2013 - Una ojeada

Jean – Pascal Labille, ministro de Cooperación para el DesarrolloPese a los tímidos indicios de una recuperación tan esperada, la política belga de cooperación al desarrollo en 2013 se ha llevado a cabo en todo momento en un contexto de dificultades económicas y financieras.

Por otra parte, es precisamente en periodos de crisis cuando la ayuda pública al desarrollo (APD) se vuelve más necesaria, por ser el canal más previsible, al con-trario que otros flujos de financiación más volátiles, una situación que se da especialmente en los países pobres y aquellos que se encuentren en situación de fragilidad. Al mismo tiempo, en estos países es en los que más se perciben los cambios climáticos, frente a los cuales desempeña un papel esencial la APD.

En cualquier caso, con crisis económica o sin ella, la acción pública se debe guiar por la eficacia y las leyes deben reflejar esta voluntad. Por este motivo, en 2013 se enmendó y votó la ley marco sobre la cooperación al desarrollo. Ahora ofrece una visión contemporánea y progresista de la cooperación belga al desarrollo. Contemporánea, por integrar los principios de efica-cia recogidos en todo el mundo. Progresista, porque recoge una visión de la cooperación basada en los derechos humanos y porque gira en torno a la lucha contra la desigualdad y a la justicia social.

Los principios por los que se guía la nueva ley se han ido aplicando gra-dualmente en 2013. Así ocurre especialmente con la Coherencia de las políticas para el desarrollo (CPD), entendida como la necesidad de dirigir una acción colectiva a escala nacional, regional y mundial que trascienda el marco de la cooperación al desarrollo como tal e integre otros ámbitos

clave como pueden ser el comercio, las finanzas o, incluso, el cambio climático y la seguridad alimentaria.

Asimismo, en 2013 se modificaron otras dos leyes que guardan una re-lación directa con la cooperación al desarrollo: la ley relativa a la Cooperación Técnica belga (CTB) y la re-lativa a la Sociedad Belga de Inversión para Países en Desarrollo (BIO, por sus siglas en francés), cuyo obje-tivo es conseguir que estas instituciones ofrezcan un mayor rendimiento y que vayan más en consonancia con la modernización de la cooperación.

En 2013, los programas de cooperación al desarro-llo y de ayuda humanitaria se han centrado en África central. Bélgica debe seguir fomentando que la comu-nidad internacional se implique en esta región.

Por último, el debate sobre el marco de desarrollo más allá del año 2015 ocupa desde hace ya algún un tiempo a la comunidad internacional del desarro-llo. Bélgica, como país colaborador, pretende mostrar una participación activa en este debate que parece esencial, ya que establecerá el programa internacio-nal para las próximas décadas. De este modo, durante la semana ministerial que se celebró en Nueva York

en septiembre de 2013, expresé las prioridades que ha de defender la cooperación belga en este nuevo contexto: por una parte, la lucha contra la desigualdad, tanto económica como social y, por otra, considerar la pro-tección social como un elemento importante para conseguir un desarrollo humano sostenible.

Reforma y limitaciones presupuestarias

El proceso de reforma de la Dirección General de Cooperación al Desarrollo y Ayuda Humanitaria (DGD), iniciado en 2012, siguió su curso en 2013 y comenzó a dar sus primeros frutos tangibles.

Asimismo, al igual que ocurrió en 2012, la cooperación bel-ga al desarrollo se ha visto obligada a actuar en un contexto general de rigor presupuestario que ha desembocado en que determinados programas y proyectos hayan visto reducidos sus medios procedentes de la ayuda pública belga al desa-rrollo.

Reforma de la Dirección General de Cooperación al Desarrollo y Ayuda Humanitaria (DGD)El proceso de reforma, iniciado en 2012, ha alcanzado ya velocidad de crucero. Actualmente ya se pueden observar ciertos resultados, como por ejemplo: • el papel y el funcionamiento del comité estratégico;• la puesta en marcha de múltiples dinámicas transversales, formales

e informales;• la planificación de los ámbitos políticos del desarrollo como conse-

cuencia de los análisis efectuados por el Servicio Público Federal de Asuntos Exteriores, Comercio Exterior y Cooperación al Desarrollo;

• la integración de asuntos europeos (como la programación conjunta)

en actividades de la dirección geográfica;• la traducción de la estrategia para los países de renta media en pro-

gramas por país;

• la dirección temática, que ocupa una posición central.

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El presupuesto de la cooperación al desarrollo y la ayuda pública al desarrollo en 2013El gobierno belga se comprometió en 2000 a cumplir antes de 2010 la norma de Naciones Unidas, por la que los países industrializados deben dedicar un 0,7 % de su producto interior bruto a la cooperación al desarrollo.

Tras un marcado incremento entre los años 2008 y 2010 (0,62 % de la renta nacional bruta en 2010, el porcentaje más alto jamás alcanzado por la ayuda pública belga al desarrollo), el porcentaje de la RNB dedicado a la ayuda pública belga al desarrollo se ha vuelto a reducir. En 2011 fue del 0,54 %, mientras que en 2012, bajó hasta el 0,48 %.

En 2013, la ayuda pública belga al desarrollo se situó en torno al 0,45 % de la RNB, porcentaje inferior al objetivo individual del 0,51 % esta-blecido para los Estados miembros de la Unión Europea.

Las restricciones presupuestarias, junto con la disminución de la parte relativa a las operaciones para la condonación de la deuda de países en desarrollo, son las principales responsables de de esta disminución del porcentaje de la renta nacional bruta dedicado al desarrollo. Así pues, la Cooperación debe hacer un esfuerzo, al igual que los demás departamentos, a raíz de la crisis económica y los objetivos presupuestarios que se manejan en la Unión Europea.

El presupuesto anual para la cooperación al desarrollo se cifró ini-cialmente en 2013 en 1.377 millones de euros. No obstante, tras un primer control presupuestario, se pidió a la Cooperación al desarrollo un esfuerzo para ahorrar 26 millones de euros. La mayor parte de esta cantidad se ha podido reunir gracias al saldo de 2012 de los costes operativos de la Cooperación técnica belga (CTB).

Como consecuencia de un segundo control presupuestario en julio, se congelaron otros 95 millones de euros de créditos. Parte de los recortes se han realizado sobre los programas por país.

El 11 de septiembre de 2013 se decidió aumentar la adopción de me-didas de prudencia presupuestaria con el fin de mantener el equilibrio del presupuesto federal para 2013.

Los gastos se han reducido a aquellos derivados de compromisos adquiridos y a los que son inevitables, como los correspondientes a personal, ejecución de la ley, normativa o acuerdos internacionales y mantenimiento de las actividades de servicio. El impacto de estas medidas se puede cifrar en 60 millones de euros, aproximadamente.

La consecuencia es que los resultados de 2013 no alcanzaron las previsiones iniciales contempladas en el presu-puesto de 2013: 1.175 millones de euros, esto es, 129 millones más que en 2012 (1.046 millones de euros)..

Educación 121,5 mil.

Salud 111,1 mil.

Población y salud reproductiva 28,7 mil.

Agua y saneamiento 40,5 mil.

Gobierno y sociedad civil 73,8 mil.

Conflicto, paz, seguridad 2,6 mil.

Servicios sociales 44,0 mil.

Transporte y almacenamiento 56,5 mil.

Communicación 0,1 mil.

Energía 53,3 mil.

Bancos y servicios financieros 29,2 mil.

Empresas 0,7 mil.

Agricultura, silvicultura, pesca 135,7 mil.

Industria, minería y construcción 10,1 mil.

Comercio y Turismo 5,2 mil.

Protección del medio ambiente 54,2 mil.

Multisectores 72,0 mil.

Ayuda humanitaria 135,8 mil.

Exoneración de deuda 23,9 mil.

Sensibilización en Bélgica 25,7 mil.

Varios 25,4 mil.

Sector no especificado 107,0 mil.

