ANÁLISIS CRÍTICO AL DESARROLLO ACTUAL DEL CONOCIMIENTO DE

ENFERMERÍA

MARIA MERCEDES DURÁN DE VILLALOBOS

El que se plantea en este ensayo es, naturalmente, un análisis muy parcial sobre

algunos aspectos del conocimiento de enfermería, y digo parcial porque para generar

una crítica epistemológica debería comenzar por el estudio de las visiones de

enfermería y su correspondiente interpretación de la teoría y la práctica y la

instrumentación de la misma lo cual llevaría algún tiempo para su desarrollo

adecuado. Sin embargo, se puede plantear un análisis que permita, de manera

sencilla y bajo una visión muy particular, la personal, ponderar la situación del

conocimiento general, y a la vez, situarnos en un contexto propio. Utilizaré, para dar

orden a la presentación un esquema propuesto por Burns y Grove en 1977 y por

Fawcett en 2005 que, aunque trata el asunto del conocimiento de forma diferente,

concuerdan en los elementos esenciales de la discusión.

Cuando se habla del conocimiento de enfermería, se habla del conocimiento

disciplinar, y adicionalmente se hace referencia a nuestra epistemología. La

epistemología, como es bien sabido, es el estudio y reflexión acerca de la naturaleza y

fundamentación del conocimiento. La epistemología es la teoría de y acerca de

nuestro conocimiento y además se relaciona con los métodos a través de los cuales

se genera y desarrolla el conocimiento (Meleis, 2007). Y agrega Willis Overton (1998),

que a la vez describe y prescribe lo que es aceptable o no como teoría y los medios

para la exploración conceptual en una disciplina

científica. Las disciplinas, y las disciplinas profesionales en mayor medida, deben ser

dinámicas y responder a los cambios y necesidades sociales y a las demandas y

transformaciones contextuales. Pero por más dinámica que se pretenda que sea una

disciplina, siempre debe mantener una perspectiva y valores que le aseguren

estabilidad y efectividad. Estos elementos le promueven la continuidad y el progreso.

Para enfermería, la calidad del cuidado continúa siendo la mayor prioridad y es el

concepto de cuidar el que ha guiado y permitido caracterizar sus virtudes y valores;

por este motivo la disciplina de enfermería tiene como eje central, para el desarrollo

de su cuerpo de conocimientos, el cuidado. Sin embargo, no debemos olvidar que

existe una gama de conocimientos adicionales que maneja enfermería, que tienen

relación con los roles profesionales y que se pueden considerar conocimiento

disciplinar.

Para comprender la empresa de mirar nuestra epistemología debemos preguntarnos:

¿CÓMO FUNCIONA EL MUNDO DEL CONOCIMIENTO DE ENFERMERÍA?

Siendo enfermería una disciplina profesional o disciplina práctica que discurre en el

mundo empírico (de la práctica), hay que aceptar que el pensamiento de enfermería

fluye en un continuo entre lo concreto y lo abstracto y lo concreto está delimitado por

aspectos o fenómenos tangibles, temporales e inmediatos de la realidad y por mucho

tiempo se aceptó que el pensamiento abstracto y reflexivo, así como la teoría, solo

eran útiles cuando mostraban efectos inmediatos (de Villalobos, 1998). Esta tendencia

la mantenemos actualmente en la educación y en la práctica, lo cual nos debe

conducir a cuestionar si verdaderamente nuestra práctica está respaldada por

verdadero conocimiento disciplinar o si, por el contrario, permanecemos anclados en

el mundo instrumental e ideal del pasado.

Pero la disciplina, si quiere mejorar la comprensión de los fenómenos de su dominio,

requiere del desarrollo del pensamiento abstracto. El pensamiento abstracto tiende a

la búsqueda y comprensión de patrones, significados, relaciones e implicaciones

filosóficas y este tipo de pensamiento es independiente

del tiempo y el espacio (de Villalobos, 1998). Es el pensamiento que surge y

evoluciona a medida que se aclaran y enriquecen los conceptos y las teorías del

mencionado dominio. Para lograr este tipo de desarrollo se requiere del

fortalecimiento del componente teórico de enfermería y de la ciencia de enfermería

que, estratégicamente, están ligadas al desarrollo de la investigación. Es decir, que es

la herramienta investigativa la que nos conduce por el continuo concreto - abstracto -

concreto que, en últimas, encapsula el conocimiento disciplinar. Pero para identificar y

enfocar las preguntas de enfermería, aquello que nos llama la atención porque no

tenemos respuestas satisfactorias al respecto (preguntas de investigación), no basta

el pensamiento concreto; se requiere del pensamiento abstracto y así podemos

asegurar que, para utilizar nuestra herramienta investigativa, requerimos de la

abstracción, aunque las preguntas de enfermería se originen en la práctica, es decir

en lo concreto. Siguiendo esta línea de pensamiento se puede afirmar que los

resultados de investigación son el enlace entre lo concreto y real con el desarrollo del

pensamiento abstracto.

Como lo propuso A. Einstein, la ciencia es el intento de hacer que la experiencia

caótica de nuestros sentidos corresponda a un sistema lógico de pensamiento, y la

ciencia de enfermería es ―la organización coherente de resultados de investigación y

de pruebas teóricas relacionadas con el campo del conocimiento de nuestra disciplina.

Es, a la vez, un proceso y un producto y delimita con rigidez los tipos de metodologías

investigativas que se pueden utilizar para la obtención del conocimiento. En última

instancia, la ciencia debe ser capaz de interpretar y explicar el mundo empírico y por

lo tanto las metas de la ciencia están relacionadas con descubrir nuevo conocimiento,

expandir y reformar el existente‖ (Andreoli y Thompson, 1977, p. 33 y 34).

Aunque se ha avanzado notoriamente en los últimos 30 años, enfermería muestra un

estado de ciencia incipiente, la réplica de investigaciones para producir teoría

predictiva y prescriptiva es todavía escasa, y la generación de resultados válidos y

confiables relacionados con la efectividad de las intervenciones o tratamientos de

enfermería no es suficiente para generar conglomerados de resultados que aceleren

los procesos de búsqueda y clarificación del conocimiento deficitario de

nuestra disciplina. Los conglomerados, convenientemente tratados a través de meta

análisis o meta síntesis, se convierten así en parte de la ciencia de enfermería (Burns

y Grove, 1997). En consecuencia, y dada la complejidad de los fenómenos del

dominio de enfermería, la investigación de enfermería debe asegurar la posibilidad de

mantener el continuo concreto - abstracto y permitir tanto la explicación y comprensión

de significados de sus fenómenos desde una perspectiva holística, como la

prescripción de sus tratamientos, y para ello requiere la utilización de métodos

investigativos cualitativos y cuantitativos respectivamente.

Por su parte, la teoría es una abstracción mental que procura explicar un segmento

del mundo empírico. Es la expresión de la percepción de una parte del mundo

empírico. Las teorías de enfermería tienen como función proveer marcos de referencia

para la práctica. Las teorías se pueden desarrollar de dos formas: a través de

resultados de investigación que fungen como punto de partida para que una o un

teórico organice los resultados de forma entendible y coherente, o la teórica o teórico

pueden utilizar el pensamiento abstracto, la experiencia o la intuición para explicar un

fenómeno. Un ejemplo del primer caso son las teorías de rango medio de Lenz y cols.

(1995, 1997) y Mishel (1988 y 1990), y del segundo podrían mencionarse modelos

conceptuales como los de Roy, Orem o Rogers.

La teoría es tan importante como la ciencia y se convierte en parte de la ciencia

cuando se prueba adecuadamente; a su vez, se convierte en parte fundamental de la

investigación. Enfermería tiene una historia de desarrollo teórico y un patrón de

teorización específicos y un tanto desconocidos en nuestra realidad.

