Nicolás Tamayo Guerrero
FUNDACION DERECHO A LA DESVENTAJA
LA BIBLIOTECA DE LA DISCAPACIDAD
Cátedra Medicina, Inclusión y Discapacidad
FOLLETO No. 1
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD
A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
Nicolás Tamayo Guerrero
Estudiante de VI Semestre de Antropología
Universidad de Los Andes y
Voluntario Fundación Derecho a la Desventaja
Editora de la colección
Marta L. Tamayo F., MD, MSc
Bogotá, D. C. Octubre de 2012
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
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FUNDACION DERECHO A LA DESVENTAJA
FUNDALDE
ENCICLOPEDIA DE LA DISCAPACIDAD
Junta Directiva FUNDALDE
-Martalucia Tamayo Fernández
-Mariela T de Lauschus
-Carmen L. Fernández
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Directora Científica: Martalucia Tamayo Fernández
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Folleto No. 1:
FUNDALDE, PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA Y FUNDACIÓN SALDARRIAGA CONCHA
DISEÑO DE CARATULA: Carolina Mejía Ramírez
Nicolás Tamayo Guerrero
PRESENTACIÓN
Nicolás Tamayo Guerrero es un estudiante de VI semestre de Antropología, a quien se
le encargó la difícil tarea de hacer un ensayo sobre los paradigmas de la discapacidad, a lo largo de la historia de la humanidad, con el fin de utilizar este material en los estudios y análisis sobre el tema en la nueva “CÁTEDRA INCLUSIÓN, MEDICINA Y DISCAPACIDAD”
que ofrece el Instituto de Genética Humana de la Facultad de Medicina de la Pontificia Universidad Javeriana, en el marco de un convenio desarrollado entre la Fundación Saldarriaga Concha, la Fundación Derecho a la Desventaja -Fundalde- y la Universidad Javeriana. En Fundalde fuimos testigos de sus lecturas y su dedicación al tema y este folleto No. 14 de la colección “Derecho a vivir en Desventaja” es prueba de ello. Hay tres cosas interesantes sobre las que llama la atención el autor. La primera, es un cuestionamiento al título del ensayo. Preguntarse si realmente uno pudiera hablar de paradigmas a través de la historia, es plantear un interesante cuestionamiento inicial que denota un análisis juicioso y cuidadoso del concepto de “discapacidad” a lo largo de los tiempos:
(...) debido a que generaliza la sociedad y por ende, también, se generaliza la forma de entender la discapacidad sin tener en cuenta los contextos sociales, familiares o históricos y políticos. Esto genera un problema, pues hace que exista una tendencia a pensar que en diferentes sociedades y culturas se entiende y se maneja la discapacidad de la misma forma y, llegar a pensar que en el mundo entero se tiene la misma concepción sobre la discapacidad, sería un error.
La segunda, es la introducción del concepto de discapacidad que se observa en la Biblia, presentado por algunos autores que han tocado el tema de los milagros de Jesús:
Es decir, que si cura a los enfermos con discapacidades o malformaciones los haría parte de una cultura normativa que no acepta sus condiciones y esto, en el argumento de Mitchell y Snyder es lo que sí hace Jesús, quien no está haciendo inclusión sino que está erradicando la discapacidad para que las personas hagan parte de la sociedad en la que todos son iguales y perfectos.
Interesante teoría sobre los milagros. Sin embargo, habría que discutir si la gente con alteraciones que busca mejorar su condición, lo hace no sólo para ser incluido socialmente o evitar la exclusión, sino para disminuir un sufrimiento físico real. La tercera, una mirada objetiva al siempre discutido y analizado “modelo médico”:
Pero, ¿qué se le podría criticar al modelo médico? Primordialmente que es generalizador (…) mientras que los enfoques más recientes, como el modelo social y más aún el modelo relacional o el modelo cultural, y los enfoques constructivistas o deconstructivistas (…) ven la discapacidad como algo relativo que depende de la sociedad o de un contexto y, de esta forma, termina con esa visión homogeneizadora que trata y enfoca el tema de la discapacidad por igual, como una enfermedad en cualquier parte del mundo.
Importantísima llamada de atención que nos hace a los médicos, quienes tendríamos que aceptar que pocas veces hemos trabajado la idea de que una alteración física o mental no necesariamente le quita a la “persona” la posibilidad de funcionar socialmente bien y ser tan productivo y activo como los demás. Caemos en el error de no verlo como alguien
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
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“diferente”, sino como alguien que se sale de la norma (anormal). Y aunque en muchas ocasiones la condición de enfermedad es innegable (tener una alteración en la secuencia de un gen produce una enfermedad específica, por ejemplo), la sociedad en general empeora el problema al tener un concepto errado o peyorativo de enfermedad. Yo adoptaría una posición conciliadora y diría que los modelos médico y social no deben ser excluyentes uno de otro, que podrían coexistir; es una cuestión de formas de ver una misma situación. El autor plantea una crítica constructiva que invita a la reflexión: “De esta misma manera el
llamado “modelo biomédico” que entiende la discapacidad de la misma forma que el “modelo médico”, propone la rehabilitación de las personas con discapacidad para sacarlos de su estado de
enfermedad y hacerlos parte de la sociedad”. Sin poder negar mi profesión y formación
médica, contestaría que las ciencias médicas hacen su aporte al mejorar la calidad de vida de una persona, cuando su limitación o alteración realmente le afecta. Buscan mitigar condicionesy reducir dolor (físico, moral o mental). Yo apoyo muchas rehabilitaciones que son necesarias, pero un cambio de concepción de enfermedad y trabajo por evitar que el mundo se siga dividiendo en normales o anormales. Lo que sí es cierto es que los médicos solemos “pacientizar a la gente y al mundo” y, tendemos a creer que toda persona que presenta una enfermedad es “un paciente” y lo vemos sólo como tal sin considerar que fuera del consultorio, en el mundo real, esa persona es otro como yo, “diferente pero igual”. ¿Difícil entender ese aparente contrasentido de palabras? Si quiero que nuestros médicos del futuro luchen por cambiar ciertos conceptos errados ya hoy en día; que vean la condición social de discapacidad y no al mal llamado “discapacitado”. Yo, por ejemplo, no puedo negar que soy persona en condición de discapacidad (PCD). Con mi propia experiencia de vida, he entendido los dos modelos social y biomédico y he logrado ponerlos a trabajar juntos, en aras de luchar por un cambio de paradigmas y concepciones distorsionadas. Acepto que tengo “una enfermedad genética” (paradójico para una médica genetista) y acepto que a pesar de “tener una enfermedad” soy un “sujeto de derechos” y no un enfermo; un ser diferente socialmente muy activo, productivo y funcional, que no debe ser visto como alguien anormal que merece la exclusión social de la que con frecuencia soy objeto. Simplemente se trata de alguien diferente, que vive en condiciones diferentes, que debido a sus limitaciones requiere ciertos cuidados especiales, condiciones sociales especiales, tratamientos y terapias para mejorar su calidad de vida. Una persona así requiere importantes variaciones en su cotidianidad, requiere que la sociedad le brinde ciertas condiciones para sobrevivir o vivir dignamente.
Martalucía Tamayo Fernández., MD.,MSc
EDITORA DE LA COLECCIÓN
Médica Genetista Profesor Titular de Genética, Facultad de Medicina
Pontificia Universidad Javeriana, y Directora Científica
Fundación Derecho a la Desventaja y, Persona en Condición de Discapacidad
Nicolás Tamayo Guerrero
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD
A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
Nicolás Tamayo Guerrero
Estudiante de VI Semestre de Antropología Universidad de Los Andes y
Voluntario Fundación Derecho a la Desventaja
Introducción
Si se habla en términos generales, y con esto me refiero al lenguaje y al
entendimiento común de la discapacidad que tienen los miembros de la sociedad en
general, más no desde una aproximación médica ni social, se puede decir que en todos los
países y en todas las sociedades existe un porcentaje considerable de pobladores que
“padecen” una discapacidad. Esto quiere decir simplemente, que en cualquier parte hay
personas con una corporalidad diferente a la del resto y que la sociedad misma tiene ciertos
estándares para entender esas diferencias en los cuerpos; también quiere decir que en la
llamada sociedad “occidental” estas diferencias corporales se denominan y se entienden
como “discapacidades”.
Hablar de una sociedad “occidental” o de una sociedad humana (hablar de la gente en el
mundo en términos generales) trae consigo ciertas complicaciones, debido a que generaliza
la sociedad y por ende, también, se generaliza la forma de entender la discapacidad sin
tener en cuenta los contextos sociales, familiares o históricos y políticos. Esto genera un
problema, pues hace que exista una tendencia a pensar que en diferentes sociedades y
culturas se entiende y se maneja la discapacidad de la misma forma y, llegar a pensar que
en el mundo entero se tiene la misma concepción sobre la discapacidad, sería un error.
La discapacidad que hasta hace poco era un campo estudiado por la medicina, se ha
convertido en un tema recurrente en las ciencias sociales, en donde el estudio se basa en
acabar con esa noción generalizada y en analizar los contextos particulares en sociedades y
culturas específicas; teniendo en cuenta que no existe una sola manera de ver y entender la
discapacidad y que tampoco ha existido una concepción general a través del tiempo. Parte
importante de estos estudios, es analizar la forma en que se creó el concepto de
discapacidad y cómo se ha venido conformando la idea de un cuerpo “normal” en
contraposición a un cuerpo “discapacitado”. Esto es importante porque muestra que existe
una explicación para entender la concepción que se tiene de la discapacidad como algo
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
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creado y conformado a través de la historia mediante diferentes procesos, que al pasar el
tiempo han construido y dado forma al modo de entender la discapacidad y el cuerpo
humano.
Hablar de los paradigmas de la discapacidad a través de la historia es precisamente hablar
de cómo, en diferentes momentos históricos, la sociedad ha visto y ha comprendido la
discapacidad, tomando la palabra paradigma en un sentido bastante simple; el paradigma se
puede entender como modelo, el modo o la forma en que una sociedad entiende lo que es
una persona o una población con discapacidad. Nuevamente aquí se presenta un problema
con la generalización, ya que al decir “paradigmas de la discapacidad a través de la
historia” se está planteando por un lado, que han existido modelos específicos de ver la
discapacidad que son homogéneos y que pertenecen a una sociedad entera y, por otro lado,
que hay “una sola historia” de la humanidad. Esto, por lo general está bien, pero si se va a
hablar de discapacidad no puede haber lugar para tal generalización, porque se puede estar
hablando de la historia política o la historia social o la historia occidental o la historia de los
pueblos indígenas o de oriente, etc. El punto es que si el enfoque con el cual se estudia la
discapacidad está tratando de deshacerse de las generalizaciones y de entender la
discapacidad a partir de contextos específicos y relativos, entonces se genera un conflicto al
hablar de “la historia” en general, ya que la historia es relativa no sólo a la geografía sino a
la cultura y a la mentalidad de un periodo histórico específico de una población. Pero es
una cultura y una mentalidad que no son del todo homogéneas como se piensa
generalmente y es justo por esta razón, que no se puede decir que “en tal periodo se
pensaba tal cosa” porque esto homogeniza la cultura y en consecuencia, también a las
personas que vivieron en dicho periodo.
Aunque relativizar todo de forma radical también trae ciertos inconvenientes, puesto que
siempre han existido costumbres y patrones culturales que moldean la mentalidad de las
personas y negar esto sería como negar el poder de la cultura misma; decir que las
costumbres y patrones culturales moldean el pensamiento de todos y de una sociedad o
inclusive una civilización que existió en un periodo histórico, tampoco es del todo correcto
porque se cae en una generalización que simplifica la complejidad de las sociedades
humanas. Además de esto, las fuentes históricas son bastante escasas y la mayoría de
trabajos sobre discapacidad en diferentes periodos históricos son hechos con base en
ejemplos concretos y situaciones específicas de las que hay registros escritos, aunque
también se utilizan las cosmogonías y las manifestaciones culturales como el arte, la poesía
y la literatura, así como las investigaciones arqueológicas para tratar de entender la
mentalidad de la época ya que, en el caso de las civilizaciones antiguas, no hay más fuentes
dónde buscar.
Muchos de los escritos sobre discapacidad en diferentes periodos históricos describen
ejemplos presentes en algún texto de literatura o poesía de la época, o en la mitología; y a
Nicolás Tamayo Guerrero
partir de esto, hacen un análisis interpretativo tratando de entender si estos ejemplos son
una muestra de una visión general sobre la discapacidad o no, pero en realidad hasta ahora
parece que no se ha llegado a concluir mucho. Esto tiene que ver con que la historia y otras
ciencias sociales no se habían involucrado en temas de discapacidad, ya que los estudios
eran hechos en su mayoría por la medicina y esto hace que hasta el momento no existan
tantas investigaciones en el tema como en otras áreas de las ciencias sociales. Aun así lo
que hay hasta hoy es muy bueno y se puede obtener mucha información a partir de los
diferentes trabajos.
