Boletín CICI N° 61

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    Centro de Investigacin de la Comunicacin y la Informacin de la Universidad del Zulia

    En la comisin conjunta del 30 de octubre se decidi abrir la conv-ocatoria para el ao 2015 de las diferentes subvenciones Condes:Subvencin de participacin en eventos cientfcos

    * Se acuerda abrir la convocatoria solo para eventos nacionales

    Monto a nanciar hasta bs. 18.000,00.Si el evento es realizado en la ciudad de Maracaibo, solo se pa-gar matrcula.Periodo de recepcin: Eventos a realizarse durante el primer semestre del ao:del 11 de noviembre de 2014 al 27 de febrero de 2015

    Eventos a realizarse durante el segundo semestre del ao:del 4

    de mayo de 2015 al 17 de julio de 2015

    Tope mximo de solicitudes a recibir: 25 en cada convocatoria(hasta agotar Bs. 900.000,00).

    Nota: si en la primera convocatoria no se recibe el tope jado (25),se pasar la diferencia a la segunda convocatoria.

    Subvencin de programas/ proyectos de investigacin:

    Del 2 de febrero de 2015 al 17 de abril de 2015

    Monto a subvencionar: hasta Bs. 120.000,00 por proyecto.Hasta 3 proyectos por programa.

    Vigsimo aniversariode la maestra

    en comunicacinde LUZ

    Nueva edicinde Chasqui

    Artculos para

    DisertacionesLos peligrosde la revolucindigital

    Convocatorias del Condes 2015 Convocatoriasdel Condes 2015

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    [email protected] // http://cici-luz.blogspot.com// Telfono: 58-0261-412-7927N 61, 25 de noviembre de 2014 // Editor: Orlando Villalobos // Diseo grco: Luis Nava, Fabiana Arias.

    http://cici-luz.blogspot.com/http://cici-luz.blogspot.com/
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    Convocatoria parael V Congreso InveCom 2015

    La Asociacin Investigadores Venezolanos de la Comunicacin(InveCom) convoca al V Congreso de Investigadores Venezola-nos de la Comunicacin, con la temtica La formacin en co-municacin desde el pensamiento crtico a celebrarse los das27, 28 y 29 de Mayo de 2015 en el Centro Cultural Padre CarlosGuillermo Plaza, Universidad Catlica Andrs Bello, Caracas,Venezuela.

    Este V Congreso estar precedido por la realizacin de un pre-congreso a celebrarse entre el 1 y 3 de diciembre de 2014 en las

    instalaciones de la Universidad Central, y cuya organizacin haestado bajo responsabilidad del Instituto de Investigaciones de laComunicacin (ININCO-UCV).

    Conferencistas

    Tanius Karam(Universidad de la Ciudad de Mxico)

    Jess Mara Aguirre

    (Universidad Catlica Andrs Bello)Ana Irene Mndez(Universidad del Zulia)

    Carmen Teresa Velandria(Universidad Catlica Cecilio Acosta)

    Problemtica central

    Desde sus inicios en 2007, la Asociacin Investigadores Ven-

    ezolanos de la Comunicacin (InveCom) ha mostrado preocu-pacin por el problema de la formacin de los comunicadoressociales del pas y Amrica Latina.

    Durante el 1er Congreso de InveCom, Elda Morales y Luz NeiraParra sentenciaban que las escuelas de comunicacin social hoyson recintos donde se legitima la sumisin a los saberes impues-tos por la explosin de la meditica. Las profesoras destacanque se ha disminuido la calidad de la labor de los egresados, locual es producido por una negacin a sus compromisos ante los

    cambios sociales, culturales y polticos que demandan los ciu-dadanos.

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    Como lo plantea Ana Irene Mndez (2007), entender la crisis queatraviesa la formacin en comunicacin en el pas por no deciren el mundo pasa por reconocer que la academia ha abdicado

    su rol de rector, pensando errneamente que es el mercado quiendebe determinar los contenidos de los pensa.

