2006Hoevel- Reseña Luces y Sombras Del Pensamiento Económico Moderno. Comentario Al Libro Del...

download 2006Hoevel- Reseña Luces y Sombras Del Pensamiento Económico Moderno. Comentario Al Libro Del Economista Hugo Ferullo

of 5

Transcript of 2006Hoevel- Reseña Luces y Sombras Del Pensamiento Económico Moderno. Comentario Al Libro Del...

  • 8/18/2019 2006Hoevel- Reseña Luces y Sombras Del Pensamiento Económico Moderno. Comentario Al Libro Del Economista…

    1/5

      Revista Valores en la Sociedad Industrial 73

     Reseñas de libros

    LUCES Y SOMBRAS DEL PENSAMIENTO ECONÓMICO MODERNO

    HUGO FERULLOFacultad de Ciencias Económicas, Universi-dad Nacional de Tucumán, 2006, 186 pp.

    ISBN 10 950-554-494-4ISBN 13 978-950-554-494-3

      Este libro de Hugo Ferullo surgido, talcomo el mismo autor lo señala en la intro-ducción, “de la práctica de la enseñanza deEconomía, en cursos y seminarios destina-dos a un público de graduados universita-

    rios en ciencias y profesiones ajenas, por logeneral, a la disciplina económica” ofreceuna visión panorámica de la situación delpensamiento económico moderno.  El autor destina la primera parte de laobra a presentar las “luces” de dicho pen-samiento. En tal sentido, para Ferullo, elpensamiento económico ha tenido cinco virtudes fundamentales. La primera es lade haber sido un instrumento formidablepara el combate de todas las formas de or-ganización “paternalista” de la sociedad ya

    que, al poner en el centro al intercambiocomercial entre individuos, el principionormativo básico de lo social pasa por lasnecesidades y preferencias individuales yno por la decisión de una jerarquía socialdeterminada.  La segunda “luz” del pensamiento eco-nómico radica, según Ferullo, en habercumplido con creces su “pretensión cientí-fica”, mediante el uso de un considerablegrado de abstracción para formular susteorías en términos de modelo centrado

    fundamentalmente en el concepto de equi-librio tomado de la física clásica . “Lo quequeremos subrayar en este punto –señalaFerullo- es que este modelo económico hadado claras muestras de cómo la prácticacientífica habitual de reducir a unas pocassimplificaciones la compleja realidad bajoestudio, permite muchas veces extraer im-plicaciones muy útiles […].” (p. 27.)  En tercer lugar, Ferullo destaca la “forma-lización elegante y sencilla” que ha logradola ciencia económica sobre la base de trespresupuestos sobre los que se apoya toda suestructura teórica: el individualismo meto-

    dológico, la racionalidad instrumental y elinterés individual. Basándose en argumen-tos tomados de autores como Stigler, Rob-bins, Smith o Keynes, Ferullo muestra comoéstos tres últimos supuestos, han permitidohasta cierto punto comprender y sobre todomodelizar matemáticamente mediante elcálculo diferencial, el comportamiento delos distintos agentes económicos confor-mando lo que él denomina el “modelo bási-co” de la economía.  La cuarta luz que destaca Ferullo en el

    pensamiento económico es el hecho deque en él se vienen generando, ademásdel ya mencionado “modelo canónico” dela escuela neoclásica, una serie de para-digmas alternativos. Comenzando por lascorrientes socialistas, la escuela histórica,la escuela austriaca y el catolicismo socialeuropeo del siglo XIX y continuando porautores del siglo XX como Keynes, Hayeko Perroux, el autor muestra la sorprenden-te capacidad del pensamiento económicopara generar un intenso debate interno.

  • 8/18/2019 2006Hoevel- Reseña Luces y Sombras Del Pensamiento Económico Moderno. Comentario Al Libro Del Economista…

