4° TOP absuelve a adolescentes de robo por prueba obtenida en forma ilícita

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Tribunal oral absuelve a acusados adolescentes por haberse obtenido la prueba de cargo con infracción de garantías constitucionales ilicitud que impide que sean condenados. (TOP Santiago 12.12.2012 rit 383-2012) Norma asociada: CP ART. 436; CPP ART. 125; CPP ART. 302; CPP ART. 340; L20084 ART. 31. Tema: Principios y garantías del sistema procesal en el CPP, responsabilidad penal adolescente. Descriptores: Robo con violencia o intimidación, duda razonable, garantías, prueba ilícita, sentencia absolutoria, SINTESIS: Tribunal oral absuelve a los 2 adolecentes acusados pues en este caso se vulneró durante la investigación penal las garantías, resultando cuestionable a los ojos del tribunal que se obtuviera una orden de detención del juez de Garantía en esas condiciones y sobre el sustento del actuar policial de manera autónoma, fuera de los casos de los artículos 125, 127 inciso 1º, 135, sin respetar el artículo 302 del Código Procesal Penal y 31 de la ley 20.084, resguardos que evidentemente el legislador señaló de manera expresa para evitar que se vulneraran garantías constitucionales, por lo que no cabe sino absolver a los acusados. También considera que en el sistema acusatorio corresponde al ente fiscal probar los hechos que imputa a fin de desvirtuar la presunción de inocencia, lo que supone necesariamente que dicha prueba tenga validez y eficacia probatoria, es decir, que la valoración se haga sobre prueba legítimamente obtenidos, y como consecuencia del principio de la presunción de inocencia -que en este caso cobra total relevancia por tratarse de prueba ilícita-, la carga de la prueba que se rinde en el juicio oral debe satisfacer el estándar dell artículo 340 del Código Procesal Penal. (Considerandos: 9, 10) TEXTO COMPLETO: Santiago, doce de diciembre de dos mil doce. VISTOS, OIDO Y CONSIDERANDO: PRIMERO: Tribunal e intervinientes. El día seis y siete de diciembre de dos mil doce, ante esta sala del Cuarto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago, integrada por los magistrados don Pedro Maldonado Escudero, quien presidió, doña Moira Ramírez Valenzuela y doña María Carolina Herrera Cortés Monroy, se llevó a efecto la audiencia de juicio oral de la causa RUC1101006483-1, RIT 383-2012, seguida en contra de los acusados adolescentes C.J.T.V , cédula nacional de identidad N° 18.67X.XXX-X, XX años en la actualidad, nacido el XX de XX de XXXX, soltero, obrero de la construcción y E.A.T.V , cédula de identidad 19.22 X.XXX-X, XX años en la actualidad, nacido el XX de XX de XXXX, soltero, estudiante, ambos domiciliados en calle XXXX de la comuna de Cerro

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Sentencia del 4° TOP de Santiago de Chile, sobre un robo en el que la prueba recabada en la investigación fue obtenida de forma ilícita.

Transcript of 4° TOP absuelve a adolescentes de robo por prueba obtenida en forma ilícita

Tribunal oral absuelve a acusados adolescentes por haberse obtenido la prueba de cargo con infraccin de garantas constitucionales ilicitud que impide que sean condenados. (TOP Santiago 12.12.2012 rit 383-2012)

Norma asociada: CP ART. 436; CPP ART. 125; CPP ART. 302; CPP ART. 340; L20084 ART. 31.Tema: Principios y garantas del sistema procesal en el CPP, responsabilidad penal adolescente.Descriptores: Robo con violencia o intimidacin, duda razonable, garantas, prueba ilcita, sentencia absolutoria, SINTESIS: Tribunal oral absuelve a los 2 adolecentes acusados pues en este caso se vulner durante la investigacin penal las garantas, resultando cuestionable a los ojos del tribunal que se obtuviera una orden de detencin del juez de Garanta en esas condiciones y sobre el sustento del actuar policial de manera autnoma, fuera de los casos de los artculos 125, 127 inciso 1, 135, sin respetar el artculo 302 del Cdigo Procesal Penal y 31 de la ley 20.084, resguardos que evidentemente el legislador seal de manera expresa para evitar que se vulneraran garantas constitucionales, por lo que no cabe sino absolver a los acusados. Tambin considera que en el sistema acusatorio corresponde al ente fiscal probar los hechos que imputa a fin de desvirtuar la presuncin de inocencia, lo que supone necesariamente que dicha prueba tenga validez y eficacia probatoria, es decir, que la valoracin se haga sobre prueba legtimamente obtenidos, y como consecuencia del principio de la presuncin de inocencia -que en este caso cobra total relevancia por tratarse de prueba ilcita-, la carga de la prueba que se rinde en el juicio oral debe satisfacer el estndar dell artculo 340 del Cdigo Procesal Penal. (Considerandos: 9, 10)TEXTO COMPLETO:

Santiago, doce de diciembre de dos mil doce.

VISTOS, OIDO Y CONSIDERANDO:

PRIMERO: Tribunal e intervinientes. El da seis y siete de diciembre de dos mil doce, ante esta sala del Cuarto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago, integrada por los magistrados don Pedro Maldonado Escudero, quien presidi, doa Moira Ramrez Valenzuela y doa Mara Carolina Herrera Corts Monroy, se llev a efecto la audiencia de juicio oral de la causa RUC1101006483-1, RIT 383-2012, seguida en contra de los acusados adolescentes C.J.T.V , cdula nacional de identidad N 18.67X.XXX-X, XX aos en la actualidad, nacido el XX de XX de XXXX, soltero, obrero de la construccin y E.A.T.V , cdula de identidad 19.22 X.XXX-X, XX aos en la actualidad, nacido el XX de XX de XXXX, soltero, estudiante, ambos domiciliados en calle XXXX de la comuna de Cerro Navia, quienes son representados en esta audiencia por el abogado Defensor Penal Juvenil don Rodrigo Torres Daz.

Sostuvo la acusacin el Ministerio Pblico, representado por la fiscal doa Alika Sukni Bunster, todos con domicilio y forma de notificacin tambin registrados en esta causa.SEGUNDO: Acusacin: Los hechos materia de la acusacin, segn aparece del auto de apertura, son los siguientes: El 01 de octubre de 2011, cerca de las 21:10 horas, en circunstancias que la vctima, don V.D.A se encontraba en su vehculo marca Dodge, patente XX, en compaa de doa W.C.R y sus dos hijos menores de edad, en la Estacin de Servicio Copec que est ubicada en la interseccin de calles Coronel Robles con Vargas Fontecilla, en la comuna de Quinta Normal, fueron abordados por los acusados C.J.T.V y E.A.T.V , quienes estaban acompaados de otros sujetos no individualizados, procediendo C.T.V a intimidar a don V.D.A que se encontraba sentado en el asiento del piloto del vehculo, ponindole una pistola que pareca ser de fuego en la sien izquierda sealndole "bjate conchetumadre o te voy a matar", luego abri la puerta y lo lanz hacia fuera del mvil, en tanto E.T.V intimidaba a doa W.C.R con un cuchillo, quien tambin se vio obligada a descender del mvil con sus hijos, apropindose los acusados del vehculo dndose en l a la fuga del lugar.

El Ministerio Pblico estima que los hechos descritos y atribuidos a C.J.T.V y E.A.T.V , satisfacen el tipo legal de robo con intimidacin, descrito y sancionado en el artculo 436, inciso primero, en relacin al artculo 432 del Cdigo Penal.

El delito se imputa a los acusados, en calidad de autores directos, conforme a lo establecido en el artculo 15 N 1 del Cdigo Penal y en grado de consumado.

La Fiscala estima que perjudica a ambos acusados la circunstancia agravante de responsabilidad penal del artculo 456 bis nmero 3 del Cdigo Penal, esto es, ser dos o ms los malhechores. Asimismo, perjudica a E.A.T.V la circunstancia agravante del artculo 12 nmero 16 del Cdigo Penal.

El Ministerio Pblico, solicita se imponga a los acusados la pena de 5 aos de internacin en rgimen cerrado con programa de reinsercin social, como autores del delito de robo con intimidacin.

TERCERO: Alegatos de apertura y clausura: En su exposicin, la Fiscala seal que acreditar ms all de toda duda razonable el hecho punible y la participacin de los acusados, los que en lo medular reproduce; las vctimas se encontraban cargando combustible, estando en el vehculo sus dos hijas, una de las cuales tena quince das de edad, momentos que C.T.V intimid con una pistola, procediendo a descender la vctima y W.C.R junto a su hija de tres aos, dndose a la fuga los imputados; se hizo la denuncia, en tanto los imputados se juntaron con una testigo, a quien le solicitaron guardara el vehculo, para luego hacer la denuncia que el vehculo robado se encontraba en el domicilio; dos funcionarios policiales lograron confeccionar un set fotogrfico con la identidad que dio la amiga de los acusados, C, que es exhibido a don V y su acompaante, siendo reconocidos, todos declararn en el juicio, por lo que se condenar a los acusados.

La defensa de los adolescentes seal que las circunstancias fcticas del delito no sern discutidas. Respecto a la participacin de sus representados sostiene que se ha incurrido en vulneracin de garantas en la construccin de un procedimiento policial, pues la testigo C , fue interrogada sin presencia de un defensor, siendo autora de un delito de receptacin, inicindose la investigacin, no hay antecedentes de llamado al defensor, existen deficiencias policiales de cmo se obtuvieron las fotografas que insertaron en un set, ante lo cual Ministerio Pblico no podr acreditar la participacin de sus defendidos, por vulneracin de garantas constitucionales de un tercero, que el Tribunal no podr dejar pasar y ha mancillado todo el procedimiento, por lo que no podr condenar con ello a otros; sus representados declararn en el juicio acerca del procedimiento y cmo se les interrog, no haba flagrancia y cmo se obtuvo la orden de detencin.

