INTRODUCCIÓN
Uno de los objetivos de la educación es proporcionar a los alumnos
herramientas, conocimientos, actitudes, valoraciones y disposiciones éticas que
les ayuden a participar de manera democrática y civilizada en su sociedad. “La
escuela mexicana aspira a formar mexicanos preparados para la prueba moral
de la democracia”. (Jaime Torres Bodet)
La exigencia de que las escuelas formen sujetos democráticos,
conocedores de sus derechos y respetuosos de los derechos de los demás, se
ha renovado en los últimos años. Centro mi trabajo en la investigación de cómo
se ejerce la educación democrática en las escuelas religiosas (en este caso una
escuela cristiana bautista), dado el incremento de la apertura y existencia de
escuelas de religiones protestantes en nuestro país, y principalmente por la
polémica que siempre rodea a la religión y su relación con diferentes temas.
Si bien no le podemos pedir a la escuela que asuma completamente la
tarea de formar esta base ciudadana, sí podemos decir que su responsabilidad
es ir, por lo menos, a la par de los progresos sociales, políticos y culturales que
nuestro país vive.
En el presente ensayo analizo algunos elementos del proceso de
formación de sujetos como ciudadanos en su aprendizaje escolar. Diferentes
conceptos como educación democrática, cultura política, formación cívica,
valores morales y sociales, forman parte de la caracterización que se busca
hacer sobre los modelos de enseñanza y aprendizaje de los estudiantes de la
escuela cristiana bautista Nuevas Generaciones, ubicada en Hermosillo,
Sonora.
1
La educación democrática en las escuelas
La educación democrática en las escuelas cristianas
"Hay que añadir inmediatamente que la religión puede ser un gran peligro
para la democracia y para cualquier forma de existencia civilizada. La historia
enseña y lo confirman acontecimientos recientes en Irlanda, Irán, Líbano, la
India y otros lugares, que el fanatismo religioso lleva fácilmente a la tragedia
social. El fanatismo es el polo opuesto de la democracia"(Xavier Zavala Cuadra.
Religión base de la democracia).
En el sector religioso, principalmente el protestante, muchas veces se
señala a sus seguidores como gente fanática, de mente cerrada; por ello la
importancia de conocer cómo se ejerce la educación democrática en estas
escuelas, cómo despertar el interés y el respeto hacia otras cosas que no sean
solamente Dios, y en este caso la política, los valores, la democracia y la
siempre importante educación cívica y ética.
La ética se distingue de la religión en su objetivo (la primera quiere una
vida mejor y la segunda algo mejor que la vida), y en su método (la primera se
basa en razón y la experiencia y la segunda en la revelación). Además la ética
es cosa de todos, mientras que la religión es cuestión de unos cuantos, por
muchos que sean: las personas religiosas también tienen intereses éticos,
mientras que no siempre se da lo contrario.
La ética y la religión sirven para ejemplificar ante los estudiantes la
diferencia entre aquéllos principios racionales que todos podemos comprender y
compartir (sin dejar de ser críticos) frente a doctrinas muy respetables pero cuyo
misterio indemostrable solo unos cuantos aceptan como válido.
Otra parte importante de la formación como ciudadanos de los
estudiantes, es la cultura política en la cual están siendo educados y parte del
proceso de formación cívica. Primeramente parto del concepto de cultura
política que los pioneros Gabriel Almond y Sidney Verba definen: “el término
cultura política se refiere a las orientaciones específicamente políticas con
relación al sistema político y sus distintas partes, y a actitudes relacionadas con
2
La educación democrática en las escuelas
el rol del individuo en el sistema”. (La cultura política en México: teoría y análisis
desde la sociología. Pág. 41). Y es precisamente en este rol del individuo en el
sistema donde la educación cívica es la encargada de promover la
evolución formativa de la ciudadanía a través de la enseñanza.
Sin lugar a dudas, la escuela es uno de los instrumentos más poderosos
con que cuenta la sociedad para impulsar una cultura política democrática, pues
en ella se da la socialización inicial, la convivencia, la participación y la
solidaridad.
