17 - Vuelven Los Yakuza

5
Vuelve la Cosa Nostra nipona

description

Vuelven Los Yakuza

Transcript of 17 - Vuelven Los Yakuza

  • RINGU Gener 20052

    Vuelve la CosaNostranipona

  • akuzas,de nuevo de moda

    Esos japonesesbien vestidos, arre-glados con su ame-ricana, corbata,gafas de sol yaspecto JamesBond no os hacensospechar? Si losveis en cualquierpelcula del pas delSol Naciente, nodudis de que setrata de un yakuza.

    uiz ahora, cuando noshablen de yakuzas, la prime-ra imagen que nos viene a lacabeza es la de los "88Manacos" que aparecan en

    Kill Bill, todos con antifaz. O si ya esta-mos ms introducidos en culturilla japo-nesa, sabremos que los yakuzas sonlos equivalentes a la Cosa Nostra italia-na y que suelen ir vestidos de formamuy parecida, aunque por debajo lle-ven tatuajes.

    Yakuzas, actualmente

    Una cosa es el aspecto que ofrezcan, yla otra es la filosofa que hay detrs.Muchas veces, sobretodo a los prime-ros yakuza de este siglo, se les ha com-parado con los samurais, por tener elmismo espritu. Hoy en da, el cdigoBushido de los samurai no es aplicablea las normas morales que rigen a los

    Y

    Qyakuza. Su historia se remonta al sigloXVII, cuando los llamados "Kabuki-mono" empezaron a hacerse notar enla sociedad de la poca. Eran rufianes,ladrones y sobretodo, samurais sin tra-bajo que se unan para sentirse segu-ros. Con la industrializacin, ya empe-zaron a tejer sus redes, a organizarsey no tardaron en ser llamados yaku-zas. El trmino en s significa 8-9-3, enreferencia a una combinacin sin usodel Oicho-Kabu (el Black Jack japo-ns). Por esto, se podra decir queyakuzas es lo mismo que decir "aque-llos sin uso en la sociedad".Pero ahora su situacin es muy dife-rente a la de los "kabuki-mono". Losyakuza siguen teniendo entre lossuyos a gente que la sociedad noacepta, y tambin se dedican a extor-sin de comercios o a los juegos deapuestas, pero a su vez estas bandasvan consiguiendo ingresos gracias a la

    prostitucin o al trfico de drogas. Hayotro aspecto fundamental para enten-der la situacin del momento. Segn unestudio de las Naciones Unidas, elCrimen Organizado tambin se globali-za. Cada vez las mafias se internacio-nalizan ms. Segn ste informe, "unanueva relacin transnacional ha surgi-do entre los tringulos asiticos, losyakuzas japoneses y las mafias euro-peas y estadounidenses". Esto suponeun cambio del paradigma yakuza esta-blecido hasta el momento. La imagendel mafioso japons que controlabatodo un barrio o incluso una ciudadcambia por la de aquel que ademstiene que negociar con otros pases.Sus trabajos consistan en mantenerlos negocios legales e ilegales de suzona, pero para los yakuzas modernosse aade la necesidad de tener contac-to con las mafias de otros pases.

    Ichi the Killer, la ms sangrienta de todas las historias contadas porTakashi Miike hasta la fecha

    Es un prototipo que no falla, que est en la mente de los japoneses, pero quequiz a nosotros todava nos queda un poco lejos. Fueron una moda cinema-togrfica a principio de los aos treinta y lo volvieron a ser alrededor de 1970.Y des de hace unos aos, la ola de pelculas sobre mafiosos japoneses invadelas costas de esta isla.