    2/5

     Año XXIV • Nº 67 • Diciembre 200674

    En tal sentido Ferullo también destaca losaportes realizados por las nuevas ramas delpensamiento como la “teoría de los juegos”,los trabajos de “economía experimental”, la“nueva economía política” y la “economíadel desarrollo.” Presenta también el autor

    los principales aportes de varios economis-tas actuales: Amartya Sen, Herbert Simon,Daniel Kahneman, Vernon Smith, JosefStiglitz y George Akerlof que muestran,en su opinión, la ductilidad con la que elpensamiento económico está lograndore-pensarse durante los últimos años, enforma complementaria a la mainstreamneoclásica.  Finalmente, la quinta luz radica paraFerullo en los resultados sorprendentesque ha dado el crecimiento económicomoderno animado en buena medida porel pensamiento económico. La aceleración vertiginosa de la producción, la mejora enlos ingresos de los trabajadores, el enormeaumento de la esperanza de vida, son parael autor indicadores claros de los méritosque puede exhibir el pensamiento econó-mico en la modernidad.  Sin embargo, para Ferullo no todas sonluces. La segunda parte del libro está de-dicada precisamente a mostrar las sombras

    que también pueden hallarse en el pensa-miento económico. La sombra más impor-tante que presenta Ferullo es la “confusióndel homo economicus con el sujeto económicoreal”. En efecto, si bien para el autor, como ya hemos visto, el modelo del homo economi-cus ha proporcionado algunas importantesherramientas, se ha exagerado la capacidadde éstas para explicar y predecir el compor-tamiento de los agentes económicos reales.De este modo, como consecuencia de estaconfusión entre un modelo abstracto y la

    realidad, los logros positivos obtenidos apartir del antipaternalismo, la racionalidadinstrumental y el interés individual, termi-naron derivando, según Ferullo, en tres gra- ves defectos del pensamiento económico: elindividualismo rampante, la destrucción delespacio público y la promoción del egoísmopuro.

    Tomando argumentos de economistas y pensadores sociales tan variados comoFrank Knight, Deirdre Mc Closkey, Kenneth Arrow, Charles Taylor, John Rawls, Albert

    Hirschman o Stefano Zamagni, Ferullorealiza la crítica de estos tres defectos cen-trales y desarrolla una propuesta de refor-mulación del modelo neoclásico desde unaserie de puntos de partida claves. Algunosde éstos últimos deberían ser, a su criterio,

    los siguientes: modificar la concepción pu-ramente exógena de las preferencias de losagentes económicos y admitir su carácterendógeno al modelo económico; ir más alláde la métrica de la eficiencia para evaluarla  performance  de una economía incluyen-do ideas morales como la justicia o el biencomún; tratar el problema de la confianzacomo cuestión central para entender elfuncionamiento de los mercados pero nosólo de manera instrumental, como suelehacerse últimamente, sino considerando ala confianza como valor substantivo.  Si bien Ferullo se coloca claramente enuna posición de respeto hacia la variedadde valores y estilos de vida propia del plu-ralismo moderno, considera que, al mismotiempo, “aparece la necesidad de restaurarde alguna manera dos nociones fundamen-tales que el pensamiento económico moder-no parece haber abandonado: la noción debien común, basada en el reconocimientode que la dignidad de la persona humana se

     juega en comunidad con otros, y la nociónde solidaridad […].” (p. 113) Para ello acon-seja que la ciencia económica dialogue conlas demás ciencias sociales. De otro modo, elautor considera que el pensamiento econó-mico corre el riesgo de acentuar la riesgosatendencia al aislamiento y al imperialismoepistemológico que hoy manifiesta.

    De hecho, Ferullo se adentra tambiénen la discusión metodológica de la cienciaeconómica. El autor muestra cómo la con-cepción metodológica vigente en la ciencia

    económica contemporánea está repre-sentada especialmente por el positivismometodológico de Milton Friedman querelativiza toda necesidad de un realismo enlos supuestos sobre los que se apoyan losmodelos económicos. En oposición a ello, ysiguiendo a autores como Daniel Hausman,Karl Popper o Mark Blaug, Ferullo sostieneque el formalismo metodológico exagera-do ha llevado al pensamiento económico auna verdadera situación de “esquizofrenia”en donde el análisis corre muchas veces por

  • 8/18/2019 2006Hoevel- Reseña Luces y Sombras Del Pensamiento Económico Moderno. Comentario Al Libro Del Economista…