La escuela es el escenario en el que se despierta y estimula el espíritu
crítico, en tanto búsqueda incesante de respuestas y la actitud de análisis y
reflexión sobre distintos temas; y es importante comprender que la educación es
el medio insustituible para proporcionar muchos de los elementos de juicio que
son indispensables para que la futura acción ciudadana pueda darse de manera
informada y responsable. Y es esto lo que muchos maestros aún no logran
comprender y mucho menos lo ejercen, para muchos basta con terminar una
unidad del libro por semana, sin importar realmente en cómo están preparando
democrática, cultural, cívica y políticamente a los futuros funcionarios públicos,
profesionistas, gobernantes, votantes, etc…
Quisiera plantear una metáfora para conocer la importancia de que los
alumnos de las escuelas estén educados democráticamente: ¿qué puede
convertir a un país en destacable políticamente hablando? Un gobierno
democrático, limpio, sin corrupciones. ¿Qué convierte a un maestro en uno de
los mejores? Aquel que sabe trasmitir sus conocimientos y hacerlos entender.
Entonces ¿Qué hace que la democracia pueda ser válida y correcta?, “requiere
de ciudadanos formados dentro de una cultura política promotora tanto de una
forma de pensamiento ajena a los prejuicios y abierta al análisis y la discusión,
como de un conjunto de valores que hagan posible la integración pacífica de
todos dentro de un orden social estable, pero también dinámico”. (La cultura
política en México: teoría y análisis desde la sociología. Pág. 65)
Aprovecho para dejar en claro lo que se entiende por una educación
democrática, es aquella que posibilita el que los individuos puedan pensar y
comportarse de forma autónoma, racional, creativa y solidaria; es decir, es ese
tipo de educación que ofrece a los individuos los conocimientos y las
competencias necesarias para juzgar por sí mismos, construir su proyecto de
3
La educación democrática en las escuelas
vida y gestionar su realización junto con los proyectos de los demás. Dicho
todavía de otra manera, la educación democrática es aquella que permite a los
individuos una vida que no está determinada por sus condiciones de origen, que
no está atada a los modelos de interpretación heredados y que no esté limitada
a la compañía de aquellos con quienes se nació y creció. (Educación,
ciudadanía y democracia. Ana Ayuste).
La democratización de la enseñanza ha de comportar, por tanto, estos
tres caracteres: enseñanza para todos, enseñanza estatal, y enseñanza con
métodos y contenidos democráticos.
Ahora toca el turno de analizar qué tanto participa la educación cívica
impartida en las escuelas cristianas, a lograr la construcción de esta democracia
válida y correcta. Es bien sabido que la religión cristiana no es una religión muy
fácil de profesar y seguir al pie de la letra. Está caracterizada por limitar a sus
seguidores de muchas maneras (buenas maneras a los ojos de Dios
primeramente y del mundo mismo aunque no lo ejerzamos). Los cristianos por
convicción tradicionales son personas de mucha Fe y voluntad para trabajar en
la obra de Dios (ganar almas y predicar el evangelio). Pero volviendo al tema de
la educación, es un reto para las escuelas cristianas no impartir bajo los mismo
principios religión y educación cívica, porque de esa manera trataría de inculcar
a los estudiantes principios que no proceden de las ideas, sino de las creencias,
es decir, que no tienen validez universal como la tienen los Derechos Humanos,
por ejemplo, o la igualdad, la justicia, la libertad.
La escuela cristiana está integrada por personas que pertenecen a la
congregación desde hace años atrás, personas no sólo cristianas en la
extensión de la palabra, sino que además de su preparación profesional, se han
ganado un lugar para ser educadores en una escuela donde no solo se
imparten clases sino en donde se edifica el espíritu y se adora a Dios.
El grupo de jóvenes que forman la comunidad estudiantil de la secundaria
cristiana, no dejan de ser adolescentes comunes: rebeldes, dormilones,
inmaduros, flojos, simples. Pero están diferenciados por una gran virtud: su
devoción y temor a Dios y el respeto que a su doctrina le deben. La gran
mayoría de ellos han crecido en esta Iglesia y por lo tanto han recibido en sus
casas una educación basada en la palabra de Dios y en las reglas que ello
conlleva. La cuestión interesante es saber si se sigue el mismo patrón para
4
La educación democrática en las escuelas
convertirlos no solamente en personas de bien a los ojos de Dios, sino en
buenos ciudadanos, conocedores de sus deberes y derechos, y sobre todo
participantes activos en la construcción de una cultura política mexicana que
necesita urgentemente enriquecerse y sobre todo evolucionar.
