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Propuesta para la caracterización del modelo de
gestión social en Emprendimiento en el Distrito
Capital
Martha Cecilia Gómez Melo
Universidad Nacional de Colombia
Facultad de Ciencias Económicas, Programa de Maestría en Administración
Bogotá D.C., Colombia
2015
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Martha Cecilia Gómez Melo
Tesis de investigación presentada como requisito parcial para optar al título
de: Magister en Administración
Director:
Ph.D. Carlos Alberto Rodríguez
Línea de Investigación:
Gestión de organizaciones
Universidad Nacional de Colombia
Facultad de Ciencias Económicas, Programa de Maestría en Administración
Bogotá D.C., Colombia
2015
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Propuesta para la caracterización del modelo de
gestión social en Emprendimiento en el Distrito
Capital
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Resumen
Este documento pretende hacer una revisión a partir de la caracterización de la gestión social,
sobre la participación de los beneficiarios en todas las fases del desarrollo de proyectos de
fomento al emprendimiento en el Distrito Capital y de este modo establecer si los sujetos de
la intervención social realmente están aportando desde sus capacidades como emprendedores
a la satisfacción de las necesidades que dan origen a la intervención. Partimos únicamente de
la revisión de la política en emprendimiento orientada a la creación de unidades productivas
como alternativa al desempleo en comunidades vulnerables y que se enmarca en lo que
podemos denominar, desde la gestión social, como necesidades de desarrollo de
oportunidades y formación laboral.
Cabe resaltar que este trabajo aunque presenta un volumen importante de información sobre
uno de los proyectos de inversión del Distrito Capital, no trata de cuestionar la ejecución del
proyecto, las entidades que en él participan o su concepción más que en lo pertinente a la
participación del beneficiario en el conjunto de decisiones que lo constituyen.
Resulta significativo que mientras desde la mayoría de los autores el individuo emprendedor
se asocia a ideas como propensión al riesgo, identificación de oportunidades, vocación,
innovador, motor del desarrollo económico, etc., en la práctica la gestión social de este tipo
de proyectos lo percibe solamente como un sujeto receptor de apoyo y no se tiene en cuenta
la visión que el sujeto emprendedor tiene y/o puede desarrollar asociada a los factores con
que se relaciona.
La reflexión que guía el documento es que aunque es clara la buena intención de favorecer
la creación y sostenibilidad de las empresas que surgen como alternativa al desempleo,
utilizando mecanismos de fomento financiero y acompañamiento empresarial de forma
simultánea, sin embargo, difícilmente se lograrán cambios importantes en las condiciones de
la población sino se considera la participación del beneficiario en la práctica de la gestión
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del emprendimiento bajo una óptica de co-diseño y co-producción de la política social
misma.
Palabras clave: Gestión social, Emprendimiento, Participación ciudadana,
Distrito Capital, Política Pública.
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Summary
This document aims to review from the characterization of social management on the
participation of beneficiaries in all phases of development projects promoting
entrepreneurship in the Capital District and thus establish whether subjects of social
intervention they are really contributing from their capabilities as entrepreneurs to satisfy the
needs that give rise to intervention. We leave only the policy review in entrepreneurship
aimed at creating productive units as an alternative to unemployment in vulnerable
communities and that is part of what we call, from social management, and development
needs and job training opportunities.
It is noteworthy that this work but has a significant amount of information on one of the
investment projects of the Capital District, not about questioning the project implementation,
the entities participating in it or its conception rather than as relevant to the participation of
beneficiary in the set of decisions that constitute it .
Significantly, while from most enterprising individual authors is associated with ideas such
as risk appetite, identifying opportunities, vocation, innovative engine of economic
development, etc., in practice the social management of such projects as perceived only as a
recipient subject support and not take into account the view that the entrepreneur has subject
and / or may develop associated factors with which it relates.
The reflection that guides the paper is that although it is clear the good intention of
encouraging the creation and sustainability of enterprises emerging as an alternative to
unemployment, using mechanisms of financial development and business support
simultaneously, however, hardly significant changes will be achieved under the conditions
of the population but is considered the beneficiary's participation in the practice of
management of the enterprise under an optical co-design and co-production of social policy
itself.
Keywords: Social Management, Entrepreneurship, Citizen Participation,
Distrito Capital, Public Policy.
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Contenido
Resumen 4
Lista de gráficos…………………………………………………………….. 9
Lista de tablas………………………………………………………………. 10
Introducción………………………………………………………………… 11
Capítulo 1. Marco teórico…………………………………………………... 19
1.1 Elementos centrales de la gestión social………………………… 19
1.1.1 Del análisis de la política pública al análisis de la gestión
social……………………………………………….. …………….
26
1.1.2 Método de Análisis estratégico de la gestión social……….. 34
1.2 Participación del beneficiario en la gestión social………………. 37
1.2.1 Criterios de evaluación de la participación………………… 39
1.3 Perfil del emprendedor………………………………………….... 43
1.3.1 Teorías de emprendimiento…………………………………. 43
1.3.2 Perfil del emprendedor sujeto de la gestión social.………….. 50
1.4 Gestión social y Política Pública de emprendimiento en Colombia. 54
1.4.1 El Ecosistema Emprendedor Colombiano……………… 55
1.4.2 Emprendimiento en el Distrito Capital………………… 60
1.4.3 Gestión Pública del Emprendimiento en Bogotá D.C…. 64
Capítulo 2. Diseño Metodológico…………………………………………... 72
2.1 Etapas del desarrollo del enfoque………….…………………… 73
2.2 Descripción del análisis de la Gestión Social propuesto………. 80
Capítulo 3. Análisis De La Gestión Social Propuesto…………………….. 82
3.1 Generalidades del Proyecto de Inversión 716…………………… 82
3.2 Trabajo de campo y herramientas de recolección de información 84
Capítulo 4. Desarrollo Del Trabajo………………………………………… 92
4.1 Perfil de Diseño………………………………………………….. 92
4.1.1 Ámbito de acción……………………………………… 92
4.1.2 Descripción de los actores involucrados en el Proyecto… 95
8
4.1.3 Necesidad a satisfacer………………………………… 108
4.1.4 Actividades propias de la Gestión Social del Proyecto 716 110
4.2 Resultados de la intervención………………………………….. 114
4.2.1 Resultados en términos de la satisfacción de la necesidad 115
4.2.2 Relaciones entre los actores……………………………. 117
4.2.3 Aprendizaje y crecimiento……………………………… 118
4.3 Análisis Estratégico de la Gestión Social………………………… 119
4.3.1 Modelo de Gestión…………………………………… 119
4.3.2 Caracterización del Programa………………………… 121
4.3.3 Análisis de brechas…………………………………… 122
4.3.4 Nodos Estratégicos……………………………………. 126
4.3.5 Facilitadores…………………………………………… 128
4.3.6 Senderos Estratégicos…………………………………. 129
4.4 Revisión de los criterios de evaluación sobre la participación de
los beneficiarios……………………………………………………….. 130
Capítulo 5. Conclusiones y recomendaciones……………………………... 134
5.1 Conclusiones...…………………………………………………. 134
5.2 Recomendaciones……………………………………………… 138
BIBLIOGRAFIA…………………………………………………………… 145
ANEXOS……………………………………………………………………. 157
9
Lista de Gráficos
1. Proceso de formación de políticas y programas sociales………………. 24
2. Enfoques de evaluación de proyectos públicos…………………………. 29
3. Niveles de toma de decisión……………………………………………… 32
4. Requerimientos del análisis estratégico de gestión social……………….. 34
5. Modelo de Timmons 49
6. Roles Institucionales en el ecosistema emprendedor…………………… 55
7. Ecosistema emprendedor Colombiano………………………………….. 56
8. Etapas del desarrollo emprenedor……………………………………… 57
9. Esquema de clasificación de la información…………………………….. 78
10. Desarrollo metodológico………………………………………………… 79
11. Estructura del cuestionario realizado a los prestadores………………….. 89
12. Participación por sector económico……………………………………… 97
13. Organigrama de la SDDE………………………………………………... 104
14. Estructura de procesos de la SDDE……………………………………... 105
15. Ficha del proyecto de inversión 716…………………………………….. 108
16. Estructura organizacional del proyecto…………………………………. 117
17. Procesos del proyecto…………………………………………………… 118
18. Metas del proyecto……………………………………………………… 121
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Lista de Tablas
1. Enfoques de política pública ……………………………………………… 26
2. Perspectivas de análisis de la política pública……………………………… 27
3. Modelos de organización y gestión de programas y proyectos sociales…… 31
4. Participación de los actores en la gestión social…………………………… 36
5. Tipos de participación ciudadana…………………………………………. 37
6. Tipologías de fórmulas participativas……………………………………. 38
7. Estrategias de la gestión social…………………………………………… 41
8. Autores representativos en emprendimiento……………………………… 42
9. Clasificación de los enfoques en emprendimiento………………………… 45
10. Comparación de enfoques de la motivación emprendedora……………… 46
11. Categorías de emprendimiento…………………………………………… 48
12. Objetivos de la política…………………………………………………… 50
13. Características del emprendimiento en el Distrito Capital………………. 60
14. Estructura del cuestionario realizado a los beneficiarios…………………. 86
15. Prestadores………………………………………………………………… 100
16. Entidades de financiamiento………………………………………………. 103
17. Actividades propias de la ejecución……………………………………… 112
18. Funciones del proyecto…………………………………………………… 118
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Introducción
La gestión social como campo de estudio específico dentro la gestión pública es
relativamente reciente, se refiere, según INDES (2006) “particularmente a la promoción de
políticas y programas sociales que contribuyan de forma significativa a la reducción de la
desigualdad y de la pobreza, y al fortalecimiento de los estados democráticos y de la
ciudadanía a través de procesos participativos de formación de políticas que generan valor
público”.
En este sentido, comprender, el carácter participativo de un modelo de gestión social hace
pensar que él mismo, parte de reconocer la verdadera influencia de los individuos en la
construcción de esas políticas y programas que buscan satisfacer las necesidades que dan
origen a la intervención por parte de los prestadores, sean estas últimas instituciones estatales
o privadas.
El desarrollo de proyectos públicos de fomento al emprendimiento se enmarca dentro de la
gestión social por cuanto la implementación de acciones públicas en la materia, se concibe
como una forma de disminuir el desempleo o mejorar las condiciones de empleabilidad de
los individuos, lo cual resulta ser claramente una necesidad de carácter social.
Estos proyectos, sobre todo en lo que tiene que ver con el financiamiento al emprendedor,
se vienen gestionando del mismo modo que se hace en otros campos como salud y educación,
aun cuando la naturaleza misma de los anhelos del individuo que participa allí, no sea de la
misma naturaleza.
Este trabajo propone que para caracterizar el modelo de gestión social en emprendimiento,
pese a que pueden existir muchos componentes alrededor, es necesario prestar especial
atención a la forma cómo se llevan a cabo estos procesos participativos en la intervención
para satisfacer la necesidad de carácter social, ejecutada en este caso por el Distrito Capital.
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Esta orientación concede a la revisión de estos procesos participativos, donde los
emprendedores son los protagonistas, el foco central del análisis. Sin embargo, se reconoce
que esa participación depende de un entramado de vínculos con otros elementos como el tipo
de estructura organizacional, los procesos que se desarrollan y las funciones de otros
participantes.
En este sentido, dentro de la política pública se reconocen varias formas de participación de
los individuos, cada una con un mayor o menor énfasis en el grado de intervención en el
diseño mismo de los programas y proyectos, pero dadas las características propias que hacen
que una persona independientemente de su motivación decida optar por crear empresa, lo
que guía sus intereses es la forma cómo se visualiza en el futuro, no solo desde el punto de
vista productivo, sino también de la forma cómo se logra relacionar con sus entorno.
Esta visión de sí mismo, como emprendedor es lo que determina la forma como puede
aprovechar o no realmente las acciones que esa gestión social pretende desarrollar, y más aun
teniendo en cuenta que el tipo de emprendedor a quienes se atiende desde la gestión social;
es decir aquellos individuos que crean empresa por la necesidad de acceder a algún tipo de
ingreso, no son conscientes del resultado de largo plazo que desean alcanzar o el mismo es
reducido frente a otro tipo de empresarios.
Esta reflexión no es muy común en la literatura, por cuanto la perspectiva desde la cual se
plantea la gestión de estos proyectos tiene que ver más con la eficiencia y eficacia cuantitativa
de los mismos. Por ello se considera que es muy relevante empezar la caracterización del
modelo centrada en los individuos, y por dar respuesta a la cuestión de ¿Cómo los proyectos
de gestión social en emprendimiento en el distrito capital están realmente incorporando la
visión del emprendedor en su ejecución?
Que los proyectos de gestión social estén incorporando la visión del emprendedor en su
desarrollo parte del principio que existe un tipo de participación, la cual, sea cual fuere su
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naturaleza, generalmente está consignada en las fichas de los proyectos y de esta premisa
parte el objetivo general que es identificar cuál es el tipo de participación que en la práctica
tienen los beneficiarios de los programas de fomento al emprendimiento en la gestión del
mismo. Con esta revisión y su contrastación con la visión del emprendedor es posible
caracterizar el modelo de gestión en emprendimiento para el caso del Distrito Capital en los
términos mencionados.
Para responder esta pregunta y cumplir con este objetivo, se plantearon los siguientes
objetivos específicos:
1. Establecer el marco teórico sobre gestión social en emprendimiento y el estado del
arte de los enfoques de análisis de la gestión social aplicables al caso del Distrito
Capital en la vigencia 2013 – 2014.
2. Examinar la participación de los beneficiarios en el desarrollo de un proyecto de
gestión social en emprendimiento en el Distrito Capital a partir de la aplicación de un
análisis estratégico y los criterios de evaluación de participación del beneficiario para
uno de los proyectos ejecutados en la vigencia 2013 – 2014.
3. Identificar algunos requerimientos mínimos que la gestión social en emprendimiento
debe atender para incluir en su gestión social la visión de los beneficiarios de la
política en el Distrito Capital.
Pertinencia: En la última década, el fomento al emprendimiento, como estrategia para
mejorar las condiciones de vida de la población en situación de vulnerabilidad se ha
consolidado en la agenda de política pública y es notable la proliferación de programas y
proyectos orientados hacia la creación sistemática de unidades productivas como principio
para mejorar la calidad del empleo. Sin embargo, si se revisan los resultados de las
intervenciones, (a pesar que en la gestión de este tipo de proyectos se aplican criterios
14
orientados por principios como equidad, solidaridad y eficiencia) los indicadores de medición
generan dudas sobre si realmente, se han identificado de manera clara las necesidades y
particularidades de los actores involucrados y más aún, si realmente este tipo de programas
satisfacen esas necesidades y expectativas. Resulta pertinente realizar una revisión al tema,
si se considera que tan solo en el año 2014, los recursos orientados a proyectos en esta línea
constituyeron el 20% del presupuesto del Distrito Capital.
Para establecer cómo participan los individuos en los proyectos, primero se caracterizan las
expectativas de los beneficiarios respecto de la gestión social en emprendimiento de
subsistencia en el Distrito Capital. Al tiempo, se revisaron los modelos existentes de análisis
de gestión social con un enfoque centrado en la participación del beneficiario, que sean
aplicables a emprendimiento y de acuerdo con el objetivo planteado se seleccionó el método
que permitía recopilar mayor número de elementos para la reflexión. Con esta base se aplicó
el modelo de análisis seleccionado a un proyecto ejecutado por el Distrito capital y se verificó
si en la práctica se conocen y responden a las expectativas de los beneficiarios y teniendo en
cuenta los criterios de evaluación de participación descritos en el marco teórico, se ofrecen
las conclusiones aplicables al caso del Distrito Capital.
Para esta comprobación, se seleccionó uno de los proyectos, que en términos de la magnitud
de los recursos asignados durante la vigencia 2013 y número de beneficiarios atendidos,
resultó más representativo en esta área. Corresponde al proyecto de inversión 716
denominado “fortalecimiento de iniciativas de emprendimiento” liderado por la Secretaria
Distrital de Desarrollo Económico y que se enmarca en el artículo 18 del Plan de Desarrollo
Económico y Social y de Obras Públicas para Bogotá Distrito Capital 2012-2016 “Bogotá
Humana”.
Este proyecto tiene como fin, formular planes de negocio y acompañar los procesos de
emprendimiento y fortalecimiento de las unidades productivas de la economía popular en el
marco de la convocatoria de emprendimiento local adelantada por la Secretaria Distrital de
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Desarrollo Económico. A la fecha, en sus dos años de operación, ha ejecutado recursos de
inversión por una cifra cercana a los treinta mil millones de pesos y está compuesto por una
serie de convenios de asociación que le permiten su desarrollo.
El desarrollo del trabajo aquí presentado se fundamenta en una propuesta para el análisis de
la gestión social en emprendimiento del proyecto de inversión 716, a través de los tres
convenios que le dieron operacionalización en el periodo en mención y de los cuales se cuenta
con la información primaria sobre la ejecución que alcanzó alrededor de 4600
emprendedores.
El proceso de investigación se dividió en cuatro etapas que permitieron un acercamiento a la
comprensión del problema en términos conceptuales y propios del ámbito de aplicación
permitiendo la identificación de variables determinantes:
1. Establecimiento del marco teórico aplicable: análisis de teorías, investigaciones y
antecedentes en tres tópicos fundamentales: gestión de proyectos sociales,
emprendimiento y enfoques para el análisis de la gestión social. Adicionalmente se
revisaron los informes técnicos, caracterización cuantitativa de beneficiarios
resultante y otros documentos de trabajo propios del convenio que aportaran
información sobre el desarrollo de su gestión.
2. Trabajo de campo: Se seleccionaron 72 emprendedores beneficiarios de entre los
recursos del proyecto de inversión 716 y se les aplicó una entrevista para identificar
su percepción sobre el programa. Adicionalmente se realizaron entrevistas a 8
funcionarios, asesores y consultores del Distrito Capital para establecer su percepción
sobre la mecánica del proceso. Una vez recopilada la información se codificó y
analizó teniendo en cuenta su naturaleza cualitativa.
3. Estructuración de la propuesta: a partir de los hallazgos resultantes del trabajo de
campo, se realizó el análisis de acuerdo con una combinación de los criterios
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utilizados por Schvarstein (2003) y la metodología de análisis estratégico de
proyectos sociales de la CEPAL. Esta información permitió establecer un marco de
referencia para el análisis crítico de la gestión de este tipo de proyectos en
emprendimiento y formular una propuesta sobre los parámetros mínimos requeridos
para la gestión social de forma que se resuelvan las necesidades de los beneficiarios.
4. Validación de los resultados, a través de la consulta a expertos sobre los aspectos
observables en el trabajo de campo y las conclusiones a que dieron lugar.
El trabajo consta de cinco capítulos: el primero, donde se presenta el marco teórico aplicable
a gestión social, enfoques de análisis de la gestión social, participación ciudadana y
emprendimiento. De la misma forma, se describe el marco de política pública establecido
para desarrollar proyectos de emprendimiento en Bogotá y los lineamientos para la
evaluación de la participación ciudadana aplicables a la gestión social del emprendimiento.
En el capítulo dos, se establece el diseño metodológico, se discriminan las etapas de
desarrollo del enfoque y se describe el análisis de la gestión social propuesto que contrasta
de la revisión del perfil de diseño del programa con los resultados de la intervención.
En el capítulo tres, se realiza el análisis de la gestión social para el programa de estudio, se
presentan los resultados del trabajo de campo en dos niveles, el resultado del proceso de
observación y los resultados de los cuestionarios aplicados tanto a los beneficiarios como a
un grupo de expertos consultados.
El capítulo cuatro se desarrolla la propuesta de análisis, se clasifica la información obtenida
de acuerdo a la propuesta metodológica incluyendo revisión de aspectos tales como actores,
necesidad a satisfacer, actividades propias de la gestión, resultados de la intervención y
aprendizajes.
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En este apartado se realiza el análisis estratégico de la gestión social del programa, se realiza
el análisis de brechas, se determinan los nodos estratégicos, facilitadores y senderos
estratégicos de acuerdo a la metodología y se aplican los criterios de evaluación de
participación ciudadana lo que permite construir en el capítulo cinco las conclusiones,
recomendaciones sobre algunos parámetros escalables a otros proyectos de gestión social en
emprendimiento y que vinculan los factores promotores y adversos desde el punto de vista
de la comunidad beneficiaria observados.
Desde los objetivos que dieron origen al presente trabajo podemos advertir que a la pregunta
de investigación y objetivo general sobre la cual se busca reflexión, se da respuesta con el
desarrollo de las conclusiones finales, por cuanto se trata de un ejercicio de percepción del
investigador y se sustenta en el cruce de la información provista en el capítulo cuatro a través
del análisis presentado y el marco teórico descrito detallado en el capítulo uno.
Del mismo modo, el objetivo específico número uno, “Establecer el marco teórico sobre
gestión social en emprendimiento y el estado del arte de los enfoques de análisis de la gestión
social aplicables al caso del Distrito Capital en la vigencia 2013 – 2014, se desarrolla en el
capítulo 1, a través de la recopilación bibliográfica y la clasificación de enfoques aplicables
al contexto distrital por los prestadores de la política pública.
Al objetivo específico número dos, “Examinar la participación de los beneficiarios en el
desarrollo de un proyecto de gestión social en emprendimiento en el Distrito Capital a partir
de la aplicación de un análisis estratégico y los criterios de evaluación de participación del
beneficiario para uno de los proyectos ejecutados en la vigencia 2013 – 2014” se da
respuesta en el capítulo cuatro, logrando establecer una descripción de la participación del
beneficiario en la ejecución de un proyecto concreto por medio del análisis estratégico de la
gestión propuesto.
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Al objetivo específico número tres, “Identificar algunos requerimientos mínimos que la
gestión social en emprendimiento debe atender para incluir en su gestión a los beneficiarios
en el Distrito Capital” se da respuesta en el capítulo cinco, a través de la reflexiones del
investigador de acuerdo con la metodología planteada guiadas por las percepciones de los
beneficiarios, prestadores y las opiniones de los expertos consultados. Por último, se
reconocen las limitaciones del estudio y se da cuenta sobre las posibles investigaciones que
pueden desarrollarse a partir de la experiencia obtenida con el mismo.
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Capítulo 1. Marco Teórico
El Instituto Interamericano para el Desarrollo Económico y Social – INDES, organismo
creado por el Banco Interamericano de Desarrollo – BID, se refiere a la gerencia social como
“un campo de conocimientos y prácticas cuyo fin es promover que las políticas y los
programas sociales que contribuyan de forma significativa a la reducción de la desigualdad
y de la pobreza, y al fortalecimiento de los estados democráticos y de la ciudadanía a través
de procesos participativos de formación de políticas que generan valor público”. INDES
(2006).
Un modelo de gestión social en emprendimiento se entiende como un marco de referencia
para la implementación de una solución a un problema social, en este caso la disminución de
la desocupación, que exige la participación del emprendedor en el diseño, ejecución y
evaluación de las políticas y programas a través de los cuales se desarrolla.
Esta definición nos induce a considerar algunos aspectos teóricos importantes para
caracterizar un modelo de gestión social en emprendimiento para el Distrito Capital. El
primero de ellos es determinar los elementos centrales de la gestión social y su análisis, el
segundo de ellos, comprender las diferentes formas de participación que puede tener el
beneficiario en la política pública; el tercero, contextualizar al emprendedor desde las teorías
que explican su naturaleza y que permiten enmarcar su visión; y un cuarto aspecto, es
demarcar la necesidad que da origen a considerar que es importante crear empresas como
mecanismo para disminuir la pobreza o la desocupación en el contexto del Distrito Capital.
1.1 Elementos centrales para el análisis de la Gestión Social
Albi & Paramo (1997) afirman que por gestión o administración pública se entienden “el
conjunto de decisiones y reglas que es necesario adoptar para motivar y coordinar a las
20
personas con el objeto de alcanzar metas individuales y colectivas; es pública, porque se
desenvuelve en el contexto de los fines del Estado dentro de un marco jurídico-político”.
En consecuencia podemos decir que la gestión pública está configurada por los espacios
institucionales y los procesos a través de los cuáles el Estado diseña e implementa políticas,
suministra bienes y servicios y aplica regulaciones con el objeto de dar curso a sus funciones.
A pesar de la tendencia a replicar formas de gestión propias del sector privado en estos
espacios y procesos, no todos aquellos programas públicos pueden desarrollarse haciendo
omisión su naturaleza social.
Es decir, existen dentro de lo administrable públicamente, proyectos que tienen
particularidades asociadas a su ejecución derivadas de tres aspectos principales: a.
Características de los problemas y programas sociales, b. factores y dificultades
organizacionales en su implementación y c. factores particulares del medio ambiente social
y político en el que se desarrollan. Este tipo de proyectos son los que se denominan sociales
y durante su ejecución, deben luchar permanentemente con la inestabilidad que conlleva el
desarrollarse sobre problemas extremadamente complejos por contener causalidades
múltiples, que varían con el tiempo creando interacciones difícilmente predecibles y que por
tradición se intentan solucionar sobre la base de modelos convencionales de gestión.
De aquí tenemos que la gestión social es una especificidad dentro de la gestión pública debido
a la complejidad y particularidad de la ejecución de los proyectos sociales, que surge a partir
del ejercicio práctico en las comunidades y la observación de la respuesta de las mismas a la
implementación de los mismos. Para el Banco Mundial (2014)1, “la gerencia social está
estrechamente relacionada con el desarrollo de programas y proyectos sociales, tanto en el
ámbito de la administración pública como en el de los organismos no gubernamentales”.
Adicionalmente indica que es posible realizar gestión social en escenarios privados
vinculados a atender demandas de los sectores sociales que no son atendidas por el Estado.
1 Citado en Mokate (2005)
21
Fantova (2005) resume los principales modelos de gestión social desde una perspectiva
histórica de su aplicación, la mayoría de los cuales coinciden naturalmente con las tendencias
más significativas en la gestión de las organizaciones privadas y que van desde enfoques
basados en la gestión estratégica, el liderazgo de proximidad, la gestión basada en la
evidencia, la gestión por procesos y estructuras, la gestión relacional, la gestión en red, la
gestión participativa, la gestión dinámica y basada en el aprendizaje y resalta en particular
los nuevos modelos de calidad y excelencia en las organizaciones sociales y los desarrollos
en responsabilidad social e inteligencia social. Estas últimas tendencias dar especial énfasis
al imperativo de la búsqueda del bienestar social basado en una ampliación del número de
involucrados y en la conciliación de sus intereses desde una perspectiva profundamente
alineada con la ética en terrenos que llegan a un desarrollo de una consciencia colectiva.
Es decir, que un elemento imprescindible en la gestión social es la participación efectiva de
los individuos y es quizás allí donde reside su principal desafío, de tal manera que logre que
sus resultados sean adecuados. No obstante existen muchos elementos dentro de la gestión
social, algunos de ellos se convierten en imperativos para aquellos encargados de gestionar
este tipo de proyectos, todos ellos muy cercanos al problema de la participación efectiva de
los beneficiarios en el proceso, tal como los señalan Klisberg (1998), Mokate y Saavedra
(2005):
Participación: Alcanzar efectividad y metas de autosustentación en programas
sociales requiere crear espacios favorables a la participación activa de la comunidad
asistida, lo que es una exigencia organizacional básica.
El sentido de la inversión social: Esta no debe entenderse como un simple esfuerzo
asistencialista. Tampoco un gasto en consumo. Debe administrarse con eficiencia a
fin de que produzca capital humano y capital social, cuya acumulación es insustituible
para un desarrollo sostenido. Los recursos son escasos y se asignan políticamente.
22
▪ La optimización de esfuerzos: Es propósito de la gerencia social optimizar el
rendimiento de los esfuerzos de los actores sociales en el enfrentamiento del déficit
social, y el mejoramiento del funcionamiento y resultados de la inversión en capital
humano y capital social. Por ello es necesario asumir una actitud heurística para:
explorar la realidad, prestar atención a las particularidades de ésta, tener en cuenta las
experiencias comparadas, construir conocimientos a través del ensayo y error, así
como reajustar continuamente los marcos de referencia en función de los hechos.
▪ La temporalidad: Los objetivos sociales sólo se alcanzan en el mediano y largo plazo.
Se trata de metas múltiples y, en diversos casos, heterogéneas. Además, hay meta
objetivos, que van más allá de los objetivos fijados, mediante los cuales se busca que
los programas contribuyan a crear condiciones de autosostenimiento, es decir, que la
comunidad asistida experimente en el proceso un crecimiento significativo en sus
propias capacidades para continuarlos. Este metaobjetivo condiciona y enmarca las
metas usuales. En la realidad suelen darse programas que cumplen los objetivos
operativos trazados, pero que después de un período de haber finalizado la
cooperación prestada, fracasan finalmente porque no ha habido un aporte real a su
auto sustentabilidad.
▪ La cooperación interinstitucional: En el desarrollo de las dinámicas sociales de
amplitud intervienen múltiples actores; pueden intervenir agentes gubernamentales
diversos, empresas, organizaciones no gubernamentales, sectores de la sociedad civil
y las organizaciones de las comunidades asistidas. Los programas sociales son por
naturaleza implícita o explícitamente interorganizacionales. Así se produce una
interdependencia básica entre los actores participantes y, por tanto, hay que gestionar
conjuntamente.
Campo de fuerzas: Los gerentes sociales deben alcanzar metas organizacionales en
medio de presiones de diferente índole. Gestionan en el marco de un “campo de
fuerzas”. Están obligados a satisfacer las expectativas amplias y de largo plazo de
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sus superiores y subordinados, e incluso de las propias comunidades que atienden.
En este aspecto, otros autores también aluden la complejidad la gestión de proyectos
sociales. Blaistein (2004) se refiere por ejemplo a los objetivos sociales, indicando su
heterogeneidad, inconsistencia proveniente de la necesidad de responder a múltiples
actores, a veces hasta contradictorios y que no siempre corresponden a problemas
meramente técnicos, sino que en su mayoría responder a la inminencia de generar
consenso y legitimidad. Y más aún los objetivos de este tipo de proyectos cambian
constantemente con su desarrollo por la dinámica de aprendizaje y critica que surge
durante su desarrollo.
