Dabrowski-y-la-Teoría-de-desintegración-positiva

27
Extret el 21 d’abril de 2015 de http://es.sott.net/article/10915- Dabrowski-y-la-Teoria-de-desintegracion-positiva 1.1 Dabrowski y la Teoría de desintegración positiva Álvaro González Sott.net mie, 28 dic 2011 05:08 UTC Comentario: El siguiente artículo está parcialmente basado en el escrito "La teoría de la desintegracion positiva de Dabrowski" de Raquel Pardo de Santayana Sanz. "En la civilización occidental la vida interior del individuo - con toda su riqueza - se encuentra relegada al último plano de la existencia. El hombre está tan atrapado en el engranaje de la vida mecanizada que no le queda tiempo para hacer alto ni el poder de atención necesario para dirigir hacia sí mismo su mirada mental. El hombre pasa sus días absorbido por las circunstancias. La inmensa máquina que lo arrastra gira sin cesar y le impide detenerse, a riesgo de ser destrozado. Hoy como ayer y mañana como hoy, se agota el hombre en esa carrera desenfrenada, lanzado en una dirección que, en definitiva, no lo conduce a ninguna parte. La vida pasa casi desapercibida, rápida como un trazo de luz; después, siempre ausente de sí mismo, cae, devorado." Boris Mouravieff, Gnosis I © Desconocido En la época actual en la que vivimos nos encontramos ante unas circunstancias preocupantes a todos los niveles. La situación es evidentemente insostenible. Cada día que pasa las masas

description

Dabrowski-y-la-Teoría-de-desintegración-positiva

Transcript of Dabrowski-y-la-Teoría-de-desintegración-positiva

Extret el 21 d’abril de 2015 de http://es.sott.net/article/10915-Dabrowski-y-la-Teoria-de-

desintegracion-positiva

1.1 Dabrowski y la Teoría de desintegración positiva

Álvaro González

Sott.net

mie, 28 dic 2011 05:08 UTC

Comentario: El siguiente artículo está parcialmente basado en el escrito "La teoría de la

desintegracion positiva de Dabrowski"de Raquel Pardo de Santayana Sanz.

"En la civilización occidental la vida interior del individuo - con toda su riqueza - se encuentra

relegada al último plano de la existencia. El hombre está tan atrapado en el engranaje de la

vida mecanizada que no le queda tiempo para hacer alto ni el poder de atención necesario

para dirigir hacia sí mismo su mirada mental. El hombre pasa sus días absorbido por las

circunstancias. La inmensa máquina que lo arrastra gira sin cesar y le impide detenerse, a

riesgo de ser destrozado. Hoy como ayer y mañana como hoy, se agota el hombre en esa

carrera desenfrenada, lanzado en una dirección que, en definitiva, no lo conduce a ninguna

parte. La vida pasa casi desapercibida, rápida como un trazo de luz; después, siempre

ausente de sí mismo, cae, devorado." Boris Mouravieff, Gnosis I

© Desconocido

En la época actual en la que vivimos nos encontramos ante unas circunstancias

preocupantes a todos los niveles. La situación es evidentemente insostenible. Cada día que

pasa las masas sociales se sienten más furiosas y confusas; se sienten engañadas por sus

gobiernos, por las multinacionales en las que trabajan o de las que son clientes, no saben en

quién creer y no se divisan posibles soluciones eficientes para mejorar el estado de las

cosas. La ciencia miente y la educación que reciben los niños es defectuosa y se ha

quedado totalmente obsoleta . Y podría continuar con una larga lista presentando los

aspectos corruptos de nuestra realidad creados y controlados por el Poder Reinante, pero

esta vez me centraré en algo muy concreto y vital: ¿Qué ocurre con la masa social, con las 

personas que en su mayoría se sienten furiosas y confusas? ¿Hacia dónde vamos? ¿Qué 

podemos   hacer   para  mejorar   la   situación   que   estamos   viviendo?   ¿Es   suficiente   con 

manifestarse en las calles abogando por el fin del capitalismo o de un gobierno? En este

artículo hablaremos sobre estas cuestiones.

Teoría de la Desintegración Positiva

Kazimierz Dabroswki fue un psicólogo, médico y psiquiatra que, después de varios años de

experiencia como psicoterapeuta e investigador de la vida de individuos superdotados y

personajes famosos por sus logros, desarrolló la Teoría de la Desintegración Positiva,

centrada en el estudio y observación de la evolución personal de los individuos hacia

estadios psicológicos más avanzados.

© Desconocido

Kazimierz Dabrowski

Para ello, Dabrowski postuló que existen distintas fases dentro del crecimiento personal, las

cuales están interconectadas unas con otras. Cada fase o nivel de desarrollo está

"compuesto" por una serie de características que definen el mismo y que Dabrowski

denominó dinamismos. Así pues, los   dinamismos   son   las   características   cognitivo-

emocionales que definen el nivel de desarrollo del individuo.

A continuación analizaremos los niveles de desarrollo y sus dinamismos con el fin de definir

cuáles son las rasgos que guían la voluntad humana y de cómo vive la masa social; si el ser 

humano se conoce a sí mismo obtendrá su propio estado de bienestar e igualmente será 

capaz de ayudar de forma beneficiosa a los demás.

Es necesario aclarar que evidentemente cada ser humano es distinto y que por tanto

manifiesta características de los diferentes niveles de desarrollo; de hecho es lo habitual.

Pero ciertamente, cada persona, aunque sus manifestaciones pertenezcan a las diferentes

fases, estará más sumergido en un nivel concreto que en los demás.