Hago mención de todo esto solo para mostrar lo complicado de los estudios sobre
discapacidad y lo complejo de hablar de unos paradigmas o modelos específicos a través de
la historia. Para simplificar eso, decidí enfocarme en investigaciones realizadas en ciertos
periodos específicos, empezando en orden cronológico por los trabajos investigativos
realizados en Mesopotamia, después un salto a Grecia y Roma y también analizar las
investigaciones que se han realizado sobre los tiempos bíblicos desde el Antiguo testamento
y el judaísmo, hasta el Nuevo testamento y la visión cristiana de la discapacidad. De ahí se
pasa a la Edad media para luego analizar los discursos del siglo XIX -importantes porque
explican cómo se va construyendo el concepto de “normal” y cómo se forma el modelo
médico a través del cual se interpretó la discapacidad durante la mayor parte del siglo XX-,
hasta llegar a los modelos actuales, el modelo social, el modelo cultural o el modelo
relacional.
Muchos trabajos al parecer se han enfocado en estos periodos históricos porque en ellos se
han formado las bases para lo que se conoce como el mundo “occidental”, el
judeocristianismo, el mundo greco-romano y la Europa del siglo XIX. La cultura y las
políticas de una región llamada “el Atlántico norte” han dominado sobre el resto del mundo
desde la época de la colonia hasta la actualidad, con imposición de ciertos procesos
imperialistas del siglo XIX en varias regiones del planeta y las migraciones poblacionales
que se dan a nivel mundial. Por otra parte, toma fuerza la teoría de que eso llamado
“occidente” se ha impuesto en el mundo entero; si esta teoría está en lo correcto o es
refutable, no hace parte del interés de este ensayo. Lo cierto es que la forma o el modelo
médico de entender la discapacidad se ha ido construyendo preferentemente en la sociedad
occidental y por esta razón es que existe el interés en analizar la discapacidad en esos
periodos históricos.
Pero, ¿qué se le podría criticar al modelo médico? Primordialmente que es generalizador y
que ha perpetuado el discurso de la hegemonía de “occidente”, mientras que los enfoques
más recientes, como el modelo social y más aún el modelo relacional o el modelo cultural y
los enfoques constructivistas o deconstructivistas, han propuesto que la discapacidad debe
entenderse de acuerdo con los diferentes contextos. Analizan cómo en diferentes tipos de
sociedades y culturas se entiende y se define la discapacidad. Estos modelos actuales la
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
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consideran como algo relativo que depende de la sociedad o de un contexto y, de esta
forma, terminan con esa visión homogeneizadora que trata y enfoca el tema de la
discapacidad como una enfermedad igual en cualquier parte del mundo.
El objetivo de este ensayo no es desacreditar el modelo médico ni enaltecer los modelos
actuales; el objetivo es analizar cómo se define y cómo se entiende la discapacidad en
diferentes periodos de la historia que están relacionados entre sí. Adicionalmente, es
importante analizar cómo se fue llegando al modelo médico y luego discutir los modelos
actuales o las nuevas aproximaciones a la discapacidad. Sin embargo, hay que tener en
cuenta que ninguna investigación llega a un consenso sobre cuál era el modelo de
discapacidad en un periodo específico.
Este problema también se relaciona con dos cosas: por un lado, como acabo de mencionar,
no se puede generalizar sobre lo que pensaba una sociedad en un periodo histórico sobre un
tema específico, así como no puede hablarse hoy en día de una sola forma generalizada de
ver la discapacidad. Por otro lado, y esto es algo que se dice muy comúnmente en
disciplinas como la historia o la arqueología, la única forma de entender el pasado es
interpretándolo desde el punto de vista de la actualidad, ya que probablemente no es posible
entenderlo sino interpretarlo a través de los registros y las fuentes que quedan. De esta
forma, las investigaciones realizadas sobre discapacidad en diferentes periodos, utilizadas
para fundamentar este ensayo, interpretan el pasado a partir de un enfoque actual de los
disability studies o estudios sobre discapacidad, un campo que analiza e interpreta la
discapacidad basándose en los modelos actuales como el modelo social o el modelo
relacional y los enfoques constructivistas de los cuales se hablará más adelante. Lo
importante es exponer las interpretaciones sobre el modo de ver la discapacidad a través de
la historia y cómo fueron cambiando hasta la actualidad.
Mesopotamia:
Las primeras sociedades complejamente organizadas que desarrollaron tecnologías y
conocimientos más avanzados que los de otras poblaciones humanas y que por esta razón
son llamadas civilizaciones, por algún motivo aparecieron en la región conocida como
Mesopotamia, ubicada entre los ríos Tigris y Éufrates; de ahí el nombre que significa “entre
ríos”. Allí surgieron ciudades como Ur, Uruk, Nippur y Babilonia, entre otras; alrededor del
año 4500 a.c, surge la civilización sumeria para luego aparecer otras, como la de los asirios,
acadios y babilonios y muchas más que luego habitarían la región.
Es claro que posiblemente desde los tiempos en que surgieron los primeros seres humanos
que vivían en sociedades de nómadas dedicados a la caza y recolección, hubiera habido
diferencias corporales en algunas personas, pero no se sabe si estas primeras sociedades
reconocían esas diferencias. En el caso de Mesopotamia, los registros históricos y
Nicolás Tamayo Guerrero
arqueológicos muestran que las personas que vivieron en alguna de las civilizaciones que
surgieron en esa región, sí reconocían esas diferencias corporales y les daban un significado
y un rol social específico a las personas que al parecer tenían un cuerpo diferente al de los
demás. La pregunta sobre el reconocimiento de estas diferencias es importante, porque
denota los estándares de una sociedad en cuanto al cuerpo humano y sus funciones.
En las sociedades más antiguas de cazadores y recolectores no hay datos que registren si las
personas le daban alguna importancia a las funciones del cuerpo, o si algunas diferencias
eran limitantes o no para realizar las actividades importantes para el grupo o sociedad;
mientras que en las civilizaciones mesopotámicas hay registros históricos en textos y en
restos materiales, que permiten entender cuáles eran las expectativas sobre las funciones
corporales que eran importantes para cumplir los estándares y ser un miembro de la
sociedad. En el caso mesopotámico, los registros y las fuentes que se utilizan para
investigar sobre la discapacidad son en su mayoría textos escritos que han sobrevivido a lo
largo de los años, en los cuales se representan los valores de la sociedad1 que en su mayoría
son de carácter religioso. También hay textos de carácter médico en los que se describen
enfermedades y aflicciones propias de la época. Utilizando estos textos es que se puede
interpretar la forma de ver la discapacidad en el periodo mesopotámico ya que no hay más
registros.
Aun así, no hay que menospreciar la validez y la importancia de esos documentos que
sobreviven, ya que en las sociedades antiguas la mitología y la poesía cumplían una
función, no sólo explicaban los orígenes de la sociedad y de la cultura, sino que también
proponían el modelo al que debían adaptarse los miembros de esa sociedad. Las leyes y los
estándares por los cuales debían regirse, están plasmados en esos textos y por esta razón
estudiarlos proporciona importante información sobre los estándares y valores de una
determinada sociedad. En el libro This Abled Body: Rethinking disabilities in Biblical
Studies hay un artículo titulado The origins of the disabled body: Disability in ancient
Mesopotamia, de Neal H Walls, en el que expresa esta idea sobre los textos mitológicos:
“As poetical and rethorical expressions of the human conditions, mythological texts may
provide useful insights into the ancient construction of physical normality, abnormality and
disability”2.( Los textos mitológicos como expresiones poéticas y retóricas de la condición
humana son muestras de la construcción antigua de normalidad física, anormalidad y
discapacidad. La traducción es mía). Este autor se dedica entonces a buscar en la mitología
de los pueblos de Mesopotamia referencias a la discapacidad para interpretarlas,
1 Un texto clave es la epopeya de Gilgamesh, este tipo de textos son una base arquetípica de lo que debe ser una sociedad.En este caso la epopeya sirve como modelo de cuáles son los valores a seguir por los miembros de las civilizaciones mesopotámicas. 2 Walls, Neal H (2007). “The origins of the disabled body: Disability in ancient Mesopotamia” This Abled Body: Rethinking Disabilities in Biblical Studies, pag 16. La traducción es mía. ¿hay alguna norma de la colección para la bibliografía
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proporcionando una explicación y más claramente una exposición del modelo o la forma de
entender la discapacidad en ese periodo.
Los mitos de creación son el ejemplo claro de textos utilizados por Walls, en ellos se
explica el surgimiento de los humanos, el papel de ellos y el de los dioses; claramente son
textos de mucha importancia para el tema de la discapacidad porque en ellos se encuentra el
origen de las diferencias en los cuerpos humanos o más precisamente, la explicación a la
existencia de esas diferencias. Esto muestra claramente que los antiguos mesopotámicos sí
tenían una idea de las diferencias en los cuerpos humanos y sí hacían una distinción entre
un cuerpo con todas sus funciones y otro que tuviera limitaciones; estas diferencias eran tan
claras, que buscaban en los mitos una explicación para ellas. Walls examina el mito de
creación babilónico titulado Enuma Elish, también analiza el mito acadio de Atrahasis y el
mito sumerio de Enki y Ninmah para ver cómo se explica en la mitología de la antigua
Mesopotamia la existencia de cuerpos diferentes a los de la mayoría. Tanto en Enuma
Elish, como en Atrahasis se menciona el origen de los seres humanos como los sirvientes,
por así decirlo, de los dioses3; el papel de las personas era realizar las labores que los dioses
no querían hacer, todos tenían una función y ninguno podía ser improductivo así tuviera
algún tipo de limitación.
Walls también analiza el mito sumerio de Enki y Ninmah porque en este se da una
explicación de cómo llegaron a existir los humanos con cuerpos distintos, algunos con
limitaciones físicas que tienen un papel dentro de la sociedad y que no son vistos como
“discapacitados” en el sentido en que entendemos esta palabra actualmente. Walls describe
que luego de crear a los humanos los dioses hicieron una competencia, la diosa Ninmah
dice que como diosa creadora puede decidir sobre la vida y el destino de las personas y el
dios Enki dice que puede cambiar ese destino que la diosa les impone a los humanos. La
diosa crea personajes con limitaciones físicas y el dios los pone en una situación productiva
y le da una labor importante a cada uno de acuerdo con sus capacidades4. Es un texto que
no es excluyente con las personas con discapacidad pues, según la interpretación de Walls,
existe una labor o una función útil y respetada para las personas con limitaciones
corporales.
Además de estudiar los mitos, Walls también revisó textos en los que se describen
enfermedades que afligían a la población de la antigua Mesopotamia; estos textos por lo
general describen los términos y más claramente el vocabulario que se utilizaba para
designar las enfermedades. Walls propone que hay una dificultad con el vocabulario
médico ya que las palabras eran usadas en un sentido amplio, es decir, que no solamente
eran utilizadas para referirse a deformaciones o enfermedades puesto que tenían varios
3Ibíd. .,p 16-17 4 Ibíd. ., p 18
Nicolás Tamayo Guerrero
significados. Por lo general la interpretación que se da a los textos que describen
enfermedades como deformaciones o limitaciones de las funciones, está hecha bajo el
modelo médico y entonces se interpretan como descripciones que se referían estrictamente
a las patologías de la época cuando en realidad este podía no ser el caso; los términos eran
tan amplios y tenían tantos significados dependiendo de los diversos contextos, que es
difícil saber si el vocabulario tenía una connotación patológica como es el caso del
vocabulario médico en la actualidad. Esto no solamente sucede en el caso de Mesopotamia,
también en Grecia y, como se verá más adelante, hay discusión sobre los términos que se
utilizaban para describir las enfermedades ya que muchos de estos aparecen en diferentes
contextos con significados diferentes que no siempre se refieren a una condición médica ni
a una patología. Es claro pues, que el lenguaje y los términos que se utilizaban en la
antigüedad conforman un punto clave para entender la forma de ver la discapacidad en
aquella época, pero como todo es sujeto a interpretaciones, hay amplia discusión mundial
respecto al verdadero significado de dichas referencias.
