Post on 17-Oct-2018
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA LA UNIVERSIDAD DEL ZULIA FACULTAD DE INGENIERIA DIVISIÓN DE POSTGRADO
PROGRAMA DE POSTGRADO EN INGENIERÍA DE SEGURIDAD
PREVENCIÓN DE RIESGOS EN EL MANEJO DE DISPOSITIVOS CON AGUJAS EN LAS CLÍNICAS DE LA INDUSTRIA PETROLERA DE OCCIDENTE
a
Trabajo Especial de Grado presentado ante la Ilustre Universidad del Zulia
para optar al Grado académico de:
ESPECIALISTA EN INGENIERIA DE SEGURIDAD
Autor: Ing. Mildred Elena Muñoz Sáez
Tutor: Ing. José Vicente Ferrer Bastidas
Maracaibo, abril de 2012
Muñoz Sáez Mildred Elena. Prevención de riesgos en el manejo de dispositivos con agujas en las clínicas de la Industria Petrolera de Occidente. (2012). Trabajo Especial de Grado. Universidad del Zulia. Facultad de Ingeniería. División de Postgrado. Maracaibo, Venezuela. 126 p. Tutor Académico: José Vicente Ferrer Bastidas.
RESUMEN
El objetivo de la investigación fue proponer medidas de bioseguridad para la prevención de pinchazos en las clínicas petroleras de occidente, basándose para ello en fuentes bibliográficas, tales como: Benavidez y Ruíz (2004), Cortés (2002), Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (2007), Ramírez (2001), entre otros. El estudio fue de tipo descriptivo, con un diseño transeccional, no experimental y de campo. La población estuvo conformada por la clínica Dr. Gustavo Quintini La Salina del municipio Cabimas y sus unidades de observación fue el personal de enfermería, usando como técnica para la recolección de datos el cuestionario tipo encuesta, el cual fue validado por un grupo de expertos en el área de seguridad industrial y posteriormente aplicado en una prueba piloto para conocer el nivel de confiabilidad, la cual arrojó un 0,99 de confianza. Los resultados el desconocimiento de los principios de bioseguridad en el uso de dispositivos con aguja, al mismo tiempo, un entorno poco conveniente y alejado a los manuales de seguridad para la prevención de accidentes ocupacionales debido a la poca importancia en la planificación de estrategias de bioseguridad durante las prácticas de trabajo. Se concluyó la falta de motivación por parte de las personas encargadas en el área de bioseguridad del establecimiento de tales normas en las clínicas. Se recomendó aplicar procedimientos para la prevención de accidentes por dispositivos punzo cortantes ajustados a las leyes pertinentes. Palabras clave: Bioseguridad, manejo de punzo cortantes, riesgos por accidentes, transmisión de enfermedades. Correo Electrónico: Mildred_ms@hotmail.com
Muñoz Sáez Mildred Elena. Prevention of risks in the handling of devices with needles in the clinics of the oil Industry of the West. (2012). Trabajo Especial de Grado. Universidad del Zulia. Facultad de Ingeniería. División de Postgrado. Maracaibo, Venezuela. 126 p. Tutor Académico: José Vicente Ferrer Bastidas.
ABSTRACT
The objective of the investigation was to offer measures of bio-security for the prevention of pinchazos in the oil clinics of the West, being based for it on bibliographical sources, such as: Benavidez and Ruiz (2004), Courteous (2002), Statutory law of Prevention, Conditions and Environment of Work (2007), Ramirez (200l), among others. The study was of descriptive type, with a transeccional, nonexperimental design and of field. The population was conformed by the clinical Dr. Gustavo Quintini the Salt mine of the Cabimas municipality and their units of observation were the infirmary personnel, using like technique for the data collection the questionnaire type survey, which was validated by a group of experts in the area of industrial security and later applied in a pilot test to know the level trustworthiness, which threw 0.99 of confidence. The results the ignorance of the principles of bio-security in the use of devices with needle, at the same time, surroundings little advisable and moved away to the hazard reports for the occupational accident prevention due to the little importance in the planning of strategies of bio-security during the work practices. The lack of motivation on the part of the people in charge in the bio-security area concluded of the establishment of such norms in the clinics. It was recommended to apply procedures for the accident prevention by devices I jab sharp fit to the pertinent laws.
Key Words: Bio-security, handling of I jab sharp, risks by accidents, transmission of diseases. E-mail: Mildred_ms@hotmail.com
DEDICATORIA
A Dios Todopoderoso, por darme la entereza para continuar adelante y conseguir
la meta trazada.
A mi Madre, quien con su comprensión y apoyo motivó a continuar con la carrera,
por compartir tantos sacrificios brindando el aliento necesario para el logro de esta meta
propuesta.
A mi Hijo, Gabriel Enrique, fuente inagotable de energía de todas mis metas y
éxitos quien ha soportado largas ausencias, gracias chiquito, por haber sabido esperar
pacientemente mi llegada.
A mi Hermano Economista Saulo Muñoz, quien con su sabiduría y apoyo
incondicional brindo impulso a lo largo de la carrera.
A todas aquellas personas que de una u otra manera quisieron ver mi sueño
realizado.
Que Dios los bendiga!
AGRADECIMIENTO
A la Universidad del Zulia División de Postgrado y a mis Profesores, doy las más
sinceras gracias por su colaboración y por abrirme las puertas del conocimiento.
A la Clínicas estudiadas, quienes permitieron el acceso a información clave
durante la investigación.
A mi tutor Ing. José Ferrer, MSc Gilbert Fernández, MSc Ronald Brice, Ing
Zenaida Soto, Ing Yanet Vivas, Especialista Lorna Pirela, Ing. Ana Giusti, Ing Ana Irene,
Ing Elio Briceño, por extender su mano amiga y ayudar en la realización de este
estudio, gracias por su invaluable contribución.
A todas aquellas personas que con sus aportes académicos hicieron posible el
desarrollo de este trabajo y su feliz culminación.
ÍNDICE DE CONTENIDO
Pág. RESUMEN ................................................................................................................ 4 ABSTRACT ............................................................................................................... 5 DEDICATORIA .......................................................................................................... 6 AGRADECIMIENTO .................................................................................................. 7 ÍNDICE DE CONTENIDO .......................................................................................... 8 ÍNDICE DE FIGURAS ............................................................................................... 10 ÍNDICE DE TABLAS ................................................................................................. 11 INTRODUCCIÓN ...................................................................................................... 13 CAPÍTULO I. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 1.1. Planteamiento del problema ............................................................................... 16 1.1.1. Formulación del problema ............................................................................... 20 1.1.2. Sistematización del problema .......................................................................... 20 1.2. Objetivos de investigación .................................................................................. 20 1.2.1. Objetivo general .............................................................................................. 20 1.2.2. Objetivos específicos ....................................................................................... 21 1.3. Justificación de la investigación ......................................................................... 21 1.4. Delimitación de la investigación ......................................................................... 22 1.4.1. Delimitación espacial ....................................................................................... 22 1.4.2. Delimitación temporal ...................................................................................... 22 1.4.3. Delimitación teórica ......................................................................................... 22 1.4.4. Delimitación poblacional .................................................................................. 22
CAPÍTULO II. MARCO TEÓRICO 2.1. Antecedentes de la investigación ....................................................................... 24 2.2. Bases teóricas .................................................................................................... 29 2.2.1. Bioseguridad ................................................................................................... 29 2.2.2. Principios de bioseguridad .............................................................................. 30 2.2.2.1. Barreras físicas ............................................................................................ 30 2.2.2.2. Barreras químicas ........................................................................................ 31 2.2.2.3. Barreras biológicas ....................................................................................... 32 2.2.2.4. Barreras ergonómicas .................................................................................. 33 2.2.2.5. Barreras psicosociales ................................................................................. 35 2.2.3. Conocimiento de bioseguridad ........................................................................ 37 2.2.3.1. Capacitación ................................................................................................. 38 2.2.3.2. Manejo de punzo cortantes .......................................................................... 41 2.2.3.3. Notificaciones de riesgos .............................................................................. 42 2.2.4. Elementos de bioseguridad ............................................................................. 46 2.2.4.1. Infraestructura .............................................................................................. 46 2.2.4.2. Ambiente de trabajo ..................................................................................... 47 2.2.4.3. Tecnología .................................................................................................... 49 2.2.5. Estrategias de prevención ............................................................................... 50 2.2.5.1. Técnica del lavado de manos ....................................................................... 52 2.2.5.1.1. Lavado común ........................................................................................... 53 2.2.5.1.2. Lavado higiénico ....................................................................................... 54
Pág.
2.2.5.1.3. Lavado quirúrgico ...................................................................................... 55 2.2.5.2. Uso de guantes ............................................................................................ 56 2.2.5.3. Protección ocular .......................................................................................... 57 2.2.5.4. Uso de zapatos ............................................................................................ 58 2.2.5.5. Protección corporal....................................................................................... 59 2.2.5.6. Lavado de material ....................................................................................... 59 2.2.5.6.1. Crítico ........................................................................................................ 59 2.2.5.6.2. Semicrítico ................................................................................................. 59 2.2.5.6.3. No crítico ................................................................................................... 59 2.3. Sistema de variables .......................................................................................... 60 2.3.1. Definición nominal ........................................................................................... 60 2.3.2. Definición conceptual ...................................................................................... 60 2.3.3. Definición operacional ..................................................................................... 60 CAPÍTULO III. MARCO METODOLÓGICO 3.1. Tipo de investigación .......................................................................................... 63 3.2. Diseño de la investigación .................................................................................. 64 3.3. Población ............................................................................................................ 65 3.4. Técnicas e instrumento de recolección de datos ............................................... 67 3.5. Validez y Confiabilidad ....................................................................................... 69 3.6. Análisis de la información ................................................................................... 70 3.7. Fase de investigación ......................................................................................... 71
CAPÍTULO IV. ANÁLISIS DE RESULTADOS 4.1. Análisis de los resultados ................................................................................... 73 4.2. Discusión de los resultados ................................................................................ 98 CONCLUSIONES ...................................................................................................... 108 RECOMENDACIONES ............................................................................................. 113 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS .......................................................................... 116 ANEXOS ................................................................................................................... 120
ÍNDICE DE FIGURAS Figuras Pág.
1. Barreras Físicas .................................................................................................... 74
2. Barreras Químicas ................................................................................................ 76
3. Barreras Biológicas ............................................................................................... 77
4. Barreras Ergonómicas ........................................................................................... 78
5. Barreras Psicosociales .......................................................................................... 79
6. Capacitación .......................................................................................................... 81
7. Manejo de Punzo Cortantes .................................................................................. 82
8. Notificaciones de Riesgo ....................................................................................... 83
9. Infraestructura ....................................................................................................... 85
10. Ambiente de Trabajo ........................................................................................... 86
11. Tecnología ........................................................................................................... 87
12. Técnica del Lavado de Manos ............................................................................. 89
13. Uso de Guantes .................................................................................................. 90
14. Protección Ocular ................................................................................................ 91
15. Uso de Zapatos ................................................................................................... 92
16. Protección Corporal ............................................................................................. 93
17. Lavado de Material .............................................................................................. 94
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla Pág. 1. Operacionalización de la variable .......................................................................... 61
2. Distribución de las unidades de distribución .......................................................... 66
3. Codificación Escala Lickert .................................................................................... 69
4. Principios de bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina. Barreras físicas 2010-2011 .... 74
5. Principios de bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina. Barreras químicas 2010-2011 75
6. Principios de bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina. Barreras biológicas ................ 77
7. Principios de Bioseguridad en el Personal de Enfermería en el Uso de dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina. Barreras ergonómicas ........... 78
8. Principios de bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina.Barreras psicosociales ............ 79
9. Nivel de conocimiento que posee el personal de enfermería, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos, según el Manual de Normas de PDVSA. Capacitación 2010-2011 ......................................................................... 80
10. Nivel de conocimiento que posee el personal de enfermería, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos, según el Manual de Normas de PDVSA. Manejo de punzo cortantes 2010-2011 ................................................... 82
11. Nivel de conocimiento que posee el personal de enfermería, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos, según el Manual de Normas de PDVSA. Notificaciones de riesgo 2010-2011 ........................................................ 83
12. Elementos requeridos, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos. Infraestructura 2010-2011 ................................................................... 85
13. Elementos requeridos, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos. Ambiente de trabajo 2010-2011 ......................................................... 86
14. Elementos requeridos, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos. Tecnología 2010-2011 ..................................................................... 87
15. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Técnica del lavado de manos 2010-2011 ................ 88
Pág.
16. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Uso de guantes 2010-2011. ................................... 90
17. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Protección ocular 2010-2011 ................................... 91
18. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Uso de zapatos 2010-2011 ...................................... 92
19. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Protección corporal 2010-2011 ................................ 93
20. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Lavado de material 2010-2011 ................................ 94
INTRODUCCIÓN
La bioseguridad es una disciplina de gran importancia para la prevención de las
diferentes enfermedades infecciosas emergentes, las cuales constituyen un riesgo para
la salud de las personas. La aparición de ellas ha demostrado entre otras cosas, la falta
de preparación de planes de contingencia para su erradicación; constituyendo esto un
importante reto para los encargados de implementar estas medidas.
Es por ello, la utilidad de la misma en la capacitación de las personas para que los
servicios de las instalaciones del sector salud se preparen adecuadamente para el
enfrentamiento de los desastres sanitarios derivados de las mismas y su importancia en
el cumplimiento de la prevención de accidentes en el trabajo.
En reportes de estudios se demuestra que anualmente, cientos de miles de
trabajadoras y trabajadores de la salud están expuestos a enfermedades mortales como
el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) y la hepatitis C por causa de pinchazos con
agujas y lesiones corto punzantes. Con la tecnología que existe hoy en día, el personal
de enfermería no debería enfrentar semejante riesgo.
De allí, la necesidad de elaborar unas medidas de bioseguridad para la
disminución de tales riesgos y tratar de que todos los trabajadores de la salud cambien
su actitud frente a las normas de bioseguridad y las apliquen en todo momento dentro
del laboratorio y con todo tipo de pacientes o muestras independientemente del
diagnostico preestablecido, y hagan un llamado a todos los compañeros para que las
empleen como elementos indispensables en la realización de su trabajo.
El presente estudio se fundamenta en diferentes fuentes bibliográficas, revisadas y
analizadas, contrastando con ello las opiniones de diversos autores para el desarrollo
de la misma y está estructurada mediante el desarrollo de cuatro (4) capítulos, los
cuales se esquematizan de la siguiente manera:
En el capítulo I, se plantea el problema y justificación, así como el objetivo general
y los objetivos específicos que guiaron la investigación, la sistematización, la
justificación y delimitación espacial y temporal.
14
Seguidamente en el capítulo II, referido al marco teórico, donde se hace referencia
a algunos antecedentes relacionados con la investigación, se definen las bases teóricas
que fundamentan la variable bioseguridad, culminando con la descomposición en tantas
partes como fueron necesarias para darle mayor carácter de investigación.
El capítulo III, marco metodológico, se describe el tipo y diseño del estudio, se
presenta la población, las técnicas de recolección de datos, utilizando para ello un
cuestionario, el cual fue validado por el juicio de expertos y se probó su confiabilidad
con el método Alpha Cronbach.
Al mismo tiempo, se explica cómo se elabora el análisis de resultados. Por último,
en el capítulo IV se analizan y discuten los resultados de la investigación, para
finalmente efectuar las respectivas conclusiones y recomendaciones.
15
CAPÍTULO I
EL PROBLEMA
1.1. Planteamiento del problema
En la actualidad, las organizaciones orientadas a la salud para ser competitivas
han de cumplir con estándares de calidad internacionales y para ello deben satisfacer
los requerimientos que determinen las normas especializadas en el área de
bioseguridad industrial; siendo indispensable que las empresas cuenten con un
adecuado plan de mantenimiento y prevención que les permita conservar sus equipos,
herramientas e instalaciones en las condiciones apropiadas para su funcionamiento, no
sólo dentro del área de procesos sino también para su entorno donde se manejan.
La bioseguridad tiene la finalidad principal de orientar y facilitar el trabajo del
personal con responsabilidad en los laboratorios en los que se trabaja con agentes
biológicos. Es preciso comprender que lo esencial de la bioseguridad es inculcar
procedimientos de trabajo que sean correctos. Además establecer los lineamientos
filosóficos básicos y las normas que de ellos se derivan, en el ámbito de la bioética y la
bioseguridad aplicados a la investigación.
Es por eso, que la bioseguridad se fundamenta en lograr cambios en las actitudes
y conductas de las personas quienes están expuestas al contacto directo con personas
enfermas, para prevenir infecciones y usar en forma adecuada las barreras de
protección. Se consideran como trabajadores del laboratorio de hematología: el
personal de entrenamiento cuyas actividades incluyen el contacto con pacientes, con
sangre u otros líquidos biológicos o con desechos biológicos, dentro del ambiente del
laboratorio. El manejo inadecuado de residuos, la inobservancia en el uso de las
barreras de protección, la falta de información y orientación al personal de salud y
usuarios que acuden a centros de salud constituyen los principales factores de riesgos
de infección. Entre los diversos daños están: heridas y pinchazos, infecciones, alergias,
16
sensibilización a medicamentos, intoxicaciones y cáncer.
Los riesgos primarios del personal que labora con agentes biológicos están
relacionados con exposiciones accidentales de membranas mucosas, percutáneas o
por ingestión de materiales infecciosos. Las exposiciones ocurren por pinchazos de
agujas u otros objetos filosos contaminados con sangre infectada, o por contacto de los
ojos, nariz, boca o piel con la sangre del paciente infectado.
Dentro de este orden de ideas, la exposición ocupacional de trabajadores en el
área de urgencias que utilizan agujas, incrementa el riesgo de sufrir lesiones por
pinchazos. Este tipo de lesiones son frecuentes y pueden provocar infecciones graves o
mortales por patógenos contenidos en la sangre tales como el virus de la hepatitis B
(VHB), hepatitis C (VHC) o el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
En atención a lo expuesto, en Argentina el 80% del personal médico no manipula
con precaución el material corto punzante; en consecuencia se reportan entre 100 y 120
casos de accidentes de este tipo, en relación a la contaminación por los residuos
infecciosos.
Los residuos infecciosos son aquellos que se encuentran contaminados con
agentes que pueden contener altas concentraciones de microorganismos de potencial
riesgo para la persona que entre en contacto con ellos de acuerdo al grado de
exposición que hayan tenido con los agentes infecciosos que provocan las
enfermedades. De tal manera, pueden provenir de salas de aislamiento de pacientes,
materiales biológicos, sangre humana, hemoderivados y fluidos corporales, residuos
anatomopatológicos y quirúrgicos, residuos corto punzantes (agujas, ampollas rotas,
hojas de afeitar, hoja de bisturí) que estuvieron en contacto con el paciente o agentes
infecciosos, residuos de animales de experimentación contaminados, entre otros.
Existe un acuerdo donde se reconocen que el personal sanitario se expone en su
trabajo cotidiano al riesgo de contraer infecciones graves derivadas de más de 30
agentes patógenos potencialmente peligrosos como por ejemplo la hepatitis B, la
hepatitis C y el VIH como resultado de los pinchazos por agujas. Los pinchazos
accidentales representan un grave peligro laboral para los trabajadores sanitarios.
17
Se calcula que en la Unión Europea se producen más de un millón de pinchazos
por aguja cada año, lo cual representa uno de los riesgos más comunes y graves para
los trabajadores sanitarios de Europa a la par que un alto costo para los sistemas
sanitarios y la sociedad en general. Además, el impacto emocional de las lesiones por
instrumentos punzocortantes puede ser grave y duradero incluso cuando no desemboca
en la transmisión de una infección grave. Los trabajadores sanitarios y sus familias
pueden padecer numerosos meses de angustia a la espera de descubrir si han
contraído una infección potencialmente mortal.
En este sentido, en Venezuela y específicamente la clínica Dr. Gustavo Quintini,
no escapa de esta realidad, en entrevista no estructurada con el personal que labora se
observa un desconocimiento de procedimientos de bioseguridad al momento de utilizar
dispositivos con agujas, lo cual podría estar influenciado por la ausencia de un manual
de procedimiento donde se establezcan las normas mínimas de atención y
manipulación de objetos punzantes. Cabe señalar, que en la actualidad la empresa
cuenta con un manual de procedimientos elaborado en el año 2004 y no ha sido
actualizado.
De igual manera, se nota la falta de tomas de decisiones acertadas durante la
atención con dispositivos con agujas, a pacientes en condiciones críticas, así como la
utilización de cajas o contenedores de agujas contaminadas, ya saturadas para su
disposición final. Aunado a tal situación, se observa la utilización de botellones de agua
como contenedores de agujas contaminadas. Tales consideraciones pudieran deberse
a escasos controles con relación a las normas de bioseguridad que deben ser
adoptadas en las clínicas petroleras de occidente.
Como complemento, se han evidenciado accidentes en los lugares de trabajo por
la mala manipulación de los dispositivos con agujas, que en ocasiones pueden deberse
al poco compromiso que poseen el personal que labora en las clínicas hacia su trabajo,
en otros casos no cuentan con la ayuda de un enfermero auxiliar, lo que podría generar
accidentes en el lugar de trabajo ya que por lo general atienden un número excesivo de
pacientes al día.
De continuar esta situación, podría afectar a las enfermeras ya que pueden
18
contraer patologías tales como la Hepatitis y el VIH. En la actualidad existen casos de
enfermeras recibiendo actualmente tratamiento Retroviral, como parte del protocolo de
emergencia al sufrir accidente por pinchadura con aguja contaminada.
En este sentido, la empresa petrolera en su rol de patrono, en su esfuerzo por
cumplir con el marco legal vigente y lo establecido en la Ley Orgánica de Prevención,
Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (LOPCYMAT, 2005), la cual contempla la
necesidad de identificar y notificar a todo el personal de enfermería los riesgos por
puesto de trabajo y por instalación con todas su medidas de prevención y de control.
En el corto plazo, el personal de enfermería podría presentar enfermedades
ocupacionales
Para ello, se han implementado una serie de medidas como: la reducción al
mínimo posible del número de trabajadores que puedan estar expuestos, el
establecimiento de procedimientos de trabajo adecuados y medidas técnicas de control
con el fin de evitar o minimizar la emisión de agentes biológicos en el lugar de trabajo,
eliminación del uso innecesario de instrumentos punzocortantes mediante la aplicación
de cambios en la práctica y sobre la base de los resultados de la evaluación del riesgo,
procedimientos seguros especificando el uso y eliminación de los instrumentos médicos
punzocortantes y los desechos contaminados. La reutilización se prohibirá con efecto
inmediato. Dichos procedimientos serán objeto de evaluaciones a intervalos regulares y
formarán parte importante de las medidas de información y formación dirigidas a los
trabajadores.
De igual manera, se han establecido propuestas para actualizar y divulgar los
procedimientos de bioseguridad para la aplicación de tratamiento y toma de muestra
con dispositivos con agujas, según lo establecido en normativas vigentes. Por otra
parte, concienciar al personal sobre la importancia de notificar los accidentes por
pinchaduras, a fin de tomar los correctivos evitando su recurrencia.
Así mismo, se debe garantizar que todo el personal conozca las notificaciones de
riesgo por puesto de trabajo, contar con mayor disponibilidad de cajas o contenedores
para agujas contaminadas, incrementar el personal de enfermería como auxiliar durante
19
el suministro de medicamentos y tomas de muestra, elegir delegados de prevención,
mejorar el orden y limpieza del área de tratamiento de enfermedades, mayor
comunicación entre supervisor y supervisados.
1.1.1. Formulación del problema
De las consideraciones antes descritas, surge la siguiente interrogante ¿Cuáles serían los lineamientos para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos al manipular el personal de enfermería dispositivos con agujas en las clínicas petroleras de occidente?
1.1.2. Sistematización del problema
¿Cuál es la situación actual para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos al manipular el personal de enfermería dispositivos con agujas en las clínicas petroleras de occidente?
¿Qué conocimiento posee el personal de enfermería, para la aplicación de medidas de Bioseguridad por pinchazos en las clínicas petroleras de occidente?
¿Qué características poseen los elementos requeridos, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos en las clínicas petroleras de occidente?
¿Cuáles serían las estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos en las clínicas petroleras de occidente?
¿Cuáles serían las alternativas que permiten la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos, que permitan reducir en el personal de enfermería los accidentes por pinchaduras en las clínicas petroleras de occidente?.