▪ Control: El monitoreo y la evaluación en la ejecución de programas sociales requiere
un abordaje técnico particular, para medir el grado de cumplimiento de impactos y
resultados. Estos sistemas de medición deben de estar funcionando en “tiempo real”,
para que sus productos puedan ser incorporados a la toma de decisiones gerencial.
▪ Información: Los programas sociales deben dar cuenta permanente sobre la marcha
y resultados de su gestión. La “transparencia” debe ser “activa” y debe garantizar la
escrupulosidad de la operación.
Estos desafíos ponen de manifiesto que las organizaciones involucradas en los proyectos
sociales deben gestionarse de un modo particular, considerando todos estos elementos. Esto
justifica que la gestión de proyectos sociales, sea considerada de un modo particular dentro
de la gestión pública tradicional.
En otro sentido, si bien la naturaleza de la gestión de los proyectos sociales se ve alterada por
los objetivos que plantean, lo está mucho más por la naturaleza metodológica con la cual se
deben implementar y realizar seguimiento. La metodología de ejecución de los proyectos se
va desarrollando por el camino y no corresponde en prácticamente ningún caso, a un estándar.
Si bien es posible identificar etapas amplias en la gestión, es un ejercicio más cotidiano ir
24
validando cada uno de los pasos en razón a circunstancias como su complejidad e
incertidumbre, entre otras razones (Blaistein, 2004)2.
El INDES (2002)3 propone una estructura de gestión iterativa e interactiva para este tipo de
programas, la cual sintetiza el eje en la participación de los individuos como soporte del
diseño y la ejecución garantizando la solidez y sostenibilidad de la intervención, este modelo
se sintetiza en la siguiente gráfica, la cual considera todos los elementos presentes en la
ejecución como resultado y generadores del componente social:
2 Este autor señala: a. la complejidad e incertidumbre, tanto intra- organizacional como externa, que rodean la ejecución
de programas sociales, b. la ejecución requiere una gestión inter – organizacional, en forma creciente. Los programas son
implementados por varias organizaciones que deben al menos coordinarse, c. en la ejecución existe un complejo decisorio,
ya que hay un gran número de instancias de decisión, dentro de cada organización y en las diferentes organizaciones
participantes, d. División y fragmentación de la administración pública en el área social que generan dinámicas de conflicto
y consenso, e. estas características conducen a una dinámica de interacción política , a una intensa negociación entre los
actores que alteran la ejecución y el tiempo previsto para ella, f. existen diferencias importantes entre el diseño y la
ejecución debido a las diferentes perspectivas de los actores sobre el programa, que dependen de su ubicación en la
jerarquía burocrática y la organización a la que pertenecen, g. la concepción formalista de la ejecución aún vigente, h. las
organizaciones del sector social están entre las más tradicionales y burocratizadas del sector público y i. conocimientos
limitados sobre implementación social. 3 Citado en Molina (2002).
25
Grafico 1. Proceso de formación de políticas y programas sociales
Fuente: Molina (2002)
Este modelo contrasta con la gestión tradicional de los programas concentrada en la eficacia
y eficiencia y no en el impacto, lo que se observa cuando miramos la forma cómo se
monitorean los proyectos sociales, asumiendo que la entrega de bienes o servicios puede dar
cuenta de su impacto real. Por ejemplo, se mide el número de personas satisfechas con un
determinado proyecto, que porcentaje de solicitudes se generan, cuánto cuesta cada unidad
del producto entregado, etc. pero no se evalúa rigurosamente a largo plazo la influencia del
desarrollo mismo del programa.
Definición de prioridades
Situación
Construcción de consensos
Monitoreo y evaluación Gestión de la
opción adoptada
Selección entre opciones
GESTION SOCIAL DE POLITICAS
Definición de objetivos dentro
de una organización
Definición de Estrategias de
acción
Análisis de la situación existente
GERENCIA SOCIAL DE
PROGRAMAS
Monitoreo y evaluación de
resultados Gerencia
estrategias de acción
26
Aunque la gestión de este tipo de proyecto ha cambiado Cohen (2005)4, incluso en nuestro
país, ya se vienen considerando desde hace mucho esfuerzos metodológicos en este sentido,
para el caso concreto del emprendimiento no se vienen aplicando en la ejecución, incluyendo
modelos como la gestión centrada en las personas, originada en los programas de atención a
población discapacitada.
1.1.1 Del análisis de la política pública al análisis de la gestión social:
Partiendo del hecho de que la gestión social se enmarca en la política pública debemos revisar
antes el estado del arte en análisis de políticas públicas para llegar luego a la especificidad
del análisis de la gestión de proyectos sociales y resaltar porqué es importante establecer cuál
es la forma cómo los individuos participan del proceso y la forma cómo se desarrollará más
adelante el análisis.
De acuerdo con Roth (2004), el análisis de las políticas públicas tiene como objeto de estudio,
el conjunto de dispositivos conformado por:
a. Objetivos colectivos que el estado considera como deseables o necesarios, incluyendo
el proceso de definición y de formación de estos,
b. Los medios y las acciones procesados, total o parcialmente, por una institución u
organización gubernamental, y
c. Los resultados de estas acciones, incluyendo tanto las consecuencias deseadas como
las imprevistas.
4 “hoy, la organización y gestión de los programas y proyectos sociales están básicamente determinadas por
los grados de estandarización de los bienes o servicios por entregar, la homogeneidad / heterogeneidad de la
población objetivo a la que están destinados. Estandarización del producto. Un producto es estandarizado
cuando resulta de un proceso de producción o distribución que tiene patrones normatizados de funcionamiento
y genera bienes o servicios de igual calidad. Homogeneización de la población objetivo. Se dice que una
población es homogénea cuando requiere de un mismo bien o servicio para lograr el impacto perseguido”.
COHEN, Ernesto; FRANCO, Rolando. Gestión social: cómo lograr eficiencia e impacto en las políticas
sociales. Siglo XXI, 2005
27
Este autor clasifica a su vez la política pública en tres enfoques de acuerdo a la naturaleza de
la intervención estatal, los cuales podemos sintetizar de la siguiente forma:
Tabla 1. Enfoques de política pública
Teorías centradas en la sociedad Teorías centradas en el Estado
El Estado, es considerado una variable
dependiente de la sociedad. Teorías marxistas,
neomarxistas, enfoques racionalistas. Minimizan
la capacidad y el impacto de las instituciones
públicas, sus agentes y los valores que pueden
tener sobre las elecciones hechas
El estado es independiente de la sociedad,
funciona como un selector de las demandas y un
proveedor de servicios. La acción pública es
resultado de las acciones realizadas por los
decisores políticos y los altos funcionarios
públicos. Son los individuos y los grupos que
ocupan el estado quienes determinan de manera
esencial las elecciones en materia de políticas
públicas. Corresponden a enfoques decisionistas,
el enfoque burocrático.
Teorías mixtas
Se ubican posturas y opciones teóricas y políticas muy variadas como el neocorporativismo, el
neoinstitucionalismo, al análisis de redes y la teoría de la acción, entre otros, intentan tomar en
consideración factores internos y externos en su explicación de la acción pública.
Dentro de este paquete se encuentran las teorías neocorporativistas y de entramado:
Neocorporativistas: Consiste en la existencia de relaciones privilegiadas o exclusivas entre un
número relativamente reducido de grupos o gremios y el estado. Las políticas públicas se conciben
como el resultado de la competición entre grupos, sino como el fruto de una negociación entre el
estado y los representantes de los grupos sectoriales involucrados.
Teorías del entramado: las fronteras entre lo estatal y lo no estatal son movedizas y existe una serie
de puentes entre estas esferas. Las políticas públicas se conciben como el resultado de
interrrelaciones e interdependencias entre varias instituciones, grupos e individuos que conforman
una red de influencia mutua y en donde las jerarquías reales no siempre son las que están
formalmente establecidas. El análisis se describe como una metodología descriptiva y de
modelización inductiva de la estructura de relación entre un conjunto de actores. Existen tres
enfoques que tienen que ver con esta concepción: el policy network, el policy community, y las
coaliciones de militantes (advocacy coalitions). Estos enfoques proporcionan modelos de interacción
entre los diferentes actores de la politica pública.
Neoinstitucional: la definición de las instituciones debe incluir las creencias, paradigmas, culturas,
tecnologías, saberes que sostienen, elaboran, contradicen estas reglas y rutinas.
Fuente: Roth (2004)
Autores como Nioche (1997) sostienen de forma complementaria, que un análisis serio de la
política social como política pública, debe incluir tres aspectos básicos: la forma de elaborar
la respuesta a la situación problémica a través de un proyecto, el cómo se ejecutó ese proyecto
28
y cómo analizar los efectos previstos y no previstos de la puesta en práctica. No obstante lo
fundamental es el marco de análisis partir del cual se realice.
Desde el marco de análisis, Bobrow y Dryzer5 argumentan que el análisis de las políticas
públicas se puede realizar desde cuatro perspectivas básicamente: la economía del bienestar,
la elección pública, la estructura social y el procesamiento de la información:
Tabla 2. Perspectivas de Análisis de la Política Pública
Marco de análisis Descripción Autores
La economía del bienestar Implica la aplicación de las
teorías y modelos de la
economía del bienestar para
mejorar la racionalidad y
eficacia de la toma de
decisiones.
Quade. (1976), Stokey. (1978),
Junkins- Smith. (1990), Carley
(1980).
La elección pública Se ocupa de analizar el
comportamiento y desarrollo
del mercado y de las
organizaciones sobre la base de
las teorías económicas y de la
elección racional dentro de la
empresa.
Niskanen (1971), Downs
(1957), Dunleavy (1991)
La estructura social Incluyen el análisis a partir de
la teoría sociológica.
Fuller (1941), Mills (1959),
Becker (1963), Blumer (1971),
Spector (1977), Henshel (1990).
El procesamiento de
información
Es el marco de análisis más
diverso de todos. Este marco
recurre a los siguientes
enfoques: psicología cognitiva,
psicología social, ciencia de las
decisiones, ciencia de la
información, inteligencia
artificial, comportamiento
organizacional.
Lasswell (1930), Simon (1957),
Lindblom (1959), Newall
(1972), Simon (1958),
Campbell (1973), Carroll
(1990)
Fuente: Elaboración propia a partir de Parsons (2007)
Desde el punto de vista procedimental, es clave comprender que el análisis de programas
públicos y sociales se puede realizar a partir de múltiples herramientas, siendo la evaluación
de los programas la más generalizada. La evaluación de programas, a su vez cuenta con
5 Citado en: PARSONS (2007).
29
variaciones de acuerdo al foco de su aproximación y es posible identificar en la literatura al
menos cuatro enfoques que podemos sintetizar en el siguiente esquema. En este gráfico,
hemos divido los enfoques de evaluación básicamente en dos ramas, de acuerdo al sitio que
asumen tanto el individuo sujeto de la intervención como el evaluador de la política durante
el proceso.
Grafico 2. Enfoques de evaluación de proyectos públicos.
Fuente: Elaboración propia.
Por un lado se encuentran los enfoques que evalúan solamente la gestión de la política como
un proceso, y que se tratan más de evaluaciones del modelo con que se interviene: en esta
área, a la izquierda del esquema se ubican el modelo de investigación aplicada de Ander Egg
(2003) y el enfoque de Ballart (1992), cuya diferencia fundamental es que el segundo incluye
la evaluación del proceso desde su interior y no solo es una intervención externa como en el
caso del primero.
PICHARDO (1993) EVALUACION DE IMPACTO SOCIAL
Se evalúa:
Ex ante
Concurrente
Ex post
30
La evaluación como investigación aplicada, se basa en los requerimientos del método
científico. Se trata de un proceso de enjuiciamiento de procesos y de resultados de lo que se
ha hecho, se está realizando o se va a realizar valorándolo y apreciándolo cuantitativamente
y cualitativamente. La evaluación se realiza en alguno de los momentos previstos: el diseño,
la instrumentación o los resultados con criterios puramente orientados a establecer la eficacia
y la eficiencia.
Enfoque de Ballart (1992): divide la evaluación por fases: la conceptualización, la
implementación, la eficiencia o impacto de los programas. Básicamente se concentra en
determinar los efectos de un programa sobre sus beneficiarios para relacionar de acuerdo con
el modelo teórico de la intervención los resultados finales con la forma en que es
administrado el programa y planificada la intervención.
Por otro lado, se encuentran los enfoques orientados a evaluar la intención y sustentabilidad
de la política, donde el individuo beneficiario juega un papel central en la evaluación continua
de la gestión y se han ubicado al lado derecho del esquema: por un lado, se encuentra el
enfoque de evaluación de impacto social y por otro el enfoque de la gestión integral de
programas.
El enfoque de evaluación de impacto social: se trata de revisar los cambios atribuibles a la
política social en tres niveles: los destinatarios de la acción evaluada, el medio institucional
en el que se desarrollan y el contexto de la acción. Sostiene la evaluación como un enfoque
metodológico descriptivo o analítico y que es aplicable en cualquier momento cronológico
Gestión Integral De Programas: tiene un carácter permanente y sistemático que debe operar
como un proceso de aprendizaje institucional, que permita tomar decisiones rápidas y mejorar
los resultados. La evaluación consiste en formular preguntas que se diseñan previamente y
acompañarán todo el proceso, cuyas respuestas se recogerán de forma permanente. La gran
diferencia con otros métodos de evaluación consiste en que en esta, los beneficiarios y otros
actores involucrados en el programa intervengan en la evaluación de forma continua.
31
La finalidad de este tipo de evaluación es verificar el grado de cumplimiento de los objetivos
del programa en términos de eficiencia y eficacia de la inversión social y determinar si
modificó las condiciones de vida de los beneficiarios.
Dadas sus características, este enfoque de evaluación corresponde con una metodología de
gestión en sí misma, debido a que se fundamenta “en el paradigma de la planificación
estratégica, como un proceso que se construye colectivamente, que está orientado acotar la
distancia que media entre la reflexión y la acción, entre la investigación, el conocimiento y
la práctica, y que en definitiva permite comprender mejor los procesos de cambio,
reproducción y transformación en espacios micro y macro sociales.” Siempro (1999).
Existe un quinto tipo de enfoque de evaluación que no hemos incluido en el esquema
presentado y que se denomina evaluación a través del análisis estratégico de programas
sociales, desarrollado por la CEPAL. Este organismo multilateral, ofrece una visión
agrupadora de múltiples teorías y visiones sobre la gestión social, y define la misma como la
función de la producción global del programa que procura transformar los insumos de la
organización en productos, con arreglo a criterios de eficiencia interna e impacto externo
sobre la población destinataria”. Cohen (2005)
Para fundamentar su modelo, La CEPAL, ha construido una matriz de tipos ideales (modelos
de organización y gestión de programas y proyectos sociales) enlazándolas con las
principales corrientes administrativas en las cuales se enmarcan gran variedad de proyectos
sociales ejecutados:
32
Tabla 3. Modelos de organización y gestión de programas y proyectos sociales
Modelo Tipo de gestión Características
De lo burocrático
Esta estructura se
relaciona directamente
con las teorías clásicas de
la administración.
La población es homogeneizada. La estructura de
operación es jerarquizada y se insiste en la
especialidad de las tareas diferenciadas y se controla
a través de la supervisión directa. Existen objetivos
generales y se establecen otros por unidad de
ejecución. Los criterios de medición son aquellos
asociados con eficiencia y eficacia.
Modelo adaptativo
Gestión descentralizada y
participativa. Gerencia
Estratégica
Producto estandarizado para población heterogénea.
Trabajo en equipo como mecanismo de coordinación.
El gerente es más un facilitador que un supervisor. Se
reconoce la incertidumbre y se favorece el aprendizaje.
Modelo de orientación
al usuario (o de gestión
profesional).
Este modelo es la base de
las orientaciones de los
organismos
multilaterales como el
Banco Mundial y el FMI
y es especialmente
referido en los
documentos de la OCDE.
Es aplicable a la combinación de población
heterogénea y productos estandarizados. Se
caracteriza por la prestación personalizada de
productos que entrega el programa. El beneficiario
adquiere un papel protagónico en la evaluación de la
pertinencia y la calidad de los bienes o servicios
recibidos, y su grado de satisfacción es un importante
mecanismo de control y aprendizaje. La organización
del trabajo está estructurada sobre la base de la
demanda
Fuente: Elaboración propia a partir de los conceptos de la CEPAL
33
Para identificar el modelo particular sobre el cuál se desarrolla la gestión social se empieza
con la verificación de su estructura de toma de decisiones, teniendo en cuenta los siguientes
niveles decisionales: 6
Grafico 3. Niveles de toma de decisión. CEPAL.
Fuente: El autor a partir de Cohen & Franco (2005)
Si bien esta clasificación7 podría contribuir a los ejecutores de la gestión social a desarrollar
su acción, no es elemento suficiente para evaluar que los proyectos sociales hayan sido
gestionados de manera tal que respondan a su definición orientada a la satisfacción de las
necesidades de la población. Solo ofrecería un panorama sobre la flexibilidad en la toma de
decisiones y orientaría sobre el modelo de gestión desarrollado. Es por ello, que la evaluación
6 Descrito en detalle en: Cohen & Franco (2005) 7 Otros autores como Ortegón (2008), solo identifican dos grupos (estratégico y operativo) y definen su
entrelazamiento como una serie de pasos consecutivos que se encadenan iterativamente: definición de visión-
definición de objetivos y metas – definición de instrumentos – definición de recursos – definición de
beneficiarios – definición de programas estratégicos – compatibilización entre objetivos y recursos – definición
del esquema de ejecución – definición del esquema de seguimiento – definición del esquema de evaluación y
entrega de resultados – matriz de resultados – identificación de indicadores de seguimiento y evaluación –
jerarquización de los programas – definir techo presupuestario por sectores y regiones – matriz de roles y
responsabilidades – identificación de actores – identificación de problemas y necesidades.
Estrategico: Define la orientación del programa, para lo cual analiza la influencia del contexto sobre la gestión y construye escenarios de futuro a los efectos de tomar hoy las decisiones
considerando el mañana. En este nvel se considera el rendimiento global del programa como una totalidad.
Táctico: Transforma las estrategias elaboradas para alcanzar las metas en programas de acción con objetivos detallados, plazos definidos, metas y
estandares, asigna responsabilidades, fija las lineas de coordinación entre ellos. Se centra en el corto y en el
mediano plazo.
Operativo: Desagrega los procesos en actividades y tareas detalladas entre las que puede distinguirse el
trabajo sustantivo, que significa la prestación directa y la interacción con los destinatarios de los bienes o
servicios y el administrativo normalmente rutinario y repetitivo.
34
de la gestión social requiere un análisis estratégico que muestre las condiciones sobre las
cuales se dio respuesta a las necesidades de los beneficiarios.
Cohen & Franco (2005) en su estudio, advierten que para realizar el análisis estratégico de la
gestión social es necesario describir el modelo de organización y gestión; caracterizar el
programa, analizar las brechas, identificar los nodos estratégicos y los facilitadores y
establecer los senderos estratégicos o propuestas de solución. Sin embargo, nuestro enfoque
requiere de nos ocupemos especialmente de cómo los actores pueden lograr una verdadera
satisfacción de sus intereses a través de los mecanismos de gestión social.
1.1.2 Método de Análisis Estratégico de la Gestión Social
Hemos representado los requerimientos descritos por Cohen & Franco (2005), en el siguiente
esquema:
Grafico 4. Requerimientos del análisis estratégico de la gestión social
Fuente: Elaboración propia a partir de Cohen & Franco (2005)
1. Modelo de organización y de gestión: En este aspecto hay que verificar tres
elementos:
Estructura organizacional: referida a la composición interna (unidades administrativas que
la constituyen) y externa (unidades administrativas que la condicionan. Se busca verificar
los tipos de relaciones e interacciones.
35
Procesos: definidas como actividades lógicamente relacionadas para producir un resultado.
Funciones: en todos los programas sociales existen las funciones de organización, dirección,
programación, ejecución, monitoreo y evaluación.
2. Caracterización del programa: Establecer el marco de referencia a través del cual
se ejecuta.
3. Análisis de brechas: La brecha es la distancia entre el rendimiento programado o
esperado y el realmente logrado. Es un concepto descriptivo que alude a la distancia
existente entre una situación actual y otra deseada. Se determina al efectuar la
comparación entre el diagnóstico y los objetivos del programa con sus productos e
impacto en el marco del modelo de gestión utilizado. Dado que la eficiencia interna
y el impacto externo son las orientaciones centrales que deben guiar la gestión de los
programas sociales, su análisis parte de las brechas existentes en el logro de los
objetivos propuestos. En este sentido, la brecha equivale al problema social que dio
origen y justifica la existencia del proyecto.
4. Los nodos estratégicos: el nodo es la estructura causal que origina la brecha y alude,
por consiguiente, a la explicación de esta. Acordes con las brechas es posible
identificar nodos de eficiencia, de impacto, y los que se relacionan con ambos.
5. Facilitadores: además de los nodos se debe identificar los facilitadores o factores
impulsores para el logro de los objetivos de programa. Ellos pueden ser internos al
proyecto o derivados de condiciones del entorno. Los facilitadores pueden analizarse
al mismo tiempo que se identifican los nodos, lo que permite efectuar un balance
crítico de los aspectos positivos y negativos de la gestión. Para identificar y
caracterizar los facilitadores, hay que definir su ubicación y características. La
ubicación identifica las variables de gestión con las que se asocia un facilitador. Esta
36
puede situarse en tres áreas diferentes: formulación (cuando fue expresamente
considerado en el diseño del programa), gestión (si se originan durante la aplicación)
contexto (si se trata de elementos externos al proyecto que facilitan su gestión y que
así permiten el logro de sus objetivos)
6. Los senderos estratégicos: son las propuestas de solución para los nodos detectados.
Estas tienen dos dimensiones derivadas del nivel de control que detentan los
operadores del programa:
a. Unas son las acciones que pueden implementarse rápidamente en el ámbito
interno, como resultado de tener en cuenta tanto los facilitadores como el
análisis del modelo de gestión y organización.
b. Otro escenario considera la vinculación con los factores que se encuentran
fuera del ámbito de influencia directa del programa, mediante una acción.
1.2 Participación del beneficiario en la gestión social
Los diferentes enfoques de evaluación nos llevan a reflexionar sobre el rol que debe jugar el
beneficiario de la gestión social en el proceso. En este sentido, la participación se refiere
tradicionalmente a “la posibilidad que personas o grupos tienen para influir, hacerse
presentes, en la determinación de la agenda pública y también en la formulación ejecución
y evaluación de las políticas públicas” Lahera (2002)
Tradicionalmente la forma básica de participación es la democracia, sin embargo puede
contener múltiples significaciones. Seller (2009) indica que “desde la gestión social podemos
orientarla en dos vías, el papel otorgado a los individuos en el proceso y los resultados que
37
el gestor social espera obtener de la participación y que es similar a la clasificación para un
nivel más genérico que se muestra a continuación”:
Tabla 4. Participación de los actores de la gestión social.
Papel otorgado por los ciudadanos Expectativas de los gobernantes
El derecho a ser informados La disponibilidad de colaboradores
El derecho a ser consultados La legitimidad política
El derecho a tomar parte La mejora de las decisiones
El fortalecimiento del capital social
Fuente: Brugué, Font, Goma. (2005) citados en Seller (2009)
Esta clasificación vertical del papel otorgado a los ciudadanos, es similar a la elaborada por
la OCDE en 2008:
Tabla 5. Tipos de participación ciudadana
Ofrecer información Consulta Co- producción
Información proporcionada
por los responsables de los
servicios
Dialogo entre ciudadanos y
responsables
Participación activa del
ciudadano en la toma de
decisiones y/o el diseño /
provisión / control de
servicios públicos.
Fuente: Seller (2009)
Este primer tipo (ofrecer información), realmente no puede ser denominado participación, ya
que recibir información es un requisito más no es suficiente para adquirir la capacidad de
entrar en interacción con el gestor de la política.
El segundo tipo (consulta) es un mecanismo para aumentar la legitimidad de la política, pero
requiere que la información sea transparente y es preciso que la información que reciba el
38
beneficiario sea pertinente. En este tipo de relación con el beneficiario, es posible que su
opinión no sea tomada en cuenta.
El tercer tipo, denominado co-producción, implica la voluntad del gestor de incorporar las
opiniones al proceso de gestión social. Se desarrolla a través de herramientas como la
consulta y deliberación o la interacción (transacción). “La idea central es que no funcione
como una “respuesta a”, sino como “una anticipación de”. Una transacción, supone
intercambios circulares, en los que la persona, grupo y entorno se moldean recíprocamente,
se producen procesos de influencia mutua, reformulándose entre sí en un tiempo continuo y
con resultados no predeterminados, es decir donde cualquier sistema influye a los otros”
Seller (2009).
Este tercer tipo, de acuerdo al mismo autor, contiene en sí mismo múltiples formulas
participativas dependiendo de la fase de la gestión en que se desarrolle: “en el diagnóstico,
en las decisiones o en la gestión; que tienen relación directa con el hecho de que los
individuos participen de forma individual, asociativa o mixta (combinación de grupos e
individuos)”:
Tabla 6. Tipología de fórmulas participativas
Tipología de fórmulas participativas Fase Participación asociativa Participación
mixta
Participación de base personal
sectorial territorial intensivo extensivo En el
diagnóstico
Forums.
Mesas
sectoriales
Consejos
consultivos de
entidades a
escala
Planes
estratégicos.
Procesos
participatorios
temáticos
Círculos de
estudio.
Conferencias de
consenso.
Asambleas,
audiencias,
teledemocracia
En las
decisiones
Consejos,
comisiones y
ponencias
sectoriales
Consejos
municipales de
barrio o
distrito. Planes
integrales.
Consejos
territoriales
mixtos. Jurados
Presupuesto
participativo.
Jurados
ciudadanos,
paneles
informativos.
Encuestas
deliberativas.
Referéndum,
consultas
populares,
teledemocracia
39
En la
gestión
Gestión
asociativa de
servicios
municipales
Gestión
asociativa de
centros cívicos
Gestión
compartida de
servicios
Gestión por
voluntariado de
servicios o
programas
municipales
Coproducción
personalizada
de servicios.
Fuente: Seller. 2009.
1.2.1 Criterios de evaluación de la participación
Aunque los mecanismos nombrados pueden incluso estar siendo utilizados por las entidades
actualmente para gestionar los proyectos sociales, no sobra indicar que su validez real
conlleva que una vez desarrollados, se revisen cuatro aspectos fundamentales, señalados por
Harms y Pereyra (2006) y que se recogen a continuación: La máxima inclusión /
representatividad (es decir, que sea toda la ciudadanía la que cuenta con el acceso y no solo
algunos grupos cualificados); funcionamiento deliberatorio, es decir que la discusión se dé
sobre la base de información extensa y diversa; Motivación para participar, los
participantes deben tener certeza de sus propuestas serán tomadas en cuenta y por último
apoyo al bien común, los cuales se desarrollan a continuación:
Criterio 1: Máxima inclusión – representatividad:
Se trata principalmente de verificar que todos los actores posibles tengan la posibilidad de
participación. Es decir que ella, no solo se remita a aquellos actores que por su situación
particular cuentan con la posibilidad de comprender y evaluar la información que reciben. La
posibilidad de acceso debe ser para todos los individuos lo más parecida posible.
Criterio 2. Funcionamiento deliberativo
El mecanismo tiene que poner la información necesaria a disposición de cualquier ciudadano
para permitirle tener el mismo nivel de información que los expertos. Seleccionar, entender
40
y aplicar esta información requiere su tiempo. Así como los prestadores de la política tienen
el tiempo necesario para procesar la información, los ciudadanos deben contar con la misma
posibilidad sin tener que sacrificar su tiempo libre para ello.
Criterio 3. Motivación para participar
Como en todo proceso, la motivación es fundamental. No se puede esperar que los
beneficiarios de las políticas o cualquier otro ciudadano se involucre con un proceso que le
demandará tiempo y esfuerzo sino cuenta con los incentivos apropiados. Muchos de estos
incentivos parten de que los individuos puedan confiar en que su esfuerzo se verá reflejado
en el diseño de la intervención. Existen además otros factores que influyen en la motivación
por ejemplo que el ejercicio cuente con una dinámica orientada a la acción que no permita a
los individuos perder el interés. Es importante que los individuos sientan que participan en
un proceso provechoso y vean resultados tempranos.
Criterio 4. Apoyo del bien común.
Los nuevos mecanismos de toma de decisión son utilizados con frecuencia por relevantes
grupos de presión como invitación para involucrarse. Harms & Pereyra (2006) indican que
una alternativa para evitar que ciertos grupos se acoden y se desestime el interés común, es
la selección aleatoria de los participantes debido a que se impide el acceso a un grupo
específico que pueda distorsionar las decisiones.
De esta manera, para que la participación ciudadana sea efectiva deben generarse
compromisos y condiciones institucionales con interacción social, asociatividad,
deliberación pública, tolerancia y respeto por el pluralismo ideológico, dentro de lo que se
conoce como capital social. Ortegón (2008) plantea cuatro problemas centrales: el número
de actores involucrados, el inevitable sesgo centralizador del gobierno, la dificultad en
garantizar representatividad múltiple y la dificultad para solucionar controversias.
41
Schvarstein (2003), afirma que independientemente de su naturaleza pública o privada, las
organizaciones cuentan con tres estrategias básicas de gestión social: “la asistencia
(satisfacer los mínimos requerimientos legales al menor costo posible), el paritarismo
(establecimiento de relaciones de paridad entre los distintos grupos de interés, relacionados
con el concepto de justicia distributiva) y los proyectos comunitarios (la gestión social se
convierte en un proyecto político que cuestiona). Estas estrategias se asocian con la forma
como nuestros gobiernos, en particular en Latinoamérica, han determinado la forma de
asignación de los recursos en política social y como se ha gestionado tal accionar. 8 El autor
las representa de la siguiente forma:
Tabla 7. Estrategias de gestión social.