Walls expone en su texto esa dificultad en cuanto al lenguaje con el que se representan las
diferencias del cuerpo y los síntomas de enfermedades y aflicciones, pero plantea que no se
pueden analizar los textos médicos en los que se presenta la discapacidad como
enteramente médica, ni mucho menos decir que la aparición de este vocabulario se deba a
que en la antigüedad se veían las discapacidades como enfermedades. Walls plantea lo que
él llama un modelo o un enfoque comunitario para poder entender la discapacidad en la
antigua Mesopotamia:
In this essay I asume a community model, in which disability is defined or measured by
ones capacity to fulfill socially prescribed tasks rather than by a medical or physical
criteria. Disability, whether physical or cognitive, is thus a relative and socially
constructed category that rests upon a particular society‘s expectations.5
(Esto quiere decir, que el autor asume un modelo comunitario en el cual la discapacidad es
medida por la capacidad de llevar a cabo las tareas prescritas socialmente en vez del criterio
médico; que la discapacidad ya sea física o cognitiva es una categoría relativa que se
construye socialmente basada en las expectativas de una sociedad particular. La traducción
es mía). Esta idea es la base para los modelos que se utilizan en la actualidad; se plantea
que la discapacidad se relaciona no con la persona sino con el contexto o con la sociedad,
esto define qué es “ser discapacitado” y qué no. Esta idea también se encuentra en el texto
de Nicole Kelley sobre Grecia y Roma del que se hablará después; Kelley cita el texto de
Robert Garland titulado The eye of the beholder: Deformity and Disability in the Greco-
Roman World y dice: “Deformity and disability are, as Robert Garland argues, in the eye
5Ibíd. ., p 15
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
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of the beholder” 6 y después afirma, citando textualmente a Garland: “any judgment upon
what constitutes a normal morphology is influenced by the salient characteristics and
distinctive aesthetic viewpoint of the society seeking to establish the definition.”7 La
primera cita sostiene que Garland señala que la discapacidad está en los ojos del espectador
y en la segunda argumenta que lo que constituye o define una morfología normal es visto
de acuerdo al punto de vista estético característico y distintivo de la sociedad que hace esa
definición. Aunque el texto de Kelley y de Garland se refiere a Grecia y Roma, la idea se
aplica a Mesopotamia también y eso es precisamente lo que está planteando Walls con su
modelo comunitario, en el que se entiende la discapacidad relacionada con las expectativas
sociales. Esa idea es la base con la que se estudia y se interpreta la discapacidad en las
sociedades antiguas y se relaciona con el modelo social y los demás modelos.
Otro tema que se estudia no solo en Mesopotamia sino también en Grecia, Roma y en el
antiguo testamento, es la costumbre de deshacerse de los bebés recién nacidos que tuvieran
alguna malformación; el hecho de que eso sucediera en esas sociedades da una pista sobre
la manera de pensar de los miembros de estas sociedades antiguas en cuanto a las funciones
del cuerpo. Nuevamente aquí se presenta la complicación sobre cómo entender los casos en
los que se deshacían de los recién nacidos, si se mira bajo la perspectiva de que había una
necesidad de deshacerse de ellos porque no iban a ser útiles en el mundo; pero si se analiza
más ampliamente como lo hacen varios autores, se puede ver que los actos de deshacerse de
tales bebés respondían a causas muy diversas y se daban en situaciones bastante específicas
y no por el simple hecho de tener condiciones médicas que los afectaran.
Walls en su texto analiza varios casos de situaciones registradas en Mesopotamia y
menciona un texto antiguo llamado Sakikku, que es reconocido como un libro de
diagnósticos en los que se describen casos con enfermedades y se explica qué hacer en esas
situaciones. Por ejemplo, especifican qué hacer ante un bebé que nace con una enfermedad
que debilita los músculos y aclaran que la conducta a seguir es botarlo al río8; hay reporte
de otros varios casos y también describen las instrucciones a seguir. Estos sucesos eran
poco comunes y se daban en condiciones bastante específicas; es decir, que no era una
norma de la sociedad deshacerse de los bebés sino más bien una decisión familiar y relativa
a un contexto. Este autor, en particular, ha planteado un modelo comunitario para la
discapacidad en Mesopotamia y por ende muestra que la forma de ver la discapacidad en
este periodo no era excluyente como ya había mencionado en la descripción de los textos
mitológicos. Para explicar los casos en los que se deshacían de los bebés el autor utiliza el
mismo modelo basándose en la importancia de la superstición y de lo sobrenatural en estas
sociedades antiguas. Debido a que los casos eran muy raros, los antiguos pensaban que
6 Kelley, Nicole (2007). “Deformity and Disability in Greece and Rome” This Abled Body: Rethinking Disabilities in Biblical Studies, pag 33 7Ibíd. ., p 34 8 Walls, Op.Cit., p21
Nicolás Tamayo Guerrero
había diferentes causas para sucedieran y una explicación posible son las creencias
supersticiosas de la época.
Según la explicación que da Walls, al parecer creían que las enfermedades eran causadas
por un mal sobrenatural que además de afectar a un recién nacido era posible que afectara a
toda la familia. Ese recién nacido era una forma en la que los males sobrenaturales
afectaban a un grupo de personas y si se deshacían de ese bebé, entonces el mal
desaparecería; una especie de sacrificio que impedía que los males afectaran a otros. El
autor sostiene esta hipótesis basado en los ejemplos de textos antiguos que afirman
claramente que la mejor forma de impedir los males era deshacerse de los bebés. Walls cita
una traducción del texto original mesopotámico que dice: “in order that the house of his
father not be scattered you lay him to rest as if he were a stillborn child and the evil will be
carried away with him”9 . (El texto afirma que para que el mal no dañe la casa del padre
hay que deshacerse del niño como si hubiera nacido muerto y así el mal se iría con él). Así
que el punto principal de la visión de este autor es que no se deshacían de los bebés porque
vieran que su discapacidad era un problema que le impediría ser un miembro funcional de
la sociedad, sino por creencias sobrenaturales. Walls no está defendiendo el acto de matar
un recién nacido, pero sí plantea que no debe entenderse el infanticidio como una necesidad
de perfeccionar la sociedad, ya que estos actos eran aislados y respondían a causas que no
se relacionaban con el hecho de que las enfermedades produjeran personas indeseables para
la sociedad. Es más, Walls menciona que los casos en los que se estigmatizaba a las
personas con enfermedades que producían discapacidades, estaban totalmente relacionados
con lo sobrenatural y no con la inhabilidad de cumplir expectativas sociales. El estigma se
producía porque se pensaba que eran castigos de los dioses y que las personas que las
padecían habían hecho algo para ofenderlos; esto era lo que generaba una estigmatización y
no la enfermedad como tal.
Resumiendo, según los mitos de creación de las antiguas sociedades mesopotámicas, los
dioses que crearon a los humanos les dieron un trabajo y un papel que cumplir en la
sociedad sin importar el tipo de cuerpo. Estos mitos son la explicación de los
mesopotámicos a las diferencias corporales que claramente veían y se preguntaban la razón
para su existencia. Según la interpretación de Neal H. Walls estos mitos muestran que no
había un modelo excluyente con respecto a la discapacidad, ya que todas las personas eran
aceptadas y tenían una función. Las causas para la mayoría de enfermedades se entendían
como sobrenaturales y si existía algún tipo de discriminación esto se debía más a asuntos
religiosos y supersticiosos que a las inhabilidades que pudieran producir estas
enfermedades. Esto es lo que concluye el autor, pero aclara que las fuentes son escasas y
hay poco material para trabajar, aún así expone una perspectiva diferente a la de otros
estudios que se enfocan en ver la discapacidad y la exclusión en sí mismas sin analizar un
9 Ibíd. ., p 22
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
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contexto histórico y cultural mucho más amplio, en el que se entremezclan varios factores
que deben ser tomados en cuenta al momento de estudiar la discapacidad.
Grecia:
Como se había mencionado en la introducción, el discurso de “occidente” utiliza las
antiguas culturas de Grecia como fundamento. La cultura griega en general ha
proporcionado las bases no sólo culturales sino institucionales y organizacionales, puesto
que definió cómo se organiza la sociedad del mundo contemporáneo. También proporcionó
la llamada racionalidad del conocimiento, las instituciones gubernamentales y políticas y
los modelos para el arte y la música. La religión también es una de esas partes de las
antiguas sociedades que juegan un papel importante en la vida de hoy, en especial el
sistema político-religioso de la antigua Roma que se convertiría en las bases de la Iglesia
católica; pero este sistema religioso también encuentra sus bases en Grecia ya que la
antigua Roma adoptó la mayoría de las expresiones y manifestaciones culturales griegas. El
hecho de que el mundo “occidental” se base en la antigua Grecia (también en el judaísmo y
el cristianismo, tema que se tocará más adelante), es la razón para que se hayan realizado
tantos estudios de todo tipo sobre este periodo de la historia y para que los análisis que se
hacen de la antigua Grecia tengan tanta validez.
El tema de la discapacidad cabe dentro de estos análisis por la relevancia que está
adquiriendo actualmente en la academia por fuera del campo médico, que era el único en
estudiarlo. Al igual que en el caso mesopotámico, para estudiar la visión de la discapacidad
en la antigua Grecia, se utilizan manifestaciones culturales, textos e información mitológica
registrada y material físico que queda de la época en donde pueda haber referencias a las
enfermedades y a las discapacidades. Martha L. Rose y Nicole Kelley se han dedicado a
analizar la discapacidad en la antigua Grecia; por un lado Rose en su libro The staff of
Oedipus: Transforming disability in ancient Greece analiza varios casos de discapacidad
tanto mitológicos y literarios como históricos; resalta en particular el caso de Demóstenes y
algunos otros registrados de sordera. En su artículo Deaf and Dumb in Ancient Greece
resume lo que para ella era la forma de entender la discapacidad en este periodo histórico.
Por otro lado, Nicole Kelley en su artículo Deformity and Disability in Greece and Rome
trata casos como el del dios Hefesto, que es una clara manifestación de discapacidad en la
antigüedad; menciona también casos de discapacidad en la antigua Roma y de ceguera en la
antigua Grecia.
Los trabajos de ambas se enfocan en que la discapacidad es una construcción social
definida por ciertos factores sociales y culturales y no es tan simple definirla como una
enfermedad que inhabilita a las personas y las excluye. Rose plantea que para entender la
discapacidad en la antigua Grecia es necesario pensarla como algo variante; es decir, que la
sociedad en general no tenía un mismo concepto de la discapacidad sino que este variaba
Nicolás Tamayo Guerrero
dependiendo de situaciones en las que se presentaban casos de discapacidad y diferentes
personas manejaban estas situaciones de formas diversas. En la introducción a su libro, la
autora dice lo siguiente:
In fact, the Greeks would not have known what to make of this discussion of physical
disability. This is not to suggest that the Greeks did not notice physical disability or
that physical disability did not have consequences. Rather, the consequences varied
from one individual to the next and from one situation to the next10
.
(Esto quiere decir que los griegos no sabrían cómo discutir la discapacidad, esto no sugiere
que los griegos no notaran la discapacidad o que no tuviera consecuencias; más bien las
consecuencias variaban de un individuo a otro y de una situación a otra).
En resumen, esa es la noción de la discapacidad que tiene esta autora en el periodo clásico
de la antigua Grecia y un punto esencial que ella plantea es que se tiende a interpretar la
discapacidad en este periodo, a través de una mirada actual. Para ella, la forma de entender
la discapacidad en esa época es igual a como se asume hoy en día, enfermedades que
inhabilitan a las personas para realizar ciertas funciones. Rose sostiene que esto es un error
porque según su argumento, que ya se había mencionado anteriormente, la incapacidad que
se crea por algún tipo de enfermedad depende de una situación particular; en algunas
situaciones se produce discapacidad, en otras no. Reafirma que era totalmente relativo a un
contexto y no generalizable a la sociedad. Ella, al igual que Nicole Kelley, parecen estar
influenciadas por Robert Garland, mencionado antes, con The eye of the beholder:
Deformity and Disability in the Greco- Roman World, cuyo argumento principal es la base
de la visión de los autores que trabajan la antigua Grecia, también ya discutida con
anterioridad. Además, Kelly está de acuerdo con Martha Lynn Edwards en que ni los
términos “incapacidad” y “discapacidad”, ni la división entre ellos, existían en este periodo
de la historia de la forma en que sí existen hoy en día.11
El tema del ideal de cuerpo perfecto es recurrente en los trabajos que se hacen sobre la
antigua Grecia. Uno de los argumentos de Rose es que este ideal del canon de belleza
griego es representativo del arte renacentista y de los movimientos artísticos neoclásicos
que toman su estética de las formas artísticas griegas, mas no es un ideal de belleza
perteneciente a los antiguos griegos12
. De acuerdo con esta idea y con evidencias
arqueológicas y literarias, se sabe que en el periodo antiguo había condiciones que
generaban discapacidades (enfermedades, guerras, accidentes, etc.) y por ello la autora 10Rose, Martha L (2010). Corporealities: Discourses of disability: The staff of Oedipus: Transforming disability in ancient Greece, Martha L Rose, pag. 2. 11 Kelley, Nicole (2007). “Deformity and Disability in Greece and Rome”. This Abled Body: Rethinking Disabilities in Biblical Studies, pag 33. En esta página Kelley cita a Martha Lynn Edwars y también a Martha L Rose. 12 Rose habla de los antiguos griegos y no de la antigua Grecia porque no existía tal cosa como una nación o un estado griego sino unas comunidades independientes que compartían un lenguaje y una cultura.