    ALBERT PUYUELO

  • Mafiosos

    La imagen que proyectaban losgngsters (incluidos los yakuzas) enlas pelculas anteriores a la SegundaGuerra Mundial era la de alguien mal-tratado por la sociedad, una vctimams de la pobreza y que no tena msremedio que meterse en el crimenorganizado. Pero despus de seperodo, la figura de ste antihroe yano poda ser tan bien recibida. As queel prototipo de gngster flmico cambihacia alguien que se dedicaba a losnegocios legales y que a su vez tenasu propia mafia, familia o clan parapoder obtener "mejoras" en stosnegocios. Aqu el hroe sola ser algnpolica o detective privado y el gngs-ter dejaba de tener esa faceta trgica.En el caso concreto de los yakuzas,las pelculas crearon el gnero llama-do yakuza eiga, y en el primer perodolos mafiosos japoneses se movansiguiendo el cdigo Jingi (Justicia yDeber). ste sera una evolucin delcdigo Bushido de los samurais. Y enel segundo perodo el leiv-motiv de laspelculas de yakuzas es sin duda eldilema entre el giri y el ninjo, es decir,entre las obligaciones sociales (bsi-camente lo que les mande el clan) ylos sentimientos y deseos personales.A mediados de los aos setenta, y conel estreno el 1973 de El Padrino enUSA y de Jinji Naki Tatakai (Battles

    Without Honor and Humanity) enJapn el mismo ao, las pelculas degngsters parecan haber llegado enun punto muerto. Y as fue paraHollywood, porque las produccionesen masa de pelculas pertenecientes ase gnero ya no tenan sentido.Hasta el da de hoy han aparecidojoyas como Goodfellas (1990), de M.Scorsese o Camino a la Perdicin(2002) de Sam Raimi. Pero ya no for-maban parte de ninguna tendencia desu poca.

    Nuevos tiempos

    En Japn, con los yakuzas, fue unpoco diferente. Tambin baj la pro-duccin de grandes cantidades depelculas con las mismas caractersti-cas, pero en ste pas haba dos hom-bres que continuaron por su propiacuenta. Kinji Fukasaku y Seijun Suzukisiguieron dirigiendo pelculas delgnero. Suzuki, por ejemplo, ya dirigamuestras del gnero, en clave "pop-art", des de 1956. An as, hubo unclaro declive. Y no fue hasta queTakeshi Kitano sustituy a Fukasakuen el rodaje de Violent Cop (1989) queno vimos una forma de ver el cine deyakuzas con otros ojos. Aqu se dio lavuelta por completo a todos los idea-les que conformaban al yakuza vistopor las cmaras hasta la anterioridad.Kitano puso los mismos elementos,

    pero actualizados. El yakuza era per-cibido cmo alguien que usaba la vio-lencia como forma de expresin y lafigura del polica solitario (un "lonewolf") ya no era alguien que estabapor encima de todos, sino que sucum-ba ante la desesperacin. En los doscasos, se trataba de personajes casisuicidas, que no podan seguir convi-viendo ni con el giri ni con el ninjo. Ysta pauta marcada por Kitano se fuedesarrollando con gran velocidad y laempezaron a asumir los directoresque a principios de los noventa dirig-an sus primeras obras. Entre ellos, elpolifactico Takeshi Miike, que traehasta extremos el estereotipo delyakuza.A mediados de los noventa ya habaun buen nmero de filmes del gnerorenovado. En 1993 Kitano se dio aconocer en todo el mundo en elFestival de Cannes con su cuarta pel-cula como director: Sonatine. En 1995sali la primera entrega de TokioMafia, una serie de pelculas dirigidasen cada entrega por un director dife-rente. El mismo ao sala Gonin, deTakashi Ishii, que estaba en una lneaargumental parecida a las otras: latraicin al Oyabun (jefe de un clan), lapersecucin al traidor y la proximidadde una destruccin mutua. El siguien-te ao el mismo Ishii diriga la segun-da parte.

    EL CDIGO BUSHIDOLas reglas que regan a los samurais

    Los yakuzas, en sus inicios como tales seguan el cdigo Jingi, quesignificaba Justcia hacia las dems personas y Deber hacia suOyabun y su propio clan. Este cdigo era una evolucin del Bushido,una serie de normas, que a su vez, tienen races en el Budismo y enel Shintoismo. Aqu os mostramos las siete normas del Bushido, delas cuales se pueden deducir muchos comportamientos de stos gue-rreros. An as, los yakuzas de hoy en da no siguen el cdigo Jingi araja tabla, y mucho menos el Bushido.

    Continua en la pgina siguiente...