Ayuda DGD por canal

Ayuda DGD por sector (en euros)

Cooperación gubernamental 23,8 %

Cooperación no gubernamental 19,9 %

Cooperación multilateral 40,4 %

Fondo belga para la seguridad alimentaria 1,8 %

Consolidación de la sociedad 2,3 %

Ayuda humanitaria y alimentaria 8,9 %

Apoyo al sector privado, BIO 2,2 %

Sensibilización en Bélgica (excl. ONGs) 0,5 %

Administración, evaluación, otros 0,2 %

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Población y salud reproductiva 28,7 mil.

Agua y saneamiento 40,5 mil.

Gobierno y sociedad civil 73,8 mil.

Conflicto, paz, seguridad 2,6 mil.

Servicios sociales 44,0 mil.

Transporte y almacenamiento 56,5 mil.

Communicación 0,1 mil.

Energía 53,3 mil.

Bancos y servicios financieros 29,2 mil.

Empresas 0,7 mil.

Agricultura, silvicultura, pesca 135,7 mil.

Industria, minería y construcción 10,1 mil.

Comercio y Turismo 5,2 mil.

Protección del medio ambiente 54,2 mil.

Multisectores 72,0 mil.

Ayuda humanitaria 135,8 mil.

Exoneración de deuda 23,9 mil.

Sensibilización en Bélgica 25,7 mil.

Varios 25,4 mil.

Sector no especificado 107,0 mil.

Ayuda DGD por canal

Ayuda DGD por sector (en euros)

Cooperación gubernamental 23,8 %

Cooperación no gubernamental 19,9 %

Cooperación multilateral 40,4 %

Fondo belga para la seguridad alimentaria 1,8 %

Consolidación de la sociedad 2,3 %

Ayuda humanitaria y alimentaria 8,9 %

Apoyo al sector privado, BIO 2,2 %

Sensibilización en Bélgica (excl. ONGs) 0,5 %

Administración, evaluación, otros 0,2 %

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Salud 111,1 mil.

Población y salud reproductiva 28,7 mil.

Agua y saneamiento 40,5 mil.

Gobierno y sociedad civil 73,8 mil.

Conflicto, paz, seguridad 2,6 mil.

Servicios sociales 44,0 mil.

Transporte y almacenamiento 56,5 mil.

Communicación 0,1 mil.

Energía 53,3 mil.

Bancos y servicios financieros 29,2 mil.

Empresas 0,7 mil.

Agricultura, silvicultura, pesca 135,7 mil.

Industria, minería y construcción 10,1 mil.

Comercio y Turismo 5,2 mil.

Protección del medio ambiente 54,2 mil.

Multisectores 72,0 mil.

Ayuda humanitaria 135,8 mil.

Exoneración de deuda 23,9 mil.

Sensibilización en Bélgica 25,7 mil.

Varios 25,4 mil.

Sector no especificado 107,0 mil.

Ayuda DGD por canal

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Cooperación gubernamental 23,8 %

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Cooperación multilateral 40,4 %

Fondo belga para la seguridad alimentaria 1,8 %

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Ayuda humanitaria y alimentaria 8,9 %

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Educación 121,5 mil.

Salud 111,1 mil.

Población y salud reproductiva 28,7 mil.

Agua y saneamiento 40,5 mil.

Gobierno y sociedad civil 73,8 mil.

Conflicto, paz, seguridad 2,6 mil.

Servicios sociales 44,0 mil.

Transporte y almacenamiento 56,5 mil.

Communicación 0,1 mil.

Energía 53,3 mil.

Bancos y servicios financieros 29,2 mil.

Empresas 0,7 mil.

Agricultura, silvicultura, pesca 135,7 mil.

Industria, minería y construcción 10,1 mil.

Comercio y Turismo 5,2 mil.

Protección del medio ambiente 54,2 mil.

Multisectores 72,0 mil.

Ayuda humanitaria 135,8 mil.

Exoneración de deuda 23,9 mil.

Sensibilización en Bélgica 25,7 mil.

Varios 25,4 mil.

Sector no especificado 107,0 mil.

Ayuda DGD por canal

Ayuda DGD por sector (en euros)

Cooperación gubernamental 23,8 %

Cooperación no gubernamental 19,9 %

Cooperación multilateral 40,4 %

Fondo belga para la seguridad alimentaria 1,8 %

Consolidación de la sociedad 2,3 %

Ayuda humanitaria y alimentaria 8,9 %

Apoyo al sector privado, BIO 2,2 %

Sensibilización en Bélgica (excl. ONGs) 0,5 %

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Cómo se financia la ayuda pública belga al desarrollo?

• Mediante contribuciones inscritas en el presupuesto de la Cooperación al desarrollo (en torno a un 60 % del total de la ayuda pública al desarrollo);

• Por créditos de otras autoridades federales, incluyendo la ayuda belga aportada a través de la Comisión Europea;

• Por una parte de los costes de acogida de refugiados y estu-diantes procedentes de países en desarrollo que cursen sus estudios en Bélgica;

• Por medio de contribuciones de las regiones, comunidades, provincias y municipios;

• A través de cuotas de anulación de la deuda, aprobadas a escala internacional.

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Jornadas de Cooperación al desarrolloLa sexta edición de las Jornadas de Cooperación belga al de-sarrollo, que tuvieron lugar en mayo en Bruselas, sirvieron para lanzar una reflexión anticipatoria sobre el programa de desarrollo posterior al año 2015, fecha en la que se deberá re-novar el marco de los Objetivos del Milenio para el Desarrollo.Las sextas Jornadas de Cooperación al desarrollo, celebradas el 7 de mayo en el Palacio de Egmont, en Bruselas, congregaron a importantes actores del sector de la política, instituciones, repre-sentantes de la sociedad civil y de los universitarios, en presencia de la princesa Mathilde y de Amina J. Mohammed, asesora especial del secretario general de las Naciones Unidas.

Estas Jornadas de Cooperación al desarrollo giraron en torno al marco del desarrollo que se presenta más allá de 2015.

Un debate de actualidad: centró el acto especial organizado por Naciones Unidos unos meses después, en septiembre de 2013. Realmente ha lle-gado el momento de analizar la situación de las campañas realizadas para lograr los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) y, especialmente, de reflexionar acerca de la evolución del marco actual, que expira en 2015.

Integrar los distintos aspectos de Río+20 (incluyendo el cambio climático y la biodiversidad) en el programa de desarrollo supondrá un importante de-safío, al igual que lo será definir el proceso de financiación del desarrollo.

Lograr un planteamiento universal que convenga tanto a los países desa-rrollados como a los emergentes y en desarrollo no será tarea fácil.

El nuevo marco de desarrollo debe dar respuesta a la erradicación de la pobreza y, al mismo tiempo, llevar a un desarrollo sostenible. Las Jornadas contribuyeron a establecer, con el conjunto de los actores belgas, las prioridades que anticipa Bélgica en este nuevo marco: la lucha contra la desigualdad, la protección social univer-sal y el programa para un empleo justo.

Paralelamente a este debate, las Jornadas de Cooperación ana-lizaron la coherencia de las políticas para el desarrollo (CPD) del Estado belga. Éstas permitieron explicar la creación de un meca-nismo belga para la coherencia de las políticas para el desarrollo (CPD), cuyo objetivo consiste en garantizar la CPD mediante un compromiso político de alto nivel, una mejor coordinación de las políticas y un seguimiento independiente de los avances realiza-dos. También brindaron la ocasión de conocer los planteamientos de las entidades adscritas a la CPD, así como las aspiraciones que comparten las distintas entidades en este ámbito.

Las sextas Jornadas de Cooperación, preparadas con antelación por la DGD, representantes de las entidades adscritas, ONG, sindicatos y univer-sidades, han servido para crear una plataforma que permite a los participantes intercambiar ideas y conversar sobre estas cuestio-nes y reunirse para diseñar juntos el programa de los próximos años para el desarrollo.

La sexta edición de las Jornadas de Cooperación al Desarrollo ha permitido a los participantes intercambiar opiniones, dialogar y concebir juntos el programa del desarrollo para los próximos años.