Meleis (2007) sugiere que el proceso de desarrollo teórico de enfermería se remonta a

la década de 1950 y a partir de 1970 se trabajó en el desarrollo metateórico

1. Inicialmente se discutió y concluyó que el proceso de desarrollo teórico era

fundamental para el desarrollo del conocimiento de enfermería. Reed, Schearer y

Nicoll, en la cuarta edición del libro PERSPECTIVAS DE LA TEORÍA DE

ENFERMERÍA (2004), presentan una recopilación de artículos que apuntan a la

clarificación de estas discusiones. Esta propuesta ha evolucionado y en los comienzos

del siglo XXI, cuando nos encontramos con un conocimiento disciplinar mucho más

organizado y amplio, se reemplazó por la necesidad de mejorar el conocimiento

empírico y el énfasis generador de programas de investigación con la fortaleza

suficiente para reforzar el desarrollo del conocimiento.

2. Existió la propuesta sobre la necesidad de enfermería de aprender las estrategias

para el desarrollo teórico a partir de otras disciplinas (Hardy, 1974 y Harris, 1971), ya

que enfermería no había participado, hasta el momento, en esta actividad.

3. Se generó suficiente literatura sobre la forma de escribir teoría y sobre las

estrategias disciplinares utilizadas en este empeño, ya que existió un vacío creado por

las teóricas al no explicar adecuadamente cuáles fueron las estrategias utilizadas para

el desarrollo de sus propuestas teóricas; y a finales del siglo XX y comienzos del XXI

no existe todavía un análisis claro sobre las estrategias utilizadas para el desarrollo

teórico disciplinar. Fawcett, (2005), (Rayle - Alligood, y Marriner-Tomey, 2007),

(Meleis, 2007) y Parker (2006), en sus respectivos libros sobre evaluación y utilización

de diversos modelos conceptuales y teorías de enfermería, explican los sustentos

filosóficos y las estrategias inductivas o deductivas seleccionadas para formular la

teoría, pero estos referentes no son suficientes para eliminar el bache señalado

anteriormente.

4. En los escritos tempranos, entre 1971 y 1979, fue evidente la idea de utilizar, con

exclusividad, una sola estrategia para el desarrollo teórico, de acuerdo con Meleis

(2007) quien cita a Hardy 1971, Jacox 1974, Johnson, 1974, Newman 1979. Tal vez

estas posiciones fueron modificadas en su momento, pero inicialmente reflejan una

posición un tanto radical sobre el desarrollo teórico. La utilización de múltiples vías

para este fin es aceptada más recientemente (Meleis, 2007), (Stevens,1998).

5. También existió, y existe todavía en nuestro medio, la idea de que el desarrollo

teórico es una actividad "elitista", para plantear y reforzar en los medios académicos y

que la práctica clínica no tiene ninguna relación con estos avatares del conocimiento

disciplinar ya que el "trabajo diario es lo real" y no requiere de ellos.

6. Algunos piensan que enfermería siempre ha trabajado con teorías de otras

disciplinas y que lo que se hace es ampliar el campo de aplicación de la teoría

prestada, con lo cual, implícitamente, se acepta que la práctica disciplinar no requiere

de teoría práctica propia que guíe la propia práctica. Es decir, que enfermería no

requiere desarrollo teórico. Afortunadamente esta posición ha cambiado y

actualmente existe un amplio grupo de enfermeras y enfermeros que están de

acuerdo en la necesidad de teorías que promuevan la mejor comprensión de los

fenómenos de la disciplina y expliquen y faciliten las intervenciones con un respaldo

de conocimiento científico.

7. La necesidad de preparar enfermeras y enfermeros en prácticas avanzadas apunta

a utilizar, en mayor medida, las ciencias biomédicas En consecuencia, enfermería se

torna más biológica y posiblemente esto se refleja en el tipo de teorías propias que

maneja, pero también es evidente que el componente psicosocial y espiritual ha

impregnado el interés de enfermería, y en los últimos 20 o 25 años han surgido

posturas teóricas enfocadas en la comprensión de fenómenos del área. Lo ideal, en

un futuro cercano, sería poder registrar una serie de teorías más holísticas e

integradoras, con un enfoque de ciencia biosicosocial y espiritual. En este orden de

ideas se puede asegurar, entonces, que la mayoría de las publicaciones científicas de

enfermería tienden a responder a las orientaciones de la práctica y la educación y, por

ello, en gran medida, el énfasis se hace en dar respuestas de orden biomédico

aunque éstas no hagan referencia alguna a las necesidades del conocimiento

disciplinar. Este concepto no es generalizable, en la actualidad, ya que es notorio el

avance en indagación enfocada a fenómenos sobre calidad de vida, niveles de

funcionamiento,

percepción de situaciones de salud, adaptación, niveles de energía, fenómenos

percibidos culturalmente..., por nombrar algunos temas de interés.

8. Finalizando el siglo XX emergió una tendencia importante en el discurso teórico de

enfermería, tendiente a eliminar las restricciones y prejuicios anteriores, facilitando la

emergencia de una nueva raza de teorías, las teorías de rango medio (Blegen, Tripp-

Reimer) y (Smith y Liehr, 2003) y facilitando el abordaje de fenómenos de formas

mucho más integradas de conocimiento (Cutcliff y McKenna, 2005).

Finalmente se puede sugerir, con relación al desarrollo teórico, que existe en la

actualidad un acuerdo sobre la necesidad de proponer múltiples teorías que expliquen

los fenómenos de enfermería y que aseguren la autonomía y eficiencia de la práctica.

Eso conduce a la necesidad de identificación clara de los fenómenos mencionados y

de avanzar en la investigación que dé respuesta a las necesidades teóricas de

descripción y prescripción. El futuro se visualiza fascinante pues la necesidad de

desarrollo teórico se enfocará en la descripción y aclaración de conceptos propios del

dominio disciplinar con la reinvención de nuevos ambientes, el bienestar, las

interacciones, las transiciones, vivir con enfermedades, presencia de la familia,

seguridad, calidad de vida, terapéutica de enfermería, entre otros temas de

importancia (Meleis, 2007). Sobra decir que el desarrollo teórico debe hacerse

presente en las áreas funcionales de administración, enseñanza y aprendizaje.

Retomando entonces la idea del conocimiento de enfermería podemos afirmar que la

relación entre la ciencia y la teoría es elemento fundamental para el crecimiento y

fortalecimiento del desarrollo disciplinar o del conocimiento de enfermería. Esta

relación nace del hecho común de que tanto la ciencia como la teoría son los

elementos fundamentales para la comprensión del mundo empírico; cada una de ellas

promueve el conocimiento de la realidad y, en este sentido, igualmente se acercan un

tanto más a la ―verdad‖, si es que a ella podemos acceder en algún momento, a

través de asociaciones y conjeturas. A raíz de esa situación, Benoliel

(1977) comenta que quienes dan mayor importancia a la ciencia pueden restar valor a

las teorías, o quienes aseguran el valor de las teorías pueden minimizar el valor de la

sabiduría que generan los resultados de la investigación. Pienso que el equilibrio en el

punto medio es el ideal porque la ecuanimidad de pensamiento es aquello que facilita

la evolución de las disciplinas.

Pero el conocimiento de enfermería va un poco más allá de la ciencia y la teoría. Este

elemento de nuestra epistemología, ―el conocimiento‖, tiene diversas facetas y

también se utiliza de diferentes formas, siendo el orden el hecho imperante porque

ese orden permite "conocer" de acuerdo con los requerimientos coyunturales y las

necesidades de la práctica. Por ejemplo: yo sé poner inyecciones o yo sé estadística

descriptiva o yo sé cómo manejar la teoría de Roy o hacer un metaanálisis.

Además de estos aspectos de conocimiento, entendido como se maneja el término,

enfermería identifica cuatro patrones fundamentales de conocimiento, es decir, cuatro

formas como se expresa el conocimiento que respalda la práctica disciplinar:

empírico, ético, estético y personal (Carper, 1978). La experiencia, percepciones y

memorias juegan un papel fundamental en el conocimiento pero no son conocimiento.