ESTRATEGIAS
ASISTENCIA PARITARISMO PROYECTO
COMUNITARIO
Función de
gobierno Sinergia elemental Regulación Trascendencia
Necesidades Recibir Intercambiar Dar(se)
Intereses Técnicos Prácticos Emancipatorios
Ética Yo, sin los otros Yo y los otros Nosotros hacia el proyecto
Valores
culturales Seguridad Solidaridad – equidad Dignidad
Valores
organizacionales Control Cooperación Autonomía
Aprendizaje
Tipo 1 (Revisión de
elecciones dentro de un
conjunto inmodificado de
alternativas)
Tipo 2 (Revisión del
conjunto dentro del cual se
hace la elección)
Tipo 3 (Un cambio correctivo
en el sistema de conjunto de
alternativas entre las que se
hace la elección)
Cambio Conservativo Innovativo Radical
Efecto Clima de seguridad Espacio de libertad Dinámica de progreso
Fuente: Schvarstein (2003)
La estrategia de proyecto comunitario se asemeja a la finalidad misma de la co-producción
definida por otros autores y resulta en el modelo ideal de participación donde el beneficiario
8 El autor establece estas estrategias a partir de las tres funciones que Fauvet y Stefani (1983) le asignan a la
gestión del gobierno (a. la sinergia elemental, que promueve el trabajo en conjunto con los otros y la
coordinación de acciones; b. la función de regulación, la necesidad de armonizar la satisfacción de los
bienestares privados y c. la función de transcendencia). Schvarstein (2003)
42
de la gestión social se entromete completamente en la gestión, de tal modo que los resultados
de cualquier intervención conllevan a la satisfacción de sus necesidades. No hay que olvidar
que en este sentido el beneficiario, también se acomoda a las circunstancias propias que le
impone el entorno. No quiere decir, que la gestión social conlleve directamente a la
satisfacción de las necesidades que dan origen a la gestión social, significa que, el
beneficiario y el prestador definen en conjunto la que en principio resulta la mejor alternativa
de intervención y son conscientes durante todo el proceso de los aciertos y limitaciones y de
esta manera los potencian o reducen significativamente según sea el caso.
1.3 Perfil del emprendedor
1.3.1 Teorías de emprendimiento
Para la mayoría de autores, el emprendimiento como tema de estudio se fundamenta en la
descripción de las capacidades personales de los empresarios inherentes al ejercicio
emprendedor y su contribución al desarrollo económico. Sin embargo es un campo de
conocimiento en el cuál convergen múltiples disciplinas, por lo cual se encuentra un volumen
importante de posturas teóricas sobre el tema.
Los desarrollos teóricos en emprendimiento se concentran en definir al emprendedor a partir
de su rol en la creación de empresas. Tal es el caso, de la mayoría de teorías que vienen desde
el campo de la economía. Desde esta óptica, Crowe (2010) propone tres categorías en las
cuales se pueden enmarcar a los autores, y que ilustran la evolución del significado del
término “emprendedor” desde lo económico: el emprendedor como persona arriesgada, el
emprendedor como asignador de recursos y el emprendedor como innovador. A partir de esta
clasificación y de la compilación de autores elaborada por Rodríguez & Jiménez (2005)
presentamos un resumen de los principales teóricos en el tema, incluyendo una cuarta
categoría que agrupa los autores que visualizan al emprendedor como acelerador del proceso
económico:
43
Tabla 8. Autores representativos en emprendimiento
El emprendedor
como persona
arriesgada
Richard Cantillon (1755) veía al emprendedor como alguien que compra a un
precio conocido pero vende a un precio incierto. Por lo tanto ellos asumían el
riesgo y la incertidumbre del negocio pero conservaban el excedente luego del
pago contractual. El beneficio resultaba de la aceptación de la incertidumbre, y la
función del emprendedor era llevar a cabo estos negocios riesgosos. Es
importante aclarar que en economía el riesgo (se puede asignar una probabilidad
a un resultado) se distingue de la incertidumbre (no se puede asignar una
probabilidad de ocurrencia) pero aquí el término riesgoso incluye a los dos.
Según Knight (1921) un emprendedor es alguien que calcula y luego asume el
riesgo y tiene que manejar la incertidumbre y asumir la responsabilidad de los
resultados positivos como los negativos.
El emprendedor
como asignador
de recursos
Jean-Baptiste Say (1821): Consideró al emprendedor como un organizador de
factores de producción. Éste intercambia recursos económicos (trabajadores,
habilidades, educación y capital) de áreas de poca productividad a áreas de gran
productividad y alta rentabilidad. Esta función de coordinador también contiene
un elemento de riesgo a pesar de que el emprendedor no necesariamente provee
el financiamiento para la empresa. Por lo tanto Say (1821) hace hincapié en la
función del emprendedor de reunir y coordinar los recursos.
Casson (1990): La habilidad del emprendedor es tomar decisiones sobre la mejor
asignación y uso de los recursos y coordinar los recursos escasos. Sugiere que el
emprendedor debe controlar los recursos, generalmente teniendo el capital
necesario para comprarlos. Este emprendedor es un coordinador de recursos, un
negociador y un exitoso arriesgado. Los cambios en el ambiente externo (como
por ejemplo la tecnología, los mercados, etc.) otorgan oportunidades, y el
emprendedor juzgará si toma o no la oportunidad basándose en las recompensas,
el riesgo y la incertidumbre.
El emprendedor
como acelerador
del desarrollo
económico
(Kirzner, 1960, 1971, 1973, 1979 y 1986) Establece que la función empresarial
en el mercado no es fácil de entender, y trata de explicarla mediante lo que
denomina elemento empresarial en la acción individual humana. Él lo define
como el elemento de impulso y perspicacia, que resulta necesario para determinar
los fines a alcanzar y los medios que harán posible la consecución de los mismos.
Para Kirzner, el empresario es quien mueve la sociedad a un estado de no
ganancia (núcleo). Lleva la sociedad de un estado de desequilibrio hacia un estado
de equilibrio, y el equilibrio se alcanza gradual e incrementalmente a medida que
se perciben los distintos precios relativos, lo cual da lugar al arbitraje de recursos
Marshall. Introdujo el concepto de que los factores de producción no son tres,
sino cuatro. A los factores tradicionales: tierra, trabajo y capital, agregó la
organización, y la definió como el factor coordinador, el cual atrae a otros factores
y los agrupa. Él creyó que el entrepreneurship es el elemento que está detrás de
la organización, manejándola. Estableció que los emprendedores son líderes por
naturaleza y están dispuestos a actuar bajo las condiciones de incertidumbre que
44
causa la ausencia de información completa. Al igual que Mill, aseguró que los
entrepreneurs poseen numerosas habilidades especiales y que son pocas las
personas que pueden definirse de esa manera. Sin embargo, reconoció que una
persona puede aprender y adquirir dichas habilidades.
Acs y Szerb (2007), el emprendimiento puede contribuir al crecimiento
económico actuando como un mecanismo que permea la sociedad mediante el
reconocimiento de oportunidades y su posterior comercialización, el
emprendedor es un conducto para la difusión y mercantilización de los
conocimientos.
El emprendedor
como innovador
Joseph Schumpeter (1943). Analizó a los emprendedores como innovadores, es
decir como aquellos que desean cambiar las cosas o hacer las cosas de forma
diferente. Definió al emprendedor como alguien que implementa “nuevas
combinaciones de medios de producción”. Esto puede ser hecho a través de:
introducir nuevos bienes económicos o productos, introducir un nuevo método de
producción o proceso, abrir un nuevo mercado, obtener una nueva fuente de
materias primas o inputs (incluyendo el financiamiento), o cambiar la
organización de una empresa en particular o de una industria. Esto puede ocurrir
en organizaciones con y sin fines de lucro. A pesar de que la innovación es un
componente importante del emprendedor, debe incluir la implementación de una
nueva idea o actividad y no sólo en generar una idea como haría un inventor.
Mill: Este autor de origen británico enfatizó más la importancia del
emprendimiento para el crecimiento económico. Expresó que el desarrollo del
entrepreneurship requiere habilidades no comunes y lamentó la inexistencia de
una palabra en el idioma inglés que tenga el mismo significado que el término
“entrepreneur” en francés (citado en Burnett, 2000).
Peter Mathias (1983) sostiene que relativamente pocos de los nuevos
emprendedores de la revolución industrial del siglo XIX fueron pioneros de
grandes innovaciones o inventos propios, tenían el conocimiento de nuevas
técnicas y pudieron aplicarlas efectivamente para satisfacer las cambiantes
necesidades del mercado. En aquellos días los emprendedores compraban y
transportaban ellos mismos la materia prima y adaptaban su producción al nuevo
mercado masivo, por lo tanto tuvieron un rol importante en la reunión y
administración de recursos diversos. En esa época el acceso al capital era
limitado, y esta era generalmente una característica fundamental del
emprendedor. Es posible constatar que varias de las definiciones de emprendedor
se relacionan al ambiente social y económico del momento en que surgieron.
Drucker (1985) “el empresario innovador ve el cambio como una norma
saludable. No necesariamente lleva a cabo el cambio él mismo. Pero (y esto es lo
que define al empresario innovador) busca el cambio, responde a él y lo explota
como una oportunidad”
Drucker (2002). Define al entrepreneur como aquel empresario que es innovador,
y al entrepreneurship como el empresariado innovador. Esclarece la común
confusión de creer que cualquier negocio pequeño y nuevo es un emprendimiento,
y que quien lo lleva a cabo es un emprendedor, destacando que, aunque quien
abra un pequeño negocio corra riesgos, eso no quiere decir que sea innovador y
represente un emprendimiento
Kunkel, (1991). La actividad emprendedora es la gestión del cambio radical y
discontinuo, o renovación estratégica, sin importar si esta renovación estratégica
ocurre adentro o afuera de organizaciones existentes, y sin importar si esta
renovación da lugar, o no, a la creación de una nueva entidad de negocio”
45
Mises. (1949) “Tiene una visión del empresario muy similar a la presentada por
Schumpeter, para él, la actividad empresarial parte de la detección entre lo que se
hace habitualmente y lo que debería hacerse. Así decide una acción que dirige
consciente y exitosamente el flujo de los recursos (lo que Porter denominará
cadena de creación de valor) hacia la satisfacción de las necesidades del
consumidor. Estar alerta ante toda oportunidad abierta es el distintivo del
‘emprendedor’ que descubre los errores e ineficiencias y procura eliminarlos. El
emprendedor descubre lo que otros han pasado por alto” (citado en Rodríguez de
Rivera, 1999). Para Mises (1949), “Empresario quiere decir un hombre que actúa
de acuerdo con los cambios que tienen lugar en los datos del mercado”.
Mises (1949), identifica tres características que considera esenciales para que un
individuo sea considerado emprendedor. La primera tiene que ver con que el
emprendedor es un evaluador. Es decir que calcula beneficios y costos numéricos,
en base a los mismos realiza elecciones, y al realizarlas descubre nuevas
necesidades y nuevos factores de producción. A su vez, construye imágenes de
las futuras acciones que pueden realizar otros individuos que actúen en el
mercado. La segunda característica es la de empresario, el emprendedor construye
la decisión de cómo utilizar los factores, para producir mercaderías. Por último,
rescata que el emprendedor “soporta” la incertidumbre, ya que actúa en función
del futuro y no conoce exactamente las acciones que otros seres humanos llevarán
a cabo.
Stevenson (1985). “Emprender es perseguir la oportunidad más allá de los
recursos que se controlen en la actualidad”. Un emprendedor, además de ser
creador de una empresa, busca continuamente la oportunidad y crear nueva
riqueza. Él considera imprescindible que el empresario innove para encuadrarlo
como emprendedor. Y cabe aclarar que innovar no implica sólo crear un nuevo
producto, puede innovarse al crearse una nueva organización o una nueva forma
de producción o una forma diferente de llevar adelante una determinada tarea,
etc. Realiza la diferenciación entre emprendedor exitoso (cultura emprendedora,
estado dinámico, estrategia según la percepción de la oportunidad) y ejecutivo
exitoso (cultura administrativa, estado estático, estrategia en función de recursos
que controla)
Fuente: Elaboración a partir de Crowe (2010) y Rodríguez y Jiménez (2005)
Veciana (1999) clasificó algunos de estos enfoques teóricos en cuatro grupos, partiendo de
la naturaleza de la acción del emprendedor:
Tabla 9. Clasificación de enfoques en emprendimiento
Enfoque
económico
Enfoque
psicológico
Enfoque socio
cultural o
institucional
Enfoque
gerencial
Micro (Nivel
individual)
La función
empresarial como
cuarto factor de producción.
Teoría de los
rasgos de
personalidad
Teoría de la
marginación.
Teoría del rol. Teoría de redes.
Teoría de la
eficiencia
46
Teoría del
beneficio del
empresario
Teoría psico-
dinámica de la
personalidad del
empresario
Teoría del
comportamiento
del empresario
Modelos del
proceso de la
creación de
empresas
Meso (Novel de
empresa)
Teoría de los
costos de
transacción
Teoría de redes
Teoría de la
incubadora
Teoría
evolucionista
Modelos del éxito
de la nueva
empresa
Modelos de
generación y
desarrollo de
nuevos proyectos
innovadores
Macro (Nivel
global de la
economía)
Teoría del
desarrollo
económico de
Shumpeter
Teoría del
empresario de
Kirzner
Teoría del
desarrollo
económico de
Weber
Teoría del cambio
social
Teoría de la
ecología
poblacional
Teoría
institucional.
Fuente: Veciana (1999)
Para efectos del presente trabajo, nos interesa establecer cuál es la relación de las teorías con
lo que se denomina en nuestro país emprendimiento de subsistencia, concepto asociado a la
asignación de recursos del Estado en poblaciones con escasos recursos. Es por ello que
tenemos que revisar autores que nos acerquen a la óptica de emprendimiento utilizada por
los determinadores de política pública. En este sentido, autores como Alan Gibb (1982) y
Timmons (2009), desarrollan los modelos que resultan ser recurrentemente nombrados por
los entes gubernamentales en sus presentaciones.
Gibb y Richie (1982), formalmente identifican y analizan de la siguiente manera las etapas
que sigue el emprendedor para crear una empresa: adquisición de la motivación y la idea de
negocio, validación de la idea, definición de la escala de operación, identificación de los
recursos necesarios, negociación y entrada al mercado, nacimiento y supervivencia de la
47
empresa. Realizan un aporte importante en la comparación de enfoques que analizan el
surgimiento de la motivación emprendedora y que se presenta a continuación:
Tabla 10. Comparación de enfoques de la motivación emprendedora
El enfoque del “azar” en la
emergencia (innato)
El enfoque de la “ingeniería”
social en la emergencia
(adquirida)
Formación de la
motivación básica
Asume que es innata y determinada
en la niñez
Asume que es el resultado de un
rango general de influencias a
través de la vida (clase social,
familia, educación, carrera, etc.)
Influencias durante la
vida adulta sobre el deseo
de transformarse
empresario
El deseo viene desde adentro. Es
una consecuencia de la
personalidad.
Es el resultado de la interacción
con otros.
Adquisición de nuevas
ideas de negocio
Explicada por la suerte, fortuna,
destino, así como las características
personales dadas.
Explicadas como un proceso
continuo con un cierto grado de
regularidad y predictibilidad de
acuerdo a los conocimientos del
individuo y el rango de situaciones
sociales en el que se desenvuelve.
Filosofía de la
intervención asociada
Dado que la creación de empresas
implica una “selección natural” la
intervención se vuelve
esencialmente marginal. La
actividad es, por lo tanto,
direccionada hacia la remoción de
obstáculos del ambiente tales como
los impuestos.
Cree que la intervención social y
el ambiente pueden activar al
individuo hacia los fines deseados.
Fuente: Gibb y Richie (1982)
Timmons (2009), asegura que el auge del emprendimiento se liga a los últimos 30 años de
desarrollo económico y se manifiesta particularmente con la generación de nuevas empresas
y el crecimiento en el surgimiento de innovaciones radicales. Tiene que ver también con el
cambio de mentalidad en la manera cómo se perciben a sí mismos los individuos en el
desarrollo de su actividad profesional más allá de la dificultad de encontrar empleo estable.
La Mesa Nacional de Emprendimiento (2012), indica que se reconocen básicamente dos
categorías de emprendimiento: Por necesidad y por oportunidad. El emprendimiento por
necesidad es definido en la política nacional de emprendimiento, como aquel generado por
48
individuos que al momento de tomar la decisión de poner en marcha una empresa no
disponían de otras oportunidades de trabajo, por lo que esta es su única opción de generar
ingresos. Se divide en dos: Emprendimiento de subsistencia y tradicional.
El emprendimiento por Oportunidad, se define como emprendimientos creados por
individuos que al momento de tomar la decisión de poner en marcha una empresa tenían
pleno conocimiento del entorno y vislumbraron la oportunidad, seleccionando esta opción
frente a otras posibilidades de generación de ingresos que tenían como alternativas. De la
misma manera se divide en dos subcategorías: emprendimiento dinámico y de alto impacto.
La siguiente tabla muestra las principales diferencias entre las subcategorías de
emprendimiento:
Tabla 11. Categorías de emprendimiento
EMPRENDIMIENTO POR NECESIDAD EMPRENDIMIENTO POR OPORTUNIDAD
SUBSISTENCIA TRADICIONAL DINAMICO ALTO IMPACTO
Auto empleo.
Dirigidos a generar
ingresos diarios para
vivir. Poco valor
agregado.
Empresas con
excedentes. Potencial
de crecimiento gracias a
la organización
empresarial.
Empresas con potencial
de convertirse en
mediana empresa en poco
tiempo. Son capaces de
reinvertir.
Empresas con
capacidad de
transformar y
dinamizar las
economías a través de
la innovación.
Crecimiento rápido y
sostenido.
Inversión inferior a los
$25 millones de pesos
Inversión proyectada
inferior a $100 millones
Inversión inicial superior
a los $100 millones
Inversión inicial
superior a $100
millones
Pocos excedentes
económicos
Sectores con pocas
barreras de entrada
Innovadoras. Cambia la
forma de hacer los
negocios.
Enfocada a tener
ventas por encima del
promedio de la
industria
Productos de
imitación, de bajo
costo, poca calidad.
Productos o servicios
sin diferenciación. Uso
de tecnologías simples
Intensivas en
conocimiento, propuestas
de valor diferenciadas
orientadas a mercados
internacionales.
Implementación de
prácticas de gestión
del conocimiento,
talento humano y
gobierno corporativo.
Informalidad y
vinculación familiar
Generalmente
formalizadas. Empleo
Equipo de
emprendedores con
experiencia laboral
Empleados con
ingresos superiores al
49
de mano de obra
calificada
previa o formación
universitaria.
Implementan procesos de
protección de marca
promedio de la
industria.
Ventas anuales
inferiores a $50
millones antes del año
3.
Ventas anuales
superiores a $50
millones antes de año 3
Ventas anuales
superiores a los $400
millones antes del año 3
y los $4.000 millones
antes de 10 años
Ventas superiores a
los $10.000 antes del
año 10
Fuente: El autor a partir de los resultados de la Mesa de Emprendimiento (2012)
De la misma manera, se han caracterizado los perfiles emprendedores así:
Emprendedores Potenciales: Son aquellos individuos que tienen los conocimientos,
las habilidades y el deseo de poner en marcha una idea de negocio, pero aún no han
materializado esa idea.
Emprendedores Nacientes: Aquellos involucrados en la puesta en marcha de una
empresa hasta tres meses, ya sea como autoempleados o en combinación con otro
trabajo.
Nuevos empresarios: Aquellos cuyas empresas tienen entre 3 y 42 meses de
funcionamiento, es decir realizando pago de salarios a una persona adicional al
propietario o a sí mismo, ya sea como auto empleo o en combinación con otro trabajo.
Empresarios establecidos: Aquellos que tienen más de 42 meses realizando pago de
salarios. A partir de este periodo se considera que una compañía está en fase de
aceleración.
La generación de estas empresas dinámicas y de alto impacto depende de la confluencia de
tres factores fundamentales: el emprendedor, la oportunidad y los recursos. Timmons los
relaciona de la siguiente manera:
50
Grafico 5. Modelo de Timmons sobre el proceso emprendedor
Fuente: Timmons (2009)
En América Latina, particularmente, las debilidades de la actividad emprendedora tal como
lo señalan Angelelli & Prats (2005) están asociadas con la menor capacidad para generar
empresas dinámicas, más que con la ausencia o no de la motivación para iniciar el ejercicio
empresarial propio. Esta deficiencia, no ha sido expresa en los objetivos del fomento a la
empresarialidad:
Tabla 12. Objetivos de política BID
Población meta Objetivos de corto plazo
(3 a 4 años)
Objetivos de mediano y largo
plazo ( 5 a 10 años)
Población en general Difundir la cultura
emprendedora
Acelerar el crecimiento
económico
Aumentar el empleo.
Fortalecer y diversificar el
sector productivo.
Desarrollar sectores
estratégicos.
Reducir la pobreza.
Aumentar la inclusión social.
Población adulta con
motivación emprendedora
Fomentar la creación de
empresas
Empresas de reciente
creación
Favorecer la supervivencia y
el crecimiento de las nuevas
empresas
Fuente: Angelelli & Prats (2005)
Plan de negocio Recursos Oportunidad
Equipo
Creatividad Liderazgo
Comunicación
Incertidumbre
Ambigüedad Fuerzas exógenas
Contexto del mercado de capitales
Brechas
51
1.3.2 Perfil del emprendedor sujeto de la gestión social
El sujeto emprendedor de la gestión social, no es un emprendedor que naturalmente llegue a
ser considerado como tal por vocación, por el contrario, en la mayoría de los casos es un
individuo obligado a esta opción por no encontrar en el entorno las condiciones necesarias
para su desarrollo laboral y que es probable que no se reconozca a sí mismo como empresario.
Son generalmente eventos externos a su voluntad y generalmente negativos, los que le
motivan desarrollarse de manera independiente, por ejemplo, un despido, crisis personales,
migraciones, etc, pero que dependen de un entramado de relaciones para que lleguen a
concretarse, de hecho es muy seguro que una vez estas condiciones negativas que dan origen
al emprendimiento sean superadas, exista una mayor propensión del individuo a abandonar
su negocio. Luna (2015).
En este sentido muchas de las capacidades atribuidas al emprendedor por oportunidad, como
el ser asignador de recursos, la capacidad de innovar y la aceleración del proceso económico,
son difusas para este individuo y se desarrollan solo como resultado de un proceso de largo
tiempo, donde el individuo se reconoce a sí mismo como empresario. Sin embargo, no hay
que olvidar que el fundamento de considerar el emprendimiento como parte del que hacer de
la gestión social radica precisamente en la convicción de que las habilidades gerenciales
pueden ser parte de un proceso de aprendizaje y en este orden que la gestión social está
orientada a impulsar ese proceso individual de reconocimiento.
El emprendedor por necesidad puede verse como un tomador de riesgos en el sentido estricto.
Para caracterizarlo dentro de la gestión social es imprescindible verlo de igual forma desde
los diversos enfoques principalmente con aquellos asociados a la psicología y la cultura. En
este nivel de la gestión social, el imperativo de subsistencia, es más importante dimensionar
cuáles son los componentes que hacen a un emprendedor desarrollarse., teniendo en cuenta
que las empresas que no encuentran más oportunidades de empleo registran menor tiempo
52
de supervivencia que aquellas creadas por personas con otras motivaciones (Abdeselam et
al. 2004; Block & Sandner, 2009 En: Morales 2015)
Filion (1991) define al emprendedor como visionario. Es una persona capaz de aprender con
el tiempo a identificar oportunidades de negocio basado en su sensibilidad y en el nivel de
riesgo asociado a sus decisiones. Esta visión se genera en dos niveles: dónde quiere llevar su
producto o servicio en términos del mercado y la empresa que requiere para llegar a ese
escenario imaginado. Esta definición del emprendedor lleva a reflexionar sobre si a pesar
de que el emprendedor sujeto de la gestión social puede no tener vocacionalmente las
condiciones, la intervención misma debe llevarlo a reconocerse en el futuro como generador
de bienestar para sí mismo y su entorno.
Si queremos caracterizar esa visión, en términos de este planteamiento, hay que comprender
al emprendedor como resultado de sus experiencias, valores, modelos cercanos, experiencia
laboral, grado de educación, autopercepción, los cuales marcarán sus decisiones y desde allí
tener presente que este emprendedor está limitado por esos mismos condicionamientos a
generar ingresos de subsistencia, lo cual resulta ser su motivación principal y a partir de ella,
integra los demás elementos que señala Filion (1991), le permiten proyectarse a futuro en
términos de energía, liderazgo y relaciones.
La visión del individuo como emprendedor entonces es resultado de lo que conoce y las
decisiones que puede tomar con esta información que le brinda su entorno y sus propias
capacidades. Es por ello que para integrar la visión del emprendedor en un programa de
gestión social es requisito establecer cuáles son las características individuales que le
permiten reconocerse como participante, es decir establecer cuál es la dimensión que el
proyecto emprendedor tiene para el individuo en términos de su interacción con otros.
Desde la perspectiva sociológica y sicologica, existen algunas características asociadas al
emprendedor en dos dimensiones: Exploración e innovación y gerencia y persistencia, las
cuales alineados con cuatro factores: planeación, innovación, implementación y poder. Estas
53
características son las que definen al emprendedor en las etapas de desarrollo de su negocio
y se pueden resumir según Oliveira (2014) así:
Desde la dimensión de la Exploración e innovación, se encuentran: a. desde la planeación: el
establecimiento de metas, la búsqueda de información y la capacidad de realizar planificación
y monitoreo y b. Desde la innovación: la creatividad y capacidad de innovar.
Desde la dimensión de la gerencia y persistencia, se encuentran a su vez dos factores: a.
Implementación, donde los comportamientos asociados son la búsqueda de oportunidades, la
iniciativa, la persistencia, la toma de riesgos y b. el empoderamiento, desde donde se
reconocen comportamientos como la persuasión, establecimiento de redes, el liderazgo, la
independencia y la autorealización.
Estos comportamientos asociados definen la manera como el emprendedor establece esa
visión que le permitirá desarrollarse. La gestión social del emprendimiento, se desarrolla
entonces, para ayudar al emprendedor a encontrar esa visión y desarrollar las habilidades y
comportamientos que le permitan llevarla a cabo, tradicionalmente se ha orientado la mejora
en la capacidad técnica, el impulso inicial al desarrollo de pequeños negocios y al desarrollo
de la mentalidad empresarial.
Desde otra perspectiva, el emprendedor sujeto de la gestión social también va cambiando y se va
desarrollando más en el sentido de lo que hoy día se conoce como emprendedor social, que es aquel
que tiene una profunda preocupación por el desarrollo no solo individual sino de su propia
comunidad. En términos de Brouard (2010), algunas características fundamentales de los
emprendedores sociales son:
1. Para el emprendedor social la motivación nace de una experiencia colectiva, para el emprendedor
económico nace de su propia energía y habilidad personal.
54
2. El desarrollo de capacidades es lo fundamental, en el emprendimiento económico lo importante es
generar ganancia y financiamiento.
3. Su perspectiva de éxito es de largo plazo y proyecta su sostenibilidad del mismo modo.
4. Sus productos y servicios están limitados por su visión, para el emprendedor económico no existe
ninguna limitación al número de productos o diversidad de servicios que puede ofrecer.
5. Los proyectos son un medio y los beneficios se reinvierten.
El emprendimiento social, es un conjunto de actividades y procesos para crear y mantener el
valor social (Brouard, 2010), y proporciona un marco en el que los individuos pueden apoyar
o participar en un sistema de gobierno cuyos principales objetivos son sociales no política
(en el sentido del sistema de decisión política) o fundamentalmente económicas (aunque las
actividades económicas pueden ser realizadas por una empresa social). Desde el punto de
vista de la gestión, este tipo de emprendimiento es una oportunidad para que otros ciudadanos
expresen su participación bajo diversas formas organizacionales.
1.4 Gestión social del Emprendimiento y Política Pública en Colombia
En Colombia, la política pública, a través de la ley 1014 de 2006, ha definido el
emprendimiento como: “el conjunto de personas, variables y factores que intervienen en el
proceso de crear una empresa. Una manera de pensar y actuar orientada hacia la creación de
riqueza. Es una forma de pensar, razonar y actuar centrada en las oportunidades, planteada
con visión global y llevada a cabo mediante un liderazgo equilibrado y la gestión de un riesgo
calculado, su resultado es la creación de valor que beneficia a la empresa, la economía y la
sociedad”.
De acuerdo con esta definición se considera en la política nacional de emprendimiento, que
el Estado tiene tres responsabilidades claves: (i) promotor de la alianza público-privada
académica, (ii) facilitador de las condiciones para el emprendimiento y (iii) desarrollador de
la dimensión local, regional, nacional e internacional del emprendimiento. Para el
cumplimiento de ellos, la política de Emprendimiento del país plasmada en la ley 1014 de
55
2006, ha comprometido al Ministerio de Comercio, Industria y Turismo con tres objetivos
estratégicos: 1) facilitar la iniciación formal de la actividad empresarial, 2) promover el
acceso a financiación para emprendedores y empresas de reciente creación y 3) promover la
articulación interinstitucional para el fomento del emprendimiento en Colombia y articularlos
con dos ejes transversales que son : 1) fomento de la industria de soporte “no financiero”,
que provee acompañamiento a los emprendedores desde la conceptualización de una
iniciativa empresarial hasta su puesta en marcha y 2) promover emprendimientos que
incorporan ciencia, la tecnología y la innovación9.