1.2. Objetivos de la investigación
1.2.1. Objetivo general
Proponer medidas de bioseguridad para la prevención de pinchazos en las clínicas petroleras de occidente.
20
1.2.2. Objetivos específicos
Describir la situación actual para la aplicación de los principios de bioseguridad en
el personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en las clínicas petroleras
de occidente.
Evaluar el nivel de conocimiento que posee el personal de enfermería, para la
aplicación de medidas de Bioseguridad por pinchazos, según el manual de normas de
Petróleos de Venezuela, S.A. PDVSA.
Caracterizar los elementos requeridos, para la aplicación de medidas de
bioseguridad por pinchazos.
Analizar las estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que
plantean peligro de lesiones por pinchazos.
Proponer alternativas que permiten la aplicación de medidas de bioseguridad por
pinchazos, que permitan reducir en el personal de enfermería los accidentes por
pinchaduras.
1.3. Justificación de la investigación
El estudio se justifica en la práctica por su beneficio a las clínicas petroleras de
Occidente en el sentido de tener un mayor conocimiento acerca de la manipulación de
jeringas. Esta información sirve para el análisis en el área de bioseguridad pues
describe el nivel de conocimiento que tiene el personal sobre las medidas existentes en
el área de trabajo, así como los elementos requeridos para su aplicación y al mismo
tiempo, considerar las estrategias de prevención pertinentes que podrían considerarse
durante las prácticas de trabajo, de esta manera, se puede desarrollar lineamientos que
sirvan para la toma de decisiones bien fundamentadas y orientadas a reducir los
accidentes por pinchaduras.
Teóricamente, la investigación se justifica al servir como antecedente para futuras
investigaciones abordando la variable bioseguridad, tomando para ello como punto de
partida la consulta de diversos autores de reconocida trayectoria en el área objeto de estudio
21
y de publicaciones de revistas indexadas y arbitradas, cuyos postulados permiten establecer
un primer contacto válido entre la teoría y la realidad que se investiga.
Desde el punto de vista metodológico, se diseñará un instrumento el cual servirá para
ser aplicado a la unidad de enfermería de la clínica Dr. Gustavo Quintini, permitiendo con
ello reforzar investigaciones futuras con la variable bioseguridad, considerando para su
construcción los objetivos de la investigación, a fin de analizar la instrumentación del
presente estudio.
Por último, se justifica en lo social porque sirve de apoyo para el conocimiento de
las normas de bioseguridad por el personal de salud que labora en las clínicas
petroleras de Occidente permitiendo la correcta manipulación de jeringas, como
resultado final, disminuir los accidentes y tomar acciones en cuanto a las posibles fallas
presentes en el sector, las cuales se contrarrestarán con las propuestas pertinentes que
se darán con el propósito de garantizar seguridad a los trabajadores pertenecientes al
área objeto de estudio, así a todas aquellas personas, sean estudiantes, docentes,
auxiliares que trabajan dentro de las áreas del laboratorio, y que directa o
indirectamente están sometidas a un riesgo ocupacional.
1.4. Delimitación de la investigación
1.4.1. Delimitación Espacial
El estudio se realizó en la clínica Dr. Gustavo Quintini.
1.4.2. Delimitación Temporal
La investigación se hizo desde marzo del año 2011 hasta diciembre del año 2011.
1.4.3. Delimitación Teórica
Se tomó como fuentes bibliográficas autores de reconocida trayectoria en el área de
seguridad industrial, tales como: Cortés (2002), Guédez (2006), Ramírez (2007), Velázquez
(2004), entre otros. Así mismo, se consideraron manuscritos científicos extraídos de revistas
electrónicas arbitradas e indexadas de Redalyc y Scielo.
22
1.4.4. Delimitación Poblacional
La investigación estuvo dirigida a una unidad de observación compuesta por el
personal que labora en la clínica Dr. Gustavo Quintini.
23
CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO
2.1. Antecedentes
La European Biosafety Network (2010), publicó un artículo titulado “Prevención de
Pinchazos Accidentales en los Sectores Hospitalario y Sanitario”. El documento fue
redactado por la Red Europea de Bioseguridad, organización constituida recientemente
con el principal objetivo de erradicar los pinchazos accidentales en toda la Unión
Europea. Se consideró como fuente documental: Advances in Exposure Prevention
(2001), Adams (2006), Cullen (2006), Meryl y col. (2001), Wittman (2005), entre otros.
La Red Europea de Bioseguridad nació tras la adopción definitiva de la nueva
Directiva europea sobre pinchazos accidentales con el compromiso fundamental de
mejorar la seguridad de los pacientes y los trabajadores sanitarios y no sanitarios. Entre
los objetivos de la Red cabe destacar el establecimiento de medidas a nivel europeo
dirigidas a incrementar la educación y formación de los trabajadores sanitarios y no
sanitarios y promover prácticas más seguras al mismo tiempo que se proporcionan las
necesarias tecnologías de seguridad.
Tal documento es idóneo para la presente investigación dado que contiene
información sobre pinchazos accidentales y se tiene el compromiso fundamental de
mejorar la seguridad de los pacientes y los trabajadores sanitarios y no sanitarios. A su
vez, proporciona información sobre cómo se debe manejar situaciones referidas a
pinchazos accidentales con el fin de garantizar el máximo cumplimiento normativo y
cobertura informativa para todos los trabajadores y sectores afectados.
Rodríguez; Odalys, Aguilera; Alina; Barbé; Anaiza y Delgado; Nelson (2010),
publicaron un estudio en la revista Archivo Médico de Camagüey sobre “Intervención
educativa sobre bioseguridad en trabajadores de la Salud”, apoyado en autores como:
Díaz (2005), Hernández y col. (2006), Richmond (2005), Trujillo (2004), entre otros.
24
La bioseguridad representa un componente vital del sistema de garantía de la
calidad, es una doctrina encaminada a lograr actitudes y conductas que disminuyan el
riesgo del trabajador de adquirir infecciones en el medio laboral. Tuvo como objetivo
elevar el nivel de conocimientos sobre la bioseguridad en los trabajadores de la salud
del Hospital de Santa Cruz del Sur.
Metodológicamente se realizó una intervención educativa sobre la bioseguridad en
los trabajadores de la salud del Hospital Enrique Santi Esteban Báez desde el 1ro de
enero al 30 de septiembre de 2008. El universo se conformó por cuatro cientos ochenta
y tres trabajadores, se tomó una muestra de ciento doce trabajadores seleccionados a
través de un muestreo aleatorio simple a los que se les aplicó un cuestionario.
Se evidenció que antes de recibir las labores educativas existían conocimientos
adecuados sobre qué es la bioseguridad, las precauciones universales, las
enfermedades que se pueden contraer si no se cumplen con las medidas de seguridad
biológica y qué se debe hacer ante un accidente con un objeto corto punzante utilizado
en un paciente con VIH/SIDA. No así en cuanto al nivel de conocimiento sobre las
legislaciones vigentes, el cual fue bajo. Conclusiones: después de aplicar la
intervención se logró un aumento significativo del conocimiento en los trabajadores
sobre la bioseguridad, por lo que se consideró efectiva la intervención.
Dicha publicación aporta conocimientos para la elaboración de medidas de
bioseguridad orientadas a la protección de los trabajadores que están expuestos al
riesgo de contraer enfermedades por su trabajo con pacientes portadores de
enfermedades infecciosas transmitidas por sangre, entre otros el Virus de la
inmunodeficiencia humana (VIH) y virus de la hepatitis B (VHB). El grupo más expuesto
a este riesgo son los trabajadores de las unidades de salud, especialmente las
enfermeras y el personal de limpieza, y se incluyen los trabajadores que manipulan los
desechos médicos fuera del hospital.
Ardila, Ana y Muñoz, Alba (2009), publicaron en la Revista Ciencia y Saúde
Coletiva un artículo titulado “Bioseguridad con énfasis en contaminantes biológicos en
trabajadores de la salud”, soportado en autores como: Bernal (2005), Guerrero (2006),
Miranda y col. (2001), entre otros. El estudio tuvo como objetivo de caracterizar socio-
demográficamente a los trabajadores, además de verificar el nivel de aplicación de las
25
normas de bioseguridad, en el servicio de urgencias de una institución de salud en la
ciudad de Bogotá-Colombia.
El estudio fue de carácter descriptivo y tuvo como resultados que los trabajadores
de la salud del servicio de urgencias están expuestos frecuentemente a diferentes
peligros, entre ellos a la exposición de los contaminantes biológicos. El 68,3 % de los
trabajadores se encuentra vinculados mediante contrato en la modalidad de prestación
de servicios, el 31,7%, está vinculado en la modalidad de término indefinido. El 44,6%
del personal no ha recibido capacitación sobre el tema de bioseguridad, un 42,4 % no
aplican la técnica adecuada de lavado de manos.
En relación con el aspecto de re-encapuchar las agujas, se encontró que el 31%
realizan esta práctica. El 100% de los trabajadores tienen el esquema completo de la
vacuna Hepatitis B, pero el mismo porcentaje no tiene medición de anticuerpos de
hepatitis B. Es fundamental el suministro de elementos de protección personal y
dotación de elementos y recipientes que contribuyan a la bioseguridad. Se recomendó
la realización de actividades pedagógicas para sensibilizar y crear conciencia crítica a la
organización y todo el personal que labora en el área de urgencias, sobre los peligros y
consecuencias a que se exponen en su lugar de trabajo.
Tal investigación es de importancia para el presente estudio, dado que analiza las
medidas de bioseguridad en los trabajadores que laboran en el área de la salud y toma
como indicadores los contaminantes biológicos que pueden ser transmitidos por la
inadecuada manipulación de las agujas y se consideran como estrategias para evitar
cortaduras el debido uso de protección personal y la correcta manipulación de
elementos punzo penetrantes que pueden causar contaminación de patógenos.
Gambino, Darsy (2007), publicó un artículo sobre “Bioseguridad en Hospitales”.
Revista Cubana de Salud y Trabajo. Dentro de la bibliografía revisada para un trabajo
realizado en el Hospital “Dr. Salvador Allende”, se encontraron elementos importantes
sobre el riesgo biológico y la bioseguridad en centros de salud, entre los cuales se
tienen: Garrison (2001), Bello y col. (2002), Rodríguez (2001), entre otros.
Se consideraron aspectos sobre agentes biológicos; gestión, percepción y
26
evaluación de riesgos; principios y niveles de bioseguridad; así como legislación actual,
entre otros. Considerando todos los aspectos planteados, se concluyó que reviste una
gran importancia el cumplimiento de las medidas de prevención, y la nueva sociedad
del siglo XXI permitirá ver nuevos y espectaculares avances en esta dirección, movidos
por un mayor conocimiento técnico, pero, sobre todo, por una cada vez mayor
conciencia social y colectiva a este respecto, que ha sacado a la seguridad del ámbito
puramente técnico para entronizarla, con todas sus consecuencias, dentro del más
genuino concepto de calidad de vida.
La publicación es idónea al presente estudio al garantizar las condiciones de
trabajo no supongan una amenaza significativa, siendo el propósito de estimular una
actividad preventiva, que debe desarrollarse mediante los principios generales de evitar
los riesgos y evaluar aquellos que no se puedan observar a simple vista. Al mismo
tiempo, considera el principio de la bioseguridad y comprende el concepto de evitar la
exposición directa a sangre y a otros fluidos orgánicos potencialmente contaminantes,
mediante la utilización de materiales adecuados que se interpongan al contacto de los
mismos.
González, Nora (2007), elaboró un estudio sobre “Normas de Bioseguridad
Aplicadas por el Personal Médico y de Enfermería del Centro Clínico Materno San
Juan”, para optar al grado de especialista en educación ambiental de la Universidad
Rafael Urdaneta. Desarrollado teóricamente por autores como: Costa (2000), Ferreira y
col. (2005), Gómez (2002), Hinojosa (2005), entre otros.
El propósito del estudio fue las normas de bioseguridad aplicadas por el personal
médico y de enfermería del Centro Clínico Materno San Juan, enmarcado en los
estudios positivistas, de tipo descriptivo, el diseño se clasificó como no experimental,
transeccional. La población fue de sesenta personas, se aplicó un cuestionario simple
auto administrado de 27 ítems con escala Likert, validado por expertos y con una
confiabilidad de 0,85 según Alfa Cronbach. La técnica de análisis estadístico fue
descriptiva con frecuencias absolutas y relativas.
Los resultados evidenciaron la existencia de un plan de prevención, cuyas normas
son observadas en el uso de uniformes y prendas de protección (guantes, gorras,
27
zapatillas y mascarillas), debiendo fortalecerse lo inherente a la manipulación de
desechos sólidos, control de plagas, roedores y contaminación, por otro parte, existe un
plan de contingencia, el cual es difundido más allá de su contenido literal, con la
identificación de salidas de emergencia y rutas de escape y acciones ante accidentes
biológicos y por último, se encontró la necesidad de campañas educativas sobre
normas de seguridad, ejecución de simulacros y adiestramiento de personal.
Se recomendó atender las medidas que deben contener los planes de prevención
para evitar la transmisión de agentes contaminantes, así mismo, se recomendó
establecer canales de comunicación con el personal médico y de enfermería, llevando a
cabo programas de capacitación en bioseguridad intra hospitalaria.
Este estudio es de relevancia para la presente investigación, en lo referente a la
necesidad de concientizar al recurso humano sobre la importancia y necesidad de
asumir e implantar medidas de bioseguridad para evitar que el organismo sufra una
serie de agresiones por el efecto de los agentes y de las situaciones en los que puedan
estar expuestos cotidianamente. Igualmente, provee de información de la manera como
se puede evitar accidentes en la transmisión de enfermedades infecciosas ocurridos
con sangre y otras secreciones al entrar en contacto con la piel, muchas veces
ocasionadas por la incorrecta manipulación de los equipos.
Arze; Marcelo, Parrado; Fernando, Morote; José, Carrasco; María, Veneros;
María y Rodríguez, Leonardo (2005), publicaron un “Manual de Manejo de Residuos,
Bioseguridad y Prevención de Infecciones Nosocomiales”, basándose en autores como:
Jauregui y Panozo (2003), Guevara (2001), entre otros. El propósito del documento fue
facilitar la aplicación de todas las actividades relacionadas con el manejo de residuos
sólidos, bioseguridad, e infecciones nosocomiales en el Instituto Nacional de
Oftalmología “Dr. Javier Pescador Sarget”, constituyéndose como guía de consulta para
todo el personal de la institución, sobre todo al personal involucrado en el tema.
Este instrumento impulsó la creación de conciencia sobre la temática del
documento la misma que se refleja en la calidad de atención médica prestada a la
población que acude en busca de servicios, a través de la adopción de normas y
28
procedimientos que eviten riesgos innecesarios para el personal y los pacientes.
Este manual aporta al presente estudio, el conocimiento de los principios de la
bioseguridad, las medidas preventivas para evitar los pinchazos y el manejo de objetos
punzocortantes, facilitando así la aplicación de todas las actividades relacionadas con el
manejo de objetos punzo penetrante y darle una adecuada información a todas aquellas
personas que laboren en centros de salud. De igual manera, el documento beneficia la
capacitación a través de la adopción de normas y procedimientos que eviten riesgos
innecesarios para el personal y los pacientes.
2.2. Bases teóricas
2.2.1. Bioseguridad
Para Arze y col. (2005), la bioseguridad es el conjunto de normas y
procedimientos orientados a salvaguardar la salud de los trabajadores, pacientes y
familiares que asistan a centros hospitalarios, con el propósito de lograr cambios en las
actitudes y conductas de los individuos para prevenir contaminaciones y usar de
manera pertinente las barreras de protección.
Según Barriga y Castillo. (2004), dentro del concepto de bioseguridad deben abarcarse también todos los aspectos que en relación al ambiente quirúrgico puedan afectar negativamente al personal de salud, incluso a pacientes, por lo tanto, debe prestarse atención al espacio físico, incluyendo riesgos químicos y físicos, a los servicios mínimos para una correcta funcionalidad, la limpieza e higiene del área y la capacitación adecuada del personal en funciones, sin olvidar que el trabajo en cirugía en una interacción multidisciplinaria entre médicos, estudiantes, enfermeros(as) y personal de anestesia.
Es el conjunto de normas y procedimientos que garantizan el control de los
factores de riesgo, la prevención de impactos nocivos y el respeto de los límites
permisibles, sin atentar contra la salud de las personas que laboran y/o manipulan
elementos biológicos, técnicas bioquímicas, experimentaciones genéticas y sus
procesos conexos e igualmente garantizan que el producto de estas investigaciones y/o
procesos no atenten contra la salud y el bienestar del consumidor final ni contra el
29
ambiente.
Para Guardino (2001), la bioseguridad es una doctrina de comportamiento, dirigida
al logro de actitudes y conductas con el objetivo de minimizar el riesgo de quienes
trabajan en prestación de salud, al enfermarse por las infecciones propias de ese
ejercicio, incluyendo a todas aquellas personas que se encuentran en el espacio
asistencial cuyo diseño debe coadyuvar a la disminución de riesgos.
De las consideraciones anteriores, se infiere que la bioseguridad es el conjunto de
normas o actitudes que tienen como objetivo prevenir los accidentes en el área de
trabajo, es decir, a disminuir el potencial riesgo ocupacional. También se puede definir
como el conjunto de medidas preventivas que deben tomar el personal que trabaja en
áreas de la salud para evitar el contagio de enfermedades de riesgo ocupacional.
2.2.2. Principios de bioseguridad
Los principios de la bioseguridad se basan en la aplicación sucesiva de las
medidas, como: determinación de los peligros; evaluación de los riesgos si se pone al
descubierto el peligro y cálculo del efecto combinado de las consecuencias y la
probabilidad de que el peligro se concrete; gestión de riesgo, cuando indiquen los
resultados de la evaluación, mediante la aplicación de estrategias adecuadas de
control, incluido el diseño de procedimientos y métodos para reducir al mínimo los
riesgos y sus consecuencias. (Manual de Bioseguridad del laboratorio clínico, 2005)
Según el manual de higiene ocupacional de PDVSA HO-H-16 (2006), ningún
trabajador o trabajadora, podrá ser expuesto a la acción de agentes físicos, químicos,
biológicos, disergonómicos, psicosociales o de cualquier otra índole, sin ser advertido
por escrito de la naturaleza de los mismos, de los daños que pudieran causar a la salud
y sin ser capacitado en los principios de su prevención.
2.2.2.1. Barreras físicas
Ramírez (2007), concibe a las barreras físicas desde el punto de vista del
comportamiento del organismo humano y condicionamiento, va a estar determinado por
30
la: talla, edad, sexo, alimentación, condiciones físicas, aptitudes y motivaciones. Por lo
general, las personas necesitan de cierta energía que su organismos necesita para
poder realizar cualquier actividad, el cuerpo humano reacciona frente a situaciones de
conflicto tanto físicos como de origen psíquico.
De igual manera, la alimentación juega un papel fundamental en el
comportamiento físico de los trabajadores, al igual que la medida de los sonidos; al
sobrepasar éstos los límite permitidos, si bien no generan una sordera acrecentada;
pueden afectar considerablemente el sistema nervioso y son una causa indirecta de
bajo rendimiento y por ende causa de accidentes.
Por otra parte, se considera que en el dominio del campo visual, se toma en
cuenta la edad cronológica de las personas; la cantidad de luz requerida a un sujeto
para asegurarle un mínimo grado de eficacia de su visión es prácticamente el doble
cada 13 años. Con el trascurso del tiempo, la eficacia de las funciones sensoriales y
físicas disminuyen enormemente, la vista pierde gran parte de sus funciones, por lo
tanto, las actividades que requieren mayor precisión se hace cada vez más difíciles de
practicar.
Entre los muchos aspectos que pueden tomarse en cuenta, para la predisposición
de accidentes en el trabajo, se trata de disminuir el riesgo real, al perfeccionar
materiales y proporcionar mayor seguridad y protección al personal. Por tanto, un
programa conjunto en el que se evalúen las condiciones físicas del individuo y sus
hábitos, en función de la disminución de accidentes laborales es una buena política de
prevención.
Arze y col. (2005), consideran para el control de las barreras físicas los: guantes,
barbijos, gafas, batas y cualquier otro equipo de protección individual que ayude a
prevenir accidentes en las salas de atención al paciente, sobre si todo si se manipula
objetos punzo penetrantes que puedan ser una vía de transmisión de enfermedades.
2.2.2.2. Barreras químicas
Para Arze y col. (2005), corresponden a este elemento el uso de desinfectantes
31
como: el hipoclorito de sodio, glutaraldehido, derivados del yodo, gluconato de
clorhexidina y cloruro de piridonio, los cuales ayudan a eliminar de la piel o los
instrumentos, los gérmenes adquiridos después de su exposición, algunos de ellos
proveen de protección a la piel.
Sin embargo, el uso inadecuado de tales químicos como son tóxicos al contacto
directo en la piel pueden quebrantar la salud de los quienes lo manipulen. Todo
desinfectante antes de su utilización debe ser conocido por el personal sobre los
efectos adversos o lesiones que pueden causar y tratamiento en caso de intoxicación.
Cortés (2002), determina que los factores ambientales de origen químico pueden
dar lugar a diferentes de enfermedades ocupacionales como consecuencia de
exposición a contaminantes tóxicos, los cuales pueden producir efectos: corrosivos;
destruyen los tejidos sobre lo que actúa, Irritantes; irritan la piel o las mucosas en
contacto con el toxico, neumoconióticos; producen alteración pulmonar por partículas
sólidas o polvos, asfixiantes; producen desplazamiento del oxígeno del aire,
anestésicos y narcóticos; producen depresión en el sistema nervioso central,
cancerígeno, mutógeno y teratógenos; pueden producir cáncer, modificaciones
hereditarias y malformaciones del feto y sistémicos; producen alteraciones en
determinados sistemas: hígado, riñones.
2.2.2.3. Barreras biológicas
Arze y col. (2005), recomiendan la necesidad de aplicar vacunas, antibióticos y
quimioprofilaxis, de esa manera, se brindará protección al personal de salud generando
defensas para evitar contagios o combatir la infección.
Benavides y Ruiz (2004), señalan que las principales vías de contaminación o
exposición a riesgo biológico que tiene el personal de salud, son las siguientes:
• Vía respiratoria; al inhalar material infeccioso.
• Vía digestiva; la ingesta a través de manos sucias, alimentos, objetos y material
de rutina que se maneja diariamente en la atención a pacientes.
32
• Vía dérmica; por auto inoculación accidental por agujas (pinchazos) y jeringas,
derrames o salpicaduras de líquidos sobre la piel intacta o por pequeñas heridas o
laceraciones.
• Vía mucosa; por depósitos de partículas infecciosas sobre membranas,
especialmente conjuntiva ocular como resultado de salpicadura.
En todo caso, los medios más frecuentes de transmisión son: auto inoculación por
pinchazos (Virus de la Hepatitis B, VIH), inhalación de material infeccioso (Infecciones
virales, bacterianas y micóticas), producidos por el paciente, ingestión de gérmenes o
formas evolutivas de parásitos.
Cortés (2002), específica que los factores ambientales de origen biológico pueden
dar lugar a diferentes tipos de enfermedades ocupacionales como consecuencia de
exposición a contaminantes biológicos: Bacterias (tétanos, brucelosis, tuberculosis),
Parásitos (paludismo, toxoplasmosis), Virus (hepatitis, rabia), Hongos (pie de atleta).
De las consideraciones anteriores por los autores citados, se infiere que todos los
factores de riesgo existentes en un laboratorio, los riesgos biológicos son los mas
importantes por la variedad y gran agresividad de microorganismos que se presentan
(bacteria, virus y hongos), causando accidentes o enfermedades ocupacionales.
Los riesgos de peligrosidad variables a los que está sujeto el personal de
laboratorios hematológicos, los cuales son potencialmente letales, destacan el riesgo de
contraer infecciones con los agentes patógenos objeto de trabajo o con otros no
sospechosos que se encuentran presentes en las muestras que se reciben en el
laboratorio, estos agentes se comportan como riesgo primario para el operador y en
ocasiones para la comunidad.
Los riesgos biológicos inducen infecciones agudas y crónicas y son más
frecuentes en el personal de laboratorio, expuestos a: accidentes de trabajo al
manipular las muestras, negligencia e inobservancia de reglamentos al manipular
agentes infecciosos, no disponer de medios adecuados de protección, personal
inadecuadamente capacitado.