    Y se trata precisamente de un error porque las investigacin deMorales y Parra, y de varios acadmicos latinoamericanos, rev-elan la necesidad de formacin en el eje terico-epistemolgico, elcual ha sido disminuido progresivamente por los mismos integran-tes de las escuelas de comunicacin, fortaleciendo lo instrumentaly el uso de los recursos tecnolgicos en detrimento del desarrollode la aptitud natural de la inteligencia humana para ubicar todaslas informaciones en un contexto y en un conjunto.

    Entonces, surge como prioridad fortalecer el eje de investigacin,precisamente porque es el que permite entrenar al educando parapensar en trminos conceptuales, introducirlo a los procesos deconstruir abstracciones del campo de la teora e identicar susinstancias en el nivel emprico.

    El acadmico mexicano Fuentes Navarro apunta sobre la exist-encia de tres modelos de enseanza de la comunicacin: 1. For-macin de periodistas en los aos cincuenta; 2. El comunicador

    como un intelectual, y 3. el del comunicador como cientco social.Ninguno de estos esquemas curriculares ha logrado la consisten-cia suciente para legitimarse, ni profesional ni universitariamente.Es necesario, como lo plantea Reguillo (1995), superar los mod-elos en los que la esfera meditica sea el epicentro de las prc-ticas socio-comunicativas, y reconocer la emergencia de nuevosactores que producen e interpretan sistemas de mensajes.

    Como respuesta a la deslegitimacin de los modelos tradicion-ales surge la propuesta del cuarto modelo de formacin en co-

    municacin que plantea TaniusKaram desde la Universidad dela Ciudad de Mxico (UCM). Se plantean las siguientes lneasprioritarias en ese modelo culturolgico: a) Comunicacin, va-lores y cultura; b) Comunicacin, sociedad y democracia; c) Co-munidades simblicas, identidades y representaciones sociales;d) Comunicacin y vida cotidiana; e) Impacto sociocultural de lastecnologas de informacin; y, f) Comunicacin y ciudad.

    Para lograr el cometido de mejorar los pensa de estudio, la for-macin en comunicacin debera estar orientada por el pensami-ento crtico. Haskins (2003) dene el pensamiento crtico como un

    proceso en el cual usamos nuestro conocimiento y la inteligencia

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    para llegar de manera efectiva a las posiciones ms razonables yjusticables sobre temas, as como los esfuerzos para identicar ysuperar los numerosos obstculos al pensamiento racional. Comolo plantea Gabriela Lpez Aymes (2012), la misin de la escuela

    no es tanto ensear al alumno una multitud de conocimientos quepertenecen a campos muy especializados, sino ante todo, apren-der a aprender, procurar que el alumno llegue a adquirir una au-tonoma intelectual. Esto se puede lograr atendiendo el desarrollode destrezas de orden superior como las del pensamiento crtico.

    El informe de la Organizacin de las Naciones Unidas para la Ed-ucacin, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) generado por el equipode Jacques Delors (1996), plantea la importancia del pensami-ento crtico y el reto particular que enfrenta la educacin superiorde potenciar la comprensin, despertar la curiosidad intelectual,

    estimular el sentido crtico y adquirir al mismo tiempo autonomade juicio. La demanda social para modicar los modelos educa-tivos es de tal importancia, que obliga a algunas agrupaciones decientcos en todo el mundo a ser ms proactivos en su lucha porel desarrollo del pensamiento crtico (Fdorov, 2006).