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Dos nuevas estrategias de cooperación: una orientada a la educación; otra para los países de renta mediaAyudar a los Estados de los países socios en su misión de educaciónPara la Cooperación belga, la educación es un factor clave para la igualdad de oportunidades y la movilidad social. Ha elaborado un documento estratégico que define sus priori-dades en materia de educación en los países en desarrollo, así como el modo en que tiene previsto ayudar a los Estados asociados en la aplicación de su sistema educativo. En las sociedades contemporáneas, una parte de la transmisión del saber, el saber ser y el saber vivir, va más allá de las competencias de la familia y constituye la parte colectiva de la educación. Dado que al Estado le co-rresponden funciones socioeconómicas como la asignación de recursos, la redistribución de la riqueza y la regulación del sistema, compete también a éste ocuparse de esta parte colectiva de la educación. Es competencia del estado aplicar una serie de políticas, estrategias, campañas y medios que componen el sistema educativo.

La Cooperación belga pretende ayudar a los Estados en la implementación y el desarrollo de sus sistemas educativos, a adoptar una visión integral del sector y a ejecutar estrategias diferenciadas en función de cada situación.

También ha elaborado un documento estratégico acerca de los países en desarrollo, que fue aprobado por el ministro de Coope-ración en mayo de 2013.

Ayudar a los países con niveles intermedios de ingresos a hacer frente a nuevos desafíosEl nivel de desarrollo humano es superior entre los países de renta media, ya que cuentan con una mayor capacidad fi-nanciera y humana que les permite afrontar desde una mejor posición los retos en materia de desarrollo. Las necesidades en los ámbitos socioeconómico, político y ecológico, por no hablar de las desigualdades sociales y regionales internas en estos países, no son menos importantes.Los países de renta media todavía han de hacer frente a desafíos con-siderables. Los problemas referentes al desarrollo se pueden atribuir, en gran parte, a la desigualdad en la redistribución social de los frutos del crecimiento, a las instituciones y a las políticas públicas, que no son lo suficientemente inclusivas, así como a la falta de cohesión social. Todos estos elementos en su conjunto instan a propiciar un cambio en el modelo de cooperación y a buscar una nueva forma de asociación más inclusiva.

La Cooperación belga ayudará a los Estados asocia-dos a aplicar una serie de políticas, estrategias, cam-pañas y medios que componen el sistema educativo.

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Las tres prioridades de la estrategia para la educación:1. Concentración en la educación elemental y en la forma-

ción técnica y profesional2. Concentración en los países menos avanzados en los

que haya más de un 10 % de menores desescolarizados o menos de un 60 % de menores que superen el ciclo básico

3. Buscar el equilibrio entre:• el acceso, concretamente la gestión de los índices

de transición basada en la competencia;• la igualdad en cuanto al acceso, el mantenimiento y

las posibilidades de éxito;• la calidad de la enseñanza y la idoneidad de los

contenidos.

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Las decisiones estratégicas de la Cooperación belgaEl ministro de Cooperación aprobó a principios de 2013 el documento estratégico sobre la Cooperación belga al desarrollo en países de renta media. La Cooperación belga al desarrollo tiene la intención de mejorar las condiciones de vida de quienes no se benefician del crecimiento del nivel de bienestar en estos países. En este sentido, pretende dar valor al potencial institucional, financiero y humano local como impulsor del desarrollo.

Ámbitos prioritarios de cooperación en los paí-ses de renta media:• la redistribución del bienestar por medio de la

protección social y la fiscalidad;• la emancipación política y social de los ciuda-

danos desfavorecidos, vulnerables y excluidos;• un crecimiento más inclusivo y sostenible;• el clima y el medio ambiente.

Nuevas formas de cooperación con los países de renta media:

La Cooperación belga al desarrollo irá abando-nando gradualmente la ayuda financiera y la prestación de servicios para concentrarse en la transmisión de conocimientos, tecnologías y experiencia técnica con el fin de ayudar a las fuerzas sociales que actúan por conseguir una relación de fuerzas sociopolíticas más justa y por una mayor cooperación supranacional.

En el futuro, las relaciones entre Bélgica y los países de renta media asociados se ampliarán más allá del ámbito político de la cooperación al desarrollo.

En el marco de la cooperación con los países de renta media, Bélgica pretende trascender la mera relación donante-beneficiario, para propiciar una relación basada en una asociación igualitaria y beneficiosa para ambas partes. La Cooperación belga irá abandonando gradualmente la ayuda financiera y la prestación de servicios para concentrarse en la transmisión de conocimientos, tecnologías y experiencia técnica.

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Una organización eficiente para una ayuda eficazLa Dirección General de Cooperación al Desarrollo y Ayuda Humanitaria (DGD) quiere y debe ser una organización efi-ciente. En este sentido se han puesto en marcha distintos sis-temas con el fin de garantizar y trabajar en la mejora constan-te de la eficacia de la ayuda prestada, tanto en lo referente a los procesos como a los resultados esperados. Se presta una especial atención a la evaluación y el seguimiento de dichos resultados, así como a la transparencia. También a la distri-bución de las competencias y de los conocimientos especiali-zados, por medio de equipos transdireccionales.

Gestión y seguimiento del resultado de las evaluacionesEvaluación de la MOPAN y de la OMS

Bélgica se encuentra entre los 17 países donantes que forman parte de la MOPAN (Red de Evaluación del Desempeño de Organi-zaciones Multilaterales). La red MOPAN tiene por finalidad evaluar la eficacia de las organizaciones multilaterales que reciben su fi-nanciación de los países donantes.

En 2013, la red evaluó, entre otras instituciones, a la Organización Mundial de la Salud (OMS), al Programa Mundial de Alimentos (PMA) y al Fondo In-ternacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), tres organizaciones multilaterales asociadas con la cooperación belga al desarrollo.

Durante las consultas bilaterales con estas entidades, la DGD utilizó estas relaciones como punto de partida para la preparación de las reuniones de los consejos de administración.

Actualmente, la red MOPAN está en fase de transición. En este contexto, en 2013 se organizó una evaluación externa de la MO-PAN. Bélgica se encargó de la misma, que sirve de base para las negociaciones sobre su reforma. Estas negociaciones deben dar sus frutos en 2014, cuando se tendrá que aprobar una propuesta para la apli-cación en 2015 de un planteamiento y una metodología nuevos.

En cuanto a la evaluación de la OMS, el papel de Bélgica también es destacado. La representación belga en Ginebra, junto con su homó-logo holandés, han colaborado para facilitar el proceso de evaluación y han entablado el diálogo con la OMS acerca de esta cuestión. Gracias a esta estrecha cooperación se han podido sentar las bases de seguimiento que Bélgica y los Países Bajos quieren organizar con la OMS para extraer las conclusiones de la evaluación y detectar aquellas áreas susceptibles de mejora.

Transparencia y resultadosLa transparencia y los resultados son dos elementos muy impor-tantes para que la ayuda sea eficaz. La DGD lo enfoca de distintas maneras.

Transparencia hacía a los actores y el público belgas. Todas las in-tervenciones financiadas por el presupuesto de la DGD están a disposición del público en su página web (http://diplomatie.belgium.be/fr/politique/cooperation_au_developpement/) y se pueden consultar fácilmente gra-cias a un motor de búsqueda muy sencillo de utilizar.

Transparencia a través de la comunidad internacional. Esta transpa-rencia se traduce en las relaciones del Comité de Ayuda al Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE-CAD), así como la Iniciativa Internacional para la Transparencia de la Ayuda (IATI).

A través de estos dos canales complementarios, los donantes cumplen su compromiso en materia de transparencia adquirido durante el cuarto foro de alto nivel sobre la eficacia de la ayuda, celebrado en Busan, Corea del Sur. Efectivamente, en Busan se decidió reunir las distintas

relaciones y canales de comunicación existentes en torno a unas Normas Públicas Comunes para la Información sobre la Ayuda.

El nivel de exigencia de esta nueva norma de relaciones es ahora mayor: es preciso tener en cuenta y medir un mayor número elementos. La información se debe actualizar con más regularidad, mientras que se ha de facilitar su consulta y tratamiento mediante motores de búsqueda, aplicaciones interactivas o bases de datos locales de los países socios.