    3/5

      Revista Valores en la Sociedad Industrial 75

    carriles que no llegan a converger nuncacon la realidad. Por otra parte, este aisla-miento de la ciencia económica en relacióna la realidad deriva en lo que el autor de-nomina “el imperialismo de la economía”representado paradigmáticamente por el

    economista de Chicago Gary Becker quepretende sostener la tesis de la extensión dela lógica del mercado a todas las actividadeshumanas. En ese sentido Ferullo se refiere ala economía como “una ciencia seriamenteherida” y considera que uno de los sínto-mas de esta situación está en el abuso delas matemáticas que hoy se practica en elpensamiento económico ya atisbado porKeynes y hoy denunciado nuevamente,especialmente en relación a la econome-tría, por economistas otrora defensores del

     mainstream como Deirdre Mc Closkey.  La obra de Ferullo contiene, además, unexcursus al campo de la política económica.El autor propone tres ejemplos como la ex-portación de polución a los países pobres,el crecimiento desorbitante de la deudaexterna argentina y los errados consejosdel Fondo Monetario Internacional y final-mente la persistencia de la pobreza y lasdesigualdades crecientes en la Argentina yen el mundo. De acuerdo al autor, estas si-

    tuaciones son en buena medida el resultadode una mentalidad economicista que aplicarecetas aparentemente correctas en el planopuramente abstracto de la teoría pero com-pletamente imprudentes en la práctica y deuna limitación de valores morales y socialespara orientar la política económica más alláde los criterios de mercado, actitudes que,según Ferullo, están fuertemente emparen-tadas con los aspectos sombríos que el autoratribuye a la ciencia económica.  La obra finaliza con una serie de con-

    clusiones en las que Ferullo resume supropuesta de cambio para el pensamientoeconómico. En primer término propone“superar el simplismo.” En tal sentido pre-senta algunas observaciones de Sen en tornoa la necesidad de que la ciencia económicano enfatice únicamente la función predicti- va y se aboque también a desarrollar otrasdimensiones como una descripción adecua-da de los hechos y una evaluación racionalde los aspectos normativos. Asimismo, conrespecto a las relaciones de la economía

    con otras ciencias, Ferullo cita a Coase paraquien “los economistas tienen que incluir ensu estudio a las cuestiones políticas, legales y sociales.” (p. 164) Pero sobre todo, Ferullocree que el simplismo sólo puede ser supe-rado en la medida en que el razonamiento

    económico garantice el respeto pleno de lapersona humana.

    El pensamiento económico debería ade-más, según Ferullo, “bregar por una econo-mía ética” que vaya más allá del positivis-mo, supere una generalización excesiva deconceptos tales como “destrucción creativa”o funcionamiento puramente “espontáneo”del mercado e incluya cuestiones clave comolas instituciones y reglas necesarias no sólopara posibilitar y garantizar el intercambiolibre del mercado, sino también para queéste se desarrolle dentro de un marco de justicia distributiva.  Para ello Ferullo cree también que esnecesario “volver sobre las necesidades ylos fines.” En efecto, el pensamiento eco-nómico no puede limitarse, en su opinión,“a invocar el mérito de la minimización decostos en el uso productivo de recursos esca-sos” ya que “la ciencia de la economía tieneque ofrecer también razones que permitan vislumbrar que la utilización de estos recur-

    sos sirve efectivamente para satisfacer lasnecesidades de la gente” (p. 170). Por fin y ya en el final del libro, el autor aspira a queel pensamiento económico apunte a “unanueva visión de la alteridad” la cual, supe-rando el individualismo, tome en cuenta lacompleja interdependencia entre el sujetoindividual y las sociedades en las que vive.

    El libro de Ferullo constituye, a mi crite-rio, no sólo un aporte importantísimo parael mundo de académicos y profesionalesconformado por los no-economistas, como

    propone humildemente el autor, sino tam-bién para el de los economistas, quienes nosiempre tienen a su disposición -especial-mente en el mundo de habla hispana- unaobra como ésta que refleje de un modotan panorámico, claro y bien orientado, elestado de situación de su ciencia. Abstenién-dose intencionalmente de exhibir su bagajecompleto de erudición sobre el tema del queevidentemente está dotado, el autor logra suprincipal efecto -no frecuentemente obteni-do por otros trabajos de este tipo cargados

  • 8/18/2019 2006Hoevel- Reseña Luces y Sombras Del Pensamiento Económico Moderno. Comentario Al Libro Del Economista…

    4/5

     Año XXIV • Nº 67 • Diciembre 200676

    de un exagerado aparato crítico y de refe-rencias excesivamente abundantes- que es elde ofrecer una visión aguda y profunda delas cuestiones cruciales hoy en juego en elpensamiento económico.