    El objetivo del V Congreso de InveCom es convocar a pensa-dores, investigadores y actores involucrados en la formacin encomunicacin para intentar responder o replantear algunas de laspreguntas que se hace TaniusKaram en su trabajo: Seremos ca-

    paces de ofrecer un modo de enseanza en el campo acadmicoque se alimente de los planteamientos crticos de la comunicacincomo una legtima tradicin?, podremos conciliar los retos a untiempo disciplinarios y transdisciplinarios, la perspectiva comu-nicolgica que aspira a la denicin desde la sistmica para losobjetos y mtodos de la comunicacin y la apertura de la comisinGulbenkain que sugiere la reduccin de esas fronteras y distan-cias para privilegiar campos comunes?, sabremos superar lavisin EGOcntrica de la academia para dar paso a mediadoresculturales?

    Grupos de Trabajo que sesionarn en el V Congreso:

    GT-01: Periodismo: prcticas sociales y textuales. Coordinado-ras: Moraima Guanipa ([email protected]) y MildredPineda ([email protected]).

    GT-02: Gestin de la Comunicacin en la Organizacin: Identi-dad e imagen corporativa. Coordinadora: Fanny Ramirez ([email protected]) y Miriam Miquilena ([email protected]).

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    QurumAcadmico

    Lee y consulta todas las edi-ciones de Qurum Acadmico

    a travs de su pgina web enla Base de Datos de RevistasCientcas de la Universidad

    del Zulia:

    http://revistas.luz.edu.ve/in-dex.php/quac

    Bscala tambin en otrosndices de revistas acadmi-cas y bases de datos digi-

    tales como: Redalyc, Fonacit,Dialnet, Revencyt, Latindex,CLASE, Fundacin Biblioteca

    Miguel de Cervantes, RedIberoamericana de revistas deComunicacin y Cultura, Actu-alidad Iberoamericana, Ebsco,Red Conbercom de Revistas

    de Comunicacin, Clacalia,Qualis Capes y Google Books.

    http://revistas.luz.edu.ve/index.php/quachttp://revistas.luz.edu.ve/index.php/quachttp://revistas.luz.edu.ve/index.php/quachttp://revistas.luz.edu.ve/index.php/quachttp://revistas.luz.edu.ve/index.php/quac
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    GT-03: Comunicacin Poltica y Pblica. Coordinador: AndrsCaizalez ([email protected]) y RaisaUrribarr ([email protected]).

    GT-04: Comunicacin, Comunidad y Participacin. Coordinador:Alfredo Montilla ([email protected])

    GT-05: Ciberperiodismo y Comunicacin Digital. Coordinadora:Mabel Caldern ([email protected]) e Ysabel Viloria ([email protected]).

    GT-06: TIC, Apropiacin Social y Gobierno Electrnico. Coordi-nador: ngel Pez ([email protected]) y Carmen TeresaVelandria ([email protected]).

    GT-07: Estudios Culturales y Economa de la Comunicacin. Co-ordinador: Carlos Guzmn ([email protected]) y JohannaPrez Daza ([email protected]).

    GT-08: Formacin y epistemologa de la comunicacin. Coordi-nador: Johandry Hernndez ([email protected]) yCarlos Guzmn ([email protected]) .

    GT-09: Comunicacin pblica de la Ciencia. Coordinadoras:Argelia Ferrer ([email protected]) y Acianela Montes de Oca (aci-

    [email protected]).

    Para participar puedes consultar en

    invecom.org

    Vigsimo aniversario de la maestraen comunicacin de LUZ

    La maestra en comunicacin de la Universidad del Zulia celebra elvigsimo aniversario del inicio de sus actividades.

    Con ese motivo convoca para un acto que se realizar este 01 dediciembre, a las 5.00 p.m., en el auditorio del Museo de Arte Con-temporneo del Zulia, y contar con laparticipacin de los recono-cidos investigadores Migdalia Pineda, Marcelino Bisbal y LuisJavier Hernndez.

