Apócrifa 23 - El rostro

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AÑO 7 No. 23 MÉXICO www.apocrifa.com.mx

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Contemporary art magazine, the face edition.

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AÑO 7 No. 23

MÉXICO

www.apocrifa.com.mx

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ELROSTRO

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ELROSTRO

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vv

Director generalAnubis Mendoza

EditorMatcarrag

Directora de arteKarla Florendain

DiseñoMatcarragAnubis Mendoza

ColaboradoresMaribel CastorenaBrisa BarbosaZahira RicoJave José AguileraYorcho GómezLester Chapman

Ilustración de PortadaRita Mitzuco Sumita Deshecha

MarketingGriselda González

Contacto [email protected]

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Apócrifa art magazine es una revista digi-tal independiente que muestra el trabajo de artistas y escritores que participan en la actualidad del planeta.Parte del conte-nido de este ejemplar ha sido autorizado por sus autores, salvo el obtenido por terceros u otro medio, esto sin ninguna intención de alteración o difamación.

Total libertad para cualquier espectador hacer uso adecuado de esta revista siem-pre y cuando respete el crédito de los au-tores participantes o de esta publicación.

ISSN en trámite

Publicación trimestral Septiembre - Noviembre

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EDITORIAL

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El rostro, rey absoluto de las más divinas proporciones. En el presente número de Apócrifa, vamos más allá de las apariencias, desentrañamos el rostro huma-no en una expedición hacia los semblantes que con-forman su imaginario en el arte contemporáneo. Nos buscamos y nos encontramos con la mayor precisión y nos perdemos igual, con la mayor ambiguedad.

EDITORIAL

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ÍNDICE

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12202834425870788898

104112

Sinuhé VillegasLola DuprÉJules JulienKim ByungkwanJavier MarínAlvaro Tapia HidalgoDavid Samuel sternKwon Kung YupCarlos Álvarez MonteroTebo nikos gyftakisBen Smith

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Matgarrag

José Aguilera

Yorch Gómez

Maribel Castorena

Jave

Lester Chapman

Griselda GonzálezCarmona

Brisa Barbosa

Zahira Rico

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Rita Mitzuco Sumita Deshecha

Karla Florendain

Anubis Mendoza

Los rostros

deApócrifawww.apocrifa.com.mx

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SinuhéVillegas

Sinuhé Villegas (Guadalajara, Jalisco 1978), artista autodidacta con trayectoria de ca-torce años, fusiona técnicas vanguardis-tas para crear un discurso propio.La pregunta para el acercamiento especí-fico que leerás aquí, es: ¿cuál es la pro-puesta estética y filosófica en los siete lienzos que componen Autorretratos, la consistencia del alma?, obra expuesta en el mes de septiembre 2012 en la Galería

Juan Soriano de la Casa de la Cul-tura Jalisciense Agustín Yáñez. En Autorretratos, la consisten-cia del alma podemos apreciar de inmediato el uso de la técnica puntillismo, con trazos expresio-nistas y cubistas. Sin embargo, lo que nos intriga son los rostros anónimos, he ahí en donde co-mienza nuestro recorrido.

La pérdida del rostro en la obra pictórica Autorretratos, la consistencia del alma

“Todo pintor pinta la cosmogonía de sí mismo”Salvador Dalí

MEX

txt Zahira Ricoimg Yorch Gómez

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Autorretrato escuchando a pendereckiÓleo sobre papel

26.5 x 35.5 cm

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Autorretrato con paisajeÓleo sobre papel26.5 x 35.5 cmIMG: Archivo

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El retrato, en el siglo XIX, nos señala Rodrí-guez Moya (2010) tuvo un impacto hacia “la representación de rostros anónimos, a par-tir de la investigación sobre la expresión del alma del individuo” (p. 49), es decir, esta au-sencia en el arte contemporáneo, “se difumi-na la personalidad del artista” (p. 50), ya no importa el reconocimiento de los rasgos, ni los aspectos que determinan una identidad.En el caso de esta obra se trata de autorre-tratos, es decir, de una indagación hacia el artista en la cual se reafirma su autoría. El signo característico que encontramos es un relato inacabado, lo cual, permite que el es-pectador lo complete, entablando así una relación estrecha con el cuadro.Estas dos personas (artista-espectador), máscaras de la imagen, adoptan una posi-

ción de dobles distorsionados: el espectador se asume como otro al mirarse. Sin embargo, el pintor rompe con el acto narcisista debido a la pérdida del rostro. Y ¿qué hay de la consistencia del alma? Platón nombró de esta forma a la problemática de la existencia y de la realidad del hombre, algo verda-dero: la muerte. Esta representa-ción dentro de otra como alegoría del pintor, la identificamos median-te el discurso estético.El expresionismo juega con una po-sición significativa, ya que revela una tragedia interior, esta, impac-ta al estado emocional del espec-

ReferenciaRodríguez Moya, Inmaculada (2010). El retrato contemporáneo. Del realismo a la pérdida del rostro. En Revista de

Estética y Arte contemporáneo. Número 2, pp. 47-57.

