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ACTUALIZACION PARA PERIODISTAS

EVOLUCION DE LOS FENOMENOS POLITICOS

DEL SIGLO XX

Bloque Modular Básico: Fundamentación Socioeconómica y Cultural

Módulo. N!! 3: Fenómenos Socioeconómicos, políticos y culturales del Siglo XX

Unidad: 2

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GRUPO DE TRABAJO

Contenido Técnico ALFONSO MARTINEZ TAPIAS T.P. ND. 102 del M.E.N.

Adecuación Pedagógica STELLA M. PEREZ C.

Ilustración ALVARO MOTIVAR C y Dlagramación Dirección General - División FAD

Montaje YOLANDA HIDROBO CH.

Dirección General - Publicaciones

Fotocomposición ELIZABETH LOPEZ PACHECO Dirección General - Publicaciones

CONTENIDO

INTRODUCCION 5

OBJETIVOS 7

l. LOS COMIENZOS 9

A. Conflictos Nacionales 9

B. Conflictos Internacionales 11

11. LA LUCHA DE LOS IMPERIALISTAS 15

A. La Primera Guerra Mundial 15

B. Las ideas 19

AUTOCONTROL NO 1 25

111. LAS NUEVAS POTENCIAS 27

AUTOCONTROL NO 2 33

TRABAJO FINAL 35

INTRODUCCION

Los fenómenos Socioeconómicós, POlíticos y Culturales del sigló XX con­tienen un cúmulo de acontecimientos que someteremós a análisis en estas cartillas teniendo en cuenta el aspecto cronológico.

Al panorama de los fenómenos de carácter socioecónómicó vistos en la cartilla anterior. sigue ahora el de la evólución de los fenómenos pOlíticos del siglo XX enmarcados en dos hechos claves: la primera y la segunda guerra mundiales.

En esta cartilla se describe cómo fueron las confrontaciOnes bélicas pro­piciadas por las distintas corrientes ideológicas en disputa fratricida por ponerle cuerpo territorial, cultural y político a sus estructuras de pensamiento.

Fué en este sigló XX cuandO se confOrmaron las grandes potencias esta­blecidas cómO fuerzas militares, resultante de las depresiones económicas en que sumieron varios países militares que no alc"anzaron a ser lo suficiente-· mente respetables en el ámbito político.

Se acentúan el capitalismo y el socialismo, al tiempo que se llega al descu­brimiento de la energía nuclear como método militar. Estas situaciones bien caracterizadas y desarrólladas en el sigló XX generan ótra serie de conflictos que veremos más adelante en el presente módulo de la Actualización a Distan­cia para Periódistas.

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OBJETIVOS

Al finalizar el estudio de esta cartilla, esperamos que usted esté en capacidad de:

Escribir su información noticiosa en relación con los eventos políticos más destacados del presente siglo.

Explicar el origen, las causas y las consecuencias de las principales corrien­tes ideólógicas y políticas que gobiernan el mundo.

Describir el origen de las principales potencias mundiales de la actualidad.

Escribir una crónica periodística sobre las dos guerras mundiales.

Llevar a cabo una entrevista en relación con los acontecimientos políticos más destacados del siglo XX.

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l. LOS COMIENZOS

Al comenzar el siglo XX hicieron su aparición en el escenario político, estruc­turas de poder de viejas raigambres históricas y otras muy nuevas que en el curso de la centuria tomaron su fisonomía definitiva en desarrollo de grandes contradicciones y. antagonismos.

Estos procesos tuvieron su convergencia en las dos guerras mundiales y de ellas surgieron nuevas corrientes y nuevas oposiciones, que pueden ser el preludio de una tercera guerra, que podría poner en peligro la existencia del género humano.

En este panorama se detectan conflictos internacionales y también cnsrs políticas nacionales, que han sido las más numerosas y que en los últimos años se enmarcan en lo que se ha llamado la confrontación Este-Oeste y en una nueva polarización que es la Norte-Sur.

A. CONFLICTOS NACIONALES

En la órbita de los conflictos nacionales podrían establecerse unas cinco clases:

1. Los originados por minorías oprimidas que buscan la igualdad política y social interna, a través de manifestaciones violentas localizadas o de guerras civiles típicas. Entre los primeros está el movimiento de los negros ameri­canos en su lucha contra la discriminación y la segregación que hicieron explosión en los llamados "veranos calientes" de 1964 y 1968. En los segundos se pueden citar las guerras civiles en el Sudán en 1955 e Irlanda del Norte en 1966.

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2. Mayorías oprimidas a las que se les han desconocido promesas anteriores sobre de(echos políticos o autonomía y que han librado una lucha que ha conducido a la secesión. Es el caso de los conflictos Bangladesh-Pakistán y Eritrea-Etiopía

3. Guerras o movimientos de descolonización contra potencias imperialis­tas y que posteriormente se convierten en revoluciones contra los sec­tores políticos y sociales que se solidarizaron con los imperialismos. En esta categoría se clasifican las crisis de Vietnam, Argelia, Guinea, Angola y Mozambique.

4. Movimientos de mayorías oprimidas después de la iñdependencia colonial y que reaccionan contra minorías dominantes nacionales, tal como ocurrió en Ruanda, Búrundi, Chipre y Zanzíbar.

5. Derrumbamiento de estados dinásticos. de corte imperial y la reacción de las mayorías sojuzgadas, como es el caso de Irán y Etiopía.

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B. CONFLICTOS INTERNACIONALES

En la clasificación de los conflictos internacionales en el siglo XX aparecen tres grupos:

1. Guerras entre las viejas y las nuevas potencias imperialistas por el predo­minio én Europa y en los territorios coloniales, reserva de materias primas.

