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4. a.TE. Herramienta para tareas estratégicas.

Herramienta: Identificación de motores de desarrollo y objetivos estratégicos

Propósito:

Identificar y priorizar motores tanto actuales como potenciales de desarrollo territorial y objetivos estratégicos asociados a ellos, en el marco de la visión de futuro concertada entre los actores involucrados, redes y otros grupos, tomando en consideración los acervos ambiental, económico, social, político-institucional y cultural del territorio, con miras al desarrollo integral del territorio.

Referencia:

Mario Samper, José C. Arze, Andrea Padilla y Hernán González. s.f. Orientaciones y

herramientas para el desarrollo de los territorios rurales. Basado en el capítulo IV del Libro. Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura. Coronado – Costa Rica (de próxima publicación)

4. Identificación de motores de desarrollo y objetivos estratégicos 1

Una vez que ha sido definida una visión de futuro compartida, a partir del análisis de situación actual,

tendencias y escenarios, ésta ha de traducirse en un conjunto de “apuestas estratégicas”, que se refieren

a los tipos de transformaciones que los actores del territorio consideran necesarias para promover su

desarrollo y superar los obstáculos que lo frenan. Esto, a su vez, orientará el diseño, siempre

participativo, de una “ruta estratégica” para avanzar en el rumbo ya trazado. Dos tareas importantes e

interrelacionadas son la identificación de los motores de desarrollo actuales y potenciales del territorio,

y la definición de objetivos estratégicos asociados a ellos.2

4.1. Objetivo

Identificar y priorizar motores tanto actuales como potenciales de desarrollo territorial y objetivos

estratégicos asociados a ellos, en el marco de la visión de futuro concertada entre los actores

involucrados, redes y otros grupos, tomando en consideración los acervos ambiental, económico,

social, político-institucional y cultural del territorio, con miras al desarrollo integral del territorio.

1 Basado en el capítulo VI del libro Orientaciones y herramientas para el desarrollo de los territorios rurales (Mario Samper José C. Arze, Andrea Padilla y Hernán González, en proceso de revisión final para su publicación por parte del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura). 2 El concepto de motores de desarrollo y su función en los procesos territoriales se explica de manera más amplia en el fascículo Tareas estratégicas para el desarrollo de los territorios rurales, serie Fascículos metodológicos No. 4, Sistema de Gestión Estratégica para el Desarrollo de los Territorios Rurales y la Agricultura Familiar – SiGET, 2016, y en el capítulo antes citado del libro Orientaciones y herramientas para el desarrollo de los territorios rurales (Samper et al., s.f.).

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4.2. ¿Cómo hacerlo?

Se proponen los siguientes momentos para lograr este objetivo:

Momento 1 Identificación y priorización de motores de desarrollo

Momento 2 Definición consensuada de objetivos estratégicos asociados a ellos.

Momento 3 Especificación de criterios de éxito para valorar los avances en la consecución de los

objetivos estratégicos correspondientes a cada motor de desarrollo.

Ilustración 1. Secuencia metodológica:

Primer momento. Identificación y priorización de motores de desarrollo

Lo que se espera lograr en este momento es una selección de los principales motores o procesos capaces

de impulsar el desarrollo integral del territorio durante el período para el cual se ha propuesto una visión

de futuro y se diseña una estrategia con participación de los actores territoriales relevantes. Al hacerlo,

se diferenciará entre aquéllos que son actualmente relevantes, valorando si se considera que pueden

seguirlo siendo a lo largo del período o no, y aquéllos que tienen el potencial de llegar a serlo, con

esfuerzos concertados y sostenidos en el tiempo, pero que por ahora son sólo incipientes o, incluso,

tendrían que generarse.

En primer lugar, conviene retomar resultados pertinentes del análisis de situación actual del territorio,

de las tendencias históricas y proyectadas, de los factores que inciden decisivamente en ellas, de los

obstáculos y oportunidades identificados, del escenario deseable y factible de construir, y de la visión de

futuro que se propone para orientar la estrategia de desarrollo territorial.

