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DIOS SÓLO PUEDE AMAR Roger de Taizé, primera parte
CVX‐Galilea (Madrid, España), Adviento de 2010
[email protected] http://www.panyrosas.es/
No hay nada más bello, más profundo y más perfecto que Cristo; no solamente no lo hay, sino que no podrá haberlo nunca.
Roger de Taizé cita a Dostoievski
1. INTRODUCCIÓN “Dios de amor, te damos gracias por la vida entregada de nuestro hermano Roger que nos ha dejado hace ya 5 años, y que hace 70 años llegó solo a este pueblecito de Taizé. Buscaba vivir ardientemente de tu confianza y decir tu bondad infinita por cada ser humano, creyente o no: tú, el Dios vivo que no condena y que no excluye a nadie de su amor. En esa confianza tú les concediste el encontrar la fuente de la alegría y de la paz: la paz del corazón que fue lo que hizo de él un creador de paz entre los hombre. Como San Juan Bautista tan solo quería
preparar los caminos de Cristo y reunir a tu pueblo para decirle a todos que « Dios está muy cerca de vosotros. » Volverse hacia ti, Dios de amor, y estar cerca de los más pobres eran para él realidades inseparables. Aliviar los sufrimientos, acoger a los jóvenes, escuchar para así comprender todo del otro: allí se encontraba la vía que tú le abriste para que caminase tras los pasos de Cristo y para que escuchase al Espíritu Santo. Aunque pobre y vulnerable, usando sus propias expresiones, con todas sus fuerzas eligió amar. Amaba tu Iglesia que reúne a los creyentes en un única comunión más allá de todas las fronteras políticas, sociales o culturales. Esta era
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para él, el signo de esperanza de una humanidad reconciliada. Te damos gracias el poder recordarle con toda la Iglesia. Las palabras de papa Benedicto van directo al corazón cuando escribe: «Que su testimonio de un ecumenismo de la santidad nos inspire en nuestro camino hacia la unidad.» Los patriarcas de Constantinopla y de Moscú, el arzobispo de Canterbury, los responsables luteranos y reformados, como tantos otros, se unen para decirte nuestro agradecimiento. Concédenos, a todos nosotros, continuar de todo corazón lo que el hermano Roger comenzó. Como él, quisiéramos vivir de la amistad de Cristo poniendo en práctica, sin esperar, aunque sea una sola palabra del Evangelio. En la comunión de toda la Iglesia a través del mundo y con quienes nos han precedido en la fe, desde los apóstoles y María, te alabamos y te cantamos: ‘Jesucristo, luz interior, no dejes que mis tinieblas me hablen. Jesucristo, luz interior, concédeme acoger tu amor’.”1
Hermano Alois de Taizé, 14 de agosto de 2010
2. ORACIÓN DE ENTRADA El asombro de un amor2
Hermano Roger de Taizé Dios no puede sino amar. Me ama como a su único; Un amor que me excede Hasta el final de mi vida: Razón para maravillarme, Audacia para recomenzar Una y otra vez. Amanece en mí la belleza del asombro, El asombro de un amor. Cada día es un hoy de Dios. Aunque piense que no soy digno, ¿Dejaré que Dios pose en lo más hondo de mi ser El frescor de una fuente? Dios jamás me retira su presencia, Cristo me aguarda en lo más profundo de mí Aun cuando no lo sé;
1 Estas fueron las sencillas palabras pronunciadas en el 70 aniversario de la fundación de la Comunidad de Taizé, por su prior, el hermano Alois. http://www.taize.fr/es_article11172.html 2 Oración compuesta con textos de Roger de Taizé. Fuente: [email protected]
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Lo encuentro y surge lo inesperado: Llama en el corazón, relámpago en la oscuridad. ¿Presiento en mí la callada espera de su presencia? Dios me busca incansable.