2. Conflictos surgidos en el enfrentamiento Este-Oeste. como ocurrió con. la guerra de Corea y también dentro de la misma polarización. las disputas territoriales de áreas dentro o fuera de los estados: conflictos entre Argelia y Marruecos, por territorios del Sahara; entre India y China en 1962 por el territorio del Himalaya y entre la Unión Soviética y China por la región de Usuri, en 1968.

3. Conflictos antiguos de ongen precolonial. como ocurrieron entre India y Pakistán; Somalia-Kenia-Etiopía y Vietnam-Campuchea.

En la política del siglo, se evidencia que las confrontaciones de poder han tenido como rasgo característico la simple expansión territorial y las frecuentes alianzas entre estados, para disputarse áreas considerables del mur'ldO. Pero las más graves y extensas crisis han sido estimuladas por ideologías de tipo intelectual que han hecho más profundas las transformaciones.

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Como origen y secuela de la Revolución Francesa, surgió un vasto movimiento espiritual iniciado por los llamados enciclopedistas, Diderot, Voltaire, Rousseau, Montesquiéu, D'Aiambert y otros. Su doctrina, con las naturales variaciones y matices representó el principio del racionalismo, del poder del razonamiento como único mecanismo del espíritu humano para llegar al conocimiento pleno de la realidad y de la verdad. El racionalismo unido con el pensamiento científico derrumbaron en su época las anteriores tesis y mitos sobre el estado, la religión, el poder y la estructura social. Su primer resultado fué la destrucción física y fun­cional de la monarquía francesa y el establecimiento de la teoría republicana, la división de los poderes y la eliminación de los privilegios ancestrales para dar paso a la democracia representativa y posteriormente al Estado liberal. Esta ola de profunda transformación política y social cubrió toda Europa, llevada por los ejércitos de Napoleón Bonaparte, quien si a la postre traicionó los principios republicanos al establecer el Imperio Francés, fué el agente de cambio en todas las estructuras semifeudales del Viejo Continente.

Casi simultáneamente con la gran revolución de Francia, comenzó a nacer la etapa industrial en Europa, generada inicialmente en Inglaterra y que se extendió rápidamente a Francia, Alemania e Italia.

MARX ENGELS

Cuando apenas se configuraba la nueva economía manufacturera, impulsada por las ideas de los economistas Say, Ricardo y Adam Smith, sobre el "laissez !aire" la libre empr.esa, la consolidación de la propiedad privada y el libre cambio, apareció un nuevo movimiento ideológico que iría a producir todas sus conse­cuencias en el siglo XX. Fue el socialismo revolucionario cuyas bases fueron

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proclamadas en el Manifiesto Comunista, que apareció en 1848, apenas cin­cuenta y cinco años después del estallido de la Revolución Francesa. Sus autores Carlos Marx y Federico Engels, quienes eran aún adolescentes. Su doctrina era la abolición del estado burgués - recién nacido - y su reemplazo por la dictadura del proletariado. considerado como clase explotada y depauperizada por el capitalismo industrial y comercial. En el curso del siglo las ideas esbozadas en el Manifiesto tomaron forma científica en "El Capital" de Marx y en el "Anti During" de Engels y fueron enriquecidas por otros autores para llegar a un sistema de pensamiento conocido como el materialismo dialéctico y el materialismo histórico.

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11. LA LUCHA DE LOS IMPERIALISTAS

A. LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL

La irrupción de los conflictos creados por los países imperialistas, en el siglo XX fue la culminación de una evolución de gran movilidad iniciada en el.siglo anterior y cuyo principal protagonista fué Inglaterra, que a mediados de 1800 se consolidó como la primera potencia del mundo. Su condición de ser la cuna de la primera revolución industrial (se le denominaba "taller del mundo" ) hizo posible la creación de un gran poder militar y concretamente su flota de guerra que dominó todos los mares para lograr sus ambiciones coloniales. Estas tomaron como objetivo principal la India y alrededor de esta conquista. las otras dos potencias que al final del siglo. le seguían en importancia; Francia y Rusia buscaron también esa región de Asia como campo de actividad política. Se recuerda que en 1757 Francia fué derrotada en la India por Inglaterra y poste­riormente, en 1858 conquistó a lndochina.

También Rusia llevó a cabo una expansión de carácter imperialista y en el siglo XIX trató de llegar hasta fa India, cuya conquista acababa de concluir Inglaterra en 1856.

Afganistán quedó así aprisionado entre fa presión expansionista inglesa desde el sur y fa de Rusia desde el norte. Antes de 1900 Inglaterra y Rusia estuvieron varias veces al borde de fa guerra por fa cuestión de Afganistán.

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Desde mediados del siglo XIX, otros cuatro estados nacionales se incorporaron al sistema imperialista en formación. Tal incorporación ocurrió después de haber superado sendas crisis internas y haber alcanzado una nueva consolidación que hizo posible su expansión ultramarina. Dos de ellos, Italia y Alemania, estaban situados en Europa y otros dos, Japón y los Estados Unidos, en ultramar Italia y Alemania formaron estados nacionales sobre la · base de una creciente homogeneidad nacional y la consolidación de sus sistemas constitucionales. Eri Italia la unificación como nación se produjo con el "resur­gimiento" en 1861 y en Alemania con la creación de una sola nación en forma del Primer Reich en 1 871 . Ambos estados fueron esencialmente producto de la revolución industrial, el nacionalismo moderno y el liberalismo.

Japón y Estados Unidos, siendo ya estados organizados, se afianzaron después de conflictos internos y guerras civiles. Japón tras la obligada apertura al comercio internacional por imposición de los Estados Unidos entre 1853 y 54 y este último país tras los cuatro años de guerra civil entre 1861 y 1865. Los cuatro nuevos estados nacionales exigieron su parte. en la distribución colonial del mundo, lo que originó gran parte de las tensiones que dieron lugar a la primera guerra mundial y un cuarto de siglo después, a la segunda.