En su alegato de clausura, el Ministerio Pblico seal que acredit que los hechos ocurrieron de la manera como se sostuvo, el 1 de octubre de 2011, las vctimas concurrieron a un servicentro Copec y fueron abordados por los imputados, apuntndolos con pistola, exigiendo descendieran del vehculo, acreditado con las declaraciones de las dos vctimas, a las que se les exhibi un set fotogrfico, reconociendo en la comisara a los dos imputados, al que lo amenaz a l y tambin a su seora. Un mes despus en fiscala sta reconoci a los dos sujetos que su marido reconoci, ratificado con los funcionarios policiales que adoptaron el procedimiento; el vehculo fue guardado por los acusados en el domicilio de C, contando a la madre de sta una historia acerca que los padres de uno de los imputados estaba ebrio y no poda conducir; la madre de C denunci que el auto fue dejado por unos amigos de su hija en su casa; que haba sospechado que poda ser ilcito, quien es denunciante de un delito que estaba ocurriendo; sta y su hija C no eran imputadas.

Lo que se encuentra discutido es si C tuvo la calidad de imputada, pero nunca tuvo esa calidad, an cuando ella sintiera eso; no hay antecedentes que fuera imputada por receptacin, sin perjuicio de lo que le dijo a la mam y lo que ella crey o sinti. No se han infringido garantas constitucionales, porque la calidad de sta es de testigo; con la identidad de los acusados no han infringido garantas constitucionales porque no era imputada; la causa pas tres filtros respecto a la prueba, al pedir la orden de detencin, con los antecedentes que se expusieron al juez de garanta, en la audiencia de control de detencin y en la preparacin del juicio.

Dnde si podra haber vulneracin de garantas, es en vez de esperar que se contaran con los antecedentes para la detencin de los acusados, se efectu un control de identidad, los llevaron a la unidad, pero eso es independiente del procedimiento que si fue ajustado a derecho, pues los acusados no prestaron declaracin, slo se tom declaracin a la madre, quien no aport antecedentes de los hechos, es ms bien una testigo de coartada, porque dijo que estaban en una fiesta, lo que al parecer si fue efectivo porque estuvieron en la fiesta con C . Toda la prueba que vincula a los imputados est separada de una infraccin de garantas a los imputados. stos declararon en el juicio y mintieron, porque no reconocieron haber concurrido al domicilio de C y ellos fueron a dejar el vehculo a casa de C, eso est establecido con la declaracin de sta; adems, que los reconoci en un set de fotografa en la comisara. Corroborado por las vctimas, a quienes se les exhibi las fotos, siendo un reconocimiento imparcial, en el que participaron tres funcionarios, solicita sean condenados.

En su alegato de clausura, la defensa sostuvo que no hay discusin sobre la existencia del delito, pero insta por la absolucin por falta de participacin. Las necesidades de persecucin penal deben cumplirse garantizando los derechos fundamentales en un Estado de Derecho Democrtico; la circunstancia de condenar tambin debe respetar esto, porque es un deber para el Tribunal; no se puede acreditar participacin por vulneracin de derechos; se afect derechos de la adolescente C , no pueden afectarse garantas de un tercero para condenar a otro, eso implica una vulneracin al ordenamiento jurdico; sta estuvo once horas privadas de libertad, con esta invitacin voluntaria a un cuartel policial, es una privacin ilegtima de la libertad de las personas; si la defensa hubiese conocido ese antecedente podra haber alegado la ilegalidad de la detencin; acaso para pedir la orden de detencin se dio a conocer que sta estuvo once horas privada de libertad?. La calidad de imputado no es una cuestin formal, el artculo 7 del Cdigo Procesal Penal seala que se tiene esa calidad desde que un acto de procedimiento se dirige en su contra, si existe ese olfato policial para acreditar participacin, por supuesto que hubo investigacin para determinar participacin en el delito de C y su madre, no se les advirti de su derecho a guardar silencio, luego de ser interrogada la madre se dan cuenta que no particip en el delito; traslad a la hija a la 45 Comisara, sin lectura de derechos, exhibieron fotografas en la unidad, estando ya detenidos los acusados en la comisara, no se le tom declaracin, cmo puede saber el defensor si hubo vulneracin de garantas y del derecho a defensa?, sino se dej registro; se adujo que no se tom declaracin, no obstante ser testigo y estar acompaada de un adulto responsable; no se le tom declaracin porque se consider imputada, esa es la razn por la cual no hay declaracin.

Existe proteccin del sujeto frente al poder del Estado, cuando tiene la calidad de imputado; el artculo 31 de la ley 20.084, seala que no puede tomarse declaracin a los adolescentes, sin la presencia del defensor, el legislador dio ese derecho por estar en calidad especial de sujeto en desarrollo; no se resguard el derecho de C que tena la calidad de imputada. Los imputados en el cuartel policial se refieren a los hechos, dan explicaciones, mientras se les mantiene privados de libertad, eso es declaracin, sin embargo esas conversaciones con los aprehensores no estn registradas.

Si se excluye prueba por vulneracin de garantas, la declaracin de la vctima es que se trataba de personas de contextura mediana, delgados, de pelo corto. No hay forma de que estuvieran las fotos de stos en el set fotogrfico. El protocolo que debe cumplirse para el reconocimiento es que la exhibicin sea secuencial, de fotos individuales, no en dos set como lo fue; deben ser de caractersticas similares, pero en algunos set haba fotos de personas adultas, participaron los tres funcionarios policiales, el diligenciador de la investigacin se encontraba presente. Cul es el valor real del reconocimiento en audiencia si son los nicos sentados al lado del defensor y acompaados por un gendarme?. Qu es eso de, depende de lo que me digas, quedas libre o no, de eso depende lo que le va a pasar, eso es coaccin hacia C , hacer sentir al sujeto en estado de indefensin. La circunstancia de efectuar controles de identidad en el domicilio no resiste mayor anlisis en un estado de derecho. Pide absolucin de sus defendidos

En la rplica, el Ministerio Pblico expuso que es no es la situacin de C , quien no tena conocimiento que el auto era robado, no era imputada de receptacin y no tuvo conciencia que era un auto robado ni de la ilicitud, era una testigo que estuvo ms horas en una comisara, por lo tanto no hay vulneracin de garanta ni prueba ilcita, no fue apercibida del artculo 26 del cdigo procesal penal, no fue pasada a control de detencin ni formalizada. Que no escrituraron su declaracin, pero se da cuenta en las actuaciones de lo que ella dijo en la investigacin, est nombrada en todas las diligencias policiales, por lo que la defensa estaba en conocimiento de lo que sta dijo. La detencin fue independiente, no hay prueba posterior con la detencin, por lo que sta no se invalida.

En la rplica la defensa expuso que en anlisis ex post sta no tiene la calidad de imputada, pero el funcionario policial cuando hay lnea investigativa respecto de ciertos sujetos, la garanta se hace evidente y debe respetarse el catlogo de derechos no es algo formal, este funcionario reconoci que slo despus de la declaracin entendi que no era partcipe en el delito; la consecuencia jurdica que C sea imputada o no es una decisin del Ministerio Pblico, pero para el actuar de la polica de ese da, tena la calidad de imputada, C es el elemento central del Ministerio Pblico y no se le tom declaracin, justificndolo en que era menor de edad y eso es restrictivo para el imputado no para los testigos.

CUARTO: Convencin probatoria: Las partes acordaron la siguiente convencin probatoria: el imputado C.J.T.V naci el da XX de XX de XXXX y E.A.T.V naci el da XX de XX de XXXX. De lo anterior se establece que a la fecha de los hechos imputados, el primero tena XX aos XX meses de edad y el segundo XX aos XX meses de edad.

QUINTO: Declaracin de los adolescentes: Ambos renunciaron a su derecho a guardar silencio y no autoincriminarse declarando en el juicio. C.J.T.V manifest que era sbado estaba en su casa con su hermano, como a las 9 de la noche, se baaron porque iran a una fiesta, salieron a las 10 de la noche. Su hermano se fue a la casa de la polola, l junto a R y unos amigos, fueron a la Plaza del XXXX, escucharon msica, como a las 12.00, 12.30 horas se fueron a la fiesta, ah vio a C; estuvo con R y otros cabros tomando, como a la 1.30 horas fueron a otra fiesta, con J.N y C, pero se devolvieron porque haban problemas; alrededor de las 3 de la madrugada lo llam al celular su pap, tena permiso hasta esa hora, se fue a la Plaza del XX. Al otro da, a las 9 de la maana, su hermano estaba durmiendo, lleg carabineros de civil a su casa, a su madre le dijeron que haran un control de identidad, que cooperaran y le tomaron declaracin por un robo, le preguntaron a qu hora andaba en la calle, con quien andaba en la fiesta. Se lo llevaron a la comisara de Quinta Normal, all le preguntaron por el robo, por la camioneta, eso es control de identidad. En la comisara estuvo hasta las 10 de la noche, donde le hicieron despus las mismas preguntas, pero con su mam, antes estaba solo, era un carabinero blanco con melena, no sabe el nombre. A su mam le preguntaron si quera declarar y ella dijo que s. Llamaron al fiscal y le dieron la libertad, estaba con sus paps, se dirigieron a tomar la micro, pero lleg Carabineros preguntando por su hermano, lo llamaron y como a las 11- 12 los pasaron por robo con intimidacin detenidos, porque haban sido reconocidos. No escuch que le leyeran los derechos o que no poda declarar, estaba en una sala de espera, cerca del calabozo. Adelante la comisara es con carabineros vestidos y atrs son de civil, del OS9. En la comisara, lleg un caballero de pelo largo, a quien le haban robado, preguntando por su auto, le dijeron si lo reconoca y contest que no. La Plaza del XX est al frente donde era la fiesta. C estuvo en la fiesta con unos amigos, pero no se fue con C, se fue con unos amigos y despus volvi a la fiesta, su casa est cerca del lugar. Al contraexamen, seal que no se acuerda la fecha, la fiesta fue el sbado en la noche y el domingo los carabineros llegaron a su casa; como a las 3, 5 de la tarde lleg la vctima a la comsiara. E lleg como a las 10 de la noche, despus que l estuvo todo el da en la comisara.