Las “apuestas estratégicas” del territorio, y más concretamente los motores para su desarrollo, estarán

asociadas a determinados actores, redes y grupos directamente interesados en ellos, y dispuestos a

impulsarlos. Para ello generarán propuestas y construirán alianzas o coaliciones a fin de que sean

incorporadas y priorizadas en la estrategia de desarrollo del territorio. Su acción colectiva será

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fundamental, posteriormente, para promover iniciativas y proyectos estratégicos relacionados con

dichos impulsores y negociarlos tanto con las autoridades del territorio como con entidades públicas o

privadas externas a éste.

Algunos insumos útiles:

Se debe considerar los respectivos análisis de:

Los acervos ambiental, económico, social, político-institucional y cultural, de una visión del

territorio como sistema;

El análisis de potencialidades y limitaciones por dimensión y para el sistema-territorio;

Las tendencias internacionales, nacionales y territoriales, históricas y proyectadas;

La síntesis interpretativa por dimensión y sus interrelaciones, factores causantes y

El análisis de las y los actores involucrados o afectados por ellas;

La síntesis interpretativa de barreras y oportunidades con relevancia estratégica;

Los tipos de acciones consideradas necesarias para construir el “futurible” o escenario normativo

(deseable pero realista).

Para que el desarrollo territorial sea efectivamente incluyente, hay que retomar asimismo el análisis de

grupos excluidos históricamente o que están siendo expulsados por la falta de oportunidades en el

territorio, y proponer motores de desarrollo que los incorporen efectivamente, fortaleciendo sus

capacidades para que puedan beneficiarse con las nuevas oportunidades. En general, los motores de

desarrollo deben contemplar la incorporación de las mujeres rurales en condiciones equitativas, como

también de la juventud rural, y considerar las circunstancias de grupos humanos en situación especial de

vulnerabilidad, como la población de tercera edad. En territorios con pueblos originarios o

afrodescendientes, los motores de desarrollo deberán seleccionarse tomando en consideración su

pertinencia cultural y la necesidad de generar procesos acordes con los valores y cosmovisión,

relacionamiento con la naturaleza, formas de organización comunitaria y de gobernanza. En territorios

en los cuales es relevante la agricultura familiar, esta debe potenciarse como motor de desarrollo tanto

económico como relacionado con el aprovechamiento sustentable de los recursos naturales, el

fortalecimiento del tejido social, la participación en procesos de gestión territorial, y sus contribuciones a

las identidades colectivas territoriales y a la capacidad de acción colectiva.

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¿Cómo verificar si la propuesta de desarrollo territorial es efectivamente incluyente?

Con los insumos antedichos, se sugiere elaborar una presentación sintética para el grupo y, después de

explicar el concepto de motor de desarrollo integral, desarrollar una “lluvia de ideas”, primero en torno a

los motores de desarrollo actuales considerados relevantes para el futuro desarrollo territorial, y luego

acerca de otros motores potenciales. Si el grupo participante es numeroso, esto podría hacerse en

subgrupos, para luego integrar sus aportes. Puede ser útil anotar las propuestas de motores en tarjetas y

colocarlas en la dimensión correspondiente, diferenciando entre los actuales y los potenciales. Esto

puede hacerse en papelógrafos, en pizarras, en mesas rotuladas o incluso en rincones de un salón o

espacios designados en el suelo, con personas encargadas de recibir y ordenarlas, agrupando las que son

similares entre sí.

Los motores propuestos en la intersección entre dos o más dimensiones del desarrollo territorial

ameritan un tratamiento especial, que explore sus interrelaciones. Si se trabaja con tarjetas,

inicialmente estas pueden colocarse en una pizarra o lugar designado, para luego abrir una discusión

sobre cuáles dimensiones articulan. Los resultados de esa conversación grupal pueden reflejarse en un

cuadro sencillo como el siguiente:

Tabla 1 Registro de Motores de Desarrollo y dimensiones que articulan Motor de desarrollo actual (o potencial)

ambiental económico social institucional cultural

No. 1 X X

No. 2 X X X

No. 3 X X X

No. 4 X X X X X

No. …

Seguidamente se hace una síntesis de los principales motores de desarrollo identificados por el grupo,

diferenciando entre los actuales y los potenciales, asociados a una o varias dimensiones.