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Esta constelación de siete potencias imperialistas, en el juego de sus profundas contradicciones y antagonismos, llegaron a una polarización de poderes que condujo a la primera conflagración mundial. En esta crisis fué decisiva la política exterior del Reich alemán y su intento abiertamente proclamado de convertirse en potencia mundial, en pie de igualdad con el Imperio Británico. Como principal potencia militar del continente europeo y estimulada por una capacidad indus­trial en rápido crecimiento, formó desde finales del siglo XIX la segunda flota del mundo, equiparable cuantitativamente con la británica. Los investigadores históricos han comprobado que esta armada, ideada por el Kaiser Guillermo 11 y organizada por el gran almirante Tirpitz estaba contemplada desde el primer momento como instrumento ofensivo contra Inglaterra. Esta evidencia hizo que el Imperio Británico se sintiera retado y su política se orientó desde ese momento a lograr el "Balance of power" contra Alemania. Y creó en el curso de pocos años su sistema solar con otras potencias. En 1904 formalizó la llamada "Entente Cordiale" con Francia y en 1907 logró un tratado bilateral con Rusia.

Los sucesos se precipitaron en los primeros diez años del siglo, cuando el juego de las grandes potencias se vió complicado por una serie de conflictos de pequeñOs países en el área de lós Balcanes y el Oriente Medio. El Imperio turco que comenzó a desmoronarse a mediados del siglo anterior vino a ser presa de la codicia de Rusia e Inglaterra y también del Imperio Austro Húngaro, que iniciaron acciones para obtener territorios del llamado "enfermo del Bósforo". La primera en intervenir fue Rusia que vió una oportunidad de extender su expan­sión más allá de los límites de su enorme territorio, con el argumento de defender a sus correligionarios ortodoxos y a los hermanos eslavos sometidos al yugo turco.

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Nació así. a finales del siglo XIX. el paneslavismo como ideología impulsora de la expansión rusa. Inglaterra por su parte intentó apoyar el imperio otomano frente a las ambiciones rusas e intervino contra ella en la Guerra de Crimea, en 1853.

Tras la expulsión de los turcos de Europa en 1912 se desarrollaron nuevos conflictos que culminaron en la primera guerra de los Balcanes en ese mismo año, en la que se enfrentaron Servía y Grecia contra Bulgaria en la disputa de Macedonia, que culminó con la derrota búlgara. Paralelamente había estallado otra crisis, con la anexión de Bosnia al imperio Austrohúngaro. En este evento se destacó el movimiento nacionalista de los jóvenes bosnianos que reaccionó furiosamente contra la anexión y prepararon el atentado de Sarajevo en el que murió el príncipe heredero del trono Austro Húngaro. Francisco Fernando. Esta fué la chispa que prendió la primera guerra mundial.

En su obra sobre "Problemas Mundiales entre los dos bloques de poder "Benz y Graml, precisan esta dramática coyuntura:

"Los disparos de Sarajevo, dicen, hicieron blanco en una Europa en la que á lo largo de las décadas, se habían vuelto a acumular tensiones hasta llegar al conflicto. Ei lugar de las potencias hegemónicas tra­dicionales, Francia y Rusia. había pasado a ocuparlo desde finales del siglo, Alemania que, con su política mundial, apoyada por una pasmosa industrialización, puede decirse que provocó la alianza de Francia y Rusia contra ella en 1882 -84. Mientras que Francia se había visto obligada a ponerse a la defensiva desde 1870, la línea de expan­sión rusa se dirigía a los Balcanes y a no largo plazo debilitada, mediante el apoyo al nacionalismo de los eslavos meridionales. la posición de Austria-Hungría, aliada a su vez con Alemania. La presión se refor­zaba con la presencia de una Italia cuya actitud era en el fondo igual­mente antiaustriaca".

La primera conflagración mundial dió como resultado el hundimiento simul­táneo de cuatro imperios dinásticos cuyos orígenes de poder se remontaban al nacimiento del feudalismo; Rusia, Alemania, Austria- Hungría y el imperio otomano. La suerte de los otros imperialismos que intervinieron fué diversa; Francia, muy quebrantada conservó su sistema republicano pero vió disminuida su potencialidad económica y política preservando difícilmente su estructura colonial. Los Estados Unidos que intervinieron tardíamente, se colocaron sorpresivamente a la vanguardia de las potencias mundiales, relegando a un segundo lugar a un Imperio Británico que aunque triunfante, comenzó su primera etapa de resquebrajamiento. El Japón, poco afectado por el confl icto, comenzó a robustecer su desarrollo industrial y su tecnología militar.

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Los conflictos anteriores a la guerra. es decir las luchas de los imperialismos por imponerse dentro de Europa y en los ámbitos de otros continentes se cumplían con criterios pragmáticos de "la alta política", del predominio econó­mico, sin influencias muy visibles de fuerzas ideológicas de tipo filosófico.

B. LASIDEAS

Dos corrientes intelectuales que se cristalizaron en movimiento de masas, comenzaron a aflorar dentro del mismo conflicto; el socialismo marxista-leninista que tomó el poder en Rusia en 1917 y el fascismo que lo tomó en Italia en 1922 y en Alemania en 1933. El primero originado en los principios racionalistas de la Revolución Francesa, y en la metodología dialéctica de Hegel, tomó su forma definitiva en las doctrinas del materialismo dialéctico e histórico de Carlos Marx y Federico Engels y evolucionó hacia la praxis revolucionaria de Lenin.