El adolescente E.A.T.V, afirm que el sbado en la noche, salieron como a las 10 de la noche, su hermano, Ren, Claudio, fueron a la Plaza del XX, donde estuvieron hasta la 1 de la madrugada; l estuvo en la casa de su polola. A las 9 de la maana del domingo, se llevaron a su hermano, l tambin fue a dar una declaracin. Lo dejaron detenido por algo que l no hizo; cuando se llevaron a su hermano l dorma, a l lo fueron a buscar despus; Carabineros le dijo que le tomaran declaracin; a la casa lleg Carabineros con sus paps y su hermano, l subi a un auto y los llevaron a la comisara de Quinta Normal, donde estuvo hasta las 12 de la noche y luego lo llevaron a otra Comisara; declar en la primera comisara, estaba presente su mam, no estaba su abogado, haba un carabinero de civil; le consultaban que haba hecho, l contest que estuvo con su polola. Que si haba salido con su hermano, a qu hora se entr, si conoca a C , l dijo que si la conoca. No sabe donde sta vive, le preguntaron por el robo de una camioneta. No vio a la persona que reclam el vehculo.

SEXTO: Prueba de cargo y valoracin de la misma respecto al hecho acreditado, no discutido por los intervinientes:

Este Tribunal del Juicio Oral en lo Penal, apreciando los elementos de prueba rendidos durante la audiencia, de conformidad con lo establecido en el artculo 297 del Cdigo Procesal Penal, ha adquirido la conviccin, ms all de toda duda razonable, que se encuentra acreditado el siguiente hecho:

El da 01 de octubre de 2011, alrededor de las 21:00 horas, en circunstancias que la vctima, don V.D.A se encontraba en su vehculo marca Dodge, patente XXXX, en compaa de doa W.C.R y sus dos hijos menores de edad, en una estacin de servicio Copec de la comuna de Quinta Normal, fueron abordados por varios sujetos, uno de los cuales apunt con arma que pareca ser de fuego a don V.D.A , que se encontraba sentado en el asiento del piloto del vehculo, exigiendo que descendiera del mvil, en tanto otro sujeto oblig a doa W.C.R a descender del mvil con sus hijos, apropindose los sujetos del vehculo, dndose en ste a la fuga del lugar.

Para dar por probada la proposicin fctica que antecede, se han tenido como elementos de conviccin la prueba testimonial y fotogrfica rendida por la Fiscala, que apreciada conforme a los principios de la lgica, mximas de experiencia y conocimientos cientficamente afianzados, sirven para establecer los hechos indicados en el prrafo anterior, pues la prueba fue consistente y concordante entre una y otra, disipando cualquier duda razonable sobre la ocurrencia de tal hecho.

La vctima V.H. D.A , manifest no recordar la fecha de los hechos, fue a fines de septiembre y principios de octubre, hace un ao, venan del cumpleaos de su suegro. Por calle General Velsquez a la altura de San Pablo, hay una Copec, donde carg combustible, estaban sus hijas sentadas en silla en la parte trasera junto a su mujer, la menor de 15 das, momentos que sinti gritos, garabatos, exigiendo entrega de plata a un bombero, era un asalto, trat de subir el vidrio y poner seguro, pero uno de los muchachos le apunt con un arma por la ventana, (sindica al de chaqueta de blanco con raya ploma, que es el acusado E T ) diciendo que lo matara y soltara la llave. l le dijo que se calmara, porque tena dos nios atrs, su hija mayor tena 3 aos, tena bloqueadas para nio las puertas traseras, el otro muchacho abri la puerta, llevaba un arma que se meti en el pantaln; su hija salt por la puerta trasera del lado del copiloto, su mujer sali tras ella; l sac a su hija de 15 das de la silla y los sujetos se fueron en la camioneta, la que incluso estaba conectada al combustible. Por lo sucedido tuvieron que llevar a su hija al psiclogo; llam a carabineros, le tomaron una declaracin; al otro da lo llamaron por el vehculo, le mostraron un set de fotografas, logr reconocer al que lo apunt con la pistola y al que sali por la puerta donde estaba su hija; los sujetos eran entre 6 y 8, todos subieron al vehculo. Que los acusados han cambiado bastante. Otro sujeto, el que est al lado, el de chaqueta roja con ploma (se refiere a C.T.V ) le deca a su seora que se bajara por la parte de atrs del asiento del copiloto. La persona que lo apunt a l con el arma es la que tom el control del vehculo. El resto, un montn de gente se meti al vehculo.

Al servicentro lleg Carabineros, un teniente, su mujer se fue antes con sus hijas. El vehculo fue encontrado, estaba en una casa, no lo tiene muy claro, lo llamaron para retirarlo con la segunda llave que l tena, sac el vehculo y se dirigi a la comisara cercana, luego se fue a su casa y posteriormente fue a otra comisara ms grande, alrededor de la una, le tomaron declaracin y mostraron un set de fotografas carabineros de civil, de personas parecidas de posibles participantes; pas directo a una sala, a una oficina chiquitita donde haban funcionarios de civil, no vio a nadie antes que le mostrara las fotografas, el set tena cuatro columnas y siete fotos hacia abajo, era una hoja de oficio llena de fotos chicas tipo carn, reconoci a dos personas, eran parecidas, no pudo recordar a otros, estaba traumado. Cuando recuper la camioneta haban sacado la ropa que estaba en el interior, cortado los cinturones, las sillas no estaban, tampoco su celular ni sus documentos.

Al contraexamen afirm que las fotos eran de jvenes; se le exhibe el set de fotos, que eran de color, seala que hay personas de varias edades, adultos y adolescentes; hay nueve por cada hoja, dieciocho en total y siete son adultos, algunos tenan el pelo largo; que uno de los sujetos lo amenaz con pistola y otro amenaz a su seora. En la audiencia reconoci a E T como el que lo apunt a l. Lee que en el reconocimiento que hizo el 2 de octubre de 2011, el nmero 7 es el muchacho que lo apunt con arma de fuego con la mano derecha y tom el control de la camioneta, corresponde a C.T.V V . Reconoci a otro sujeto, pero l estaba preocupado de lo que a l le pasaba ms que lo pas a bomberos, en ese grupo slo haba hombres. En el domicilio donde estaba la camioneta, haba una mujer adulta y la declaracin fue ante una persona no uniformada, es una comisara que tiene acceso directo y atrs hay oficinas ms chicas que estn afuera, pas por una especie de plaza, patio. No vio a ninguno de los acusados en la oficina. En su declaracin describi a los sujetos como delgados, pelo corto, con ropa deportiva. Que antes, cuando hizo el reconocimiento, estaba ms seguro que ahora. No recuerda el nombre de los sujetos que reconoci, slo que eran jvenes, no podra especificar si eran menores de edad o no. Duda si la declaracin con la descripcin de los sujetos la hizo antes o despus de pasarle las fotos, pero parece que fue antes. Un funcionario ms joven mostr el set de fotografas, los otros entraban y salan pero estaba en la oficina. Que tena ms seguridad en el reconocimiento antes que ahora en el juicio; el segundo set de fotografas exhibido eran todos jvenes de pelo corto, el segundo sujeto que reconoci fue el que intimid a su familia atrs.

La vctima W.C.R , seal que el ltimo fin de semana de septiembre, el sbado siguiente, su hija tena 15 o 16 das y su otra hija tres aos y medio, pasaron a echar bencina a una Copec, a la salida de General Velsquez, cerca de San Pablo, en un momento apareci gente con garabatos, chuchadas, metieron la mano por el vidrio del lado de su marido, quien no alcanz a subirlo, le dicen bjate concha de tu madre, estaban sus hijas atrs, ella sentada al medio, las puertas traseras tenan seguro de nios, descendieron del vehculo, uno de los asaltantes abri la puerta de su hija mayor, ella le pidi que bajara corriendo por donde estaba el asaltante, el sujeto se guard un revlver en el pantaln se subieron a la camioneta, su marido baj la guagua en la silla nido y se fueron los cuatros a un rincn. Los sujetos partieron con la manguera de combustible cargando. Los bomberos les facilitaron un telfono, llam a su mam para que los fueron a buscar y a Carabineros. Un sujeto apunt a su marido, en total eran como 5 o 6, vio a ste y al que abri la puerta por donde baj su hija. Carabineros lleg a la bomba, ella se fue antes al domicilio de un familiar, por lo que no los vio ni declar; lo hizo posteriormente en verano en la fiscala, le mostraron fotos de los imputados, donde identific a dos personas, al que apunt a su marido y al que abri la puerta de su hija, antes le apunt. Vio ms de dos set, de varias fotos pequeitas en un set con columnas y otros con fotos ms ampliadas. Ha pasado tiempo y estuvo en tratamiento psicolgico para olvidar. Los acusados en la audiencia son similares a los sujetos de la fotografa, el de blanco es el que apunt a su esposo (se refiere a E T ), o al revs, no recuerda bien. Llamaron a su esposo al telfono de un asistente, Andrs; no supo cmo le entregaron la billetera; su esposo hizo los trmites para recuperar el vehculo, le cont que fue a una casa donde estaba una seora, no saba quin era; en la comisara se top con una joven preocupada que deca que no dijera nada, que ella no haba hecho nada; ah le mostraron los mismos sujetos que su marido reconoci. Se introducen fotografas con la testigo, tres de ellas, las describe como parte de la bencinera, parecida a donde ocurrieron los hechos.

Al contraexamen afirm que un caballero entreg la billetera al trabajador de su marido. Le exhibe la declaracin que prest en fiscala e 14 de noviembre de 2011, en la que lee A N se contact con estos sujetos que eran puros cabros chicos. Que identific a dos sujetos del set, pero no firm el documento; que despus le mostraron los que su marido reconoci; que lo que seal fue que se acercaron seis sujetos jvenes que rodearon la camioneta; no hizo descripcin de los mismos en la declaracin. Que la joven que se acerc a su marido le dijo que no siguiera con la denuncia, que ella no saba nada. Su marido cuando fue a la comisara sali a las 9 de la maana y regres pasado las 4 de la tarde.