Lo que esperamos del conocimiento es que sea un reflejo mas o menos correcto de la

realidad, por esto se requiere verificación de nuestra información. Así como la

investigación es un medio para la validación de las experiencias, percepciones y

memorias, las evidencias derivadas de la investigación no se convierten

automáticamente en teorías o conglomerados útiles para la generación de teorías y

ulterior conocimiento científico. Debemos elaborarlas de acuerdo con la realidad.

(Burns y Grove, 1997).

En enfermería se requiere que ese cuerpo de conocimientos existente sea

aprehendido, incorporado y asimilado, por los miembros de la profesión

independientemente, y colectivamente por la profesión misma. Este cuerpo de

conocimientos debe guiar el pensamiento y el comportamiento profesional de cada

individuo de manera particular. Deberá guiar el ulterior desarrollo e interpretación de la

ciencia y la teoría de la disciplina de enfermería. El aumento y el refinamiento del

cuerpo de conocimientos de enfermería nos dará, primero, la

confianza de ―saber lo que estamos haciendo y nos dará las bases para el

reconocimiento de la ciencia de enfermería como insustituible dentro del desarrollo de

las ciencias de la salud, nos hará visibles con nuestros clientes y nos hará visibles

para la sociedad‖ (Burns y Grove, 1997, Meleis, 2007).

En el último escalón del mundo del conocimiento de enfermería y en el peldaño más

abstracto se encuentra la filosofía. La filosofía nos brinda una amplia explicación del

mundo. Brinda unidad y significado a la realidad y propone un marco de referencia,

dentro del cual ocurren el pensamiento, el conocimiento y el hacer. Este marco de

referencia tiene influencia en nuestro conocimiento, de tal forma que la utilización de

la ciencia y la teoría para entender el mundo empírico están marcadas por esa

filosofía. Esto nos lleva a cuestionarnos sobre la realidad y a pensar si existe una

verdad absoluta o si ésta es relativa, a pensar si la realidad es única o si existen

varias realidades para cada persona, o si el conocimiento, en última instancia, se

debe conducir y desarrollar de una única manera o si, por el contrario, podemos y

debemos aceptar que según la posición filosófica, el conocimiento se obtiene y valida

con abordajes diferentes.

Al mundo lo modifica la filosofía de igual manera que unos anteojos modifican nuestra

visión y por ello las percepciones reciben esta influencia. Asimismo modifica la forma

como se identifican las preguntas de la disciplina, y por ello, el rumbo que toma el

conocimiento. Si lo que vemos o pensamos no concuerda con las ideas de la verdad o

de la realidad, si no encajan con nuestro sistema de valores, lo pasamos

desapercibido y esos aspectos no serán motivo de interés y estudio.

Los aspectos filosóficos que comúnmente manejamos las enfermeras y enfermeros

tienen que ver con la interpretación del humano como un ser holístico, racional y

responsable, con la certeza de que las personas buscan estar saludables, y la

consideración de que la salud es mejor que la enfermedad, al igual que la importancia

de la calidad de la vida y por ello un buen cuidado de enfermería es aquel que facilita

y refuerza los patrones de salud de la gente.

Pero para concluir es necesario recordar que en enfermería, aún los conceptos más

abstractos de la filosofía se deben ligar de manera visible con los elementos

más concretos del conocimiento, como son los indicadores empíricos que son los

conceptos más concretos que maneja enfermería en la práctica e investigación. Y

para utilizar el cuerpo de conocimientos como respaldo de la práctica debemos

incorporar todos los elementos que dan forma al conocimiento. Es decir, se debe

adoptar una visión filosófica de enfermería, ser conciente de los patrones que la

disciplina maneja, utilizar teorías de diferente nivel, manejar la ciencia y, por supuesto,

identificar cuál es la realidad empírica. Si se elimina un elemento, se elimina el

significado. No se puede ser totalmente abstracto o concreto, sólo teórico o científico;

no se puede ser un experto clínico y desechar el resto del mundo de enfermería. Nada

de esto se debe hacerse si se es una verdadera enfermera o enfermero (Burns y

Grove, 1997 y Fawcett, 2005).

¿PERO QUÉ SUCEDE CON EL ESTADO ACTUAL DEL CONOCIMIENTO DE

ENFERMERÍA EN NUESTRO MEDIO?

Después de hacer una revisión de las revistas indexadas de enfermería (Aquichan,

Avances de enfermería, Investigación y educación en enfermería y Actualizaciones de

enfermería), se puede apreciar que no existen registros que permitan hacer un

análisis referenciado del asunto. Sin embargo, el estado de desarrollo académico, los

programas curriculares, la práctica y el tipo de contenidos de los materiales que se

presentan en los eventos científicos de enfermería permiten apreciar ese estado. Pero

es importante aclarar que lo que plantearé no será una crítica; son algunas reflexiones

que nos permitirán hacer un autoanálisis individual de nuestra situación y que podrán

facilitar la ideación de las estrategias que debemos poner en práctica para acelerar

nuestro crecimiento disciplinar.

1. EL ESTADO DE DESARROLLO ACADÉMICO

El pensamiento teórico y el desarrollo teórico están íntimamente ligados con el

desarrollo académico. Las disciplinas maduras, y con tradición antigua, facilitan un

contexto intelectual que nutre y promueve la indagación académica, al igual que las

proposiciones teóricas y la teoría proponen un marco de referencia para la indagación.

Boyer (1990), mencionado por Meleis (2007), propone que el contexto académico se

refuerza y hace visible en la medida que se incrementa la calidad de los programas

académicos de educación superior y de maestría y doctorado, ya que lo académico se

relaciona con el trabajo concertado de la empresa investigativa y este trabajo

concertado de investigación en enfermería requiere, como nutriente fundamental, el

apoyo y el bagaje de enfermeras y enfermeros investigadores clínicos. Si no se

generan condiciones para que se desarrollen estas articulaciones entre las

actividades de indagación científica, no se promueven las posibilidades de

descubrimiento, integración, aplicación y traducción para la enseñanza. Importante

aclarar que esta última posibilidad no se debe confundir con el aprendizaje tradicional,

por más activo y motivador que éste sea. La traducción para la enseñanza hace

referencia a la exposición de los resultados de la indagación a la publicación, crítica a

los estándares de calidad y control y debe ser acumulativa, es decir sustentada con

otros trabajos académicos.

Para respondernos las preguntas relacionadas con el desarrollo académico y tener

una prospectiva para el desarrollo, se requiere el análisis de cada elemento

mencionado en el párrafo anterior.

¿CÓMO SE HA DESARROLLADO NUESTRO PENSAMIENTO TEÓRICO?

Como se vio anteriormente el pensamiento teórico y la utilización de la teoría son

aspectos fundamentales para la consolidación del conocimiento científico que

respalda la práctica. El pensamiento teórico se desarrolla a partir de las

características de la educación, no se adquiere de forma automática. Igualmente, la

utilización de la teoría se aprende a partir de la formación profesional. Esa utilización

no se hace visible porque se desee, requiere de conocimiento y de su

utilización, y cuando se logra esta integración, la teoría deja de ser el elemento

extraño del salón de clase y se convierte en parte de la práctica porque el profesional

la utiliza casi instintivamente. Y es entonces cuando surge la pregunta de mayor

interés ¿cuál es el tipo de teoría que se enseña? ¿Es teoría de enfermería? ¿o no

enseñamos teoría de enfermería porque no la manejamos y nos sentimos más

cómodos con otras teorías ajenas que no están facilitando la comprensión de los

fenómenos de enfermería bajo la óptica delimitada por el dominio particular de la

disciplina?. Este análisis toca delicadamente los contenidos curriculares de pre y

posgrado. Los contenidos hacen la diferencia entre un currículo disciplinar o uno

desdibujado, sin identidad de pensamiento y con experiencias clínicas atomizadas o

repetitivas, y además hace que la investigación se moldee de acuerdo con los

problemas disciplinares, explicados por la teoría de enfermería.

