22. - Orfeo en los infiernos

download 22. - Orfeo en los infiernos

If you can't read please download the document

description

 

Transcript of 22. - Orfeo en los infiernos

En el reino de Tracia viva un hombre llamado Orfeo, que manejaba como nadie el poder de la msica.

Con su msica las bestias del bosque quedaban hechizadas, el agua de los ros se detena para escuchar y las rocas temblaban emocionadas.

Una tarde conoci a la ninfa Eurdice y desde entonces vivi para amarla.

El da que se casaron se sinti en la cumbre de la felicidad.

Su alegra, sin embargo, fue fugaz como el roco de la maana.

El mismo da de la boda, Eurdice fue envenenada por una vbora y su cadver qued tumbado en tierra, plido y desangelado como una rosa cortada a destiempo.

Cuando Orfeo se enter de lo ocurrido crey enloquecer de dolor.

Al final, empujado por su amor invencible, Orfeo concibi una idea temeraria, casi suicida: bajar a los infiernos para rescatar a su esposa.

Inici su viaje al pie del cabo Tnaro, entrando en una cueva llena de espinos de la que siempre se ha dicho que lleva a los infiernos.

Camin sin descanso rumbo a las entraas de la Tierra en medio de una ardiente oscuridad, sentiendo a las almas de los muertos adelantarle en su viaje, hasta topar con la inmensa extensin de aguas negras que es la laguna Estigia y sus orillas Caronte, el barquero que gua las almas al infierno.

Orfeo le pidi a Caronte que lo llevase hasta la otra orilla, pero este le respondi lo que ya saba: los vivos no podan cruzar la laguna.En vez de suplicar, Orfeo alz su lira y cant la dicha de estar vivo con tanta elocuencia que Caronte se sinti trasladado a los das ms queridos de su nies, en sus ojos de viejo barquero brillaban las lgrimas y murmur:Has ganado, Orfeo. Sube a mi barca y te llevar a la otra orilla.

As, valindose del poder supremo de su msica, Orfeo fue superando todos los obstculos que le salieron al paso.Incluso consigui amansar a Cerbero, el feroz perro de tres cabezas que vigila las puertas del infierno.

Rodeado de seres quimricos y almas errantes por fin lleg hasta Plutn, el dios de los infiernos, sentado en su trono junto a su esposa, con el gesto grave del rey que exige una obediencia ciega.

Con el corazn roto de dolor, Orfeo le pidi a Plutn que le devolviera a su amada Eurdice o le dejara quedarse junto a ella en su reino, pues no deseaba vivir un da ms sin ella.Angustiado, rompi a cantar, pues nada lo aliviaba como la dulzura celestial de la msica.Su voz son tan ntida y emotiva que las almas de los muertos lloraron y el mismo Plutn qued sobrecogido, decidiendo faltar su inflexible ley por una vez.

Eurdice seguira a Orfeo en el camino de vuelta al mundo de los vivos, pero este jams debera volver la cabeza para mirarla o ella volvera de inmediato al reino donde todo se acaba.

Pero cuando Orfeo alcanzaba a ver ya la luz del sol, empujado por el terror a que su esposa no lo siguiera, mir hacia atrs para encontrarse con el rostro de su amada, sobrecogido por la tragedia, mientras se perda de nuevo en la distancia.

La muerte haba vencido de nuevo la partida.

Orfeo se refugi en la cima de una montaa y aliviaba su pena cantando al son de su lira.Ocurri, sin embargo, que su msica lleg a la base de la montaa donde vivan los ccones y las mujeres de la tribu quedaban enamoradas del cantor nada ms verlo.

Sin embargo, ante sus sentimientos, Orfeo responda con melanclica indiferencia Olvidaos del amor, no trae ms que desgracias.

Las ccones se tomaron a mal esas palabras, asesinaron y descuartizaron a Orfeo, cuya cabeza fue arrastrada por el ra Hebro hasta llegar a las orillas de la isla de Lesbos.

Una serpiente se acerc a ella y abri sus fauces para devorarla pero Apolo, dios de la msica, penss:Es injusto que un msico tan maravilloso como Orfeo tenga un final tan indigno.Y transform a la temible serpiente en estatua de piedra gris.

Tambin el dios Baco, a quien Orfeo haba adorado, decidi intervenir y cuando las mujeres volvan sonriendo a sus cabaas, quedaron convertidas en altos rboles que parecen seguir irradiando maldad, pues lo pjaron se niegan a posarse en sus ramas y las ardillas no saltan sobre sus copas.

Mientras tanto, el alma de Orfeo regres a los infierno. Pasando por los caminos subterrneos no sinti el miedo a lo desconocido que sienten todos los muertos pues ya estaban grabados en su memoria.

As lleg a los Campos Elseos, donde se encontr con Eurdice y la abraz con infinita ternura.Desde aquel da no se han separado y su amor, al alejarse de la vida, se ha vuelto indestructible.Ya no temen que la muerte los separe, pues es ahora quien los mantiene unidos.