El fascismo tiene su origen en las tesis de los filósofos alemanes que se adhirieron al movimiento de la Restauración, impulsada por los pequeños estados monár­quicos en que estaba dividida Alemania y que lucharon contra la oleada libertaria de la revolución francesa.

Pensadores como Shelling, Schopenhauer, Nietzsche y Spengler, entre otros, crearon una corriente "irracionalista" del Estado y de la cultura. Ideas como el super hombre nietzscheano, la superioridad de la raza aria, el intuicionismo, el agnosticismo y la acción violenta llevada hasta el genocidio de pueblos inferiores, encarnaron esta nueva visión de la realidad que llevó a la famosa exclamación del fascista español Foxá: "¡muera la inteligencia!". Benz y Graml describen así este proceso:

"El vacío creado por el hundimiento de los viejos imperios y de las dinastías monárquicas fué llenado, por un lado, por el espectro polí­tico de la revolución socialista- comunista, que solo pudo imponerse en Rusia en la Revolución de Octubre de 1917 y mantenerse frente a la guerra civil y a la guerra de intervención y, por otro, por el fascismo. inicialmente en Italia -1922- y después en su forma más exacerbada de nacionalsocialismo, también en Alemania en 1933.

La polarización entre comunismo y fascismo determinó en gran parte la evolución política en el período comprendido entre las dos guerras mundiales, en muchos casos a nivel nacional y desde el triunfo del fascismo alemán en 1933, a nivel internacional. Entre las fuerzas extremas del comunismo y el fascismo quedaron trituradas otras fuerzas que en 1918 tenían vigencia política: socialdemócratas. liberales, conservadores, cristianos o agrarios o nacionalistas conservadores, como los nacionalistas de Alemania.

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Así ha de entenderse la polarización interestatal que acabó resumién­dose en el eje Berlín -Roma- Tokio y en la Unión Soviética. El ensan­chamiento del aspecto político por la izquierda hasta el comunismo y por la derecha hasta el fascismo, produjo la polarización interna y externa que llevó al conflicto entre el comunismo - organizado estatalmente en la URSS - y el fascismo - organizado estatalmente, sobre todo en Italia y Alemania - y por último a la segunda guerra mundial''.

a. El Socialismo

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En octubre de 1917 el socialismo revolucionario derrocó a la monarquía del Zar Nicolás 11 de Rusia y asumió el poder, inicialmente en una etapa de transición con la presidencia de Kerenski y posteriormente se conso­lidó la llamada "dictadura del proletariado", cuando fué derrocado Kerenski y asumió el poder el movimiento de los bolcheviques liderado por Lenin. Este constituyó el Consejo de Comisarios del Pueblo que comenzó a imple­mentar la organización socialista del Estado. El nuevo gobierno se enfrentó desde un principio a una serie de conflictos internos y externos, provo­cados por fuerzas empeñadas en derrocar al socialismo ruso que amena­zaban con propagarse rápidamente por la Europa debilitada por la guerra. En 1920 el ejército de Polonia, instigado por los gobiernos de Francia e Inglaterra, bajo la dirección de mariscal Pilsudski invadió a Rusia y tomó a Kiev capital de Ucrania. En pocas semanas el recién formado ejército rojo contraatacó y expulsó a los polacos haciéndolos retroceder hacia su frontera y posteriormente hasta las puerta·s de Varsovia. Un comentarista señala que "la derrota polaca parecía inminente y con ella, el colapso de la paz de París y tal vez el derrocamiento de la sociedad capitalista alemana y europea"~

Sin embargo las fuerzas de Pilsudski contraatacaron y lograron derrotar al ejército ruso, culminando este incidente en el acuerdo de paz de Riga, en octubre de 1920. Libre de esta presión el ejército rojo aplastó a la .contrarrevolución· de los· "rusos blancos" dirigida por los generales zaristas Denikin, Wrangel y Koltchack. Al terminar esta campaña Len in proclamó la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas.

El gobierno de Lenin tuvo que superar todos los fenómenos económicos y políticos de un estado en disgregación y con la aplicación de la Nueva Pol'ítica Económica logró reconstruir la producción industrial y activar la agricultura.

En 1924 murió Lenin que fué reemplazado por José Stalin. Este logró el apoyo del ejército soviético y con él, aniquilamientos de quienes consideró como desviacionistas y enemigos ocultos del socialismo, como fué el

caso de Zinoviev, Kamenev y Yagoda. El gobierno de Stalin, monolítico y eficaz, se dedicó al cumplimiento de los planes quinquenales y logró la colectivización total de la agricultura.

Los principios básicos del sbcialismo soviético, emanados del desarrollo de las tesis de Marx y Engels, complementadas posteriormente, por Lenin están contenidos, en su forma pura, en el Manifiesto Comunista, publicado en 1848. El filósofo Werner Sombart define así las ideas ca­pitales del Manifiesto, . que han alimentado posteriormente la expansión del socialismo por el mundo:

"La historia, toda ella, es la historia de la lucha de clases, la historia contemporánea lo es de la lucha entre la burguesía y el proletariado. La formación de las clases es el resultado de determinadas condiciones económicas que presiden a la producción y reparto de valores: estas relaciones determinan también las relaciones de predominio.

Fuerzas inmanentes transforman las condiciones de la producción y como consecuencia de ello, todas las relaciones económicas.

Esta transformación económica, agrega Sombart, encuentra su expre­sión inmediata en la oposición y la lucha de clases. En nuestros tiempos, la burguesía representa al antiguo régimen económico, que marcha a su ocaso, mientras el proletariado representa el nuevo orden de cosas, que aún se encuentra en su período de gestación. El mo­vimiento social moderno, es decir, el movimiento del proletariado, no es otra cosa que la organización de aquellos elementos sociales que están llamados a truncar el dominio de la burguesía y a "apoderarse de las nuevas fuerzas productivas de la sociedad". Y no podrán llevarlo a efecto sino "anulando la constitución actual y por consecuen­cia, toda la actual constitución social". Es decir, sustituyendo la propiedad y la producción privadas por el comunismo".

