«Vamos a una boda»
Jn 2, 1- 11
20 / I / 2013
Jesús acudió con María, su madre
y unos discípulos
a Caná, en Galilea.
La figura de María es muy
importante en la vida de Jesús …
Cuando se dio cuenta que los novios ya no
tenían vino fue con su Hijo…
Le pidió que actuara…
Sabía que podía hacerlo
Vio la necesidad y confió en Él.
El le respondió con palabras
fuertes:
«Mujer, que te va a ti y a mí…
Aún no ha llegado mi hora»
Se miraron el Hijo y la Madre…
Ella entra en el alma de su Hijo…
Jesús entiende a su Madre
Y llena de seguridad dijo al
sirviente:
«Haz lo que Él te diga».
Llena las tinajas hasta el borde…
Jesús le dijo entonces:
hicieron posible el milagro…
y la obediencia de los sirvientes,
Hubo vino,
y buen vino…
El poder de Dios,
Andrés y el mundo entero lo
necesitabanEs el vino
de la alegría,
Es la manifestación del poder de Dios…
Dios Bueno:
Gracias porque te manifestas en tu Hijo…
Gracias por la intervención de María…
su Madre y nuestra Madre…Gracias porque nos has
dado el vino de la alegría, de la vida, de la
comunión, del amor
Concédenos obedecer, como aquellos
hombres,
Para que haya el vino de la alegría en nuestro
mundo…
Si en Caná la fe de María movió tu poder,
Haz que ahora vivamos la fe,
como Ella la vivió, para
que haya vida, haya alegría y amor en nuestros hogares…
Así viviremos y haremos vivir
a los demás…
¡Así sea!
Nuestro mundo está perdiendo la
verdadera alegría…
Que nosotros, tus hijos, se la mostremos …
Tu amor y tu presencia en nuestras vidas es el
milagro que la eterniza…¡Creemos, pero aumenta nuestra fe!
ÁMBITO MISIONERO