    Esta intencional economía expositiva

    -que no impide que en el libro estén pre-sentes una amplia variedad de autores y te-mas - explica seguramente la ausencia en eltexto, especialmente en la primera parte enque se hace referencia a las luces, de algu-nos autores y teorías -como las derivacionesde la teoría de las expectativas racionalesde Lucas o la introducción del crecimientoendóngeno con Romer, por poner sólo dosejemplos- que en los últimos años podríancitarse como argumentos para defender unacomplejización y sofisticación considerable

    del modelo del homo economicus en relaciónal mucho más simple modelo propuesto ori-ginalmente por los economistas pionerosde la escuela neoclásica y consumados con Arrow-Debreu. No obstante, aún si el autorno hubiera omitido estos desarrollos recien-tes –omisión probablemente explicable porlas intenciones pedagógicas del libro- los ar-gumentos centrales que presenta Ferullo enla parte dedicada a las “sombras” del pensa-miento económico seguirían firmemente enpie. De hecho, las críticas de Ferullo apun-

    tan certeramente al núcleo duro del modeloneoclásico hoy todavía vigente por debajode todas las sofisticaciones.  Por otra parte, Ferullo no cae en ningúnmomento en el clásico recurso sofístico decrear un “muñeco de paja” al que despuéscómodamente pueda prendérsele fuego. Elautor no caricaturiza al paradigma neoclási-co, ni lo juzga basándose en prejuicios irra-cionales. Por el contrario, aunque su críticaes dura, está basada en un conocimientoexhaustivo y detallado de los principios,

    modelos y herramientas matemáticas y, almismo tiempo, no deja de valorar equili-bradamente los aportes positivos de dichoparadigma. Su pretensión no es suprimir elparadigma neoclásico sino sólo completarlosin perder sus aspectos de racionalidad.  De todos modos la valorización como“luces” de algunas características típicasdel modelo neoclásico como la “pretensióncientífica” o la “formalización elegante ysencilla” – en la que el mismo Ferullo in-cluye a los presupuestos del individualismo

    metodológico, la racionalidad instrumental y el interés individual- sólo podrían enten-derse como elogios más bien irónicos si setoman en cuenta los argumentos críticos – ami juicio acertados- que contra ellos dirigeel autor a lo largo de casi todo el libro. Por

    lo demás, Ferullo salva esta posible contra-dicción utilizando un muy adecuado recursodiscursivo como es el de atribuir estas luces - y también otras como el antipaternalismo, laexistencia de un intenso debate interno o elresultado sorprendente del progreso en losúltimos siglos- no ya al modelo neoclásicoen particular sino al “pensamiento econó-mico” en general, lo cual resulta coherentecon la lógica interna del libro.

     Además, de su brillante dimensión críti-ca, el libro tiene a mi juicio otro de sus mo-

    mentos culminantes en la exposición de laspropuestas alternativas. Ferullo no sólo de-tecta con lucidez los puntos neurálgicos dela teoría neoclásica que requieren cambios,sino que propone también algunas solucio-nes. Para ello utiliza ciertamente su vastoconocimiento de los autores que han aporta-do nuevos enfoques en las últimas décadas,pero también, y sobre todo, lo meritorio delautor es que nos ofrece su propio enfoquepersonal acerca de cómo interpretar y es-tructurar en un conjunto coherente todos

    estos aportes múltiples. De todos modos, elproblema que subsiste en una propuesta decambio metodológico como el que proponeFerullo -que no apunta a romper completa-mente con el mainstream de la economía-es el del modo de introducir formalmenteen la ciencia los nuevos enfoques, dada laimposibilidad o limitación para formalizarmatemáticamente muchas cuestiones.

    Por lo demás, otro aspecto muy rico dellibro de Ferullo es que no sólo aporta unaorientación en el campo de la discusión

    teórica, sino que proporciona una visióndel pensamiento económico en su dimen-sión práctica. Aunque, en mi opinión, losejemplos de política económica han sidoelegidos y analizados por Ferullo quizás unpoco apresuradamente y sin tomar en cuen-ta toda su complejidad histórica, no por ellodejan de ser eficaces para mostrar cómo unpensamiento económico con presupuestoserróneos en su base termina teniendo gra- vísimas consecuencias en el campo de lapráctica política.