Las declaraciones de las vctimas del delito, testigos directos, que describieron lo vivido, son relatos certeros, sin contradicciones acerca de la poca y lugar en que ocurrieron los hechos, la circunstancia de haber sido amenazados por sujetos jvenes, uno de los cuales portaba una arma con la que apunt a D A , exigindoles la entrega del vehculo en que se desplazaban, ante lo cual descendieron junto con sus hijas menores, dndose a la fuga los individuos en la camioneta, testimonios que son consistentes y verosmiles para acreditar el hecho descrito anteriormente, sin perjuicio que estima el tribunal que no ha quedado fehacientemente comprobado el elemento con el cual presuntamente habra sido amenazada la seora W.C.R, pues sta en ningn momento seal que habra sido amenazada con arma corto punzante como lo describe la acusacin y refieren los funcionarios policiales en el juicio, no obstante que seal que el segundo sujeto se guard un arma en el pantaln, cuando su hija baj de la camioneta, no aclarando ni examinando respecto de aquello la representante del Ministerio Pblico.

En lo medular la dinmica de los hechos, se encuentran corroborado con la declaracin del funcionario policial, Ricardo Ariel Cataln Arce, testigo de odas, ante quien depuso la vctima Donoso Aravena, el da 02 de octubre de 2011, en la 22 Comisara de Quinta Normal, en cuanto a que el da anterior, la vctima, alrededor de las 21, 21.30 horas, mientras se encontraba en un servicentro cargando combustible, al cerrar la ventana fue intimidado por un joven delgado, de pelo corto, en la sien con un arma, posteriormente su cnyuge fue amenazada por un segundo individuo, que portaba un arma blanca, el que la hace descender del vehculo con sus dos hijos, para luego subirse los sujetos al automvil y darse a la fuga. Le exhibi a los imputados entre 18 fotografas, reconociendo a C.T.V como quien intimid con arma de fuego en la sien. De un set de 12 fotografas, reconoci a otro menor, el que intimid a la seora con arma blanca. Que en la diligencia no particip el suboficial Man, si el carabinero Sobarzo. Que los antecedentes con las fotos de las personas que estaban detenidas fueron dados por el sargento. El reconocimiento si se hizo delante de los tres funcionarios policiales mencionados. Al contraexamen sostuvo que en el parte denuncia los sujetos fueron descritos como delgados, de pelo corto, estatura mediana. Cuando se hizo el reconocimiento fotogrficos, los sujetos ya estaban en la comisara; no recuerda la hora de la orden del juez; que si concurri al domicilio de los imputados ese da, pero se qued en el auto afuera, alrededor de las 9 de la maana. No recuerda si fueron a buscar a la nia, como tampoco haber traslado al hermano de la nia. No fue al domicilio de otros sujetos; en la comisara vio a la nia con el hermano y en la tarde vio a la madre de sta, a quien haba visto en el sitio del suceso donde estaba el auto sustrado, no vio al padre. No sabe a qu hora se fue de la comisara la nia. Que los funcionarios Sobarzo y Man colaboraron en las tres diligencias y en el reconocimiento de la vctima. Al ver a los sujetos en la oficina de atencin de pblico con personal de la SIP, si se dio cuenta que se trataba de adolescentes.

As, entonces, se encuentra suficientemente comprobado el da, hora y lugar de los hechos, permitiendo asentar que las vctimas fueron amenazadas con arma que pareca de fuego, exigindoles la entrega del vehculo en que se desplazaban, apropindose los sujetos de ste, en el que se dieron a la fuga, el que fue recuperado al da siguiente en el domicilio de un tercero.

SPTIMO: Calificacin jurdica. Que los hechos descritos y que se han tenido por ciertos en el considerando sexto de esta sentencia, se encuadran dentro de la figura tpica, prevista y sancionada en los artculos 432 y 436 inciso primero del Cdigo Penal, esto es, robo con intimidacin.

La figura penal descrita requiere para su configuracin la apropiacin de especies corporales muebles ajenas, con nimo de lucro y sin la voluntad de su dueo, siempre que para obtener la apropiacin se utilice la coaccin para que se entreguen o manifiesten las especies.

La apropiacin define a los delitos contra la propiedad, pues el objetivo ltimo de la accin delictual es obtener una especie, para lucrar con la misma. Para determinar la existencia de la accin apropiatoria contra la voluntad de su legtimo tenedor, debemos indicar que las vctimas y el funcionario policial que tom declaracin a una de ellas, fueron precisos en sealar la manera de la sustraccin y la especie sustrada, que consisti en un vehculo, por tanto bien mueble y, consecuentemente, objeto de apropiacin por el tipo penal analizado.

Hubo apropiacin con intencin de expropiar la especie, en forma permanente, de la esfera de custodia del detentador legtimo de la misma, con el objeto de generar un poder fctico similar al del dueo, lo que se traduce en las facultades de uso, goce y disposicin de la misma, lo que acontece desde el momento que oper una apropiacin por parte del agresor sustrayendo la especie de la esfera de custodia del detentador legtimo. Por ltimo, el nimo de lucro, como elemento subjetivo especial del tipo, se establece por la misma conducta desplegada por los hechores desde que se forj una nueva tenencia respecto de la cual se poda lucrar u obtener provecho con el mvil.

Asimismo existi una intimidacin real y seria, esto es, la voluntad de irrogar en un tiempo inmediato un mal grave, una coaccin particularmente intensa, sin que sea necesario generar un peligro objetivo al destinatario. La seriedad de la amenaza, como lo seal la vctima y su pareja, fue real desde que se apunt al primero con un arma que pareca ser de fuego, con garabatos fue conminado a descender el vehculo para ser sustrado, adems de otro sujeto hacer lo mismo con la seora de la vctima, que se encontraba atrs con sus hijas. En ese entendido, cualquier persona que se encuentre en la situacin descrita por los afectados, genera un miedo de verse expuesto a un mal mayor, dado la seriedad y gravedad de la coaccin, teniendo presente adems, que estaban con su dos hijas pequeas en el vehculo, revela inequvocamente la intencin de causar el mal si se opona a la sustraccin, pues el mal amenazado debe parecer posible de realizar a ojos del ofendido (posibilidad relativa), conforme a un juicio ex antes de un tercero puesto en la concreta situacin fctica de que se trata (Politoff, Matus y Ramrez, Lecciones de Derecho Penal, parte especial, pag. 363), es perfectamente lgico que el afectado considerase verosmil las amenazas de que era objeto dada la aparente idoneidad del medio utilizado para coaccionar.

En cuanto al grado de desarrollo, se estima que el ilcito se encuentra en grado de consumado, dado que se llev a cabo la sustraccin de la especie logrando la apropiacin de vehculo, iniciando una nueva esfera de custodia, pues los sujetos huyeron en el vehculo, el que fue recuperado al da siguiente en el domicilio de un tercero, lo que permite afirmar que se despleg completamente la conducta reseada en el tipo penal respectivo.

OCTAVO: Prueba de cargo y de la defensa en relacin a la participacin de los acusados. Que la controversia en este juicio, como se adelant en el veredicto, se ha centrado en la participacin de los acusados en el delito establecido, adems de determinar la existencia y valoracin de la prueba de cargo y, especialmente, si sta result suficiente.

Que se evidenci en la audiencia de juicio una serie de irregularidades en las diligencias policiales, efectuadas al margen de la nuestra legislacin procesal vigente, a partir de las cuales se obtuvieron los datos concretos que hicieron vincular a los adolescentes acusados en los hechos descritos, que derivaron directamente de vulneracin de garantas constitucionales, en especial, el derecho a la libertad personal, tanto de la testigo adolescente en cuyo domicilio se encontr el vehculo sustrado y de quien se recab informacin acerca de los acusados, en el marco de la investigacin de su propia presunta participacin en un ilcito, como asimismo, vulneracin de la misma garanta y del debido proceso respecto de los adolescentes acusados, al ser trasladados a una unidad policial, sin que la polica tuviere facultades para ello, desde que no estaban frente a un delito flagrante ni contaban de antemano con una orden de detencin para ello, permaneciendo largas horas en dicha unidad policial, mientras se realizaron pesquisas investigativas, en circunstancias que los imputados son adolescentes.

En efecto, as se advierte de los siguientes testimonios, prueba de cargo del Ministerio Pblico:

H E V G, moradora del inmueble donde se encontr el vehculo sustrado a las vctimas, manifest que su hija C el da 1 o 2 de octubre lleg alrededor de la 1.30 de la madrugada con dos amigos, dicindole que stos queran guardar una camioneta en la casa, porque el pap estaba borracho y la mam no quera dejarla en la bomba. Se fueron despus a una fiesta a tres cuadras de la casa. Al llegar su hijo de XX aos, a las 3 de la maana, le dijo que esa camioneta no era del lugar; al interior haba paales, muecas, cosas que le llam la atencin. Llam a su hija, pero el telfono estaba apagado. Avis a carabineros, como a las 6 de la maana, para preguntar por la patente, dicindole que tena encargo por robo y GPS y ya estaban cerca de la casa. Llegaron cuatro patrullas, sacaron a su hijo esposado. Les dijo que ella no saba nada de la camioneta, que trabajaba, que tena temor de meterse en estas cosas, que se llevaran a su hija al Sename, la que tiene 16 aos, pens que era lo que corresponda, si sta tena responsabilidad.

Carabineros se llev a C, peda perdn, estuvo todo el da en la comisara, le fueron a dejar comida, no supo de ella hasta las 11 de la noche. Ella pens que su hija estaba metida con los nios que robaron la camioneta. sta haba estado con los amigos, la haban llamado dicindole que la iran a buscar, se encontr con stos y la camioneta, para dar una vuelta, quisieron guardarla y se les ocurri llevarla a su casa, porque ella guarda colectivos, cobra $ 1.000, pero no autos robados. No conoca a los amigos; ella no tuvo consecuencias por esta causa, su declaracin la prest fuera de su domicilio, le preguntaban si conoca a los sujetos, sus nombres; que si su hija no cooperaba se ira al Sename, ella pens que se ira al Sename, por lo que tambin le dijo a su hija que si no les deca quienes eran pasara al Sename. Que se imagin que la dejaran presa, C lloraba, su hijo la acompa en la comisara hasta las 6 de la tarde, pero despus qued sola, ste se fue porque estaba con la caa viva y se quedaba dormido.

