UNA NUEVA PERSPECTIVA
En relación a la lectura sugerida, y el tema del conflicto de la franja de gaza y en especial
palestina, podemos evidenciar el despliegue que hacen los medios de comunicación sobre
cada incidente que sucede día a día en este país.
Vemos como las redes sociales con su periodismo ciudadano, destaca la participación de
varios escritores muy buenos que se dedican a entregar sus opiniones y dejar clara su
postura al respecto. Con una perspectiva de imparcialidad y objetividad, dado a que
participan activamente de la noticia y esto les da la seguridad de poder informar con criterio
de causa.
No es simple corresponsalía editada como suele suceder con el abordaje de la noticia
tradicional, es la noticia en su esencia, con contexto real y sin matices adicionales, lo cual
muchas veces puede parecer crudo ante los ojos de los espectadores, pero que en sí es un
hecho que debe comunicarse tal cual sucede para no entrar en especulaciones.
Más cruda aún, es la misma realidad que se vive al interior de este conflicto, y a lo que
están expuestos los corresponsales de guerra que deben inmiscuirse en él, para poder
transmitir el horror que se vive minuto a minuto, exponiendo su integridad y hasta sus
propias vidas.
La particular postura de los informadores, desde los diversos puntos del conflicto y
utilizando todos los medios de comunicación para transmitir los acontecimientos, traspasa
las fronteras y llega hasta los rincones ms apartados del mundo, llevando la noticia en
tiempos reales y dándole oportunidad a las personas de todo el mundo, de que participen
con sus opiniones y puntos de vista.
Cabe destacar a la escritora de twiteer, Elizabeth Tsurkov, la cual a través de una ong ayuda
a los refugiados en Israel y defiende sus derechos, pero al mismo tiempo es imparcial al
momento de opinar contra los ataques terroristas y las manifestantes que se realizan en
contra del gobierno de Israel.
Por otra parte, el lado humano de la información en medio del conflicto, le corresponde a
un ciudadano de Gaza, quien sin dejarse llevar por los motivos que originan esta guerra,
intenta promover y defender la paz a toda costa, y se dedica a informar sobre el número de
víctimas sin profundizar mucho en la manera como estos han sido heridos, muertos o
masacrados, dándole así una parte de humanidad a la noticia pero informando verazmente
los puntos, horas y fechas en que sucedieron.
Es desgarrador ver como en esta guerra sin cuartel, los niños y las madres son los que más
maltrato sufren a manos de los terroristas, los cuales demuestran una absoluta inhumanidad
que los lleva a cometer tales actos despiadados sin remordimiento alguno y sin temor a las
consecuencias.
La postura del doctor palestino conocido como Dabour es un poco más gráfica dada su
profesión, enfocándose en los heridos, las clínicas, centros de atención a los desaparecidos,
así como todas las construcciones destruidas, lo cual conlleva a incrementar la cifra de
civiles muertos en el conflicto, del orden del 70% según informe de la oficina de las
naciones unidas para la coordinación de asuntos humanitarios.
El auge de estos informadores ciudadanos que en varios idiomas, de diversas
nacionalidades, y desde cualquier lugar del mundo, buscan aportar información que es
muchas veces restringida o tergiversada para cubrir a los implicados en acciones
reprobables, ha sido muy bien recibido y aceptado por la población en general que prefiere
conocer la verdad de primera mano y tal y como suceden los hechos.
Siempre y cuando se actúe de una manera socialmente responsable con el manejo de la
información suministrada que abarque decisión y compromiso real, el periodismo ciudadno
seguirá aportando dinamismo, credibilidad y fuerza al periodismo tradicional, el cual se
complementa muchas veces de este tipo de comunicadores que sin ser profesionales en este
campo, logran realizar verdaderas noticias que ponen a consideración del mundo entero y
que se retroalimentan de muchas formas con sus aportes, comentarios, y opiniones.
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