33
2.2.2.4. Barreras ergonómicas
Para Ramírez (2007:67), la ergonomía “es la disciplina metódica y racional con
miras a adaptar el trabajo al hombre y viceversa, mediante la interacción o
comunicación intrínseca entre el hombre, la máquina, la tarea y el entorno, configurando
el sistema productivo de toda empresa”.
Es conocido el tripe objetivo del estudio ergonómico: eficiencia, salud y bienestar,
es por ello, que dentro de las empresas debe existir un comité de ergonomía integrado
por un ingeniero industrial, el médico de la empresa y el psicólogo industrial. El estudio
ergonómico del puesto de trabajo considera los movimientos del cuerpo humano
requeridos en el desarrollo del trabajo.
Dichas posibilidades se traducen en una multiplicación de los efectos como
resultado de la aplicación de los diferentes miembros del cuerpo humano. Un
movimiento de cabeza ampliará el campo visual sobre el que se trabaja. Un movimiento
del tronco, por el mismo hecho de involucrar la mayor cantidad de órganos vitales, es
importante considerarlo en la determinación del área de trabajo, toda vez que el tronco
sirve no sólo de enlace entre las diferentes partes del cuerpo, sino que aún mas, sirve
de elemento elástico para alcanzar determinadas distancias.
En la distribución del puesto de trabajo es importante considerar los principales
elementos:
• Delimitar y fijar dónde deben colocarse los materiales y herramientas.
• Las herramientas, aparatos deben ubicarse alrededor del puesto de trabajo y tan
enfrente y cerca del trabajador como sea necesario.
• Los materiales y herramientas deben situarse de forma que permitan mejor
visibilidad.
• Deben adoptarse las medidas necesarias para facilitar condiciones de visión
adecuada mediante la iluminación en el puesto de trabajo.
34
• Facilitar al trabajador un asiento cuyo tipo y altura le permitan ejecutar la tarea
tanto de pie como sentado.
Costa y Costa (2002), refieren que la institución donde se trabaja, debe proveer
equipos de seguridad, equipos para el manejo de materiales potencialmente
contaminados, equipos para materiales para la esterilización y desinfección de los
instrumentos de trabajo, el mobiliario y las manos, gabinetes para el manejo de
muestras infecciosas y sustancias toxicas, con las cuales pueda obtener condiciones de
seguridad para su trabajo.
Por su parte, Cortés (2002), asegura que la ergonomía es una disciplina científica
o ingeniería de los factores humanos, de carácter multidisciplinar, centrada en el
sistema hombre-máquina, cuyo objetivo consiste en la adaptación del ambiente o
condiciones de trabajo al hombre a fin de conseguir la mejor armonía posible entre las
condiciones óptimas de confort y la eficacia productiva.
Según la Norma Técnica Programa de Seguridad y Salud en el trabajo (2008), la
ergonomía, es la disciplina que se encarga del estudio del trabajo para adecuar los
métodos, organización, herramientas y útiles empleados en el proceso de trabajo, a las
características (psicológicas, cognitivas, antropométricas) de las trabajadoras y los
trabajadores, es decir, una relación armoniosa con el entorno (el lugar de trabajo) y con
quienes lo realizan (las trabajadoras o los trabajadores).
Unas ideas y reflexiones acerca de las barreras ergonómicas, tiene relación con la
iluminación adecuada del área de trabajo, el diseño deficiente de las oficinas y sus
mobiliarios. Hay que tener en cuenta las posturas y posiciones del cuerpo pues llevan a
incurrir al padecimiento de lumbagos, inflamaciones, mala circulación, entre otras.
2.2.2.5. Barreras psicosociales
Ramírez (2007), plantea que desde la perspectiva del recurso humano, la empresa
viene a ser un conglomerado de diversos grupos. Con lengua, motivaciones, pautas
conductuales. Status, y formación cultural diferentes; no obstante todos convergen
hacia un objetivo común, el cumplir con las normas de la empresa.
35
Desde el punto de vista de la seguridad de los trabajadores no ven de manera
similar una situación; o sobreestimas o subestiman un hecho. Por lo general, los
trabajadores antiguos y experimentados, son más resistentes al cambio y por tanto,
cualquier enmienda o nueva disposición en el trabajo no es bien recibida. Se aferran a
sus propios métodos y procedimientos y se dejan llevar por la llamada fuerza de la
costumbre. Por el contrario, los trabajadores principiantes o el joven son más
dinámicos, es más arriesgado, no mide los peligros y trata de adaptarse a cualquier
nueva situación.
En otro orden de ideas, el estudio de los efectos psicológicos del trabajo incluye
también los trabajos que exigen atención continuada, más o menos concentrada y los
trabajos en los que el trabajador no ve su avance final. Así mismo, deben añadirse las
interacciones del trabajador y el grupo de trabajo en el que está inmerso y tienen
considerable influencia de las vibraciones del sistema nervioso del trabajador.
Por lo tanto, la dirección debe analizar el estado de las relaciones del trabajador
tanto con los compañeros del grupo como con los jefes. Por último, cabe considerar que
también fuera del ambiente de trabajo el individuo recibe agresiones propias del
ambiente que lo rodea, por ejemplo, la concentración urbana, la contaminación, la
dificultad con el transporte, el ruido de la calle. Por lo que toda acción preventiva deberá
tomarse en cuenta para disminuir la fatiga mental del trabajador al término de su
jornada.
Para el manual de higiene ocupacional de PDVSA HO-H-16 (2006), el aspecto
psicosocial comprende todas aquellas condiciones presentes en la situación laboral
directamente relacionadas con la organización del trabajo, el contenido del trabajo y la
realización de la tarea, y que se presentan con la capacidad para afectar el desarrollo
del trabajo y la salud del trabajador o trabajadora (Instituto Nacional de Seguridad e
Higiene en el Trabajo de España –INSHT).
Adicionalmente, el manual de higiene ocupacional HO-H-27 (2010), Son
condiciones que se manifiestan en la relación de las personas con los aspectos de su
entorno social y de su vida cotidiana, por ejemplo: en la relación con la familia, el
trabajo, la comunidad a la que pertenecen, entre otros.
36
Pueden ser laborales o extra laborales. Para PDVSA es prioridad enfocarse en los
laborales, sin embargo, en las actividades de identificación es recomendable considerar
los extra laborales y la forma como se vinculan con las condiciones de trabajo. Por
ejemplo: un cambio de ciudad puede impactar la cotidianidad socio familiar del
trabajador o trabajadora, por tal motivo, y si el cambio es inminente e inevitable, se
deben tomar medidas que atenúen esos efectos.
Son positivos o negativos según sus efectos. Si generan bienestar, motivación y
promueven la salud, entonces son positivos. Si están relacionados con enfermedades,
accidentes, desmotivación, fatiga, estrés laboral, entre otros efectos, entonces son
negativos y pueden derivar o estar asociados a procesos peligrosos. Es importante
tener en cuenta la frecuencia, duración e intensidad de estos factores de acuerdo a lo
que perciben y valoran las personas.
De lo señalado anteriormente por la bibliografía, se analiza que las barreras
psicosociales consisten en los cambios inesperados que se presentan en un individuo
en su área de trabajo lo cual conlleva a perjuicios en su salud. El trabajo repetitivo
causa desinterés y desmotivación por el mismo, lo cual con un aumento en su actividad
diaria ocasiona el estrés laboral. El desequilibrio psicofísico tiene como consecuencia
malas relaciones con los compañeros, ya que se vuelve poco tolerante y mal humorado.
También suceden con frecuencia alteraciones psicosomáticas que se detectan con
cefalea, trastornos digestivos, asma, etc. El estrés ocupacional son alteraciones del
individuo a nivel físico y mental, algunas manifestaciones mentales de estrés son:
subjetivos (ansiedad), comportamiento: aislamiento de la familia (trastornos
psiquiátricos, clínicos y trastornos adoptivos, afectivos).
2.2.3. Conocimientos en bioseguridad
Para Fernández (2005), las organizaciones deben proporcionar a sus trabajadores
condiciones de trabajo seguras e higiene que les garantice niveles de salud de acuerdo
con el conocimiento actual en la industria y la legislación que a tal efecto resulte
aplicable.
Lo anterior expuesto se logra con un análisis y control permanente en los procesos
37
entre el trabajador y el medio donde se desarrolla sus actividades cotidianas,
detectando las enfermedades que por su nivel de ocurrencia resulten más probables.
La seguridad en el trabajo abarca el conjunto de medidas empleadas para prevenir
accidentes y eliminar las condiciones inseguras del ambiente, así como dar a conocer a
los trabajadores la necesidad de prácticas preventivas. El propósito fundamental de
toda empresa no es solo la prevención de enfermedades y accidentes laborales sino
también demostrar compromiso con aquellos empleados que han entregado su salud
por la organización.
Pero la salud en el trabajo no es sólo responsabilidad de la empresa, sino también
de los trabajadores, quienes tienen que ser conscientes de los riesgos que su trabajo
puede conllevar y conocer cuáles son las pautas de conducta establecidas.
Para tal fin, Gómez y col. (2001, citado en Fernández 2005:111), “las empresas
deben ofrecer programas de bienestar enmarcados en sus políticas de seguridad de
higiene industrial”. Dichos programas deben ayudar aquellos trabajadores con
problemas físicos, mentales o emocionales, lo que ciertamente influirá en su
comportamiento laboral y productividad.
2.2.3.1. Capacitación
Ramírez (2007), argumenta que la capacitación tiene como objetivo conocer el
proceso que da lugar a los accidentes; determinar sus consecuencias tratar de crear
una conciencia de seguridad, a fin de cumplir con las normas de prevención de
accidentes, como medio de evitarlos. Deben participar todos los trabajadores de la
empresa, incluyendo los mandos intermedios.
Cantú (2006:134), refiere que “la capacitación es esencial para el éxito de un
programa a través del trabajo en grupo, ya que los dos principales objetivos de un
proceso participativo son el mejoramiento de los procesos y el incremento de la moral
del grupo”. Existen dos tipos de capacitación: el formal, referido a la capacitación que
requiere de un tiempo previo para su planificación y cuenta con un formato
estructurado, se hacen conferencias en aulas, usando métodos expositivos y con la
38
ayuda de un experto en la materia y se tiene la capacitación informal; que a diferencia
de la anterior no es estructurada ni planeada siendo más abierta porque comprende la
mutua ayuda entre los trabajadores donde comparten información resuelven juntos los
problemas.
La capacitación en el trabajo comprende programas de rotación de personal,
sistemas de aprendices, asignación de suplencias y programas de mentores formales,
estableciendo de esta manera oportunidades dentro de la organización de hacer carrera
al personal que sobresalga en sus tareas.
Robbins y Coulter (2005), refieren que la capacitación de los empleados es una
actividad importante para las empresas, conforme a los cambios del panorama mundial,
los empleos exigen modificaciones, las destrezas de los trabajadores se deben
actualizar. La capacitación de empleados se puede proporcionar en formas
tradicionales en el trabajo, la rotación de empleos, la enseñanza y el adiestramiento, los
ejercicios de experiencia, los cuadernos de ejercicios y manuales o las conferencias en
el salón de clases.
Para Chiavenato (2002), el entrenamiento en seguridad permite reducir accidentes
principalmente cuando involucra nuevos empleados, para capacitarlos en prácticas y
procedimientos que eviten riesgos potenciales y desarrollen al mismo tiempo su
percepción relacionada con la seguridad en el trabajo.
La Norma Técnica Programa de Seguridad y Salud en el trabajo (2008), especifica
que la capacitación en el personal a través del servicio de seguridad y salud en el
trabajo, deberá diseñar, planificar, organizar y ejecutar un programa de educación e
información preventiva, en materia de seguridad y salud en el trabajo con su respectivo
cronograma de ejecución, que establezca como mínimo 16 horas trimestrales de
educación e información por cada trabajadora y trabajador que participen en el proceso
productivo o de servicio, independientemente de su condición.
Se debe promover un programa de educación e información preventiva, que
responda a las necesidades detectadas y su número de horas aumentará de acuerdo al
proceso peligroso presentes en la actividad de trabajo; determinando la fecha, lugar,
39
temática, facilitador, espacio físico y grupos a formar (Dándole prioridad a las
trabajadoras y los trabajadores que estén expuestos a mayor riesgo en el centro de
trabajo).
De igual manera, los encargados de los programas de capacitación deben
proporcionar a las trabajadoras y los trabajadores, la educación en materia de
seguridad y salud en el trabajo dentro de su jornada de trabajo. Siendo teórica y
práctica, suficiente, adecuada y periódica, sobre los riesgos y procesos peligrosos,
previa a realizar las tareas que le sean asignadas, así como los posibles daños a la
salud que estos podrían generar y las medidas de prevención para evitar accidentes de
trabajo y enfermedades ocupacionales.
Por su parte, los cursos de inducción a nuevos ingresos y cambios o modificación
de tareas/puestos de trabajo: deben ser de manera verbal, escrita y práctica, dando
recorridos en el centro de trabajo sobre los procesos peligrosos existentes y los
asociados a la actividad, que puedan afectar la seguridad, salud de las trabajadoras y
los trabajadores.
Adicionalmente, el personal debe ser capacitado en las siguientes áreas:
legislación en materia de seguridad y salud laboral, identificación de los procesos
peligrosos y los procedimientos de acción frente a los mismos, prevención de
accidentes y enfermedades ocupacionales, primeros auxilios, equipo de protección
personal y colectiva, prevención y control de incendio, seguridad vial, ergonomía,
crecimiento personal, daños a la salud generados por el consumo de tabaco,
alcoholismo, sustancias psicotrópicas, estrés laboral y cualquier otro tema requerido de
acuerdo a los procesos peligrosos a los cuales se encuentran expuestos las
trabajadoras y los trabajadores.
El Reglamento Parcial de La Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio
Ambiente de Trabajo (2007), señala que la capacitación son todas aquellas actividades
de educación de manera sistemática y organizada, con el fin de ampliar valores y
conocimientos, así como desarrollar destrezas y habilidades en materia de seguridad y
salud en el trabajo.
40
Para la Oficina Internacional del Trabajo (OIT) (2001), es tarea de los encargados
de la seguridad asegurarse de que los trabajadores disponen de suficiente información
para proteger su salud frente a los factores ambientales peligrosos que puedan estar
presentes, que dicha información se facilite a los trabajadores en una forma y lenguaje
que entiendan, y que estos últimos reciban una capacitación suficiente para entender la
información y adoptar las medidas de protección necesarias.
La forma y el contenido de la información y la capacitación deberían ser diseñados
y ejecutados en consulta con los trabajadores y/o sus representantes, y deberían estar
de acuerdo con las necesidades identificadas en la evaluación, y podrían abarcar:
aspectos relevantes de la legislación sobre seguridad y salud en el trabajo, tales como
los derechos, responsabilidades y deberes de las autoridades competentes, de los
empleadores y de los trabajadores
Otro elemento a considerar es la necesidad del departamento de seguridad el de
asegurarse de que, como parte del examen de evaluación, se realiza el seguimiento de
los requisitos y procedimientos en materia de capacitación e información. Los
programas de capacitación y de información deberían realizarse sin costo económico
para los trabajadores y, en lo posible, dentro de las horas de trabajo.
2.2.3.2. Manejo de punzo cortantes
Volkow y col. (2006), afirman que a pesar de que no todas las agujas que se
utilizan en un hospital llegan a estar en contacto con el paciente, deben manejarse en
su totalidad como residuos peligrosos biológicos infecciosos, a lo que recomiendan que
todo punzocortante debe ser destruido, debido a la dificultad de saber si tuvo contacto o
no con el paciente. Los punzo cortantes se deben desechar o destruir en: contenedores
rígidos y destructores de agujas.
Los contenedores deben ser ubicados cerca del paciente (cabecera o piecera) o
en mesas de Pasteur de las enfermeras; en el quirófano, deben colocarse junto a la
mesa de atención. Dichos contenedores no pueden estar alejados más de un metro y
medio de distancia donde fueron utilizados los punzo cortantes.
41
La práctica de encapuchar la aguja a dos manos, para después desecharla debe
evitarse a toda costa, ya que es una acción de alto riesgo y la mejor forma de producir
una vía de entrada al organismo. Por lo tanto, se deberá destruir o desechar
inmediatamente después de ser utilizada. Si es necesario reencapucharlas se hará
sobre una superficie rígida o utilizando un dispositivo para reencapuchar agujas.
Para los sistemas de tomas de muestras de sangre al vacío existen dispositivos
que permiten expulsar la aguja del cuerpo y del sistema y desecharlo directamente en el
contenedor, sin riesgo de pincharse. Durante los programas de vacunación, el personal
de salud deberá llevar un contenedor rígido con tapa abatible y tener la leyenda de
material punzocortante.
Arze y col. (2005), refieren que para evitar accidentes laborales es obligatorio
desechar los materiales corto punzante en bidones descartables luego de su uso. De
igual manera, se debe manejar este material con extrema precaución, tapar las agujas
con cuidado, utilizando la técnica de una sola mano o con la ayuda de una pinza, no
doblar ni romper el material cortó punzante, no dejar en cualquier sitio el material cortó
punzante, comprobar que el material cortó punzante no haya sido depositado en
recipientes de residuos corrientes, ni que se encuentre mezclado entre la ropa que se
envía a lavandería.
La Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo,
publicada en Gaceta Oficial N° 38.596 del 02 de Enero de 2007, señala en su artículo 1,
numeral 1:
‘‘Establecer las instituciones, normas y lineamientos de las políticas, y los órganos y entes que permitan garantizar a los trabajadores y las trabajadoras, condiciones de seguridad, salud y bienestar en un ambiente de trabajo adecuado y propicio para el ejercicio pleno de sus facultades físicas y mentales, mediante la promoción del trabajo seguro y saludable, la prevención de los accidentes de trabajo y las enfermedades ocupacionales, la atención integral al trabajador y trabajadora afectado y la promoción e incentivo al desarrollo de programas para la recreación, utilización del tiempo libre, descanso y turismo social’’. <
2.2.3.3. Notificaciones de riesgo
42
Según la Norma Técnica Programa de Seguridad y Salud en el trabajo (2008),
todas las profesiones llevan implícito un riesgo inherente a la naturaleza misma de la
especialidad y al ambiente donde se desenvuelve. El personal de enfermería que labora
en las áreas quirúrgicas y quirófanos no escapa a esta situación y sufren en su
organismo una serie de agresiones por parte del medio donde actúan por efecto de los
agentes con que trabajan y de las situaciones en que cotidianamente se ven envueltos
que producen en ellos una serie de modificaciones.
Según el American Nurses Association (2002), antes de que ocurra una
exposición, garantice que su empleador sea capaz de proveer:
• Inmediata evaluación del riesgo y del pinchazo con aguja (por una línea de
consulta telefónica del hospital). Pruebas confidenciales para el VIH, la hepatitis B y C.
• Acceso al tratamiento de post-exposición y medicamento profiláctico en las
siguientes dos horas después de la exposición.
• Asesoramiento, educación y pruebas de seguimiento hasta por un año luego de
la exposición. Si Ud. sufre un pinchazo con aguja, realice inmediatamente las siguientes
acciones:
• Enjuague las heridas con agua y jabón.
• Avísele a su supervisor e inicie el sistema de reporte sobre las lesiones en su
lugar de trabajo.
• Identifique al paciente fuente, quien deberá ser examinado por infecciones por
VIH, hepatitis B y hepatitis C. El proceso de realización de pruebas se dará inicio con el
consentimiento del paciente.
• Reporte al servicio de salud del personal de salud (PS), al departamento de
emergencia o a otra institución designada para dar tratamiento.
• Sea examinado inmediata y confidencialmente para infecciones por VIH, hepatitis
B y hepatitis C.
• Consiga PPE según las guías del Centers for Disease Control and Prevention
43
(CDC) cuando el paciente fuente sea desconocido o haya resultado positivo para:
• VIH: para la mayoría de las exposiciones, inicie la profilaxis en las primeras dos
horas luego de la exposición. La profilaxis post-exposición (PPE) para VIH debe incluir
un régimen por cuatro semanas de dos drogas (zidovudine [ZDV] y lamivudine [3TC];
3TC y stavudine [d4T]; o didanosine [ddI] y d4T) y un régimen expandido que incluya
una tercera droga para la exposición al VIH que implique un elevado riesgo de
transmisión. Cuando se sepa o se sospeche que el virus del paciente es resistente a
una o más drogas PPE, se recomienda la selección de drogas a las cuales el virus del
paciente fuente no sea resistente.
• Hepatitis B: si está vacunado, no necesita tratamiento, pero si no, consiga HBIG
e inicie la serie de vacunas de HB.
• Hepatitis C: en la actualidad, no se recomienda ningún tratamiento, pero quizá
sea conveniente consultar a un especialista sobre la existencia de algún PPE
experimental.
• Documente la exposición de manera detallada, para sus propios archivos así
como para los archivos del empleador y de compensación de las y los trabajadores.
Bajo la nueva ley de pinchazos con agujas, los empleadores deben mantener
confidencialmente los archivos que contienen, como mínimo, el tipo y marca del
dispositivo involucrado en el incidente, el departamento de trabajo donde ocurrió el
incidente y una explicación sobre cómo sucedió.
Seguimiento
• Realice seguimientos confidenciales, pruebas de post-exposición a las seis
semanas, tres meses y seis meses y, según el riesgo, al año.
• Reciba monitoreo y seguimiento para la PPE.
• Tome precauciones (especialmente practicando sexo seguro) para prevenir la
exposición de otros mientras se realice todas las pruebas.
• En caso de tener cualquier pregunta, no tema buscar información adicional o
44
remitirse a un especialista en enfermedades infecciosas. También considere
asesorarse, ya que un pinchazo con aguja puede ser traumático, independientemente
del resultado.
Según la OIT (2001), los empleadores deberían realizar, en cada lugar de trabajo
permanente o temporal, evaluaciones periódicas de las situaciones de peligro y de los
riesgos para la seguridad y la salud derivados de factores ambientales peligrosos y
deberían poner en práctica las medidas de control necesarias para prevenir dichas
situaciones de peligro y riesgos o reducirlas al nivel mínimo que pueda conseguirse de
manera razonable y práctica.
Cuando se introduzca un nuevo factor de riesgo, la evaluación debería llevarse a
cabo antes de que los trabajadores se expongan al riesgo. La evaluación debería reunir
información acerca de los factores ambientales peligrosos presentes en el lugar de
trabajo, del grado de exposición y riesgo, de las medidas de control adecuadas, de la
vigilancia de la salud, y de la capacitación y la información. Debería procederse a una
revisión de la evaluación siempre que exista motivo para ello.
El manual de higiene ocupacional de PDVSA HO-H-16 (2006), señala que las
notificación de peligros y riesgos es el proceso mediante el cual la empresa informa
sobre: la naturaleza de los riesgos y peligros por la exposición a agentes físicos,
químicos, biológicos, meteorológicos o a condiciones disergonómicas o psicosociales
presentes en los ambientes o puestos de trabajo, los daños que pudiera causar a la
salud, indicando los principios para su prevención.
La notificación de peligros y riesgos que se efectúa a los trabajadores y
trabajadoras, debe realizarse:
a. Al momento del ingreso a la empresa.
b. Con motivo de transferencia/ asignación/ sustitución o cualquier trabajo por
tiempo definido a otra instalación y/o puesto de trabajo.
c. Al efectuarse modificaciones a las instalaciones o procesos operacionales y/o
administrativos.
45
d. Al asignar nuevas tareas al trabajador o trabajadora.
En caso de que no ocurra ninguna de las situaciones expuestas en el punto
anterior y con el fin de reforzar la información sobre los peligros y riesgos, se deben
realizar charlas, cursos, vídeos, entre otros; haciendo énfasis en las medidas de
prevención de los riesgos, tareas y controles a aplicar, en un periodo no mayor a 3
años.
La identificación de peligros y riesgos debe ser realizada por un equipo de trabajo
multidisciplinario, se realizará según los formatos señalados. Las organizaciones
contratantes deben incluir en los pliegos de licitación la información referida a la
identificación de peligros de la instalación donde se realizarán las actividades.
Las empresas contratistas realizarán la notificación de riesgos asociados a los
puestos de trabajo de cada uno de sus trabajadores y trabajadoras y entregará una
copia de dicha notificación a la gerencia contratante.