3. MATERIAS PRIMAS
a. Amar
• Dios no puede sino amar. (Roger, 2005)
• Isaac de Nínive (siglo VI): Dios no puede sino dar su amor. (Roger, 2007)
• Te ama como a su único (Is 43, 4) (Roger, 2000)
• Lo inmenso de un amor que sobrepasa todo conocimiento (Ef 3, 18‐19). Ahí encontrarás, hasta el final de tu vida, razón para maravillarte y la audacia para recomenzar una y otra vez. (Roger, 2000)
• Te amo, tal vez no como querría, pero te amo…(Roger, 2000)
• No para aportar soluciones, sino ante todo para
ser una sencilla presencia de amor. (Roger, 2005)
b. Asombro de un amor
• Amanece en ti la belleza del asombro… (Roger, 2000)
• Reaparece el espíritu de infancia, el asombro de un amor. (Roger, 2000)
• Hacer nacer en cada persona el asombro de un amor procedente de Dios. (Spink, 1998)
• ¿Acogerás el nuevo día como un hoy de Dios? (Roger, 2000)
c. A las fuentes
• Aunque pienses que no eres digno de ser amado por Él, ¿dejarás que deposite en lo más profundo de tu ser el frescor de una fuente? (Roger, 2000)
• ¿Quién allanará para ti el sendero que conduce a las fuentes? Allí crecen las fuerzas vivas del riesgo. (Roger, 2000)
d. Presencia de Dios
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• Lo que fascina de Dios es su humilde presencia. (Roger, 2000)
• Conocido o no, Cristo, el Resucitado, permanece junto a cada ser humano, aun sin que éste lo sepa. (Roger, 2000)
• Ardor en el corazón del hombre, luz en la oscuridad (Jn 1, 4‐5) (Roger, 2000)
• Dios jamás retira su presencia. (Roger, 2005)
• En lo más profundo del ser, allí donde nadie se parece a nadie, Cristo te aguarda. Y surge lo inesperado. (Roger, 2000)
• Paso inesperado del amor de Dios, el Espíritu Santo atraviesa a cada ser humano como un relámpago en la noche. (Roger, 2000)
• Dondequiera que te encuentres sobre la tierra, tú que desearías percibir el misterio que encierra el corazón de tu corazón, ¿presientes en ti, aunque fugaz, la callada espera de una presencia? Esa sencilla espera, ese simple deseo de Dios, es ya el comienzo de la fe (Lc 17, 5‐6). (Roger, 2000)
• En cada uno existe una parte de soledad que ninguna intimidad humana puede colmar. Sin embargo, no estás nunca solo. (Roger, 2000)
• Cristo Jesús, no te oculto nada de mi corazón… Cuando mi ser interior siente el vacío, en mí queda la sed de tu presencia. (Roger, 2005)
e. Búsqueda
• Una sed calma mi
alma…(Roger, 2000)
• Dios nos busca incansablemente. (Roger, 2007)
• No te asombres si lo esencial permaneciera oculto a tus ojos. El ardor de tu búsqueda encuentra ahí el aliento para avanzar hacia el Resucitado. (Roger, 2000)
f. Sufrimiento del hombre
• Vivíamos en una aldea muy pobre de montaña. A los siete años con mis siete
hermanas ayudé a una vecina muy pobre a mudarse de casa: entonces descubrimos que todas sus posesiones, aparte de la cama, cabían en un carrito de bebé que empujábamos por una calle empinada. (Roger, 2005)
• ¡Dios nos quiere felices! Pero jamás nos invita a permanecer indiferentes ante el sufrimiento de los otros. (Roger, 2005)
• ¿Están tus ojos abiertos al sufrimiento? (Roger, 2000)
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• Sabía que debía vivir y rezar en el corazón de la miseria humana a fin de que naciese aquello que intuía. (Spink, 1998)
• ¿Soy capaz de mantenerme firme en medio de una de las más grandes desgracias del momento? (Spink, 1998)
• Una urgencia que viene de las profundidades de los pueblos: ir en socorro de las víctimas. (Roger, 2007)
• Que el que nada tiene, el que es víctima de la injusticia, no caiga en el olvido. (Roger, 2000)
• ¿Te preparas para caminar con un corazón reconciliado en medio de fuertes tensiones? (Roger, 2000)
• Cristo jamás contempla pasivamente el sufrimiento de nadie. Resucitado, acompaña a cada ser humano en su sufrimiento hasta el extremo de que existe un dolor de Dios, un dolor de Cristo. Y, en su nombre, nos concede compartir la angustia de los que
atraviesan por la incomprensible prueba y nos conduce a aliviar la pena de los inocentes. (Roger, 2007)
g. En medio de las pruebas
• Ante las pruebas, Dios nos sugiere ser creadores. (Roger, 2005)
• Algunas veces, en situaciones exigentes, el ser humano llega a ser plenamente él mismo. (Roger, 2005)
• ¿Atravesamos períodos desérticos? Con casi nada puede abrirse una flor de desierto, alegría inesperada. (Roger, 2005)
• Cuando la noche se hace densa, su amor es un fuego. (Roger, 2000)
• Fija tu mirada en esa luz encendida en la oscuridad hasta que la aurora rompa y comience a despuntar el día en tu corazón (2 Pe 1, 19) (Roger, 2000)
• Cuando sobrevienen las incomprensiones del exterior, no olvides que de la herida donde penetra la inquietud nacen también las fuerzas creadoras. (Roger, 2000)
• Tú, que quieres dar tu vida a causa de Cristo has de saber que, incluso en tu propia noche, avanzas con Él hacia la luz. (Roger, 2000)
• No lo olvides: Dios se ocupa de lo que te preocupa. (Roger, 2000)
h. Recuperar el gusto por la vida
• Atrévete a decir al tentador: ‘¡No tengo ni un segundo de mi vida para darte!’ (Roger, 2000)
• ¿Tendrás miedo de tu propio miedo? (Roger, 2000)
• No te detengas en las situaciones sin salida, agotarías tus energías vitales. Sin dudarlo da un paso que te lleve más lejos. (Roger, 2000)
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• ¿Por qué recrearte en lo que te hace daño de ti mismo y de los demás? (Roger, 2000)
• Si intentaras acusarte de todo lo que te habita, ¿te bastarían tus días y tus noches? (Roger, 2000)
• El odio de sí mismo está más cerca del orgullo que de la humildad.
