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Camino Diocesano de Nueva Evangelizacin

CADINE

Dicesis de Montelbano

Camino Diocesano de Nueva Evangelizacin CADINE

2016 2020

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Identidad de la Dicesis de Montelbano

La Dicesis de Montelbano es Pueblo de Dios, parte de la Iglesia Universal, dinamizada por la espiritualidad misionera, llamada y enviada a evangelizar, est conformada por parroquias con familias, comunidades y movimientos, toda ella es discpula misionera de Cristo, conducida por la gracia renovadora del Espritu Santo, acoge y manifiesta el amor misericordioso de Dios Padre, celebra su fe alimentada por la Palabra y la Eucarista, goza con la presencia maternal de Santa Mara Reina, y se esfuerza por vivir el Reino de Dios en el sur de Crdoba.

Misin de la Dicesis de Montelbano

Evangelizar integralmente: mediante el testimonio de vida de hombres y mujeres, con el anuncio explcito del Evangelio y la celebracin de los sacramentos, sirviendo al don de la vida, la dignidad humana, la reconciliacin y la paz, en comunin con la Provincia Eclesistica de Cartagena y con toda la Iglesia Universal.

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Visin de la Dicesis de Montelbano

En el ao 2020 la Dicesis de Montelbano, en el sur de Crdoba, ser signo e instrumento del discipulado misionero de Cristo: Tendremos un gran nmero de comunidades de nueva evangelizacin, los ministerios parroquiales estarn sirviendo con alegra, los movimientos apostlicos integrados, los barrios y veredas animados en la fe, y todas las personas ms comprometidas en la vivencia del Reino de Dios.

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Introduccin Aparecida nos invita a robustecer la conciencia misionera de nuestra Dicesis, para salir al

encuentro de quienes no creen en Cristo y de quienes creen pero no participan en la vida

de la Iglesia:

La Dicesis, en todas sus comunidades y estructuras, est llamada a ser una comunidad misionera. Cada Dicesis necesita robustecer su conciencia misionera, saliendo al encuentro de quienes an no creen en Cristo en el mbito de su propio territorio y responder adecuadamente a los grandes problemas de la sociedad en la cual est inserta. Pero tambin, con espritu materno, est llamada a salir en bsqueda de todos los bautizados que no participan en la vida de las comunidades cristianas. (Aparecida 168)

El CADINE lo hemos construido entre todos y lo vamos a implementar entre todos con la ayuda del Seor y de la Santsima Virgen, sta gua escrita nos ayudar a motivarnos y a auto desafiarnos en el servicio al Evangelio, nos pondr en camino, a los laicos, a las religiosas, a los seminaristas, a nosotros los sacerdotes, es un camino que se realiza cantando, trabajando y orando. Si con generosidad y confianza nos lanzamos a recorrer este camino, el tiempo pasar, y dentro de cinco aos, en el 2020, miraremos hacia atrs para ver la obra del Seor, agradeceremos todos los frutos, haremos todos los ajustes que el aprendizaje nos haya dado, con nimo renovado miraremos hacia adelante y seguiremos el camino, en un peregrinar que slo termina en la casa de Dios Padre. Con la ayuda del SINE nos proponemos reconquistar para Cristo en la Iglesia a muchas familias de todos los barrios y veredas de nuestra Dicesis de Montelbano, nos proponemos servir con dedicacin, creatividad, tenacidad y alegra en todas las parroquias del sur de Crdoba. En las fatigas y sacrificios del camino descubriremos que, no somos caminantes solitarios, porque veremos que Jesucristo camina con nosotros y que l se ha propuesto reconquistarnos con su amor, comenzando por nosotros los sacerdotes, para convertirnos a todos en sus discpulos misioneros.

+Luis Jos RUEDA APARICIO

Obispo de Montelbano

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Dicesis de Montelbano CADINE

Camino Diocesano de Nueva Evangelizacin 2016 2020 [Emas: Lc 24, 12 - 35]

El episodio de los discpulos de Emas, relatado por el evangelista Lucas, nos presenta a Jess resucitado anunciando la Buena Nueva. Puede ser tambin un modelo de Nueva Evangelizacin.(Tomado del documento de Santo Domingo, IV Asamblea del Episcopado latinoamericano No. 14 - 26) Jess sale al encuentro de la humanidad que camina (Lc 24,13-17). Mientras los discpulos de Emas desconcertados y tristes caminaban de regreso a su aldea, el Maestro se les acerca para acompaarlos en su camino. Jess busca las personas y camina con ellas para asumir las alegras y esperanzas, las dificultades y tristezas de la vida. Jess comparte el camino de los seres humanos (Lc 24, 17-24). Jess no solamente se acerca a los caminantes. Va ms all: Se hace camino para ellos (Jn 14,6), penetra en la vivencia profunda de la persona, en sus sentimientos, en sus actitudes. Por medio de un dilogo sencillo y directo conoce sus preocupaciones inmediatas. El mismo Cristo Resucitado acompaa los pasos, las aspiraciones y bsquedas, los problemas y dificultades de sus discpulos cuando stos se dirigen a su aldea. Jess ilumina con las Escrituras el camino de los hombres (Lc 25-28). La presencia del Seor no se agota en una simple solidaridad humana. El drama interior de los dos caminantes era que haban perdido toda esperanza. Ese desencanto se ilumin por la explicacin de las Escrituras. La Buena Nueva que oyeron de Jess transmita el mensaje recibido de su Padre. Explicndoles las Escrituras, Jess corrige los errores de un mesianismo puramente temporal y de todas las ideologas que esclavizan al hombre. Explicndoles las Escrituras, les ilumina su situacin y les abre horizontes de esperanza. Exhortamos a todos los agentes pastorales a profundizar en el estudio y la meditacin de la Palabra de Dios para poder vivirla y transmitirla a los dems con fidelidad.