¿CÓMO SE ENCUENTRA LA INDAGACIÓN DISCIPLINAR?

Este punto guarda relación con el tipo de fenómenos de indagación que interesan

principalmente a enfermeras y enfermeros docentes, clínicos y al énfasis del trabajo

de las líneas y grupos de investigación de instituciones docentes y de servicio. Al

plantear estas discusiones miraremos si los grupos docentes y académicos se

interesan o no por los fenómenos de enfermería, o si, por el contrario, los intereses

investigativos apuntan a la clarificación de fenómenos tangenciales a la disciplina.

Adicionalmente se determina si el tipo de investigación y de investigación formativa

que se plantea para los estudiantes, en los diferentes niveles curriculares, colaborará

en el fortalecimiento de líneas y grupos de investigación, y si los proyectos de

investigación responden a necesidades intelectuales y de mejoramiento de la práctica

disciplinar, lo cual facilita el cambio de políticas de la práctica y la docencia, o si

pretenden responder a criterios meramente burocráticos.

¿CUÁL ES EL ESTADO DE LA ARTICULACIÓN ENTRE LOS INVESTIGADORES

DEL ÁMBITO DOCENTE Y LOS INVESTIGADORES CLÍNICOS?

Al ser la práctica la ―razón de ser‖ de enfermería, es importante que los resultados

de la investigación y de la réplica investigativa generen núcleos de interés para su

modificación y mejoramiento. Esta posibilidad es adicional al trabajo que se puede

llevar a cabo en instituciones docentes que trabajan proyectos de investigación con

enfermeras o enfermeros del ámbito clínico, y tiene la gran ventaja de que los

estudiantes serían quienes se apropien de la práctica investigativa, aceptándola como

un elemento más de la rutina profesional.

¿CÓMO ESTÁ EL DESARROLLO DE NUESTRAS PUBLICACIONES CIENTÍFICAS

Y BIBLIOGRÁFICAS?

El acceso a la literatura de enfermería no es muy amplio. Esa dificultad se debe a dos

motivos básicos: no escribimos y la cultura de nuestros profesionales los hace preferir

literatura de otras disciplinas. Por lo tanto, tendemos a llenar los vacíos del

conocimiento con literatura ajena al interés disciplinar y este fenómeno tiene dos

consecuencias, la primera es que los contenidos curriculares se apoyan en

conocimientos de otras disciplinas, y la actualización del conocimiento de enfermería

o estados del arte son, de manera general, poco conocidos por las enfermeras y

enfermeros.

Las revistas indexadas en Colombia son muy pocas (cuatro). Si se piensa en el

número elevado de instituciones educativas y de servicio, se puede apreciar la baja

productividad científica. Sería interesante tratar de hacer metaanálisis o metasíntesis

de los contenidos y mirar las tendencias que proyectan.

Las fuentes bibliográficas (edición de libros y textos) son textos traducidos o en otros

idiomas. No existen teorías propuestas por autores locales…

En fin, este breve análisis nos hace pensar en la situación de ―nuestro‖ conocimiento

disciplinar, no en el de enfermería.

Pero también nos hace recordar algunos planteamientos muy importantes para el

crecimiento:

―Debemos retomar la idea de la articulación docencia servicio a través de la

estrategia de investigación‖

―Mantener el pluralismo filosófico es esencial para el crecimiento de enfermería‖

―Recordar que se deben asimilar ciertas propuestas de desarrollo académico, antes

de generar ciertos híbridos disciplinares, por la mera noción de mostrar avances

inciertos‖

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Metodología de Investigación desde la perspectiva fenomenológica: su

contribución para la construcción de conocimiento en salud.

María Soledad Rivera. PhD, MSP.

Profesora, Escuela de Enfermería, Pontificia Universidad Católica de Chile.

La traducción de la fenomenología como filosofía a un método de construcción de

conocimiento en salud, data del siglo pasado. Algunos ejemplos en el campo de la

psiquiatría son los aportes de Carl Jaspers, en psicología, el psicoanálisis de Sigmund

Freud y la psicología analítica de Carl Gustav Jung, en la sociología, Alfred Shultz, y

en la antropología cultural, Clifford Geertz, por nombrar algunos.

En el siglo pasado hubo una explosión de producción de conocimiento comprensivo

en salud, que aportó enormemente al desarrollo de una mirada profunda sobre los

fenómenos humanos. Sin embargo, la explosión tecnológica ofreció mayor desarrollo

al bienestar social en menos tiempo, a más bajo costo y con mejores resultados, lo

que implicó la sustitución de esta ciencia más comprensiva y respetuosa de la

experiencia y procesos humanos en salud, por otra explicativa e intervencionista

sobre el cuerpo humano y sus procesos. Esta visión se centra en la cura del cuerpo-

cosa, cuando está afectado por una enfermedad y proporciona una experiencia de

poder que afirma la identidad exitosa de médicos y enfermeras y disminuye la

angustia que emerge inevitablemente ante cualquier evento que pone en riesgo la

vida humana. De esta manera, el estilo controlador sobre los factores de riesgo para

el desarrollo de enfermedades actúa directamente a través de la formación de los

profesionales de la salud, los espacios sociales sanitarios, las políticas públicas y los

estilos de producción de conocimiento. Respecto a esto último, se genera un

movimiento mundial sobre medicina basada en evidencia, para filtrar la información

generada por estudios de investigación y garantizar que los resultados son

generalizables, confiables y validos y distinguirla de aquella que no lo es. El problema

es que este tipo de saber, en su gran mayoría, se refiere sólo a los problemas

mensurables de la enfermedad, como tratamientos farmacológicos, quirúrgicos,

procedimientos diagnósticos, etc. excluyendo lo que las personas viven y significan

respecto a sus enfermedades, diagnósticos, tratamientos, fármacos, etc.

La información comprensiva en salud es vital para poder comprender el otro lado de

esta realidad: la perspectiva de los usuarios, sus valores, sus creencias y su cultura,

así como las culturas de los prestadores de salud, entre otras cosas. Estos

fenómenos no son mensurables, sólo podemos comprenderlos, y los métodos para

producir este tipo de saber son los llamados genéricamente métodos cualitativos de

investigación. Este tipo de métodos se apoyan en supuestos distintos de su mirada

frente a la realidad, de los métodos cuantitativos Se percibe la realidad múltiple, a las

personas con un mundo particular en el cual definen sus vidas y toman sus

decisiones, en interacción constante con el medio sociocultural familiar, en su trabajo

y sociedad, elaborando, construyendo y reconstruyendo significados frente a las

experiencias de vida, construyendo realidades múltiples en un mundo dinámico,

globalizado, y por lo tanto ofreciendo múltiples perspectivas de elección y atribución

de significados. En este mundo complejo es imposible imponer una mirada

mecanicista sobre la vida, es decir, es imposible pretender controlar lo incontrolable

que constituye la ontología de la vida y la salud humanas.

La pretensión de controlar fenómenos es tarea de la mirada positivista de la ciencia,

expresada en el método científico, que reduce lo complejo a lo simple fragmentando la

realidad, separándola en unidades reducibles susceptibles de ser investigadas. De

esta realidad escapa totalmente la posibilidad de adentrarse en los misterios de la

vida en múltiples pedazos, pues se percibe la parte como equivalente del todo y no el

todo en sí mismo, irreductible. Se ha ido perdiendo la perspectiva del Todo humano y

se ha ido deformando hasta el infinito, generando malestar en las personas, quienes

poco a poco se vuelen mas autónomas y reclaman por su derecho a una salud

integral y digna.

