considerar una razón más estricta de la prueba de liquidez empresarial.
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En relación a algún estándar, se señala que éste pudiera ser de 1, aunque
manteniendo las debidas precauciones. En ocasiones a este índice también se le
denomina de tesorería, precisamente por considerar a dicho subconjunto del
activo circulante (Amat, 1997).
Si bien la liquidez de una empresa reduce el riesgo de que ésta se declare
insolvente, también se produce un efecto negativo sobre su rentabilidad (Gitman,
1997). Ello se describe desde tiempos remotos, como por ejemplo lo señala la
parábola de los talentos en el libro de Mateo, capítulo 25, versículos 14 a 30
(Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy, 2005).
La razón de prueba del ácido se considera como una medida menos burda de la
liquidez de una empresa, en comparación con la razón circulante, por el hecho de
descontar en su cobertura, al inventario, que es el activo circulante menos líquido
(Van Horne y Wachowicz, 2002; Moyer et al, 2000). Por ello, en esta razón se
toma en cuenta el diferencial de velocidades mencionado, sobre los diferentes
rubros circulantes del balance (Moyer et al, 2000). Existe consenso sobre la
dificultad de volver efectivo los inventarios (Weston, 1990; Moyer et al, 2000;
Langdon y Bonham, 2001; Haime, 1995; Brealey y Myers, 1996; Mondino y
Pendás, 1994).
Si bien es cierto que existe unanimidad sobre la superioridad de esta razón sobre
la general de liquidez expuesta previamente, en el análisis es importante incluir
ambas, para conocer el efecto que los inventarios ejercen en las mismas. Además,
en los casos en los que los inventarios no son cuantitativamente relevantes,
resulta indistinto seleccionar cualquiera de las dos.
El siguiente cuadro tiene como finalidad resaltar la fórmula de cálculo, la unidad de
medida, el estándar propuesto y la interpretación de la razón de prueba rápida.
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Cuadro 2. Razón de prueba rápida.
Nombre Fórmula Unidad de
medida
Estándar
propuesto
Explicación
Razón
prueba
rápida
liquidez
ácida
de
o
(Activo circulante –
inventarios) /
pasivo de corto
plazo
Veces Igual a 1 / 1 Número de veces
que se puede
cubrir el pasivo
de corto plazo
con el activo
circulante,
descontado el
inventario
Fuente: Elaboración propia.
Una vez señalados los principales aspectos relacionados con la liquidez, a
continuación se buscaron los elementos conceptuales más destacados, que se
relacionan con la medición y evaluación de la actividad, productividad o eficiencia
operacional de las empresas.
2. Razones de productividad, eficiencia operacional o actividad. La manera
de generar rotación en los activos
Dentro de la segunda familia de razones, lo que se busca es determinar la
productividad de los diversos activos (y en algunos casos pasivos, como es el
caso de las cuentas por pagar), situación que complementa en gran medida a lo
arrojado en el análisis de liquidez.
Es decir, retomando la parábola de los talentos, con este tipo de ratios se puede
concluir sobre el grado de eficiencia en el uso de los recursos, que en este caso
serán los activos sujetos a evaluación. Son razones de productividad, porque
miden la relación output (principalmente representado por las ventas) input, que
son precisamente los diversos activos. Al respecto, parece haber una coincidencia
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en general por parte de los teóricos analizados en torno al significado de este tipo
de razones y sus componentes (Gitman, 1997; Weston y Brigham, 1990; Amat,
1997; Moyer et al, 2000; Langdon y Bonham, 2001; Haime, 1995).
Es necesario enfatizar la relación de variables flujo (dinámicas, de resultados) y
variables stock o saldo (estáticas, de balance), que es propia de los ratios de
productividad (Gitman, 1997; Mondino y Pendás, 1994). Sin embargo, ante la
dificultad que implica poner en la misma fórmula cifras dinámicas tomadas del
estado de resultados (las propias ventas), con cifras estáticas (los activos en
cuestión), parece lógica la solución de Gitman (1997), en el sentido de asumir que
los saldos de fin de periodo son una buena aproximación a los saldos promedio.