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
17
argumenta que ese ideal de belleza es posterior a los griegos, porque en realidad las
sociedades estaban llenas de personas con cuerpos que no respondían a ese canon de
belleza artístico que fue utilizado en épocas muy posteriores.
Siguiendo este argumento, se sabe que había términos para designar estas enfermedades y
condiciones en los textos de medicina, disciplina que había surgido en el periodo clásico de
la antigua Grecia. Los términos que se describen en los textos médicos de la época son
importantes para los investigadores que estudian la discapacidad en este periodo, ya que a
partir del lenguaje se logra interpretar la visión o el entendimiento que se tenía de ella.
Martha L. Rose analiza estos términos y plantea que, al igual que en el caso de
Mesopotamia, las palabras para designar estas condiciones por un lado, no significan lo
mismo que hoy en día, o mejor dicho no tienen la misma connotación que se les da
actualmente; y por otro lado, eran palabras que no siempre se utilizaban para referirse a
condiciones médicas pues tenían significados diferentes en contextos diferentes. Citando a
Rose:“The greek terms for physical impairment are general and describe outward
appereances or symptoms; in contrast, we in the developed world are accustomed to
technical, medical categorizations of specific physical conditions”13
(Los términos griegos
para discapacidad física son generales y describen una apariencia externa o unos síntomas,
en contraste, nosotros en el mundo desarrollado estamos acostumbrados a la categorización
técnica y médica de condiciones físicas específicas. La traducción es mía). Esto significa
que su argumento se basa en que cuando se utiliza una palabra para designar una condición
física se hace con el propósito de expresar la apariencia y los síntomas, pero esta palabra no
es solamente utilizada en ese contexto, como sí sucede actualmente, sino que esa misma
palabra puede significar otra cosa totalmente diferente y no tener una connotación médica
de enfermedad cuando es utilizada en otra situación.
Rose analiza términos como “mutilado”, “deforme”, “débil”, “saludable”, “incompleto” e
“imperfecto”, “cojera” y el término “incapaz” haciendo comparaciones de diferentes
contextos en los que aparecen; primero como unos síntomas y luego, en otras situaciones
registradas por escrito, como en la literatura, en la mitología, en la poesía o también en
situaciones históricas específicas. Por ejemplo, el término “mutilado”, que representa una
condición física en la que hace falta un miembro, se manifiesta en otros registros con un
significado diferente. Rose menciona a Teofrasto, un botánico que habla de las plantas con
mutilaciones14
, también hace referencia a Aristóteles que cuando se refiere a la mutilación
se refiere a cualquier cosa que le haga falta algo, sea una persona o un objeto. Otro ejemplo
que analiza Rose es el término “incapaz” y dice que este no significa lo mismo que hoy en
día cuando se le asocia a la persona con discapacidad. Afirma: “There are crucial
13 Rose, Martha L (2010). “Cap 1. The Landscape of Disability” Corporealities: Discourses of disability: The staff of Oedipus: Transforming disability in ancient Greece, pag 11. 14 Ibid. ., p 12
Nicolás Tamayo Guerrero
differences between the Greek “unable” and the modern “disable”…The greek term is
literal and is seen in many situations in which one is not able to accomplish something”15
(Hay diferencias cruciales entre el término griego “incapaz” y el término moderno
“discapacitado”… el término griego es literal y es visto en muchas situaciones en las que
uno no es capaz de lograr alguna cosa. La traducción es mía). La autora plantea una
separación entre ambos términos para que no haya una confusión en la interpretación del
término “incapaz” cuando aparezca en la antigua Grecia, ya que si se lo asocia con la
discapacidad, se está cayendo en el error de pensar que los griegos asociaban la incapacidad
solamente con personas que tuvieran alguna enfermedad o limitación física, mientras en
realidad este término se aplicaba a la sociedad en general. Estos son algunos ejemplos del
lenguaje que aparece en los textos médicos analizados por Martha L. Rose, para sustentar
su teoría de que la discapacidad aparecía en contextos y situaciones específicas.
Al igual que en Mesopotamia, los casos de “asesinatos a recién nacidos” también son tema
de análisis en la antigua Grecia, en especial porque se sabe de ciertas ciudades estado
griegas en donde era costumbre deshacerse de bebés recién nacidos y se tiende a pensar que
se debía a que nacían con algún tipo de enfermedad o deformidad. Estos casos se analizan
porque pueden mostrar una idea sobre la noción de discapacidad del periodo clásico griego,
ya que la tendencia común es pensar que el infanticidio se daba por la necesidad de tener
una sociedad perfecta de cuerpos perfectos pero, como explicó Walls en el caso
mesopotámico, ésta no era la razón específica, puesto que en la decisión de eliminar un
bebé recién nacido influían muchos otros factores.
En otro capítulo de su libro, Martha L. Rose trata también el tema y su argumento es muy
parecido, en el sentido en que las razones para deshacerse de un bebé no se relacionaban
con los defectos de nacimiento ni con enfermedades, sino con otros factores. La base del
argumento para Rose es que en el periodo clásico griego no existía un concepto
generalizado de lo que es un cuerpo “normal” y se fundamenta, en que el cuerpo de los
griegos se asume desde una perspectiva moderna; es decir, que la forma como los griegos
entendían el cuerpo es igual a como hoy se entiende, aunque ella no está de acuerdo con ese
planteamiento ni con esa interpretación que se hace de los griegos. Sobre eso dice lo
siguiente: “It is important to avoid projecting present day interpretation of Classical
statuary onto fifth century Greeks. Mathematical measurements of conformation to an ideal
were not applied, as they are to a fanatical degree in our own day, to the ordinary, living
human body”.16
(Es importante evitar interpretaciones actuales de la estatuaria clásica de
los griegos del siglo V. Las medidas matemáticas ideales no se aplicaban en esa época de la
forma tan fanática que se hace hoy en día al cuerpo viviente ordinario. La traducción es
mía). Basándose en esta idea, es que Rose no concibe que el infanticidio se diera por
15Ibid. ., p 14. 16 Rose, Martha L (2010). “Cap 2 Killing Defecting Babies” Corporealities: Discourses of Disability: The Staff of Oedipus: Transforming Disability in Ancient Greece, pag 37.
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
19
razones relacionadas a las funciones corporales de los recién nacidos. Más bien las razones
eran similares al argumento de Walls y los factores sobrenaturales; el sacrificio de un bebé
sirve para contrarrestar el mal y deshacerse de los males en una sociedad. Rose concluye
que cualquiera que fuera la razón para matar un bebé, no era una sola generalizada para
toda la sociedad sino que cada caso particular tenía sus razones específicas.
Nicole Kelley plantea el tema de las personas con discapacidad como objeto de burla en la
antigüedad, basándose en ejemplos tanto de Grecia como de Roma. En hechos reales
históricamente documentados, como en la mitología y en textos como La Ilíada, esta autora
muestra otra faceta de esas sociedades antiguas al enfrentarse a los diversos cuerpos. Ella
menciona el caso del dios Hefesto cuyo papel era ser el herrero de los dioses y presentaba
ciertas deformidades físicas que son descritas tanto en la Ilíada y en la Odisea como en la
Teogonía de Hesiodo, un texto de la antigua Grecia que trata los orígenes del mundo y de
los dioses. En estos textos, Hefesto es objeto de burla por parte de los dioses olímpicos
debido a sus malformaciones en los pies. En otra parte de su artículo, Kelley revela que
tanto en Grecia como en Roma la discapacidad no solo era objeto de burla, también era
entretenimiento. El caso de Hefesto es un ejemplo de esto, en los banquetes los demás
dioses solían burlarse de él y estas burlas eran para el entretenimiento de todos. También en
los banquetes o fiestas de la aristocracia había personas con deformidades que eran
utilizadas como entretenimiento. Inclusive Kelly describe la existencia de un “mercado de
monstruos” en la antigua Roma, en donde se compraban esclavos con malformaciones para
ser utilizados para el entretenimiento. A pesar de todo esto, Kelley propone que esas
personas con discapacidad no eran excluidas del trabajo como sucede hoy en día.
Otros temas importantes que se tratan cuando se habla de discapacidad en la Grecia antigua
son la sordera y la ceguera. Los textos antiguos mitológicos, literarios, de poesía, teatro o
las historias y anécdotas están llenos de representaciones de sordos y ciegos. De acuerdo
con el tema, la discapacidad que traen consigo, la sordera y la ceguera, no se relaciona con
la falta de las funciones, sino con la forma en que según la cultura y según el contexto se
veía la falta de una función como el oído o la vista. Es decir, que no en todos los casos era
incapacitante la pérdida de la visión y la audición y por ende, no siempre eran motivo de
exclusión ni de estigmatización; solo en situaciones específicas eran vistas como
discapacidades. La discapacidad producida por la sordera se asocia más a la imposibilidad
de hablar que a la de escuchar y esto se debe al valor cultural que le daban los griegos al
habla.
Nuevamente Martha L. Rose en sus textos Croesus other son: Deafness in a culture of
comunication y Deaf and Dumb in Ancient Greece plantea esta idea, la discapacidad que
afecta a la sordera y en consecuencia el estigma que genera, son producto no de la
inhabilidad de escuchar sino más bien de la incapacidad de comunicarse. En ambos textos
Rose menciona la palabra en griego antiguo para designar al sordo (kophos) y al igual que
Nicolás Tamayo Guerrero
los otros términos mencionados en este ensayo, la palabra para designar al sordo también
tiene un connotación de enfermedad solamente en contextos relativos. Tiene varios
significados y en otras situaciones significa otra cosa, por lo general, esta palabra se asocia
a cualquier cosa que no produzca un sonido, al silencio total no siempre relacionado con las
personas y no siempre de forma negativa17
. En ese orden de ideas cuando se ve de forma
negativa la sordera es en el caso en que la comunicación es relevante. Rose explica que la
comunicación y la inteligencia eran conceptos asociados: “Language was the hallmark of
human achievement, so muteness was beyond a physical condition. An inability to speak
went hand in hand with inability to reason, hand in hand with stupidity”18
(El lenguaje era
lo más grandioso en los logros humanos, así que la mudez iba más allá de una simple
condición física. Incapacidad para hablar iba de la mano de la incapacidad para razonar y a
su vez de la mano con la estupidez. La traducción es mía).
Según esto, la sordera sólo se convertía en una discapacidad, con todo lo que una
discapacidad trae consigo, cuando impedía la comunicación de una persona; debido a que la
cultura de Grecia en el periodo clásico valoraba enormemente la capacidad de expresar las
ideas por medio del habla y de comunicarse. Aún así, el discurso y la comunicación oral no
eran igualmente valorados en todas las esferas sociales. Rose argumenta que:
On the one hand, Herodotus greek audience knew that Croesus son could never
become King. On the other hand, the deaf child of a farmer or shepherd, even if
considered utterly stupid and incapable of political activity, could certainly carry out
any number of tasks. Aristotle and his circle had the luxury to despise lack of
eloquence, but the average peasant would be far less concerned with his child forensic
skills.”19
(Por un lado, la audiencia griega de Herodoto sabía que el hijo de Croeso nunca sería rey.
Por otro lado, el hijo sordo de un granjero o de un pastor, aunque fuera considerado
estúpido e incapaz de actividad política, podría de todas formas realizar cualquier tarea.
Aristóteles y su círculo se podían dar el lujo de despreciar la falta de elocuencia, pero a un
campesino común no le importarían las habilidades forenses de su hijo La traducción es
mía). Para aclarar el contexto de la cita, hay que recordar que Croeso tenía un hijo sordo
que era desprestigiado, pero hubo un momento en el que habló para salvar a su padre y así
fue redimido. El punto central detrás de esta cita es que el hecho de no poder comunicarse
crea una discapacidad y no el hecho de ser sordo, porque la discapacidad sólo se genera en
17 Rose, Martha L (2010). “Cap 4. Croesus Other Son: Deafness in a Culture of Communication” Corporealities: Discourses of disability: The staff of Oedipus: Transforming disability in ancient Greece, pag. 66-78. Esta es una idea general recurrente a través de todo el texto. 18 Rose, Martha L (2006). “Deaf and Dumb in ancient Greece” The Disability Studies Reader Second Edition, pag 21. 19 Ibíd, pag 22.