2.2.4. Elementos de la bioseguridad
El objetivo general de la bioseguridad es el de minimizar el riesgo potencial de
accidentes laborales dentro del lugar de trabajo en el manejo de los residuos
patogénicos. Es por ello fundamental, identificar los requerimientos mínimos que deben
poseer las áreas de atención de pacientes para determinar el uso de barreras de
protección adecuadas.
Para tal situación, se requiere darle oportuna atención a todo individuo que a
través de cualquier técnica o procedimiento descarte una situación de riesgo y a las
acciones relacionadas con el manejo, separación, recolección, almacenamiento,
transporte, tratamiento, recuperación y disposición de los residuos patogénicos dentro
de la empresa. Por lo que se requiere de darle una especial atención a la
infraestructura, ambiente de trabajo y a la tecnología con la cual se le da apoyo al
personal que manipula objetos punzocortantes.
2.2.4.1. Infraestructura
46
Peter y Olson (2006), argumentan que el ambiente físico incluye todos los aspectos tangibles divididos en espaciales (producto y marcas) y los no espaciales (temperatura, humedad ambiental, iluminación e intensidad del ruido). Analizar las situaciones que el consumidor experimenta en el ambiente e intentando la comprensión de las respuestas afectivas, cognitivas y de comportamiento de los consumidores hacia las características del ambiente.
Por su parte Chiavenato (2002), plantea la importancia de una adaptación
ambiental por parte de las organizaciones donde este tipo de estrategias ayuda a
ajustarse a las exigencias de los consumidores y a las presiones del entorno en donde
se maneja, es decir, la disposición de ambientes de trabajo acordes a la buena atención
de las personas que visitan la empresa en busca de bienes.
Lamb y Hair (2006:259), coinciden en exponer que “las instalaciones que visitan
las personas o en las que se brindan los servicios, son una parte tangible fundamental
de la oferta total del servicio”. Los mensajes acerca de cómo la empresa transmite a sus
clientes a través de los elementos como: la decoración, la distribución de los muebles y
otras áreas de servicio y la atención del vendedor causan una impresión de quienes lo
visitan.
Asfahl (2000), plantea que la infraestructura de la empresa se debe diseñar con
suficiente consideración al trabajador que ha de tener acceso, junto con su equipo, para
dar mantenimiento, limpiar, reparar, reemplazar o cualquier acto de movilización que
requiera comodidad dentro de las instalaciones. Con frecuencia el área de trabajo está
ubicada en lugares donde les sería difícil el acceso en caso de cualquier inconveniente.
Atendiendo a estas consideraciones, el soporte físico se refiere a aspectos
concretos de la edificación, la manera de cómo están dispuestas las oficinas y salas de
atención al cliente, mobiliario, ubicación geográfica del negocio dentro de la ciudad,
facilidad de transporte, entre otros.
En cuanto al ambiente físico conformado por elementos como la temperatura, el nivel de ruido, el tipo e intensidad de iluminación, pueden influir en el estado de ánimo de la persona que ejecuta su trabajo dentro de la empresa y de las personas que esperan ser atendidas. De allí, la importancia de mantener en condiciones apropiadas
47
la planta física repercutirá directa e directamente en la productividad de los trabajadores, en la satisfacción de los clientes y por ende en el logro de los objetivos de la empresa.
2.2.4.2. Ambiente de trabajo
Ramírez (2007), puntualiza que el ambiente de trabajo es factor esencial en el
rendimiento humano; por lo que es necesario en el ser humano no trabaje más allá de
los límites máximos de su resistencia y en condiciones ambientales adecuadas.
Enfrentándose de esa manera, a situaciones como: temperatura, humedad, ruido,
vibraciones, iluminación y fuerzas de aceleración y desequilibrio. La atención de cada
uno de estos elementos le proporcionará a los trabajadores los conocimientos
necesarios para trabajar en forma permanente.
El medio ambiente de trabajo, es el resultado de:
• Progreso tecnológico; obedece a procedimientos nuevos en los sistemas de
trabajo.
• Diversidad de equipos que producen ruidos.
• Métodos modernos de organización de trabajo.
• Disposición de plantas al elemento físico de la empresa y a las condiciones de
las actividades productivas.
Según Jobber y Fahy (2007:180), “se trata del entorno en el que se entrega el
servicio y cualquier bien tangible que facilite el rendimiento y la comunicación”. El
ambiente de trabajo influye tanto en la cantidad como la calidad de trabajo que una
persona pueda realizar en su centro laboral de ahí la importancia que se le debe dar a
mejorar y convertir el ambiente de trabajo en un lugar cómodo y agradable.
El Reglamento Parcial de la LOPCYMAT (2007), establece que el medio ambiente
de trabajo se entiende como los lugares, locales o sitios, cerrados o al aire libre, donde
personas presten servicios a empresas, centros de trabajo, explotaciones, faenas y
48
establecimientos, cualquiera sea el sector de actividad económica; así como otras
formas asociativas comunitarias de carácter productivo o de servicio; o de cualquier otra
naturaleza, sean públicas o privadas, con las excepciones que establece la Ley.
De igual manera, las situaciones de orden socio-cultural, de organización del
trabajo y de infraestructura física que de forma inmediata rodean la relación hombre y
mujer–trabajo, condicionando la calidad de vida de los trabajadores y las trabajadoras y
la de sus familias. Igualmente os espacios aéreos, acuáticos y terrestres situados
alrededor de la empresa, centro de trabajo, explotación, faena, establecimiento; así
como de otras formas asociativas comunitarias de carácter productivo o de servicio y
que formen parte de las mismas.
Para el manual de higiene ocupacional de PDVSA HO-H-16 (2006), el ambiente
de trabajo Es el conjunto integrado por: Los lugares, locales o sitios, cerrados o al aire
libre, donde personas vinculadas por una relación de trabajo presten servicios a
empresas, oficinas, explotaciones, establecimientos industriales, agropecuarios y
especiales o de cualquier naturaleza que sean públicos o privados.
Las circunstancias de orden sociocultural y de infraestructura física que de forma
inmediata rodean la relación hombre–trabajo, condicionando la calidad de vida de los
trabajadores y trabajadoras y sus familias. Los terrenos situados alrededor de la
empresa, explotación, establecimientos industriales o agropecuarios y que formen parte
de los mismos.
2.2.4.3. Tecnología
Gibson y col. (2006), la definen como el procedimiento ejecutado por un individuo
sobre un objeto con o sin el manejo de herramientas, con el propósito de hacer un
cambio en él. Por lo tanto, las estructuras de la organización reflejan la tecnología en la
manera en que los puestos de trabajo son diseñados y agrupados, en ese sentido, el
estado actual del conocimiento en relación con las acciones apropiadas para cambiar
un objeto actúa en la decisión de los encargados de administrar los recursos.
Bateman y Snell (2005), afirman que en la actualidad toda organización para tener
49
éxito debe incorporar a su estrategia el uso de las tecnologías. Los adelantos
tecnológicos crean productos nuevos, avanzadas técnicas de producción y mejores
maneras de administrar y de comunicarse. Adicionalmente, en la medida que
evoluciona la tecnología, se desarrollan nuevas empresas, mercados competitivos.
Las nuevas tecnologías también proporcionan nuevas técnicas de producción
originando así innovaciones en los negocios. Las estrategias que se desarrollan en
torno a la avanzada de los adelantos tecnológicos crean una ventaja competitiva; por el
contrario, las estrategias que ignoran respecto a sus competidores y de la tecnología se
dirigen hacia la obsolescencia y la extinción.
Jones y George (2006), consideran que los cambios tecnológicos en algunas organizaciones son una oportunidad como en otras representa una amenaza. Por un lado, el uso de la tecnología ayuda a generar oportunidades para productos nuevos que los administradores en sus empresas pueden utilizar. Sin embargo, tales innovaciones en los productos y servicios pueden ocasionar perjuicios en la demanda de los productos más viejos que ya están consolidados.
2.2.5. Estrategias de prevención
Benavides (2004:64), define las estrategias como “el enfoque general de las acciones que se ejecutarán para alcanzar los objetivos”. En este sentido, las estrategias se refieren a la forma en la cual competirá una empresa para posicionarse y expandir sus operaciones en el mercado, desplegando así esfuerzos y recursos para alcanzar objetivos amplios.
Según Venkatraman y Camilus (1984, citado en Wallker y col., 2006:10), una estrategia “es un patrón fundamental de objetivos, despliegues de recursos e interacciones, presentes y planeados, de una organización con los mercados, competidores y otros factores”.
Así mismo, Koontz y Weihrich (2007:80), definen a las estrategias como “la determinación de los objetivos básicos a largo plazo de una empresa y la adopción de líneas de acción, así como la asignación de los recursos necesarios para la consecución de estas metas”.
50
Las definiciones de estrategias, planteadas por los autores citados anteriormente,
guardan una estrecha relación, en cuanto a la importancia que se le confiere al proceso
de integración de las metas de una organización, las políticas y acciones secuenciales
hacia un todo cohesionado. Una estrategia bien formulada ayuda al gerente a coordinar
los recursos de la organización hacia una posición única y viable, basada en sus
competencias relativas internas, anticipando los cambios en el entorno y los
movimientos contingentes de la competencia.
Con respecto a la prevención de accidentes, Chiavenato (2002), señala que en la
práctica todo programa de prevención de accidentes se concentra en dos actividades
básicas: eliminar las condiciones de seguridad y reducir los actos de inseguridad.
Con relación al primero; es el papel de los trabajadores encargados de la defensa,
como son los ingenieros de seguridad quienes diseñan cargos para eliminar o reducir
los riesgos físicos de los empleados. Los supervisores y gerentes de línea cumplen un
papel fundamental en la reducción de las condiciones de inseguridad, tales como:
localización de áreas de riesgo; es una evaluación constante y permanente de las
condiciones ambientales que pueden provocar accidentes en la empresa.
Por otro lado, se encuentra el análisis profundo de los accidentes; todo informe de
accidentes, con o sin incapacidad laboral, debe ser sometido a un profundo análisis
para descubrir las posibles causas (condiciones de inseguridad o actos inseguros).
Seguidamente se debe dar apoyo irrestricto de la alta administración; este compromiso
determina la importancia de la alta dirección le da al programa la prevención de
accidentes en la empresa.
Con relación a la reducción de los actos inseguros; los accidentes son semejantes
a otro tipo de desempeño deficiente. Estudios psicológicos sugieren que no se debe
seleccionar a las personas que presenten tendencias a accidentarse en cargos
específicos. Para ello, se debe hacer un proceso de selección del personal, usando
técnicas para identificar ciertos rasgos humanos (habilidad visual o coordinación motriz)
relacionados con accidentes en ciertos cargos.
Estableciendo medidas para evaluar las habilidades visuales, pruebas de madurez
51
emocional, desempeño seguro y cuidadoso, pruebas de personalidad, susceptibilidad a
la exposición a productos tóxicos.
Ivancevich (2005), asegura que los métodos de prevención deben estar presentes
en las organizaciones para mejorar el historial de seguridad hacia los trabajadores. Una
de las medidas consiste en incorporar la seguridad en el centro de trabajo mediante el
diseño de ingeniería de seguridad, logrado con ello que los puestos de trabajo sean
más cómodos, menos confusos, y menos fatigosos. Estos ayudan a los empleados
estar más alertas y menos vulnerables a accidentes.
Una de las funciones del departamento de seguridad es la inspección del centro
de trabajo con la meta de reducir accidentes y enfermedades. Por tal razones, se
requiere hacer evaluaciones sistemáticas a intervalos regulares de las pruebas de
accidentes y peligros para la salud, los datos de estas investigaciones deben reunirse
de fuentes internas y externas. Por otra parte, las investigaciones de los accidentes
comprende muchas veces el cálculo de las tasas de accidentes en las empresas,
comparándose con las cifras industriales y nacionales para determinar el desempeño
relativo de la organización en el área de la salud.
Para el Manual de Higiene Ocupacional PDVSA HO-H-16 (2006), las medidas de
prevención: son las acciones individuales y colectivas cuya eficacia será determinada,
en función a la participación de las trabajadoras y los trabajadores del centro de trabajo,
permitiendo la mejora de la seguridad y salud. Estas acciones estarán enfocadas a la
identificación, evaluación y control de los riesgos derivados de los procesos peligrosos.
Su aplicación constituye un deber por parte de la empleadora o del empleador.
2.2.5.1. Técnica del lavado de manos
Vásquez y Rivas (2004), señalan entre las medidas preventivas el lavado de
manos, siendo ésta la más importante y debe ser ejecutada de inmediato, antes y
después del contacto con los pacientes. Al tratar con los pacientes se debe considerar:
entre diferentes procedimientos efectuados en el mismo paciente, luego de
manipulaciones de instrumentales o equipos que hayan contactado con superficies del
52
ambiente y/o pacientes y luego de retirarse los guantes.
Así mismo, se deben considerar el lavado de manos: luego de manipular sangre,
fluidos corporales, secreciones, excreciones, materiales e instrumentos contaminados,
tanto se haya usado o no guantes. Inmediatamente después de retirar los guantes del
contacto con pacientes y entre diferentes tareas y procedimientos. El lavado de manos
es la limpieza activa, química y mecánica de las manos y antebrazo, antes y después
de realizar una actividad de enfermería.
Arze y col. (2005), sugieren que es la medida más importante para la prevención
de infecciones, y existen tres tipos de lavado de manos:
2.2.5.1.1. Lavado común
Con jabón y agua es eficaz en remover la mayoría de los gérmenes de las manos.
Indicaciones
• Antes de manipular alimentos, alimentar al paciente o comer.
• Antes y después de utilizar servicios higiénicos.
• Antes y después de prestar atención al paciente.
• De inmediato, antes y después del contacto entre pacientes
• Luego de concluida la atención a cualquier paciente
• Entre diferentes procedimientos no invasivos efectuados en el mismo paciente.
• Después de ensuciarse las manos
• Lavarse las manos antes y después de sacarse los guantes
La técnica de lavado común de las manos tiene la siguiente secuencia
1. Subirse las mangas por encima de las muñecas
2. Preferentemente retirar alhajas y reloj
53
3. Mojarse las manos con agua corriente
4. Aplicar 3 a 5 ml. de jabón neutro líquido
5. Frotar las superficies de las caras palmar y dorsal de ambas manos entre si,
pliegues interdigitales, y falanges dístales de todos los dedos, durante 10 a 15
segundos, generando abundante espuma.
6. Enjuagar abundantemente con agua corriente en dirección distal a proximal
(punta de dedos a muñeca). Una vez concluido el enjuague No sacudir las manos.
7. Secar con toalla de papel (preferentemente), toalla de lino: en dirección distal a
proximal, sin volver a los dedos.
8. Desechar la toalla de papel en el basurero de residuos comunes, en caso de
toalla de lino, ésta debe ser utilizada una sola vez y ser descartadas a la espera de su
lavado para reutilizarla.
2.2.5.1.2. Lavado higiénico
Utiliza algún tipo de antiséptico o detergente con el objetivo de remover y/o matar
microorganismos.
Indicaciones
• Antes de cualquier procedimiento invasivo.
• Antes de prestar atención a pacientes inmuno deprimidos.
• Antes y después de tocar heridas, catéteres, etc.
• Después de entrar en contacto con sangre y derivados o secreciones
contaminadas
Se debe de usar
• Jabón común neutro de preferencia líquido.
• Jabón con detergente antimicrobiano o con agente antiséptico en: situaciones
54
específicas (brotes epidémicos, previo a procedimientos invasivos, unidades de alto
riesgo).
La técnica de lavado higiénico de las manos:
1. Subirse las mangas hasta el codo.
2. Retirar alhajas y reloj.
3. Mojarse las manos con agua corriente.
4. Aplicar a ambas manos 3 a 5 ml. de jabón antiséptico o desinfectante jabonoso.
5. Frotar las superficies de las caras palmar y dorsal de ambas manos entre si,
pliegues interdigitales, y falanges dístales de todos los dedos, durante 10 a 15
segundos.
6. Enjuagar abundantemente con agua corriente en dirección distal a proximal
(punta de dedos a muñeca). Una vez concluido el enjuague No sacudir las manos.
7. Secar con toalla de papel (preferentemente), toalla de lino: en dirección distal a
proximal, sin volver a las manos. Desechar la toalla de papel en el basurero de residuos
comunes, en caso de toalla de lino esta debe ser utilizada una sola vez y ser
descartadas a la espera de su lavado para reutilizarla.
8. Cerrar la canilla con la toalla.
2.2.5.1.3. Lavado quirúrgico
Utiliza antisépticos o detergentes para remover y matar microorganismos
previamente a realizar algún procedimiento invasivo protegiendo al usuario y al
proveedor.
Indicaciones
• Antes de cualquier intervención quirúrgica, sin importar la complejidad.
• Aplicar a ambas manos 3 a 5 ml. de jabón antiséptico o desinfectante jabonoso.
55
En la técnica para el lavado quirúrgico de manos
1. Retirar alhajas y reloj.
2. Subirse las mangas del pijama quirúrgico hasta por encima del codo.
3. Mojarse las manos con agua corriente.
4. Aplicar a ambas manos 3 a 5 ml. de jabón antiséptico o desinfectante jabonoso.
5. Con un cepillo de cerda, frotar las superficies de las caras palmar y dorsal de
ambas manos, pliegues interdigitales y falanges dístales de todos los dedos, continuar
el cepillado en dirección proximal hasta el codo, el tiempo de exposición a los
desinfectantes es de 3 a 5 minutos, además se extiende a las muñecas y antebrazos.
6. Enjuagar abundantemente con agua corriente en dirección distal a proximal
(punta de dedos a muñeca). Una vez concluido el enjuague No sacudir las manos.
7. Secar con toalla estéril, en dirección distal a proximal, sin volver a las manos.
Desechar la toalla en el tacho para ropa quirúrgica usada.
8. Colocarse la bata quirúrgica.
2.2.5.2. Uso de guantes
Arze y col. (2005), consideran que el uso de los guantes actúan como una barrera
de protección contra microorganismos infecciosos, por tanto el objetivo principal es
proteger al personal, se debe aclarar que el uso de guantes no reemplaza el lavado
manos.
Tipo de guantes
(A) Guantes quirúrgicos
Estos guantes se utilizan cuando el personal de salud habrá de realizar
procedimientos que lo pongan en contacto con sangre y tejidos.
(B) Guantes para exámenes de un solo uso
56
Estos guantes se usan cuando habrá contacto con mucosas intactas o cuando el
principal propósito del uso del guante es reducir el riesgo de exposición del proveedor
de servicios de salud, estos guantes deben desecharse después de su uso.
(C) Guantes multiuso o para trabajo pesado
Este tipo de guante se utiliza para manipular elementos contaminados, desechos
médicos, desechos químicos y para realizar actividades de aseo, por lo que deberán
contar con un reforzamiento especialmente en la palma de las manos por la posibilidad
de contacto con material cortante o punzante y la consecuente probabilidad de
producirse un accidente laboral.
Indicaciones
• Usar guantes previo contacto con: sangre, fluidos corporales, secreciones,
excreciones, mucosas y materiales contaminados.
• Para procedimientos invasivos deben usarse guantes de látex estériles y luego
descartarlos.
• Para el aseo corporal de los pacientes.
Se debe tomar en cuenta el uso de guantes cuando:
• El trabajador de salud tenga lesiones o heridas en la piel.
• Luego del contacto con materiales que puedan contener alta concentración de
microorganismos.
• Entre diferentes procedimientos en el mismo paciente.
Retirado de guantes
• Antes de retirarse los guantes estos deben primero lavarse.
• Antes de tocar áreas no contaminadas o superficies ambientales.
• Cuando un guante se rompa, se debe retirar ambos guantes, lavarse las manos
57
con agua y detergente por arrastre y colocarse otros nuevos.
• Antes de atender a otro paciente.
Las manos deben ser lavadas inmediatamente después de retirados los guantes
para eliminar la contaminación de las mismas que sucede aún con el uso de guantes.
2.2.5.3. Protección ocular
Arze y col. (2005), opinan que cuando se anticipa generar aerosoles de sangre o
de secreciones que podrían contaminar la cara, las mucosas de la nariz, boca o los ojos
se usan barbijos o protectores oculares.
Indicaciones
• El uso de barbijo tiene como objetivo evitar que los microorganismos eliminados
al hablar, toser, o respirar lleguen al usuario, así como de proteger membranas
mucosas de nariz y boca durante procedimientos y cuidados de pacientes con
actividades que puedan generar aerosoles, salpicaduras de sangre, fluidos corporales,
secreciones, excreciones, etc.
• Lentes especiales usados en procedimientos terapéuticos y diagnósticos por
exposición a Rayos Láser.
Recomendación
• El barbijo debe ser de material impermeable frente a aerosoles o salpicaduras,
por lo que debe ser amplio para cubrir nariz y toda la boca, se debe utilizar el barbijo
como corresponde es decir como barrera efectiva para la boca y la nariz por lo tanto,
este deberá estar permanentemente ocluyendo ambas cavidades. Puede ser utilizado
durante el tiempo en que se mantenga limpio y no deformado. Idealmente el barbijo
debe ser renovado después de cada cirugía.
• Los lentes deben ser amplios y ajustados al rostro para cumplir eficazmente con
la protección.
58
2.2.5.4. Uso de zapatos
Arze y col. (2005), evalúan la necesidad de usar zapatos para ayudar a minimizar
el número de microorganismos que se pueden llevar al área quirúrgica o de
procedimientos y protege los pies del proveedor de lesiones, de salpicaduras de sangre
y otros fluidos.
Usar botas limpias, no estériles para proteger la piel y prevenir la suciedad de la
ropa durante procedimientos, en actividades de cuidados de pacientes que puedan
generar aerosoles, salpicaduras de sangre, fluidos corporales, secreciones y
excreciones.
El personal de enfermería debe usar zapatos exclusivos en el ambiente del
Instituto, quitarse los zapatos o botas y colocarlos en un lugar adecuado para posterior
procesamiento y lavarse las manos después de manipular los zapatos o botas
(colocarse o retirárselos).
2.2.5.5. Protección corporal
Arze y col. (2005), asumen que se recomienda frecuentemente el uso de batas y
delantales para prevenir la transmisión de infecciones, su importancia es secundaria al
lavado de manos. Su uso es recomendable cuando la ropa del personal de salud este
expuesta a contaminación.
• La utilización de batas es una exigencia multifactorial en la atención de pacientes
por parte de los integrantes del equipo de salud.
• La ropa contaminada será depositada en bolsa de plástico roja y será
transportada para el procesamiento.
• Es obligatoriedad del uso de mandil en la consulta externa y toda vez que el
personal este en contacto con pacientes, sin embargo el uso del mandil es restringido
para el área de trabajo.
• Utilizar frecuentemente el uso de batas y delantales para prevenir la transmisión
de la infección.
59
2.2.5.6. Lavado de material
2.2.5.6.1. Críticos
Arze y col. (2005), refieren que los materiales o instrumentos que entran en
contacto con tejidos estériles del cuerpo deben esterilizarse Ej. Instrumental quirúrgico
y/o de curación.
2.2.5.6.2. Semicrítico
Los materiales o instrumentos que entran en contacto con membranas mucosas
pueden esterilizarse o desinfectarse con desinfectantes de alto nivel (glutaraldehido) Ej.
Equipo de terapia ventilatoria, cánulas endotraqueales, etc.
2.2.5.6.3. No crítico
Los materiales o instrumentos que entran en contacto con la piel íntegra deben
limpiarse con agua y jabón y desinfectarse con desinfectantes de nivel intermedio o bajo
nivel como el cloruro de piridonio al 10%. Ej. Tensiómetro, vajilla chatas, patos,
muebles, ropa. Los artículos críticos, semi críticos y no críticos deben ser limpiados
mediante acción mecánica utilizando agua y un detergente neutro.
Todos los materiales, luego de ser usados deben ser colocados en inmersión en
un detergente enzimático o neutro durante un mínimo de 5 minutos posteriormente
cepillados y enjuagados con agua corriente a efecto de retirar todo resto de materia
orgánica presente, luego secados y de acuerdo a la categorización del material deben
ser esterilizados o desinfectados. Los críticos deben ser esterilizados. Los semi críticos
pueden ser procesados con desinfectantes de alto nivel (ej. glutaraldehido al 2% en un
tiempo mínimo de 20 minutos) y los no críticos mediante desinfección de nivel
intermedio o de bajo nivel.