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    La Revista de la Universidad del Zulia

    La Revista de la Universidad del Zulia puede ser consultada en enla siguiente direccin: issuu.com/revistadelauniversidaddelzulia

    La publicacin posee un carcter multidiscliplinario, por ello sutemtica se divide en tres grandes ejes: a. ciencias sociales y arte;b. ciencias del agro, ingeniera y tecnologa; c. ciencias exactas,naturales y de la salud. Su publicacin es cuatrimestral. Cadanmero, de los tres del ao, se corresponde con uno de los tresejes temticos. La Revista de la Universidad del Zulia, por sunaturaleza histrica y patrimonial, est adscrita a la Ctedra LibreHistoria de la Universidad del Zulia.

    Nueva edicin de la revista Chasqui

    Nueva edicin de la revista Chasqui(Alexander Amezquita Ochoa, coordinador editorial de la revistaChasqui, [email protected])Chasqui, revista latinoamericana de comunicacin, acaba de pub-licar sultimo nmero en http://www.revistachasqui.com/index.php/chas-qui. All puedes revisar su tabla de contenidos.

    CHASQUI. Revista Latinoamericana de Comuni-cacin nm. 126 (2014): Comunicacin organiza-

    cional

    Tabla de contenidos

    Tema Central- Interaccin institucional, participacin democrtica y transpar-encia. La iniciativa del Voto Transparente en el Ecuador (2013 -

    2014) (4 - 13). Daniel BARREDO IBEZ, Roxana SILVA CH.

    - La Generalitat de Catalunya y la potenciacin de la participacinciudadana. Un anlisis de la presencia online (14 - 21). JoanFrancesc FONDEVILA GASCN, Joaquim MARQUS PASCUAL,Marc PERELL SOBREPERE

    - Comunicacin Institucional en Espaa. Estudio del uso que losdiputados espaoles hacen de las TIC en sus relaciones con laciudadana (22 - 30)

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    Ana ALMANSA MARTNEZ, Antonio CASTILLO-ESPARCIA- Audiovisual y Web 2.0. Empleo de YouTube por las empresas es-paolas con mejor reputacin (31 - 41)Carmen COSTA SNCHEZ- La molcula conductual de relaciones pblicas en la comuni-cacin gubernamental con los inmigrantes en Espaa (42 - 56)Carmen CARRETN BALLESTER

    - O campo da comunicao e a atividadelinguageira no mundo dotrabalho (57

    - 65) Roseli FIGARO

    Ensayos

    - La radio universitaria, una mezcla de experiencia, juventud ytecnologa?(66 - 75)Andrs BARRIOS RUBIO- En cada pueblo un nombre. Trayectorias, prcticas y saberesdemigrantes africanos de la regin subsahariana en Argentina (76 -86)Orlando Gabriel MORALES- Un mundo oculto: la experiencia del trabajo domstico en refu-giadascolombianas (87 - 95)Diana Sofa SANTOS

    - Principales estudios realizados sobre la representacin de lasminoras enla ccin televisiva (96 - 108)Mara MARCOS RAMOS

    Informe

    - Red CIESPAL XXI. Por la construccin de conocimientos y ciu-dadana (109 -115) Heriberto CARDOSO MILANS- Rafael Correa y las elecciones 2006. Inicios del Marketing y Co-municacin

    poltica digital en Ecuador (116 - 123) Jos RIVERA COSTALES

    Reseas

    - Cronotopias: A renovao do audiovisual ibero-americano (Se-bastioGuilherme ALBANO DA COSTA, Maria rica DE OLIVEIRA LIMA yAurelio DE LOSREYES) (124 - 125) Alexander AMZQUITA OCHOA- El derecho a comunicar. Los conictos en torno a la libertad de

    expresin en las sociedades contemporneas (Damin LORETI yLus LOZANO) (126 - 127)Marco NAVAS ALVEAR

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    - El pensamiento comunicacional a travs del cine (ElizabethGONALVES -coordinadora) (128 - 129)Adriana GARRIDO- Imaginarios. El asombro social (Armando SILVA) (130 - 132)Mara Virginia TIPN- Atmsferas ciudadanas: grati, arte pblico, nichos estticos(Armando SILVA) (133 - 135)Edison PREZ

    Artculos para la revista Disertaciones

    Call for Papers: Artculos para el Volumen 8, Nmero 2 (Jul-Dic2015), dedicado a Investigacin en Opinin Pblica.