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
21
un contexto específico y en una situación en la que la comunicación sea importante. Como
dice la cita, al hijo de un campesino no le importarían las habilidades retóricas, no las
necesita para realizar sus labores, en el caso de ser el hijo de un político o de ser un filósofo
que no puede comunicarse entonces se vería “discapacitado” y ahí se produciría una
degradación de la persona. Esto encaja con el argumento principal de la autora porque la
sordera es un ejemplo concreto de cómo la discapacidad es algo relativo, no sólo a la época,
la cultura o al tipo de sociedad, sino que también es relativa de un contexto y de una
situación específica; ese es el punto central del argumento de Rose.
Sucede algo parecido con el modelo de aproximación a la ceguera en la antigua Grecia, a
excepción de una cosa. Al igual que con el término para describir la sordera, la palabra para
ciego tenía varios significados, dependiendo de los contextos en los que se usaba. La
palabra en griego es tuphlos y significaba ciego en varios sentidos, no sólo física sino moral
y figurativamente también20
. Pero ser ciego en Grecia significaba algo totalmente distinto a
ser sordo y tenía bastante importancia en la sociedad, ya que no simplemente era una
característica común de la gente sino que en el material escrito de la época, como las
tragedias o las comedias y en La Ilíada y La Odisea, que son los textos fundacionales de la
cultura griega que sirven como modelo cultural a seguir por todos los griegos, hay muchas
referencias a los ciegos; empezando por el autor, Homero, que era ciego. Rose cita a
William Paulson: “William Paulson, in Enlightment, romanticism, and the blind in France,
points out that blindness is not a phenomenon that exists independently; rather, its
definition and meaning are determined by any given culture”21
(William Paulson en su
texto señala que la ceguera no es un fenómeno que existe independientemente; por el
contrario, su definición y significado son determinados por cualquier cultura. La traducción
es mía). Basándose en esto, Rose trata la ceguera de esa forma en la Grecia antigua, no
entiende la ceguera en términos actuales sino en los términos precisos de esa época. No
había una sola forma de entender la ceguera sino que era entendida de acuerdo a contextos
específicos.
De acuerdo con Rose, en algunos casos la ceguera se ve como algo negativo, ella menciona
que en cierta época se pensaba que la ceguera era un castigo de los dioses y por esta razón
se discriminaba a ciertos ciegos22
. En otros casos, la ceguera era vista como una especie de
bendición, ya que en la antigüedad hay relatos de muchos casos de profetas ciegos a los que
se les da una especie de poder a cambio de la ceguera23
. En otros casos, simplemente era
una condición más que podía hacer parte de la vida de cualquier persona, como Rose lo
explica: “No one in the Greek World was inmune to blindness. Most of us in the developed
20 Rose, Martha L (2010). “Cap 5. Degrees of Sight and Blindness” Corporealities: Discourses of disability: The staff of Oedipus: Transforming disability in ancient Greece, pag 80 21 Ibíd. ., p 80 22Ibíd. ., p 87 23Ibíd. ., p 90
Nicolás Tamayo Guerrero
world live in the luxury of assuming that we will not among other fates become blind”24
.
(Nadie en el mundo griego era inmune a la ceguera. Nosotros en el mundo desarrollado
vivimos en el lujo de asumir que nunca quedaremos ciegos entre otros destinos. La
traducción es mía) Según esto, la ceguera era aceptada por la sociedad como parte de la
vida de cualquier persona y no se le daba una connotación ni negativa ni positiva, ya que
cualquier persona aceptaba la ceguera como parte de la vida. Claro está que todas estas
formas de entender la ceguera dependían de contextos, periodos y casos específicos; no es
que fuera la visión global de la sociedad.
El punto central de Rose es que la manera moderna de entender la ceguera como una
discapacidad generada por falta de una función y la connotación negativa que trae consigo,
son el “paradigma” actual, por llamarlos así, por el cual se analiza la ceguera en la antigua
Grecia; y de esta misma forma, ese “paradigma” actual utiliza la interpretación que se hace
de la ceguera en la antigüedad como base para perpetuarse. Como yo lo entiendo, su
argumento funciona como una retroalimentación. Actualmente se entiende la ceguera como
algo negativo, con esto en mente se analiza la ceguera en la antigua Grecia y basándose en
la información encontrada, se interpreta para seguir con esa mirada negativa de la
actualidad. La información y los registros históricos y materiales están ahí, la forma de
entender la discapacidad entonces depende del modelo o enfoque que se utilice para
interpretar esos datos.
En resumen, la forma en que los autores mencionados interpretan la forma de entender y
aproximarse a la discapacidad que había en la antigua Grecia y en Roma, es contextual.
Como dice Martha L. Rose: “disability has no inherent meaning”25
(la discapacidad no
tiene un significado inherente. La traducción es mía), sino que depende del entorno y el
contexto y de otros factores que son los que definen la discapacidad. En el caso griego
menciona cómo los términos para designar al cuerpo humano y sus facultades o la falta de
estas, son relativos y su connotación depende del contexto o situación en que se usen.
Casos como el de Hefesto, el de los infanticidios y el de los sordos y ciegos son utilizados
para explicar esta idea de cómo en la Grecia antigua la discapacidad era relativa. Kelley
propone que lo que constituye y define una discapacidad se construye de forma diferente
dependiendo de cómo se entienda el cuerpo: “disability is not so much an objective reality
as the product of discursive practices (broadly constructed) that marginalize, exclude, and
limit those whose bodies have certain physical traits”.26
(La discapacidad no es una
realidad objetiva, pero sí el producto de prácticas discursivas construidas que marginalizan,
excluyen y limitan a los que tienen unos cuerpos con ciertos rasgos físicos. La traducción
es mía). Argumenta que la discapacidad es un discurso y no algo físico real; plantea que la
24 Ibíd. ., p 92-93 25Rose, Op.Cit., p 17 26Kelley, Op.Cit., p 34
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
23
forma de entenderla en la antigua Grecia es variante; como mostró en sus ejemplos, había
varias maneras de ver la discapacidad.. Kelley describe como “ambivalente” la forma de
aproximarse a la discapacidad en la antigua Grecia, ya que no siempre era vista de la misma
forma ni bajo el mismo modelo.
La Biblia:
Para hacer una aclaración, esta sección sobre la Biblia no es introducida en este ensayo
como el ítem siguiente en el orden cronológico que se viene analizando, simplemente
porque se abarcan periodos de tiempo muy amplios que no encajan entre Mesopotamia y
Grecia, ya que en la Biblia está el antiguo testamento que abarca desde los orígenes del
judaísmo hasta el inicio del cristianismo, y el nuevo testamento que narra la vida de Jesús,
por supuesto, era después de Cristo. De esa época se extraen las formas de ver la
discapacidad de acuerdo con el cristianismo que son diferentes a las del judaísmo. Esta es la
razón para quebrar un poco el orden cronológico que estaba utilizando en este ensayo.
La Biblia es hoy en día considerada uno de los textos más importantes del mundo
“occidental”, es la base de la religión con mayor número de miembros y es el fundamento
de un sistema moral que rige la vida de un gran número de personas en la actualidad. En los
textos bíblicos hay numerosas referencias a la discapacidad, tanto en el antiguo testamento
como en el nuevo, y dado que el sistema moral que rige gran parte de la humanidad se basa
en la Biblia, los modelos de entender la discapacidad que hay en este texto son de gran
importancia. Uno de los puntos en los que se enfocan los estudios que se han realizado
sobre la discapacidad en la Biblia, es el cambio que se dio a partir del nuevo testamento;
este rompe con varias de las tradiciones y creencias del judaísmo incluyendo la forma de
ver a las personas con diferencias corporales.
En el tema de la discapacidad en la Biblia, Héctor Avalos, uno de los académicos ateos más
conocidos, plantea una teoría que llama sensory criticism o “crítica sensorial”, que sería la
traducción más precisa. El planteamiento es básicamente un enfoque en los sentidos y la
validez relativa de estos; relativa quiere decir según Avalos que la importancia de los
sentidos no es la misma siempre. Según él, hubo momentos en los que se le dio más
importancia a un sentido que a otro y, en diferentes espacios, situaciones y momentos
históricos la importancia que se le daba a los sentidos iba cambiando. Otro enfoque teórico
que se plantea con respecto a la Biblia, es lo que Karry H. Wynn llama the normate
hermeneutics, una vaga traducción sería “las hermenéuticas normativas”, ya que el
concepto está en inglés originalmente. La idea detrás de esto es que las interpretaciones que
se hacen sobre los textos bíblicos están basadas en el concepto normativo de la actualidad,
es decir, un concepto de cuerpo normal que es válido y que hoy en día se utiliza para
interpretar el pasado, según Wynn. Así que básicamente ambos autores trabajan bajo el
mismo enfoque que otros ya citados en este ensayo.
Nicolás Tamayo Guerrero
Avalos en su texto expone los términos audiocentricity y visiocentricity y los utiliza para
analizar la importancia de los sentidos en la Biblia. No tienen traducción al español pero se
entiende que el primero se refiere al oído como el sentido más importante y el segundo se
refiere a la vista. En el texto Introducing Sensory Criticism in Biblical Studies, Héctor
Avalos habla de la “Historia Deuteronomista”, que son los libros del antiguo testamento
que empiezan con el Deuteronomio y terminan con el libro Reyes II. Aquí el autor se
enfoca en la importancia que se le da en esta parte del antiguo testamento al oído como el
sentido fundamental. Avalos muestra varios ejemplos, en estos se enfatiza la importancia de
escuchar a dios o al YHWH27
, la comunicación con el dios judío es principalmente auditiva
y no visual:
The denial that the israelites saw any form of Yahweh is repeated in verse 15. This
denial, in turn, is directly linked to a warning not to make any visual representation of
Yahweh or anything else in the world. Furthermore, this passage affirm that the
israelites did not need to see Yahweh to receive correct information about his will and
commandments. Hearing was sufficient.28
(Esto significa que la negación de que los israelitas vieran cualquier forma de Yahveh se
repite en el verso 15. Esta negación se relaciona con una advertencia de no hacer ninguna
representación visual de Yahveh o de cualquier otra cosa en el mundo. Más allá de eso, esto
significa que los israelitas no necesitaban ver a Yahveh para recibir información correcta
sobre su voluntad y mandamientos. Escuchar era suficiente. La traducción es mía). Esto lo
dice Avalos a modo de conclusión basándose en un gran número de ejemplos que cita de la
Biblia, en donde muestra cómo la importancia de la comunicación con la deidad está en
poder escucharlo y no en poder verlo; de ahí que mencione en la cita la parte de las
representaciones físicas de dios que están prohibidas, ya que se comunican con dios
directamente y este no se manifiesta de forma visual sino auditiva. Avalos cita en su texto
varios fragmentos de esa parte del antiguo testamento en donde se prohíbe la idolatría física
y visual del dios judío, él trata de encontrar una razón para esta prohibición y entre varios
argumentos destaca la resistencia del pueblo de Israel a las invasiones de los babilónicos y
otros mesopotámicos que basaban su poderío en lo visual29
, ya que estas civilizaciones
tenían no sólo grandes ciudades y palacios sino también representaciones físicas de sus
dioses.
27 El famoso tetragrámaton YHWH es el nombre que se le da al dios judío en el antiguo testamento y con el que dios se representa a sí mismo, es la raíz lingüística de donde sale Yahveh o Jehová. 28 Avalos, Hector (2007). “Introducing Sensory Criticism in Biblical Studies” This Abled Body: Rethinking Disabilities in Biblical Studies, pag 51. 29Ibíd. ., p 54
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
25
Así, Avalos argumenta la importancia de la oralidad para antiguos judíos como una forma
de diferenciarse de otros pueblos a quienes consideraban enemigos y que tenían una cultura
más visual. Los argumentos de este autor se enfocan en mostrar que la importancia de los
sentidos se daba en contextos específicos. En la Biblia no aparece un sólo modelo de la
discapacidad, esta aparece dependiendo del momento en que la falta de una función se
vuelva limitante. En el caso de lo que muestra Avalos, debido a la importancia de la
oralidad y de la comunicación con dios de forma auditiva, la discapacidad se definiría a
partir de las personas que no pueden cumplir estas funciones.