Este nuevo método conlleva cambios considerables para los do-nantes. Actualmente se está preparando una hoja de ruta en la que se detallará cómo deben indicar los donantes todos los datos que puede o podrá aportar, cuándo y con qué frecuencia los podrá actualizar. El sistema deberá entrar en funcionamiento en 2015.

Bélgica muestra su voluntad en esta materia y se ha comprometido con la campaña “Publish What You Fund“ (PWYF) a seguir estrictamente esta hoja de ruta, respetando el espíritu de Busan.

La propia DGD se ha comprometido a publicar sistemáticamente, de aquí a finales de 2015, los resultados deseados y previstos, calibrados objeti-vamente a través de indicadores adecuados.

La DGD ha puesto en marcha un proyecto con el fin de imple-mentar un sistema de datos internos que se deberá desarrollar a lo largo de 2014, de tal forma que a finales de 2015, como muy tarde, pueda alcanzar sus ambiciosos compromisos.

Mejora de la gestión interna de la organización: el control internoEn lo referente a la modernización de la administración, cada vez se presta una mayor atención al buen gobierno y a una gestión de los medios que resulte más eficiente. La DGD, muy sensible a estos valores y con el celo que la caracteriza para una óptima utilización de los fondos públicos, se comprometió plenamente a ello tras su última reforma a través del departamento Gestión de la organización (D4).

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Las plataformas O*: PULSE y KLIMOS; GRAP santé: una fructífera colaboración entre universidades y la CooperaciónLa Cooperación belga al desarrollo colabora con diversas plataformas universitarias, aprovechando sus conocimientos técnicos y su competencia en ámbitos concretos como el cli-ma o la salud, pero también la sensibilización de la población en todo lo que conlleva la ayuda al desarrollo. Hasta finales de 2013, la cooperación universitaria ha financiado grupos de estudio cuyo objetivo es prestar apoyo científico a la DGD, tanto para la determinación de posiciones políticas como para ampliar sus competencias temáticas.

Sin embargo, estos grupos de estudio también tenían por objeto estimular y fortalecer el interés y los conocimientos técnicos en estos temas en el seno de la comunidad univer-sitaria.Entre 2009 y 2013 han operado tres grupos en las universidades flamencas partiendo de estas premisas: • KLIMOS (medio ambiente y adaptación climática);• PULSE (estudio acerca del apoyo de la opinión pública al desarrollo);• AID EFFECTIVENESS (eficacia de la ayuda).

En las universidades francófonas operan otros tres grupos• GRAP-3A (agricultura);• GRAPPAX (prevención de conflictos y consolidación de la paz);• GRAP-PA (Programa de París – Accra y el sector de la salud).

Asimismo, la DGD ha obtenido asistencia científica a través de programas del Instituto de Enfermedades Tropicales, del Real Instituto Belga de Cien-cias Naturales y del Museo de África Central.

A continuación se exponen los tres ámbitos de investigación:

La plataforma O* PULSE analiza el apoyo de la opinión pública belga al desarrolloBélgica, en comparación con otros países europeos, realiza una gran inversión en la sensibilización y la educación al desarrollo, aun-que no siempre sea posible conocer la incidencia que tienen las campañas de las ONG y de sensibilización en las escuelas sobre la actitud y el com-portamiento de la población. Por otra parte, el periodo de crisis económica que estamos atravesando hace que el apoyo a la cooperación al desarrollo tienda a reducirse.

Del mismo modo, PULSE ha concretado qué acciones de sensibilización han registrado un mayor impacto y ha intentado medirlo. Esta plataforma ha procurado identificar a los actores que efectúan estas campañas de concienciación y las entidades que las financian en Bélgica.

Algunas conclusiones del estudio de PULSE• Transmitir un mensaje sobre la Cooperación al desarrollo a

través de los medios de comunicación es complicado. El men-saje debe ser lo más concreto posible. Ha de presentar una parte dramática y un matiz positivo, preferentemente vinculado al contexto local. No es tan evidente como parece. No menos importante es establecer buenas relaciones con los medios. Actos tan popu-lares como Music for Life llegan a un público muy amplio, pero se corre el riesgo de que se diluya el mensaje;

• Para los partidos políticos belgas, la Cooperación al desarro-llo no es una prioridad por no considerarlo un asunto renta-ble electoralmente. Por lo tanto, el desarrollo de una visión en la materia se confía a un experto que, por lo general, tiene un papel secundario en el partido;

• Internet es el medio más adecuado para realizar un sondeo, con un equipo de personas que participan voluntariamente en el mismo. Por una parte, las encuestas por este medio resultan más baratos y son más sencillos de realizar que por teléfono, ofre-ciendo a la vez una garantía suficiente de fiabilidad.

La plataforma O* KLIMOS relaciona el cambio climático y la cooperación al desarrolloAdemás de su actividad investigadora, la plataforma interuniver-sitaria “Clima y Cooperación al desarrollo” (KLIMOS) colabora con la DGD prestándole asistencia científica.

Klimos, una plataforma especializada en cuestiones ligadas al cambio climático, a la mitigación y a la cooperación al desarrollo, reúne a diez grupos de investigación de cuatro universidades (Vrije Universiteit Brussel, Universiteit Gent, Universiteit Antwerpen, Katholieke Universiteit Leuven) y de la Katholieke Hogeschool Sint-Lieven.

La caja de herramientas de KLIMOSLa caja de herramientas de KLIMOS 2.0 se ha adaptado con el fin de dar una mejor respuesta a las necesidades de la Cooperación al desarrollo mediante la ampliación y optimización de su base de datos.

Estos recursos se han utilizado durante la celebración de talleres regiona-les de la DGD en Kampala (África anglófona) y Bamako (África francófona).

En total se han organizado, realizado o redactado cinco talleres, tres artí-culos, dos documentos de trabajo, una contribución a una conferencia, un informe, tres carteles y dos estudios de caso, para los que se ha contado con el apoyo de tres doctorandos.

La colaboración entre KLIMOS y la DGD en 2013 ha permitido.• crear una misión de evaluación de la sostenibilidad de la construc-

ción de una escuela y de proyectos de construcción en Palestina;• redactar un manual destinado al análisis del medio ambiente y de la

vulnerabilidad;• realizar r un estudio de viabilidad para vincular la base de datos de

Ayuda al desarrollo y la caja de herramientas de KLIMOS;• aportar opiniones en las reuniones del Comité Ejecutivo y los comen-

tarios sobre la evaluación de la estrategia ambiental de 2002 por el Servicio Especial de Evaluación;

• desarrollar indicadores para los Objetivos de desarrollo sostenible y mantener la contribución belga para Río+20;

• poner en marcha cinco talleres cuyas contribuciones servirán para redactar un nuevo documento estratégico de la DGD sobre el medio ambiente;

• desarrollar las pruebas KAFKA y EIDDD;• organizar un taller de varias jornadas dedicadas a las redes.

El proyecto KLIMOS se ha centrado durante dos años en la publicación de artículos científicos y en la organización de seminarios. Los dos años restantes se han dedicado al estudio de casos. A cada uno de ellos se ha asignado un doctorando (República del Congo, Ruanda, Perú, Etiopía, Ecuador, Sudáfrica, Malawi, Uganda y Mozambique) para poder trabajar a largo plazo y, gracias a la experiencia adquirida, conseguir un efecto multiplicador para las encuestas sobre el clima.

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Gracias a una interacción adecuada, KLIMOS ha conseguido que los distin-tos actores de la Cooperación belga incorporen en sus políticas operativas sus investigaciones científicas, su educación y formación, su enfoque so-cial y sus conocimientos científicos.

KLIMOS ha servido de impulso a un gran número de proyectos sobre la adaptación, la mitigación y la cooperación al desarrollo, en colaboración con universidades locales

GRAP-PA evalúa la eficacia de la ayuda en el sector de la sanidad públicaEl Grupo de Investigación para el Apoyo de la Política de cooperación en ejecución del programa para la eficacia de la ayuda, París-Accra (GRAP-PA, por sus siglas en francés) tiene como principal misión analizar la efi-cacia de la ayuda y, en especial, realizar un seguimiento del cumplimiento de las Declaraciones de París y Accra, concretamente en el sector de la sanidad pública.

