JUVENTUDES MARIANAS VICENCIANAS SECRETARIADO NACIONAL JMV
C/ JOSÉ ABASCAL, 30 - 28003 MADRID
“La Liturgia nos impulsa a que, saciados
con los sacramentos pascuales, seamos
coherentes en nuestra vida y conserve-
mos la fe recibida en el Bautismo, reno-
vando la Alianza del Señor con nosotros
en la Eucaristía que nos nutre y urge a
la apremiante caridad de Cristo”.
10
la Comunidad de Hijas de la Caridad o Misioneros
Paúles en ciertos días y tiempos,
� preocuparse de que se tengan días de retiro y Ora-
ción,
� velar y motivar, junto a la Delegada y al Consilia-
rio, para que cada joven tenga su acompañante
espiritual.
5.- EL VOCAL DE LITURGIA DIOCESANO
Es elegido a tenor de Estatutos 20.1 por el Consejo Dioce-
sano.
Es de su competencia:
� estar informado de la vida Litúrgica de los Centros;
� aprovechar las reuniones Diocesanas (o convocarlas)
para dialogar y evaluar con los Vocales de Liturgia de
los Centros sobre sus competencias;
� informar a los Vocales de Centro de cuanto se diga en
el Consejo Diocesano sobre su competencia;
� animar a los Centros para que se realicen las celebra-
ciones del Proceso Catecumenal y de las Campañas;
� acudir, en nombre de JMV, a las oraciones y Celebra-
ciones Diocesanas;
� preparar, con otros responsables, las celebraciones de
los encuentros Diocesanos;
� trasladar al Consejo Diocesano la voz de los Vocales de
Liturgia del Centro.
3
INTRODUCCIÓN
El Vocal de «Liturgia», según la Sacrosanctum Concilium
es quien ejerce el Ministerio o servicio de la Liturgia. Es la per-
sona que invita a interiorizar y celebrar la Fe; que ayuda, me-
diante la preparación y animación, a que la Liturgia sea: signo
de unidad de la Comunidad, vínculo de Caridad y experiencia vi-
va de FE.
1) La Liturgia es uno de los tres Ministerios de la vida de la
Iglesia. Mediante el Ministerio Profético se proclama la
Palabra y se hace que el Mensaje llegue a los hombres.
2) El Ministerio de la Caridad hace visible el amor de
Cristo, en el cristiano que sirve al hermano, y al servir,
se sirve a Cristo en el pobre (Mt 25,40) y se hace pre-
sente Cristo en el que sirve (Lc 4,18).
3) Por el Ministerio Litúrgico: la Palabra escuchada se re-
posa y celebra y, también, se hace viva y eficaz.
«La Liturgia, nos dice el Concilio Vaticano II, es la cumbre
a la cual tiende la actividad de la Iglesia y, al mismo tiempo, la
fuente de donde mana toda su fuerza. Pues los trabajos Apostó-
licos se ordenan a que, una vez hechos hijos de Dios por la Fe y
el Bautismo se reúnan, alaben a Dios en medio de la Iglesia,
participen en el Sacrificio y coman la Cena del Señor».
(SC 10).
«Más, para asegurar esta plena eficacia, es necesario que
los fieles se acerquen a la Sagrada Liturgia con recta disposición
4
de ánimo, pongan su alma en consonancia con su voz y colabo-
ren con la gracia divina, para no recibirla en vano» (SC,11).
La Liturgia nos hace presente a Cristo (SC,7):
� Está presente en el Sacrificio de la Misa.
� Está presente en la Palabra.
� Y también en la Asamblea reunida (Mt 18,30).
Y la Liturgia nos alienta a orar. La Ordenación General de
la Liturgia de las Horas nos anima a orar en Iglesia (SC 6), al es-
tilo de Jesús (SC 4-5). Un creyente en Jesucristo no será cristia-
no si no ora. Además, es necesario descubrir el carácter comuni-
tario de la oración (Hch 1,14-4,32).
Si bien es necesaria la oración hecha en lo oculto y en lo
secreto de tu habitación (Mt 6,6), la oración comunitaria encie-
rra una especial dignidad conforme a lo que el mismo Jesús ma-
nifestó.
1.- EL VOCAL DE LITURGIA EN JMV
En JMV el Vocal de Liturgia ayuda a los jóvenes a:
� Ir adquiriendo la conciencia de grupo orante, a medida
que recorre su proceso catecumenal.