Para el logro de estos objetivos, en el año 2009, Colombia inició el proceso de identificación
y concertación entre los diversos actores asociados al fomento empresarial bajo la forma de
la mesa nacional de emprendimiento cuyo propósito básico es alcanzar un mayor impacto
regional y nacional, estableciendo canales de comunicación directa, evitando la duplicidad
de esfuerzos, contradicciones en la oferta, armonizando instrumentos, cubriendo sectores
desatendidos, reduciendo costos de transacción e integrando los actores en un solo sistema
que responda a los desafíos en materia de emprendimiento; y que es lo que conocemos
actualmente como el Ecosistema Emprendedor.
El proceso de consolidación de una política pública en materia de emprendimiento es
relativamente reciente en nuestro país. La primera acción concreta aparece en 2002 con la
creación del Fondo Emprender y en 2003 con la aparición de las incubadoras de empresas.
Sin embargo, el soporte jurídico para el fomento al emprendimiento solo se da en 2006 con
la promulgación de la ley 1014 que da origen a las redes regionales y a la red nacional de
emprendimiento y que dan como resultado en 2009 el documento de política nacional de
emprendimiento.
En el periodo entre 2010 y 2013, se avanza significativamente en la ejecución de programas
de fomento gracias entre otros a los recursos asignados a través de la ley 1429 de 2010 y el
9 Enumerados de acuerdo con el texto de la ley 1014 de 2006.
56
acto legislativo 05 de redistribución de regalías. Para 2011, Colombia cuenta con 32 redes
regionales de emprendimiento y 24 Fondos de capital privado constituidos; en 2012, ya
existen 9 redes de ángeles inversores y en 2013 se constituye el Programa Nacional de
Microfranquicias.
1.4.1 El Ecosistema Emprendedor Colombiano
En el mundo, los ecosistemas de emprendimiento son esos espacios en donde un grupo
heterogéneo y multidisciplinar de empresas y personas se encuentran para generar y poner
en marcha emprendimientos, algunos de estos actores tienen el papel fundamental de
orientar, apoyar y guiar desde la perspectiva logística, empresarial y financiera y/o la tarea
de innovar para la generación de nuevos productos o servicios. Los ecosistemas de
emprendimiento son lugares, a lo largo y ancho del mundo, que se han convertido en
incubadoras de negocios, ofreciéndoles a los participantes la concreción de ideas y a través
de estas la generación de negocios en búsqueda de ingresos económicos. Es importante
también tener en consideración que, sin una revisión exhaustiva, se percibe que los países
con mayor número de ecosistemas consolidados de emprendimiento tienen a su vez un mayor
grado de desarrollo económico y social. En general los ecosistemas de emprendimiento se
han convertido en un soporte para la generación de innovación y empresas redundando en el
desarrollo económico y social en los países en donde estos se han logrado consolidar.
El siguiente grafico publicado por IMPACT-A10 en su informe 2013 sobre el panorama del
Ecosistema de Emprendimiento en Bogotá, resume la clasificación de los distintos papeles
de las entidades de un ecosistema emprendedor genérico, según la cadena de
emprendimiento:
10 IMPACT-A es un programa creado en 2011 por la Fundación Endeavor Colombia, Corporación Ventures,
Compartamos Colombia, Fundación Avina, Fundación Bavaria, La Cámara de Comercio de Bogotá y la
Facultad de Administración de la Universidad de los Andes.
57
Grafico 6. Roles institucionales en el ecosistema emprendedor.
Fuente: IMPACT-A (2013)
En el Ecosistema Emprendedor Colombiano se han identificado no solo el conjunto de
instituciones públicas y/o privadas que actualmente cuentan con alguna acción concreta en
materia de apoyo al emprendimiento, sino que además ha segmentado estos esfuerzos
cruzándolos tanto como la etapa en que se encuentre el empresario como su propio perfil.
Para el caso de nuestro país, debido al volumen de actores que intervienen, la mesa de
emprendimiento ha dividido la etapa de conceptualización en tres (sensibilización,
identificación y formulación) y ha combinado la etapa de crecimiento y fortalecimiento bajo
lo que se denomina aceleración.
58
Grafico 7. Ecosistema emprendedor colombiano
Fuente: Mesa de emprendimiento (2012).
Para el correcto funcionamiento de un ecosistema emprendedor es imprescindible desarrollar
una oferta de financiamiento apropiada para las necesidades a lo largo de las diferentes etapas
del proceso de desarrollo emprendedor. El esquema nos indica en color rojo todas aquellas
áreas desatendidas institucionalmente en materia de recursos y da cuenta de la
“especialización” institucional en las fases de sensibilización, identificación y formulación
de la idea de negocio, dejando el fomento público de la puesta en marcha y la aceleración
empresarial en muy pocos segmentos de la población. En estas etapas, el empresario debe
hacer uso de los capitales privados, desafortunadamente en la mayoría de los casos no cuenta
con el conocimiento sobre sus conveniencias o no en cada caso particular.
59
Grafico 8. Etapas de desarrollo emprendedor.
ETAPAS DE DESARROLLO DEL EMPRENDIMIENTO
Alt
ern
ati
va d
e fi
na
nci
am
ien
to
SENSIBILIZACIÓN IDENTIFICACIÓN FORMULACIÓN PUESTA EN MARCHA ACELERACIÓN
Ahorros personales, familiares y amigos
Concursos y capital
presemilla
Servicios financieros
tradicionales
Capital
semilla
Ángeles
inversionistas
Capital de riesgo
Capital
privado
Mercado de
capital
Fuente: Mesa nacional de emprendimiento (2012)
Es por ello, que el objetivo de la política de emprendimiento, en su componente de
financiación, es generar las condiciones necesarias para promover una cultura de inversión y
facilitar el acceso al financiamiento por parte de emprendedores y empresas de reciente
creación.
60
Según el tipo de emprendimiento y la etapa del proceso de desarrollo empresarial en que se
encuentre, se han desarrollado diferentes instrumentos para atender las necesidades de
financiamiento, como:
1. Promover el desarrollo de fondos de capital semilla y de riesgo en etapa temprana.
2. Fomentar el desarrollo de redes de inversionistas y ruedas de inversión para
financiamiento de empresas en etapa temprana.
3. Promover el desarrollo de fondos de capital de riesgo y de fondos de capital privado.
4. Promoción del acceso a servicios financieros (Banca de las Oportunidades).
5. Entorno y regulación para promover el acceso a servicios financieros.
6. Soporte a oferta y demanda de servicios financieros.
7. Apoyo a la Red de Banca de las Oportunidades.
1.4.2 Emprendimiento en el Distrito Capital
De acuerdo con el informe del Global Entrepreneurship Monitor para Bogotá - GEM (2012-
2013) la ciudad muestra los mejores resultados comparados con el resto del país y con la
mayoría de las ciudades de América latina. Algunas de las cifras más interesantes que
presenta el informe son las siguientes:
▪ En Bogotá son creadas diariamente en promedio 150 empresas. Es la ciudad del país
en la que más empresas son creadas cada año, 54 mil en promedio, y tiene el mayor
porcentaje de nuevos emprendedores, 7.8%.
▪ Bogotá aumentó el porcentaje de emprendedores que tienen como motivación la
oportunidad y que buscan incrementar sus ingresos o aumentar su autonomía
personal, de 27.6% en 2011 a 35.7% en 2012. La Capital obtuvo una tasa de actividad
emprendedora (TEA) de 20,5%, por encima de la de todo el país que es de 20.1%. La
TEA mide cuantas personas están creando empresa en una región. Las personas
representadas por esta tasa son las que llevan al menos tres meses trabajando en un
61
proyecto de emprendimiento y hasta tres años pagando salarios en una nueva
empresa.
▪ Es la ciudad con el mayor porcentaje de empresarios establecidos, con una tasa de
8,1%, superior a la nacional (6.7%).
▪ Los servicios y el comercio concentran el 68% del número total de empresas. La
manufactura tiene un 12% y la construcción un 5%.
De acuerdo con el GEM (2013), Bogotá es la ciudad del país que tiene el mayor número de
emprendedores dispuestos a establecer sus empresas en actividades de alto impacto para el
desarrollo de la ciudad, como los servicios personales y empresariales, las comunicaciones,
y la actividad financiera e inmobiliaria.
En cuanto a las etapas del desarrollo emprendedor, Bogotá se destaca porque tiene una tasa
de intención de emprendimiento del 57.5%, superior a la de otros países latinoamericanos
como Ecuador (54.3%), Brasil (37.3%) o Uruguay (24.3%) y una tasa de empresarios
establecidos del 8.1%, superior a la de Chile (7.8%), Uruguay (5%) y México (4.7%).
Con respecto a la calidad del emprendimiento, en Bogotá aumentó el porcentaje de
emprendedores que tienen como motivación crear empresas por oportunidad de negocios y
que buscan incrementar sus ingresos o aumentar su autonomía personal, de 27.6% en 2011 a
35.7% en 2012.
La intención de emprender, medida como las personas que piensan crear una empresa en los
próximos tres años, es más alta en Bogotá que en otras capitales de América Latina. Según
el estudio, el 58% de los emprendedores bogotanos manifiestan la intención de iniciar una
62
empresa en los siguientes tres años y el 30% consideran que el miedo al fracaso no es un
factor que les impediría realizar su empresa.
En cuanto a la motivación para emprender, el estudio estableció que los emprendedores
hombres presentan una mejor calidad del emprendimiento ya que el 71% expresa que su
motivación para emprender se debió a una oportunidad, mientras que en el caso de las
mujeres fue de 66%.
Tabla 13. Características del Emprendimiento en el Distrito Capital.
Composición etaria Nivel educativo
En Bogotá el grueso de la población
emprendedora se concentra en las edades
que van de 25 a 34 años. Por su parte, los
emprendedores bogotanos entre los 18 a 24
registran una de las más bajas
participaciones (14%) en comparación con
otras ciudades de América Latina, como es
el caso de Río de Janeiro (30%) y Sao Paulo
(28%).
Por su parte, el rango donde se presenta la
mayor motivación para emprender por
oportunidad está entre los 25 a 34 años. El
77% de la motivación para emprender en
este grupo es por oportunidad. En el resto
del país la motivación para emprender está
por debajo del 70%.
Bogotá se ubica como una de las ciudades
con mayor nivel de emprendimiento (25%)
generado por personas con nivel educativo
de secundaria y superior, frente a ciudades
como Río de Janeiro (8%), Sao Paulo (3%)
y Quito (1.4%).
En Bogotá hay una relación directa entre el
nivel educativo y la mayor calidad de la
actividad emprendedora, en la medida en
que los emprendedores profesionales y con
posgrado representan el 69% y el 89%
respectivamente de emprendimiento por
oportunidad.
Formalidad Actividad económica
En Bogotá, para el año 2009, una cuarta
parte de las empresas que se crean nacen
desde la formalidad. El resultado es muy
superior al presentado por Colombia en
2008, en donde sólo el 16% de las empresas
que se crean se formalizan. Además el 63%
de las empresas de Bogotá se formalizan
después de cumplir 3 años y medio de vida.
Los nuevos emprendimientos se están
generando en el sector de servicios de
consumo (comercio) y en el sector de
transformación (industria). En este último
caso el porcentaje de creación de nuevos
emprendimientos de Bogotá (32%) está por
encima de la de Colombia (22%).
63
Las empresas que superan los tres años y
medio de vida son en su mayoría pertenecen
al sector de transformación (48%) y de
servicios de consumo (40%).
Tecnología Innovación
El porcentaje de las nuevas empresas de los
emprendedores bogotanos utilizan mayor
tecnología de punta (16%) que el resto de
Colombia (12%) y que los países cuyas
economías están impulsadas por la
eficiencia como Rusia, Rumania, Croacia,
Sudáfrica, Panamá, Uruguay, Argentina y
Chile, entre otras (11%).
Según el estudio GEM el indicador de
innovación es superior en las empresas
nuevas, frente a las ya establecidas. En el
caso de Bogotá (35%), la ciudad se ubica
por encima de Colombia (16%) y de países
latinoamericanos como Argentina, Brasil,
Ecuador y Uruguay (que no superan el
25%).
Así mismo, el informe GEM establece que
el nivel de innovación está directamente
relacionado con el nivel educativo, siendo
las personas que han hecho postgrados los
más innovadores.
Recursos para crear empresa Generación de empleo
La mayoría de empresas tanto de Bogotá
como de Colombia se crean con una
inversión de $10 millones. Sin embargo, el
promedio del monto requerido para crear
una empresa en Bogotá es de $43 millones,
mientras en Colombia es de $31 millones.
En Bogotá el mayor número de empresas se
crea por un valor cercano al promedio
(65%) y en el país solo el 19% se crea por
un valor cercano al promedio.
De esa inversión 49% son ahorros, 14%
dinero familiar, 20% créditos bancarios y
6% ayuda de amigos
Estos resultados evidencian que los
emprendedores bogotanos tienen mayor
acceso e información a programas de
financiamiento y líneas de crédito. Según
los resultados de la encuesta el 33% de la
financiación proviene de las entidades
financieras, aunque sigue primando la
Los emprendedores de Colombia y Bogotá
tienen la mayor expectativa de generación
de empleo (más de 10 puestos de trabajo)
actual o en los próximos cinco años, siendo
del 22% y 20% respectivamente, frente a
economías latinoamericanas como Brasil,
Panamá, Uruguay, Ecuador, Chile y Perú
que no superan el 18%.
64
financiación por parte de personas cercanas
al emprendedor (34%).
Internacionalización Apoyo al emprendimiento
Según el informe GEM, los emprendedores
de países como Colombia, Croacia y
Rumania y las ciudades de Shenzen y
Bogotá tienen un mayor grado de
internacionalización tanto en sus nuevas
empresas, como en las ya existentes, en la
medida en que consideran que más del 75%
de sus clientes están en el exterior.
El GEM concluye que los emprendedores
bogotanos están ampliando sus mercados y
miran con confianza al mercado externo, el
porcentaje de emprendedores en Bogotá que
afirman que están exportando aumentó de
16,9% en 2010 a 22% en 2012.
Cerca del 30% (933.000) de los bogotanos
conoce la existencia de algún programa
dirigido a fomentar y fortalecer el
emprendimiento y la creación de empresas
en la capital del país. De esta población el
13% (125.000) participa en la actualidad en
alguno de estos programas.
Los programas más conocidos por la
población adulta en Bogotá son Bogotá
Emprende, de la CCB y la Alcaldía Mayor
(30%) y el programa DaVinci y el Fondo
Emprender del Sena (24%).
La carencia de tiempo, la ocupación actual
y la decisión de emprender más adelante,
son los principales factores para no
participar en los programas de
emprendimiento que ofrece la ciudad
Fuente: El autor a partir de la información del GEM (2013)
1.4.3 Gestión Pública del Emprendimiento en Bogotá D.C.
De acuerdo con el GEM (2013), Bogotá es el centro de la actividad emprendedora nacional.
Según con cifras de la CCB (2013), una de cada tres empresas creadas en el país se matricula
en la ciudad y es atendida actualmente por alrededor de 250 instituciones que forman parte
del ecosistema emprendedor distrital11. Es por ello, que existe una preocupación constante
por la transferencia de modelos de gestión del emprendimiento y se han invertido cuantiosos
recursos en ello. Casos de ello son, por ejemplo, Bogotá Emprende, iniciativa diseñada con
11 De acuerdo con las cifras del programa IMPACT-A, del total de instituciones 39% son centros de educación
superior, 31 % entidades de asistencia técnica y consultoría, 16% entidades de financiamiento, 9% entidades
del gobierno local y 6% asociaciones y gremios.
65
base en la metodología de Barcelona Activa; Connect Bogotá, que emula el método de San
Diego, California y Endeavor Colombia en el área de emprendimiento de alto impacto.
A nivel normativo, con el cambio institucional de los años 90, el tema del emprendimiento
empieza a ser incluido en la agenda de política pública nacional y local a través de un
conjunto de leyes que favorecen la creación de empresa, siendo por supuesto Bogotá eje de
la acción de las mismas.
IMPACT-A (2013) ha dividido en tres periodos normativos la política de emprendimiento
que tiene influencia directa en el Distrito Capital, clasificándolos de acuerdo a los principales
hitos y la naturaleza de los actores a intervenir: Un primer periodo comprendido entre 1990
y 2001, que denominaremos de reacondicionamiento del tejido institucional; la política se
concentra en favorecer la creación de empresas y al fortalecimiento productivo de las ya
existentes. Un segundo periodo comprendido entre 2002 y 2007, que corresponde con la
consolidación de las políticas de emprendimiento; y un tercer periodo que va de 2008 a 2013
donde incorporan en la agenda pública temas como impulso al emprendimiento de alto
impacto y los negocios inclusivos.
Los principales hitos normativos nacionales y/o locales que afectan la política de
emprendimiento distrital, de estos periodos son:
Periodo de 1990 a 2001:
1990: La constitución política de Colombia incluye en su artículo 333 la protección de la
libertad económica y la promoción de la responsabilidad social de las empresas.
Ley 20 de 1990: Creación de incubadoras y parques tecnológicos en Colombia
1991: Ley de Ciencia y Tecnología. Creación del Sistema y El Consejo Nacional de
Ciencia y Tecnología.
1993: Ley 35. Eliminación de obstáculos de acceso a los mercados financieros por las
mipymes.
66
1996: ley 344. El Sena destina 20 % de su ingreso anual a programas de competitividad
y desarrollo productivo
1999: Ley 550, articulo 55. Se capitaliza el Fondo Nacional de Garantías, con recursos
de garantías para acreedores de las mipymes para que estas puedan acceder a recursos de
redescuento.
2000: Ley 590. Ley Mipyme. Categorización de empresas. Inclusión de políticas de
promoción.
Periodo de 2002 a 2007:
2002: Ley 789, articulo 90: Se crea el Fondo Emprender como unidad especial adscrita
al Sena
2003: Decreto 210: Aparece Fomipyme. Coordinación de políticas relacionadas con la
competitividad de los sectores productivos de la industria.
2004: CONPES 3297: define la agenda interna para la productividad y la competitividad.
2004: Bogotá productiva. Programa descrito en el plan de desarrollo 2004-2008 con tres
ejes orientadores: Bogotá Ambiental Empresarial, coordinado por el Departamento
Administrativo del Medio Ambiente (Dama); Bogotá Internacional, coordinado por el
Instituto Distrital de Cultura y Turismo (IDCT) y Bogotá Asociativa y Emprendedora,
coordinado por la Secretaría de Hacienda Distrital (SHD)
2005: Resolución 470 de la Superintendencia Financiera. Permite la creación de fondos
de capital privado. – Aparece GEM Colombia.
2006: Ley 1014 de fomento a la cultura del emprendimiento. CONPES 3424 y 3439.
Redes regionales de emprendimiento.
2007: CONPES 3484: Política Nacional de Transformación Productiva y promoción de
mipymes. Decreto 2175: se regula la administración y gestión de las carteras colectivas
y aspectos relacionados con los fondos de capital privado. Surgen Parquesoft Bogotá.
Bogotá Emprende. Invest in Bogotá.
En el Distrito Capital, mediante el Acuerdo Distrital No. 257 de 2006, “Por el cual se
dictan normas básicas sobre la estructura, organización y funcionamiento de los
67
organismos y de las entidades de Bogotá, Distrito Capital, y se expiden otras
disposiciones”, el Concejo de Bogotá reorganizó la estructura general de la
Administración Distrital y como consecuencia de lo anterior se crearon doce sectores
administrativos que coordinan las funciones de la anterior estructura funcional. Uno de
estos sectores es el de Desarrollo Económico, Industria y Turismo que tiene la misión de
“crear y promover condiciones que conduzcan a incrementar la capacidad de producción
de bienes y servicios en Bogotá, de modo que se garantice un soporte material de las
actividades económicas y laborales que permitan procesos productivos, de desarrollo de
la iniciativa y de inclusión económica que hagan efectivos los derechos de las personas
y viables el avance social y material del Distrito Capital y sus poblaciones, en el marco
de la dinámica ciudad región”. Este sector se compone de tres organismos: la Secretaria
de Desarrollo económico, el Instituto para la Economía Social IPES y la Corporación
para el desarrollo y la productividad Bogotá – Región.
Sobre el particular el IPES, - es producto de la transformación del Fondo de Ventas Populares
–FVP-, ordenada por el Acuerdo 257 de diciembre de 2006, fijándole entre sus funciones:
Ejecutar programas y proyectos para el apoyo a microempresas, famiempresas, empresas
asociativas, pequeña y mediana empresa e implementar el microcrédito; otorgar alternativas
para los sectores de la economía informal a través de la formación de capital humano, el
acceso al crédito, la inserción en los mercados de bienes y servicios y la reubicación de las
actividades comerciales o de servicios y adelantar operaciones de ordenamiento y de
relocalización de actividades informales que se desarrollen en el espacio público.
Se crea mediante el Decreto 552 de 2006, la Secretaría Distrital de Desarrollo Económico,
con el objeto de “orientar y liderar la formulación de políticas de desarrollo económico de
las actividades comerciales, empresariales y de turismo del Distrito Capital. Así mismo,
mediante Decreto 091 de 2007 modificatorio del Decreto 552 de 2007 se le añadieron otras
funciones como las siguientes:
▪ Formular, orientar y coordinar las políticas, planes, programas y proyectos en materia de
desarrollo económico y social de Bogotá, relacionados con el desarrollo de los sectores
68
productivos de bienes y servicios en un marco de competitividad y de integración
creciente de la actividad económica;
▪ Formular, orientar y coordinar las políticas para la generación de empleo digno e ingresos
justos, y estímulo y apoyo al emprendimiento económico y al desarrollo de competencias
laborales. En este sentido, participará en la elaboración y ejecución de la política de
generación de empleo y la competitividad de las personas discapacitadas;
▪ Formular, orientar y coordinar políticas para el desarrollo de microempresas,
famiempresas, empresas asociativas y pequeña y mediana empresa;
Periodo de 2008 a 2013:
2008: CONPES 3527: Se fortalece la relación entre emprendimiento y
competitividad- CONPES 3533: Adecuación del sistema de propiedad intelectual.
2009: Política Nacional de Emprendimiento Ley 1286. Se transforma Colciencias en
Departamento Administrativo.
2010: Ley 1429: Ley de formalización y generación de empleo.
Decreto 2555: Generación de incentivos a las etapas iniciales de la creación de
empresas.
2011: Ley 1450: PND 2010- 2014: Se crea INNpulsa. Decreto 4160: se crea la
ANSPE.
Particularmente en Bogotá, a través del Acuerdo Distrital No. 489 del 12 de Junio de
2012, se adoptó el plan de desarrollo económico, social, ambiental y de obras
públicas para Bogotá D.C. 2012 - 2016 Bogotá Humana cuyo Artículo 18 estableció
el programa de “apoyo a la economía popular, emprendimiento y productividad”,
el cual define para la economía popular el desarrollo procesos de formación,
asistencia y acompañamiento técnico para la creación y fortalecimiento de unidades
productivas y establece como proyecto prioritario “fortalecimiento de las iniciativas
de emprendimiento”
69
Este programa busca según su concepción descrita en el Plan de Desarrollo 2012-2016:
“realizar acciones transversales para potenciar el ecosistema de emprendimiento de la
ciudad y brindar servicios integrales, más apoyo e implementación de políticas públicas
al emprendedor y al empresario, (diferenciando entre emprendimientos por oportunidad
o por necesidad), mediante esquemas asociativos, negocios inclusivos y acceso a
mercados.”
Los proyectos prioritarios de este programa son:
1. Fortalecer de las iniciativas de emprendimiento. Realizar acciones transversales
para potenciar el ecosistema de emprendimiento de la ciudad y brindar servicios
integrales, más apoyo e implementación de políticas públicas al emprendedor y al
empresario, (diferenciando entre emprendimientos por oportunidad o por necesidad),
mediante esquemas asociativos, negocios inclusivos y acceso a mercados.
2. Potenciar zonas de concentración de economía popular. Intervenir en la economía
popular aglomerada en el territorio, referente a la estructura productiva de base
popular que es claramente identificable en el territorio y donde se puede actuar
integralmente de manera que se potencien las economías de aglomeración y se cierren
las brechas de productividad de esa economía popular con el tejido productivo más
consolidado. Potenciar la economía de aglomeración que frecuentemente se
encuentra desaprovechada a través del acompañamiento y asistencia técnica
especializada, la asociatividad, el financiamiento y la democratización del crédito y
de otros productos financieros.
3. Desarrollo de iniciativas productivas para el fortalecimiento de la economía
popular. Prestar servicios integrales que propendan por la generación de ingresos
70
sostenibles para poblaciones vulnerables, víctimas del conflicto armado interno,
vendedores informales en el espacio público y población en pobreza extrema.
4. Banca para la economía popular. Adquirir, por parte del Distrito Capital, total o
parcialmente, la propiedad accionaria de un banco de primer piso y de una entidad
fiduciaria para apoyar la economía popular. El propósito del banco es democratizar
el crédito, disminuir los costos y aumentar el ingreso de los beneficiarios llegando a
los barrios populares mediante programas de financiamiento acordes con las
necesidades y rentabilidad de productores y consumidores tradicionalmente excluidos
del acceso al crédito.
5. Desarrollo turístico social y productivo de Bogotá. Desarrollar acciones transversales
que propicien y fortalezcan la cadena de valor del turismo y ecoturismo en distintos
territorios locales, generando oportunidades económicas y sociales para la ciudad y
la región, como destino turístico sostenible bajo criterios de complementariedad y
cooperación.
6. Bogotá ciudad turística para el disfrute de todos y todas. Promover y proyectar a
Bogotá como un destino turístico accesible, sostenible y con gran proyección en lo
comunitario y social.
7. Bogotá productiva y competitiva en la economía internacional. La Administración
Distrital formulará una agenda para la productividad y competitividad sistémica con
miras a implementar una política activa que favorezca los factores relevantes que
determinan el desarrollo sostenible a partir de un entorno favorable para la inversión,
la provisión de una infraestructura de servicios, la protección de los derechos de
propiedad intelectual, la promoción del comercio internacional, el desarrollo de la
ciencia, la tecnología y la innovación, las actividades de investigación y el desarrollo
del recurso humano y de la sostenibilidad ambiental. Formular un conjunto de
71
estrategias encaminadas a afrontar los desafíos y aprovechar las oportunidades de los
TLC suscritos por el país.
La Secretaría Distrital de Desarrollo Económico basado en su énfasis estratégico, misión y
visión ha priorizado y definido sus intervenciones para alcanzar los resultados propuestos de
acuerdo con los siguientes objetivos estratégicos:
▪ Fortalecer la productividad y competitividad del sector empresarial con énfasis en la
economía popular, mejorando la inserción económica internacional de la ciudad y
fortaleciendo el mercado interno de Bogotá.
▪ Mejorar la calidad y cantidad de trabajo decente que se genera en la ciudad.
▪ Fortalecer la seguridad alimentaria de la ciudad a través del abastecimiento y acceso de
alimentos en condiciones de inocuidad, productividad y competitividad.
▪ Desarrollar y difundir estudios, evaluaciones e información que soporten la toma de
decisiones de política pública en temas de desarrollo económico de la ciudad.
▪ Mejorar la prestación de los servicios a través del sistema integrado de gestión, la
atención en el territorio y la medición de la satisfacción de los beneficiarios.
▪ Gestionar, administrar y controlar eficientemente el uso de los recursos financieros de la
entidad.
▪ Fortalecer el desarrollo organizacional de la entidad, garantizando un ambiente de trabajo
en óptimas condiciones.
En la actualidad, de acuerdo a la información oficial de la Secretaría Distrital de Desarrollo
Económico - SDDE, los proyectos mediante los cuales desarrolla sus funciones son los
siguientes:
429 Fortalecimiento institucional
686 Articulación para la generación de trabajo digno y decente
688 Planeación, difusión, seguimiento y evaluación para la garantía de derechos
72
689 Potenciar zonas de concentración de economía popular
690 Centro de pensamiento en economía urbana
709 Proyecto agrario de sustentabilidad campesina distrital
715 Banca para la economía popular
716 Fortalecimiento de las iniciativas de emprendimiento
736 Disponibilidad y acceso a los alimentos en mercado interno a través del abastecimiento
748 Fomento de la investigación básica y aplicada para fortalecer la productividad empresa
752 Bogotá productiva y competitiva en la economía internacional
754 Agricultura urbana y periurbana
775 Participación ciudadana para el desarrollo económico territorial y humano
964 Transparencia, probidad y lucha contra la corrupción en la SDDE
Economía Popular
El concepto de economía popular se enmarca dentro de la economía solidaria y corresponde
al “conjunto de actividades económicas y prácticas sociales desarrolladas por los sectores
populares con miras a garantizar, a través de la utilización de su propia fuerza de trabajo y
de los recursos disponibles, la satisfacción de las necesidades básicas, tanto materiales como
inmateriales”, Icaza (2003). Esto implica que se refiere a individuos que construyen
relaciones de cooperación que les permite trabajar para garantizar su supervivencia en
términos del logro de los mínimos necesarios para el intercambio, sino también a individuos
que a partir de esa cooperación espontanea tienen la meta de mejorar la calidad de vida del
colectivo.
La economía popular difiere de la informalidad, en que la primera implica la ausencia de
relaciones de subordinación laboral y está vinculado estrechamente con la cultura del
emprendimiento o iniciativas empresariales originadas a partir de la necesidad.
