carta número 125 (03-09-2011) del Bajo Lempa/El Salvador

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 A mis amigos y amigas y a los hermanos y herma- nas solidarios con los empobrecidos de esta tierra Carta 125 de la repatriación y la esperanza encar- nada en la realidad de cada día Nueva Esperanza  Bajo Lempa El Salvador CA 2 de septiembre de 2011  El invierno –tropical, la temporada de lluvias- está avanzado. La gente campesinas agradece a  Dios la buena cosecha de maíz de este año. Las mi- lpas, aquí en el Bajo Lempa, alcanzan los 2 metros de altura. Buenas mazorcas, buenos elotes, o “hi-  jos” de maíz tierno. Los tamales, el atol, las riguas  se ofrecen en las casas. No habrá hambre, ni esca-  sez demasiada de comida, por unos meses al me- nos. Las vacas y otras reses con buen pasto. Tam- bién hay leche, cuajada, queso, requesón. ¡Qué rico con una buena tortilla de maíz bien tostada! Trabajos con el maíz: destusando la mazorca y  preparando tamales Quiero comenzar así, en plan optimista y real,  porque así es la vida aquí ahora. Trabajo no falta estos meses. Las lluvias, las tormentas, abundan- tes, no amenazan con temporales inacabables que  producen inundaciones. Vienen y van cumpliendo un rito armonioso, agradecido por la población, la vegetación, los animales. Todos contentos. Por ahora. Quedan los dos meses más tremendos para esto de las lluvias, setiembre y octubre. En noviem- bre se despiden hasta regresar de nuevo en mayo,  si todo va normal. Porque con esto del calenta- miento global también se muestran irregulares.  Hacía años no teníamos un invierno tan formal y bueno como este de este año.  En Nueva Esperanza se encuentran varias muje- res jóvenes conocidas de ustedes embarazadas: Tica, Esperanza, Yanet (Oscar)… Y eso que hoy to- das las parejas se miden mucho lo de tener hijos e hijas. Así que la vida sigue. El centro infantil de  Nueva Esperanza funciona bien, lo mismo que los otros tres de abajo, al sur, El Presidio Liberado,  Amando López y La Canoa, siempre con ayuda so- lidaria internacional. Hay dos psicólogas nuestras, Tica es una, que colaboran en los planes educati- vos fortaleciendo los programas existentes. Tam- bién en las escuelas –centros escolares les llaman ahora- funcionan aulas de parvularia o preescolar con buena participación de alumnos y alumnas de cinco años en adelante.  La enseñanza formal sigue adelante en toda la  zona. El instituto de Nueva Esperanza con los jóve- nes durante los días lectivos de la semana, y los domingos con una población estudiantil de gente  joven y adulta de 160 alumnos y alumnas. Yo estoy  sorprendido de este repunte tan grande y es una de mis alegría mayores aquí hoy. El transporte esco- lar gratuito que dirijo está siempre disponible y,  sin duda, facilita este movimiento de diario y fines de semana. En total son más de 300 estudiantes los que se movilizan entre nosotros para obtener su bachillerato. Lo cual es un logro enorme y más en un país como el nuestro acosado por la violencia de las pandillas y el crimen organizado, con índi- ces de los más altos del mundo, y para contención de los cuales el estudio en edades juveniles es prio- ritario como prevención, aunque sólo sea mirado así. El Bajo Lempa es de las zonas rurales de El Salvador -y de muchas zonas urbanas y suburba- nas también- con mayor índice de educación por habitantes y por niveles de estudio. Y dentro del  Bajo Lempa, la comunidad Nueva Esperanza va a la cabeza de él. Mientras nuestros hermanos y her- manas solidarios sigan apoyando el transporte escolar gratuito pienso yo que mantendremos estos altos índices de población estudiantil y la baja y controlada violencia en la zona, que se expresa en  forma de brotes intermitentes, de vez en cuando en alguna comunidad o lugar. La escuela de Nueva  Esperanza se une a este esfuerzo, pues recibe cada día más de 180 niñas y niños y adolescentes y jóve- nes provenientes de otras comunidades de la zona, algunas a 15 km de distancia, como Las Mesas, La Canoíta, Los Cálix y La Chacastera. 1

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 A mis amigos y amigas y a los hermanos y herma-

nas solidarios con los empobrecidos de esta tierraCarta 125 de la repatriación y la esperanza encar-

nada en la realidad de cada día Nueva Esperanza Bajo Lempa El Salvador CA

2 de septiembre de 2011

 El invierno –tropical, la temporada de lluvias-está avanzado. La gente campesinas agradece a