� Iniciarse en los Niveles y Etapas Pre-catecumenales.
� Anima a los jóvenes a dar el paso y crecer en la Primera
9
El Vocal de Liturgia es elegido a tenor de Estatutos, 20.1
por el Consejo de Centro.
A él le corresponde:
1.- Representar a los Vocales de los grupos en el Consejo
de Centro.
2.- Ser «el Vocal de Liturgia del Centro» que se responsa-
biliza y asiste a las reuniones de preparación litúrgica
de la Parroquia y, en ocasiones, de la Diócesis.
3.– Preocuparse de que todos los grupos tengan «Vocal de
Liturgia» y reunirlos periódicamente para evaluar su
competencia en los grupos.
4.– Informar puntualmente al Consejo de Centro de las
anomalías que encuentre y llevar la voz de los Vocales
al mismo.
5.- Tener en cuenta las Celebraciones del Proceso Catecu-
menal y avisar puntualmente a los Vocales correspon-
dientes.
6.- En los tiempos fuertes y en las Campañas de la Iglesia;
� preparar con los responsables, las celebraciones,
� participar en las preparaciones intergrupales de
Pastoral de la Juventud,
7. Es también competencia del Vocal de Liturgia del Cen-
tro:
� asistir a los Escrutinios y preparar la Celebración,
� animar a la Oración de las Horas en el Centro o con
8
� se estime la vida de oración,
� se realicen los Retiros en los Tiempos Litúrgicos fuer-
tes del Año,
� se hagan los escrutinios y demás tipos de oración-
revisión-evaluación,
� se celebre periódicamente el sacramento de la Recon-
ciliación y de la Eucaristía para el grupo (o Centro),
� se participe en las Campañas de Oración del Centro o
de la Diócesis,
� se comparta la Oración al estilo vicenciano,
� se prepare toda celebración con esmero,
� Asiste a las reuniones periódicas de los Vocales de Li-
turgia del Centro,
� En la Catequesis semanal ilumina el tema Catequético
aportando ideas para su Celebración según el ritmo
del Proceso Catecumenal,
� Está disponible para ser nombrado Vocal de Liturgia
del Centro.
Si el «grupo» ha recibido el Libro “Ora con los Salmos”, les
invita a la Oración en ciertos días de la semana, sobre todo en
los tiempos fuertes.
4.- El VOCAL DE LITURGIA EN EL CENTRO
El Centro, como comunidad de comunidades (grupos), tie-
ne tantos Vocales de Liturgia como grupos.
5
Etapa, buscando llegar a la experiencia de grupo, co-
munidad «orante», y a la experiencia de Fe mediante el
compartir.
� Se robustece en la Segunda Etapa: recibe el «Libro de
las Horas» y reza con él ciertos días de la semana. Bus-
ca encontrarse en el grupo para orar, al estilo de Hch
1,14 y, desde la Oración, saca fuerzas para la Evangeli-
zación y el Servicio (SC 20).
� Se consolida en la Tercera Etapa: descubre las distintas
formas, estilos y sentidos de la Oración (N. 15-18) y ad-
quiere conciencia de su deber orante como laico (SC
27).
El Vocal de Liturgia:
� es un miembro activo,
� que ha descubierto el sentido de la corresponsabilidad,
� anima siempre,
� invita siempre a terminar la Catequesis con la Oración y
a celebrar la Palabra como encuentro y escucha,
� prepara las celebraciones con fervor,
� y, desde la Vocalía, ilumina el tema de cada Cateque-
sis.
El Vocal de Liturgia sabe que el Mensaje cristiano es como
el maná; no se guarda y si no se consume, si no se profundiza en
la Oración y no se celebra en la Liturgia, se pudre.
6
2.– TAREA DEL VOCAL DE LITURGIA
Presentamos, a continuación, las tareas del Vocal de Litur-
gia:
1. Es importante recordar a los catequistas que la Cateque-
sis no puede terminar:
� sin invitar a la reflexión-oración,
� sin responder a la Palabra desde la experiencia de Dios
(conversión),
� sin celebrar, como signo de amistad, la presencia del
Señor en la Liturgia y, en ciertas ocasiones, en los Sa-
cramentos.