En otro contexto, como muestra Avalos, también sería la vista la facultad importante y por
lo tanto la que crearía una discapacidad en caso de no poseerla. Él analiza el libro de Job en
el antiguo testamento para probar su punto; en este caso sucede todo lo contrario que en la
“Historia Deuteronomista” ya que las referencias a la visión como la forma de
comunicación con dios son principales en Job. Avalos cita un gran número de fragmentos
en donde aparece la importancia de ver a Dios, pues Job ya lo había escuchado y no era
suficiente con esto. Avalos cita el texto original de Job 42:5 “Ii had heard of thee by
hearing of the ear, but now my eyes see thee”30
(Había oído de ti por medio del oído pero
ahora mis ojos te ven) y sobre esto comenta: “then it is reasonable to expect to find some
indications that just hearing Yahweh or hearing about Yahweh was not providing Job with
sufficient satisfaction”31
(Entonces es razonable esperar encontrar algunas indicaciones que
muestren que solamente oír a Yahveh o escuchar sobre Yahveh no le daba a Job suficiente
satisfacción. La traducción es mía). Al igual que con los textos de la “Historia
Deuteronomista”, la discapacidad se define de acuerdo a la falta de una función, de uno de
los sentidos como los denomina Avalos. En el caso de Job es la vista, no ver a su dios
imposibilita la comunicación; al igual que en los otros textos es la imposibilidad de oírlo y
así se entiende la discapacidad de acuerdo a las funciones corporales a las que se les da
importancia en un contexto específico.
Thomas Hentrich en el artículo Masculinity and Disability in the Bible hace mención de la
perfección del dios judío y de las figuras masculinas como modelos a seguir en la sociedad
judía de la antigüedad. Él enfatiza que Israel era una sociedad patriarcal y esto explica que
los modelos a seguir sean los hombres, empezando por un dios de género masculino que es
perfecto físicamente; entonces, si todos los seres humanos están hechos a la imagen y
semejanza de Dios, todos deberían tener cuerpos perfectos. De esta misma forma Hentrich
analiza al famoso rey David como el hombre perfecto y modelo a seguir en esta sociedad
que veía en él un arquetipo de cómo debería ser un miembro de la sociedad israelita. De
acuerdo con esto, se generaba una discapacidad en aquellos que no cumplieran con estos
modelos de “hombre perfecto”, como las mujeres y las personas con limitaciones
30Ibíd. ., p 55 31Ibíd. ., p 55
Nicolás Tamayo Guerrero
corporales. Lo que sucede con el argumento de Hentrich es que él plantea que estos
modelos masculinos no producían una discapacidad generalizada, solamente en contextos
religiosos; los cuerpos con diferencias (alteraciones o discapacidades) eran vistos por la
sociedad generalmente como castigo divino, pero esto sólo producía la exclusión y
estigmatización típica de la discapacidad en los ambientes religiosos: “The situation for
disabled or otherwise afflicted people was compounded by the impact of the purity laws on
any illnes or injury. They essentially turned them into outsiders and second class citizens;
at least where temple worship is concerned”32
. (La situación de los discapacitados o los
afligidos era agravada por el impacto de las leyes de pureza sobre cualquier enfermedad o
herida. Estas esencialmente convertían a estas personas en ciudadanos de segunda clase, al
menos en cuanto se refiere a la adoración en los templos. La traducción es mía). Aquí se
muestra la relatividad de la discapacidad, un argumento central en Hentrich; para él, una
condición del cuerpo o una limitación solo se veía como discapacidad en un contexto
específico. El religioso es el ejemplo clave, estas leyes de pureza que se mencionan en la
cita son leyes de los templos para poder adorar a su dios y producían exclusión a las
personas con cuerpos diferentes al modelo que proponía el dios masculino y la sociedad
patriarcal.
Estas investigaciones citadas tratan sobre el Antiguo testamento. El Nuevo testamento es
algo totalmente diferente en cuanto a la forma de ver la discapacidad, en especial porque
aquí Jesús rompe con los esquemas de la sociedad tradicional judía y mediante su discurso
de la compasión empieza a darle importancia a personas que antes eran excluidas y vistas
como discapacitadas. Este modelo de la compasión de Jesús es explicado por Martin Albl
en su texto For Whenever I Am Weak Then I Am Strong: Disability in Paul´s Epistles. En
este texto se habla de una paradoja que menciona Pablo en sus epístolas, representa a Jesús
como débil y discapacitado por un lado y poderoso y glorificado por el otro. El argumento
de Albl se basa en que la paradoja muestra que Jesús vino a la tierra y vivió como una
persona con debilidades y pecados, pero a la vez representaba la salvación de la humanidad.
Así que para Albl, Jesús representa una nueva era sin discapacidad ni imperfecciones, pues
con su muerte limpió a la humanidad de todo lo “imperfecto”; lo importante aquí es que
Jesús crea el ideal de un mundo mejor para las personas con cuerpos diferentes que eran
excluidos.
Como lo entiendo, funciona así: Jesús compartió todo lo “malo” de la humanidad, cuando
murió se sacrificó por esos “males” (las enfermedades y la falta de funciones hacen parte de
esos males) y mostró que habría una vida mejor en el cielo sin esos “males”. Con esto Jesús
acaba con ese contexto religioso del antiguo testamento que excluye de la adoración a las
32Hentrich, Thomas (2007). “Masculinity and Disability in the Bible Thomas” This Abled Body: Rethinking Disabilities in Blibical Studies, pag 76.
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
27
personas con enfermedades y cuerpos “anormales” y permite que estas sean incluidas bajo
la promesa de una vida mejor después de la muerte. Albl dice lo siguiente sobre estas ideas:
Paul’s thought challenged in a fundamental way, the accepted understanding of
disability in his day, removing it from the realm of social stigma and from its close
association with sin and the demonic. Rather, disability was an occasion for a person
to allow true divine power, the power of the crucified and the resurrected Christ, to
manifest itself in his or her own life.33
(El pensamiento de Pablo desafió la forma de ver la discapacidad en su época,
removiéndola de la estigmatización social y su asociación con el pecado y lo demoníaco.
En cambio, la discapacidad era la ocasión para que una persona tuviera verdadero poder
divino, el poder del Cristo crucificado y resucitado, para que se manifestara en su vida. La
traducción es mía). Así que según Pablo, la discapacidad pasó de tener una connotación
negativa en el Antiguo testamento, a ser valorada de forma positiva en el nuevo.
Hay otros autores que muestran una versión diferente para ver la discapacidad en el nuevo
testamento, refutando los argumentos de Martin Albl sobre el discurso de Pablo. La crítica
que realizan David Mitchell y Sharon Snyder en el artículo Jesus Thrown Everything Off
Balance: Disability and Redemption in Biblical Literature, se basa en un simple
argumento: la compasión de Jesús con los enfermos y discapacitados crea un modelo de
sociedad perfecta y esto impide que la sociedad cambie y permite que siga excluyendo a los
“discapacitados” bajo la excusa de que habrá una vida mejor para ellos después de la
muerte. Para Mitchell y Snyder la compasión de Jesús y ese nuevo modelo de ver la
discapacidad que plantea Martin Albl en el que se rompe con las normas del Antiguo
testamento, es en realidad una forma de hacer invisible la discapacidad y no de hacer una
sociedad más inclusiva. La idea de estos autores es simplemente decir que Jesús al curar y
sentir compasión por los enfermos (discapacitados) y prometer una mejor vida en el cielo,
está en realidad haciendo que la sociedad no se preocupe por mejorar la vida de estas
personas con discapacidad, ya que tendrán una mejor después de morir.
Me pareció interesante este argumento, en especial porque Mitchell y Snyder hacen
referencias a Friedrich Nietzsche y su libro Así habló Zarathustra; en este libro, Zarathustra
es un profeta que lleva viviendo solo en una montaña por diez años y decide acabar con su
exilio para enseñar y darle un mensaje a la humanidad con el que intenta invertir los valores
de la cultura y hacer una crítica a la moral, pero desiste porque las personas al parecer no
entienden lo que quiere decir34
. Zarathustra es una especie de Jesús pero predica y enseña lo
33 Albl, Martin (2007). “For Whenever I Am Weak Then I Am Strong: Disability in Paul’s Epistles” This Abled Body: Rethinking Disabilities in Biblical Studies, pag. 158. 34 Nietzsche, Friedrich (edición 1982) “Así habló Zarathustra”. No pretendo profundizar en las discusiones filosóficas de este texto que son infinitamente más complejas que lo que acabo de decir, solamente hago
Nicolás Tamayo Guerrero
contrario. La referencia que hacen Mitchell y Snyder es de un episodio en un momento en
que los enfermos le piden a Zarathustra que los cure, cosa que también sucedía con Jesús.
Estos autores dicen lo siguiente: “In response Zarathustra emphasizes the value of their
bodily situations as the foundation of their character. The erasure of disability would not
prove his divine qualities but rather trust them into a commerce with a mainstream culture
that is devoid of worth”35
(En respuesta Zarathustra enfatiza el valor de la situación
corporal como el fundamento de su carácter. Hacer desaparecer la discapacidad no probaría
sus cualidades divinas pero sí haría que estas personas hicieran parte de una cultura popular
sin valor. La traducción es mía). Es decir, que si cura a los enfermos con discapacidades o
malformaciones los haría parte de una cultura normativa que no acepta sus condiciones36
y
esto, en el argumento de Mitchell y Snyder es lo que sí hace Jesús, quien no está haciendo
ninguna inclusión sino que está erradicando la discapacidad para que las personas hagan
parte de la sociedad en la que todos son iguales y perfectos. Estos dos puntos de vista sobre
el Nuevo testamento son un ejemplo de cómo la forma o el modelo de entender la
discapacidad en otras épocas no se puede conocer sino interpretar y, las interpretaciones
varían de acuerdo a la mirada que se utilice para analizar los casos.
Para concluir, se puede decir que al igual que en los estudios sobre Mesopotamia y Grecia,
la propuesta de los autores que analizan el caso bíblico es ver la discapacidad como relativa
al contexto histórico y social. En el Antiguo testamento se le da importancia a los sentidos
(como Avalos denomina las funciones sensoriales del cuerpo) y se plantea que sólo se
produce una discapacidad dependiendo del sentido al que se le da importancia en un
momento histórico. Allí también se mencionan unas leyes religiosas específicas para alabar
al dios judío que excluían de los templos a los enfermos y discapacitados, según la
concepción de Thomas Hentrich esta exclusión en el ambiente religioso se basa en el
modelo patriarcal israelita de los hombres perfectos.
Estos artículos mencionados son muestra de las diferentes interpretaciones que se hacen de
los textos bíblicos buscando un modelo para entender la discapacidad. Estos autores
citados, en su mayoría, están influenciados por los modelos actuales para entender la
discapacidad, como el modelo social o el relacional y de acuerdo a esto interpretan la
discapacidad que aparece en la Biblia.
referencia a un episodio del libro citado por Mitchell y Snyder que tiene importancia para el tema de la discapacidad. 35 Mitchell, David, Snyder, Sharon (2007) “Jesus Thrown Everything Off Balance: Disability and Redemption in Biblical Literature” This Abled Body: Rethinking Disability in Biblical Studies, pag 180. 36 Un examen de la crítica a la cultura y a la moral que hace Nietzsche no es un tema de este ensayo, la referencia es solo un ejemplo que se relaciona con la discapacidad.
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
29
Edad Media:
La Edad media es un periodo histórico que se ubica entre la caída de Roma en el 476 d. c. y
la caída total del Imperio romano (llamado por los historiadores del siglo XIX Imperio
bizantino) en el siglo XV. Este es un periodo de la historia muy extenso que fue dominado,
en Europa particularmente, por la Iglesia católica. Esto es importante ya que los estudios
sobre discapacidad en el periodo medieval se centran en Europa, y la moral y las doctrinas
religiosas influyen en la forma de ver la discapacidad. Claro está que no en toda la Edad
media existía una sola forma de ver la discapacidad y, dado que es un periodo tan extenso,
los historiadores suelen dividirlo en Edad Media Temprana, Alta Edad Media y Edad
Media Tardía, una sucediendo a la otra cronológicamente. La visión general sobre la
discapacidad en la Edad Media, según dice Joshua R. Eyler en la introducción al libro
Disability in the Middle Ages: Reconsiderations and Reverberations, en la que cita la
opinión de Edward Wheathley, es que la discapacidad se crea a partir del “modelo
religioso” y éste se basa en el argumento de que la religión tenía en la Edad media el mismo
papel que la ciencia y la medicina hoy en día37
. Entonces, el “modelo religioso” funcionaba
de la misma forma que en épocas más modernas funcionó el modelo médico, que es
excluyente. Se planteaba el pecado como causante de la discapacidad y las personas eran
excluidas y relegadas al cuidado de la Iglesia. Eyler propone que este modelo de Weathley
es bastante complicado y generalizador, porque supone una sola forma de ver la
discapacidad en la Edad media cuando en realidad, según Eyler, en este periodo se
conocían y reconocían las limitaciones físicas y las diferencias de los cuerpos, pero se
aceptaba que no siempre generaban discapacidad.