 Dios la buena cosecha de maíz de este año. Las mi-lpas, aquí en el Bajo Lempa, alcanzan los 2 metros

de altura. Buenas mazorcas, buenos elotes, o “hi-

 jos” de maíz tierno. Los tamales, el atol, las riguas se ofrecen en las casas. No habrá hambre, ni esca-

 sez demasiada de comida, por unos meses al me-nos. Las vacas y otras reses con buen pasto. Tam-

bién hay leche, cuajada, queso, requesón. ¡Qué 

rico con una buena tortilla de maíz bien tostada!

Trabajos con el maíz: destusando la mazorca y

 preparando tamalesQuiero comenzar así, en plan optimista y real,

 porque así es la vida aquí ahora. Trabajo no faltaestos meses. Las lluvias, las tormentas, abundan-

tes, no amenazan con temporales inacabables que

 producen inundaciones. Vienen y van cumpliendoun rito armonioso, agradecido por la población, la

vegetación, los animales. Todos contentos. Por ahora. Quedan los dos meses más tremendos para

esto de las lluvias, setiembre y octubre. En noviem-

bre se despiden hasta regresar de nuevo en mayo,

 si todo va normal. Porque con esto del calenta-miento global también se muestran irregulares.

 Hacía años no teníamos un invierno tan formal y

bueno como este de este año.

 En Nueva Esperanza se encuentran varias muje-res jóvenes conocidas de ustedes embarazadas:

Tica, Esperanza, Yanet (Oscar)… Y eso que hoy to-das las parejas se miden mucho lo de tener hijos e

hijas. Así que la vida sigue. El centro infantil de

 Nueva Esperanza funciona bien, lo mismo que losotros tres de abajo, al sur, El Presidio Liberado,

 Amando López y La Canoa, siempre con ayuda so-lidaria internacional. Hay dos psicólogas nuestras,

Tica es una, que colaboran en los planes educati-

vos fortaleciendo los programas existentes. Tam-bién en las escuelas –centros escolares les llaman

ahora- funcionan aulas de parvularia o preescolar con buena participación de alumnos y alumnas de

cinco años en adelante.

 La enseñanza formal sigue adelante en toda la zona. El instituto de Nueva Esperanza con los jóve-nes durante los días lectivos de la semana, y los

domingos con una población estudiantil de gente

 joven y adulta de 160 alumnos y alumnas. Yo estoy sorprendido de este repunte tan grande y es una de

mis alegría mayores aquí hoy. El transporte esco-lar gratuito que dirijo está siempre disponible y,

 sin duda, facilita este movimiento de diario y fines

de semana. En total son más de 300 estudiantes losque se movilizan entre nosotros para obtener su

bachillerato. Lo cual es un logro enorme y más enun país como el nuestro acosado por la violencia

de las pandillas y el crimen organizado, con índi-

ces de los más altos del mundo, y para contenciónde los cuales el estudio en edades juveniles es prio-

ritario como prevención, aunque sólo sea miradoasí. El Bajo Lempa es de las zonas rurales de El 

Salvador -y de muchas zonas urbanas y suburba-

nas también- con mayor índice de educación por habitantes y por niveles de estudio. Y dentro del 

 Bajo Lempa, la comunidad Nueva Esperanza va ala cabeza de él. Mientras nuestros hermanos y her-

manas solidarios sigan apoyando el transporte

escolar gratuito pienso yo que mantendremos estosaltos índices de población estudiantil y la baja y

controlada violencia en la zona, que se expresa en forma de brotes intermitentes, de vez en cuando en

alguna comunidad o lugar. La escuela de Nueva

 Esperanza se une a este esfuerzo, pues recibe cadadía más de 180 niñas y niños y adolescentes y jóve-

nes provenientes de otras comunidades de la zona,

algunas a 15 km de distancia, como Las Mesas, LaCanoíta, Los Cálix y La Chacastera.