2. El Vocal de Liturgia ejerce este servicio Ministerial,
haciendo que el grupo o Centro:
� descubra el sentido de la oración,
� experimente el paso de “grupo de amistad” a “grupo
de Fe” (Comunidad),
� celebre la Fe con gozo,
� descubra en la experiencia de la celebración el gran
valor que ésta tiene, capaz de contrarrestar otros va-
lores,
� llegue a vivir los Sacramentos como auténtica presen-
cia del Señor en la Liturgia.
3. Es una tarea noble capaz de entusiasmar y de mantener el
entusiasmo de los jóvenes del grupo y del Centro.
7
4. Es competencia de esta Vocalía:
� fomentar el espíritu celebrativo y de oración Vicencia-
na,
� preocuparse del buen gusto por la Liturgia,
� hacer que se lleve a la oración todo compromiso cris-
tiano,
� hacer que en el grupo no se pasen por alto:
� las celebraciones catequéticas,
� ni la oración Vicenciana,
� iluminar cada catequesis desde la Liturgia,
� preparar o cooperar en la preparación de las celebra-
ciones y fomentarlas en los tiempos fuertes.
3.- EL VOCAL DE LITURGIA EN EL GRUPO
Todo grupo, tanto de Infantiles como de Juveniles o de Jó-
venes, de cualquier edad y Etapa, ha de tener un Vocal de Litur-
gia.
El Vocal de Liturgia acepta la Vocalía como signo de com-
partir, de colaboración y de corresponsabilidad.
Es el responsable con el Catequista, de que en su grupo:
� se ilumine la catequesis desde la Liturgia,
� se termine la catequesis en clima de oración y con
oración,
6
2.– TAREA DEL VOCAL DE LITURGIA
Presentamos, a continuación, las tareas del Vocal de Litur-
gia:
1. Es importante recordar a los catequistas que la Cateque-
sis no puede terminar:
� sin invitar a la reflexión-oración,
� sin responder a la Palabra desde la experiencia de Dios
(conversión),
� sin celebrar, como signo de amistad, la presencia del
Señor en la Liturgia y, en ciertas ocasiones, en los Sa-
cramentos.
2. El Vocal de Liturgia ejerce este servicio Ministerial,
haciendo que el grupo o Centro:
� descubra el sentido de la oración,
� experimente el paso de “grupo de amistad” a “grupo
de Fe” (Comunidad),
� celebre la Fe con gozo,
� descubra en la experiencia de la celebración el gran
valor que ésta tiene, capaz de contrarrestar otros va-
lores,
� llegue a vivir los Sacramentos como auténtica presen-
cia del Señor en la Liturgia.
3. Es una tarea noble capaz de entusiasmar y de mantener el
entusiasmo de los jóvenes del grupo y del Centro.
7
4. Es competencia de esta Vocalía:
� fomentar el espíritu celebrativo y de oración Vicencia-
na,
� preocuparse del buen gusto por la Liturgia,
� hacer que se lleve a la oración todo compromiso cris-
tiano,
� hacer que en el grupo no se pasen por alto:
� las celebraciones catequéticas,
� ni la oración Vicenciana,
� iluminar cada catequesis desde la Liturgia,
� preparar o cooperar en la preparación de las celebra-
ciones y fomentarlas en los tiempos fuertes.
3.- EL VOCAL DE LITURGIA EN EL GRUPO
Todo grupo, tanto de Infantiles como de Juveniles o de Jó-
venes, de cualquier edad y Etapa, ha de tener un Vocal de Litur-
gia.
El Vocal de Liturgia acepta la Vocalía como signo de com-
partir, de colaboración y de corresponsabilidad.
Es el responsable con el Catequista, de que en su grupo:
� se ilumine la catequesis desde la Liturgia,
� se termine la catequesis en clima de oración y con
oración,
8
� se estime la vida de oración,
� se realicen los Retiros en los Tiempos Litúrgicos fuer-
tes del Año,
� se hagan los escrutinios y demás tipos de oración-
revisión-evaluación,
� se celebre periódicamente el sacramento de la Recon-
ciliación y de la Eucaristía para el grupo (o Centro),
� se participe en las Campañas de Oración del Centro o
de la Diócesis,
� se comparta la Oración al estilo vicenciano,
� se prepare toda celebración con esmero,
� Asiste a las reuniones periódicas de los Vocales de Li-
turgia del Centro,
� En la Catequesis semanal ilumina el tema Catequético
aportando ideas para su Celebración según el ritmo
del Proceso Catecumenal,
� Está disponible para ser nombrado Vocal de Liturgia
del Centro.