De acuerdo a Patricia Fortuny Loret de Mola, en su trabajo de “Cultura
política entre los protestantes en México”; resalta que se piensa que todos los
protestantes son escépticos en lo que a política se refiere o bien que todos
apoyaban al partido-gobierno. No es posible afirmar que la religión determina la
posición y la cultura política del converso (Los estudios recientes sobre “cultura
política” en la antropología social mexicana. Pág. 131). Uno de los objetivos de
este ensayo es comprobar si en la escuela primaria y secundaria cristiana
Nuevas Generaciones la hipótesis de Loret de Mola confirma lo que tal vez para
muchas personas ajenas a esta religión consideren como una realidad: las
escuelas religiosas protestantes no imparten clases de cívica o bien, en las
religiones protestantes el escepticismo en cuestiones políticas no ha sido
desterrado.
En materia de la educación en valores, preciso destacar que la formación
integral de los alumnos requiere la transmisión de los valores éticos y cívicos, y
de su fundamentación, en los que se basa la convivencia democrática.
La existencia humana no puede carecer nunca de sentido, y este solo se
alcanza a través de la vivencia de los valores. Por ello, hablar de educación
significa hablar necesariamente de los valores.
Para el cristianismo la educación está definida como:
- Relación que construye, que desarrolla, que hace crecer en el
reconocimiento de la persona de Cristo como la clave, el centro y el fin de
la historia humana.
- Presencia que despierta la toma de conciencia y capacita para asumir el
destino individual y colectivo. Presencia que por vivirla, descubre la
trascendencia que puede transformar las relaciones alteradas por la
injusticia y el egoísmo.
- Construcción y crecimiento en la relación alumno-maestro, propiciando
que todos los que participan en el proceso educativo se reconozcan
como hijos de Dios, descubran su auténtica dignidad (imagen y
5
La educación democrática en las escuelas
semejanza de Dios), que los hace corresponsales de la obra creadores,
en amor y libertad.
- Ayuda para encontrar sentido a la vida, aportar alguna luz para discernir
y clarificar los valores por los cuales vale la pena vivir y actuar. (Cap.4: la
educación en valores. Pág. 115).
Por ello la escuela cristiana considera primordial los valores en su
método educativo, pues son estos los que orientan los objetivos educativos,
porque son la motivación última de toda conciencia humana. Así pues
suscitar valores y crear actitudes debe ser el contenido de cualquier programa
de formación integral y no sólo de contenidos de aprendizaje.
Una de las asignaturas donde se da mayor lugar a la enseñanza de valores
es la que corresponde a educación cívica y ética, la cual no solamente puede
consistir en una mera disciplina, sino que debe motivar a los adolescentes y
jóvenes para que interioricen la necesidad de someterse a normas. Esta
disciplina deberá aceptar toda la ayuda que le puedan brindar las instituciones –
no solo educativas- pues interiorizar principios y someterse a leyes – morales o
políticas- exige la aceptación de unos valores y unos principios que difícilmente
se encuentran en los libros de texto, en los currículos escolares, en la docencia
de los profesores, por bien preparados que estén. La educación cívica debe
pretender preparar a los niños, adolescentes y jóvenes para el ejercicio pleno y
participativo de la ciudadanía.
Las instituciones educativas que pretenden contribuir eficazmente a formar a
la ciudadanía para el ejercicio de la democracia, han de dotarse de los
instrumentos pedagógicos, canales de participación y sistemas organizativos
necesarios para favorecer la práctica democrática y la adquisición de
habilidades y valores tales como la capacidad deliberativa y las competencias
para el diálogo.
Para poder conocer más sobre el cumplimiento de este punto dentro de la
escuela cristiana, se recurrió a realizar una entrevista con dos de los maestros
encargados de impartir la materia de educación cívica y ética en la secundaria
cristiana Nuevas Generaciones, en respuesta a la pregunta de ¿qué tanto
predominan los valores de la democracia en sus clases?, dejaron en claro que
predominan en el sentido de que los muchachos puedan opinar, pero de todas
la opiniones siempre llegan a un acuerdo, y la decisión final es acorde a la
6
La educación democrática en las escuelas
palabra de Dios. Para ellos lo mas importante dentro de su materia es la ética,
“porque la razón más importante de la vida es quien soy, por qué estoy aquí y
para que vivo en esta vida, y de ahí cuando un joven pueda entender la razón
por la que esta en este mundo y por que vive en una sociedad como en la que
vive, va a aprender a vivir también para una sociedad” (Lic. Evelia Soto. Maestra
educación cívica y ética).