2.3. Sistema de variables
2.3.1. Definición nominal
Bioseguridad
60
2.3.2. Definición conceptual
Para Arze y col. (2005), la bioseguridad es el conjunto de normas y
procedimientos orientados a salvaguardar la salud de los trabajadores, pacientes y
familiares que asistan a centros hospitalarios, con el propósito de lograr cambios en las
actitudes y conductas de los individuos para prevenir contaminaciones y usar de
manera pertinente las barreras de protección.
2.3.3. Definición operacional
Desde la perspectiva operacional, se entiende por bioseguridad el conjunto de
dimensiones e indicadores (principios, conocimientos, elementos y estrategias de
prevención), los cuales permiten hacer seguimiento de las actividades realizadas por el
personal que labora en las clínicas petroleras del municipio Cabimas. La relación se
precisa en la tabla de operacionalización de la variable. (Ver Tabla 1).
61
TABLA 1. OPERACIONALIZACIÓN DE LA VARIABLE
Fuente: Elaboración propia (2012)
OBJETIVOS ESPECÍFICOS VARIABLE DIMENSIÓN INDICADORESBarreras FísicasBarreras QuímicaBarreras BiológicasBarreras ErgonómicasBarreras Psicosociales
CapacitaciónManejo de Punzocortantes
Notificaciones de RiesgoInfraestructuraAmbiente de TrabajoTecnologíaTécnica del Lavado de ManosUso de GuantesProtección OcularUso de ZapatosProtección CorporalLavado de Material
OBJETIVO GENERAL: Proponer Medidas de Bioseguridad Para la Prevención de Pinchazos en las Clínicas Petroleras de Occidente.
Principios de Bioseguridad
Describir la situación actual para la aplicación de losprincipios de bioseguridad en el personal de enfermeríaen el uso de dispositivos con agujas en las clínicaspetroleras de Occidente.
Conocimientos
Evaluar el nivel de conocimiento que posee el personal de enfermería, para la aplicación de medidas deBioseguridad por pinchazos, según el manual de normasde PDVSA.
ElementosCaracterizar los elementos requeridos, para la aplicaciónde medidas de Bioseguridad por pinchazos.
Analizar las estrategias de prevención durante lasprácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones porpinchazos.
Estrategias de Prevención
Proponer alternativas que permiten la aplicación demedidas de Bioseguridad por pinchazos, que permitanreducir en el personal de enfermería los accidentes porpinchaduras.
Bioseguridad
Propuesto en las Recomendaciones
61
62
CAPÍTULO III
MARCO METODOLÓGICO
3.1. Tipo de investigación
Pelakais y col. (2007), refieren que al momento de clasificar una investigación, han
de ser considerados el problema planteado y los objetivos a alcanzar, para ello es
necesario relacionar el propósito del estudio con respecto a la clasificación de la
investigación.
Por su parte, Sabino (2007), propone esquematizar los tipos de investigación en
función de tres ejes fundamentales: exploratorios, descriptivos y explicativos. La
investigación puede ser de varios tipos, y en tal sentido se puede clasificar de distintas
maneras, sin embargo, es común hacerlo en función de su nivel, diseño y propósito.
De las consideraciones anteriores, el presente estudio se consideró de tipo
descriptiva, pues permite describir, analizar e interpretar los hechos actuales, lo cual
coincide con la definición ofrecida por Hernández y col. (2007), quienes consideran a
los estudios descriptivos como aquellos donde se analizan situaciones y eventos, es
decir, cómo es y se manifiesta determinado fenómeno.
Así mismo, la investigación descriptiva trata de especificar las propiedades
importantes de personas, grupos, o cualquier otro fenómeno sometido a análisis, en
este caso a los sujetos que manejan la bioseguridad pertenecientes al área de
enfermería de la clínica Dr. Gustavo Quintini.
Hurtado (2008), expresa que la investigación descriptiva tiene como fundamento
precisar la descripción del evento de estudio, asociándose al diagnóstico al exponer el
63
suceso que se investiga, por medio de una enumeración detallada de sus
características o propiedades.
En ese sentido, los resultados se pueden lograr dos niveles, dependiendo del
fenómeno y del propósito del investigador, un nivel más elemental, en el cual se logra
una clasificación de los resultados con características comunes y un nivel de mayor
profundidad en el cual se relaciona los elementos observados a fin de tener una
descripción más detallada.
3.2. Diseño de la investigación
Hurtado (2008), considera en el diseño de investigación hacer explícitos los
aspectos operativos de la misma. Si el tipo de investigación define los objetivos, el
diseño se ubica de acuerdo al procedimiento. Abarca a dónde y cuándo se recopila la
información, así como la amplitud de la información a recopilar, para dar respuesta a la
interrogante del estudio de la manera más pertinente posible.
Por su parte, Arias (2006), establece que el diseño de la investigación es la
estrategia general que adopta el investigador para responder al problema planteado.
Sabino (2002), puntualiza que el diseño de la investigación tiene como objetivo el
proporcionar el modelo de verificación que permitirá contrastar los hechos con la teoría
y se presenta como una estrategia o plan general que determina las operaciones
necesarias para lograrlo.
Tomando en consideración los señalamientos, la presente investigación se tipificó
como un diseño no experimental, pues la misma se realizó sin manipular
deliberadamente la variable. Se trata de un estudio donde no se altera intencionalmente
la variable Bioseguridad y se observan los fenómenos de la misma manera como
ocurren en su contexto natural, para luego analizarlos.
En función de la dimensión temporal o del número de momentos donde se va a
introducir la recolección de datos, esta investigación se define como descriptiva
transeccional. Tal como lo plantean, Hernández y otros (2007:208), “los diseños de
investigación transeccional recolectan datos en un solo momento, en un tiempo único.
64
Su propósito es describir las variables y analizar su incidencia en un momento dado”.
Hurtado (2008:148), especifica que en los diseños transeccionales “el investigador
estudia el evento en un único momento del tiempo”. En estos diseños lo que se mide es
el comportamiento de una variable o la relación entre variables en un tiempo
determinado.
Sierra (2005), postula en esta clase de diseños, tienen lugar cuando el grupo
investigado es una muestra o población, formada por determinados grupos en un
momento determinado en el tiempo, con el propósito de inferir cómo evoluciona con el
paso del tiempo.
Así mismo, el estudio se enmarca en un diseño de campo, en el cual los datos
fueron recolectados en el ambiente donde se reúne cotidianamente el personal de
enfermería que labora en la clínica Dr. Gustavo Quintini. Tal y como lo indica Hurtado
(2008:148), quien específica “el “dónde” del diseño alude a las fuentes: si son vivas y la
información se recoge en su ambiente natural, el diseño se denomina de campo”.
Sabino (2002) afirma que el estudio de campo permite al investigador cerciorarse
de las condiciones reales en que las que se han conseguido sus datos, permitiendo
realizar modificaciones en caso que surjan interrogantes respecto a su calidad, para así
garantizar mayor confianza en el conjunto de la información obtenida. Al realizar el
análisis de las unidades de información en su respectiva realidad, la data que se
obtendrá a partir de la aplicación de instrumentos, podrá ser analizada minuciosamente,
sin variar ninguno de sus elementos a voluntad.
Balestrini (2002:131) lo define como una investigación en donde “se permite
establecer una interacción entre los objetivos y la realidad; observar y recolectar los
datos directamente, en su situación natural; profundizar en la comprensión de los
hallazgos encontrados con la aplicación de los instrumentos y proporcionar al
investigador una lectura del fenómeno objeto de estudio”.
3.3. Población
Para Chávez (2007:162), la población “es el universo de estudio de la
65
investigación, sobre el cual se pretende generalizar los resultados, constituida por
características o estratos que le permiten distinguir los sujetos, unos de otros”.
De igual manera, Corbetta (2007: 274), define a la población como “un conjunto de N
unidades, que constituyen el objeto de un estudio; donde N es el tamaño de la población”.
En este orden de ideas, la población de estudio de la presente investigación
estuvo conformada por las 34 enfermeras que trabajan en la Clínica PDVSA Dr.
Gustavo Quintini La Salina Cabimas con un promedio de atención de 5000 pacientes
aproximadamente al mes distribuidas en las áreas de la siguiente manera (ver Tabla 2).
Tabla 2. Distribución de las unidades de observación UNIDADES DE OBSERVACIÓN NÚMERO DE PERSONASEmergencia 15Quirófano 3Salud Ocupacional 4Área de Inmunización 2Sala de Cura 1Esterilización 1Cardiología 2Depósito 1Videoendoscopia 1Atención Domiciliaria 1Fisioterapia 1Epidemiología 1Lïder de Enfermería 1TOTAL 34
Fuente: Elaboración propia (2011)
Cabe destacar que la población se tipifica como finita, ya que según Hurtado
(2008), una población finita es aquella que todos los sujetos son conocidos y pueden
ser identificados y enumerados por el investigador en su totalidad.
Así mismo, la población se cataloga como accesible, por cuanto el número de
clínicas petroleras, hacen factible desplegar la investigación sobre la totalidad de la
población. En este sentido, se aplica un censo poblacional, según Parra (2003:16), “es
posible estudiar cada uno de los elementos que componen la población cuando ésta es
pequeña”.
66
Sobre las bases de las ideas expuestas, la presente investigación estudió como
unidad de análisis al personal de enfermería, ya que es éste el que está en capacidad
de dar respuesta a las interrogantes con las cuales se persiguen obtener los resultados
esperados de esta investigación.
Sierra (2007), define las unidades de observación como las realidades que se
pretenden observar, constituyendo en la investigación el objeto global de estudio y de
ellas se obtienen los datos empíricos necesarios para contrastar las hipótesis con la
realidad.
Las unidades de observación son entidades sustantivas que forman unidades de
realidad más o menos independientes y que como tales poseen determinados atributos
y propiedades y son susceptibles de diversos cambios y relaciones referentes a dichos
atributos y propiedades.
3.4. Técnicas e instrumento de recolección de datos
Afirma Sabino (2002), que las técnicas de recolección de datos son aquellas
metodologías a seguir con las que se vale el autor para obtener datos de la realidad,
representadas a través de instrumentos o cualquier instrumento del que se vale
investigador para acercarse a los fenómenos y extraer de ellos información.
Para el presente estudio se utilizó un instrumento, haciendo uso de la técnica de
recolección de datos a la encuesta, como es generalmente conocida es una forma
específica de interacción social que tiene por objeto recolectar datos para una
investigación.
A este respecto, Sabino (2002), expresa que el investigador formula preguntas
para requerir información a un grupo socialmente significativo de personas acerca de
los problemas en estudio para luego, mediante un análisis de tipo cuantitativo, sacar las
conclusiones que se correspondan con los datos recogidos.
Por otra parte, Chávez (2007), argumenta que los instrumentos de investigación
son los medios que utiliza el investigador para medir el comportamiento o atributos de
las variables, entre los cuales destaca: los cuestionarios, entrevistas y escalas de
67
clasificación, entre otros. Para la recolección de los datos que sirve de base para la
interpretación de los resultados de la investigación se utiliza el cuestionario que es uno
de los instrumentos de la técnica de encuesta.
Bavaresco (2006:100), define el cuestionario como “el instrumento que más
contiene los detalles de la población que se investiga tales como: variables,
dimensiones e indicadores”. Es decir, es el conjunto de preguntas a las que el sujeto
puede responder oralmente o por escrito, cuyo fin es poner en evidencia determinados
aspectos a estudiar.
Por otra parte, Tamayo (1984), citado por Méndez (2007:299), define la encuesta
como un “instrumento de observación formado por una serie de preguntas formuladas y
cuyas respuestas son anotadas por el empadronador”. Es de corta duración y
eventualmente la puede contestar de manera directa la persona encuestada.
Según Méndez (2007), la encuesta es la técnica de recolección de información
que se hacen a través de formularios, los cuales tienen aplicación a aquellos problemas
que se pueden investigar por métodos de observación, análisis de fuentes
documentales y demás sistemas de conocimientos.
Los instrumentos de investigación son los medios que se van a utilizar para medir
el comportamiento o atributos de las variables. En la presente investigación se aplicó
como técnica de recolección de datos, la encuesta utilizando como instrumento el
cuestionario tipo escala Likert.
Sobre esta consideración, Hurtado (2008:479), define la escala de Likert como un
conjunto de ítems presentados en forma de juicios referidos a un evento o situación
acerca del cual se quiere medir la actitud. Puede concebirse como un continuo de
valores ordenados correlativamente que admite un punto inicial y otro final.
Hernández y otros (2006:.341), coinciden en considerar este tipo de escalas como “un conjunto de ítems presentados en forma de afirmaciones o juicios, ante los cuales se pide la reacción de los participantes”. Consiste en un conjunto de ítems presentados en forma de afirmaciones o juicios ante los cuales se pide la reacción de los sujetos.
68
Se presenta cada afirmación y se pide al sujeto que externe su reacción eligiendo uno de los cinco puntos de la escala. A cada punto se le asigna un valor numérico. Así, el sujeto obtiene una puntuación respecto a la afirmación y al final se obtiene su puntuación total sumando las puntuaciones obtenidas en relación a todas las afirmaciones.
Para Chávez (2007), refiere que las escalas tipo Likert consideran las opciones
totalmente de acuerdo, parcialmente de acuerdo, ni de acuerdo ni en desacuerdo,
parcialmente en desacuerdo y totalmente en desacuerdo, estableciendo un puntaje para
cada categoría.
De igual manera, puntualiza que para cada categoría (Ver Tabla 3), se le debe dar
una numeración a los ítems de dirección positiva de mayor a menor, de igual manera,
cuando el ítems está orientado a la dirección negativa se le dará una ponderación de
mayor a menor puntuación.
Tabla 3. Codificación Escala Likert Ítem con dirección positiva Alternativas de respuestas Ítem con dirección negativa
5 Totalmente de acuerdo (TA) 1
4 Parcialmente de acuerdo (PA) 2
3 Ni de acuerdo ni en desacuerdo (NAND) 32 Parcialmente en desacuerdo(PD) 4
1 Totalmente en desacuerdo (TD) 5 Fuente: Chávez (2007)
En tal sentido, el cuestionario tipo escala de Lickert (Ver Anexo A) constó de
treinta y seis (36) ítems, con opción a respuestas cerradas solicitando al encuestado
que seleccione sólo una alternativa de respuesta. Según el grado de estructuración, el
instrumento fue diseñado con afirmaciones o negaciones.
3.5. Validez y Confiabilidad
Méndez (2007:298), afirma que “la validez puede definirse como el grado en que
una prueba mide lo que se propone medir”, este aspecto es de gran importancia ya que
los resultados obtenidos le aseguraran al investigador que la información obtenida le
servirá a su propósito. La validez abarca todo el concepto experimental y establece si
69
los resultados obtenidos cumplen todos los requisitos del método de investigación
científica.
Corbetta (2007), puntualiza el término validez como el proceso donde se
descompone analíticamente la variable estudiada en dimensiones, para cerciorarse de
que todas las dimensiones quedan cubiertas por los indicadores seleccionados. Así
mismo, la validez se determina antes de la aplicación del instrumento, mediante el juicio
de expertos.
Hernández y otros (2006:278), plantean que la validez es el “grado en el cual el
instrumento refleja un dominio específico de contenido de lo que se mide”. Luego de
diseñado el instrumento, antes de su aplicación, se debe cumplir con el requisito de
validación del mismo.
Atendiendo a estas consideraciones, el instrumento diseñado para la recolección de
información fue validado por un grupo de expertos, el cual estuvo conformado por personas
de extensa experiencia en seguridad industrial. Una vez determinada la validez de contenido
del instrumento a través del juicio de expertos, se reestructuró el instrumento basado en las
sugerencias de los especialistas, seguidamente se aplicó una prueba piloto, a un grupo de
sujetos con las mismas características de las poblaciones objeto de estudio, cuyo resultado
fue 0,99 de nivel de confiabilidad (Ver anexo 2)
Parra (2003), establece que el nivel de confianza es la probabilidad de que la
estimación efectuada se ajuste a la realidad, es decir, la proporción de que el intervalo
construido en torno a un estadístico capte el verdadero valor del parámetro.
Pardo y Ruiz (2002), opinan en este tipo de prueba de confiabilidad asume que la
escala está compuesta por elementos homogéneos que miden las misma
características y circunstancias, en donde la consistencia interna de la escala puede
medirse mediante la correlación existentes entre todos sus elementos.
Por otra parte, Corbetta (2007), expone que la confiabilidad indica el grado en que
un procedimiento concreto de traducción de un concepto en variable produce los
mismos resultados en pruebas repetidas con el mismo instrumento de investigación. La
fiabilidad (confiabilidad) es un ingrediente necesario para la determinación de la validez
70
total de un experimento científico y el aumento de la fuerza de los resultados.
3.6. Análisis de la información
Méndez (2007:326), argumenta que el análisis de los resultados “es un proceso
que implica el manejo de los datos obtenidos y contenidos en cuadros, gráficos y tablas,
una vez dispuestos, se inicia su comprensión considerando el marco teórico, partiendo
de allí para responder a los objetivos”.
Sabino (2002), plantea que dentro de las técnicas para el análisis cuantitativo, se
debe seleccionar la tabulación, técnica mediante la cual se elaboran las tablas
correspondientes para cada una de las preguntas del cuestionario en términos de
cuantificar la información obtenida por medio de la aplicación del instrumento.
En el presente estudio, los datos se analizaron a través de la técnica estadística
descriptiva, concretamente con la asignación de frecuencias absolutas y relativas, con
sus respectivas medias las cuales según Hernández y otros (2006:419), “es el conjunto
de puntuaciones ordenadas en sus respectivas categorías”.
3.7. Fases de la investigación
El presente estudio se desarrolló bajo los siguientes aspectos
1 . Se seleccionó el tema de estudio: Prevención de riesgos en el manejo de
dispositivos con aguja en las clínicas de la Industria Petrolera de Occidente.
2. Se identificaron de las circunstancias del problema objeto de estudio y
formulación del problema, sistematización y objetivos de la investigación en función de
los aspectos que se deseaban conocer acerca de la variable bioseguridad.
3. Se realizó la búsqueda y selección de información documental para la
conformación del marco teórico de la investigación, así como investigaciones previas o
antecedentes sobre variable en estudio, los cuales permitieron obtener aportes diversos
para la orientación de la presente investigación.
4. Se identificó la variable, con sus dimensiones, subdimensiones e indicadores
71
para proceder a la operacionalización de la misma.
5. Se formuló el enfoque metodológico de la investigación: considerando el tipo y
diseño de la investigación, población, instrumentos de recolección de datos, pruebas
de validez y confiabilidad, análisis de la información y procedimiento de la investigación.
6. Se elaboró el instrumento de recolección de datos.
7. Realización de las pruebas de validez, mediante la intervención de cinco (5)
expertos.
8. Desarrollo del plan de recolección de datos, mediante la realización de un
trabajo de campo, el cual consiste en la aplicación del instrumento en la población
seleccionada.
9. Realización de la prueba de confiabilidad, para lo cual se aplicó el coeficiente
Alfa Cronbach.
10. Análisis de los datos: mediante tratamiento estadístico para obtener frecuencias y
porcentajes, a fin de generar el correspondiente análisis de la información obtenida.
11. Discusión de las propuestas de los distintos autores con los datos resultantes
del instrumento de recolección de datos analizados, a fin de dar cumplimiento a los
objetivos de la investigación.
12. Establecimiento de conclusiones y recomendaciones.
13. Reseña de referencias bibliográficas y anexos.
72
CAPÍTULO IV
ANÁLISIS DE RESULTADOS
En relación al primer objetivo orientado a “Describir la situación actual para la
aplicación de los principios de bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de
dispositivos con agujas en las clínicas petroleras de Occidente”, se presenta la
dimensión principios de bioseguridad con los indicadores: Barreras físicas, químicas,
biológicas, ergonómicas y psicosociales.
Tabla 4. Principios de bioseguridad en el personal de Enfermería en el uso de dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina. Barreras físicas. 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr1. Establecimiento de programaspara la evaluación de lascondiciones físicas del individuoy sus hábitos, en función de ladisminución de accidenteslaborales.
1 3,00 6 17,60 1 3,00 3 8,80 23 67,60 34 100,00
2. Toma de medidas necesariaspara la manipulación de objetospunzo penetrantes que puedanser una vía de transmisión deenfermedades.
10 29,40 0 0,00 1 2,90 2 5,90 21 61,80 34 100,00
Promedio Frecuencia 5,50 16,20 3,00 8,80 1,00 2,95 2,50 7,35 22,00 64,70 34,00 100,00
Media Indicador
Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
OPCIONES DE RESPUESTA
ITEMS
2,04 Fuente: Elaboración propia (2012)
73
16,28,8
2,957,35
64,7
0
10
20
30
40
50
60
70Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 1. Barreras físicas
El indicador barreras físicas, tabla 4; figura 1, refleja para el ítem 1, 67,6% de los
encuestados reportaron estar en total desacuerdo con la afirmación de que: “Se
establecen programas para la evaluación de las condiciones físicas del individuo y sus
hábitos, en función de la disminución de accidentes laborales”, un 17,6% está
parcialmente de acuerdo, un 8,8% parcialmente en desacuerdo y ni de acuerdo ni
desacuerdo y totalmente de acuerdo con igual frecuencia de un 3%.
El ítem 2, 61,8% respondió en total desacuerdo con que: “Se toman las medidas
necesarias para la manipulación de objetos punzo penetrantes que puedan ser una vía
de transmisión de enfermedades”, sin embargo, el 29,4% dijo estar totalmente de
acuerdo, el 5,9% parcialmente en desacuerdo y el 2,9% ni de acuerdo ni en
desacuerdo. La media para el indicador fue de 2,04.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 22 enfermeras que representan un 64,70%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas para solventar las barreras físicas.
74
Tabla 5. Principios de bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de
dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina. Barreras químicas. 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr3. Uso de desinfectantes paraayudar a elliminar de la piel o losinstrumentos; los gérmenesadquiridos después de suexposición.
10 29,40 1 2,90 2 5,90 3 8,80 18 53,00 34 100,00
4. Conocimiento previo por elpersonal, de los efectosadversos o lesiones que puedencausar el uso de desinfectantes.
8 23,50 1 2,90 14 41,30 1 2,90 10 29,40 34 100,00
Promedio Frecuencia 9,00 26,45 1,00 2,90 8,00 23,60 2,00 5,85 14,00 41,20 34,00 100,00Media Indicador
OPCIONES DE RESPUESTA
ITEMS Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
2,68 Fuente: Elaboración propia (2012)
26,45
2,9
23,6
5,85
41,2
051015202530354045
Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 2. Barreras químicas
Respecto al indicador barreras químicas, tabla 5; figura 2, ítem 3, el 53% de la
población dijo estar totalmente en desacuerdo con “Se hace uso de desinfectantes para
ayudar a eliminar de la piel o los instrumentos, los gérmenes adquiridos después de su
exposición”, mientras que el 29,4% está totalmente de acuerdo, el 8,8% parcialmente
en desacuerdo, el 5,9% ni de acuerdo ni en desacuerdo y el 2,9% parcialmente de
acuerdo.
El ítem 4, 41,3% señaló de los encuestados dijo estar ni de acuerdo ni en
desacuerdo con “Todos los desinfectante antes de su utilización son conocido por el
personal sobre los efectos adversos o lesiones que pueden causar”, el 29,4%
75
totalmente en desacuerdo, el 23,5% totalmente de acuerdo y el 2,9% parcialmente de
acuerdo y parcialmente en desacuerdo. La media se situó en 2,68.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 14 enfermeras que representan un 41,20%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas para solventar las barreras químicas
Tabla 6. Principios de bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina. Barreras biológicas 2011-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr5. Aplicación de vacunas,antibióticos y quimioprofilaxisrespectivos para darle protección al personal de salud.
7 20,60 1 2,90 5 14,70 2 5,90 19 55,90 34 100,00
6. Reporte de casos deenfermedades contraídas porpinchazos, tales como el virus dela Hepatitis B y VIH.
0 0,00 0 0,00 16 47,00 9 26,50 9 26,50 34 100,00
Promedio Frecuencia 3,50 10,30 0,50 1,45 10,50 30,85 5,50 16,20 14,00 41,20 34,00 100,00Media Indicador
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
OPCIONES DE RESPUESTA
ITEMS Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
2,24 Fuente: Elaboración propia (2012)
10,3
1,45
30,85
16,2
41,2
051015202530354045
Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 3. Barreras biológicas
El indicador barreras biológicas, tabla 6; figura 3, ítem 5, el 55,9% está totalmente
en desacuerdo con “Se aplican las vacunas, antibióticos y quimioprofilaxis respectivos
para darle protección al personal de salud”, el 20,6% está totalmente de acuerdo, el
14,7% ni de acuerdo ni en desacuerdo, el 5,9% parcialmente en desacuerdo y el 2,9%
76
parcialmente de acuerdo.