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Autorretrato como pintor flamencoÓleo sobre papel

26.5 x 35.5 cm

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tador. Apoya el simbolismo de los estados del alma. Es el grito a favor de la humanidad.Por otro lado, el cubismo como estética de la des-composición de planos y de la distorsión de los trazos, brinda puntos de vista caleidoscópicos. De esta manera la dialéctica de realidad e ilusión se hace presente. Rechaza la semejanza de la natura-leza humana.Finalmente, la técnica del puntillismo mendiante la descomposición de los tonos, formula el maquilla-je perfecto para connotar lo monstruoso.Sinuhé Villegas, arma un discurso complejo que invita a reflexionar sobre el universo del pintor contemporáneo, del hombre mismo, de la muerte, así como de la mirada posada en la encarnación del humano donde el tiempo lo destruye todo.

[email protected]

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Autorretrato en viernes santoÓleo sobre papel

26.5 x 35.5 cm

AutorretratoÓleo sobre papel26.5 x 35.5 cmIMG: Archivo

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LolaDupré

Double DCollage20.8 x 29.5 cm

GBR

txt Anubis Mendoza

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Un diálogo asentado en el desplazamiento de las ani-llas del dedo pulgar y anular, en la prolongada fricción de dos hojas que acentúan la agudeza de las tijeras. La fantástica visión de una reinterpretación pictórica que conlleva a la metódica disección de fotografías que se transfiguran en formas que distorsionan y desfiguran a la imagen original.

La receta es breve, impresiones en papel (varias co-pias en diferentes tamaños), pegamento y tijeras para explorar nuevas formas y contornos que tras-cienden las representaciones convencionales del re-trato. El meticuloso trabajo de la ilustradora británica responde a una fascinación personal por lo grotesco y lo extravagante, Lola Dupre encuentra en el resultado atípico de la deformación un detonante de la expresi-vidad, de la sensualidad y del humorismo.

Los collages de Lola le han acompañado desde su in-fancia, en el trajinar de un país a otro paralelamente ha experimentado con el papel maché, la animación stop-motion, el cine, la fotografía y la escritura. En la actualidad, ella misma se restringe al ámbito tra-dicional de cortar y pegar, se niega a importar a este minucioso y laborioso proceso cualquier tipo de mo-dificación digital, prefieriendo los resultados tangi-bles del papel.

En su misión como creadora, al crear un diálogo, de-tona deslumbrantes ilusiones ópticas dignas de un caleidoscopio.

LolaDupré

Double DCollage20.8 x 29.5 cm

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Exploded Abraham LincolnCollage20.8 x 29.5 cm

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Exploded Al CaponeCollage20.8 x 29.5 cm

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http://www.loladupre.com/

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Exploded Marilyn Monroe #4Collage29.5 x 20.8 cm

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Exploded Louise BrooksCollage20.8 x 29.5 cm

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Exploded Audrey HepburnCollage20.8 x 29.5 cm

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JulesJulien

Face #2Digital

80 x 80 cmFRAtxt Karla Florendain

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http://www.julesjulien.com/

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The blue series.

Rostros estoicos y absolutos que van más allá de una franca declaración humanoide extraída entre el 460 y el 482 nm del espectro visual humano; los rostros de la “The Blue Series” lográn en el espectador a un testigo cautivo voluntario o no, de las miradas y expresiones oníricas, permanentes y misteriosas, desde un infinito mundo vectorial.Así es como JULES JULIEN nos invita a conocer su pro-yecto, muestra del dominio antropométrico a través del arte digital. Estudio detallado del rostro humano, que nos sumerge en un satinado baño profundo y purpúreo.Es precisamente ésta acertada composición monocro-mática la que cuestiona sin titubeos la realidad, juzga el efecto visual nacido entre lo verdadero y falso de un rostro vulnerable, frágil, de pronto inexpresivo y frío, pero delicado y suave como también indiferente. En esta singular tesis del rostro, encontramos una ex-posición múltiple de emociones a través del juego de trazos, formas, dimensiones y sombras del rasgo hu-mano; talante único entre los seres vivos; incompara-ble e irrepetible. Será imposible cualquier tritanopía ante ésta experien-cia visual-etérea, que nos lleva a una re-valoración del 5to. Color del círculo Newtoniano; lejos, mucho más le-jos del simple vocablo de origen árabe, persa o sanscri-to; y reconocer en su propia estética, el Azul.