Esta medicina y enfermería mecanicistas están demostrando ser insuficientes para

proporcionar una salud integral a la población. Es aquí donde el saber comprensivo es

retomado por las ciencias de la salud, y especialmente por Enfermería, por su

capacidad de percibir al sujeto como el todo que es, sin buscar explicaciones a su

conducta, mas abriendo la percepción a los significados que ellos atribuyen a sus

experiencias de salud, de enfermedad, de tratamiento, de adherencia a tratamientos,

de su poder de decidir, etc. Este saber ha demostrado proporcionar mayor sustento

para las prácticas de cuidado de promoción, prevención y rehabilitación de la salud,

así como el ejercicio de liderazgos y visiones inclusivas de los ciudadanos en la

promoción de su salud como tarea de todos.

Este saber comprensivo está siendo fuertemente desarrollado, especialmente desde

que las enfermeras obtienen sus doctorados en todo el mundo, está

publicado y sustenta prácticas humanizadas de cuidado que hemos denominado

cuidado comprensivo en salud.

En América Latina, la investigación fenomenológica ha sido desarrollada fuertemente

en Brasil en los últimos 20 años y presenta la tendencia a apoyarse en las

fenomenologías originales de Edmund Husserl (1857-1938), Martin Heidegger (1889-

1976) y Maurice Merleau-Ponty (1905-1980), según fueron retematizadas en las

perspectivas de los profesores Joel Martins y sus discípulos, Maria Aparecida Bicudo

y Vitoria Esposito, asi como Lucila e Maria Ines Fini, Ozeneide Machado y Luiz Lima,

todos fundadores de la Sociedade de Estudos e Pesquisa Qualitativa, y responsables

por las publicaciones sobre abordaje fenomenológico en las investigaciones en

educación de la época.

Las investigaciones realizadas en Enfermería han demostrado su contribución para la

comprensión de las experiencias vividas por los usuarios y enfermeras; entre ellas

destaco las de Boemer (1988,1991), Gelain (1991), Barbosa (1993), Gomes (1993)

Colvero (1994), Marcolino (1994) Veríssimo, (1994), Corrêa (1995), entre otras.

Quienes han contribuido al desarrollo y aplicación del método fenomenológico en

Brasil es el dr. William B. Gomes (1997), investigador del Instituto de Psicología de la

Universidade Federal de Rio Grande do Sul, quien ha trabajado la perspectiva de la

psicología fenomenológica desarrollada por Amadeo Georgi de la Duquesne

University, y de la fenomenología semiótica, desarrollada por Richard Laningan

(1972), de la Southern Illinois University, cuyo fundamento se basa en la teoría

fenomenológica de Husserl y de Merleau-Ponty. Gomes ha centrado sus estudios en

la experiencia consciente del alcohólico que está en búsqueda de rehabilitación, de

adolescentes que consumen alcohol; la experiencia consciente de adolescentes

portadores de enfermedades orgánicas crónicas; la experiencia consciente de madres

de tres generaciones sobre sus preocupaciones con la vida familiar y con la educación

de los hijos (Gomes, 1997). Investigadores de la psicología como Marques (1989),

Kude (1997a. 1997b), de la Pontificia Universidad Católica de Rio Grande do Sul, y

Forghieri (1989),de la Universidad de São Paulo, han sido conducidos, formados e

inspirados por el profesor Joel Martins et al. (1984, 1990), quien es reconocido como

fundador de esta perspectiva de investigación en Brasil.

La metodología de investigación fenomenológica esta enraizada en la filosofía

fenomenológica de Husserl, Heidegger y Merleau-Ponty, que se articuló como visión

alternativa a la positivista reinante de la época. Algunos filósofos

fenomenólogos europeos emigraron a Estados Unidos y allí operacionalizaron el

discurso filosófico en métodos de investigación y con ello posibilitaron la construcción

de conocimiento comprensivo sobre los fenómenos humanos. Algunos de ellos, de

acuerdo con Streubert & Carpenter (1994, 1999, 2006), son Van Kaam (1959) y

Amadeo Georgi (1975, 1985), de la Duquesne University; Colaizzi (1978) y Van

Manen (1984). En enfermería, las doctoras que han desarrollado investigación y han

construido modelos teóricos humanistas de enfermería son Paterson & Zderad (1976),

Rizzo- Parse (1987) y la propia Streubert & Carpenter (1991. Estos modelos son fieles

a la tradición de las fenomenologías de Husserl, Heidegger y Merleau-Ponty,

conservan lo esencial de la perspectiva fenomenológica y aplican los métodos de

investigación de Georgi, Colaizzi y Van Manen.

La fenomenología como trayectoria De investigación

El termino "fenomenología" viene de phainomenon, que significa aquello que se

muestra como es, lo manifiesto, lo revelado, y de logos, que significa discurso, esto

es, aquello que es transmitido por el habla, por la palabra. Significa dejar que las

cosas se manifiesten como lo que son, sin que proyectemos en ellas nuestras propias

categorías (Heidegger, 1974; Espósito, 1994). Son las cosas que se nos revelan en lo

que son, a través de las múltiples formas de manifestarse y de expresarse en lenguaje

verbal, corporal, plástico, musical, etc. Sin embargo, esto que se muestra, al ser

percibido por otra consciencia, siempre será perspectiva, ya que siempre habrá otro

sujeto para el cual el fenómeno se mostrará de una manera diferente (Bicudo, 1994 ).

Por su parte, Bicudo cita a Joel Martins cuando transcribe: "fenomenologia é, neste

século, um nome que se dá a um movimento cujo objetivo precípuo é a investigação

direta e a descrição de fenômenos que são experienciados conscientemente, sem

teorias sobre sua explicação causal e tão livre quanto possível, de pressupostos ou de

preconceitos" (Bicudo, 1994: 15).

Merleau-Ponty (1971), basado en Husserl, creador de la fenomenología, interroga en

el prefacio de su texto Fenomenologia da percepção: “¿ O que é fenomenologia? Sua

descrição reflete o estado aberto desta questão até hoje, porque, em essência, a

fenomenologia desvela-se na medida que passa o tempo, estando em permanente

desenvolvimento. Ela mesma é caminho aberto de interrogação na medida em que o

assunto de que trata sua investigação é a experiência vivida no mundo, no dia-a-dia

da existência. E revelar o mistério do

mundo... reaprender a ver o mundo" (Merleau-Ponty, 1971: XV). O que é

Fenomenologia? pregunta Merleau-Ponty: "é o estudo das essências‖, es una

"filosofia que recoloca as essências na existência; uma filosofia para a qual não se

pode compreender o homem e o mundo senão a partir de sua facticidade, é uma

filosofia transcendental, que coloca entre parêntesis as afirmações da atitude natural

para entendê-las; porém é também uma filosofia para quem o mundo está sempre ali,

antes da reflexão começar – como uma presença inalienável – e todos seus esforços

estão concentrados em resgatar um contato direto e primitivo com o mundo". Es

además de eso, continúa el autor "a tentativa de uma descrição direta de nossa

experiência tal como é, sem levar em conta a sua gênese psicológica e as

explicações causais do cientista…" (Merleau-Ponty, 1971). en América Latina

La fenomenología es descrita por Merleau-Ponty (1984) como filosofía y método. Por

su parte Martins (1984) y Bicudo (1994), la perciben como una manera de verse a sí

mismo, a los otros, y a todo aquello con lo que tenemos contacto en la vida.

"Fenomenologia é um sistema de interpretação que nos ajuda a perceber e conceber

a nós mesmos, nossos contatos e intercâmbios con os outros, e tudo o demais nas

propias experiências, numa variedade de formas..." (Martins, 1984: 75).

El foco central de la fenomenología es la experiencia vivida del mundo, en el día-a-

día. Schutz, acorde con Streubert (1994), describe el mundo del día-a-día como la

esfera total de las experiencias de un individuo que está circunscrito por los objetos,

personas, y eventos presentes en la vida. En otras palabras, es esta experiencia

vivida que presenta al individuo lo que es verdad o real en su vida. Además de eso, es

la experiencia vivida que da significados a cada percepción del individuo respecto de

un fenómeno particular y a las influencias internas e externas al individuo.