Si el «grupo» ha recibido el Libro “Ora con los Salmos”, les
invita a la Oración en ciertos días de la semana, sobre todo en
los tiempos fuertes.
4.- El VOCAL DE LITURGIA EN EL CENTRO
El Centro, como comunidad de comunidades (grupos), tie-
ne tantos Vocales de Liturgia como grupos.
5
Etapa, buscando llegar a la experiencia de grupo, co-
munidad «orante», y a la experiencia de Fe mediante el
compartir.
� Se robustece en la Segunda Etapa: recibe el «Libro de
las Horas» y reza con él ciertos días de la semana. Bus-
ca encontrarse en el grupo para orar, al estilo de Hch
1,14 y, desde la Oración, saca fuerzas para la Evangeli-
zación y el Servicio (SC 20).
� Se consolida en la Tercera Etapa: descubre las distintas
formas, estilos y sentidos de la Oración (N. 15-18) y ad-
quiere conciencia de su deber orante como laico (SC
27).
El Vocal de Liturgia:
� es un miembro activo,
� que ha descubierto el sentido de la corresponsabilidad,
� anima siempre,
� invita siempre a terminar la Catequesis con la Oración y
a celebrar la Palabra como encuentro y escucha,
� prepara las celebraciones con fervor,
� y, desde la Vocalía, ilumina el tema de cada Cateque-
sis.
El Vocal de Liturgia sabe que el Mensaje cristiano es como
el maná; no se guarda y si no se consume, si no se profundiza en
la Oración y no se celebra en la Liturgia, se pudre.
4
de ánimo, pongan su alma en consonancia con su voz y colabo-
ren con la gracia divina, para no recibirla en vano» (SC,11).
La Liturgia nos hace presente a Cristo (SC,7):
� Está presente en el Sacrificio de la Misa.
� Está presente en la Palabra.
� Y también en la Asamblea reunida (Mt 18,30).
Y la Liturgia nos alienta a orar. La Ordenación General de
la Liturgia de las Horas nos anima a orar en Iglesia (SC 6), al es-
tilo de Jesús (SC 4-5). Un creyente en Jesucristo no será cristia-
no si no ora. Además, es necesario descubrir el carácter comuni-
tario de la oración (Hch 1,14-4,32).
Si bien es necesaria la oración hecha en lo oculto y en lo
secreto de tu habitación (Mt 6,6), la oración comunitaria encie-
rra una especial dignidad conforme a lo que el mismo Jesús ma-
nifestó.
1.- EL VOCAL DE LITURGIA EN JMV
En JMV el Vocal de Liturgia ayuda a los jóvenes a:
� Ir adquiriendo la conciencia de grupo orante, a medida
que recorre su proceso catecumenal.
� Iniciarse en los Niveles y Etapas Pre-catecumenales.
� Anima a los jóvenes a dar el paso y crecer en la Primera
9
El Vocal de Liturgia es elegido a tenor de Estatutos, 20.1
por el Consejo de Centro.
A él le corresponde:
1.- Representar a los Vocales de los grupos en el Consejo
de Centro.
2.- Ser «el Vocal de Liturgia del Centro» que se responsa-
biliza y asiste a las reuniones de preparación litúrgica
de la Parroquia y, en ocasiones, de la Diócesis.
3.– Preocuparse de que todos los grupos tengan «Vocal de
Liturgia» y reunirlos periódicamente para evaluar su
competencia en los grupos.
4.– Informar puntualmente al Consejo de Centro de las
anomalías que encuentre y llevar la voz de los Vocales
al mismo.
5.- Tener en cuenta las Celebraciones del Proceso Catecu-
menal y avisar puntualmente a los Vocales correspon-
dientes.
6.- En los tiempos fuertes y en las Campañas de la Iglesia;
� preparar con los responsables, las celebraciones,
� participar en las preparaciones intergrupales de
Pastoral de la Juventud,
7. Es también competencia del Vocal de Liturgia del Cen-
tro:
� asistir a los Escrutinios y preparar la Celebración,
� animar a la Oración de las Horas en el Centro o con
10
la Comunidad de Hijas de la Caridad o Misioneros
Paúles en ciertos días y tiempos,
� preocuparse de que se tengan días de retiro y Ora-
ción,
� velar y motivar, junto a la Delegada y al Consilia-
rio, para que cada joven tenga su acompañante
espiritual.