    El concepto de opinin pblica ha sido muy difcil de precisar y

    hasta hoy no existe una denicin generalmente aceptada. Dehecho, tras una extensa revisin bibliogrca HarwoodChilds(1965) encontr al menos 48 deniciones distintas. Sin embargo,la falta de precisin del concepto no ha impedido que se extiendaen las ciencias sociales y concentre el inters de un grupo cadavez ms grande de investigadores. Se trata de un campo multidis-ciplinario donde conviven la ciencia poltica, la historia, el derecho,la sociologa, la psicologa social, las comunicaciones, la losofay la economa.

    Como detallaron Donsbach y Traugott (2008, p. 1), se pueden dis-

    tinguir al menos cinco grandes lneas de desarrollo de los estudiosde Opinin Pblica: 1) Poltica normativa, que propone un con-cepto normativo de opinin pblica, en que sujetos racionales einformados se encuentran y debaten sobre los asuntos de interspblico; 2) Funcionalista, que se concentra en losprocesos de reduccin de complejidad que se dan al interior de lassociedades para construir una agenda pblica con una cantidadde temas manejables; 3) Control social, que visualiza a la opininpblica como un mecanismo para mantener la conformidad de losciudadanos e inhibir potenciales cambios; 4) Investigacin con

    encuestas, que usa muestras representativas para medir las opin-iones de la poblacin y se trata de la forma ms habitual de dores,trabajo en las universidades, se ha desarrollado una industria deestudios de mercado, vinculada a investigaciones de inters parael mundo privado, aunque ocasionalmente incursiona en estudiospolticos y evaluacin de polticas pblicas.

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    Tanto el trabajo acadmico como la investigacin de mercado hanenfrentado fuertes desafos metodolgicos en los ltimos aos,sobre todo respecto a las mejores formas de aplicar los sondeospara recoger informacin. Si bien las muestras probabilsticas,con aplicacin cara a cara del cuestionario, siguen siendo lamejor forma lograr datos representativos del universo que sequiere estudiar, cada vez son ms los problemas que se debenenfrentar al usar este mtodo. Por ejemplo, el largo tiempo querequiere el trabajo de campo para obtener una muestra robustapuede permitir que en medio del desarrollo de la investigacinocurran hechos de alto impacto que alteren las percepciones delos individuos, y por tanto, los resultados nales. Tema especial-mente complejo cuando se realizan encuestas electorales. Porotra parte, en muchos pases los ciudadanos son cada vez ms

    reacios a recibir a los encuestadores en sus casas, lo que obligaa tener altas tasas de reemplazo y tiene como consecuencia nalque se consigan datos con un menor nivel de representatividad.Frente a esta situacin, los investigadores han buscado la formade obtener informacin representativa a travs de otros medios,como la telefona celular o internet.

    Sin embargo, an el tema est lejos de ser resuelto, y por eso, losresultados de los estudios son mirados con mayor escepticismoque dcadas atrs.

    Otro desafo metodolgico es cmo procesar la gran cantidad deinformacin que los individuos generan en fuentes abiertas, comolas redes sociales. Esta operacin implica un cambio de lgica,ya que los investigadores no disean instrumentos para obtenerinformacin de los individuos, sino que deben interpretar y darsentido a millones de datos producidos por los individuos sobretemas muy variados.

    Adicionalmente, en la investigacin reciente han emergido nuevastemticas, como las interrogantes respecto a la deliberacin ciu-

    dadana y su relacin con la gobernabilidad y el buen funcionami-ento del sistema poltico.La emergencia de las redes sociales tambin ha signicado undesafo en trminos tericos. Los investigadores han buscadoestablecer cul es el papel que pueden cumplir en la participacinpoltica, especialmente en el surgimiento de nuevos movimientossociales, y su capacidad de articular corrientes de opinin transna-cionales.