Dentro del Plan de Desarrollo local (2012), el quinto objetivo de este eje se refiere
específicamente a la economía popular, así:
73
Objetivo No. 5. “Generar trabajo decente y digno como el principal mecanismo para que la
población bogotana pueda gozar con autonomía de sus derechos. El trabajo decente será la
base del desarrollo económico, la competitividad y el criterio guía de las relaciones entre
empleadores y trabajadores tanto en el sector público como en el privado. Democratizar el
trabajo decente con énfasis en el fomento de la economía popular. Los programas de
formalización, emprendimiento y generación de empleo propenderán por descentralizar la
actividad económica para crear oportunidades de trabajo digno en las localidades con
mayores niveles de pobreza, de modo que contribuyan a mejorar la movilidad, reduciendo
los desplazamientos en armonía con la política de ordenamiento territorial”… “La
Administración Distrital, recurriendo al apoyo de la OIT y del Ministerio del Trabajo,
convocará la participación de las organizaciones de trabajadores y los gremios
empresariales en torno a una agenda pública por el trabajo decente, fortalecerá la
formación en ciudadanía laboral y promoverá la construcción de una cultura del respeto a
los derechos laborales y la resolución de conflictos a través de la cooperación y el diálogo
social”.
Para el logro de este objetivo, en el Plan de Desarrollo (2012) se diseñó la estrategia 7:
“Gestionar recursos de crédito para las personas vinculadas a la economía popular con
dificultades de acceso al crédito formal, con la aplicación de criterios de priorización
cuando existan barreras adicionales por razones de pertenencia a grupos étnicos;
afrodescendientes, palenqueros, raizales, indígenas, las personas LGBTI, las víctimas y
personas con discapacidad y en general de los grupos poblacionales discriminados y
segregados que se adapten a la escala de sus operaciones y capacidades de pago, de modo
que los emprendimientos de los sectores populares dispongan de fuentes de financiación y
se fortalezcan sus formas de generación de ingreso”.
Estos planteamientos quedaron concretos en el Programa de apoyo a la economía popular,
emprendimiento y productividad, que en su aparte dedicado a la economía popular plantea
desarrollar procesos de formación, asistencia y acompañamiento técnico para la creación y
74
fortalecimiento de unidades productivas a partir de la identificación de las vocaciones
productivas locales, la puesta en marcha de estrategias para la asociatividad y la
democratización del acceso a los recursos financieros.
75
Capítulo 2. Diseño Metodológico
Para poder identificar cuáles son unos parámetros mínimos de gestión social aplicables a
proyectos de emprendimiento en el distrito capital desde la perspectiva del emprendedor, se
decidió utilizar como base teórica la descripción de los modelos de gestión social descritos
en el capítulo de marco teórico y que nos parece un referente para enmarcar los proyectos de
inversión social en el distrito, más específicamente se utilizarán los elementos para el análisis
estratégico de la gestión social, descritos en el mismo aparte.
En primera medida, se parte de la base que los proyectos de desarrollo y fortalecimiento en
emprendimiento se enmarcan efectivamente en el concepto de proyectos sociales por cuanto
responden en términos de la escala planteada por Schvarstein (2003) al segundo grupo,
denominado necesidades de desarrollo como oportunidades de trabajo y capacitación laboral.
Partiendo de esta verificación, y para caracterizar la gestión social en emprendimiento en el
Distrito Capital, se seleccionó uno de los proyectos que en términos de magnitud de los
recursos asignados durante la vigencia 2013 y número de beneficiarios atendidos, resultó más
representativo en esta área y corresponde al proyecto de inversión 716 denominado
“fortalecimiento de iniciativas de emprendimiento”.
El desarrollo del trabajo se fundamenta en el análisis de la gestión social del proyecto de
inversión 716, a través de uno de los convenios que le dieron operacionalización,
particularmente el convenio 562 suscrito con la Universidad EAN, del cual se cuenta con la
información primaria sobre ejecución, realizado sobre la base de 2000 de los emprendedores
participantes del proyecto de inversión 716.
La información disponible sobre este convenio procede de los informes técnicos, financieros,
estructura metodológica y participación de los comités técnicos. Sin embargo, hay que
resaltar que este convenio solo desarrolló las fases 2 y 4. De las otras fases la información
76
procede de la consulta directa a los operadores. Los resultados de este convenio incluyeron
una caracterización cuantitativa de los beneficiarios propiedad de la Universidad EAN, que
resulta ser uno de los puntos de partida para el desarrollo del presente trabajo.
Cabe resaltar que a la fecha de redacción de este documento, el convenio no contempló
ninguna fase de evaluación de impacto, ni un análisis riguroso de satisfacción de los
beneficiarios, temática primordial de análisis en el presente documento, aunque se realizaron
algunos mediciones e informes internos sobre la eficacia de la intervención.
El trabajo de campo que se presenta en este documento no hace parte de los desarrollos del
proyecto de inversión, aunque si se realizó de forma paralela a la fase cuatro aprovechando
la cercanía con los sujetos de estudio.
2.1 Etapas del desarrollo del proyecto
El proceso de investigación se dividió en cuatro etapas que permitieron un acercamiento a la
comprensión del problema en términos conceptuales y propios del ámbito de aplicación
permitiendo la identificación de variables determinantes:
1. Establecimiento del marco teórico y conceptual aplicable: análisis de teorías,
investigaciones y antecedentes en general que se consideraron válidos para
desarrollar el trabajo. Adicionalmente se revisaron los informes técnicos,
caracterización cuantitativa de beneficiarios resultante y otros documentos de trabajo
propios del convenio que aportaran información sobre el desarrollo de su gestión.
En esta etapa se realizó el análisis documental, a partir de la recopilación inicial de
documentos en dos niveles: por un lado libros y artículos que dieran cuenta de los principales
aportes teóricos en las áreas de emprendimiento, gestión social y participación ciudadana,
seleccionados a partir de la recurrencia de sus su aparición en los buscadores académicos y
bases de datos como Jstor, Redalyc y Ebrary. Adicionalmente se indagó la bibliografía citada
77
por los prestadores de política pública en sus presentaciones. Por otro lado, se recopiló la
información específica de archivo del proyecto de inversión seleccionado y los documentos
de ejecución, informes parciales y finales de intervención, estudios de caracterización de
beneficiarios, fichas técnicas de consulta pública, entre otros. Como limitación, los
documentos citados son aquellos disponibles a diciembre de 2014. No se examinó material
bibliográfico de publicación posterior.
Una vez recopilada la bibliografía se clasificó por áreas de estudio y se categorizó teniendo
en cuenta la naturaleza de la investigación. En el caso de las teorías de emprendimiento y la
participación ciudadana, a partir de los enfoques de clasificación presentes en la literatura
más recurrentemente citados, para el caso, de la gestión social, a partir de los enfoques de
evaluación como criterio.
Esta selección se revisó en varias oportunidades durante el desarrollo del proceso
investigativo teniendo en cuenta los criterios de representatividad y pertinencia. Este proceso
condujo a la reformulación de los objetivos específicos e incluso de la pregunta de
investigación para mejorar su coherencia interna frente a las posibilidades reales del trabajo
de campo que se planeó.
2. Trabajo de campo: El trabajo de campo se realizó a la par del análisis documental que
permitió la construcción del marco teórico aplicable. Se desarrolló a través de un
ejercicio de observación participante, desarrollado entre los meses de enero y octubre
de 2014, documentado a través de notas, fotografías e informes de ejecución, que
sirve de base para describir el rol de los actores en el capítulo 4; y la aplicación de
entrevistas individuales estructuradas.
En esta etapa, se seleccionaron 72 emprendedores beneficiarios de entre los recursos del
proyecto de inversión 716 y se les aplicó una entrevista individual estructurada, para
identificar su percepción sobre el programa. Adicionalmente se realizó entrevistas
individuales a 8 funcionarios, asesores y consultores del Distrito Capital para establecer su
78
percepción sobre sus impresiones sobre la gestión social en general. Una vez recopilada la
información se codificó y analizó teniendo en cuenta su naturaleza cualitativa, identificando
categorías principales y revisando su recurrencia.
El número de participantes entrevistados se determinó por conveniencia por cuanto aunque
se pudiese alcanzar el nivel de saturación de las respuestas, los individuos mostraron
disposición a responder y se consideró importante escuchar el mayor número de personas
posible.
3. Estructuración de la propuesta: a partir de los hallazgos resultantes del trabajo de
campo, se realizó el análisis de acuerdo con una combinación de los criterios
utilizados por Schvarstein (2003) en lo que a clasificar la participación en los
proyectos refiere y la metodología de análisis estratégico de proyectos sociales de la
CEPAL. Se seleccionó esta metodología por cuanto incluye la revisión y cruce de un
volumen importante de informaciones cualitativas con referencia no solo relativas a
la contrastación de objetivos y metas, sino también relativas a las acciones y roles de
los participantes. Como herramienta de análisis de programas sociales, han sido
publicados varios estudios de caso donde se aplica y los autores cuentan con alrededor
de 570 citaciones de su trabajo.
Adicionalmente se incluye una reflexión sobre los criterios descritos para la evaluación de la
participación de los beneficiarios de acuerdo con la propuesta de la OCDE y con base en
ellos, se estructuró la propuesta de parámetros de participación para la gestión social, y las
implicaciones para el desarrollo de la visión del emprendedor en la intervención.
4. Como último paso se solicitó concepto a cuatro expertos sobre los resultados del
trabajo de campo y las conclusiones a que dieron lugar para establecer su validez.
Esta indagación se realizó durante el mes de mayo y junio de 2015 y sus resultados
se incluyen como parte de la reflexión final.
79
Desde el punto de vista metodológico, este trabajo de investigación se realizó con un enfoque
de carácter etnográfico, orientado desde lo crítico social haciendo uso de la observación
participante como principal herramienta de trabajo. El enfoque crítico-social, pretende que
la investigación se encamine al logro de una conciencia auto-reflexiva y crítica para
transformar la realidad, bajo un contexto cultural en donde el diálogo, el debate y la praxis
(relación teoría-práctica), sean los ejes del quehacer investigativo ligado a lo cotidiano.
En esta perspectiva, el encuadre metodológico parte de asumir la necesidad de una inmersión
en esa realidad objeto de estudio contando con dos herramientas básicas; la observación
participante y las entrevistas. En nuestro caso puntual, se utilizó la observación y la
aplicación de cuestionarios a un grupo de beneficiarios y un grupo de asesores y funcionarios
de otras instituciones involucradas.
La selección de esta metodología se realizó teniendo en cuenta variables como la naturaleza
del objeto de investigación, la disponibilidad de información cuantitativa proveniente del
desarrollo mismo del proyecto, la necesidad de obtener información sobre las opiniones más
en detalle de los participantes, y principalmente la cercanía con el objeto de estudio por parte
del investigador. El involucramiento del investigador dentro del proceso hace que posea
información de primera mano que solo en el desarrollo de este trabajo puede ser utilizada
para contribuir a generar pautas para proyectos posteriores, ya que tal como se mencionó
anteriormente, la ejecución de este tipo de proyectos en el Distrito Capital no cuenta con
mecanismos de validación de resultados similares al planteado en este documento y de
medición de impactos más allá de los cuantitativos tradicionales que se traducen en los
indicadores de gestión.
En cuanto al uso de herramientas como la observación participante se justifica por cuanto,
Marshall & Rossman (1989) definen la observación como "la descripción sistemática de
eventos, comportamientos y artefactos en el escenario social elegido para ser estudiado".
80
La observación participante es el proceso que faculta a los investigadores a aprender acerca
de las actividades de las personas en estudio en el escenario natural a través de la observación
y participando en sus actividades. Provee el contexto para desarrollar directrices de muestreo
y guías de entrevistas. Lecompte y Schensul (1999) definen la observación participante como
"el proceso de aprendizaje a través de la exposición y el involucrarse en el día a día o las
actividades de rutina de los participantes en el escenario del investigador".
Para este caso, el investigador realizó seguimiento al proceso como uno de los prestadores
intermediarios en la ejecución del proyecto en un rol de carácter administrativo durante un
periodo de un año, lo que permitió acceder a los beneficiarios, escuchar muchas de sus
percepciones sobre el programa, de igual modo escuchar a los consultores técnicos asignados,
estar en contacto con los determinadores del gasto, lograr cercanía con otros prestadores y en
general hacer parte del desarrollo del proyecto de inversión. De todas formas, para
complementar, contrastar y dar mayor sustento a la información disponible se complementó
en trabajo de campo mediante la aplicación de entrevistas, cuya codificación aportaron
elementos importantes a la construcción del análisis estratégico y a la construcción de la
propuesta.
2.2 Descripción del análisis de la Gestión Social propuesto
El análisis propuesto como ya se indicó anteriormente parte de una combinación de los
criterios utilizados por Schvarstein (2003) para determinar la forma de participación en la
política, Filion (1991) para determinar la visión del emprendedor y la metodología de análisis
estratégico de proyectos sociales de Cohen & Franco (2005). Lo más importante para este
análisis es resolver el interrogante sobre ¿Cómo los proyectos de gestión social en
emprendimiento en el distrito capital están incorporando la visión del emprendedor en su
ejecución?
Para aproximarnos a la respuesta, se clasificó la información de tal manera que permitiera
dar una idea sobre el perfil de diseño con el cuál fue concebido y los resultados, y así poder
81
determinar el tipo de estrategias de gestión social seguida en la práctica por la administración
distrital para desarrollar este proyecto. Este perfil se construye identificando el ámbito
(interno y externo), los prestadores (categorías), los prestatarios, las necesidades a satisfacer
y las actividades a desarrollar.
Cómo el punto central de nuestra investigación es determinar la vinculación del modelo de
gestión con la participación de los emprendedores, se reflexiona sobre el rol de los actores
desde el punto de vista de los resultados obtenidos por este proyecto de inversión a la fecha,
agrupados en tres niveles: a. en términos de la satisfacción de la necesidad que da origen a la
intervención, b. relacionamiento de los actores y c. aprendizaje y crecimiento medidos en
términos de los conocimientos desarrollados durante la intervención.
Grafico 9 Esquema de clasificación de la información
Fuente. Elaboración propia
A partir de este esquema se fueron ubicando los elementos encontrados en la revisión del
proyecto de inversión 716 desarrollado por el Distrito Capital en el periodo comprendido
entre 2012 y 2014 y establecido en el plan de desarrollo denominado Bogotá Humana.
De esta forma se identificó la estrategia de gestión social asociada al proyecto 716 de acuerdo
con la clasificación propuesta en el marco teórico y se reflexionó sobre la coherencia del
diseño y estrategia adoptada contrastándola con el modelo de análisis estratégico que
proponen Cohen & Franco (2005) y se plantearon las reflexiones finales frente a los tópicos
sobre los cuales un emprendedor desarrolla su visión. Se utiliza este modelo de análisis ya
PERFIL DE DISEÑO
AMBITO INTERNO / EXTERNO
ACTORES PRESTADORES / PRESTATARIOS
NECESIDAD A SATISFACER
ACTIVIDADES
RESULTADOS DE LA INTERVENCION
Resultados en términos de la satisfacción de la necesidad que le da origen
Relaciones entre los actores
Aprendizaje y crecimiento
82
que para aplicarlo se requiere cubrir una gran cantidad de aspectos que ofrecen una
descripción detallada del área de estudio y permiten organizar las impresiones de los actores
involucrados y del investigador mismo, comparándolos con la información entregada por los
participantes.
Una vez realizada la reflexión completa, se procede a identificar cuáles son en los elementos
que al sentir de los beneficiarios resultan ser los que favorecen más el desarrollo de un modelo
de gestión social como el que se desarrolla actualmente, así como establecer cuáles son los
elementos que resultan adversos en modelos de esta naturaleza y proceder a generar
conclusiones y recomendaciones sobre la participación de los individuos en la gestión social
del emprendimiento en el Distrito Capital.
Grafico 10. Desarrollo metodológico.
Fuente: Elaboración propia.
Para identificar estos elementos en el proyecto de estudio, se aplicaron entrevistas
individuales estructuradas, entre los meses de mayo – agosto de 2014, a 72 emprendedores
beneficiarios del proyecto de inversión 716 y a un grupo 8 personas seleccionadas entre
funcionarios distritales, consultores empresariales, técnicos de apoyo y profesionales de la
subdirección de emprendimiento de la SDDE. La técnica seleccionada consistió en la
realización de preguntas abiertas que permitiesen a los sujetos expresar su opinión.
Análisis
ELEMENTOS
PROMOTORES
ELEMENTOS
ADVERSOS
Clasificación
ANALISIS ESTRATEGICO
DE LA GS
1. modelo de gestión
2. caracterización del programa
3. análisis de brechas
4. nodos
PERFIL DE DISEÑO
AMBITO
INTERNO / EXTERNO
ACTORES
PRESTADORES /PRESTATARIOS
NECESIDAD A SATISFACER
ACTIVIDADES
RESULTADOS DE LA INTERVENCION
Resultados en términos de la satisfacción de
la necesidad que le da origen
Relaciones entre los actores
Aprendizaje y crecimiento
83
Este proceso se complementó con la información disponible de la caracterización de dos mil
unidades productivas evaluadas por los operadores de dicho convenio durante un periodo
previo al desarrollo de este trabajo y al cual ha dado acceso la Secretaria Distrital de
Desarrollo Económico SDDE del Distrito Capital. Paralelamente, gracias a la cercanía con
los actores se pudo realizar un proceso de observación que complementa el material
disponible y provee los insigths para la contrastación de la información y la construcción de
las conclusiones. La reflexión constante sobre cada uno de los elementos constitutivos del
análisis fue generando iterativamente pautas para considerar otros aspectos durante el
desarrollo del trabajo.
Los individuos se seleccionaron las personas a entrevistar de manera arbitraria, de acuerdo a
su disponibilidad y cercanía, es decir se realzó un proceso de muestreo por conveniencia. Se
seleccionan de esta manera una vez que se pretende establecer una hipótesis generalizable a
partir de la saturación de respuestas y se fundamenta en el concepto de Miles y Huberman
(1994) “La muestra cualitativa se va perfilando paulatinamente conforme avance el examen
de casos, no surge de una elaboración predeterminada del trabajo de campo, resultado de
una ecuación estadística, se trata más bien de un diseño emergente, que se construye en el
mismo proceso del desarrollo de la investigación” La selección de los entrevistados en este
caso, no siguió ningún patrón especifico.
Estas personas se ubicaron a través de las jornadas de capacitación dispuestas, las reuniones
de seguimiento del proyecto. Los individuos corresponden en su totalidad a beneficiarios del
proyecto, por conveniencia no se tuvieron en cuenta personas que se hubiesen postulado para
recibir recursos pero que no fueron sujetos de crédito. Esto se justifica por cuanto estas
últimas no participaron de todo el proceso y se trata de revisar en detalle la participación de
los beneficiarios en el ciclo completo.
84
Capítulo 3. Análisis de la Gestión Social Propuesto
3.1 Generalidades del Proyecto de Inversión 716
El Proyecto de inversión 716 “Fortalecimiento de las iniciativas de emprendimiento”,
cuyo objetivo principal de acuerdo con la ficha de información estadística básica es:
“fortalecer la competitividad y productividad de las pequeñas unidades productivas y
emprendimientos del Distrito, a través de la implementación de estrategias y servicios que
les permitan insertarse y/o mantenerse en el mercado de acuerdo con la dinámica económica
de la ciudad. Como de disponer de los mecanismos que faciliten la accesibilidad a recursos
financieros para iniciar el desarrollo de la actividad empresarial de los emprendimientos
por oportunidad del Distrito”.
Este proyecto a la fecha ha finalizado la ejecución de la convocatoria No1, realizada entre
2012 y 2013. Las entidades involucradas en la operación de este proyecto a la fecha son: La
Secretaria Distrital de Desarrollo Económico, La compañía de financiamiento Confiar, La
Universidad EAN, La Corporación Minuto de Dios, La Cooperativa Minuto de Dios, La
Universidad Los libertadores. El proyecto se ejecutó en cuatro fases:
Etapa 1: Inscripción y clasificación de los emprendedores ante la Secretaria Distrital de
Desarrollo Económico a través de los grupos territorio. Durante esta etapa, se realizó la
divulgación de la convocatoria por diversos medios masivos, de tal modo que se los
ciudadanos que quisieran acceder a un crédito blando para desarrollar mejoramiento
productivo o iniciar un negocio se inscribieran. Durante esta fase la SDDE, realizaba la
clasificación de los emprendedores de la siguiente manera: Tipo 1: emprendedores con ideas
de negocio. Tipo 2: Emprendedores con un negocio en desarrollo y algún tiempo de
85
operación y Tipo 3: empresarios con algún grado de formalidad en el desarrollo de su
ejercicio productivo. Adicionalmente en esta etapa, una vez clasificados los emprendedores,
se les asesoraba en el desarrollo de un perfil de negocio y se les recopilaba la documentación
de soporte apropiada para ingresar a la etapa de evaluación.
Etapa 2: esta etapa estuvo a cargo de la Universidades EAN y Libertadores y la Corporación
Minuto de Dios. En ella, se realizaban visitas de verificación técnica a los emprendedores y
a partir de la misma se generaba un concepto de viabilidad técnica sobre los perfiles de
negocio y se entregaba al beneficiario un plan de acción para ser desarrollado en caso tal que
el proyecto fuese sujeto de crédito.
La Evaluación y Alineación de planes de negocios, la cual buscaba homogenizar y ajustar
los términos de los planes y modelos de negocio existentes e identificar los requerimientos
de inversión para el negocio propuesto.
Etapa 3: Consistió en la presentación del proyecto ante el Comité de asignación de recursos
conformado por la Compañía de Financiamiento Confiar, la Cooperativa Minuto de Dios y
la Subdirección de financiamiento de la SDDE. Este Comité asignaba los recursos de acuerdo
con dos criterios fundamentales: uno el estudio de verificación de capacidad de
endeudamiento realizado por Confiar y la Cooperativa Minuto de Dios y segundo, el
concepto de viabilidad técnica entregado por los operadores de la fase dos.
Etapa 4: Una vez signados los recursos de crédito al emprendedor ingresaba en el proceso de
seguimiento empresarial a su ejecución y acompañamiento para el desarrollo de su plan de
acción. Adicionalmente, los operadores de esta fase, se encargaron de prestar formación
básica a los emprendedores en áreas administrativas y operativas. Las actividades de la fase
cuatro, de acompañamiento y seguimiento, constaron en promedio de 50 horas colectivas de
86
formación por emprendedor y visitas periódicas (mensuales o quincenales según el caso) de
acompañamiento en la unidad productiva.
Para la SDDE, el proyecto durante su operación arrojó los siguientes resultados:12
1. 12000 emprendedores inscritos en las veinte localidades del Distrito Capital.
2. 3000 conceptos de viabilidad técnica
3. 1405 créditos desembolsados a igual número de unidades productivas.
4. 30.000 millones de pesos asignados.
3.2 Trabajo de campo
La aplicación de los dos tipos de cuestionarios, se realizó de acuerdo a los pasos descritos
por Fernández (2006)13:
a. Obtener la información
b. Capturar, transcribir y ordenar la información,
c. Codificar la información,
d. Integrar la información.
12 Según informes técnicos de ejecución de la SDDE y los operadores de las diferentes etapas. 13 “Este proceso puede resumirse en los siguientes pasos o fases (Álvarez-Gayou, 2005; Miles y Huberman,
1994; Rubin y Rubin, 1995): 1. Obtener la información: a través del registro sistemático de notas de campo,
de la obtención de documentos de diversa índole, y de la realización de entrevistas, observaciones o grupos de
discusión. 2. Capturar, transcribir y ordenar la información: la captura de la información se hace a través de
diversos medios. En el caso de documentos, a través de la recolección de material original, o de la realización
de fotocopias o el escaneo de esos originales. Y en el caso de las notas de campo, a través de un registro en
papel mediante notas manuscritas. Toda la información obtenida, sin importar el medio utilizado para
capturarla y registrarla, debe ser transcrita en un formato que sea perfectamente legible. 3. Codificar la
información: codificar es el proceso mediante el cual se agrupa la información obtenida en categorías que
concentran las ideas, conceptos o temas similares descubiertos por el investigador, o los pasos o fases dentro
de un proceso (Rubin y Rubin, 1995).Los códigos son etiquetas que permiten asignar unidades de significado
a la información descriptiva o inferencial compilada durante una investigación. En otras palabras, son
recursos mnemónicos utilizados para identificar o marcar los temas específicos en un texto. compleja (ej: una
metáfora). El agrupar y desplegar los trozos condensados, sienta las bases para elaborar conclusiones. 4.
Integrar la información: relacionar las categorías obtenidas en el paso anterior, entre sí y con los fundamentos
teóricos de la investigación.” Fernández (2006)
87
Respuestas de los Emprendedores
Las entrevistas realizadas a los emprendedores se ejecutan para determinar la identificación
que ellos pueden tener con el proyecto y que tan cercano o lejano ven su rol en el mismo. No
se les indagó directamente por su rol, se les cuestionó acerca de elementos que pudiesen
arrojar pistas sobre cómo se articulan ellos mismos con la ejecución y que incluso fuesen
controversiales para incitar que expresasen su opinión. Las preguntas abiertas realizadas a
los 72 emprendedores seleccionados fueron las siguientes:
1. ¿Está satisfecho con los resultados obtenidos durante el programa?
2. ¿Durante el desarrollo del programa cuál ha sido la principal barrera que se ha
encontrado para continuar con el proceso?
3. ¿Le parece acertada la forma como se ha realizado el proceso de distribución de
recursos y se ha realizado el acompañamiento a emprendedores?
4. ¿Qué es lo más importante para el mejoramiento de su negocio que ha encontrado en
este programa?
5. ¿Que NO ha encontrado para su mejoramiento empresarial durante el desarrollo de
este programa?
6. ¿Qué tipo de proyectos hacen falta para emprendedores?
7. Después de haber participado en este programa. ¿En cinco años cómo ve su negocio?
En el anexo 1 se pueden observar las respuestas obtenidas de los 72 participantes. Con esta
información se procedió a transcribir a un formato de hoja de cálculo las respuestas (anexo
2), se etiquetó la información y se identificaron las etiquetas de acuerdo a su nivel de
recurrencia dentro de las respuestas expresadas por los emprendedores, una vez realizado
este proceso, se agruparon tales etiquetas en categorías más amplias de la siguiente forma
(solo se incluyen las etiquetas que tuvieron recurrencia significativa), la clasificación
completa se adjunta como anexo 3:
88
Tabla 14. Resumen estructura del cuestionario y respuestas de los beneficiarios.
PREGUNTA 1
¿Está satisfecho con los resultados obtenidos
durante el programa?
RECURRENCIA DE ETIQUETAS DE LAS RESPUESTAS
FORMACION 49
SATISFECHO POR MULTIPLES CAUSAS 32
ACOMPAÑAMIENTO 15
ASESORIA 14
MEJORAMIENTO 9
INSATISFECHO 6
FINANCIAMIENTO 5
PREGUNTA 2
Durante el desarrollo del programa cuál ha sido la principal
barrera que se ha encontrado para continuar con el proceso?
RECURRENCIA DE ETIQUETAS DE LAS RESPUESTAS
NINGUNA 36
TIEMPO 10
DEMORA EN EL DESEMBOLSO 6
DESPLAZAMIENTO 5
MENOS DINERO DEL SOLICITADO 5
LEJANIA DEL SITIO 4
COMERCIALIZAR 2
APOYO AL INDIVIDUO Y NO A LA IDEA 1
DEMORA EN VISITAS 1
DESCUENTOS BANCARIOS 1
FALTA DE CONOCIMIENTO 1
FALTA DE DISCIPLINA 1
FALTA DE DIVULGACION DE FORMACION 1
FALTA DE EXPERIENCIA DEL ASESOR 1
HORARIOS 1
INSUFICIENTE DINERO 1
POCO CRITERIO DE LA ENTIDAD AL ADJUDICAR
CREDITO 1
POCO DINERO 1
PROVEEDORES 1
RECURSOS INSUFICIENTES 1
PREGUNTA 3
Le parece acertada la forma como se ha realizado
el proceso de distribución de recursos y se ha
realizado el acompañamiento a emprendedores? RECURRENCIA DE ETIQUETAS DE LAS
RESPUESTAS
ACERTADO 25
BUEN ACOMPAÑAMIENTO 19
DEMORA EN EL DESEMBOLSO 5
EL VALOR DESEMBOLSADO NO
CORRESPONDE A LO SOLICITADO 5
EXCELENTE 2
NOS APORTA CONOCMIENTO 2
ACOMPAÑAMIENTO LENTO 1
ACOMPAÑAMIENTO MAS PROLONGADO 1
AL FINALIZAR DAR MAS CREDITO 1
89
PREGUNTA 5
Que NO ha encontrado para su mejoramiento
empresarial durante el desarrollo de este programa?
RECURRENCIA DE ETIQUETAS DE LAS
RESPUESTAS
CONFORME 30
NINGUNA OBSERVACION 9
AGILIDAD EN EL TRAMITE 2
CONTABILIDAD 2
DINERO 2
LOCAL ADECUADO 2
ACCESO A CONTRATACION PUBLICA 1
ASESORIA ESPCIALIZADA POR SECTOR 1
ASESORIA Y CAPACITACION
SIMULTANEA CON EL DESEMBOLSO 1
CANALES DE VENTAS 1
CAPACITACION EN CUESTIONES ADMINISTRATIVAS 1
CERCANIA DEL LUGAR DE
CAPACITACION 1
CLASES EN CADA LOCALIDAD 1
COMO EXPORTAR 1
COMO PONERSE AL DIA CON MAQUINAS 1
CONITNUIDAD AL ACOMPAÑAMIENTO 1
DUDAS RECURRENTES 1
EDUCACION FINANCIERA 1
ESTRATEGIA ESPECIALIZADA POR
SECTOR 1
FALTA DE OPORTUNIDADES PARA ACCEDER A MERCADOS MAS GRANDES 1
FORMA DE PAGAR EN MESES MUERTOS 1
LA PRODUCCION CONSUME TODO EL TIEMPO 1
PREGUNTA 4
Qué es lo más importante para el mejoramiento de su
negocio que ha encontrado en este programa?
RECURRENCIA DE ETIQUETAS DE LAS RESPUESTAS
CAPACITACION 20
ACOMPAÑAMIENTO 12
MEJORAMIENTO PRODUCTIVO 10
ASESORIA 10
CREDITO 9
COMERCIALIZACION 9
CAPITAL DE TRABAJO 4
APOYO INSTITUCIONAL 4
PREGUNTA 6
Qué tipo de proyectos hacen falta para
emprendedores?