• Renunciando a mirar atrás, camina tras las huellas de Cristo Jesús (Lc 9, 62). (Roger, 2000)
• Tu pasado está enterrado en el corazón de Cristo y de tu futuro Dios ya se ocupa. (Roger, 2000)
• Dios deja nuestro pasado en el corazón de Cristo y calma las heridas secretas de nuestro ser. (Roger, 2007)
• Tú que aspiras a seguir al Resucitado, ¿en qué signo reconoces que lo has encontrado? Cuando, avanzando hacia él, tus combates interiores no te endurecen , sino que te conducen a las fuentes mismas del amor. (Roger, 2007)
• Cristo viene a transfigurar en ti incluso lo más inquietante. (Roger, 2000)
• En nuestras propias heridas haces surgir una flor del desierto. (Roger, 2000)
• Con nuestras propias espinas enciendes un fuego. (Roger, 2000)
• El fuego de su perdón te abrasa. Ese fuego devora las raíces de la amargura. (Roger, 2000)
• El Espíritu Santo da el gusto por la vida a los que lo pierden. (Roger, 2005)
• Dios es más grande que nuestro corazón (1 Jn 3, 20). (Roger, 2000)
i. Comprensión incondicional
• ¿Existe sobre la tierra una vía por la que llegar a comprender al otro? Si esta vía existe, comienza por ti mismo y comprométete a recorrerla. (Spink, 1998)
• Procurar comprenderlo todo, más que tratar de ser comprendido. (Roger, 2007)
• Quien aspira a vivir del perdón, busca más escuchar que convencer, más comprender que imponerse. (Roger, 2005)
• Las personas mayores totalmente desinteresadas son indispensables para las nuevas generaciones. Escuchan y así descargan el peso de las inquietudes. (Roger, 2005)
j. Cambio en nuestros
corazones
• El Espíritu Santo nos remueve, nos trabaja. Reorienta nuestras profundidades. (Roger, 2005)
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• ¿Quién sabrá despertar a un niño o a un joven el misterio de la confianza en Dios? Una intuición, presentida en la juventud, aunque se olvide más tarde, puede reaparecer a lo largo de la vida. (Roger, 2005)
• Por su misteriosa presencia, el Espíritu Santo realiza un cambio en nuestros corazones, rápido para unos, imperceptible para otros. Lo que era oscuro e inquietante, se ilumina. (Roger, 2005)
• El Resucitado transfigura lo más desconcertante en ti. Alcanza lo inalcanzable. (Roger, 2007)
k. Una peregrinación de confianza por toda la tierra
• No temas, solamente da tu confianza. (Lc 8, 50) (Roger, 2005)
• Lo que Dios te pide es que te abandones a Cristo en la confianza…(Roger, 2000)
• Lo mejor de nosotros mismos se construye a través de una confianza muy sencilla…(Roger, 2005)
• La confianza en Dios, la fe, es una realidad muy sencilla, tan sencilla que todos pueden acogerla. (Roger, 2000)
• Cualesquiera que sean nuestras opacidades, la humilde, la muy humilde confianza en Dios pasa y vuelve a pasar por nosotros como una corriente de vida. (Roger, 2005)
• En un momento dado no hay otra salida que una respuesta en libertad. Esa respuesta es la de lanzarse en Dios como en un abismo. Y
sobreviene la maravilla. (Roger, 2007)
• La confianza profunda no tiene nada de ingenua, a la par con el discernimiento. El espíritu de infancia es una mirada límpida. Lejos de ser simplista, es más bien lúcida. (Roger, 2005)
• La confianza permite asumir riesgos, avanzar incluso cuando sobreviene el fracaso. (Roger, 2007)
• Una profunda confianza permite permanecer allí donde las sociedades humanas están quebrantadas o dislocadas. (Roger, 2007)
• Hoy más que nunca se eleva una llamada a abrir caminos de confianza hasta en las noches de la humanidad. ¿Presentimos esta llamada? (Roger, 2005)
• Si la confianza del corazón estuviera al comienzo de todo, tú irías lejos, muy lejos. (Spink, 1998)