El análisis multidisciplinar llevado a cabo por el GRAP-PA incluye dos com-ponentes de investigación: • las políticas internacionales de cooperación y sanidad, incluyendo las

de la Cooperación belga;• la influencia de las políticas internacionales de cooperación y sanidad

en la aplicación de políticas públicas de sanidad en los países en desarrollo;

• En 2013, su apoyo a la política de la DGD se ha traducido, entre otras cosas, en: un análisis de la nueva ley de cooperación;

• apoyo a la reflexión acerca de la asistencia técnica y sobre el dispo-sitivo de equipos transdireccionales;

• asimismo, han participado también los tres GRAP y contribuido a la consulta ;

• de la sociedad civil en torno a la posición del pueblo belga sobre el programa de desarrollo posterior a 2015.

Los resultados de estos estudios han servido de punto de partida para la creación de un módulo de formación continua sobre las cuestiones y la puesta en práctica de los principios de eficacia de la ayuda. Esta formación está dirigida a fortalecer la capacidad de los actores y su compromiso para conseguir que la ayuda sea más eficaz, así como a mejorar el funciona-miento de su administración. El módulo de formación se impartió en Benin en marzo de 2013 y en Senegal en octubre. Entre el público meta se con-taban responsables de la administración nacional, socios en el desarrollo, incluyendo los adjuntos belgas a la cooperación y los asistentes de la CTB y de la sociedad civil.

Breve presentación del GRAP-PA SANTÉEl GRAP-PA Santé forma parte de la Red de Desarrollo y Salud (RDS) de la DGD. Esto permite establecer vínculos regulares entre el GRAP-PA Santé y los coordinadores de la DGD, la interconexión de los distintos actores (DGD, CTB, IMT, Be-cause health) y la posibilidad de participar y contribuir activamente a los debates sobre la Cooperación belga al desarrollo en materia de sanidad.

Para la DGD, la implicación directa del GRAP-PA Santé en un grupo interno como el RDS ha permitido establecer una relación directa con el mundo académico y beneficiarse periódicamente de apoyos puntuales o más es-tructurales.

www.grap-pa.be

El GRAP contribuye activamente al debate sobre la Cooperación belga al desarrollo en materia de sanidad.

Un nuevo ciclo de colaboración: Teniendo en cuenta las evaluaciones de los participantes universitarios y sus propias opiniones, se decidió seguir adelante con este tipo de colabo-ración durante los próximos tres años, cambiando algunos matices:• limitación a tres grupos de estudio con el fin de reforzar el segui-

miento en la DGD ;• Una definición clara de los resultados previstos al inicio de cada año

de trabajo;• propiciar la colaboración interuniversitaria en cada grupo cuando sea

posible y pertinente, preferentemente con investigadores de las dos comunidades;

El 15 de diciembre de 2013, CIUF-CUD y VLIRUOS presentaron su candi-datura para colaborar con la DGD en tres temas ofrecidos por el gobierno;• la financiación del desarrollo;• la integración de temas relacionados con el medio ambiente y el

cambio climático en la transición a un desarrollo sostenible;• la eficacia de la ayuda, con especial atención a los contextos más

frágiles.

Esta colaboración se ha lanzado con el nombre ACROPOLIS (Investigación Académica para el Apoyo a las Políticas, por sus siglas en inglés).).

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AMÉRICA LATINA15. Ecuador16. Perú17. Bolivia

ÁFRICA DEL NORTE1. Marruecos2. Argelia

ÁFRICA OCCIDENTAL3. Mali4. Níger5. Senegal6. Benín

ÁFRICA CENTRAL7. República Democrática

del Congo8. Ruanda9. Burundi

ÁFRICA ORIENTAL10. Uganda11. Tanzania12. Mozambique

13. Sudáfrica

ORIENTE MEDIO14. Territorio Palestino

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LOS 18 PAÍSES COLABORADORES DE LA COOPERACIÓN DEL GOBIERNO BELGA

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ÁFRICA ORIENTAL10. Uganda11. Tanzania12. Mozambique

ASIA18. Vietnam

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La coherencia de las políticas a favor del desarrolloActualmente, en un mundo multipolar y globalizado, el desa-rrollo de los países de renta baja depende de innumerables ámbitos que no necesariamente guardan relación con la coo-peración al desarrollo propiamente dicha. También resulta imprescindible controlar, garantizar y evaluar que las demás políticas (económicas, comerciales, agrícolas, financieras, energéticas, etc.) aplicadas por los Estados industrializados sean coherentes con la cooperación al desarrollo. Para Bélgi-ca, la coherencia de las políticas es prioritaria, tanto a escala nacional como internacional.

Une cooperación en pos de la coherencia de las políticas a favor del desarrolloLa globalización de la economía afecta en gran medida a los paí-ses en desarrollo. Algunos de ellos aprovechan plenamente las nuevas posibilidades, mientras que otros no consiguen salir de esa situación de fragilidad o marginalidad.

Por este motivo ha evolucionado tanto el contexto político de la coopera-ción al desarrollo. Hoy en día se caracteriza por la consolidación de las economías emergentes, en especial de los países “BRICS” (Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica).

La visión antigua de la cooperación al desarrollo, en términos de norte y sur, ha quedado obsoleta y se ha de sustituir por un plan-teamiento moderno que considere el actual contexto multipolar.

Asimismo, el entrelazamiento más estrecho de los vínculos económicos implica que las posibilidades de desarrollo en los países de renta baja vienen dadas cada vez con más frecuencia por otros ámbitos políticos además de la cooperación al desarrollo como tal. Precisamente por esto, la política moderna de desarrollo debe prestar ahora más atención a la incidencia que pueden tener otros campos políticos, como el comercio, las finanzas, la energía, el clima, la migración, etc. sobre los países en desarrollo.

El gobierno belga expresó de forma explícita esta inquietud en el acuerdo de coalición de 1 de diciembre de 2011, así como en declaracio-nes de políticas generales relativas a la cooperación al desarrollo.

Por consiguiente, la cooperación belga debe velar por que se re-fuerce la coherencia de las políticas a favor del desarrollo. Las Jornadas de Cooperación al desarrollo 2012 se dedicaron íntegramente a este tema. Tras la celebración de las mismas se creó un grupo de trabajo mixto, que incluía a las ONG, para preparar medidas concretas.

Nuevo marco legislativo para reforzar y garantizar la coherencia de las políticas a favor del desarrolloLa nueva ley de 2013 relativa a la cooperación al desarrollo incluye varios artículos encaminados a conseguir que la coherencia de las políticas de desarrollo sea una realidad tangible.

La Conferencia interministerial sobre Coherencia de las Políticas a favor del Desarrollo (CPD) ha recibido la luz verde del Consejo de Ministros. El empleo, el cambio climático, la (in)tolerancia y la (in)seguridad, la migra-ción, los mercados, las inversiones y la huida de cerebros y capitales, los precios de la energía, etc. Prácticamente cualquier decisión que se tome en un país está ligada actualmente a lo que ocurre en el extranjero. Esta interdependencia es aún más marcada para los países en desarrollo. Por consiguiente, para que sea eficaz, la cooperación al desarrollo ya no se puede separar de las demás políticas del gobierno federal. Las decisiones relacionadas con la economía, la agricultura, el comercio exterior, la migra-

ción, el medio ambiente, el desarrollo sostenible o incluso la energía tienen una repercusión directa sobre el desarrollo de terceros países. Todos estos ámbitos deberían desarrollar un “reflejo de cooperación”.

Dosdecretos reales, aprobados a finales de 2013 por el Consejo de Ministros, prevén la creación de dos órganos institucionales des-tinados a promover la coherencia de las políticas de desarrollo.• El primero de ellos será una comisión cuyo cometido será el de con-

cienciar a los distintos departamentos federales acerca de la cohe-rencia de las políticas a favor del desarrollo, así como contribuir a conocer mejor los intereses de los países en desarrollo en los distin-tos ámbitos políticos.

• El segundo órgano es un Consejo consultivo independiente, el cual se encargará de supervisar el funcionamiento de los mecanismos institucionales en el marco de la coherencia de las políticas y contri-buir a que sean más eficaces.