Finalmente, el grupo deberá priorizarlos y seleccionar los motores de desarrollo más importantes

actualmente y los que considera que tienen mayor potencial para el futuro del territorio. Su número ha

de ser necesariamente reducido, quizás uno o dos actuales que se prevé que seguirán siendo relevantes,

y dos o tres potenciales, seleccionados por la contribución que se espera que hagan al desarrollo integral

del territorio. Esto puede hacerse por consenso, después de una amplia conversación al respecto, con

opción de revisar lo acordado inicialmente en una próxima reunión, y de hacer consultas a otros actores.

Es importante tomar en cuenta la relación entre los motores propuestos, y evitar que se concentren en

una sola dimensión del desarrollo (típicamente en la económica). Esta decisión, crucial para lo

subsiguiente y para la estrategia de desarrollo del territorio, no debe tomarse en forma apresurada, y

tampoco puede ser el resultado mecánico de una votación, sino que debe ser una propuesta

reflexionada, debatida y consensuada entre todas las personas, organizaciones e instituciones

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participantes, conscientes de sus implicaciones, e incluso consultar el criterio de otros actores no

representados ahí cuya participación o apoyo se requerirá para avanzar en la dirección propuesta.

Para seleccionar y priorizar motores de desarrollo, cabe preguntarse acerca de los elementos a

considerar o valorar al respecto, incluyendo su relevancia actual y potencial, así como su relación con los

acervos ambiental, económico, social, político-institucional y cultural del territorio. Es importante,

asimismo, sopesar su inclusividad en términos de la incorporación de grupos de mujeres, jóvenes,

indígenas o afrodescendientes. También han de considerarse sus impactos ambientales tanto positivos

como negativos; la generación o no de encadenamientos económicos y valor agregado en el territorio;

su potencialidad de articular a un conjunto mayor o menor de actores y redes del territorio; sus posibles

implicaciones para la institucionalidad territorial, y sus facetas socioculturales.

¿Cómo hacerlo?

i) Convocar a un grupo de personas representativo e inclusivo de actores, redes y otros grupos del

territorio.

ii) Explicar el concepto de motor de desarrollo integral.

iii) Elaborar una presentación sintética para el grupo con los insumos disponibles

iv) Desarrollar una “lluvia de ideas” en torno a los motores de desarrollo actuales considerados

relevantes para el futuro desarrollo territorial.

v) Desarrollar una “lluvia de ideas” en torno de otros motores potenciales.

vi) Anotar las propuestas de motores en tarjetas.

vii) Colocar las tarjetas en la dimensión territorial correspondiente (diferenciando entre actuales y

potenciales).

viii) Identificar los motores que se ubican en la intersección entre dos o más dimensiones del desarrollo

territorial.

ix) Registrar el resultado del trabajo grupal en el Tabla 1.

x) Diferenciar los principales motores de desarrollo entre actuales y potenciales, considerando sus

posibles complementariedades y trayectorias a lo largo del período para el cual se realiza el ejercicio

prospectivo

xi) Destacar los motores de desarrollo asociados a una o varias dimensiones, o que se ubican

principalmente en una de ellas, pero inciden claramente en otras.

xii) Priorizar los motores de desarrollo, tanto actuales como potenciales.

xiii) Seleccionar los motores con mayor potencial para el futuro territorial actuales (1 o 2).

xiv) Seleccionar los motores potenciales más destacados para el futuro territorial (2 o 3).

Algunos ejemplos de motores de desarrollo y de su relación con distintas dimensiones o facetas de éste

son:

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- La prestación y pago de servicios ambientales o ecosistémicos, incluyendo la fijación de carbono en

bosques conservados o por regeneración, la protección y enriquecimiento de la agrobiodiversidad,

la gestión del agua tanto “azul” (o líquida, como el agua llovida o de los ríos y nacientes) como

“verde” (almacenada en los agroecosistemas y evapotranspirada en las plantas). Muchos territorios

rurales prestan este tipo de servicios a la sociedad, y cuanto son relevantes y tienen un significativo

potencial su valorización y compensación económica puede constituirse en motor de desarrollo.

- El fortalecimiento de uno o más sistemas territoriales de agricultura familiar que contribuyen o

pueden contribuir de manera importante a la dinamización de la economía territorial es un motor

de desarrollo tanto productivo como en lo referente a otras actividades económicas asociadas a la

agricultura familiar, y en aspectos relacionados con la gestión de los recursos naturales en las fincas

campesinas. La pluridimensionalidad de estos sistemas significa que pueden contribuir también al

tejido social de los territorios a través de las redes sociales conformadas por quienes participan en

ellos; pueden apoyar la gobernanza relacional participativa y la estabilidad sociopolítica, y ser un

elemento identitario y cohesionador que facilita la acción colectiva.