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Jess se da a conocer en la fraccin del pan (Lc 24, 28-32). Pero la explicacin de la Escritura no fue suficiente para abrirles los ojos y hacerles ver la realidad desde la perspectiva de la fe. Es cierto que hizo arder sus corazones pero el gesto definitivo para que pudieran reconocerle vivo y resucitado de entre los muertos fue el signo concreto de partir el pan. En Emas se abri adems un hogar para Alguien que andaba peregrino. Cristo revel su intimidad a los compaeros de camino y en su actitud de compartir reconocieron al que durante su vida no hizo ms que darse a los hermanos y quien sell con su muerte en la cruz la entrega de toda su vida. Jess es anunciado por los discpulos (Lc 24,33-35). El encuentro entre el Maestro y los discpulos ha terminado. Jess desaparece de su vista. Pero ellos impulsados por un nuevo ardor, salen gozosos a emprender su tarea misionera. Abandonan la aldea y van en bsqueda de los otros discpulos. La vivencia de la fe se realiza en comunidad. Por eso los discpulos regresan a Jerusaln a encontrarse con sus hermanos y comunicarles el encuentro con el Seor. A partir de la fe, vivida en comunidad, ellos se convierten en pregoneros de una realidad totalmente nueva: El Seor ha resucitado y est de nuevo entre nosotros. La fe en Jess lleva consigo la misin.

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1 El camino recorrido: Marco histrico de la Dicesis de Montelbano

El conocimiento de nuestra historia es de suyo una herramienta que nos permite ubicarnos en un abanico de contextos de carcter geogrfico, cultural, poltico, econmico y, naturalmente, religioso. Estar al tanto de nuestra historia y situados en nuestra realidad, nos provee de mejores empeos, decisiones y acciones en lo que debemos hacer, vivir y testimoniar. Este mismo conocimiento permite crecer en el sentido de pertenencia y amor a la jurisdiccin eclesistica en la que estamos insertos y a la que le debemos nuestra entrega y fidelidad. Al conocimiento de la Historia de Salvacin que Dios en su infinita bondad ha venido trazando e hilando con su sabidura divina, debe darse una correspondiente actitud de agradecimiento, pues, son muchos los instrumentos escogidos (personas y acontecimientos) a travs de los cuales l nos ha mostrado el amor de su Hijo, nuestro Seor Jesucristo, y los dones que recibimos por su Santo Espritu. Cmo no agradecer en esta hora, a quienes haciendo la opcin por Cristo, Buen Pastor, se pusieron al servicio del Evangelio, para ser sembradores de la vida nueva en Dios, lo cual trae consigo cambios sustanciales en las personas y en las comunidades a quienes ha llegado la Buena Noticia de la salvacin. As, igualmente, la historia que se conoce y se agradece, impulsa a seguir gestando los cambios o las transformaciones con la apropiacin de las oportunidades que en cada momento tenemos para avanzar en la tarea de la misin evangelizadora que el Seor nos ha encomendado. Son de grata memoria los sacerdotes diocesanos o de comunidades religiosas que han pasado dejando el recuerdo del Dios cercano y comprometido con su pueblo; igualmente el reconocimiento justo dado a las religiosas que, de diferentes comunidades y con su carisma propio han aportado a la maduracin de la fe de nuestras gentes. Registra nuestra historia el paso de las comunidades religiosas claretianas tanto masculinas como femeninas; los Padres Jesuitas; las Hermanas Dominicas de Santa Catalina de Siena; las Hermanas Lauritas; las Siervas de la Iglesia; las Siervas del Santsimo y de la Caridad; Hermanitas de la Anunciacin; las Misioneras Catequistas; Hermanas Dominicas de la Presentacin; Hermanas Misioneras Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia.

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1.1 Dicesis de Santa Mara la Antigua del Darin La colonizacin espaola entre nosotros comenz por la costa Atlntica con la fundacin de la Dicesis de Santa Mara la Antigua del Darin, en septiembre de 1510 por Fernndez de Enciso, en el Golfo de Urab, constituyndose en el primer centro de evangelizacin en el continente Americano.

Los monarcas espaoles propusieron en 1513 a su Santidad Len X, la creacin de la primera dicesis, lo cual se cumpli en agosto de ese mismo ao