Las energías del régimen soviético se vieron absorbidas durante el resto de la década y gran parte de la siguiente en el empeño de conseguir un rápido crecimiento económico. Por consiguiente, la política exterior rusa tras la guerra polaca tuvo un carácter eminente­mente defensivo, tendiente a mantenerse alejada del resto del mundo, más que a cambiarlo. Señala el historiador Parker que "la Unión Soviética,· como los Estados Unidos, si bien por razones muy distintas, se convirtió en un gran ausente de la política europea y mundial. y el dominio cada vez más artificial de las potencias occidentales, Inglaterra, ·Francia, Italia y Alemania en los asuntos internacionales se prolongó hasta los años 40".

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b. El Fascismo

La otra fuerza ideológica y política que asumió todo su poder posteriormente contra el socialismo revolucionario de la Unión Soviética, comenzó a gestarse en Alemania al terminar la primera guerra mundial. La República de Weimar, constituida al firmarse la paz de Versalles, inició una compleja labor de reconstrucción de la economía que se resentía de un proceso inflacionario, aunque existía prosperidad creciente y mejoramiento del nivel de vida. Sin embargo entre 1922 y 1923, el movimiento inflacionario se hizo incontenible, y comenzó a observarse un creciente índice de desocupación. El desasosiego social se reflejó en una ola de huelgas, en las que comenzó a aparecer el movimiento comunista, como elemento de agitación. Sin embargo la situación fue controlada en los años sub­siguientes lográndose impulsar la producción industrial que superó los niveles de la preguerra. Esta aparente tranquilidad fue perturbada bruscamente por la gran depresión mundial de 1929 que tuvo más dra­máticas consecuencias en Alemania que en los demás países europeos. Uno de los principales fenómenos fué una fuga masiva de capitales hacia el exterior lo que debilitó la inversión interna. Igualmente las exportaciones renacientes se fueron a pique por efecto de la recesión del comercio internacional; la producción industrial descendió en un 58 por ciento de su nivel en 1928. La desocupación afectó a seis millones de trabaja­dores y en julio de 1 932 cerca de la mitad de todos los miembros de los sindicatos alemanes carecían de trabajo y paralelamente fa agricultura se encontraba cerca del colapso.

Aparte de esta dramática coyuntura económica, un serio problema de opinión pública afectaba a los partidos políticos y a los gobiernos y se originó en el mismo hecho de la derrota militar en 1918, que presentó una cara diferente para los movimientos de izquierda y para la derecha. Para los primeros era evidente que el pueblo alemán había sido descarriado y engañado por militares irresponsables y sus aliados de las altas clases sociales que rodeaban al Kaiser Guillermo 11. Para la derecha, el ejército no había sido derrotado en absoluto y habían sido los movimientos revolucionarios en 1918, que estallaron en diferentes ciudades de Alemania, los responsables de la hecatombe. En esta disputa se observó en 1923 en Baviera la aparición del Partido Obrero Nacional Socialista Alemán del que era afiliado el joven político Adolfo Hitler, quien cobró notoriedad nacional por un abortado movimiento subversivo en Munich. Hitler, dotado de excepcionales condiciones oratorias inició su batalla contra el tratado de Versalles, el naciente y ya agresivo movimiento marxista-leninista en Alemania y con mayor ardentía contra los judíos y los sindicatos obreros a quienes adjudicaba la derrota alemana. Con un grupo de militares y políticos descontentos fundó posteriormente el Partido Nacional Socialista -NAZI-. En 1923 se pronunció contra el gobierno de 6erlín y se dispuso a restaurar "el

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reinado del pueblo alemán" en una acción de su partido en Munich, que fué ahogada por la policía: Hitler fué detenido y encarcelado en Land's Berg, y allí escribió el compendio de sus doctrinas políticas en un libro de amplia difu­sión: el Mein Kampf- "Mi lucha". Transcurrido un año fue puesto en libertad y desde ese momento extendió aún más su imagen, logrando g¡:inar progresi­vamente poder político en varias elecciones para el Reichtag. Aprovechó hábilmente las contingencias de la crisis y de la inflación como también del resentimiento nacional contra las potencias extranjeras que habían vencido a Alemania. Con la llegada a la presidencia del país del mariscal Hinder'lburg, .Hitler influyó mucho en sus decisiones para solucionar conflictos cada vez más agudos entre los diferentes partidos, entre ellos el social demócrata, el liberal y los diferentes movimientos agrarios. En enero de 1933 Hindenburg designó a Hitler canciller de Reich. Ya en el poder procedió a perseguir y eliminar a sus adversarios políticos, disolvió el parlamento, apresuró los planes de rearme militar e inició una implacable persecución contra los judíos.

A la muerte de Hindenburg en 1934, asumió las funciones de presidente y canciller y se proclamó "Fuhrer" -Caudillo-. Desde este momento comenzaron a implantarse los dogmas sagrados del fascismo alemán, basados en la corriente irracionalista y mítica de un sector de la filosofía alemana. El filósofo Georg Lukacs define así la metodología política. hitleriana:

"Hitler es un adversario irreductible de la verdad objetiva y también en la vida combate por doquier todo lo que sea objetividad. Se siente a sí mismo como el agente de una posición capitalista, cuyas metas trata de alcanzar con una técnica de propaganda implacable~ mente hábil, conscientemente colocada al margen de toda verdad o de toda exactitud objetiva. En este sentido, es un discípulo verdadera­mente hábil de la técnica publicitaria norteamericana".