- El turismo rural, el agroturismo o el ecoturismo pueden ser motores de desarrollo territorial

significativos y con un potencial importante, relacionados respectivamente con la valorización de los

modos de vida rurales, con rutas turísticas asociadas a determinados tipos de producción

agropecuaria, o con los ecosistemas conservados en el territorio.

Para explorar las interconexiones actuales o potenciales entre motores de desarrollo, es útil retomar los

aspectos pertinentes del análisis sistémico de la situación del territorio, como también los referidos a las

influencias mutuas entre las tendencias relacionadas con dichos motores, tanto históricamente como al

proyectarlas a futuro, y a las interrelaciones entre los principales cambios ambientales, económicos,

sociales, político-institucionales y culturales. Seguidamente es importante establecer cómo influye o

podría influir cada motor de desarrollo en esos cambios en las distintas dimensiones o facetas del

desarrollo integral del territorio. Finalmente, será necesario abordar las relaciones directas entre

motores de desarrollo, cómo inciden unos en otros, y en particular si pueden reforzarse mutuamente o si

por el contrario tenderá a haber interferencias entre ellos.

Este ejercicio puede realizarse en grupos representativos de la diversidad de actores y redes territoriales,

o de manera diferenciada para diversos actores sociales, institucionales y privados, redes formales e

informales relevantes, y grupos históricamente excluidos de la gobernanza territorial. Sus conclusiones

iniciales al respecto deberán incorporarse en una propuesta integrada que se someterá a consideración

de la plataforma de concertación territorial. Luego podrá socializarse, discutirse y validarse críticamente

con otros actores redes relevantes y grupos involucrados en la elaboración de la estrategia de desarrollo

del territorio.

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Segundo. Definición consensuada de objetivos estratégicos asociados a los motores de

desarrollo

En general, entendemos por objetivo una situación futura que difiere de la actual en determinados

aspectos, de acuerdo con lo que nos proponemos lograr y en el grado en que consideramos deseable y

posible lograrlo. Es, entonces, una situación esperada, a lograr mediante ciertas acciones durante un

tiempo establecido, en un proceso conducente a abordar una problemática u oportunidad identificada y

priorizada, en este caso para el desarrollo de un territorio en determinadas dimensiones o facetas del

mismo, de manera que impulse su transformación integral en un sentido consensuado entre los actores

involucrados.

Una vez seleccionados los motores de desarrollo territorial prioritarios, cabe definir para cada uno el

objetivo que se espera lograr en el largo plazo, en términos de su contribución específica al desarrollo

del territorio. Dicha contribución puede referirse principalmente a determinada dimensión de ese

desarrollo, o a la convergencia entre dos o más dimensiones. En todo caso, deberá definirse qué se

espera lograr en cuál o cuáles aspectos de cada dimensión y en términos del desarrollo general del

territorio, a través de dicho motor o impulsor. En otras palabras, cómo contribuirá éste a lograr la

situación futura propuesta para el territorio en la visión prospectiva.

Para construir esta definición de objetivos por motores de desarrollo se proponen dos posibles opciones:

Opción 1

i. Invitar a las personas participantes interesadas en determinado motor desarrollo a proponer un

objetivo estratégico asociado a él.

ii. Dividir a las personas asistentes en pequeños grupos de trabajo.

iii. Valorar los resultados en plenaria.

iv. Construir un acuerdo sobre la versión más apropiada del objetivo para cada motor de desarrollo.

Opción 2

i. El equipo técnico facilitador elabora una o más propuestas de objetivo por motor de desarrollo,

luego de consultar el criterio experto de personas relacionadas con los actores territoriales, redes

y grupos directamente interesados en determinado motor actual o potencial.

ii. Convocar un grupo de personas representativas e interesadas en cada motor de desarrollo.

iii. Someter a consideración del grupo las siguientes preguntas: ¿expresan en forma adecuada los

objetivos propuestos lo que se espera? ¿consideran factible lograr los objetivos, a largo plazo, con

dicho motor de desarrollo?

iv. Si el grupo convocado lo considera necesario, se procede a modificar los objetivos, o sustituirlos

por otros.