Otra consideración a observar es la correspondiente al hecho de que solo en el
caso de la rotación de activos totales se da un indicador de referencia o norma,
dependiendo en general la de otros ratios del giro en particular. Por ello, el análisis
en esta categoría se enfocará a dicho ratio que, además, sintetiza la productividad
general de la empresa.
En relación a esta característica financiera de las empresas, se consideró
suficiente hablar de la razón de rotación de activos totales, dado que en la misma
se sintetiza la capacidad de convertir la inversión en activos en pesos de ventas.
2.1.Rotación de activos totales
Definitivamente esta razón puede servir como resumen de la productividad o
eficiencia operacional (Gitman, 1997; Van Horne y Wachowicz, 2002), ya que sirve
para evaluar la eficiencia en el uso de los activos de la empresa (Van Horne y
Wachowicz, 2002; Weston y Brigham, 1990; Moyer et al, 2000; Langdon y
Bonham, 2001; Haime, 1995).
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Una alta rotación de activos puede reflejar exceso en la utilización de la capacidad
instalada. Cabe señalar que este índice únicamente señala qué tan productiva es
la empresa, no se refiere a la rentabilidad de la misma, pese a que la primera es
condición necesaria para la segunda, no es suficiente. La diferencia radica en que
para la productividad se están comparando las ventas, en tanto que para la
rentabilidad se requiere usar a las utilidades.
El siguiente cuadro tiene como finalidad resaltar la fórmula de cálculo, la unidad de
medida, el estándar propuesto y la interpretación de la razón de rotación de
activos totales.
Cuadro 3. Razón de rotación de activos totales.
Nombre Fórmula Unidad de
medida
Estándar
propuesto
Explicación
Rotación
activos
totales
de Ventas
totales
/ activos Veces Mayor de 1 /
1
Número de veces
que las ventas
superan a los
activos
Fuente: Elaboración propia.
En ese sentido, esta clase de indicadores son adecuados para evaluar aspectos
más allá de la rentabilidad (generación de utilidades), principalmente en
organizaciones públicas o de orientación eminentemente social, ya que requieren
de cubrir criterios de eficiencia, eficacia y economía, dado el carácter escaso y
público de los recursos manejados (Quezada, 2010). La relevancia de dichos
conceptos se destaca aún más al considerar que dentro de las funciones del
director de administración y finanzas se encuentra “…el control y buen uso de los
activos e inversión…” (González, 2009: 45).
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El siguiente aspecto a evaluar se refirió al uso de dinero de terceros para financiar
a la empresa, denominado endeudamiento, apalancamiento o estructura
financiera.
3. Razones de endeudamiento, estructura financiera o apalancamiento.
Impacto a largo plazo en el financiamiento externo de los activos
En relación a esta característica a estudiar, se tocaron dos aspectos del
endeudamiento: el nivel del mismo, medido por la razón de deuda o de
endeudamiento; y la capacidad de pago, evaluada por la razón de cobertura de
intereses.
Respecto de esta categoría de razones, destaca el carácter riesgoso del uso de la
deuda, por cuanto son obligaciones de pago al vencimiento, con posibilidad de
ejercer acción legal para su recuperación (Gitman, 1997). En este orden de ideas
se puede señalar la relación que existe entre el riesgo y el rendimiento de la
empresa, ante el apalancamiento ejercido, es decir, en sentido directo, a mayor
riesgo, mayor rendimiento esperado (Gitman, 1997). Existe un aspecto interesante
del equilibrio buscado entre el riesgo y el rendimiento que conlleva el uso del
apalancamiento (Weston y Brigham, 1990).
Dentro de la clasificación en cuestión, es interesante la sub división en medidas: a)
de nivel de deuda y b) de capacidad de pago de las mismas (Gitman, 1997).
También se puede hablar de este tipo de razones como una extensión de la
liquidez de la empresa en el largo plazo (Van Horne y Wachowicz, 2002). Con
estas razones se mide la participación de cada uno de los aportadores de fondos,
dentro de la estructura financiera de la empresa (Weston y Brigham, 1990).
Esta clase de razones relaciona el uso de costos fijos y su impacto en el
apalancamiento financiero de la empresa (Moyer et al, 2000). Ello destaca el papel
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de un alto nivel de apalancamiento en la potenciación de generación de utilidades
de la empresa (Langdon y Bonham, 2001).