RECURRENCIA DE ETIQUETAS DE LAS
RESPUESTAS
NINGUNA 14
CAPITAL 3
FERIAS 3
MAS OPORTUNIDADES 3
ASOCIATIVIDAD 2
CONOCIMIENTO CONTABLE 2
CONTINUAR ESTE 2
CONVENIOS 2
CREDITOS ROTATIVOS 2
DE MANUALIDADES 2
INNOVACION 2
MAS FORMACIO OPERATIVA Y
TECNICA 2
REGLAMENTAR EL MADRUGON 2
RUEDAS DE NEGOCIO 2
AGILIZAR EL PROCESO 1
APOYAN PERSONAS CON
INCENTIVOS 1
APOYAR A TODOS LOS QUE SE INSCRIBAN
1
APOYAR CON HECHOS 1
ASESORIA CON PRACTICANTES 1
ASESORIA ESPECILIAZADA EN EL
NEGOCIO 1
CAPACITACION DINAMICA 1
COMERCIALIZACION 1
CONOCIMIENTO SOBRE MULTIPLES NEGOCIOS
1
COOPERATIVAS 1
CORTE Y DISEÑO 1
DISTRIBUCIÓN DE PRODUCTOS 1
ESCUELAS DEPORTIVAS 1
EXPORTACIONES 1
FINANCIAMIENTO 1
FINANCIERA Y DE COSTOS 1
FRANQUICIAS 1
INTERNACIONALIZACION
EMPRESARIAL 1
INVESTIGACION CIENTIFICA 1
90
PREGUNTA 7
Después de haber participado en este programa.
¿En cinco años cómo ve su negocio?
RECURRENCIA DE ETIQUETAS DE LAS
RESPUESTAS
MAS PUNTOS DE VENTA 6
RECONOCIMIENTO EN EL OFICIO 6
GENERANDO EMPLEO 5
POSICIONADO EN LA RAMA
INDUSTRIAL 5
SOLIDA Y EXITOSA 5
MAYOR CRECIMIENTO 4
PROSPERIDAD 4
MAS GRANDE 3
MAS PRODUCTIVA 3
MAYOR PRODUCCION 3
VARIOS NEGOCIOS 3
CON LOCAL 2
EMPRESA FORMAL 2
EXPORTANDO 2
Fuente: Elaboración propia
Cuestionario aplicado a prestadores
En este caso las preguntas se orientaron directamente a verificar la concepción que el
prestador tiene sobre el beneficiario y su relación con el proyecto. De la misma forma las
preguntas se orientan a generar que el entrevistado exprese sus opiniones frente al
beneficiario. Las siguientes preguntas fueron las aplicadas a los ocho prestadores
participantes en el desarrollo del proyecto:
1. ¿Qué es para usted un proyecto de gestión social?
2. ¿En su opinión se desarrollan actualmente proyectos de gestión social en la ciudad?
3. Según su experiencia, ¿cuál debe ser el impacto de un proyecto social en la
comunidad?
91
4. En su opinión, ¿cómo considera usted que se prioriza la asignación de recursos para
proyectos sociales?
5. En su opinión, actualmente ¿cuál es el papel que juega la comunidad en el momento
de planear un proyecto social?
6. ¿Cuantos y cuales proyectos de naturaleza social orientados a economía popular
conoce actualmente?
7. ¿Los proyectos sociales que usted conoce, solucionan las necesidades de las
comunidades y por qué?
8. ¿Cómo cree usted que la comunidad percibe los programas sociales?
En el anexo 4 se pueden observar las respuestas obtenidas de los 8 participantes. Con esta
información se procedió a transcribir a un formato de hoja de cálculo las respuestas, se
etiquetó la información y se identificaron las etiquetas de acuerdo a su nivel de recurrencia
dentro de las respuestas expresadas por los emprendedores, una vez realizado este proceso,
se agruparon tales etiquetas en categorías más amplias de la siguiente forma (solo se incluyen
las etiquetas que tuvieron recurrencia significativa, la clasificación completa se adjunta como
anexo 5:
Gráfico 11. Resumen estructura del cuestionario y respuestas de los prestadores.
PREGUNTA 1:
¿Qué es para usted un proyecto de gestión social?
SATISFACER NECESIDADES: 5
SOSTENIBILIDAD EN EL TIEMPO: 2
ATENDER POBLACION VULNERABLE: 1
BENEFICIO COMUN: 1
GENERACION DE OPORTUNIDADES: 1
REDUCIR DESIGUALDAD: 1
PREGUNTA 2:
¿En su opinión se desarrollan actualmente proyectos
de gestión social en la ciudad?
EXISTEN: 6
URGENCIA DE OFRECER SOLUCIONES A LA
POBLACION: 2
POLITIQUERIA: 1
92
Fuente: Elaboración propia
PREGUNTA 3:
Según su experiencia, ¿cuál debe ser el impacto de
un proyecto social en la comunidad?
FORMACION: 5
CALIDAD DE VIDA: 5
EMPLEO DIGNO: 2 NUMERO DE BENEFICIARIOS 1
NECESIDADES ATENDIDAS: 1
TECNIFICACION DEL TRABAJO: 1 DISMINUIR LA POBREZA: 1
ASEGURAR CRECIMIENTO: 1
AUTONOMIA LABORAL: 1 CREAR EMPLEO: 1
PREGUNTA 4:
En su opinión, ¿cómo considera usted que se prioriza la
asignación de recursos para proyectos sociales?
VULNERABILIDAD DEL BENEFICIARIO: 4
ASIGNACION CENTRALIZADA: 1
EJECUCION DEL ANTIGUO PLAN DE DESARROLLO: 1 EJECUCION DEL NUEVO PLAN DE DESARROLLO: 1
VALORES Y PRINCIPIOS DE LA ECONOMIA SOCIAL: 1
POLITICA: 1
PREGUNTA 5:
En su opinión, actualmente ¿cuál es el papel que
juega la comunidad en el momento de planear un
proyecto social? OBSERVACION PASIVA: 5 PLANTEAR NECESIDADES: 1
SOLO CUANDO SE SIENTEN MOTIVADOS: 1
MEJORA CON EL TIEMPO: 1 FALTA DE CONSIENTIZACION: 1
NINGUNA: 1
DESCONOCIMIENTO DE LA COMUNIDAD: 1
PREGUNTA 7:
¿Los proyectos sociales que usted conoce, solucionan
las necesidades de las comunidades y por qué? DAN RESULTADOS DE CORTO PLAZO: 3
NO DAN SOLUCION POR FALTA DE FORMACION: 2 PARA ESO ESTAN CREADOS: 1
DAN ACOMPAÑAMIENTO: 1
ORIENTAN EN PLAN DE VIDA: 1 NO DAN RESULTADO POR FALTA DE AMOR PAIS: 1
GANAR INDEPENDENCIA ECONOMICA: 1
SON NEGOCIO PARA LAS ENTIDADES QUE LOS
ADMINISTRAN: 1
PREGUNTA 6:
¿Cuantos y cuales proyectos de naturaleza social orientados
a economía popular conoce actualmente?
• Apoyo a iniciativas de negocio y/o fortalecimiento en
micro empresas apoyado por la alcaldía desde secretaria de desarrollo económico;
• generación de ingresos para desplazados a través de
emprendimientos desde Acción Social, • Generación de ingresos a través de creación de negocios
para reinsertados desde Alta consejería para la
reintegración,
• fortalecimiento de clúster en el sector de artes gráficas
en el barrio RICAUTE a través de la alcaldía local de Mártires,
• Mercados Campesinos.
• Colonias.
• Red de Empresarios Innovadores (R.E.I).
• Territorio de vida y paz (Vendedores Ambulantes).
• Agencia Pública de Gestión para el Empleo “Bogotá
Trabaja”. • Programa de Formación para el Trabajo y el Desarrollo
Humano (F.T.D.H).
• Banca Muisca para la Economía Popular.
• Política Pública de Seguridad Alimentaria y
Nutricional.
• Bogotá Emprende.
PREGUNTA 8:
¿Cómo cree usted que la comunidad percibe los
programas sociales? OPORTUNIDAD DE MEJORA: 4 OPORTUNIDAD DE REBUSQUE: 2 POSITIVA: 1 DESCONFIANZA: 1 MANIPULACION POLITICA: 1 PLAN DE VIDA: 1 MEJORA DE INGRESOS: 1 MEJORA DE EMPLEO: 1
93
En ambos casos, este proceso de etiquetado permitió revisar con detalle las respuestas de los
participantes y de esta manera se obtuvieron elementos nuevos que permitieron realizar el
análisis estratégico de forma integrada determinando los vínculos existentes entre la
información de los emprendedores y los otros sujetos consultados, con los informes que
documentan el proceso y la observación del investigador.
94
Capítulo 4. Desarrollo del trabajo
Clasificación de la información
A partir de la información contenida en la caracterización cuantitativa del proyecto 716, que
hace parte de los resultados de los convenios que le dan ejecución, y las impresiones de los
participantes recopilados, podemos identificar para nuestro caso de estudio la siguiente
información.
4.1 Perfil de Diseño
En esta sección únicamente describiremos el proyecto y sus componentes a partir de cómo
resultó su operación. Este diseño no corresponde necesariamente a la concepción original de
los prestadores, sino a lo que resulta del proceso de observación y recolección de información
secundaria.
4.1.1 Ámbito de acción
El ámbito se refiere al campo de actuación que puede ser interno o externo. De acuerdo con
Schvarstein (2003), “El interno, comprende, las prestaciones destinadas a los miembros de
la organización, sea que se presten en la propia organización o en otros espacios. El externo,
comprende las prestaciones destinadas a aquellos que nos son miembros de la organización,
pudiendo también en este caso separar entre las que se prestan dentro y fuera de la
organización”.
Para nuestro proyecto particular el ámbito se refiere entonces, al fortalecimiento de proyectos
productivos para los beneficiarios de crédito y se extiende a todos aquellos quienes aun
cuando no hayan sido sujetos de crédito, obtuvieron retroalimentación a sus ideas de negocio
y a la forma cómo debían administrar sus negocios. El campo de acción del proyecto se
95
circunscribe a las veinte localidades siendo las de mayor participación que en su orden
fueron: Kennedy (353), Ciudad Bolívar (283), Bosa (170), Rafael Uribe (109), todas ellas
localidades caracterizadas principalmente en los niveles 1 y 2 y 3 de estratificación. Cabe
agregar que a pesar de no estar técnicamente inmerso en la ciudad, el municipio de Soacha
también fue lugar de acción para la ejecución del proyecto.
Los actores involucrados, trabajaron en tres escenarios durante la prestación del servicio: en
los lugares de habitación y trabajo de los beneficiarios seleccionados, en las instalaciones de
los Centros de desarrollo local ubicados en diez puntos de la ciudad y en las instalaciones de
cada una de las entidades prestatarias, durante aproximadamente dieciséis meses entre los
meses de julio de 2013 a diciembre de 2014.
Desde el punto de vista de la inserción de este proyecto en el plan de desarrollo local, se
realizó adscrito al eje estratégico 01 denominado: “Una ciudad que supera la segregación y
la discriminación: el ser humano en el centro de las preocupaciones del desarrollo,
Programa 12 Apoyo a la economía popular, emprendimiento y productividad”. De aquí
subyace que el programa está claramente inserto bajo el carácter de economía popular,
conceptualizado el capítulo dedicado al marco teórico.
No es al azar que se realiza esta distinción por cuanto dentro del ámbito de aplicación definido
para los proyectos distritales, desde el año 2012, se viene incorporando el enfoque diferencial
para el diseño de todos los proyectos de inversión distrital14.
Por enfoque diferencial se entiende, tal como lo afirma Palacios (2012), como el “Enfoque
que al tratar de focalizar la lectura de una realidad desde una mirada especifica que permita
reconocer y proyectar con mayor claridad y nitidez sus condiciones (de la población) y
pautas de vida así como sus necesidades y mejores alternativas para satisfacerlas, y es
14 Un proyecto de inversión pública contemplan actividades limitadas en el tiempo, que utilizan total o
parcialmente recursos públicos, con el fin de crear, ampliar, mejorar, o recuperar la capacidad de producción o
de provisión de bienes o servicios por parte del Estado.
96
Diferencial por tener en cuenta diferencias y particularidades de poblaciones que en sí
mismas conllevaron a un trato desigual y/o discriminatorio y busca motivar la generación
de estrategias de protección como sujetos de derecho y actores de deberes, desde y la
igualdad y la equidad, para que sean beneficiarios y contribuyentes directos del desarrollo”.
Y agrega el autor que con la aplicación de este enfoque diferencial se busca principalmente:
“1. Aportar con el desarrollo de mecanismos y estratégicas que conduzcan a hacer de Bogotá
una ciudad democrática, en la que cuenta y suma la voz de todos y todas. 2. Contribuir a que
la planificación y gestión del desarrollo se alinee a una visión futurista de ciudad moderna,
ejemplarizante y retadora que garantiza derechos individuales y Colectivos. 3. Colocar la
supervivencia de los grupos humanos, de pueblos, de colectivos, de lógicas y comprensiones
del mundo, de perspectivas del desarrollo; de sus culturas y sus acumulados, como centro
de análisis y variable primordial del desarrollo social, cultural, político, económico y
territorial. 4. Impulsar transformaciones sociales y culturales de alto impacto que coadyuven
a consolidar un proyecto de ciudad sostenible, sustentable y democrática. 5. Motivar
acciones en torno a una institucionalidad pública que propone y desarrolla condiciones y
oportunidades favorecedoras para la diversidad incorporando lineamientos, estrategias e
instrumentos de fácil aplicación. 6. Una gestión pública que reconoce y valora la pluralidad
de condiciones, situaciones y características propias de las personas y comunidades a las
que pertenecen; y madura progresivamente sus estrategias de atención, gestión e
intervención.” Palacios (2012).
El ámbito de este proyecto de inversión se enmarca dentro de las acciones desarrolladas para
fortalecer la economía popular de la ciudad, entendiendo esta misma como un grupo
conformado por individuos diversos con alto grado de vulnerabilidad y cuyas acciones lo
ponen en un territorio diferente de cualquier otro tipo de empresario adscrito a los demás
programas de apoyo institucional al emprendimiento y por lo tanto esta condición de
economía popular es la que le da el sello particular a las actividades y resultados esperados
del proyecto de inversión y solo será evaluable, desde las necesidades de este tipo de
población.
97
4.1.2 Descripción de los actores involucrados en el Proyecto
Este grupo está conformado para este caso por los prestatarios y los prestadores. Cada uno
está formado a su vez por subgrupos de acuerdo al nivel de beneficio recibido y grado de
desarrollo de la idea por una parte y de acuerdo a su papel en una u otra fase de la ejecución
del proyecto. Cabe anotar que existen un grupo de actores mucho mayor, que incluyen las
entidades del distrito asociadas, como por ejemplo, el IDIPROM, el ILPES, las asociaciones
de vecinos, que no caracterizamos ya que su forma de acción es indirecta a través de los
actores que se describen a continuación:
a. Los beneficiarios:
La información que aquí se muestra es producto de la recopilación de los consultores de la
fase de evaluación, con el formato suministrado por planeación distrital, la información que
validan los consultores de la fase de seguimiento y la información suministrada por los
emprendedores para su postulación al programa.
Los beneficiarios caracterizados corresponden a 2000 personas que se inscribieron en los
cinco grupos territorio asignados por la Secretaria Distrital de Desarrollo Económico. Estos
beneficiarios fueron clasificados en la etapa 1 de la siguiente manera: Tipo 1: 858 personas
con ideas de negocio y Tipo 2: 1217 emprendedores con negocio en desarrollo. No se
evaluaron proyectos pertenecientes al grupo Tipo 3.
De estos 1217 que corresponden a emprendedores en etapa de mejoramiento productivo, es
decir aquellos caracterizados como tipo 2, en promedio cuentan con 60 meses de operación
y ninguno exporta actualmente. En promedio estos emprendedores venden en promedio
$11.282.408 anuales.
98
Sólo un 30 % de los participantes cuenta con inscripción ante Cámara de Comercio, actuando
en su mayoría como personas naturales para todos los efectos legales. La mayoría opta por
no tener establecimientos comerciales y trabajar con el RUT como herramienta de
identificación empresarial debido, tal como lo manifiestan a nuestros consultores a que
consideran que su nivel de ventas no amerita incurrir en los costos añadidos que supone
contar con registro mercantil, u otra figura de formalidad.
Un 65% opera en espacios en arriendo independientes de su lugar de residencia, un 22% en
su casa, un 10 % son ambulantes o trabajan puerta a puerta, un 1% opera en el transporte
público y tan solo un 2% cuenta con un espacio propio específico para realizar su actividad
productiva. Un 8% se niega a informar la condición del lugar donde labora; es probable que
este fenómeno corresponda a que el emprendedor teme que el suministrar esta información
le afecte en cuanto deba sumir gastos que probablemente evade o elude.
En cuanto a aquellos que aún no han iniciado operaciones, el 40% de emprendedores tipo 1
aún no tiene claridad o se niega a compartir información sobre el lugar donde planea
desarrollar su actividad productiva, y un 44 % tiene claro que iniciaría labores en una oficina
o local en arriendo.
Los emprendedores tipo 1 pertenece en su mayoría al régimen subsidiado y los empresarios
tipo 2 en su mayoría al régimen contributivo. La participación por sector económico en el
que desarrollan su actividad fue la siguiente:
99
Grafico 12. Participación por sector económico
Fuente: EAN. Informe de caracterización 2013
Nótese la brecha existente entre los beneficiarios atendidos dedicados a actividades
comerciales de poca agregación de valor y aquellos orientados a sectores de transformación
y agregación intensiva de valor. De acuerdo a la información ofrecida por los consultores de
la etapa de evaluación, es probable que estas brechas se produzcan por deficiencias en la
calidad de la educación recibida por parte de los emprendedores y la celeridad con que se
lanzó el programa ofrecido por el Distrito, ya que muchas de las personas convocadas
pensaron en iniciativas de rápido montaje para acceder a los recursos de crédito.
La tendencia de generación de empleo en su mayoría se encuentra entre uno (32.28 %) y dos
empleos (34.85 %). Esta información concuerda con los resultados de clasificación o
composición por sector productivo. En la medida que incorporan menos procesos de
agregación de valor, es menos necesaria la participación de más personas en el mismo.
100
En este programa el rango de edad de los emprendedores está bien marcado por las personas
en edades entre 27 a 59 años, en cada uno de los tipos de emprendimientos representando el
83.33% en tipo 1 y el 78.88% en tipo 2.
En este proyecto se encontró que las mujeres están más dispuestas a asumir riesgos y a
generar nuevas opciones de vida tanto para ellas como para la población a su alrededor, es
así como el 56.39% del total de las unidades productivas están lideradas por mujeres. Tan
solo un 30 % aproximadamente de las personas participantes cuenta con estudios más allá de
la primaria completa (las cifras presentadas en el Informe de caracterización de los
beneficiarios (2014) son las siguientes: “En cuanto al nivel educativo para los empresarios
tipo 1, un 11.8 % cuenta con estudios secundaria completa, seguidos por universitaria
incompleta con un 8.14 % y secundaria incompleta 7.71 %. Esta relación no cambia mucho
para los empresarios tipo 2: secundaria completa 15.9 % tecnología completa 10.07 % y
secundaria incompleta 9.78 %.”).
En cuanto a la expectativa generada por el programa en los dos tipos de empresarios
caracterizados, coinciden que su mayor deseo se encuentra enfocado en la obtención del
crédito, que les permite adquirir un nivel de vida diferente. Representado en un 26.22% para
los empresarios tipo 1 y un 23.13% para los tipo 2. Las otras expectativas están divididas en
un sin número de opciones que permiten mejorar de una y otra forma su condición personal,
para los tipo 1, la opción que ocupa el segundo lugar en porcentajes es independizarse con
un 4.63%. Para los tipo 2 el fortalecer su negocio es la expectativa que registra el 11.18%.
En la gráfica se evidencian las otras alternativas de los empresarios.
De un total de 2075 visitas, el 94% (1949) de este total muestra claramente que los
empresarios no están interesados en agregar personas con las cuales tengan que compartir
decisiones del manejo de su emprendimiento.
101
Los empresarios tipo 2 tienen bien claro que su unidad productiva necesita invertir en
maquinaria y equipos representado en un 19.28% buscando el mejoramiento, los tipo 1
apenas el 9.98 % invierte en este ítem dado que la mayoría de estos proyectos están dedicados
al comercio. El capital de trabajo representa en los tipo 1 el 5.83 % y en los tipo 2 el 14.36%.
La materia prima y los inventarios representan un menor porcentaje de participación debido
a que las unidades productivas no se desarrollan en la parte industrial o de producción.
El total de los montos solicitados por los emprendedores tipo 1 es de $ 15.650.588.587 y
para el tipo 2 de $ 19.254.553.229. Los valores sugeridos por el grupo de consultores de la
universidad EAN para cada uno de estos tipos de unidades productivas son: para el Tipo 1
$3.785.826.626 y para tipo 2 $19.762.817.563.
Existen dos niveles diferentes de beneficios recibidos por el grupo caracterizado aquí como
prestatarios. Por un lado, se encuentran aquellos que después de la etapa de evaluación de su
perfil de negocio resultaban favorecidos con el acceso a crédito y que ingresaban a las fases
posteriores. Y por otro lado, se encuentran aquellos cuyos proyectos indistintamente de
haberse considerado viables o no técnicamente, por diferentes razones no resultaban sujetos
de desembolso y cuyo beneficio principal radicó en el acompañamiento inicial y la
retroalimentación ofrecida para mejorar técnicamente su iniciativa.
b. Los prestadores
En el desarrollo de este proyecto los prestadores están divididos en dos grupos: los
prestadores técnicos y los prestadores financieros.
Los prestadores técnicos fueron las tres organizaciones dedicadas a la asesoría, evaluación
técnica y acompañamiento técnico de los emprendedores a través de convenios de asociación
102
firmados con la SDDE. Para este caso fueron: la Universidad EAN, La Fundación
Universitaria los Libertadores y la Corporación Minuto de Dios. Los tres de carácter privado
sin ánimo de lucro, reconocidas legalmente.
Tabla 15. Prestadores.
Universidad EAN Fundación Universitaria
Los Libertadores
Corporación Industrial
Minuto de Dios
Tipo Privada – Institución
Universitaria sin ánimo de
lucro
Privada - Institución
Universitaria sin ánimo de
lucro
Privada – ONG sin
ánimo de lucro
Año de creación 11 octubre 1967 14 mayo 1982 1996
Ubicación Cl 79 # 11-45 Cra 16 # 63 A - 68 Cra. 76 #90-70
Número de
estudiantes
7500 10600 No aplica
Número de
programas
45 25 No aplica
Tipos de programas Pregrado, especialización,
maestría, doctorados
Pregrado, especialización No aplica
Modalidades Presencial - Virtual Presencial - Virtual No aplica
Acreditaciones Acreditación Institucional
de alta calidad – ABET –
ACBSP
Acreditación de programas No aplica
Fuente: Elaboración propia.
El papel de estos actores durante el proceso se concentró en el apoyo técnico a los
emprendedores durante las fases 2 y 4 del proyecto. En la fase 2 siendo organismos de
verificación de las condiciones técnicas expresadas en su postulación por el emprendedor,
sugiriendo ajustes a sus expectativas de financiamiento con base en la información
suministrada por la SDDE y aportando su concepto sobre la viabilidad o no de la idea de
negocio o el mejoramiento productivo propuesto.
En la fase 4, el papel de estas entidades fue realizar acompañamiento en la ejecución de los
recursos de crédito entregados al emprendedor, verificando que su ejecución se ajustase a lo
propuesto y realizando visitas periódicas para orientarlo sobre diferentes aspectos técnicos y
administrativos. Los tres operadores técnicos incluyeron para los emprendedores que
llegaron a esta fase un pequeño programa de formación grupal de entre 48 y 100 horas
certificables en conjunto con la SDDE. Estos programas se concentraron en temas como
103
manejo de las finanzas, plan de vida emprendedor, técnicas de ventas, exhibición comercial,
análisis de la competencia, selección de proveedores entre otros.
Cada operador tenía la obligación de evaluar el número de perfiles de negocio requeridos
hasta completar el alcance de sus convenios así: La Universidad EAN, 2000 perfiles
viabilizados, la Fundación Universitaria Los Libertadores, 1000 perfiles de negocio
viabilizados, la Corporación Minuto de Dios, 1000 perfiles de negocio viabilizados.
En particular, la Universidad EAN para cumplir esta meta contrató 75 consultores para la
fase 2 y 10 asesores para la fase 4. Estos consultores inicialmente se seleccionaron dentro de
la planta interna de cada institución, sin embargo debido a su alto perfil académico y por las
características de los perfiles de negocio a evaluar, la necesidad de desplazarse hasta el sitio
de trabajo o residencia del emprendedor y la cantidad de tiempo requerido en la fase 2 para
emitir el concepto técnico, se optó por desarrollarlo con contratistas independientes cuya
facilidad para administrar autónomamente su tiempo y experiencia especifica en el trabajo
de campo implicará menores costos para la operación.
Los contratistas que desarrollaron la labor, como regla general son profesionales del área
administrativa con experiencia mínima de cinco años en trabajo con población vulnerable.
Adicionalmente se contó con un equipo administrativo para la ejecución conformado por un
coordinador general, un coordinador para la fase de evaluación, un coordinador para la fase
de seguimiento, dos profesionales de apoyo y tres auxiliares técnicos.
Cada prestador técnico debía ofrecer un aporte de contrapartida en infraestructura física y
telemática. Es por ello que cada uno desarrolló diferentes herramientas y aplicativos
telemáticos para facilitar la sistematización de la información, cuyo volumen resultó
considerable.
104
Por cada emprendedor los operadores técnicos debían aportan al final de la fase 2: un
concepto técnico, Un perfil de negocio ajustado, documentos de soporte de identificación e
información contable suministrados por el postulante, una simulación financiera que diera
cuenta de la viabilidad financiera del proyecto, un plan de acción concertado con cada
emprendedor, fotografías que evidenciaran la realización del trabajo de campo, un formato
de caracterización diligenciado con destino a la Secretaria de planeación distrital.
En la fase de seguimiento, un formato por cada visita firmado por el emprendedor donde se
consignaban sus avances y compromisos ara posteriores reuniones, fotografías que
evidenciaran cada una de las visitas realizadas, un plan de acción ajustado, un informe sobre
el estado inicial y final de cada una de las unidades productivas atendidas, listados de
asistencia a las capacitaciones, copia de las presentaciones realizadas en cada una de las
clases, copia de las tareas y evaluaciones realizadas en las sesiones grupales.
Adicionalmente cada operador debía manejar por lo menos las siguientes tres bases de datos
y garantizar su actualización permanente: base de datos general que contiene la información
de contacto, tipo de emprendedor, actividad, sector económico, consultor de la fase de
evaluación, monto solicitado, monto sugerido, concepto de viabilidad generado. Una segunda
con la información actualizada de los emprendedores sujetos de crédito y la relación de vistas
realizada a cada uno y una tercera donde se consignaba la información obtenida de la ficha
de caracterización.
Los prestadores financieros: fueron aquellas entidades que participaron de la etapa 3 del
proyecto y se encargaron de por una parte administrar los recursos entregados por el Distrito
Capital para el subsidio a las tasas de interés a los emprendedores y por emitir su concepto
sobre la capacidad crediticia del emprendedor.
105
Adicionalmente estas entidades hacían parte del comité de financiamiento en conjunto con
la Subdirección de financiamiento de la SDDE cuya función principal era determinar los
sujetos de crédito. Para el caso del proyecto de inversión 716, se contó con la participación
como prestador financieros de la Corporación Financiera Confiar y a la Cooperativa de
ahorro y crédito Minuto de Dios, los dos de naturaleza privada vigilados por la
Superintendencia Bancaria.
Tabla 16. Entidades de financiamiento.
CONFIAR Cooperativa Minuto de Dios
Tipo Empresa asociativa de derecho privado de
la economía solidaria, de naturaleza
cooperativa, sin ánimo de lucro
Cooperativa de aportes y crédito, sin
ánimo de lucro
Año de creación 3 de julio de 1972 9 de abril de 2006
Ubicación Calle 52 # 49 – 40 Cra. 73 A No.80-12
Servicios Ahorro y crédito Aportes y crédito
Cobertura Medellín y Bogotá D.C. Bogotá D.C. Bello, Bucaramanga,
Cartagena y Villavicencio
Asociados 120.000 asociados y 48.000 ahorradores 21.153
Activos 363.424 millones de pesos No disponible
Fuente: Elaboración propia
Estos prestadores financieros, se encargaron en la fase 3 de realizar visitas de verificación
sobre el sitio de residencia e información crediticia suministrada por el emprendedor en las
fases 1 y 2, adicionalmente se encargaron de la recuperación de cartera una vez desarrollada
la fase 4 en los casos a que hubo lugar.
c. El Distrito Capital
La SDDE opera administrativamente de acuerdo con el siguiente organigrama:
106
Grafico 13. Organigrama de la SDDE
Fuente: SDDE (2014)
Para el desarrollo del proyecto de inversión 716, participaron en mayor medida las
subdirecciones de emprendimiento, formación y capacitación y financiamiento.
La SDDE cuenta con una estructura de procedimientos contenida en su sistema integrado de
gestión, cuyos elementos integrantes se pueden observar en la siguiente gráfica:
107
Grafico 14. Estructura de procedimientos de la SDDE
Fuente: SDDE (2014)
Adicionalmente la SDDE cuenta con los Centros de Desarrollo Económico Local, quienes
cumplieron un papel muy importante en la selección de los grupos beneficiarios postulantes
y en el acompañamiento inicial para realizar el levantamiento de la información y la
construcción del perfil de negocio que se iniciaría el proceso de evaluación, además fueron
durante toda la ejecución del proyecto el enlace principal de comunicación oficial entre los
beneficiarios y los demás prestadores.