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Validación y versión final

El resultado inicial de estos ejercicios, bajo una u otra modalidad, deberá incorporarse a una propuesta

integrada, la cual podrá validarse luego con criterio experto e informantes clave, con representantes de

organizaciones, redes y grupos, y con responsables político-institucionales. Una versión posterior que

incorpore sus recomendaciones ser somete entonces a consideración de la plataforma de concertación

territorial, para su aprobación, y podrá validarse luego con otros actores sociales, institucionales y

privados, redes formales e informales, y grupos involucrados en la construcción participativa de la

estrategia de desarrollo del territorio.

Tercer momento. Especificación de criterios de éxito para valorar los avances en la

consecución de los objetivos estratégicos correspondientes a cada motor de desarrollo.

Los criterios nos permiten juzgar algo que nos interesa,

valorar situaciones o evaluar resultados, estableciendo

determinadas pautas o parámetros. Al definirlos de antemano

y en forma consensuada, quedan claramente establecidos

para todas las personas, grupos, organizaciones o

instituciones interesadas.

Los criterios de éxito pueden entenderse como requisitos para

considerar que se logró un objetivo o resultado. Se trata, en

general, de identificar el menor número posible de criterios, preferiblemente uno solo, que permita

verificar dicho logro, o el grado en que se avanzó hacia él. Un criterio es una condición que deberá

cumplirse para que un proceso, iniciativa o proyecto pueda considerarse exitoso, en el aspecto específico

considerado por él.

El último paso en la tarea de identificar motores de desarrollo y objetivos estratégicos es definir con

claridad los criterios con los cuales se valorará en qué medida se ha logrado avanzar hacia el logro de lo

propuesto en los objetivos. Esto es necesario para establecer metas finales e intermedias, dar

seguimiento al proceso e introducir ajustes o cambios mayores según se requiera.

Los criterios son una definición de la situación esperada en relación con el objetivo estratégico para el

respectivo motor de desarrollo. Una vez definida esa situación o criterio, conviene traducirla en

Al igual que la definición de los motores de desarrollo, la de los objetivos estratégicos asociados a ellos debe hacerse con participación activa y decisoria de representantes autorizados de los diversos actores colectivos e institucionales involucrados. De lo contrario, no habrá sentido de apropiación y difícilmente podrá mantenerse un esfuerzo concertado y sostenido para impulsar dichos motores y lograr esos objetivos.

Criterios de éxito Permiten acordar entre actores la forma de:

Valorar procesos, acciones y resultados

Establecer pautas o parámetros

Verificar logros y sus grados.

Establecer metas intermedias o finales.

Ajustar procesos.

Diseñar cambios.

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elementos verificables, ya sea cuantitativamente o en forma cualitativa, o mediante una combinación de

elementos cuantificados y cualitativos.

¿Cómo hacerlo?

Dado que los motores de desarrollo y los objetivos estratégicos han sido definidos de común acuerdo

por un conjunto de actores territoriales, son ellos quienes pueden y deben definir asimismo los criterios

que les permitirán valorar, en determinado tiempo, si se han logrado esos objetivos. Esto puede hacerse

planteándose preguntas sencillas como las siguientes:

¿De qué manera podremos saber si hemos logrado lo que nos propusimos?

¿Cómo podemos valorar si estamos avanzando bien hacia el objetivo propuesto?

¿Qué resultados tendríamos que ver para saber que lo hemos logrado?

¿Qué situación esperaríamos haber alcanzado en determinado tiempo, en lo que se refiere a este

objetivo?

Una vez consensuados grupalmente los criterios para los objetivos estratégicos, el equipo técnico puede

proponer una redacción de los mismos, así como opciones para medir los avances hacia el logro de cada

objetivo. Esta medición puede ser cuantitativa, cualitativa, o integrar elementos cuantitativos y

cualitativos. La forma de medición propuesta debe ponerse en conocimiento del grupo y ser avalada por

él.

4.3. Producto

Motores de desarrollo actuales y potenciales priorizados por los actores territoriales, redes y otros

grupos involucrados en la formulación de la estrategia de desarrollo del territorio, con objetivos

estratégicos asociados a ellos, capaces de impulsar transformaciones integrales e interrelacionadas.