El ítem 6, el 47% respondió estar ni de acuerdo ni en desacuerdo con “Se han
reportado casos de enfermedades contraídas por pinchazos, tales como el virus de la
Hepatitis B y VIH”, el 26,5% está totalmente en desacuerdo, el 26,5% parcialmente en
desacuerdo y las categorías totalmente de acuerdo y parcialmente de acuerdo no
registraron puntajes. La media fue de 2,24.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 14 enfermeras que representan un (41,20%), están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas para solventar las barreras biológicas.
Tabla 7. Principios de bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina. Barreras ergonómicas
2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr
7. Ubicación de las herramientasde trabajo están ubicadasalrededor del puesto de trabajo.
9 26,50 2 5,90 0 0,00 5 14,70 18 52,90 34 100,00
8. Adopción de medidasnecesarias para facilitarcondiciones de visión adecuadamediante la iluminación en elpuesto de trabajo.
6 17,60 2 5,90 1 2,90 8 23,50 17 50,10 34 100,00
Promedio Frecuencia 7,50 22,05 2,00 5,90 0,50 1,45 6,50 19,10 17,50 51,50 34,00 100,00Media Indicador
Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
OPCIONES DE RESPUESTA
ITEMS
2,28 Fuente: Elaboración propia (2012)
22,05
5,91,45
19,1
51,5
0
10
20
30
40
50
60Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 4. Barreras ergonómicas
77
El indicador barreras ergonómicas, tabla 7; figura 4, el ítem 7, 52,9% de la
población seleccionó la categoría totalmente en desacuerdo con “Las herramientas de
trabajo están ubicadas alrededor del puesto de trabajo”, el 26,5% está totalmente de
acuerdo, el 14,7% parcialmente en desacuerdo, y el 5,9% parcialmente de acuerdo.
El ítem 8, el 50,1% estuvo totalmente en desacuerdo “Con la adopción de
medidas necesarias para facilitar condiciones de visión adecuada mediante la
iluminación en el puesto de trabajo”, el 23,5% de igual manera, el 23,5% estuvo
parcialmente en desacuerdo, el 17,6% totalmente de acuerdo, el 5,9% parcialmente de
acuerdo y el 2,9% ni en desacuerdo ni de acuerdo. La media fue de 2,28.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 18 enfermeras que representan un 51,50%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas para solventar las barreras ergonómicas.
Tabla 8. Principios de bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en la Clínica de la Salina. Barreras psicosociales
2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr9. Análisis de la dirección por elestado de las relaciones deltrabajador tanto con loscompañeros del grupo como conlos jefes.
2 5,90 7 20,60 0 0,00 2 5,90 23 67,60 34 100,00
10. Sufrimiento frecuente decefalea, trastornos digestivos,asma y ansiedad como productodel estrés laboral.
20 58,80 11 32,40 3 8,80 0 0,00 0 0,00 34 100,00
Promedio Frecuencia 11,00 32,35 9,00 26,50 1,50 4,40 1,00 2,95 11,50 33,80 34,00 100,00Media Indicador
OPCIONES DE RESPUESTA
ITEMS Parcialmente de Acuerdo
Totamente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
1,71 Fuente: Elaboración propia (2012)
78
32,35
26,5
4,4 2,95
33,8
0
5
10
15
20
25
30
35Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 5. Barreras psicosociales
El indicador barreras psicosociales, tabla 8; figura 5, ítem 9, el 67,6% del personal
que labora en las clínicas dijo estar totalmente en desacuerdo con “La dirección analiza
el estado de las relaciones del trabajador tanto con los compañeros del grupo como con
los jefes”, sin embargo, el 20,6% señaló estar parcialmente de acuerdo, el 5,9% para
las categorías totalmente de acuerdo y parcialmente en desacuerdo, ni de acuerdo ni en
desacuerdo no fue seleccionada.
El ítem 10, un 58,8% estuvo totalmente de acuerdo con “Con frecuencia sufro de
cefalea, trastornos digestivos, asma y ansiedad como producto del estrés laboral”, el
32,4% dijo estar parcialmente de acuerdo, las demás categorías no registraron
puntajes. La media fue de 1,71.
En referencia al objetivo “Evaluar el nivel de conocimiento que posee el personal
de enfermería, para la aplicación de medidas de Bioseguridad por pinchazos, según el
manual de normas de PDVSA”, en el cual la dimensión nivel de conocimiento presenta
como indicadores: capacitación, manejo de punzo cortantes y notificaciones de riesgo.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 12 enfermeras que representan un 33,80%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas para solventar las barreras psicosociales.
79
Tabla 9. Nivel de conocimiento que posee el personal de enfermería, para la aplicación
de medidas de bioseguridad por pinchazos, según el Manual de Normas de PDVSA. Capacitación 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr11. Capacitación con el fin decumplir con las normas deprevención de accidentes.
3 8,80 5 14,70 1 2,90 4 11,80 21 61,80 34 100,00
12. Entrenamiento sobre el usode dispositivos de seguridaddurante el último año.
2 5,90 4 11,80 1 2,90 8 23,50 19 55,90 34 100,00
Promedio Frecuencia 2,50 7,35 4,50 13,25 1,00 2,90 6,00 17,65 20,00 58,85 34,00 100,00Media Indicador
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
1,93
ITEMS
OPCIONES DE RESPUESTA
Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Fuente: Elaboración propia (2012)
7,3513,25
2,9
17,65
58,85
0
10
20
30
40
50
60Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 6. Capacitación
El indicador capacitación, tabla 9, figura 6, ítem 11, el 61,8% de la población
respondió estar totalmente en desacuerdo con “Se capacita con el fin de cumplir con las
normas de prevención de accidentes”, 14,7% parcialmente de acuerdo, 11,8%
parcialmente en desacuerdo, 8,8% totalmente de acuerdo y 2,9% ni de acuerdo ni en
desacuerdo.
El ítem 12, un 55,9% comunicó estar totalmente de acuerdo con “Se ha dado
entrenamiento sobre el uso de dispositivos de seguridad durante el último año”, 23,5%
parcialmente en desacuerdo, 11,8% parcialmente de acuerdo, 5,9% totalmente de
80
acuerdo y 2,9% ni de acuerdo ni en desacuerdo. La media fue de 1,93.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento se concluye que el
promedio de 20 enfermeras que representan un 58,85%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas en el área de conocimientos para la
capacitación del personal.
Tabla 10. Nivel de conocimiento que posee el personal de enfermería, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos, según el Manual de Normas de
PDVSA. Manejo de punzo cortantes 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr13. Reporte inmediato depinchazo con aguja o una lesióncortopunzante.
10 29,40 0 0,00 0 0,00 2 5,90 22 64,70 34 100,00
14. Desecho de los punzocortantes en contenedoresrígidos y destructores de agujas.
6 17,60 0 0,00 1 2,90 10 29,50 17 50,00 34 100,00
15. Prestación de atenciónmédica a aquellos trabajadoresque han sufrido pinchazos en lassiguientes dos horas después desufrir la lesión.
10 29,40 0 0,00 0 0,00 4 11,80 20 58,80 34 100,00
Promedio Frecuencia 8,67 25,47 0,00 0,00 0,33 0,97 5,33 15,73 19,67 57,83 34,00 100,00Media Indicador
Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
2,20
OPCIONES DE RESPUESTA
ITEMS
Fuente: Elaboración propia (2012)
81
25,47
0 0,97
15,73
57,83
0
10
20
30
40
50
60Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 7. Manejo de punzo cortantes
El indicador manejo de punzocortantes, tabla 10; figura 7, ítem 13, el 64,7%
señaló estar totalmente en desacuerdo con “Si algún trabajador sufre algún pinchazo
con aguja o una lesión corto punzante inmediatamente lo reporta”, el 29,4% dijo estar
totalmente de acuerdo, el 5,9% parcialmente en desacuerdo y las categorías
parcialmente de acuerdo, y ni de acuerdo ni en desacuerdo tuvieron puntuaciones.
El ítem 14, 50% estuvo totalmente en desacuerdo con “Los punzo cortantes son
desechados en contenedores rígidos y destructores de agujas”, pero el 17,6% dijo estar
totalmente de acuerdo, el 2,9% ni de acuerdo ni en desacuerdo y parcialmente de
acuerdo no fue seleccionado.
El ítem 15, 58,8% dijo estar totalmente en desacuerdo con “Se le da atención
médica a aquellos trabajadores que han sufrido pinchazos en las siguientes dos horas
después de sufrir la lesión”, el 29,4% totalmente de acuerdo, el 11,8% parcialmente en
desacuerdo, las categorías parcialmente de acuerdo y ni de acuerdo ni en desacuerdo
fueron seleccionadas. La media fue de 2,20.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento se concluye que el
promedio de 20 enfermeras que representan un 57,83%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas en el área de conocimientos para el
Manejo de los dispositivos Punzocortante.
82
Tabla 11. Nivel de conocimiento que posee el personal de enfermería, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos, según el Manual de Normas de
PDVSA. Notificaciones de riesgo 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr16. Asesoría necesaria luego depincharse para las pruebas deseguimiento hasta por un añoluego de la exposición.
7 20,60 1 2,90 1 2,90 9 26,50 16 47,10 34 100,00
17. Notificación al supervisor einicio un sistema de reportesobre las lesiones en su lugar detrabajo.
10 29,40 0 0,00 0 0,00 8 23,50 16 47,10 34 100,00
18. Identificación del pacientefuente, quien deberá serexaminado por infecciones (VIH,hepatitis B y hepatitis C).
6 17,60 3 8,80 1 2,90 3 8,80 21 61,90 34 100,00
Promedio Frecuencia 7,67 22,53 1,33 3,90 0,67 1,93 6,67 19,60 17,67 52,03 34,00 100,00Media Indicador 2,25
Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
OPCIONES DE RESPUESTA
ITEMS
Fuente: Elaboración propia (2012)
22,53
3,9 1,93
19,6
52,03
0
10
20
30
40
50
60Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 8. Notificaciones de riesgo
El indicador notificaciones de riesgo, tabla 11; figura 8, ítem 16, el 47,1% dijo estar
totalmente en desacuerdo con “En caso de ser expuesto a un pinchazo se le da la
asesoría necesaria para las pruebas de seguimiento hasta por un año luego de la
exposición”, el 26,5% parcialmente en desacuerdo, el 20,6% totalmente de acuerdo, las
categorías parcialmente de acuerdo y ni de acuerdo ni en desacuerdo coincidieron en
no ser señaladas.
El ítem 17, el 47,1% de los encuestados reportaron estar en total desacuerdo con
“Se le notifica a su supervisor e inicia un sistema de reporte sobre las lesiones en su
lugar de trabajo”, el 29,4% totalmente de acuerdo, el 23,5% parcialmente en
83
desacuerdo y parcialmente de acuerdo y ni de acuerdo ni en desacuerdo registraron
valores.
El ítem 18, el 61,9% expresó estar totalmente en desacuerdo con “Se Identifica al
paciente fuente, quien deberá ser examinado por infecciones (VIH, hepatitis B y hepatitis
C)”, 17,6% totalmente de acuerdo, 8,8% coincidieron parcialmente de acuerdo y
parcialmente en desacuerdo y 2,9% ni en desacuerdo ni de acuerdo. La media fue de
2,25.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 18 enfermeras que representan un 52,03%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas en el área de conocimientos para la
Notificación de Riesgo.
Con respecto al objetivo “Caracterizar los elementos requeridos, para la aplicación
de medidas de Bioseguridad por pinchazos”, para la dimensión elementos y cuyos
indicadores son: infraestructura, ambiente de trabajo y tecnología
Tabla 12. Elementos requeridos, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos. Infraestructura 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr19. Diseño de la clínica consuficiente consideración altrabajador que ha de tenercualquier acto de movilizaciónque requiera comodidad dentrode las instalaciones.
4 11,80 2 5,90 3 8,80 8 23,50 17 50,00 34 100,00
20. Facilitamiento al trabajadorde un lugar de trabajo cómodoque le permita ejecutar la tareatanto de pie como sentado.
2 5,90 6 17,70 0 0,00 3 8,80 23 67,60 34 100,00
Promedio Frecuencia 3,00 8,85 4,00 11,80 1,50 4,40 5,50 16,15 20,00 58,80 34,00 100,00Media Indicador
Totamente de AcuerdoITEMS
OPCIONES DE RESPUESTA
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo
1,96
TOTAL
Fuente: Elaboración propia (2012)
84
8,8511,8
4,4
16,15
58,8
0
10
20
30
40
50
60Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 9. Infraestructura
El indicador infraestructura, tabla 12; figura 9, ítem 19, el 50% reportó estar
totalmente en desacuerdo con “La clínica está diseñada con suficiente consideración al
trabajador que ha de tener cualquier acto de movilización que requiera comodidad
dentro de las instalaciones”, el 23,5% parcialmente en desacuerdo, 11,8% totalmente
de acuerdo, 8,8% ni de acuerdo ni en desacuerdo y el 5,9% parcialmente de acuerdo.
El ítem 20, del cual el 67,6% seleccionó la opción totalmente en desacuerdo con
“Se le facilita al trabajador un lugar de trabajo cómodo que le permita ejecutar la tarea
tanto de pie como sentado”, 17,7% parcialmente de acuerdo, 8,8% parcialmente en
desacuerdo, 5,9% totalmente de acuerdo y ni de acuerdo ni en desacuerdo ningún
valor. La media fue 1,96.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento se concluye que el
promedio de 20 enfermeras que representan un 58,80%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas que cumplan con las condiciones de
infraestructura.
85
Tabla 13. Elementos requeridos, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos. Ambiente de trabajo 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr
21. Trabaja más allá de loslímites máximos de resistenciafísica y mental.
27 79,40 4 11,80 2 5,90 0 0,00 1 2,90 34 100,00
22. Disposición de condicionesambientales adecuadas en elárea de atención de pacientes.
4 11,80 5 14,70 2 5,90 3 8,80 20 58,80 34 100,00
Promedio Frecuencia 15,50 45,60 4,50 13,25 2,00 5,90 1,50 4,40 10,50 30,85 34,00 100,00Media Indicador
Totamente de Acuerdo
Parcialmente de AcuerdoITEMS
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
1,74
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
OPCIONES DE RESPUESTA
Fuente: Elaboración propia (2012)
45,6
13,25
5,9 4,4
30,85
0
10
20
30
40
50Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 10. Ambiente de trabajo
El indicador ambiente de trabajo, tabla 13; figura 10, ítem 21, el 79,4% de los
trabajadores coincidieron en estar totalmente de acuerdo con “Se Trabaja más allá de
los límites máximos de resistencia física y mental”, 11,8% parcialmente de acuerdo,
5,9% ni de acuerdo ni en desacuerdo, 2,9% totalmente en desacuerdo y parcialmente
en desacuerdo no fue seleccionado.
El ítem 22, el 58,8% estuvo totalmente en desacuerdo en “El área de atención de
pacientes dispone de condiciones ambientales adecuadas”, 14,7% parcialmente de
acuerdo, 11,8% totalmente de acuerdo, 8,8% parcialmente en desacuerdo y 5,9% ni de
86
acuerdo ni en desacuerdo. La media fue de 1,74.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 16 enfermeras que representan un 45,60%, están totalmente de acuerdo
con la no aplicación de medidas que originan condiciones de Ambiente de Trabajo
adecuado.
Tabla 14. Elementos requeridos, para la aplicación de medidas de bioseguridad por pinchazos. Tecnología 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr
23. Existencia en la unidaddispositivos o procedimientosque poseen un elevado riesgo deprovocar pinchazos con agujas olesiones cortopunzantes.
22 64,70 3 8,80 2 5,90 2 5,90 5 14,70 34 100,00
24. Disposición de equipos deúltima generación para eldescarte de dispositivos punzocortantes.
1 2,90 7 20,70 1 2,90 1 2,90 24 70,60 34 100,00
Promedio Frecuencia 11,50 33,80 5,00 14,75 1,50 4,40 1,50 4,40 14,50 42,65 34,00 100,00Media Indicador
Totamente de Acuerdo
Parcialmente de AcuerdoITEMS
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
1,90
OPCIONES DE RESPUESTA
Fuente: Elaboración propia (2012)
33,8
14,75
4,4 4,4
42,65
051015202530354045
Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 11. Tecnología
El indicador tecnología, tabla 14; gráfico 11, ítem 23, el 64,7% optó por estar
totalmente de acuerdo con “Existen en la unidad dispositivos o procedimientos que
poseen un elevado riesgo de provocar pinchazos con agujas o lesiones corto
punzantes”, el 14,7% totalmente en desacuerdo, 8,8% parcialmente de acuerdo, y 5,9%
para las categorías ni de acuerdo ni en desacuerdo y parcialmente en desacuerdo.
87
El ítem 24, el 70,6% dijo estar totalmente en desacuerdo con “Se dispone de
equipos de última generación para el descarte de dispositivos punzo cortantes”, el
20,7% parcialmente de acuerdo, las categorías: totalmente de acuerdo, ni de acuerdo ni en
desacuerdo y parcialmente en desacuerdo no registraron puntajes. La media fue de 1,90.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 15 enfermeras que representan un 42,65%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de nuevas tecnologías, en la implantación de nuevos
dispositivos.
En cuanto al objetivo “Analizar las estrategias de prevención durante las prácticas
de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos”, en donde la dimensión
estrategias de prevención incluye los indicadores: Técnica del Lavado de Manos, uso
de guantes, protección ocular, uso de zapatos, protección corporal y lavado de material.
Tabla 15. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Técnica del lavado de manos 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr25. Lavado de las manos deinmediato, antes y después delcontacto con los pacientes.
10 29,50 0 0,00 1 2,90 1 2,90 22 64,70 34 100,00
26. Consideración del lavado demanos luego de manipularsangre, fluidos corporales,secreciones, excreciones,materiales e instrumentoscontaminados, tanto se hayausado o no guantes.
10 29,50 0 0,00 0 0,00 9 26,50 15 44,00 34 100,00
Promedio Frecuencia 10,00 29,50 0,00 0,00 0,50 1,45 5,00 14,70 18,50 54,35 34,00 100,00Media Indicador
Totamente de Acuerdo
ITEMS
2,35
Parcialmente de Acuerdo
OPCIONES DE RESPUESTANi de Acuerdo
Ni en Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
Fuente: Elaboración propia (2012)
88
29,5
0 1,45
14,7
54,35
0
10
20
30
40
50
60Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 12. Técnica del lavado de manos
El indicador técnica del lavado de manos tabla 15; figura 12, ítem 25, el 64,7% de
los encuestados estuvo totalmente en desacuerdo en “Se lavan las manos de
inmediato, antes y después del contacto con los pacientes”, el 29,5% totalmente de
acuerdo, el 2,9% para ni de acuerdo ni en desacuerdo y parcialmente en desacuerdo y
la categoría parcialmente de acuerdo cero valor.
El ítem 26, el 44% estuvo totalmente en desacuerdo con “Se considera el lavado de
manos luego de manipular sangre, fluidos corporales, secreciones, excreciones, materiales e
instrumentos contaminados, tanto se haya usado o no guantes”, 29,5% totalmente de
acuerdo, el 26,5% parcialmente en desacuerdo y parcialmente de acuerdo y ni de acuerdo ni
en desacuerdo no fueron seleccionados. La media fue de 2,35.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 19 enfermeras que representan un 54,35%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas en el área de prevención, como es la
técnica del lavado de manos.
89
Tabla 16. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Uso de guantes 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr27. Uso de guantes como unabarrera de protección contramicroorganismos infecciosos.
9 26,50 1 2,90 1 2,90 7 20,60 16 47,10 34 100,00
28. Uso de guantes de látexestériles y su descarte duranteprocedimientos invasivos.
10 29,40 0 0,00 1 2,90 3 8,80 20 58,90 34 100,00
Promedio Frecuencia 9,50 27,95 0,50 1,45 1,00 2,90 5,00 14,70 18,00 53,00 34,00 100,00Media Indicador 2,37
OPCIONES DE RESPUESTA
ITEMS Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente de Acuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
Fuente: Elaboración propia (2012)
27,95
1,45 2,9
14,7
53
0
10
20
30
40
50
60Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 13. Uso de guantes
El indicador uso de guantes, tabla 16; figura 13, ítem 27, el 47,1% comunicó estar
totalmente en desacuerdo con “Se hace uso de los guantes como una barrera de
protección contra microorganismos infecciosos”, el 26,5% totalmente de acuerdo, el
20,6% parcialmente en desacuerdo, el 2,9% para parcialmente de acuerdo y ni de
acuerdo ni en desacuerdo.
El ítem 28, de los cuales 58,9% seleccionó la categoría totalmente en desacuerdo
con “Para procedimientos invasivos se usan guantes de látex estériles y luego se
descartan”, 29,4% totalmente de acuerdo, 8,8% parcialmente en desacuerdo, 2,9% ni
de acuerdo ni en desacuerdo y la categoría parcialmente de acuerdo no obtuvo puntaje.
La media fue 2,37.
90
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 18 enfermeras que representan un 53 %, están totalmente en desacuerdo
con la no aplicación de medidas en el área de prevención, como es el uso de guantes.
Tabla 17. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Protección ocular 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr29. Utilización de protectoresoculares cuando se anticipagenerar aerosoles de sangre ode secreciones que podríancontaminar la cara, las mucosasde la nariz, boca o los ojos.
6 17,60 0 0,00 4 11,80 4 11,80 20 58,80 34 100,00
30. Utilización de lentesespeciales para procedimientosrelacionados con manipulaciónde sangre o secreciones.
2 5,90 5 14,70 3 8,80 9 26,50 15 44,10 34 100,00
Promedio Frecuencia 4,00 11,75 2,50 7,35 3,50 10,30 6,50 19,15 17,50 51,45 34,00 100,00Media Indicador 2,09
Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
OPCIONES DE RESPUESTA
ITEMS Totamente en Desacuerdo TOTAL
Fuente: Elaboración propia (2012)
11,757,35
10,3
19,15
51,45
0
10
20
30
40
50
60Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 14. Protección ocular
El indicador protección ocular, tabla 16; figura 14, ítem 29, el 58,8% de los
trabajadores respondieron están totalmente en desacuerdo en “Cuando se anticipa
generar aerosoles de sangre o de secreciones que podrían contaminar la cara, las
mucosas de la nariz, boca o los ojos se usan protectores oculares”, 17,6% totalmente
de acuerdo, 11,8% ni de acuerdo ni en desacuerdo y parcialmente en desacuerdo,
ningún puntaje para parcialmente de acuerdo.
91
El ítem 30, el 44,1% dijo estar totalmente en desacuerdo en “Se utilizan lentes
especiales para procedimientos relacionados con manipulación de sangre o
secreciones”, 26,5% parcialmente en desacuerdo, 14,7% parcialmente de acuerdo, 8,8% ni
de acuerdo ni en desacuerdo, 5,9% totalmente de acuerdo. La media fue de 2,09.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 18 enfermeras que representan un 51,45%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas en el área de prevención, como es la
protección ocular.
Tabla 18. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Uso de zapatos 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr31. Uso de zapatos para ayudara minimizar el número demicroorganismos que se puedenllevar al área quirúrgica.
5 14,70 0 0,00 3 8,80 6 17,70 20 58,80 34 100,00
32. Protección de los pies alpersonal de enfermería, desalpicaduras de sangre y otrosfluidos.
4 11,80 3 8,80 1 2,90 11 32,40 15 44,10 34 100,00
Promedio Frecuencia 4,50 13,25 1,50 4,40 2,00 5,85 8,50 25,05 17,50 51,45 34,00 100,00Media Indicador
ITEMS Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
OPCIONES DE RESPUESTA
2,03
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
Fuente: Elaboración propia (2012)
13,25
4,4 5,85
25,05
51,45
0
10
20
30
40
50
60Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 15. Uso de zapatos
.