• Para ser fieles, debíamos comprometernos por toda la existencia. (Roger, 2005)
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l. Vida interior
• Estabas dentro de mí, era yo quien estaba fuera… (S. Agustín) (Spink, 1998)
• El misterio que nosotros somos para nosotros mismos…(Spink, 1998)
• ¿Dejarás crecer en ti una vida interior que no conozca ni comienzo ni fin? (Roger, 2000)
• No es que yo quisiera elaborar un sistema cualquiera; esperaba más bien crear una pequeña unidad interior. (Roger, 2007)
m. Sencillez, transparencia
• Simplificar para vivir intensamente. (Roger, 2000)
• Roger se dice: “Habla con la sencillez del corazón de un niño. ¿Acaso eres hoy tan distinto de aquel niño al que tu hermana mayor enseñaba a leer y escribir? (Roger, 2005)
• Cristo Jesús, Tú me sugerías: vive lo poco que hayas comprendido del Evangelio. (Roger, 2000)
• Ser hombres de una bellísima transparencia. (Spink, 1998)
• La alegría se encuentra en la transparencia de un amor sereno. (Roger, 2000)
• Cuando las fuerzas vivas de la madurez redescubren en ti el espíritu de la infancia, tu alma alcanza la alegría serena. (Roger, 2000)
• En torno a la mesa, el espíritu de fiesta crece en la sencillez. (Roger, 2000)
n. Pobreza
• Frente a lo absoluto del Evangelio te sientes desvalido. (Roger, 2000)
• No te preocupes si tienes poco o nada para compartir. Al compartir ese poco, Dios te ofrece una inagotable sobreabundancia de corazón. (Roger, 2000)
• La abundancia de bienes, más que estimular la comunión, la frena. (Roger, 2000)
• El espíritu de pobreza no consiste en hacerse el mísero sino en disponerlo todo con imaginación. (Roger, 2007)
o. Sostener
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• El Espíritu Santo tiene fuerza para sostener el Sí de toda una vida. ¿No es Él quien ha depositado en el ser humano un deseo de eternidad y de infinito? (Roger, 2005)
• En Él, siempre de nuevo, es posible recobrar un impulso y decirse: ‘¡Ten un corazón decidido y sigue el camino!’ (Roger, 2005)
• No me apoyo solamente en mi propia fe, sino en a fe de los cristianos de todos los tiempos, hasta los de hoy en día. (Roger, 2007)
4. ORACIÓN FINAL La flor inesperada en el desierto3
Roger de Taizé ¿Están mis ojos abiertos al sufrimiento? Debo vivir y rezar en el corazón de la miseria humana Para que nazca aquello que sólo intuyo. ¿Soy capaz de mantenerme firme en medio de las más grandes desgracias del momento? ¿Estoy preparado para caminar con un corazón reconciliado en medio de fuertes tensiones? Ante las pruebas, Dios me sugiere ser creador. En mis propias heridas haces surgir una flor del desierto, Con mis propias espinas enciendes un fuego, El fuego de tu perdón me abrasa. Ese fuego devora las raíces de la amargura. Señor, eres más grande que nuestro corazón. Tú has hecho anidar en mi ser La sed de infinito y eternidad. Si atravieso el desierto Con casi nada haces abrirse una flor de desierto, Alegría inesperada. Cuando la noche se hace densa, Su amor es un fuego. Fijaré mi mirada en esa luz encendida en la oscuridad hasta que la aurora rompa y comience a despuntar el día en mi corazón. Fuentes: Roger de Taizé, 2005: ¿Presientes una felicidad? PPC, Madrid. Roger de Taizé, 2000: Las fuentes de Taizé: Dios nos quiere felices. PPC, Madrid. Kathryn Spink, 1998: Hermano Roger. La vida del fundador de Taizé. Herder, Barcelona. Roger de Taizé, 2007: Escritos esenciales: una confianza muy sencilla. Antología de Marcello Fidanzio. Lumen, Buenos Aires.
3 Oración compuesta con textos de Roger de Taizé. Fuente: [email protected]