Las tesis fascistas se desenvolvían en un conjunto de mitos y de verdades a medias que encendían el espíritu fatalista de los alemanes de esa época y los alentaba hacia un futuro heróico, después de la vergüenza de la derrota. Uno de los mitos fué el de la superioridad racial de los alemanes: sustentada en el hecho de que Alemania no había desgastado a sus juventudes en las guerras coloniales, como sí lo habían hecho "países decadentes" como Inglaterra, Francia, Italia y Holanda. La idea general es que existían características raciales divergentes; que las razas "puras" estaban llamadas a mayores empresas que las mezcladas: que la raza aria o nórdica tenía un mérito especial; que los alemanes eran el mejor ejemplo de la raza aria en su forma más pura, pero que esta pureza se hallaba amenazada por otras razas inferiores especialmente por los desarraigados judíos.

Con esta tesis de que los alemanes, según el Mein Kampf era "la más alta especie humana sobre la tierra" se fundamentó la política internacional fascista: Alemania debería ser una gran potencia· mundial y para serlo, un estado requiere un gran territorio. Las fronteras alemanas en 1914 eran

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totalmente inadecuadas y debería por lo tanto buscarse "el espacio vital'' en las áreas de la Europa Oriental.

Decía Hitler: "El territorio sobre el que un día nuestros campesinos alemanes podrán tener al mundo y alimentar a sus recios hijos, justificará la sangre de los hijos de los campesinos que ha de ser derramada hoy y los estadistas que han decretado su sacrificio pueden ser criticados ahora por sus contemporá­neos, pero la posteridad los eximirá de toda culpa por haber · pedido a su pueblo esta ofrenda".

Precisó luego: "Ponemos punto final a la política comercial y colonial de antes de la guerra y pasamos a la política territorial del futuro. Cuando hablamos hoy de nuevos territorios en Europa, debemos pensar sobre todo en Rusia y en los estados fronterizos sometidos a ella".

c. Hacia la segunda guerra

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Culminado el rearme, en el que Alemania gastó más del doble del presupuesto militar que en ese entonces asignaban Estados Unidos e Inglaterra, comenzó el movimiento expansionista de la Alemania hitlerista. En 1936 se ordenó la ocupación de Renania. En 1938 con el beneplácito

1 de la Italia de Benito Mussolini, donde realmente nació el fascismo, y sin que Francia e Inglaterra pudieran impedirlo, los ejércitos nazis se apo­deraron de buena parte de 1 Checoslovaquia y en septiembre cuando invadieron a Polonia, estalló la segunda guerra mundial. El conflicto se protocolizó con la declaratoria de la guerra a Alemania por Francia e Inglaterra. La respuesta alemana fué la ocupación de Francia, en una acción relámpago, que hizo capitular a ese país en 1940, finalizando así la primera fase de la guerra. De este añó hasta 1941. Inglaterra prác­ticamente solitaria resistió la presión armada y diplomática alemana para obligarla a firmar la paz. En el verano de 1941 Alemania invadió a Rusia y en diciembre de ese año el conflicto se convirtió en guerra mundial cuando Japón atacó a los Estados Unidos en Pearl Harbar, ataque que fué seguido inmediatamente por la declaración de guerra de Alemania a Estados Unidos.

Las tropas alemanas lograron llegar hasta las inmediaciones de Moscú y luego hasta Stalingrado donde sufrieron la primera gran derrota, que obligó a·l cambio de tácticas del comando hitleriano. La batalla de Moscú que fué ganada más que por el ejército rojo muy quebrantado, por las brigadas de las juventudes comunistas, fué la iniciación de la retirada alemana que sufría también un gran revés en Africa donde las fuerzas del general Rommel fueron vencidas por el ejército inglés del mariscal Montgomery. La derrota en Rusia que se inició en 1943 culminó en 1945 cuando las tropas soviéticas entraron a Berlín junto con los ejércitos de Estados Unidos, Inglaterra y Francia, que habían penetrado por Norman­día y en pocos meses aniquilaron al ejército nazi.

AUTOCONTROL Ng 1

1. ¿Cuáles son los grupos de conflictos internacionales que aparecen en el siglo XX?

2. ¿Cuál fue la secuela más profunda de la Revolución Francesa?

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3. ¿Qué países fueron los principales protagonistas de la Primera Guerra MundiaP

4. ¿Cuáles son los principales puntos de la tesis fascista?

5. Redacte una crónica periodística donde sintetice las principales causas, desarrollo y consecuencias de la primera guerra mundial. Tenga en cuenta las ideas políticas preponderantes en su condición determinante de los conflictos bélicos.

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La crónica no debe tener más de cuatro cuartillas a doble espacio. Una vez redactada discútala con su círculo de estudió y corríjala si lo considera necesario.

Compare sus r~spuestas con el contenido del capítulo anterior .y compleméntelas con la bibliografía sugerida por el autor.

111. LAS NUEVAS POTENCIAS

En el período de las dos guerras mundiales. el poderío económico de los Estados Unidos, le permitió extender su influencia por el mundo. El "standard of life" americano fué el arquetipo social que ambicionaban todos los países desarro­llados y también los del Tercer Mundo. La imagen del capitalismo proyectada por ese país basado en los valores de la libertad, la democracia y la igualdad de oportunidades, se convirtió en una especie de mística internacional que facilitó la adhesión de todos los países que quedaron al margen de la segunda guerra y fijó una impronta épica a su intervención victoriosa en Europa y en el Oriente donde venció al Japón en una guerra cruenta en la que al principio estuvo en inferioridad de condiciones. El gobernante norteamericano durante casi todo el conflicto, Franklin. D. Roosevelt, junto con el primer ministro británico Winston Churchil l constitúyeron la imagen clásica de los estadistas democráticos en contraste imponente con los caudillos fascistas Hitler y Mussolini que eran el símbolo del antihumanismo y de la falta total de escrúpulos.