Para las razones de la subdivisión de nivel de endeudamiento no parece haber
consenso o siquiera algún estándar. Una aproximación podría ser si la razón de
pasivos a activos es menor al 10% su apalancamiento se considera como bajo, si
ésta es similar a un tercio, es considerado como medio y alto es cuando la razón
se aproxima a dos tercios. Otra escala señala que valores altos son superiores al
60% y bajos inferiores al 40% (Amat, 1997). Un indicador más general lleva a
considerar un 50% como la división entre una palanca financiera alta (riesgosa) o
baja (conservadora).
Por otra parte, se enfatiza la vulnerabilidad de una empresa con alto
apalancamiento, a los efectos de las tasas de interés, en tanto que un bajo nivel
de apalancamiento no siempre puede ser considerado como adecuado (Langdon y
Bonham, 2001). Ello se debe al desaprovechamiento del uso de recursos ajenos
para potenciar la rentabilidad empresarial.
Como ya se señaló, en ocasiones se aplica el término solvencia a lo que muchos
autores llaman la capacidad de pago de las deudas (Haime, 1995; Brealey y
Myers, 1996). Cabe señalar que una diferencia relevante entre estas razones y las
de liquidez, es que en tanto éstas ayudan a “…determinar si el problema (es) a
corto plazo (escasez temporal de efectivo)…”, las primeras (de capacidad de pago
de las deudas) permiten establecer si es a “…largo plazo (demasiada deuda)…”
(Ramírez y Rendón, 2011: 20).
3.1. Razón de endeudamiento
Esta razón mide la proporción de activos que está financiada por acreedores. Ésta
puede tender a ser alta debido a que los propietarios de la empresa buscan más
recursos sin perder el control de la misma. La tendencia opuesta es la que piden
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los acreedores, seguramente para no elevar la probabilidad de impago de las
obligaciones correspondientes (Gitman, 1997; Weston y Brigham, 1990). Un
aspecto relevante que puede ayudar en ésta disyuntiva es la emisión de acciones
preferentes, como fuente de crédito no comercial (Bello, 2009).
Una cobertura nula de intereses puede llegar a hacer inviable siquiera un mínimo
nivel de endeudamiento, al no poder servir dicha deuda en modo alguno. Es decir,
si no hay capacidad mínima de pago de los intereses, no es viable ni siquiera un
nivel de endeudamiento conservador o muy bajo.
El siguiente cuadro tiene como finalidad resaltar la fórmula de cálculo, la unidad de
medida, el indicador propuesto y la interpretación de la razón de endeudamiento.
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Cuadro 4. Razón de endeudamiento.
Nombre Fórmula Unidad de
medida
Indicador Explicación
Razón de (Pasivo total / Porcentaje Mayor de Porcentaje de
endeudamiento activo total) x 100 50%: los activos
o de deuda Estructura financiado por
(pasivo total) financiera los pasivos o
liberal o alta deuda
palanca
financiera
Menor de
50%:
Estructura
financiera
conservadora
o baja
palanca
financiera
Fuente: Elaboración propia.
De acuerdo a José Antonio Quezada:
“Los administradores tienen un grado de responsabilidad formal muy alto, que se
intensifica en época de crisis, por ejemplo en …contraer cifras de endeudamiento
excesivas o en … no declarar , aunque deban, el concurso de la sociedad o la
responsabilidad de quienes solicitan la refinanciación de las deudas para ocultar
un estado de insolvencia o iliquidez …” (Quezada, 2009: 23).
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En torno al endeudamiento, Omar Antonio Minera Sanders señala que:
“La estructura de capital …” (deuda a largo plazo más capital)… en las empresas
varia de industria en industria y de empresa en empresa. Sin embargo, lo que
siempre debe buscarse es que tenga el menor costo posible para hacer rentable a
la organización sin perder flexibilidad y capacidad de decisión”. (Minera, 2009: 18).