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    Estos nuevos temas, tambin han tenido repercusiones me-todolgicas. Se han propuesto procedimientos innovadores,aunque complejos, como los sondeos deliberativos, mtodoscombinados, que incorporan tcnicas cualitativas, como anlisisnarrativo o discursivo.

    Estos nuevos temas y los fuertes desafos tericos y metodolgi-cos que enfrenta la disciplina hacen recomendable un nmeromonogrco sobre los estudios de opinin pblica.

    En la actualidad existen mltiples preguntas sobre la investigacinen opinin pblica, por ejemplo, Cules son las mejores formasde obtener muestras representativas?, Cmo las redes socialesestn cambiando los procesos de formacin de opinin pblica yla participacin poltica?, Cul es el mejor mtodo para procesar

    e interpretar la gran cantidad de informacin que est disponibleen fuentes abiertas?, Cmo enfrentar el estudio de los procesosdeliberativos que forman parte de la construccin de la opininpblica?, Existe una opinin pblica internacional?En este nmero de DISERTACIONES (volumen 8, nmero 2, dedi-cado a Investigacin en Opinin Pblica) invitamos a la comuni-dad acadmica a proponer manuscritos inditos que sean resul-tado de investigaciones y estudios en esta disciplina.Plazo de envo de artculos: hasta 31/11/2014.

    Coordinadores del Nmero:Prof. Andrs Scherman ([email protected])Profa. Carolina Campalans ([email protected]).

    Los peligros de la revolucin digital

    Cada vez las personas delegan ms en la tecnologa, que guasus pasos, relaciones, trabajos. Surge la complacencia automa-tizada: conar en que la mquina lo resolver todo mientras se

    deja la atencin a la deriva, lo que merma las capacidades delindividuo.

    (Publicado en el diario Pgina 12, 26.10.14)Por Joseba Elola, desde Madrid

    En la primavera del ao 1995 el transatlntico Royal Majesty en-call, inesperadamente, en un banco de arena de la isla de Nan-tucket. A pesar de estar equipado con el ms avanzado sistemade navegacin del momento, hundi el morro en esta isla situadaa 48 kilmetros de Cape Cod, Massachusetts, en Estados Unidos.Proceda de las islas Bermudas y se diriga hacia Boston, con

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    1500 pasajeros a bordo. La antena del GPS se solt, el barco fuedesvindose progresivamente de su trayectoria y ni el capitn ni latripulacin se dieron cuenta del problema. Un vigilante de guardiano avist una importante boya junto a la que el barco deba pasar,y no inform: cmo se va a equivocar la mquina? Afortunada-mente, el accidente no produjo heridos.

    El prestigioso ensayista norteamericano Nicholas Carr utiliza esteepisodio para ilustrar hasta qu punto depositamos la fe en lasnuevas tecnologas, que no siempre resultan infalibles.En algunos casos, pueden arrastrarnos a lugares a los que noqueramos llegar.

    En su nuevo libro, Atrapados: cmo las mquinas se apoderande nuestras vidas, Carr, de 55 aos, explica que hemos cado en

    una excesiva automatizacin, proceso mediante el cual hemosexternalizado parte de nuestras capacidades. La tecnologa guanuestras bsquedas de informacin, nuestra participacin en laconversacin de las redes, nuestras compras, nuestra bsquedade amigos. Y nos descarga de labores pesadas.