Face #1Digital80 x 80 cm

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Face #3Digital80 x 80 cm

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Face #4Digital80 x 80 cm

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Kim

B

yun

gkw

an

¿Al? ¿Marilyn? ¿Adolf o Charles? Uno piensa que reco-noce los rostros transformados que uno presencia, caminamos por las calles y no nos damos cuenta que somos nosotros mismos divididos en miles, millones o según el más reciente cálculo 7.2 mil millones de personas. Es increíble que desfigurando el rostro, o apenas escondiéndolo solo mostrando algunos ras-gos distintivos, uno pueda caer en cuenta que al quien ves en el cuadro es a ti mismo y a la vez a alguien más que es otro y que con esfuerzos percibes quién es.

KOR

txt Jave

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Drawing 1940 #4Acrílico sobre tela91 x 116.8 cm

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Actor series #11Acrílico sobre tela60.6 x 72.7 cm

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Face madness #8Acrílico sobre tela78 x 118 cm

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Nos saturan de sus imágenes, nos bombardean a cual-quier lado que dirijamos la vista, espectaculares, re-vistas, paradas de autobús, aeropuertos, supermer-cados, creamos un hábito asqueroso de ver nuestros rostros sin ver a la persona, solo percibimos la imagen que quieren proyectar, una imagen construida y falsa, se erigen sobre nuestra humanidad, la condiciona, y hace pensar a muchos que podemos ser más que sim-ples humanos, se les adora, como en la antigüedad se adoraba a Apolo, Dionisio o Afrodita, se les rinde culto como a Yahweh, nos han cegado que dudo si seríamos capaces de reconocer a un cuerpo desnudo si lo vié-ramos, a una persona sincera y honesta, amante de la verdad. ¿¡Diógenes, dónde estás!?

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Face madness #2Acrílico sobre tela92 x 116 cm

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Face madness #7Acrílico sobre tela91 x 117 cm

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En realidad más que resaltar al Yo, focaliza el So-mos, nuestros rostros están tan bien delineados que pensamos que yo soy muchos, cuando reali-dad solo somos yo o yo soy somos, pero eso es tema para cuando nos enfrentemos ante el cuadro y coincidamos en nuestras miradas cruzadas. Como tip la obra susurra: Deja de observarte en el espejo y mejor ve tu figura en el agua del río, o del lago.

http://www.kimbyungkwan.com/

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Face madness #4Acrílico sobre tela60.6 x 72 cm

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Cabeza de mujer, 2000Resina de poliéster con semilla de amaranto

158 x 110 x 75 cm

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ESTUDIO DE JAVIER MARÍN.México, DF.Noviembre 05. 2014.16:30 hrs.

Morada de silenciosos personajes que te vigilan con la mira-da, rostros imponentes que nacieron de las manos de Javier para quedarse junto a él, co-habitando el mismo espacio….

K: ¿Cómo te gustaría que se recordara a JAVIER MARÍN?

J: Me gustaría que sobreviviera mi obra y que fuera de tal modo clara, de tal modo reflejo de mí mismo, de tal modo que me hiciera mantenerme presente, que me hiciera permanecer; que la gente pudiera leerme a través de mi obra escultórica y también en mi trabajo que no tiene que ver con la escultura. Me gustaría que me leyeran y conocieran no mejor ni peor de lo que soy ahora, si no lo que se pudiera decir de mi aquí y ahora, de alguna manera lo más cercano a quien soy; pues mi trabajo soy yo, lo que hago son auto retratos, son testimonios personales. Aunque no sea de manera presencial, estaré en mi obra que soy yo mismo.

JavierMarín

MEXentrevista Karla Florendainimg Javier Marín

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K: Tú apariencia es la de un hombre sereno, pero al ser tu trabajo un autorretrato surge la duda inminente. ¿Qué hay ahí, dentro de Javier?.

J: Todo lo que se ve en mi obra y más, mi obra es solo la punta del iceberg de lo que hay, pues todos somos un cúmulo de conocimiento de tantas generaciones y generaciones atrás; no es que cada ser humano surja como generación espontánea; venimos a completar y a ser parte de todo lo que existió antes que nosotros, un antecedente genético, cultural, histórico y por-que no espiritual.Soy un poco de todo eso, por ello el por qué mis esculturas son un poco clásicas, un poco trá-gicas, recuerdan tantos momentos del ser hu-mano, de la propia historia del hombre; porque todo está ahí, dentro de mí. Cada una de mis piezas no es un invento, no es algo nuevo, es mi herencia, mi historia, mis vi-vencias, mis genes, yo soy mismo; yo creo que todos los seres humanos somos uno solo, “Todos somos uno mismo”.

K: Partiendo entonces de la premisa “Todos so-mos uno mismo”; ¿Todos nos podemos encontrarnos en la escul-tura de Javier Marín?