Fase de Integración primaria

Este nivel de desarrollo nos habla de las características innatas de un individuo, basadas en 

el egocentrismo, hecho que provoca que el sujeto perciba el ambiente externo como un 

lugar   en   donde   conseguir   sus   intereses  más   inmediatos;   a   su   vez,   las   personas   que 

componen   ése   ambiente   externo   son  meros   instrumentos   con   los   cuales   lograr   los 

objetivos que se ha propuesto.

Cabe destacar que el nivel de integración primaria corresponde a la forma de percibir el

mundo desde una perspectiva psicopática. El psicópata experimenta la vida de esta manera.

Para el resto de las personas es un paso previo antes de adquirir los valores sociales

establecidos en su cultura de pertenencia

Las características o dinamismos principales de este nivel reflejan aún mejor el

comportamiento psicópatico:

Conflicto   externo: El sujeto se mantiene en un continuo conflicto con el resto de los

individuos del medio que le rodea cuando no se siente responsable de sus acciones (un

rasgo fundamental del psicópata: ausencia de sentimiento de culpabilidad por sus acciones

manipuladoras, agresivas, etc., es decir, irresponsabilidad ante sus actos sea de la naturaleza

que sean).

Sintonía temperamental: Cuando el sujeto participa en actividades grupales con el resto de

individuos, se adapta a las circunstancias - sobretodo si las actividades no tienen implicación

emocional alguna-, siempre con el fin de lograr su objetivo.

Si tenemos en cuenta que vivimos en una sociedad controlada en su mayoría por psicópatas,

que estipulan cuáles  son  los  valores  éticos y  morales  de  las  civilizaciones,  controlan el 

complejo   militar/industrial   y   que   por   tanto   manipulan   los   sistemas   en   los   que   la 

humanidad   se   sustenta, podemos hacernos una ligera idea de por qué el mundo se

encuentra en la situación actual, donde los valores humanos se perdieron y los individuos 

son meros instrumentos del Sistema, utilizados para conseguir los fines que se propongan ,

ya sea por parte de las corporaciones internacionales o de los gobiernos - aunque ambos van

siempre de la mano-. Recomiendo el documental "La Corporación" para verlo más

claramente.

Fase de Desintegración Uninivel

En este nivel el individuo asume los "valores" sociales de la cultura a la que pertenece, es 

decir, se forja en su personalidad la moral, la ética, o más claramente los conceptos de qué 

está bien y qué está mal. En primer lugar, en este punto las personas son condicionadas por

la cultura, adquiriendo una visión subjetiva de la realidad que no le permite ver las cosas tal 

como son, sino tal como le ha sido inculcado. Este hecho resta libertad en el individuo, ya 

que, en lugar de pensar por sí mismo, es pensado por la sociedad a la que pertenece. Y una

sociedad fundamentada en el egoísmo, la manipulación y la mentira no puede sino crear

individuos de similares características.

Evidentemente no estoy diciendo que todo ser humano sea de esta manera, pero sí es cierto

que la tendencia actual es esta. Con tan sólo echar un vistazo a nuestro alrededor - y por qué

no, a nosotros mismos- comprobaremos que esta afirmación no está alejada de la verdad

que vivimos cada día en el trabajo, con la familia o con los vecinos.

En cierta manera, según Dabrowski, la Desintegración Uninivel provoca un choque interno

en el sujeto ya que los nuevos valores integrados se contrastan con la tendencia egoísta de

la Integración Primaria. Cierto es que, como veremos ahora, se crea un conflicto interno

entre las tendencias primarias y los valores adquiridos. Aunque ahora los valores están

basados en el egocentrismo, cosa que no se diferencia demasiado de el estado de

Integración primaria. Las personas tienen valores también positivos, no podemos decir que

todas son egocéntricas. Pero es la tendencia dominante. En el mundo laboral se puede ver

esto de forma muy clara. Según en qué ámbito laboral nos encontremos - en casi todos-, es

posible observar que las virtudes de una persona no son relevantes en absoluto, sino que lo

importante es cuál es su cota de producción. No importa que engañe, que manipule y que

pase por encima de sus compañeros. Igualmente existe tal condicionamiento en nuestra vida

social, en la que el concepto de amistad o fraternidad se ha convertido en algo ambiguo.

De hecho, la fraternidad o el trabajo en grupo se ha transformado en algo extraño y

sospechoso para la sociedad actual.

A continuación analizaremos los dinamismos de este nivel.

Ambivalencia: Es la coexistencia entre los sentimientos primarios - egoístas- y los valores

sociales adquiridos. Prácticamente todo ser humano se debate entre una tendencia u otra

cuando ha de tomar una decisión.

Ambitendencia: Deriva de la ambivalencia; es la contradicción plasmada en la conducta del

sujeto.

Susceptibilidad hacia la influencia externa: Es la sensibilidad del individuo ante las opiniones

o consideraciones vertidas por el grupo al que pertenece, ya sea por su carácter o la

conducta.

Es innegable que a los seres humanos nos  importa mucho lo que los demás opinen de 

nosotros. Uno de los motivos de por qué ocurre esto es porque las personas requieren ser 

admitidas por el grupo o sociedad a la que pertenecen o desean pertenecer. Otro motivo 

es el orgullo y la necesidad del individuo por ser bien considerado. En parte de ahí nace la 

hipocresía.

Identificación: Una necesidad general para el ser humano es identificarse con alguno o

varios aspectos de la realidad circundante, sea una ideología, un partido político, una

imagen, religión, deporte, un grupo de personas y un largo etcétera. El sentirse identificado

le proporciona seguridad y un supuesto bienestar psicológico.