Ella no fue a la comisara. Vio a dos sujetos que bajaron de la camioneta, cree que son parecidos a los acusados, no se acuerda, uno era bonito, rubiecito. Carabineros no le hizo lectura de derechos, como guardar silencio, ni le advirtieron los derechos respecto de su hija; al abrir el portn de su casa, los carabineros ingresaron y agarraron a su hijo, preguntando donde estaban los otros. Como C no llegaba, fue ella la que les dijo a Carabineros que la fueran a buscar. Como a las 6.30 lleg con Carabineros, no quera decir donde estaba, no la bajaron del vehculo policial. C peda perdn y se vea aterrada, lloraba, en esa fecha tena 15 aos. Nunca haba sido detenida antes, es estudiante, estaba en 7 bsico, por problemas de aprendizaje. Fue su marido el que le llev comida como a las 6 o 7 de la tarde. El vehculo fue retirado como a las 10 de la maana por el dueo con carabineros de civil.

El sargento primero Rafael Osvaldo Man Madrid, quien sostuvo que el 02 de octubre de 2011 por un llamado de Cenco se traslad a una casa, para verificar si estaba el vehculo Dodge patente XXXX, que registraba encargo por robo, se entrevist con la propietaria y su hijo, quienes dijeron que a la una de la madrugada, su hija haba llegado con un amigo, le haban solicitado guardar el vehculo que era de unos amigos y el pap haba bebido alcohol; llam a su hija C y a los 25 minutos lleg al lugar. En presencia del hermano la entrevist, seal que se trataba de E A y C J , indicndole que vivan en Cerro Navia; se dirigi a la 45 Comisara de Cerro Navia con C y el hermano, de manera voluntaria, no ubicaba el sector, ah pidi fotos de los acusados de los krdex, C seal los nombres, le exhibieron fotografas de los hermanos T V , estos pertenecan al grupo XX ; se dirigi la casa de ellos, como a las 9 de la maana, se entrevist con la madre de los menores, los que dorman, les explic la situacin, sali C J, le pregunt por la camioneta, para aclarar la situacin fueron voluntariamente a la comisara. Que l tom declaracin a la madre de C , a la vctima y el cabo Cataln exhibi el set fotogrfico a sta, por orden del fiscal, segn el manual tres personas participan en la diligencia, el que efecta la exhibicin de las fotos, el testigo y el diligenciador, que en este caso fue el mismo. Tambin se fij fotogrficamente la camioneta. Despus la magistrada envi la orden de detencin para los dos hermanos.

Con la madre de C fue una entrevista informal, para l era una testigo clave, primero tom declaracin para ver si tenan participacin en ese delito, pero los mismos propietarios eran los denunciantes, luego le tom declaracin como testigo. C tena 15 o 16 aos, no puede tomar declaracin por ser menor, para l era testigo, no le tom declaracin en presencia de la madre, sta seal que estuvo con tres personas que guardaron el vehculo. La llev en forma voluntaria, porque ella saba quien haba guardado el vehculo; sta no pas a control de detencin ni qued apercibida por el artculo 26 del CPP. Descart la participacin de la madre y del hermano porque, adems, hicieron la denuncia. En el reconocimiento efectuado por la vctima en un set de 18 fotos, ste de inmediato sindic al n 7, como el que lo apunt con el arma de fuego, corresponda a C.T.V, quien le haba dicho bjate concha de tu madre o te voy a matar. De otro set de 12 fotos, reconoci a E T como el que intimid a la seora con un arma blanca. En la comisara estuvo la mam de los hermanos Tolosa, cuando se hizo el reconocimiento, los dos imputados estaban en la comisara. No les tom declaracin, slo a la madre, ah se enter recin que se trataba de menores de edad, porque hicieron biomtrico, no antes cuando recab la fotografas de la 45 Comisara. Se introdujeron con el testigo cinco fotografas, correspondientes al pasaje E 2721, donde estaba el vehculo de la vctima, marca Dodge Journey patente XX; la chapa del mismo sin signos de fuerza y el nmero de chasis.

Al contraexamen seal que el procedimiento lo efectu con el cabo Cataln y Sobarzo, que pertenecen a la SIP, l no viste de carabinero. No pregunt al hijo de la propietaria de la casa si era l quien andaba con otros sujetos; tuvo duda sobre la participacin en el delito de receptacin, en primera instancia pens que si la tenan, pero fue ella la que llam al 133 y ah en la casa se dio cuenta de otra lnea investigativa. No les ley los derechos antes de ver si tenan participacin en la receptacin. No le dijo a la mam que su hija poda ser imputada de receptacin, sta lleg caminando por el pasaje; l la esperaba en el lugar; tampoco le hizo saber sus derechos. Fue el hermano el que dijo que quera aclarar la situacin y los acompa a la 45 comisara voluntariamente; que en ese momento no inform al fiscal. No tom declaracin a C de manera formal. sta seal como cinco amigos que andaban juntos, slo tenan fotos de C y E, porque tenan una investigacin vigente y se incluyeron en el set fotogrfico. Que l fue personalmente con Sobarzo a buscar a los Tolosa, C se fue en otro vehculo, no recuerda la hora exacta, a quienes inform que los estaban vinculando directamente con un vehculo encargado por robo en Quinta Normal, en todo momento sealaron que queran cooperar, pero no les advirti de sus derechos. Antes tambin fue a domicilios de R y F , los que no fueron reconocidos. La madre de los imputados prest declaracin y no le ley los derechos. C se retir de la comisara como a las 7, 7.30 horas de la tarde y haba llegado como a las 10.30 horas, siempre estuvo acompaada de la madre y el hermano. Luego rectifica que no vio a la madre, pero que C se retir con el hermano. Todo el tiempo estuvo en calidad de testigo en la comisara, no se le tom declaracin como imputada, porque estaba cooperando con la investigacin. No tiene explicacin para el traslado de C de la 45 comisara, donde se haba efectuado las diligencias de las fotografas con los acusados, a la 22 comisara posteriormente, pues ah tampoco prest declaracin formal.

A su vez la testigo de la defensa, C A A e V, de actuales XX aos, seal no saber lo que es el delito de receptacin, no termin la educacin bsica pero no tiene problemas de aprendizaje. Estaba con unos amigos, uno le dicen El W, le dijeron que iran a buscarla pero tenan que ir para otra parte. Se fue con los amigos, a donde se junta con ellos y le pidieron guardar una camioneta en su casa, luego se fue para otro lado. Lleg al otro da a su casa, como a las 10, 10.45 horas; la haba llamado la mam y le dijo que estaban los carabineros en la casa y que tena que ir con ellos a Cerro Navia, a buscar las llaves de la camioneta. Carabineros le dijo que se metiera al auto para entregar sus datos. En la 45 comisara le decan que ella andaba con estos nios y le mostraron unas fotos, ella dijo esos son. No se registr su declaracin. Despus la trasladaron a la 22 comisara, le dijeron era la que corresponda a su comuna. Volvi a contar los hechos. No pens que poda tener un problema por guardar la camioneta. Como a las 7 de la tarde fue su pap a la comisara, le dej ropa, comida y se fue, su hermano se haba ido a dormir. En ese lugar vio a C , le dijeron que estaba para aclarar las cosas. Ella pens que la dejaran ah, en un hogar de menores; se fue como a las 11 de la noche, estaba ms o menos asustada, porque pens que poda irse presa, pero con lo que cont, crea que no se ira presa. Tambin le dijeron que tena que hacer unos trmites en la fiscala, la trasladaron los carabineros, se entrevist con un caballero pelado, a quien tambin cont lo sucedido, estaba sola.

Al contraexamen manifest que los amigos de El W tenan que ir a buscarla primero para ir a otro lado, llegaron a Cerro Navia, estuvo en la Plaza del XX, ah llegaron C y E ; otros nios llegaron en la camioneta y C parece que manej de la plaza a su casa y ah le dijeron a la mam que el pap de stos haba tomado y al otro da la iran a buscar. Despus se fue a carretear a otro lado, como a la 1.30 de la madrugada. En la casa, en la maana, se enter que la camioneta era robada. Que si fue a la fiscala, a este edificio. Los carabineros le dijeron que si poda estar presa, que no saban que sucedera con esto, que dependa de lo que dijeran los sujetos ira al Sename o no, despus que se poda ir para la casa porque era testigo.

Que con las testimoniales referidas, es posible concluir lo siguiente:

1.- Funcionarios policiales de la SIP de la 22 Comisara de Quinta Normal concurrieron al domicilio de la adolescente de 15 aos de edad, C A A V, pues su madre efectu un llamado consultando por la patente de un vehculo, que result tener encargo por robo, que haba sido guardado en el inmueble por su hija y unos amigos de sta.

2.- En dicho lugar interrogaron a la madre de la adolescente, H E V G, sin primeramente - mientras averiguaban la presunta participacin de sta en un delito, sea por un robo o receptacin de vehculo, no obstante haber sido ella la que efectu el llamado hacer lectura de derechos conforme lo previsto en el artculo 93 letra g) del Cdigo Procesal Penal. Luego descartada su participacin, segn el olfato policial sealado por el propio testigo Man Madrid, tampoco efectu las advertencias establecidas en el artculo 302 del mismo cdigo, esto es, dar a conocer la facultad de abstenerse de declarar respecto a los hechos que involucraren e incriminaren a su hija adolescente en el delito investigado, recabando antecedentes al respecto.

