EN ESTE CAPITULO DEBES RECORDAR QUE ES NECESARIA TU PARTICIPACION ACTIVA CON EZDECISIÓN Y PERSEVERANCIA PARA VENCER, USANDO LAS ARMAS ESPIRITUALES QUE DIOS NOS DIO EN SU PALABRA.
"Al vencedor le concederé sentarse conmigo en mi trono, como yo también vencí y me senté con mi Padre en su trono" (Apocalipsis 3:21).
El vencedor es el que lucha y persevera. Es el que no se da por vencido porque cuando falla se levanta hasta alcanzar la victoria.
¿Qué quieres? ... Muerte o vida, esclavitud o libertad, opresión o paz, amor u odio, darte por vencido o vencer, luchar o permanecer prisionero...?
Depende de tu actitud ante la vida, ante el camino que tienes delante de ti en estos momentos de oscuridad. Dios no te hará avanzar a la fuerza porque El siempre respeta tu voluntad y tus decisiones. Él es el libertador y sanador pero no trabaja solo, debes actuar sostenido de su mano.
Vencer o vencer debe ser tu consigna.
El primer "vencer" de la frase está en la mente de todos, pero el segundo "vencer" depende de tu voluntad si eres valiente y perseverante. Debes someter tu voluntad a la fe y creerle solo a Dios aunque escuches voces interiores que te dicen lo contrario, que te dicen que nunca podrás vencer:
"No desechéis pues vuestra confianza la cual tiene gran recompensa porque os es necesario la perseverancia para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengas lo prometido" (Hebreos 10:35,36).
Debes con convicción, estar dispuesto a luchar para cambiar y salir del pozo donde has caído. Es importante que reconozcas tus debilidades, culpas e inseguridades doblegando a tu yo y, venciendo a tu egocentrismo.
Para alcanzar la victoria es entonces necesario reconocer la necesidad de cambiar, estar dispuesto a luchar, y perseverar.
Muchas personas nunca vencen, porque en el fondo de su corazón no se habían decidido a hacerlo.
Debes recordar lo siguiente:
"Dios está contigo en todo cuanto haces"(Génesis 21:22). "Encomienda al Señor tu camino. Confía en Él, que El actuará; hará resplandecer tu justicia como la luz y tu derecho como el mediodía"(Salmo 37:5,6).
Resiste cuando te quieras dar por vencido, y piensa que ya has dado el paso más importante al aceptar a Jesús en tu corazón. La Palabra de Dios dice:
"Someteos a Dios, resistid al diablo y huirá de vosotros"(Efesios 6:11). Resistir es: Perseverar, luchar, no darse por vencido y confiar que Dios está contigo porque: ¡"El Señor es el que da la victoria"! (Proverbios 21:31).