En lo que corresponde a la educación en valores, se centran en trabajar en
la integridad de sus alumnos, hablando desde el punto de vista ético cristiano, lo
cual significa que se guían por la ética de la Biblia, que es el libro de Fe y
práctica que tienen los cristianos.
En entrevista con ellos, compartieron una de sus dinámicas para impartir la
clase de ética: estudian libro por libro de la Biblia (pablo, job. Isaías, jeremías,
Ezequiel, etc) y de cada uno de ellos van analizando algún valor o antivalor que
los caracterizó durante su vida y como los afectó o los benefició.
En correspondencia a la enseñanza de efemérides dentro de sus clases,
concuerdan con lo expuesto por el autor Hebe Clementi: “las efemérides del
principio de la nacionalidad es formativa, evocativa y ratificadora de nuestra
identidad, por eso optamos aquí por revificarlas, ahondarlas, quererlas. Porque
sabiendo esos datos que el pasado borró cuando no se lo cultiva, se conoce
mejor, se explica mejor, nuestro presente” (Las Fiestas Patrias. Buenos Aires
siglo XXI 1984. Pág. 158). Afirmando uno de sus maestros que el estudio de las
efemérides son necesarias en conjunto con otros elementos de la educación
cívica: símbolos patrios, historia, derecho, etc.. Para poder comprender mejor el
presente y la influencia de esos sucesos en el hoy.
Aceptaron que en cuestiones de promover la cultura política entre sus
alumnos tal vez no lo hagan lo suficiente, pero de nueva cuenta toman un
ejemplo de la Biblia y se rigen a partir de ello “Dar al César lo que es del César
y a Dios lo que es de Dios”, por lo cual si consideran importante que sus
estudiantes aprendan a cumplir su parte como ciudadanos, que es también
parte de su integridad, que tienen deberes y responsabilidades con su sociedad.
En su discurso pude descubrir que a lo que le dan mayor prioridad dentro de
sus clases es a la educación en valores tanto morales, como sociales. Esto
justificado por la conclusión a la cual llegué: para los maestros de educación
cívica y ética de la escuela Nuevas Generaciones, el tener personas íntegras,
7
La educación democrática en las escuelas
buenos cristianos y por ende buenos hombres, sin duda alguna dará como fruto
buenos ciudadanos. Conclusión que hace referencia a un texto citado por Silvia
L. Conde, en su trabajo “La formación de sujetos con una moral democrática”,
donde cita: “En las escuelas, el aprendizaje de la democracia incluye la
comprensión de ciertos contenidos relacionados con la ley, el gobierno, los
derechos y la procuración de justicia, pero es especialmente importante
considerar que la formación de sujetos democráticos tiene un fuerte vínculo con
el desarrollo de la moralidad, ya que "la educación moral debe tener lugar en un
contexto social y político llamado democracia" (Los estudios recientes sobre
cultura política en la antropología social mexicana. Pag. 131).
Una sugerencia que hago desde mi punto de vista, considero muy necesario
por parte de los maestros que imparten la materia de educación cívica y ética, la
implementación de dinámicas de trabajo y aprendizaje más efectiva, en
respuesta a que ellos mismos aceptan que les falta trabajar en lo que a cultura
política y promoción de la democracia se refiere.
Por ello sugiero algunas prácticas que favorezcan el desarrollo de una moral
democrática como las asambleas por grupo, la participación de los alumnos en
la elaboración del reglamento que regirá al grupo, la organización del trabajo en
comisiones de alumnos y el trabajo académico por equipos. En las asambleas,
alumnos y maestros organizan el trabajo, toman decisiones, determinan las
reglas ' proponen sanciones, evalúan algunos procesos comunes y resuelven
los problemas en el marco del poder de la colectividad. La elaboración del
reglamento de grupo es una estrategia que favorece en los alumnos la
comprensión de la importancia de las normas y los acuerdos como reguladores
de la convivencia social, y les permite apreciar las ventajas y responsabilidades
de participar en su definición. Tal vez con estas estrategias, favorezcan el
aprendizaje vivencial de la democracia entre sus alumnos: aprender a participar,
a relacionarse de manera más o menos horizontal con la autoridad, a ejercer
poder, a tomar decisiones, a asumir responsabilidades en el trabajo cotidiano y
a responder a la lógica del grupo más que a la perspectiva individual.