En el texto Representation of Disability: The medieval literary tradition of the Fisher King,
Kisha G. Tracy expone varias formas de ver la discapacidad en la Edad media, basándose
en un texto literario que junto con otros escritos y libros hace parte de la conocida leyenda
del Rey Arturo. El texto trata sobre un rey que protege el Santo Grial y que tiene algunas
alteraciones en las piernas que varían de acuerdo a las versiones de la historia. Tracy
analiza estas versiones y argumenta que la connotación, ya sea negativa o positiva, de la
discapacidad del rey varía de acuerdo a los contextos en los que se escribieron esas
versiones. En unos relatos inspira compasión mientras que en otros su discapacidad es la
base de su poder como rey. Tracy dice lo siguiente: “The Fisher King disability is
manipulated by these authors to serve the purpose of their texts and can be approached
from multiple angles- such as the relevant social and /or religious concerns and the
functions of narrative”38
(La discapacidad del rey pescador es manipulada por esos autores
para servir un propósito en sus textos y se puede entender desde múltiples ángulos, como
las preocupaciones sociales y religiosas y la función de la narrativa. La traducción es mía).
37 Eyler, Joshua R (2010) “Introduction. Breaking Boundaries Building Bridges” Disability in the Middle Ages: Rehabilitations Reconsiderations Reverberations, pag 6. 38 Tracy, Kisha G (2010) “Representations of Disability: The Medieval literary tradition of the Fisher King” Disability in the Middle Ages. Rehabilitations Reconsiderations Reverberations, pag. 105.
Nicolás Tamayo Guerrero
Básicamente lo que está diciendo es que las versiones responden al interés del autor y a la
función que cumplan esos textos, ya sean religiosas, sociales o cualquier otra; esa función
es lo que determina cómo se utiliza el ejemplo del rey discapacitado y la connotación que
se le da a su discapacidad.
Otro ejemplo de cómo la forma de entender la discapacidad cambia a lo largo de la Edad
media y de los contextos religiosos, políticos y sociales, se encuentra en el texto de John P.
Sexton Difference and Disability: On the logic of naming in The Icelandic Sagas. Aquí se
narran casos de personas con discapacidad en contextos muy diferentes a los otros casos
medievales, ya que las Sagas Islandesas hacen parte de una cultura totalmente diferente a la
del resto de Europa; en especial porque los países nórdicos adoptaron el cristianismo
mucho después que el resto de la sociedad europea. En ese texto se presenta el caso de
Onund Ofeigsson, un guerrero que perdió una de sus piernas en una batalla. El guerrero
siente vergüenza de su pérdida pero sus amigos le recuerdan que esta herida se debe a que
tuvo valor en batalla y que se arriesgó valientemente. En esta cultura el valor y el coraje son
parte fundamental de la vida, en el sistema religioso nórdico la muerte en batalla
significaba reunirse con sus dioses y vivir como uno de ellos, así que morir combatiendo
era algo muy valorado. Onund Ofeigsson no murió, pero sí fue valiente y en el relato se
sabe que después luchó más batallas y salió victorioso; y su discapacidad la utilizó para
recordarse a sí mismo el valor. Aquí se presenta un concepto de discapacidad que se
diferencia de otros en la Edad Media; si en el mundo cristiano los enfermos y
discapacitados son el producto del pecado y por eso deben ser excluidos, en las Sagas
Islandesas hay un ejemplo de cómo una persona es recordada por su discapacidad de forma
“positiva” por decirlo así, ya que a Onund Ofegisson nunca lo reconocen como alguien
incapaz de vivir de acuerdo a los estándares sociales por su discapacidad, sino como
alguien que la utilizó para impulsarse a ser mejor.
Estos ejemplos muestran cómo varía la definición y la concepción de la discapacidad a
través de diferentes momentos y espacios geográficos de la Edad Media. Ya que la religión
dominó durante gran parte de ese periodo, se tiende a pensar que la forma de entender la
discapacidad es general para toda la sociedad medieval, pero la realidad, como dice Joshua
R. Eyler, es diferente: “Think of disability in the Middle Ages as something that is
constructed by both bodily difference and social perception at the same time”39
(piensen en
la discapacidad en la Edad media como algo construido tanto por las diferencias corporales
como por la percepción social. La traducción es mía). Es decir, que el contexto en el que se
percibe una diferencia corporal, es el que define si ésta produce o no una discapacidad. Esto
se ve en los ejemplos del rey pescador y de las Sagas islandesas, en el primero la
connotación de la discapacidad del rey varía de acuerdo a los intereses del autor y en el
segundo, la discapacidad es vista de forma positiva y no negativa, lo que no quiere decir
39Eyler, Op.Cit., p 8
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
31
que los nórdicos le dieran un valor especial a la discapacidad; es solo un ejemplo de cómo
en contextos específicos suelen cambiar la connotación que se da a las alteraciones y la
forma en que se definen.
Siglo XIX:
La importancia de los estudios sobre discapacidad en el siglo XIX radica en que en este
periodo se definió, por un lado, el concepto de “normal” que se aplica al cuerpo y que sigue
vigente hoy en día; y por otro, es donde se consolida el modelo médico para entender la
discapacidad que se utiliza durante gran parte del siglo XX. En el siglo XIX, se definirían
muchos conceptos importantes, posiblemente porque este periodo es una época de grandes
innovaciones y grandes cambios en el mundo. Se consolida un sistema económico que se
basa en las industrias que están surgiendo y en los cambios que hay en la tecnología y las
ciencias. El siglo XIX es en sí mismo un producto de los cambios que se dieron en los
siglos anteriores en todos los campos del conocimiento, que llevaron a las innovaciones en
Europa. La forma de percibir el mundo en la actualidad tomó forma en este periodo, ya que
en ese momento empieza la consolidación de los estados nacionales, la revolución
industrial, el imperialismo europeo, las innovaciones en las ciencias y en la medicina, las
innovaciones tecnológicas, etc.
También la forma de ver la discapacidad se fue formando en este periodo, ya que nuestra
sociedad se basa en el ideal de un cuerpo “normal”; es más, no sólo se utiliza este concepto
para hablar del cuerpo sino en todo sentido, de modo que lo “normal” es lo que califica la
vida de las personas. Este concepto es la razón para que exista una división entre el cuerpo
“normal” y el cuerpo “con alteraciones o discapacitado”, división en la que se basa la
percepción general de la discapacidad en nuestros días. La importancia histórica de la
discapacidad en el siglo XIX es que en ese periodo se definió lo que significaba ser
“normal” y con esto, se definió la forma de entender la discapacidad en periodos
posteriores.
Lennard J. Davis explica la forma en que se construyó este concepto, en el texto
Constructing Normalcy: The Bell Curve, The Novel, and the Invention of the Disabled Body
in the Nineteenth Century. El argumento fundamental de este texto es que la dicotomía
discapacidad/capacidad se produce a través del concepto de “normal”. La discapacidad es
definida por ese concepto que no existía antes del siglo XIX y que se relaciona con el
surgimiento de la industrialización y de las estadísticas.
Nicolás Tamayo Guerrero
Davis empieza diciendo lo siguiente: “the idea of norm is less a condition of human nature
than it is a feature of a certain kind of society”40
(la idea de norma no es tanto una
condición de la naturaleza humana como una característica de un cierto tipo de sociedad.
La traducción es mía). Luego dice: “As we will see, the social process of disabling arrived
with industrialization and with the set of practices and discourses that are linked to late
eighteen-and nineteenth-century notions of nationality, race, gender, criminality, sexual
orientation, and so on.”41
(Como veremos, el proceso social de discapacitar llegó con la
industrialización y con un número de prácticas y discursos que están ligados a nociones de
nacionalidad, raza, género, criminalidad, orientación sexual y demás conceptos de finales
del siglo XVIII y XIX. La traducción es mía). Estas dos citas explican cuáles son los
argumentos centrales del texto de Davis.En primer lugar, no existe en la naturaleza algo que
califique como normal, y como dice en la segunda cita, es una invención constituida
durante la industrialización mediante discursos asociados a las nociones de lo que es ser
normal. Para saber de dónde viene este concepto, Davis empieza con el origen de la palabra
normal, más específicamente en qué contexto empieza a utilizarse esta palabra para
designar lo que actualmente se entiende como normal; y analiza en qué momento surge con
el significado que tiene en la actualidad. Según él, solamente hasta el siglo XIX se empieza
a utilizar la palabra “normal” para referirse a un promedio. Precisamente, el campo de la
estadística es el que proporciona el concepto de normal para designar un promedio de la
población. Según Davis, este concepto empieza con el estadista francés Adolphe Quetelet
que emplea el término “l´homme moyen” que quiere decir exactamente el hombre
promedio, que es universal. De acuerdo con Davis, este concepto que empezó como una
estadística de las personas se empezó a utilizar en las sociedades en general, lo “normal” se
empezó a asociar con el “promedio” en la estadística. A partir de esto, la sociedad se
normativiza y así se construye lo que “no es normal”; las personas con discapacidad caben
dentro de esta idea de lo que está fuera del promedio42
.
Davis plantea una conexión interesante entre el surgimiento de la estadística y la eugenesia:
“statistics is bound up with eugenics because the central insight of statistics is the idea that
population can be normed. An important consequence of the idea of the norm is that it
divides the total population into standard and nonstandard subpopulations”43
. (La
estadística está atada a la eugenesia, porque el punto central de la estadística es que la
población puede ser normalizada. Una consecuencia importante de la idea de la norma es
que divide la población en subpoblaciones estándares y no estándares. La traducción es
mía). La asociación que hace Davis de la eugenesia y la estadística es bastante explícita, el
40 Davis, Lennard J (2006) “Constructing Normalcy The Bell Curve, The Novel, and the Invention of the Disabled body in the Nineteenth Century” The Disability Studies Reader Second Edition, pag. 3. 41Ibíd. ., p 3 42Ibíd. ., p 6 43Ibíd. ., p 6
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
33
objetivo en común es encontrar lo “normal” y así crean las categorías de lo que no es
normal como las enfermedades y la discapacidad, entre otras cosas.
Esta forma de pensar que surge en el siglo XIX es válida en la actualidad. La sociedad tiene
un estándar de lo que califica como “normal” y, al igual que como empezó a suceder en el
siglo XIX, actualmente sigue existiendo lo no normal o anormal. Las condiciones de
discapacidad, en general, hacen parte de esa población que está por fuera del cuerpo
“normal”.
Otro artículo interesante sobre la discapacidad en el siglo XIX se titula A Silent Exile on
This Earth: The Metaphorical Construction of Deafness in the Nineteenth Century escrito
por Douglas Bayton. En él se muestra básicamente que la forma en la que hoy en día
entendemos la sordera como una enfermedad o una discapacidad, fue creada y constituida
en el siglo XIX. Como este texto sigue los lineamientos teóricos de los otros textos citados,
empieza por mencionar que la sordera no siempre fue entendida como una enfermedad o
una discapacidad. La forma en que se entiende al sordo actualmente es como “un
discapacitado”, pero Bayton enfatiza que la connotación de “discapacitado” del sordo no
existía antes del siglo XIX, aunque sí había una diferenciación entre sordos y oyentes. Esta
creación del concepto de discapacidad en la sordera, se asocia con la educación que se les
daba en esa época. Los sordos empezaron a crear comunidades y a trabajar la comunicación
con la lengua de señas, pero los educadores decidieron acabar con estas comunidades e
impartir una educación oral para que los sordos no se aislaran del resto de la población44
.
Sobre esto, Douglas argumenta de esta forma: “Implicit in these images was the message
that deaf people depended upon the hearing people to rescue them from their exile”45
(Implícito en esta imagen estaba el mensaje de que los sordos dependían de los oyentes
para rescatarlos de su exilio. La traducción es mía). Es decir, que la forma de educar a los
sordos tanto oral como manual, refuerza un modelo que inhabilita al sordo y lo hace
dependiente de los demás. Baynton también dice: “Deafness, constructed as a condition
that excluded people from the community, was defined and redefined according to what
their hearing educators saw as essential community”46
. (La sordera, construida como
condición que excluye a la gente de la comunidad, era definida y redefinida de acuerdo a lo
que sus educadores oyentes consideraban una comunidad esencial. La traducción es mía).