J: Totalmente, es parte mía, pero también es parte tuya, somos humanos y compartimos lo mismo, vamos hacia el mismo lugar, la mar-cha de la humanidad es hacia una misma meta.

“venimos a com-pletar y a ser par-te de todo lo que existió antes que nosotros”

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Cabeza Bruselas II, 2010Resina de poliéster con tabaco52 x 30 x 27 cm

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Cabeza Bruselas III, 2010Resina de poliéster con tabaco

54 x 26 x 24 cm

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Cabeza Bruselas I, 2010Resina de poliéster con tabaco

47 x 28 x 24 cm

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Mi obra es el reflejo del hombre de hoy y el de siempre; yo soy ese hombre. Por eso es que en estas esculturas, en estos rostros cualquiera puede vivir el encuentro de sí mismo y su his-toria.

K: ¿Te has encontrado en la obra artística de alguien más?

J: Por supuesto, he estado frente a alguna obra de arte que casi me hace caer de rodi-llas; fuerte encuentro de absoluta identifi-cación, casi se me doblan las piernas. Eso es lo que pasa con el arte cuanto es tan libre y está fuera de muchos esquemas, y preocupaciones, cuando es una expresión li-bre, profundamente humana y honesta, pun-to de encuentro entre todos, donde todos nos identificamos el uno con el otro, somos idénticas, es la frecuencia en la que vibra-mos al unísono. El arte nos acerca a través de esta frecuencia y nos sensibiliza; es en-tonces cuando entendemos al de a lado, más allá de explicaciones, más allá de prejuicios, más allá de temas culturales, hay algo que nos encuentra de una manera muy profunda a los seres humanos. El arte es ese vehículo que nos lleva hasta el punto donde te en-cuentras con la gente, donde se acaban las fronteras, donde ya no hay diferencias, don-de coincides: “Es verdad, todos somos uno”.

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Cabeza Bruselas I, II, III, 2010Resina de poliéster con tabaco

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Cabeza de mujer, 2002Barros de Zacatecas y Oaxaca40 x 38 x 38 cm

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K: Iconos aspiracionales. ¿Tú, como quien quieres ser de grande?

J: No recuerdo querer ser como nadie, la verdad, no. Tal vez de niño recuerdo querer ser trapecista (Risas); no quiero ser como nadie en particular, pero al mismo tiem-po como tantos personajes, no sé, como tanta gente, pues siempre te sorprendes, siempre hay alguien con quien quedarte con la boca abierta, el ser humano es im-presionante. Me gusta mucho la gente que avanza, los que van adelante, los que van en busca del conocimiento, siempre a la vanguardia.

K: ¿Y tú qué buscas?

J: Lo mismo que todos, entender algo de la realidad en la que vivimos, yo no sé si alguien lo tenga claro pero yo no, (Muchas risas), ¿Porque es tan diferente para unos y otros?, ¿Porque estamos aquí?, ¿Estamos en el camino correcto?. Me gustaría encontrar todas esas respuestas. Creo que como a todos, me cuesta trabajo entender cosas tan simples y cotidianas.Y hablando de artistas por ejemplo, me es incompren-sible como algunos siendo tan talentosos son total-mente desconocidos, en cambio otros que no, son tan privilegiados.

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Cabeza de mujer, 2000Bronce a la cera perdida

158 x 110 x 75 cm

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K: Con más de tres décadas de trabajo en el mundo del arte; ¿Haz encontrado ya la respuesta a alguna de tus inquietudes?.

J: No, yo sigo igual, con las mismas dudas; yo creo que el artista hace lo que hace en un intento de explicarse muchas cosas, cosas que le preocupan, muchos cuestionamientos y el día que lograra encontrar o resolver mis preguntas, ya no tendría caso decir nada. Yo no creo poder salirme de mí y verme desde fuera, pero si puedo proyectarme en algo, en un poco de material y hacer una impresión de mí mismo, para luego verme de lejos; entonces creo que es lo que el artista hace, intenta verse a sí mismo en su obra, saca ese discurso propio y lo pone ahí, porque necesita conocer quién es.

K: Haz experimentado con varios materiales; ¿Cual sigue?.

J: En el tema de la escultura y de la forma me encantaría ha-cer cosas virtuales, modelar virtualmente. Puede ser, por qué no, hay tanto material que no es físico…

K: ¿Cómo llegaste al atrevimiento de irrumpir el espacio públi-co?.