Permitiéndoles una mayor comprensión sobre el concepto y el ejercicio de la
democracia en el aula.
En contradicción con la opinión de los maestros, los alumnos de preparatoria
y secundaria de esta escuela, no tienen ni siquiera la noción del concepto
8
La educación democrática en las escuelas
“cultura política”, en pocas palabras, ni de uno ni de otro (ni cultura, ni política).
Pero cada uno de los alumnos entrevistados, estuvieron de acuerdo en lo
concerniente a la educación en valores que reciben y a la importancia que la
ética tiene dentro de esta materia (educación cívica y ética). “Nos ayudan a
comprender los problemas que existen en la sociedad, como está compuesta,
como aplicar los valores en nuestra vida diaria y cosas por el estilo” (estudiante
de secundaria Nuevas Generaciones).
Un hallazgo más fue que al preguntarles cuál era su materia favorita, en
ningún momento contemplaron esta, por el contrario prefieren lo que a artes,
música o ciencias exactas se refiere. Esto prueba que los jóvenes rara vez
están interesados en los contenidos cívicos de sus materias. De igual manera
en su totalidad calificaron que la materia de educación cívica y ética se inclina
más por las cuestiones éticas que por las cívicas.
Enseguida presento la trascripción de la entrevista realizada al director de la
secundaria cristiana Nuevas Generaciones(Jorge Raúl Lerma Trejo), para con
base a ello poder realizar un análisis que sea más fácilmente comprendido por
el lector:
1.- ¿Como seleccionan a los maestros?
Hay perfiles por parte de la SEC que se tienen que cumplir y en base a
eso escogemos a los maestros. Uno de los requisitos principales es que sean
hermanos de la congregación ya sea de nuestra Iglesia local o de otras.
2.- ¿Con base en qué les asignan las materias a impartir?
Las materias les son asignadas de acuerdo a su profesión y su perfil.
Tenemos ingenieros, abogados, literatos, de acuerdo a esto se les asigna.
3.- ¿Qué tipo de relación es la que existe entre los docentes y las
autoridades de la escuela?
Como miembros de una congregación, todos somos de un mismo pensar
y un mismo sentir, igual eso mismo debemos llevar a las escuelas, no porque
estemos en un ministerio diferente a lo que es la Iglesia o cargos que tengamos
en la Iglesia, será diferente en la escuela. Tenemos que tener el mismo sentir y
el mismo objetivo para todas las cosas. Si alguien no esta en el mismo
9
La educación democrática en las escuelas
pensamiento, pues tenemos que platicar, estar todos bajo los mismos objetivos:
llevar primeramente la educación cristiana a los muchachos.
El objetivo de la educación cristiana es eso, no menosprecia la educación
secular. Obviamente tienen que estar preparados bien para cuando sean
adultos, Pero el objetivo principal es para cuando ellos estén espiritualmente
delante del señor estén listos. No menospreciamos la educación secular, eso es
importante. Pero obviamente cuando ellos estén delante de la presencia del
Señor ahí no cuentan títulos, doctorados, ni nada, sino espiritualmente cómo
vivieron y qué tanto crecieron.
4.- ¿Cree usted que en su escuela existe la democracia?
Sí. Primeramente asentamos las bases, hay reglamentos que se tienen
que cumplir, están las autoridades, se tiene que cumplir en cuanto a obediencia.
Hay reglas también de comportamiento de los maestros con los alumnos y
viceversa. Obviamente quien falte a alguno de ellos, recibe su sanción. Que
aquí en el caso de los alumnos es trabajo comunitario, limpiar el salón, los
pasillos, cuidar el jardín etc… pero sí tienen toda la libertar para expresarse o
hacernos saber cualquier inconformidad.
La misma entrevista fue realizada al director de la preparatoria (Adalberto
Flores García)
1.- ¿Como seleccionan a los maestros?
Como somos un colegio cristiano, primeramente que sean de la misma fe
y práctica cristiana y en segundo lugar que cumplan con el perfil de acuerdo a la
materia que quieran dar. Que sean maestros cristianos con un título profesional
mínimo a nivel licenciatura y que sea de acuerdo a la materia que van a impartir.
2.- ¿Qué tipo de relación es la que existe entre los docentes y las
autoridades de la escuela?