    Todo ello, poco a poco, nos conduce a lo que Carr denomina com-placencia automatizada: conamos en que la mquina lo resolvertodo, nos encomendamos a ella como si fuera todopoderosa, ydejamos nuestra atencin a la deriva. A partir de ese momento, si

    surgen problemas, ya no sabemos cmo resolverlos.La pequea historia del Royal Majesty, de hecho, encierra todauna metfora: hemos puesto el GPS y hemos perdido el rumbo.Algo as es lo que nos viene a explicar el experto estadounidense:Estamos embrujados por las tecnologas ingeniosas, dice enconversacin telefnica desde su casa en Boulder, Colorado,en las Montaas Rocosas. Las adoptamos muy rpido porquepensamos que son cool o porque creemos que nos descargarnde trabajo; pero lleva tiempo darse cuenta de los peligros queencierran, y no nos paramos a pensar cmo estas herramientas

    cambian nuestro comportamiento, nuestra manera de actuar en elmundo.

    Este estudioso de las nuevas tecnologas, que en 2011 fue nal-ista del premio Pulitzer con su anterior obra, Superciales. Quest haciendo Internet con nuestras vidas?, estima que la compla-cencia automatizada est mermando nuestras capacidades. Y usaun ejemplo bien sencillo: gracias a los correctores automticoshemos externalizado nuestras habilidades ortogrcas.Cada vez escribimos peor. Desaprendemos.

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    A medida que empresas como Facebook, Google, Twitter y Ap-ple compiten ms ferozmente por hacer las cosas por nosotros,para ganarse nuestra lealtad, el software tiende a apoderarse delesfuerzo que supone conseguir cualquier cosa.

    Qu nos estn robando las nuevas tecnologas?Nos estn robando el desarrollo de preciosas habilidades ytalentos que slo se desarrollan cuando luchamos duro por lascosas. Cuanto ms inmediata es la respuesta que nos da el soft-ware dicindonos adnde ir o qu hacer, menos luchamos contraesos problemas, y menos aprendemos. Nos roba tambin nuestrocompromiso con el mundo. Pasamos ms tiempo socializando atravs de la pantalla, como observadores. Reduce los talentos quedesarrollamos y, por tanto, la satisfaccin que se siente al desar-rollarlos.

    El discurso tecno-escptico de Carr puede ser rebatido desdemuchos ancos. No son pocas las voces que se alzaran dic-iendo que esas mismas tecnologas estn permitiendo expandirla capacidad de comunicacin de las gentes, las posibilidades deaprender o incluso de organizarse para cambiar las cosas y com-prometerse con el mundo. El propio Carr matiza su discurso ala-bando las inmensas posibilidades que la red ofrece para accedera informacin y comunicarse. Pero hay costes asociados.Mantener la atencin en el nuevo escenario tecnolgico, de he-

    cho, no es cosa fcil. Los estmulos y distracciones que alma-cenan los telfonos inteligentes que acarreamos o las pantallas alas que estamos conectados nos impiden centrarnos. Nos hacensobrevolar las cosas. Pasar de una a otra sin ton ni son, en unprofundo viaje hacia la supercialidad.

    Carr, que fue asesor editorial de la Enciclopedia Britnica,sostiene que la automatizacin en la que nos hallamos inmersosconduce, adems, a una sociedad con mdicos de atencin pri-maria que emplean entre un 25 y un 55 por ciento de su tiempomirando la pantalla en vez de prestar atencin a la narracin del

    paciente; a arquitectos que utilizan plantillas que propician unifor-midad urbanstica; y a nancieros que delegan operaciones en lamquina que, cuando falla, pasa factura.

    De hecho, ya se empezaron a dar pasos atrs en el proceso deautomatizacin. El 4 de enero de 2013, la Administracin Federalde Aviacin de Estados Unidos emita un comunicado que instabaa las compaas areas norteamericanas a que incentivaran lasoperaciones de vuelo manuales. Las investigaciones sobre ac-cidentes e incidentes en vuelo, explica Carr, indicaban que los pi-

    lotos se haban vuelto demasiado dependientes de la navegacinautomtica.