El derrumbamiento del fascismo, contraconcepto radical del socialismo mar­xista-leninista, cuyo antagonismo épico fué resuelto en una hecatombe que dejó más de 30 millones de muertos, se polarizó tan pronto se logró la paz en otra oposición antagonista; el capitalismo democrático y liberal liderado por los Estados Unidos y Europa a los que se unió años después el Japón, frente a la Unión Soviética. otra de las potencias triunfadoras.

A partir de 1945 cuando se pactó la paz mundial, la oposición entre el mundo de la economía de mercado o capitalista y el mundo de economía de planificación central o socialista se planteó de inmediato. como consecuencia de la misma distribución del área europea que determinaron las potencias victoriosas. La Unión Soviética logró asegurar su influencia en la Europa Oriental y creó estados socialistas en Polonia. Alemania Democrática que fué su parte en la división o castración de Alemania, Bulgaria, Checoslovaquia, Hungría

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y Rumania. Fuera de su dominio, pero en esa misma área se crearon otros dos' estados socialistas independientes: Yugoslavia y Albania.

El 1 Q de octubre de 1949, surgió en Asia otro estado socialista a raíz de la victoria del movimiento revolucionario ·de Mao Tse-Tung contra las fuerzas del Kuomi­tang de Chiang Kai Chek. Fué la República Popular de China, que con una peculiar concepción del marxismo ha sido considerada como la gran potencia mundial para el siglo XXI.

La expansión del socialismo en los años subsiguientes, impulsado por la descolo­nización de países africanos y asiáticos y por la reacción contra la influencia de los Estados Unidos en América Latina, ha llegado a dimensiones que han inquietado profundamente al mundo democrático capitalista.

Actualmente existen en el mundo 34 países socialistas, que abarcan un área territorial de 50.4 millones de kilómetros cuadrados y una población de 1.775 millones de habitantes, es decir el 37 por ciento de la humanidad.

Estos países están situados en los siguientes continentes: En Europa, la Unión Soviética, Albania, Yugoslavia, Alemania Democrática, Bulgaria, Checoslo­vaquia, Hungría. Polonia y Rumania. En América, Cuba y Nicaragua. En Africa, Angola, Argelia, Benín, Congo, Etiopía. Guinea. Libia, Madagascar, Mozambique, Somalia, Sudán y Tanzania. En Asia, Birmania, Corea del Norte, China Popular, lrak, Kampuchea, Laos, Mongolia, Siria, Sri Lanka, Vietnam y la República Democrática del Yemen.

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Es evidente que una de las principales consecuencias geohistóricas de la primera guerra mundial. fué la segunda guerra. que a su vez propagó,amplificó y extendió efectos esenciales y fenómenos germinados en la primera. Por ejemplo, la revolución comunista se siguió extendiendo en Europa Oriental y Sudorienta! facilitada o forzada por la presencia del ejército rojo. En Yugoslavia por su propia fuerza interna. como consecuencia de la resistencia de Jozip Broz, Mariscal Tito, contra las fuerzas de ocupación alemanas.

En cambio la presencia de Estados Unidos e Inglaterra impidió el triunfo de la revolución socialista en Grecia. En China triunfó la revolución comunista en 1949 como consecuencia de la dinámica nacional creada por la resistencia a la agresión del Japón.

El súbito desmoronamiento de los imperios dinásticos al final de la primera guerra mundial tuvo su correlación en el derrumbe paulatino de los imperios coloniales europeos - Inglaterra, Francia, Bélgica. Holanda, Italia en el curso de la descolonización a escala mundial que sucedió a la segunda conflagración.

La descolonización a partir de 1945 hizo visible el proceso un poco soterrado que se había gestado en la primera guerra. En ambos casos fué la India, centro de la expansión europea y piedra angular del moderno sistema imperialista la que marcó la pauta del fenómeno; tras la primera guerra exigió la autonomía y poco antes de estallar la segunda y más intensamente al terminarse, luchó y consiguió su independencia. Señalan los investigadores Benz y Graml que "bajo la presión de la guerra de liberación nacional revolucionaria que en caso contrario amenazaba, una Inglaterra agotada por la guerra abandonó en 1947, bajo el gobierno laborista de Clement Attee. y con la oposición de los conser­vadores encabezados por Winston Churchill, su posición India, con lo que se inició la total disolución del imperio británico".

La independencia de la India fué la señal para la descolonización del resto de Asia, hasta llegar a la derrota de Holanda en 1949 y de Francia en 1954 en sus respectivas guerras coloniales, emprendidas para reconquistar las posesiones de Indonesia e lndochina, respectivamente, que se escaparon de su control durante la segunda guerra.

Seguidamente se unió a este proceso la descolonización del continente africano, que se inició con la emancipación nacional de Egipto del protectorado .de hecho que ejercía Inglaterra y por otra parte con la autónomía de Nigeria y Ghana en 1951 y el movimiento de liberación de Argelia contra Francia en 1954.

Las formas, el curso y el resultado de muchos de los conflictos que se desa­rrollaron entre los pueblos y las potencias coloniales en el proceso de descolo­nización a escala mundial se vieron poderosamente influidos por la rivalidad entre

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Estados Unidos y la Unión Soviética. El conflicto Este-Oeste, .que aún se está dirimiendo en la guerra fría, que se inició una vez terminada la guerra c·aliente, actuó directamente en el proceso de descolonización.