Según Streubert & Carpenter (1994), como método de investigación, la fenomenología

es un camino para pensar y percibir la experiencia vivida. Su meta es describir esa

experiencia vivida. Su trayectoria histórica comienza con Brentano (1838-1917), que

definió el concepto de intencionalidad de la consciencia, en su clásica frase: "la

consciencia es siempre consciencia de algo”. El destaca la experiencia de

direccionalidad de la consciencia para los objetos y la experiencia pasó a ser

entendida como la expresividad de la consciencia. Segun Streubert, (1994), Merleau-

Ponty (1956) agregó que la percepción interior es imposible sin la consciencia

exterior, que el mundo, como conexión del fenómeno, es anticipado

en la consciencia de mi unidad y es la manera de realizarme en consciencia.

Entretanto, no es posible escuchar sino alguna cosa, o creer sin creer en algo.

Edmund Husserl (1857-1938) y Martin Heidegger (1889-1976) son los fundadores de

la fenomenología. Heidegger, discípulo de Husserl, desarrolla su pensamiento

siguiendo el de su maestro. Junto a Hegel y Nietzsche, son considerados como los

pensadores más creativos y fecundos del siglo, y han inspirado las escuelas de

pensamiento más revolucionarias como la fenomenología, el marxismo y el

psicoanálisis. Los temas centrales desarrollados en su visión del mundo, según

Streubert & Carpenter (1994), Echeverría (1993), y Gandolfo (1995), son los

conceptos de esencias, intuición y reducción fenomenológica.

Las esencias se refieren a los elementos relativos al ideal, o al verdadero significado

de algo. Ellas son aquello que hacen que una cosa sea lo que ella es. Las esencias

son conceptos que dan una comprensión común al fenómeno sobre investigación, en

la medida en que estando ellas contenidas en el fenómeno, pueden revelarse al

observador. Todo fenómeno tiene su esencialidad. Aprehender esas esencias es

tarea del fenomenólogo, porque él interroga las esencias de los fenómenos. Las

esencias emergen aisladas y en relación entre ellas. Ellas son la unidad básica de

cualquier fenómeno. Dice Bicudo al respecto: "O mostrar-se não ocorre em um

primeiro olhar o fenômeno, mas paulatinamente, dá-se na busca atenta e rigorosa do

sujeito que interroga e que procura ver além da aparência, insistindo na procura do

característico, básico, essencial do fenômeno (aquilo que se mostra para o sujeito)"

(Bicudo, 1994: 18).

Intuir como comprensión eidética es la interpretación de los significados implícitos en

la descripción del fenómeno sobre investigación. El investigador observa el fenómeno

en diferentes condiciones y realiza varias descripciones hasta que las unidades de

significado o esencias del fenómeno se le revelen. En este proceso intuitivo, también

llamado insight (acto de percibir lo que se manifiesta a la consciencia), el investigador

es orientado por un sentido, por una búsqueda de significados que él intuye y detecta

en los discursos que revelan las intenciones expresadas o articuladas. El sujeto de la

investigación atribuye significados y lo que se busca es la comprensión de estos

significados, o sea, se trata de una meta-comprensión del fenómeno buscado (meta

comprensión es lo que Husserl denomina cogito cogitatum, o sea, pensar lo pensado),

lo que constituye una "interpretación‖ (Streubert & Carpenter, 1994: 32-33).

La reducción fenomenológica es el retorno a la comprensión original del fenómeno en

investigación. En palabras de Heidegger, es el retorno "a las cosas

mismas " (Heidegger, 1974: 38). Es el proceso de aproximarse al fenómeno, a su

esencialidad que se me revela de manera ingenua, directa, real. Para eso el

investigador tiene que hacer un paréntesis y dejar en suspensión todo conocimiento

previo, teórico o experiencial, que pueda direccionar la percepción del fenómeno. Para

Husserl (1931,1965), la reducción permite describir la vida de la consciencia en su

encuentro original con el mundo. Es el camino para "ir a las cosas en sí-mismas‖.

Entretanto, para Merleau-Ponty, la reducción completa es imposible, ya que como

individuos somos un ahora, mas enraizado en un pasado experiencial y vueltos para

un futuro, en íntima relación con el mundo. La experiencia de vida está contenida en

ser-en-el-mundo-con-los-otros y con-las-cosas. Entretanto, como parte del proceso de

reducción, el investigador debe identificar sus nociones preconcebidas e ideas sobre

el fenómeno a investigar. Una vez identificadas, debe dejar en suspenso esas ideas,

separándolas de la consciencia. Esta reducción debe ser realizada durante todo el

transcurso de la investigación, en cada fase de la descripción y análisis para

aprehender el fenómeno tan puro como sea posible, es decir, lo mas fiel a su esencia,

a como se muestra a la conciencia del investigador (Streubert & Carpenter, 1994).

Con respecto a la reducción fenomenológica existen varias discrepancias en la

literatura. Los fenomenólogos brasileños de tradición ortodoxa europea, parecen ser

más estrictos con respecto a la "reducción ", dejando de lado la revisión exhaustiva de

la literatura existente respecto al fenómeno en estudio. Algunos no se documentan

hasta el final del estudio, cuando discuten sus descubrimientos o resultados con la

literatura. Sin embargo, el marco de referencia teórico-filosófico fenomenológico debe

ser explicitado, porque existen diferencias de matices y perspectivas en las visones de

Husserl, Heidegger, Merleau Ponty y otros,,como Marcel, Schultz, etc. Convertir el

texto filosófico en referencial teórico de una investigación es un trabajo arduo y

necesario para definir el contexto interpretativo del fenómeno en estudio. De esta

manera, podemos observar diversas reconstrucciones teórico-fenomenológicas y que

muchas veces resultan difíciles de comprender para las prácticas enfermeras, mas

acostumbradas al ejercicio del pensamiento operativo. En este sentido, es apreciable

el esfuerzo de fenomenólogos mas contemporáneos como Giorgi, Van Kaan y Van

Manen, que siguiendo la tradición americana, han traducido el método de análisis

fenomenológico a procedimientos de análisis y lenguajes más operativos para hacerlo

aplicable y comprensible a cualquiera que lo lea.

Todavía con respecto a la revisión de la literatura, una postura más flexible es la

señalada por Marques (1989), quien opina: "a abordagem teórica segue a tradição

fenomenológica, mas se supõe que o investigador faça uma revisão das pesquisas

anteriores sobre o assunto, a fim de ter consciência clara sobre o 'estado da arte'

naquela área de conhecimento. Naturalmente esta não é uma exigência da

abordagem fenomenológica, mas um pressuposto da pesquisa científica em geral.

Antes de poder identificar quais são meus "achados" tenho que saber o que outros

investigadores já contribuíram para a compreensão do assunto em questão"

(Marques,1989: 33). Actualmente varios artículos han sido publicados a propósito del

movimiento de salud basado en evidencia, que apelan a la necesidad de que los

diseños metodológicos y los resultados de investigaciones cualitativas sean

redactados siguiendo los pasos clásicos del método de investigación tradicional, para

que sean comprendidos y valorados por los lectores. En este sentido sugieren que, de

no ser así, es muy difícil que ellos sean considerados como contribución al

conocimiento e incluidos en las bases de datos de la enfermería y la medicina

basadas en evidencia. En otras palabras, para que las investigaciones cualitativas

puedan ser comprendidas y sus resultados sirvan para mejorar la práctica de salud,

deben ser comprendidas por el público científico; de otra manera, continúan

publicados en revistas de poca circulación, y su valioso aporte queda reducido a los

pocos que leen estas revistas.