J: Desde el principio mi escultura tendió a hacerse más grande, y siempre tuve la inquietud de trabajar con el juego de dimensio-nes, eso ha sido parte de mi experimento y ha resultado bien, me gusta, además que tiene mucho que ver con la búsqueda de espacios para contener estas piezas, pues por naturaleza están en espacios abiertos y ahí es donde me encuentro con el con otro, con el que la ve, con el que vive el espacio público.Me encanta la reacción de la gente, lo hago para eso, me gusta llegar e irrumpir en medio de sus recorridos habituales y diarios;

“creo que es lo que el artista hace, intenta ver-se a sí mismo en su obra, saca ese discurso propio y lo pone ahí, por-que necesita co-nocer quién es “

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llegar de la noche a la mañana y provocar ese encuen-tro con una nueva entidad que habita el espacio y a su vez lo transforma. Esto te da un punto de referencia totalmente distinto del contexto urbano pues de re-pente donde no había nada aparece un personaje con el que se empieza a dialogar y se enfatizan detalles del paisaje que tal vez antes no veías. Me encanta, eso me apasiona, me gusta mucho la gente cuando se encuentra con mis obras.

K: Al ser tu obra de alto contenido no solo visual si no también táctil; ¿Haz considerado exponer para ciegos y/o débiles visuales?.

J: Sí claro, alguna vez ya se dio una muestra para in-videntes donde participe con unas esculturas de ca-bezas y me pareció sumamente interesante porque mi trabajo está hecho con las manos, la expresión de la mano, donde la emoción aparece directamente en el movimiento, en el gesto que queda impreso en el material. No hay forma más fiel de leerla que con otra mano en el mismo lugar, que mejor manera de sentir la fuerza y el impulso de la forma que poniendo tú mano sobre el mismo espacio donde puse la mía al momento de forjar cada pieza.Una lectura muy particular de mi trabajo sería la de un invidente, pues leerá esa emoción traducida en gesto, será decirle algo de mano a mano, sin el prejuicio de la mirada; confío en esa lectura.

Solo luz, 1996Barros de Zacatecas y Oaxaca con engobes

155 x 68 x 35 cm

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K: ¿Porque cabezas y rostro?.

J: Para mí el rostro es muy importante, por ello me he enfocado muchísimo en ellos pues evi-dentemente es una parte altamente expresiva, es la parte que tenemos más a la vista, rostros, manos, es lo que más vemos; pues no vemos la expresión total del cuerpo, la tensión los múscu-los de la espalda, la piel, los brazos, las piernas, eso nunca lo vemos, por eso el rostro es clave. Dentro del propio rostro lo más importante son los ojos, la mirada, ahí es donde está la vida; unos ojos tienen que estar vivos, de no ser así un ros-tro se vuelve un pedazo de materia. “Al momen-to que los ojos se abren la vida comienza”.

K: ¿En qué momento tu escultura está terminada?

J: No sé en qué momento está terminada, pero sí sé en qué momento despierta; es en el mo-mento que abre los ojos. No despierta, no se anima, no cobra vida propia y no alcanza su independencia hasta que no abre los ojos. En la mirada existe la profundidad, el gesto, hay una vida interior, es donde se conecta el inte-rior con el exterior. Cuando abro un hueco en cada rostro para formar los ojos es cuando los hago vivir, los despierto, los animo, ese es un momento muy importante en cada una de mis esculturas.

Solo luz, 1996Barros de Zacatecas y Oaxaca con engobes

155 x 68 x 35 cm

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K: ¿Qué sigue?.

J: Trabajar, trabajar y darle más a esa parte que tanto me gusta; hacer algo por los demás, el trabajo social es una de mis grandes inquietudes. Por eso la idea de la fundación (http://www.javiermarin-fundacion.org.mx/) y la residencia para artistas en Yucatán; PLAN-TEL MATILDE, el cual comienza funciones a partir del próximo año.

El programa será formar grupos de artistas interdis-ciplinarios trabajando en proyectos que tengan un beneficio social para las comunidades de Yucatán.Estamos en una comunidad desvalida del estado de Yucatán, por eso me entusiasma la idea que sea gen-te creativa y sensible quien nos apoye en resolver problemas muy inmediatos y urgentes de atender en estas comunidades. No le encuentro sentido a la hu-manidad de otra manera.

http://javiermarin.com.mx/

http://www.javiermarin-fundacion.org.mx/

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Mujer Azul, 1993Barros de Zacatecas y Oaxaca con engobes 138 x 75 x 35 cm

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Alv

aro

Tap

ia H

idal

goCHI

txt Lester Chapman

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Sin títuloMixta

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The three blondesMixta

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Nadie me lo advirtió, mi aproximación a la obra de Al-varo Tapia fue intensa desde el principio, se distin-guió por una estrepitosa descarga de tonalidades. La obra de este diseñador chileno de arrebato montó mis emociones en un carrito de montaña rusa, el intem-pestivo viaje me llevó a la primera fila de la guerra de los mundos, el análogo y el digital.

En los rostros de Tapia encontré el escenario de la dualidad donde actúan y protagonizan el antes y el ahora, el pincel y el cursor, mezcla furiosa de forma, color, línea y composición.