3.- La adolescente C A V, fue interrogada por los funcionarios policiales en el lugar de los hechos - el inmueble que habitaba con sus padres - acerca de su participacin en un delito de receptacin y la identidad de las personas con las que guard el vehculo sustrado a la vctima en su casa. No se efectu lecturas de derechos, en especial, el derecho a guardar silencio y a no autoincriminarse, infringiendo lo previsto en el artculo 135 del Cdigo Procesal Penal, no se respet el catlogo de derechos especiales de adolescentes imputados establecido en el artculo 31 de la ley 20.084 en relacin al artculo 103 del Cdigo Procesal Penal, normas de las que se colige, de manera expresa y manifiesta, que la presencia de un defensor penal de un adolescente resulta indispensable en cualquier actuacin investigativa, que exceda de la mera acreditacin de su identidad, con ello la declaracin de la adolescente, que no tena otra calidad que la de imputada, en ausencia de su defensor acarrea la invalidez de dicha diligencia. El cuerpo normativo especial de adolescentes contempla ms que reglas, principios que tienden a resguardar en mayor medida a aquellas personas, que por su grado de desarrollo o de madurez, no estn igualmente capacitados que los adultos para tomar decisiones con libertad y, por ende, para comprender las consecuencias procesales de las mismas, sobre todo cuando se ven enfrentados a una persecucin penal por parte del aparato estatal.

4.- Que los funcionarios policiales, en especial el sargento Man, ha sostenido en el juicio que la adolescente C A V siempre tuvo la calidad de testigo, lo que mantiene en sus alegatos de cierre el Ministerio Pblico, cuestin que el tribunal ha desestimado, por resultar contrario a la lgica de acuerdo a la dinmica y forma en que se efectuaron las pesquisas y actuaciones policiales respecto de C A y, adems, por no sujetarse a la ley las actuaciones efectuadas.

En primer trmino cabe sealar que el estatuto de imputado est descrito en la ley y no lo otorga el criterio policial, toda vez que el artculo 7 del cdigo procesal penal, seala: Calidad de imputado. Las facultades, derechos y garantas que la Constitucin Poltica de la Repblica, este cdigo y otras leyes reconocen al imputado, podrn hacerse valer por la persona a quien se atribuye participacin en un hecho punible, desde la primera actuacin del procedimiento dirigido en su contra y hasta la completa ejecucin de la sentencia.

Para este efecto, se entender por primera actuacin del procedimiento cualquiera diligencia o gestin, sea de investigacin, de carcter cautelar o de otra especie, que se realizare por o ante un tribunal con competencia en lo criminal, el ministerio pblico o la polica, en la que se atribuyere a una persona responsabilidad en un hecho punible.

Es decir, indagar acerca de la participacin de la adolescente en el hecho de haber, sta y sus acompaantes, trasladado y guardado un vehculo robado horas antes en la casa de la primera, como lo hizo la polica en este caso, determina que la calidad de C Andrade era de imputada y no puede sostenerse la calidad de testigo, tan evidente result en la audiencia de juicio, que el funcionario policial no pudo dar ninguna explicacin satisfactoria de porqu no se registr en la investigacin, las declaraciones efectuadas por la adolescente en su supuesta calidad de testigo, situacin reconocida por ella y el sargento Man Madrid en diversas ocasiones, pues prest declaracin en su domicilio, en la 45 Comisara, en la 22 Comisara; tampoco se registr el reconocimiento fotogrfico de los acusados efectuado por ella en la 45 Comisara. Contrario absolutamente a las obligaciones legales de registro que pesan sobre la polica en el caso de declaraciones de testigos. De esta manera, la nica forma de entender tal omisin, es que la polica consider, como era lo correcto, que C A era imputada, como se trataba de una adolescente no registr su declaracin y despus intent justificar su actuacin, sealando que fue testigo de los hechos, luego de haber sido conminada para obtener su testimonio sin respetar las exigencias legales.

5.- Que, en todo caso, de las pesquisas policiales en la versin sostenida por la polica y el acusador, haber sido en todo momento la adolescente testigo de los hechos, se infringi el artculo el artculo 83 letra d) del Cdigo Procesal Penal, en relacin al artculo 181 inciso primero del mismo cdigo desde que, como fue reconocido por el Ministerio Pblico y el testigo Man Madrid, no existe en la investigacin registro alguno de la declaracin de la adolescente, no obstante ser mencionada en todos los antecedentes y haber sido, nicamente, a travs de su testimonio y su diligencia de reconocimiento fotogrfico, el elemento vinculante con el que se logr obtener la identidad de los dos acusados adolescentes, como qued determinado con la prueba rendida en el juicio.

6.- Que no slo se transgredi el catlogo de derechos que asista a la adolescente C Andrade Valenzuela, como se ha sealado, sino que, adems, se vulner el derecho a la libertad personal, por cuanto fue trasladada desde su casa, alrededor de las 10 de la maana, a diferentes partes en vehculos policiales, esto es, hasta domicilios de terceros, a la 45 Comisara, posteriormente y sin ningn objeto - como lo reconoci el propio Sargento Man Madrid -, hasta la 22 Comisara, donde vio al acusado C.T.V y estuvo hasta pasado las 7 de la tarde, segn el funcionario policial, sin perjuicio que la adolescente y su madre sealaron en el juicio que C lleg a su casa alrededor de las 11 de la noche, incluso, su padre le fue a dejar ropa y comida, alrededor de las 7 de la tarde, porque pensaban que quedara privada de libertad.

No resulta suficiente entonces y, por el contrario, confirmatorio de la vulneracin de la libertad ambulatoria, que tal traslado haya sido, como lo sostiene la polica, voluntario o para cooperar con el esclarecimiento de los hechos, pues se trataba de una adolescente de 15 aos, asustada, como lo sostuvo ella misma y su madre, que lloraba en el vehculo policial y peda perdn; que pens en todo momento que sera ingresada a una institucin del Sename. La dinmica de lo relatado, incluso, por el funcionario policial, da cuenta, claramente, que no hubo voluntariedad, consentimiento libre e informado, para ser trasladada a las unidades policiales, sino coaccin, desde que no hubo lectura previa de derechos, para no prestar declaracin ni autoincriminarse o ser asistida si declaraba por un abogado defensor. De acuerdo a las mximas de la experiencia, un adolescente o un adulto, en conocimiento y ejercicio de sus derechos, no permanece en dependencias policiales voluntariamente por ms de 10 horas, salvo una muy buena razn y exigencia de la investigacin, en el caso que tenga la calidad de vctima de un delito, cuyo no es el caso. Se pretende hacer creer al tribunal que la joven estuvo con su consentimiento, en una situacin de normalidad, sea como testigo o imputada, largas horas a disposicin de la polica, incluso sola porque su hermano se retir de la comisara.

7.- Finalmente, el adolescente acusado C.T.V V , bajo el mismo prisma policial, pero reconociendo la polica y el rgano persecutor penal su calidad de imputado, fue trasladado desde su casa, alrededor de las 9 o 10 de la maana hasta la 22 Comisara, donde permaneci, sin que se estuviere frente a un delito flagrante; a esas horas se iniciaron las pesquisas policiales para determinar los responsables del delito de robo con intimidacin, permaneciendo hasta horas de la noche en la unidad policial, tiempo en el cual prest declaracin no formal C A , adems la vctima, a quien se exhibi el set fotogrfico estando el acusado en dependencias de la unidad, para posteriormente obtener, en horas de la noche, una orden de detencin judicial. No ha quedado suficientemente claro al tribunal si el hermano menor, el acusado E T V, fue tambin detenido y trasladado a la misma comisara de su hermano sin orden de detencin en su contra. Es decir, al menos 12 horas el acusado C.T.V estuvo privado de libertad sin justificacin legal, ni tener la polica facultad para hacerlo permanecer en dicha dependencia, mientras se efectuaban los trmites para la orden, que podra haber sido, incluso, desestimada. Cuestin que fue reconocida por el propio Ministerio Pblico en su alegato de cierre.

As las cosas, se afect la libertad ambulatoria del adolescente sin que la polica estuviera autorizada legalmente de acuerdo a lo establecido en los artculos 127 y 129 del Cdigo Procesal Penal ni cumplir con el artculo 135 del mismo cdigo. An cuando no existe registro formal y escriturado de la declaracin del acusado, ste y su hermano sostuvieron que fueron interrogados autnomamente por la polica, sin lecturas de derechos previas ni en presencia de un defensor, como tampoco con autorizacin del fiscal, circunstancia del todo creble porque el Sargento Man Madrid seal que se dirigi a la casa de stos, como a las 9 de la maana, se entrevist con la madre de los menores, los que dorman, les explic la situacin, sali C J , le pregunt por la camioneta y para aclarar la situacin fueron voluntariamente a la comisara. es decir, el propio polica reconoci que pregunt al imputado por la camioneta. Qu significado puede tener un traslado a la unidad para aclarar la situacin, sino que la posibilidad cierta de ser interrogado, pretendiendo validar su accionar o el no respeto de la legislacin vigente al afirmar que la madre lo acompa voluntariamente.

NOVENO: Desestimacin de la participacin de los acusados en el delito acreditado por vulneracin de garantas.

Que establecido lo anterior, resulta ineludible colegir que la prueba de cargo no puede ser sustentatoria, conforme a la ley, para acreditar la participacin de los acusados, ms all de toda duda razonable, pues consisti bsicamente en el reconocimiento fotogrfico de las vctimas de un set construido con fotografas seleccionadas de los acusados e incluidos, nicamente, con la informacin recabada de la testigo C A , datos concretos que fueron obtenidos con infraccin de garantas fundamentales, puesto que la vctima y su pareja, slo describieron a los hechores como jvenes, con pelo corto, contextura delgada y ropa deportiva, sin que exista otra fuente independiente para corroborar la participacin de los imputados, toda vez que las sindicaciones efectuadas en el juicio oral por las vctimas ni siquiera fueron realizadas con seguridad y certeza de parte de stas, incluso, fueron confusas y con cambio de roles respecto de lo imputado a uno y otro en las actas de reconocimientos fotogrfico de la etapa investigativa, no puede entonces constituirse este nico medio de prueba, errtico por lo dems, para construir una decisin condenatoria, atendida la insuficiencia y falta de coherencia que se presenta ante tales condiciones.