Gabriel Marcel (1889- 1873), Merleau-Ponty (1905-1980) y Sartre (1905-1980), son

representantes franceses de la tercera fase del movimiento fenomenológico, según

Streubert & Carpenter (1994). Ellos desarrollan más los conceptos de ser-en el-mundo

y encarnación. Creen que la experiencia vivida es dada en el mundo percibido y esto

es lo que debe ser descrito. Munhall (1998: 24) explica esos conceptos claves como:

"La encarnación ( embodyment) explica que la consciencia de ser-en el -mundo se da

en el cuerpo. Yo soy mi cuerpo. El cuerpo da la oportunidad de percibir al mundo a

través de los sentidos: se mira, se huele, se toca, se escucha, se piensa, se siente. La

expansión de la consciencia se da en el cuerpo, en cada tiempo y cada individuo en

particular. Esa consciencia es perspectival e individual ya que se basa en la historia,

en el conocimiento del mundo, y hasta en la abertura (openness) de la persona para

el mundo. Comprender la experiencia consciente de otro es considerar los

significados tal como los individuos los interpretan." Munhall (1994:24)

¿QUE ES EXPERIENCIA CONSCIENTE?

Husserl escogió la experiencia consciente como foco central de su teoría,

presentando la fenomenología como una técnica para la interrogación de la

experiencia consciente a través de la descripción de su contenido. Su objetivo era

clarificar la articulación entre lo real, la experiencia y la consciencia. El método

fenomenológico posibilitaría la separación de los preconceptos, o sea, toda la historia

significada de las memorias, juicios, valores, deseos e imaginaciones.

Según Gomes (1997:308), la "experiencia consciente trata de una capacidad y de una

habilidad comunicacional". Como capacidad, ella se hace clara a partir de la

significación de los acontecimientos que la constituyen. Los objetos de la consciencia

toman sentido en la contextualización de las interconexiones que aparecen

organizadas en forma de estructura. Esta estructura, en cuanto experiencia

consciente del mundo vivido, es una matriz social y una expresión de los constructos

mentales (Shütz, 1972), un mundo en el cual la vida cotidiana se desenvuelve y un

lugar donde se presentan nuestras metas y objetivos, y contiene los entrelazamientos

del Yo con lo otro y con el mundo (Merleau-Ponty, 1945/1971). La experiencia

consciente se constituye y se expresa a través del cuerpo. El cuerpo es el centro

donde se vislumbran todas las perspectivas. Es la unidad de síntesis entre los objetos

dados a la consciencia y la consciencia de estos objetos en cuanto experiencia.

El proceso de la experiencia consciente se inicia como sensaciones indiferenciadas

en una configuración emergente de un cierto orden. Su apariencia trae un sentido que

revela un todo. Este todo es anterior a sus partes mas no es un todo ideal. En

palabras de Gomes (1997):― Se trata de una apariencia momentánea que trae en sí

una cierta coherencia o que está a la procura de esta coherencia en sí misma. Tiene

un status de versión y, siendo así, es siempre provisoria, se organiza según sus

propias leyes que son independientes de la voluntad. Un ejemplo señalado por

Merleau-Ponty es cuando una combinación dada aparece para mí de un cierto modo

y, al moverme de un punto para otro, percibo que mi primera apariencia era

engañosa" (Gomes, 1997: 309).

Desde la perspectiva de la fenomenología semiótica de Lanigan, (1992), Gomes

(1997) define a la conciencia como "un movimiento sinérgico (acción simultánea;

asociación de varios factores que, contribuyendo para una acción ordenada,

aumentan su eficiencia), en la reversión entre percepción y expresión. La reversión se

muestra tanto en la similitud (identidad) de la percepción y de la

expresión del propio sujeto que percibe su expresión y expresa su percepción, como

en la alteridad de la expresión de la percepción en la relación con otro individuo. Esta

circularidad entre la similitud de la percepción y expresión de sí mismo y entre la

alteridad de la expresión y de la percepción con otro, explicita tanto a la subjetividad

cuanto a la objetividad. Explicita la subjetividad de un individuo cuya experiencia

intrapersonal del silencio y del pensamiento crea su percepción de sí mismo y cuya

experiencia de usar algún sistema de lenguaje crea la expresión de su privacidad. Por

contraste, explicita la objetividad de la experiencia mutua de dos o más personas que,

a través de algún tipo de lenguaje común transforman, por consiguiente, la propia

percepción y la propia expresión. La circularidad entre percepción y expresión

produce el sentido de la consciencia inmediata y toda la actividad de la consciencia

mediata, en cuanto una unidad, en la cual se organizan los procesos cognitivos

(pensar), afectivos (sentir) y connativos (hacer juicios) (Gomes, 1997:309-310).

Desde una perspectiva comprehensiva y hermenéutica, la consciencia (como modo y

entendimiento de una sustancia o realidad) se da a conocer a través de señales en la

forma de gesto y palabra (habla, fala ). Gestos y habla se organizan en sistemas de

códigos que, desde el punto de vista de la comprensión son tomados en su totalidad.

Gestos y palabras (hablas, falas), constituyen los mensajes de la consciencia situada

en el cuerpo. Es siempre una relación entre un yo que habla y un otro que escucha,

entre un yo que se muestra en gestos y un otro que ve el movimiento, o también entre

un yo y sus pensamientos. Tenemos, así, en el discurso del gesto y de la palabra, una

evidencia empírica de la consciencia, y en la tarea de la comprensión de este discurso

tenemos un método, que es la fenomenología. El foco de este abordaje para la

consciencia es la diferenciación de la significación de un objeto (experiencia) en

cuanto presentación y representación (Husserl, 1907/1986 en Gomes, 1997: 311).

¿CÓMO TENER ACCESO A LA EXPERIENCIA CONSCIENTE?

Siguiendo el análisis de Gomes (1997), el acceso a la experiencia consciente se

realiza de diferentes maneras a lo largo de los tiempos: la dialéctica de Hegel hace un

análisis de los conceptos según el modelo de tesis-antítesis-síntesis. En este ejercicio,

la reflexión se desarrolla progresivamente a través de la superación de

contradicciones del sujeto y del objeto, prevaleciendo la verdad como una idea

absoluta. Wundt la estudió mediante métodos tomados en préstamo de las

ciencias naturales. Brentano y Dilthey sugirieron que el método debería ser

descriptivo, comprehensivo y hermenéutico (interpretativo). Sin embrago, fue Husserl,

con su proposición del método fenomenológico, quien estableció los tres pasos

reflexivos para el estudio de la experiencia consciente.

ESTRATEGIA METODOLÓGICA DE LA INVESTIGACIÓN DE LA EXPERIENCIA

CONSCIENTE

El primer paso del método fenomenológico de Husserl sugiere la descripción del

objeto de la experiencia como si se tratase de un primer encuentro. Ese primer paso

es conocido como epoché, el tradicional poner en suspenso o entre paréntesis todo lo

que se conoce acerca de él. El objeto debe ser descrito como si el observador no

supiera absolutamente nada a su respecto, dejando de lado sus preferencias,

memorias sugeridas por el objeto en descripción, deseos, imaginaciones y valores.

Tampoco debe estar preocupado por descubrir las causas del objeto o las

justificaciones de su existencia. El cuestionamiento viene a continuación: ¿Como

podré apartar toda mi historia de vida que enmascara subyacente y sutilmente mi

experiencia consciente?

Concluida la primera descripción, se pasa al segundo paso, que es la exploración o

investigación del relato escrito de la descripción. Esta reflexión se hace interrogando

al texto de modo de explorarlo exhaustivamente. Luego el investigador verifica que

partes identificadas en la descripción pueden ser retiradas sin comprometer la

estructura del sentido o la esencia del fenómeno. Por estructura, se entiende al

conjunto mínimo de información que continúe garantizando la permanencia de la

identificación del fenómeno. O sea, aquello que es esencial, característico, básico

para la identificación del fenómeno. Estas unidades son llamadas de unidades de

significado por algunos fenomenólogos (Kude, 1997: 188-189; Fini, 1994:31;

Machado, 1994: 41; Fini, 1994: 54-55; Gomes, 1992). Esta segunda descripción

muestra la nueva consciencia del objeto de la experiencia. El objeto está definido, las

partes identificadas (unidades de significado) y las distinciones entre lo esencial y no

esencial indicadas.