El indicador uso de zapatos, tabla 18; figura 15, ítem 31, el 58,8% de los
encuestados reportaron que están totalmente en desacuerdo con “Se usan zapatos
92
para ayudar a minimizar el número de microorganismos que se pueden llevar al área
quirúrgica”, 32,4% parcialmente en desacuerdo, 11,8% totalmente de acuerdo, 8,8%
parcialmente de acuerdo y 2,9% ni de acuerdo ni en desacuerdo.
El ítem 32, 44,% seleccionó la opción totalmente en desacuerdo con “Se protege
los pies al personal de enfermería, de salpicaduras de sangre y otros fluidos”, 32,4%
parcialmente en desacuerdo, 11,8% totalmente de acuerdo, 8,8% parcialmente de
acuerdo y 2,9% ni de acuerdo ni en desacuerdo. La media fue de 2,03.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 18 enfermeras que representan un 51,45%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas en el área de prevención, como es el uso
de zapatos adecuados.
Tabla 19. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Protección corporal 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr33. Uso de batas y delantalespara la proteccion desalpicaduras de sangre.
9 26,50 1 2,90 1 2,90 7 20,60 16 47,10 34 100,00
34. Depósito de la ropacontaminada en bolsa deplástico roja y su transporte parael procesamiento.
10 29,40 0 0,00 0 0,00 8 23,50 16 47,10 34 100,00
Promedio Frecuencia 9,50 27,95 0,50 1,45 0,50 1,45 7,50 22,05 16,00 47,10 34,00 100,00Media Indicador
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo TOTAL
2,41
ITEMS
OPCIONES DE RESPUESTA
Totamente de Acuerdo
Fuente: Elaboración propia (2012)
27,95
1,45 1,45
22,05
47,1
0
10
20
30
40
50Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Gráfico 16. Protección corporal
93
El indicador protección corporal, tabla 19; figura 16, ítem 33, 47,1% de los
trabajadores manifestaron que están totalmente en desacuerdo con “El uso de batas y
delantales para la protección de salpicaduras de sangre”, 29,4% totalmente de acuerdo,
23,5% parcialmente en desacuerdo, 2,9% parcialmente de acuerdo y ni de acuerdo ni
en desacuerdo.
El ítem 34, 47,1% dijo estar totalmente en desacuerdo en “La esterilización de la ropa
contaminada, depositada en bolsa de plástico roja y es transportada para el procesamiento”,
29,5% totalmente de acuerdo, 23,5% parcialmente en desacuerdo, las opciones
parcialmente de acuerdo y ni de acuerdo ni en desacuerdo no arrojaron puntajes. La media
fue de 2,41.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 17 enfermeras que representan un 47,10%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas en el área de prevención, como es el uso
de protección corporal.
Tabla 20. Estrategias de prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos. Lavado de material 2010-2011
fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr fa fr
35. Esterilización de losmateriales o instrumentos queentran en contacto con el cuerpo.
10 29,40 0 0,00 3 8,80 5 14,70 16 47,10 34 100,00
36. Esterilización condesinfectantes de alto nivel deglutaraldehído de losinstrumentos que contactan a lasmembranas mucosas.
10 29,40 0 0,00 3 8,80 5 14,70 16 47,10 34 100,00
Promedio Frecuencia 10,00 29,40 0,00 0,00 3,00 8,80 5,00 14,70 16,00 47,10 34,00 100,00Media Indicador
Totamente de Acuerdo
Parcialmente de Acuerdo
Ni de Acuerdo Ni en
Desacuerdo
Parcialmente en Desacuerdo
Totamente en Desacuerdo
2,50
ITEMS
OPCIONES DE RESPUESTA
TOTAL
Fuente: Elaboración propia (2012)
94
29,4
0
8,8
14,7
47,1
0
10
20
30
40
50Totalmente de Acuerdo
Parcialmente deAcuerdoNi de Acuerdo Ni enDesacuerdoParcialmente enDesacuerdoTotalmente enDesacuerdo
Figura 17. Lavado de material
El indicador lavado de material, tabla 20; figura 17, ítem 35, 47,1% de los
trabajadores reportaron que están totalmente en desacuerdo con “Los materiales o
instrumentos que entran en contacto con el cuerpo deben estar esterilizados”, 29,4%
totalmente de acuerdo, 14,7% parcialmente en desacuerdo, 8,8% ni de acuerdo ni en
desacuerdo, parcialmente de acuerdo no tuvo valor.
El ítem 36, ítem 36, 47,1% comunicaron que están totalmente en desacuerdo con
“Los instrumentos que entran en contacto con membranas mucosas son esterilizados
con desinfectantes de alto nivel de glutaraldehído”, 29,4% totalmente de acuerdo,
14,7% parcialmente en desacuerdo, 8,8% ni de acuerdo ni en desacuerdo, parcialmente
de acuerdo no tuvo valor. La media fue de 2,5.
Posterior al análisis realizado con la aplicación del instrumento, se concluye que el
promedio de 16 enfermeras que representan un 47,10%, están totalmente en
desacuerdo con la no aplicación de medidas en el área de prevención, como es el
esterilizado en el lavado del material.
En cuanto al objetivo de “Proponer alternativas que permiten la aplicación de
medidas de bioseguridad por pinchazos”, basadas en el análisis de los indicadores
antes descritos y visualizando las condiciones actuales en la clínica Gustavo Quintini se
establece que:
• Establecer programas en materia de bioseguridad para la prevención de
accidentes laborales con el objeto de concienciar al personal mediante charlas,
95
jornadas, entre otras; según La Norma Técnica Programa de Seguridad y Salud en el
trabajo (2008), estos programas deberán ser diseñados planificados, organizados y
ejecutados a través del Servicio de Seguridad y Salud en el Trabajo, con su respectivo
cronograma de ejecución, que establezca como mínimo 16 horas trimestrales de
educación e información por cada trabajadora y trabajador.
• Facilitar directrices sobre la legislación y las políticas locales cónsonas con la
realidad de las clínicas en estudio, promover buenas prácticas y sistemas seguros de
trabajo en relación con la prevención de los pinchazos accidentales. Igualmente,
promover la importancia de registrar los pinchazos accidentales, sensibilizar mediante la
realización de actividades y material promocional en colaboración con sindicatos
representativos y/o representantes de los trabajadores, facilitar información sobre los
programas de apoyo disponibles.
• Establecer programas periódicos de formación respectiva con las políticas y
procedimientos asociados a la prevención y la gestión de los pinchazos accidentales
por medio de cursos de inducción para el personal de enfermería. En dicha formación
se abordará: el uso debido de dispositivos médicos con mecanismos de protección
frente a los pinchazos accidentales, curso de iniciación para todo el personal nuevo y
temporal, dar a conocer el riesgo asociado a la exposición a sangre y fluidos corporales,
incorporar medidas preventivas contemplando las precauciones estándar, los sistemas
seguros de trabajo (incluyendo la prohibición de la reutilización) y el uso correcto de
papeleras para instrumentos punzocortantes y procedimientos de eliminación.
• Identificar y evaluar los riesgos por puesto de trabajo e instalación
correspondiente al área de enfermería.
• Efectuar notificaciones de riesgo por puesto de trabajo y por instalación, estos
se deberán divulgar a todo el personal de enfermería, si un trabajador sufre exposición
parenteral o de las membranas mucosas con sangre o fluidos corporales, se deberá
identificar el material y si es posible determinar la presencia de virus o anticuerpos. El
trabajador deberá informar cualquier enfermedad febril aguda que ocurra dentro de las
doce semanas posteriores a la exposición.
96
• Establecer programas de vigilancia epidemiológica para las enfermedades
virales, producto de pinchazos.
• Realizar jornadas de vacunación a todo el personal que labora en la clínica Dr.
Gustavo Quintini.
• Divulgar las hojas de seguridad de todos los productos químicos (HDSM)
utilizados por todo el personal ocupacionalmente expuesto incluyendo los efectos
adversos a la salud o lesiones que pueden causar y tratamiento en caso de
intoxicación, los mismos tienen la función de eliminar los gérmenes presentes tanto en
la piel a si como en los instrumentos después de su exposición.
• Disponer de destructores de agujas y mayor cantidad de cajas de herramientas
para la prevención de accidentes por pinchazos, preferiblemente amplios y de paredes
rígidas y semirrígidas, con tapa asegurada para su posterior descarte y contener en su
interior una solución descontaminante, y estar ubicados lo más cerca posible del lugar
de uso de los instrumentos.
• Dado el caso de aplicar el método de incineración, establecer los procedimientos acordes a las Normas para el Control de la Recuperación de Materiales Peligrosos y el Manejo de los Desechos Peligrosos (Gaceta Oficial 5245/Decreto 2635) de fecha 22 de Julio de 1998 y la Ley sobre Sustancias, Materiales y Desechos Peligrosos bajo la Gaceta Oficial N° 5.554 de fecha 13 de Noviembre de 2001.
• Las clínicas deben contar con procedimientos de limpieza por escrito, especificando las preparaciones diarias de soluciones de desinfectantes, frecuencia de cambio de las mismas, así como el cambio de herramientas de trabajo y formas de limpieza.
• Disponer en áreas de Emergencia, Hospitalización y Quirófanos dispensadores con antibacterial, para la higiene de las manos del personal médico y enfermería.
• Aplicar las vacunas, antibióticos y quimioprofilaxis respectivos para brindarle
protección al personal de salud y al mismo tiempo divulgar la importancia de la
inmunización y cómo acceder a este tipo de servicios.
97
• Establecer planes de incentivos, a fin de acrecentar el sentido de pertenencia,
estimulando la comunicación, relaciones interpersonales y el trabajo en equipo,
evitando el estrés laboral originado durante el incremento de las actividades.
• Diseñar una infraestructura acorde al volumen de pacientes atendidos y crear
espacios que consideren a los trabajadores poder manipular los equipos e insumos
médicos bajo las condiciones se bioseguridad sin representar riesgos de contaminación.
• Aplicar rigurosamente la Norma COVENIN 2237- 89 Ropa, Equipos y
Dispositivos de Protección Personal. Selección de Acuerdo al Riesgo Ocupacional.
• Usar adecuadamente los equipos de Protección Personal (EPP), como por
ejemplo: Gafas protectora, calzados de seguridad, guantes, mascarillas y batas.
• No tocar los ojos, nariz o piel con las manos enguantada, usar mascarilla en los
procedimientos en los que pueda haber riesgo de salpicadura de material biológico en
las mucosa bucal y nasal. El uso de la bata será obligatorio en todo momento dentro del
laboratorio, la cual deberá ser retirada antes de salir del laboratorio. Esta deberá ser de
manga larga para protegerse de cualquier reactivo o agente químico, o material
biológico manipulado en el laboratorio.
4.2. Discusión de los resultados
Para el objetivo “Describir la situación actual para la aplicación de los principios de
bioseguridad en el personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en las
clínicas petroleras de Occidente”, el indicador barreras físicas arrojó el no
establecimiento de programas para la evaluación de las condiciones físicas del
individuo y sus hábitos, en función de la disminución de accidentes laborales. De igual
manera, tampoco se consideran las medidas necesarias para la manipulación de
objetos punzo penetrantes que puedan ser una vía de transmisión de enfermedades.
Tales resultados son contrarios a lo establecido por Ramírez (2007), quien
asegura que las barreras físicas van a estar determinadas por las condiciones físicas,
aptitudes y motivaciones. Por lo general, las personas necesitan de cierta energía que
98
sus organismos necesitan para poder realizar cualquier actividad, el cuerpo humano
reacciona frente a situaciones de conflicto tanto físicos como de origen psíquico.
Por otra parte, Arze y col. (2005), consideran para el control de las barreras físicas
los: guantes, barbijos, gafas, batas y cualquier otro equipo de protección individual que
ayude a prevenir accidentes en las salas de atención al paciente, sobre si todo si se
manipula objetos punzo penetrantes que puedan ser una vía de transmisión de
enfermedades.
Con relación al indicador barreras químicas, en el presente estudio se halló la
ausencia en el uso de desinfectantes para ayudar a eliminar de la piel o los
instrumentos, los gérmenes adquiridos después de su exposición, aunado a la
desinformación en el personal de todos los desinfectantes antes de su utilización sobre
los efectos adversos o lesiones que pueden causar.
A diferencia de los hallazgos, Arze y col. (2005), manifiestan que el uso
inadecuado de tales químicos como son tóxicos al contacto directo en la piel pueden
quebrantar la salud de los quienes lo manipulen. Todo desinfectante antes de su
utilización debe ser conocido por el personal sobre los efectos adversos o lesiones que
pueden causar y el tratamiento en caso de intoxicación.
También, Cortés (2002), determina que los factores ambientales de origen químico
pueden dar lugar a diferentes enfermedades ocupacionales como consecuencia de la
exposición a contaminantes tóxicos, los cuales pueden producir efectos: corrosivos;
destruyen los tejidos sobre los que actúan, Irritantes; irritan la piel o las mucosas en
contacto con el toxico, neumoconióticos; producen alteración pulmonar por partículas
sólidas o polvos, asfixiantes; producen desplazamiento del oxígeno del aire,
anestésicos y narcóticos; producen depresión en el sistema nervioso central,
cancerígeno, mutógeno y teratógenos; pueden producir cáncer, modificaciones
hereditarias y malformaciones del feto y sistémicos; producen alteraciones en
determinados sistemas: hígado, riñones.
En cuanto al indicador barreras biológicas, en el presente estudio se evidenció la
no aplicación de vacunas, antibióticos y quimioprofilaxis respectivos para darle
99
protección al personal de salud. Igualmente, no se han reportado casos de
enfermedades contraídas por pinchazos, tales como el virus de la Hepatitis B y VIH.
Sin embargo, Arze y col. (2005), recomiendan la necesidad de aplicar vacunas,
antibióticos y quimioprofilaxis, de esa manera, se estará protegiendo al personal de
salud generando defensas para evitar contagios o combatir la infección.
Cortés (2002), específica que los factores ambientales de origen biológico pueden
dar lugar a diferentes tipos de enfermedades profesionales como consecuencia de la
exposición a contaminantes biológicos: Bacterias (tétanos, brucelosis, tuberculosis),
Parásitos (paludismo, toxoplasmosis), Virus (hepatitis, rabia), Hongos (pie de atleta).
En torno al indicador barreras ergonómicas, en el presente estudio se reportó que
las herramientas de trabajo no están ubicadas alrededor del puesto de trabajo.
Adicionalmente, no se adoptan las medidas necesarias para facilitar condiciones de
visión adecuada mediante la iluminación en el puesto de trabajo.
Por otra parte, Ramírez (2007), concibe la ergonomía como la adaptación del
trabajo al hombre y viceversa, mediante la interacción o comunicación intrínseca entre
el hombre, la máquina, la tarea y el entorno, configurando el sistema productivo de toda
empresa. El estudio ergonómico del puesto de trabajo considera los movimientos del
cuerpo humano requeridos en el desarrollo del trabajo.
Dichas posibilidades se traducen en una multiplicación de los efectos como
resultado de la aplicación de los diferentes miembros del cuerpo humano. Un
movimiento de cabeza ampliará el campo visual sobre el que se trabaja. Un movimiento
del tronco, por el mismo hecho de involucrar la mayor cantidad de órganos vitales, es
importante considerarlo en la determinación del área de trabajo, toda vez que el tronco
sirve no sólo de enlace entre las diferentes partes del cuerpo, sino que aún más, sirve
de elemento elástico para alcanzar determinadas distancias.
También, Costa y Costa (2002), refieren que la institución donde se trabaja, debe
proveer equipos de seguridad, equipos para el manejo de materiales potencialmente
contaminados, equipos para materiales para la esterilización y desinfección de los
instrumentos de trabajo, el mobiliario y las manos, gabinetes para el manejo de
100
muestras infecciosas y sustancias toxicas, con las cuales pueda obtener condiciones de
seguridad para su trabajo.
En cuanto al indicador barreras psicosociales, se observó la ausencia en la
dirección del análisis en relación al estado de las relaciones del trabajador tanto con los
compañeros del grupo como con los jefes. Igualmente, el personal sufre de cefalea,
trastornos digestivos, asma y ansiedad como producto del estrés laboral.
Tales resultados difieren de los hallados por, Ramírez (2007), quien señala que la
dirección debe analizar el estado de las relaciones del trabajador tanto con los
compañeros del grupo como con los jefes. Por último, cabe considerar que también
fuera del ambiente de trabajo el individuo recibe agresiones propias del ambiente que lo
rodea, por ejemplo, la concentración urbana, la contaminación, la dificultad con el
transporte, el ruido de la calle. Por lo que toda acción preventiva deberá tomarse en
cuenta para disminuir la fatiga mental del trabajador al término de su jornada.
En relación al objetivo “Evaluar el nivel de conocimiento que posee el personal de
enfermería, para la aplicación de medidas de Bioseguridad por pinchazos, según el
manual de normas de PDVSA”, el indicador capacitación, evidenció la ausencia de
adiestramiento con el fin de cumplir con las normas de prevención de accidentes. No se
ha proporcionado entrenamiento sobre el uso de dispositivos de seguridad durante el
último año.
Estos resultados divergen de lo expuesto por Ramírez (2007), quien argumenta
que la capacitación tiene como objetivo conocer el proceso que origina los accidentes;
determinar sus consecuencias tratar de crear una conciencia de seguridad, a fin de
cumplir con las normas de prevención de accidentes, como medio de evitarlos. Deben
participar todos los trabajadores de la empresa, incluyendo los mandos intermedios.
Por su parte, Cantú (2006), refiere que la capacitación es esencial para el éxito de
un programa a través del trabajo en grupo, ya que los dos principales objetivos de un
proceso participativo son el mejoramiento de los procesos y el incremento de la moral
del grupo.
101
Para el indicador manejo de punzo cortantes, los resultados reflejan que no se
hacen reportes de los accidentes laborales producidos por mal manejo de los
instrumentos de trabajo, a su vez, los punzo cortantes no son desechados en
contenedores rígidos y destructores de agujas. De igual manera, no se les presta
atención médica a aquellos trabajadores que han sufrido pinchazos en las siguientes
dos horas después de sufrir la lesión.
Contrariamente, Volkow y col. (2006), afirman que a pesar de que no todas las
agujas que se utilizan en un hospital llegan a estar en contacto con el paciente, deben
manejarse en su totalidad como residuos peligrosos biológicos infecciosos, por lo que
recomiendan que todo punzocortante debe ser destruido, debido a la dificultad de saber
si tuvo contacto o no con el paciente. Los punzo cortantes se deben desechar o destruir
en: contenedores rígidos y destructores de agujas.
Arze y col. (2005), refieren que para evitar accidentes laborales es obligatorio
desechar los materiales corto punzantes en bidones descartables luego de su uso. De
igual manera, se debe manejar este material con extrema precaución, tapar las agujas
con cuidado, utilizando la técnica de una sola mano o con la ayuda de una pinza, no
doblar ni romper el material cortó punzante, no dejarlo en cualquier sitio, comprobar que
este material no haya sido depositado en recipientes de residuos corrientes, ni que se
encuentre mezclado entre la ropa que se envía a lavandería.
En cuanto al indicador notificaciones de riesgo, la presente investigación reporta
que es poco frecuente en caso de ser expuesto a un pinchazo se le proporciona la
asesoría necesaria para las pruebas de seguimiento hasta por un año luego de la
exposición. Tampoco se le notifica a su supervisor e inicia un sistema de reporte sobre
las lesiones en su lugar de trabajo. No se Identifica al paciente fuente, quien deberá ser
examinado por infecciones (VIH, hepatitis B y hepatitis C).
A diferencia de tales exposiciones, el American Nurses Association (2002), se le
debe prestar tanto al paciente como al personal del área quirúrgica una serie de
normas, resumidas a continuación: evaluación del riesgo y del pinchazo con aguja (por
una línea de consulta telefónica del hospital). Pruebas confidenciales para el VIH, la
hepatitis B y C, asesoramiento, educación y pruebas de seguimiento hasta por un año
luego de la exposición.
102
Para la oficina Internacional del Trabajo (2001), los empleadores deberían realizar,
en cada lugar de trabajo permanente o temporal, evaluaciones periódicas de las
situaciones de peligro y de los riesgos para la seguridad y la salud derivados de
factores ambientales peligrosos y deberían poner en práctica las medidas de control
necesarias para prevenir dichas situaciones de peligro y riesgos o reducirlas al nivel
mínimo que pueda conseguirse de manera razonable y práctica.
En concordancia al objetivo “Caracterizar los elementos requeridos, para la
aplicación de medidas de Bioseguridad por pinchazos”, el indicador infraestructura, los
resultados obedecen a que la clínica carece de un diseño con suficiente consideración
al trabajador que ha de tener cualquier acto de movilización que requiera comodidad
dentro de las instalaciones. Al mismo tiempo, el trabajador no dispone de un lugar de
trabajo cómodo que le permita ejecutar la tarea tanto de pie como sentado.
A estos resultados difieren de los reportados por, Peter y Olson (2006), quienes
argumentan que el ambiente físico incluye todos los aspectos tangibles divididos en
espaciales (producto y marcas) y los no espaciales (temperatura, humedad ambiental,
iluminación e intensidad del ruido). Analizar las situaciones que el consumidor
experimenta en el ambiente para intentar comprender sus respuestas afectivas,
cognitivas y de comportamiento de los consumidores hacia las características del
ambiente.
Por su parte, Chiavenato (2002), plantea la importancia de una adaptación
ambiental por parte de las organizaciones donde este tipo de estrategias ayuda a
ajustarse a las exigencias de los consumidores y a las presiones del entorno en donde
se maneja, es decir, la disposición de ambientes de trabajo acordes a la buena atención
de las personas que visitan la empresa en busca de bienes.
Para el indicador ambiente de trabajo, los resultados reflejan que se trabaja más
allá de los límites máximos de resistencia física y mental. Además, el área de atención
de pacientes no posee condiciones ambientales adecuadas.
Tales resultados divergen de lo encontrado en la literatura de Ramírez (2007), el
cual puntualiza que el ambiente de trabajo es factor esencial en el rendimiento humano;
103
por lo que es necesario en el ser humano no trabaje más allá de los límites máximos de
su resistencia y en condiciones ambientales adecuadas. Enfrentándose de esa manera,
a situaciones como: temperatura, humedad, ruido, vibraciones, iluminación y fuerzas de
aceleración y desequilibrio. La atención de cada uno de estos elementos le
proporcionará a los trabajadores los conocimientos necesarios para trabajar en forma
permanente.
El Reglamento Parcial De La Ley Orgánica De Prevención, Condiciones y Medio
Ambiente de Trabajo (2007), establece que el medio ambiente de trabajo se entiende
como los lugares, locales o sitios, cerrados o al aire libre, donde personas presten
servicios a empresas, centros de trabajo, explotaciones, faenas y establecimientos,
cualquiera sea el sector de actividad económica; así como otras formas asociativas
comunitarias de carácter productivo o de servicio; o de cualquier otra naturaleza, sean
públicas o privadas, con las excepciones que establece la Ley.
Por otro lado, en referencia al indicador tecnología, en ésta investigación se
encontró la existencia en la unidad, de dispositivos o procedimientos que poseen un
elevado riesgo de provocar pinchazos con agujas o lesiones corto punzantes. Al mismo
tiempo, no se dispone de equipos de última generación para el descarte de dispositivos
punzo cortantes.
Por el contrario, Bateman y Snell (2005), afirman que en la actualidad toda
organización para tener éxito debe incorporar a su estrategia el uso de las tecnologías.
Los adelantos tecnológicos crean productos nuevos, avanzadas técnicas de producción
y mejores maneras de administrar y de comunicarse.
Jones y George (2006), consideran que los cambios tecnológicos en algunas
organizaciones son una oportunidad como en otras representa una amenaza. Por un
lado, el uso de la tecnología ayuda a generar oportunidades para productos nuevos que
los administradores en sus empresas pueden utilizar. Sin embargo, tales innovaciones
en los productos y servicios pueden ocasionar perjuicios en la demanda de los
productos más viejos que ya están consolidados.
Como seguimiento a esta actividad, el objetivo “Analizar las estrategias de
prevención durante las prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por
104
pinchazos”, el indicador técnica del lavado de manos, los resultados arrojaron el no
lavarse las manos de inmediato; o bien, antes y después del contacto con los pacientes.
Tampoco se considera el lavado de manos luego de estar en contacto con la sangre del
paciente, fluidos corporales, secreciones, excreciones, materiales e instrumentos
contaminados, tanto se haya usado o no guantes.