Asimismo, también se creó un comité para el análisis de los efec-tos. Este comité, que entró en funcionamiento el 1 de enero de 2014, está formado por representantes de los sectores implicados y cumple una doble misión: de asistencia y de presentación de informes.

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Reforzar la coherencia de las políticas mediante la utilización de una caja de herramientas con los siguientes objetivos:• Creación de una plataforma que reúne a los agentes no guberna-

mentales y cuyo objeto sea propiciar la coherencia de las políticas a favor del desarrollo

• El 1 de enero de 2014 comenzó a utilizarse un nuevo sistema, más integrado y accesible, de análisis de los efectos de los reglamentos federales. Se han reformado y homogeneizado las pruebas KAFKA (relativo a la carga administrativa de una recomendación) y EIDD (evaluación del impacto del desarrollo sostenible) para que el análisis de los efectos de los reglamentos sea considerado en la proporción de hombres y mujeres (prueba de género) y en el funcionamiento de las pequeñas y medianas empresas, así como el desarrollo de los países del sur

• Un procedimiento único permitirá efectuar estos análisis de los efec-tos mediante un formulario integrado, que se llenará por Internet, gracias al cual se podrá comprobar con una sola operación el im-pacto de un reglamento en diversos ámbitos (cargas administrativas, desarrollo sostenible, género “PYMES” y coherencia de las políticas de desarrollo)

• La cooperación belga analiza asimismo la coherencia de las polí-ticas en órganos como Finexpo (promoción del comercio exterior), Ducroire (financiación para la exportación) y consulta periódicamente a servicios financieros para comprobar si las posturas adoptadas por las instituciones de Bretton Woods (Fondo Monetario Internacional y Banco Mundial) prestan la suficiente atención a las necesidades de desarrollo de los países socios

• El plan del personal de la DGD contempla una división específica de funcionarios encargados de velar por la coherencia de las políticas de desarrollo.

Una prioridad mundialLa coherencia de las políticas está en lo más alto de la lista de prioridades en todo el mundo. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) se mantiene muy activa en este sentido y ha puesto en marcha numerosas iniciativas.

El informe bienal de la Unión Europea presentó exhaustiva las distintas campañas acometidas por sus Estados miembros referente a las políti-cas a favor del desarrollo. Se hizo hincapié en cinco ámbitos prioritarios: comercio y finanzas, cambio climático, seguridad alimentaria, migración y seguridad.

Por otra parte, Bélgica concede una gran importancia a la integración de las políticas en el programa de Naciones Unidas para el desarrollo más allá de 2015.

La nueva ley sobre la Cooperación al desarrollo incluye varios artículos encaminados a conseguir que la coherencia de las políticas de desarrollo sea una realidad tangible.

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Una programación europea conjunta

Contexto e idea de la programación conjuntaLos ministros europeos encargados de la cooperación al desarrollo lanza-ron en 2012 el proceso de desarrollo de una programación conjunta. Este concepto, que va en consonancia con el programa de eficacia de la ayuda y de la Declaración de París de 2005, propugna los siguientes principios: • apropiación de los países socios;• armonización de los donantes;• alineación del programa de desarrollo;• mutua responsabilidad de los países socios;• compromiso en torno a los resultados.

La programación conjunta pretende observar estos principios y contribuir, al menos, a reforzar la armonización y la alineación.

Asimismo, la programación respetará los siguientes principios: se trata de un producto gestionado sobre el terreno, de participación volun-taria; la Unión Europea (delegación o Estado miembro) garantiza el liderazgo. Por último, el proceso está abierto también a donantes que no pertenezcan a la Unión Europea. El objetivo consiste en que los Estados miembros de la Unión Europea establezcan un programa común para cada país en desarrollo en el que tengan presencia.

Cómo se elabora esta programación conjunta

Primeramente se lleva a cabo de antemano un análisis conjunto del con-texto del país y de sus necesidades en materia de desarrollo.

A continuación se distribuyen las tareas en función de las necesidades de cada país y de la competencia técnica de los donantes, lo que les permite centrarse en aquellos sectores en los que están especializados. Este método evita la dispersión de los medios disponibles. Se definen los sectores en los que quieren operar los distintos donantes, con el fin de aumentar el efecto.

También es posible transferir determinadas actividades a otros donantes o contemplar una financiación común para ciertas intervenciones. Por últi-mo, también se pueden compartir los resultados para analizar qué se debe mejorar y valorar.

El punto de partida de este ejercicio es el plan nacional de desa-rrollo del país socio en cuestión. Así pues, es necesario adoptar ciclos de programación que se correspondan con los de los países en desarrollo, para que así las autoridades del país y los donantes europeos sincronicen las intervenciones de los años venideros.

Ejecución y estado de la situaciónEn 2012 echaron a andar 11 proyectos piloto, con Ruanda y Mali como países socios de la Cooperación belga. A finales de 2013 se lanzó el proceso en más de 40 países. En la primera fase de ejecución, a falta de un modelo llave en mano o de instrucciones precisas, cada país elaboró su hoja de ruta, dependiendo del contexto, en lo relativo a la forma que debía adoptar esta programación conjunta.

Posteriormente han aumentado las incertidumbres y los distintos Estados miembros han manifestado su disposición a seguir adelante. El proceso está tomando forma claramente en algunos países y su finalidad es lanzar una programación conjunta efectiva en 2014. Otros países están experimentando más dificultades y no estarán en disposición de lan-zar una programación efectiva hasta dentro de unos años.

No obstante, ya se puede apreciar que este ejercicio está tenien-do una influencia positiva sobre la coordinación entre donantes europeos y la correspondencia con las necesidades de los países socios.

El compromiso belga a favor de la programación conjunta

Bélgica aboga por la programación conjunta desde el principio y desempeña un papel pionero en este sentido. Este compro-miso se ha incorporando a la nueva ley sobre cooperación al desarrollo, así como en los últimos documentos estratégicos.

Entretanto, en 14 de los 18 países socios de la cooperación belga se ha lanzado la programación conjunta. Por consiguien-te, la cooperación belga al desarrollo experimentará ciertos cambios en estos países tras este ejercicio para hacer que nuestra ayuda sea más eficaz. Se trata de un proceso a largo plazo en el que se profundizará en 2014.

Asimismo, en colaboración con los Países Bajos, la Comisión Europea y el Servicio Europeo de Acción Exterior, Bélgica orga-nizará en 2014 uno de los cinco talleres regionales (el referido a África central, occidental y austral) dedicado a la programa-ción conjunta. Estos talleres servirán para poner en común experiencias y conocimientos y para fomentar las prácticas correctas sobre el terreno.

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Enfoques temáticosDerechos HumanosLos cuatro subtemas de los derechos humanos en los que ya ha realizado inversiones la Cooperación belga son:• derechos y protección de la mujer (acceso equitativo al trabajo, a

la función política, derechos sexuales y reproductivos, rehabilitación de las mujeres víctimas de la violencia, etc.);

• derecho de los menores y los jóvenes (trabajo infantil, protección de menores, justicia para la juventud, integración socioeconómica de los jóvenes, etc.);

• derecho a un trabajo digno (protección social, igualdad de sala-rios para hombres y mujeres, formación profesional, etc.);

• derecho a la justicia (arresto preventivo, acceso a la justicia, pro-tección de víctimas y testigos, justicia de transición, etc.).

Consolidar la sociedad de los países sociosEs importante ayudar a los países socios a equiparse con herramientas de gobierno eficaces que cumplan los criterios democráticos y de un estado de derecho, con el fin de que la cooperación al desarrollo pueda ofrecer resultados sostenibles. Bélgica y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) colaboran para guiar a los países árabes hacia la tran-sición democrática y ayudarles a consolidar sus respectivas sociedades.

El gobierno belga es un socio importante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en el campo de la promoción del go-bierno.

La lucha contra la corrupción, el apoyo al proceso de democratización y el fortalecimiento de la justicia son esenciales para garantizar el éxito de la transición democrática en países que han atravesado una situación de conflicto.