108
Los CDEL fueron creados con el objetivo de atender las inquietudes de los ciudadanos en
temas de emprendimiento, productividad y competitividad y se han convertido en espacios a
través de los cuales los beneficiarios del proyecto manifiestan sus inquietudes a través de
charlas y reuniones informativas.
4.1.3 Necesidad a satisfacer
La necesidad a satisfacer desde la cual se plantea el proyecto es la desventaja productiva y
competitiva de las pequeñas unidades productivas y de los emprendimientos del Distrito para
insertarse y/o mantenerse en el mercado de acuerdo con la dinámica económica de la ciudad.
En este sentido se ubicaría en la escala de Schavarstein (2003) dentro de las necesidades de
desarrollo y de un modo más preciso podría clasificarse como la necesidad de oportunidad
de trabajo y capacitación laboral.
El diseño del proyecto caracteriza esta necesidad asociada los siguientes factores:
a. El bajo acceso a fuentes de financiación formales que facilite las acciones de
emprendimiento, ya que considerando la estructura productiva, financiera, contable
y administrativa propia de los emprendimientos de la ciudad, el sistema financiero
formal cataloga a estos emprendimientos como de riesgo alto; de manera que,
imponen procedimientos administrativos y requisitos demasiado rígidos de acuerdo
con la capacidad de los mismos.
b. La débil estructura productiva, administrativa, jurídica y financiera de los
emprendimientos del Distrito, explicada en parte por la escasez de oportunidades
laborales principalmente para los jóvenes y la rigidez del mercado laboral en las
condiciones de permanencia y acceso que garantice oportunidades de trabajo para la
población adulta. Estas características del mercado laboral propias de un país en
desarrollo, genera que los emprendimientos tiendan a ser formas de autoempleo que
109
se enfocan a la necesidad, rebosando en el desarrollo de empresas con baja capacidad
de gestión y bajas aspiraciones de crecimiento.
c. La deficiencia en el diseño de los productos y/o servicios generados por las pequeñas
unidades productivas de la ciudad, ocasionado por la restricción presupuestal propia
de estas unidades, que le imposibilitan contar con la tecnología, mano de obra e
infraestructura necesaria para mejorar su productividad y competitividad. La
inadecuada vinculación de los emprendimientos y de las pequeñas unidades
productivas con la tendencia económica e institucional del Distrito.
d. La situación descrita anteriormente está generando que las pequeñas unidades
productivas y los emprendimientos del Distrito no tengan la liquidez suficiente tanto
para iniciar el desarrollo de la idea de negocio como para mantenerse en el mercado.
De igual forma, esta situación ocasiona que las pequeñas unidades productivas y los
emprendimientos de la ciudad no cuenten con la capacidad suficiente para satisfacer
eficiente y eficazmente las necesidades de sus clientes, ni tengan en suficiente
posicionamiento y penetración de sus productos y/o servicios. Así mismo, la
desregulación y desarticulación en el ecosistema de emprendimiento no contribuye a
que los emprendimientos y las pequeñas unidades productivas conozcan cómo
afrontar las ventajas y/o amenazas que impone la dinámica propia del desarrollo
económico.
Dentro de la estructura metodológica que acompañó el diseño del proyecto, se menciona en
la ficha de información estadística, que para sustentar este proyecto se consideraron 65
aportes relacionados con el fortalecimiento empresarial y de nuevas iniciativas de
emprendimiento y se enmarcaron como aportes orientados a funciones que debe cumplir el
IPES, de hecho en un aparatado indica: “En general, estos aportes demandan la
complementariedad de los servicios ofrecidos a los emprendimientos y pequeñas unidades
productivas; de manera que, no se queden solo en temas de financiamiento sino que se creen
sinergias con estrategias de fortalecimiento empresarial. Por lo que es posible establecer
110
que los aportes ciudadanos están siendo recogidos en el planteamiento de este proyecto de
inversión”.
4.1.4 Actividades propias de la Gestión Social del Proyecto 716
Actividades propias del diseño:
El diseño del proyecto se realizó bajo los lineamientos de la Alcaldía Mayor de Bogotá y la
Secretaria Distrital de Planeación, de tal manera que se cumpliera con los requisitos legales.
Se cuenta con los estudios previos, la ficha de información técnica y sus anexos, que dan
cuenta del establecimiento de coberturas, objetivos, metas e indicadores esperados, como lo
resume la ficha básica de información técnica, de la cuál extraemos una parte:
Grafico 15. Ficha del proyecto de inversión 716.
111
Fuente: Banco Distrital de programas (2014)
Planteamiento descriptivo inicial
El diseño e implementación de estrategias y servicios que les permitan a los pequeños
empresarios y los emprendedores del Distrito fortalecer sus ventajas competitivas y
productivas para insertarse y/o mantenerse en el mercado de acuerdo con la dinámica
económica de la ciudad, requiere de un conjunto de acciones que se encuentran enmarcadas
en los siguientes componentes temáticos15:
15 Consideramos, aquí importante transcribir en su totalidad estos componentes por cuanto son fundamentales
para contrastar la información de la ejecución y resultados que realizaremos más adelante.
112
Componente temático 1: Alternativa de financiamiento para los emprendedores por
oportunidad del Distrito. El objetivo de este componente es desarrollar líneas de
financiamiento a la medida para el emprendedor y empresario del Distrito. Las acciones
desarrolladas con recursos del presente proyecto de inversión no apoyaran directamente la
creación y ejecución de líneas de financiamiento, pero si contribuirán como una alternativa
de financiamiento para los emprendimientos por oportunidad, para lo cual se espera apoyar
la creación de 150 emprendimientos por oportunidad mediante fondos concursables.
Adicionalmente, se desarrollarán procesos complementarios integrales de acompañamiento
y seguimiento para garantizar la sostenibilidad de estos emprendimientos en el mercado.
Componente temático 2: Alianzas público privadas para la vinculación de los
emprendedores y pequeños empresarios con la dinámica económica del Distrito. El objetivo
de este componente es articular con el nivel local y nacional intervenciones que beneficien
a emprendedores y empresarios del Distrito Capital. Esta alternativa permitirá generar
acciones conjuntas entre el nivel local y nacional, aprovechando las buenas prácticas de los
ministerios y otras entidades estatales; así como, la celebración de acuerdos publico
privados que permitan aunar esfuerzos técnicos, financieros y de gestión para beneficiar a
emprendedores y empresarios del Distrito Capital. Es decir, la principal actividad de este
componente consistirá en realizar alianzas público - privadas para poyar la generación de
esquemas asociativos, redes de proveeduría, y negocios inclusivos.
Componente temático 3: Fortalecimiento del ecosistema de emprendimiento. El objetivo de
este componente es fortalecer el ecosistema de emprendimiento a través de la vinculación de
sus actores en las discusiones institucionales sobre las intervenciones desarrolladas por la
SDDE que serán dirigidas a los emprendedores y las pequeñas unidades productivas del
Distrito.
Componente temático 4: Espacios de apoyo para la comercialización de los bienes y
servicios ofertados por los emprendedores y las pequeñas unidades productivas del Distrito.
Este componente integrará estrategias, a través de las cuales se buscará apoyar la
113
comercialización de los productos y/o servicios ofertados por los emprendedores y las
unidades productivas de la economía popular mediante la implementación de una
plataforma de exhibición y venta permanente en la Plaza de los artesanos; así como, la
realización de ferias temporales que beneficien a los emprendedores y a las pequeñas
unidades productivas del Distrito Capital
Componente temático 5: Asistencia y acompañamiento a los emprendedores y a las pequeñas
unidades productivas del Distrito. El objetivo de este componente es brindar a las pequeñas
unidades productivas y a los emprendedores de la ciudad el conocimiento sobre la forma
como se gestiona y administra una empresa, pues este es un factor determinante de su éxito.
No basta con el conocimiento del emprendedor sobre cómo se elabora el producto o se presta
un servicio.
Para asegurar la sostenibilidad y crecimiento de la empresa es indispensable la formación
en la administración y gestión empresarial, planeación estratégica, finanzas, contabilidad y
mercadeo, entre otros; teniendo en cuenta las herramientas y los resultados de programas
como Bogotá emprende.
Componente temático 6: Desarrollo de acciones priorizadas en los cabildos de presupuesto
participativo.
Actividades propias de la ejecución
Tal como ya se describió en otros apartes, la ejecución del proyecto se realizó en cuatro fases
en lo que fortalecimiento de iniciativas productivas se refiere:
114
Tabla 17. Actividades propias de la ejecución.
Fase Actividades de cada fase Actores
involucrados Escenario Documentos de soporte
Fase 1 Selección de
emprendedores,
levantamiento de
información y perfil de
negocio.
Emprendedores tipo
1 y 2 – CDEL
Viviendas y
unidades
productivas del
beneficiario
potencial
Perfil de negocio, registros de
visitas, cédula de ciudadanía,
cotizaciones,
Fase 2 Visitas a los emprendedores,
verificación de la
información, recopilación de
soportes documentales,
elaboración del concepto
técnico y financiero,
construcción del plan de
acción concertado.
Emprendedores tipo
1 y 2 – Operadores
técnicos
Viviendas y
unidades
productivas del
beneficiario
potencial
Concepto de viabilidad técnica
y financiera, fotografías,
planes de acción firmados por
los emprendedores, Rut del
emprendedor, cotizaciones y
facturas de compras, formato
de caracterización
diligenciado. bases de datos de
operadores
Fase 3 Visita de verificación de
condiciones de crediticias,
revisión de conceptos
generados por los
operadores técnicos, comité
de evaluación crediticia y
asignación de incentivos,
desembolso de recursos.
Emprendedores tipo
1 y 2 – Operadores
financieros -
Viviendas y
unidades
productivas del
beneficiario
potencial- Plaza de
los artesanos.
Formularios de solicitud de
crédito, Actas del comité de
financiamiento. Base de datos
de control de desembolsos.
Fase 4 Seguimiento al uso de los
recursos, visitas de
acompañamiento en el
desarrollo del plan de acción
concertado, capacitación
grupal, ferias y eventos
comerciales, reuniones
informativas y de
seguimiento con los
emprendedores, reuniones
de evaluación, revisión de
cartera, seguimiento y
retroalimentación del
programa.
Emprendedores tipo
1 y 2 – Operadores
técnicos
Viviendas y
unidades
productivas del
beneficiario
potencial –
Instalaciones de los
operadores
técnicos, plaza de
los artesanos, ferias
y eventos
comerciales.
Facturas, formato de visita
firmado por el emprendedor,
informes técnicos de los
asesores en campo, material de
capacitaciones, videos,
formatos de satisfacción con
capacitaciones, encuestas,
entrevistas.
Fuente: Elaboración propia.
4.2 Resultados de la intervención
El proceso de intervención de este proyecto se viene desarrollando aún, pero haciendo un
corte a la fecha podemos resaltar los siguientes aspectos:
115
4.2.1 Resultados en términos de la satisfacción de la necesidad que le da
origen:
De acuerdo con la descripción de la necesidad que da origen a la intervención, surge el
siguiente análisis de sus resultados:
a. Frente al bajo acceso a las fuentes de financiación formal que facilite las acciones del
emprendedor, el balance que podamos realizar es el siguiente: En un solo convenio de los
tres que dan operación al proyecto, de los 2075 perfiles de negocio evaluados al mismo
número de unidades productivas, los operadores técnicos viabilizaron 2000, de los cuales
fueron sujeto de crédito 614. Es decir, un 30 % de los emprendedores que obtuvieron una
evaluación positiva resultaron sujetos de crédito. Los restantes 1386 no obtuvieron ese
incentivo debido principalmente al agotamiento de los recursos destinados para atender el
proyecto. Considerados los tres convenios en conjunto, el distrito capital asignó $23.000
millones, lo que en promedio arrojó una cifra de $11.000.000 por unidad productiva
beneficiada.
Los procedimientos administrativos aplicados para asignar los créditos, sin embargo aunque
fueron más flexibles, debido a que se otorgó un peso menor al historial crediticio a la hora
de desembolsar los recursos, y parte importante de la decisión se planteó en términos de la
viabilidad técnica de las unidades productivas, creó dificultades por cuanto a la fecha la
cartera vencida se encuentra por encima del 30%.
b. Frente a la débil estructura productiva, administrativa, jurídica y financiera de los
emprendimientos del Distrito, se obtuvo una mejora significativa en la capacidad de los
emprendedores para desarrollar su empresa. En este sentido el componente de formación
y seguimiento al emprendedor, de acuerdo con la percepción de éste último es bastante
favorable. Teniendo en cuenta que estos emprendimientos han surgido como formas de
116
autoempleo, la perspectiva de progreso de los emprendedores acompañados es bastante
satisfactoria. En términos cuantitativos, se realizó un seguimiento sistemático a los
emprendedores, cada uno de los cuales en promedio recibió 7 visitas de acompañamiento
en los ocho meses en que se desarrolló esta etapa.
Se han realizado un total de 4720 acompañamientos a los 614 emprendimientos beneficiarios
de crédito.
c. Frente a la deficiencia en el diseño de los productos y/o servicios generados por las
pequeñas unidades productivas de la ciudad, si bien los resultados no son medibles, por
cuanto no fue una variable a tener en cuenta en la medición de resultados a la fecha, existe
una tendencia generalizada desde la percepción de los emprendedores de que el programa
les ayudó a suplir algunas deficiencias tecnológicas, a adquirir materias primas de mejor
calidad y a mejores precios, pero no existe referencias de los emprendedores frente al
tema del diseño de productos y servicios, expresan haber sacado provecho de la
formación en temas administrativos y solicitan mayor especificidad en la formación en
campos técnicos. Si bien la percepción del programa en términos de formación es buena,
se reconoce que la formación grupal tan general es un paso inicial y que se debería
continuar con un esquema de formación técnica por sectores.
En cuanto a los sectores favorecidos con el programa, los resultados no se compadecen
realmente con la necesidad planteada, por cuanto alrededor del 56% de los beneficiarios
desarrollan actividades comerciales con poca o casi nula agregación de valor, y aquellos
beneficiados dedicados a actividades industriales se acercan a un 8%. El proyecto si bien
atendió la necesidad de crédito, atendió la necesidad de mejora en la calidad del autoempleo,
descuido aspectos importantes para el crecimiento de la ciudad como la orientación
productiva de la misma y la posibilidad de creación de valor más allá del corto plazo.
117
d. Frente a la necesidad de generar liquidez en las unidades productivas para mejorar la
satisfacción de las necesidades de sus clientes, posicionarse y penetrar en los mercados,
el programa logró mediante los programas de formación y acompañamiento cambiar la
percepción del emprendedor sobre su negocio. Manifiestan ellos, haber comprendido la
importancia de preocuparse por conocer a sus clientes, establecer relaciones más estables
con sus proveedores y buscar nuevos mercados para sus productos. Los eventos feriales
ayudaron de igual forma a testar esta mejora, los participantes en los mismos percibieron
su participación de forma favorable, reflejado por supuesto en las ventas e ingresos
obtenidos durante estas jornadas.
4.2.2 Relaciones entre los actores
En términos de relaciones entre los actores, el proyecto como todos los de su naturaleza
muestra un alto grado de complejidad propio de la interacción de diversas entidades, de
naturalezas distintas frente a una población beneficiaria muy heterogénea en su composición
y actividad económica.
En primera instancia, la percepción de la población beneficiaria indica que el proceso ayudó
a mejorar la imagen que de la administración distrital se tiene. En las localidades
beneficiarias, los individuos hacen comentarios muy positivos frente al programa y critican
de forma recurrente que los recursos no fueron suficientes y que debería tener una
continuidad mucho mayor con los operadores.
Los beneficiarios también manifiestan que la formación grupal les ayudó significativamente
para relacionarse con otros emprendedores de su misma condición y que lograron establecer
relaciones de confianza en muchos casos que les permitieron desarrollar algunos negocios.
De hecho las jornadas de formación resultaron para la mayoría en un espacio provechosos
para generar canales de comunicación con los demás actores, que en otro espacio resultan
difíciles de manejar.
118
De otra parte, la relación entre operadores aun cuando mostró por momentos niveles de
cooperación, sobretodo en el desarrollo de los eventos de socialización, no deja de resultar
incómoda para los encargados, por cuanto siempre se está en un ambiente de competencia
por demostrar quien muestra mejores resultados y contrata nuevamente una nueva fase. Esta
situación es en muchos casos, favorecida por la misma estructura de coordinación y
supervisión interna del programa cuyas tensiones internas se expanden a los operadores.
La presión por resultados entre los actores de igual modo, se hace más evidente debido a la
divergencia de roles de cada uno y la poca interacción, que se limita a algunas reuniones
periódicas. El distrito como requisito de su actuar político, a través de la SDDE, presiona por
resultados, cifras e impactos inmediatos a sus subdirecciones, las cuales entran en conflicto
unas con otras por los límites de su responsabilidad en la ejecución y la trasladan a los
operadores técnicos, que a su vez presionan a sus asesores en campo. DE la misma manera
cada uno de los actores involucrados trabaja con lógicas y tiempos distintos, no existiendo
en la mayoría de los casos convergencia en la evaluación de prioridades en la ejecución.
Los beneficiarios también, ayudan en este proceso, ya que si bien a la hora de diseñar los
proyectos su actitud es pasiva, durante la ejecución exigen celeridad y están dispuestos a
aportar poco.
4.2.3 Aprendizaje y crecimiento
En términos de aprendizaje y crecimiento, la ejecución del proyecto mostró un avance en la
búsqueda de alternativas de financiamiento para emprendedores de base popular, sin
embargo y aun cuando falta revisar el impacto a futuro que pueda generar, el progresivo
aumento en la cartera vencida podría indicar que la financiación requiere diseñar mecanismos
más eficientes. En principio, de acuerdo con la percepción de los asesores de campo, los
emprendedores beneficiados aunque han mejorado su desempeñen sienten que los recursos
no fueron suficientes y que esto es razón suficiente para dejar de pagar. Para muchos
119
beneficiarios, la finalización de la fase de seguimiento ha generado que ya no se sientan
presionados a pagar, por cuando sienten que ya no cuentan con la presión para mantenerse
en el programa.
La SDDE implementa actualmente, como parte de su estrategia y de las lecciones aprendidas
del proyecto, la asignación de visitas a un solo operador en la perspectiva de que este
acompañamiento se desarrolle por actividad económica.
4.3 Análisis Estratégico de la Gestión Social
Los inputs para la realización de este análisis son las descripciones realizadas en el perfil y
los resultados del proyecto de inversión 716.
4.3.1 Modelo de Gestión
Estructura organizacional del proyecto:
Grafico 16. Estructura organizacional del proyecto
Fuente: Elaboración propia.
Gobierno Distrital
SDDE – Dirección de
formación y desarrollo
empresarial
Subdirección de
Formación
Subdirección de
Emprendimiento
Subdirección de
financiamiento
Operadores Técnicos –
U. EAN – U.
Libertadores –
Corporación Minuto de
CDEL Operadores Financieros -
Cooperativa Minuto de
Dios – Financiera Confiar
ENTE
S D
E C
ON
TRO
L P
ÚB
LIC
O
120
Procesos:
Grafico 17. Procesos del proyecto.
Fuente: Elaboración propia.
Funciones: Agrupadas en funciones de organización, dirección, programación, ejecución,
monitoreo y evaluación.
Tabla 18. Funciones del proyecto
Función organización dirección programación ejecución monitoreo evaluación
Actividades de cada fase
Establecimiento de lineamientos de asignación
x x
Divulgación del programa x x
Selección de emprendedores x x
Levantamiento de información x x
Elaboración perfil de negocio. x x
Visitas a los emprendedores, x
Verificación de la información, x
recopilación de soportes documentales, x x
Supervisión de operadores x x
Elaboración del concepto técnico y financiero,
x x
121
Construcción del plan de acción
concertado. x x
Visita de verificación de condiciones de
crediticias.
x
revisión de conceptos generados por los
operadores técnicos,
x x
comité de evaluación crediticia y
asignación de incentivos
x
desembolso de recursos x
Seguimiento al uso de los recursos x
visitas de acompañamiento en el desarrollo del plan de acción concertado,
x x
capacitación grupal, ferias y eventos comerciales
x x
reuniones informativas y de seguimiento con los emprendedores,
x x
reuniones de evaluación, x x
revisión de cartera, x x
seguimiento y retroalimentación del
programa
x x
Fuente: Elaboración propia.
4.3.2 Caracterización del Programa
En cuanto a los objetivos perseguidos, el programa desarrollado a la fecha, cuenta con
dificultades en la selección de los indicadores y resultados esperados, durante el desarrollo
del trabajo de campo son poco mencionados por los actores involucrados y en algunos casos
da la impresión que existe confusión.
Mientras para los beneficiarios la finalidad del programa es la asignación de un crédito
subsidiado, desde la perspectiva de los prestadores no hay concordancia, para los operadores
técnicos, los resultados se miden por el número de perfiles de negocios viabilizados y el
número de visitas realizadas a los sujetos de crédito y el número de beneficiarios asistentes
a los programas de formación; para los operadores financieros, el éxito radica en la
asignación de crédito y la recuperación de la cartera, para los responsables del distrito, se
fijan metas en cuanto a la colocación de créditos, cartera recuperada y número de visitas de
122
acompañamiento, sin embargo lo más importante para este actor y que no se ve reflejado en
el diseño del proyecto es la calificación que el programa tenga frente a la percepción de la
opinión pública. Estas metas cuantificables, difícilmente durante el proceso tuvieron una
métrica de comparación similar para todos los actores.
Las fuentes de verificación de los resultados se limitan a cuantificar los aspectos ligados al
otorgamiento de crédito y buena asignación de los recursos públicos medidos en horas de
asesoría (número de visitas) y cartera. No se observan indicadores ligados directamente con
todos los objetivos del proyecto de inversión, los cuales aluden más a la descripción de una
problemática distrital.
A la fecha no existe una proyección de los impactos esperados, en términos de los objetivos
planteados, que como se detalló antes tienen que ver con factores como calidad del empleo
en la ciudad, acceso a recursos de forma menos engorrosa para los emprendedores,
mejoramiento en el diseño de productos, y acceso a mercados alineados con la vocación
productiva de la ciudad.
La estrategia de acción de este programa se inscribe en la orientación pública nacional de
gestión participativa, cuyas características suponen un modelo adaptativo, donde se atienden
poblaciones heterogéneas con productos estandarizados y cuya idea central es el
aprovechamiento del aprendizaje continuo. El proyecto se desarrolla gradualmente y en su
siguiente etapa, los prestadores deberán aprovechar la experimentación para impulsar los
resultados.
4.3.3 Análisis de brechas
El objetivo descritos en el diseño del proyecto 716 es el siguiente: “Fortalecer la
competitividad y productividad de las pequeñas unidades productivas y los emprendimientos
del Distrito, a través de la implementación de estrategias y servicios que les permitan
123
insertarse y/o mantenerse en el mercado de acuerdo con la dinámica económica de la
ciudad.” y específicamente cuenta con los siguientes:
1. Disponer de mecanismos que faciliten la accesibilidad a recursos financieros para el
iniciar el desarrollo de la actividad empresarial de los emprendimientos por
oportunidad del Distrito
2. Realizar alianzas público privadas para la vinculación de los emprendedores y los
pequeños empresarios con la dinámica económica del Distrito
3. Fortalecer el ecosistema de emprendimiento a través de la vinculación de sus actores
en las discusiones institucionales sobre las intervenciones desarrolladas por la SDDE
que serán dirigidas a los emprendedores y las pequeñas unidades productivas del
Distrito.
4. Apoyar la participación de emprendedores y microempresarios en espacios que
favorezcan la comercialización de los bienes y servicios que estos ofertan
5. Diseñar intervenciones enfocadas a mejorar las competencias técnicas,
administrativas, jurídicas, tecnológicas y financieras de las pequeñas unidades
productivas y de los emprendimientos del Distrito Capital
Ligados a estos objetivos se presentaron las siguientes metas:
Grafico 18. Metas- Ficha del proyecto de inversión 716
Fuente: Banco Distrital de programas.
124
Cabe aclarar que no todas las metas detalladas en la ficha corresponden directamente a los
convenios desarrollados referentes a financiamiento economía popular. Algunos de los
objetivos planteados en el diseño no cuentan con una correspondencia lineal con las metas
programadas.
1. El objetivo 1: Disponer de mecanismos que faciliten la accesibilidad a recursos
financieros para el iniciar el desarrollo de la actividad empresarial de los
emprendimientos por oportunidad del Distrito, no cuenta con una meta asociada
directamente, sin embargo como ya lo describimos antes, el número de créditos
colocados es una variable que los prestadores controlan durante toda la ejecución de
los convenios, de hecho, las metas 2, 6 y 7 se miden, en la práctica con el acceso a
los créditos y acompañamiento por parte de los prestadores.
2. El objetivo 2: Realizar alianzas público privadas para la vinculación de los
emprendedores y los pequeños empresarios con la dinámica económica del Distrito,
se relaciona con las metas 1, 3,4, 5 y 6; sin embargo varias de ellas hacen referencia
a emprendimientos de oportunidad, los cuales, aun cuando no han sido plenamente
caracterizados entre los beneficiarios, por las características de la población atendida
es difícil pensar que correspondan a los casos de las unidades productivas atendidas.
3 El objetivo 3: Fortalecer el ecosistema de emprendimiento a través de la
vinculación de sus actores en las discusiones institucionales sobre las
intervenciones desarrolladas por la SDDE que serán dirigidas a los emprendedores
y las pequeñas unidades productivas del Distrito, no cuenta con una meta especifica
asociada. En la práctica se presenta una retroalimentación sobre el desarrollo del
proyecto, mediante reuniones permanentes con grupos focalizados de beneficiarios
atendidos, sin embargo no existe una evaluación de su real incidencia en las acciones
125
correctivas realizadas durante la asignación de créditos, ni su influencia en la
previsión de etapas posteriores de acompañamiento.
4 El objetivo 4: Apoyar la participación de emprendedores y microempresarios en
espacios que favorezcan la comercialización de los bienes y servicios que estos
ofertan se relacionan directamente con las metas 1,2 y 3. Pero no son actividades
constantes durante el desarrollo de los convenios aquí descritos. Para su logro se
desarrollan enlazados con otros proyectos desarrollados por la SDDE y sus
subdirecciones.
5 El objetivo 5: Diseñar intervenciones enfocadas a mejorar las competencias
técnicas, administrativas, jurídicas, tecnológicas y financieras de las pequeñas
unidades productivas y de los emprendimientos del Distrito Capital se relaciona
directamente con la meta 7 y está alineada completamente con la acción de los
operadores técnicos y financieros del programa. Es decir que los resultados obtenidos
por la combinación de operadores de los convenios, son los que sustentan este
objetivo específico, aun cuando el objetivo se relaciona con las pequeñas unidades
productivas y la descripción de la meta está orientada a economía popular, pareciendo
que estas dos definiciones se consideran análogas.
En cuanto a las metas, no se consideraron variables cualitativas que para los prestadores
si han sido en la práctica barreras para dar continuidad al programa, como por ejemplo,
la estrategia para asegurar que la cartera no aumente paulatinamente en el tiempo, como
homogeneizar metodológicamente a los operadores técnicos, como garantizar que los
operadores financieros consideren las mismas variables de riesgo, excluir la presión por
resultados del análisis técnico de viabilidad, reducción de los recursos disponibles para
la asignación y otros asociados.
126
4.3.4 Nodos Estratégicos
En el desarrollo de los convenios orientados al fortalecimiento de iniciativas productivas
podemos identificar los siguientes nodos de forma recurrente:
1. Falta de consenso entre los prestadores y prestatarios sobre la naturaleza y vocación
del proyecto. Existe una divergencia de opiniones sobre los resultados reales que
debería producir. Existe una percepción generalizada de que debe tomarse como un
proyecto de asignación de crédito de bajo costo, desestimando que el crédito se
concibe únicamente como una herramienta necesaria para impulsar productivamente
a los emprendedores. A pesar de ello lo que más destacan los emprendedores del
programa son las actividades de formación y acompañamiento, las cuales consideran
claves y de las cuales exigen que tengan continuidad.
2. El grado de correlación de las acciones realizadas con las metas planteadas no es
completamente claro. No se contempla una distinción clara en los objetivos y
resultados entre el emprendimiento de oportunidad y el de necesidad y la focalización
de los esfuerzos de política.
3. Insistencia por parte de los beneficiarios de calificar como insuficientes los recursos
otorgados y las demoras en la asignación, aun cuando recurrentemente manifiestan
estar satisfechos con las acciones de los prestadores y con el proyecto mismo.
4. La diversidad de los prestadores hace difícil unificar metodológicamente criterios de
selección y seguimiento. Del mismo modo, su diversidad en la infraestructura
destinada hace que existan diferencias significativas entre la calidad de la prestación
y los resultados obtenidos si se consideran por cada operador por separado. No se
diseñó previamente la metodología de acción, dejado a cada operador la
responsabilidad de hacerlo de acuerdo a su capacidad institucional y alcance de su
propio convenio.
127
5. La diversidad de los prestatarios. No es equiparable atender con las mismas reglas de
juego a los empresarios tipo 2 que a los emprendedores tipo1. Es notoria la brecha
que existe entre el proyecto de vida de unos y otros.
6. No se contemplan acciones concretas para medir el impacto de largo plazo del
proyecto. Los emprendedores no tienen mayores expectativas sobre el desarrollo de
su unidad productiva en el largo plazo, aunque se manifiestan optimistas no sienten
que sea un proyecto susceptible de tener un crecimiento acelerado.