    eso-el

    er,en

    mom-le

    enloo-á-

    u.ra

  • 8/18/2019 2006Hoevel- Reseña Luces y Sombras Del Pensamiento Económico Moderno. Comentario Al Libro Del Economista…

    5/5

      Revista Valores en la Sociedad Industrial 77

      La obra de Ferullo abre además intere-santes perspectivas a la dimensión interdis-ciplinaria de la economía. El libro está llenode puntos de fuga por donde se ven claroslos caminos de comunicación de la econo-mía con la psicología, la ciencia política, la

    sociología y el derecho. Pero sin dudas, laperspectiva interdisciplinar que domina laobra es la de la ética y sobre todo la de la éti-ca social. Sin necesidad de hacer referenciasexpresas a la filosofía, el autor demuestratener un fino olfato filosófico para captarcon toda claridad los núcleos éticos en jue-go en la teoría tanto micro como macroeco-nómica. A partir de allí, y evitando todotipo de moralismos, consigue entretejer congran virtuosismo los hilos principales de lasgrandes cuestiones hoy debatidas en el ám-bito de la ética política con aquellas hebrasque considera incompletas en el tejido de lateoría económica.

    El resultado de todos estos elementos esasí el de una obra de gran claridad concep-tual, de un reconfortante orden expositivo–especialmente útil en las cátedras univer-sitarias- abundante en referencias orienta-doras para todos los temas y autores, conprofusión de análisis certeros y argumenta-tivamente fundados, llena de comentarios

    sabrosos y sugestivos pero sobre todo, dota-da de un tono vital y una amplitud mentalno siempre frecuentes en el pensamientoeconómico actual.

    Carlos Hoevel

    CLAVES DE LA  FILOSOFÍA  

    DE LA  EDUCACIÓNM ARÍA  G ARCÍA  A MILBURU (ED.)Dykinson, Madrid, 2004, pp. 346.

    ISBN 8497721772

      Este trabajo es un novedoso estudioque analiza los principales problemaspresentes en el actual debate de la Filo-sofía de la Educación. Se reúnen aquí unconjunto de artículos de reconocidos au-tores del ámbito educativo pertenecientes

    a prestigiosas Universidades de España, Australia e Inglaterra.

    El Estudio Introductorio del libro lo realizaMaría García Amilburu, Profesora Titularde Filosofía de la Educación de la UNED, y se articula en los siguientes artículos: Ri-

    chard Pring, “La educación como «prácticaeducativa»; Rafael Alvira,  “La educacióncomo arte suscitador”; Richard Pring, “Lapolémica sobre los fines de la educación”; Javier Vergara, “El ideal de formación enla historia (I): El mundo Clásico, Paleocris-tiano y Medieval”; Javier Vergara, “El idealde formación en la historia (II): Ilustración y Modernidad”; John White, “La Filosofíade la Educación como disciplina académi-ca”; Fernando Gil Cantero, “La relevancia

    práctica de la Filosofía de la Educación”;María García Amilburu, “El ser humano,protagonista de la educación”; Paul Hager,“Teorías filosóficas del aprendizaje”; MartaRuiz Corbella, “El arte de ser humanos”;María García Amilburu, “¿Es posible edu-car los afectos?”; Rafael Alvira, “El métodosocrático, prototipo de diálogo educativo”; y María García Amilburu, “La formación deprofesores”.  Los trabajos se estructuran en torno aseis núcleos temáticos fundamentales: “el

    concepto y la finalidad de la educación”; “lahistoria del ideal educativo en occidente”;“el estatuto epistemológico de la Filosofíade la Educación”; “la consideración del serhumano como protagonista de la educa-ción”; “las dimensiones específicas del hom-bre de las que debe ocuparse la educación”; y, finalmente, “algunas consideraciones deinterés para los profesionales de la educa-ción” (p. 23).  En la sociedad actual, donde los conoci-

    mientos, las posibilidades técnicas y las cir-cunstancias sociales cambian a una velocidad vertiginosa, se hace necesario un replanteocontinuo de los marcos teórico-prácticos delos saberes. Esto ocurre en el ámbito de laeconomía, de la comunicación, y de la in-formática, entre otros. Ante este fenómenocabe hacer la siguiente pregunta: ¿Sucedelo mismo en el campo de la educación? Alo que habría que responder que en partesí y en parte no. Si bien los hombres somosseres históricos, con vicisitudes temporales