El tercer paso revela el direccionamiento de la consciencia para aquel determinado

objeto de la experiencia. Este direccionamiento, que es lo mismo que intención, es

entonces el sentido que aquel objeto asume para la consciencia. En la teoría de

Husserl, se llega a este sentido a través de las varias modalidades de los procesos

mentales. Estos procesos son conocidos como afección (yo siento),

connación (yo juzgo) y cognición (yo pienso). Husserl procuraba en este último paso

de su método, un Yo sumergido en la experiencia. Asi, la investigación llega a su fin

con el descubrimiento de la intencionalidad del otro. En otras palabras, la descripción

final del fenómeno de la experiencia sería la consciencia del investigador (sí-mismo),

sobre la intencionalidad de lo investigado (otro) y lo que posibilita la experiencia del

acceso a la experiencia consciente de otro (alteridad) es la inter subjetividad – una

subjetividad común a dos personas. (Gomes, 1997).

La fenomenología existencial de Merleau-Ponty (1945/1971), según Gomes (1997)

preservó los tres pasos del método fenomenológico de Husserl; sin embargo,

Merleau-Ponty toma como punto de partida el lugar que Husserl definió como punto

de llegada. En la fenomenología existencial, la primera preocupación es el

descubrimiento de la intencionalidad, o el descubrimiento del sentido del objeto de la

experiencia para la consciencia. Husserl desarrolló los tres pasos de su método para

conocer la intencionalidad del otro; Merleau-Ponty, al contrario, parte de la búsqueda

de la intencionalidad del otro para recolocarlo en el mundo. Esto revela un viraje

importante en el campo teórico. Husserl se dejó prender por el idealismo de un ego -

transcendental, esto es, de un yo que existiese por definición apriorísticamente.

Merleau- Ponty estaba en la búsqueda de un yo que existiese en el mundo.

El primer paso del método fenomenológico existencial describe al mundo como vivido

por el sujeto, esto es, su experiencia consciente. Este mundo vivido preexiste a

cualquier análisis que se pueda hacer de él, está ahí para ser conocido como es, sin

necesidad de mayores explicaciones o justificaciones. La descripción se concentra,

por lo tanto, en una determinada realidad como vivida por alguien y hace de esta

vivencia su objeto de estudio. La tarea de describir desvela progresivamente la

postura de un sujeto en relación al mundo en que vive, revelando su modo de existir.

El resultado es la definición de un sentido, de una perspectiva, o sea, de una

intencionalidad (Gomes, 1997: 317).

El segundo paso del método de Merleau-Ponty se relaciona con el primer paso de

Husserl. Se toma la descripción de un cierto todo, que es la experiencia de una

realidad o mundo vivido por alguien y se procura entender en sí misma. Nuevamente

se procura hacer una reducción y alejar las interferencias de los afectos, cogniciones

y connaciones. De esta manera, se distinguen las partes esenciales de las no

esenciales (unidades de significado).

El tercer paso sobrepasa el método fenomenológico de Husserl. No se limita a la

definición de un sentido o intencionalidad, pues especifica un determinado modo

de ser y de relacionarse con el mundo. La fenomenología existencial entiende la

experiencia consciente como una visión del mundo que trae un sujeto–cuerpo ( sujeto

corporizado ) con capacidad de acción. En este sentido, el método tiene potencialidad

para el cambio. No se trata de una descripción pasiva de las situaciones vividas, sino

de una descripción para entender mejor determinadas situaciones, algunas veces

críticas, mirando sus posibilidades de transformación. Para quien actúa en el mundo

de la salud, es de vital importancia en la elección de este método versus otros. Todo

estudio, en la perspectiva de salud, mira hacia el dinamismo de la vida y de las

experiencias humanas y se interesa por las modificaciones de los comportamientos,

de los estilos de vida cuando esos son estructurados para mantener las

enfermedades, como ocurre en el caso de enfermedades mentales y crónicas. Gomes

(1997).

Entretanto, Gomes sugiere que existen algunas cuestiones del método que merecen

clarificación. ¿Cómo esos objetos de la experiencia se presentan a la consciencia y

cómo la consciencia los expresa en la experiencia? Lejos de quedarse en el juego

aparente del cambio de palabras, ocurre que esta circularidad existe en la relación

objeto-consciencia-experiencia, de manera tal que un objeto ora es experiencia, ora

es consciencia y al revés. Los objetos de la experiencia se presentan a la consciencia

en forma de lenguaje y en forma de lenguaje se especifican en la experiencia. Se trata

de un concepto amplio, incluyendo los lenguajes verbal, gestual, plástico, musical, etc.

Según Gomes (1997), los fenomenólogos siempre reconocerán la pertinencia del

lenguaje para la fenomenología. Husserl vió en el lenguaje la corporificación del

sentido y la manifestación de la voluntad. Merleau-Ponty definió el lenguaje como la

mediación entre la experiencia y la consciencia. En este sentido, la experiencia

consciente pasa a ser entendida como un sistema significativo de expresión en el

discurso y en la acción.

CONSIDERACIONES FINALES

El método fenomenológico ha demostrado ser prolífico para producir conocimiento

respecto a fenómenos relacionados con la salud de las personas. Al interrogar sobre

los significados de la experiencia vivida por las personas en situaciones de salud y

enfermedad, nos ha permitido construir conocimiento comprensivo sobre nuestros

clientes con un método reconocido de investigación, lo que ha permitido

construir una ciencia comprensiva del cuidado enfermero. Los resultados de las

investigaciones cualitativas mejoran la calidad del cuidado pues se focalizan

directamente en el interés por aquello que las personas viven particularmente, y de

este modo, es posible comprender en profundidad los significados atribuidos a sus

experiencias. Esta forma de hacer ciencia humana complementa el saber obtenido

sobre fenómenos mensurables de la salud y la enfermedad, proporcionando una

mirada integral a la persona en familia y en comunidad. Promover la salud, las

fortalezas humanas y el autocuidado, implica estudiar al ser humano en su naturaleza

múltiple, lo que nos desafía necesariamente a conocer y aplicar variedad de métodos

según la variedad de problemas que se nos presentan en salud. Las metas sanitarias

de promoción de la salud, del bienestar, y de la calidad de vida, no pueden lograrse

sólo con un saber explicativo, pues éste tiene que reducir la experiencia humana

compleja y multidimensional a varios fragmentos de problemas mensurables. La

mirada integral a lo humano sólo es posible mediante métodos cualitativos de

investigación, de los cuales la fenomenologia es el fundamento. Enfermería, desde el

siglo pasado viene discutiendo estas cuestiones, generando conocimiento

comprensivo y publicando sus resultados en varias revistas indexadas. Por ejemplo,

en las últimas décadas, este conocimiento comprensivo está publicado en revistas ISI,

como por ejemplo, Qualitative Health Research, publicada por SAGE, cuya editora.

Janice Morse, Enfermera PhD, es la Directora del Internacional Institute for Qualitative

Methodology de la University of Alberta, Canadá. En Brasil, la mayoría de las

investigaciones publicadas en las revistas son cualitativas, y en España, la Fundación

INDEX en Granada, se fundó con el propósito de capacitar, publicar y ordenar en una

base de datos los resultados de investigaciones cualitativas producidas en Ibero

américa, en idioma español (CUIDEN). En América Latina, la producción de saber

comprensivo en Enfermería está relacionada con la obtención de doctorados y el

desarrollo de programas de postgrado, y de esta manera, el rostro de Enfermería de

la región, se va haciendo visible en la producción de saber comprensivo en salud,

desde las perspectivas socioculturales genuinas y comienza a contribuir con este

conocimiento al desarrollo de la disciplina de Enfermería y de una profesión que se

inspira y seduce con su esencia de proporcionar cuidados humanizados a la

población.

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