Contrario a lo que suele decirse, esto no es positivo, pues resta la libertad del sujeto porque

cree que no puede hacer ciertas cosas que no entran en los valores estipulados por el grupo

de pertenencia y, además, cada persona debería de sentirse seguro de forma individual, y 

su bienestar psicológico habría de surgir de sí mismo. Eso no significa que no participemos

de una forma u otra en o con un grupo. Es decir:  una cosa es sentirse identificado con un 

grupo o idea y vivir tan sólo según sus normas o formas de percibir y experimentar la 

realidad, y otra bien distinta es ser afín a un grupo y contribuir a una causa común para el 

beneficio   individual   y   colectivo  manteniendo   la   propia   libertad  de  pensamiento   y   de 

conducta.

Ahondando aún más en el concepto de "identificación", podemos ver que continuamente las

personas se identifican con todo: con una emoción, con una creencia, con un objeto, con un

grupo, etc. Aquello que le parece más atractivo a un ser humano será la cosa con la que se

sienta más identificado. Y teniendo en cuenta que las personas en su fuero interno son

contradictorias respecto a sus creencias, sentimientos y conducta, durante un instante se

sentirán identificadas con cualquier cosa, y al siguiente momento la repudiarán, a su vez

identificándose con otra. Algunas veces se mantendrán fieles a "sus principios" aunque

internamente se sientan confusas y un día quieran aquello y al otro día no lo quieran más.

En muchas ocasiones los seres humanos no ven las cosas claras. Sí que es cierto que es 

necesario  desarrollar   la capacidad de analizar  cada aspecto de  la vida desde todos  los 

prismas posibles, pero eso no significa que tengamos que identificarnos con cada uno de 

ellos en todo momento. No identificarnos supone ver las cosas con claridad, con objetividad,

y eso nos guiará hacia la dirección correcta en nuestro bienestar psicológico. G.I. Gurdjieff

dijo:

[...]El hombre está siempre en estado de identificación; sólo cambia el objeto de su

identificación.

"El hombre se identifica con un pequeño problema que encuentra en su camino y olvida

completamente las grandes metas que se propuso al principio de su trabajo [entiéndase

"trabajo" como desarrollo personal]. Se identifica con un pensamiento y olvida todos los

demás. Se identifica con una emoción, con un estado de ánimo, y olvida otros sentimientos

más profundos. Al trabajar sobre sí mismas, las personas se identifican hasta tal punto con

metas aisladas que pierden de vista el conjunto. Para ellas los dos o tres árboles más

cercanos llegan a representar todo el bosque.

"[...]Es indispensable ver y estudiar la identificación a fin de descubrirla en nosotros mismos

hasta sus raíces más profundas. Pero la dificultad de la lucha contra la identificación se

acrecienta aún más por el hecho de que cuando la gente la nota, la mira como una cualidad

excelente y le concede los nombres de «entusiasmo», «celo», «pasión», «espontaneidad»,

«inspiración», etc. Consideran que realmente no pueden hacer un buen trabajo en cualquier

terreno sino en estado de identificación. En realidad esto es una ilusión. En tal estado el

hombre no puede hacer nada sensato. Y si la gente pudiera ver lo que significa el estado de

identificación, cambiaría de opinión [...]. Miren  a   la  gente  en   las  tiendas,   los   teatros  o 

restaurantes.  Vean   cómo  se   identifican   con   las  palabras   cuando  discuten  o   tratan  de 

probar algo, sobre todo algo que no conocen. No son más que deseo, avidez, o palabras; 

de ellos mismos no queda nada.

[...]Mientras un hombre se identifique o sea susceptible de identificarse, es esclavo de todo

lo que puede sucederle. La libertad significa ante todo liberarse de la identificación."

Mientras continuemos identificándonos con los valores psicopáticos establecidos, mientras

sigamos siendo esclavos de nuestro condicionamiento moral, ético, educacional, religioso,

cultural, etc., nunca seremos libres de pensar y actuar conscientemente por nosotros

mismos. Sería apropiado reconocer que somos responsables de nuestra esclavitud. Ser 

responsables  en  lugar  de quejarnos de cuanto acontece en el  mundo y de  lo que nos 

ocurre a nosotros mismos.

Conflicto   interno: En ciertas ocasiones, sobre todo cuando el sujeto recibe un choque

psicológico provocado por una situación que puede considerar conflictiva o problemática,

nace lo que es conocido como conflicto interno. Esto significa que el individuo, tras percibir

el condicionamiento que lo mantiene subyugado, comienza a darse cuenta de su esclavitud

ante la vida, y se plantea que quizá podría ser una persona diferente y más íntegra de lo que

creía. Las personas que la sienten con frecuencia llegan a plantearse "lo que son" y lo que

"podrían o deberían ser". Aunque considerarse esclavo de la sociedad de pertenencia es

duro y un proceso en ocasiones doloroso, es un paso muy importante, ya que darse cuenta

conscientemente de ello transporta a las personas hacia el comienzo del desarrollo

psicológico positivo, en el que verán su condicionamiento y programas psicológicos más

arraigados - sobre todo en la infancia-.

Conflicto externo: En ocasiones se crea el conflicto externo, pero ya no como antes, debido

a que el individuo se adapta a lo convencionalmente aceptable en el plano social.

Podemos ver claramente que la inmensa mayoría de las personas, indiferentemente de la

cultura, país o credo al que pertenezcan, viven en circunstancias similares a las

expuestas. Dentro de nosotros se gestan contradicciones todos los días de nuestras vidas, e 

igualmente ocurre con nuestro comportamiento; somos completamente susceptibles a las 

influencias externas, y aunque cueste aceptarlo, dependemos muchas veces de ellas para 

vivir e incluso para definirnos como personas. Nos identificamos con cualquier cosa y nos 

arrebatamos a nosotros mismos la libertad de pensar y actuar por nuestra cuenta. Y a 

veces nos planteamos si  todo esto es correcto o positivo para nuestras vidas. Quien se

hace consciente de ello comienza a vivir de forma distinta, y es aquí donde empieza el

desarrollo psicológico positivo.