    GiHonradez y

    Justicia. Correctadecisin

    YuHerosmo y valen-

    ta.

    JinCompasin.

    Ayuda al resto dela humanidad

    (Amor universal)

    ReiCortesa. Correctadecisin, inclusoante el enemigo.

    MelyoHonor. El samuraino puede ocultar-

    se de como es

    MakotoSinceridad absolu-ta. Qualquier cosaque diga el samu-rai, debe ser cum-

    plida

    ChugiDevocin y

    Lealtad. Hasta elsubordinador debeser ms leal que el

    subordinado

  • Zpping de Vocabulario

    Oyabun El jefe del Clan Yakuza. Seria un equivalente al Padrino.Waka-gashiraEl nmero 2 del Clan

    AnikiSignifica hermano yakuza

    Wakashu Son los que estan por debajo de todo el resto. Tienen un Aniki por encima.

    En la otra orilla

    Paralelamente a las produccionesjaponesas de yakuzas, en China, Hong-Kong y Corea del Sur tambin se produc-an pelculas de mafiosos. John Woo esquiz el director ms conocido de todos.Despus de haber filmado obras maestrasdel gnero de accin como lo son TheKiller (1989) y Hard Boiled (1992), fuefichado por Hollywood. All hizo, por ejem-plo, Face/Off (traducida en Espaa comoCara a Cara), Windtalkers o la segundaparte de Misin Imposible. Ahora tieneanunciados, entre otros, el proyecto deHe-Man. Sus pelculas han ido cambian-do, pero es interesante observar la rela-cin que siempre han mantenido con elcine de yakuzas. La esencia de las de lasegunda poca de ste gnero era la obli-gacin que siente el hroe del film enescoger entre el giri o el ninjo. Aqu, aun-que no se puede explicar en stos trmi-nos porque ya no estamos en Japn, sque hay el mismo dilema para el protago-nista. En casi todas las pelculas de JohnWoo, el protagonista debe escoger entrelo que le dicte su propia moral y lo que lemanden sus deberes, cuando stos doselementos entren en conflicto.

    Otro director no-japons, ahoraconsagrado, Wong Kar-Wai, empez conpelculas de gngsters. Asesinos a sueldo yintegrantes de los tringulos asiticos eranpersonajes que comparta con las pelculasde otros realizadores, pero en su caso, lassecuencias de accin eran lo menos impor-tante. En Duo luo tian shi (ngeles Cados,1995), el protagonista se encuentra en lamisma situacin y con el mismo dilema queel de The Killer de John Woo. Pero aqu yaestamos en el nuevo cine de gngsters, ylos personajes asumen des del principioque se encuentran en un desesperantecallejn sin salida, y que an teniendo laposibilidad de disfrutar de la vida, esto lesresulta imposible.

    ...viene de la pgina anterior PROTOTIPO DE YAKUZAQu imagen suelen tener

    Gomina. Bien Peinados.Gafas de sol. Imprescindibles.Cigarrilo, que no falte.Tatuajes, sobretodo en la espalda.Camisa y corbata tipo Men in BlackAmericana, a juego con los anteriores

    Arma de fuego (suelen llevarlaescondida): de qualquier tipoEs posible que les falte algun trozode algun dedo (ver Vocabulario:Yubitsume).

    Pantalones lisos, del color que sea

    sta es la iamgen que podemos ver de los yakuzas a travs del cine.No es una informacin que sea al pi de la letra, pero s que hayalgunos cnones de estilo muy predeterminados

    Yakuzas y ms yakuzas

    Pero el nuevo yakuza eigase podra decir que no ha llegado asu produccin en cadena hasta elcambio de milenio. Aunque ya habafranquicias como la de Gokudo noonnatachi ("la mujeres yakuza") queempez el 1989 y este ao saca encines su ensima parte, en el ao2000 aparecieron varios ttulos, peroentre ellos, hubo uno sorprendentepor su argumento y factura visual:Versus, de Ryuhei Kitamura. En lse mezclaban yakuzas con zombiespara ofrecer un espectculo deaccin total, casi pardico. Inclusoen una de Serie Z, Wild Zero, unosyakuzas eran devorados por zom-

    bies. Son pelculas sin pretensionesde querer ser perfectas, pero s dedar un aspecto totalmente "cool",muy moderno. Eso da pi a que serealicen muchas otras. Y lo de mos-trar a los yakuzas como gente que nomerecen ni el ms mnimo respeto yaes algo que dominaba el inclasifica-ble Takeshi Miike.