5.- EL VOCAL DE LITURGIA DIOCESANO
Es elegido a tenor de Estatutos 20.1 por el Consejo Dioce-
sano.
Es de su competencia:
� estar informado de la vida Litúrgica de los Centros;
� aprovechar las reuniones Diocesanas (o convocarlas)
para dialogar y evaluar con los Vocales de Liturgia de
los Centros sobre sus competencias;
� informar a los Vocales de Centro de cuanto se diga en
el Consejo Diocesano sobre su competencia;
� animar a los Centros para que se realicen las celebra-
ciones del Proceso Catecumenal y de las Campañas;
� acudir, en nombre de JMV, a las oraciones y Celebra-
ciones Diocesanas;
� preparar, con otros responsables, las celebraciones de
los encuentros Diocesanos;
� trasladar al Consejo Diocesano la voz de los Vocales de
Liturgia del Centro.
3
INTRODUCCIÓN
El Vocal de «Liturgia», según la Sacrosanctum Concilium
es quien ejerce el Ministerio o servicio de la Liturgia. Es la per-
sona que invita a interiorizar y celebrar la Fe; que ayuda, me-
diante la preparación y animación, a que la Liturgia sea: signo
de unidad de la Comunidad, vínculo de Caridad y experiencia vi-
va de FE.
1) La Liturgia es uno de los tres Ministerios de la vida de la
Iglesia. Mediante el Ministerio Profético se proclama la
Palabra y se hace que el Mensaje llegue a los hombres.
2) El Ministerio de la Caridad hace visible el amor de
Cristo, en el cristiano que sirve al hermano, y al servir,
se sirve a Cristo en el pobre (Mt 25,40) y se hace pre-
sente Cristo en el que sirve (Lc 4,18).
3) Por el Ministerio Litúrgico: la Palabra escuchada se re-
posa y celebra y, también, se hace viva y eficaz.
«La Liturgia, nos dice el Concilio Vaticano II, es la cumbre
a la cual tiende la actividad de la Iglesia y, al mismo tiempo, la
fuente de donde mana toda su fuerza. Pues los trabajos Apostó-
licos se ordenan a que, una vez hechos hijos de Dios por la Fe y
el Bautismo se reúnan, alaben a Dios en medio de la Iglesia,
participen en el Sacrificio y coman la Cena del Señor».
(SC 10).
«Más, para asegurar esta plena eficacia, es necesario que
los fieles se acerquen a la Sagrada Liturgia con recta disposición
11
EPÍLOGO
El Vocal de Liturgia tiene un papel importante en la vida
Diocesana pero, sobre todo, en la vida del Centro. Su labor ayu-
da al resto a dar vida a la fe celebrada de manera comunitaria.
Es importante motivar para que un joven sea el que sirva
al grupo, al Centro y a la Diócesis desde esta Vocalía. Les ayu-
dará a poder dar sentido a las oraciones, ayudando a preparar
diferentes celebraciones y dando un soplo de aire fresco a la vi-
da de oración: haciendo fuerza en la Palabra de Dios y ayudán-
dose con diferentes símbolos, tan propios de la forma de orar de
JMV.
El Vocal de Liturgia ayuda a acercar al joven a Dios por
medio de la oración y las celebraciones. Su labor es fundamen-
tal ya que proporciona medios para poder entrar en contacto
con la Palabra y colabora para que los jóvenes puedan ir dando
pasos en el encuentro con Cristo y desarrollar, así, de manera
más firme su crecimiento en la fe y su ser servidor en medio de
la sociedad.
JUVENTUDES MARIANAS VICENCIANAS SECRETARIADO NACIONAL JMV
C/ JOSÉ ABASCAL, 30 - 28003 MADRID
“La Liturgia nos impulsa a que, saciados
con los sacramentos pascuales, seamos
coherentes en nuestra vida y conserve-
mos la fe recibida en el Bautismo, reno-
vando la Alianza del Señor con nosotros
en la Eucaristía que nos nutre y urge a
la apremiante caridad de Cristo”.
Sacrosanctum Concilium nº 10
Top Related