BURJ AL ARAB

El Burj Al Arab  es un hotel de lujo con una altura de 321 metros, siendo el tercer hotel más alto de todo el mundo y uno de los edificios hoteleros más

representativos. Está situado en el mar, sobre una isla artificial localizada a 270 metros de la playa en el Golfo Pérsico, la cual está conectada a tierra firme

mediante una carretera.

CIMIENTACIONES:

En un inicio se planeó construir este hotel sobre rocas, las cuales abundan en Dubai, pero se descartó la idea pues se necesitaría una isla de rocas demasiado grande para poder repeler las olas.

Para mantener la isla baja, se experimentó con unos bloques de hormigón pioneros destinados a reducir el impacto de las olas, las cuales nunca se habían usado en el Golfos por ello que se realizaron numerosas pruebas (durante 3 semanas) en maquetas con diferentes impactos de olas para comprobar la resistencia de estos bloques

huecos.

Se construyó la isla con empinadas laderas de rocas revestidas de hormigón para absorber el impacto de las olas.

Los ingeniosos bloques actúan como una esponja: cuando rompe una ola, penetra en su interior, gira sobre sí misma y su fuerza de disipa.

Con este aporte constructivo, se logró formar la isla que solo se eleva a 7.5 metros sobre el nivel del mar.

Después de ello, se insertaron en el suelo del centro de la isla, pilotes de acero de 20 metros de largo para crear un encofrado triangular que constituiría el exterior del sótano del hotel una vez vaciado su interior de arena.

Uno de los inconvenientes a solucionar fue: el peso del mar ejercía una enorme fuerza sobre el lecho, esta presión forzaba el agua sobre la arena y amenazaba a la isla de arena desde abajo. Para mantener fuera el mar, se inyecto cemento líquido sobre la arena para sellar el muro de hormigón desde abajo. Se puso aprueba el sellaje de cemento al límite, con el riesgo que los cimientos se destruyan y provocar la muerte de los obreros, al final; los cálculos fueron los adecuados.

La construcción de esta isla quedó terminada en Noviembre de 1995, esperando la construcción estructural del hotel más grande del mundo.

Los cimientos para la edificación consistieron en enormes pilotes de acero y hormigón reforzado, insertados a gran profundidad en la arena, usando el efecto de la “fricción de la piel”, que es la resistencia que impide que dos superficies rugosas se deslicen una sobre la otra.