3.2. Razón de cobertura de intereses
Respecto a la segunda subdivisión de las razones de deuda, de la que se hacía
mención en párrafos arriba, que se refiere a las razones de capacidad de pago de
las deudas, parece haber consenso en su determinación, como la relación entre
las utilidades antes de intereses e impuestos y los costos financieros (Haime,
1995). Contrariamente a lo establecido en la subdivisión de razones que indican el
nivel de deuda, en la cobertura de intereses, mientras más alto sea el cociente,
habrá menos riesgo de no cubrir las deudas (Gitman, 1997).
En esta razón se aprecia un estándar máximo y otro mínimo de acuerdo a Gitman
(1997) (5 y 3, respectivamente), aunque también se señala un mínimo de 1 en
otras fuentes (Moyer et al, 2000). Si se está por encima del máximo, la empresa
está desaprovechando oportunidades de endeudamiento por tener una capacidad
de pago excesiva, en el caso de estar por debajo del mínimo, la empresa está en
riesgo de no cubrir la carga financiera de la deuda (Gitman, 1997). Esta razón es
utilizada por calificadoras de talla internacional (Van Horne y Wachowicz, 2002).
En esta razón se usan las utilidades antes de impuestos, en vez de las netas,
debido a que estas últimas implicarían que ya han sido cubiertos los intereses
(Weston y Brigham, 1990), procediendo los datos del estado de resultados (Moyer
et al, 2000). Esta razón puede ser más relevante que las de nivel, por cuanto
expresa la capacidad de pago de la empresa de sus obligaciones a largo plazo
(Langdon y Bonham, 2001; Haime, 1995).
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El siguiente cuadro tiene como finalidad resaltar la fórmula de cálculo, la unidad de
medida, el estándar propuesto y la interpretación de la razón de cobertura de
intereses.
Cuadro 5. Razón de cobertura de intereses.
Nombre Fórmula Unidad de
medida
Estándar
propuesto
Explicación
Razón de
cobertura de
intereses
Utilidades de
operación o EBIT /
intereses o gastos
financieros
Veces Mayor a 3 Número de veces
que se pueden
cubrir los gastos
financieros o
intereses con las
utilidades
operativas o
EBIT
Fuente: Elaboración propia.
Como sección final de las categorías de razones financieras, se analizó la
rentabilidad, que se refiere a la capacidad de generar utilidades por parte de la
empresa.
4. Razones de rentabilidad, rendimiento o retorno. La capacidad de generar
utilidades
Existe un acuerdo relativo en que la rentabilidad puede ser comparada con varios
ítems financieros (Gitman, 1997; Van Horne y Wachowicz, 2002). Es decir, este
tipo de razones deben ser relativizadas a través de las diversas comparaciones
(Van Horne y Wachowicz, 2002).
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Retomando la diferencia con las razones de productividad, particularmente con la
rotación del activo total, destaca el papel concluyente de las razones de
rentabilidad (Weston y Brigham, 1990), versus el papel intermedio (sólo referido a
eficiencia), de las primeras.
En el cálculo de la rentabilidad se puede usar la utilidad neta o alguna variante
como la operativa o la bruta (Langdon y Bonham, 2001). Dado que estos índices
evalúan la capacidad de generar utilidades, cabe destacar el papel preponderante
que revisten dentro del análisis financiero (Haime, 1995). También es de resaltar
la preponderancia del rendimiento sobre el capital, respecto de otras medidas de
rentabilidad (Brealey y Myers, 1996), ya que éste se refiere a la ganancia sobre la
inversión de los accionistas. En ese sentido, para empresas en general, dos
instrumentos de medición del desempeño, se refieren al rendimiento del capital
(ROE o Return on equity) y a las utilidades operativas (González, Pérez y Varela,
2012).
Como primer elemento a analizar se vieron dos márgenes de utilidad, el de
operación o EBIT y el neto, mismos que se miden en función al nivel de ventas
registrado por la empresa.
4.1. Margen de utilidad de operación
Esta razón hace énfasis en la aportación del área comercial y de la administrativa,
al logro de la rentabilidad de la empresa (Gitman, 1997; Langdon y Bonham,
2001). Cabe destacar la importancia en el dinamismo de las utilidades para poder
tener una supervivencia financiera a largo plazo (Langdon y Bonham, 2001).
Esta razón es más comparable entre empresas que la que contempla a la utilidad
neta (Moyer et al, 2000), por cuanto ésta involucra gastos financieros y la primera
no.