Crecimiento inclusivo, equitativo y sosteniblePara que todas las personas, incluyendo los más pobres, se puedan bene-ficiar del crecimiento económico en los países en desarrollo y participar en el mismo, es preciso vigilar que éste sea inclusivo, equitativo y sostenible. Para la cooperación belga, el apoyo al sector privado de estos países es un medio de alcanzar este objetivo.

La nueva ley de cooperación al desarrollo promueve acciones que contri-buyan a conseguir un crecimiento económico inclusivo, equitativo y sos-tenible, dando prioridad al empresariado local, a la economía social y a la creación de puestos de trabajo dignos y sostenibles conforme a los convenios fundamentales y al programa para el trabajo decente de la OIT.

Así pues, esta nueva ley otorga un lugar importante al sector privado local e indica asimismo los objetivos, principios y valores básicos aplicables a todas las intervenciones de la cooperación.

Desarrollar un planteamiento basado en los derechos humanos implica:• propiciar un desarrollo que concilie las tres dimensiones del desarro-

llo sostenible: la social, la medioambiental y la económica;• poner en práctica la igualdad de oportunidades, especialmente en

materia de géneros, una obligación transversal que la cooperación belga favorece;

• dar prioridad a los criterios de economía social.

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Una multitud de campañas de sensibilización e información en 2013Aparte de las numerosas iniciativas llevadas a cabo por ONG y cofinanciadas por la DGD, multitud de campañas de sensibiliza-ción puntuales y ligadas a actos (festivales de cine, exposiciones, etc.) se han beneficiado también del apoyo financiero de la DGD, así como unos quince programas de radio, televisión y películas.

Dimension 3Dimension 3 es la revista gratuita que publica la cooperación belga al desarrollo. En ella se ofrece una amplia presentación de las campañas a favor del desarrollo realizadas y financiadas por Bélgica, pero también la actualidad y lo que conlleva la cooperación al desarrollo a escala mundial. La publicación pone asimismo a disposición de profesores y alumnos de secundaria información accesible que se puede usar en el curso, como puso de manifiesto una encuesta realizada en 2008.

www.dimension-3.be

Sensibilizar e informar a la opinión pública acerca de los temas relacionados con el desarrolloEl periodo de crisis económica que estamos atravesando hace que el apo-yo de la opinión pública a la cooperación al desarrollo tienda a reducirse. Por ello ahora es más importante que nunca concientizar e informar al pú-blico de todo lo que está en juego en cuanto al desarrollo, de la necesidad de alcanzar un equilibrio en las relaciones norte-sur y sobre las acciones que lleva a cabo Bélgica en este campo. Éste precisamente es uno de los cometidos de la DGD.

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Ayuda humanitariaEn 2013, Millones de personas en todo el mundo han seguido inmersas en conflictos armados y situaciones de violencia que han provocado el desplazamiento de refugiados en masa, cuyo número aumenta constantemente en muchos países.

Por otra parte, las catástrofes naturales que han asolado determinadas regiones del planeta han causado grandes penurias humanas.

En África son muchos los países que han sufrido inundaciones importantes y en los que se siguen desarrollando conflictos armados. Asia se ha visto asolada por ciclones, tempestades e inundaciones. En muchas regiones del mundo se han desatado epidemias de cólera, meningitis o fiebre amarilla.

En 2013 a la ayuda humanitaria belga no le ha faltado el trabajo, que ha contribuido con la ayuda aportada en el marco de diferentes crisis, entre las que se encuentra la República Democrática del Congo, Siria, Mali, la República Centroafricana y Sudán del Sur.

Principales ámbitos de las campañas humanitarias en 2013República Democrática del Congo. La situación humanitaria sigue sien-do muy precaria, ya que de sus 78 millones de habitantes, cuenta con 2,5 millones de desplazados y 6,3 millones de personas que requieren ayuda humanitaria. Por otra parte, el clima de inseguridad ha llevado a decenas de miles de congoleños a buscar refugio en Uganda, Ruanda y Burundi. La crisis en la RDC sigue siendo de protección: los civiles se ven fuertemente sujetos a la violencia (incluyendo violencia sexual y de género), a la inseguridad ge-neralizada y a la impunidad de los grupos rebeldes y de las FARDC (fuerzas armadas de la República Democrática del Congo). Los combates entre el M23 y las FARDC concitaron la atención política y mediática en 2013, si bien en el este del país hay otros actores que desestabilizan la situación. El des-plazamiento de la población y la inseguridad que impide el acceso a las dis-tintas regiones ponen en peligro los medios de subsistencia de la población.

Siria. Más de dos años después de que comenzó la crisis, el conflicto ar-mado sigue teniendo consecuencias devastadoras, incluyendo a los países limítrofes. La situación de la población civil se ha seguido deterioran-do en 2013. Se han registrado graves violaciones del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos, incluyendo violaciones, torturas, masacres, la utilización de armas químicas y bombas de fragmentación. El número de fallecidos como consecuencia del conflicto no ha dejado de au-mentar, superando las 100.000 víctimas a mitad de 2013. La respuesta a las necesidades de la población se ha visto dificultada por el fuerte deterioro de la situación de seguridad que limita el trabajo de los organismos de ayuda e impide llegar a las poblaciones vulnerables.

El número de refugiados en los países vecinos se duplicó con creces en 2013. Otros países, principalmente Líbano, Jordania, Turquía, Irak y Egipto, han acogido a más de dos millones de sirios. En este contexto, y con el fin de dar respuesta al dramático aumento de las necesidades humanitarias, las Naciones Unidas lanzaron en 2013 el mayor llamamiento de su historia a través de la versión revisada del plan de respuesta para la ayuda humani-

taria en Siria (Sharp) por una cantidad de 1.000 millones de euros y el plan de respuesta regional (RRP), por un total de 2.100 millones de euros, para proporcionar ayuda humanitaria a Siria y a los países limítrofes en 2013.

Mali. Este país atraviesa una crisis política, humanitaria y de seguridad muy compleja y de gran envergadura. El conflicto armado, que afecta a las tres regiones del norte del país desde 2012, sufrió una escalada en enero de 2013 y provocó un gran desplazamiento de la población, que huía de las zonas de inseguridad. Las necesidades humanitarias vinculadas al conflicto armado son considerables y se añaden a las ya existentes y a las generadas por las crisis alimentarias y nutricionales de 2012.

República Centroafricana. En sólo unos meses, el país ha pasado de un conflicto de baja intensidad que provocaba necesidades humanitarias im-portantes en las regiones menos pobladas al derrumbamiento del Estado, que afecta a todo el territorio. Toda la población, cifrada en 4,6 millones de personas, se ve afectada por la crisis, mientras que dos millones precisan ayuda humanitaria. El conflicto ha obligado a cerca de 900.000 personas a desplazarse al interior del país y a otras 62.000 a buscar refugio en los Estados vecinos. Las necesidades humanitarias son colosales .

La crisis actual se caracteriza también por la violación a gran escala del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos (asesinatos, mutilaciones, violaciones, secuestros, reclutamiento forzoso, incluso de ni-ños, destrucción de escuelas y de infraestructuras médicas). La inseguridad hace que las organizaciones humanitarias se enfrenten a dificultades excep-cionales para dar asistencia a las comunidades afectadas y para prestarles ayuda y protección.

Sudán del Sur. Después de un deterioro importante tras la independencia del país en julio de 2011, parece que la situación humanitaria se estabilizó ligeramente en 2013. A mediados del mes de diciembre se agravó repenti-namente tras un recrudecimiento de los combates entre comunidades (entre los Nuers y los Dinkas) que causaron innumerables víctimas entre la pobla-ción y obligaron a casi 900.000 personas a huir de las zonas donde se desa-rrollaban los combates. Las necesidades humanitarias son importantes y ur-gentes: más de tres millones de de personas precisan ayuda humanitaria.

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La contribución belga a los ODMDesde hace varios años, el informe anual de la DGD presenta las actividades emprendidas para lograr los Objetivos de De-sarrollo del Milenio. Todos los años se seleccionan uno o dos ODM. El informe de este año se centra en los ODM 1 y 2. No se emite el balance para los 8 ODM.