Hay una estrecha comunicación a través de un reglamento interno que hay, que
los docentes tienen que cumplir, desde vestimenta, vocabulario, la filosofía
cristiana que guardamos que la puedan trasmitir correctamente a los alumnos.
Queremos que los maestros se preparen lo mejor posible para que pueda haber
en el colegio un nivel académico alto, por eso tratamos de tener reuniones de
10
La educación democrática en las escuelas
maestros donde se les dan talleres de capacitación y que estén los mas
actualizados posibles para que ellos puedan hacer una buena labor.
3.- ¿Cree usted que en su escuela existe la democracia?
Si, unas cosas que hacemos es que el maestro es la autoridad en ese momento
cuando está en el salón, siempre les hago ver que el como maestro en esos 50
minutos que tiene de clase es la máxima autoridad y tiene la libertad para poder
dar la clase, usando el método que el crea que funciona mejor con los alumnos y
poder evaluar de una forma que él crea que es la mejor. Los alumnos igual tienen
la confianza y la libertad con el maestro para hacer ver algún punto de vista,
siempre se pide la participación de los alumnos.
Claramente en el discurso de ambos directores podemos identificar rápidamente
la tendencia en sus palabras a sobresaltar el perfil cristiano de su educación, de
sus convicciones y que en todo momento concuerdan el uno con el otro en sus
respuestas, no se contradicen. Como uno de ellos mencionó: están bajo el mismo
sentir y el mismo pensar.
De igual manera resaltan la importancia de que sus educadores persigan los
mismos objetivos, que estén dentro de la misma filosofía cristiana, porque en
estas escuelas su prioridad es fomentar el crecimiento espiritual y la vida
espiritual de sus alumnos ante todo; trabajando colateralmente en la preparación
académica que necesitarán para cuando se conviertan en adultos también estén
listos para enfrentar el mundo real.
Analizando estas respuestas podemos hacer referencia nuevamente a cómo
la educación cristiana se define (Ensayo página 4 y 5. Cap.4: la educación en
valores. Pág. 115).
Después de haber conocido las opiniones y percepciones de los maestros,
alumnos y las autoridades de la escuela cristiana Nuevas Generaciones,
podemos ubicar sus objetivos, sus respuestas y parte de su mentalidad en lo
que a educación respecta, dentro de los objetivos de los proyectos pedagógicos
centrados en los valores, establecido en el capítulo cuatro de La educación en
los valores como: “propiciar un ámbito, una situación, un proceso, en el cual
surja el hombre nuevo, comprometido con y los demás, en su opción de fe por
la vivencia de los valores que ayudan a superar los condicionamientos
que nos impiden una opción por Cristo” (Pág. 115)
11
La educación democrática en las escuelas
Está claro y bien entendido que la escuela cristiana se apega en su totalidad
a los principios cristianos en lo que a la manera de educar corresponde y que no
encontramos ningún déficit desde el punto de vista religioso en su método de
enseñanza. Pero si de educación democrática hablamos, aquí si hará falta
realizar un análisis más riguroso, si estamos en el entendido de que por
educación democrática tenemos a aquélla que se imparte a todos por igual, y de
ahí que se entienda por democratización de la enseñanza abrir las instituciones
educativas a todos los miembros de la sociedad; estaríamos frente a la primera
barrera democrática que la escuela cristiana promueve: no es una institución
que abra sus puertas a todos los miembros de la sociedad ni que imparta la
educación a todos por igual. Por palabras de las autoridades de la misma,
sabemos que uno de los requisitos tanto de los maestros que ahí fungen como
docentes y de los alumnos que asisten a esta escuela, es requisito primordial
pertenecer a la religión cristiana bautista, de otra manera no pueden ingresar a
esta institución.
Es verdad que como religión tienen principios, convicciones, límites y demás
que deben de respetar y que los caracteriza como comunidad religiosa, y tal vez
el aceptar a gente ajena a su religión dentro de su escuela, represente un
peligro para ellos en el sentido de que sus estudiantes puedan ser
“corrompidos”, llegar con ideas radicales e idealistas, etc… pero por otra parte,
considero una debilidad de esta escuela que no esté dispuesta a abrir sus
puertas para todos, de esta manera difícilmente podrán crecer como institución
y se conformarán con tener grupos de 10 personas máximo como es en la
actualidad. Otro factor que también debiera importarles es que su doctrina
pudiera ser más expandida, más conocida y así también ganar más miembros a
su congregación. De esta manera lo único que se logra es estancar el
crecimiento de la Iglesia y de su escuela.