El procedimiento policial a la luz de un sistema acusatorio, responde a las exigencias bsicas de un Estado Constitucional reconocedor de garantas fundamentales y en donde la presuncin de inocencia constituye un obstculo para que se imponga al imputado las consecuencias penales derivadas del juicio de culpabilidad requiere para su realizacin una serie de requisitos bsicos que legitimen su proceder, no slo en lo que dice relacin con aspectos formales como lo son las lecturas de derechos, la procedencia del interrogatorio, la duracin de dicho procedimiento, la presencia de un abogado defensor, antecedentes que, bsicamente, son sealados por la misma norma sino tambin en la existencia de circunstancias de hecho, que permitan reafirmar la idea que, dicho actuar, constituye una actividad en torno a investigar la comisin de un delito o la obtencin de informacin necesaria para la ratificacin de lneas de investigacin.

Ahora bien, ciertas disposiciones como las aludidas e infringidas en el procedimiento, sealadas en considerando anterior, son las que nuestro legislador establece como parmetros objetivos que deben respetarse sin que puedan eludirse por mera apreciacin subjetiva del oficial a cargo de la actuacin.

As tal infracciones han ido de la mano con la vulneracin de la libertad personal de la adolescente C, tantas veces aludida, desde que no se respet el estatuto que le corresponda, incurriendo en coercibilidad para el traslado de sta a la comisara y obtener antecedentes de la identidad de los acusados, lo que constituy un atentado a la garanta individual consagrada en el artculo 19 n 7 de la Constitucin Poltica de La Repblica. Este derecho, tal como queda de manifiesto en el artculo 6 de la Carta Fundamental, vincula a todos los rganos del Estado y sus agentes en ejercicio, como a toda persona, grupo o institucin, siendo deber de dichos rganos, al tenor del inciso 2 del artculo 5 de nuestra Constitucin, respetarlos y promoverlos, entendiendo que tales derechos limitan la soberana y estn constituidos por los enunciados normativos contenidos en la Constitucin y en los tratados de derechos humanos ratificados por Chile y que se encuentran vigentes, los que se refieren a l, especficamente, los artculos 9 y 12 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos y 7 de la Convencin Americana de Derechos Humanos, recalcando que el derecho a la libertad personal implica, entre otras cosas, que no pueden realizarse privaciones o restricciones a la libertad ilegtimas o arbitrarias, que impongan lmites a la autonoma de las personas, que desnaturalicen su derecho, lo hagan impracticable o lo dificulten mas all de lo razonable y, ms an, constituido por la Convencin de los Derechos de los Nios y Adolescentes, en su artculo 37 letra b) en relacin al artculo 2 de la ley 20.084.

Es por ello que la actividad desplegada por los agentes policiales, consistente en la privacin de libertad de una adolescente de 15 aos, traslado a una unidad policial durante largas horas, sin tener la autonoma para regresar a su hogar, no fue otra cosa que una detencin para obtener informacin con una declaracin no registrada, acerca de la identidad de sus acompaantes, en el traslado del vehculo a su domicilio e indagar los posibles autores del delito de robo con intimidacin - no obstante que posteriormente se renunciara a la persecucin punitiva estatal respecto de ella- vulner de manera manifiesta la garanta fundamental antes referida, por lo que la informacin obtenida y recabada bajo esa detencin y coercin, carece de toda validez y, por consiguiente, resulta imposible valorar como prueba de cargo, los reconocimientos fotogrficos efectuados por las vctimas, como la informacin y sindicacin de los acusados entregada por la adolescente, referente a haber sido quienes fueron a su casa en el vehculo sustrado al afectado, en atencin a su origen ilcito que de no mediar no se hubiese llegado a la identidad de los acusados, existiendo una concreta relacin causal entre la ilicitud de base y el material probatorio antes indicado.

Que an cuando el Ministerio Pblico circunscribi sus alegaciones de clausura a sostener que no hubo vulneracin de derechos y garantas por tener la adolescente la calidad de testigo y no de imputada, sin hacerse cargo de la discusin doctrinaria acerca de la legitimacin activa para reclamar ilegalidad y solicitar la exclusin de prueba o, en su caso, la no valoracin de la misma, por corresponder slo al titular de la garanta amagada, el tribunal ha de hacerse cargo de tal discusin.

Estiman estos sentenciadores que ello es procedente, como lo ha invocado la defensa en sus alegatos, tanto de apertura y clausura, pues ante la pregunta si es posible hacerlo a favor de quien no ha sido la vctima de la actuacin ilcita en cuestin, existe el fundamento tico que aqu se ha asignado a la exclusin de la prueba ilcita, pues la posible dictacin de una sentencia sobre la base de la violacin de garantas fundamentales parece ser igualmente ilegtima tanto si las garantas conculcadas son las del imputado como si son las de terceras personas ( Hernndez Hctor, Exclusin de la prueba ilcita en el nuevo proceso penal chileno, Colecciones Universidad Alberto Hurtado, ao 2005, N 2, p. 70)

As las cosas, la legitimacin activa para invocar la ilicitud de la prueba en nuestro ordenamiento jurdico no se restringe slo a aquel a quien se vulner una garanta, sino que tambin a terceros afectados por dicha violacin, situacin en la que se encuentran los acusados hermanos Tolosa Velsquez. En este sentido, el tema ha sido planteado por el profesor Hernndez Basualto antes citado, quien, aun manifestando dudas, se inclina a favor de la prueba ilcita incluso en el caso en que el imputado no es el titular del derecho afectado, por parecerle la nica opcin para preservar los presupuestos de legitimacin del ejercicio del ius puniendi, pues, en efecto, desde dicha perspectiva ciertamente no existe mayor diferencia entre que se hayan vulnerado los derechos de a A o Z. Compartiendo esa opinin en el entendido de que la admisin de la prueba obtenida en estas circunstancias atentara contra los dos fundamentos esgrimidos para la justificacin de la ilicitud probatoria, ya que tanto desde la perspectiva de la prevencin como de la integridad judicial la declaracin de la ilicitud de la prueba parece necesaria. (Mara Ins Horvitz Lennon y Julin Lpez Masle, Derecho Procesal Penal Chileno, Tomo II, Editorial Jurdica de Chile, pginas 214 y 215).

Un pensamiento distinto al sealado llevara necesariamente a la consecuencia de que un mismo procedimiento policial fuese ilcito respecto de un sujeto aquel cuyo derecho o garanta se vulner-, pero vlido y legtimo respecto de terceros que pudieren verse afectados, por ejemplo, aquella persona que logra ser identificada y aprehendida en base a informacin obtenida en un procedimiento en que se vulneraron las garantas de aquel que aport los antecedentes, tal como ocurri en el caso sublite, interpretacin que como ya se seal, no resulta acorde al fundamento y finalidad perseguida por esta institucin, toda vez que al estimarse que un procedimiento policial vulneratorio de garantas habilita para perseguir vlidamente a un tercero, no se lograra un efecto disuasorio en el actuar de los agentes policiales del Estado, sino que ms bien se enviara la seal contraria, esto es, que pueden incurrir en conductas ilegtimas e ilegales con el objeto de obtener antecedentes necesarios para la persecucin penal, pues el empleo de tcnicas cuestionables servira siempre para recabar informacin vlida a fin de perseguir a un tercero, conclusin que contrara el espritu y principios consagrados en el actual ordenamiento jurdico penal.

Por otra parte, en el considerando anterior se estableci fehacientemente, adems, que al menos el acusado C.T.V , permaneci ilegalmente detenido en la unidad policial, mientras recopilaban los antecedentes necesarios para inculparlo y se obtena una orden de detencin en su contra, con lo que tambin se vulner la garanta constitucional de su derecho a la libertad personal, an cuando no pueda determinarse que en el marco de esa detencin ilegal se produjo prueba de cargo que emanara slo de aquella detencin ilegal.

En este orden de ideas, en opinin de este tribunal en todo Estado de Derecho Democrtico, el enjuiciamiento criminal encuentra su legitimidad en el respeto de los derechos garantizados por la Constitucin Poltica de la Repblica, los tratados internacionales y los derechos contemplados en el propio Cdigo Procesal Penal. En tal sentido, en toda sentencia condenatoria, el convencimiento ms all de toda duda razonable, como estndar probatorio establecido en el artculo 340 del Cdigo Procesal Penal, debe haberse adquirido sobre la base de la prueba legalmente obtenida, y legtimamente rendida con respeto a las garantas comprendidas en el debido proceso contemplado en el artculo 19 nmero 3 de la Constitucin Poltica de la Repblica, que en este caso dicho procedimiento irregular no ajustado a un debido proceso, imperativo constitucional establecido en la garanta que establece que toda sentencia de un rgano que ejerza jurisdiccin debe fundarse en un proceso previo legalmente tramitado. Corresponder al legislador establecer siempre las garantas de un procedimiento y una investigacin racionales y justos, desde que se ha fundado la prueba de cargo obtenida de manera ilcita.

De esta manera sobre la base de lo establecido precedentemente, no cabe sino concluir que en el caso que nos convoca se vulner durante la investigacin penal la mencionada garanta respecto de los acusados, resultando cuestionable a los ojos del tribunal que se obtuviera una orden de detencin del juez de Garanta en estas condiciones y sobre el sustento del actuar policial de manera autnoma, fuera de los casos sealados en la ley, contraviniendo los artculos 125, 127 inciso 1, 135, sin respetar el artculo 302 del Cdigo Procesal Penal y 31 de la ley 20.084, resguardos que evidentemente el legislador seal de manera expresa para evitar que se vulnerara tal garanta constitucional.

A este respecto cabe sealar, adems, que la decisin penal se justifica jurdicamente, ya no slo por la bsqueda de la verdad, por la aplicacin a todo evento de la ley penal sustantiva, sino, antes que todo, por la licitud de los medios de bsqueda de esa verdad. Del mismo modo, la legitimacin jurdica de los medios de prueba opera como una limitacin absoluta en el establecimiento de los hechos base para una condena, por cuanto la decisin condenatoria requiere que la conviccin del tribunal sea adquirida a travs de la valoracin de medios de prueba legtimamente obtenidos, conforme a la ley, en caso contrario, se vulnera el principio de presuncin de inocencia, que es una presuncin iuris tantum, cuya destruccin requiere la existencia de una actividad probatoria lcita y sin vulneracin de garantas constitucionales, que se apoye en verdaderos actos de prueba.