Condicionamiento; programación de la psique

Antes de continuar ahondando en la Teoría de la Desintegración Positiva, quisiera enfocar la

atención en un punto concreto: el condicionamiento, la programación o inculcación de una

serie de ideas, preconceptos, prejuicios, etc. que configuran la percepción y la forma de vivir

de cualquier individuo.

A través de la experiencia y de la asunción de los valores establecidos, ya en la infancia los

seres humanos crean el hábito de utilizar "máscaras psicológicas" con el fin de sentirse

seguros en el ambiente en el que se encuentran. Los factores que crean estas máscaras son

varios; el   aprendizaje   por   imitación,   los   traumas   ocasionados   en   la   infancia,   la 

supervivencia   en   el   ambiente,   etc. Por este motivo, con la asunción de los valores

establecidos, los individuos ya no mantienen tantos conflictos externos como en la fase de

Integración Primaria. Estas "máscaras psicológicas" son conocidas también como "difusión

de la identidad" o disociación. Laura Knight escribe:

"La   difusión   de   identidad   se   refiere   a   la   estructura   psicológica   caracterizada   por   la 

fragmentación en lugar de la integración de las representaciones de uno mismo y otros, 

uno mismo en relación con otros, que es internalizada durante los años de crecimiento de 

una persona.

[...]

[...] una persona puede disociar en cualquier momento cuando está pasando por un periodo

duro que pone mucha presión sobre las emociones y el pensamiento. La cuestión es, que

una vez que lo haces, se vuelve más fácil de hacer la siguiente ocasión y la siguiente y la 

siguiente...

[...]

"La difusión de la identidad se convierte en un problema cuando lleva a emociones carentes

de valores u objetivos o un "yo central". Esto quiere decir que la persona va a través de la

vida sin creencias, valores ni metas consistentes; no tienen un sentido claro de dirección; y lo

que es claro para ellos está determinado únicamente por la situación en la que se

encuentran. Son como veletas, cualquier dirección en la que el viento sople, giran y van 

hacia allá. Si están con un grupo que hace esto o aquello, lo hacen sin pensarlo porque eso 

es lo que todos están haciendo.

"Creo que todos ustedes pueden ver fácilmente que la difusión de identidad se manifiesta en

mayor o menor medida en prácticamente todo el mundo."

© Desconocido

La disociación de la personalidad - en el contexto que nos ocupa - nos lleva a la ambivalencia

de la conducta humana, y obviamente se crean y continúan sus manifestaciones debido a la

susceptibilidad ante la influencia externa, la identificación con los estados disociativos, los

traumas - como hemos comentado más arriba, ocasionados en la infancia-, el narcisismo en

la familia, etc. Y cuando una persona se da cuenta de ello, aparece el conflicto interno que le

hace reflexionar acerca del por qué de sus pensamientos y emociones. En la enseñanza del

Cuarto Camino, el concepto de disociación es conocido como "tope".

Gurdjieff define los topes de esta manera:

"«Tope» es un término que necesita una explicación especial. Todos saben lo que son los

topes de los vagones de ferrocarril: aparatos amortiguadores de choques. Los topes atenúan

los efectos de estos choques y los hacen imperceptibles."

"En el hombre existen dispositivos exactamente análogos. No son creados por la naturaleza

sino por el hombre mismo, aunque involuntariamente. En   su  origen   se  encuentran   las 

múltiples contradicciones de sus opiniones, de sus sentimientos, de sus simpatías, de lo 

que dice, de lo que hace. Si un hombre tuviese que sentir durante su vida entera todas las

contradicciones que están en él, no podría vivir ni actuar tan tranquilamente como ahora.

Sin cesar se producirían en él fricciones; sus inquietudes no lo dejarían reposar nunca. No

podemos ver cuán contradictorios y hostiles entre sí son los diferentes «yoes» que forman

nuestra personalidad. Si un hombre pudiera sentir todas estas contradicciones sentiría lo

que él realmente es. Sentiría que está loco."

"Un hombre no puede destruir sus contradicciones, pero deja de sentirlas cuando los topes

aparecen en él. A partir de entonces ya no siente los impactos que resultan del choque entre

perspectivas, emociones y palabras contradictorias."

"Los «topes» se forman lenta y gradualmente. Muchísimos se crean artificialmente por la

«educación». [...] El  hombre está rodeado de gente que habla,  piensa,  siente,  vive por 

medio   de   sus   «topes».   Al   imitarlos   en   sus   opiniones,   acciones   y   palabras,   crea 

involuntariamente en sí mismo «topes» análogos que le hacen la vida más fácil, ya que es 

muy  duro  vivir   sin  «topes». Pero éstos impiden toda posibilidad de desarrollo interior

porque están hechos para amortiguar los choques; empero, los   choques,   y   sólo   ellos, 

pueden sacar al hombre del estado en que vive, es decir, despertarlo."

Sencillamente, a lo que Gurdjieff se está refiriendo es a que nos engañamos a nosotros 

mismos   continuamente. Y esto, por consiguiente, significa que en muchas ocasiones

nuestras relaciones interpersonales son ilusorias, en el sentido de que según en el contexto

o situación en la que nos encontramos adoptamos un papel que posiblemente no queramos

interpretar.