Es por medio de este lúdico proceder creativo entre la técnica y la inventiva que conocí la obra de un ilustra-dor que se empeña en mostrarnos como somos, cons-cientes y víctimas de nuestra propia humanidad.

Imponente en el contenido visual, el peso del color y el arrebato del gesto humano burlón y escalofriante es lo que identifican su obra, siempre cuidada paso a paso por un proceso detallado y transformador.

El ejercicio irreverente, explosivo y cimbrante de este artista plástico ha sido un válvula de escape para la comicidad y la crueldad que desconocía encontraría en mí mismo al verme reflejado en su obra, en medio de un adictivo parque de atracciones.

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Ana PaulaMixta

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AndrewMixta

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Angry BrianMixta

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CéspedesMixta

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Charly CatMixta

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http://www.alvarotapia.com/ChristophMixta

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Holly SharpeMixta

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Desde un ángulo, desde el otro, frente al espejo, haciendo muecas, poniendo la boca en posición de medio beso (pose por excelencia)… En estos tiempos de sobreexposición a tantas ca-ras, a través de las llamadas “selfies”, célebres, virales, cues-tionadas, rechazadas; descargar un archivo electrónico con la obra de un artista por invitación del director de esta revista, provoca sorpresa: se trata de retratos. Rostros, en primera instancia, pero a éstos hay que descifrarlos, verlos una y otra vez, primero para registrarlos objetivamente: hombre, mujer, joven, de mediana edad, adulto. Para luego pasar a la interpre-tación, donde David Samuel Stern, nos presenta el desafío. “Creo que es interesante que puedas tomar dos fotografías ob-

DavidSamuel

SternEUA

txt Brisa Barbosa

Kosuke Kawahara, Artist (I), 2014Impresión inkjet sobre vellum76 x 101.5 cm

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Emma Bailey, Poet, 2013Impresión inkjet sobre vellum52 x 64.8 cm

Katie Wynne, Artist, 2013Impresión inkjet sobre vellum33 x 53.3 cm

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jetivas, y la suma de las dos resulten en algo que no puede conservar la objetividad. Al fotografiar logras conseguir pequeños tra-zos, pero en general, no puedes ni siquiera tocar un poco de la realidad. Con el rostro humano, ya hay una disposición preconce-bida, un prototipo en tu cabeza que te dice cómo debe de lucir un rostro”1

Woven Portraits es una colección que dada desde 2011 a la fecha donde Stern, radica-do en Brooklyn, New York, retrata artistas, coreógrafos, poetas, músicos, diseñadores, escritores. Personas de ambos sexos, con edades, rasgos y razas, dispares. Es en su propuesta , donde el prototipo de rostro al que estamos acostumbrados ( y al que hace referencia el artista) aparece distorsionado debido a la superposición de imágenes, pues realiza un tejido entre dos fotografías de un mismo sujeto, haciéndo-lo de tal manera que en el resultado en vez de sumar detalles, éstos se enfatizan: pre-sencia de gafas, vello facial, ausencia de cabello, por no entrar en detalles sobre las expresiones faciales, pues aunque parezca no haberlas, se percibe en las imágenes una sensación de meneo, la que nos puede reve-lar pormenores de los personajes captados… y quizás ocultar otros.1Citado en el sitio web CoDesing, “Woven Portraits Capture Poets And Artists As They Really Are”, traducción libre http://www.fastcodesign.com/3034886/fast-feed/woven-potraits-capture-poets-and-artists-as-they-really-are#1

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Seán Curran, Choreographer (I), 2014Impresión inkjet sobre vellum76 x 101.5 cm

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Seán Curran, Choreographer (II), 2014Impresión inkjet sobre vellum76 x 101.5 cm

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Hay en todo esto una parte artesanal, pues literalmente el autor hace un “tejido” ma-nual de los retratos previamente impresos. No se trata de un efecto meramente digital, implica una cuidadosa selección de imáge-nes, tomadas desde varios ángulos en su estudio con iluminación artificial, que termi-nan construyendo un retrato en movimien-to, como un holograma, que provee ciertos caprichos visuales, pero magistralmente conservando la simetría.

http://davidsamuelstern.com/

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Austin Furtak-Cole, Artist, 2013Impresión inkjet sobre vellum48.3 x 66 cm

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KwonKung Yup

Eternity, 2010Óleo sobre tela116.8 x 91 cm

KOR

txt Maribel Castorena

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KwonKung Yup

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Kwon Kung Yup, artista de origen coreano quien en su obra nos invita a un dialogo intimista, narra y des-dobla la figura sobre el óleo de una manera convul-sivamente hermosa, me permitiré llamarlo así, por-que no encuentro un mejor calificativo, la artista nos presenta su obra como una colección de retratos con una perfecta definición y un estilo realista que es ca-racterizado por una fina y sutil técnica para plasmar rostros y cuerpos asexuados, rostros blanquísimos, enredados con vendajes, con una tensión en las mira-das, que transmiten una especie de duelo, de misterio lacónico y una fortaleza abatida. A pesar de parecer figuras sacadas de un mundo de porcelana y a su vez, extraído de un universo superior, casi inexistente o inexplicable, es la expresión y la impecable fuerza descriptiva en los rasgos faciales lo que hace sentir al espectador que está frente un ser con humanidad, una humanidad muy vulnerable y frágil pero con una perennidad infatigable, es la lucha o la necesidad de subsistir y prevalecer; es la lucha y el estrago de la vida, y por la vida.