    Miike empez su prolficacarrera a principios de los noventahaciendo algunas V-Movies, que soncintas hechas para su distribucindirecta en vdeo. Hoy en da es cono-cido en todo el mundo por dirigir seispelculas cada ao y que stas notengan porqu ser del mismo tema.Pero en Miike s que hay un temamuy recurrente. Los yakuzas apare-cen en casi todas sus realizacionesaunque no se traten de ningun yaku-za eiga. Y el estereotipo de gngsterjapons que Miike muestra es, engeneral, diferente al establecido porlas nuevas pautas. Se re del aspec-to "cool" y a algunos de sus persona-jes yakuza los viste con chaquetasbrillantes y un cierto toque "Kitsch".Otros tienen un comportamiento alo-cado e irracional. Y es que estos dosltimos adjetivos resumiran muybien todo el cine de Takashi Miike aojos de cualquier occidental. Una desus pelculas comercializadas enEspaa es Ichi the Killer, la que es sinduda la ms irritante de sus obras. Enella, los yakuzas son literalmente tri-turados y torturados por un asesino

    Yakuza Eiga Pelculas de Yakuzas, el gneroYubitsumeRitual que consiste en cortar la falan-ge de algn dedo. Normalmente sehace para pedir perdn a alguien aquien se ha ofendido. Aparece enmuchas pelculas, de distintas po-cas.Bushido Literalmente significa Modos milita-res del Caballero

  • alienado. Y todo esto siempre en las loca-lizaciones de los yakuza eiga, es decir, lascalles de los barrios bajos de Tokio, losdescampados y los pisos pequeos, perocon la visin extrema y delirante de Miike.Todas las caractersticas definitorias de sucine las podemos encontrar en la trilogade Dead Or Alive, de las cuales es alta-mente recomendable ver los primerosdiez minutos de la primera de las entre-gas, y as, si nunca hemos visto nada delo que ste japons ofrece, nos podemosir haciendo una idea de lo que propone alespectador, que bsicamente seria noquerer dejarle indiferente. Guste o no.

    Y an siendo casi una especie aparte, Takashi Miike no se sale del nuevognero de yakuzas, en que tanto el giricomo el ninjo tienden a destruir a sus per-sonajes, y que stos actan bajo unasombra del todo nihilista. Adems, en esteperodo hay odio hacia los yakuzas. Ya nose les ve cmo algo autctono. Ellos trafi-can con otras mafias del mundo y, por lotanto, se les pone al mismo nivel y yapocos les comparan con los antiguossamurai. Cada vez los vemos menos enambientes selectos, tal y como rescatabala americana Kill Bill, de QuentinTarantino, de las pelculas de yakuzas delos aos setenta. En las produccionespuramente de Hollywood siempre que sehan hecho pelculas con yakuzas por el

    medio, se ha procurado recalcar elhecho de que se trata de inmigran-tes, de que son gente que se sale desu gueto para controlar alguna zona.Lgicamente, como pasaba en laltima de Steven Seagal, Into TheSun (Yakuza: El Imperio del SolNaciente), no tenan el papel demalos perdonables o de buenos.Por ahora Japn est recibiendo ensus salas de cine una gran cantidadde pelculas yakuza eiga, y lo mismopasa con las chambara, que son las

    aventuras de samurais, que gracias alos efectos digitales son capaces derecrear situaciones con una imagina-cin que antes hubiera sido imposiblede aplicar al cine. Gracias tambin alcrecimiento econmico de los pasesasiticos, se pueden adaptar losManga a historias con personajes rea-les, que cada vez tienen ms acepta-cin entre el pblico que antes sloconsuma productos de cine occiden-tal.

    La pelcula Gozu es fcil que se acabe comercializandoen Espaa, gracias a su proximidad con occidente

    A.P.

    PUBLICITAT