Aquí también entra en escena el concepto de "familia narcisista". En primer lugar, es

necesaria una definición básica sobre el concepto de narcisismo como tal. No al narcisismo

como trastorno psicológico, si no como conducta del individuo, que en ocasiones puede ser

debido a un trastorno y en otras al condicionamiento mencionado. En palabras de Stephanie

Donaldson-Pressman y Robert M. Pressman, autores de la obra "La familia narcisista", el

narcisismo es "estar absorto en sí mismo, padecer una carencia de consideración y/o

preocupación, una cierta superficialidad, preocupación por las apariencias externas, falta de

profundidad, distanciamiento - desgana de acercarse mucho o dar mucho-." Por

tanto, "cualquiera de todas estas descripciones, en distintos grados y con una distinta

frecuencia, pueden ser utilizados para describir al sistema parental de la familia narcisista".

Debido a las circunstancias socioculturales, podemos percatarnos de que esta misma

descripción equivale en parte a la sintomatología de la psicopatía. Aunque las figuras

parentales de una familia narcisista no sean psicópatas, el hecho de que el Poder Reinante

esté en manos de psicópatas y/o individuos patológicos que estipulan los valores y modelos

a seguir, provoca que las personas actúen de manera narcisista, a su vez perjudicando a sus

hijos, pudiendo afectarles traumáticamente en su infancia y después en la adultez,

"obligándoles" a que creen "topes" o "máscaras psicológicas" para sobrevivir en lo que

perciben como la "jungla de la sociedad" en la que gana el más fuerte.

Las máscaras psicológicas fueron necesarias en la infancia del niño para sobrevivir

psicológicamente a la vida circundante, en donde no tenía control real sobre las situaciones

de la vida; el problema es que estas máscaras se continúan utilizando luego en la adultez,

cuando ya no son necesarias. Seguir utilizando estas máscaras distorsiona la percepción de 

la realidad sobremanera.

Los aspectos psicológicos comentados obviamente son vividos y manifestados de forma

inconsciente por las personas, ¡si no muchas cosas serían distintas en el globo azul!

Darnos cuenta de nuestros programas, traumas, preconcepciones y demás parámetros es

esencial para que un ser humano se convierta en una persona psicológicamente sana.

Potencial de desarrollo

Cada persona dispone de un potencial con el que desarrollar su evolución personal.

Dabrowski lo denomina "potencial de desarrollo". Raquel Pardo de Santayana Sanz, en su

artículo "La teoría de la desintegración positiva de Dabrowski", define las características y/o

componentes del potencial de desarrollo de la siguiente manera:

"El "potencial de desarrollo" lo forman tres componentes básicos: herencia, ambiente y un 

factor autónomo. La herencia responde a unas capacidades de partida de las que el sujeto 

dispone  denominadas   "sobre-excitabilidades";   el   segundo  elemento   lo   constituyen   las 

posibilidades que el medio otorga al individuo para que lleve a cabo esa evolución y, por 

último,   el   factor   autónomo   hace   referencia   a   la   conciencia   y   auto-dirección   que   el 

individuo presenta hacia un desarrollo propio, que aparece claramente en el sujeto en el 

cuarto   nivel[Desintegración Multinivel organizada], representado por el dinamismo

denominado "tercer factor" o "elección consciente".

Por tanto, son dos los factores internos que promueven la desintegración positiva en el

sujeto. El primero viene definido por la conciencia del sujeto sobre: sus posibilidades, las

posibilidades que otorga el ambiente y cómo ambas pueden combinarse - es decir, es el

factor que rige la conducta de acuerdo con los valores dominantes del sujeto-. Por su parte,

las sobre-excitabilidades, determinan el potencial innato que el individuo posee para

alcanzar los distintos niveles de desarrollo. Así pues, dependiendo del grado en que se den

estas intensidades y la forma en que el sujeto logre desarrollarlas y ajustarlas al medio a

través del factor autónomo, podrá alcanzar niveles inferiores o superiores en el proceso de

desintegración positiva."

Referente a las sobre-excitabilidades mencionadas, ciertos patrones de conducta del

individuo - es posible observarlo desde la infancia- nos pueden dar pistas de sus

posibilidades innatas de desarrollo. Esto significa que algunos comportamientos que social o

culturalmente son considerados como inapropiados, excesivos, compulsivos e incluso

obsesivos, nos están dando información sobre cuáles son las posibilidades de desarrollo de 

una persona. Si al sujeto se le muestran una serie de pautas y herramientas con las que

canalizar esta energía, todas aquellas conductas que en muchos casos son perjudiciales para

su vida - en el sentido amplio del término- es posible transformarlas en beneficiosos pasos 

de desarrollo psicológico positivo. La siguiente tabla nos muestra algunos ejemplos de los

diferentes tipos y manifestaciones de las sobre-excitabiliades: psicomotora, sensitiva,

intelectual, imaginativa y emocional.

© Raquel Pardo de Santayana Sanz

Cuadro de manifestación de las sobre-excitabilidades

Fase de Desintegración Multinivel espontánea

Un poco más arriba ya lo hemos comentado: cuando el individuo siente que no es lo que

quiere ser y comienza a plantearse lo que podría o debería ser, empieza - o se abre una

puerta hacia ello- su desarrollo psicológico positivo. En este punto el sujeto percibe de forma

confusa los cambios que siente en su vida; no ve muy claro hacia dónde le llevará este

proceso, aunque esté experimentando cambios internos. Por este motivo es desintegración

espontánea.

A partir de entonces los dinamismos cobran un valor real de desarrollo. En ocasiones ciertos

procesos de develación de programas inculcados, de traumas, etc., llegan a ser duros para el

individuo, pero necesarios para la limpieza emocional y el desarrollo psicológico positivo.

Para comprender mejor de qué estamos hablando, desarrollaremos la descripción de los

dinamismos característicos de este estadio.