12
La educación democrática en las escuelas
CONCLUSIONES
Sin importar la religión, convicción, ideología ni ningún otro factor de tipo
personal, los maestros siempre debieran tener en mente que son sujetos
políticos conscientes y creativos, capaces de asumir el control sobre su propio
trabajo, construir y consolidar estrategias para que sus alumnos desarrollen
habilidades para participar, tomar decisiones, resolver conflictos y ejercer poder
a través de canales y procedimientos democráticos, así como para fortalecer
ciertas actitudes morales como el respeto mutuo, la veracidad, la solidaridad, la
honestidad, la responsabilidad, el compromiso y la autonomía moral.
Las escuelas son espacios políticos en los cuales alumnos y maestros
aprenden a relacionarse con otros iguales, con otros diferentes, con la
autoridad, con el conocimiento, con sus problemas; aprenden que es posible --o
no-, participar, opinar, disentir, transformar; aprenden a vivir con -o en contra
de- la autoridad; a compartir el poder o a sufrirlo; aprenden fórmulas de
mandato u obediencia, de resistencia o de sobrevivencia ante los abusos.
Así como dentro de la religión cristiana, se esmeran porque sus
congregantes sean educados y formados en un ambiente que les permite
conocer mejor y sobre todo comprender porqué es importante seguir los
mandatos de Dios, Su palabra y todos los beneficios que trae a la vida el vivir
una vida cristiana. Las personas se forman como sujetos democráticos al vivir
en un contexto sociocultural pleno de experiencias cotidianas e interacciones
congruentes con los principios de la democracia.
Es necesario que dentro de las escuelas cristianas se fomente más el
aprendizaje de la democracia, el cual debe incluir en sus contenidos la
comprensión de ciertos contenidos relacionados con la ley, el gobierno, los
derechos y la procuración de justicia. Y que sigan manteniendo la importancia
que le dan a la moral dentro de sus clases, pues como ya se mencionó es
13
La educación democrática en las escuelas
especialmente importante considerar que la formación de sujetos democráticos
tiene un fuerte vínculo con el desarrollo de la moralidad, ya que "la educación
moral debe tener lugar en un contexto social y político llamado democracia"
(Hersh y otros, 1979:19).
14
La educación democrática en las escuelas
BIBLIOGRAFÍA
* Capítulo 4: La educación en los valores.
Compendio de la materia de Comunicación y Cultura Política.
8tavo semestre. Licenciatura en Ciencias de la Comunicación.
* Los estudios recientes sobre “cultura política” en la antropología social
mexicana. Roberto Varela.
Compendio de la materia de Comunicación y Cultura Política.
8tavo semestre. Licenciatura en Ciencias de la Comunicación.
* La cultura política en México: teoría y análisis desde la sociología.
Roberto Gutiérrez.
Compendio de la materia de Comunicación y Cultura Política.
8tavo semestre. Licenciatura en Ciencias de la Comunicación.
Internet
* Educación democrática y la democratización de la educación
ESTUDIOS. filosofía-historia-letras. Verano-Otoño 1996 Universidad Autónoma
de Guadalajara.
* Educación, ciudadanía y democracia
Autores: Ana Ayuste
Colección: Educación en Valores
* Texto Las Fiestas Patrias. Buenos Aires siglo XXI 1984.
* La formación de sujetos con una moral democrática.
Texto de Silvia L. Conde
Entrevistas realizadas (testimonio en audio)
- Director de la secundaria cristiana Nuevas Generaciones: Jorge Raúl Lerma
Trejo.
- Director de la preparatoria cristiana Nuevas Generaciones: Adalberto Flores
García.
- Maestros de Educación Cívica y Ética escuela cristiana Nuevas Generaciones:
Lic. Evelia Soto Pérez y Raúl Lerma.
15
La educación democrática en las escuelas
- Encuesta a alumnos de la secundaria y preparatoria cristiana
GALERIA FOTOGRÁFICA
Generación saliente de secundaria Nuevas Generaciones
16
17
Comunicación y Cultura Política
Ensayo “La educación democrática en las escuelas
cristianas”
Maestro: Francisco Covarrubias
Presenta: Damaris Lenine Echevarría Soto
Grupo: P11
18
Licenciatura en Ciencias de la Comunicación
Top Related