Así mismo, Vásquez y Rivas (2004), señalan entre las medidas preventivas el
lavado de manos, siendo ésta la más importante y debe ser ejecutada de inmediato,
antes y después del contacto con los pacientes. Al tratar con los pacientes se debe
considerar: entre diferentes procedimientos efectuados en el mismo paciente, luego de
manipulaciones de instrumentales o equipos que hayan contactado con superficies del
ambiente y/o pacientes y luego de retirarse los guantes. De igual manera, Arze y col.
(2005), sugieren que es la medida más importante para la prevención de infecciones.
El indicador uso de guantes, arrojó resultados donde se niega el uso de los
guantes como una barrera de protección contra microorganismos infecciosos. Para
procedimientos invasivos tampoco se usan guantes de látex estériles. Por el contrario,
Arze y col. (2005), consideran que el uso de los guantes actúan como una barrera de
protección contra microorganismos infecciosos, por tanto el objetivo principal es
proteger al personal, se debe aclarar que el uso de guantes no reemplaza el lavado
manos.
Para el indicador protección ocular, no se consideran el uso de protectores
oculares para la aplicación de aerosoles de sangre o de secreciones que podrían
contaminar la cara, las mucosas de la nariz, boca o los ojos. Tampoco, se utilizan lentes
especiales para procedimientos relacionados con manipulación de sangre o
secreciones.
A estos resultados, Arze y col. (2005), opinan que cuando se anticipa generar
aerosoles de sangre o de secreciones que podrían contaminar la cara, las mucosas de
la nariz, boca o los ojos se usan barbijos o protectores oculares.
Con relación al indicador uso de zapatos, no se hace uso de zapatos para ayudar
a minimizar el número de microorganismos que se pueden llevar al área quirúrgica. El
105
personal no se protege los pies al personal de enfermería, de salpicaduras de sangre y
otros fluidos.
A tales resultados, Arze y col. (2005), evalúan la necesidad de usar zapatos para
ayudar a minimizar el número de microorganismos que se pueden llevar al área
quirúrgica o de procedimientos y protege los pies del proveedor de lesiones, de
salpicaduras de sangre y otros fluidos. Usar botas limpias, no estériles para proteger la
piel y prevenir la suciedad de la ropa durante procedimientos, en actividades de
cuidados de pacientes que puedan generar aerosoles, salpicaduras de sangre, fluidos
corporales, secreciones y excreciones.
Con respeto al indicador protección corporal, no se usan batas y delantales para la
protección de salpicaduras de sangre. La ropa contaminada no es depositada en bolsa
de plástico roja y tampoco es transportada para el procesamiento.
También, Arze y col. (2005), asumen que se recomienda frecuentemente el uso de
batas y delantales para prevenir la transmisión de infecciones, su importancia es
secundaria al lavado de manos. Su uso es recomendable cuando la ropa del personal
de salud este expuesta a contaminación.
Finalmente, el indicador lavado de material, los resultados arrojados describen la
ausencia de que los materiales o instrumentos que entran en contacto con el cuerpo no
son esterilizados. Los instrumentos que entran en contacto con membranas mucosas
no son esterilizados con desinfectantes de alto nivel de glutaraldehído.
Además, Arze y col. (2005), refieren que los materiales o instrumentos que entran
en contacto con tejidos estériles del cuerpo deben esterilizarse Ej. Instrumental
quirúrgico y/o de curación. Los materiales o instrumentos que entran en contacto con la
piel íntegra deben limpiarse con agua y jabón y desinfectarse con desinfectantes de
nivel intermedio o bajo nivel como el cloruro de piridonio al 10%. Ej. Tensiómetro, vajilla
chatas, patos, muebles, ropa. Los artículos críticos, semi críticos y no críticos deben ser
limpiados mediante acción mecánica utilizando agua y un detergente neutro.
106
CONCLUSIONES
Durante el proceso de investigación del presente estudio, se obtuvieron una serie
de resultados que reforzados con la revisión bibliográfica especializada permitieron el
desarrollo de las conclusiones que a continuación se exponen: para el objetivo
“Describir la situación actual para la aplicación de los principios de bioseguridad en el
personal de enfermería en el uso de dispositivos con agujas en las clínicas petroleras
de occidente”, se concluye en la actualidad una falta de conocimiento en la aplicación
de los principios de la bioseguridad los cuales deben responder a la protección de los
trabajadores en relación a la acción de agentes físicos, químicos, biológicos,
ergonómicos, psicosociales o de cualquier otra índole.
En concordancia a los manuales de normas de bioseguridad, las clínicas
petroleras de occidente carecen de programas que ayuden a prevenir o disminuir el
riesgo real, al no contar con materiales y proporcionar mayor seguridad y protección al
personal. Obviando un manual en el que se evalúen las condiciones físicas de todos los
trabajadores y sus hábitos, para la disminución de accidentes laborales.
Otro elemento que viola los principios de bioseguridad, es la falta de vacunación
como medida de profilaxis a los empleados de las clínicas petroleras de occidente.
Además, no se reportan casos de enfermedades contraídas por pinchazos, tales como
el virus de la Hepatitis B y VIH, quizás por el temor de perder sus puestos de trabajo por
indebida manipulación de los objetos punzo penetrantes. Los riesgos biológicos son los
más importantes por la variedad y gran agresividad de microorganismos que se
presentan (bacteria, virus y hongos), causando accidentes o enfermedades
profesionales.
Por otra parte, es escaso el uso de químicos o desinfectantes que ayuden a
prevenir bacterias al estar en contacto la piel con la manipulación de objetos punzo
cortantes que puedan penetrar en la piel tanto de los trabajadores como de los
pacientes que ingresen a las instalaciones de atención médica. Esto podría estarse
generando por los escasos presupuestos con los que cuente la administración interna
107
en la administración de los recursos.
En cuanto a la ubicación de los insumos y a la disposición física del mobiliario y
equipo, éste no cumple con los patrones de ergonomía y principio de bioseguridad que
se encarga de adecuar los métodos, organización, herramientas y útiles empleados en
el proceso de trabajo, a las características (psicológicas, cognitivas, antropométricas)
de las trabajadoras y los trabajadores, es decir, una relación armoniosa con el entorno
(el lugar de trabajo) y con quienes lo realizan (las trabajadoras o los trabajadores).
Como complemento, la dirección le resta poca importancia el analizar el estado de
las relaciones del trabajador tanto con los compañeros del grupo como con los propios
jefes, dando como resultado un estrés laboral el cual podría estar reflejándose con
frecuencia de cefalea, trastornos digestivos, asma y ansiedad de los trabajadores de las
clínicas petroleras por las pocas relaciones armoniosas en el área laboral.
En torno al objetivo “Evaluar el nivel de conocimiento que posee el personal de
enfermería, para la aplicación de medidas de Bioseguridad por pinchazos, según el
manual de normas de PDVSA”, no se le da un adiestramiento cónsono con el manejo
de materiales punzo cortantes y todo conocimiento orientado en materia de
bioseguridad al personal que labora en las clínicas petroleras de occidente.
Con respecto al manejo de corto punzante, existen casos de mala manipulación
de los dispositivos corto punzante pudiendo ocurrir un accidente laboral originado por
algún pinchazo con aguja o una lesión, se indica así mismo, la poca probabilidad de la
formulación de los reportes de accidentes por temor a ser sancionado o suspendido de
sus funciones inherentes. A la par, las clínicas petroleras de occidente poseen muy
pocos contenedores y destructores de aguja para desechar los insumos usados en la
práctica laboral. En algunas áreas están muy alejados más de un metro y medio de
distancia donde fueron utilizados los punzo cortantes.
Tales consideraciones han ocasionado que no se hagan reportes diarios de las
eventualidades que puedan suscitarse en las áreas de atención a pacientes, no
haciéndose notificaciones a los supervisores sobre las lesiones ocurridas en el lugar de
108
trabajo lo que ha originado que los pacientes con alguna enfermedad altamente
contagiosa no se les haya dado un seguimiento pertinente.
En cuanto al objetivo “Caracterizar los elementos requeridos, para la aplicación de
medidas de Bioseguridad por pinchazos”, se tiene que las instalaciones no son las más
adecuadas para prestar un buen servicio, al tanto, el espacio es insuficiente para la
manipulación de instrumentos, la iluminación tampoco es la más idónea, generando así
un ambiente de trabajo inadecuado para pacientes y trabajadores.
Es por ello, que la infraestructura de la empresa no está diseñada con suficiente
consideración al trabajador que ha de tener acceso, junto con su equipo, para dar
mantenimiento, limpiar, reparar, reemplazar o cualquier acto de movilización que
requiera comodidad dentro de las instalaciones. Aunado a una falta de incorporación de
maquinaria y equipo de última generación para la atención de pacientes y manejo de
dispositivos corto punzantes.
En consideración al objetivo “analizar las estrategias de prevención durante las
prácticas de trabajo que plantean peligro de lesiones por pinchazos”, las clínicas
petroleras de occidente evidencia por la falta de insumos y el uso correcto de los
principios de bioseguridad, violan la prevención para accidentes, no se considera el
lavado de manos luego de manipular sangre, fluidos corporales, entre otros, tanto se
haya usado o no guantes.
De igual manera, no se hace uso de protectores oculares, corporales y zapatos
adecuados para la atención de pacientes que asisten a las clínicas y en el peor de los
casos en la manipulación de instrumental punzo cortante en pacientes de alto riesgo de
enfermedades transmisibles.
Por último, se evidenció por la falta de recursos para la adquisición de insumos
relacionados no existe una desinfección y esterilización de equipos por lo que la salud
de los empleados pertenecientes al área de clínica y los mismo pacientes corren peligro
de contaminación a través del contacto de cualquier bacteria en su piel.
Al aplicar las medidas establecidas en el Capítulo IV de este trabajo de grado,
109
estableciendo los procedimientos seguros, medidas de control para la debida
manipulación de los instrumentos médicos punzocortantes y los desechos
contaminados, se lograran evitar o minimizar la emisión de agentes biológicos en el
lugar de trabajo. Entre los procedimientos de mayor riesgo cabe citar la extracción de
sangre, la cateterización intravenosa y las jeringuillas percutáneas. Una pequeña
cantidad de sangre puede provocar una infección capaz de poner en peligro la vida de
la persona infectada. Las agujas huecas contienen una mayor cantidad de sangre y, por
tanto, su uso conlleva un mayor riesgo respecto a la utilización de agujas sólidas.
110
RECOMENDACIONES
De las conclusiones generadas del estudio acerca de la prevención de riesgos en
el manejo de dispositivos con agujas en las clínicas de la industria petrolera de
Occidente, se sugiere al personal que labora, los siguientes aspectos:
Identificar y evaluar los riesgos por puesto de trabajo e instalación correspondiente
al área de enfermería, seguido de las notificaciones de riesgo por puesto de trabajo e
instalación, dirigido a todo el personal de enfermería.
Concienciar mediante campañas a la población de enfermeras y trabajadores que
manejen dispositivos punzo penetrantes; en la aplicación de medidas de bioseguridad
garantizando así, la prevención de accidentes y enfermedades ocupacionales.
Establecer programas de vigilancia epidemiológica para las enfermedades virales,
producto de pinchazos, realizando jornadas de vacunación a todo el personal que
labora en la clínica Dr. Gustavo Quintini.
La aplicación de las normas serán objeto de evaluaciones a intervalos regulares
(monitoreo permanente) formando así parte integrante de las medidas de información y
formación dirigidas a los trabajadores.
Se debe eliminar el uso innecesario de instrumentos punzocortantes mediante la
aplicación de cambios en la práctica y sobre la base de los resultados de la evaluación
del riesgo.
La práctica de reencapuchar la aguja con las dos manos, para después
desecharla debe evitarse a toda costa, ya que es una acción de alto riesgo y la mejor
forma de producir una vía de entrada al organismo. Por lo tanto, se deberá destruir o
desechar inmediatamente después de ser utilizada. Los contenedores deben ser
ubicados cerca del paciente (cabecera o piecera) o en mesas de las enfermeras; en el
111
quirófano, deben colocarse junto a la mesa de atención. Dichos contenedores no
pueden estar alejados más de un metro y medio de distancia donde fueron utilizados los
punzo cortantes.
El uso de soluciones de hipoclorito deben ser frescas (diluidas en el momento de
desinfección del área), y no se debe almacenar en grandes volúmenes en la clínica,
dado a que la solución en un periodo de treinta días, pierde el cincuenta por ciento de
concentración inicial aunque este almacenado en recipientes oscuros, de plásticos y
cerrados. No debe ser mezclado con otros químicos ni agua caliente dado a su efecto
corrosivo en los metales. No se debe permitir el uso de desinfectantes de alto nivel para
ambientes; por razones de salud ocupacional se debe prohibir el uso de químicos a
base de formaldehido, fenoles o glutaraldehído para superficies ambientales.
Las herramientas de trabajo deben estar ubicadas alrededor del puesto de trabajo.
La iluminación debe ser eficiente, el diseño acorde al lugar de trabajo, su mobiliario y
equipo. Considerar las posturas y posiciones del cuerpo correctas pues de no ser así se
corre el riesgo de padecer lumbagos, inflamaciones, mala circulación. Las cargas
pesadas, se debe tener mucho cuidado cuando se maneja, pues hay condiciones y
parámetros que indican la relación del peso de la carga, pues muchas veces ocasiona
desgarros.
Se recomienda el uso de guantes de látex en todo procedimiento que implique el
manejo de material biológico o donde exista el riesgo de exposición a sangre o fluidos
corporales, así mismo deberán usarse en los procesos de descontaminación y
eliminación de residuos contaminados. Los guantes deberán ser descartados una vez
hayan sido contaminados en los sitios dispuestos para los residuos contaminados, y
luego reemplazados por otros.
No tocar los ojos, nariz o piel con las manos enguantadas, usar mascarilla en los
procedimientos en los que pueda haber riesgo de salpicadura de material biológico en
la mucosa bucal y nasal. El uso de la bata será obligatorio en todo momento dentro del
laboratorio, la cual deberá ser retirada antes de salir del laboratorio. Esta deberá ser de
manga larga para protegerse de cualquier reactivo o agente químico, o material
biológico manipulado en el laboratorio.
112
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Ardila, Ana y Muñoz, Alba (2009). Bioseguridad con énfasis en contaminantes biológicos en trabajadores de la salud. Disponible en: www.redalyc.com. Ciência e Saúde Coletiva, Vol. 14, Núm. 6, Diciembre-sin mes, 2009, pp. 2135-2141. Associação Brasileira de Pós-Graduação em Saúde Coletiva. (Consulta: 2011, Septiembre 8). Brasil.
Arias, Fidias. (2006). El Proyecto de Investigación. Introducción a La Metodología Científica. Quinta edición. Editorial: Episteme, C.A. Venezuela.
Arze; Marcelo, Parrado; Fernando, Morote; José, Carrasco; María, Veneros; María y Rodríguez, Leonardo (2005). Manual de Manejo de Residuos, Bioseguridad y Prevención de Infecciones Nosocomiales. Documento en línea. Disponible en: www.swisscontact.bo/sw_files/mmqbpprskzy.pdf. 37 p.p. (Consulta: 2011, Septiembre 9). Bolivia.
Asfahl, Ray (2000). Seguridad Industrial y Salud. Cuarta edición. Editorial Pearson Educación. México.
Balestrini, Miriam (2006). Cómo se elabora el Proyecto de Investigación. Consultores Asociados BL. Venezuela.
Barriga, Gustavo. y Castillo, Noemí (2004) Seguridad en el Laboratorio. Revista Patología Clínica. Documento en Línea. Disponible en:. http://www.infecto.edu.uy/prevencion/bioseguridad/bioseguridad.htm-(Consultado en: 2011, Septiembre 5).
Bateman, Thomas. y Snell, Scott. (2005). Administración. Un Nuevo Panorama Competitivo. Sexta Edición. Editorial: McGraw-Hill. México.
Bavaresco, Aura. (2006). Proceso Metodológico en la Investigación. (Cómo hacer un diseño de investigación). Quinta edición. Editorial de La Universidad del Zulia. Maracaibo, Venezuela.
Benavides, Javier. (2004). Administración. Primera edición. Editorial: McGraw-Hill. México.
Benavides; Fernando y Ruiz, Carlos. (2004). Salud Laboral. Conceptos y Técnicas para la Prevención de Riesgos Laborales. Editorial Masson. España.
Cantú, Humberto (2006). Desarrollo de una Cultura de Calidad. Tercera edición. Editorial: McGraw-Hill. México.
Chávez, Nilda. (2007). Introducción a la Investigación Educativa. Cuarta edición. Maracaibo, Venezuela.
113
Chiavenato, Idelfonso. (2002). Administración en los Nuevos Tiempos. Primera Edición. McGraw-Hill. Colombia.
Corbetta, Piergiorgio. (2007). Metodología y Técnicas de Investigación Social. Edición revisada. Editorial: McGraw-Hill. España.
Cortés, José. (2002). Seguridad e Higiene del Trabajo. Técnicas de Prevención de Riesgos Laborales. Tercera edición. Editorial Alfaomega Global ediciones. Colombia.
Costa; Marco y Costa; María (2002). Bioseguridad. Lo Estratégico de Seguridad e Saúde no Trabalho. Rev. Cipa. 256:86-90.
European Biosafety Network (2010). Prevención de Pinchazos Accidentales en los Sectores Hospitalario y Sanitario. Guía de implementación del Acuerdo Marco Europeo, la Directiva del Consejo y la Legislación Nacional Asociada. 16 p.p. Documento en línea. Disponible en: www.europeanbiosafetynetwork.eu. (Consultado en: 2011, Septiembre 5). España.
Fernández, Roberto (2005). Administración de la Responsabilidad Social Corporativa. Primera Edición. Editorial Thomson. España.
Gambino, Darsy (2007). Bioseguridad en Hospitales. Revista Cubana de Salud y Trabajo. Volumen 8, No 1. Enero-Junio de 2007. Disponible en: bvs.sld.cu/revistas/rst/vol8_1_07/rst10107.html. (Consultado en: 2011, Septiembre, 7). Cuba.
Gibson, James; Ivancevich, John, Donnelly James. y Konopaske Robert (2006). Organizaciones. Duodécima Edición. McGraw-Hill. México.
González, Nora (2007). Normas de Bioseguridad Aplicadas por el Personal Médico y de Enfermería del Centro Clínico Materno San Juan. Tesis no publicada, para optar al grado de especialista en educación ambiental de la Universidad Rafael Urdaneta. Venezuela.
Guardino, X. (2001). La Gestión de los Equipos de Protección Individual Frente al Riesgo Biológico. España.
Hernández, Roberto., Fernández, Carlos y Baptista Pilar. (2006). Metodología de la Investigación. Cuarta edición. Editorial McGraw-Hill. México.
Hernández, Roberto.; Fernández, Carlos.; y Baptista, Pilar. (2007). Metodología de la Investigación. Editorial McGraw-Hill. México.
Hernández, Tamara; Talavera, Arturo; Arencibia, Daniel; Infante Juan; López Yulieé; Rodríguez, Niurka; Díaz, Daiyana y Fariñas, Mildrey. (2010). Identificación y modificación de riesgos biológicos en el bioterio del Instituto Finlay, durante los ensayos preclínicos de toxicología. Disponible en: www.redalyc.com. Revista Electrónica de Veterinaria, vol. 11, núm. 9, septiembre, 2010, pp. 1- 14. Veterinaria Organización. (Consultado en: 2011, Septiembre 8). España.
Hurtado, Jacqueline. (2008). El Proyecto de Investigación. Comprensión Holística de la
114
Metodología y la Investigación. Sexta edición. Sypal, Quirón. Venezuela.
Ivancevich, John. (2005). Administración de Recursos Humanos. Novena edición. Editorial: McGraw-Hill. México.
Jobber, David; y Fahy, John (2007). Fundamentos del Marketing. Segunda edición. Editorial: McGraw-Hill. España
Jones, Gareth; y George, Jennifer (2006). Administración Contemporánea. Cuarta edición. Editorial: McGraw-Hill. México.
Koontz, Harold y Weinrich, Heinz (2004). Administración. Una perspectiva global. México. Editorial: McGraw-Hill. Segunda edición.
Lamb, Charles y Hair, Joseph (2006). Fundamentos de Marketing. Cuarta edición. Editorial: Thomson. México.
Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (2007). Publicada en Gaceta Oficial N° 38.596.
Ley Sobre Sustancias, Materiales y Desechos Peligrosos bajo la Gaceta Oficial N°5.554) (2001).
Manual de Bioseguridad del Laboratorio Clínico (2005). Tercera edición. México: OMS.
Manual de Higiene Ocupacional PDVSA HO-H-16 (2006). Identificación y Notificación de Peligros y Riesgos Asociados a las Instalaciones y Puestos de Trabajos. Volumen 1. Venezuela.
Manual de Higiene Ocupacional PDVSA Ho-H-27 (2010). Guía Para la Identificación y Abordaje Participativo de Factores Psicosociales. Venezuela.
Méndez, Carlos. (2007). Metodología. Cuarta Edición. Editorial Limusa, Noriega Editores. Colombia.
Norma Técnica Programa de Seguridad y Salud en el Trabajo NT-01-2008 (2008).
Normas COVENIN 2237-89. (1989). Ropa, Equipos y Dispositivos de Protección Personal. Selección de Acuerdo al Riesgo Ocupacional.
Normas Normas para el Control de la Recuperación de Materiales Peligrosos y el Manejo de los Desechos Peligrosos (Gaceta Oficial 5245/Decreto 2635) (1998).
Nurses Association (2002). Guía para la prevención de pinchazos con Agujas. Estados Unidos.
Oficina Internacional del Trabajo (2001). Factores Ambientales en el Lugar de Trabajo. Primera edición. ISBN 92-2-311628-7. Ginebra.
Pardo, Antonio; y Ruiz, Miguel. (2002). SPSS 11. Guía de Análisis de Datos. Editorial: McGraw-Hill. Madrid España.
115
Parra, Javier. (2003). Guía de Muestreo. LUZ. Maracaibo. Venezuela.
Pelekais, Cira; Finol, Mineira.; Neuman, Noel y Belloso, Oscar. (2007). El ABC de la Investigación. Una aproximación teórico – práctica. Segunda edición, Ediciones Astro Data S.A. Venezuela.
Peter, Paul. y Olson, Jerry. (2006). Comportamiento del Consumidor y Estrategia de Marketing. Séptima edición. Editorial McGraw-Hill. México.
Ramírez, César. (2007). Seguridad Industrial. Un Enfoque Integral. Tercera edición. Editorial Limusa Noriega Editores. México.
Reglamento Parcial de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (2007).
Robbins, Stephen y Coulter, Mary (2005). Administración. Octava edición. Editorial Pearson. España.
Rodríguez, Odalys; Aguilera, Alina; Barbé, Anaiza y Delgado, Néstor (2010). Intervención educativa sobre bioseguridad en trabajadores de la Salud. Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=211114978012 Consultado: 2011, Agosto 8. Archivo Médico de Camagüey, vol. 14, núm. 4, julio-agosto. Centro Provincial de Ciencias Médicas de Camagüey. ISSN 1025-0255. Cuba
Rosental, Verónica (2006). Comisión de infección hospitalaria de la sociedad Argentina de insectología. Agujas que dañan a los Médicos. Disponible en: www.scielo.com p. 2. (Consultado en: 2011, Septiembre 8). Argentina.
Sabino, Carlos. (2002). El Proceso de la Investigación. Novena Edición Actualizada. Editorial Panapo de Venezuela.
Sabino, Carlos. (2007). El Proceso de Investigación. Editorial Panapo. Venezuela.
Sierra, Restituto. (2005). Tesis Doctorales y Trabajos de Investigación Científica. Quinta edición. Editorial Tomson. España.
Vásquez, Yajaira y Rivas Zenaida (2004). Manual de Técnicas y Procedimientos de las Actividades de Enfermería en la Unidad de Emergencia. PDVSA La Salina. Venezuela.
Volkow; Patricia; Velásquez; Ruth, Gutiérrez; Margarita y González; Rocio (2006). Residuos Peligrosos, Biológicos e Infecciosos. Guía para su manejo en los establecimientos de salud. Primera edición. Editorial Trillas. México.
Wallker, Orville; Boyd, Harper; Mullins, John y Larréché, Jean. (2005). Marketing Estratégico. Enfoque de Toma de decisiones. Cuarta edición. Editorial: Mc Graw Hill. México.