7. La percepción de pasividad de los beneficiarios en el diseño del programa y la poca
participación en la evaluación del mismo. En su gran mayoría los beneficiarios
manifiestan no tener objeciones a la intervención. Solo en casos aislados manifiestan
inconformidades frente a su desarrollo. No es verificable plenamente la influencia
real de los beneficiarios en la concepción del programa frente al esquema de gestión
participativa.
8. No existe una comunicación suficientemente fluida entre actores, los organismos de
control se convierten en una amenaza al proceso por cuanto su intervención añade
presión para los prestadores en términos de celeridad para la ejecución.
9. Los beneficiarios acceden al programa más como oportunidad de rebusque que por
considerar el emprendimiento como una opción real de desarrollo profesional. La
selección de los emprendedores beneficiarios no es tan estricta en su componente
técnico y de análisis de riesgo.
10. Los prestatarios se enfrentan continuamente a la presión que imponen cuestiones
políticas ajenas al proyecto, por demostrar resultados contundentes y acelerados en la
intervención.
128
11. La formalización de las unidades productivas no es una variable que se tenga en
cuenta en la medición de resultados, asignación de recursos, ni en el acompañamiento.
4.3.5 Facilitadores
Como elementos facilitadores podemos señalar:
1. La intermediación para el fácil acceso a crédito, motiva a los beneficiarios a
inscribirse al proceso, asistir a las jornadas de capacitación y aprovechar las visitas
de acompañamiento.
2. Los operadores técnicos privados cuentan con metodologías y formas de operación
más agiles que les permiten desarrollar sus actividades con celeridad.
3. El acompañamiento mediante visitas a las unidades productivas, influye directamente
en el aprovechamiento de que de él puede realizar e emprendedor. Allí el beneficiario
puede resolver inquietudes que le resulten particulares a él o propias de su actividad
y cuenta con la retroalimentación permanente por parte de un asesor técnico. La
regularidad de las visitas es un elemento importante ya que le agrega disciplina al
emprendedor que debe ir mostrando avances.
4. Ofrecer las jornadas de formación grupal, se convierte en un escenario de
relacionamiento y socialización para los beneficiarios del proyecto. Los eventos
feriales se vuelven una escuela activa en la formación y los emprendedores tienen la
oportunidad allí de ensayar y mejorar aspectos determinantes en su éxito en el
mercado como: formas de exhibición comercial, relacionamiento con el cliente,
manejo del dinero, etc.
5. La posibilidad de certificar la formación, es un motivador importante para el
emprendedor beneficiario. La observación demuestra que aquellos que fueron
129
certificados son aquellos que tienen menos índices de mora y son quienes mejor
atención prestaron al acompañamiento.
6. Las reuniones de seguimiento al convenio son un buen espacio para que los
beneficiarios manifiesten sus dudas y más allá de quejarse sobre el proceso, aporten
en la construcción conjunta de la estrategia de intervención.
7. Permanencia del proyecto. El proyecto está por abrir su segunda convocatoria a
emprendedores.
4.3.6 Senderos Estratégicos
Para contrarrestar el efecto de cada uno de los nodos identificados se propone:
1. Establecer desde el principio el concepto y tipo de emprendimientos que se van a
beneficiar de acuerdo a la problemática identificada en los estudios previos.
2. Formalizar una estructura de resultados establecida conjuntamente con todos los
actores participantes. Dejando claro los mecanismos de intervención y la naturaleza
de la acción de cada uno.
3. Dar continuidad al proceso en términos no solo de realizar nuevas convocatorias, sino
de continuar con el acompañamiento a los beneficiarios apoyados hasta el momento.
4. Aprovechar las lecciones aprendidas durante el desarrollo de esta convocatoria.
Diseñar estrategias separadas para emprendedores tipo 1 y 2.
5. Ejecutar el proyecto alineado con los otros programas de la SDDE. Continuar con el
desarrollo de este proyecto clasificando los emprendedores por actividad económica
desde la fase 1.
130
6. Establecer desde el principio una escala de asignación de recursos de crédito en el
tiempo y ajustarla de tal manera que se beneficien menos unidades productivas, pero
con mayores posibilidades de fortalecerse productivamente.
7. Distinguir en la fase de convocatoria entre emprendedores por oportunidad y por
necesidad y establecer claramente los criterios con los cuales se medirán los
resultados por separado en cada segmento.
8. Unificar metodológicamente las actividades de los prestadores técnicos y financieros.
9. Determinar los impactos esperados en el largo plazo y diseñar los mecanismos que
permitirán la medición de las variables cualitativas asociadas.
10. Divulgar los beneficios reales del programa con los beneficiarios, indicando
claramente sus limitaciones.
11. Buscar mecanismos diferentes para el acceso a recursos financieros de los
beneficiarios, de tal modo que exista menos injerencia pública en la asignación de
crédito, dejando en manos de los operadores financieros la selección y estableciendo
mecanismos de motivación suficientes para que el beneficiario tenga incentivos para
pagar su crédito de manera oportuna. Por ejemplo, generando beneficios tributarios,
beneficios durante el proceso de formalización, etc.
4.4 Revisión de los criterios de evaluación sobre la participación de los
beneficiarios:
Desde el punto de vista del grado de participación de los beneficiarios en el proceso tenemos:
131
1. Representatividad y máxima inclusión: El programa tal como está concebido y se
desarrolló corresponde a un enfoque diferencial en la identificación de los beneficiarios.
Los beneficiarios participan en el desarrollo de las actividades desde la pasividad de su
rol como receptores de las acciones de la gestión social y como sujetos activos a través de
algunos espacios de discusión sobre la ejecución. Los prestadores manifiestan que el
diseño de la política recoge elementos de aprendizaje y evaluación realizados en proyectos
anteriores, pero no existe evidencia, ni se manifiesta en la percepción de los actores, que
durante el desarrollo del proceso se haya ofrecido la misma información a todos los
interesados y menos aún podría afirmarse de acuerdo con la observación que la totalidad
de los beneficiarios participantes entienda la naturaleza real de la atención.
2. Funcionamiento deliberatorio: la información con que cuentan los diferentes actores es
limitada. No existe una suficiente ilustración a los beneficiarios y demás actores sobre
toda la cadena de ejecución del programa. En la mayoría de los casos los beneficiarios han
prestado toda su atención al monto de recursos que recibirán y han desestimado la
importancia del acompañamiento, aun cuando lo agradecen, se vuelve secundario ante la
posibilidad de recibir recursos financieros. Los mecanismos de intervención tampoco son
claros para la ciudadanía en general, acuden indistintamente a cualquiera de los
prestadores en busca de atención, lo cual da muestras de que no tienen claro cómo
participar. En esas condiciones un ejercicio deliberatorio es prácticamente inexistente. La
mayoría percibe el programa como un programa de crédito simple. Esto indica que la
población no cuenta con las herramientas de juicio suficientes para valorar y mucho menos
participar durante todo el proceso. Los prestadores privados, por su parte cuentan cada
uno con información parcial sobre el proceso, lo que los ubica también en una situación
de poca participación frente a los procesos de ajuste en los cuales podrían aportar
significativamente. El ejercicio en este caso, se vuelve un ejercicio de control y rendición
de cuentas. Adicionalmente los prestadores estigmatizan al beneficiario atribuyéndole
únicamente el oportunismo como motivación para acceder al programa.
132
3. Motivación para participar: Este programa en particular por incluir la colocación de
recursos con bajas tasas de interés, genera un efecto doble en la motivación de los
beneficiarios. Por una parte genera gran expectativa por la recepción de recursos
financieros, ante la cual los beneficiarios están dispuestos a hacer algunos sacrificios en
cuanto a tiempo. Sin embargo, en general, para los beneficiarios cualquier
contraprestación es un sacrificio. Es decir, el diligenciamiento de la información, el
tiempo que dedican a atender al asesor, las horas que reciben de capacitación, etc son
vistas como tiempo sacrificado. La mayoría se siente compensada por los recursos de
crédito obtenidos, aun cuando provengan de un prestador que no tiene la suficiente
legitimidad para realizar el cobro. Es innegable que fenómenos cotidianos en la ciudad
como la corrupción, menguan las intenciones de pago de los beneficiarios y de alguna
manera son un argumento para el no pago de obligaciones financieras.
Adicionalmente los funcionarios que atienden el programa se quejan del poco interés que
demuestran los beneficiarios, sin embargo, la mayoría de los beneficiarios no cuenta con
incentivos reales para participar activamente, ya que existe una prevención explicita
contra la real utilidad de estas aportaciones. Los beneficiarios perciben que participar es
perder el tiempo, ya que difícilmente lo que manifiesten tendrá repercusión real. Además
es resaltable, que se trabaja con poblaciones de escasos recursos, que no pueden dejar de
4. Apoyo al bien común: Aunque la filosofía de la intervención tiene un alto grado de
satisfacción de necesidades de un grupo amplio de la población plenamente identificado.
Existe en el proceso grupos que por su vulnerabilidad son privilegiados en la asignación
de recursos, permeando en muchos casos los criterios técnicos de asignación. Muy pocos
de los beneficiarios evalúan el programa más allá del beneficio personal que les ofrece.
Esto se observa en las manifestaciones de inconformidad por los montos asignados en
materia de financiamiento, que son casi que las únicas generadoras de interés por parte de
la comunidad. Ninguno hace referencia a temas relacionados con el bienestar general de
su comunidad.
133
Teniendo en cuenta estas condiciones observadas el esquema de intervención, y muy a pesar
de su filosofía, continúa siendo más del tipo de la estrategia de paritarismo con algunos
rasgos incluso de asistencialismo. La función del gobierno en este caso, es la simple
regulación, oferta y provisión de la política y medios de intervención. El beneficiario es
receptor y solo intercambia beneficios con unos pocos actores, pero desde una óptica de
acción individualista donde la solidaridad y la cooperación son fenómenos aislados y la
participación ciudadana se reduce al control social de la ejecución.
134
Capítulo 5. Conclusiones y Recomendaciones
5.1 Conclusiones
Desde el emprendimiento
1. En Colombia, en general, y particularmente en el Distrito Capital hemos avanzado en
materia de fomento al emprendimiento, es clara la buena intención de favorecer la creación
y sostenibilidad de las empresas que surgen como alternativa al desempleo, utilizando
mecanismos de fomento financiero y acompañamiento empresarial de forma simultánea.
Durante las últimas dos décadas es notable el crecimiento del aparato institucional orientado
a incentivar el emprendimiento como opción laboral y el aumento de recursos disponibles
para tal fin.
2. El emprendedor descrito en la política pública en Bogotá y para el cuál se diseñan
políticas dista de ser el emprendedor que realmente accede a los beneficios de la misma. La
política pública en muchos de sus apartes dirige su mirada a fomentar emprendimientos
dinámicos como alternativa al desempleo, desde lo que Veciana (1999) denomina el enfoque
gerencial y se aleja de la concepción de emprendedor como aquella persona que combina
capacidades, conocimientos y vocación para desarrollar empresa. Es muy difícil que un
emprendedor en condiciones de vulnerabilidad, como aquellos que están siendo atendidos,
reúna estas tres características. De igual modo, tampoco su selección para participar en el
proceso incluye una revisión mínima de que efectivamente la persona cuente con la
confluencia de estos tres elementos.
3. El emprendedor beneficiario es más el resultado de lo que Gibb y Richie (1982)
denominan la “emergencia adquirida”, dado que su actuar como emprendedor surge de
influencia y condicionamientos propios de su modo de vida y de este modo, el enfoque que
135
subyace la gestión social de su desempeño parecería estar ligado más con la creencia de que
la intervención social puede activar en el individuo las características o rasgos que le
permitan desenvolverse a futuro como empresario.
Desde la gestión social
4. La política pública distrital de emprendimiento se puede enmarcar como gestión
social por cuanto es un desarrollo estratégico orientado la satisfacción de una necesidad de
un grupo amplio de personas en el Distrito como lo es, la carencia de condiciones de
empleabilidad. Desde su definición, los programas y proyectos asociados con el fomento al
emprendimiento en la ciudad requieren de acciones de análisis, la formulación, evaluación,
implementación y monitoreo, de las condiciones institucionales y organizacionales que son
necesarias para obtener resultados sociales adecuados, es decir, requieren de gestión social.
5. La gestión social del emprendimiento en Bogotá no es ajena a los desafíos expresados
por los teóricos de la gestión social: a. Es necesarios velar por la creación de valor público,
en este caso expresado en mejor calidad de vida para los beneficiarios medidos en términos
de aumento de oportunidades laborales y aumento en el nivel de ingresos. b. Los recursos
dedicados a la gestión social son limitados para atender el número tan significativos de
personas que se encuentran en el segmento a atender y más si se considera que la expectativa
de creación de unidades productivas es alta debido a la elevada concentración de la actividad
productiva en la ciudad. c. la gestión social de estos recursos, por su cuantía y disposición no
escapa a prácticas poco éticas por parte de los diferentes actores en juego. d. La diversidad
de mandantes, es un reto, en el Distrito, sin embargo, es un reto por cuanto se asume que el
ciudadano está en condiciones solo de realizar control y pedir rendición de cuentas. e. Existe
una presión intensa por parte de los organismos de control por verificar procesos, resultados
e impactos. Es decir, que son ejercicios que requieren de métodos no tradicionales de
medición, pero que están condicionados a los requerimientos por indicadores de gestión
favorables que validen a los prestatarios de turno.
136
6. El grado de correlación de las acciones realizadas con las metas planteadas no es
completamente claro. No se contempla una distinción clara en los objetivos y resultados entre
el emprendimiento de oportunidad y el de necesidad y la focalización de los esfuerzos de
política y determinar actividades económicas priorizables.
7. Desde la perspectiva de la gestión social es indispensable establecer una jerarquía de
valores y preferencias de los interesados para establecer cuál es la verdadera dinámica que
permita aterrizar esta intervención de forma provechosa para los individuos. La interacción
permanente entre el sujeto de la política y los otros actores, y las mismas estructuras sobre
las cuales se mueven los procesos de gestión debe ser armónica con esta realidad personal
del emprendedor de subsistencia, siendo este último un sujeto caracterizado por unos
intereses que han ido surgiendo y aclarándose por el camino.
8. Para que ello pueda ser posible es importante diseñar la política continuamente como
parte de la comprensión del contexto en que se mueve el emprendedor y su visión del futuro.
Los objetivos mismos de lo que se pretende incentivar deben ir cambiando de acuerdo a la
dinámica por lo tanto deben ser iniciativas que cuenten con una sostenibilidad significativa
en el tiempo lo que permita ir consolidando poco a poco las visiones de los involucrados.
Desde la participación del beneficiario
9. La gestión social del emprendimiento se concibe desde el diseño con un enfoque
diferencial. Es decir basado en la segmentación de la población objeto de la intervención,
con el fin de atender intereses y necesidades de grupos más enfocadas y con la idea de que
así es posible elevar el impacto de los resultados.
10. La participación del beneficiario en los proyectos de gestión social en el área se limita
a un rol de control de la gestión. No existe aún en el terreno de la gestión social en
137
emprendimiento la práctica de la gestión como proyecto comunitario y del co-diseño como
medio de participación ciudadana.
11. Un enfoque diferencial en la gestión social, si bien es un paso importante para el
reconocimiento de las necesidades de los beneficiarios que dan origen a la intervención, no
puede considerarse un enfoque de co- diseño propiamente dicho, que garantiza que las
necesidades de los individuos sean satisfechas, ya que carece de funcionamiento
deliberatorio, motivación para participar y representatividad, aspectos sin los cuales el
beneficiario queda excluido del proceso de construcción.
12. Por sus características, el emprendedor debe ser un sujeto muy activo y participativo
en los proyectos. Resulta contradictorio que mientras las teorías de emprendimiento lo
describen como un sujeto arriesgado, innovador, asignador de recursos, un elemento central
en crecimiento económico; el diseño y ejecución de los programas no lo vincule de esta
manera. Se concibe a los sujetos como meros receptores de conocimientos inculcados por
otros, de recursos financieros, pero se trabaja poco en su integración al proceso económico.
Desde la Visión del emprendedor
13. Un proceso previo a cualquier intervención es comprender que el desarrollo de
las habilidades necesarias para que el emprendedor genere su propia visión sobre el negocio
que va formando es indispensable para viabilizar su esfuerzo. Si bien cada uno lo diseñará
de acuerdo a los condicionamientos y limitaciones que su propio entorno y forma de
relacionamiento, cultura, proceso, experiencia, le indique, si hay que reconocerlo como un
ser capaz de desarrollarse con estos elementos y proyectarse en una situación de mejora
respecto al fenómeno que lo llevó a plantearse el reto empresarial.
14. Una vez el individuo emprendedor cuenta con esa visión clara, empieza el
verdadero trabajo de la gestión social de este tipo de proyectos y es coadyudarlo para que
138
construya las condiciones sobre las cuales puede cumplir esa meta. Parte importante de este
desarrollo si se puede generar dentro de un marco colectivo de participación.
15. La gestión social del emprendimiento, se desarrolla entonces, para ayudar al
emprendedor a encontrar esa visión y desarrollar las habilidades que le permitan llevarla a
cabo, tradicionalmente se ha orientado la mejora en la capacidad técnica, el impulso inicial
al desarrollo de pequeños negocios y al desarrollo de la mentalidad empresarial.
5.2 Recomendaciones
Para que un programa enmarcado en el la gestión social cuente con la posibilidad real de
satisfacer las necesidades de la población que le dan origen es necesaria la confluencia de
diversos elementos promotores y adversos que se deben verificar desde su diseño y deben
ser susceptibles de ser evaluados y reformulados durante y posteriormente a su ejecución.
Para el caso particular de la gestión social en emprendimiento en el distrito capital, a partir
de la revisión de la experiencia del proyecto de inversión 716 cuales podemos destacar los
siguientes:
1. Debe existir una coherencia plena entre los principios orientadores de la gestión pública
consagrados en los planes de desarrollo y los mismos programas, por cuanto si bien en los
primeros se establecen parámetros muy razonables de acción, en la práctica los ejecutores no
los están aplicando, probablemente por desconocimiento o porque los cambios
administrativos constantes desincentivan al gestor público para involucrarse más. Es
importante que desde los gestores públicos en campo tengan claridad sobre cuál es el tipo de
emprendimiento que se desea apoyar en los planes de desarrollo. Se plantea fomentar el
emprendimiento por oportunidad mientras se gestionan programas que en la práctica por sus
condiciones de operación terminan desarrollando emprendimientos de subsistencia sin
mayores posibilidades de crecimiento.
139
2. Realizar programas de gestión social orientados al fomento al emprendimiento como opción
para obtener una disminución en el nivel de desempleo o mejorar la calidad del empleo, no
puede resultar en una política homogénea para toda la población. Es importante tener claro,
que uno de los principales factores para que un emprendedor se desarrolle es que sea parte
de su vocación personal, independientemente de los factores que lo llevaron aencontrarla. Es
indispensable establecer otros mecanismos de convocatoria diferente a los actuales, que
incluyan una evaluación de la trayectoria, capacidades, habilidades y compromiso del
beneficiario. No hay que perder de vista que es la confluencia las personas, las oportunidades
y los recursos quienes se mezclan en el proceso de generar empresa.
3. De la misma forma, debe existir una relación directa entre los objetivos planteados y la forma
cómo se miden los resultados esperados, aun cuando los objetivos de los programas sociales
pueden ser muy heterogéneos debido a que deben responder a múltiples actores que no
siempre responden a las mismas lógicas de acción. Los indicadores de medición de la gestión
deben ser planeados en diversos niveles, no solo en términos de productividad de los
prestadores, sino teniendo en cuenta el problema que da origen a la atención.
4. La calificación y formación de los prestadores es clave en el proceso. Los ejecutores deben
tener la suficiente claridad sobre los objetivos que desarrollando y las condiciones sobre las
cuales trabajan para poder mediar con las comunidades que no siempre están dispuestas a
cooperar en la solución de sus necesidades. No necesariamente los beneficiarios tienen la
claridad suficiente sobre la implicación de empezar un desarrollo productivo.
5. Los beneficiarios deben participar de manera más activa en el proceso, no basta solo con
contar con ellos cuando se está realizando el levantamiento de la información que da origen
al programa y a la hora de evaluar el proceso, sino que realmente deben integrarse al proceso
a través de metodologías más flexibles de operación. Es importante que los beneficiarios de
los programas entiendan la naturaleza y finalidad de cada intervención y participen del
proceso. La gestión participativa establecida en los planes de desarrollo no implica solicitar
140
al beneficiario durante el proceso o al final del mismo para que cuente sus inconformidades
y exprese su agradecimiento, sino que realmente debe participar activamente como ejecutor
y no solo como beneficiario.
6. La continuidad es clave en programas de gestión social, ya que las lecciones aprendidas son
las que van trazando la orientación de los mismos. Los objetivos de un programa de gestión
social en emprendimiento deben ser dinámicos y reformularse durante la ejecución
adaptándolos a los nuevos requerimientos y a la misma interacción con la comunidad.
7. Es fundamental que la operación de los programas sea mixta, ya que los privados por
naturaleza cuentan con menos barreras de acción que los organismos públicos, lo que le
agrega celeridad al proceso y la participación del sector público aporta institucionalidad y
garantiza que se persigan los objetivos. No obstante, los mecanismos de contratación de los
operadores técnicos de los programas influyen directamente en el poco consenso entre los
prestadores y prestatarios sobre la naturaleza y vocación de los proyectos. Los esquemas de
trabajo basados únicamente en indicadores de productividad del operador, la presión política
generan desconfianza entre los prestadores de la gestión social y no permiten concentrarse
en los requerimientos de los beneficiarios y mucho menos incluirlos en el proceso.
8. Es necesario que previamente se realice una caracterización amplia y se segmenten los
beneficiarios, no todos pueden ser atendidos con los mismos esquemas de trabajo. Cada
grupo debe integrarse en todas las acciones, es posible realizarlo utilizando herramientas
metodológicas más cercanas a las utilizadas para el diseño de productos, se trata de escuchar,
reflexionar sobre las necesidades, co-crear con el beneficiario la ruta de solución, guiarlo a
él en la implementación y medir el impacto real de acuerdo al origen. Las reuniones de
seguimiento al convenio son un buen espacio para que los beneficiarios manifiesten sus dudas
y más allá de quejarse sobre el proceso, aporten en la construcción conjunta de la estrategia
de intervención, pero no pueden volverse la única manera de integrar al beneficiario.
141
9. Es determinante para que un programa de fomento al emprendimiento ofrezca resultados
medidos en términos de sostenibilidad de las unidades productivas en el tiempo, que se
oriente al desarrollo de modelos de negocio y no a la selección por parte del beneficiario de
un producto o servicio que puede ofrecer, de la misma forma, si bien hay que ayudar al
beneficiario a obtener recursos, y la intermediación para el fácil acceso a crédito, motiva a
los beneficiarios a inscribirse al proceso, asistir a las jornadas de capacitación y aprovechar
las visitas de acompañamiento; no puede resultar que el crédito se a la base sobre la cuál gira
el programa, desvinculando al beneficiario de su proceso. Y es por ello que hoy por hoy, los
beneficiarios de estos proyectos se muestran escépticos y no tienen mayores expectativas
sobre su desarrollo empresarial.
10. Es cierto que la gestión social se encamina a solucionar necesidades puntuales de las
comunidades, pero es precisamente por eso que para el caso de los programas de
emprendimiento su impacto no puede medirse solo en el número de personas formadas para
hacer empresa, o beneficiarias de crédito o auxilios financieros, es indispensable que se
considere medirla en términos de la capacidad real de esos emprendimientos para generar
ingresos, empleos directos y mejoramiento de las condiciones de vida de los beneficiarios.
11. La cobertura y eficiencia en la asignación de recursos no es sinónimo de que un programa de
estas características contribuya al bienestar perdurable de los beneficiarios. Tampoco se trata
de utilizar lógicas únicamente provenientes del mercado para asignar recursos públicos, en
ultimas lo que se requiere es vincular a la comunidad lo suficiente para que el estímulo desde
lo público potencie su capacidad de desenvolverse como privados.
12. El acompañamiento mediante visitas a las unidades productivas, influye directamente en el
aprovechamiento de que de él puede realizar e emprendedor. Allí el beneficiario puede
142
resolver inquietudes que le resulten particulares a él o propias de su actividad y cuenta con
la retroalimentación permanente por parte de un asesor técnico. La regularidad de las visitas
es un elemento importante ya que le agrega disciplina al emprendedor que debe ir mostrando
avances. También sirve como herramienta para acercar al prestador al día a día del
beneficiario y modificar su acción en la medida que se va desarrollando el acompañamiento.
13. Ofrecer las jornadas de formación grupal, se convierte en un escenario de relacionamiento y
socialización para los beneficiarios del proyecto. Los eventos feriales se vuelven una escuela
activa en la formación y los emprendedores tienen la oportunidad allí de ensayar y mejorar
aspectos determinantes en su éxito en el mercado como: formas de exhibición comercial,
relacionamiento con el cliente, manejo del dinero, etc. La posibilidad de certificar la
formación, es un motivador importante para el emprendedor beneficiario. La observación
demuestra que aquellos que fueron certificados son aquellos que tienen menos índices de
mora y son quienes mejor atención prestaron al acompañamiento.
14. Para que la ejecución de programas de gestión pública en emprendimiento realmente dé
cuenta de las necesidades de los beneficiarios en el Distrito Capital, solo se podrá concretar
una vez los prestadores entiendan que el beneficiario es quien debe llevar el peso de la
ejecución del proyecto y debe estar inmerso activamente en todas las fases de desarrollo, lo
que lleva a un esquema que más allá de la formación tradicional y la asignación de recursos,
contenga un acompañamiento guiado no por la entrega de conocimientos sino por la
construcción compartida del proyecto empresarial.
Es fundamental que en la gestión social de este tipo de programas se vincule la riqueza del
hecho de trabajar con sujetos particulares como lo son los emprendedores, quienes por sus
características personales y la urgencia de obtener soluciones cuentan con la capacidad de
aportar significativamente al diseño de las soluciones.
143
Reflexión final
En el desarrollo de este trabajo de investigación se contó con la cercanía a los diferentes
actores, lo que favoreció la comprensión de la manera cómo se desarrolló el proyecto de
estudio y permitió desarrollar el análisis estratégico propuesto bajo la metodología
seleccionada quedando presente que realizar un análisis de este tipo puede resultar en la
identificación de elementos que mejoren la gestión tradicional de los proyectos sociales en
el Distrito. Sin embargo, el tiempo requerido y el volumen de la información que se debe
entrelazar hace que metodológicamente sea difícil su escalabilidad en el Distrito u otras
entidades que por la premura de la ejecución de recursos y la dinámica misma de su actividad
pueden no estar interesados.
Como principal limitación de este trabajo y que resulta en una ruta de investigación a futuro
consiste en revisar la disponibilidad y/o desarrollo de herramientas y metodologías que
permitan al gestor público incorporar los parámetros descritos en este documento de manera
ágil y oportuna, de tal manera que realmente se logre incluir al beneficiario de la atención en
su propio gestor, inclusive alterando la forma misma como desde la política pública se
concibe al emprendedor sujeto de la intervención.
De igual forma, es claro, que este estudio no pretende ser definitivo en el tema del rol de los
beneficiarios en los proyectos públicos en emprendimiento y busca servir como un paso
inicial para futuras investigaciones que pudiesen generarse a partir de sus conclusiones y la
validación que los expertos puedan realizar a la luz de otros enfoques y paradigmas de
investigación.
Desde los objetivos que dieron origen al presente trabajo podemos advertir que a la pregunta
de investigación y objetivo general sobre la cual se busca reflexión, se da respuesta con el
desarrollo de las conclusiones finales, por cuanto se trata de un ejercicio de percepción del
investigador y se sustenta en el cruce de la información provista en el capítulo cuatro a través
del análisis presentado y el marco teórico descrito detallado en el capítulo uno.
144
Del mismo modo, el objetivo específico número uno, “Establecer el marco teórico sobre
gestión social en emprendimiento y el estado del arte de los enfoques de análisis de la gestión
social aplicables al caso del Distrito Capital en la vigencia 2013 – 2014, se desarrolla en el
capítulo 1, a través de la recopilación bibliográfica y la clasificación de enfoques.
Al objetivo específico número dos, “Examinar la participación de los beneficiarios en el
desarrollo de un proyecto de gestión social en emprendimiento en el Distrito Capital a partir
de la aplicación de un análisis estratégico y los criterios de evaluación de participación del
beneficiario para uno de los proyectos ejecutados en la vigencia 2013 – 2014” se da
respuesta en el capítulo 4, logrando establecer una imagen de la participación del beneficiario
en la ejecución de un proyecto concreto por medio del análisis estratégico de la gestión
propuesto. Cabe resaltar que este trabajo aunque cuenta con un volumen importante de
información sobre el proyecto de inversión, no trata de cuestionar la ejecución del proyecto
o su concepción más que en lo pertinente a la participación del beneficiario en el conjunto de
decisiones que lo constituyen.
Al objetivo específico número tres, “Identificar algunos requerimientos mínimos que la
gestión social en emprendimiento debe atender para incluir en su gestión a los beneficiarios
en el Distrito Capital” se da respuesta en el capítulo cinco, a través de la reflexiones del
investigador de acuerdo con la metodología planteada guiadas por las percepciones de los
beneficiarios, prestadores y expertos consultados.
145
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Waissbluth, M., & Larraín, F. (2009). Modelos de gestión pública: implicancias para la
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Propuestas de Modernización y Reforma, 541-559.
Zalakain, J. (2014). Tendencias y prácticas innovadoras en inclusión social. Perspectiva
internacional. Lan harremanak: Revista de relaciones laborales, (29), 175-216.
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Lista de ANEXOS
Anexo 1. Cuestionarios efectuados a beneficiarios
Anexo 2. Tabulación de resultados beneficiarios. Hoja de cálculo.
Anexo 3. Etiquetas completas de los beneficiarios
Anexo 4. Respuestas de los prestadores
Anexo 5. Tabulación de resultados prestadores. Hoja de cálculo.
Anexo 6. Conceptos expertos.