En todos los países socios en los que opera, la cooperación belga al desarrollo incluye en sus campañas el primer Obje-tivo de Desarrollo del Milenio: erradicar la pobreza extrema y la hambruna. Para lograr este primer ODM, la agricultura y la seguridad alimentaria constituyen dos de los cuatro sectores prioritarios.

Objetivo n.° 1: reducir la pobreza extrema y la hambruna

Campañas de Bélgica para alcanzar el ODM 1:Erradicar la pobreza es uno de los principales objetivos de la cooperación belga al desarrollo. Para lograrlo, la agricultura y la seguridad alimentaria constituyen dos de los cuatro sectores prioritarios, principalmente a través de campañas dirigidas a la agricultura familiar.

Los objetivos de la DGD al respecto se definen, entre otros, en el documento estratégico “Agricultura y seguridad alimentaria” de 2010.

Con el fin de hacer que este documento sea operativo, se ha creado una plataforma de Agricultura y seguridad alimentaria. En ella se reúnen los distintos servicios de la DGD, así como de otros agentes belgas implicados en la aplicación de la estrategia de desarrollo relativa a la seguridad alimentaria, como la CTB, los ACNG, las

universidades, BIO, etc. Funciona como un espacio de información, coordinación y debate entre los distintos agentes belgas.

En 2013 se reunió en cuatro ocasiones y, entre otras cosas, emitió un anuncio público sobre el documento de la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO) “Inversión agrícola responsable”.

La plataforma Agricultura y seguridad alimentaria ha elaborado un modelo de análisis y evaluación de proyectos y programas presentados para su financiación. Este modelo se adoptó en diciembre de 2013 y sirve para evaluar si estas acciones se inscriben en los objetivos generales de la cooperación belga y van en consonancia con las cuatro prioridades iden-tificadas en el documento estratégico. El modelo se aplica a todos los canales de la cooperación belga.

En aras de la especialización, a continuación se ofrecen y definen cuatro ejes de intervención prioritarios.1. Producción agrícola: mejora y protección de la producción y de la

productividad agrícola en una perspectiva de desarrollo sostenible;2. comercialización de la producción: mejora de la valoración agrícola y

del acceso a los mercados;3. Gobierno del sector agrícola: fortalecimiento del Estado, de la socie-

dad civil y de las organizaciones de campesinos;4. La mujer rural: habilitación individual y colectiva de las mujeres en

el entorno rural.

La nueva ley relativa a la cooperación belga al desarrollo fija el objetivo del desarrollo humano sostenible e insiste en la nece-sidad de crear puestos de trabajo dignos y sostenibles, conforme al programa para el trabajo decente de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

En 2008, el entonces ministro de Cooperación se comprometió a dedicar en 2010 un 10 % del total de los gastos de la DGD a la agri-cultura y a la seguridad alimentaria y a aumentar este porcentaje hasta el 15 % en 2015.

Algunos compromisos de la cooperación belga en 2013:• Programa alimentario mundial: 1 millón de euros para el proyecto

“Compras para el progreso” (P4P) en la República Democrática del Congo;

• Fondo internacional de desarrollo agrícola: una participación de 24 millones de euros en la novena reconstitución de recursos del FIDA (esto es, 8 millones de euros anuales en 2013, 2014 y 2015), a los que hay que añadir los 6 millones de euros para la ASAP, Adaptación para el programa agrícola Smallholder. Todo ello supone un presu-puesto total de 14 millones de euros en 2013;

• CGIAR: 8,1 millones de euros para campañas de investigación en el ámbito de la agricultura, la seguridad alimentaria, la nutrición y para el uso y la protección de los recursos naturales y de la biodiversidad. Está previsto que este compromiso a largo plazo alcance los 9,3 millones de euros para los años 2014 y 2015;

• FAO: aproximadamente 2,5 millones de euros, en forma de contri-bución voluntaria a los recursos generales para contribuir a hacer realidad los cinco objetivos estratégicos (eliminar la hambruna, la inseguridad alimentaria y la desnutrición; aumentar la productividad y la sostenibilidad de la agricultura, la silvicultura y la pesca; reducir la pobreza en el entorno rural; fomentar la aplicación de sistemas agrícolas y alimentarios públicos y eficaces; mejorar la resistencia de los medios de subsistencia frente a las catástrofes).

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Objetivo n.° 2: garantizar el acceso a la educación primaria para todosLa DGD circunscribe desde su acción en el sector de la educación en el marco de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Durante 2013 elaboró el balance de las actividades llevadas a cabo en este dominio, con el fin de mejorar la coherencia y la complementariedad, propiciando especialmente un acercamiento con los agentes de la sociedad civil. De esta reflexión na-ció precisamente la nueva estrategia de educación que se describe en este informe (parte 1 “Puntos principales de la cooperación belga al desarrollo en 2013”, punto 4 “Dos nuevas estrategias de cooperación”).

El segundo Objetivo de Desarrollo del Milenio pretende facilitar a to-dos los menores, niños y niñas de todo el mundo, los medios para cursar un ciclo completo de estudios primarios.

Para contribuir a lograr este objetivo, la DGD se comprometió a au-mentar los medios dedicados a la educación, especialmente para la edu-cación elemental, así como a incrementar la eficacia de su ayuda, es decir, a obtener mejores resultados con los recursos disponibles.

Aumento de los medios reservados a la educación elementalEn los últimos años, Bélgica ha abogado por utilizar los márgenes obteni-dos por las operaciones de reducción de la deuda, en la iniciativa en favor de los países pobres muy endeudados (PPME), por ejemplo, en sectores sociales, siendo la educación uno de ellos.

Bélgica financia desde 2002 la Vía rápida de educación para todos, recon-vertida actualmente en la “Alianza mundial por la educación” (GPE, por sus siglas en inglés). Esta iniciativa ayuda a los países menos avan-zados a diseñar su estrategia nacional para el sector de la educación y a llevarla a la práctica. Mediante la creación en 2002, junto con los Países Bajos, Noruega e Italia, del “Fondo fiduciario” que hace posible la acción de la GPE, Bélgica ha contribuido a generar un efecto de formación entre los donantes. Este “Fondo fiduciario” asciende actualmente a 2.200 millones de euros. Gracias a él se ha podido subvencionar la edu-cación elemental en 57 países. La financiación belga de este fondo no ha dejado de aumentar: en 2013 fue de 9 millones de euros.

Aumentar la eficacia de la ayudaDe Bélgica: la aplicación de los principios de eficacia de la ayuda a la cooperación bilateral y una mayor colaboración con la sociedad civil:

La cooperación belga ha mostrado una gran iniciativa para lograr una ma-yor eficacia de su ayuda. Concretamente ha participado en asociaciones en todos los países en los que interviene, respeta las estrategias naciona-les y aporta la ayuda presupuestaria por sectores en aquellos lugares que reúnen las condiciones necesarias. La cooperación belga ha respaldado la definición de políticas y estrategias nacionales para el sector de la educa-ción en la República Democrática del Congo y en Burundi, especialmente. La DGD participa también en la cooperación delegada con el Reino Unido en Ruanda (Bélgica aporta la financiación y el Reino Unido se encarga de la ejecución).

La DGD ha efectuado un acercamiento con todos los actores bel-gas de la cooperación en el sector de la educación. La plataforma Educaid, financiada por la DGD por medio de los programas de la APEFE y de la VVOB, reúne a estos actores (DGD, CTB, ACNG, universidades, WBI, Región flamenca, cuarto pilar). Constituye un activo para mejorar la cohe-rencia y la complementariedad de las campañas de Bélgica en este sector. En concreto, ha permitido dirigir una reflexión común en torno a la nueva estrategia para el sector (véase la parte I). Esta estrategia fue aprobada por el ministro de Cooperación al Desarrollo en mayo de 2013. Ésta retoma la eficacia de la ayuda mediante sus tres principios rectores.

Multilateral: la Alianza mundial por la educaciónLa cooperación belga participa en la “Alianza mundial por la educación” (GPE), cuyo cometido es mejorar la educación elemental en los países en desarrollo. Su consejo de dirección está compuesto por representantes de los países socios, de la sociedad civil y de los donantes.

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