La   jerarquización: El individuo es consciente de la existencia de niveles superiores e

inferiores de desarrollo psicológico, comprendiendo cuál es su representación en la vida

individual y colectiva.

Insatisfacción con uno mismo: En este punto, el conflicto interno se intensifica y el sujeto se

siente insatisfecho con lo que es y con sus manifestaciones en las situaciones que vive en su

vida diaria. Eso suele provocar enfado y frustración, y es probable que,al ser cada vez más 

consciente de sus programas y condicionamientos, entre en un proceso depresivo. En este 

caso el proceso depresivo en cuestión no será negativo mientras el sujeto no se permita 

hacerlo durar más de lo necesario. Por extraño que parezca, la depresión puede ser un paso

necesario para comprender lo que somos ahora y lo que podemos llegar a ser. En palabras

de Gurdjieff,

"El despertar [es decir, darse cuenta del condicionamiento de uno mismo y de la

imposibilidad para ser psicológicamente sano en su actual estado] sólo  es  posible  para 

aquellos que lo buscan, que lo quieren, y que están dispuestos a luchar consigo mismos, a 

trabajar sobre sí mismos, mucho tiempo y con perseverancia para obtenerlo. Con este fin,

es absolutamente necesario destruir los «topes», es decir, ir al encuentro de todos los

sufrimientos interiores que están ligados a la sensación de las contradicciones. Además, la

destrucción misma de los «topes» exige un trabajo muy largo [...], comprendiendo bien que

para él el despertar de su conciencia estará acompañado de todas las incomodidades y de 

todos los sufrimientos imaginables."

© Desconocido

Gurdjieff deja patente que, a diferencia de lo proclamado por los gurús y seguidores de la

Nueva Era, el desarrollo psicológico y espiritual de uno mismo no es un camino sencillo

únicamente enfocado en lo positivo y a la "creación de la propia realidad a través del amor",

sino que es un camino basado en el  compromiso con uno mismo,  en el  que se puede 

encontrar con aspectos desagradables que forman parte de su psique, al igual que también 

se encontrará con sus heridas traumáticas, narcisistas, etc. De igual manera, De Santayana

Sanz escribe que para Dabrowski, "ese desarrollo o transición no se produce a través de

procesos armónicos sino que, por el contrario, responde a vivencias cargadas de tensión,

conflictos internos, ansiedad e, incluso, desesperación y sufrimiento. Únicamente pueden

encontrarse individuos sin una lucha interior cuando están en el nivel más primitivo de

desarrollo y no presentan potencial para «evolucionar», o bien cuando han alcanzado el nivel

superior."

Inferioridad   hacia   uno  mismo: Ligado a la insatisfacción de uno mismo, debido a la

conciencia de su real estado psicológico y teniendo presente la existencia de diferentes

niveles de desarrollo, el sujeto puede sentir inferioridad ante lo que es y lo que podría ser.

Esto implica un posible proceso depresivo positivo como ya hemos comentado más arriba.

La   sorpresa  e   incredulidad   sobre  uno mismo: Este dinamismo representa la conciencia

crítica de sí mismo, es decir, siendo consciente de su actual estado psicológico, el individuo

se sorprende de su propia conducta, de sus contradicciones y también de las de los demás,

provocando un sentimiento de sorpresa crítica ante ello, deseando corregir lo que considera 

sus defectos.

Sentimientos de vergüenza o culpa: Estos sentimientos surgen cuando el individuo tiene la

sensación de no estar cumpliendo con su criterio de valoración según su concepto de

jerarquización moral. En ocasiones, las personas que buscan y desean convertirse en

individuos psicológicamente sanos llegan a ser demasiado críticos consigo mismos, ya que

saben o perciben "lo que deberían ser o serán" y quieren ajustarse a ése modelo idealizado

de persona íntegra.

Pero es necesario recordar que normalmente todo proceso en la vida es paulatino, y a veces

las personas tenemos conductas indeseables que luego repercuten en nuestro juicio interno

-haciéndonos pensar que somos sucios o no merecedores de ser personas íntegras y

psicológicamente sanas-, pero no por ello somos malos ni nuestro esfuerzo es en vano. Es

decir, también debemos permitirnos  el  equivocarnos,   lo   importante es  que nos  demos 

cuenta de que quizá lo podríamos haber hecho de otras maneras. Todo son lecciones.

Desajuste positivo: Cuando el sujeto se percata de que los valores establecidos - que le

fueron inculcados- no son los más adecuados en relación a su bienestar

psicológico, comienza a gestarse un sentimiento de protesta interna ante los mismos, y es 

en este punto en dónde nace su propio pensamiento independiente. Este hecho abre la 

mente  de   la   persona,   aceptando  que  existen  más  posibilidades  de   las   que   le   fueron 

mostradas desde la infancia.

Empatía: Este dinamismo nos indica la capacidad de compartir con otras personas los

sentimientos y necesidades de uno mismo, y a su vez de ponerse en el lugar de las personas

y comprender qué sienten los demás y por qué.

Actualmente la capacidad empática de las personas, en la gran mayoría de casos, brilla por

su ausencia. Centrados en nosotros mismos y en lo que nos ocurre, olvidamos las

preocupaciones y sentimientos de los demás en muchas ocasiones.