Según este argumento, la mentalidad de la época fue la que creó esa discapacidad; los
educadores promovían la superioridad de los oyentes, la educación oralista fortaleció esa
imagen de los sordos como incapaces de pertenecer a la sociedad, ya que se imponían sobre
44 Banyton, Douglas (2006) “A Silent Exile on This Earth: The Metaphorical Construction of Deafness in the Nineteenth Century” The Disability Studies Reader Second Edition, pag 34. 45 Ibíd. ., p 35 46Ibíd. ., p 35
Nicolás Tamayo Guerrero
ellos de forma paternalista, creando un modelo en el que los sordos eran vistos como
incapaces y excluidos del resto de la sociedad normativa.
Ambos autores muestran la importancia del siglo XIX para la discapacidad. En este periodo
se formaron los conceptos y los modelos que se utilizarían para entenderla durante gran
parte del siglo XX, hasta la aparición de los modelos más recientes. En el siglo XIX, se
formó el concepto que define lo que “significa la discapacidad” como una contraposición o
una oposición a lo normal, como lo muestra Davis; la forma de entender la discapacidad
como un problema está basada en el ideal de cuerpo normal. El caso de la sordera, también
es un ejemplo de cómo en este siglo se conformó la manera de entender la discapacidad en
términos de una dicotomía (capacitado/discapacitado) que no existía en épocas anteriores.
Siglo XX. Nuevas Aproximaciones:
Para aproximarse a la discapacidad en el siglo XX se implementó un “modelo médico” que
tuvo sus orígenes en el siglo XIX. Este modelo fue, por así decirlo, el paradigma con el cual
se analizó la discapacidad durante las primeras décadas del siglo; es claro pues, que el siglo
XX se caracterizó por un modelo que buscaba rehabilitar a las personas con discapacidad;
este fue denominado “modelo biomédico”. Por otra parte, en este siglo también surgió una
nueva mirada a la discapacidad que se denominó el “modelo social”, que surge desde los
movimientos de personas con discapacidad como una alternativa al “modelo médico”, este
nuevo modelo se asocia a los derechos humanos y es aceptado por la Organización de las
Naciones Unidas (ONU), donde se define oficialmente lo que se considera una
discapacidad y se plantean los derechos de esas personas en la “Convención sobre los
Derechos de las Personas con Discapacidad (PCD)”.
También a finales del siglo XX, surgen nuevos modelos que actualmente se están
solidificando y que proponen una nueva aproximación a la discapacidad, con enfoques
constructivistas y deconstructivistas; estos han sido llamados de varias formas:“modelo
relacional” o “modelo cultural” y se diferencian en algunos planteamientos del “modelo
social”.
El “modelo médico” tiene su origen en el siglo XX, pero se basa en otros modelos de
periodos anteriores. La idea básica de este modelo es que las limitaciones en las funciones
de los cuerpos y las diferencias físicas son una enfermedad que debe ser tratada
médicamente. Este modelo esta implícitamente sustentado por los conceptos de “normal”
del siglo XIX, que proponen un entendimiento dicotómico como discapacidad/capacidad o
saludable/enfermo, y bajo esta concepción, es que se categoriza la discapacidad como una
enfermedad o la ausencia de salud. De esta misma manera, el llamado “modelo biomédico”
que entiende la discapacidad de la misma forma que el “modelo médico”, propone la
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
35
rehabilitación de las personas con discapacidad para sacarlos de su estado de enfermedad y
hacerlos parte de la sociedad. Durante gran parte de los siglos XIX y XX se utilizó este
modelo para aproximarse a la discapacidad y ésta se definía desde la medicina únicamente;
es decir, que la decisión sobre lo que se debía considerar una enfermedad que inhabilita a la
persona, la tomaban los médicos y así mismo, decidían cómo tratar esa discapacidad.
El contrapunteo con el “modelo médico” surge de los movimientos sociales creados por las
personas con discapacidad, quienes proponen cambios en la forma de entenderla como una
enfermedad, porque sienten que esto los convierte en personas diferentes al resto de la
sociedad y que además genera ciertas actitudes, ya sea de rechazo o de lástima, que crean
exclusión. Así nacen las aproximaciones sociales. El surgimiento de estas en los años 60
generalmente se asocia con las revoluciones y los inicios de los movimientos sociales
típicos de esta época. Catherine J. Kudlick, por el contrario, propone que la idea del modelo
es anterior y que a principios de siglo ya había ideas sobre la discapacidad que se alejaban
del “modelo médico”. Ella no plantea que el modelo surgió antes de los años 60 pero sí que
las ideas se fueron formando antes: “Writing just after World War I, philantropist-
businessman Douglas C. McMurtrie articulated the contrasting “social model” by
asserting that ‘the greatest handicap is not a loss of limb or other disability but the weight
of public opinión’”47
(Escribiendo justo después de la Primera Guerra Mundial, el
filántropo y empresario Douglas C. McMurtrie articuló el “modelo social” diciendo que “la
mayor desventaja no es la pérdida de una extremidad o cualquier otra discapacidad, sino el
peso de la opinión pública. La traducción es mía). Esto que dice la cita es la idea que
sustenta el “modelo social”, que la discapacidad se crea sobre una persona con alguna
limitación o diferencia corporal, dependiendo de lo que una sociedad particular piense que
deben ser las funciones corporales importantes; así que no todas esas diferencias corporales
son necesariamente discapacidades o limitantes para la persona.
Este modelo se basa en la inclusión de las personas con discapacidad a la sociedad y no en
el rechazo ni en la compasión; por ello, las organizaciones que defienden los derechos
humanos han adoptado este modelo para el trato de las personas con discapacidad. La
ONU, principalmente, trabaja utilizando este modelo y ordena que las políticas
gubernamentales que se asocian con la discapacidad también estén enfocadas en la
inclusión propuesta por el “modelo social”. La Convención sobre los Derechos de las
Personas con Discapacidad hace una definición de acuerdo al “modelo social” y menciona
las obligaciones de los gobiernos cuando traten con la discapacidad.
En el Artículo 4: Obligaciones generales de la convención, se indican las obligaciones de
los Estados que hacen parte de esta; obligaciones como por ejemplo: “B) Tomar todas las
47Kudlick, Catherine J (2003). “Disability History: Why We Need Another Other” The American Historical Review Vol 108, No.3 , pag. 772.
Nicolás Tamayo Guerrero
medidas pertinentes, incluidas medidas legislativas, para modificar o derogar las leyes,
reglamentos, costumbres y prácticas existentes que constituyan discriminación contra las
personas con discapacidad”48
. Este fragmento de la convención es un ejemplo de la forma
en que las organizaciones de derechos humanos trabajan hacia la inclusión propuesta por el
“modelo social”. Así mismo, se propone que las políticas gubernamentales se enfoquen en
la inclusión y “tomen las medidas”, como dice la convención, para acabar con la exclusión.
Recientemente han surgido nuevas aproximaciones a la discapacidad con pequeñas
diferencias del “modelo social”. Estas al parecer, están en desarrollo y plantean nuevas
formas de entender la discapacidad. El “modelo cultural” y también el llamado “modelo
relacional”, surgen con nuevas propuestas que los hacen diferentes a los modelos
anteriores. Joshua R. Eyler explica las diferencias fundamentales entre los modelos más
recientes y el “modelo social”. Según él, esta diferencia se debe a que el “modelo social”
hace una distinción entre una condición biológica que produce diferencias corporales y la
discapacidad como tal; entonces la discapacidad solamente se crea en un contexto en el que
haya una limitación social a la condición física. David Mitchell y Sharon Snyder también
mencionan la diferenciación que se hace en el “modelo social” entre “diferencia biológica”
y “proceso de invalidación”49
. En consecuencia, estos modelos más recientes no hacen
ninguna distinción entre una condición biológica real y el proceso social que convierte esta
condición en discapacidad.
En el “modelo cultural”, según Snyder y Mitchell, el cuerpo como tal es una construcción
cultural, así que tanto las condiciones biológicas como los procesos sociales que las
inhabilitan hacen parte de una sola construcción. Sobre esto Mitchell y Snyder dicen lo
siguiente: “The definition of disability must incorporate both the outer and inner reaches of
culture and experience as a combination of profoundly social and biological forces.”50
(La
definición de discapacidad debe incorporar tanto lo exterior y lo interior de la cultura y la
experiencia como una combinación de fuerzas profundamente sociales y biológicas. La
traducción es mía). De este modo, ellos plantean que no se debe diferenciar entre estas
fuerzas mencionadas. Como yo lo entiendo, es así: en el “modelo social” una cosa son las
condiciones físicas de una persona y otra cosa totalmente diferente son los procesos
sociales que convierten esas diferencias en discapacidades. En el “modelo cultural” esas
dos cosas hacen parte de un mismo proceso de construcción cultural; la forma de entender
el cuerpo como diferente, es decir esas condiciones físicas, es construida por la cultura al
igual que los procesos sociales que hacen de esas diferencias una discapacidad.
48 ONU (2010) “Convención sobre los derechos de las Personas con Discapacidad y Protocolo Facultativo”, pag 6. 49Mitchell, David, Snyder, Sharon (2006) “Introduction: Cultural Locations of Disability” Cultural Locations of Disability, pag 5. 50 Ibíd. .,p 7
LOS PARADIGMAS DE LA DISCAPACIDAD A TRAVÉS DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD
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En resumen, estos son los modelos que se utilizan para entender la discapacidad en el siglo
XX. Primero estuvieron los modelos “médico” y “biomédico”, luego las personas con
discapacidad al organizarse y exigir sus derechos, fundamentaron el surgimiento del
“modelo social” que busca la inclusión y que es aceptado por las organizaciones
internacionales de derechos humanos. Finalmente, aparecen los modelos constructivistas
como el “modelo social” y el “modelo relacional”, que traen consigo nuevas propuestas
para aproximarse a la discapacidad desde diferentes campos de las ciencias sociales.
Conclusiones:
Este ha sido un breve repaso de los diferentes modelos para entender la discapacidad en
determinados periodos históricos. Teóricamente hablando, la mayoría de los trabajos que se
analizaron para este artículo plantean que la forma de estudiar y analizar la discapacidad en
el pasado implica ubicarse en casos y contextos específicos, porque el enfoque que ellos
utilizan busca mirar la discapacidad con un nuevo paradigma, que le ofrezca opciones
diferentes a la de considerarla una enfermedad. Al analizar estos periodos históricos se
mencionó el momento en el que surge la dicotomía generalizadora de
discapacitado/capacitado, se vio que el surgimiento de esta sucede en un periodo moderno y
por lo tanto no se pueden analizar sociedades antiguas basándose en esta dicotomía. Esto lo
plantean los académicos en temas de discapacidad que promueven o se basan en un enfoque
actual constructivista y eso es lo que se planteó a lo largo de este ensayo. Tanto en el
periodo mesopotámico, como en Grecia y Roma, en los textos bíblicos, en la Edad Media y
en el siglo XIX, los casos estudiados y los ejemplos dados muestran una nueva
aproximación a la discapacidad, la cual se aleja de esa dicotomía y se enfoca en mirar las
condiciones específicas en un contexto determinado en el que ella se produce.
Este ensayo no trata de desprestigiar o atacar el “modelo médico”, ni de hacer una
comparación entre éste y los más recientes para ver cuál es mejor; tampoco es un ataque a
la medicina porque de eso se han encargado ya bastantes textos e investigaciones. Este
ensayo simplemente expone, de manera breve, una nueva forma de entender la
discapacidad desde otros campos del conocimiento, que también es válida para la medicina,
ya que los nuevos enfoques son bastante útiles para los médicos que quieran dedicarse a
trabajar por la discapacidad. Caso en el cual tendrían que estudiar un campo mucho más
profundo de lo que yo he expuesto en este ensayo.
Nicolás Tamayo Guerrero
Nicolás Tamayo Guerrero
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AGRADECIMIENTOS
Se agradece a la FUNDACION SALDARRIAGA CONCHA, a la FUNDACION
DERECHO A LA DESVENTAJA -Fundalde-, y a la PONTIFICIA UNIVERSIDAD
JAVERIANA, por el apoyo técnico y económico de este trabajo y de la Cátedra
INCLUSION, MEDICINA Y DISCAPACIDAD.
La Fundación Derecho a la Desventaja agradece al autor, por el minucioso y juicioso
trabajo realizado y por las enseñanzas que nos impartió durante el tiempo que estuvo con el
grupo de trabajo. Este folleto se utilizará como texto de estudio de algunos temas a tratar en
la Cátedra INCLUSIÓN, MEDICINA Y DISCAPACIDAD de la Facultad de Medicina de
la Pontificia Universidad Javeriana.
Nicolás Tamayo Guerrero
FUNDACION DERECHO A LA DESVENTAJA
LA BIBLIOTECA DE LA DISCAPACIDAD
FOLLETO No. 1
Cátedra Medicina, Inclusión y Discapacidad
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