Rememberance, 2009Óleo sobre tela91 x 116.8 cm

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Rememberance, 2009Óleo sobre tela91 x 116.8 cm

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Tearful eyes, 2009Óleo sobre tela45.5 x 53 cm

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Tearful, 2007Óleo sobre tela100 x 72 cm

Bloodshot, 2007Óleo sobre tela162.2 x 130.3 cm

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Tearful, 2007Óleo sobre tela100 x 72 cm

Bloodshot, 2007Óleo sobre tela162.2 x 130.3 cm

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Bleached memory, 2009Óleo sobre tela227.3 x 162 cm

http://kwonkyungyup.com/

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Car

los

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arez

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Ana Paula, Scars, 2010Fotografía digital

MEX

txt José Aguilera

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Beto, Scars, 2010Fotografía digital

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Teoría de una identidad

Carlos Álvarez Montero. México 1974.Fotógrafo mexicano cuya obra fluctúa entre la identi-dad, la individualidad (que me gustaría decir el indivi-duo), y las apariencias.

Las cicatrices revelan un pasado, cada marca en la piel es un instante recordado por siempre. Las rodi-llas marcadas hacen evidente una infancia recorrida sin miedos, o una infancia muy fracturada. Carlos, en su serie Scars, refleja no esa infancia marcada en la piel, sino esa vida que nos persigue siempre, el fo-tógrafo retrata a personas que se han marcado, que han vivido instantes que deben quedarse en la piel, que deben salir de la memoria para que los demás las vean.

Las fotografías no presentan más trabajo que aquel que ofrece la lente, no hay retoques, no hay juego de luces y sombras, no hay juego de perspectivas, uno se enfrenta a un cuadro, un cuadro cerrado que nos muestra una marca en el cuello. Vemos cómo los po-ros abren paso a la tinta. El tatuaje no está solamente en la piel, también se ve en los ojos.

Los sujetos dejamos de ser individuos cuando nos in-sertamos en la sociedad, y cada acto que realizamos pretende rescatar al individuo que fuimos, muchas veces fracasamos, muchas veces cedemos ante el miedo que provoca el sistema. En la obra del autor, la idea que aparece entre líneas es la del encuentro consigo mismo. Un tatuaje inicia con el dolor de cada pinchazo, y termina con la imagen eterna que se re-pite al espejo. Las personas que aparecen en estos retratos han encontrado, a fuerza de repetirse en el espejo cada mañana, y recordar instantes, al indivi-duo que fueron. La piel abre paso al sujeto.

Los encuentros consigo mismo son muy difíciles de dar, se requiere de paciencia y mucho coraje, porque lo que hay detrás de las pupilas no siempre se reconoce, cuando el sujeto está listo debe decidir si se enfren-ta a él mismo antes de enfrentarse a la sociedad, los ojos de las personas que aparecen en las fotografías de Carlos revelan al sujeto que se ha enfrentad a sí mismo y ahora se enfrenta a la sociedad, la transgre-de, y todo lo hace a través de su piel marcada. Cuando somos señalados por la sociedad significa que hemos salido de las filas del sistema para introducirnos en otras más complejas, revestidas de consciencia. Esto es lo que sucede cuando observas fijamente a los ojos a las personas retratadas en cada fotografía.

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Vince Monster, Scars, 2010Fotografía digital

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Ihxel, Scars, 2010Fotografía digital

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Dick, Scars, 2010Fotografía digital

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Chuster, Scars, 2010Fotografía digital

http://www.alvarezmontero.com/

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Sonrisas, Scars, 2010Fotografía digital

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Pablo, Scars, 2010Fotografía digital

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Leer el rostro a partir de un resumen de lo más sustancial, de los rasgos reconocibles figurativos en retratos que denotan un ses-go infantil.

La tendencia a la abstracción ha sido par-te del desdoblamiento de personalidad del diseñador español Diego Estebo, TEBO, un personaje abstracto que se nutre de la evo-lución de los cánones y la estética, un per-sonaje que reclama la potestad de la mancha inherente a la iconografía pop de sus repre-sentaciones abstractas.