Los mamíferos tenemos una capacidad fisiológica llamada "resonancia límbica". También es

conocida como "contagio del estado de ánimo". Wikipedia define la "resonancia límbica":

La resonancia límbica es la capacidad de compartir estados emocionales profundos que 

surgen del sistema límbico del cerebro. Estos estados incluyen los sentimientos promovidos

por el circuito dopamínico de la armonía empática y los estados emocionales de miedo

originados por el circuito noreprinefrínico, la ansiedad y la ira. El concepto fue propuesto por

primera vez en el libro "A general theory of love". Se refiere a la capacidad de conexión 

empática y no verbal de los animales y que forma la base de nuestras conexiones sociales 

al igual que los fundamentos de varios modos de terapia y curación. Según los autores,

profesores de psiquiatría de la UCSF, nuestros sistemas nerviosos no son independientes, 

sino que, de manera demostrable, están en consonancia con aquellos a nuestro alrededor 

con los que tenemos una relación estrecha. "En el resplandor de su nuevo cerebro, los

mamíferos desarrollaron una capacidad que denominamos "resonancia límbica", una

sinfonía de intercambio mutuo y adaptación interna en la que dos mamíferos pasan a estar

en consonancia con los estados interiores del otro. Por ejemplo, los autores vuelven a contar

detalladamente los conocidos experimentos de Harry Harlow que establecen la importancia

del contacto físico y afecto en el desarrollo cognitivo y social del mono Rhesus. También

hacen un uso extensivo de la investigación posterior a cargo de Tiffany Field del contacto

madre/bebé, Paul D. MacLean sobre el cerebro triúnico (reptiloide, límbico, y neocórtex), y

la obra de G.W.Kraemer.

[...] En "A handbook of Psychology" (2003) se traza un claro camino a partir de 1965

Winnicott identificando el concepto de madre e hijo como un organismo de relación o pareja

y prosigue para examinar la interrelación de la respuesta social y emocional con el desarrollo

neurológico y el papel del sistema límbico regulando la respuesta al estrés.

La Resonancia límbica también se conoce como "resonancia empática", como en el

libro "Empathy in Mental Illness" (2007), que establece la importancia de la empatía o falta

de ella en una amplia gama de patologías individuales y sociales. Los autores Farrow y

Woodruff citan el trabajo de Maclean, 1985, que establece que "La empatía puede que sea 

el corazón del desarrollo de mamíferos, la regulación límbica y la organización social", así

como la investigación hecha por Carr y otros, 2003, que utilizaron resonancia magnética

funcional la actividad para localizar actividad cerebral durante la observación y la imitación

de expresiones faciales emocionales, concluyendo que "entendemos los sentimientos de los

demás a través de un mecanismo de representación de las acciones que da forma al

contenido emocional y que nuestra resonancia empática se basa en la experiencia de

nuestros cuerpos en acción y las emociones asociadas con los movimientos específicos del

cuerpo". Otros estudios citados examinan la relación entre las neuronas especulares (o

neuronas espejo, activas durante la actividad imitando tal) y el sistema límbico, como los de

Chartrand y Bargh, 1999: "Las   áreas   de   neuronas   especulares   parecen   controlar   esta 

interdependencia,  esta  intimidad, este sentido de la agencia colectiva que surge de las 

interacciones   sociales   y   que   está   estrechamente   vinculada   a   la   capacidad   de   formar 

resonancia empática."

Si el conjunto de personas que formamos una sociedad fuéramos más conscientes de esta

capacidad, como dijo el neurocientífico Paul Maclean, pudiera ser que nuestra organización

social mejorara. Es decir, si las personas fuéramos más atentas en relación a nuestras

capacidades límbicas y también escucháramos a nuestro "segundo cerebro", en lugar de

simplemente ceñirnos a los valores racionales establecidos, obtendríamos un cuadro más 

completo de la realidad tanto interna como externa.

Este cuadro más completo nos permitiría darnos cuenta de que la vida no es lo que el Poder 

Reinante nos ha inculcado por tantos años, si no que abarca posibilidades infinitas que tan 

sólo   hay   que   explorar. Nos percataríamos de que hemos   vivido   a   través   de   nuestros 

"topes", y de que no utilizamos todas las partes que nos configuran como seres humanos, 

tanto a nivel físico, emocional e intelectual, si no que nuestra psique está compartimentada

por cada uno de estos "topes", traumas sufridos e informaciones en muchos casos ilusorias;

únicamente utilizamos todo ello para sobrevivir de forma mecánica, reaccionando

automáticamente ante las situaciones de la vida.

En este punto, el sujeto continúa luchando consigo mismo, y este conflicto interno se

acentúa hasta llegar al siguiente nivel de desarrollo.

Fase de Desintegración multinivel organizada

En este punto de desarrollo, el individuo se plantea "lo que debería ser" y "lo que será".

Ahora su meta es definida, conoce o empieza a conocer un método de Trabajo personal con

el cual lograr su desarrollo psicológico positivo, comprende que es necesario el cambio,

yendo más allá de su anterior visión de "ideal de personalidad". Asume la responsabilidad 

de sí mismo al igual que para con los demás, siendo consciente de que su propio desarrollo 

también   puede   llegar   a   ser   importante   para   otras   personas. Esta asunción de

responsabilidad conlleva un fuerte sentimiento de altruismo, de entrega y superación.

Los dinamismos de este nivel son:

Conciencia de sujeto-objeto en uno mismo: Con esta capacidad el individuo obtiene una

visión clara de la realidad de lo que es y de las situaciones que vive, es decir, es objetivo 

consigo  mismo,  se  comprende a   sí  mismo y  eso  le  permite  corregirse  en  aquello  que 

considera innecesario para su vida.