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8/4/2019 carta número 125 (03-09-2011) del Bajo Lempa/El Salvador

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Transporte de estudiantes de fin de semana al y del Instituto Nueva Esperanza desde y a las comunidades (poblados) de la

 zona

 En Nueva Esperanza el comité de seguridad quetrabaja dentro de ella, compuesto de forma directa

 por más de treinta miembros, convocó, junto con ladirectiva comunal, a una reunión sobre temas de

 seguridad, pues había datos que precisaban cono-

cimiento general y toma de decisiones comunita-rias., como visitas de gentes extrañas en las noches

o petición de dinero, mediante extorsión o renta lollaman aquí, entre otras. Una reunión fue con toda

la gente de la comunidad y otra con los jóvenes.

 Entre los resultados fue reponer las luces apagadasde las candelas o faroles nocturnos de la comuni-

dad –sólo Nueva Esperanza y Ciudad Romero tie-nen alumbrado público en el Bajo Lempa-, limitar 

la salida a la calle hasta las 9 de la noche (equiva-

lente a las 11 de la noche en Europa, más o me-nos), hacer un llamado a los jóvenes y en particu-

lar a algunos de ellos, tomar conciencia que la se- guridad es cosa de todos/as y que queremos seguir 

viviendo tranquilos como hasta ahora desde que

llegamos.

 Ayer jueves 1 de setiembre hubo una despedida a Kevin, a un grupo de catalanes/as de Horta, Barce-

lona, y de recepción a dos jóvenes alemanas que

quedarán tres meses en Nueva Esperanza. Partici- pó de hecho toda la comunidad. Hubo números ar-

tísticos de música y danza que revelan el alto nivel que mantenemos en estos aspectos, la verdad. Y 

otros aportes. Kevin es un fotógrafo inglés que ha permanecido nueve meses entre nosotros en Nueva

 Esperanza y ha sacado fotografías de toda la vida

de la comunidad. Nadie como él tiene un reporte gráfico de lo que somos en este momento. Espera-

mos compartirlo algún día, aparte las exposicionesde fotos que ya ha realizado con nosotros. Gente

 joven de la solidaridad catalana también han per-

manecido más de un mes entre nosotros, compar-

tiendo sobre todo con jóvenes y niñas/os, y así han pintado de nuevo el mural del puente, manchado el anterior por pintadas ajenas y que fue borrado del 

todo. Las jóvenes alemanas colaborarán en el cen-

tro infantil de Nueva Esperanza por unos tres me- ses.

 La Unidad de Salud más cercana a nosotros, que

dirige la doctora Ana Julia, una de nuestras exestu-diantes becadas, está a pleno rendimiento. Además

de aumentar la demanda entre la gente de las co-

munidades por su buena atención, pacientes queiban al hospital de Usulután, o a Jiquilisco, ahora

 se quedan aquí, en cuestiones de consultas, recetasde medicinas, fisioterapia, odontología, enferme-

ría. Bueno, un éxito. Y queda por construir la nue-

va unidad en terrenos cedidos por la comunidad Ciudad Romero a partir de noviembre. De forma

que de aquí a un año tendremos como un hospita-lito con varias especialidades para toda la zona.

 Aunque desde Jiquilisco jalan, tiran para llevarse

allí parte de estas especialidades. En los meses

 próximos veremos cómo queda todo esto de la sa-lud en la zona. Pero sin duda con mejoras sensi-bles importantes.

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 Escenas de la Unidad de salud Nuevo Amanecer 

 De mí, ya saben algo de cuestiones de salud re-

ciente, como la operación de hernias que he tenidohace un mes y de la que me encuentro restablecido

del todo. De hecho no dejé las actividades que ten- go ni siquiera la primera semana de convaleciente.

 Estoy preocupado por la situación interna de nues-

tra iglesia, pues no se ha solucionado del todo. Aquí las cuestiones de iglesia afectan a la gente y

las comunidades, pero prefiero dejarlo así, sinotras explicaciones, pues en otros ambientes estos

asuntos se miran de otra manera. Una cosa que

lleva es que no me he sentido con ganas de escribir de manera personal a casi nadie, así que me dis-

culpan por ello.

 Espero que quienes han disfrutado de algunas

buenas vacaciones este tiempo se encuentren conel mejor ánimo y podamos seguir unidos en este

caminar en el tiempo y el espacio en que nos en-contremos. Estos días he leído un precioso artículo

 sobre nuestra generación y otras generaciones en

 Eclesalia –“Decíamos ayer”, del 1 de setiembre-con el que me identifico y que expresa bien el sen-

tir de esta hora para todos nosotros. Un abrazo, un saludo, algo cercano y comunicacional para cada

uno/a de ustedes. Su hermano y amigo Angel AQ

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