Análisis valorativo de la homilía.

En cuanto a la fidelidad al mensaje, el presbítero parte de la Palabra de Dios, la cual

vino a iluminar un acontecimiento festivo celebrado por la comunidad eclesial ahí reunida,

a la vez que supo adaptar su mensaje a las expectativas y esperanzas existenciales de la

comunidad creyente. De ahí que supo ayudar a que los fieles cristianos entraran en el

discernimiento del designio de Dios para sus vidas.

La fidelidad a la liturgia es el segundo elemento al cual consideramos el presbítero

supo responder muy acertadamente. En el marco de la celebración de una fiesta mariana,

hizo de la misma liturgia y por ello la vida de los santos, la fuente de su predicación.

Logro introducir a los fieles en el momento y contexto celebrativo de tal modo que

aporto lo que estuvo a su alcance, para que pudieran vivir su celebración como un

acontecimiento de gracia y salvación.

Y por último el tercer elemento a discurrir es la fidelidad a la comunidad cristiana

de tal modo que se facilite a que esta pueda escuchar la Palabra y al ser interpelados

acogerlas en sus vidas. El presbítero pudo lograr el cometido de ser un instrumento para

que la Palabra de Dios bajase hasta la existencia cotidiana de quienes la escuchan.