Actualidad

3
Sebastiao Mendonça Ferreira: El Juicio Político de Dilma Perú 21- 22-09-2015 En todo país civilizado hay dos necesidades fundamentales: que el Poder Legislativo represente al pueblo, es decir, que la elección no sea falsificada, y que el pueblo influya efectivamente sobre sus representantes. Citando a Rui Barbosa, el Dr. Hélio Bicudo, jurista eminente y fundador del PT, y la Dr. Janaina Paschoal presentan a la Cámara de Diputados de Brasil un pedido de impeachment (juicio por incapacidad moral) a la presidenta Dilma Rousseff. El pedido se basa en la decisión del Tribunal Superior Electoral (TSE) de reabrir la investigación sobre las cuentas de la campaña presidencial del PT. También se apoya en la opinión de la Contraloría de la República (Tribunal de Contas da Uniao, TCU) de que Dilma ha distorsionado las cuentas nacionales para engañar a la población en las recientes elecciones y ocultar la gravedad de la crisis a los inversionistas. Según el documento , la presidenta era muy allegada a Paulo Roberto Costa, una figura central en el escándalo del Petrolão, y, siendo entonces presidenta del directorio de Petrobras, ella tiene responsabilidad directa en la compra fraudulenta de la Refinería de Pasadena. El documento también acusa al ex presidente Luis Ignacio Lula de tráfico de influencias a favor de la empresa Odebrecht en varios contratos internacionales, de mantenerse en el poder por medio de su influencia sobre Dilma Rousseff, y de haber recibido cerca de US$10 millones de empresas contratistas con la justificación de dar charlas en otros países.

description

Actualidad Peru

Transcript of Actualidad

Page 1: Actualidad

Sebastiao Mendonça Ferreira: El Juicio Político de DilmaPerú 21- 22-09-2015

En todo país civilizado hay dos necesidades fundamentales: que el Poder Legislativo

represente al pueblo, es decir, que la elección no sea falsificada, y que el pueblo

influya efectivamente sobre sus representantes. Citando a Rui Barbosa, el Dr. Hélio

Bicudo, jurista eminente y fundador del PT, y la Dr. Janaina Paschoal presentan a la

Cámara de Diputados de Brasil un pedido de impeachment (juicio por incapacidad

moral) a la presidenta Dilma Rousseff.

El pedido se basa en la decisión del Tribunal Superior Electoral (TSE) de reabrir la

investigación sobre las cuentas de la campaña presidencial del PT. También se apoya

en la opinión de la Contraloría de la República (Tribunal de Contas da Uniao, TCU) de

que Dilma ha distorsionado las cuentas nacionales para engañar a la población en las

recientes elecciones y ocultar la gravedad de la crisis a los inversionistas.

Según el documento, la presidenta era muy allegada a Paulo Roberto Costa, una

figura central en el escándalo del Petrolão, y, siendo entonces presidenta del

directorio de Petrobras, ella tiene responsabilidad directa en la compra fraudulenta de

la Refinería de Pasadena.

El documento también acusa al ex presidente Luis Ignacio Lula de tráfico de

influencias a favor de la empresa Odebrecht en varios contratos internacionales, de

mantenerse en el poder por medio de su influencia sobre Dilma Rousseff, y de haber

recibido cerca de US$10 millones de empresas contratistas con la justificación de dar

charlas en otros países.

Los acusadores listan una variedad de personas muy próximas a Dilma que resultaron

siendo participantes centrales del escándalo de Lava Jato, y afirman que esa

proximidad no era coincidencia, sino un indicio serio de que la presidenta era parte de

un esquema de corrupción cuyo propósito era y es eternizar la presencia del PT en el

poder.

Page 2: Actualidad

En la presentación del documento estuvieron congresistas de la oposición y líderes de

los movimientos políticos que realizaron las recientes marchas multitudinarias. Con

este acto formal, el 17 de setiembre se ha iniciado el proceso político del juicio de

Dilma Rousseff.

Juan Claudio Lechín: La caída de Rousseff Perú 21-20-09-2015

Ante las muchas manifestaciones que piden la dimisión de Dilma Rousseff por el

escándalo de Petrobras, veintiséis movimientos sociales han salido a defenderla,

enarbolando una consigna que vale la pena mirar: “contra el golpe”, sugiriendo una

posible conjura civil-militar. Nada indica esta posibilidad pero lanzada en la calle,

como al descuido, se vuelve sumamente operativa. La frase “golpe de Estado” detona

automáticamente sentimientos contrarios, moviliza memorias de las dictaduras y

encamina la búsqueda de culpables hacia lados totalmente distintos.

Una vez que la consigna se siembre como posibilidad en los medios de comunicación,

los propagandistas del régimen podrán convertirla en hecho verdadero, en la

explicación conspirativa detrás de las protestas contra Rousseff. O sea, este recurso

tiene la capacidad de invertir el escenario mediático. Nada movilizaría más a lo

políticamente correcto que Rousseff fuera víctima de un complot militar. Recordemos

que, alegando “golpe de Estado”, se demonizó la orden legal dictada por la Corte

Suprema de Honduras para sacar a Zelaya. Ecos del mismo trino, en su discurso de

anteayer, Cristina Fernández de Kirchner comparó las protestas contra Rousseff con

las realizadas contra Salvador Allende; preludio del golpe de Estado de 1973, en

Chile. “Tienen la marca de una agencia de un país del norte que suele intervenir en la

política de América del Sur”, dijo refiriéndose a la CIA, otro fantasma.

El bloque político del socialismo del siglo XXI empieza a reverberar la muletilla del

golpe de Estado para encubrir, esta vez, el escandaloso caso de corrupción de

Petrobras y evitar la caída de Rousseff, que para muchos es inminente.