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    La automatizacin supone, adems, una amenaza para el empleoy convierte a los trabajadores en accesorios de la mquina, enejecutores de labores cada vez ms mecnicas, al externalizarsecapacidades intelectuales. Es muy triste. No slo supone unaamenaza para el sustento de la gente, sino que nos convierte enobservadores ms que en actores. Nuestra experiencia y mltiplesestudios psicolgicos demuestran que implicarse es la forma deestar satisfecho en el trabajo.

    Este proceso se ve alimentado por una doble fuerza: por un lado,las empresas potencian la automatizacin en pro de la ecienciay la cuenta de resultados. Y por otro, los trabajadores aceptan debuen grado estas tecnologas: Nos inclinamos hacia ellas porquenos ofrecen la ilusin de que tendremos ms tiempo libre. Ahest la trampa. Muchos emprendedores e inversores de Silicon

    Valley nos dicen: Esto mejorar nuestras vidas, nos liberar. Esaretrica utpica esconde el hecho de que, en muchos casos, lastecnologas no estn haciendo nuestras vidas mejores, ni nosestn dando mejores trabajos o actividades, sino que estn haci-endo cada vez ms ricos a los plutcratas de Silicon Valley.

    Carr, ex director de la Harvard Business Review, rechaza que eneste caso se trate del viejo miedo a la mquina de los tiempos dela Revolucin Industrial: Hay una gran diferencia: las computado-ras pueden hacer ahora muchos ms tipos de trabajo: no slo se

    hacen con los de produccin, mediante robots, sino que se hacencon los analticos. Esta vez asistiremos a una prdida neta deempleos.

    El ensayista norteamericano lleva su reexin ms all. Existe,dice, una amenaza para nuestra libertad. La gente hace amis-tades automatizadas por empresas como Facebook o Twitter, loque supone que cada vez elabora menos sus propios pensamien-tos. El ordenador se apodera incluso de reas ntimas de nuestravida.

    Cree usted que la tecnologa, de algn modo, puede hacer queseamos menos libres?S, as lo creo. La libertad empieza con la libertad de pensami-entos, que signica la habilidad de controlar tu propia mente, aqu prestas atencin, qu consideras importante. Y ahora quellevamos computadoras encima todo el tiempo, en forma de tel-fonos inteligentes, tabletas o lo que sea, el ordenador determinacada vez ms adnde se dirige nuestra atencin. Las empresasde software y de Internet saben muy bien qu es lo que atraparnuestra atencin. Cuando empezamos a regalar el control de

    nuestra mente y de nuestra atencin, perdemos una fuente muyimportante de libertad y libre albedro.

    B letn CICI

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    No. 61, 25 de noviembre de 2014

  • 7/21/2019 Boletn CICI N 61

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    Es un peligro para nuestra sociedad que nuestras bsquedasde informacin, o compras, estn guiadas?Hay algoritmos secretos que, en cierto modo, nos estn manipu-lando.Nos estn manipulando?Lo estamos viendo en muchos casos. Facebook determina consus algoritmos lo que ves de tus amigos. Pero como no informade sus algoritmos, no sabemos qu intenciones tiene, por qu nosmuestra una cosa y no la otra. Si haces una bsqueda en Google,son sus algoritmos secretos los que determinan lo que vas a ver yno sabemos cmo escogen lo que nos muestran. Podemos tenerla esperanza de que su manipulacin es benigna, que nos estnayudando, pero no podemos estar seguros de ello.

    Carr, que rechaza ser calicado de tecnfobo, considera que el

    problema es que las mquinas estn diseadas por tecnlogosque slo estn preocupados por saber hasta dnde es capaz dellegar la mquina, y no de qu modo puede sta expandir nues-tras capacidades. Las innovaciones tecnolgicas no se puedenparar. Pero podemos pedir que se designen dando prioridad al serhumano, ayudndonos a tener una vida plena en vez de apoder-arse de nuestras capacidades.

    * De El Pas, de Madrid. Especial para Pgina/12

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