De esta forma, este tribunal no ha alcanzado el estndar probatorio necesario para condenar ms all de toda duda razonable, en base a prueba de cargo que sea lcita, vlida y legal y, por lo tanto, como dichos antecedentes emanan de un procedimiento que ha excedido el marco establecido por la ley, no puede ser valorado positivamente por este tribunal, ha de decidirse a favor de los acusados y la teora de la defensa.

Lo que se ha resuelto es armnico con el control que debe hacerse de la prueba que se rinde en juicio oral y que sirve de base a una sentencia condenatoria, tal como se ha venido sealando, por cuanto, en primer trmino, si bien el tribunal oral no est facultado para excluir los medios de prueba que constan en el auto de apertura, algunos de los cuales fueron incorporados en el juicio por el Ministerio Pblico durante la audiencia del juicio oral, no se puede pretender que el tribunal oral est obligado a valorar positivamente dichos medios de prueba, cuando de la propia prueba rendida en la audiencia del juicio oral, resulta de manera patente que los mismos fueron obtenidos con infraccin de garantas fundamentales. Lo anterior, en razn de que nuestra obligacin principal como adjudicatarios es la cautela de los derechos humanos y el principio de supremaca constitucional. En tal sentido, el profesor Ral Tavolari Oliveros refiere: Con la misma fuerza con que se preservan las atribuciones, facultades y competencia del juez de garanta, corresponde defender las del Tribunal de Juicio Oral, para apreciar, esto es, ponderar la prueba que ante l se produzca, materia que, todos comprenden, es completamente diferente a la de rechazar prueba admitida o admitir prueba rechazada (Tavolari Oliveros, Instituciones del Nuevo Proceso Penal, Editorial Jurdica de Chile, pgina 195).

Lo anterior resulta evidente si se considera que todo el proceso penal discurre sobre la base de que no se pueden emplear mtodos o procedimientos que infrinjan los derechos fundamentales del imputado y de los dems intervinientes.

Pues bien, este aspecto requiere analizar la legitimidad de la prueba en el proceso penal. Tal legitimidad, se debe analizar en dos momentos: El primero, es la audiencia intermedia, o de preparacin del juicio oral, en que se dispone que el Juez de Garanta a cargo de la misma, debe excluir de entre todas las pruebas propuestas por los litigantes, aquellas que hubieren sido obtenidas con inobservancias de garantas fundamentales. El segundo, es el momento del pronunciamiento definitivo, vale decir, la evaluacin del valor probatorio de todas las pruebas producidas en el juicio oral, en el que lgicamente deben excluirse las pruebas obtenidas en forma ilcita. En este sentido el profesor Hctor Hernndez Basualto, en el libro antes citado, pgina 90, seala que: con prescindencia de su ubicacin sistemtica y su alcance directo es indudable que el artculo 276 del Cdigo Procesal Penal cumple en nuestro ordenamiento procesal penal la funcin de una prohibicin general de valoracin de la prueba obtenida con infraccin de garantas fundamentales, prohibicin que rige tambin y de modo especial para el tribunal que precisamente est llamado a valorar la prueba. cualquier otra interpretacin implicara sostener un supuesto deber de los jueces del fondo de fallar conscientemente con fundamento en la vulneracin de garantas fundamentales.

Ello puede explicarse, por cuanto, el nivel de informacin con que resuelve el Juez de Garanta es inmensamente inferior a aquel con el cual se cuenta en el juicio oral. As el Juez de Garanta resuelve sobre la base de los antecedentes y las alegaciones de las partes, en cambio el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal, aprecia mediante la inmediacin la rendicin de la prueba completa, por ejemplo el examen y contra examen de los testigos y peritos etc.; pudiendo por ejemplo salir a la luz vicios por infracciones a las garantas constitucionales que el Juez de Garanta nunca tuvo conocimiento. Una conclusin distinta, implicara la obligacin del Tribunal Oral de valorar y fallar sobre la base de una prueba que, a sabiendas, se obtuvo con infraccin de garantas constitucionales, lo cual resulta del todo inaceptable en un Estado Social y Democrtico de Derecho, por cuanto no slo importa que el rgano persecutor llegue a la verdad sino tambin la forma en que sta se obtiene, la cual debe sujetarse a las normas bsicas del debido proceso, como lo ha sostenido nuestra jurisprudencia.

DCIMO: Duda razonable y presuncin de inocencia: Que como corolario de lo sealado en el considerando que precede, no cabe sino absolver a los acusados de los hechos por los cuales se ha deducido acusacin fiscal. Pero adems, cabe tener en consideracin, que el sistema que rige en nuestro pas es acusatorio y corresponde al ente fiscal probar los hechos que le imputa a una determinada persona a fin de desvirtuar la presuncin de inocencia que lo ampara y que se encuentra expresamente reconocida en el artculo 4 del Cdigo Procesal Penal. Lo anterior supone necesariamente que dicha prueba tenga validez y eficacia probatoria, es decir, que la valoracin que se haga sustentada en medios de prueba legtimamente obtenidos, lo cual es una manifestacin de dicho principio legal, pues en caso contrario, se deber dictar sentencia absolutoria.

Como consecuencia del principio de la presuncin de inocencia -que en este caso cobra total relevancia por tratarse de prueba ilcita-, la carga de la prueba que se rinde en el juicio oral corresponde al ente persecutor, de manera que si no satisface el estndar probatorio impuesto por el artculo 340 del Cdigo Procesal Penal, no ser posible imponer una condena a los imputados, derivada del juicio de culpabilidad, mxime si tales antecedentes presentados fueron obtenidos con vulneracin de garantas constitucionales, lo cual conlleva a que la prueba que deriva de ellas sea considerada por estos sentenciadores como ilcita. La citada norma es la que establece el estndar de conviccin para llegar a una condena penal, siendo adems, una manifestacin del principio de presuncin de inocencia reconocido en el artculo 4 del Cdigo Procesal Penal. Por cuanto el acusado llega a un juicio como inocente y slo puede salir de l como culpable si su primitiva condicin es desvirtuada plenamente a partir de las pruebas lcitas aportadas por las acusaciones. El mencionado artculo, constituye la mxima seguridad para cualquier individuo de no sufrir un castigo injusto.

El estndar o conviccin que se requiere para condenar, y a que alude el citado artculo, no se encuentra resuelto legislativamente y por ende, se debe recurrir a la doctrina comparada para tratar establecer cul sera la conviccin necesaria para ello. En este caso resulta pertinente citar a Julio Maier (Derecho Procesal Penal, Tomo I, pg. 257 y siguientes), que seala: la exigencia de la sentencia de condena, por ende, la aplicacin de una pena, slo puede estar fundada en la certeza del tribunal que falla acerca de la existencia de un hecho punible atribuible al acusado. Precisamente, la falta de de certeza representa la imposibilidad del Estado de destruir la presuncin de inocencia construida por la ley, que ampara al imputado, razn por la cual ella conduce a la absolucin. Cualquier otra posicin del juez respecto de la verdad, la duda o la probabilidad, impide la condena Asimismo seala que slo la certeza positiva permite condenar y que los dems estados del juzgador respecto de la verdad remiten a la absolucin, como consecuencia del in dubio pro reo.

UNDCIMO: Costas. Que habindose absuelto a los acusados de los cargos formulados por el Ministerio Pblico, estos sentenciadores condenarn en costas al Ministerio Pblico, conforme a lo dispuesto en el artculo 48 del Cdigo Procesal Penal, tomando en consideracin que la prueba de cargo fue obtenida con vulneracin de garantas constitucionales y el hecho de haber permanecido los acusados privados de libertad por esta causa el da de la detencin y control de la misma.

Por estas consideraciones y, visto, adems, lo dispuesto en los artculos 1, 3, 432, 436 inciso 1, 439, del Cdigo Penal; 1, 7, 48, 91, 93, 94, 125, 127, 129, 135, 276, 295, 297, 302, 305, 340, 341, 342 y 344 del Cdigo Procesal Penal; artculos 19 N 3, 19 N 7 de la Constitucin Poltica de la Repblica, en relacin con lo dispuesto en el artculo nmero 9 y 12 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos; 7 de la Convencin Americana de Derechos Humanos; 37 letra b) de la Convencin de los Derechos del Nio y Adolescente y Ley 20.084; SE DECLARA:

I.- Que SE ABSUELVE a los adolescentes C.J.T.V y E.A.T.V, ya individualizados, de la acusacin formulada en su contra por el Ministerio Pblico, como autores del delito de robo con intimidacin en grado consumado en la persona y en perjuicio de don V.H. D.A, previsto y sancionado en el artculo 432 y 436 inciso 1 del Cdigo Penal, cometido el da 01 de octubre de 2011, en la comuna de Quinta Normal.

II.- Que se condena en costas al Ministerio Pblico, conforme lo sealado precedentemente.

Devulvanse los documentos incorporados en la audiencia del juicio oral al Ministerio Pblico.

Se deja constancia que en la audiencia de comunicacin del veredicto se orden el cumplimiento de lo dispuesto en el artculo 347 del cdigo Procesal Penal.

Ejecutoriado que sea el presente fallo, dse cumplimiento a lo dispuesto en el artculo 468 del Cdigo Procesal Penal y, en su oportunidad, remtase copia autorizada al competente Juzgado de Garanta de Santiago.

Regstrese, notifquese y dse copia.

Archvese en su oportunidad.

Sentencia redactada por la magistrada Mara Carolina Herrera Corts-Monroy.

RUC: 1200175109-1

RIT:333-2012

Dictada por la sala del Cuarto Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Santiago, integrada por los magistrados Pedro Maldonado Escudero, quien presidi la audiencia respectiva, Moira Ramrez Valenzuela y Mara Carolina Herrera Corts Monroy, el primero y la ltima, en comisin de servicio en este tribunal y la segunda subrogando legalmente.