Bea y Noe

Nos quejamos de tener madrugar

Nos quejamos de tener que estudiar y la verdad es que no nos damos cuenta cuenta de que en otros lados del mundo hay niños y niñas que se tienen que levantar antes de lo que nosotros madrugamos para trabajar y cobrar 1 euro al día.

Nos quejamos de la comida

También nos quejamos cuando nuestra madre o nuestro padre nos hace para comer algo que no nos gusta, y que muchísima gente de otros países, ciudades, comunidades quisieran comer .

Nos quejamos de las tareas domesticas

Hay niñas que trabajan de sol a sol todos los días para que les den lo mínimo de comida que llevarse a la boca, y aun así nos quejamos cuando nos mandan hacer tareas en casa. Muchas de ellas quisieran tener nuestra vida.

Nos quejamos de cuidar a nuestras hermanas

Nos quejamos también, cuando nuestras familias nos mandan cuidar a nuestras hermanas pequeñas, y estas dos niñas que veis en estas imágenes cuidan de sus hermanos sin protestar porque saben que no les queda otro remedio, y que por ello pueden darles la mas mínima comida.

Nos quejamos de ir al instituto

Muchos niños quisieran que su escuela estuviera en buenas condiciones y que tuvieran las mismas instalaciones que tenemos aquí para una buena educación.

No nos compran lo que queremos

La queja más común entre la gente joven es que sus padres no quieran/puedan comprarle todo lo que quieren y por eso se quejan aunque tengan una vida estupenda. Esta niña y muchos otros les gustaría tener nuestra mitad del armario, nuestra mitad de juguetes, nuestra tele y sobre todo nuestra cama, cosa que ellos por desgracia nunca podrán permitirse.