Cómo tener un desacuerdo saludable

Este artículo es cortesía de Revista HomeLife.

Nunca he sido el tipo de mujer para crear comidas gourmet. Puedo seguir con éxito una receta,

pero yo no diría que soy un gran cocinero. Muy temprano en mi matrimonio, yo podría hacer

cerca de cuatro platos. Terrell y yo comimos mucho pollo y judías verdes. Yo también podría

hacer un pastel, así que había que. De alguna manera me perfeccioné sopa de patatas casera,

que se convirtió rápidamente en la comida favorita de mi marido... hasta que la lucha Sopa de

patata.

Cómo tener un desacuerdo saludable

La cena comenzó inocentemente. Terrell amó a la sopa, pero tomó mucho tiempo para hacer.

Tanto con los que trabajamos nuevos puestos de trabajo, me decidí a hacer una tanda doble

para que pudiéramos tener sobras. Nos sentamos a comer, y Terrell terminado su primer tazón.

"¿Te importa si me da más?" , preguntó. Tenía una segunda porción. Pero cuando él se sirvió la

tercera copa, le espeté. "No comer todo! Hice lo suficiente para las sobras, y que está comiendo

todo!"

Después de que me mira como si estuviera loco, mi marido se acercó a la basura y se vierte

todo el tazón en la lata. Sopa de patata nunca ha probado la misma.

Terrell y yo celebramos 27 días de felicidad casado antes de que tuviéramos esa primera pelea.

Y lo que un ojo abridor que era. Me casé con mi mejor amigo. Sabíamos cómo hacer reír unos a

otros, sabíamos cómo hablar de cualquier cosa, y sabíamos cómo llevarse bien. Pero no

teníamos idea de cómo luchar.

Por lo tanto, nuestro primer argumento - en lugar de sopa - terminó conmigo gritando como

una loca y mi marido por temor a nuestro matrimonio estaba condenado porque estaba

levantando mi voz.

Yo vengo de una larga línea de gente ruidosa, expresivos que hacen todo con pasión -

incluyendo discutir. Mi marido se crió en una zona tranquila, casa reservada y nunca vio ni oyó

sus padres no están de acuerdo. Cuanto más le grité porque Terrell no sería discutir conmigo,

más se volvió hacia el interior. Estábamos en una encrucijada de la ira y el dolor, y no teníamos

ni idea de dónde ir desde allí.

Terrell y yo pasamos varios meses la corrección de los otros "errores". (Se volvió a los vasos en

el armario de abajo; yo los presenté.) Y sí, argumentó sobre cosas tontas como esta

constantemente. Los cónyuges que viven juntos en la honestidad y la transparencia van a estar

en desacuerdo a veces. No es si luchamos, es cuando. Pero, ¿cómo lo hacemos de una manera

que agrade a Dios y nos mueve en una mejor relación con los demás?

Afortunadamente mi marido y yo hemos reunido consejos prácticos para ayudar a forjar un

equilibrio saludable de desacuerdos productivas y significativas. Aunque nuestros argumentos

han cambiado con los años, todavía tenemos que aplicar estos principios para ayudar a resolver

las diferencias y crecer como pareja. (Pero los vasos en los armarios están vueltas hacia arriba

ahora.)

Cuando los ánimos se caldean

1. Memorice Santiago 1: 19-20

"Todo el mundo tiene que ser pronto para oír, tardo para hablar, tardo para la ira, porque la ira

del hombre no obra la justicia de Dios."

Recordando este versículo en el medio de una discusión puede cambiar todo - el tono, el

contexto, su reacción. Detener recordar este verso también puede ayudarle a escuchar y

mantener la calma.

2. Aclarar el problema

Asegúrese de entender lo que el argumento es realmente acerca de. Mi primera gran pelea con

mi marido no era realmente de sopa; era cuestión de respeto, el amor y la comunicación.

Repita el problema para asegurarse de que escuchó lo que su cónyuge está realmente tratando

de decir. A menudo, los argumentos no son acerca de pequeñas cosas como ropa colocada en

el suelo; por lo general son sobre temas más profundos como sentirse poco apreciada.

3. Valide su pareja

Escuchar es a veces la mejor cosa que usted puede ofrecer a su cónyuge. En el calor del

momento, a menudo el ofendido sólo quiere ser escuchado. Puede mostrar respeto e incluso

un temperamento fresco cuando simplemente escuchar. Observe la atención se centra en la

escucha, que no se fija. Hay momentos adecuados para ofrecer soluciones y momentos

apropiados para escuchar solamente. Descifrar los dos tiene la sabiduría y la disciplina.

4. Aplicar el autocontrol

Usted sabe que lo que realmente, realmente desea abiertamente estar en cólera - que nombre

o error del pasado que le viene a la mente - no lo dicen. Resista la tentación de nombre de

llamada, drudge el pasado, y señalar con el dedo. La aplicación de este fruto del Espíritu parece

tan simple, pero puede ser tan difícil, especialmente con su pareja. Pídale a Dios que le

ayudarán a si se lucha en esta área.

5. Mire su entrega

Todo el mundo responde mejor a la bondad. Es demasiado fácil decir cosas hirientes a su

cónyuge que nunca le diría a un amigo. La entrega es crucial cuando se trata de una crítica

constructiva, de modo sándwich intencionalmente sana crítica entre el amor y halagos. Por

ejemplo, decid primero: "Muchas gracias por hacer que los almuerzos de los niños." Luego

pregunte: "La próxima vez, ¿te importaría limpiando los contadores?" Termina con: "Realmente

me encanta cuando me ayudas en las mañanas. Ayuda a comenzar mi día de la derecha."

6. Orad sin cesar

Pida sabiduría, el autocontrol y la paz en tu corazón. No hace falta decir que usted debe estar

orando por y con su cónyuge. Pero lo haces? Y en medio del conflicto, en algunos casos, es

totalmente apropiado para detenerse y orar. Sólo asegúrese de que ambos estén listos para

recibir esto. El tiempo lo es todo.

7. Ser parte de la solución

Dado que el objetivo final de resolver un desacuerdo es el crecimiento y la armonía, dejar de

lado su orgullo y ofrecer una solución que funcione si la situación lo exige. A menudo,

simplemente necesita la ayuda de su compañero, así que no tenga miedo de preguntar.

Algunos desacuerdos no necesitan una solución, por lo que evalúan cada situación

cuidadosamente.

8. No digas una palabra

A menudo la cosa más espiritual que puede hacer es no decir nada. A veces lo mejor es

abstenerse de ofrecer un regreso, dando un ejemplo, o la defensa de su posición. Estar callado

puede mostrar fuerza. No siempre va a tener las respuestas o soluciones a los desacuerdos, y

usted puede hacer peores situaciones por decir demasiado.

Aunque a nadie le gusta que se resuelve cuestiones difíciles, la realidad es que todas las parejas

discuten. Es la forma de luchar contra lo que importa. Desacuerdos saludables que se resuelven

generalmente mover su matrimonio hacia adelante. El objetivo debe ser siempre para honrar y

respetar a su esposo en el proceso de llevarse bien. Y no se olvide de una de las mejores partes

de la lucha - que componen.