En su obra, Tebo ejecuta un ejercicio de “des-aprender” en la combinación y reducción de sus elementos visuales, al tiempo que se jacta de su habilidad para decir apenas tanto con tan breves trazos. Sus retratos pueden ser grotescos, pero dan identidad, provocan emoción y reflexión.

Se trata de representaciones de la humani-dad desde una perspectiva donde es dificil pintar la realidad, se trata de una síntesis de materiales y texturas, de una improvisa-ción que me insinúa un amorío con el Jazz, y de huellas que quizás son herencia del arte rupestre de Altamira.

Tebo

ESP

txt Matcarrag

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Secundarios en verano IIMixta sobre cartulina

50 x 70 cm

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Serie, Cabezas de carbónMixta sobre cartulina

29.7 x 42 cm

Cartoon de ollín IIMixta sobre cartulina

50 x 70 cm

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Cartoon de ollín IIMixta sobre cartulina

50 x 70 cm

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Cabezas vaporosas IMixta sobre cartulina

50 x 70 cm

http://www.tebo.es/

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Self portraitÓleo sobre tela30 x 25 cm

Nikos Gyftakis

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Nikos GyftakisGRE

txt José Aguilera

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Lo continuo discontinuo

La obra de Nikos revela una profunda idea del ser, entendido como impulso vital para llegar a ser.

Las líneas que ondulan por todo el lienzo, los colores que se mezclan entre pasteles y ma-tes, la figura humana que se hace presente en la textura de cada imagen.

La Grecia clásica converge con la Grecia mo-derna, en cada trazo se percibe la severidad de los dioses griegos, pero, en el fluir de cada línea se hace evidente la Grecia moderna, la del hombre y no de los dioses, la Grecia que vive un poco nostálgica, un poco alegre, un poco triste, un poco severa. Lo importante acá no son las líneas, sino la luz y los colores que hacen converger al tiempo y al espacio. Como el autor mismo lo dice, “es un dialogo entre culturas”, entre el pasado y el presen-te, y una proyección hacia el futuro.

La identidad de una pintura no se logra por sí sola, necesita de una red, para poder es-tablecer una significación que después nos lleve a establecer su identidad, cada uno de los cuadros del autor se une al otro, es como si las líneas (que para él no son lo importan-te) funcionaran como un enlace entre cada

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Self portraitPastel y óleo sobre tela150 x 190 cm

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Self portraitPastel y óleo sobre tela160 x 190 cm

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cuadro y, entonces, cada pintura continúa en la siguiente, y no importa el orden de la secuencia, lo que se logra es un puente ten-dido hasta dentro de nosotros. Grecia es el origen y para encontrar el origen de una obra es necesario ir detrás de cada línea, detrás de cada color, encontrarse mirando fijamen-te detrás del cuadro. Nikos Gyftakis es la ex-presión de un arte moderno que no persigue escuelas ni movimientos artísticos, lo que persigue es una idea, la de llegar a ser.

El arte postmoderno se convulsiona entre las ideas de resurgimiento de expresiones anteriores, y la trasgresión de las vanguar-dias. En la obra de Nikos desaparece esa idea convulsa, en su obra se logra trasgredir la idea del ser y llegamos al punto medular de la existencia: la discontinuidad de la vida.

Self portraitPastel y óleo sobre tela150 x 185 cm

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Self portraitPastel y óleo sobre tela150 x 190 cm

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http://nikosgyftakis.com/

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Nick IÓleo sobre madera60 x 65 cm

Ben Smith

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Parecieran pinceladas fortuitas, descui-dadas y sin interés, parecieran entre-co-lores rasgados por rostros emergentes del lienzo, de miradas dolientes y gestos contenedores de descontento.

De la mano de Ben Smith los rostros huma-nos son más que una simple figura humana para convertirse algunas veces en reflejo del dolor y la perdida, como tantas otras en espejo de sensualidad y delicadeza.

La técnica utilizada va más allá de la téc-nica, pues no solo captura el encuentro de emociones en cada rasgo, sonrisa, mira-da y gesto, nos relata historias de deca-dencia, amor o desconcierto; nos muestra además una interesante exposición de co-

Ben SmithAUS

txt Matcarrag

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lor contrastado, juego de luz y trazos in-completos que complementan de manera precisa los alteres y turbes de los perso-najes que protagonizan su obra.

Encontramos en la obra de este artista plástico una puerta entre abierta a mun-dos surreales e infinitos, donde cada ac-tor puede ser héroe o villano, inhumano o irreal, sorpresa o sorprendido gracias al esplendido efecto de capturar el instante a través del rasgo estriado en medio del todo y de la nada.

http://bensmith.viewbook.com/

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Self defenseÓleo sobre madera

60 x 70 cm

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The shiftÓleo sobre madera120 x 180 cm

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Nick IIÓleo sobre madera50 x 80 cm

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