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El siguiente cuadro tiene como finalidad resaltar la fórmula de cálculo, la unidad de
medida y la interpretación del margen de utilidad en operación.
Cuadro 6. Margen de utilidad en operación.
Nombre Fórmula Unidad de
medida
Estándar
propuesto
Explicación
Margen de
utilidad en
operación
(Utilidades de
operación o EBIT /
ventas) x 100
Porcentaje Sin estándar Porcentaje de las
ventas que
representan las
utilidades de
operación o EBIT
Fuente: Elaboración propia.
En ese orden de ideas, Mario A. González señala que el análisis de la rentabilidad
se profundiza yendo más allá del meramente marginal, al incorporar la medición
EBITDA (González, 2012).
4.2. Margen neto de utilidad
En referencia a esta razón, considera la deducción de los costos financieros
inherentes a la empresa. No cuenta con un estándar homogéneo, sino que su
nivel dependerá del tipo de industria de que se trate (Gitman, 1997; Van Horne y
Wachowicz, 2002; Weston y Brigham, 1990; Haime, 1995). Parece haber un
consenso en el sentido de que este ratio mide la eficacia total de la empresa para
la consecución de su objetivo primordial (Brealey y Myers, 1996; Mondino y
Pendás, 1994). Ella es heterogénea a nivel de diferentes giros, toda vez que los
márgenes de rentabilidad varían dependiendo de los bienes y servicios ofrecidos
por cada actividad en particular.
El siguiente cuadro tiene como finalidad resaltar la fórmula de cálculo, la unidad de
medida y la interpretación del margen de utilidad neta.
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Cuadro 7. Margen de utilidad neta.
Nombre Fórmula Unidad de
medida
Estándar
propuesto
Explicación
Margen de
utilidad neta
(Utilidades netas /
ventas) x 100
Porcentaje Sin estándar Porcentaje de las
ventas que
representan las
utilidades netas
Fuente: Elaboración propia.
Una vez analizadas las principales características conceptuales de los márgenes
de rentabilidad, a continuación se vieron los elementos relacionados con la
rentabilidad de la inversión total y de los accionistas.
4.3. Rendimiento de activos totales
Si la rotación de los activos totales es el resumen de la productividad de los
activos, esta razón evalúa la rentabilidad de los mismos. En muchas ocasiones se
le conoce como ROI, por sus siglas en inglés (return on investment) (Gitman,
1997; Van Horne y Wachowicz, 2002; Moyer et al, 2000; Langdon y Bonham,
2001). Aquí se evalúa la rentabilidad de los activos, independientemente de cómo
fueron éstos financiados. (Haime, 1995). Ésta razón es considerada una variable
de base teórica para medir el desempeño financiero de las empresas (Bustani y
Morales, 2010). También resulta interesante ver que para Héctor Meza, éste
indicador es clave para “…la continuidad de las organizaciones, sobre todo en
éstos momentos, en los que debemos ser más precavidos al invertir…” y lo define”
como el período de tiempo en que se recupera la inversión”. (Meza, 2009: 54).
El siguiente cuadro tiene como finalidad resaltar la fórmula de cálculo, la unidad de
medida y la interpretación del rendimiento de activos totales.
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Cuadro 8. Rendimiento de activos totales.
Nombre Fórmula Unidad de
medida
Estándar
propuesto
Explicación
Rendimiento
de activos
totales o
rentabilidad
del activo
(Utilidades netas /
activos totales) x
100
Porcentaje Sin estándar Porcentaje de los
activos que
representan las
utilidades netas
Fuente: Elaboración propia.
4.4. Rendimiento sobre el capital
Esta razón es la que presumiblemente les sea de mayor interés a los propietarios
de la empresa, ya que les permite evaluar y comparar el rendimiento que han
obtenido por su patrimonio (Gitman, 1997), como ya se señaló previamente. Cabe
destacar el importante efecto de apalancamiento que sobre la empresa ejerce el
uso de las deudas, lo cual se ve reflejado directamente en el resultado de la
misma. (Moyer et al, 2000). Es decir, con el apoyo de los recursos obtenidos
mediante deudas, se puede aumentar el nivel de ingresos y, dado un costo
financiero fijo, aumentar las utilidades resultantes.