Tercer factor (elección consciente): Este dinamismo, como se ha comentado más arriba, es

el que propulsa el factor autónomo. El sujeto, esforzándose por separarse conscientemente

de la socialización inculcada, decide cuáles son los elementos positivos y negativos para

desarrollar beneficiosamente sus capacidades. Esto implica el desarrollo del discernimiento,

que, como define el glosario Cassiopaea, "es la capacidad para sentir la naturaleza

verdadera de las cosas. El discernimiento es más una cualidad o habilidad que el estado de

poseer información. El discernimiento puede aplicarse a todas las manifestaciones del

universo, ya que en última instancia todas derivan de fuentes arquetípicas. El discernimiento

no puede ser codificado en un conjunto de reglas universalmente aplicables pero puede ser

aprendido a través de la práctica. Si bien existen algunos principios generales, todas las

situaciones son únicas. El discernimiento es la capacidad de ver qué es aplicable a qué. El

discernimiento, al igual que el conocimiento, es infinitamente variado y abarcador. No puede

ser encontrado en un vacío, siempre está en relación con alguna situación, un fenómeno o

mensaje. [...] Ejemplos de discernimiento aplicado al mundo exterior incluyen ver a través de

las mentiras y distorsiones en la política sin el velo del pensamiento deseoso. Inclusive

yendo más lejos, el discernimiento se aplica a lo que es y no es conocido. El discernimiento

es lo opuesto a la creencia u obsesión, es un estado de vigilia constante, conociendo los

límites del propio conocimiento. Otra aplicación consiste en observar los patrones de la

historia a través de las capas de desinformación acumuladas en cada nueva versión de la

misma. También podemos aplicar el discernimiento extrayendo información valiosa de

fuentes esotéricas o canalizadas. Inclusive si existiera una fuente de información

invariablemente veraz, ésta sería de poco valor sin la capacidad de discernimiento para

confirmar su veracidad, y para hacer de esta manera que el receptor pudiese también

apropiarse de ese modo la información."

Auto-conocimiento: Este término abarca la auto-conciencia de lo que uno mismo es; el

sujeto conoce   paulatinamente   las   características   psicológicas   que   componen   su 

personalidad, sabe en qué momento de desarrollo se encuentra e intuye hacia dónde se 

dirige - lo intuye porque realmente un auténtico camino de desarrollo de uno mismo implica

vivir momentos de incertidumbre debido a la naturaleza del mismo -.

Auto-control: El auto-control es la intención de poner orden a lo que uno es y a sus

manifestaciones.

Transformación psíquica interna: Teniendo como referencia las experiencias vividas y las

situaciones observadas, el individuo evalúa todo el conjunto de lo que ha sido para

desarrollar al máximo sus características futuras.

Auto-educación y Auto-psicoterapia: Estos aspectos son de vital importancia para llegar a la

consecución correcta del desarrollo psicológico positivo.

Auto-educación significa establecer un sistema de Trabajo de evolución personal - como

por ejemplo Eiriu Eolas, las ideas del Cuarto Camino, etc.-, el cual es recomendable - o mejor

dicho, imprescindible- llevarla a cabo junto a  un grupo de personas  que compartan  las 

mismas metas. Un grupo de personas diverso y objetivo, comprometido con la búsqueda 

de la verdad interna y externa,  hace la función de "espejo",  proporcionando toda una 

multitud   de   prismas   referente   a   una   persona   o   situación   concretas.   Esto   facilita 

enormemente la consecución de las metas propuestas por el grupo.

La auto-terapia va de la mano con la auto-educación. Debido a que el desarrollo psicológico

positivo de un individuo pasa por ciertas fases que pueden llegar ser psicológicamente

complicadas, el apoyo y colaboración de un grupo aporta en el sujeto un importante grado 

de aprendizaje y de "sostenibilidad psicológica" sana.

Los siguientes dinamismos también son propios del siguiente nivel de desarrollo, pero se

gestan durante la desintegración multinivel organizada.

© Desconocido

Responsabilidad: Como ya hemos comentado anteriormente, la asunción de la

responsabilidad consigo mismo conlleva la tendencia altruista de ayuda a los demás.

Autenticidad: Significa la coherencia entre las creencias internas y las acciones externas. Es

una señal inequívoca de desarrollo psicológico positivo, pues como ya se ha visto, la mente

humana tiende a ser un mar de contradicciones. Cuando una persona mantiene en el tiempo

la coherencia entre pensamiento y acción, podemos hablar de autenticidad.

Autonomía: Es la libertad interna, el pensamiento y la acción independiente, la

prescindencia tanto de la subordinación social como a los dinamismos de los niveles de

desarrollo inferiores.

Empatía: En este punto de desarrollo, la empatía se convierte en la ayuda y colaboración

hacia las personas en sus momentos difíciles y su evolución psicológica positiva.

Fase de Integración secundaria

La Integración secundaria supone el logro de los objetivos del individuo, es decir, el culmen 

del desarrollo psicológico positivo. Los dinamismos de los niveles de desarrollo inferiores

son superados y, como define Dabrowski, es el «auto-conocimiento, auto-elección y auto-

afirmación de la estructura cuyo dinamismo dominante es el ideal de personalidad».

Conclusiones

El   ser   humano   tiene   en   sus  manos   el   desarrollo   de   su   potencial. Durante siglos las

sociedades han sido sometidas de todas las maneras imaginables, intentando - y logrando-

anular por completo sus capacidades y las posibilidades de desarrollo, creando auténticos 

autómatas volcados hacia afuera sin preguntarse quiénes son y a dónde pueden llegar.

Pero si un individuo es conocedor de tal anulación y sometimiento - social y

psicológico-, está dando un primer paso hacia el  desarrollo de su potencial. A partir de

entonces su búsqueda de respuestas y de comprensión sobre quién es él mismo y la vida

circundante le conducirá a conocer la realidad tal cual es y, por ende, será libre de elegir qué

quiere para su vida.

"Tu visión devendrá más clara solamente cuando mires dentro de tu corazón... Aquel que

mira afuera, sueña. Quién mira en su interior, despierta." Carl Gustav Jung