Ética profesional
Lectura No.6 Doctrina social
Contextualización
La libertad es sin duda uno de los rasgos más
notables y más hermosos de la naturaleza, pero
misteriosamente es también uno de los aspectos más
contradictorios del hombre. Concepto que, sin
embargo, ha sido devaluado y hay que volver a
contemplarlo en su belleza prístina para poder
comprenderlo en su justo valor y alcance. Ya que de
un concepto correcto de libertad se sigue una
adecuada percepción de la ley y de la autoridad y de
los principios que la misma debe usar para coordinar
a los particulares, principios tales como el de
subsidiariedad.
http://matiascanepa.com/blog/la-libertad-y-
sus-limites/
Libertad como ley que permite y obliga actuar
buscando el bien
Éste es sin duda uno de los rasgos más notables y
más hermosos de la naturaleza, pero misteriosamente
es también uno de los aspectos más contradictorios
del hombre. Además hoy en día este aspecto tan
hermoso de la naturaleza humana ha sido tan
devaluado que conviene volver a contemplarlo en su
belleza original para poder quedarnos admirados de la
grandeza que representa para el hombre el hecho de
ser libre.
Introducción
http://www.proyectopv.org/2-
verdad/1marcoscomovivircamino.html
Decimos que el concepto de libertad está muy
devaluado porque si nos dedicamos a preguntar por las
calles a la gente, adultos, jóvenes o niños qué entienden
por libertad las definiciones, aunque muy básicas y
distintas, tendrán un común denominador: afirmar que la
libertad consiste en hacer lo que uno quiera sin que
nadie ni nada se lo impida. Esta definición, aunque con
muchos detalles ciertos, reduce a la libertad a una pura
propiedad física de los actos humanos, es decir, que
mientras “yo no tuve nada que me estorbara entonces
fui libre”. Es obvio que eso no es libertad porque el
ladrón que realiza su “labor” sin que nadie le estorbe no
está siendo libre, aunque cumple con todas las
características de libertad arriba enunciadas: hace lo
que él quiere y nadie se lo impide. A pesar de eso, él
está siendo esclavo de un vicio deplorable como lo es el
hábito de apoderarse de lo que no le pertenece.
Ley y libertad
http://teatrevesadespertar.wordpress.com/categor
y/la-revolucion-pacifica/luchadoras-anonimas/
Es bueno saber que el espíritu tiene dos
facultades que son la inteligencia que está
ordenada a la verdad y la voluntad que está
ordenada al bien. Bueno, la libertad es un
acto de la voluntad pero no es un acto ciego
sino que sólo se inclina a lo que la
inteligencia le presenta y cómo la inteligencia
siempre llega a la verdad, entonces la
voluntad se fía de ella y acepta lo que le
ofrece. Podemos decir entonces que entre
más ponderada y sopesada haya sido
nuestra acción más libre fue.
Ley y libertad
http://wasanga.com/gananciasenlibertad/
Hay que hacer mención de un rasgo que suele
faltar en las definiciones que normalmente
nosotros escuchamos de la libertad y éste es el
bien. Porque de nada sirve hacer cosas sin
coacción externa si con ese acto nos hacemos
daño. Esto es lo que se nos escapa muchas
veces a la hora de creernos libres, pues
pensamos que lo somos cuando en realidad
estamos haciendo pedazos nuestra naturaleza e
incluso haciendo pedazos a los demás, incluidos
nuestros seres queridos y aquéllos que nada
tienen que ver con nosotros. Hemos de tener
presente esa conciencia de mejorarnos a nosotros
mismos, de auto perfeccionarnos con cada uno de
nuestros actos.
Ley y libertad
http://www.hoysetratadevivir.com.ar/
El bien común. De nada sirven las organizaciones
humanas si no nos llevan al bien del hombre. Su
razón de ser sería un absurdo y, más que
beneficiosa, se convertiría en dañina para el
hombre. La sociedad debe buscar el bien común.
El bien común consiste en que una comunidad
esté dotada de todos los bienes que constituyen
su auténtica perfección y que se conceda a todos
participación en ellos, pues ése es el objetivo de la
sociedad: ayudar a sus miembros a alcanzar su
perfección. Se le llama común porque consiste en
el mayor grado de perfección, tanto de los
individuos como de la sociedad. Esto nos lleva a
afirmar que no podemos hablar de bien común si
éste implica la no perfección de uno sólo de sus
individuos.
Autoridad y subsidiariedad
http://www.cpalsj.org/persiguiendo-el-bien-
comun/
Pero en este tema nos puede llegar la pregunta:
¿qué es en concreto el bien común? Porque muchas
veces sucede que lo que es un bien para mí para
otros no lo es y, si esto pasa en mi sociedad, ¡qué
decir del mundo entero donde los intereses de los
hombres son tan diversos como diversos son los
hábitos, costumbres, tradiciones, creencias de todos
ellos! Aquí la solución nos la dará una vez más la
naturaleza.
Cuando hablamos de la naturaleza humana
mencionamos que era ese rasgo que compartíamos
todos los seres humanos y que nos acomuna e
iguala. Es como en los pájaros, los hay de diversos
colores, tamaños, habilidades, pero todos son
pájaros, comparten la misma naturaleza y eso es lo
que los hace ser iguales. Lo mismo pasa con los
hombres, nuestra naturaleza nos hace ser iguales
dentro de las diferencias.
Autoridad y subsidiariedad
http://hoy.ulsa.edu.mx/?p=31996
Pero ya en concreto, ¿qué es el bien común? Si
hubiera que ponerle un sinónimo, al bien común
podríamos decir que el bien común consiste en la
“felicidad”.
No una felicidad pasajera, porque eso sería
alegría, sino una felicidad permanente tan
permanente como la naturaleza que jamás nos
abandonará. Ahí radica la gran responsabilidad de
los gobernantes y autoridades de todo el mundo,
pues su cometido no es solamente darnos cosas
que nos permitan estar en un estado de bienestar
elevado sino que deben darnos ese ambiente para
permitirnos alcanzar la felicidad en la perfección
de todas nuestras capacidades. Esto conduce a
un tema obligado: la autoridad.
Autoridad y subsidiariedad
http://www.altonivel.com.mx/10741-la-
asistencia-social-un-motor-para-el-bien-
comun.html
El bien común consiste en la perfección de lo que
todos tenemos en común: la naturaleza. El bien
común es un conjunto bien armado de bienes que
no están revueltos sino ordenados en una
jerarquía, hay unos por encima de otros.
Obviamente los valores que están abajo en la lista
son los del cuerpo: los muebles e inmuebles, las
posesiones, las riquezas, la salud, la integridad. Y
los valores del espíritu están por encima por ser el
componente del hombre que nos hace superiores
al resto de las criaturas como son la ciencia, la
virtud, etcétera.
Conclusión
http://www.agama-consulting.com/pt/articulos/las-
12-claves-del-sentido-comun-9-clave-orientarse-al-bien-
comun
Referencias
• Fagothey, A. (1973). Ética, teoría y aplicación. México: McGraw-Hill.
• Sada, R. (2008.). Curso de ética general y aplicada. México: Tercer Milenio
• Sánchez-Fuentes, F. (2003). Desarrollo y formación líderes. México: El Arca.
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