Esta razón es un indicador clave del desempeño financiero de una empresa, así
como del quehacer del administrador financiero (Langdon y Bonham, 2001),
pudiendo variar de industria a industria.
El siguiente cuadro tiene como finalidad resaltar la fórmula de cálculo, la unidad de
medida y la interpretación del rendimiento sobre el capital.
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Cuadro 9. Rendimiento sobre el capital.
Nombre Fórmula Unidad de
medida
Estándar
propuesto
Explicación
Rendimiento
sobre el
capital o
rentabilidad
del
patrimonio
(Utilidades netas /
capital contable) x
100
Porcentaje Sin estándar Porcentaje del
capital contable
que representan
las utilidades
netas
Fuente: Elaboración propia.
Cabe destacar que tanto el rendimiento sobre la inversión o sobre los activos,
como el rendimiento sobre el capital, son variables clave que se incorporan en
modelos de determinación del desempeño empresarial (Bustani y Morales, 2011).
Una vez revisados los principales aspectos relacionados con las cuatro categorías
de ratios o razones financieras, se reiteró su utilidad para evaluar lo concerniente
a la desigualdad de medias entre los índices de los diferentes sectores, como en
lo que corresponde a la comparación con determinados parámetros cuantitativos.
Se concluyó con los aspectos por los cuales se consideran las razones arriba
descritas como las suficientes y necesarias para este estudio, como a
continuación se detalla:
Respecto de los ratios de liquidez, tanto la corriente como la ácida son las más
comúnmente usadas, son de carácter geométrico (relativizadas, al estar en
veces), además de que el uso conjunto de ambas posibilita evaluar de una manera
más integral la capacidad de pago de los pasivos de corto plazo. A diferencia de
ellas, existen ratios como el capital neto de trabajo, que se expresa en unidades
monetarias, por lo que resulta limitado su uso, toda vez que requiere de actualizar
cifras e impide su comparación relativa con dos o más empresas.
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En relación con las razones de actividad, pareció plausible medir en forma
sintética la productividad de las empresas mediante el uso de su rotación de
activos totales; es decir, en ella se resumen todos los otros ratios de esta
naturaleza. Por ejemplo, dicha razón incorpora aspectos del activo de corto plazo,
como el ciclo de conversión de efectivo, del mismo modo, otros relacionados con
el largo plazo, como la rotación de activos fijos. De igual manera, la facilidad de
acceso a niveles agregados de activos hace más atractivo el uso de este ratio.
Por lo que toca a las razones de apalancamiento, pareció lógico calcular una para
el nivel de endeudamiento de la empresa, y otra para evaluar la capacidad de
servicio de dicha deuda. Pese a que existen muchas otras razones de esta
naturaleza, no pareció que éstas generaran información adicional relevante como
para considerar de utilidad en el presente estudio.
En lo que respecta a los índices de rentabilidad, se determinaron dos márgenes, lo
cual parece suficiente para evaluar las ventas en este aspecto. Así mismo, se
determinaron dos índices muy relevantes, a saber, la rentabilidad de los activos,
para medir la capacidad de obtención de utilidades de la empresa como un todo,
así como la rentabilidad del capital, mismo que posibilita la comparación con
inversiones alternativas. Por lo demás, en este ámbito de análisis pareció más que
suficiente la inclusión de este conjunto de cuatro indicadores.
No hay preeminencia de algunos de los tipos de ratios, como se señala en la
consideración de elementos indispensables para la nueva función del director
financiero “…Control interno para asegurar la integridad financiera y mejorar la
rentabilidad; y enfoque hacia la productividad, la optimización de costos y gastos,
y el retorno de la inversión.” (Reyes, (2009: 61).
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Fuentes de consulta
Bibliografía
Amat Salas, Oriol. (1997). "Análisis Económico Financiero”. Décimo Sexta edición.
España. Ediciones Gestión 2000, S.A.
Brealey, Richard A. y Myers, Stewart C. (1996). "Principios de Finanzas
Corporativas". Cuarta edición. España, Ed. Mc Graw-Hill/Interamericana de
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