Señalan los autores citados que ''también bajo la presión de la amenaza de ayuda y a veces con una ayuda real y concreta a los rebeldes de los países en esta situación de liberación por parte de la Unión Soviética, tanto en el terreno político como en el militar -suministro de armas, formación de cuadros militares-, las antiguas potencias coloniales se vieron obligadas a abandonar sus colonias y en gran medida lo hicieron sin luchar".

Mientras la guerra fría solo dió lugar en un punto a una guerra localizada, a saber, la de Corea, donde tuvo una función de guerra librada entre las superpo­tencias a través de sus respectivas zonas de influencia en el país dividido, en algunos países se produjeron largas y sangrientas guerras de liberación que afectaron considerablemente a los pueblos coloniales aún dependientes: Vietnam, Argelia, Kenia, Malasia, Guinea, Bissau, Angola, Mozambique y Zimbabwe.

A pocos años de terminar el siglo XX, la evolución de la política mundial se caracte­riza por la exacerbación de las tensiones entre las potencias de Occidente y el Mundo Socialista que va recibiendo cada vez en mayor proporción la solida­ridad abierta o soterrada de lo que se ha llamado el Tercer Mundo.

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El descubrimiento de los usos militares de la energía nuclear que dió por resultado la invención de la bomba atómica, dió un nuevo carácter a toda la teoría de la guerra. El presidente Truman ordenó en 1945 el lanzamiento de dos artefactos de ese tipo en las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, con un saldo

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de más de 300.000 muertos, cifra que horrorizó al mundo en ese momento y Estados Unidos consolidó su posición como. primera potencia mundial. Sin embargo la huida a la Unión Soviética de algunos científicos que participaron en la construcción de la primera bomba atómica hizo posible que esta nación socialista se constituyera cinco años después en la segunda potencia atómica del mundo. La recuperación del equilibrio, aseguró la prolongación de la guerra fría y paradójicamente el alejamiento de un estallido bélico nuclear. Los dispositivos de ataque y defensa que han perfeccionado los dos países, conducirían fatalmente a una destrucción masiva de sus respectivas industrias, centros urbanos y reductos militares y de comunicaciones.

Esta congelación de decisiones radicales en el enfrentamiento Este- Oeste, ha variado la estrategia de expansión del socialismo en los países en desarrollo, que parecen ser su objetivo más concreto. Una de las tácticas ha sido el estímulo de movimientos guerrilleros, que han aparecido desde hace varias décadas en algunos países, como reacción contra gobiernos dictatoriales de derecha, especialmente en América Latina. Directamente o por conducto de otros países se ha suministrado apoyo logístico a movimientos de ese tipo, cuyo poder político se ha incrementado poderosamente, en El Salvador, Colombia, Perú, Ecuador, Argentina, Venezuela y Guatemala en América Latina.

La estrategia soviética ha logrado también fortificar la subversión contra el establecimiento capitalista en muchos países de Africa y Asia, erosionando progresivamente el poder político de los Estados Unidos en esas regiones. La perspectiva para el año 2.000 es cada vez más inquietante, aunque para muchos analistas, el estallido de una guerra atómica masiva es una posibilidad cada vez menos viable, por la imposibilidad de que haya un ganador.

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AUTOCONTROL N2 2

1. ¿Qué valores proyecta el capitalismo desde los Estados Unidos?

2. ¿Qué potencias quedaron enfrentadas después de la segunda guerra mundial?

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3. ¿Qué consecuencias tuvo el descubrimiento de la energía nuclear como arma de guerra?

4. Amigo periodista, entreviste a un historiador, investigador, profesor o experto en el tema planteado en la cartilla. Utilice para la entrevista el cuestionario que aparece a continuación del párrafo siguiente. Grabe un casete de su charla con el experto y redacte dos cuartillas a doble espacio. Comente la grabación y el texto resultante con el respectivo Círculo de Estudio y si considera necesario redacte nuevamente el par de cuartillas.

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Comparé sus respuestas con el contenido de los capítulos anteriores

y compleméntelas con la bibliografía sugerida en la cartilla NO 1

TRABAJO FINAL

NOMBRES Y APELLIDOS ----------- ------

DIRECCION

MUNICIPIO: ________ DEPARTAMENTO _______ _

NQ DE MATRICULA: --------- - - -------

ESPECIALIDAD:

BLOOUEMODULAR: _________________ _

UNIDAD NO ------ FECHA DE ENVIO: _ ___ _ __ _

Llene estos datos y envíelos junto con las respuestas a su tutor.

Además envíe la crónica sugerida en el primer autocontrol. La entre­vista grabada en el casete del segundo autocontrol junto con las dos cuartillas de resumen.

Conserve una copia de este trabajo para su archivo personal.

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1. Enumere las cinco clases de conflictos nacionales que se enmarcan dentro de las confrontaciones políticas actuales.

2. ¿Qué consecuencias dejó la Revolución Francesa en el plano intelectual?

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3. ¿Cuál era el principal objetivo de los Imperios del Siglo XIX? ¿Cuáles fueron los principales protagonistas?

4. ¿Cuál es la diferencia básica que se plantea entre el capitalismo y el socia­lismo con respecto a la economía?

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5. ¿Qué puntos neurálgicos de la guerra fría actual puede citar?

6. Enuncie brevemente cuál es su opinión personal sobre la evolución de la guerra fría.

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CARTILLAS DEL MODULO

FENOMENOS SOCIOECONOMICOS,

POLITICOS Y CULTURALES DEL SIGLO XX

l. El Mundo 2. Evolución de los Fenómenos Políticos del Sfglo XX 3 Evoluc1ón de los Fenómenos Culturales y Científicos 4 Colomb1a en el S1glo X X

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